Piomiositis
Piomiositis
Piomiositis
Coagulación BH QS PFH
TP 19.9 Hb 13.4 Gluc 111 DL 240
INR 1.78 Hto 41.1 Bun 40 BT 3.52
TPT 32.7 Plaq 138 Urea 85.6 BD 2.89
Leuc 17.01 Creat 1.14 BI 0.63
Neut% 86.6 TGP 20
Neut# 14.74 TGO 23
Se realiza otro aseo quirúrgico, sin complicaciones trans ni post operatorias. Sangrado
150cc.
Se repite el perfil de coagulación:
Coagulación:
TP 18:6
INR 1.66
TPT 28.9
19.04.2020 cursa su 4º DEH, se refiere afebril, MPI con presencia de drenaje en herida quirúrgica,
continua con curaciones, se indica el baño y deambulación asistida por familiar , curaciones cada
12 hrs y se cambia el metronidazol por clindamicina 600 mg IV cada 8 hrs, resto del manejo
farmacológico continua igual.
BH ESC QS PFH
Hb 9.4 Na 138 Ac Ur 10.5 DL 219
Hto 30.7 K 3.70 Gluc 100 BT 0.88
Plaq 83 Cl 110 Urea 96.3 BD 0.63
Leuc 7.35 Mg 1.93 Bun 45 BI 0.25
Neutr% 78.6 Ca 7.70 Creat 1.27 TGP 18
Colest 107 TGO 31
Triglic 163 PT 5.4
Alb 2.1
El día 20.04.2020 en su 5º DEH, se reporta afebril con dolor leve a nivel de herida quirúrgica con
presencia de anuria, tolerando vía oral, con administración de oxigeno suplementario con puntas
nasales, MPI con herida quirúrgica de bordes libres, con gasto de material seroso, no fétido,
continua con curaciones cada 12 hrs. Se solicita tele de tórax. Continua con mismo manejo
farmacológico.
En su 6º DEH (21.04.2020) continua afebril, ya presenta uresis, MPI con presencia de herida
quirúrgica la cual se encuentra limpia sin datos de infección, pero la cual no se logra avance para el
cierre de dicha herida, por lo que se recomienda la colocación de VAC y se solicita el material para
su colocación. Ese mismo día por la tarde se realiza la colocación del sistema VAC sin
complicaciones.
22.04.2020 con 7 DEH, se sigue reportando afebril, asintomático con presencia de sistema VAC en
MPI el cual reporta un gasto de 5cc de características serosas, se realiza recolocación de sistema
VAC ya que se encontraba disfuncional. En la tele de tórax que se solicitó el día 20.04.2020 se
observa un derrame pleural, por lo que se solicita IC a inhalo terapia. El paciente continua con el
mismo manejo farmacológico.
Piomiositis
Se trata de una infección aguda bacteriana que afecta al músculo estriado, generalmente
causada por Staphylococcus aureus, que suele acompañarse de la formación de un
absceso en el músculo.
Fue descrita por primera vez en 1885 por Scriba como enfermedad endémica en los
trópicos.
Aunque el término PM se utiliza habitualmente para describir la infección piógena
primaria, desde el punto de vista conceptual podemos hablar de PM secundaria cuando la
infección muscular se origina a partir de heridas penetrantes, úlceras de decúbito,
extensión de infecciones desde tejidos vecinos o por una bacteriemia en el contexto de
otro foco infeccioso.
Epidemiología:
Es más frecuente en varones sanos y, aunque aparece en todos los grupos de edad,
aumenta de los 2 a los 5 años y entre los 35 y 40.
Las áreas comprometidas con mayor frecuencia son los grandes músculos de las
extremidades inferiores (especialmente el cuádriceps femoral y los glúteos) y los
músculos del tronco (generalmente el psoas-ilíaco).
Fisiopatología:
Se piensa que la infección del músculo se produce en el transcurso de una bacteriemia,
generalmente asintomática. La rareza de esta infección se atribuye a que el músculo
esquelético es muy resistente y difícilmente se coloniza por gérmenes a no ser que esté
dañado.
Miyake realizó un estudio experimental en el que inyectaba, de forma intravenosa, dosis
subletales de S. aureus a animales; sólo se produjeron abscesos musculares en aquellos
cuyos músculos habían sido traumatizados previamente mediante pinchazos,
electroshock o isquemia. Cuando los pacientes tienen historia de traumatismo previo (en
un 20 a un 50% de los casos), normalmente es un golpe directo sobre el músculo que
días o semanas después desarrolla el absceso. Sin embargo, aunque los traumatismos
musculares en las extremidades inferiores son muy frecuentes, la PM es rara, por lo tanto,
el traumatismo debe de ser un factor contribuyente pero no suficiente para el desarrollo de
la infección.
Por lo tanto, el germen coloniza el músculo si está previamente lesionado o bien si los
mecanismos de defensa del huésped se encuentran comprometidos para impedir la
colonización. Por ejemplo, la diabetes mellitus produce un defecto en la circulación del
músculo que aumenta el riesgo de infección. Por otro lado, la insuficiencia renal, la
granulocitopenia, la glucocorticoterapia, la leucemia, entre otros trastornos, producen una
alteración en el número de los leucocitos o en su funcionamiento, como anormalidades en
la quimiotaxis, ingestión y actividad bactericida.
Etiología:
S. aureus es la causa del 90% de los casos de PM primaria en los trópicos y de un 70%
de los casos en áreas no tropicales. Los estreptococos del grupo A explican del 1 al 5%
de los casos..
Otros microorganismos grampositivos que pueden provocar piomiositis con menor
frecuencia incluyen diversos grupos de estreptococos (B, C y G), Streptococcus
pneumoniae y Streptococcus anginosus.
Manifestaciones clínicas:
Clásicamente, el cuadro clínico se divide en 3 estadios:
Inicio subagudo, con fiebre variable, escasa tumefacción local con eritema o
1er estadio sin él, dolor leve e hipersensibilidad mínima a la palpación.
Este estadio suele pasar inadvertido. Si se intenta aspirar la lesión, no se
o invasor obtendrá pus. En esta fase se encuentra un 2% de los pacientes cuando
consultan.