Naturaleza de La Bibliotecologia 2022

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I.F.S n° 6001: “Gral.

Manuel Belgrano” -Tecnicatura Superior en Bibliotecología y Ciencias de la


Información

Espacio Curricular: Fundamentos dela Bibliotecología y Ciencias de la Información

Eje temático Nº 1: La bibliotecología y las Ciencias de Información en la actualidad

La Bibliotecología: etimología. Devenir histórico: niveles, fases y etapas del fenómeno bibliotecológico
Enfoques de la Bibliotecología. Las disciplinas que conforman las Ciencias de la Información: Bibliotecología,
Archivística, Documentación, Ciencia de la Información. Definición. Tendencias actuales .Semejanzas y
diferencias a partir de su desarrollo histórico y su objeto de estudio. La bibliotecología y la Biblioteconomía
¿Una misma Ciencia? .Objeto de estudio. Devenir histórico de la biblioteconomía. La interdisciplinariedad de
la Bibliotecología.

Articulación de contenidos con la Unidad Curricular Procesos Técnicos I: Archivística

Origen y Evolución de la Bibliotecas y el Libro .Historia y evolución de la Archivística. La archivística en


Argentina. Ciencias relacionadas: Paleografía, Diplomática, Cronología, Historia, Derecho, Lingüística e
Informática. Archivología, una ciencia nueva.
Distintas acepciones del término Archivo. Archivo y Centro de Documentación: características y
diferencias.

Naturaleza de la Bibliotecología

Atendiendo a su raíz etimológica, la voz bibliotecología deriva de biblioteca y está compuesta por tres
palabras griegas: biblion (libro), theke (caja o armario) a las que se agrega el sufijo -logos (ciencia, estudio).
Literalmente, puede entenderse como ciencia o estudio de la biblioteca, acepción recurrente entre los
primeros que formularon su conceptualización, pretendiendo establecer una diferenciación con respecto a la
biblioteconomía.1

En la actualidad aun es cuestionada la cientificidad de la Bibliotecología. Rendón Rojas (1996) sostiene “al
cuestionarse sobre el status epistemológico de la bibliotecología nos enfrentamos a ese problema ¿la
bibliotecología pertenece a las ciencias naturales o a las ciencias sociales y humanísticas?”. Indudablemente,
el autor parte de la afirmación de que se está ante una disciplina de rasgos científicos. Sin embargo, el
problema tiene raíces más hondas y parece llegar más allá de cuestionarse una ubicación entre las ciencias
duras o ciencias blandas; pone en duda la propia cientificidad de la disciplina.

Nosotros, profesionales de la información debemos conocer su devenir


histórico, los autores y sus tendencias como así también las etapas y fases
de este fenómeno bibliotecológico.

1. Un recorrido histórico, la bibliotecología ¿una ciencia o técnica?


1
Rendón Rojas, M.A. (2013)

1
El debate acerca de la naturaleza del conocimiento bibliotecológico no es reciente y tiene sus orígenes en
Alemania, entre 1808 y 1829, a partir de la utilización del término Bibliothekswissenschaft (ciencia de las
bibliotecas) por parte de Martin Schrettinger. Hasta ese momento, la disciplina era concebida como un
conjunto de técnicas y rutinas de carácter práctico cuya finalidad se centraba en la organización y
conservación de las colecciones bibliográficas y, subsidiariamente, en la disponibilidad de dicho acervo para
su uso.

Con posterioridad, en Europa y Estados Unidos, se registraron opiniones encontradas en relación con el
término apropiado para designar a la bibliotecología y al posible alcance de cada uno de ellos. También
surgieron defensores y detractores de la propuesta de Schrettinger de dotarla de un perfil científico, sobre
todo en Alemania, portadora de una larga tradición bibliotecaria erudita. Unos adhirieron a sus teorías y las
tomaron como base para continuar el desarrollo o efectuaron nuevas propuestas, buscando consolidar su
posicionamiento en el esquema de las ciencias; en tanto, otros insistieron en señalar las carencias y
limitaciones que no permitían hablar de una ciencia bibliotecológica. En muchos casos, los autores
advirtieron en la disciplina una faceta técnica, meramente práctica y otra científica.

Autores adheridos Autores que no adhirieron


Domenico Rossetti (1832), quien empleó el término Friedrich Ebert (1820), quien incluso le negó la categoría de
bibliotattica, para definir la ciencia que forma parte de técnica y afirmó que se trata de la teoría y práctica de la
la Bibliología y se ocupa del sistema de los monumentos actividad bibliotecaria, a la que dividió en dos partes:
u objetos gráficos, con la finalidad de reunirlos, “Einrichtungskunde, o actividad de disposición y
conservarlos y difundirlos en pos de contribuir con el ordenación, relacionada con los catálogos
progreso humano. fundamentalmente, y Verweltungskunde, o actividad
administrativa o de gestión.”
Edmund Zoller (1846) se apoyó en los postulados Julius Petzholdt (1856) entendió que la bibliotecología es el
desarrollados por Schrettinger para fundamentar la ordenamiento sistemático de los conocimientos referidos a
disciplina y la concibió como una ciencia encargada de la la biblioteca, pero esta sistematización no denota
organización sistemática y gestión de la biblioteca. cientificidad, sino un proceso y una actividad práctica.
También fue precursor en referirse a la función social y
educativa que debe cumplir la biblioteca en tanto un
servicio público.
En Estados Unidos, mayoritariamente se prefirió hablar En tanto, en Gran Bretaña predominó el uso del término
de la Library Science o ciencia de la biblioteca, Librarianship, es decir la profesión del bibliotecario. Señala
responsable de estudiar el conocimiento y el un matiz diferente al concebir la disciplina como el
funcionamiento de la biblioteca y sus componentes. resultado de la aplicación práctica de determinados
conocimientos, como una técnica.

En Argentina, la revista Documentación Bibliotecológica Herbert Goldhor (1972) tampoco aceptó la cientificidad de
de Bahía Blanca, en el año 1975, reunió en su quinto la disciplina, mientras no se establezcan generalizaciones
número opiniones de destacados especialistas del universales o leyes, que sean comprobables, verificables y
ámbito nacional como Domingo Buonocore, Roberto que se basen en la evidencia; hasta entonces, opinó, la
Couture de Troismonts, Stella Maris Fernández, Ernesto actividad bibliotecaria se mantendrá como un campo de la
Gietz, Roberto Juarroz y Reinaldo José Suárez, quienes práctica.
expusieron sus puntos de vista en torno a esta cuestión.
(Conforti y Artaza, 2000). La mayoría de ellos entendían
que la bibliotecología poseía las condiciones necesarias
para aspirar al rango de ciencia.

Más de cien años después del trabajo de Schrettinger –en 1940-, en Argentina, Ernesto Gietz fue pionero en la
adopción del término Bibliotecología, para hacer referencia a la ciencia de la biblioteca. Desde entonces, su

2
uso se extendió por toda Latinoamérica –con excepción de Brasil- y el concepto evolucionó en armonía con los
nuevos aportes y estudios efectuados, como por la influencia de las transformaciones producidas en el
contexto social, particularmente en el ámbito de la información. 2

Domingo Buonocore (1963), bibliotecario y escritor argentino de larga trayectoria y reconocimiento


internacional, recogió inmediatamente el término propuesto por Gietz y lo empleó para designar al conjunto
de conocimientos sistemáticos relativos al libro en sí mismo y a la biblioteca.

Conforme se avanzó en el estudio de la disciplina, aparecieron nuevos elementos y dimensiones en su


definición .La bibliotecología deja de ser un conjunto amplio e impreciso de saberes para constituir una
disciplina cuyo foco de atención no son solo la biblioteca y el libro, sino la mediación entre un colectivo
organizado de información registrada y las demandas que los usuarios efectúan sobre dicho universo
informativo, con todas las implicancias y posibles relaciones que se establecen entre estos elementos. 3

Pérez y Herrero transcriben la definición aportada por Morales Campo (1989), para quien se trata de un:
“conjunto de actividades técnicas y científicas que tienen como finalidad el conocimiento de la información, de
los materiales en que se presenta y del recinto en el cual se puede hacer uso de ella; así como de los servicios,
la tecnología y la metodología para hacerla accesible, previo conocimiento del destinatario.”

En tanto, el mexicano Rendón Rojas rescata la función comunicativa que posee en el seno de la sociedad la
institución bibliotecaria, no como un mero eslabón sino como una pieza trascendente que participa del
conocimiento, propiciando a los lectores el acceso al mundo informativo.

En el ámbito cubano, se desarrolló un enfoque interesante de la disciplina; Setién Quesada y Gorbea Portal
publicaron en 1994 un artículo en el que expusieron un modelo teórico sobre el Sistema de Conocimientos
Bibliológico Informativo, y definieron las disciplinas científicas específicas que integran dicho sistema, entre
ellas la Bibliotecología, la denomina “fenómeno bibliotecario” refiere a las tareas que posibilitan el uso el
conocimiento registrado, tanto en espacios reales o virtuales. Su objeto de estudio está determinado por el
fenómeno bibliotecario en su interacción con la sociedad, entendiéndose como tal al conjunto de elementos
que permiten conformar, facilitar y promover el uso de colecciones de bibliotecas reales o virtuales, integradas
por documentos de cualquier índole que registren los conocimientos y la actividad creadora de la humanidad,
y que por su carácter e intención sean susceptibles de difusión o se hayan difundido para trasmitir sus
contenidos.

Para resumir, estos enfoques fueron presentados en el trabajo Los fundamentos de la bibliotecología y la
ciencia de la información en las universidades públicas argentinas: perspectivas académicas de M.A. Damus
(2014) con un enfoque nuevo, la bibliotecología como tecnología.

1.2 Evolución de las disciplinas Informativos documentales

Para comprender los mismos se presenta un cuadro explicativo de los distintos paradigmas que permiten
caracterizar el conocimiento científico, en este caso, el conocimiento informativo documental.

Paradigma física o fisicalista Paradigma cognitiva Paradigma social o sociocognitiva

En los años 1950, las Popper, con sus elementos propuestos conlleva a un Citando a Fernández &Moya-Anegón

2
Damus M,A (2014)
3
Idem

3
disciplinas informativas- cambio, desde la perspectiva positivista ala cognitiva ya (2002) “El comportamiento de las
documentales no contaban que incorpora elementos cognitivos y sociales, que sin personas respecto a la información
con raíces epistemológicas. renunciar a las experiencias cuantitativas de la teoría de la no es algo condicionado solo por
Por ello, tomaban modelos información permiten ampliar perspectivas teóricas. las características individuales sino
epistémicos de otros campos Postura 1: considera que los mitos, las ideas y teorías también está fuertemente
científicos. constituyen algunos de los productos más característicos influenciado por el contexto social
En 1980, el neopositivismo, de la actividad humana y que puede llamarse como y la cultura compartida. La decisión
era la perspectiva conocimiento humano. de cada individuo de escoger entre
epistemológica dominante y Postura 2:el conocimiento puede entenderse de dos diferentes fuentes de información,
considerada como la única maneras está condicionada socialmente y la
fundamentación válida para a-como producto objetivo: se encuentra formulado forma en que entiende el mensaje,
identificar y validar algún lingüísticamente por problemas y teorías, puede ser está dirigido por los significados
campo del saber. Este surge sometido a discusión crítica para ser aumentado, compartidos que proporcionan los
como respuesta a lo modificado o eliminado del mismo. Puede ser hallado en diferentes contextos en los que se
propuesto por el Círculo de los libros, revistas, bibliotecas, medios magnéticos, inserta.
Viena 4que analizaba el computadoras, etc.
lenguaje, la estructura y los b-en sentido subjetivo: formado por nuestras disposiciones De esta manera, el contexto social
métodos de las ciencias y expectativas y que carecen de relevancia epistemológica, se convierte en objeto de interés
naturales y los fundamentos porque no puede ser unificado ni eliminado, es nuestro prioritario y se pueden emplear
de las matemáticas. conocimiento entendido con un carácter disposicional. métodos como la hermenéutica, el
Su núcleo central era la Postura 3: reconoce diferentes mundos pensamiento sistémico, y el
verificación. Las proposiciones Mundo 1:es el de los objetos físicos pensamiento complejo.
Se pueden verificar Mundo2: el de los estados de conciencia, de los estados
empíricamente a través de mentales o quizás de las disposiciones comportamentales
Se deje entrever la necesidad de un
los hechos de la experiencia. a la acción.
nuevo enfoque para abordar la
realidad dela información tomando
Como consecuencia la Esto significa que – para el humano- al menos algunos en cuenta su unidad y multiplicidad
Bibliotecología, Archivología. elementos del mensaje comunicado deben ser percibidos, empleando diferentes disciplinas y
Documentación y Ciencia de reconocidos o asociados, con el fin de permitirle variedad de métodos que propicien
la Información se centra transformar al mensaje actual en nuevo orden de las soluciones a los problemáticas
solamente en investigaciones conocimiento. de la información de forma
de carácter cuantitativo, el Mundo 3:se refiere a los contenidos lógicos de los libros, interdisciplinaria y tratándola como
progreso se mide en términos bibliotecas, computadoras y similares que conforman el un fenómeno en donde interactúan
de factores, indicadores, pensamiento objetivo y cuyos elementos constitutivos son múltiples dimensiones que hagan
cobertura, etc. Desde lo los pensamientos científicos, las estructuras gramaticales, interaccionar lo personal y lo social.
tecnológico o desde las la tradición, las obras de arte, la poesía, etc. Es este mundo
ciencias naturales, el que contiene los problemas y situaciones problemáticas,
olvidándose de los aspectos los argumentos críticos y el estado de discusión.
humanos y del contexto De esta manera, queda incluido el estudio del
social en el que se produce la comportamiento humano relacionado con la información
transferencia de la dentro de su formulación epistemológica. Los
información. presupuestos se erigen sobre la diferencia entre el
carácter subjetivo y objetivo de la información y sobre el
supuesto de que el conocimiento existe como una
configuración de estados mentales subjetivos dentro del
individuo.
Por esto, las disciplinas informativo- documentales
realizaron estudios que trataron de ver de qué forma los
procesos informativos transforman o no al usuario,
entendido como sujeto cognoscente, con modelos
mentales del mundo exterior que son transformados
durante el proceso informacional.

1.3 Enfoques más destacados sobre la naturaleza del campo disciplinar de la bibliotecología

4
Movimiento filósofo y científico fundado en el año de 1921 por Moritz Schlick en la ciudad de Viena Austria, en sus inicios fue
denominado como Círculo de Viena para la concepción científica del mundo, este organismo se encargaba de estudiar la lógica que
existía dentro de la ciencia, creando un léxico común dentro de todas las ciencias, basado principalmente en la física, además de ello se
consideraba a la filosofía como una herramienta para diferenciar entre lo que era considerado como ciencia y lo que no.

4
1.3.1 La bibliotecología como técnica

Tradicionalmente, la bibliotecología fue considerada una técnica, es decir un conjunto de procedimientos


practicados por los bibliotecarios para organizar las bibliotecas mediante una serie de tareas y rutinas. En la
actualidad, no es raro encontrar en el ámbito profesional –y aun en la percepción social- quienes comparten
esta opinión.

En palabras de Molina Campos (1995) la técnica involucra principios, procedimientos y recursos que
intervienen en la producción de un objeto o en la realización de un fin, que sirven a una ciencia, arte, oficio o
actividad intelectual.5

Morales López (2005) atribuye la visión tecnicista, en los momentos iniciales de la bibliotecología, a la
necesidad de formar recursos humanos para atender las bibliotecas, a la falta de tiempo y de preparación, por
lo que la preocupación inmediata no se centraba en la conformación de una epistemología bibliotecológica.

Naudé, bibliotecario y erudito francés, en su libro Advis pour dresser una bibliotheque, ofrece
recomendaciones de tipo práctico para el trabajo de los responsables de las bibliotecas del siglo XVII. La
atención prioritaria que reciben los procesos técnicos, tanto en la práctica cotidiana como en la literatura
profesional, es otro elemento que contribuye a vincular a la bibliotecología con una técnica. Esta es una
característica que desde siempre trascendió y distinguió a la disciplina, desde las incipientes prácticas en las
actividades técnico descriptivas hasta los desarrollos producidos en las últimas décadas. La aplicación de la
tecnología informática a los procesos técnicos subrayaron los rasgos procedimentalistas de las operaciones;
una vez más la práctica iba unos pasos por delante, en detrimento o deterioro del constructo teórico de la
disciplina. Sin embargo, despegarse de esta imagen no significa renunciar o eliminar el procesamiento técnico
de las actividades del bibliotecario, que constituye un paso necesario e importante para el tratamiento
informativo-documental y para la disponibilidad de los registros informativos; se trata de no encuadrarse
solamente en las funciones técnicas de la biblioteca y de procurar que las mismas encuentren un basamento
teórico que justifiquen su aplicación y que conduzcan a la formulación de leyes y principios teóricos,
tendientes a fortalecer el núcleo disciplinar.

1.3.2 La bibliotecología como tecnología

Esta concepción la ofrecen los bibliotecarios argentinos Noemí Conforti y Carlos Artaza, quienes proponen
clasificarla como una tecnología social y no una ciencia o una técnica. Esto es porque: resulta indudable que la
Bibliotecología no constituye una disciplina científica. No cuenta con un cuerpo orgánico de leyes ni con un
sólido aparato teórico. Resulta claro que tampoco se encuentra entre sus objetivos primordiales intentar
describir y explicar la realidad mediante fórmulas o siguiendo modelos de leyes. Como tampoco tiene entre
sus metas la obtención de conocimientos puros desprovistos de posteriores utilidades como acontece con las
ciencias básicas o puras. No constituye por lo tanto una ciencia social o cultural, en la medida en que no busca
conocimientos desprovistos de utilidad, ni formula enunciados generales de carácter teleológicos. Tampoco es
una ciencia aplicada.

Esta noción de tecnología social, o también llamada tecnología para la inclusión social, no es reciente y está
asociada con la promoción de un desarrollo tecnológico acorde con las necesidades reales de la sociedad.
Cobró mayor impacto en las últimas décadas por el despliegue de las tecnologías de información y
comunicación, principalmente en países como Argentina y Brasil en los últimos años, han buscado redefinir la
5
Damus M.A. (2014)

5
noción de tecnología social y trabajan para su desarrollo e implementación en articulación con la educación, a
fin de promover la inclusión social. Por lo tanto, ante la evidencia de que la Bibliotecología hace uso de los
conocimientos y metodologías de la ciencia para generar productos y diseñar procedimientos con una
finalidad social, y se esfuerza por reducir la brecha informativa que excluye a importantes sectores de la
sociedad, Conforti y Artaza (2000) concluyen que puede ser incluida entre las disciplinas tecnológicas: “Todas
estas características permiten encuadrarla dentro del grupo de las tecnologías sociales cuyo objeto de control
y transformación es de orden cultural” . Justifican dicha afirmación en la finalidad que persigue el saber
bibliotecológico, el cual “tiene por objetivo la resolución de problemas prácticos y el control de un aspecto de
la realidad (…) La bibliotecología construye y diseña procedimientos tendientes a solucionar problemas
prácticos”.

1.3.3 La bibliotecología como ciencia

Para comprender la evolución de la bibliotecología como ciencia, debemos hacer un alto y conocer el devenir
de todo conocimiento científico.

1.3.4 Aportes o aspectos tomo la bibliotecología de los diferentes paradigmas

Del positivismo: las ciencias debían limitarse a describir el aspecto exterior de los fenómenos y prestar
atención a las verdades provenientes de la observación.

Del conductismo y de la psicología conductista

En un primer momento: aboga por el factor conductual como único elemento válido para la psicología, al ser
sólo ella susceptible a la observación y la medición.

En un segundo momento: consideraban que procesos mediadores como la personalidad, la motivación y el


conocimiento podían afectar la conducta de las personas.

En un tercer momento y desde la hermenéutica: la psicología cognitiva, una rama de la psicología que estudia
los procesos cognitivos, es decir, aquellos procesos relacionados con el conocimiento -percepción, memoria,
atención, pensamiento y lenguaje, que permiten al hombre tomar conciencia del entorno y del significado de
sus acciones, y que intenta responder a dos interrogantes: ¿cómo funciona la mente humana? y ¿cómo conoce
el hombre?

Del paradigma subjetivo: la necesidad de tratar el aspecto social, -donde tiene lugar el fenómeno
bibliotecológico-, y busca un tipo de pensamiento distinto al propuesto por el paradigma objetivista, propio de
las ciencias naturales. Con este, la búsqueda de la explicación sobre la realidad en las disciplinas informativas y
la Bibliotecología, como parte de ellas, transcurre hacia corrientes de pensamiento más abstractas, donde se
trata de hallar el porqué de las cosas.

Del paradigma físico o fisicalista: Centra su atención exclusivamente en aquello que pueda ser observado,
cuantificado y comprobado mediante la experimentación, como la conducta. No consideraban la categoría
“usuario” para el diseño de sus servicios; ellos, se diseñaban, a partir del sistema de información y los recursos
tecnológicos; por tanto, los usuarios eran un elemento más y debían adaptarse al sistema, configurado de una
manera, por así decirlo, arbitraria, al considerar sólo el criterio de los especialistas de información.

6
A mediados del siglo XX por el paradigma físico se cuestionó y se consideró el paradigma cognitivo, que al
decir de Linares Columbié, significó un reemplazo del conductismo, que había marcado la formación y
desarrollo de la disciplina informativa y la defensa de aspectos subjetivos orientados hacia el mundo interior
de los usuarios. Como consecuencia se pueden citar 2 dos etapas en cuanto a la orientación de la práctica
bibliotecaria:

1. Un primer momento donde las bibliotecas orientaron su gestión hacia el interior de la organización.

2. Un segundo momento en el que se parte de la categoría usuario y sus necesidades de información para el
diseño e implementación de sus servicios.

Del paradigma cognitivo: se observó un cambio progresivo en los estudios de los usuarios de la información;
no es suficiente abordarlo entonces, sólo sobre la base de variables neutrales o sociodemográficas; y
comienzan a llamar la atención aquellos eventos que ocurren en el orden emocional y cognitivo de los
usuarios; se presta mayor atención a las variables de tipo socio-psicológicas.

En palabras de Setien: “la Bibliotecología clasifica como una ciencia social en tanto su objetivo de estudio
responde a canales de comunicación cuyo origen y destino tiene carácter directamente humano, aunque
puedan mediar elementos tecnológicos”.

Del paradigma Social o Socio-cognitivo: ofrece una visión de la realidad informacional que se dimensiona al
universo sociológico y cultural, donde tiene lugar el paradigma analítico del dominio y su perspectiva
psicológica social.

Es una rama del saber científico que ofrece respuestas respecto a los fenómenos que la ocupan, sobre una
visión epistemológica social, puede considerarse como una disciplina científica o mejor aún como una ciencia
social.

El carácter científico de la Bibliotecología se basa en el reconocimiento de los aspectos de orden social y


cultural entre los cuales se debate el propio quehacer de la praxis bibliotecaria, que se determina, además, por
las relaciones intersubjetivas e interculturales sobre la base de un proceso diálogo, de comunicación.

La actividad bibliotecaria, así como el estudio teórico de esta disciplina no puede orientarse sólo hacia
procesos netamente técnicos y normalizativos de descripción bibliográfica para la recuperación de la
información, debe considerar, además, algunas cuestiones relativas a los actores que intervienen en ella, tanto
al usuario de los servicios de información como al propio bibliotecario que, “es un sujeto social con sus valores
y cosmovisión puestos en juego en contextos donde priman las relaciones intersubjetivas..., sus acciones
afectan a las comunidades y, al mismo tiempo, es afectado por ellas, en los procesos de intervención y
transformación socio-cultural”.

Por tanto, la Bibliotecología considera el estudio del fenómeno comunicacional, que se logra entre la
biblioteca como sistema de información y la comunidad, de la cual forma parte y actúa como un agente de
cambio, transformación y formación desde el punto de vista social y cultural.

La Bibliotecología, entonces, se inserta en el campo de las ciencias sociales, al orientar su cuerpo teórico y
epistemológico hacia un enfoque más complejo que incluye al sujeto y su contexto socio-cultural, así como las
mediaciones entre el sujeto y el conocimiento registrado.

7
2. La interdisciplinariedad de la Bibliotecología y los niveles, fases y etapas del fenómeno bibliotecológico

La interdisciplinariedad de la bibliotecología forma parte de las discusiones actuales ya que diversos autores
como Nuria Esther Pérez Matos y Emilio Setién Quesada en su trabajo Bibliotecología y Ciencia de la
Información: enfoque interdisciplinario presentan: la interdisciplinariedad de la bibliotecología según la Norma
Cubaba 39-03-87 y la interdisciplinariedad lineal de la Bibliotecología según de Guevara o disciplinas que la
conforman.

También nos ofrece en detalle los niveles fases y etapas del fenómeno bibliotecario

Para ampliar este tema, deberán consultar el artículo, trabajado


articuladamente con el espacio curricular Practicas I : Pérez Matos, N.E.
y Setién Quesada, E. Bibliotecología y Ciencia de la Información:
enfoque interdisciplinario
Recuperado en : http://scielo.sld.cu/pdf/aci/v18n5/aci021108.pdf

Una de las interdisciplinariedades que nos presentan L. Orera Orera en su trabajo “Manual de
Biblioteconomía”. La misma se puede observar en el siguiente gráfico:

Libro
estudia
Recopila
Clasifica
Conserva Bibliología

Biblioteca

Describe

Bibliografía

Organización
y
Administración

Biblioteconomía

Difunde información

Bibliotecología

8
3 La Bibliotecología y la Biblioteconomía

Orera Orera (1997) realiza una revisión de algunas de las conceptualizaciones efectuadas del término
biblioteconomía. Según Buonocore, comprende “... el conjunto de conocimientos teóricos y técnicos relativos
a la organización y administración de una biblioteca”. Para este autor, la biblioteconomía es una parte de la
bibliotecología. No es el único quien opina de este modo; también Currás y Becerra, entre otros, afirman que
la biblioteconomía está comprendida en la bibliotecología, porque solo se ocupa de un aspecto de ésta, la
organización de las bibliotecas.

Molina Campos (1995), pese a pertenecer al ámbito español y a utilizar el término Biblioteconomía, defiende
el uso de Bibliotecología por considerarla etimológicamente más apropiada y acorde con el desarrollo y el
alcance que presenta la disciplina en la actualidad. Sin embargo, su concepto resulta un tanto ambiguo, ya que
considera a la bibliotecología una ciencia y una técnica.

López Yepes (2009) también considera que Biblioteconomía y Bibliotecología se emplean en calidad de
sinónimos, por fuerza del arraigo y de la influencia cultural de determinadas áreas geográficas, más allá de sus
diferencias etimológicas y semánticas. Además, atribuye el conflicto terminológico a múltiples causas, entre las
que cuentan: - las características de la gestación de la disciplina en el ámbito anglosajón por un lado, y en el
europeo por otro; - los cambios sociales de las últimas décadas, la creciente demanda de información y el
factor tecnológico como motor de cambio; - el surgimiento de una nueva terminología vinculada con el mundo
electrónico, digital y virtual; - el interés por la información como objeto de estudio de múltiples disciplinas; - la
traducción de términos provenientes del área angloamericana a otros idiomas; - las heterogéneas políticas
académicas de los centros de enseñanza de la disciplina, entre otras. Independientemente del término
adoptado por los países o regiones, no se debe perder de vista el centro del debate, es decir el objeto de
estudio y la naturaleza de la disciplina. Para algunos su objeto primario será la institución que aglutina los
procesos y fenómenos involucrados: “en relación con la producción de conocimiento, tanto se prefiera
Biblioteconomía o Bibliotecología, el núcleo duro u objeto de estudio identificable, identificador e identitario
es la biblioteca, ya sea como entidad ideal, como construcción social, como dispositivo cultural, como sistema,
como proceso, como locus de conexiones inter-subjetivas, etc.” (Romanos, 2010, p. 84). En tanto, otros
entienden que si bien la biblioteca no deja de ser uno de los componentes esenciales, el núcleo de estudio lo
constituye la información que circula a través de este sistema y que posibilita la creación de nuevo
conocimiento, mediante su difusión y utilización.

Del mismo modo que en el contexto latinoamericano se refiere al binomio Bibliotecología-Ciencia de la


información, en buena parte de Europa la dupla casi inseparable es Biblioteconomía-Ciencia de la
documentación, o simplemente Biblioteconomía y Documentación. Al respecto, Liberatore (2006), en un
artículo publicado en la Revista de historia de la comunicación, introduce la siguiente acotación: “dentro del
bloque MERCOSUR, del cual Argentina es parte, se adopta el nombre de "Bibliotecología y Ciencia de la
Información" o, en el caso español, “Biblioteconomía y Documentación” 6

Para ampliar este tema, deberán consultar Nuria Esther Pérez Matos y Emilio
Setién Quesada en su trabajo Bibliotecología y Ciencia de la Información:
E enfoque interdisciplinario, amplían estos momentos de la bibliotecología o
F fenómeno bibliotecológico citando los aportes de Castillo Guevara y Leal
L Labrada, Sander en el Foro Social de Información, Documentación y Bibliotecas,
6
Damus ,M.A (2014)

9
Y los aportes de Ranganathan y de Melvin Dewey.

3.1 Breve historia de la biblioteconomía

Procede de las palabras griegas biblion “libro”, theke “caja” y nomos “ley”. Es el más usado en España.
Entonces, “es el conjunto de conocimientos teóricos y técnicos relativos a la organización y administración de
un biblioteca .Comprende una parte doctrinaria que estudia la teoría de la selección y adquisición de libros,
catalogación, clasificación, y el régimen económico-administrativo de la biblioteca: recursos, local y mobiliario,
personal y conservación de los libros y uso de la biblioteca. La biblioteconomía presenta entonces dos partes:
una primera parte: científico-técnica y una segunda parte: político-administrativa.”
La existencia de la biblioteconomía es muy antigua y su evolución se puede plasmar en dos etapas:
3.1.1 La Biblioteconomía Pre científica
Se corresponde con bibliotecas consistentes en depósitos de formatos bibliográficos y unos bibliotecarios
erudito-conservadores.
A esta fase corresponde la historia de la biblioteca que nace en el mundo oriental y se extiende al occidental.
Ejemplos, la biblioteca de Ebla, la de Asurbanipal, las casas de la vida egipcias, etc. Durante este período
destacaron las bibliotecas de Alejandría y Pérgamo, rodeadas de leyendas. La primera, creada por Ptolomeo I
Soter (366-283 a.C.), fue la más famosa de la antigüedad. Igualmente de famosa fue la Biblioteca de Pérgamo,
en la que según una opinión hoy desterrada, se comenzó a usar el pergamino. De Roma son muy conocidas las
bibliotecas del Palatino y la Octaviana en época de Cayo Julio César (101 a. C.; 44 d. C.).En la Edad Media, la
cultura quedó en manos de la Iglesia, floreciendo las bibliotecas monásticas. También en el mundo Islámico
surgieron importantes bibliotecas.
Durante este período comienza a desarrollarse la Biblioteconomía. Concebida como el arte de conservar los
tesoros de aquellas bibliotecas. Las técnicas para conservar los libros se remontan a la época de las primeras
bibliotecas.
Siguiendo con la evolución de las bibliotecas, la invención de la imprenta por Johannes Gutemberg en el siglo
XV tendrá gran trascendencia en dicha evolución. Los siglos XV y XVI fueron época de creación de grandes
bibliotecas; la Marciana de Venecia, La ambrosiana de Milán, la Mediceo Laurentiana de Florencia, etc. En el
siglo XVII crecieron las bibliotecas de la compañía de Jesús, las de importantes monasterios de Centroeuropa y
las grandes bibliotecas reales, origen de las bibliotecas nacionales, como la de Fontainebleau.
Generalmente se admite que fue Gabriel Naudé quién estableció en su obra de 1.927 los principios de la
Biblioteconomía moderna, en la cual Naudé se ocupa de diversos temas relacionados con la gestión de la
biblioteca.
Aunque la palabra biblioteconomía la usó por primera vez en 1.963 en su Bibliografía Política, parece que no se
impondría hasta pasados dos siglos, cuando el librero -bibliógrafo Leopold Constantin Hesse lanza su obra
Bibliotheconomie, publicada en 1.839 bajo el seudónimo de L.A. Constantin. En la obra el autor separa la
biblioteconomía de la Bibliografía y pone el acento en conocimientos técnicos que según él habían sido
infravalorados hasta entonces.

3.1.2 La Biblioteconomía científica:

10
La evolución de la Biblioteconomía desembocará en la llamada biblioteconomía científica, que no hará su
aparición hasta el siglo XIX. Se corresponde con unas bibliotecas-centro de información/educación/recreo
sociocultural, y con unos bibliotecarios/agentes difusores de la información. La Biblioteconomía en esta fase es
la ciencia de la difusión organizada y de la difusión de los fondos librarios y audio visuales.
En esta evolución, el momento decisivo es la aparición de la biblioteca pública en el mundo anglosajón, fruto
de una demanda social.
Posteriormente, se cita factores que contribuyeron a la evolución de la Biblioteconomía:
- La ALA nace en Filadelfia en 1.876, centrándose en aspectos relativos a las técnicas (cooperación,
normalización, formación profesional). En 1877 nace la L.A (Library Association), que cumple un papel decisivo
en la formación profesional de Inglaterra. La IFLA, que nació en Edimburgo en 1.927 y ha tenido una gran
influencia en la configuración de la doctrina Bibliotecaria.
- La institucionalización de la enseñanza de la Biblioteconomía, con la aparición de las escuelas de
bibliotecarios. En 1879, Melvin Dewey, bibliotecario del Columbia Collage, presentó a la American Library
Association un plan para organizar las escuelas de bibliotecarios. En 1.887 la Columbia School of Library
Economy, abrió sus puertas. 
- La publicación de las obras especializadas sobre Biblioteconomía ha contribuido, a la configuración de la
actual disciplina.

Carácter científico de la Biblioteconomía 


Desde el principio surge la polémica del carácter científico de la Biblioteconomía. Todo ello ha llevado a
contribuir a la consolidación de la misma como disciplina científica. Molina Campos hace una síntesis en la cual
nos basamos.
Para Schrettinger (Alemania 1.808) la Biblioteconomía es la disciplina científico encargada de coordinar la
búsqueda del libro y  el rápido acceso al mismo. Su discípulo Zoller, afianza esta postura al definir la
Biblioteconomía como la ciencia que se ocupaba de la ordenación y gestión de la Biblioteca.
Hubo autores como Ebert, que despojándola de su condición científico-técnico, reduce a gestión el proceso de
recuperación de la información. Petzholdt la define como la ordenación sistemática de todos los
conocimientos relacionados con las bibliotecas, pero elude la calificación de ciencia.
Una de las aportaciones más importantes como ciencia la ha llevado a cabo Ranganathan a través de su labor
docente e investigadora. Se destaca su obra Las cinco leyes de la biblioteconomía, publicada en 1.931 y son las
siguientes:
1-Los libros están para usarse.
2-A cada lector su libro.
3- A cada libro su lector.
4-Ahorrar tiempo al lector.
5-La biblioteca es un organismo en crecimiento.
Ranganathan considera la Biblioteconomía una ciencia social.
Ya mediados del siglo xx, la discusión sobre el carácter científico de la disciplina se tornó a que la formación del
bibliotecario tenga carácter universitario.
En el Convenio de Colonia celebrada en 1.969 se vuelve a plantear el carácter científico de la Biblioteconomía.
En ella Sauppe la considera como una ciencia y basa ese carácter en la investigación fundamentada en la
creciente importancia de las bibliotecas en la sociedad, así como la complejidad de la estructura bibliotecaria
y su progresiva tecnificación. En esta misma área, G. Pfluig niega a la biblioteconomía el carácter de ciencia.
Últimamente se ha comenzado a formar una corriente crítica respecto al carácter científico de la
biblioteconomía.

11
Independientemente de las distintas posturas de los autores del área anglosajona, hay que señalar, sin
embargo, que globalmente entre América e Inglaterra se da una diferenciación de la disciplina: Library Science
en EEUU y Librarianship en Gran Bretaña.
En el área sudamericana, D. Buonocore sólo atribuye un carácter científico-técnico a la parte de la
Biblioteconomía que comprende la teoría de la selección y adquisición de libros, la catalogación, la clasificación
y el régimen económico administrativo. La parte que se ocupa de administrarla y gobernarla para lograr una
mayor eficacia la considera más bien un arte.
La polémica sobre el carácter científico de la Biblioteconomía se refleja también en algunos autores franceses.
La Association des Bibliothécaires Francais la define como el estudio de las técnicas utilizadas en las
bibliotecas. B Richer, por su parte, especifica que no es una ciencia sino una técnica rigurosa. En España Emilia
Curras basa el carácter científico de la biblioteconomía en dos aspectos. En primer lugar la existencias de
teóricos sobre esta ciencia, basados en la investigación. Como consecuencia de dicha investigación nacen,
unos principios teóricos básicos que fundamentan la parte práctica. En segundo lugar, la utilización del método
científico, necesario para llevar a cabo esa investigación. La autora ha clasificado también las Ciencias de la
Documentación, y, por tanto, la Biblioteconomía, como ciencias experimentales, aplicadas, sociales,
humanísticas, históricas, deterministas, interdisciplinares y universales.
Jiménez Vela aboga por el carácter científico de la Biblioteconomía, calificándola como una disciplina empírica,
teórica, abierta, una disciplina cuya metodología es moralmente neutra, constituye una crítica  a la sociedad y
de los servicios culturales, y es una disciplina aplicada.

Carrión usa el término biblioteconomía para referirse a la ciencia que se ocupa de la biblioteca y propone
continuar con la utilización del mismo a pesar de la evolución que ha experimentado la disciplina.

3.1.3 La biblioteconomía especializada

Este concepto fue utilizado por primera vez en 1908 por John Cotton Dana, que junto con un grupo de
bibliotecarios se separó de la American Library Association y fundo la Special Libraries Association.
Sin embargo, se utiliza el término para designar a aquella parte de la biblioteconomía que se encarga del
estudio de los distintos tipos de biblioteca.
La biblioteca, que en un principio fue una, se fue diversificando con el paso del tiempo, a medida que iba
desarrollándose. La diversificación lograra pleno crecimiento en el siglo xx, que es cuando se ha dado una gran
expansión de las bibliotecas a causa, entre otros factores, de la elevación del nivel de vida, del desarrollo de la
enseñanza y, por lo tanto, disminución del analfabetismo y aumento del número de lectores, y del enorme
crecimiento de la producción de libros, revistas y otros documentos: la oferta de bibliotecas se ha
multiplicado. Por ello, los bibliotecarios en su misión pontificial de canalizadores de los mensajes de los
autores, han tratado de facilitar a cada lector el libro de interés para él y han consolidado varios tipos de
bibliotecas para hacer frente tanto a la gama cada vez más amplia de las apetencias del público lector como a
la gran cantidad de libros que aparecen delas materias más dispares. Hoy en día, no existe una biblioteca
única, sino distintos tipos y variedades que se adaptan a las necesidades de los usuarios y hay una parte de la
biblioteconomía que se encarga de esta variada tipología.

3.1.4 La biblioteconomía internacional


En paralelo a lo que es la bibliotecología internacional, este último tramo es relativamente nuevo. John Harvey
la definió como “el conjunto de la relaciones bibliotecológicas internacionales”.

12
Las cusas nos remiten a la creciente demanda de los lectores, el volumen cada vez mayor de publicaciones y la
poca predisposición de las naciones y de la comunidades a enfrentarse con las consecuencias financieras que
entrañan unos servicios bibliográficos óptimos. El problema se complica todavía más por el hecho de que, por
su misma naturaleza, una biblioteca es siempre incompleta.
M. Carrión expone al respecto “Lo internacional es el verdadero campo de la cooperación. La cooperación que
podríamos llamar “interior” puede moverse por planes y, tratándose de bibliotecas sostenidas por dinero
público, ser dirigida de hecho, por quien dispone de los medios financieros. La cooperación internacional, por
su parte, suele moverse hacia metas muy concretas, financiándose con los medios aportados por cada
participante y tener un apoyo doctrinalmente sólido. Este apoyo doctrinal constituye a base de los que
podemos llamar biblioteconomía internacional” 7

4- Objeto de estudio de la Bibliotecología y la biblioteconomía

Objeto de estudio de la Biblioteconomía Objeto de estudio de la Bibliotecología

Citando a Carrión, el objeto de estudio de la Citando a Miguel Ángel Rendón .La Bibliotecología tiene
Biblioteconomía es la biblioteca: La biblioteca existe como objeto de estudio al Sistema Informativo
para lograr unos determinados objetivos, para lo cual Documental que está formado por los siguientes
sus elementos están sometidos a una organización, elementos: información, documento, institución
relacionándose con el entorno constituido por los informativa documental y usuario, y por la dinámica de
usuarios. En este último punto la biblioteca ha variado dicho sistema.
en forma importante, relacionándose no sólo con los A continuación se definirán los elementos:
usuarios, que son el entorno más inmediato, sino con Información: entidad ideal resultante de la síntesis que
otras bibliotecas. Surge una característica de la realiza el sujeto al estructurar los datos que recibe.
biblioteca, que es la de la cooperación. Una biblioteca Posteriormente ésta se objetiva y llega a formar el
no puede ser autosuficiente, por lo que de algún modo mundo posible de la información en el cuál habitan
deberá arbitrarse a medidas para  que las demás ciertos entes y rigen determinadas leyes y relaciones.
bibliotecas dispongan, además de sus propias Documento: producto social y cultural de la objetivación
colecciones, de las colecciones de las demás. del espíritu humano y del pensamiento. Tiene como
En una biblioteca se puede visibilizar cinco apartados, función conservar la memoria social.
que se corresponden con: la colección, la organización, Institución informativa documental: es por un lado un
los servicios de la biblioteca, la cooperación y la agente dentro del proceso de comunicación social y de la
tipología bibliotecaria. Los tres primeros representan comunicación personal donde el autor encuentra a su
la esencia de la biblioteca, ya que sintetiza la misión de lector; y por otro, es el espacio que propone las
la misma y del bibliotecario, y últimamente se las condiciones necesarias para satisfacer las necesidades de
reúne bajo el término único de desarrollo de información documental del usuario. También es el lugar
colecciones, cuyo significado se resumen en que la donde no solo se conserva la información intelectual
biblioteca selecciona los conocimientos que interesan impresa de la humanidad y donde se puede dar el
a sus usuarios, y que se recogen en documentos, y los autoconocimiento del espíritu humano y permite el
organiza para hacerlos accesibles. Los dos últimos desarrollo.
elementos del concepto de biblioteca, la cooperación Usuario: es el origen y fin de la actividad bibliotecaria. Es
y la tipología bibliotecaria, se han ido desarrollando a quien motiva el proceso informativo con su deseo de
medida que el mundo de la información y, por ende la satisfacer una necesidad de información y solo con la
misión de la biblioteca se ha ido complicando. satisfacción de esta culmina el proceso.

Independientemente de la diferencias señaladas por los autores, Bibliotecología y Biblioteconomía constituyen


con frecuencia sinónimo, determinando el usos de uno u otro termino el área cultural de que se trate por
7
Orera Orera L ( 1998)

13
ejemplo, el área sudamericana emplea el termino Bibliotecología, mientras que en España el término más
extendido es Biblioteconomía.

Para ampliar este tema, podrán consultar la videoconferencia de Miguel


Ángel Rendón Rojas
Conferencia: El objeto de estudio de la Bibliotecología no es la biblioteca.
Recuperado en :https://www.youtube.com/watch?v=zEDvhnJA2ng

5. Aproximación conceptual a la Ciencia de la Información

Entre 1950 y 1970 aproximadamente, se desencadenó una serie de transformaciones científicas y tecnológicas
que impactaron fundamentalmente en el aparato económico y político de los países industrializados,
caracterizada por la fuerte necesidad de utilizar la información como motor productivo y ésta pasó a ocupar el
lugar que antes poseían el capital financiero, las materias primas o la energía.

Este fenómeno dio lugar a lo que muchos autores bautizarían como “sociedad de la información”, una
sociedad en la que la información, mediante la aplicación de las tecnologías de información, forma parte activa
de la vida cotidiana de las personas y determina hasta cierto punto su desarrollo socio-económico y cultural.

El interés puesto principalmente en la información especializada como insumo para la actividad científica,
tecnológica y económica, ocasionó la aparición de nuevos saberes y disciplinas. Del mismo modo, la necesidad
de estudiar en profundidad a la información, en tanto elemento significativo para el desarrollo humano,
desencadenó el surgimiento de la Ciencia de la información, creada precisamente con la finalidad de atender
este aspecto de la información.8

El nacimiento de la Ciencia de la información se sitúa oficialmente en Estados Unidos en 1962, en un contexto


muy particular y como resultado de un proceso socio histórico complejo, en el cual se destacan la explosión de
la información, el enfrentamiento político de Estados Unidos con la Unión Soviética, el carácter estratégico de
la información y la aparición de las tecnologías computacionales. 9

Una de las primeras definiciones realizadas de esta nueva ciencia fue la de Robert Taylor (1966): “La Ciencia de
la Información se encarga de mensajes almacenados o registrados, de su creación como documentos, de su
propagación y uso”. En estas primeras conceptualizaciones había una anuencia respecto al objeto de estudio y
a la naturaleza de la disciplina; su etapa fundacional se caracterizó por considerar a la información como algo
mensurable, objetivo, susceptible de recuperarse, organizarse, almacenarse y difundirse.

Linares señala que la finalización del siglo XX significó una fase de ruptura y diferenciación para la Ciencia de la
Información. A partir de 1980, se comienza a cuestionar el paradigma positivista que enmarcó los primeros
años de la ciencia y se emprende una progresiva aceptación del paradigma interpretativo, atendiendo más a la
influencia del sujeto e indagando otros modos de entender la objetividad científica.

8
Damus, M.A (2014)
9
Idem

14
En la etapa posterior a la fundacional, denominada crítica, se puede observar la tendencia de circunscribir la
información en un proceso comunicativo. Se explicita su vinculación con el campo social, así como la presencia
del componente humano, no solamente como un usuario sino como potencial productor de nuevo
conocimiento: “La ciencia de la Información estudia el mundo de la información registrada y producida por la
acción humana.”10

La Ciencia de la Información se planteó su pertenencia a las ciencias sociales cuando comprendió a la


información como un fenómeno inserto en espacios económicos, sociales y culturales.

Los principios rectores de este nuevo enfoque pueden apreciarse en la siguiente definición: “La Ciencia de la
Información trata los problemas de la efectiva comunicación de conocimientos y registros de conocimientos
entre seres humanos en el contexto de usos y necesidades sociales, individuales e institucionales de
información”. La bibliotecología concentraba la mayor parte de la actividad informativa hasta mediados del
siglo XX, pero paulatinamente se profundizaron las diferencias entre las bibliotecas tradicionales, ocupadas en
atender necesidades informativas culturales y educativas generales, y las bibliotecas especializadas que debían
resolver problemas vinculados con el manejo de la información científica y tecnológica. Si se concibe a la
bibliotecología como el campo del saber que se ocupó tradicionalmente del conocimiento registrado, dicho
conocimiento no es otra cosa que información organizada y plasmada en un soporte a fin de ser comunicada.
Por lo tanto, como todas áreas involucradas con la información, experimentó una considerable evolución en
las últimas décadas, impulsada por las transformaciones tecnológicas y sociales. Fundamentalmente, el
surgimiento de la Ciencia de la Información generó un estado de incertidumbre al interior de la disciplina
bibliotecológica y la pérdida de su hegemonía, porque la nueva ciencia aparecía como un campo científico
consolidado, con un objeto de estudio definido -cercano al de la bibliotecología- y con objetivos en esencia
similares: recuperar y difundir información. Incluso, algunos autores opinan que la ciencia de la información no
constituye más que una nueva denominación para las actividades que realiza la bibliotecología, o
sencillamente que la bibliotecología desapareció, reemplazada por la ciencia de la información. Otros
defienden la idea de ámbitos del conocimiento con objetivos y métodos diferentes pero que se relacionan.
Morales López (2005) desecha la idea de que la ciencia de la información venga a sustituir a la bibliotecología,
o que la bibliotecología esté subordinada a aquella, ya que entiende que la ciencia de la información nació
como una disciplina independiente, posee intereses diferentes y sus saberes originales no son los del objeto
del estudio de la bibliotecología.

Rendón explica que cuando la disciplina bibliotecológica se enfrentó a los efectos de los avances tecnológicos,
la especialización de la ciencia, la globalización y la virtualidad, entre otros, debió replantearse la visión
tradicional que sostenía (ligada al estudio del libro, la biblioteca y los bibliotecarios) y considerar fenómenos
abstractos, como la información, como objeto de estudio. Para algunos, esto significó la aparición de una
nueva ciencia, mientras que otros lo tomaron como un viejo nuevo objeto de estudio de una antigua disciplina.
“Cuando se reconoce la aparición de una nueva ciencia, la propuesta es que ese lugar sea ocupado por la
ciencia de la información (…) En el segundo caso, un viejo objeto de estudio de una antigua disciplina, no se
acepta la aparición de una nueva ciencia sino que se reconoce la continuidad de la bibliotecología” 11
10
Damus, M.A (2014)
11
Idem

15
Lo cierto es que la aparición de la ciencia de la información vino a generar cierto desasosiego en el mundo
bibliotecario y en el vasto campo de la información documental; ello se refleja, en principio, en la proliferación
de denominaciones para referirse tanto a cada una de las disciplinas por separado como a sus variadas
combinaciones.

Fuente. Damus, M.A (2014, p. 333)

Para continuar la comprensión del tema, deberán consultar el artículo,


trabajado articuladamente con el espacio curricular Practicas I : Pérez Matos,
N.E. y Setién Quesada, E. Bibliotecología y Ciencia de la Información:
enfoque interdisciplinario
Recuperado en : http://scielo.sld.cu/pdf/aci/v18n5/aci021108.pdf

6 Tendencias actuales de las Ciencias Informativas documentales

Tomando el trabajo de Miguel Ángel Rendón Rojas (2013) desarrollaremos las tendencias actuales de
las mismas

6.1 Bibliotecología

Disciplina Tendencias actuales Autores

16
representativos

Se presentan tres tendencias: A. Serrai


1-La posición consideraba de inmediato que la bibliotecología debía D. Buonocore
subordinarse a la ciencia de la información, e incluso que la bibliotecología E. Setien
debía desaparecer, como ocurriría en el futuro con el soporte de información E. Molina
Bibliotecología que privilegiaba: el libro. V. Morales
2-La posición desconocía la existencia de una ciencia de la información, al grado
que busco por todos los medios posibles cerrarse incluso a las innovaciones
derivadas de la tecnología de la información, con el temor de que con ello
desaparecería un elemento vital de la cultura humana: el libro.
3-La posición aposto por una relación equilibrada entre dos disciplinas que
compartían algunos elementos en sus objetos de estudio.
Definición Según el glosario ALA: conocimientos necesarios para seleccionar, adquirir y organizar la
información registrada, utilizándola para cubrir las necesidades y demandas de los lectores.
Rendón Rojas (2013) ciencia referida a la actividad bibliotecaria, en especial la relacionada con
la lectura, los usos del libro, etc., que configuran un sistema de estructuración y
funcionamiento propio, caracterizado por la organización documental que se encarga de la
trasmisión, el flujo de la información registrada y la comunicación de impresos.
Ramírez Ibarra I. (2016) en su trabajo Tres perspectivas globales en Bibliotecología y ciencia de
la Información presenta tres perspectivas:
-Bibliotecario-usuario de hoy, usuarios-bibliotecarios de mañana
-La postura de la BCI en América Latina respecto de los países desarrollados
-La BCI debe preguntarse permanentemente sobre sí misma.

Para ampliar este tema, deberán consultar el artículo, trabajado


articuladamente con el espacio curricular Procesos técnicos I :
Ramírez Ibarra (2016) .Tres perspectivas globales en Bibliotecología y
Ciencia de la Información.
Consultado en: http://revistascientificas.filo.uba.ar/index.php/ICS/article/view/
2251/2051

6.2 Documentación

17
Autores
Disciplinas Tendencias actuales representativos

Se evidencian dos grandes perspectivas: la primera, es la de P. Otlet, quien la S.


considera como una ciencia, doctrina y técnica que estudia los documentos, y Ranganathan
hace uso de operaciones bibliográficas, para la organización, ordenación y J. Shera
clasificación de los mismos; la concibe además como un cuerpo sistemático de P. Otlet
conocimientos integrado por la bibliografía, la biblioteconomía, la archivología V. Correa
y la museología. La segunda, la de S. Ranganathan, la ve como una función R. Coll
especializada de la bibliotecología, de carácter técnico, que aborda los datos, la J. Lopez
información registrada, almacenada y organizada mediante las técnicas y
análisis de correlación; su objetivo es difundir la nueva información a la
comunidad de investigadores.
Actualmente subsisten las siguientes posiciones:
1-La española, que considera que es la ciencia que abarca el estudio y
Documentación

organización de todos los soportes/documentos de información existentes.


Debido a que la consideran parte sustancial para el apoyo de la investigación
científica, llegan a aseverar que es la “ciencia para la ciencia”.
2-Es un área de una disciplina de mayor envergadura que se dedica al estudio
de los documentos, por lo general se la subordina a la ciencia de la información
o a la ciencia de la biblioteca y la información.
3-Al ser una derivación de la bibliografía, la documentación surgió cuando los
libros ya no eran la principal vía para la comunicación de conocimiento útil
para la investigación científica. Al aparecer nuevos soportes de la información,
la documentación deja de tener razón de ser y es sustituida por la ciencia de la
información.
4-La documentación se considera como una técnica, doctrina y técnica que
estudia los documentos, los que son organizados, ordenados y clasificados
mediante operaciones bibliográficas; se trata de informar con ayuda de la
documentación.

Definición P. Otlet: una ciencia, doctrina y técnica que estudia los documentos, y hace uso de
operaciones bibliográficas, para la organización, ordenación y clasificación de los mismos; la
concibe además como un cuerpo sistemático de conocimientos integrado por la bibliografía, la
biblioteconomía, la archivología y la museología.
S. Ranganathan: función especializada de la bibliotecología, de carácter técnico, que aborda los
datos, la información registrada, almacenada y organizada mediante las técnicas y análisis de
correlación; su objetivo es difundir la nueva información a la comunidad de investigadores.

18
6.3 Ciencia de la Información

Disciplina Tendencias actuales Autores


representativos

Actualmente se evidencian las siguientes tendencias: E.C. Shannon


1-Cientifica: estudia la información con el fin de poder encontrar las leyes que Holmstrom
Ciencia de la información
la rigen y los modelos teóricos a través de los cuales puede representarse. Mooers
2-Tecnologica: basada en los estudios de la ciencia pura en torno a la J.Farradane
información, considera que uno de los motores vitales de la información se
encuentra en la tecnología.
3-Social: todos los procesos de la información se ubican en un entorno social,
el cual es necesario estudiar.
4-Documentalista: estudia los procesos a que debe someterse la información
para ser puesta a disposición de los usuarios, con el fin de mejorarlos.

Definición H. Borko (1968): disciplina que investiga las propiedades y el comportamiento de la


información, las fuerzas que rigen su flujo y los métodos para procesarla, a fin de obtener
accesibilidad y utilización óptimas. Está interesada en un conjunto de conocimientos
relacionados con el origen, colección, organización, almacenamiento, recuperación,
interpretación, transmisión, transformación y utilización de la información.
Rendón Rojas (2013): producto de la tercera revolución de la información, y con esto se hace
referencia a ese momento histórico en el que la información deja de estar circunscrita a un solo
soporte, y al desarrollo de tecnologías que permiten el almacenamiento y manejo de grandes
volúmenes de información.

6.4 Archivística

Disciplina Tendencias actuales Autores


representativos

19
Se evidencias dos perspectivas: E. Casanova
1-La custodial, patrimonialista, historicista y tecnicista que se centra en la W. Leesch
custodia, conservación y restauración del soporte documental como función A. Heredia
básica de la actividad profesional; enfoca su acción en la preservación de la A.M .Da Silva
cultura “erudita”, “letrada” o “intelectualizada” ( las artes, las letras y las & F. Ribero
ciencias) ; hace énfasis en la memoria como fuente legitimadora del Estado-
Nación y de la cultura como refuerzo de identidad del mismo Estado y el
respectivo Pueblo; le da una importancia creciente al acceso al “contenido” a
través de instrumentos de búsqueda( guías, inventarios, catálogos e índices) y
de la profundización de los métodos de clasificación y de indexación; y
considera relevante la división profesional entre archivista, el bibliotecario y el
documentalista.
2-La informacional, científico y post-custodial que centra la valorización de la
Archivística

información en cuanto fenómeno humano y social, y de la cual se deriva y


orienta su materialización en cualquier soporte; opta por un dinamismo
informacional, contrario al “inmovilismo” documental, con lo que este se
traduce por el trinomio creación/selección natural/acceso-uso; propende a
interpretar y comprender la información social a través de los modelos
técnicos-científicos cada vez más exigentes y eficaces, y también a las reglas y
procedimientos “neutrales” de creación, clasificación, ordenación y
recuperación, sustituyendo la lógica instrumental que encierra las expresiones
“gestión de documentos” y “gestión de la información”, por la lógica científico-
comprensiva de la información en la gestión, es decir la información social está
implicada en el proceso de gestión de cualquier entidad u organización, de este
modo, las practicas informacionales transcurren y se articulan con las
concepciones y prácticas de los gestores , y con la estructura y cultura
organizacionales.

Definición Rendón Rojas(2013) disciplina aplicada del campo de la Ciencia de la Información, que estudia
los archivos, concebidos como la información social materializada en cualquier tipo de soporte,
configurado por dos factores esenciales-la naturaleza orgánica(estructura) y la naturaleza
funcional(servicios/uso)- que se asocia a un tercer factor: la memoria.

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