Impedimentos Excusas y Recusaciones
Impedimentos Excusas y Recusaciones
Impedimentos Excusas y Recusaciones
Impedimentos, Excusas y
Recusaciones.
Artículo 51.
Los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los magistrados de circuito, los jueces de
distrito, así como las autoridades que conozcan de los juicios de amparo, deberán excusarse cuando
ocurra cualquiera de las siguientes causas de impedimento:
I. Si son cónyuges o parientes de alguna de las partes, de sus abogados o representantes, en línea
recta por consanguinidad o afinidad sin limitación de grado; en la colateral por consanguinidad
dentro del cuarto grado, o en la colateral por afinidad dentro del segundo;
II. Si tienen interés personal en el asunto que haya motivado el acto reclamado o lo tienen su
cónyuge o parientes en los grados expresados en la fracción anterior;
III. Si han sido abogados o apoderados de alguna de las partes en el asunto que haya motivado el
acto reclamado o en el juicio de amparo;
VII. Si tuvieren amistad estrecha o enemistad manifiesta con alguna de las partes, sus abogados o
representantes; y
VIII. Si se encuentran en una situación diversa a las especificadas que implicaran elementos objetivos
de los que pudiera derivarse el riesgo de pérdida de imparcialidad.
Artículo 52.
Sólo podrán invocarse como excusas las causas de impedimento que enumera el artículo anterior.
Las partes podrán plantear como causa de recusación cualquiera de tales impedimentos.
Artículo 53.
El que se excuse deberá, en su caso, proveer sobre la suspensión excepto cuando aduzca tener
interés personal en el asunto, salvo cuando proceda legalmente la suspensión de oficio. El que deba
sustituirlo resolverá lo que corresponda, en tanto se califica la causa de impedimento.
Artículo 54.
Conocerán de las excusas y recusaciones:
c) De los jueces de distrito, los titulares de los tribunales unitarios y demás autoridades que
conozcan de los juicios de amparo, que se encuentren en su circuito.
Artículo 55.
Los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación manifestarán estar impedidos ante el
tribunal pleno o ante la sala que conozca del asunto de que se trate.
Artículo 56.
Cuando uno de los ministros se manifieste impedido en asuntos del conocimiento del pleno o sala,
los restantes calificarán la excusa. Si la admiten, éstos continuarán en el conocimiento del asunto;
en caso de empate, quien presida tendrá voto de calidad.
Cuando se manifiesten impedidos dos o más ministros de una de las salas, se calificarán las excusas
por otra sala. Si las admiten, se pedirá al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación la
designación de los ministros que se requieran para que la primera pueda funcionar válidamente.
Artículo 57.
Cuando uno de los integrantes de un tribunal colegiado de circuito se excuse o sea recusado, los
restantes resolverán lo conducente.
Artículo 58.
Cuando se declare impedido a un juez de distrito o magistrado de tribunal unitario de circuito,
conocerá del asunto otro del mismo distrito o circuito, según corresponda y, en su caso,
especialización; en su defecto, conocerá el más próximo perteneciente al mismo circuito.
Artículo 59.
En el escrito de recusación deberán manifestarse, bajo protesta de decir verdad, los hechos que la
fundamentan y exhibirse en billete de depósito la cantidad correspondiente al monto máximo de la
multa que pudiera imponerse en caso de declararse infundada. De no cumplirse estos requisitos la
recusación se desechará de plano, salvo que, por lo que hace al último de ellos, se alegue
insolvencia. En este caso, el órgano jurisdiccional la calificará y podrá exigir garantía por el importe
del mínimo de la multa o exentar de su exhibición.
Artículo 60.
La recusación se presentará ante el servidor público a quien se estime impedido, el que lo
comunicará al órgano que deba calificarla. Éste, en su caso, la admitirá y solicitará informe al
servidor público requerido, el que deberá rendirlo dentro de las veinticuatro horas siguientes a su
notificación.
En caso de no rendirse el informe a que se refiere el párrafo primero, se declarará fundada la causa
de recusación, en cuyo caso se devolverá al promovente la garantía exhibida.
Si el órgano que deba calificar la recusación la hubiere negado y ésta se comprobase, quedará sujeto
a la responsabilidad que corresponda conforme a esta Ley.