Deuteronomio 29 - Renovación Del Pacto

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DEUTERONOMIO 29 

– RENOVACIÓN
DEL PACTO
A. Las grandes maravillas de Dios para Israel.
1. (1) El pacto en la tierra de Moab.

Estas son las palabras del pacto que Jehová mandó a Moisés que celebrase con los hijos
de Israel en la tierra de Moab, además del pacto que concertó con ellos en Horeb.

a. Estas son las palabras del pacto: Unos 40 años antes de esto, en Horeb (Monte
Sinaí), Israel hizo un pacto con Dios: Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo,
el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos.Entonces Moisés
tomó la sangre y roció sobre el pueblo, y dijo: He aquí la sangre del pacto que Jehová ha
hecho con vosotros sobre todas estas cosas (Éxodo 24:7-8).

b. Además del pacto que concertó con ellos en Horeb: En su mayor parte, el pueblo al
que se le roció la sangre del pacto había muerto en el desierto. La generación de la
incredulidad había muerto, ahora era una oportunidad para la generación de la fe.
Entonces, Moisés reconfirmará el pacto con la nueva generación.

2. (2-4) Israel vio maravillas, pero no las vieron.

Moisés, pues, llamó a todo Israel, y les dijo: Vosotros habéis visto todo lo que Jehová ha
hecho delante de vuestros ojos en la tierra de Egipto a Faraón y a todos sus siervos, y a
toda su tierra, las grandes pruebas que vieron vuestros ojos, las señales y las grandes
maravillas. Pero hasta hoy Jehová no os ha dado corazón para entender, ni ojos para ver,
ni oídos para oír.

a. Vosotros habéis visto todo lo que Jehová ha hecho delante de vuestros ojos: Israel
vio grandes maravillas de la mano de Dios desde que salió de Egipto. Vieron las plagas,
vieron la muerte de los primogénitos, vieron el Mar Rojo partirse, vieron los ejércitos
egipcios destruidos, vieron victorias ganadas por la oración, comieron el maná,
bebieron el agua provista milagrosamente, y vieron milagro tras milagro.

b. Pero hasta hoy Jehová no os ha dado corazón para entender: Los milagros en sí


mismos no podían lograr nada en el corazón de Israel. Si Dios no enviaba su Espíritu
para cambiar sus corazones, entonces ni la mayor maravilla imaginable haría una
diferencia.

i. Algunas personas hoy en día piensan que la mayor ayuda para el evangelismo
sería ver más eventos milagrosos. Después de todo, ¿quién podría no creer ante
tales demostraciones de poder espiritual? Pero ver grandes maravillas no logra
nada aparte de una obra sobrenatural de Dios en el corazón de alguien.

3. (5-9) Las grandes obras de Dios para Israel en el desierto.

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Y yo os he traído cuarenta años en el desierto; vuestros vestidos no se han envejecido
sobre vosotros, ni vuestro calzado se ha envejecido sobre vuestro pie. No habéis comido
pan, ni bebisteis vino ni sidra; para que supierais que yo soy Jehová vuestro Dios. Y
llegasteis a este lugar, y salieron Sebón rey de Hesbón y Og rey de Basán delante de
nosotros para pelear, y los derrotamos; y tomamos su tierra, y la dimos por heredad a
Rubén y a Gad y a la media tribu de Manasés. Guardaréis, pues, las palabras de este
pacto, y las pondréis por obra, para que prosperéis en todo lo que hiciereis.

a. Y yo os he traído cuarenta años en el desierto: Durante sus cuarenta años en el


desierto, sus vestidos no se gastaron, su calzado no se gastó, y a pesar de que no
tenían pan para comer, ni sidra para beber, hubo provisión de todas sus necesidades.
Israel derrotó a sus enemigos, y ellos tomamos su tierra.

i. Claramente, estos son milagros notables. La ropa y las sandalias simplemente no


duran 40 años de marcha dura en el desierto aparte de un milagro. El desierto no
proporciona suficiente comida ni agua para satisfacer las necesidades de unos dos
millones de personas, aparte de un milagro. Una nación de esclavos durante 400
años no conquista naciones permanentes y toma su tierra aparte de un milagro.

ii. Cada una de estas grandes maravillas (cada prueba en sí misma del poder y el


amor de Dios por Israel) tiene una contrapartida espiritual en nuestras vidas.

·En el desierto de este mundo, Dios nos proporciona vestiduras (Apocalipsis 3:18).

·Nos da calzado (Efesios 6:15).

·Nos da a beber pan y vino (1 Corintios 11:23-26).

·En Él vencemos a nuestros enemigos (Romanos 8:37).

·Podemos tomar la tierra de nuestros enemigos espirituales (2 Corintios 10:4-5).

b. Guardaréis, pues, las palabras de este pacto: Al ver estas grandes obras de Dios,
hay una respuesta lógica. Conocer la grandeza del amor y el poder de Dios debería
hacer que Israel esté más comprometido que nunca con su pacto.

B. Renovación del pacto.


1. (10-15) Las partes del pacto.

Vosotros todos estáis hoy en presencia de Jehová vuestro Dios; los cabezas de vuestras
tribus, vuestros ancianos y vuestros oficiales, todos los varones de Israel; vuestros
niños, vuestras mujeres, y tus extranjeros que habitan en medio de tu campamento,
desde el que corta tu leña hasta el que saca tu agua; para que entres en el pacto de
Jehová tu Dios, y en su juramento, que Jehová tu Dios concierta hoy contigo, para
confirmarte hoy como su pueblo, y para que él te sea a ti por Dios, de la manera que él te
ha dicho, y como lo juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob. Y no solamente con
vosotros hago yo este pacto y este juramento, sino con los que están aquí presentes hoy
con nosotros delante de Jehová nuestro Dios, y con los que no están aquí hoy con
nosotros.
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a. Vosotros todos estáis hoy en presencia de Jehová vuestro Dios: Esto significa que
el pacto fue hecho con toda la nación. Esto incluía a los líderes, los hombres, las
mujeres, los niños e incluso los sirvientes.

b. Para confirmarte hoy como su pueblo: Todo Israel estaba incluido en el deseo de
Dios de entrar en el pacto, para ser su pueblo. No estaba buscando solo a unas pocas
personas prominentes y talentosas, ni solo a una tribu espiritual como los levitas. Dios
quería que toda la nación fuera su pueblo.

c. Y con los que no están aquí hoy con nosotros: Pero el pacto se extendía más allá de
aquellos que estaban delante de Jehová y Moisés en ese día. Incluía también a los que
no están aquí hoy con nosotros. Los descendientes de esta nación reunidos ante el
Señor y Moisés también estaban incluidos en el pacto.

i. “La demanda del pacto se extiende aquí a aquellos que aún estaban por nacer.
Las generaciones futuras fueron una con ese Israel primitivo que prestó juramento
en el Sinaí”. (Thompson)

2. (16-20) La promesa de juicio contra el quebrantador del pacto.

Porque vosotros sabéis cómo habitamos en la tierra de Egipto, y cómo hemos pasado
por en medio de las naciones por las cuales habéis pasado; y habéis visto sus
abominaciones y sus ídolos de madera y piedra, de plata y oro, que tienen consigo. No
sea que haya entre vosotros varón o mujer, o familia o tribu, cuyo corazón se aparte hoy
de Jehová nuestro Dios, para ir a servir a los dioses de esas naciones; no sea que haya en
medio de vosotros raíz que produzca hiel y ajenjo, y suceda que al oír las palabras de
esta maldición, él se bendiga en su corazón, diciendo: Tendré paz, aunque ande en la
dureza de mi corazón, a fin de que con la embriaguez quite la sed. No querrá Jehová
perdonarlo, sino que entonces humeará la ira de Jehová y su celo sobre el tal hombre, y
se asentará sobre él toda maldición escrita en este libro, y Jehová borrará su nombre de
debajo del cielo;

a. Habéis visto sus abominaciones y sus ídolos de madera y piedra, de plata y oro,
que tienen consigo: Israel había visto las abominaciones y sus ídolos de sus vecinos
paganos. Dios prometió que cualquiera cuyo corazón se aparte hoy de Jehová
nuestro Dios, para ir a servir a los dioses de esas naciones, nunca debe presumir de
tener un sentido de paz en su corazón.

b. Él se bendiga en su corazón, diciendo: Tendré paz: Tal vez alguien que se ha
apartado de Jehová y ha ido a los ídolos escucha las maldiciones contra el
quebrantador del pacto, pero piensa que ha escapado de cualquier castigo.
Entonces, él se bendiga en su corazón, diciendo: Tendré paz. Puede tener una
sensación inmediata de paz en este momento, pero es la paz de los ciegos, la paz de los
ignorantes, que no pueden ver el peligro del juicio venidero.

i. Un pecador empedernido puede sentirse confiado en su propio corazón,


teniendo una maravillosa sensación de “paz”. Pero esta paz es una ilusión. Es la paz
de los ciegos, de los ignorantes. Si hay una bomba en un avión, casi todos en el
avión están en paz en el momento antes de que explote la bomba. Pero su paz se
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basa en su ignorancia. De la misma manera, un pecador puede estar
completamente tranquilo en su corazón. Pero esto es solo porque es ciego.

ii. Aunque ande en la dureza de mi corazón, a fin de que con la embriaguez quite


la sed: La embriaguez puede dar felicidad mientras dura, pero su felicidad se basa
en una ilusión. Dios advierte en contra de incluir la paz de los justos con la paz que
los malvados parecen tener.

c. No querrá Jehová perdonarlo: Esta verdad es clara “No hay paz para los malos, dijo
Jehová” (Isaías 48:22). La cuenta puede ajustarse en cualquier lado de la eternidad,
pero se ajustará. Nadie puede abandonar al Señor y escapar de las consecuencias.

3. (21-28) El propósito del juicio contra el quebrantador del pacto.

Y lo apartará Jehová de todas las tribus de Israel para mal, conforme a todas las
maldiciones del pacto escrito en este libro de la ley. Y dirán las generaciones venideras,
vuestros hijos que se levanten después de vosotros, y el extranjero que vendrá de
lejanas tierras, cuando vieren las plagas de aquella tierra, y sus enfermedades de que
Jehová la habrá hecho enfermar (azufre y sal, abrasada toda su tierra; no será sembrada,
ni producirá, ni crecerá en ella hierba alguna, como sucedió en la destrucción de Sodoma
y de Gomorra, de Adma y de Zeboim, las cuales Jehová destruyó en su furor y en su ira);
más aún, todas las naciones dirán: ¿Por qué hizo esto Jehová a esta tierra? ¿Qué significa
el ardor de esta gran ira? Y responderán: Por cuanto dejaron el pacto de Jehová el Dios
de sus padres, que él concertó con ellos cuando los sacó de la tierra de Egipto, y fueron y
sirvieron a dioses ajenos, y se inclinaron a ellos, dioses que no conocían, y que ninguna
cosa les habían dado. Por tanto, se encendió la ira de Jehová contra esta tierra, para
traer sobre ella todas las maldiciones escritas en este libro; y Jehová los desarraigó de
su tierra con ira, con furor y con grande indignación, y los arrojó a otra tierra, como hoy
se ve.

a. Y lo apartará Jehová de todas las tribus de Israel para mal: Hay una razón obvia
para castigar al quebrantador del pacto por su propio bien. Pero Dios tiene un
propósito más allá de la razón del pacto individual.

b. Vuestros hijos que se levanten después de vosotros, y el extranjero que vendrá de


lejanas tierras: El propósito de Dios al traer juicio contra un Israel quebrantador del
pacto también era por el bien de las generaciones venideras, vuestros hijos que se
levanten después de vosotros… y el extranjero. Cuando vean la devastación que
viene por romper el pacto de Dios, cuando vean lo que sucede con la tierra contra la
que se encendió la ira de Jehová, serán advertidos para que sean obedientes.

i. Nosotros también podemos aprender de la calamidad que sobreviene en la vida


de los demás cuando quebrantan el pacto de Dios. Podemos aprender que el
precio de la desobediencia no vale la pena. Podemos aprender que los
mandamientos de Dios son buenos y protectores en nuestras vidas.

c. Todas las naciones dirán: El propósito de Dios al traer juicio contra un Israel que
quebranta el pacto también era por el bien de todas las naciones. Cuando vean lo que
le sucede a una nación que abandona al Señor, serán advertidos para que obedezcan.
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4. (29) La revelación de Dios a Israel.

Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para
nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de
esta ley.

a. Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios: En medio de este estímulo a
la obediencia, Moisés hace una pausa para dar un principio de cómo Dios nos habla.
Primero, Dios nunca declara todo al hombre: Hay secretos que Dios tiene y siempre
tendrá. Él tiene derecho a tener secretos, porque Él es Dios.

i. Dios es más grande e inteligente que nosotros y siempre lo será. Simplemente


debemos aceptar esto. “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni
vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra,
así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que
vuestros pensamientos” (Isaías 55:8-9).

b. Mas las reveladas: Segundo, Dios sí revela algunas cosas al hombre. Ya que Dios
está allí y no está en silencio, debemos hacer todo lo posible para prestarle mucha
atención.

c. Mas las reveladas son para nosotros: Tercero, la revelación de Dios tiene la
intención de decirnos algo. Dios no habló solo para sorprendernos o divertirnos; hay un
mensaje que nos pertenece. Si bien no podemos entender perfectamente la revelación
de Dios, es perfectamente comprensible.

d. Para nosotros y para nuestros hijos: Cuarto, la revelación de Dios


es transgeneracional. Sí, Dios tenía un mensaje específico para la generación de Moisés,
pero el mensaje va más allá de su audiencia original para dirigirse a todas las
generaciones siguientes.

e. Para nosotros y para nuestros hijos para siempre: Quinto, la revelación de Dios
es eterna. Su palabra no solo dura para siempre, sino que es para siempre relevante. La
palabra de Dios es más relevante que cualquier nueva moda o interés que pueda
extenderse por el mundo o la iglesia.

f. Para que cumplamos todas las palabras de esta ley: Finalmente, la revelación de
Dios debe importarnos. Él no nos ha hablado simplemente para satisfacer nuestra
curiosidad acerca de las cosas espirituales. Él nos ha hablado para afectar la forma en
que vivimos. Si solo somos oidores de la palabra, y no también hacedores, entonces
realmente no hemos recibido su palabra.

©2022 The Enduring Word Comentario bíblico en español de David Guzik –


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