Muy Historia España - Data - N33 2021 26601

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 100

data

www.muyhistoria.es

P R E G U N TA S , R E S P U E S TA S
Y CURIOSIDADES

LOS DIOSES
DEL OLIMPO
¿EN QUÉ CREÍAN
LOS VIKINGOS?
TARTESSOS Y OTRAS
INCÓGNITAS HISPANAS
LA AMÉRICA
PRECOLOMBINA
FIGURAS
LEGENDARIAS

GRANDES MITOS
de TODAS LAS CULTURAS
#RevistasContigo
#LeeRevistas

Tus revistas van


contigo
Antes, durAnte y después
Ni un solo día, las revistas hemos dejado de publicar información
y entretenimiento para estar a tu lado. En papel y en digital.
Para los días buenos y malos, para los de confinamiento o
compañía. Para las tardes de domingo o las mañanas de lunes.
Para reír, para saber, para disfrutar, para inspirar. ¡Contigo!

AxEL SPRiNgER ESPAñA · BLuE OCEAN ENt. ESPAñA · CONdé NASt · Eig CAmBiO 16 · gOdÓ VERtiCAL mEdiA ·

gRuPO dE COmuNiCACiÓN SExtA mARChA · gRuPO V · gRuPO ZEtA REViStAS · hEARSt ESPAñA · hOLA · LuikE

iBEROAmERiCANA dE REViStAS · mOtORPRESS iBéRiCA · PRiSmA PuBLiCACiONES · PuBLiCACiONES hERES · RBA

REViStAS · RPm-mktg · SEmANA · SPAiNmEdiA · tALLER dE EditORES · tELVA · timE Out · ZiNEt mEdiA gROuP

www.revistasari.es
LOS orígenes del MUNDO

Los MITOS
Una explicación a las
INCÓGNITAS de la vida

Las pinturas prehistóricas más


SHUTTERSTOCK

importantes del Valle del Vézère (Francia)


se hallan en la cueva de Lascaux (en la
imagen), cuyo descubrimiento en 1940
marcó un hito en la historia del arte
prehistórico. Las escenas de caza –cien
figuras de animales– asombran por su
gran riqueza de colorido y su realismo.

4 MUY HISTORIA DATA


Pinturas rupestRes:
El pensamiento simbólico
L
os santuarios rupestres de Lascaux rezcan en galerías subterráneas remotas e partieron mitos similares para explicar
(en la Dordoña francesa, suroeste del inaccesibles, donde los artistas tenían que las incógnitas existenciales. ¿Por qué era
país) y de Altamira (en Cantabria, utilizar lámparas de aceite para ver lo que tan importante la religión para esos pue-
España) nos permiten imaginar cuáles hacían, prueba que esas figuras formaban blos? Los antropólogos Edward B. Taylor
eran las creencias religiosas en el período parte de ceremonias religiosas”. y James Frazer creen que la religión exis-
paleolítico, una de cuyas deidades más En el zoroastrismo –religión ancestral te porque ayuda a la gente a dar sentido
representativas debió ser la Madre crea- que todavía hoy se practica en la India e a situaciones incomprensibles, como el
dora de la vida. Hace unos 25.000 años, Irán–, el dios Ozmad fue el creador de la origen de la vida, la muerte o el tránsito
nuestros antepasados fueron capaces de vida, al arrojar parte de su luz al abismo al más allá. El sociólogo alemán Niklas
desarrollar un pensamiento simbólico del cosmos. En el Egipto milenario, Ra fue Luhmann asegura que las creencias reli-
que plasmaron en las paredes de grandes la divinidad que hizo posible todo lo que giosas y los mitos ofrecen orientación a
cuevas pintando animales, formas huma- existe. En Mesoamérica, el mismo papel quienes sienten temor ante los misterios
nas con máscaras y enigmáticas manos. correspondió a Quetzalcóatl, la Serpiente de la naturaleza (la existencia, la muer-
Pero ¿por qué hicieron aquellas fantásti- de Plumas de Quetzal, el ser superior que te, las tormentas o los terremotos). Pero
cas obras en lo más hondo de las cuevas? enseñó a los humanos la agricultura, la ¿hay alguna diferencia entre religión y
¿Sus autores querían que fueran vistas so- orfebrería, las matemáticas y la astrono- mitología? Los occidentales entendemos
lo en determinadas ocasiones? En su libro mía. Estos y otros seres celestiales fueron por religión las tres monoteístas; las más
Nuestra especie, el antropólogo Marvin considerados por sus seguidores como primitivas las consideramos animistas, y
Harris da respuesta a estas preguntas: “El los creadores de todo lo que conocemos: a las que practicaron los grecolatinos en el
hecho de que las pinturas murales apa- las grandes civilizaciones históricas com- período clásico las llamamos mitológicas.

MUY HISTORIA DATA 5


LOS orígenes del MUNDO

¿QUÉ ES UN MITO?
S
egún Carlos García Gual, los ra los cristianos coptos del Egipto del Diluvio, que aparece ya en las
mitos surgen como respues- del siglo IV, quienes lo adoptaron civilizaciones mesopotámicas, los
ta a la necesidad humana de como propio, siendo símbolo de que sobreviven al desastre agrade-
comprender la realidad y justifi- la promesa de Cristo de una vida cen al Ser Supremo el haberles per-
car nuestra existencia. “Explican el eterna. donado la vida. Cuando las aguas
mundo a su manera, porque hablan Y es que el dios del Antiguo y Nue- bajan, la barca conduce al elegido a
de los grandes temas: la creación, vo Testamento surge como un ente las faldas de una gran montaña. Si
el más allá o el sentido de la vida”, viviente que vela por nosotros. En en la Biblia el afortunado es Noé y
afirma este catedrático de Filología el mensaje de Cristo a sus apóstoles el monte es el Ararat, en la mitolo-
griega y escritor que ocupa el sillón aparece la misma idea: “Yo vivo, y gía griega el protagonista es Deuca-
J de la Real Academia Española. vosotros viviréis en mí”. En el mito lión y el monte es el Parnaso.
Podría decirse que religión y mi-
tología son la misma cosa o, al
menos, tratan de dar sentido a las
mismas cuestiones. Entre ellas, una
explicación de la muerte y de su
consecuencia inmediata, la vida en
el más allá, dos aspectos que siem-
pre han suscitado una profunda
inquietud en todas las culturas. En-
tonces, ¿el miedo a lo desconocido
es el origen de lo sagrado? La ne-
cesidad del ser humano de creer en
un dios creador está directamente
relacionada con la de comprender
su propia existencia y con el temor
que siente a perder la vida, la salud,
las cosechas o la caza. En casi todas
las religiones resuena la misma ple-
garia temerosa: “Señor, protégenos
de todo mal. Señor, danos la vida”.
Y esta petición se hace porque se
considera que la divinidad tiene
poder sobre la vida y la muerte.
Por ejemplo, los dioses del Antiguo
Egipto exhiben en sus manos el anj
o ankh, la llave de la vida. Este sím-
bolo que data del período dinástico
Arcaico (c. 3150- 2613 a.C.) repre-
senta su poder sobre la muerte. Los
egipcios creían que la vida terrenal
Representación de
SHUTTERSTOCK

era solo una parte de la vida eter- la llave de la vida o


na y el ankh simbolizaba tanto la cruz ansada, con la
existencia mortal como la vida en parte superior en
el más allá. La asociación del Anhk forma de óvalo,
con el más alla se convirtió en un lazo, asa o ansa.
símbolo especialmente potente pa-

6 MUY HISTORIA DATA


LOS REYES en
el más allá Qin Shi Huang fue
enterrado con un

E
l antropólogo estadouni- impresionante
dense Marvin Harris, crea- ejército de 8.000
dor del materialismo cul- guerreros y
caballos de
tural (corriente que explica las
terracota a tamaño
diferencias y similitudes socio- real. En la imagen,
culturales dando prioridad a las una de las figuras
condiciones materiales de la expuestas en el
existencia), afirma: “La apari- Museo de los
ción de las sociedades-Estado Guerreros de
dio lugar a nuevas creencias Terracota, en Xian.
religiosas e instituciones ecle-
siásticas controladas por sa-
cerdotes, que eran los que in-
terpretaban la voluntad de los
dioses y los que se encargaban
de oficiar los rituales”. Fue en-
tonces cuando los monarcas
se vincularon a las divinidades,
convirtiéndose en sus repre-
sentantes en la Tierra.
Los restos momificados de
reyes y faraones fueron ente-
rrados en lujosas sepulturas
junto a joyas, carros, cerámica
y objetos de lujo que les se-
rían de utilidad en la otra vida.
Mientras sus almas subían al
firmamento para reunirse con
los dioses, sus restos momifi-
cados permanecían ocultos
en este mundo. Ejemplos
emblemáticos de estas
prácticas son las tumbas
egipcias del Valle de los
Reyes o el sepulcro de Qin
Shi Huang, primer empera-
dor chino de la dinastía Qin
(210-209 a.C.), que fue en-
terrado en Xian con un im-
presionante ejército de gue-
rreros de terracota.
SHUTTERSTOCK

MUY HISTORIA DATA 7


LOS orígenes del MUNDO

EL PODER CONVERTIDO
EN DIVINIDAD
Y
SHUTTERSTOCK

a en el mundo antiguo, la connivencia de di- a los dioses con la esencia espiritual de los anima-
rigentes políticos y dioses hizo que los más les sacrificados en su honor, lo que facilitaba que la
perspicaces dijeran que la religión había sido carne pudiera ser repartida entre el pueblo. Pero a
inventada por el poder para lograr la sumisión de un medida que creció el poder de las clases dirigentes, las
pueblo supersticioso y temeroso de las fuerzas divi- ofrendas se convirtieron en donaciones obligatorias
nas. Esa vinculación de la realeza con las fuerzas ce- de animales y otros tributos que fueron a parar a pa-
lestiales queda plasmada, por ejemplo, en la famosa lacios y santuarios, enriqueciendo a reyes, cortesanos
Estela de Hammurabi, en la que los dioses entregan y sacerdotes y empobreciendo al pueblo.
al monarca las insignias reales. Los sacrificios eran rituales religiosos que concedían
En la Grecia clásica, Alejandro Magno no tuvo nin- un papel estelar al derramamiento público de sangre,
gún reparo en decir que había sido engendrado por tanto de animales como de seres humanos. A fina-
el mismo Zeus, lo que demostraría que los dioses del les del siglo XIX, el arquitecto y arqueólogo alemán
Olimpo lo habían ungido para que él los representa- Robert Koldewey sacó a la luz los restos de la ciudad
ra en la Tierra. Por su parte, el historiador romano de Babilonia y de la Torre de Babel bíblica, que fue
Polibio ofrece una explicación muy práctica sobre construida durante el reinado de Nabopolasar (626-
la importancia de la religión y de los ritos sagrados: 605 a.C.). En lo alto de aquel enorme zigurat, que
“Son imprescindibles para mantener unida a la Re- tenía siete plantas y 90 metros de altura, los sacerdo-
pública y asegurar el orden social en Roma”. tes oficiaban rituales de sangre al dios Marduk para
En los tiempos remotos, los creyentes alimentaban bendecir a su pueblo en la guerra.

8 MUY HISTORIA DATA


SACRIFICIOS
PARA
APACIGUAR A
LOS DIOSES
L
os rituales sagrados
con sacrificios forma-
ban parte de la vida
cotidiana de muchas de las
culturas antiguas. Por ejem-
plo, en la Grecia clásica, los
sacerdotes se afanaron en
realizar todo tipo de sacrifi-
cios para apaciguar la furia
de los dioses. Las activida-
des arriesgadas, como las
expediciones de caza o las
guerras, no podían empren-
derse sin antes llevar a cabo
un sacrificio para pedir pro-
tección a las figuras mitoló-
gicas del Olimpo. Jenofonte,
historiador, militar y filóso-
fo, contó que los atenienses
prometieron a la diosa Arte-
misa sacrificarle tantas ca-
bras como persas mataran
en el campo de batalla. Y en
la batalla de Salamina (480
a.C.), el estratega Temísto-
cles ordenó sacrificar a tres
cautivos persas para asegu-
El famoso mosaico romano de rarse la victoria.
Issos, que representa a Junto a las creencias oficia-
Alejandro Magno en la batalla les, en las civilizaciones anti-
contra Darío III Codomano. Se
guas también se practicaban
halló en Pompeya y se exhibe
en Nápoles, Italia. ceremonias ocultas sujetas
a sus divinidades. Eran los
cultos mistéricos, cuyos ela-
borados rituales prometían a

¿Se puede calcular la edad sus seguidores el acceso a


secretos esenciales y a una
existencia plena más allá de
que tiene el universo? la triste vida del resto de los
mortales. Muchos de esos

E
s uno de los grandes misterios de la humanidad y cada vez estamos cultos bebían de viejos mi-
más cerca de desvelarlo. De hecho, en 2001 un equipo internacional tos mesopotámicos, como
de astrónomos del Observatorio Europeo Austral (ESO), dirigido por el de Ishtar, que descendió
Roger Cayrel, calculó que el universo tal y como lo conocemos tiene, al a los infiernos para después
menos, una edad de 12.500 millones de años. La medición fue realizada regresar de nuevo a la vida,
mediante el análisis de la luz emitida por una estrella, la denominada CS o de mitos egipcios, como el
31082-001, que se encuentra en la Vía Láctea. Para ello se utilizó el ura- de Osiris, que fue despeda-
nio 238, en un sistema de medición astronómica que equivale al de la zado por Seth y resucitado
datación del Carbono 14 que se utiliza habitualmente en paleontología y por Isis y Horus.
arqueología. Fue la primera vez que se logró realizar esta clase de me-
diciones fuera de nuestro Sistema Solar.

MUY HISTORIA DATA 9


Arrodillados ante el miedo
H
oy día, los musulmanes Junto al miedo y la sumisión, En el Egipto antiguo, las pirá-
tocan el suelo con la fren- aparece la exaltación de las di- mides eran escaleras para que
te cuando imploran a Alá vinidades. El dios, al igual que el el alma del faraón alcanzara su
y los cristianos se arrodillan con rey, se mostraba a los fieles sen- lugar entre las estrellas. Los so-
humildad cuando rezan a su tado en un majestuoso trono ele- beranos del Valle del Nilo eran
dios. Y es que la mayoría de las vado. Los dioses de la Edad de considerados los intermediarios
religiones antiguas establecie- Bronce vivían en la cima de las de los dioses en la Tierra. Al mo-
ron su liturgia en torno al temor. montañas, lo mismo que los bo- rir se fusionaban con Osiris, mo-
Esquilo recordaba que el miedo dhisattvas budistas, que guiaban mento en que eran venerados
a Zeus era “el miedo supremo”. a los fieles hacia la iluminación. como una deidad más del olim-
Cuando la peste negra asolaba Los templos de algunas culturas po egipcio. La reunificación de
grandes territorios de Europa, los evolucionaron en torres o zigu- los reinos Alto y Bajo en una so-
flagelantes se unían a las proce- rats, como en Mesopotamia o en la corona se efectuó bajo la guía
siones que suplicaban el perdón Mesoamérica, a semejanza de espiritual del dios tebano Amón,
de Dios ante los pecados come- los montes sagrados venerados a cuya gloria se construyeron nu-
tidos por los hombres. por diversas culturas asiáticas. merosos templos en Karnak.

EL DIOS
CREADOR DE
LOS AZTECAS
D
urante años, los aztecas
adoptaron los mitos y las
creencias de los pueblos a los
que fueron sometiendo. En su pan-
teón figuraban Otontecuhtli, dios
del fuego de los otomíes, Tlazol-
téotl, diosa del amor de los huas-
tecos, y Tzapotlatena, diosa de las
medicinas de los zapotecos, en-
tre otras muchas deidades. Pero la
principal de todas era Quetzalcóatl,
la Serpiente Emplumada, dios crea-
dor del mundo y de la vida, la divini-
dad primordial para los aztecas que
también lo fue para los teotihuaca-
nos, mayas y olmecas. Quetzalcóatl
representaba la dualidad del ser hu-
La Pirámide de
mano, siendo la serpiente el cuerpo
Quetzalcóatl, en
físico y las plumas su espiritualidad. Teotihuacán
Los aztecas también tomaron pres- (México), está
tada de sus antecesores la ingesta decorada con
de hongos alucinógenos que con- cabezas de
tenían psilocibina, como el peyote, serpiente
el olioluqui o el teonanacatl. La tra- emplumada (en la
ducción de este último es “carne de imagen), una de las
dios”, dado el efecto que tiene so- deidades más
bre la piel. Los chamanes de prác- antiguas e
ticamente todas las culturas me- importantes de los
SHUTTERSTOCK

pueblos
soamericanas los utilizaban en sus
mesoamericanos.
rituales religiosos y mágicos.

MUY HISTORIA DATA 11


mitología griega

Estatua de
mármol del
dios griego Zeus
con cornucopia
en las manos.

12 MUY HISTORIA DATA


LOS HABITANTES
DEL OLIMPO
T
odas las manifestaciones de la cultura clásica
griega, tanto las materiales como las espirituales
o anímicas, están determinadas por la presencia
exhaustiva de sus adorados dioses. La Antigüedad
grecolatina es profundamente religiosa. Sus dioses
aparecen casi en cada verso, en cada estatua, en cada
vaso de cerámica, en cada rincón de las ciudades y los
caminos. Cualquier intento de acercamiento o de ex-
plicación del universo mitológico de la Antigua Grecia
resultará estéril si no parte del estudio de sus dioses.
Pero este análisis no resulta sencillo, pues en Grecia
nunca hubo un libro sagrado ni un clero que guiara
los pasos de la gente por la senda pretendidamente co-
rrecta. Esto distingue de raíz a la fe griega de la mayo-
ría de las religiones existentes, antiguas o modernas, y
convirtió la experiencia religiosa de los griegos en algo
directo y personal, en un diálogo abierto entre el dios y
el mortal. Textos mitológicos como la Ilíada, el famoso
poema homérico, y la Teogonía de Hesíodo, explican
el origen y la naturaleza de esos dioses, así como su
relación con los hombres, pero no las tradiciones en
que se basaban. Gracias a fuentes literarias posteriores
y a la arqueología sabemos que la mitología griega in-
tegró las dos raíces de su civilización, la prehelénica y
la indoeuropea, así como influencias externas.

shutterstock

MUY HISTORIA DATA 13


mitología griega

EN El principio era el caos


L
os dioses del Olimpo griego tienen rostro y viven en los versos de los poetas. De hecho, fue Hesíodo, el
poeta beocio, quien, allá por el siglo VII a.C., estableció en una de sus obras, la Teogonía, el árbol genea-
lógico de los dioses de la mitología griega. Y lo hizo partiendo de un umbral muy expresivo: “En el princi-
pio era el Caos”. El Caos entendido como un espacio que se abre, eso fue lo que existía antes que el resto
de los dioses y fuerzas elementales; es decir, el estado primigenio del cosmos era una hendidura (el propio
poeta griego relata en la Titanomaquia que Zeus, al lanzar el rayo a los Titanes, provoca ese resquicio situa-
do entre el cielo y la tierra que es el Caos). Siguiendo con la Teogonía, Hesíodo relata en ella que tras Caos
existieron Gea (Tierra) y Eros (Amor), el más hermoso de todos los dioses, quizá la fuerza que habría de co-
hesionar los demás elementos para empezar a entretejer el cosmos, el orden del universo. No se dice de for-
ma explícita que Gea y Eros fueran engendrados por Caos, pero muchos expertos lo dan por supuesto, ya
que siendo la única entidad existente originalmente las deidades posteriores necesariamente debieron surgir
de él. Nix y Érebo sí son referidos de forma explícita como hijos de Caos.

Homero, de J. B. Auguste Leloir (1809-1892).


MUY
HUMANOS
L
os dioses griegos llega-
ron a ser el reflejo más
humano (y más exacto)
de la psicología de quie-
nes los crearon y, desde el
primer momento, fueron
el ejemplo de la primera
civilización caracterizada
por su atención, respeto y
amor por el ser humano.
Los griegos imaginaron
dioses que nunca son so-
brenaturales, pues son hi-
jos de la misma madre que
los hombres. Son sobre-
humanos, pues son más

ASC
fuertes que nosotros, y

Posada celestial
viven eternamente sin en-
vejecer, pero no son más
que nosotros y, a veces,

E
incluso su inmortalidad es l poeta Hesíodo nos dice también que de Caos surgieron espontánea-
una carga. Las deidades mente, sin intervención de nadie, dos criaturas tenebrosas: Nýx (la no-
griegas, en definitiva, no che) y Érebo (las tinieblas subterráneas), dos hermanos sombríos car-
son opresoras ni exigen a gados de misterios. Érebo vive debajo de Gea, en cada grieta, en cada
los mortales un compor- caverna; Nýx vive en el extremo Occidente, más allá de la tierra de Atlas,
tamiento imperiosamente donde los rayos del Sol perecen cada día.
correcto; no hablan a los De estos seres primigenios comenzó a surgir una primera generación de
hombres a través de las dioses que la mitología conoce como hijos de la diosa de la noche. En
páginas de una Biblia o un efecto, Nýx alumbró, después de ser fecundada por su hermano Érebo, a
Corán, ni se sirven de un dos hermosas criaturas, Hemera (Día) y Éter, en todo distintas a sus pa-
clero encargado de velar dres. La gemela, Hemera, es la personificación de la luz, una divinidad fe-
por una ortodoxia más o menina nacida para repartirse el tiempo con su madre y procurarle, así,
menos intransigente. No descanso. Una maldición para madre e hija, pues ambas están condena-
son abstracciones impla- das a no encontrarse más que en el fugaz instante del amanecer y del oca-
cables ni quimeras con so. Éter, divinidad masculina y hermano gemelo de Día, es el cielo superior,
rasgos imposibles. el lugar en que la luz se genera, pura, infinita e inmensa. Un lugar que los
mortales, deslumbrados, apenas pueden percibir.

14 MUY HISTORIA DATA


HIJOS DE LA NOCHE
A
demás de a Hemera (día) y Éter, Nýx tuvo otros hijos que
también jugaron un papel importante en estos inicios de
la cosmogonía griega: Hipno (sueño) y su hermano Tánato
(muerte), que, comprensiblemente, aparece solo de puntillas en
los mitos. Tánato representa, en general, la muerte tranquila, no
violenta, casi una plácida prolongación de su somnoliento her-
mano Hipno.
También son hijas de Nýx las Moiras, tres lóbregas mujeres ape-
gadas a la Luna cuya tarea es hilar la vida de cada uno de los
mortales, desde su nacimiento hasta la muerte. La primera de
ellas es Átropo (inconmovible) y sus dos hermanas se llaman
Cloto (hilandera) y Láquesis (suerte). En su telar se urde el hilo
que representa la vida de cada humano. Átropo lo trama, Cloto
comienza a hilarlo y Láquesis prepara la tijera que habrá de cor-
tarlo cuando llegue la hora de la muerte.
Otras criaturas nacidas de Nýx fueron arrinconadas con el tiem-
po por la fuerza emergente de otros dioses, más jóvenes, hijos
de un mundo nuevo que necesitaba nuevas divinidades.
ASC

Gea, la gran madre


P
ero no fue de Nýx de quien habrían de nacer todos los li-
najes de los dioses sino de Gea, la Tierra a quien el poeta
Hesíodo definió en su Teogonía como: “La de amplio pecho,
sede siempre segura de todos los inmortales que habitan la ne-
vada cumbre del Olimpo”. Sin intervención de elemento mascu-
lino alguno, Gea parió a Urano (cielo), a Ponto (mar) y a las mon-
tañas, con lo que el mundo estaba ya formado.
De todos sus hijos –que constituyen la primera generación de
deidades griegas– el más importante, con diferencia, fue Urano,
la personificación del cielo.Todas las religiones mediterráneas
han concebido la bóveda celeste como el elemento fecundador
por naturaleza, pues en su seno se genera la lluvia, esa espe-
cie de semen que fecunda la tierra y hace posible la vida en ella.

ASC
Así pues, Urano, el dios cruel engendrado por ella misma, es el
amante fecundo de Gea y de ellos nace la primera generación Ara Pacis (altar de la paz) romano que
de dioses propiamente dichos, especialmente los titanes y las representa a la diosa Tierra (la griega Gea)
con dos niños, como madre nutricia.
titánides, como Crono y Rea, cuya unión significa efectivamente
el comienzo de la religión griega como tal.
getty

Psique es recibida en el
Olimpo, de Rafael (1517).
mitología griega

Violento Urano Cupido une con un nudo de amor a Marte


con Venus –equivalente romano de la

C
onsumido por los celos y por el temor de que griega Afrodita–. Paolo Veronese (1570).
alguno de sus hijos llegara a ser más poderoso
que él, Urano los mantuvo ocultos en el seno
de su madre, Gea. Esta decidió enfrentarse a él y
forjó una hoz. Solo el más joven de sus hijos va-
rones, Crono, fue capaz de llevar adelante el plan
de su madre, pues no sentía la más mínima piedad
por su abominable padre. Cuando apareció Ura-
no y abrazó violentamente a Gea, Crono salió de
su escondite blandiendo en la mano la enorme y
perfecta hoz de oro. Aturdido por el deseo de po-
seer una vez más a Gea, el enorme dios no acertó
a comprender lo que sucedía. De repente sintió un
un dolor agudo y la hoz de oro segó sus órganos
genitales limpiamente. Estos cayeron al mar y co-
menzaron un viaje a merced del viento y las co-
rrientes. Cuando llegaron a la costa de Chipre, her-
vían a borbotones y de la blanca espuma que los
rodeaba nació una hermosa doncella que habría
de convertirse en la más hermosa de las diosas,
Afrodita. Tras ser castrado, Urano fue encerrado en
el Tártaro, el inframundo, y su hijo ocupó su lugar,
desatándose esa naturaleza colérica herencia de

SHUTTERSTOCK
su progenitor. Así la segunda generación está com-
puesta por los hijos de Crono.

pARRICIDIO MÍTICO
A
l principio solo existía el Caos, hecho de vacío y oscu-
ridad, hasta que Gea y Urano se unen y comienzan a
procrear. De su unión nacieron los doce Titanes –Crono,
Océano, Ceo, Crío, Hiperión y Jápeto (seis Titanes) y Febe,
Mnemosine, Rea, Temis, Tetis y Tea (seis Titánides)–; los Cí-
clopes (gigantes de un solo ojo en la frente) –Brontes, Esté-
ropes y Arges–; los Hecatonquires (tenían cien brazos y cin-
cuenta cabezas) –Giges, Coto y Briareo–; las Musas mayores
–Aedea, Meletea y Mnemea–, los gigantes con armadura, las
Erinias o Furias y las Melias (ninfas de los fresnos).
Así pues, de Urano y Gea nace la primera generación de dio-
ses propiamente dichos, especialmente los titanes y las titá-
nides a quienes Crono dejó prisioneros en el Tártaro.
Mientras, él, decidido a llenar la Tierra con sus hijos, tomó a
su hermana Rea como esposa. Pero su afán reproductor se
enfrió cuando Gea, su madre, le anunció que uno de sus hi-
jos le arrebataría el poder. Furioso, pensó en arrojarlos al Tár-
taro, pero no lo hizo porque con la ayuda de sus poderosos
tíos la profecía se cumpliría inexorablemente. Entonces de-
cidió devorarlos uno a uno, según fueran naciendo. Eso hizo
con Hestia, Deméter, Hera, Hades y Poseidón. Pero al aveci-
narse un nuevo parto, Rea pidió ayuda a su madre, Gea, que
la refugió en la remota Arcadia. Allí nació Zeus, lejos de todo;
Museo Nacional del Prado

también de Crono. Al amparo de la noche, en lugar de entre-


garle al bebé, Rea le dió a Crono una piedra para que se la
En torno a 1820, Goya pintó al titán Crono –el comiera. Y así lo hizo. Zeus estaba oculto y seguro.
Saturno romano– devorando a uno de sus hijos.

16 MUY HISTORIA DATA


¡Esto es la
guerra!
Z
eus creció en Creta, lejos de to-
dos, criado por sus nodrizas, su
madre, Rea, y su abuela, Gea. Y
llegó el día en que el joven y fuerte
dios estaba preparado para enfren-
tarse a su temido padre. Consiguió
acercarse a él haciéndose pasar por su
copero y le hizo beber una poderosa
droga purgante que le llevó a vomitar
el contenido de su estómago, hasta
que los dos hermanos y las tres her-
manas de Zeus volvieron a nacer. La
ira de Crono fue inmensa, pero el jo-
ven dios, con sus hermanos liberados
y agradecidos, estaba en disposición
de iniciar el combate contra su aterra-
dor progenitor.
Durante diez años, como en Troya, la
guerra entre titanes y dioses, conoci-
da como Titanomaquia, tuvo un resul-
tado indeciso. Los titanes se hicieron
La caída de los Titanes,
fuertes en el monte Otris; los dioses, por Cornelis van Haarlem.
en otra montaña que habría de ser su
ASC

morada para siempre: el Olimpo. La


Tierra sufría espantosamente. Enton-
ces Gea decidió dar a su nieto el con-
sejo definitivo: liberar a los resentidos
hermanos de su padre, los Cíclopes
HUEVO PRIMIGENIO
S
y los Hecatonquires, encerrados en egún los mitos más antiguos, a partir del Caos surgió una
el Tártaro desde hacía largo tiempo. diosa madre, creadora del universo, llamada Eurínome. El ini-
Liberados, sus tíos saludaron a Zeus cio del mundo se debió a su danza, pues con su movimiento
como el verdadero soberano y se lan- hizo que el cielo y la tierra se separaran y que a su alrededor se
zaron furiosos a la lucha. formaran las corrientes y a través de ellas el viento del norte, el
Los agradecidos cíclopes forjaron pa- Bóreas, que esparcía las semillas de todas las cosas. Así el Caos
ra Zeus el rayo y el relámpago; hicie- fue tomando forma.
ron para Hades un yelmo mágico que Sin embargo, el Bóreas fue enfriando el cuerpo de Eurínome
lo haría invisible –hermosa alegoría de que, aterida, abandonó su danza por un instante. Tomó en sus
lo que habría de ser el mundo de Ha- manos aquel viento helado y lo frotó sin cesar hasta que consi-
des, la muerte– y moldearon para Po- guió que se templase. El calor producido por el frotamiento de
seidón el tridente con el que agitaría sus manos dio forma a un ser de aspecto casi líquido, como un
los mares y movería la tierra. Con es- río. Este ser extraordinario recién nacido, llamado Ofión y que te-
tas armas, los tres hermanos inclina- nía el aspecto de una enorme serpiente, rodeó con sus anillos el
ron a su favor la balanza de una gue- cuerpo de Eurínome y copularon. Una vez fecundada con la se-
rra que ganaron definitivamente con milla de la serpiente, Eurínome se transforma en paloma y depo-
la intervención de los hecatonquires, sita en el balbuciente mundo, apenas iniciado, un huevo del que
quienes, utilizando la multitud de sus surge todo lo creado. Con su eclosión nacieron todos los seres y
brazos, lanzaron una incesante lluvia elementos que componen el cosmos –el Sol, la Luna, las estre-
de piedras que enterró a los titanes. llas, los planetas, los ríos, los animales, los árboles y las plantas–
Entonces Zeus se comportó como su y de la tierra emergieron las montañas.
padre: encerró en el Tártaro a los tita- Eurínome y Ofión fueron a descansar juntos al monte Olimpo.
nes, con Crono a la cabeza, y puso de Sin embargo, cuando él se atribuyó la creación del universo,
carceleros a los tres hecatonquires, cu- ella lo envió a las oscuras cavernas debajo de la tierra.
yo odio garantizaba que no saldrían.

MUY HISTORIA DATA 17


mitología griega

ASC
CULTOS MISTÉRICOS ¿Quiénes viven
J
unto a los cultos olímpicos, que fueron transfor-
mados políticamente en lo que podríamos definir
como cultos oficiales, en la Antigua Grecia se de- en el Olimpo?
E
sarrollaron otros rituales menos conocidos pero más l número de dioses que la tradición re-
cercanos a la gente común. Estos ritos son conocidos conoce como olímpicos varía según las
por la literatura científica como ‘cultos mistéricos’. épocas y los autores, aunque parece
Mistérico tiene un sentido en nuestra lengua que no haber cierto acuerdo general en que fueron
tenía en la Antigüedad, de manera que convendría de- doce deidades las que habitaban en la cima
nominar mejor a esos ritos populares como ‘de inicia- del Monte Olimpo decidiendo desde allí la
ción’, tal y como los llamaban los romanos, que tradu- vida de los mortales. De hecho, los griegos
cían el término griego por initiatio. denominaban el dodecatheron (doce dioses)
En Grecia fueron dos dioses, Deméter y Dioniso, los a esas divinidades olímpicas principales so-
que propiciaron estos ritos que eran una forma de bre las que reinaba el poderoso Zeus.
religión personal y votiva, que favorecía una expe- De la primera generación –los hermanos
riencia de lo sagrado diferente a la propuesta por la hijos de Crono– están Zeus, Hera, Posei-
fe olímpica oficial. Tras ellos se ocultaba un deseo de dón y Deméter. Entre ellos no se encuen-
curación y un anhelo de felicidad tras la muerte. tran Hades, porque no vive en el Olimpo,
Este afán de bienaventuranza de cara al futuro es lo ni Hestia, porque Zeus da su puesto a Dio-
que favorecía Deméter en su santuario de Eleusis (lo- niso por inventar el vino. Otros aparecen o
calidad cercana a Atenas). Dioniso no poseía un san- no según el autor que los cite (Eros, Persé-
tuario concreto y sus ritos, vinculados al vino y a los fone, Heracles, Asclepio...) o represente.
elementos irracionales del comportamiento humano, La segunda generación de dioses la for-
se celebraban al aire libre, en plena naturaleza. Su re- man los hijos de Zeus con diferentes mu-
ligión perseguía una especie de camino hacia la felici- jeres (diosas y mortales), y de ellos habitan
dad eterna. el Olimpo Atenea, Afrodita, Apolo, Artemis,
Hermes, Dioniso, Hefestos y Ares.

18 MUY HISTORIA DATA


LOS héroes,
ASC

MITAD
dioses
A
pesar de ser inmor-
tales, los dioses grie-
gos poseían en oca-
siones comportamientos
muy humanos, algunos
de los cuales les llevaban
a descender del monte
Olimpo para yacer con al-
guna mujer u hombre. De
estos encuentros sexua-
les nacían los héroes.
Más valientes que nadie,
luchaban con tremendos
Júpiter y Juno (Zeus y monstruos, hacían viajes
Hera) en el monte Ida épicos, lograban grandes
(1790), obra del pintor victorias o ejecutaban ta-
irlandés James Barry. reas imposibles para los
demás. Eran lo más cer-
Zeus y sus mujeres cano a la perfección de
los dioses que podían es-

L
a deidad suprema del panteón griego fue auxiliada constantemente por las tar los hombres. El más
mujeres, desde su madre (cómplice en el destronamiento de su padre) has- fuerte y más famoso de
ta diferentes esposas e hijas que se revelan como instrumentos indispen- todos los héroes helenos
sabIes para el ejercicio de su poder. Además, utilizó su promiscuidad como fue Heracles (el Hércules
una verdadera arma demográfica y llevó a algunos de sus hijos a la cumbre romano), hijo de Zeus y
del Olimpo. Zeus se procuró muchísimas amantes, tanto diosas –Leto, Demé- Alcmena, pero también
ter, Dione, Maya o Némesis, con la que tuvo a Helena de Troya– como morta- cabe recordar a Aquiles,
les –Sémele, Alcmena (madre de Hércules), Ío, Europa, Leda...–. Pero solo se Perseo de Argos, Odisea
casó con las titánides Métis, de la que nació Atenea, y Temis, con la que tuvo de Ítaca, Jasón de Tesa-
a las Horas y a las Moiras o Parcas; con la guapa oceánide Eurinome, con la lia, Teseo de Atenas o He-
que engendra a las tres Chórites o Gracias, extremadamente bellas, y con su racles de Tebas.
hermana Hera, su tercera y última esposa, con la que compartió el trono en el
Olimpo y tuvo a Ares, Hebe, Ilitia y Hefesto.

¿GRIEGOS O ROMANOS?

E
l panteón griego fue absorbido por los romanos modificando
solo los nombres. Así, Zeus pasó a ser Júpiter, padre de los
dioses y de los hombres y principal dios del Olimpo; su pa-
dre, el titán Crono, fue Saturno, dios del tiempo, y su esposa He-
ra se convirtió en la Juno romana, reina de los dioses. La corre-
lación en los hijos de Zeus-Júpiter fue la siguiente: Hefesto-Vul-
cano, hacía los rayos que su padre arrojaba a los mortales; Ares-
Marte, dios de la guerra; Apolo-Febo, dios del Sol, la música y
la profecía; Artemisa-Diana, diosa de la caza; Palas Ateneas-Mi-
nerva, nació de la cabeza de Zeus; Hermes-Mercurio, mensajero
y dios de los comerciantes. En cuanto a sus hermanos, tenemos
a Poseidón-Neptuno, señor de los océanos, y a Hades-Plutón,
señor del reino de los muertos. Por otro lado, Afrodita, diosa de
la belleza y el amor nacida de la espuma del mar, pasó a ser
Venus, y su hijo, Eros, el dios del amor, Cupido.
ASC

MUY HISTORIA DATA 19


El panteón griego estaba ya constituído en la época homérica, pero los griegos no Zeus
sintieron la necesidad de trazar la generación de sus dioses hasta el siglo VIII a.C. En
su poema Teogonía, Hesíodo es el primero en clasificar las divinidades y establecer
su filiación, es decir, es el primero que relata la creación del Universo. Antes de que
aparecieran los dioses con rasgos antropomorfos, se relata la existencia de algunas
divinidades mucho más abstractas, generalmente identificadas con elementos o
principios naturales, las cuales dieron origen a todo cuanto existe.

Éter Hémera
(Cielo Superior) (El Día)

Las Melíades Afrodita


(Ninfas de los fresnos) (Amor, lujuria...)

Los Gigantes Eros


(Seres monstruosos ) (Amor)

Jápeto Hiperión
(Antecesor de la (Fuego Astral)
humanidad)

Tía Mnemosine
(Vista) (Memoria)

Helio Selene Eos


(Sol) (Luna) (Aurora)

Las Musas
Metis Asia
(Ciencia y artes)

Atenea Atlante Epimeteo


(Sabiduría) (Pensamiento tardío)

Las Híades Prometeo Pandora


(Ninfas de la lluvia) (Robó el fuego de los dioses) (Primera mujer)

Deucalión Pirra
(Los dos únicos supervivientes del Diluvio Universal)

LOS HOMBRES

MUY HISTORIA DATA 21


MITOLOGÍA ROMANA

dioses de andar
por casa E
l general romano Craso es-
taba a punto de embarcar-
se en una batalla contra los
partos cuando escuchó vocear
a un frutero: “¡Cauneas!”, o sea,
“¡Higos de Cauno!”, palabra que
suena exactamente igual que la
expresión: “Caue ne eas!”, que
significa: “¡Ten cuidado, no va-
yas!”. Craso pensó que era un
simple vendedor de fruta ofre-
ciendo su mercancía y se fue
a la guerra. Craso error (de él
viene la frase), porque en Ca-
rras, además de la derrota, en-
contró la muerte. Este es uno
de los más conocidos omen o
presagios que se contaban los
antiguos romanos, convencidos
de que los dioses convivían con
las personas y les avisaban de lo
que iba a suceder.
“Hay que persuadir a los ciu-
dadanos de que los dioses son
amos y reguladores de todo –
decía Cicerón– y que se com-
portan muy bien con la raza de
los hombres: ellos vigilan los
hechos y la responsabilidad de
cada persona, sus propósitos y
su piedad en el cumplimiento
de los deberes religiosos”.

El consejo de los
dioses, detalle central
del fresco mitológico
Logia de Cupido
y Psique (1518), obra
de la escuela de
Rafael que se
encuentra en Villa
GETTY

Farnesina, Roma.

MUY HISTORIA DATA 23


MITOLOGÍA ROMANA

TÚ ME DAS,
YO TE DOY
A
unque en la larga historia de Ro-
ma hubo grandes cambios –el
más importante, el paso de la
monarquía a la república y de esta al im-
perio–, lo cierto es que la relación con
los dioses y la religión no varió demasia-
do en su idea básica. Para lograr los fa-
vores de los dioses, los humanos tenían
que hacer su parte del trato: realizar ce-
remonias, ritos y sacrificios que fueran
de su agrado. “Yo te doy una cosa a ti,
tú me das una cosa a mí” es lo que fun-
cionaba, y en cierto modo sigue funcio-
nando. Ni siquiera las divinidades hacen
favores si antes o después no reciben
algo a cambio. Como dice Pierre Gri-
mal en La civilización romana: “Los dio-
ses romanos no ordenan a los hombres
conducirse de tal o cual manera; no les
exigen otra cosa que el cumplimiento de
los ritos tradicionales (...). A este precio,
prometen mantener su acción benefac-
tora. Pero, sobre todo, esta acción divi-
na se revelará eficaz para apartar los mil
peligros que amenazan a cada instante
las actividades humanas”.

La religión lo
impregna todo
L
os historiadores modernos reprochan
a los romanos haber reducido la vida
religiosa al cumplimiento, sobre todo
formal, de un contrato entre el hombre y las
... PERO TAMBIÉN DE
divinidades”: así lo afirma Pierre Grimal en
La civilización romana. Pero los romanos
OTRAS PROCEDENCIAS
L
no eran fríos en el aspecto religioso; por a deidad egipcia Isis llegó a tener templo en el
el contrario, la vida estaba impregnada de Campo de Marte romano. Cada noviembre su
religión. Los habitantes del Olimpo influían esposo y hermano Osiris moría e Isis lo resu-
en todos los actos públicos y privados, así citaba de nuevo con gran alegría de los fieles en la
que tenían tantas ocupaciones que tuvieron llamada Invención de Osiris. A Atárgatis, mitad mu-
que especializarse. De ahí vino el concepto jer mitad pez, se le llamó Dea Syria porque procedía
de numen (deseo o voluntad de un dios), una de aquel país. A Cibeles, de origen frigio, pero ado-
fuerza de origen sobrenatural que preside rada desde época neolítica como diosa de las cose-
una actividad determinada o una realidad chas, la muerte y el renacimiento, se la honraba con
concreta de la vida. El numen divino estaba un culto especial: el taurobolio. Como se describe
en todo. En las labores del campo, por en el libro Un día en la Antigua Roma: “Un sacer-
ejemplo, Sator se ocupaba de la siembra; dote o iniciado se tumbaba en una zanja excavada
Occator, de la rastrillada; Sterculinus, del en el suelo que se cubría con una tabla de madera
abono; Veruactor, del barbecho, etc. agujereada. Encima se sacrificaba al toro, de modo
que la sangre chorreaba sobre el fiel”.

24 MUY HISTORIA DATA


DE ORIGEN
GRIEGO EN
SU MAYORÍA...
L
as tareas eran tantas, que los romanos aceptaban con
naturalidad –por la vía de la asimilación o por la del
sincretismo– a los dioses de otros países y culturas. De
hecho, sus deidades principales provenían en su mayoría del
Olimpo griego. El Zeus victorioso se convirtió en un Júpiter
similar y compartió con Marte, dios de la guerra, y Quirino,
de la agricultura, la tríada capitolina de los primeros tiem-
pos. En sucesivas épocas, Júpiter permaneció en la tríada,
pero Juno ocupó el puesto de deidad femenina por exce-
lencia y Minerva el de diosa de las artes, la guerra y la inteli-
gencia. Las procedencias eran variadas. Neptuno (en la ima-
gen), el hermano de Júpiter que gobierna todas las aguas y
mares, proviene del Poseidón de la mitología griega. Venus,
la deidad romana que protegía los huertos, asimiló las facul-

ASC
tades de la griega Afrodita y de la etrusca Apra, ampliando
sus poderes hacia la belleza y el amor. Apolo, que era griego
y romano, también tomó facultades del Esculapio griego. El
OJO CON BACO Y NADA
héroe Hércules, hijo de dios (Júpiter) y mortal (Alcmena), DE CRISTIANOS
L
fue una adopción casi literal del griego Heracles, mientras os romanos no tuvieron reparo en aceptar
que Diana, la virgen de la caza, romanísima en su origen, te- divinidades, aunque hubo dos excepciones:
nía puntos en común con la griega Artemisa. Vulcano, hijo el dios del vino, Baco (en la imagen, pintado
de Júpiter y Juno y marido de Venus, se correspondía con el por Caravaggio) –el Dioniso griego–, y Jesucristo.
Hefesto griego, pero también con el etrusco Sethlas. El dios Los seguidores del primero fueron objeto de una
del comercio Mercurio era análogo no solo del griego Her- importante represión y en 186 a.C. las bacanales
mes sino del etrusco Turms. Incluso hubo algunos sincretis- o fiestas mistéricas en su honor fueron prohibidas
mos, como es el caso de Júpiter Amón, una fusión del padre
SHUTTERSTOCK

por el Senado. “Todos los iniciados culpables de


de los dioses romanos y del dios de la creación egipcio. prostitución y muerte, testimonios falsos, firmas
falsificadas, testamentos supuestos o de cual-
quier otro delito igualmente deshonroso fueron
decapitados”: así lo contó Tito Livio, partidario
Interior del Gran Templo de Abu Simbel, del Senado. “Estos cultos en un principio no te-
a 230 km al suroeste de Asuán (Egipto). nían muchos adeptos, pero después empezaron
a divulgarse bastante, tanto entre los hombres
como entre las mujeres. Para seducir a más gente
se añadieron a las prácticas religiosas los place-
res del vino y de la buena carne. Cuando el vino
encendía los espíritus, y la noche y la mezcla de
sexos, especialmente de tierna edad, borraban
cualquier sentimiento de pudor, pronto se cayó
en todo tipo de desenfrenos”. La represión no vi-
no tanto por la ortodoxia religiosa como por la al-
teración del orden público.
La otra excepción llevó a la persecución de los
cristianos y tampoco fue algo estrictamente re-
ligioso, pues se produjo por el rechazo de estos
a adorar a los emperadores hechos dioses (una
shutterstock

particularidad de la religión romana durante el Im-


perio fue la deificación de líderes políticos).

MUY HISTORIA DATA 25


MITOLOGÍA ROMANA

Obligaciones rituales,
¡claro que las había!
L
os profesores de la Universidad de Barcelona Xavier Espluga y
Mónica Miró explican en Vida religiosa en la Antigua Roma: “En
el acto ritual quedaba rigurosamente establecido qué había que
hacer; dónde, cómo y cuándo se tenía que llevar a cabo y quiénes
eran el ejecutor y el destinatario”. Los actos en cuestión eran la
plegaria, el himno, el voto, el sacrificio, las técnicas adivinatorias y los
banquetes sagrados. Había que hacer una invocación a la divinidad
con una fórmula determinada y después se decía varias veces la
petición concreta, mencionando por qué se había elegido a ese
dios precisamente y por qué se era merecedor de lo solicitado. La
plegaria no admitía errores, y si se pronunciaba un himno tenía que
ser solemne y poético. Algo como: “Somos fieles a Diana, / jóvenes
y doncellas vírgenes. / Hija de Latona, poderosa / descendencia del
omnipotente Júpiter, / a quien tu madre alumbró / cerca del olivo
delio / para que fueras la señora de los montes, / de los bosques
verdeantes, / de los recónditos sotos / y de los ríos sonoros”.

OFRENDAS Y

ASC
SACRIFICIOS
T
ras la invocación al
dios en cuestión había
que hacer una prome-
sa o voto y luego una ofren-
SHUTTERSTOCK

da o sacrificio. A veces solo


se trataba de derramar vino
o leche en el altar, pero a
El emperador, menudo se utilizaba sangre
de algún animal. Era un rito

otro dios regulado en el que se ele-


gía una víctima sana que se

E
adornaba, se trasladaba al
l culto al emperador tuvo la
templo y se inmolaba con
facultad de servir de nexo de
plegarias y advocaciones.
unión de todos los ciudada-
Los templos eran el princi-
nos, fuera cual fuese su proceden-
pal espacio sagrado, pues
cia. Por eso, saltárselo, como ha-
allí estaba la estatua del
cían los cristianos (porque solo ha-
dios al que se dedicaban las ofrendas, pero no eran el único (por
bía un dios y no era precisamente el
eso los restos de los templos no dan la medida total de la riquísima
emperador), era un auténtico desa-
vida espiritual ciudadana).
fío. Excepto para los seguidores de
Las sibilas eran las comunicadoras de los oráculos, pues se consi-
Jesús, para el resto de los ciudada-
deraba que poseían poderes adivinatorios. Su papel en la civiliza-
nos era obvio que Julio César (en la
ción griega fue de importancia capital –la más famosa fue la Sibila
imagen) había realizado una misión
de Delfos (en la imagen, en uno de los frescos de la Capilla Six-
divina, y su traumática muerte no
tina pintados por Miguel Ángel)–, pero también en Roma estas
hizo más que facilitar su camino a
profetisas, inspiradas en ocasiones por Apolo, eran requeridas para
los cielos. Augusto, su sucesor, hijo
conocer el futuro. Una vez interpretadas las señales adivinatorias
adoptivo y primer emperador, con-
halladas en el cuerpo de la víctima propiciatoria, se la descuartiza-
sagró un templo a su figura y, cuan-
ba y comía ritualmente. Estos banquetes eran tan importantes que
do murió, fue él mismo instalado en
tenían sus propios sacerdotes: los espulones.
los altares con un rito de gran pom-
pa, la Consecratio in forma deorum.

26 MUY HISTORIA DATA


DIOSES Interior del Gran Templo de Abu Simbel,

FAMILIARES a 230 km al suroeste de Asuán (Egipto).

E
n el hogar romano, en
el que el pater fami-
lias era el jefe religioso,
lo primero que se adoraba
era a los antepasados más
antiguos, a quienes se re-
cordaba con un altar en la
puerta (más o menos osten-
toso dependiendo del poder
económico).
En la mitología romana, los
manes eran los dioses fa-
miliares y domésticos, los
espíritus de los difuntos de
la casa que, por lo general,
estaban asociados a otros
llamados lares que prote-
gían las habitaciones (aun-
que también había lares es-
pecializados en caminos, en
cruces, etc.). Los penates
o dioses de la despensa se
ocupaban de los alimen-
tos; Giano, de los
jardines y patios, y
Genius, de la pro-
creación. Pero tam-
bién existía el ‘lado
oscuro’, con sus
lemures o espíritus
de la muerte (espec-
tros de difuntos ma-
lignos vagando sin
esperanza), con las
maniae, divinidades
que personificaban
la locura y la de- Epígrafe funerario hallado en Mérida que reza:
mencia, o con La- “Consagrado a los dioses manes. Mario Droso de 70
ASC

verna, diosa pro- años está sepultado aquí; que la tierra te sea leve.
tectora de ladro- Mario Tyquio lo hizo para su padre queridísimo”.
ASC

nes e impostores.

Presentes en el nacimiento y la infancia


C
uando una romana traía dioses en concreto (Intercidona, Liberalia (fiestas en honor de Liber,
un hijo al mundo, la diosa Pilumnus y Deuerra) se encargaban dios de la fertilidad y del vino, y su
Lucina (la Ilitía griega) la de cortar y barrer todos los males esposa Libera), que tenían lugar
auxiliaba durante el parto. También, que pudieran acechar al recién a mediados de marzo, los padres
las diosas Diana y Juno, en su nacido en sus primeros días de llevaban a sus hijos varones al foro
calidad de diosas de la luz, eran vida. Al niño varón se le colgaba al –vestidos con una túnica de adulto–
consideradas protectoras de cuello un amuleto, la bulla o bula para presentarlos en sociedad e
los alumbramientos. Después, (burbuja), que le protegía contra los inscribirlos como ciudadanos; de
numerosos numina especializados malos espíritus y que no se quitaba este modo se les tenía en cuenta en
protegían al pequeño, pero tres hasta la adolescencia. Durante las las levas del ejército.

MUY HISTORIA DATA 27


MITOLOGÍA ROMANA

¿Cómo
honraban a
los muertos?
T
ambién los ritos formaban
parte de la muerte en Roma.
Al difunto se le sometía pri-
mero a una serie de pruebas para
asegurarse de su fallecimiento. Fi-
nalmente, los parientes le llama-
ban por su nombre mirándole a los
ojos y si no respondía se le exponía
durante unos días para, posterior-
mente, ser conducido a la pira fu-
neraria, donde era incinerado. Aquí
se apreciaban las diferencias de
clase, pues las comitivas pobres
eran más silenciosas, mientras que
las de las clases pudientes eran
una exhibición con plañideras pro-
fesionales, músicos y retratos de
todos los antepasados de alcurnia.
La rivalidad era tanta, que se pro-
mulgaron leyes antisuntuarias para
evitar agravios comparativos entre
los muertos.
Las cenizas del difunto se metían
en una urna con un trozo de dedo
que se le cortaba antes. Según el
dinero disponible, esta se coloca-
ba en el suelo o en un mausoleo.
El pater familias tenía que espantar
a los espíritus maléficos lanzando
habas por el suelo del hogar y repi-
VESTALES, tiendo una imprecación.
ASC

LAS ‘MONJAS’ ROMANAS


S
eleccionadas por el Pontifex maximus, el emperador, en-
tre los seis y los diez años, las candidatas a vestales de-
bían ser vírgenes, de padre y madre patricios y de gran
hermosura. Estaban liberadas de la obligación de casarse y te-
ner hijos, pero tenían voto de castidad. Desde el momento en
que entraban en el templo el día de la consagración a la diosa
Vesta, comenzaban diez años de noviciado y diez más de ejer-
cicio, en los que aprendían a presidir ceremonias, custodiar
imágenes y, sobre todo, a llevar adelante la misión más honora-
ble que pudiera imaginarse: tutelar el fuego sagrado. Esa era su
mayor responsabilidad, mantener encendido el fuego sagrado
del Templo de Vesta en el Foro romano. Alberto Angela cuenta
en Un día en la Antigua Roma: “Si el fuego llegara a apagarse
o si una vestal perdiera su virginidad, el castigo sería ejemplar:
el amante sería azotado hasta la muerte y ella sentenciada, pe-
ro sin derramar una gota de sangre: sería enterrada viva en una
celda subterránea con una hogaza de pan y un candil”. Duro
castigo, pero es que convertirse en una vestal era uno de los
trabajos religiosos más respetados en Roma.

28 MUY HISTORIA DATA


Creo en Mitra, matador de toros
E
ste dios, mencionado ya por los hititas, nació en el solsticio de in-
vierno y de su culto no ha quedado nada escrito, pues era una reli-
gión esotérica y secreta, muy arraigada en el exclusivo estamento
militar y que nunca tuvo un número considerable de creyentes. Las mu-
jeres estaban excluidas de estos ritos –exportados por los legionarios de
Persia– que se practicaban libremente en Roma y que tenían en los cris-
tianos a sus principales enemigos.
Los ritos se celebraban en una sala rectangular, similar a una oscura cueva,
con un banco corrido a los lados y pinturas en las paredes. Tras un ban-
quete de pan y vino servido por los novicios (los llamados corax o cuervos),
se sacrificaba un toro y se bautizaba a los neófitos con su sangre (en otras
épocas, por inmersión en agua). Los soldados eran tatuados con hierro
candente y se ponían una corona que tiraban al suelo gritando que solo Mi-
tra era su corona. A veces, el ritual incluía una muerte simulada.

ASC
Los hígados
UNA VIDA LLENA DE FIESTAS hablan
L
a vida pública romana estaba fueron las Saturnalia, festejos de in-

Y
tan repleta de ritos y fiestas re- vierno; las calendas de marzo y las a existía en Mesopo-
ligiosas (que también se consa- celebraciones del solsticio de verano. tamia y Grecia, pero la
graban a los dioses) que en el calen- En un solo mes, pongamos abril, eran práctica de la hepatos-
dario reformado por Julio César en festivos los días 1 (fiesta de Venus), 4 copia –consultar las entrañas
el año 47 a.C. casi dos de cada tres al 10 (de Cibeles), 12 al 19 (de Ceres), de los animales para adivinar
días eran festivos. 15 (Fordicidio, por las 30 curias de el porvenir– la tomaron los ro-
La vida agrícola estaba marcada por Roma), 21 (de Pales), 23 (de Júpiter), manos de los etruscos y fue
las Parilia (fiestas de los pastores), 25 (de Robigus, que protege a los ce- aceptada oficialmente por el
las Lupercalia (para proteger a los re- reales) y 28 al 30 (juegos en honor de Senado en el siglo II a.C.
baños del ataque de los lobos) y las la diosa de la primavera). Lo primero era elegir un ani-
fiestas del Dea Dia, a finales de mayo, La vida material y la espiritual eran mal para el sacrificio, prefe-
que se hacían en honor de la diosa parte de la misma realidad para los rentemente un gallo o un ca-
que regía el buen tiempo. Las Com- romanos; la omnipresencia de la divi- brito. Posidonio explicaba que
pitalia, Faunalia, Cerialia, Lucaria o nidad en todos los sectores de la vi- el poder divino “guiaba en la
Volcanalia se desarrollaban a lo lar- da pública y privada y lo muy variada elección de la víctima, mien-
go del año dedicadas a la primavera, que fue su religión resultó ser un as- tras la naturaleza podía inter-
los bosques, la naturaleza, las lluvias, pecto unificador y en gran parte res- venir produciendo cambios en
las fuentes o las viñas. Destacables ponsable del auge de Roma. las vísceras de los animales”.
Después, los arúspices (de
ara, altar, e inspiciare, exami-
nar) observaban los órganos
internos del animal recién sa-
crificado. Se centraban en el
hígado, observaban su color,
aspecto y posición, y lo divi-
dían en dos mitades. En ge-
neral, las señales que se veían
en el lado izquierdo eran de
mal augurio y las del derecho,
buenas, pero no existía una
correspondencia clara. De he-
cho, Cicerón se preguntaba si
“los arúspices habían contras-
tado entre sí sus observacio-
nes para establecer la parte de
SHUTTERSTOCK

la víscera que es enemiga y la


parte que es familiar”.

MUY HISTORIA DATA 29


HADES / PLUTÓN HEFESTO / VULCANO POSEIDÓN / NEPTUNO HERMES / MERCURIO
Dios de los Muertos y los Infiernos Dios del Fuego Dios del Mar Mensajero y dios del Comercio

HESTIA / VESTA DEMÉTER / CERES TIQUE / FORTUNA GEA / TELLUS DIONISIO / BACO
Diosa del Fuego Sagrado Diosa de la Agricultura Diosa del Destino Diosa de la Tierra Dios del Vino

MUY HISTORIA DATA 31


MITOLOGÍA NÓRDICA

CREENCIAS DEL

DE LAS ‘EDDA’ A LOS ESCALDOS


A
comienzos del siglo XI, el cristianismo se había impuesto en Europa a todas las religiones preexistentes, aunque
todavía quedaban focos aislados en los que se conservaban de forma más o menos encubierta las viejas creen-
cias. Para entonces, la evangelización había llegado incluso a la remota Islandia, donde un sacerdote cristiano
llamado Semundo dedicó años a coleccionar las tradiciones orales recogidas en canciones y poemas que resumían las
creencias anteriores de su pueblo. Al conjunto lo llamó graciosamente Edda, o sea, “la abuela”.
Esta es la primera fuente real para nuestro conocimiento de la espiritualidad escandinava. La segunda es otra recopi-
lación hecha por Snorri Sturluson en el siglo XIII, la Snorra Edda, que incorpora a su vez las creencias que difundían
y transmitían los juglares vikingos, los escaldos o autores de las sagas, aquellos interminables relatos míticos que
parecen elaborados para entretener las largas noches boreales al lado del fuego.

32 MUY HISTORIA DATA


NORTE El mito de
la creación
E
l Völuspá (Profecía de la
vidente), el primer y el
más conocido poema de
la Edda poética, cuenta la his-
toria de la creación del mundo
y su inminente final (el Rag-
narök). Narrado por una völva
o vidente, está dirigido a Odín
y es la principal fuente para el
estudio de la mitología nórdica.
Al principio solo existían luga-
res vacíos y temperatura. La
región fría estaba separada de
la cálida por un lugar llamado
Ginunngagap (abismo enorme),
que admite la comparación
con el khaos de los griegos,
que también existió antes que
todo lo demás. Esta palabra
helena (que en origen no aludía
al desorden, como lo entende-
mos ahora, sino a una misterio-
sa abertura o grieta abismática)
contiene en su etimología el
mismo concepto que la nórdi-
ca Ginunngagap, el de espacio
abierto abismal. Para los nórdi-
cos, fue en ese precipicio inter-
medio donde surgió el mundo,
cuando el calor descongeló el
Estatua del dios Odín hielo produciendo una vaca si-
flanqueado por su hijo deral que, sedienta, lamió la
Tyr, dios de la guerra, nieve que cubría las rocas y fue
blandiendo su espada, y
descubriendo la cabeza y el
por Heimdall, que hace
sonar el cuerno para cuerpo del dios Buri, el primer
anunciar la llegada de dios en la mitología nórdica,
SHUTTERSTOCK

intrusos. cuyos descendientes serán los


dioses principales de los vikin-
gos (fue padre de Bor y abuelo
de Odín).
SHUTTERSTOCK
MITOLOGÍA NÓRDICA

LUCHA ENTRE
ASES Y VANES
L
os escandinavos coinciden
con los griegos en una idea
básica: los dioses no fueron
divinidades desde el principio,
sino que tuvieron que guerrear
contra sus enemigos para obte- Los Æsir alrededor
ner el dominio del mundo. Las del cadáver de
deidades griegas vencieron a Baldr, del danés
los poderosos titanes; las nórdi- Christoffer Wilhelm
Eckersberg.
cas, los ases (Æsir), a los vanes

ASC
(Vanir). Pero mientras los titanes
acabaron prisioneros en el Tár-
taro, donde los confinó el victo- Una herencia religiosa
rioso Zeus, los vanes se reconci-
liaron con sus dioses enemigos, compartida
A
los ases, y se incorporaron a su
pesar de la enorme diversidad de cultos identificada en los
grupo. De ahí la peculiar orga-
yacimientos más antiguos, muchos expertos defienden la
nización de los dioses vikingos
idea de una religión raíz entre los indoeuropeos, idea basada
en dos clanes: los vanes y los
en la historia posterior de estos pueblos, en la evidencia lingüística
ases. En el universo vikingo, am-
común y en las religiones comparadas. La existencia de similitudes
bos clanes, de dos generaciones
entre sus dioses y sus prácticas religiosas sugiere que en cualquiera
distintas, conviven en una inte-
de las poblaciones que formaran tenían una forma de religión poli-
resante armonía después de la
teísta y la creencia de que hay algo después de la muerte. Además,
guerra. No obstante, se diferen-
los idiomas del norte, sueco, noruego y danés, pertenecen con se-
ciaban por su carácter. Los ases,
guridad a la misma familia original que los del sur, la indoeuropea.
de temperamento belicoso, eran
Las semejanzas que encontramos entre las creencias podrían obe-
dioses de la guerra; los vanes,
decer a esa raíz común de la cultura indoeuropea que detectamos
pacíficos, eran dioses dadores
también en las lenguas, aunque la religión primitiva fuera luego de-
de riqueza, fecundidad, placer
sarrollada por separado y reelaborada poéticamente por cada grupo
y paz, y protegían al mundo de
cultural. El analista francés Georges Dumezil afirmaba que la primera
cualquier mal.
naturaleza de los diversos dioses que adoraban los diferentes pue-
blos indoeuropeos probablemente fuera de carácter celestial o as-
trológico (vivían en los cielos y desde allí se manifestaban).

dos dinastías divinas


E
n Asgard, el hogar de los dioses, habitaban los Æsir (dioses) y las
Asynjur (diosas) en una asamblea a cuya cabeza estaba Odín, el
más noble e importante, creador del mundo y dios de la sabiduría,
la guerra y la muerte. Aunque hay muchos Æsir en la mitología nórdica y
germana, detacamos a los más cercanos a Odín. Frigg (en la imagen), su
esposa y reina de los Æsir, era diosa del cielo, la fertilidad, el amor, el ho-
gar, el matrimonio y la maternidad. Su hijo Thor, armado con su martillo
de guerra arrojadizo, era el dios del trueno y tenía influencia en el clima,
las cosechas, la protección, la justicia, los viajes y las batallas. Balder,
su segundo hijo y su preferido, fue asesinado por Loki, pero resucitará y
asumirá el mando de su padre. Destaca también Tyr, el dios de la guerra
y la ley: perdió una mano y encarna el ideal del caballero, el honor. Por su
ALAMY

parte, los pacíficos Vanir vivían en Vanaheim, presididos por los gemelos
Frey (dios de las cosechas, la lluvia, el calor del Sol y la prosperidad) y Freyja (diosa del amor y los matrimonios).
También estaban Njörd, dios del Mar, su esposa Skadi, señora del invierno y cazadora de las montañas, Nerthus,
la Madre Tierra, y el sabio Heimdall, el guardián de la puerta de Asgard. Y contra todos, tanto los Æsir como los
Vanir, está Loki, el dios del mal y del Caos. Su hija, Hel, es la diosa del Niflheim o Infierno de hielo.

34 MUY HISTORIA DATA


ASC

ASC
Camino al
THOR, EL PROTECTOR Valhalla
A A
pesar de ser enorme y fortísimo, el hijo de Odín tenía
unque su carácter era
un carácter protector e íntimo y era el dios al que se
furibundo y desmesura-
invocaba para demandar favores (lo llamaban fulltrui,
do, es verdad que Odín
es decir, ‘en el que se confía totalmente’). En él descansa-
poseyó atributos como el de la
ban los principios de estabilidad y justicia y su culto estaba
sabiduría y desempeñó tareas
más extendido que ningún otro porque su carácter protec-
semejantes a las del Mercurio
tor y conservador encajaba bien con la mentalidad de los
latino y el Hermes griego. Co-
colonos vikingos, que necesitaban estabilidad. Thor se en-
mo estos últimos, Odín es el
cargaba también de mantener el orden celeste (el por aquel
encargado de conducir a los
entonces misterio de los días y las noches, las estaciones y
muertos al otro mundo. Aun-
los años). Es posible que su atributo más señero, el mjollnir
que no a todos los difuntos,
o martillo, no fuera en sus orígenes un arma sino una he-
sino tan solo a los bienaven-
rramienta con la que ajustaba la cúpula del firmamento
turados guerreros que pere-
produciendo un sonido aterrador: el trueno. Thor
cen valerosamente en la bata-
lucha contra los gigantes que intentan des-
lla. Para ello se ayuda de las
equilibrar el cosmos, pero también mantie-
valquirias, bellísimas jóvenes
ne a raya a Jörmundgander (imágen), la
que conducen a los caídos en
temible serpiente celestial que termina-
combate hasta el Valhalla.
ALAMY

rá venciendo a los dioses.


Se trata de un enorme edificio
con 540 puertas situado en el
Asgard. Allí permanecen los
einherjer, los espíritus de los
ODÍN, el gran dios del norte guerreros que han muerto en

T
la batalla, bebiendo hidromiel
ambién llamado Wotan o Woden,
y disfrutando de la compañía
Odín es la divinidad principal nór-
de las valquirias, en espera de
dica y uno de los dioses más com-
poder ayudar a los dioses en
plejos del panteón universal. Vive en el
el combate del Fin del Mundo,
Asgard (en el cielo), en el palacio Valas-
el Ragnarök.
kjálf, y desde su trono, el hliðskjálf, ob-
Todo esto se parece mucho a
serva con su único ojo (sacrificó el otro
la idea musulmana de que los
para obtener el conocimiento) cuanto
héroes muertos en comba-
ocurre en los nueve mundos. La des-
te son recompensados con el
mesura y el arrebato forman parte de su
traslado a la yanna o paraíso,
carácter –su nombre significa ‘furor’– y,
donde les esperan las huríes,
como dios de la guerra y la victoria, ha-
esas doncellas maravillosas y
SHUTTERSTOCK

ce hervir la sangre de los guerreros, que


perpetuamente vírgenes que
atacan al enemigo invocando su nombre,
deparan un placer cien veces
y se encarga de enviar a las valquirias a
mayor al conocido en este
recoger a los guerreros muertos heroicamente. Se le invocaba en las cele-
mundo. Por supuesto, en am-
braciones y en esos banquetes llenos de excesos, reflejados en las cróni-
bos casos se trata de un re-
cas altomedievales. Pero Odín es también el señor de la sabiduría, la ma-
curso muy conveniente para
gia, la poesía y la profecía. Al final de los tiempos guiará a los dioses y a los
obtener guerreros sin miedo a
hombres contra las fuerzas del caos en la batalla final, el Ragnarök.
dejarse la vida en el combate.

MUY HISTORIA DATA 35


MITOLOGÍA NÓRDICA

SIN TEMPLOS
A
todos esos dioses, que esta-
ban muy presentes en su vi-
da cotidiana, los vikingos los
veneraban en santuarios consagra-
dos por la tradición y enclavados
en bosques o en lugares señalados
por algún motivo, como la presen-
cia de manantiales. Tácito asegura
que los germanos despreciaban
las estatuas de dioses, afirmando
que nadie podía conocer su as-
pecto ni su naturaleza. En Islandia,
sin embargo, sí se construyeron
edificios para el culto donde se ce-
lebraban ceremonias en las que se
sacrificaban caballos (las vísceras
se ofrecían a los dioses, mientras
que el resto era consumido por la
voraz asamblea). Quizá por ello, el
papa Gregorio III calificó de crimen
inmundo y execrable el hecho de
comer carne de caballo. También
se practicaban sacrificios huma-
nos en honor de Odín. Sobre todo,
de prisioneros de guerra, que a ve-
ces eran ahorcados sin ceremonia.
Una actitud que los hacía aún más
temibles para sus enemigos.

ADIVINAR EL
FUTURO
S
abemos poco de los ritos sa-
grados de los vikingos, pero

ASC
es seguro que practicaban

Viernes, día de Freyja


la adivinación, arte que dejaban en
manos de videntes femeninas. Lla-
madas völvas (portadoras del bácu-

E
lo), estas adivinas de vida itinerante n Roma, el domingo era el día del Sol y, aunque la Iglesia ca-
y apartada eran llamadas en mo- tólica lo cambió por el día del Señor (dominus), sigue siendo
mentos de crisis para conocer el fu- así, sunday, para germanos, escandinavos y anglosajones.
turo. Practicaban la magia seid, en- El lunes, día de la Luna en Roma, fue monday; el martes, día de
tonaban unos misteriosos cánticos Marte, tuesday por el dios Tyr; el miércoles, día de Mercurio, wed-
y adivinaban el futuro por la sangre, nesday por el Wotan u Odín vikingo; el jueves (de Jove, Júpiter)
las runas, el vuelo de las aves o la fue thursday por Thor; y el sábado, día de Saturno, se conservó
interpretación de lo sueños. El he- en el Norte como saturday. En cuanto al viernes, día de Venus pa-
cho de que el propio Odín visitase ra los romanos, dio lugar al friday al ser dedicado por los vikingos
a una de ellas para saber si podía a Freyja, esposa de Odín. Su nombre es similar a Frigg, otra diosa
cambiar el curso del Ragnarök in- nórdica, y al de su hermano gemelo Freyr, lo que hace pensar que
dica su importancia. Pero eran tan se trataba de la misma divinidad. Diosa bellísima, en todo caso,
respetadas como temidas, pues era patrona y protectora del amor y el sexo (era tradicional casar-
también podían maldecir, dañar y se en su día) y, como la Venus romana, fue infiel a su divino mari-
hasta provocar la muerte. do. Además, ayudaba en los partos y en el cuidado de los hijos.

36 MUY HISTORIA DATA


¿Quiénes eran DIVINIDADES MENORES
las nornas?
L
os escandinavos tenían una concepción

D
e las extrañas analogías que se recono- animista del mundo, por lo que, al margen
cen entre la religión nórdica y la medite- de los grandes dioses (ases y vanes), te-
rránea destacan las figuras de las hace- nían otras divinidades menores muy apegadas
doras del destino, aquellas que hilan la vida de a la naturaleza. Los elfos y elfinas, por ejemplo,
los seres humanos. Tanto para los escandinavos eran deidades jóvenes, de gran belleza, que
como para los griegos, esa labor recaía en tres vivían en bosques, cuevas o fuentes. Se los
mujeres a las que los primeros llamaban nornas, consideraba seres de larga vida o inmortales y
los segundos moiras y los romanos parcas. Las con poderes mágicos. Eran benéficos y podían
nornas escandinavas habitaban en las raíces llegar a unirse sexualmente con los humanos.
del Árbol del Mundo, que regaban con un líqui- Los enanos (los dvergar escandinavos y los ni-
do especial, y al igual que las moiras griegas belungos germanos) eran herreros hábiles de-
hilaban el cordón de oro de la vida humana. La dicados a producir armas para las batallas de
metáfora de la vida como un hilo que se termi- los dioses. Más oscuros eran los jotun (jotnar),
na cortando era análoga en el norte y en el sur gigantes de fuerza sobrehumana que vivían
del continente, lo que también se acredita con en Jötunheim, uno de los nueve mundos, se-
los nombres que recibe el destino en las len- parados de los hombres por altas montañas y
guas germánicas (wurd) y escandinavas (urdh), densos bosques. Se les consideraba enemigos
claramente relacionados con el verbo latino que de los dioses, aunque se mezclaban o incluso
expresa la noción de girar, vertere, como hace se casaban con ellos. Grandes constructores,
la rueca. se les atribuye la edificación de los dólmenes.
Continuando con las asociaciones, el antiguo Grandes eran también los trols (troll), salvajes
término noruego audhna, ‘destino’, se entiende de horrible aspecto que vivían en cuevas ba-
como ‘tejer’ en el lituano audmi. Esto, que no jo las montañas y pueden colarse en cualquier
deja de ser sorprendente, se explica a través del hogar, adoptando el aspecto de animales do-
viejo parentesco entre las lenguas indoeuropeas mésticos, para secuestrar y robar niños. En los
y parece resultado, no ya de la conservación de ríos y los lagos prosperaban unos seres llama-
una palabra, sino de una metáfora compartida, dos nixos, y, en el mar, la malvada Ran.
que debió nacer de un fundamento común pro-
cedente de los primitivos indoeuropeos.

ASC

MUY HISTORIA DATA 37


PANTEÓN

Dioses Aesir Dioses Vanir Otros Ymir


(Gigante original)
Gigantes Loki y familiares
AUDHUMLA
GIGANTES (Jötunn) (Vaca primigenia)

SURT FARBAUTI LAUFEY


(Guardián del fuego) (Padre de Loki) (Madre de Loki)

BYLEIST HELBLINDI
(Hermano de Loki) (Hermano mayor de Loki)
UTGARD-LOKI
(Señor del Castillo BURI
Útgarðir) (Primer Dios)
SVADILFARI
(Engendra al
ANGRBODA caballo de ocho
SIGYN LOKI (Madre de los patas Sleipnir
BOLTHORN FJÖRGYNN
(Mujer de Loki) (”Origen de todo fraude”) hijos de Loki) con Loki) (Padre de Frigg)
(Gigante de Hielo)

BESTLA BORR
(Madre de Odín) (Padre de Odín)

FENRIR HEL JÖRMUNGAND HUGIN Y MUNIN VILI y VÉ


(Lobo) (Diosa de la Muerte) (Serpiente marina) SLEIPNIR (Cuervos de Odín) (Hermanos de Odín)

NJÖRUN GRID RIND ODÍN FRIGG


SKADI NJÖRD (Rey dioses Aesir. (Reina de los dioses Aesir.
(Diosa del Esquí) (Dios de la Pesca) (Tierra) (Diosa del Misterio) (Diosa de la Muerte)
Dios de la Guerra) Diosa del matrimonio)

FREY/YNGVI FREYA VIDAR VÁLI NANNA BALDER HODER


(Dios de la Lluvia) (Diosa del Amor y la Belleza) (Dios del Silencio) (Dios de los Arqueros) (Diosa) (Dios de la Luz y Pureza) (Dios ciego)

GERD OD
(Hermosa giganta) (Esposo de Freya)

FJÖLNIR HNOSS
(Diosa del Deseo) BRAGI IDUNN FORSETI HERMOD
(Rey legendario) (Dios de la Poesía) (Diosa de la Juventud) (Dios de la Justicia) (Mensajero de los dioses)

REYES DE SUECIA
Y NORUEGA
CARLOS AGUILERA

38 MUY HISTORIA DATA


árbol genealógico
de los dioses nórdicos
MUNDILFARI HYMIR HYROD
(Gigante) (Gigante) (Giganta)

AEGIR RÁN
(Dios del Mar) (Diosa del Mar)
SOL MANI
(El Sol cazado (La Luna cazada
por lobos) por lobos)

9 HERMANAS TYR
(Las olas del Mar) (Dios de la Guerra)

AESIR Y VANIR
HEIMDALL En la mitología nórdica, los dioses están divididos en
(Guardián de las
puertas de Asgard)
dos categorías: los Aesir y los Vanir. Los primeros
eran los grandes dioses, vivían en Asgard, estaban
ligados al mundo celestial y eran los dioses de la
guerra, el coraje, los elementos naturales… Los
Vanir por su parte vivían en el reino de Vanaheim,
se asociaban al mundo terrenal y eran los dioses de
JORD la cosecha, la fertilidad o los mares. Unos eran
(Personificación
de la Tierra) adorados por la aristocracia guerrera y los jarls,
FULLA mientras que los otros solían estar presentes en las
(Criada de Frigg)
oraciones de los agricultores y campesinos.

MEILI
(Hermano de Thor) THOR SIF
(Esposa de Thor)
(Dios del Trueno)

SCYLDSCEFING MODI MAGNI


(Primeros reyes THRUD ULLR
(Dios de la Furia) (Dios de la Fuerza) (Hija de Thor) (Dios del Esquí)
daneses)

REYES DE DINAMARCA

MUY HISTORIA DATA 39


Ishtar
Lug

Horus

Atenea

Quetzalcóatl Gilgamesh
Odín

Osiris

Viracocha

Visnú
Isis

El rey Arturo
El Emperador
Amarillo
PERSONAJES

GILGAMESH,
EL PRIMERO
DE TODOS LOS
HÉROES
P
roviene de Sumeria, la cuna
de la civilización en las tierras
de Mesopotamia, y es el pri-
mero de los grandes mitos univer-
sales del que tenemos constancia
histórica. El Poema de Gilgamesh
fue escrito muy probablemente ha-
cia la primera mitad del segundo
milenio antes de Cristo, pero su his-
toria ya circulaba mucho antes en
las leyendas orales mesopotámi-
cas, haciendo referencia a un míti-
co rey que habría vivido hacia 2500
a.C. Por esta difusión tan temprana,
los estudiosos han visto su influen-
cia tanto sobre episodios de la mis-
mísima Biblia como sobre la Odisea
de Homero. Estamos, por tanto, an-
te un mito de una gran trascenden-
cia para nuestra cultura.

Gilgamesh no era totalmente huma-


no, ni completamente divino (en una
tercera parte era mortal). Capaz de
grandes hazañas, resultaba antipáti-
co para sus súbditos porque se en-
vanecía de sus éxitos y reclamaba el
derecho de pernada, que le permitía
yacer con las esposas en la prime-
ra noche de bodas. Los ecos de sus
abusos llegaron a los dioses, que
decidieron castigarlo creando un ser
semisalvaje, llamado Enkidu, que
atemorizaba a la población de su rei-
no. Para amansarlo, el rey le envió
a una prostituta sagrada con la que
Enkidu acabó casándose. Enton-
ces Gilgamesh reclamó su derecho
de pernada y Enkidu, enfurecido de
nuevo, le plantó cara. Tras un terri-
ble combate, acabaron por hacerse
amigos y emprendieron una aventura
juntos para lograr reconocimiento.

Aquí comienza un viaje iniciático


plagado de aventuras fenomena-
les, durante el cual Gilgamesh in-
tentará alcanzar la inmortalidad.
Por el camino descubrirá el senti-
do de la vida, la amistad y muchas
SHUTTERSTOCK

otras enseñanzas que lo transfor-


marán profundamente.

42 MUY HISTORIA DATA


SHUTTERSTOCK

ISIS Y OSIRIS, EL AMOR MÁS ALLÁ DE LA MUERTE

S
egun la mitología egipcia, el enseñándoles a respetar a los dio- el amor de Isis quien, ayudada por el
dios de la tierra, Geb, y la dio- ses. Para extender este esfuerzo ci- guardián Anubis, rescató los trozos,
sa del cielo, Nut, engendra- vilizador por la Tierra, emprendió un recompuso a su amado y con su po-
ron cuatro hijos. Osiris era el mayor, largo viaje que lo alejó de Egipto. Su derosa magia –se la conocía como
Seth, un dios irascible e incapaz de esposa Isis quedó a cargo del rei- ‘la gran maga’– devolvió a la vida a
controlar sus pasiones, el segundo, no, lo que hizo aumentar el odio de Osiris, aunque ya como dios de los
e Isis, futura esposa de Osiris, la ter- Seth, que aspiraba al trono. muertos, y le otorgó el vigor sexual
cera. Los tres formarían un triángulo para poder concebir juntos un hijo.
de amor y odio que forjaría un mito. A la vuelta de Osiris, Seth intentó Así nació Horus, que se enfrentó en
acabar con él de varias maneras. La dos mortales combates a Seth. Aun-
Osiris apartó a los egipcios de la vi- más cruel fue despedazarlo en ca- que los otros dioses le impidieron
da salvaje haciéndoles conocer los torce trozos que dispersó por todos que matase a Seth, Horus fue reco-
frutos de la tierra, dándoles leyes y lados. Pero su maldad no pudo con nocido como legítimo rey de Egipto.

MUY HISTORIA DATA 43


PERSONAJES

ASC

ISHTAR, TAN HERMOSA COMO TERRIBLE


A
ntes de Afrodita y Venus fue banipal se habla de Ishtar como “la Como diosa de la sexualidad, lshtar
Ishtar. La diosa del amor, que irresistible en los combates” o “la in- era la máxima expresión del placer
tanto protagonismo ostenta domable en la guerra”, y en muchas y la voluptuosidad y los mesopotá-
en las mitologías griega y romana, obras literarias aparece participando micos celebraban fiestas orgiásticas
tuvo su antecedente en la Ishtar me- en episodios bélicos dotada de una de fertilidad bajo su advocación. La
sopotámica, cuyo culto se extende- imagen hombruna (quizás, en su eta- más importante, la hierogamia, re-
ría por todo el Próximo Oriente.Pero pa primitiva, Ishtar pudiera haber si- presentaba la unión entre un dios y
la ‘abuela’ de Afrodita y Venus era do una deidad masculina). una mujer humana. Esta práctica y la
menos dulce, al ser al mismo tiempo de la prostitución ritual en los tem-
diosa de la sexualidad y de la guerra. Además de guerrera, la primitiva Is- plos de Ishtar, que se extendieron
htar era una diosa astral. Vinculada por todo el Mediterráneo con los fe-
En su faceta bélica, resulta ser una lógicamente al planeta Venus, se le nicios, escandalizaron a las civiliza-
guerrera temible y despiadada. En rindió culto junto a la Luna y al Sol, ciones occidentales y perpetuaron el
las tablillas babilónicas del rey Asur- refiriéndose a ella como Ashtar. mito de la terrible y deseada Ishtar.

44 MUY HISTORIA DATA


LUG, EL
DIOS CELTA
POLIVALENTE
E
n el primer milenio antes de
Cristo los celtas ocuparon bue-
na parte de Europa, especial-
mente su vertiente más occidental.
Aunque lograron unidad lingüística,
esta amplitud geográfica provocó la
dispersión de sus creencias y mito-
logías, que irían evolucionando de
manera diversa influidas por las tra-
diciones locales. No obstante, exis-
te una excepción: Lug. Se trata de
la única deidad celta que fue objeto
de adoración a lo largo y ancho de la
geografía céltica.

Llamado el artesano polivalente, in-


cluso el ‘politécnico’, era un dios
que dominaba todas las ciencias,
oficios y modalidades de la arte-
sanía. Estas múltiples habilidades
le servirían para tomar el poder del
mundo. Y es que, según su biogra-
fía mitológica, Lug se presentó en
la corte del rey Nuada, soberano de
uno de los clanes divinos, pero le fue
negada la entrada. Lejos de enfa-
darse, como otras divinidades más
arrogantes, permaneció allí des-
empeñando diferentes oficios, por
modestos que pareciesen –carpin-
tero, herrero, espadachín, arpista,
guerrero, poeta y mago–, hasta que
demostró que nadie podía brillar en
todos ellos a la vez como hacía él.
Admirado de su potencial, Nuada
decidió convertirlo en el comandan-
te en jefe de sus ejércitos para diri-
gir la gran batalla que su clan libraría
contra otro clan de dioses primige-
nios irlandeses, al que pertenecía la
propia familia materna de Lug.

Allí Lug se econtró con su abuelo


Balor, capaz de matar a alguien so-
lo con mirarlo con su ojo diabólico,
y quien, guiado por un oráculo, ha-
bía intentado matarlo de niño. Sa-
biendo del poder de su abuelo, Lug
le lanzó con una honda una piedra
ASC

al ojo que le salió por la espalda.


Al proyectar su mirada hacia atrás,
aniquiló a su propio ejército. Como
había muerto Nuada en la batalla,
Lug fue coronado rey.

MUY HISTORIA DATA 45


PERSONAJES

QUETZALCÓATL, LA SERPIENTE EMPLUMADA SHUTTERSTOCK

Y
a era una divinidad adorada germinal de la tierra (serpiente) y el Los aztecas integraron muchas de
por los pueblos predecesores poder fecundador del cielo (pájaro) a las tradiciones religiosas y mitológi-
de los aztecas en el territorio través de la lluvia. cas de los toltecas, incluída la pro-
mesoamericano y su devoción se fecía de Quetzalcóatl, cuyo punto
puede rastrear hasta en las cuevas Los toltecas, la siguiente gran civili- clave era que el dios regresaría con
rupestres de la región. Los olmecas zación mesoamericana, engrande- el aspecto de un hombre blanco y
expresaron gráficamente un ser má- cerían el culto a Quetzalcóatl al pre- con barba y acompañado por sus hi-
gico con aspecto de serpiente y plu- sentarlo como el sabio rey fundador jos para dominar a ese desobediente
mas verdes, tal y como aparece en de su dinastía. Su reinado sería una pueblo. Fatídicamente, esto allanó el
las grutas de Juxtlahuaca, que datan época dorada aunque, finalmente, camino de la conquista a los espa-
de 1200 a.C. Más adelante abunda- hostigado por los dioses oscuros y ñoles. Para sorpresa de Hernán Cor-
rían las pinturas del ‘dragón olmeca’, harto de que el pueblo no obede- tés, el emperador azteca Moctezuma
también con aspecto de serpiente y ciese sus enseñanzas y normas mo- estaba convencido de que quien se
plumaje de pájaro, que condensa los rales, Quetzalcóatl se marchó por presentaba ante él era nada menos
poderes del mundo natural: la fuerza Oriente, prometiendo volver. que el mismísimo dios Quetzalcóatl.

46 MUY HISTORIA DATA


VISNÚ, DIVINIDAD
CON AVATARES
E
l dios hindú de los cuatro bra-
zos y piel de un singular color
azul es hoy es el más popular
de la India, pues se le atribuyen in-
tervenciones providenciales en mo-
mentos críticos de la historia. Sus
hazañas han sido recreadas a lo lar-
go de los siglos.

Visnú es un dios preparado para lu-


char contra el mal. De los cuatro ele-
mentos que sostiene en las manos,
dos son armas que utiliza contra los
demonios: el sudarshana chakrá –
un disco acabado en puntas con el
que degüella– y la maza de oro para
aplastar cráneos. El tercero es la ca-
racola o shankhá, con la que anuncia
su victoria, y el último es el padma, la
bella flor de loto, sobre la que la dei-
dad se suele sentar para descansar.

Las nueve intervenciones del dios en


los acontecimientos humanos ante
situaciones excepcionales las realizó
adoptando sucesivas encarnaciones
o avatares. En la primera, un pez gi-
gante llamado Matsya, se enfrentó
a un diluvio universal y salvó al Noé
hindú, Manu, que se convirtió en el
patriarca de la humanidad. El segun-
do avatar, una tortuga, ayudó a los
dioses a obtener el agua que conce-
día la vida eterna a los mortales. Pa-
ra el tercero se convirtió en un jabalí
y utilizó su cornamenta para exca-
var en el suelo hasta el inframundo,
donde un demonio se había llevado
a la Madre Tierra. Logró salvarla. Su
cuarto avatar castigó al rey Hira-
nakashyap, que quiso alcanzar la in-
mortalidad para desafiar la suprema-
cía de los dioses.

Todas las siguientes reencarnacio-


nes de Visnú fueron en forma hu-
mana. Dos corresponden a los más
celebrados héroes de la épica hin-
dú –Rama y Krishna–, pero también
fue el mismísimo Buda, que rechazó
el hinduísmo y creó su religión. Ka-
lki será su décima y última encar-
nación. Montado a caballo con una
espada y liderando un gran ejército,
restaurará el equilibrio.
ASC

MUY HISTORIA DATA 47


PERSONAJES

SHUTTERSTOCK

ODÍN, EL GRANDE

E
l historiador romano Tácito re- su cuerpo al abismo y de él crearon Aun siendo un dios guerrero (más
lataba que a los pueblos ger- los diferentes elementos de nues- adelante libraría una épica batalla fa-
mánicos les parecía una des- tro mundo: de la carne, la tierra; de miliar entre los Aesir, su tribu de dio-
honra “adquirir con sudor lo que se la sangre, los mares y los lagos; de ses, y los Vanir, el otro gran clan de
puede lograr a costa de la sangre”. los huesos, las piedras; del pelo, los inmortales), Odín también era sabio,
Así que no resulta extraño que en la árboles, y del cráneo, la bóveda ce- un dios chamánico, un gran mago
cúspide del panteón mitológico nór- lestial. El mundo así creado tomó el capaz de prever los acontecimientos
dico esté un ser tan belicoso como nombre de Midgard, ‘la Tierra Media’ futuros. Esto era sí porque acudió al
Odín, dios de la guerra y la muerte. que J.R.R. Tolkien popularizó en El manantial de la sabiduría custodiado
señor de los anillos. Pero había que por Mimir, su tío materno, quien para
Fue el creador del mundo junto con crear más cosas –el Sol, la Luna, los dejarle beber le exigió un sacrificio:
sus dos hermanos Vili y Ve. Com- astros– y ello implicaba seguir lu- perder uno de sus ojos. Odín acce-
batieron y mataron a Ymir, fundador chando en lugares más elevados, ha- dió y en el mismo manantial aban-
de la raza de los gigantes, llevaron bitados por gigantes. donó uno de ellos como tributo.

48 MUY HISTORIA DATA


ASC

VIRACOCHA, FUNDADOR DEL IMPERIO INCA

E
l gran mito de la creación del gen de la cultura inca, pero la tarea Manco Cápac, el primer rey de los
mundo y el de los propios orí- de la creación del mundo conocido, incas, hijo del dios Sol y la diosa
genes del pueblo inca se unen para los pueblos andinos, llevó a Vi- Luna, recibió de su padre el báculo
en la leyenda del dios-héroe Viraco- racocha y a sus dos hijos lejos de sagrado que había abandonado Vi-
cha, del que se dice que habría sur- Tiahuanaco, del norte a occidente y racocha. Este le debía indicar el ca-
gido del gran lago Titicaca. de Cuzco a la línea equinoccial en el mino a seguir en un peregrinaje que
Ecuador. Allí avisó a sus gentes de le llevó a la búsqueda de una tierra
Este dios creador talló en piedra las que con el tiempo llegaría quien se fértil donde establecer a su pueblo.
figuras de los primeros hombres y identificaría como Viracocha y que Allí donde el báculo se enterrase se-
mujeres, a los que situó en los lu- no debían creerle. Tras este aviso, ría el lugar señalado para su asen-
gares donde luego vivirían. Con la desaparecieron para siempre en las tamiento, su tierra prometida. Y ese
colaboración de dos hijos, que creó aguas (esta profecía sería tomada li- lugar fue el valle del Cuzco, que en
antes, empezó a darles vida. Todo lo teralmente por los incas cuando vie- lengua inca significaba ‘el ombligo
hizo desde Tiahuanaco, ciudad ori- ron a los españoles). del mundo’.

MUY HISTORIA DATA 49


ARTURO, REY DE
REYES
A
unque es evidente la falta de
referencias al personaje por
parte de los historiadores y
cronistas de su época (finales del si-
glo V o principios del VI), las pocas
pruebas que demostraban su exis-
tencia se abrieron paso y contribu-
yeron a crear una de las grandes
leyendas anglosajonas. Así, el mito
del caudillo britanorromano prendió
con fuerza en todo el mundo cristia-
no convirtiéndolo en uno de los reyes
más valientes y sabios de la historia,
en el monarca ideal.

La admiración por Arturo comenzó


posiblemente con la victoria en la ba-
talla del monte Badon, en la que los
romano-británicos detuvieron una in-
cursión anglosajona. Con ella Arturo
logró un fugaz momento de armonía
en un mundo que se derrumbaba, el
creado por el Imperio romano, ya cris-
tianizado, que estaba desintegrándo-
se. Logró prorrogar ese sueño en un
rincón de Europa (la isla de Britania)
con su estable reinado. Una etapa de
gobierno recto y ejemplar, en la que las
decisiones se tomaban por consen-
so de los pares, reunidos alrededor de
una mesa redonda que se convirtió en
símbolo de diálogo y acuerdo, de una
nueva forma de gobernar. Aunque este
aparente edén trajo el hastío de unos
aguerridos caballeros que se busca-
rían aventuras en la persecución del
ideal cristiano, personificado en el
Santo Grial.

A partir de aquí, la literatura medie-


val convertiría a Arturo en el centro
de una pléyade de imaginativos he-
chos –épicos, mágicos o piadosos–
que engrandecerían su leyenda. Em-
pezando por su propio nacimiento,
ya que la magia del mago Merlín ha-
bría ayudado al rey Uther Pendragón
a poseer a la bella noble Igraine, ma-
dre de Arturo.

No podía faltar el trágico triángulo


amoroso. Lancelot, el caballero más
fiel a Arturo, se enamoró de su espo-
sa Ginebra, que le correspondía. Esto
SHUTTERSTOCK

desembocó en una traición, muy do-


lorosa para Arturo.

MUY HISTORIA DATA 51


PERSONAJES

HORUS,
DIOS DEL CIELO
R
epresentado como un halcón
o un hombre con cabeza de
halcón, con la típica ‘corona
doble’, Hor –Horus es su nombre he-
lenizado– es considerado como el
iniciador de la civilización egipcia.
Conocido ya en el período predinás-
tico, la mitología egipcia lo conside-
ra dios de la realeza en el cielo y de
la guerra. Parte troncal de la Gran
Enéada, forma la tríada osiriaca junto
a sus padres, Isis y Osiris, dios de la
resurrección.

Los innumerables enfrentamientos


entre Seth y su hermano Osiris aca-
ban con este descuartizado y des-
perdigado por todo Egipto. Su es-
posa Isis consigue resucitarlo con
su magia, ya como gobernante del
inframundo, y conciben un hijo: Ho-
rus. Escondido durante su infancia,
este se convirtió en un excepcional
guerrero, instruido por Thot, dios de
la sabiduría. Y, cuando estuvo prepa-
rado, luchó contra el asesino de su
padre por el trono.

Sin duda, uno de los relatos mitológi-


cos que contribuyeron a afianzar su
leyenda fue La contienda, conteni-
do en el Papiro Chester Beatty, en el
que se relata el enfrentamiento entre
Horus y Seth por el derecho a recibir
la dignidad de Osiris.

En la corte que preside Ra, se reúne


la Enéada. Mientras los dioses se
muestran incapaces de resolver el
pleito entre Horus y Seth, los conten-
dientes protagonizan varios enfren-
tamientos, no exentos de artimañas.
En uno de sus duelos, Seth arranca
el ojo izquierdo a Horus, pero este lo
recuperará gracias a Hathor.

La resolución llega con la interven-


ción del propio Osiris, en su papel de
dios-rey, que es contundentemente
favorable a su hijo Horus. La Enéada
no tiene otra opción que reconocer
su legitimidad para heredar la reale-
za de su padre. Finalmente, Horus
fue proclamado dios de todo Egipto,
mientras que Seth reinaría en el de-
sierto y en los pueblos extranjeros.
ASC

52 MUY HISTORIA DATA


La fuerte y
SABIA ATENEA
C
onsiderada en la mitología
griega una de las deidades
principales (formaba parte de
los 12 dioses olímpicos), era la dio-
sa guerrera por excelencia (imbati-
ble) y poseía los dones de la estra-
tegia, la ciencia, la habilidad, la jus-
ticia y la sabiduría.

Como en muchos otros casos, el


mito de Atenea comienza desde el
momento mismo de su concepción.
Según relatan: “Zeus decide tragar-
se a su amada Metis (la Sabiduría)
porque le anuncian que, tras la pri-
mera hija que nazca, la diosa vol-
verá a quedarse embarazada de un
hijo que le destronará. Al cabo de
un tiempo, Zeus sufre unos terribles
dolores de cabeza. El herrero divino,
Hefesto, le abre el cráneo y de allí
sale Atenea, ya adulta y completa-
mente armada”.

Aunque fue más conocida como pro-


tectora de Atenas (también lo fue de
Esparta), esta diosa recibió culto en
toda la Grecia Antigua y en toda su
área de influencia. Sin duda era una
de las deidades más adoradas por
representar las causas justas, la sa-
biduría y el valor de la cultura y las
artes en la sociedad. Pero también
era muy respetada porque sintió ad-
miración por mortales que mostraron
dotes de dioses. De hecho, protegió
a muchos héroes y otras figuras mí-
ticas. Ayudó a Perseo a matar a Me-
dusa, a Heracles a matar a la hidra de
Lerna y en algunos otros de sus doce
trabajos (le enseñó, por ejemplo, a
navegar en el inframundo para captu-
rar a Cerbero) y a Odiseo en la etapa
final de su viaje a ítaca. Sin duda, es
una de las diosas que más episodios
de la mitología protagonizan.

No tuvo amoríos y nunca se casó;


de ahí que, al mantener su virgini-
dad perpetua, se le asignara el papel
de protectora de la modestia sexual.
Obviamente no tuvo hijos, pero ac-
tuó como madre adoptiva de Ericto-
nio, nacido de Hefesto (cuyo semen
engendró la tierra, tras no poder vio-
ASC

lar a Atenea).

MUY HISTORIA DATA 53


leyendas indígenas

Una enorme pirámide


con escalinata
conocida como ‘el
Castillo’ domina la
antigua ciudad maya
de Chichén Itzá (en la
SHUTTERSTOCK

península mexicana
de Yucatán).
GRANDES MITOS
PRECOLOMBINOS
S
e desconoce gran parte de la historia indígena de América
antes de la conquista española, porque esta se conservaba
principalmente en la memoria colectiva (era transmitida
oralmente) y el choque cultural supuso su olvido. Pero lo que sí
sabemos es que, como en todas las grandes civilizaciones anti-
guas, la religión, el arte, la historia y la geografía se entremezclan
en las leyendas anteriores a la llegada de los españoles.
En los mitos y leyendas presentes comúnmente en las culturas ma-
ya, azteca e inca conviven deidades y hombres, demonios y duen-
des, realidad y ficción. Abundan los capítulos relacionados con el
Sol, la divinidad más poderosa y más venerada por la civilizacio-
nes precolombinas, así como las leyendas de los Hijos del Sol. Pero
también encontramos los mitos de la creación del mundo y de los
primeros hombres: según la tradición maya (relatos sacados de sus
libros sagrados, Chilam Balam y Popol Vuh) o la incaica (cómo
Manco Capac llegó a Cuzco, civilizó a los hombres y creó la dinas-
tía de los Incas). Incluso el imaginario de estos pueblos originarios
explicaría por qué los conquistadores españoles buscaron en vano
y durante años un reino lleno de riquezas fabulosas que no existía.
leyendas indígenas

LA ‘BIBLIA MAYA’
M
uchos de los mitos de la civilización maya –que abarcaba
gran parte del actual sur de México, Belice y Guatemala–
están recogidos en una recopilación de narraciones de tra-
dición oral llamada Popol Vuh y considerada la ‘Biblia maya’. Fue
el dominico Francisco Ximénez quien recibió la primera versión
del libro en maya quiché con versos en latín y lo tradujo, aunque
incompleto, al castellano. Como lo conocemos hoy, se divide en
tres partes. La primera describe la creación del mundo y del hom-
bre. La segunda se centra en las aventuras de los gemelos Huna-
hpú e Ixbalanqué, hijos de Ixquic (‘la sangre’). Estos jóvenes dio-
ses derrotan a las fuerzas malignas con pruebas como el juego de
pelota y se convierten en el Sol y la Luna. La tercera parte narra el
origen de los pueblos indígenas de Guatemala, sus migraciones, su
expansión territorial, sus guerras. El Popol Vuh muestra divinidades
mayas poderosas, pero no omnipotentes, pues igual que los humanos
tenían limitaciones físicas (sed, hambre...) que solo podían satisfacer por
SHUTTERSTOCK

la mano del hombre, normalmente mediante sacrificios de sangre.

El inframundo
de Xibalbá
En el nutrido panteón maya, destacan los
tres principales dioses creadores: Kukulcán,
la ‘Serpiente emplumada’ (en la imagen),
dios de las tempestades; Huracán, ‘el de
una sola pierna’, dios del viento, y Tepeu,
dios del cielo. Ocupan asimismo un lugar de
honor los doce dioses del inframundo, que
habitaban un lugar subterráneo llamado Xi-
balbá (que significa ‘lugar de terror’) adonde
querían llegar todas las almas para disfrutar
SHUTTERSTOCK

del más allá. Aunque para los mayas –co-


mo para los judeocristianos– la
muerte no era el fin de la exis-
tencia, Xibalbá no se parecía al
infierno, pues no se llegaba allí Tres ríos para llegar
como un castigo, sino co-
mo destino lógico de los a Xibalbá
L
muertos. Llegar a él
as narraciones del Popol Vuh describen el Xibalbá
era un auténtico de-
como una gran ciudad con varias estructuras y llena
safío, pero lejos de
de trampas. Para empezar, había que pasar por tres
ser un submundo espiritual
ríos: de escorpiones, de sangre y de pus. Si se lograba
era un reino físico, pal-
superar estas y otras pruebas, se llegaba ante los temi-
pable, escondido
bles Señores de Xibalbá o dioses del inframundo.
bajo la superfi-
El Xibalbá siempre estuvo relacionado con los cenotes:
cie de la tierra
agujeros naturales en cuyo interior se forma un sistema
y con entradas
de cuevas inundadas. Estas arterias subterráneas de
reales.
la península del Yucatán (México) se llenaban de agua
de lluvia asegurando la supervivencia de la población.
Conscientes de su importancia, los mayas ubicaban
SHUTTERSTOCK

templos en sus orillas y arrojaban a sus aguas sagradas


ofrendas a los dioses (incluidas personas vivas).

56 MUY HISTORIA DATA


La ruta de CIELO, TIERRA E
los muertos INFRAMUNDO
U
n grupo de arqueólogos

L
mexicanos, con Guillermo os antiguos mayas basaban sus
de Anda al frente, creyó creencias en tres grandes planos
descubrir en 2008, en el centro de existencia, relacionados entre
del estado de Yucatán, esa di- sí: cielo, tierra e inframundo. Además
fícil ruta por el inframundo que de dioses, en ellos vivían los duendes
suponía el Xibalbá y que, según o aluxes, pequeños seres representa-
la tradición maya, los muertos dos por figuras de barro. Se cree que
debían recorrer en su tránsito eran más antiguos que los propios ma-
hacia la otra vida. yas y, según estos, fueron los hombres
Hallaron catorce cuevas y depó- primigenios que construyeron las gran-
sitos de agua de manantial don- des ciudades. Trabajaban en la oscuri-
de había fragmentos de cerámi- dad y cuando salía el sol se volvían de
ca, elementos rituales y restos piedra. Cuidaban de las personas y de
óseos humanos. Esta red subte- sus campos. Fieles a sus amos (que
rránea de cuevas debió ser una les daban de comer), se mostraban
recreación de la entrada al infra- traviesos con los desconocidos. En el
mundo. Allí acababa la vida, pe- Yucatán, donde siguen estando muy
ro también empezaba. presentes, se han hallado aluxes origi-
nales en cenotes como el de Samulá,
SHUTTERSTOCK

cerca de la ciudad de Valladolid.

LA PROFECÍA
dEL FIN DEL Parque Nacional deTikal (Guatemala).

MUNDO
E
n el yacimiento de Tortu-
guero, en el estado mexi-
cano de Tabasco, se en-
contró un trozo de piedra con
inscripciones conocida como
la Estela 6. En ella se ve escri-
ta la fecha 13.0.0.0.0 4 Ajaw

SHUTTERSTOCK
3 Kank’in que corresponde al
21 de diciembre de 2012. Mu-
chos quisieron ver en ello una
profecía del fin del mundo,
pero según aclaró el Institu- LAS RUINAS DE TIKAL
M
to Nacional de Antropología e isteriosamente, en el siglo IX, Tikal y otras grandes ciudades
Historia de México esta fecha mayas quedaron vacías de repente. Murieron millones de
corresponde al fin de una era personas, algunas de ellas asesinadas brutalmente, y los po-
de 5.125 años y de un ciclo cos supervivientes volvieron a la vida tribal. De este modo, el mundo
de 400 –conocido como 13 maya que hallaron los españoles era apenas una sombra de lo que
b’aak’tuunes– que daría pa- había sido. Los arqueólogos han buscado una explicación: guerra,
so a un nuevo período. En la invasión, migración, enfermedades, sobreexplotación... Entre las mu-
ciudad maya de Chichén Itzá chas teorías está la de Jared Diamond y Franz J. Broswimmer, auto-
creían que al finalizar ese tiem- res de Colapso, para quienes se debió a una combinación de varios
po la población debía mudar- factores. Aparte de las guerras o problemas políticos, habría sido
se a otro lugar, nada más. Lo clave la enorme fuerza de trabajo dedicada a la construcción de ciu-
que los mayas pronosticaron dades monumentales, que causó la deforestación y la disminución
en dicha fecha fue un cambio de tierras de cultivo. Otra controvertida hipótesis es la de Dick Gill,
de ciclo. No fue una profecía quien asegura que los mayas murieron de hambre y sed a causa de
fallida porque nunca existió. una serie de devastadoras sequías durante los siglos IX y X.

MUY HISTORIA DATA 57


leyendas indígenas

Imagen de Viracocha en la Puerta del Sol de Tiahuanaco (Bolivia).

SHUTTERSTOCK
VIRACOCHA, EL CREADOR
SHUTTERSTOCK

A
l igual que la Pachamama, Viracocha o Huiracocha,
el dios Creador, enseñó a los habitantes de las tie-
rras andinas el respeto por la naturaleza y por valo-
res éticos como la solidaridad y la generosidad. Su origen
es incierto, pero una versión de este mito afirma que surgió
del lago Titicaca (entre Perú y Bolivia) rodeado de viento
y espuma (según el cronista español Pedro Sarmiento de
Gamboa, Viracocha significa ‘espuma de mar’). Venerado
como dios supremo, era considerado también un héroe mí-
tico que peregrinó de un lugar a otro, con su báculo sagra-

Pachamama
do en la mano, hasta crear todo el Imperio inca.

F
ue, junto a Viracocha, el gran perso-
naje mitológico del poderoso Impe-
rio inca. Era la joven, bella, maternal
Sacrificios humanos
C
y protectora Madre Tierra y represen- uando los españoles arribaron al actual México, escribie-
taba la fertilidad y la vida. Se casó con ron que los aztecas (o mexicas) estaban llevando a cabo
Pachacamac, dios del cielo, y vivieron sacrificios sangrientos en una cantidad nunca vista –tan-
una historia de creación y respeto por to, que en una ocasión superaron los 80.000 muertos en solo
la naturaleza. Se la consideraba frágil y cuatro días– y que a veces se comían a las víctimas. Algunos
poderosa a la vez (su mito está lleno de expertos, como la antropóloga Yolotl González Torres, autora
dolor, muerte y venganza) y se la vene- de El sacrificio humano entre los mexicas, defienden que se ha
raba de tal modo que los conquistado- exagerado el número de víctimas; una exageración surgida en-
res la compararon con la Virgen María. tre los enemigos de los aztecas, que aumentando dicha cifra
Pachamama es hoy símbolo de protec- demostraban su superioridad al enfrentarse a tan temibles ene-
ción del planeta y referente de los mo- migos. Según esta experta, hay otra cuestión que suele obviar-
vimientos ecologistas, que recogen el se al hablar de esto, y es que este tipo de sacrificios rituales se
mito de que es la defensora de la natu- daban en numerosas culturas de todo el mundo: Egipto, India,
raleza y los seres vivos. China, Japón, Roma, Grecia y Mesopotamia.

CADA SACRIFICIO ESTABA DEDICADO A UN DIOS


L
as ceremonias de sacrificios humanos sobrepa- pretendía conseguir algo de él o agradecerle algo. En
saban el ámbito religioso para entrar en el políti- los rituales, que constaban de tres fases –entrada, in-
co. Los aztecas no sacrificaban por puro sadis- molación y salida–, intervenían el sacrificador (el que
mo, para hacer sufrir, sino con un objetivo concreto: mataba), el sacrificante (que ofrecía el sacrificio) y los
cada sacrificio estaba dedicado a un determinado sacrificados (sobre todo los de la capital azteca, Te-
dios (Tláloc, Xipe Totec, Mixcóatl, Cihuacóatl y, so- nochtitlán, solían ser prisioneros). Los ritos posterio-
bre todo, Quetzalcóatl, la Serpiente Emplumada) y res podían incluir la antropofagia.

58 MUY HISTORIA DATA


¿Quetzalcóatl o Hernán Cortés?
H
ijo del primer dios, el Se- bargo, en un momento dado, Cortés era Quetzalcóatl, lo que le
ñor de la Creación, Quet- abandonó a su pueblo –expul- llevó a presentar una actitud pa-
zalcóatl era venerado sado por su hermano gemelo siva ante la conquista. Esta con-
como ‘el padre’, ‘el héroe civili- Tezcatlipoca–. Antes de irse pro- fusión se observa tanto en tes-
zador’ o ‘el que da el maíz a los metió que volvería y con eso, sin timonios en lengua náhuatl co-
hombres’. Inteligente y persis- pretenderlo, fue uno de los res- mo en los documentos que los
tente, se enfrentó a sus herma- ponsables de la caída del Impe- cronistas Francisco de Aguilar y
nos (también dioses) para crear rio mexica. Bernal Díaz redactaron sobre los

SHUTTERSTOCK
a la humanidad y triunfó donde Y es que el emperador azteca discursos que ofreció Moctezu-
ellos habían fracasado. Sin em- Moctezuma creyó que Hernán ma al ‘entregar’ su imperio.

fundación de
Inti Raymi, la fiesta del sol
Tenochtitlán
E
l legado incaico llega hasta nuestros días con la celebración

M
itológica es también la histo- de la fiesta del Inti, en quechua Inti Raymi, que tiene su ori-
ria que cuenta la fundación de gen en la Wawa Inti Raymi o ‘fiesta del niño sol’ precolom-
Tenochtitlán, capital del Im- bina. Cada 24 de junio, una explosión de colores, música, danza
perio mexica, que tiene como pro- y tradiciones invade las ruinas de Sacsayhuamán, a dos kilóme-
tagonistas a un águila y un nopal. tros de Cuzco, en Perú. Se conmemora esa gran ceremonia re-
Se dice que, 130 años después de ligiosa inca y andina que rendía culto al astro rey (Inti) y marcaba
la creación del quinto Sol (siglo XII), el solsticio de invierno y el Año Nuevo en los Andes. La celebra-
los aztecas dejaron Aztlán en busca ción arranca en el Templo del Sol y prosigue en la plaza de Armas,
de una nueva tierra prometida que, donde el Inti se dirige a su pueblo. Participan más de 800 actores
según el dios Huitzilopochtli, encon- que encarnan a personajes mitológicos (el más importante es el
trarían en una zona pantanosa con Aya Uma, líder espiritual y protector de la naturaleza que espanta
un nopal (cactus) sobre una roca y a los demonios que amenazan las cosechas). Uno de los momen-
un águila devorando a una serpien- tos más importantes es la masiva ‘toma’ de la plaza principal, a la
te. Fue en un islote del valle de Mé- que sigue una ‘pelea ritual’. Y todo termina en una gran fiesta con
xico donde, tras detectar dicha se- música, baile, fuegos artificiales, comida y bebida.
ñal, construyeron en 1345 la ciudad
de Tenochtitlán. La capital desde la

La maldición de El Dorado
que se levantó un Imperio fue tam-
bién protagonista de su final, al caer
en manos de los españoles el 13 de

S
agosto de 1521. Pero la leyenda no in duda, los tesoros hallados (y enviados en parte a España)
ha muerto, pues hoy el águila, la por conquistadores, así como los escritos de los cronistas
serpiente y el nopal aparecen en el mencionando joyas y objetos dorados que iban encontrando,
escudo de México. atrajeron a aventureros y exploradores a América, ansiosos por ha-
llar riqueza, y alimentaron una leyenda que ha perdurado durante si-
glos, la de El Dorado, el mayor tesoro imaginado por el hombre.
SHUTTERSTOCK

Ruinas de Tenochtitlán Aunque el mito procedía de la Antigüedad, fue el madrileño Fernán-


(Ciudad de México).
dez de Oviedo el primero en escribir sobre él referido al Nuevo Mun-
do. En su Historia general y natural de las Indias (1548), habla sobre
un rey cubierto en polvo de oro. Más preciso fue, en 1636, Juan Ro-
dríguez Freyle al situar su origen en un ritual de los nativos muisca en
el lago Guatavita (en la imagen, representado en una figura
de oro): “Un líder, dorado de pies a cabeza, era iniciado
en el centro de la laguna con magníficas
ALBUM

ofrendas de oro a los dioses”.


Pero, mientras para los españoles el
oro tenía un valor material, para los in-
dígenas era algo simbólico, hasta so-
brenatural. Tanto era así, que las
joyas y los objetos de dicho metal
no se heredaban: se enterraban
con sus propietarios.

MUY HISTORIA DATA 59


Las culturas precolombinas estaban presentes en América antes de la llegada de Cristóbal Colón. Eran politeístas, es
decir, creían en varios dioses. En líneas generales, estos dioses eran deidades de la naturaleza o animales a los que
había que ofrendar para lograr su protección. Estas ofrendas eran en la mayoría de los casos sacrificios animales,
humanos (en especial en la cultura azteca) u ofrendas de vegetales.

AZTECAS MAYAS

TLALOC MICTLANTECUHTLI TEZCATLIPOCA XAMEN EK ITZAMNÁ HUNAB KU


Dios de la Dios de la muerte Hacedor de todas Dios guía de la Dios del Sol y la Padre de todos
lluvia las cosas estrella polar sabiduría los dioses

COATLICUE XOCHIQUETZAL HUITZILOPO- CHAAC YUM KAAX IX U


Dios del agua y Diosa de la belleza, el CHTLI Dios de la lluvia y Dios del maíz Diosa de la Luna
las olas amor y el placer Dios de la guerra el trueno

MIXCOATL QUETZALCÓATL CINTEOTL KUKULCÁN IXCHEL YUM KIMIL


Dios de las Guardián de los Dios del maíz Dios del viento, Dios de la Dios de la
tormentas y la esclavos el agua y el medicina y del muerte
CARLOS AGUILERA

caza planeta Venus amor

MUY HISTORIA DATA 61


mitos IBÉRICOS

En la imagen, el
Árbol de Gernika,
todo un símbolo no
solo de Bizkaia, sino
del conjunto de la
sociedad vasca.
Este roble representa
las libertades
tradicionales del
Territorio Histórico
de Bizkaia y de sus
ciudadanos.

62 MUY HISTORIA DATA


Sobre estas
líneas, una mujer
jordana ataviada
con un niqab,
que cubre todo
el rostro menos

TARTESSOS
los ojos.

Y OTROS
ENIGMAS
HISPANOS
Como en el resto de Europa, las culturas
primitivas que habitaron la península
sucumbieron al empuje sucesivo de Roma
y del cristianismo. Aun así, muchas de sus
huellas pervivieron como mitos.

Iberia viene del vasco


L
o que sabemos de nosotros antes de Roma es lo que contaron
los griegos. Para ellos, esta parte del mundo se llamaba Iberia,
si bien la primera fuente que la menciona la denomina Hiberia,
con esa h inicial que nadie ha sabido explicar. Se trata de un nom-
bre autóctono que tendría que ver con el río Iberus (el Ebro), el cual,
a su vez, estaría emparentado con el término vasco ibar, que signi-
fica río. Pero los griegos jamás pisaron Euskadi, de manera que si
el nombre del Ebro –que ellos conocieron por su desembocadura
en Tarragona– era vasco, no se explica cómo lo recogieron en boca
de los pueblos mediterráneos de su desembocadura. A menos que,
como parece más verosímil cada día, el vasco sea un residuo fósil
de la lengua que, con sus diversas variantes dialectales, se habló
en la península en los tiempos anteriores a Roma. La lengua vasca
sería el resultado de una evolución de la íbera o el de una evolución
de una lengua de la misma familia que la íbera.
SHUTTERSTOCK

MUY HISTORIA DATA 63


mitos IBÉRICOS

Una tierra DOS CLASES DE


paradisíaca MITOS
H
ay dos clases de mitos sobre la

E
vieja Iberia. Están, por un lado,
n Iberia, región misteriosa y remotísima, ubicaban las cultu-
los que podríamos llamar ex-
ras antiguas sus lugares paradisíacos: los griegos, los Cam- teriores –o sea, los que forjaron los
pos Elíseos y las islas de los Bienaventurados; los semitas, de pueblos mediterráneos sobre noso-
acuerdo con el Libro de los Jubileos esenio, el Jardín del Edén. Y tros–, y por otro los interiores, los mi-
ámbitos maravillosos y ubérrimos como el Jardín de las Hespéri- tos propios de los pueblos ibéricos.
des, cuyos árboles producían frutos de oro, las islas Cassitérides, Desde fuera, las culturas pujantes
con sus inagotables minas de estaño, o el reino de Tartessos con su del otro lado del mar nos veían como
soberano Argantonio, el rey de la plata. Y también el río del Olvi- las tierras del fin del mundo, lindan-
do y el país de los Sueños, así como la mítica batalla entre dioses y tes con el océano. El hecho de que
titanes y los tres últimos trabajos de Hércules. el Sol se oculte por Occidente situa-
Los fenicios, por su parte, coincidían con los griegos en la no- ba aquí la noche y el otro mundo.
ción de la riqueza inconcebible de esta tierra, pues aquí situaron Los egipcios llamaban a sus difuntos
su Tarschisch, equivalente al Tartessos de los griegos, de la que ‘los occidentales’, y los enterraban
afirmaban que los pastores daban de comer a las bestias en pese- en la orilla oeste del Nilo. Por su par-
bres de plata maciza y que sus naves cargaban de allí tanta plata, te, los etruscos ponían a sus dioses
que incluso sustituían sus anclas por otras hechas de plata para del Más Allá en Occidente.
aprovechar el peso. Y también situaron en el remoto Occidente las
hazañas de su héroe análogo a Hércules: Melkart.

Hércules matando al dragón del Jardín de las


Hespérides (1639-1640). Iniciada por Rubens,
esta obra sería terminada por su taller.
ALAMY

64 MUY HISTORIA DATA


La nación de
los Sicanos
D
e acuerdo con la tradición, hubo
antiguas expediciones de pue-
blos ibéricos que habrían ocupa-
do y colonizado Córcega, Cerdeña y
Sicilia. Esta última fue poblada por la
nación de los sicanos, llamados así
porque procedían de un río ibérico
con ese nombre, que se ha supues-
to el Júcar (Sicoris). Y estos sicanos
ibéricos quedaron incardinados en
los propios mitos griegos, pues entre
ellos aterrizó Dédalo con sus alas de
cera después de huir de Creta, don-
de había construido el laberinto para
Minos. El rey ibero-sicano, llamado
Cocalos, acogió al ingenioso Dédalo
y lo empleó, encargándole obras que
embellecieron su reino. Hasta que Mi-
nos se enteró y se dirigió a Sicilia para
recuperar a su ingeniero. Cocalos le
dio la bienvenida respetuosamente y,
con el pretexto de ofrecerle un baño
caliente, sus hijas lo asesinaron por el
procedimiento de escaldarlo vivo en
agua hirviendo.
Otra asimilación entre los mitos grie-
gos y la remota Iberia es la que se re-
fiere a la llegada a estas costas de al-
gunos héroes de la Guerra de Troya,
que fundaron ciudades en distintas
partes de la península. Ulises, Me-
nesteo, Teukros y el propio Menelao
terminaron en Iberia sus aventuras,
de acuerdo a la tradición mítica. Esta
parte del mundo, fabulosa y descono-
cida, era un buen refugio para aque-
llos a quienes había que dar un desti- Ícaro y Dédalo (1799), del pintor
francés Charles Paul Landon.
no después de la contienda homérica.
ASC

Tradiciones latentes
L
a llegada del cristianismo supuso el golpe de Pirineos). Es un lapso de tiempo enorme, ¡más de
gracia tanto para los dioses romanos como pa- 24 generaciones!, pero incluso así todavía queda-
ra los restos del mundo espiritual anterior que ron restos de las viejas creencias. De hecho, los
habían sobrevivido a Júpiter y Marte en Hispania. primeros concilios cristianos españoles, que arran-
Las viejas creencias se enquistaron en los medios caron a comienzos del siglo IV, prevenían sobre
rurales, lejos de los grandes centros de poder, y allí algunos ritos y hábitos condenables que sin duda
permanecieron latentes. formaban parte de las tradiciones autóctonas pre-
En España, la presencia del mundo romano se pro- cristianas, como la adoración de ciertas piedras,
longó cerca de siete siglos, entre el II a.C. y el siglo las suertes adivinatorias o las fogatas en las encru-
V (que fue cuando asomaron los visigodos por los cijadas de los caminos.

MUY HISTORIA DATA 65


mitos IBÉRICOS

Muchas tribus
muy parecidas
E
strabón afirma que, en su tiempo,
se sucedían los nombres de tribus
desde Galicia hasta los Pirineos (de
los kallaikoi, ástoures y kantabroi has-
ta los ouaskones y los habitantes del
Pyrene), pero que esas diferencias de
nombre no eran importantes, ya que
todas esas gentes vivían de la misma
manera. Dice también que los kallaikoi
–los clanes celtas del noroeste penin-
sular– eran ateos y que el resto de las
tribus veneraban a un dios sin nombre
en cuyo honor bailaban a la puerta de
su casa en las noches de plenilunio.
No cabe duda de que la música y el
Maqueta a escala del recinto canto fueron extremadamente impor-

SHUTTERSTOCK
arqueológico de Cancho Roano, en
tantes para nuestros antepasados pre-
Zalamea de la Serena (Badajoz).
rromanos. Los autores antiguos son
unánimes a este respecto, ya hablen

DEMASIADAS DUDAS de las tribus norteñas, de las andaluzas


o de las mediterráneas. Los restos ar-
queológicos muestran, en los relieves y
Sabemos que los viejos ritos precristianos se conservaron latentes,
en las cerámicas pintadas, multitud de
pero cosa distinta es llegar a saber cómo se practicaban esas creen- instrumentos musicales diferentes. Es
cias en el interior de aquellas colectividades. Las dudas se extienden, posible que concibieran la música co-
realmente, a todas las facetas de la vida, y lo que se sabe de cier- mo algo incardinado en sus mitos, co-
to procede de las viejas fuentes y de los estudios de los modernos mo algo de carácter celestial.
especialistas. Los hallazgos arqueológicos a veces iluminan ciertos De aquí habrían salido después las
aspectos y otras los oscurecen más. Hay demasiados monumentos brujas, las meigas, las lamias y los di-
misteriosos en la península, de los que se han ofrecido interpretacio- versos elementos que se consideraron
nes dispares. Pongamos por caso la extraña construcción de Cancho puramente satánicos y purgaron su
Roano, en Badajoz, una estructura que apareció colmatada de ceni- supuesta culpa entre las llamas de las
zas entre las que se han hallado restos de todo tipo. Unos creen que hogueras medievales.
fue un palacio, otros que un templo o una fortificación.

Cerveza y
matriarcado
N
o sabemos gran cosa sobre su estructura so-
cial, pero nos consta por los autores romanos
que los íberos se parecían a los germanos en
dos cosas: ambos bebían cerveza y, tanto en Germa-
nia como en Hispania, las mujeres eran escuchadas
en las asambleas políticas, donde se les concedía el
uso de la palabra (lo que era mucho más insólito en-
tonces). En realidad, aquellos antepasados debieron
vivir en un medio fuertemente matriarcal, como ma-
triarcales han sido en gran medida las sociedades que
los han sucedido más tarde. Sobre todo, en la cordi-
SHUTTERSTOCK

llera cantábrica. Fue allí donde la conquista de Roma


encontró las mayores dificultades.

66 MUY HISTORIA DATA


MEIGAS vs. brujas
ASC

E
l hecho de que entre los pueblos íberos predomi- rían las sorginak, en el caso de la Mari vasca, o las
naran las hechiceras sobre los brujos puede tener meigas celtas, cuyo cometido es megar o enmeigar, es
su explicación en la condición matriarcal de las decir, hacer el bien y deshacer los conjuros maléficos y
sociedades antiguas, que a su vez habría enlazado con el mal de ojo de las brujas. Y es que la bruja –término
la condición femenina de la Gran Diosa, arraigada posiblemente prerromano, del mismo origen que el
desde el comienzo de la civilización: aquella antiquí- portugués y gallego bruxa y el catalán bruixa– tendría
sima Diosa Madre, de la que hay muestras evidentes un carácter negativo. De hecho, en Roma serían lla-
en los primeros grupos de cultura occidentales. Por madas maleficae (maléficas).
ejemplo, en el origen del euskera no hay un dios, Diosas y hechiceras estaban asociadas a los dólme-
sino una Diosa Madre que se habría convertido nes; no en vano a la época megalítica se asocian
en la Mari, el personaje más reconocido de la toda clase de leyendas arcaicas en la península.
mitología y las leyendas vascas. Todo lo relacio- Los megalitos vascos, por ejemplo, tienen nom-
nado con maternidad, familia, fertilidad, cos- bres como Mairubaratza o Jentilbaratza –Huerta
tumbres y formas de vida iba dirigido hacia de los Mairus o de los Gentiles–, aunque ocupan
esa ‘madre’ que tenía más importancia que terrenos que nunca pudieron haber sido huer-
cualquier otra cosa y sin la que no se puede tas. Parecen creencias traídas de épocas muy
comprender el matriarcado vasco. antiguas, conservadas en el seno de sociedades
Las sacerdotisas de esa Diosa Madre se- muy endogámicas y resistentes al cambio.

En Vuelo de brujas
(1798), Francisco de
Goya denuncia la
ignorancia
(simbolizada por el
burro), las
supersticiones y el
oscurantismo que le
tocó vivir en su
época.
mitos IBÉRICOS

En la Piazza della
Signoria de Florencia
Los mitos andaluces
E
n el sur, en el Estrecho de Gibraltar o Columnas de
se encuentra este
Hércules y el centauro Hércules, que fue la primera tierra ibérica que co-
Neso (1550), del nocieron los griegos, florecieron otros mitos que
escultor flamenco la presencia romana y después la mahometana –que
Jean Boulogne o duró tanto como la romana– contribuyeron a eliminar.
Giambologna. Los últimos restos de las creencias nativas serían ba-
rridos finalmente por la repoblación cristiana.
De los viejos mitos andaluces solo tenemos noticia
a través de los historiadores griegos y romanos, que
transmiten informes curiosos como por ejemplo que,
según Plinio, los andaluces (los túrdulos) tenían más
dientes en la boca que el resto de los mortales. De
esta extravagante información no se conoce el ori-
gen ni el fundamento, de manera que se ha llegado a
interpretar como una simple metáfora.
Otros informes griegos aseguran que el Sol parece
cuatro veces mayor al ponerse en Cádiz que en
cualquier otra parte del mundo. Esta noción pu-
do haber estado ligada al hecho de que no se
conocían tierras más allá del océano y a que el
astro, en su caída por Occidente, se aproxi-
maba más a la Tierra y por lo tanto se veía
mayor. También se decía que desde las Co-
lumnas de Hércules podían verse con to-
da claridad las montañas de la Luna, y
probablemente por la misma razón.
Como la Iberia era el confín del
mundo (el confín del Mediterrá-
neo), tenía sentido que estu-
viera más cerca de los astros
en su declinar diario.
SHUTTERSTOCK

68 MUY HISTORIA DATA


La leyenda de los
primitivos reyes de
Tartessos, Gárgoris
y Habis, recuerda a
la historia de
Moisés,
abandonado en las
aguas del Nilo al
poco de nacer. En la
imagen, Moisés en
el monte Sinaí
(1895-1900), de
Jean-Léon Gérôme.

Fascinante Tartessos
ASC

L
a leyenda ibérica más completa que los siglos nos han blo a labrar la tierra con animales de tiro.
transmitido llega de la pluma de un escritor galorro- Mucho se ha especulado sobre el sentido de esta leyen-
mano del siglo I a.C. llamado Pompeyo Trogo. Aun- da, que parece aludir a épocas remotísimas en las que
que su obra se perdió, quedaron largos fragmentos recogi- se dio el paso de la ganadería a la agricultura; o sea, al
dos en el siglo III por el historiador romano Justino en los Neolítico. Sus analistas, en particular Julio Caro Baroja,
que cuenta la historia de los primitivos reyes de Tartessos, lo interpretan como un mito fundacional semejante al
los famosos Gárgoris y Habis. de Rómulo y Remo, también protegidos y salvados por
De acuerdo a esta leyenda, la hija del rey Gárgoris, que una bestia salvaje, en su caso la loba capitolina. Pero
había enseñado a sus semejantes la recolección y el uso además recuerda a la historia de Moisés, abandonado en
de la miel, tuvo un hijo ilegítimo que el soberano repudió. las aguas del Nilo al poco de nacer. El hecho de que esta
Ordenó abandonar al niño en el monte, pero las fieras sal- leyenda se relacione con los descendientes de los tarte-
vajes lo amamantaron y el niño siguió vivo. Luego ordenó sios parece vincularlo con otra noticia que proporciona
depositarlo en un paso de ganado para que los animales lo Estrabón: que los andaluces (turdetanos o túrdulos) eran
pisotearan, arrojarlo a los perros hambrientos y tirarlo al los más cultos de todos los pueblos ibéricos y que dispo-
mar. Nada terminó con él y vivió entre los animales hasta nían de crónicas históricas y leyes versificadas con una
que cayó en la trampa de un cazador y fue conducido ante antigüedad increíble, que ellos mismos fechaban en seis
Gárgoris, el cual, maravillado por lo ocurrido, lo nombró mil años. Si algún día se logra encontrar y descifrar esos
su heredero. Y con gran acierto, porque Habis se mostró escritos constituirá el mayor tesoro cultural que pueda
como un excelente gobernante. Estructuró la sociedad en soñarse, pues nos aproximarían a la infancia olvidada
siete grupos o castas, promulgó leyes adecuadas para la de nuestra civilización, ampliando el conocimiento que
convivencia y desarrolló la agricultura y enseñó a su pue- tenemos de nosotros mismos. Para eso sirve la historia.

MITOS COMPARTIDOS
P
or otra parte, muchos de los mitos y creencias Parece que hubo cultos locales relativos a deter-
del norte eran compartidos por varios pueblos minados territorios. Se han encontrado numerosos
hispanos y se explican a partir de la mitología altares dedicados a deidades cuyo nombre coinci-
celta, como los duendes de todas clases con las for- de en muchos casos con el de los lugares junto a
mas más curiosas, las ninfas acuáticas (lamias, xa- los que han aparecido. Debieron de ser entidades
nas, etc.) o los hombres salvajes de la montaña (el y creencias de índole animista por las que se reco-
basajaun u ojancu vasco y el ojancanu cántabro). nocía una condición sagrada a algunos espacios en
Tampoco faltan los cíclopes en esa nómina de seres concreto, genios locales a los que se atribuían cier-
mitológicos, como el vasco Tartalo, un ser enorme y tos beneficios o dádivas y cuya protección se reque-
cruel con un solo ojo en medio de la frente. ría erigiendo esos altares.

MUY HISTORIA DATA 69


E
n la mitología de muchas culturas antiguas aparecie-
ron seres de gran poder, pero con una característi-
ca mágica especial: figuras fantásticas, en su mayor
parte femeninas, y especialmente ligadas a la naturaleza.
Procedentes de la tierra, el mar o el aire, su finalidad era
la de complementar las creencias existentes y explicar al-
gunos fenómenos naturales.
El agua cubre el 75% de nuestro planeta, es fuente de vida
y elemento femenino: por todo ello, parece lógico que
sean tantos y tan variados los seres con forma de mujer
ligados a ella. Las hay dóciles como una fuente o salvajes
como una cascada; generosas como la lluvia o siniestras
como un temporal; accesibles como una charca o inabar-
cables como el océano; combativas como las amazonas o
inofensivas como las focas.
Pero, sin duda, pocos mitos han cautivado tanto desde la
noche de los tiempos como el de las sirenas. De entre to-
dos los seres mitológicos femeninos destacan, sin duda,
las reinas de las aguas oceánicas. Ya en el siglo VIII a.C.
circulaban relatos de seres cuyo hipnótico canto atraía a
los marineros. En las antípodas de las edulcoradas sire-
nas de cuento, los griegos las imaginaban como repulsi-
vas mujeres-pájaro que no tenían reparo en lanzarse en
picado contra los marineros. Como prueban algunas ce-
rámicas, exhibían busto de mujer con generosos pechos
y enormes garras. De su naturaleza aérea provienen, pro-
bablemente, sus dotes musicales y su atrayente melodía.

nos
MUY HISTORIA DATA 71
CON NOMBRE DE MUJER

Sirenas, sin alas en el mar


E
sas malvadas mujeres-pája- fragios a las guardianas del mar
ro que describían los griegos y a ser pintadas de azul y oro, los
cambiaron sus alas por una colores de la Virgen. Se libraron
cola de pez en el siglo IV y, con definitivamente de su mala ima-
este aspecto acuático, protago- gen en el Romanticismo (cuan-
nizaron los mitos paganos que la do las pasiones dejaron de verse
Iglesia católica adaptó. Descarta- tan negativamente). Asociadas al
dos los seres marinos alados (por amor, eran criaturas bondadosas
ser demasiado parecidos a los y protectoras (tanto es así, que
ángeles), estas sirenas comenza- aún hoy su nombre se asocia a
ron a aparecer en leyendas orales, sonidos que alertan de peligro).
manuscritos, escudos y vitrales Podían enamorarse de humanos
como mujeres impuras que tenían y, si estos les correspondían, ob-
dos piernas separadas que exhi- tenían un alma inmortal. Es este
bían sin pudor. Aunque no tuvie- un tema recurrente en leyendas y
ron este carácter despectivo en cuentos como el de Hans Chris- Ulises y las sirenas, obra
todas las culturas antiguas. Los tian Andersen, La sirenita (1836). pintada en 1891 por el
celtas, por ejemplo, que las llama- Su protagonista (inmortalizada británico John William
ban mermaids (vírgenes marinas), en una estatua en Copenhague) Waterhouse (1849-1917).

ASC
no las consideraban símbolos de cambia la cola por piernas para
perdición.
Su imagen cristiana se dulcificó
durante el Renacimiento; pasaron
conquistar a su príncipe, pero él
se casa con otra y ella se lanza al
mar. Su amor la salva y se con-
LAS
de ser las causantes de los naut- vierte en sílfide (espíritu del aire).
NEREIDAS,
Grabado NIETAS
DEL DIOS
(procedente de
un antiguo
boceto

OCÉANO
dibujado a
mano) de una
arpía, animal
mitológico
mitad mujer,
mitad ave

Pérfidas arpías
A
pesar de su aspecto similar y de su carácter malvado, no
hay que confundir a las primitivas sirenas aladas de los
griegos con las arpías, también griegas y también aves.
Aquellas sirenas encarnaban la tentación, eran criaturas per-
versas porque usaban su mejor arma, el canto libidinoso, para
reducir a los hombres, pero no maléficas. En ocasiones se las
describe como antropófagas, mantis religiosas que, tras hechi-
zar a su víctima, la engullen. Por su parte, las arpías –seres vin-
culados al aire con rostro de mujer, cuerpo de ave de rapiña y
afiladas garras– sí son de inequívoca naturaleza maléfica. Aun-
que en su orígen mitológico su cometido principal era solo
hacer cumplir el castigo impuesto por Zeus a Fineo (roba-
ban continuamente su comida antes de que pudiera to-
marla), en tradiciones posteriores fueron transformadas
en genios maléficos que llevaban consigo tem-
SHUTTERSTOCK

pestades, pestes e infortunio.

72 MUY HISTORIA DATA


S
irenas y nereidas son las ninfas taba a unirse a ellas en el mar y al que oceánides o ninfas del mar y nietas
griegas del mar más conocidas seguía, inevitablemente, la muerte. del dios Océano (posteriormente
y ambas comparten una bellísi- Gracias a su ardid fue el único griego Poseidón), de cuyo séquito forma-
ma voz, pero mientras las sirenas en que salió airoso de tan dura prueba. ban parte. En las leyendas se apa-
su origen eran peligrosas, las segun- O casi, pues también se salvaron de recen a los marineros montadas en
das fueron todo bondad siempre. su encantador canto Jasón y los Ar- delfines, hipocampos y monstruos
El término sirena procede del latín gonautas. En su caso, gracias a que marinos con el fin de velar por ellos,
siren o el griego seiren, y significa lucharon con su misma arma: la voz siendo los Argonautas los más fa-
‘atar una cuerda’. Homero recoge en y la lira de Orfeo pudieron contra- mosos de entre los que socorrieron.
la Odisea cómo Ulises, prevenido rrestar su peligroso canto. Los griegos adoraban a las ninfas del
por Circe, se hizo atar al mástil de su Muy distintas eran las nereidas, Mediterráneo en altares situados en
nave para así, inmovilizado, resistir- que simbolizaban todo lo hermoso playas y acantilados, donde se les
se al placer de aquel canto que invi- y amable del mar. Eran hijas de las ofrendaba leche, aceite y miel.

Las ondinas de agua dulce Mujeres


foca
E
n la mitología grecolatina las ondinas o náyades estaban asociadas

M
con el agua dulce, como las oceánides lo estaban con el agua sala- ientras las mari-mor-
da y las nereidas específicamente con el Mediterráneo. Así pues, las gans de Bretaña y las
ondinas habitaban en fuentes, pozos, manantiales, arroyos, lagos, ríos nixes de las aguas
y estanques. El término ondina (deriva de la palabra latina unda, ‘onda’) estancadas germánicas
fue utilizado por primera vez por el médico y alquimista medieval Para- y nórdicas arrastran a los
celso, quien creía que había “homólogos espirítuales e invisibles de la mortales hasta el fondo del
Naturaleza visible”, espíritus elementales de cuatro clases que moraban agua para capturarlos, en
en los cuatro elementos: silfos, en el aire; gnomos, en las profundidades el caso de las mujeres-foca
de la tierra; salamandras, en el fuego, y ondinas, en el agua. Los autores de las islas escocesas, sel-
alemanes del siglo XIX y XX embellecieron a la ondina convirtiéndola en kies o roanes, la historia es
una bella ninfa acuática que podía andar y respirar fuera del agua y lau- a la inversa. Si un pescador
reada con la inmortalidad (don que perdía al tener un hijo con un mortal). la descubre y roba la piel
Aunque tenían a Paracelso como fuente, encontraron inspiración tam- de foca con la que se cu-
bién en la literatura clásica, particularmente la Metamorfosis de Ovidio, bre, la selkie debe quedar-
dada la transformación de muchas de las ondinas en manantiales. se en tierra y ejercer de es-
posa hasta que encuentra
su piel y vuelve al agua.

MUY HISTORIA DATA 73


CON NOMBRE DE MUJER

De allende El mito de Casandra


los mares C
omo las sibilas de las que hablaremos a conti-
nuación, también Casandra recibió el don de la
profecía de Apolo. El dios, enamorado de la hi-

L
as ninfas acuáticas, ya sean del mar o de
aguas dulces, no se limitan a la mitología ja de los reyes de Troya, le ofreció dicho don si se
occidental. Las apsaras, por ejemplo, son entregaba a él. Casandra aceptó, pero después no
ninfas acuáticas que animan el cielo hindú con cumplió su parte. Enfadado, Apolo escupió en su bo-
canciones y danzas; los antiguos habitantes de ca y así le retiró el don de la persuasión, por lo que
China y Japón creían que reinas dragonas habi- aunque dijera la verdad, nadie la creería. De hecho,
taban en las profundidades marinas; y la amal- cuando anunció que Paris traería la ruina a Troya y la
gama de elementos paganos y cristianos del inminente caída de la ciudad, nadie dio crédito a sus
vudú se unen en la historia de la diosa del mar vaticinios: pensaban que estaba loca. Terminó como
Sirène, que se fusionó con santa Filomena. esclava y amante de Agamenón, rey de Micenas, y
predijo su muerte a manos de la esposa de este.

El británico Solomon
LORELEY Y MELUSINA, Joseph Solomon
plasmó en Áyax y
MAL DE AMORES Casandra (1886) el
momento

L
os mitos germánicos y galos nos descu- en que un caudillo
bren a otras dos mujeres mitológicas, Lo- aqueo rapta del
reley y Melusina, protagonistas de dos templo a Casandra
tristes historias que tienen como origen un para violarla.
corazón roto o traicionado.
La primera leyenda, la alemana, habla de una
muchacha de piel blanca y dorada cabellera
que vivía junto al Rin: Loreley. Al ser traicio-
nada por el hombre al que amaba, la joven
decidió apartarse del mundo y adoptó forma
de sirena. Desde entonces, alimentada por el
rencor, se dedicó a conducir a los navegantes
a la muerte. Esta leyenda de la sirena del Rin
ha sido una fructífera fuente de inspiración;
entre otros, para el poeta Heinrich Heine, que
le dedicó románticos versos.
Y de la literatura medieval francesa nos lle-
ga Melusina, amalgama de tres seres maldi-
tos para la Iglesia: mujer, serpiente y hada. La
versión más conocida de su historia nació en
1392 en un relato de Jean d’Arras: Mélusine.
Este autor, que recopiló cuentos y narracio-
nes populares ambientados en la corte del
rey Arturo, narra la vida de un hada escocesa,
Melusina, que vivía en Avalon y fue condena-
da por su propia madre a ser hada «hasta el
día del juicio», salvo que un hombre se casara
con ella y no la viese nunca los sábados. Para
dificultar la búsqueda de marido, el sortilegio
contenía una segunda condena: se transfor-
maría en serpiente de cintura para abajo to-
dos los sábados, hasta que un hombre qui-
siera casarse con ella y aceptara no verla ese
día de la semana. Melusina encuentra a ese
hombre y tienen diez hijos, pero este acaba
faltando a su palabra y, al verse descubierta,
ella abandona el hogar y a su marido.
ASC

74 MUY HISTORIA DATA


MAGNAS
SIBILAS
S
on, sin duda, de las mujeres
más importantes de la mito-
logía griega y romana pues,
al estar bendecidas con el don de
la profecía, eran intermediarias
entre dioses y hombres.
Según algunas tradiciones, hubo
una joven, hija del troyano Dárda-
no y de Neso, que estaba dotada
del don de la profecía y tenía una
gran reputación como adivina. Es-
ta joven se llamaba Sibila y desde
entonces se llama así a las mujeres
con la capacidad de profetizar.
En ocasiones estas profetisas es-
taban inspiradas por Apolo. Este
es el caso de la Pitia, la sibila del
principal centro profético griego:
el templo de Delfos, dedicado a
este dios. La médium entraba en
trance o en sueño y respondía a
las preguntas. Sus augurios siem-
pre se hacían realidad.
De las romanas, destaca la sibila
de Cumas o sibila cumana, cuyo
don era de origen divino, recibido
de su padre Júpiter. La sibila pidió
una larga vida, pero no la virtud
de conservarse joven, de modo
que envejeció rápido. Acabó sus La Sibila Délfica o Sibila
días reducida al tamaño de una de Delfos representada
cigarra y en una jaula. por Miguel Ángel en la
Capilla Sixtina (1509).
ASC

Un lugar para vivir


C
omo hemos visto, las náyades o (dafneas), las de las flores (anthousai) o
ninfas acuáticas habitan las aguas las que vigilan los bosques (hyleoroi).
dulces, las oceánidas, los ríos, y las También el aire está habitado por seres
oceánides, el agua salada, pero también mágicos de aspecto eternamente joven,
encontramos ninfas en otros lugares co- alas de libélula y cuerpos delicados. Son
mo prados y pastos (limónides y aulo- las sílfides, ninfas o hadas del aire. Para
níades), valles de montañas (napeas) o descansar escogen lugares en las altu-
grutas (orestíades). Todas estas son nin- ras, ya sea en las montañas o en las co-
fas terrestres, pero las hay de bosques pas de grandes árboles (rara vez se las
y plantas como las que viven en los ár- ve en tierra firme). La más entrañable es
boles (dríades o hadríades), las del laurel la pizpireta Campanilla de Peter Pan.
AGE

MUY HISTORIA DATA 75


CON NOMBRE DE MUJER

LAS Ninfas hispanas


DISCÍPULAS
L
as hadas españolas son muy hermosas. De voz melo-
diosa y cabellera rubia, visten túnicas blancas, portan

DE MERLín guirnaldas de flores y custodian tesoros, además de


dedicarse a quehaceres tales como hilar y lavar y de dis-

S
on las hadas y hechi- frutar con el baile. De naturaleza bondadosa, ayudan al
ceras Viviana y Mor- que se lo merece y castigan al que actúa por puro interés.
gana, nacidas en las Aun así, también hay hadas maléficas, muy poco agra-
leyendas artúricas. Mien- ciadas. Las lamias, con pies de pato o pezuñas de cabra,
tras la primera seduce y pululan por Aragón (lainas), Navarra y País Vasco, donde
embruja a Merlín (este le poseen un camino propio: el Sendero de las Lamias, en
construye un palacio en el Mundaka. Y las lavanderas son ancianas que actúan con
fondo de un lago y le ense- nocturnidad y alevosía; si alguien las ve mientras lavan la
ña su magia), la segunda ropa, lo pagará con su vida. La mayoría de hadas viven en
(hermanastra de Arturo) es palacios en cuevas, como las dones d’aigua catalanas.
primero discípula y des- Otras se instalan en castillos, como las moiras, o habitan
pués rival del brujo. Vivia- en el bosque, como las anjanas cántabras.
na, como dama del lago, Ciertas leyendas atribuyen el nacimiento de un linaje a la
saca de las aguas la espa- unión de un hada y un humano. Y es que, sin ser habitual,
da Excalibur que entrega hay hadas con descendencia, como las xanas asturianas
al rey Arturo y Morgana le (sus vástagos se distinguen por estar cubiertos de pelusa).
pone los obstáculos que Las sirenas recorren todo el litoral peninsular y ambos
le permiten convertirse en archipiélagos. Incluso las hay tierra adentro. En Extre-
el mejor caballero. Merlín madura, sin ir más lejos, las llaman serenas. Y es famosa
acabó encerrado por Vi- la ogresa extremeña, la Serrana de la Vega, que dio títu-
viana en el encantamien- lo a una comedia de Lope de Vega. Y no podía faltar la
to que él mismo le enseñó principal deidad vasca: Mari. Considerada hacedora de
para atrapar a un hombre. tormentas, los campesinos la invocan para salvaguardar
ASC

sus cosechas.

Madres creadoras
L
as figuras de la madre protectora de las yemas, el Sol; y de las claras,
–símbolo de la fertilidad– existen la Luna. Luego concibió océanos y
desde el Paleolítico: las orondas continentes. En los Andes, aún se
Venus. De estas figurillas halladas garantizan las cosechas venerando
por toda Europa –la más conocida a la Pachamama, de origen inca.
es la de Willendorf, en Austria (en la Para los nativos del sudoeste de Es-
imagen)– dependía la supervivencia tados Unidos la creadora es la Mu-
de las primeras comunidades agrí- jer Araña, con ciertas variantes. La
colas. Después, muchos pueblos de los navajos, por ejemplo, tejió la
tuvieron como ser supremo origina- escalera por la que las personas su-
rio a una figura femenina encargada bieron al mundo, y la de los keres,
de crear la Tierra. Grecia cuenta con los hilos del universo. En cambio,
Gea, que dio a luz a la primera raza los séneca, habitantes de la actual
de seres vivos, los titanes; y Cibeles, Nueva York, llaman Eagentci (ancia-
la Gran Madre. En Roma, compiten na) a su Primera Madre. Su esposo,
Juno, diosa del parto, y la Bona Dea, el Portador de la Tierra, la tiró por
rodeada de misterio. Las matres cel- un agujero, y mientras caía iba reco-
tas suelen mostrar un pecho o llevar giendo semillas que soltó sobre un
algún bebé, mientras que la primera caparazón de tortuga. Por eso, las
diosa finlandesa es Luonnotar. Un tribus americanas de iroqueses y al-
ave puso huevos en sus rodillas: de gonquinos se referían a Norteaméri-
las cáscaras surgieron cielo y tierra; ca como la “isla de la Tortuga”.
ASC

76 MUY HISTORIA DATA


MUJERES MALAS
MALÍSIMAS
H
ay otros mitos primige- planeta de guerra y dolor. A ambas
nios mucho más rebeldes. las pierde la curiosidad, que nun-
Basta echar un vistazo a ca se interpreta como ansia de co-
las tres primeras mujeres, todas nocimiento, sino como debilidad.
transgresoras, que según cánones Así, aparte de culpabilizarlas de los
occidentales pisaron el planeta. males del mundo, pueden ser tra-
La primera compañera de Adán, tadas como moralmente inferiores
el hada Lilith, resultó ser una a los varones y se justifica así la ne-
protofeminista. Se rebeló contra cesidad de controlarlas y, de paso,
el rol secundario que le había to- al resto de su género.
cado en virtud de su sexo y osó A partir de estas tres mujeres, los
abandonar a su hombre para se- mitos femeninos han ofrecido
guir su camino sin él. Por eso se la mil y un rostros, siendo inofensi-
retrata como un demonio come- vas enamoradas o crueles femmes
niños, maligna y oscura (lilith, en fatales, bondadosas o malvadas,
hebreo, significa ‘nocturna’). salvadoras o asesinas, vírgenes
Pandora y Eva completan la tríada sumisas o agresivas ninfómanas,
de chicas malas. Eva osó atreverse independientes o sometidas... En
a probar el fruto prohibido y trajo cualquier caso nos acompañan
el pecado al mundo. Pandora, la desde el origen de los tiempos y,
primera fémina para los griegos, lejos de vivir en el pasado, están Eva pintada
abrió el ánfora prohibida y llenó el anclados al presente. Son eternos. por el artista
alemán
Alberto
Durero en el
año 1507.
FORJADORAS DEL DESTINO
T
res diosas controlaban el hilo de la vida de cada ser huma-

MUSEO NACIONAL DEL PRADO


no del nacimiento a la muerte, tres mitos femeninos que re-
cibieron diferente nombre en Grecia (moiras), en Roma (par-
cas), en la mitología báltica (laimas) y en la nórdica (nornas).

Amazonas y valquirias, las guerreras


P
ara el mundo clásico, amazonas pe. Una de las teorías sobre el tér- sármatas. En este punto se funden
y valquirias fueron los seres mí- mino amazona apuesta por la unión ficción y realidad. Marco Polo vio
ticos femeninos más guerreros de a (‘sin’) y mazós (‘pecho’), en en Oriente una isla de féminas be-
y vivieron en Asia Menor, en el Pon- alusión a su costumbre de ampu- licosas, y los hombres de Orellana
to Euxino (mar Negro), en los con- tarse el seno derecho para manejar lucharon contra mujeres mientras
fines del mundo que ellos conocían. mejor el arco. Los hombres tenían navegaban por el río Amazonas.
A la Grecia Clásica, poder y mujer prohibido el acceso a su territo- También presentan un aspecto com-
les parecían términos incompati- rio. Una vez al año, ellas visitaban bativo las valquirias nórdicas, en-
bles, y por eso llamaron tanto su a los gargarios con el fin de pro- tidades femeninas menores que
atención aquellas féminas libres, crear: los niños eran sacrificados, servían a Odín seleccionando a los
símbolo del conflicto entre las colo- las niñas, adiestradas para el com- guerreros que merecían entrar en el
nias del Egeo y los jinetes de la es- bate. Aquiles dio muerte a la reina Valhalla, la morada de los dioses.
tepa, entre civilización y barbarie. de las amazonas, Pentesilea. Las Musas de Wagner, estas doncellas
Apunta Heródoto que eran capaces que escaparon se emparejaron con escuderas aparecen en su tetralogía
de disparar con arco en pleno galo- escitas para fundar la tribu de los operística El anillo del Nibelungo.

MUY HISTORIA DATA 77


MITOS POR DESCUBRIR

las fábulas más


desconocidas
Hay infinidad de pueblos que conservan mitos
ancestrales como parte de su acervo cultural.
Algunos corresponden a rincones tan recónditos
del planeta que están aún por descubrir.
SOLO UN HOMBRE Y
UNA MUJER AL INICIO
E
ntre los inuit –nombre común para los distintos pueblos esquimales que
habitan las regiones árticas de América y Groenlandia– se relata cómo al
comienzo de los tiempos solo existían un hombre y una mujer. Fue ella la
que le pidió al dios del cielo que les diese compañeros con los que convivir en el
planeta y esta divinidad, llamada Kaila, le dijo que abriera un hueco en el hielo
y que comenzara a pescar. Cada vez que la mujer lanzaba el anzuelo, extraía un
animal diferente. El último de todos fue un caribú, animal sagrado para los inuit
desde entonces, porque fue un regalo de la propia deidad Kaila para alimentar y
vestir a la población.

ASC

MUY HISTORIA DATA 79


RÍOS CELESTIALES
DEL MUNDO
ABORIGEN
A veces sucede que los mitos parecen
raros a nuestros ojos, pero son muy
significativos para la cultura a la que
pertenecen. Su valor trasciende el paso
del tiempo y de las generaciones. To-
man prestados otros elementos, vuelven
a contarse y renacen en nuevas versio-
nes. Esto ocurre con las muchas creen-
cias sobre el comienzo de los tiempos,
sobre la creación. Una de ellas, la de los
aborígenes australianos, sostiene que el
cielo no es más que una extensión de la
tierra y que todas las formaciones que
se ven allí arriba –como la Vía Láctea–
son ríos celestiales o grandes canoas.
Es esta relación cielo-tierra la que expli-
ca algunos de los grandes misterios de
la naturaleza y muchas tradiciones cul-
turales de la zona (Australia, Tasmania
e islas cercanas). Por ejemplo, se creía
que los espíritus de los bebés caían del
cielo y al morir, ya adultos, el alma reali-
SHUTTERSTOCK

zaba el camino inverso.

Mitos fineses
U
na de las áreas más cercanas a nosotros con gran riqueza
mitológica, aunque bastante desconocida, es Finlandia. Con
una historia que se remonta a 5000 a.C., los diversos pueblos
que componían el actual país crearon sus propias versiones y le-
yendas sobre el origen del mundo y la raza humana. Una de ellas
es la leyenda de Vainamonen, el eterno cantor, explicación mito-
lógica del origen del mundo y la raza humana.
En 1835, el filólogo y lexicólogo finlandés Elias Lönnrot publi-
có una gran cantidad de mitos, canciones y poemas recogidos
durante siete años en un periplo que lo llevó a viajar por todo el
país. Lo que Lönnrot quería no era solo rescatar del olvido las
leyendas autóctonas, sino unificarlas añadiendo contribuciones
suyas, de modo que la tradición se conjugara con sus aporta-
ciones dando nueva vida a la mitología antigua. Deseaba crear
un poema heroico semejante a la Ilíada de Homero que pudiera
ser cantado por sucesivas generaciones de finlandeses y el re-
sultado fue el Kalevala, cuyo héroe protagonista era Väinämöi-
nen, descrito como un hombre anciano y sabio con una voz
portentosa y mágica.
Compuesto por 23.000 versos, la primera parte del Kaleva-
la relata la creación de la Tierra por Väinämöinen a partir del
caos primigenio y las siguientes relatan sus proezas, centrán-
dose en la lucha entre dos pueblos: los pohjola, del norte de
Finlandia, y los haleva del sur.

MUY HISTORIA DATA 81


MITOS POR DESCUBRIR

CONTADORES AFRICANOS
T
an necesario era un sistema de transmitir oralmente tales historias, presente.
memorización efectivo para ya fuese en el interior de las casas o Uno de los relatos míticos africanos
mantener viva la información a toda la comunidad en alguna cele- más conocidos procede del pueblo
relevante del pasado que en ciertas bración especial. Esta tarea les otor- abaluyia de Kenia, para el que Wele es
culturas, incluso, se creó la figura del gaba un papel crucial en la formación la deidad suprema, creadora del uni-
contador de relatos mitológicos, que de los jóvenes, que se entretenían a verso y también del día y de la noche.
se entrenaba en el arte de la memori- la vez que aprendían la historia de su Según se relata, cuando Wele puso
zación literal. Esta tradición del conta- pueblo y comprendían cómo había al Sol y a la Luna en el cielo, observó
dor de historias tuvo gran arraigo en sucedido la creación del universo y cómo el Sol empujaba a la Luna para
África, donde las lenguas escritas no del mundo que les rodeaba. Y es que alejarla y, en respuesta, esta le abatía.
aparecieron hasta los siglos VIII y IX los relatos fabulosos recogidos en el Como la situación no tenía visos de
gracias a la extensión del islam hacia el continente africano hablan, sobre arreglarse, Wele decretó que el Sol
interior del continente. Ya lo dijo Pli- todo, de la historia y el origen de las saldría de día y que la Luna lo haría
nio el Viejo: “Siempre hay algo nuevo diversas etnias, que siempre han uti- durante la noche, de tal modo que
en África”. lizado a los ancestros como vehículo ninguno de los dos astros coincidiera
Los mayores eran los encargados de perfecto para unir el pasado con el en el mismo tiempo y espacio nunca.

Miembros de una tribu de


SHUTTERSTOCK

bosquimanos en lo que se
conoce como el ‘Museo vivo
de Grashoek’, en Namibia.
Allí realizan actividades
ancestrales como bailar,
cantar, contar historias o
simular la caza.
Brumoso atardecer en Ambot,
monte situado en el País Vasco
(principalmente en Bizkaia con
parte en Araba). En él la
mitología vasca fija la morada
de la Dama de Amboto, Mari,
lo que lo convierte en un monte
casi sagrado.

MATI SYRA ZEMLIA


P
robablemente sea la divinidad más antigua de los
eslavos y, al igual que otras Madre Tierra mitológi-
cas, como Mari, la divinidad vasca que sigue alber-
gando el monte Amboto, Mati Syra Zemlia nunca fue re-
presentada con forma humana porque se la consideraba
SHUTTERSTOCK

la Tierra misma. Siendo la personificación de la Madre


Tierra, en las leyendas ancestrales de los pueblos esla- DESCENDIENTES
vos, a Mati Syra Zemlia o Húmeda Madre Tierra siempre
se le rindió culto a través de su propio elemento, has- DE DIOSES
O
ta tal punto que en primavera no se permitía horadarla tros mitos sirven para legitimar a
con una azada o con un arado pues se consideraba que un pueblo en particular o a una fa-
estaba embarazada. Si se la cuidaba, Mati Syra Zemlia milia gobernante. Es una imagen
respondería con una primavera abundante y fértil. Para poderosa, ya que si el poder de un regen-
no enojarla, los eslavos pronunciaban juramentos sagra- te llega a través de un deseo divino y pri-
dos mientras sostenían en las manos o en la boca una migenio, ¿quién osaría contradecir ese
porción de la Húmeda Madre Tierra. También los votos derecho obtenido en el pasado? Esto ocu-
matrimoniales se tomaban con un poco de esa tierra sa- rría, por ejemplo, en el reino de Tonga, en
grada puesta sobre la cabeza. Oceanía, cuya mitología recogía la figura
Otro de los poderes atribuidos a Mati Syra Zemlia era el de Eitumatupua, un dios primigenio que
de la adivinación, y aquellos campesinos que deseaban solía descender a la Tierra a través de una
averiguar el futuro horadaban la tierra con cuidado y ha- casuarina (un árbol autóctono). En una de
blaban al agujero planteando la pregunta que deseaban. sus visitas conoció y fecundó a Ilaheva,
El apego por Mati Syra Zemlia no desaparecía ni siquie- hija del noble Seketoa. bien posicionado
ra con la muerte, pues era a ella a la que los moribundos en el reino. De la unión entre Eitumatu-
le confesaban sus pecados si antes no habían encontra- pua e Ilaheva nació Ahoeitu, el primer Tui
do a un sacerdote. Tonga, heredero de la condición divina del
cielo y de la secular de la Tierra.

MUY HISTORIA DATA 83


PARAÍSOS mitológicos

LUGARES DE
LEYENDA
L
as penalidades de este mundo incendiaron, desde la noche de los tiempos, la
imaginación de pobres y ricos, que fabularon con la utopía de otro mundo,
de un paraíso terrenal mítico por su abundancia imposible y por su felicidad
sin fin. Podía ser una recompensa espiritual, ese paraíso al que llegaba el alma tras
el sufrimiento terrenal, pero en muchas ocasiones era tan real como para tener
coordenadas geográficas concretas. Y es que el ser humano proyectó ese ideal,
esa entelequia impracticable en la realidad, hacia tierras remotas e inalcanzables.
En un tiempo fueron las islas Afortunadas como la Atlántida, las Canarias o Tule;
en otros momentos, ricos reinos como el de Saba o el de Preste Juan; también se
buscaron ciudades perdidas construidas en oro o mundos subterráneos inexpug-
nables que recorrían las entrañas de la Tierra. El hombre necesitaba creer y aún lo
necesita; si no, ¿cómo se explica que mitos como el de la Atlántida se sigan buscan-
do en pleno siglo XXI utilizando moderna y costosa tecnología?
SHUTTERSTOCK

84 MUY HISTORIA DATA


La eterna Atlántida
El único texto en que se describe de forma detalla-
da la mítica isla de la Atlántida es Critias, escrito por
Platón hacia 360 a.C. En este diálogo, continuación
de Timeo, el filósofo narra la hipotética guerra que
mantuvieron Atenas y la Atlántida. Hipotética, por-
que ningún texto histórico nos habla de la misma, tal
y como señala Angela Hobbs, profesora de Filosofía
en la Universidad de Warwick: “Todo lo que sabemos
sobre la Atlántida procede de unas pocas páginas de
Timeo y Critias, escritas por Platón. No hay ningu-
na otra fuente antigua. Esto es todo”. Según relata el
filósofo griego, la historia de la Atlántida llegó a su
conocimiento a través de su primo, quien la supo de
su abuelo, quien la oyó de su padre, quien la escuchó
al legislador griego Solón, quien la recibió a su vez de
los sacerdotes egipcios de Sais en 590 a.C. Cuando
Platón ideó el mito de la Atlántida probablemente no
esperaba que esta isla misteriosa fuera objeto de de-
bates y nutriera el imaginario popular durante más de
dos mil años, pero así fue.
En 1882, el escritor y político estadounidense Igna-
tius L. Donnelly publicó Atlantis: The antediluvian
world, libro en el que aseguraba que la Atlántida
había sido un continente real y no una fantasía. Ha-
bía llegado a esta conclusión tras analizar los estilos
arquitectónicos de las antiguas culturas europeas y
precolombinas y encontrar paralelismos significa-
tivos: el empleo de pirámides, la importancia que
daban al oro, semejanzas en sus relatos mitológi-
cos... Coincidencias que solo podrían explicarse si
esas civilizaciones hubieran tenido un antecesor co-
mún, una cultura madre que actuara como puente
de unión, y que para Donnelly era la Atlántida, un
lugar habitado por una raza majestuosa, semidivina
y semihumana, que colocó los cimientos de todas las
civilizaciones posteriores. Incluso se atrevió a datar
en 12.000 años la fecha de su desaparición. Hoy sa-
bemos que esas teorías no tienen fundamento. Los
arquitectos señalan que las pirámides son un tipo de
construcción bastante sencilla, el primer paso en la
edificación en vertical de una cultura primitiva. Ade-
Para Platón, la
Atlántida habría sido más, las pirámides egipcias, salvo contadas excepcio-
una enorme isla nes, son puntiagudas y las precolombinas son escalo-
ubicada más allá de nadas y comenzaron a ser edificadas, en su mayoría,
las Columnas de 2.000 años después de que los egipcios terminaran
Hércules que con su fiebre constructora.
desapareció por Sin embargo, en el siglo XIX, las tesis de Donnelly
una catástrofe resultaban tan cautivadoras como otras muchas teo-
natural. Una
poderosa potencia
rías surgidas en los años y siglos posteriores. Efecti-
militar que existió vamente, en los años 70 del siglo XX, Charles Berlitz
nueve mil años reavivó el mito con su libro El misterio de la Atlánti-
antes de la época da, y, ya en el XXI, los hallazgos arquelógicos obteni-
del legislador dos gracias a los modernos vehículos de exploración
ateniense Solón. submarina han abierto de nuevo la puerta al mito.

MUY HISTORIA DATA 85


Paraísos mitológicos

EL JARDÍN
DE LAS
DELICIAS
D
esde la Grecia de la Edad de Oro, los
Campos Elíseos y las Islas Afortuna-
das, el mito del Paraíso fue cuajando en
el inconsciente colectivo de sucesivas civili-
El río Aqueronte está situado zaciones. Pero dejó de ser un rincón del más
en el noroeste de Grecia. Nace allá destinado a las almas afortunadas para
cerca de Zotiko y desemboca
convertirse en un sueño con difusa ubica-
en el mar Jónico formando el
delta de Ammoudiá. ción en el mapa, en un remoto paraje del le-
jano Oriente, en el que los hombres vivían en
ASC

armonía, inmunes a la vejez o la muerte por-


LA MÍTICA EDAD DE ORO que habitarlo significaba un salvoconducto a
la juventud eterna. Es el Jardín de las Delicias

G
riegos y romanos proyectaron sus anhelos de una de la tradición judeocristiana (en la imagen,
existencia paradisíaca hacia el pasado forjando el
imaginado por El Bosco), que comparte ras-
mito de la Edad de Oro, un tiempo en el que, a sal-
gos con el Edén del Génesis sumerio y me-
vo de las preocupaciones y los desvelos del presente, los
sopotámico y variantes primas-hermanas en
hombres vivían permanente ociosos, sin temor a la muerte,
espoleados por la tranquilidad que les daba saberse po-
otras culturas: el Monte Meru y el Monte Ka-
seedores del elixir de la eterna juventud. Esta entelequia liash del budismo y el hinduísmo o las mon-
del mundo feliz cuajó en el mito de los Campos Elíseos y su tañas del Kunlun de los taoístas. El Paraíso
más célebre variante, las Islas Afortunadas. Este paraíso pa- Terrenal de la tradición bíblica figuraba en
ra las almas afortunadas se ubicaba en algún lugar más allá los mapas medievales en esa nebulosa geo-
del río Aqueronte y para acceder a él era preciso atravesar gráfica que era entonces la India: un mundo
el inframundo, con el beneplácito de los dioses. Era el bar- perfecto reservado a los rectos y virtuosos
quero del Hades, Caronte, el que cruzaba a los difuntos que encontró a partir del siglo X una répli-
de un lado a otro del Aqueronte. ca popular, ese paraíso más accesible que la
gente del vulgo necesitaba.

ASC

86 MUY HISTORIA DATA


La isla de Tule El dios de
los vientos

T
anto o más perdurable fue este mito, de cuya existen- imaginado
cia dio cuenta por vez primera el explorador griego por Rubens
Piteas allá por el siglo VI a.C. Oyó hablar de la isla de en Bóreas
Tule en su periplo por el Atlántico Norte y la definió como rapta a Oritía
el país más septentrional al norte de las islas Británicas. El (1620).
mito se fusionó con los precarios conocimientos geográ-
ficos de la época, y Eratóstenes y Estrabón dieron pábulo
a la leyenda describiéndola como una isla de hielo y fuego
donde nunca anochecía. Tule cobró forma como una de las
posibles ubicaciones de la Atlántida de Platón, que es, sin
duda, la entelequia paradisíaca que más ha perdurado en
el tiempo. Como posible Atlántida, Tule se consolidó como
espejo de civilización y sociedad perfecta y opulenta. Ha-
bría estado constituida por una confederación de reinos rí-
gidamente sometida al imperio de la ley, y gobernada por
una realeza justa y ejemplar –extraordinariamente sabia y
modélica–. Pero Tule también fue identificada como el lugar
en el que existió la mítica Hiperbórea, habitada por Bóreas,
dios de los vientos, y por hombres inmortales. Tule e Hiper-
bórea fueron difusamente ubicadas en el Medievo en algún
rincón insular de Escandinavia. El mito de Tule perduró has-
ta el siglo XX, cuando los nazis se afanaron en moldearla
como la cuna misma de la raza aria.
ASC

EL PAÍS DE JAUJA
F
ue otro edén de placeres interminables, una
tierra de abundancia mucho más mundana
que el Paraíso bíblico, que no emerge desde
la literatura mística de la élite sino desde las nece-
sidades poco trascendentes del pueblo. Los más
desfavorecidos fueron los que forjaron esta leyen-
da de un paraíso alternativo que acabaría siendo
una parodia del Edén ‘oficial’ judeocristiano.

Afortunadas Canarias Originariamente esta tierra mitológica –que vivió


su esplendor en la Edad Media– se llamaba País

P
or definición, el paraíso es un paraje remoto en un de Cucaña o de la Cucaña. En ella no era nece-
horizonte lejano e inaccesible, una entelequia que sario trabajar, el alimento era abundante y todos
no sería tal sin una geografía imposible, sin la inac- los deseos eran instantáneamente gratificados.
cesibilidad que frustra cualquier empeño de darle forma. Fue tras 1533 cuando tuvo como sinónimo País
Por eso, el ancho océano ha sido y es tierra abonada de Jauja. Y es que, durante la conquista del Ta-
para el mito y pocas metáforas paradisíacas ha habido huantinsuyo, Pizarro y sus tropas descansaron en
tan sugerentes como las islas. Estar en medio del mar la ciudad de Jauja, sede de enormes tampu (de-
y más allá de las fronteras del mundo conocido conver- pósitos) de riquezas, ropas, alimentos y bienes
tía cualquier isla en un enclave ideal para la mitificación. diversos acumulados por los incas que fueron re-
Así, el mito de las Islas Afortunadas en algún ignoto lu- quisados por los conquistadores españoles.
gar del Atlántico –con el tiempo, los geógrafos lo ubica- Los mitos de ambos lados del Atlántico se fusio-
ron en las Canarias– cobró forma de diversas maneras. naron con la conquista y los europeos descubrie-
Mucho antes de que el archipiélago fuera colocado por ron que el anhelo de una vida ajena a las preocu-
los primeros cartógrafos en un mapa, ya se oían rumo- paciones y miserias del día a día también existía
res de que más allá de las Columnas de Hércules (estre- en los habitantes de las Indias. Por ejemplo, Azt-
cho de Gibraltar) existían unas islas míticas que podrían lán, la tierra de los ancestros de los aztecas, tam-
bién era un paraíso cuyos habitantes gozaban del
SHUTTERSTOCK

ser los restos de la antigua Atlántida de Platón o donde


germinaban los frutos del Jardín de las Hespérides. privilegio de la vida eterna.

MUY HISTORIA DATA 87


Paraísos mitológicos

El reino de saba Las tierras del


C Preste Juan
onscientes de que la natura-
leza humana era en sí misma

C
incompatible con la utopía del
élebre en la Edad Media y Mo-
gobierno perfecto, el mito del pa-
derna, el mito del reino del
raíso se ‘politiza’ y se proyecta ese
Preste Juan ubicaba más allá
ideal, impracticable en el mundo
de las fronteras del mundo islámico
real, hacia tierras remotas e inalcan-
un vasto país de seres monstruosos y
zables donde proliferan sistemas de
prodigiosos palacios, gobernado por
gobierno e ingeniería social que son
un rey de sabiduría inagotable, el pia-
la cristalización, en el ámbito de la
doso Presbyter Johannes. Durante si-
ensoñación (o la idealización), de rei-
glos algunos soñaron, incluso, con la
nos y sociedades modélicas, espejo
reunificación de la iglesia de Occiden-
en el que mirarse y variante de la en-
te y Oriente tomando como cabeza
telequia paradisíaca. El más célebre
visible a este singular monarca, cuyo
de ellos es, sin duda, la Atlántida,
reino de fábula bien puede tener una
pero no es ni mucho menos el único.
raíz histórica en el eco de las comuni-
El reino de Saba, gobernado por la
dades nestorianas de Asia.
reina Makeda, que enamoró a Salo-
món, se convierte en la Antigüedad
en un icono de la prosperidad y la
abundancia, en el que proliferan es-
pecias, metales preciosos, jardines y El sueño de El Dorado
E
palacios majestuosos. Pero Saba es, l mito del Paraíso terre- en la jungla de Nueva Grana-
quizá, un mito construido sobre una nal, con su opulencia in- da (la actual Colombia). Era una
realidad histórica tangible. Durante agotable y el privilegio de deformación de los relatos míti-
siglos se creyó que se trataba de po- la vida eterna, viajó a América, cos precolombinos de los indios
co más que una fábula geográfica de donde se fundió con el relato de muiscas.
tantas, pero en la actualidad algunos los aterrorizados indígenas, dis- Pero no todos buscaban oro.
arqueólogos defienden su existencia puestos a fabricar los mitos que Ponce de León, por ejemplo,
e historicidad ubicándolo en algún los invasores quisieran escuchar. buscó pruebas de la vigencia de
lugar de Yemen o, más probable- Así, alimentaron su sed de oro los mitos bíblicos y navegó por
mente, Etiopía. con el rumor, cada vez más dis- las costas de América, desde
torsionado, de grandiosas ciu- 1512, en busca de la Fuente de
Encuentro de la dades ubicadas en el corazón la Eterna Juventud.
reina de Saba y el de la selva en las que el oro co-
rey Salomón, rría como el agua en los ríos.
fresco de Piero El éxito de las expediciones
della Francesca. de Cortés y Pizarro no hizo si-
no engordar el asunto. Las no-
ticias que llegaban a España
desde las Indias sobre grandes
riquezas encontradas por los
conquistadores, y los barcos
que mandaban cargados con el
quinto real en oro y plata, des-
pertaron la avaricia de más de
uno que se embarcó hacia el
Nuevo Mundo en busca de ri-
getty

quezas sin fin. Los obsesos del


oro –con Jiménez de Quesada,
Lope de Aguirre y Orellana a la
cabeza– se afanaron desde la
tercera década del siglo XVI en Pectoral en oro de Xipe
la búsqueda de la legendaria Tótec, dios mexica de la
El Dorado, ciudad esculpida en vida, la muerte y la
oro y presuntamente ubicada resurrección.
ASC

88 MUY HISTORIA DATA


De Xanadú a Shangri-La
E
n el otro extremo del mundo, por leyendas que trascendían el
en el lejano Oriente, también relato histórico.
cuajaron otros mitos alrede- La literatura, vehículo por exce-
dor de fantásticas ciudades do- lencia de la creación de mitos pa-
tadas de grandiosas riquezas y radisíacos en el mundo moderno,
sociedades enormemente avan- también hizo su contribución ima-
zadas. Es el caso de Xanadú, la ginando ciudades prodigiosas. La
histórica Shangdu, capital de ve- más célebre, la Shangri-La inven-
rano del Imperio mongol visitada tada por el escritor James Hilton
por Marco Polo (en la imagen) a en su novela de 1933 Horizontes
finales del siglo XIII y que, gracias perdidos, una irresistible utopía
fundamentalmente a un célebre subterránea tibetana ubicada bajo
poema de Samuel Taylor Colerid- las montañas Kunlun que ha aca-
ge, cuajó en el imaginario colecti- bado por convertirse en sinónimo
vo como metáfora de ciudad opu- de cualquier paraíso que el hom-
SHUTTERSTOCK

lenta y exuberante, engordada bre haya sido capaz de imaginar.

EL MITO DE AGARTHA
A
medida que se iba descubrien- en las entrañas mismas de la Tierra. malaya, las montañas más altas del
do el mundo, los paraísos geo- Así nace el mito de Agartha, gracias mundo, y gobernado por el Rey del
gráficos dejaron de ser creíbles a la imaginación y las falacias de un Mundo, otro monarca sabio y justo
porque se acabó el misterio, lo que novelista francés, Louis Jacolliot, que que hizo posible un mundo feliz ba-
no significa que el hombre no siguie- vivió varios años en la India y otras jo el suelo. A pesar de que no haya
ra teniendo la necesidad de creer en zonas de Asia y que decía citar textos ninguna evidencia de su existencia,
ellos. Explorada la práctica totalidad sánscritos secretos. Agartha era un la tradición budista adoptó este mito
de la superficie del globo, no queda- reino formado por una intrincada red y aún hoy se habla en el Himalaya de
ba más alternativa para los soñadores de prósperas ciudades subterráneas un reino subterráneo donde reinaría
del siglo XIX que buscar el Paraíso construidas bajo la cordillera del Hi- el conocido como “rey del mundo”.

Vista de la cordillera del


SHUTTERSTOCK

Himalaya desde un
monasterio budista.

MUY HISTORIA DATA 89


¿QUIÉNES ERAN LOS
CARTEROS
DEL OLIMPO?
E
n la mitología griega, los propios dioses sable de su correo, pues Apolo le había regalado
(algunos de ellos) cumplían la función el caduceo de oro. Como mensajero del Olim-
de mensajería, que realizaban portando po, Hermes llevaba sombrero y estaba autoriza-
el caduceo de oro, símbolo del cargo de he- do a usar sandalias aladas. Por supuesto, nunca
raldo entre las deidades griegas. Se trataba de abandonaba el caduceo de oro, por lo que este
una varita mágica con serpientes enrolladas y símbolo casi siempre acompaña al heraldo de
alas en la parte superior. Hoy el mítico bastón los dioses en las representaciones que de él hay
se emplea comúnmente como símbolo del co- desde la Antigüedad.
mercio. A veces se confunde el caduceo con la Aunque en los relatos homéricos se señala a
vara o báculo de Esculapio (para los romanos) Hermes como el cartero principal del Olimpo,
o Asclepio (para los griegos), que se usa como el dios mensajero no ejercía él solo esta tarea,
símbolo de la medicina. La copa de Higía (diosa sino que le ayudaba la diosa Iris. Ella era la per-
griega de la sanidad), uno de los símbolos más sonificación del arcoíris y ocupaba también el
conocidos de la profesión farmacéutica, tam- cargo de cartera entre las mansiones de cris-
bién guarda cierta similitud con la mítica varita tal celestes. Otro mensajero divino era Tritón.
de los mensajeros divinos. Aunque próximo al Olimpo, pero fuera ya de
En la morada olímpica, Hermes era la persona él, era la deidad que se ocupaba del correo ma-
de confianza del mítico Zeus; eso suponía que rítimo. En este caso, Tritón no porta el caduceo
ejercía de sirviente, pero además era el respon- sino una concha de mar retorcida.

MUY HISTORIA DATA 91


preguntas y respuestas

¿Existió el basilisco?

ASC
Retrato de
Alfonso X

C
de Castilla, uentan que los viajeros de la Antigüedad llevaban siempre con-
llamado
sigo un gallo para mantenerse a salvo de un ser maligno que era
‘el Sabio’,
pintado por capaz de matar con la mirada. Solo dos cosas podían acabar con
Eduardo él: el olor de la comadreja y el canto del gallo. Plinio El Viejo habló de
Gimeno y esa maléfica criatura describiéndola como una serpiente con cresta que
Canencia había nacido de un huevo sin yema puesto por una gallina vieja e incu-
en 1857. bado por una serpiente. Aclaró que su nombre, basilisco, procedía del
griego basilískos –diminutivo de rey–, por lo que era considerado el mo-
narca de las serpientes. Y no solo tenía el poder de asesinar dirigiendo
únicamente la mirada hacia su víctima. También era capaz de marchitar
lo sembrado y resquebrajar piedras con su aliento fétido, lo que servía
para explicar años desgraciados de malas cosechas en el campo o de-
rrumbes que habían acabado con la vida de seres queridos.

Las nereidas
(1902), del pintor
simbolista francés
Gaston Bussière.

¿QUIÉN ERA
CRUNIA?
F
ue la primera mujer habitan-
te de la ciudad de A Coruña,
de la que se enamoró perdi-
damente Hércules, considerado
el fundador de la urbe. Alfonso ¿Cuál es el origen de la
expresión “estás
X el Sabio fue el que alimentó la
leyenda en su obra Estoria de
Espanna. Allí cuenta como el hé-
roe griego llegó a la península en
busca del gigante que reinaba como una sílfide”?
ASC

sobre las tierras comprendidas

C
entre el Duero y el Tajo. Lo en- uando escuchamos esta frase dirigida a alguien, entendemos
contró, se enfrentó a él y lo ven- que a esa persona se le está diciendo que está muy delga-
ció. Enterró su cabeza junto al da. Y es que ‘estar como una sílfide’ es estar como una ágil,
mar y en ese lugar construyó la liviana, delicada y alargada nereida del aire. En la mitología antigua
Torre de Hércules. Como home- las sílfides eran nereidas, seres femeninos que habitaban en el aire y
naje a su amada, el griego dió a controlaban los vientos (los relatos nórdicos cuentan que fueron ellas
esa tierra el nombre de Crunia. las encargadas de formar las nubes y las lluvias). Para poder mover-
Sin embargo, la ciudad herculina se con soltura por el aire, estos seres míticos tenían muy poco peso y
cuenta con otro relato fundacio- una figura alargada, que las ayudaba en su ágil vuelo y en su preciada
nal protagonizado por el héroe capacidad innata de levitar. Por eso, las sílfides suelen representarse
celta Breogán. con formas muy menudas y cuerpos flacos y semietéreos.

92 MUY HISTORIA DATA


¿CÓMO SE LLAMABA EL ‘BUDA’
MÁS SONRIENTE?
S
u nombre es originalmente Hotei y, según las mi- asocia a la felicidad y la abundancia (existe la creencia
tologías china y japonesa, fue un semilegendario de que si se le frota el vientre se obtienen riquezas, bue-
monje zen que vivió hace más de mil años en Chi- na suerte y prosperidad). Las estatuas y los amuletos
na, durante la dinastía Liang (907-923). Pocos datos se que representan a Hotei con una prominente barriga y
tienen sobre su existencia, pero según la tradición bu- una amplia sonrisa han llegado a ser tan conocidos en
dista se trataba de un excéntrico monje, hombre cari- todo el mundo que han provocado la confusión al iden-
ñoso, de buen carácter, temperamento alegre y amable tificarle erróneamente con el verdadero Buda. El ‘Buda
y una natural gran benevolencia. En Japón forma parte gordo’ o el ‘Buda feliz’ se ha convertido en una caricatu-
de los denominados ‘Siete dioses de la fortuna’ y se le ra del fundador de la religión budista.
SHUTTERSTOCK

Imagen del gigantesco


Buda Feliz de la Pagoda
Vinh Trang, un colorido
templo budista de la
ciudad de My Tho, al sur
de Vietnam.
preguntas y respuestas

¿Dónde está enterrado


el rey Arturo?
L
a controversia sobre dónde yace el rey Arturo no ha ce-
sado en siglos (sin olvidarnos de la que rodea a su pro-
pia existencia). Aunque siempre quedarán fuentes tradi-
cionales que sigan situando el epicentro del misterio artúrico
en Glastonbury (Somerset), el lugar que visitan aquellos que
anhelan rendir homenaje a Arturo y a sus caballeros, pare-
ce que hay un lugar con más papeletas que los demás para
ser el lugar de enterramiento de Arturo. Se trata de una fin-
ca –impresionante casa con tres acres de jardín rodeándo-
la– en la villa de Caerleon, situada en la ribera del río Usk, en
el sur de Gales (Reino Unido). Allí se cree que reposan los
restos del mítico personaje y de sus caballeros. No en vano
la leyenda artúrica fue originaria de este lugar de gran impor-
tancia arqueológica (posee vestigios de la Edad del Hierro y
construcciones del Imperio romano –Isca Augusta–). Es posi-
ble que las valientes y mágicas hazañas que rodearon a Ca-
melot surgieran de las leyendas de la tribu romanizada de los
silures, que lucharon contra la invasión sajona.
El mito que afirma que el supuesto lugar de descanso eterno
del monarca se encuentra en Caerleon surgió de varios libros
de investigación histórica que, bebiendo de los escritos de
un monje llamado Geoffrey de Monmouth, afirmaban que Ar-
turo adoraba descansar en esta villa galesa. De Monmouth
dejó escrito en 1133 que al rey y a sus caballeros les gustaba
tanto esta región que llegaron a trasladar a sus verdes pra-
SHUTTERSTOCK

dos la corte en varias ocasiones. Además, el escritor galés


recoge en sus textos descripciones exactas de Caerleon.

¿Qué era la
hidra de lerna?
U
n despiadado monstruo acuático
con apariencia de serpiente y alien-
to venenoso que habitaba en una
ciénaga en una entrada al inframundo, y a
la que Hércules (el Heracles griego) mató
en el segundo de sus doce trabajos. Sus Hércules lucha
cabezas –cuyo número va de tres, cinco u con la hidra de
ocho hasta cien, e incluso diez mil, según Lerna (1634),
uno de los
la fuente– se regeneraban aunque las cor-
diez lienzos
taran una y otra vez. Pero Hércules conta- sobre los
ba con la ayuda de su sobrino Yolao, que trabajos de
iba quemando con un trapo ardiendo los Hércules que
cuellos de las cabezas que su tío cortaba, realizó el
de forma que el monstruo murió al per- pintor español
derlas todas. Después, el héroe mojó las Francisco de
puntas de sus flechas en la sangre de la Zurbarán.
hidra para que el potente veneno pudiera
acabar con sus enemigos.
ASC

94 MUY HISTORIA DATA


Odiseo en la cueva de
Polifemo, de Jacob
Jordaens (primera mitad
del siglo XVII).
ASC

¿CÓMO perdió su único


ojo el cíclope POLIFEMO?
G
igantes de un solo ojo aparecen sea, Homero relata que una partida clavarle una lanza en su único ojo.
en gran parte de los mitos y le- de reconocimiento encabezada por Así lo hicieron y después Odiseo y
yendas más antiguos que cono- Odiseo, héroe de la Guerra de Troya, sus hombres se ataron al vientre de las
cemos. Hesíodo, Homero, Eurípides y llegó a la remota isla de los Cíclopes y ovejas de Polifemo. Cuando este las
Virgilio, entre otros, escribieron sobre se adentró en una cueva, que no era llevó a pastar, palpó sus lomos para
esos gigantes con un solo ojo en mi- otra que la del temido Polifemo. Este asegurarse de que los hombres no las
tad de la frente que en la mitología los encerró y comenzó a comerse a la montaban, pues estaba ciego, pero no
griega eran conocidos como cíclopes. tripulación hasta que Odiseo urdió tocó sus vientres. De este modo hu-
El más famoso fue Polifemo, hijo de un plan: emborrachar al cíclope con yeron. Odiseo logró con su ingenio
Poseidón. En el canto IX de la Odi- vino hasta que perdiera el sentido y liberar a su tripulación.

¿QUÉ ERA LA ISLA DE LA TORTUGA?

L
as mitologías de los pueblos iroqueses y algon- cuando se mueve provoca un terremoto”.
quinos del noroeste de Estados Unidos com- El caparazón de la tortuga, asociado al mito de la
parten muchos relatos legendarios. Sobre to- Creación, tiene un papel muy destacado en los ri-
dos ellos destaca el mito de la Creación de su uni- tuales de los pueblos nativos americanos. Los iro-
verso, el que le dio a Norteamérica el nombre por el queses crearon sonajeros con toda la coraza, en los
que muchos nativos americanos la conocen, la isla que el mango representaba la cabeza y el cuello de
de la Tortuga. Incluso existe documentación de va- la tortuga. Los curanderos los empleaban para eli-
rios testimonios en referencia a esta creencia, como minar enfermedades. Y en los pueblos de las Gran-
el de un nativo de las naciones wyandot de Kan- des Llanuras los usaban para hacer los tambores
sas: “Vivimos sobre el caparazón de la Tortuga, que que tocaban en sus ceremoniosos ritos.

MUY HISTORIA DATA 95


preguntas y respuestas

¿EXISTEN FOTOS DE HADAS?


E
l origen de las hadas lo encontra- es la imagen que quedó grabada en aparecía en un bosque de Cottingley
mos en las ninfas de la mitología el imaginario colectivo. El resto de junto a cuatro hadas. La imagen ha-
griega: eran espíritus divinos fe- sus atributos se mantuvo: caras an- bía sido tomada por su prima, Elsie
lices que actuaban a menudo como gelicales, alas de mariposa y siempre Wright. Las jóvenes, de 16 y 10 años,
ayudantes de distintos dioses y habi- rodeadas de naturaleza, a la que en tomarían después otra fotografía co-
taban en la naturaleza. Presentes des- teoría protegen. Y este es el aspecto mo aquella intentando probar con
de entonces en decenas de poemas, con el que salen en unas fotografías ello que dichas criaturas fantásticas
en un principio se las imaginó con tomadas entre 1917 y 1920 que re- existían. Estas increíbles instantáneas
proporciones humanas, pero desde volucionaron a la sociedad británica. llegaron a manos de Arthur Conan
que Shakespeare habló de ellas co- En la primera foto, una adolescente Doyle, creador de Sherlock Holmes,
mo criaturas diminutas y etéreas esa británica llamada Frances Griffiths en mayo de 1920, a través de la ma-
dre de Elsie (ambos coincidieron en
la Sociedad Teosófica, organización
Frances Griffiths rodeada esotérica fundada por Helena Bla-
de hadas en la primera vatsky). Tras consultar a varios es-
de las cinco fotografías pecialistas, Doyle concluyó que las
de Cottingley (1917).
fotos eran auténticas, aunque para la
gran mayoría de la gente era obvio el
fraude (quizás quería ver confirma-
das sus creencias en seres extraordi-
narios). Aquella historia del engaño,
que tuvo una segunda parte con tres
fotos más obtenidas en 1920, acabó
siendo la base del ensayo El misterio
de las hadas, en el que Doyle advertía:
“Es posible que los hechos que vamos
a contar en este libro saquen a la luz
la estafa más fabulosa jamás hecha al
público, pero tal vez el futuro, por el
contrario, muestre que estos hechos
constituyen un hito de la historia de
la humanidad”. Décadas después, las
primas confesaron que las fotografías
estaban trucadas.
ASC

¿Un trasgo es
bueno o malo?
U
n trasgo es un duende propio de la mi-
tología clásica del norte de España y,
aunque no es malo (de hecho, es un
duende familiar que habita en el hogar), sí es
bastante travieso y disfruta haciendo bromas
como cambiar las cosas de lugar. De pequeño
tamaño, a veces es totalmente invisible. Tam-
bién existe en la cultura germana, en la que,
además de como trasgos, son conocidos co-
mo kobold o gremlin y también por los simila-
res silfo, goblin o gnomo. En algunas leyendas
ASC

figuran como descendientes de los elfos.

96 MUY HISTORIA DATA


¿HAY SERES OCULTOS EN LOS BOSQUES?

L
os misteriosos bosques también están llenos de características orejas largas y puntiagudas, los elfos
seres mágicos. Allí habitan los gnomos, muy po- tienen poderes sobrenaturales y pueden llegar a vivir
pulares en la mitología nórdica y centroeuropea cientos de años en los bosques, fuentes o cuevas.
desde hace siglos. Paracelso los describía en el siglo Muy parecidos físicamente a ellos son los duendes,
XVI como seres fantásticos que podían desplazarse que comparten con los elfos la característica forma de
por el interior de la tierra y eran buenos conocedores sus orejas. Aunque se les asocia con frecuencia a las
de sus secretos, siendo los guardianes del oro y la pla- casas (de hecho se cree que están relacionados con
ta. Tanto por su aspecto como por su labor, son muy los dioses domésticos menores del Imperio romano,
distintos de los elfos de la mitología germánica y es- los genium loci cuya misión era proteger el hogar), su
candinava. De aspecto más fino y estilizado y con unas principal labor es cuidar de la naturaleza y del bosque.

SHUTTERSTOCK

¿Qué era el Kraken?


U
na enorme y colosal criatura marina
de la mitología escandinava, descrita
comúnmente como un tipo de pulpo
o calamar gigante que, emergiendo de las
profundidades, atacaba barcos y devoraba a
los marineros. El pulpo Kraken ha sido des-
crito por marineros noruegos y por ballene-
ros de América, y antes por escritores de la
Antigüedad como Plinio el Viejo. En cuentos
antiguos se alude a él como un animal “del
tamaño de una isla flotante”. No hay que
descartar que este mito pueda haberse origi-
nado en avistamientos de calamares gigan-
tes reales. Poco se sabe de esta especie que
habita en las profundidades marinas, pero
está comprobado que algunos pueden llegar
a medir de 33 a 45 metros de largo, incluyen-
do las ocho patas con tentáculos.

MUY HISTORIA DATA 97


vive LA HISTORIA
con pasión

EDICIÓN
EDICIÓN
COLECCIONISTA
COLECCIONISTA

ORIGEN
De la República
al Imperio
EL IMPERIO ROMANO

OCTAVIO AUGUSTO Nueva


El primer emperador edición
coleccio
nista
MUJERES
Más allá de
la domus

TERRITORIO
Una Roma,
mil provincias

EL IMPERIO ROMANO
historia y vida cotidiana
Nº 2

¡YA A LA VENTA!
data
P R E G U N TA S , R E S P U E S TA S
Y CURIOSIDADES

grandes mitos
de todas las
culturas

También podría gustarte