El Carnicero de Riga

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El carnicero de Riga fiambre en Paraguay

Eduard Roschmann", el carnicero de Riga (treinta mil judíos letones asesinados), "pompette, como
de costumbre,
Uno de los testigos del personaje en su solicitud de ciudadanía argentina en 1950 era la esposa de
Eduard Roschmann, el "Carnicero de Riga", responsable de la muerte de unos 30.000 judíos en
Letonia.428
(Roschmann llegó a la Argentina desde Génova llevando un pasaporte de la Cruz Roja el 2 de
octubre de 1948, bajo los auspicios del Obispo Hudal 24 horas después, Roschmann escapó a su
vecino Paraguay, donde ingresó en un hospital en la ciudad capital de Asunción, muriendo de
insuficiencia cardíaca el 10 de agosto. Su cadáver desapareció misteriosamente unos días después
'Seis hombres vinieron y se llevaron su cuerpo', lo cual todas las autoridades del hospital pudieron
decir)
Kutschmann/Olmo file, AGN, DAE 20920.
429 Odessa al Sur, Camarasa. For Hudal and Roschmann, Flucht vor Nürnberg?,
Meding, ch. 5, fn. 53.
La tercera ruta ponía en contacto Alemania con ciertos países de Sudamérica: especialmente y
hasta la caída del régimen de Perón en 1955, fue Argentina la Tierra Prometida para todos los
cabecillas nazis. Paraguay es hoy el refugio de moda de la élite de la SS.
Entretanto, Mengele había sido informado por sus parientes de Alemania que se había publicado
una orden de arresto en Freiburg. En mayo de 1959, ocho semanas antes de que fuera hecha pública
en Freiburg la acusación, Mengele se fue al Paraguay, donde había hecho amistades durante el curso
de una previa visita, entre ellas la del barón Alexander von Eckstein, ruso báltico muy allegado al
presidente del Paraguay, general Alfredo Stroessner, de ascendencia alemana. Eckstein apadrinó la
naturalización de Mengele como ciudadano del Paraguay, atestiguando —falsamente— junto con
otro testigo, un hombre de negocios alemán llamado Werner Jung, que Mengele había vivido en
Paraguay durante cinco años, que es lo que las leyes del país requieren para conceder la
naturalización. Ello fue confirmado a su vuelta a Alemania en 1961, cuando bajo juramento
respondió a preguntas del fiscal del Estado, Hans Kügler, de Frankfurt. Con ese falso testimonio, a
«José Mengele» le fue concedida ciudadanía paraguaya, el 27 de noviembre de 1959, según decreto
gubernamental número 809.
Mengele tiene buenas razones para sentirse seguro en el Paraguay y la historia del país le
reconforta. Paraguay ganó su independencia en 1811, siendo una dictadura desde 1815 a 1840.
Luchó contra Brasil, Argentina y Uruguay desde 1865 a 1870 y adoptó por fin una constitución
democrática cuando la población se había reducido a 280.000 hombres y casi 200.000 mujeres.
Como Paraguay necesitaba emigrantes que quisieran trabajar su suelo, griegos, polacos, italianos y
japoneses fueron inmigrando, así como muchos alemanes. Desde siempre, el Paraguay ha atraído a
los colonos alemanes, especialmente después de la Primera Guerra Mundial y hoy existen más de
treinta mil habitantes de ascendencia germana en el país. La población es ahora de casi dos
millones, pero la influencia de la minoría alemana excede considerablemente a su número, pues los
alemanes han conseguido posiciones clave en el comercio y en la industria. El presidente, general
Alfredo Stroessner es el nieto de un oficial de caballería bávaro, y si bien él nació en Paraguay,
parece muy ligado a su herencia alemana, hasta el punto que la guardia presidencial está compuesta
de seis guardias que marcan el paso a la alemana.
En julio de 1962, el gobierno de Bonn pidió a las autoridades de Paraguay que verificasen la
identidad del doctor José Mengele, con residencia en Fulgencio Moreno, 507, Asunción. Varios
meses después, las autoridades del Paraguay notificaron a la Alemania Occidental que Mengele era
ciudadano de Paraguay sin «historial criminal alguno».
El tercer asalto tuvo lugar pocos meses después, una noche de marzo de 1964, en que Mengele
estaba pasando el fin de semana en el Hotel Tirol, cerca de Honeau, próspera colonia alemana al
este del Paraguay. El Hotel Tirol es punto favorito de reunión de la sociedad local: buena comida,
buena cerveza y una orquestina que toca maravillosas rumbas. El general Stroessner acude de vez
en cuando a pasar allí un fin de semana, y también Mengele.
El juicio de Auschwitz iba a empezar en Frankfurt am Main en 1964. El doctor Fritz Bauer,
ministerio público principal, dijo a la prensa que el «José Mengele», al que se suponía en cierto
lugar del Paraguay, y el «Josef Mengele» que fue médico del campo de concentración, eran una
misma persona. El gobierno de Bonn hizo la última tentativa para obtener la extradición del
principal encartado, y el 16 de julio de 1964, Eckhard Briest, embajador alemán en Asunción,
durante una audiencia que le concedió el presidente Stroessner, presentó una vez más petición
oficial de la extradición de Mengele. El presidente Stroessner se puso furioso y dio un puñetazo
sobre la mesa del despacho. —Si sigue insistiendo en ello —gritó—, romperé toda relación
diplomática con la República Federal Alemana. Briest le explicó que había recibido instrucciones.
específicas de Bonn respecto al caso Mengele. El presidente añadió: —¡Ni una palabra más, señor
embajador! ¡No voy a seguir tolerando semejantes cosas!
Martin bormann Hace varios años, se dijo que había sido enterrado en Asunción, Paraguay, y la
exhumación de la tumba en cuestión puso en evidencia que el cuerpo enterrado era el de un
ciudadano paraguayo llamado Hormoncilla.
En el curso de mi búsqueda del doctor Josef Mengele, recibí una carta dirigida a «Wiesenthal,
Viena» procedente de Puerto Príncipe, Haití, en la que el señor Johny Sommer, un alemán que se
había pasado los últimos años en Sudamérica, me decía haber tenido un nigth-club llamado «Ali
Baba» en Asunción, Paraguay, que vendió en 1963 y que en la actualidad era propietario del Roxy
Bar en Puerto Príncipe.
«Este hombre, llamado Bauer, venía con frecuencia en 1961 a mi club nocturno de Asunción con
ese cierto Mengele. A veces el doctor Jung venía también con ellos y muchas veces iban de pesca
juntos al río Obto, de Paraná». Esta información me fue posteriormente confirmada por otros
testigos de Asunción. El hombre marcado con la flecha es Bormann y la familia Jung son ricos
terratenientes del Paraguay.

SIMÓN WIESENTHAL
LOS ASESINOS ENTRE NOSOTROS
MEMORIAS
1967

During the late 1950s and early '60s in Paraguay, Mengele used the name "Fischer" as one of his
aliases
Frederico Haase, un distinguido arquitecto que vivió en Buenos Aires. Haase conocía a todos los
que podrían ser importantes para Mengele. Su esposa era la hija del hombre que se convirtió en el
ministro de Finanzas de Paraguay cuando el presidente Stroessner tomó el poder en 1954. Ella y su
esposo proporcionaron un enlace invaluable a los influyentes paraguayos que allanaron el camino
de Mengele hacia la ciudadanía allí en 1959. Haase también introdujo a Mengele en otro vital
contacto, el coronel Hans Ulrich Rudel, el as de Lurftwaffe más condecorado de Hitler cuya amplia
red política y comercial de amigos ayudaría a Mengele de muchas maneras importantes-
Aunque Rudel fue un nazi impenitente, asistió a mitines neonazis y visitó santuarios de las SS hasta
su muerte en 1982, su estrecha relación con los dictadores Juan Perón y Alfredo Stroessner, y luego
con Augusto Pinochet, lo hizo atractivo para varias firmas alemanas importantes. , incluido
Siemens, como embajador itinerante. Fue en uno de los frecuentes viajes de negocios de Rudel a
Paraguay a principios de la década de 1950 que Mengele hizo el primero de muchos viajes allí para
explorar las perspectivas de ventas de la empresa de su padre en Giinzburg.

La fecha de esta primera visita a Paraguay fue "alrededor de 195 1, de acuerdo con tres informes
separados", registró un memorándum de la CIA. "Trabajó durante algún tiempo como vendedor [de
una) empresa de maquinaria agrícola de Alemania Occidental ... Durante el tiempo que Mengele
estuvo en Paraguay, nunca trató de ocultar su identidad o usar un nombre falso incluso durante los
viajes a Argentina y Brasil.
Paraguay tuvo el primer partido nazi en América Latina, formado en 1932, y el último en ser
disuelto, a mediados de 1946.
Jung era el jefe de un grupo juvenil alemán que era efectivamente el partido nazi local durante la
guerra ". Él tuvo
Emigró a Paraguay en 1936 como ejecutivo de una empresa alemana, Ferretaria Alemania, que
actuó como agente de varias empresas alemanas y vendió maquinaria y herramientas livianas.
Aunque fue Frederico Haase quien presentó a los Jung a Mengele, la esposa de Jung, Margaret,
recordó: "En el momento en que el Dr. Mengele conoció a mi esposo, él representaba a su compañía
de Giinzburg y era conocido del Oberst {Coronel] Rudel".
Fue durante un viaje a Paraguay en 1954 que Mengele conoció a otro contacto clave, Alejandro von
Eckstein. Luego fue capitán del ejército paraguayo y, junto con Jung, patrocinó la candidatura de
Mengele para obtener la ciudadanía paraguaya en 1959. Rudel estaba en una visita aérea a
Paraguay, habiendo regresado a Alemania para desempeñar un papel activo en la política neonazi
como miembro. de la Deutsche Reichspartei, cuando tuvieron su primer encuentro, como describió
von Eckstein:
fredo Stroessner acababa de tomar el control de Paraguay, gobernando con el poder absoluto
derivado del Artículo 52 de la Constitución de 1940. + El Artículo 52 le permitió declarar el estado
de emergencia y suspender el hábeas corpus. (Esta situación existe hasta el día de hoy, Stroessner se
ha declarado Presidente de por vida.) Von Eckstein y el dictador de cuarenta y cuatro años eran
amigos íntimos, ambos descendientes de alemanes y que habían luchado codo a codo en la década
de 1930. en la guerra del Chaco contra los bolivianos. Tanto Stroessner como von Eckstein fueron
condecorados como héroes de guerra.
Mengele se convirtió en una figura popular en sus muchas visitas a los Jung. Su gran casa en la
Calle General MacArthur en la capital paraguaya de Asunción fue un centro de actividad social.
"Pensamos muy bien de él", dijo la Sra. Jung. "Al igual que Oberst Rudel, él era un no bebedor por
razones de salud. Amaba la música clásica, disfrutaba leer buenos poetas alemanes y elogiaba
nuestra buena y natural manera.
Como medida de precaución, sin embargo, Hans Rude1 pidió al ministro del Interior, Edgar
Ynsfran, que agilizara el caso. Mengele sabía que había triunfado cuando, el 24 de octubre de 1959,
recibió una tarjeta de identidad como "JosC Mengele". Dos semanas más tarde, la policía de
Asunción le entregó un certificado de "buena conducta y residencia". ** Sus documentos de
ciudadanía fueron avalados por el amable Dr. Sanabria; su solicitud fue presentada ante el juez Luis
Martínez Miltos. Los procedimientos judiciales muestran que el certificado de buena conducta de la
policía fue suficiente para satisfacer al juez Miltos de que no había "registros legales o policiales
pendientes que pudieran obstaculizar su obtención de la ciudadanía paraguaya a través de la
naturalización". El juez también se mostró satisfecho de que Mengele "haya estado
permanentemente en este país durante más de cinco años" y de que "haya demostrado
reiteradamente su intención de renunciar a su nacionalidad anterior, ya que está respaldada por las
declaraciones de sus testigos Werner Jung y Alejandro von Eckstein ". Por ley, Mengele tuvo que
depositar la suma de 5,000 guaraníes, en 1959 el equivalente a $ 41. Todo lo que se requirió para
completar el proceso fue la aprobación del sello de la corte suprema, donde los documentos fueron
debidamente archivados.
* El juez Miltos fue nombrado posteriormente enviado paraguayo en el Vaticano.
posner & ware

en su libro de memorias de 1967, The Murderers Among Us. Wiesenthal estuvo feliz de complacer.
Incluso persuadió a Forsyth para que convirtiera a su villano en una persona real: Eduard
Roschmann, un austríaco que fue el antiguo comandante del gueto de Riga. Como el letón Herbert
Cukurs, era famoso por su brutalidad.
Después de la guerra, Roschmann huyó a Argentina, pero el libro y la película aumentaron la
presión para su captura y extradición. "Roschmann se convirtió en el hombre perseguido retratado
en la película", observó con satisfacción Wiesenthal. El ex nazi huyó a Paraguay en 1977, muriendo
de un ataque al corazón dos semanas después de llegar allí. En la película, hubo un final aún más
catártico: fue atrapado y asesinado.

Frederick Forsyth and

Roschmann story, including “Roschmann became” and “but I didn’t want”:


Wiesenthal, 96–103.
The Nazi Hunters, Andrew Nagorski.

En octubre de 1948, procedente de Génova, el capitán de la SS Eduard Roschmann había


desembarcado en Buenos Aires, con documentos en su bolsillo que lo identificaban como Federico
Wegener. Los crímenes por los que fue buscado habían sido cometidos en Riga, Letonia, entre 1941
y 1944: cuarenta mil judíos ejecutados, muchos de los cuales fueron fusilados personalmente por el
"carnicero".

CAMARASA, ANGEL DE LA MUERTRE, MENGELE

La extradición de Roschmann fue decidida por el Gobierno argentino del general Videla, según
noticias de principios de este mes, pero aún no está concretada. Roschmann, acusado.

vivió en la pensión de la calle Iturbe Nº 859, propiedad de la señora Juana Echagüe viuda de Ríos.

Fue, tal vez, el menos conocido entre los criminales nazis, hasta que la novela de Forsyth lo sacó de
la oscuridad del olvido, del anonimato, para mostrarlo al mundo.

Frederick Forsyth revela uno de los métodos utilizados para exterminar a los judíos: “… se trata de
los ómnibus que oficiaban de cámara de gas, Roschmann había ordenado pintar, en los vidrios de
esos ómnibus, las figuras de seres humanos sonriendo. El que veía pasar a esos ómnibus pensaba,
tal vez, que se trataba de gente feliz camino a su ‘weekend’; y, sin embargo, en ese mismo
momento, esa gente se asfixiaba allí dentro”.
CALCENA

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