Borrás Gualis
Borrás Gualis
5603
RESUMEN
Testimonio personal del autor, a modo de autobiografía intelectual, en el que se analiza el proceso
historiográfico sobre su concepto del arte mudéjar, hasta culminar con la propuesta de una definición
cultural que lo considera como un sistema de trabajo alternativo al del arte occidental cristiano europeo
y como pervivencia de la tradición artística andalusí en la España cristiana tanto en las estructuras como
decoración arquitectónicas, con un papel primordial de los maestros de obras moros.
Palabras clave: arte mudéjar, arte andalusí
ABSTRACT
A personal account by the author, by way of an academic autobiography, in which the historiogra-
phical process is analysed in relation to his concept of Mudéjar art, leading to the proposal of a cultural
definition that regards it as an alternative system of work to western European Christian art and as
the continuation of the Andalusian artistic tradition in Christian Spain, both in terms of structures and
architectural decoration, with Moorish master builders playing an essential role.
Keywords: Mudéjar art, Andalusian art
Desde hace tiempo he venido acariciando la Para acometer la realización de la tesis doctoral
idea de exponer para la comunidad científica me trasladé durante el curso siguiente, 1967-68,
de historiadores del arte el personal proceso de del que ahora se cumplen cincuenta años3, desde
investigación sobre el arte mudéjar1, es decir, el Zaragoza al Instituto de Enseñanza Media “Primo
relato de los años cruciales y de las aportaciones de Rivera” de Calatayud, como profesor interino
decisivas, que me llevaron a definirlo culturalmen- de Geografía e Historia. Esta estancia bilbilitana
te como la pervivencia de la tradición artística an- me facilitó estudiar detenidamente “in situ” los
dalusí en la cultura española, y deseaba adscribir monumentos mudéjares de la comunidad de Ca-
esta exposición al género historiográfico de las latayud así como exhumar los ricos fondos do-
autobiografías intelectuales2. cumentales del Archivo de Protocolos Notariales
El tema de mi tesis doctoral “Mudéjar en los de Calatayud, ambos fundamentos básicos de mi
valles del Jalón-Jiloca” fue fruto de una decisión tesis doctoral, cuyos tres volúmenes (texto, ma-
colectiva, tomada durante curso 1966-67 en una pas y planos, y fotografías, respectivamente) hube
de las frecuentes sesiones de seminario dirigidas de depositar apresuradamente en diciembre de
por mi maestro don Francisco Abbad, un cate- 1970, ante las previsiones médicas de un fatal
drático liberal en la estela de la Institución Libre desenlace de la leucemia de mi maestro Francisco
de Enseñanza, que no siempre tenían lugar en el Abbad, como así sucedió en enero de 1972.
edificio de la Facultad, ya que en ocasiones, como En la defensa de la tesis, realizada en marzo
en aquella nos trasladábamos a una de las míticas de 1971, la acritud manifestada por uno de los
cafeterías de Zaragoza. miembros del tribunal me cerró el deseado paso a
la calificación de “cum laude”, con las posteriores teórica, ya que me dediqué básicamente al aná-
Gonzalo M. Borrás Gualis
secuelas curriculares, por lo que tomé entonces lisis y valoración de los puntos de vista sobre el
la firme decisión de olvidarme para siempre del mudéjar de José Amador de los Ríos, de Vicente
arte mudéjar. Podría decirse, parafraseando a mi Lampérez, del marqués de Lozoya, de Leopoldo
admirado Francisco de Goya, que “acordándome Torres Balbás y de Fernando Chueca. Aunque es
de Zaragoza y de mudéjar, me quemo vivo”. obvio que en mi crítica del concepto del mudé-
jar defendido por estos historiadores subyace un
Tal era mi estado de ánimo en relación con el punto de vista personal, que se podría considerar
arte mudéjar cuando en el emblemático año de como una nueva propuesta teórica.
1975 recibí la indeclinable invitación por parte de
mi entrañable colega y amigo, el profesor San- De todos los citados, el historiador que resulta
tiago Sebastián4, para participar como ponente peor parado en mi análisis crítico es el arquitecto
en el I Simposio Internacional de Mudejarismo, Vicente Lampérez y Romea, cuya obra6 por otra
parte era la que mayor impacto y recepción te-
que se iba a celebrar en Teruel del 15 al 17 de
nía en los manuales universitarios de historia del
septiembre, y del que eran máximos responsables
arte, gracias a su sólida sistematización por focos
académicos él mismo y el profesor medievalista
regionales y por evolución histórica, que siempre
Emilio Sáez.
le he reconocido.
De nuevo un estímulo externo me devolvía al
Sin embargo en la obra de Lampérez se contie-
tema ya olvidado; pero a pesar de que tan sólo
nen los puntos de vista más distorsionantes sobre
habían transcurrido cuatro años, quien regresaba
la arquitectura mudéjar, entre los que destaca su
a él era una persona bien distinta, que había rea-
tesis de que la estructura, que es lo decisivo, es
lizado, siempre con esfuerzo y escasos recursos,
siempre de origen occidental cristiano, románica
un largo recorrido como historiador del arte, con
o gótica, mientras que la decoración, que es lo
una formación en gran parte autodidacta, y con
secundario, es el único elemento de origen is-
un interés muy marcado por los aspectos teóricos
lámico, y de ahí su propuesta terminológica de
y muy influido por los estudios de Juan Antonio
“románico-mudéjar” y “gótico-mudéjar”, un
Gaya Nuño y de Enrique Lafuente Ferrari, entre término compuesto intencionadamente de sus-
los historiadores del arte españoles, y por los de tantivo y adjetivo, y que llevado al extremo ha
Pierre Francastel y de Giulio Carlo Argan, entre derivado en el de “arquitectura románica y gótica
los extranjeros. Y por qué no decirlo, con la con- de ladrillo”.
ciencia personal de ser una “rara avis” dentro de
la profesión, pero al fin consolidado como profe- Esta tesis errónea de Lampérez me ha llevado
sor del nuevo cuerpo de profesores adjuntos en forzadamente a lo largo de mis investigaciones
la Universidad de Zaragoza, un empleo del que posteriores a poner el foco de atención en el aná-
había tomado posesión el 1 de septiembre de lisis de las estructuras arquitectónicas mudéjares,
ese mismo año 1975, poco antes de cumplir los tanto sobre las de origen occidental cristiano,
treinta y cinco años. que resultan transformadas en su adaptación al
sistema mudéjar, como sobre las estructuras de
origen andalusí, ignoradas por Lampérez, y tan
El mudéjar como constante artística (1975) evidentes en iglesias con tipología de mezquita
Así mismo era bien consciente de que en 1975 en los focos regionales toledano y sevillano, y en
nos hallábamos ante una coyuntura oportuna torres-campanario con tipología de alminar en
para plantear con carácter general un problema todo el ámbito peninsular. Y ello a pesar de que
de historiografía artística, que diera un giro co- la estructura siempre tienen un interés secundario
pernicano a la definición del arte mudéjar. Y para en la arquitectura mudéjar, como sucede asimis-
ello propuse para mi ponencia el título de “El mo en la islámica y en la andalusí, unas manifes-
mudéjar como constante artística”5. taciones artísticas que se definen esencialmente
por la decoración como factor principal.
Vuelto a leer con una perspectiva de más de
cuatro décadas encuentro que aquel texto tiene Sin embargo, mi interés primordial en esta po-
más de crítica historiográfica que de propuesta nencia de 1975 era recuperar los planteamientos
del texto fundacional de José Amador de los Ríos con la herramienta tradicional de una definición
te de arte mudéjar o de arte mudéjar aragonés, del cromatismo ornamental y del atectonismo
Gonzalo M. Borrás Gualis
del arte mudéjar aragonés. Poner el acento en Consciente de la dificultad del encargo del
Se adelanta asimismo la idea angular de “sis- la carpintería (Carmen Fraga) y la cerámica (Mª
Gonzalo M. Borrás Gualis
NOTAS que en ambos casos todavía siguen ce- Instituto de Estudios Turolenses, Teruel,
Gonzalo M. Borrás Gualis
Borrás Gualis, Gonzalo M. 1986. “Los materiales, Mudéjar / el legado andalusí en la cultura espa-
las técnicas artísticas y el sistema de trabajo, ñola. 2010. Catálogo de la exposición, Para-
como criterios para la definición del arte mu- ninfo/Universidad de Zaragoza, 6 de octubre
déjar.” In Actas del III Simposio Internacional de 2010 al 9 de enero de 2011. Zaragoza:
de Mudejarismo (Teruel, 20-22 de septiembre Universidad de Zaragoza.
de 1984), 317-325. Teruel: Instituto de Estu- Ovidio Cuella, Esteban. 1984. Aportaciones cul-
dios Turolenses. turales y artísticas del papa Luna (1394-1423)
Borrás Gualis, Gonzalo M. 1990. El arte mudéjar. a la ciudad de Calatayud. Prólogo de Gonzalo
Serie Estudios Mudéjares. Teruel: Instituto de M. Borrás. Zaragoza: Institución “Fernando el
Estudios Turolenses. Católico”.
Borrás Gualis, Gonzalo M. 1999. “El artesano Pacios Lozano, Ana Reyes. 1993. Bibliografía de
mudéjar en Aragón.” In L´artista-artesà me- arquitectura y techumbres mudéjares, 1857-
dieval a la Corona d´Aragó ( Lleida, 14, 15 i 16 1991. Serie Estudios Mudéjares. Teruel: Insti-
de gener de 1998), 59-75. Lleida: Universitat tuto de Estudios Turolenses
Pacios Lozano, Ana Reyes. 2002. Bibliografía de de autobiografía intelectual).” Conferencia sin