Pie Diabético.
Pie Diabético.
Pie Diabético.
El pie diabético, según el Consenso Internacional sobre Pie Diabético, es una infección, ulceración o
destrucción de los tejidos profundos relacionados con alteraciones neurológicas y distintos grados de
enfermedad vascular periférica en las extremidades inferiores que afecta a pacientes con diabetes
mellitus que no ha sido o no está siendo correctamente tratada. Por tanto, no debe ocurrir a efectos
generales en pacientes cuya diabetes esté siendo controlada adecuadamente dentro de una relativa
normalidad. La amputaciòn de la extremidad inferior del afectado es reconocida como un elemento
importante en el padecimiento y también está vinculada a la inestabilidad postural en personas de edad
avanzada con diabetes.
😷Complicaciones neuropáticas :
Cuando se dice que el pie diabético tiene una "base etiopatogénica neuropática" se hace referencia a
que la causa primaria que hace que se llegue a padecer un pie diabético está en el daño progresivo que
la diabetes produce sobre los nervios, lo que se conoce como neuropatía. Los nervios están encargados
de informar sobre los diferentes estímulos (nervios sensitivos) y de controlar a los músculos (nervios
efectores). En los diabéticos, la afectación de los nervios hace que se pierda la sensibilidad,
especialmente la sensibilidad dolorosa y térmica, y que los músculos se atrofien, favoreciendo la
aparición de deformidades en el pie, ya que los músculos se insertan en los huesos, los movilizan y dan
estabilidad a la estructura ósea.
Si una persona pierde la sensibilidad en el pie implica que si se produce una herida, un roce excesivo,
una hiperpresión de un punto determinado o una exposición excesiva a fuentes de calor o frío, no las
sienta. Ya que el dolor es un mecanismo defensivo del organismo que incita a tomar medidas que
protejan de factores agresivos, los diabéticos pueden sufrir heridas y no darse cuenta. Además, la
pérdida de control muscular favorece la aparición de deformidades y provocar roces, cambios en la
distribución de los apoyos del pie durante la marcha y predisponer a determinados puntos del pie a
agresiones que, de no ser atacadas a tiempo, pueden resultar fatales.
😷Complicaciones vasculares:
Además, la insuficiencia arterial no solo provoca un sufrimiento de las células y de los tejidos que las
componen, sino que además implica que la respuesta inflamatoria, que también depende del flujo
circulatorio, se vea disminuida. Las arterias son responsables de llevar los materiales necesarios para
que un tejido se regenere, de modo que si se forma una herida, ésta difícilmente cicatrizará. A través de
las arterias es como los medicamentos alcanzan las distintas partes del organismo, así que si un paciente
diabético sufre una infección en el pie y el riego circulatorio está disminuido, el éxito del tratamiento
farmacológico sistémico (por vía oral principalmente) se reduce potencialmente porque el medicamento
llega con mucha dificultad a la zona en la que tiene que actuar, si bien debe instaurarse aún asumiendo
el riesgo de que no sea eficaz. Por otro lado, el tratamiento local, es decir, sobre la misma herida, resulta
fundamental aunque por desgracia, dadas las dificultades añadidas, no siempre sea suficiente.
Las úlceras requieren todos los cuidados podológicos y médicos que estén al alcance del paciente, ya
que no solo no se resuelven espontáneamente, sino que tienden a agravarse, llegando en muchos casos
a gangrenarse, lo que obliga a ejecutar amputaciones parciales o incluso totales de las zonas afectadas.
Se estima que las complicaciones derivadas de la diabetes son la principal causa de amputación no
traumática en el mundo. La suma de falta de riego sanguíneo con la acumulación de toxinas derivadas
del metabolismo infeccioso pueden facilitar la aparición de fenómenos necróticos; dicho de otro modo,
pueden provocar que determinadas zonas de tejido mueran. Si ese tejido muerto no es elimininado
correctamente puede provocar la liberación de toxinas en sangre que acaben por ocasionar una
gangrena del miembro. La gangrena es subsidiaria de un único tratamiento posible: la amputación o la
muerte (si es que alcanza el sistema circulatorio a niveles superiores).
😷Abordaje:
La alta incidencia de la diabetes, considerada por muchos como la auténtica epidemia del siglo XXI, exige
que las autoridades sanitarias centren sus esfuerzos en combatir esta enfermedad y tratar precozmente
todas las complicaciones derivadas de ella, incluyendo por supuesto al pie diabético. Sin duda, un
enfoque multidisciplinar, que incluya la participación de diferentes profesionales del ámbito sanitario, es
con toda probabilidad la mejor forma de detectar y atajar a tiempo estas complicaciones y evitar que se
produzcan.
En la primera valoración de una lesión en el pie de un diabético se debe realizar una valoración de la
circulación arterial pues en caso de que ésta esté afectada se debe intentar la revascularización lo antes
posible. A continuación y en el mismo momento, es imprescindible valorar la situación clínica del
paciente y detectar cuantos padecimientos o circunstancias coinciden y pueden ser coadyuvantes para
una mala evolución de las lesiones, y por último, el cuidado local , que no puede separarse de lo
anterior, pues un cuidado esmerado de la lesión no tendrá ningún resultado mientras no consigamos
corregir cuantas circunstancias intervengan en el caso.
El interés básico de disponer de una clasificación clínica de los estadios en que cursa el Pie Diabético
responde a la conveniencia de articular los protocolos terapéuticos adecuados a la necesidad de
establecer su valor predictivo en cuanto a la cicatrización de la úlcera. La clasificación de Wagner
(Meggitt/Wagner), valora 3 parámetros: la profundidad de la úlcera, el grado de infección y el grado de
necrosis.
Grado 1: Úlcera superficial que compromete todo el espesor de la piel pero no tejidos subyacentes.
Grado 2: Úlcera profunda, penetrando hasta ligamentos y músculos pero no compromete el hueso o la
formación de abscesos.
Grado 3: Úlcera profunda con celulitis o formación de abscesos, casi siempre con osteomielitis.
😷Tratamiento:
Grado / Tratamiento
2 / La infección está presente, por lo que es necesario obtener muestras para cultivo. Debe realizarse
una desbridación, curación tópica y utilizar antibióticos y coadyuvantes.
Dentro de los coadyuvantes más efectivos, novedosos y de fácil aplicación son los productos a base de
iones de plata.
3 / Se caracteriza por la existencia de una infección profunda, con formación de abscesos, a menudo de
osteítis. La intervención quirúrgica es una posibilidad.
4 / Los pacientes afectados requieren hospitalización urgente y valoración del componente isquémico,
que en esta fase suele estar sumamente afectado. En términos generales, se procede a cirugía
revascularizadora, para evitar la amputación, o conseguir que esta pueda realizarse a un nivel distal de
la extremidad.
😷Prevención:
La prevención de úlceras es básica para un paciente con diabetes, ya que de esta depende el evitar
futuras complicaciones; para ello se deben de llevar ciertas medidas y evaluaciones como lo son:
1.- Inspección del estado de la piel y de las uñas (hiperqueratosis, maceraciones, paranoquia, uñas
fúngicas).
3.- Exploración de signos y síntomas de neuropatía autonómica (sequedad, menos sudoración) y motora
(debilidad y atrofias musculares) que origina "dedos en garra" y ausencia de reflejos tendiosos.
4.- Exploración vascular mediante el índice tobillo-braquial, palpación de pulsos, temperatura. Síntomas
de arteriopatía.
5.- Valoración de deformidades del pie y puntos de hiperpresión (dedos en garra o martillo, hallux
valgus, cabeza metatarsianas prominentes, pie charcot.
6.- Recomendar al paciente que limite el uso directo de talco a la piel del pie, ya que este ocasiona
mayor resequedad.
7.- Utilizar humectantes en crema o aceites, como vaselinas o aceite de almendras, para mantener una
buena hidratación y evitar grietas.
También es importante que el personal de salud capacite a los pacientes sobre las acciones de
autocuidado, tales como la revisión frecuente del pie, pliegues interdigitales y el uso de un calzado
adecuado.
😷Bibliografía:
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