Principios Aplicados en Materia Ambiental Las 6 R
Principios Aplicados en Materia Ambiental Las 6 R
Principios Aplicados en Materia Ambiental Las 6 R
REALIZADO POR
LEON GUTIERREZ
MIGUEL ANTONIO
C.I: 18.792.883
2DO. SEMESTRE
ING. EN SISTEMAS
PRINCIPIOS APLICADOS EN MATERIA AMBIENTAL LAS 6 R
La situación actual de nuestro planeta es muy delicada. A
medida que las actividades humanas crecen y las necesidades
materiales se hacen más complejas, aumenta nuestro impacto en el
ambiente y los recursos naturales. Todo esto ha traído como
consecuencia que se rompan los equilibrios imprescindibles para la
continuidad de la vida en la Tierra. La degradación de los ecosistemas,
la contaminación y la sobreexplotación de los recursos naturales son
problemáticas que afectan a todo el planeta y a todo ser vivo que lo
habita, incluyendo a los humanos.
Sin duda es nuestra responsabilidad detener, o al menos
disminuir el deterioro ambiental, los pequeños cambios en nuestros
hábitos diarios son imprescindibles para conseguir un planeta más
saludable y que las generaciones actuales y venideras disfruten de los
recursos en armonía con el resto de seres vivos.
La regla de las tres erres, también conocida como las tres erres
de la ecología o simplemente 3R, es una propuesta sobre hábitos de
consumo. Durante la Cumbre del G8 en junio de 2004, el primer
ministro del Japón, Koizumi Junichiro, presentó la Iniciativa, y explicó
que ésta busca construir una sociedad orientada hacia el reciclaje. En
abril de 2005 se llevó a cabo una asamblea de ministros en la que los
representantes de más de 20 países discutieron la manera en que se
podrían implementar de manera internacional acciones relacionadas a
las tres erres.
Este concepto hace referencia a estrategias para el manejo de
los residuos que se producen todos los días en nuestro hogar o en la
industria, buscando ser más sustentables con el ambiente y reducir el
volumen de basura generada.
Reducir
Se refiere principalmente a consumir menos, evitar comprar
objetos nuevos o de moda que seguramente terminarán en la basura, y
por lo tanto, contaminando. También se refiere a disminuir nuestro
gasto de agua y energía, ya que las fuentes actuales son altamente
contaminantes. De este modo agotaremos menos recursos,
generaremos menos contaminación y basura y, desde luego,
ganaremos en calidad de vida. Si viajamos más el transporte público o
en bicicleta, usamos pilas recargables, apagamos las luces y
desconectamos los aparatos eléctricos cuando no los utilizamos,
estaremos contribuyendo al ahorro energético.
Reutilizar
Es otra de las actitudes que necesitamos poner en práctica para
disminuir la contaminación y dejar de degradar el ambiente. Es
necesario utilizar al máximo las cosas que ya tenemos, sin necesidad
de tirarlas o destruirlas, es decir; alargar la vida de cada producto. La
mayoría de los bienes pueden tener más de una vida útil, ya sea
reparándolos o utilizando la imaginación para darles otro uso y de este
modo evitar comprar cosas nuevas, sobre todo aquellas que están
hechas de materiales contaminantes como el plástico o unicel.
Reciclar
Se trata de rescatar lo posible de un material que ya no sirve
para nada (comúnmente llamado basura) y convertirlo en un producto
nuevo. Es una forma en la que se reincorpora la materia prima al ciclo
los materiales para crear nuevas cosas sin necesidad de gastos
energéticos y sin aumentar el volumen de residuos. El reciclaje ha de
volverse un hábito, para poder conseguir un equilibrio entre lo que se
produce, lo que se consume y lo que se desecha, intentando siempre
generar la menor cantidad posible de basura. Reciclar vidrio, materia
orgánica, llantas o plástico, son algunos ejemplos.
Los beneficios que nos dan las 3 Rs
Dentro de los beneficios ambientales encontramos la disminución
de residuos sólidos, el incremento de la calidad del suelo, reducción de
la emisión de gases de efecto invernadero; mejorando así la calidad de
aire y ayudando a que la situación del clima se estabilice.
También hay beneficios económicos, ya que los residuos sólidos
pueden ser vendidos a empresas que los reciclan, ahorramos en
costos en el hogar utilizando materiales reciclados. Se pueden crear
diferentes artículos hechos de material reciclado como camas, sofás,
sillas, mesas, lámparas, floreros, entre otros. En algunos casos, el arte
de reciclar puede llegar a ser un negocio, pues se crean artículos que
se venden. Por último, tenemos el beneficio social, ya que poco a poco
se crea una cultura de responsabilidad con el ambiente.
Con toda esta información que tenemos ahora, antes de comprar
un producto en el mercado debemos hacernos varias preguntas:
¿realmente lo necesito?, ¿este producto fue elaborado de manera que
no contamine o de manera sustentable?, ¿durará mucho tiempo?,
¿contaminará al ser desechado?, ¿bajo qué circunstancias fue
fabricado?, ¿existe un producto similar, pero con menos empaques? La
idea es que cada uno de nosotros hagamos un consumo razonado, no
comprar por comprar sin mirar a quién o a qué podamos dañar.