Kostas Floros - Kiklos Alpha. El Movimiento Libertario Español Durante La Dictadura
Kostas Floros - Kiklos Alpha. El Movimiento Libertario Español Durante La Dictadura
Kostas Floros - Kiklos Alpha. El Movimiento Libertario Español Durante La Dictadura
KYKLOS ALPHA
1939‒1977
Editan:
Otoño 2014.
http://www.solidaridadobrera.org/ateneo_nacho/biblioteca.html
CONTENIDO
1 La traducción del título original griego es "Las personas que circunscribieron la A"
actuaron en el periodo relatado, Salvador Gurucharri me
preguntó sobre el tamaño que tendría el libro que iba a
escribir. Todo orgulloso le respondí que sería de al menos
quinientas páginas y sonriendo me dijo irónicamente: Así que
se trata de una vulgarización de la historia, ¿eh? Cuanto más
avanzaba en mi investigación más comprobaba que tenía toda
la razón. Este libro es una cartografía muy concentrada de una
serie de hechos y procesos muy complejos. Contiene versiones
muy simplificadas y seguramente habrá descuidos ‒no
intencionados‒. A pesar del rigor y la diversidad de fuentes es
razonable que también tenga errores. Lo único a lo que me
comprometo es que no se oculta nada deliberadamente
‒incluso se describen pormenorizadamente hechos que no
honran al movimiento anarquista‒ y que he tratado de hacer
referencia a todas las perspectivas concernientes a los hechos,
con independencia de con cuál estoy de acuerdo. Eso significa
que este libro es “históricamente objetivo”, como les gusta
decir a los diversos historiadores, científicos u otros apologetas
de la democracia burguesa. Parafraseando por orden a
Clemenceau, Vidal‒Naquet y Amorós, quiero a mi vez decir que
la historia de la guerra social y de clases es un asunto
demasiado serio para dejarlo en manos de los historiadores
profesionales.
Atenas, 19/3/2010.
P.D.1
P.D.2
P.D.3
2 Después de haber editado el libro, me hice con el minucioso libro Hijos de una
Guerra, de Jorge Marco, que en la página 74 hace referencia a que solamente está
comprobado que Pepe Quero estaba afiliado al Partido Sindicalista durante la Guerra Civil
y que Antonio era miembro de la UGT antes de la guerra. Jorge Marco, Hijos de una
Guerra. Los Hermanos Quero y la Resistencia Antifranquista, Granada: Comares, 2010.
P.D.4
3 Vid. Nettlau, Max, Itnopíai; tpi; avapxíai; [Historia de la anarquía], Atenas, Dieznís
Vivliociki, 1988, ps. 104112, 138‒152, 205‒233. En el texto To Xáooi; ron Octvéxt [El
error de Fanelli], vid. Colombo, Eduardo, Lanza, Luciano, Camacho, Diego, Berti, Nico,
Itraavía 1936. nóxep.05 xat Emxvátacrq [España 1936, guerra y revolución], Atenas,
Elefceriakí Cultura, 2006, ps. 19‒27.
4 El término de “trágica” lo consagraron los periodistas de la época. Los participantes
y sus contemporáneos revolucionarios la denominaron “Semana Gloriosa” y “Semana
Roja”. La insurrección duró desde el 26 al 31 de julio y durante ella setenta y cinco
edificios eclesiásticos (iglesias, monasterios, capillas, etc...) fueron entregados a las
llamas. Los insurrectos levantaron más de doscientas barricadas en unas pocas horas y
para la restitución del orden llegaron diez mil soldados de otras regiones del país.
Oficialmente los muertos llegaron a ciento diecisiete (ciento cuatro del lado de los
insurrectos), mientras que fuentes anarquistas de la época hablaban de seiscientos
muertos. Hay una vivida descripción de los hechos en La Barcelona de la dinamita, el
plomo y el petróleo, 1884‒1909, Barcelona, Grupo de Afinidad Quico Rivas, 2009, ps.
103‒149.
Francisco Ferrer y de otros cuatro revolucionarios fue su
culminación.
6 Los somatenes, una singular milicia armada, fueron disueltos durante la Segunda
República española para reconstituirlos Franco después de 1944, con la voluntad de batir a
la guerrilla.
7 Gómez Casas (1986) habla de cien muertos y quinientos heridos de la CNT, ibid. p.
60, mientras que Peirats da una lista de ciento seis muertos que considera incompleta. Solo
en 1921 se realizaron treinta atentados mortales contra jefes, cincuenta y seis contra
policías y ciento cuarenta y dos contra obreros. En dos años estallaron más de doscientas
bombas en blancos de uno y otro lado. Vid. Marín (2002) p. 43. En griego hay una amena
descripción de los sucesos en Abel Paz (1999) ps. 34‒52.
importantes miembros, como el secretario general del comité
nacional, Evelio Boal, Antonio Feliú y Salvador Seguí 8, conocido
también como el Noi del Sucre, pero dio a conocer a una nueva
generación que dotó de personal a los grupos de autodefensa
de la organización, respondiendo a la represión estatal y
patronal. Entre ellos destacaban Pedro Mateu 9, Rafael Torres
Escartín 10 , los hermanos Ascaso, Marcos Alcón 11 ,
Buenaventura Durruti, Juan García Oliver, Ricardo Sanz 12 y
Gregorio Suberviola. 13
8 Salvador Seguí Rabinat (1887‒1923) fue asesinado el 10 de marzo de 1923. Había sido
cofundador de la CNT y uno de sus más reconocidos miembros. Opuesto desde el
principio a la Tercera Internacional, recibió críticas en los duros años del pistolerismo por
su actitud política conciliadora. Después de dos atentados frustrados, los paraestatales
pusieron fin a su vida, una vida repleta de encarcelamientos, pero también de lucha
incesante.
9 Pedro Mateu Cusido (1897‒1980) participó en 1921 en el asesinato del presidente
Dato. Fue puesto en libertad en 1931, combatió en la Guerra Civil y fue encarcelado tras
los sucesos de mayo de 1937 por la ocupación ilegal del arsenal. Exilado en Francia,
colaboró con grupos de guerrilleros anarquistas, fue torturado por los franceses en 1951 y
vuelto a encarcelar en 1959 por su relación con la lucha armada antifranquista.
10 Rafael Liberto Torres Escartín ejecutó junto con Francisco Ascaso al cardenal
Soldevila, participó en numerosas acciones contra la policía y fue detenido tras el gran
robo del Banco de España de Gijón en 1923. Fue encarcelado, torturado y trasladado en
1931 a un psiquiátrico. En 1939, el primer día de la entrada de los fascistas en Barcelona lo
fusilaron a la puerta del psiquiátrico.
11 Marcos Alcón Selma (1902‒1997) era miembro de los grupos armados de
autodefensa y luego de las organizaciones sindicales de la CNT. Sustituyó a Durruti en el
Comité de Milicias en 1936. Después de la derrota emigró a Méjico y se opuso a las tesis
reformistas, participando en el movimiento hasta su muerte.
12 Ricardo Sanz Asensio (1898‒1996) fue un miembro fundamental de los comités
armados de defensa y soportó muchos encarcelamientos. Tras la muerte de Durruti asumió
la comandancia de su columna hasta el fin de la guerra. En el exilio se alineó con la
tendencia reformista.
13 Gregorio Suberviola Baigorri (1896‒1924) participó intensamente en la vida
organizativa del movimiento, pero también protagonizó una serie de robos para financiar a
la CNT. Fue asesinado por la policía, junto a Marcelino del Campo, en su escondrijo de
No olvidemos que en ese mismo periodo la Revolución de
Octubre estaba en proceso y seguramente también influyó a
los obreros españoles. La CNT en un principio adoptó una
actitud crítica ante los sucesos que tenían lugar en Rusia,
aunque en 1919 anunció su participación en la Tercera
Internacional. Pero un grupo de jóvenes miembros que eran
filobolcheviques sacaron provecho de la situación (régimen de
ilegalidad, represión, ejecuciones y detenciones) y ‒dado que
eran desconocidos para la policía‒ ocuparon cargos en los
comités de la organización, sin representar a ninguna
tendencia importante. Los más conocidos eran Andrés Nin y
Joaquín Maurín14. Ambos, con Jesús Ibáñez, Hilario Arlandis y
Gastón Leval, compusieron la delegación de la CNT en la
URSS 15 . Después del regreso y como las libertades
constitucionales habían sido restablecidas, en el congreso de la
CNT en Zaragoza en junio de 1922, la tendencia
anarcosindicalista no dejó ningún margen al más mínimo
Barcelona.
14 Andrés Nin, fundador posteriormente con Maurín del POUM, fue asesinado por los
estalinistas tras los sucesos de mayo de 1937. Antes de la fundación del POUM, Maurín
dirigió el BOC, un partido catalán obrero y campesino que colaboraba con la Unión
Soviética estalinista. Más información sobre el POUM, de una fuente trotskista, puede
encontrarse en griego en Félix Morrow, Exaváataaq Kat Avrexaváataat arqv laxa vía
[Revolución y contrarrevolución en España], Atenas, Pali Eigatikí, 2006. Como muchos
otros izquierdistas antiestalinistas cuando analizan la Revolución Española, Morrow da al
POUM dimensiones mayores de las que en realidad le corresponden, mientras que sus
comentarios contra los anarquistas muestran más rabia militante que una excelente labor
de análisis, como se dice en el prólogo. La frecuencia de referencias al POUM por parte de
los izquierdistas contemporáneos, reside en que, no pudiendo alinearse históricamente con
el partido comunista estalinista o los socialistas, pusieron los ojos necesariamente en este
pequeño partido sin importancia (con sus enormes errores de bulto y sus dirigentes de
dudosa calidad) para identificarse.
15 Gómez Casas, apoyándose en el testimonio personal de Manuel Buenacasa, dice que
a la delegación se le privó del derecho de representación oficial antes de que partiese. Vid.
Gómez Casas (1986), p. 61.
bolchevismo y se retiró de la Tercera Internacional para
incorporarse a la anarcosindicalista AIT recién fundada, con
sede en Berlín.
18 Informaciones que analizan ese primer congreso, Gómez Casas (1986), ps. 107‒116.
alteración social, debida tanto a la crisis económica que
castigaba al país como a la actividad creciente de los sindicatos.
21 Vid. Íñiguez (2001) ps. 602‒603, pero también Gómez Casas (1986). ps. 125‒129.
22 Nos referimos al asesinato de veinte trabajadores de la Confederación durante el
ataque de la Guardia Civil a las oficinas de la CNT en Sevilla en julio de 1931 para
ocuparlas. Los trabajadores participaban en una huelga en la que se produjeron disturbios.
apoyo manifiesto del gobierno a la tendencia de los Treinta,
con el encarcelamiento selectivo de miembros de la FAI y la
publicación de artículos ‒por parte de la prensa
gubernamental‒ contra las prácticas violentas que la FAI
defendía y en defensa de las tesis sindicalistas, orientó a la
Confederación hacia la tendencia de la FAI. En 1931 esa
postura era sostenida no solo por la propia FAI, sino también
por otros polos de influencia dentro de la CNT y,
especialmente, por la familia Urales y sus publicaciones, así
como por los reconstituidos Solidarios, que habían cambiado
su nombre por el de Nosotros en 1931.23
30 Isaac Puente Amestoy (1896‒1936) era médico y eminente teórico del comunismo
libertario. De los más grandes intelectuales del movimiento, fue encarcelado
repetidamente y ejecutado los primeros dias del golpe de estado. Tras su ejecución, un
tribunal franquista lo condenó a muerte.
31 Paz da cuenta de ochenta y siete muertos y seis mil encarcelados, vid. Paz (1999),
tomo I, p. 215, aunque la cifra real de encarcelados por la insurrección ascendió a
setecientos y los seis mil que refiere debían de ser el conjunto de los detenidos. Vid. Peirats
(1988), tomo I, p. 78.
32 Pseudónimo de Baudilio Sinesio García Fernández. Nacido en España en 1897, a
corta edad emigró con sus padres a la Argentina. Regresó a España a estudiar, se vinculó
con el movimiento y a continuación vivió cuatro años en Alemania antes de regresar en
1926 a la Argentina. Murió en Barcelona en 1983.
escrita. Fundó junto con otros compañeros el grupo anarquista
Nervio y, con la ayuda del grupo Germen de Juan Manuel
Molina ‘Juanel’, Santillán asumió el cargo de secretario del
comité peninsular de la FAI. En ese periodo la FAI estaba siendo
golpeada por las detenciones y se caracterizaba por una
desorientación teórica que reunía en sus filas a seguidores de
la acción directa (Nosotros, etc...), pero también a conocidos
reformistas y seguidores de la participación política (Fidel Miró,
Horacio Prieto). Santillán era moderado y defendía una
percepción tecnocrática del comunismo libertario. Había
escrito muchos libros sobre la gestión de la producción y la
importancia revolucionaria de la industria y de la tecnología,
aunque creía en la necesidad de un consejo económico central
que coordinase la economía postrevolucionaria 33. Finalmente,
era defensor de una alianza de la CNT con la UGT.
33 Amorós considera que sus últimas tesis eran cercanas a las de los socialdemócratas.
Vid. Amorós (2003), p. 89.
34 Todas estas tesis se expresaban abiertamente en los periódicos del movimiento.
Juzgando por el hecho de que nunca la base de la CNT decidió colaborar con el PSOE,
podemos suponer que el punto de vista de Jaume Balius en Tierra y Libertad representaba
a gran parte de los miembros de la CNT: [...] los socialistas, los eternos traidores del
proletariado y el verdugo mayor que ha conocido el proletariado ibérico en el periodo
1931‒1933. Amorós (2003), p. 64.
compromiso revolucionario público, al que seguiría la firma de
un acuerdo básico de afianza de clase. La UGT ni siquiera
respondió. En el siguiente pleno nacional, en junio, se mantuvo
esa postura de la CNT, pero se supo que la organización local
de Asturias había suscrito por separado un pacto con la UGT
local.
36 La Guardia Civil es un cuerpo militar de vigilancia del campo que fue creado en el
siglo XIX y existe hoy día. Fue utilizado contra los contrabandistas y los bandoleros
tradicionales y, tras el ascenso del movimiento popular, constituyó el arma de represión
por excelencia de las reivindicaciones y las insurrecciones agrarias. Tras la Guerra Civil
cayó sobre ella el peso de la aniquilación de los guerrilleros, por eso llegó a contar con
cerca de sesenta mil miembros.
37 Una buena descripción de los hechos hacen Paz (1986), tomo n, ps. 19‒93 y Thomas
(1971), tomo I, ps. 145154. Esas cifras son más bien pequeñas, si tenemos en cuenta que el
poder oficial quería rebajar ‒en la medida de lo posible‒ el suceso.
38 Se calculaba que los políticos presos eran cerca de treinta mil en 1935, la mayoría de
los cuales eran miembros de la CNT. Vid. Amorós (2003) p. 61.
que todos sabían que era ya casi seguro un golpe de estado
militar. Incluso hasta los partidarios de la acción directa, como
Durruti, optaban por una disminución de las huelgas y de las
prácticas insurreccionales, para que el movimiento no sufriese
más encarcelamientos de militantes en un momento tan
decisivo. Los militantes tenían que preparar su arsenal y
organizarse para la victoria de la revolución.
39 La Falange era el partido que había fundado José Antonio Primo de Rivera ‒hijo del
exdictador‒ en 1933. Su ideología era nacionalsindicalista y daba prioridad a la acción
directa contra los políticos rivales.
40 Para que el lector entienda un poco la dinámica de los partidos, los partidos de
centroizquierda consiguieron 117 escaños, el PSOE 90, Esquerra 38, los comunistas 13, el
POUM apenas 1 y el partido de Pestaña 2. Aunque los escaños no reflejan con exactitud la
analogía de fuerzas, ya que el resultado está influido por el sistema electoral y la
concentración de fuerzas de cada partido en una región concreta, sin embargo son
indicativos del tamaño y de la base de cada partido. No hay cómputo analítico de los votos
de cada partido por separado, puesto que el Frente Popular participó como bloque unitario.
Vid. Peirats (1988), tomo 1, p. 111.
La postura de la CNT ante las elecciones fue en esta ocasión
controvertida. La organización de Cataluña convocó una
asamblea para el 25 de enero de 1936, en la que se debatiría la
postura del sindicato a la vista de las elecciones. Los
numerosos anarquistas presos y su segura liberación en caso
de victoria del Frente Popular pesaron mucho en el criterio de
los ciento cuarenta y dos representantes que se reunieron.
Peirats refiere en su historia semioficial del movimiento que
muchos habían llegado al punto de considerar que la
abstención en las elecciones era un tema de táctica y no de
principios 41 . La representación de Hospitalet propuso la
votación de reprobación de esa tesis oportunista y de los
compañeros que habían convocado una asamblea con
semejante tema. Pese a todo, el tema se debatió. Una carta de
reprobación que había enviado la FAI invitaba a los
participantes a asumir sus responsabilidades ante el
proletariado español e internacional. Hacía referencia a que la
aceptación del proceso electoral dañaría irremediablemente
cualquier perspectiva revolucionaria. Esa carta 42 transformó el
clima de la asamblea.
43 Esas cifras da Peirats (1988), p. 117. Otras fuentes elevan el número de trabajadores
a quinientos ochenta y nueve mil ciento catorce, vid. Íñiguez (2001), p. 643. Sea como
fuere, esas cifras no representan al conjunto de miembros de la CNT, ya que muchos
congresistas protestaron por la ausencia de representación de muchos sindicatos.
subversión del régimen existente. El congreso planteó como
objetivo la victoria del comunismo libertario y nombró un
comité para la redacción de un informe, para que se pudiese
debatir con base científica de las cuestiones de naturaleza
económica y social que surgiesen tras la revolución.
48 Este término, aunque se ha consagrado en la mayoría de los libros que tratan el tema,
es bastante desacertado, cuando se proporcionaba una posibilidad de expresarse
libremente a todos a través de su sindicato y de las estructuras comunitarias que se
desarrollarían. Su objetivo era la transformación de la sociedad y de la economía en el
espíritu de las decisiones del congreso de Zaragoza. Vid. Gómez Casas, (1986) p. 188.
49 Vid. Peirats (1988), tomo I, p. 158
Aparte de García Oliver y los sindicatos del Baix Llobregat,
que estaban representados 50 por José Xena 51 , que
argumentaban en favor de la proclamación del comunismo
libertario, la mayoría se alineó finalmente en favor de la
colaboración. Así, se decidió la fundación de las Milicias
Antifascistas de Cataluña, por iniciativa de la CNT. La
Generalitat de momento había perdido su fuerza, pero no fue
eliminada. El Comité de Milicias asumió el control real de la
situación y la CNT creó poco a poco otros comités para afrontar
las cuestiones de la guerra, de la economía, del orden público,
de la justicia, etc... Pero siempre intentaba no provocar un
enfrentamiento serio con otras fuerzas políticas y colaboraba
con ellas.
50 No se desprende de ningún sitio que los asistentes al pleno hubiesen consultado a los
sindicatos o a sus organizaciones locales. Vid. Richards (1996), p. 36. Esa disfunción, que
se observó ya desde el primer día, fue ‒desgraciadamente‒ norma durante la Guerra Civil.
51 José Xena Torrent (1908‒1988) ejerció luego de alcalde de Hospitalet y fue
secretario de la FAI catalana durante la Guerra Civil. Fue encarcelado en Francia tras la
retirada del 39 y acabó exilado en Venezuela, donde continuó su intensa actividad política.
52 Aunque sí una fuerza considerable, la CNT en Valencia no tenia la primacía
absoluta, como en Barcelona. Vid. Paz (Virus, 2001), ps. 25‒34.
principalmente por trabajadores armados y algunos
destacamentos de las fuerzas del orden fieles a él. La mayoría
de los trabajadores madrileños pertenecía a la UGT socialista,
así que el gobierno central logró controlar con relativa facilidad
la ciudad en la que se encontraba.
55 Juan López Sánchez (1900‒1972) había firmado el ‘Manifiesto de los Treinta’ y era
secretario de la FSL de Pestaña. En la década de los sesenta colaboró con el sindicalismo
franquista.
56 Vid. Richards (1996), ps. 82‒83.
57 El 30 de octubre la recién constituida policía comunista de Valencia abrió fuego
contra anarquistas que participaban en las pompas fúnebres de un miliciano que había sido
asesinado por la policía a causa de su identidad política. Pese a los treinta muertos y los
ochenta heridos, la CNT y la FAI silenciaron el hecho y cuatro días más tarde entraron en
el gobierno. Vid. Paz (Virus, 2001), ps. 86‒89.
58 Las cifras que dan los miembros del PCE en 1936 varían entre los 3.000 y los 30.000.
Al final de la Guerra Civil se acercaban a los dos millones.
hizo crecer la autoridad del PCE, que gestionó esa relación. El
dinero de la URSS contribuyó a la incesante propaganda de los
comunistas, que encontró repercusión en muchos obreros de
la UGT y ‒especialmente en Cataluña y Levante‒ en la clase
burguesa. La pequeña burguesía ‒y en general la clase media‒
estaban inquietas con la fuerza de los anarquistas y querían
asegurar sus propiedades y la continuidad de la democracia
burguesa tras una probable victoria. Idéntica repercusión tuvo
la propaganda en los pequeños propietarios campesinos,
mientras que el PCE se había pronunciado abiertamente contra
las colectividades y en defensa de la propiedad privada59.
59 El 30,7% de los miembros del PCE en marzo de 1937 eran campesinos hacendados y
el 6,2% medioburgueses acomodados
octubre del frente de Aragón. Allí se había proclamado el
Consejo de Defensa de Aragón, que formaban solamente
anarquistas. La decisión de su fundación surgió de reuniones
entre representantes de las milicias que acampaban allí y de las
colectividades agrarias que se habían creado60. Ese peculiar
“órgano anarquista de poder” quería reorganizar la economía
local y controlar el poder que ejercían las milicias
‒principalmente las no anarquistas‒ a costa de los pueblos y
colectividades. Los comunistas tildaron de ‘fascista’ al Consejo
y el gobierno central lo reconoció apenas el 17 de diciembre
una vez que los anarquistas cedieron ciertas competencias a
otras fuerzas políticas61.
66 Francisco Maroto del Ojo era comandante de milicia en Granada y muy conocido
en toda Andalucía por sus éxitos contra los fascistas y su tenaz posición en cuestiones de
principios. Fue liberado el 1 de mayo de 1937 y siguió combatiendo. En 1938 se retiraron
las acusaciones contra él. Al final de la guerra fue detenido en Alicante, salvajemente
torturado por los falangistas y ejecutado.
67 Hubo aisladas críticas dispersas tanto de combatientes como de ciertas publicaciones
anarquistas.
apoyo de casi cinco mil combatientes68 y llegaron al cénit de su
influencia en los sucesos de mayo de 1937.
71 No hay datos exactos de bajas. Fuentes diversas estiman los muertos entre quinientos
y mil, mientras que los heridos ascienden hasta los dos mil.
72 Camilo Berneri había nacido en 1897 en Lombardía, Italia. Desde pequeño hahia
participado activamente en el movimiento anarquista, especialmente en el sector editorial.
Luchó contra el fascismo y fue desterrado de la Italia de Mussolini y luego también de
Francia por sus convicciones políticas. Llegó a España con el estallido del golpe de estado
y combatió en la Columna Ascaso. Editó el periódico italiano Guerra de Clase, desde
cuyas columnas ejerció la crítica a la lógica de colaboración de la CNT y fue un enemigo
inflexible del estalinismo.
comité revolucionario que destituiría a la Generalitat y
continuaría la revolución no encontró suficiente repercusión.
La postura de CNT‒FAI durante los sucesos tenía una lógica
defensiva y conciliadora. Así que la clase burguesa catalana y
los comunistas lograron su objetivo. Desarmaron a la clase
obrera, consolidaron el dominio soviético en el territorio de la
España republicana y frenaron los logros de los trabajadores en
provecho de la propiedad individual73.
74 Da la cifra Santillán, vid. Peirats (1988), tomo II, p. 242. Sobre el congreso, vid.
Gómez Casas (1986), ps. 217225.
había sido limitada. El gobierno central y los miembros de los
partidos que participaban minoritariamente en él obstruían
continuamente su labor. Algunas propuestas para la
constitución de un órgano nuevo en el que participasen
solamente anarquistas y colectivistas habían caído en saco
roto. El 11 de agosto el gobierno central ordenó la disolución
del Consejo y envió a Aragón la XI división bajo el mando de
Líster, coronel comunista. El objetivo real de la intervención no
era el Consejo ‒ya débil‒, sino las conquistas revolucionarias
de los campesinos de Aragón. El ejército disolvió por la fuerza
las colectividades, expropió sus provisiones y reintegró la tierra
y las herramientas a sus antiguos propietarios, imponiendo la
propiedad individual de la tierra. También destruyó los edificios
en los que se albergaba el movimiento libertario en todos los
pueblos y ciudades por los que había pasado. Hubo más de
seiscientas detenciones, muchas desapariciones y denuncias
por homicidios, pero una vez más CNT‒FAI no opusieron
resistencia con las armas para no romper el frente antifascista
ni ser acusadas de favorecer la victoria de los fascistas. Al
mismo tiempo, el comité nacional de la CNT dio muestras de
buena conducta aguardando una llamada para participar en el
gobierno de Negrín.
75 Sobre ese pleno los datos son limitados. Vid. Peirats (1988) tomo III, ps. 3‒25.
trabajo en las fábricas para intensificar la producción, línea
común en la prensa anarquista y sindicalista para no crear
discrepancias internas en el movimiento, creación de un banco
sindical...
77 Aquí merece la pena referir que la única organización que mantuvo durante toda la
Guerra Civil una firme postura no oportunista fueron las juventudes libertarias de
Cataluña. Pese a la insoportable presión que recibió de toda clase de comités del
movimiento libertario, no abandonó nunca el apoyo de los principios tradicionales del
anarquismo. Vid. Peirats (1988), tomo III, p. 51.
artículos que la FAI debería aceptar oficialmente su
participación en el escenario político y transformarse en
partido político. Pero la situación desesperada a la que habían
llegado el frente y la economía por los manejos comunistas
había llevado a muchos miembros de la FAI a la revisión de la
postura del movimiento libertario. La resistencia de muchos
anarquistas ya se había agotado y había una tendencia que
demandaba la revisión de las tesis. Para la solución de estas
cuestiones se convocó un pleno de comités regionales del
movimiento libertario del 16 al 30 de octubre de 1938.
perspectiva libertaria.
hallaba entre ellos y ha hecho una descripción del ambiente en
su libro La muerte de la esperanza: 86
Real, cuando éstos se sublevaron contra Casado. Vid. Íñiguez (2001), p. 236.
DERROTA, RECONSTRUCCIÓN Y CISMA (1939‒1945)
101 El estado español aceptaba solamente treinta mil quinientos presos. Vid. Ester
Borras, carpeta 71.
102 La propaganda franquista, ya durante la Guerra Civil, llamaba “rojos” al conjunto
del bando republicano. La guerra fría afianzó ese apelativo, ya que Franco se presentaba
como custodio de los ideales de occidente frente a la URSS.
tomados por los derechistas. Los tribunales imponían enormes
sanciones económicas, incluso hasta a familias de ejecutados,
de modo que les obligaban a vender baratas sus casas a
compradores predeterminados. La corrupción era soberana en
el régimen conservador, cristiano, de Franco. Las circunstancias
económicas condujeron a miles de mujeres a la prostitución. A
las mujeres que habían sido encarceladas y su marido había
muerto se les privó de la custodia de los hijos103. Más de diez
mil hijos de presos crecieron en instituciones eclesiásticas de
concepto medieval 104 . Miles de huérfanos de la guerra
crecieron en asilos y reformatorios bajo supervisión
eclesiástica.
Retirada y Exilio.
108 Las cifras de los refugiados oscilan en las diversas investigaciones, aunque la
situación en Francia no permitió ningún inventario oficial, ya que unos meses después
empezó la Segunda Guerra Mundial. Hugh Thomas refiere 240.000 refugiados civiles y
250.000 militares. Vid. Thomas (1971), tomo II, p. 413. Dolors Marín da cuenta de
ochocientos mil. Vid. Marín (2002), p. 64.
del cadáver un niño jugaba. Esta falta de solidaridad con la
República española es el tocar a muerto de la República
francesa. (9 defebrero de 1939). 109
110 Hay una buena descripción de toda esa situación en Paz, Ταξίδι στο παρελθόν
[Viaje al pasado], Alfa, Atenas, 1996, ps. 321‒323.
El comportamiento del estado francés con los refugiados fue
inaceptable. Muchos españoles creían que la tradición
republicana del país y la izquierda potente que había
asegurarían una recepción mejor. La realidad completamente
diferente fue dictada por dos razones principalmente. La
primera fue económica. El avituallamiento y el alojamiento era
caro para el estado francés, especialmente en un período en
que los preparativos bélicos absorbían partidas enormes.
Inevitablemente se debatió el concurso de otros estados, tanto
en la financiación como en la recepción de refugiados. Al
principio solo Bélgica aceptó acoger a tres mil niños, mientras
que Inglaterra y la Unión Soviética solamente donaron ciertas
cantidades de dinero y luego también recibieron un pequeño
número de inmigrantes. Los Estados Unidos enviaron ciertas
cantidades de dinero, pero también víveres; y lo mismo
México, que gradualmente aceptó veinticinco mil solicitudes de
inmigración en su territorio 111. La segunda razón para esa
recepción era política y se sintetizó en la opinión del diputado
francés Ybarnegaray. Este solicitó al parlamento francés en
marzo de 1939 que se expulsase a todos los refugiados
españoles de Francia y se los enviase a las colonias africanas, a
Madagascar o lo más lejos posible. Justificó esa opinión
diciendo que determinados refugiados eran agentes de un
virus revolucionario contra el que no había antídoto 112.
114 El partido comunista prohibía a sus miembros luchar contra los alemanes, para
apoyar el acuerdo de no agresión Ribbentrop‒Molotov entre los nazis y la URSS.
115 En julio de 2006 se editó en España Libro de la memoria. Españoles deportados a los
campos nazis (1940‒45), de B. Bermejo y S. Checa. En su investigación han cotejado
nueve mil nombres de presos, de los que habían muerto unos seis mil. La lista es, aunque
incompleta, bastante aproximada a las cifras reales. Vid. El país Semanal, n° 1587,
25/2/2007.
1940, algunas de las figuras más conocidas de la Guerra Civil
española, de todo el espectro político del campo
antifranquista, regresaron al otro lado de los Pirineos. Entre
ellos se distinguían el presidente de la Generalitat, Lluis
Companys, el exministro anarquista Joan Peiró 116, el socialista
Zugazagoitia, así como el albañil anarquista Cipriano Mera,
comandante en la Guerra Civil del cuarto cuerpo del ejército.
Todos ellos fueron condenados a muerte. Salvo Cipriano Mera,
cuya pena fue conmutada por cadena perpetua, los demás
fueron ejecutados.
116 Juan Peiró i Belis nació en 1887 en Barcelona. Obrero comprometido desde 1906,
ejerció como ministro de Industria durante seis meses y dimitió tras los sucesos de mayo
del 37. Los fascistas lo torturaron durante casi dos años y le propusieron un puesto en el
sindicato fascista a cambio de su vida. Fue ejecutado en Valencia el 24/7/1942.
117 Peirats calculaba en más o menos ochenta mil los miembros de CNT que huyeron a
Francia. Vid. Herrerín (2004), p. 36.
José Xena, Francisco Isgleas, Valerio Mas, Germinal de Sousa,
Roberto Alfonso, Fidel Miró y Serafín Aliaga118. Ese consejo no
se reunía ni ordinariamente ni con el cuórum indispensable.
Gestionaba los asuntos económicos del movimiento,
intentando ayudar a los miles de anarquistas que estaban
encerrados en campos de concentración franceses, pero
también a los que intentaban asegurar una plaza en los barcos
de Latinoamérica. El consejo se autoproclamó único
representante del movimiento, basándose en una
interpretación sui generis de las decisiones de 1938 sobre la
creación de un comité ejecutivo del MLE.
118 Los nombres de los miembros del consejo general del MLE difieren según el
historiador o incluso el participante en él. Esgleas, aunque fue preguntado en los congresos
de 1944‒45, no reveló oficialmente sus nombres. Aquí se utiliza la lista que se publicó en
el volumen colectivo Memorias (1993), p. 809.
119 En sus memorias, García Oliver sostiene que abandonó inmediatamente la idea del
partido y acusa a la pareja Esgleas‒Montseny de calumnia, con el objetivo de su
destrucción moral. Vid. García Oliver (2008), p. 536.
El 18 de julio de 1939 ‘Marianet’ se ahogó cuando nadaba en
el Marne y su puesto fue ocupado por Esgleas120. Este se hizo
cargo también, además de la secretaría, de la gestión de los
recursos económicos del movimiento. La actividad principal del
consejo durante el periodo siguiente hasta la ocupación de
Francia se limitó a la correspondencia, a la edición de circulares
y a la gestión económica. No hubo ninguna iniciativa evidente
para asumir acciones fuera de España. Toda la actividad del
consejo se consagró a las disputas con los miembros de la CNT
exilados en Londres, pero también en España, para preservar
su primacía dentro del movimiento. La ocupación de Francia
por los ejércitos nazis en junio de 1940 condujo a Esgleas y al
consejo a la clandestinidad, que también significaba su
definitivo abandono.
121 Francisco Marés Sánchez (1895‒1941) había participado antes de la guerra en los
Sindicatos de Oposición. Fue uno de los fundadores de la Columna de Hierro y su
comandante después de Pellicer, cuando ya había cambiado su nombre a 83a Columna.
Fue detenido cuando viajaba clandestinamente para fines de la organización y fusilado en
Paterna en 1941. Se había escapado de Albatera.
122 Esteve Pallarols Xirgu nació a principios del siglo XX en Vic. Participó en el
movimiento desde temprana edad y estuvo exilado en Cuba durante la dictadura de Primo
de Rivera. Durante la Guerra Civil contribuyó de manera importante a la organización de
las colectivizaciones de Cataluña y Levante. Fue ejecutado en julio de 1943 acusado de
demoler una iglesia de Vic en los primeros días de la Guerra Civil.
123 Cuadros del régimen franquista firmaban tales fianzas de excarcelación para
conocidos y familiares suyos, bastaba con que no fuesen responsables de delitos contra la
vida.
fugas ilegal y de comunicación de los núcleos libertarios
dispersos.
124 Saturnino Carod Lerín (1903‒1988) participó antes de la guerra en los sindicatos de
Zaragoza. En la Guerra Civil fue comandante de la Columna Carod‒Ferrer y en mayo de
1937 participó con Máximo Franco en la columna de anarquistas que partió hacia
Barcelona. Fue encarcelado por actividades ilegales en 1941 en Barcelona y permaneció
preso hasta 1960.
125 Victoriano Castán Guillen (1901‒1983) se hizo cargo, después de la militarización,
del XVII cuerpo del ejército. Espía de los servicios secretos aliados durante la Segunda
Guerra Mundial, dejó de militar en la CNT en 1945 por principios. Fiel a sus ideas hasta la
vejez, se suicidó días después de la muerte de su compañera en el exilio francés.
126 Eduardo José Esteve (1916‒1996) fue conocido con el pseudónimo de Germen
Esteve. Antes de la guerra fue albañil y secretario de las juventudes de Levante. Regresó a
España en 1942 para contribuir a la lucha, participó en la actividad clandestina durante
toda la dictadura y fue encarcelado en multitud de ocasiones.
primer instante a la organización de los anarquistas, con el
objetivo de salir del campo y crear grupos que actuasen
clandestinamente dentro de España. Las armas para esa
actividad pertenecían a su grupo, que había tenido la
precaución de ocultarlas en la frontera antes de que los
desarmasen los franceses durante la retirada.
129 Ángel Tarín Haro (1920‒1941) combatió en la Guerra Civil en las milicias
anarquistas. Actuaba clandestinamente con su hermano José, que huyó a Francia. Su
hermano mayor, Miguel, había sido ejecutado en 1939.
130 Los datos sobre este período son orales y escasos. Vid. Molina (1976), ps. 89‒98.
131 Celedonio Pérez Bernardo era minero. Cuadro beligerante desde la época de la
dictadura de Primo de Rivera, estuvo exilado en Bélgica, donde colaboró con Ascaso y
Durruti. En la Guerra Civil había sido comisario en el regimiento de Mera. Hasta su
muerte en 1956 o bien actuaba en la clandestinidad o bien estaba en prisión. Era el alma de
la organización clandestina en Madrid.
anarquistas mediante el soborno de funcionarios estatales.
Tras su detención a principios de 1941, se hizo cargo del puesto
de secretario Manuel Amil, que estaba preso en Madrid. La
organización de los anarquistas en las cárceles había llegado a
un altísimo nivel. Así, se decidió que las orientaciones se diesen
desde dentro de la cárcel y el trabajo clandestino fuera
consistiese en comunicarse con el secretario preso132.
132 Herrerín invoca los testimonios de dos miembros de la CNT que sostienen que el
secretario no debía nunca ser un preso y por eso Amil había cedido su puesto a Eusebio
Azañedo. Vid. Herrerín (2004), p. 84.
133 Aparte de materias primas y uso libre de los puertos españoles, Franco había enviado
una división de voluntarios para luchar en el frente oriental. Componían la División Azul
falangistas fanáticos, muchos de los cuales perdieron la vida en la batalla de Leningrado.
De esa manera, en 1942 creó un parlamento dirigido y en 1943
concedió el indulto a miles de presos que estaban acusados de
delitos leves. La coyuntura favoreció a la CNT, ya que fueron
excarcelados bastantes combatientes suyos y acometieron
inmediatamente la difícil tarea de la recomposición.
134 Agustín Remiro Mañero (1904‒1942) formaba parte de la CNT desde 1919 y se dio a
conocer por su actividad organizativa clandestina durante la dictadura de Primo de Rivera.
En la Guerra Civil combatió al principio en la Columna Durruti como jefe de un grupo de
sabotaje que actuaba por detrás de las lineas enemigas. Luego combatió con la Columna
Carod‒Lerín, siempre en misiones especiales, y desde 1938 comandaba una compañía
autónoma que acometía secuestros, atracos y sabotajes en el frente del Ebro, en la
retaguardia de los fascistas.
135 Vid. Téllez (1996), p. 234.
136 Ramón Arsenio Acín Aquilé (1888‒1936) fue ejecutado en su ciudad natal por los
fascistas en 1936. Era profesor, pero también escultor y escritor. Luchó en la CNT desde
En noviembre de 1942 las fuerzas alemanas se desplegaron
también por el sur de Francia. La Gestapo asumió la tarea
represiva que correspondía a la policía del gobierno de Vichy y
en poco tiempo restringió la actividad de las redes de fuga.
Ponzán con los cuadros fundamentales de su grupo137 fueron
encerrados en Vernet una vez más como refugiados, ya que los
servicios alemanes ignoraban su actividad. Enseguida salieron
del campo con documentos falsos, pero su suerte no duró
mucho tiempo. Vicente Moriones, ‘Navarro’, experto guía de
fronteras138, fue detenido en junio de 1943 y conducido a
Buchenwald. Los hermanos Eusebio y Pascual López, que
colaboraban con Ponzán desde la época de la Guerra Civil,
fueron encarcelados respectivamente en Francia y Barcelona.
El propio Francisco Ponzán fue detenido por la Gestapo en abril
de 1943 en Toulouse, después de una delación. Permaneció
preso hasta el 17 de agosto de 1944, último día de estancia de
los alemanes en Toulouse. Cuando se iban, los nazis escogieron
a los presos más peligrosos, los ejecutaron a las afueras de la
ciudad y quemaron sus cadáveres. Entre ellos estaba también
Francisco Ponzán Vidal, de treinta y tres años.
corta edad y es considerado uno de los talentos más importantes del mundo libertario.
Entre muchos otros célebres anarquistas, Ponzán fue alumno suyo.
137 Entre los cuadros básicos del grupo estaba Juan Catalá Balaba (1913‒2008), que
estaba ya preso en Barcelona. Catalá era especialista en fugas y, después de su tercera
fuga, en 1947, regresó a Francia. Allí participó en 1951 en un atraco y fue encarcelado
durante catorce años. En la guerra fue saboteador en la Columna Durruti y colaborador de
Ponzán desde 1938.
138 Vicente Moriones Belzunegui, ‘Navarro’, (1913‒1970), sobrevivió a los campos de
concentración nazis con serios problemas de salud. En 1947 volvió a la actividad
clandestina en España, fue detenido en Donostia y permaneció preso durante dieciocho
años. Cuando salió de la cárcel, continuó la labor de organización y fue secretario del
comité regional clandestino de la CNT Norte. Murió de infarto en Baracaldo, donde vivía
con documentos falsos.
Comités Nacionales y Locales Hasta el Fin de la Guerra.
140 Esos cuadros se habían distinguido por la lucha en defensa de la primacía del
sindicalismo frente a las ideas anarquistas dentro de la CNT.
141 Unión Nacional Española.
Abraham Guillén, que había suscrito el acuerdo142. Pero una
vez más se justificó la táctica de alianzas y participación política
que se había decidido durante la Guerra Civil con el argumento
de que ésta no había terminado y que solo un congreso táctico
podía cambiar esa orientación política. A continuación, el pleno
expresó su descontento por la falta de ayuda de los
compañeros exilados y principalmente porque no mostraban
interés fehaciente, viajes y comunicación clandestina
mediantes, con objeto de informarse sobre la situación en el
interior. El sexto comité nacional que surgió del pleno tenía
doce miembros de diversos comités locales, cifra indicativa de
la extensión de la organización por toda España.
142 Abraham Guillén Sanz (1913‒1993) ejerció de comisario político de la XIV división
bajo Cipriano Mera. Fue condenado a muerte al final de la Guerra Civil, pero escapó en
dos ocasiones, la segunda en 1945, cuando llegó a Francia con la ayuda de unos gitanos
libertarios. Fue dado de baja en 1946 por la CNT del exterior por filocomunista. En 1948
emigró a América Latina y vivió en Argentina, Uruguay y Cuba, hasta su regreso a España
a la muerte de Franco. Muchos lo consideran el padre de la guerrilla urbana. Fue mentor de
los Uturuncos y cofundador y teórico de los Tupamaros. Escribió decenas de libros y
artículos sobre guerrilla urbana, economía, autogestión y la Guerra Civil, siendo editor de
muchas revistas y periódicos. Luis Andrés Edo ‒cuya gran contribución al movimiento se
presentará en los capítulos siguientes‒ considera una excusa sin motivo su baja. Incluso
añade que su obra en tres tomos sobre economía autogestionaria es claramente
antimarxista y no duda en calificarlo como la figura intelectual más importante que el
movimiento libertario en el exilio ha puesto de manifiesto. Vid. Edo (2006), ps. 142‒143.
143 Alianza Nacional de Fuerzas Democráticas.
Amil se distanció voluntariamente porque soportaba un cordón
policial asfixiante. Cuando pretendía desplazarse a Francia, fue
sorprendido en Barcelona y encerrado en los calabozos
franquistas.
144 Ramón Álvarez afirmó en 1990 que los contactos para la fundación de la AFND los
comenzó la CNT en 1942 y que la alianza funcionaba ya en 1943, aunque su existencia se
hiciese pública en octubre de 1944. Vid. Memorias (1993), p. 302. No hay otro registro del
periodo que afirme tal cosa.
realización de elecciones democráticas, el mantenimiento del
orden político y social, el restablecimiento del funcionamiento
judicial normalizado. La secretaría de la ANFD pasó a manos de
Catalá, consolidando la posición del comité nacional de la CNT.
146 Los organismos de refugiados que habían creado las organizaciones y partidos
españoles en el exilio habían previsto que el 22% de las plazas de los barcos para México
correspondiese a miembros de la CNT. Al final, a causa de la insuficiencia de anarquistas
y del “espíritu de colaboración” de las restantes fuerzas, el porcentaje real no rebasó el 5%,
así que varios centenares de combatientes se quedaron en los campos de concentración.
Vid. Herrerín (2004), p. 45.
Progreso Alfarache de secretario. El objetivo principal de los
exilados era la participación en las organizaciones de ayuda y el
contacto con las demás fuerzas políticas, de modo que
pudiesen intervenir en las cuestiones que concernían a España.
La delegación mostró gran interés por los dos mil refugiados
que se encontraban en Santo Domingo ‒entre ellos muchos
anarquistas‒ y vivían en condiciones miserables.
153 Francisco Carreño (¿?‒1947) fue un activo miembro de la FAI antes de la guerra y
responsable del consejo de guerra de la Columna Durruti desde julio de 1936. Se
distinguió por sus posiciones antiestalinistas y participó en el primer comité de los Amigos
de Durruti. Era un firme defensor de la tradición política anarquista.
154 Evangelista Campos era partidario de la colaboración y en 1945 entró en España para
ponerse en contacto con el movimiento clandestino. Fue encarcelado en sucesivas
ocasiones durante la dictadura.
155 Ángel Marín Pastor (1917‒1993) combatió en la Columna Durruti y fue miembro del
comité de Béziers. En Francia participó en grupos que hacían expropiaciones en beneficio
del movimiento. En 1945 lo detuvieron en Barcelona durante una misión política. Su
pronta excarcelación (después de una rumoreada intervención de Melis) acabó con su baja
en la CNT en Francia. Su apego a los ideales anarquistas hasta su muerte, aunque fuese al
margen de la organización, muestra que tal vez no colaborase con los fascistas, sino que lo
liberaron para sembrar discordia entre los exilados en Francia, ya que Marín estaba entre
las figuras cruciales del movimiento.
Normandía, auxiliado por la guerrilla en el interior, condujo a la
liberación de Francia. Las primeras unidades de la División
Leclerc, que entraron triunfantes en París, llevaban banderas
de la República Española junto con las francesas. Sobre los
carros de combate se leían nombres como Teruel, Durruti,
Guadalajara, acreditando el numeroso componente español de
la resistencia. En las batallas de la liberación participaron más o
menos doce mil guerrilleros españoles en unidades
autónomas 156 y una cifra desconocida ‒claramente menor‒
combatió en las francesas. Muchos miembros de la CNT
combatieron como unidad separada de la UNE, controlada por
comunistas157.
Hacia el Cisma.
162 Hasta su muerte en 1981 en Francia, Esgleas no aceptó rendir cuentas en Francia,
pese a que hubo congresos de la CNT en España tras el cambio de régimen.
163 La Junta Española de Liberación fue creada en 1943 por socialistas y republicanos en
México y se trasladó a Francia en 1944, con el objetivo de ser el órgano común de los
exilados ‒excepto los comunistas‒ en las negociaciones con los aliados y los organismos
internacionales.
164 Hubo hasta acusaciones contra Laureano Cerrada, falsificador, editor de Solidaridad
Obrera de París y conocido militante de la FAI, de que había sobornado a algunos
miembros para que cambiasen de postura. Vid. Herrerín (2004), p. 61. Personas que lo
conocieron desmienten totalmente esas acusaciones. Entrevista con S. Gurucharri,
Barcelona, 14/5/2007. De todos modos, parece que Cerrada contribuyó con dinero de sus
actividades clandestinas a la edición de los periódicos que apoyaban las opiniones de los
“pieles rojas”. Vid. Memorias (1993), p. 396.
comité nacional restableció a Esgleas y Montseny la posibilidad
de participar en el siguiente congreso y ser elegidos. Esa
decisión era irregular, ya que solo un pleno podía revocar la
decisión de un pleno anterior. Y era también un gesto de buena
voluntad por parte de la tendencia reformista hacia la unidad
del movimiento.
167 Las decisiones del congreso están en Paz (2001), ps. 116‒120.
Montseny, Juan Puig Elias, Ángel Marín, Paulino Malsand,
Miguel Chueca y Jerónimo Rodríguez168.
169 Por desgracia, muchos antiguos y célebres militantes en el exilio creían que tenían
superioridad intelectual y dentro del movimiento frente a los del interior. En España,
aparte de unas pocas excepciones, habían quedado los miembros de la Confederación que
no tuvieron un papel dirigente en la Guerra Civil, por lo tanto corrían menos peligro. La
nueva generación, que reorganizaba la CNT y asumía por primera vez cargos de
organización, era desconocida para la mayoría de los combatientes. Valerio Mas, célebre
militante de la facción ortodoxa, los calificaba, subestimándolos, como célebres
desconocidos a los que quizá alguien conociese en su casa. Vid. Memorias (1993), p.312.
170 Vid. Herrerín (2004), ps. 69‒70.
finalidades de la ideología anarquista, en lugar de funcionar
como trampolín para lanzar un ataque frontal a Franco, se
quedó en vehículo del restablecimiento del grupo de
Esgleas‒Montseny en el timón del movimiento.
172 Vale la pena referir que la crítica de los exiliados no procedía solo de los criterios
políticos reformistas. Es significativo que el comité regional de Cataluña, que en sus
propuestas mantenía una postura crítica a la ANFD y optaba por métodos de acción
directa, como huelgas, colectivizaciones y lucha armada, ejerciese una dura crítica a sus
posiciones.
173 Las informaciones proceden de las actas del pleno que se encuentran en el archivo
Gómez Peláez, carpeta 726.
nacional e inmediatamente tomó iniciativas de coordinación de
la AFND, con llamamientos nacionales a organizar unidades
dispersas de resistencia y contactos con el conjunto de fuerzas
políticas resistentes. Al mismo tiempo, el comité envió a
Francia a José Expósito Leiva y Manuel Vicario para que se
pusiesen en contacto con los miembros de la CNT en el exilio
que quisiesen contribuir a la organización en España. Una gran
parte de los reformistas aceptó colaborar con los delegados,
considerando que así se interpretaba al pie de la letra la
decisión del Congreso de París, que ‒supuestamente‒ cedía la
iniciativa al comité español. El medio para organizar a los
exilados reformistas fueron las Regionales de Origen, en las
que se organizaron según la parte de España de la que
procedían.
174 José Sancho García había colaborado en el primer comité nacional de Pallarols.
Pocas cosas se saben de su actividad. Fue fusilado por los fascistas en la cárcel de Ocaña el
23 de diciembre de 1949.
175 La existencia de esa lista la confirman también no anarquistas. Vid. Herrerín (2004),
p. 75‒76. Paz refiere que los ministros fueron nombrados desde el interior de acuerdo con
Giral. Vid. Paz (2001), p. 131.
consultad al conjunto de compañeros de España, así como
a los núcleos responsables del movimiento libertario en el
exilio 176.
Introducción
180 Aquí merece la pena referir que muchas personas optaron por emparedarse en
escondrijos (paredes dobles o sótanos excavados bajo las casas), para evitar la ejecución
durante los primeros años después de la conclusión de la guerra. Se les denominaba topos
y en ciertos casos extremos permanecieron así, ocultos, más de diez años.
181 Vid. Moreno (2001), p. VIII.
después de 1945, se caracterizó por el intento del partido
comunista español de controlar los focos dispersos de
resistencia y manipularlos. El otoño de 1944 fue el punto de
inflexión para la guerrilla rural, cuando se produjo la fracasada
invasión de guerrilleros ‒bajo la égida de comunistas‒ desde la
frontera francesa. Algunos de los que pasaron a territorio
español desempeñaron un papel crucial en el control de las
zonas de la guerrilla ‒no todas‒ por parte del partido
comunista. A despecho de la propaganda comunista que lanzó
el PCE después de la transición española, los guerrilleros
comunistas no fueron ni la mayoría ni los más decisivos en las
acciones. Sencillamente después de 1945 los delegados del
partido asumieron el control en muchas zonas de la España
montañosa, puesto que el PCE había establecido la lucha
armada como prioridad.
182 Seguramente hubo incidentes aislados también en otras ciudades, pero los datos
históricos son muy deficientes.
investigaciones in situ en las zonas de la guerrilla, treinta años
después de su apogeo183.
184 Antonio Asensio Forza (1923‒?) salió de la cárcel en 1958, después de diecinueve
años.
régimen pretendía aterrorizar y humillar a todos los habitantes
de esos barrios tradicionalmente libertarios con métodos
extremos. En la Semana Santa de 1939 curas acompañados por
policías y falangistas paraestatales armados paseaban por la
Torrassa, Hospitalet y Sans obligando a los transeúntes
‒muchos de ellos eran obreros ateos‒ a recibir la comunión en
mitad de la calle 185.
188 Los datos sobre esa partida son limitados. Paz refiere que su organizador fue Juan
Doménech, quien fue liberado en 1944 y asumió la actividad clandestina de reorganizar el
sindicato de artes gráficas. Vid. Paz (2001), p. 50. Pero quizá se trate de José Doménech
Avellanet, miembro de las Juventudes Libertarias que fue detenido en 1939 y ejecutado en
el cuartel de Camp de la Bota en 1942. Vid. Íñiguez (2001), p. 188.
189 Manuel Lozano Guillen (1904‒1945) fue un activo miembro de la CNT desde la
dictadura de Primo de Rivera y sufrió encarcelamientos y destierros. En 1937 fue
comisario de la Columna Roja y Negra, entonces militarizada. Pese a las propuestas y las
torturas para que asumiese un puesto en los sindicatos fascistas, se negó a ceder y fue
ejecutado en 1945.
190 Bernabé Argüelles Repaz fue comandante de una unidad de la Columna Roja y
Negra.
Con la ayuda de los compañeros de Aragón, el grupo de la
Torrassa intensificó sus actividades. En el nivel organizativo
logró reconstituir en 1942 las Juventudes Libertarias de
Barcelona, creando así la primera organización de base
prolongada en el tiempo del movimiento libertario en la región.
El comité regional de las Juventudes Libertarias de Cataluña
logró entrar en negociaciones con los presos de Barcelona, a
los cuales consultaban también en la toma de decisiones. Los
compañeros aragoneses constituyeron un comité de enlace de
la CNT entre Aragón y Cataluña.
197 Manuel Gallego Ponce de León (1915‒1942) se echó al monte cuando se descubrió
que la CNT local estaba funcionando. En 1942 lo asesinaron los comunistas. Su hermano
Luis (1917‒1979) estuvo activo en la reconstrucción de la CNT clandestina y huyó al
norte de África a finales de la década de los 40.
atracos, participó también en numerosos sabotajes y
ejecuciones de partidarios del régimen y delatores. El 12 de
junio de 1942, tras un pleno regional de la CNT en Granada,
algunos guerrilleros fueron interceptados por fuerzas de la
policía, pero huyeron tras un tiroteo. El 23 de junio Antonio
Raya fue a un bar de la plaza de la Mariana. Las fuerzas de
represión estaban informadas de que lo frecuentaba y en
cuanto abrió la puerta, lo mataron con una ráfaga de
disparos198. Al día siguiente hubo una serie de detenciones en
la ciudad de Granada.
198 Entre los asesinos de Antonio Raya González estaba el policía Eduardo López
Ochoa, hijo del general del mismo nombre. El general había desempeñado un papel crucial
en la imposición de la dictadura de Primo de Rivera en 1923, cuando fue jefe de las fuerzas
que reprimieron con sangre la comuna de Asturias en 1934. En julio de 1936 estaba en el
hospital militar de Madrid y fue ejecutado por los republicanos. Vid. Téllez (1996), p. 47.
199 Íñiguez refiere que no aguantó las continuas palizas de los falangistas y en 1941 se
En la primavera de 1941 comienzan la actividad, al principio
en los montes aledaños de Granada, aunque entraban
frecuentemente en la ciudad. Su partida ayudaba en la
comunicación y la actividad del comité regional, en
colaboración también con Antonio Raya. Los Quero
procedieron a una serie de atracos en 1942‒43 en Granada y la
Zubia. Su fama creciente y los muchos puntos de apoyo que
tenían en la zona contribuyeron a la ampliación de la partida.
Miembros permanentes desde 1943 fueron ‘Güéjar’ y
‘Mecánico’, que habían huido de un batallón de trabajos
forzados en Huelva. Otros miembros de la partida eran Morales
y Delgado. El incremento de miembros mejoró la capacidad
operativa de la partida, que había empezado a ejecutar
delatores y a secuestrar.
echó al monte. Vid. Íñiguez (2001), p. 500. Otras fuentes sostienen que Francisco Quero
Robles estuvo preso en el campo de concentración hasta 1943 y entonces huyó. Vid
Casanova et alii (2004), p. 211.
Andalucía, merece la pena hacer referencia a Manuel Campillo,
quien fue el hombre que reorganizó el comité regional de
Andalucía en colaboración con Raya. Tras la muerte de Raya,
Campillo continuó la actividad organizativa en Málaga,
funcionando como enlace con los guerrilleros del monte.
Perseguido por la policía, se vio obligado a huir a Madrid en
junio de 1943, donde al mes siguiente fue localizado y
asesinado en mitad de la calle, antes de que respondiese a los
disparos.
200 En España había desde principios de siglo una ley (la ley de fugas), que permitía a las
fuerzas policiales ejecutar a cualquier detenido que intentase huir. Cientos de guerrilleros
y enlaces fueron asesinados con esa excusa, de modo que su eliminación estaba justificada
legalmente. El presidente Dato, que había aprobado esa ley, fue ejecutado por un grupo de
anarquistas en 1921.
201 Bujalance, al este de Córdoba, era una villa cuyos campesinos y obreros eran en su
aplastante mayoría miembros de la CNT. Otros pueblos semejantes de la zona eran
Villaviciosa y Fuente Ovejuna.
La partida empezó su actividad con robos de animales y
víveres a familias pudientes. Una parte de los objetos robados
se la suministraban a las familias de sus miembros, que,
privadas de trabajo y sin recursos, pasaban hambre. Los Jubiles
evitaron durante su prolongada actividad establecer relaciones
con grupos guerrilleros de convicciones políticas diferentes, ya
que no tenían confianza en ellos. El 31 de mayo de 1940
tendieron una emboscada a una patrulla y mataron a un
soldado y a un guardia civil. El 8 de julio de 1940 y mientras se
lavaban en el arroyo Guadalbarbo, se les acercaron cuatro
cazadores, que los reconocieron y les ordenaron que se
entregasen. Pese a la sorpresa, los Jubiles lograron matar a los
cazadores, sin sufrir bajas. Tres de aquéllos eran miembros de
la Falange y el cuarto era un terrateniente. Tras el incidente las
autoridades prohibieron la caza en la comarca.
202 El otoño de 1942 las autoridades detuvieron a Francisco Milla ‘Paco Simón’, cuñado
de los Jubiles y miembro de la partida. La hija del latifundista lo reconoció entre los
muchas veces con las fuerzas de orden, pero siempre lograban
escapar sin bajas. El 22 de julio y el 4 de septiembre del mismo
año, realizaron dos secuestros exitosos, con los que cubrieron
con creces sus necesidades económicas.
203 En Moreno (2001), ps. 93‒95, hay una descripción pormenorizada de la batalla.
204 El padre de los ‘Béjar’, Manuel Alcalá Rodríguez, había sido miembro original de la
partida de los ‘Jubiles’ y había muerto en un enfrentamiento en 1941. Junto a los hermanos
Manuel y Mateo Alcalá Cabanillas ‘Béjar’ cayeron muertos otros dos guerrilleros de la
comarca y el campesino sin tierra que había alquilado la finca.
205 La posibilidad de relatar pormenorizadamente la actividad de la partida se debe a la
localización del último superviviente. José Moreno Salazar ‘Quincallero’, por el
historiador Francisco Moreno. ‘Quincallero’ fue conducido a la cárcel de Córdoba. Allí
fue interrogado por el juez militar para fijar la acusación. Cuando recibía el papel
preparado previamente, el juez, con la ayuda del guardia, lo dejó semiinconsciente de una
paliza... Pocos días después logró huir, esquivando el pelotón de ejecución. Solicitó ayuda
en Manzanares (pueblo con muchos anarquistas) y en Madrid, terminando finalmente en
Valencia. Allí ‒tras fracasados intentos de reunirse con la guerrilla local‒ se proveyó de
papeles falsos e hizo una vida nueva, evitando la detención. A ello contribuyeron los
archivos de la Guardia Civil, que se referían a él como muerto en un tiroteo en Córdoba.
Moreno (2001), ps. 105106.
Aparte de la partida de los Jubiles, muchos libertarios de la
zona 206 se ocultaban en los alrededores del pueblo de
Villaviciosa, asistidos por la topografía montañosa y boscosa
del lugar. La mayoría de ellos encontraban apoyo en la ayuda
del pueblo para sobrevivir, pero la intensidad de la represión
contra el pueblo y contra ellos mismos, condujo a la
aniquilación de la mayoría hacia 1942. La misma suerte
corrieron también muchos de los prófugos que se ocultaban en
la sierra de Albuñuelas, al sur de la ciudad de Granada, que
también se habían puesto en contacto con los Quero. Varios de
ellos procedían de la vecina villa de Alhama, centro del
colectivismo libertario de la comarca durante la Guerra Civil207.
206 Entre ellos los tres hermanos Caballero Calvo. Por falta de datos sobre su actividad
desde 1941 hasta 1944, serán incluidos en el capitulo sobre el siguiente periodo de la
guerrilla.
207 Entrevista con J. Gutiérrez, Banat d’Ariége, 13/5/2007. Su padre habia sido el
organizador de la colectividad de Alhama y fue ejecutado por los fascistas. Los comunistas
hicieron en 1937 una tentativa de disolver la colectividad por la fuerza, pero una milicia
anarquista defendió el pueblo.
208 El atraco se produjo el 20 de octubre de 1941. El régimen respondió con la ejecución
ejemplar de cinco lugareños, tras una parodia de juicio. Solo dos de ellos eran enlaces de
‘Salsipuedes’. Otros once aldeanos fueron condenados a penas mayores de veinte años.
formó hasta una unidad de artillería en los montes de los
alrededores, que perseguía la disolución de la numerosa
partida de ‘Salsipuedes’. Tras el bombardeo el 4 de diciembre
de 1942 que costó la vida a un guerrillero y en el que otros
resultaron heridos, la partida se separó en pequeñas secciones.
El 10 de febrero de 1943, tras detenciones y torturas en los
pueblos de alrededor, la Guardia Civil obtuvo la información
deseada sobre el escondrijo que buscaba. Cercó una cueva
escarpada en la que se encontraban ‘Salsipuedes’ y tres
guerrilleros más. La batalla duró muchas horas y los guerrilleros
huyeron uno tras otro, salvo su capitán, que fue el último en
intentar salir. Manuel Castillo ‘Salsipuedes’ murió a la entrada
de la cueva, no sin haber matado antes a un oficial. Después de
su muerte, el anarquista Juan Garrido ‘Ollafría’ dirigió a la
mayor parte del grupo tras los montes de Granada209.
213 Antes de militarizarse, el Batallón 207 se llamaba Batallón García Tirador, por el
nombre de su fundador y primer jefe, Onofre García Tirador. García era de los cuadros
más importantes de la CNT y de la FAI en la región y había sufrido persecución tras la
insurrección de 1934. Murió en México en 1988.
214 Vid. Nieto (2007), p. 30.
partida, es cierto que era uno de los guerrilleros más violentos
de la región215. ‘Santeiro’ se suicidó el 5 de diciembre de 1947,
gravemente enfermo y perseguido por un gran contingente de
policía y paraestatales. Tres miembros de su partida, que
permanecían con él todavía, huyeron. Durante su actividad
evitó la colaboración con otros grupos, anarquistas incluso,
pero siempre procuraba que su actividad no influyese
negativamente en los demás grupos anarquistas de la comarca.
215 Pons Prades refiere que, cuando hizo la investigación in situ en 1976 en la comarca
en la que había actuado, los nativos confirmaban unánimemente su dureza. Vid. Pons
(1977), p. 185.
216 Para la Federación de Guerrillas de León y Galicia, vid. Nieto (2007), ps. 51‒58.
contribuyó a deshacer sus conflictos y avanzar hacia una
federación genuinamente pluralista y unitaria. El talante
organizativo de los anarcosindicalistas y la falta de talante
hegemónico en los comunistas facilitaron la situación. En la
asamblea fundacional participaron ‒representando a sus
respectivos grupos‒ cinco socialistas, cuatro de la CNT, seis de
la UGT, cuatro comunistas y cinco sin afiliación. Entre los
fundadores estaba Manuel Girón217, mientras que el socialista
Marcelino Fernández ‘Gafas’ ejerció como jefe del comité
director. En el comité estaba también el anarcosindicalista
Marcelino de la Parra.
217 Manuel Girón Bazán, combatiente de la UGT, es uno de los mitos de la guerrilla
española. En los montes durante quince años ininterrumpidamente, fue asesinado por la
espalda por un traidor el 2 de mayo de 1951. En la Guerra Civil fue saboteador de las lineas
enemigas, junto con su inseparable amigo, anarquista, Marcelino de la Parra.
resistencia pasiva, la Federación permaneció unida y
especialmente activa durante todo 1944. De la Parra ejerció
como miembro del comité director en los cuatro congresos que
organizaron los guerrilleros hasta 1944. Precisamente en
octubre de 1944 fue él quien propuso la separación ‒militar‒
de la Federación en agrupaciones para mejor coordinación de
la guerrilla. De la Parra se encargó del sector entre Casayo y
Vilar de Cervos. Dos grupos más de anarquistas que
participaban en la Federación eran el que mandaba Abelardo
Macías ‘Liebre’ y la partida de los hermanos Jovino, Baldomero
y Abelardo Gutiérrez Alba, con este último como jefe. Ambos
jefes participaron en la asamblea fundacional de Ferradillo en
1942 218, pese a que sus partidas actuaban en la zona al menos
desde 1939.
218 El cuarto anarquista que participó en la asamblea fundacional fue Eduardo Pérez
Vega ‘Tameirón’. Pérez pasó clandestinamente a Francia en 1948 y acabó en Venezuela.
219 En el estudio in situ de Pons Prades, los lugareños afirman que ‘Foucellas’ hizo
sabotajes en su tierra desde 1936. Vid. Pons (1977), p. 364.
En 1940 creó su propia partida, que se limitó a un papel
pasivo y por eso no se le ejecutó cuando fue detenido en 1945,
sino que fue condenado a veinte años de prisión220.
220 Jesús Lavandeira Pérez ‘Ladrillo’ salió de prisión en 1953 y murió a principios de la
década de los noventa en A Coruña. Antes de la Guerra Civil habia sido miembro de la
FAI.
221 José Manuel Neira Fernández (1909‒1942?) nació en Ortigueira (A Coruña) y antes
de la guerra habia sido herrero y miembro de la CNT.
una lesión seria222, es casi seguro que fue purgado por los
comunistas por orden de ‘Marrofer’, ya que se oponía a la línea
política del PCE. Los comunistas denominaron durante un
tiempo a la partida Agrupación de Guerrilleros Neira,
explotando su fama, y sobre ella construyeron el posterior
Ejército Guerrillero de Galicia.
225 Juan Fernández Ayala ‘Juanín’ (1918‒1957) fue un guerrillero local que colaboró
con todas las tendencias políticas. En el monte desde 1937, dirigió una partida desde 1941
y asumió la jefatura de la guerrilla de ‘Machado’ tras la muerte de éste. No abandonó
nunca la lucha. Acompañado por el comunista Francisco Bedoya, ayudante y amigo suyo,
vivió en el monte hasta el 24 de abril de 1957, en que cayó muerto en un tiroteo con la
Guardia Civil. Había pasado veinte años ininterrumpidos en la guerrilla. Bedoya fue
asesinado unos meses después, en un intento de huir a Francia.
actuasen y funcionasen como contrapeso de la propaganda
comunista.
226 Vid. Nieto (2007), p. 90. Algunas fuentes refieren que ‘Machado’ era miembro de la
UGT y no anarcosindicalista.
guerrilleros españoles. Basiliso Serrano ‘Manco de La Pesquera’
nació en 1908 en La Pesquera, en el extremo suroccidental de
la provincia. Antes de la guerra había sido secretario general de
la CNT de su pueblo y durante la Guerra Civil había servido
como conductor de camión en la Columna de Hierro, pese a los
cuatro dedos mutilados de su mano izquierda, que había
perdido de pequeño haciendo fuegos artificiales. Tras el final
de la Guerra Civil logró regresar a su pueblo y se vio obligado a
vivir en un régimen de semiclandestinidad, dado que lo
buscaban las autoridades. Pero él tenía una reputación
extraordinaria en la comarca y circulaba con relativa
comodidad. Decidió pasarse a la guerrilla en el verano de 1944,
formando una partida con compañeros de su zona. Su actividad
fue particularmente intensa en la segunda fase de la guerrilla.
227 Tales ‘paseos’ de presos eran habituales los primeros años después de la guerra. En
concreto, en ciertos casos, las distancias que cubrían los presos eran irrealizables, de modo
que muchos morían en el camino. Hay testimonio de un superviviente del recorrido desde
Alcalá de Henares, a las afueras de Madrid, hasta Barcelona, durante el que murieron casi
doscientos de los trescientos presos. Vid. Pons (1977), p. 216.
sobre ‘Fortuna’ son limitados y parece que su partida se
disolvió poco a poco, durante la segunda fase de la guerrilla.
228 Aguaviva era un pueblo de larga tradición libertaria. Según Pons, no había allí ni un
solo comunista por muestra. Pons (1977), p. 146. Cuando visité yo mismo la comarca, en
marzo de 2008, la plaza del pueblo era la única parte de la provincia donde había una
pintada de anarquistas...
229 José María Alarcón Flores (1922‒1945?), Jesús Borrás Salavert (1907‒1945?) y
Saturnino Colomer Lázaro (1888‒1945?) fueron detenidos en 1945 y condenados a
muerte. No hay datos en los archivos en relación con lo que sucedió.
la comarca en régimen de semilibertad. Desde 1944 y después,
aparte de la organización política que ya funcionaba, se
formaron también grupos armados que procedieron a hacer
sabotajes y expropiaciones. Algunas de esas partidas actuaban
por la noche, ocultaban los objetos robados y las armas y por la
mañana iban con normalidad a las minas a trabajar. La
organización de la CNT en la comarca se llamaba ‘red
Espartaco’ y jefes de grupos armados fueron, entre otros,
Pedro Acosta ‘Chaval’, Modesto Plou ‘Modesto’ y Justiniano
García ‘Macho’. La policía era completamente incapaz de
controlar la actividad de los anarquistas de la comarca, a pesar
de que había veinte agentes en las minas y grandes fuerzas
policiales en los pueblos de los alrededores 230. En el mismo
periodo empezó la actividad de la partida de Josep Borrás
‘Cinctorrá’. Este había huido a Francia al final de la guerra, pero
regresó en 1943 con José Linares ‘Valencia’ 231, Josep Sangüesa
y Francisco Salvador. Ese grupo actuaba en los alrededores de
Morella, provincia de Castellón.
230 En marzo de 1944 los agentes de Utrillas solicitaban que les enviasen refuerzos con
demandas reiteradas. Vid. Sánchez Cervelló (2003), p. 106.
231 José Linares Beltrán (1913‒1950) se habia fugado en 1942 de la cárcel, donde estaba
condenado a muerte. Participó en la guerrilla de la comarca hasta mayo de 1950, cuando
resultó muerto en un tiroteo con la Guardia Civil. Vid. Sánchez Cervelló (2003), p. 477.
guerrilla, sino que pasaron a las líneas republicanas, que
estaban a una distancia de pocos kilómetros. El gran número
de libertarios de la zona fue la piedra angular de las redes de
Ponzán, pero también contribuyó a que antifascistas de todas
las organizaciones y partidos cruzaran las fronteras.
234 Las torturas a las que lo sometieron los fascistas como represalia por la actividad de
su hijo dejaron tullido al padre de ‘Veneno’, que se había quedado en el pueblo. Una de
ellas fue la destrucción de su sentido del oído vertiendole aceite hirviendo por las orejas.
Vid. Moreno (2001), p. 61.
235 Julio Rodríguez Fernández ‘Cubano’ (1918‒1949) se había distinguido en la Guerra
Civil y había sido comandante de la 39 Brigada en 1938. Pons Prades, en nuestra entrevista
de 3 de octubre de 2006 en Barcelona, afirmó que el ‘Cubano’ estaba en 1941 en los
grupos de acción de Barcelona y que fue de los primeros que cometieron atracos de bancos
en la ciudad. Probablemente en 1946 se encontró en Madrid con Mera, por quien se sabe
que había participado en la guerrilla de Almadén en el periodo anterior (¿quizá después de
la represión de 1943 en Barcelona?). A continuación (¿1947?) huyó a Francia e ingresó en
los grupos que actuaban en Barcelona. Allí fue asesinado en la gran ola de represión de
octubre de 1949.
Francisco Blancas. Todos los antes citados desempeñaron un
papel muy importante en la segunda fase de la guerrilla, que
comenzó en la zona en 1945 con la organización a la que el PCE
dirigió sus esfuerzos. Finalmente, por lo que concierne a las
numerosas fugas masivas que se produjeron en la región, se
refiere el caso revelador de la fuga de Hato Blanco en 1943 de
cuarenta y dos presos que dotaron de personal a las partidas
del monte. Entre ellos estaban los anarquistas Luis López
‘Lechuga’ y Miguel Martín ‘Chepa’.
Gracias al porte de Ibars, que era alto y rubio, los policías los
dejaron pasar sin control, creyendo que eran agentes
alemanes. Los dos compañeros se separaron para no provocar
sospechas e Ibars fue a casa de los compañeros, donde se
proveyó de explosivos. Pero Canillas fue detenido y no llegó
nunca al punto de encuentro. Ibars intentó él solo acercarse
otra vez a la estación, pero el aumento de soldados a su
alrededor lo hizo imposible y se vio obligado a abandonar236.
Sin que lo supiese Ibars, Celedonio Pérez había organizado
desde Madrid un atentado contra el tren que trasladaría a
Franco a esa cita. Pero una detención de última hora forzó al
comando de anarquistas que se había encargado de ello a
abandonar el plan. Apenas un año después del dominio total
de los fascistas, se abría un baile de intentos frustrados de
tiranicidio, que el movimiento libertario continuó durante tres
décadas.
237 Francia ya había cerrado sus fronteras con España el 1 de marzo como protesta por la
ejecución de Cristino García, miembro del engranaje clandestino del PCE y héroe de la
resistencia francesa.
políticos españoles que procurasen apartar pacíficamente a
Franco y disolver las estructuras franquistas. El régimen que
surgiese podía ser decidido mediante referéndum.
238 Juan García Durán (1915‒1986) se llamaba Luis Costa García, aunque solamente era
conocido con el nombre que utilizaba en la clandestinidad y que conservó. Escapó en 1949
de la cárcel de Yeserías, pasó a Francia y viajó por todo el mundo antes de regresar a
España tras la muerte de Franco.
239 Juan Manuel Molina Mateo ‘Juanel’ (1901‒1984) salió de prisión en 1952 y pasó a
Francia. Se distanció del movimiento hasta la reconstrucción de la CNT en España durante
la Transición.
un verdadero defensor de las negociaciones (incluso con los
monárquicos), ya que consideraba que la CNT por sí sola no
podía soportar el peso de la oposición frontal al régimen. El
comité nacional de Marco aguantó la presión del aparato de
represión durante un año entero, el año más creativo de la CNT
en toda la dictadura.
240 Registra esa cifra Herrerín basándose en cálculos y datos. Vid. Herrerín (2004), p.
122. Otros estudiosos del periodo contraponen cifras más abultadas, como los cincuenta
mil ejemplares de Solidaridad Obrera que refiere Coloma para Barcelona y los sesenta mil
miembros de la CNT en toda Cataluña que calculó Pons Prades. Esas cifras tal vez
garanticen que el mínimo de miembros de la CNT, a principios de 1947, era de sesenta mil
en toda España y probablemente fuesen algunos más. Vid. Coloma (1973), p. 36 y
entrevista con Pons Prades, Barcelona, 3/10/2006.
241 Vid. Herrerín (2004), p. 118‒119.
capital, Madrid 242. En regiones como Galicia e Islas Canarias, la
Confederación tenía una participación y una influencia mayores
que antes de la Guerra Civil.
245 Eso se debía no solo a factores ideológicos, sino también al nivel de vida de España.
El PIB era inferior al de antes de la guerra, los sueldos estaban congelados, mientras que
en muchas provincias incluso se repartían los víveres con cartilla. En combinación con la
favorable coyuntura internacional, muchos españoles esperaban un cambio social.
pueda parecer, lo inadmisible fue admisible en la CNT, sobre
todo después de que Enrique Marco fuera su secretario general
a partir de Mayo de 1946 246.
248 Información “de primera mano” de Abel Paz, que pasó la mayor parte de ese periodo
en las cárceles españolas. Paz (2001), p. 223.
249 Vid. Herrerín (2004), p. 133.
250 Vid. Paz (2001), p. 222.
democrático. El quebrantamiento de todo principio libertario
era tan evidente que los redactores de Solidaridad Obrera
sintieron la necesidad de poner una nota bajo el comunicado
de la plenaria para anticipar la crítica: Sépase, eso sí, que la CNT
no ha perdido un ápice de su valor revolucionario y constructivo, y
que su linea de conducta es consecuente con el anhelo del pueblo
trabajador que espera de nuestro anagrama y de los hombres que
lo mantienen vivo la liberación política y económica de España251.
256 El soborno de los funcionarios públicos era norma en el país en aquellos años de
hambre. Por una cantidad satisfactoria ‒y por casos de peso específico menor‒ muchos
oficiales del ejército, jueces y carceleros (y, en menor grado, policías) estaban dispuestos a
hacer desaparecer expedientes, a modificar acusaciones y facilitar excarcelaciones.
Cuando Pons Prades atravesó clandestinamente el país en una misión de organización y
fue detenido por el ejército, consiguió ‒pagando‒ ser acusado solamente de no llevar
consigo documentación completa y se le dejó en libertad provisional. Entrevista con E.
Pons Prades, Barcelona, 3/10/2006.
257 El italiano Tommaso Ranieri (1908‒1969) era conocido con el pseudónimo de
Antonio Pereira. Perseguido por el fascismo, llegó a España en 1932. Combatió con las
milicias anarquistas en Aragón y fue encarcelado en Alicante al final de la Guerra Civil.
Pasó a la clandestinidad nada más salir de la cárcel en 1945 y ejerció de secretario de
defensa en Cataluña, teniendo a su cargo los grupos armados. Escapó a una ejecución tras
su detención en 1946 por las presiones de Italia y Gran Bretaña. Fue deportado a Italia,
donde continuó su intensa actividad hasta la muerte.
258 Hermes Piquer Fargas sucedió a Ranieri en sus funciones desde 1946 hasta su
detención en 1947, y durante un tiempo ejerció de secretario del comité regional. Tras su
excarcelación pasó a Francia y continuó su actividad política. En 1966 ‒estando exilado‒
fue condenado a trece años de prisión por actividad sindical en el exterior por un tribunal
de Madrid. Era conocido con el pseudónimo de Juan Figueras. Su hermano José fue
detenido en 1947 como miembro del comité local de Vic y murió por las torturas en un
interrogatorio. Los policías lo colgaron en su celda para que pareciese un suicidio.
secretario del comité catalán, Eduardo José Esteve, quien
estaba bajo una discreta vigilancia259. Años más tarde, en 1990,
Marco escribió que el objetivo de su viaje era organizar la
voladura del parlamento y del edificio de la seguridad en
Madrid con explosivos que les enviaría desde el exterior el
subcomité de Francia. Franco ya había hecho pública su
propuesta de dar prioridad en la sucesión al príncipe Juan
Carlos, reduciendo drásticamente las probabilidades ‒ya
escasas‒ de un golpe de estado monárquico. Juzgando por la
actitud global del comité Marco, parece casi improbable un
escenario semejante, que tal vez ambicionaba dinamitar el
sambenito de reformista que le adjudican muchos
historiadores 260.
259 Eduardo José Esteve, ‘Germen’ (1916‒1996), era miembro de los grupos de
Ponzán. Permaneció en España durante toda la dictadura luchando por la CNT, lo que
pagó con sucesivos encarcelamientos.
260 En el propio texto de 1990 acepta que un cuadro dirigente de las guerrillas
libertarias de Galicia y Asturias se había ofrecido a participar con sus unidades en
sabotajes violentos donde se lo pidiese el comité. Cinco meses después Marco afirma que
fue a Barcelona a solicitar combatientes que entendiesen de explosivos... Memorias
(1993), ps. 97‒158.
Pocos días antes de Marco, la policía había detenido en
Madrid a la mayor parte del comité nacional. Asumió las
funciones de secretario Antonio Ejarque, hasta entonces
secretario de defensa del comité nacional. Las masivas
detenciones de mayo ‒más de doscientas en todo el país‒
significaban para la CNT del interior el principio del curso
descendente. Las relaciones de la Confederación con el resto
de los socios de la ANFD iban a peor y lo mismo con el gobierno
en el exilio de Llopis en Francia. En agosto de 1947 los
socialistas y la CNT retiraron a sus ministros del gobierno,
provocando su caída. Casi once años después de la primera
participación de la organización en el esquema gubernamental,
esta dimisión cerraba esa página negra de experimentos de
gobierno. Pero, desafortunadamente, las tácticas del comité
nacional siguieron siendo las mismas.
261 Los que participaron sostienen que el soplón fue Progreso Martínez (pseudónimo de
Sebastián Martínez del Hoyo), miembro de la regional Centro y uno de los que acusa a
Ejarque de colaborar con las autoridades. Juan Gil Heredia, gitano libertario y coordinador
de la fuga fuera de la cárcel, fue fusilado el 17 de noviembre de 1949 acusado por sus
actividades durante la Guerra Civil. Los diez fugados que fueron detenidos pasaron casi un
año y medio en régimen de aislamiento, aunque el límite de aislamiento máximo previsto
era de dos meses y medio. Vid. Yáñez et alii (1993).
El siguiente comité nacional que se constituyó tuvo a Antonio
Castaños como secretario y Valencia como sede. Pero no tuvo
el apoyo del subcomité de Francia, del que disfrutaba hasta
entonces. En el pleno de 1948 el subcomité decidió que el
capítulo de las desviaciones gubernamentales debía cerrarse
definitivamente para la CNT, aunque volvió una preocupación
global en torno a las colaboraciones políticas. Los reformistas
de Francia se acercaban cada vez más a las posturas de la
tendencia ortodoxa. Además en marzo de 1949 redactaron un
texto en el que consideraban que ya estaban de acuerdo con la
tendencia ortodoxa en cuestiones de táctica y de principios
ideológicos y que el “ciclo de la colaboración” se había
cerrado 262. El restablecimiento de las relaciones entre ambas
tendencias no siguió adelante porque los ortodoxos no
aceptaban la vuelta colectiva de los reformistas al movimiento,
sino que les pedían que disolviesen sus estructuras y que
cursasen solicitudes individuales de entrada en la CNT
ortodoxa.
propaganda intensa por la abstención con setenta mil octavillas y pintadas en muros. Vid.
Téllez (1996), ps. 149‒150,164.
general monárquico y un representante socialista, el
comité‒pantalla CIC (Comisión Interna de Coordinación), que
se basaba solo en las promesas del general Aranda de que
procedería a un golpe de estado. Castaños fue condenado a
treinta años de prisión y el comité nacional fue trasladado a
Barcelona, quizá la única ciudad en territorio nacional que
podía incluso apoyar con éxito un aparato clandestino. Miguel
Vallejo asumió las funciones de secretario. En la primavera de
1950 el subcomité francés intentó, en colaboración con la
regional de Cataluña, apartar la línea de colaboración que
empantanaba a la CNT ‒ya anémica‒, pero las demás
regionales no aceptaron. Sin embargo, en un gesto de buena
voluntad, el delegado del comité nacional en Francia, Helios
Sánchez264, condenó el comportamiento de sus predecesores,
Luque y Ejarque, durante cuyo mandato las relaciones de
ambos comités se habían enfriado. Sánchez, dando un paso
más allá, intentó convocar un congreso unitario de ortodoxos y
reformistas, pero la tendencia ortodoxa se opuso.
264 Heliodoro Sánchez Fernández (1909‒1988) era gitano, obrero industrial que ingresó
en la CNT en 1928 y desarrolló una intensa actividad sindical. Combatió en la Columna de
Hierro y fue atrapado al final de la guerra en Alicante. Fue miembro del comité de Vallejo.
con la carestía y el paro a participar en la huelga del 12 de
marzo, que convocaron con octavillas unos estudiantes. En el
ínterin, convocaron a la huelga muchas organizaciones, como la
FAI, la FIJL, la CNT, hasta falangistas decepcionados que
firmaron como CNS265.
265 El CNS era el sindicato único vertical y estaba controlado por miembros de Falange.
Los fascistas proponían a muchos detenidos de los comités de la CNT ocupar puestos en él
a cambio de su libertad, pero ninguno de ellos sucumbió. El CNS sacó un comunicado
público contra la huelga de tranvías, condenando a los redactores de la convocatoria.
cinturón industrial. Las medidas de excepción fueron duras,
muchos fueron detenidos, mientras la ciudad recordaba una
zona ocupada. La fábrica de maquinas de escribir Hispano‒
Olivetti despidió, en una demostración de dureza, a centenares
de trabajadores en bloque. El comité nacional y el local de la
CNT quisieron explotar la coyuntura y convocar una huelga el 1
de mayo, pero cuando el régimen se percató de sus
intenciones decidió cortar de raíz semejante iniciativa.
Perseguido por la policía, Miguel Vallejo, se vio obligado a
refugiarse en Francia en mayo de 1951 para evitar ser
detenido. Era ya evidente que la capacidad de la organización
era muy limitada.
267 Los dos miembros eran Sema y ‘Germen’ Esteve, posteriormente secretario de la
regional de CNT que fue detenido junto con Marco en 1947.
Parra 268. En las tres semanas que permaneció en Toulouse,
Fernández se dio cuenta de que las grandes expectativas que
alimentaban en el interior sobre ayuda de cualquier clase por
parte de los compañeros de Francia eran desproporcionadas.
Cuando se fue, se llevó consigo una pequeña ayuda económica
y la promesa de que la FIJL enviaría representantes para ayudar
en todos los niveles. Sus compañeros de Barcelona ya habían
comprado una máquina de imprenta con la que empezó a
editarse Ruta, periódico de las Juventudes. Además, antes de él
habían llegado los primeros delegados de Toulouse, Raúl
Carballeira y Diego Franco, más conocido con el nombre de
Amador Franco. Carballeira había ido como delegado del
MLE‒CNT y Amador en misión de recogida de información. Un
tercer enviado, José Pérez, ‘Pepín’, se dirigió hacia Madrid.
Los reformistas son los que llevan la batuta... cuando leo las
circulares de Francia, escritas con una euforia manicomial, me dan
ganas de llorar. Procura hacer, cuando llegues, una información
sincera. ¡No hay derecho a engañar a la gente! 271
270 Juan Gómez Casas (1921‒2001) fue detenido en 1948, ya que estaba en su domicilio
la imprenta clandestina de las ediciones de los ortodoxos en Madrid. Fue excarcelado en
1962 y fue el primer secretario de la CNT en la Transición (1976‒1978).
271 Vid. Herrerín (2004), p. 111.
los delegados de Toulouse y de sus estructuras, porque sus
órdenes de resistencia violenta constituían un factor de
inestabilidad para la seguridad. En agosto de 1946 las
autoridades detuvieron a treinta y nueve compañeros en
Barcelona, entre ellos a Manuel Fernández 272. En Zaragoza
detuvieron a Ignacio Zubizarreta 273.
en cuando el honor de ganarse ese título de parte de Quintela fueron Lluis Facerías y Quico
Sabaté.
275 Vid. Paz (2001), p. 200.
principios de 1946, cuando las demás fuerzas políticas lo
abandonaron. Los ortodoxos mantuvieron su firma para tener
un peón internacional en su tablero. En 1951 decidieron
retirarse por fin de la organización en la que estaban ellos
solos, con un comunicado en el que se decía que la JEL había
sido derrotada por las decisiones internas y que se retiraban
ante el peligro de que la JEL se transformase en ¡una
organización platónica!
279 Recordemos aquí que los tutores de Toulouse eran los que habían propuesto el
cambio de nombre de MIR a MLR.
producción fascista. Proceder a la eliminación automática de
verdugos y delatores, poner el corazón en la garganta a los
bravucones de los antros represivos y penitenciarios, promover
la resistencia pasiva de todos los antifascistas españoles que no
pueden practicar la acción.
280 Vid. Téllez (1996), p. 155. Los subrayados son del texto original.
presentaba a sí mismo como una organización de tipo
terrorista y añadía:
285 La montaña de Montjuic, con el castillo de la ciudad en su cumbre, está muy cerca
del centro de la ciudad y tiene una extensión de cerca de seis kilómetros cuadrados.
El 26 de junio de 1948, las fuerzas policiales, siguiendo a su
compañera, dieron con el lugar en donde se encontraba y lo
rodearon. El argentino intentó romper el cerco y huir, pero
cayó muerto en el tiroteo que hubo a continuación. La orden
del jefe era disparar solo a los pies, porque Quintela lo quería
vivo. Pero, cuando se interrumpieron los disparos y los fascistas
pudieron acercarse al punto en que se encontraba, lo hallaron
muerto con una bala en la sien. Su pistola estaba vacía, hecho
que confirma la posibilidad de que Raúl guardó la última bala
para sí.
287 Vid. Actas de la reunión plenaria específica: Dictamen elaborado por la ponencia
nombrada para resolver sobre el punto 5o del día del Pleno Nacional 24/5/1950, Ester
Borras, carpeta 80.
288 Vid. Téllez (1996), ps. 290‒291.
invitación al partido socialista y la UGT, que ni siquiera se
tomaron la molestia de responder. El plan quedó sobre el
papel. Los socialistas estaban desarticulados en mayor grado
que los libertarios. El Partido Comunista había arrojado hacía
tiempo la toalla, con su comité central ubicado en Moscú y
proponiendo la política de reconciliación nacional dentro de
España.
294 Otras fuentes cuentan que Paquita Martínez murió por los disparos de los policías.
En cuanto a los muertos, Hernando sostiene que murieron in situ el propietario y un
policía, mientras que tres días después perdieron la vida otros dos policías y un inspector
que fueron hospitalizados gravemente heridos. Vid. Hernando Bravo (s.f.). Sohre el
incidente de la calle de la Serra, vid. Marín (2002), p. 273.
295 El grupo se separó tras el suceso. En julio fue detenido Antonio Malpica, miembro
del grupo. Hahía cometido dos atracos por dinero para sobrevivir, hasta que restableció el
contacto con los compañeros. Acusado solamente de dos atracos, pero con sospechas de
que estaba en la partida de Sabaté, permaneció en prisión durante veinte años. Vid.
Sánchez Agustí (2006), ps. 172‒173.
Sacando provecho de sus informaciones, el 9 de mayo la
policía esperaba a ‘Abisinio’ a la entrada de la casa donde
residía y lo mató mientras subía las escaleras. El 26 de mayo
localizó a ‘Roset’ y lo detuvo296. Sabaté se dio cuenta de la
emboscada que le habían puesto y escapó. Poco después se
puso en contacto con su hermano José, que acababa de salir de
prisión, y acordaron continuar juntos la lucha armada. Su
primer golpe juntos fue el atraco a la fábrica de lignita de
Serchs, con Vila y Massana, el verano de 1946. El botín fue de
40.000 pesetas. En Barcelona los grupos armados intentaban
constituir el MLR y aún no habían pasado al ataque frontal.
Acciones aisladas que hubo ese año fueron la explosión de una
bomba en el monumento a la Legión Cóndor nazi el 3 de
octubre, la colocación de artefactos explosivos en dos oficinas
de falangistas en diciembre y la voladura del repetidor de la
radio nacional el 15 del mismo mes. De todos modos, la
situación estaba aún tan desorganizada en la ciudad que
Celedonio García, que acababa de salir de prisión ‒estuvo en
prisión desde 1939 por haber participado en la UJA‒, tomó la
iniciativa de pasar solo a Francia a buscar armas. 1946 terminó
para la resistencia catalana de la misma manera que había
empezado. Hubo muchas detenciones, no solo de miembros de
grupos armados, sino también del comité regional de
Carrasquer297.
296 Juan Salas Millán ‘Roset’ (1918‒¿?) combatió a finales de la Guerra Civil en grupos
de sabotaje de la retaguardia franquista. Fue condenado a treinta años de prisión y tiene el
triste récord de permanencia en los calabozos franquistas. Fue liberado en 1973, después
de veintisiete años y once meses. Aunque el periodo de prisión que estaba previsto eran
veinte años, su condena se prorrogó por cuatro intentos de fuga fracasados en 1951, 1954 y
1955.
297 Félix Carrasquer Launed (1905‒1993) pertenecía a la tendencia reformista. Pese a
Mientras en Barcelona se preparaban para fundar el MLR, los
compañeros de Francia seguían intentando adquirir los medios
necesarios para la lucha. El paladín de estos esfuerzos fue
Laureano Cerrada, quien en febrero de 1946 reunió datos para
el atraco a la brigada central de transporte de dinero del Credit
Lyonnais en París. Para ejecutar la misión eligió a Manuel Huet
‘Murciano’ 298. ‘Murciano’ proyectó un plan con seis individuos
armados con subfusiles y gases lacrimógenos, que intervenían
en dos automóviles. El atraco se llevó a cabo con éxito en una
calle central de París ‒con muchos transeúntes como
espectadores‒, ya que los cuatro vigilantes del furgón no
presentaron resistencia y el traslado de las sacas a los
automóviles se produjo con precisión y celeridad. Dos policías
de paisano que asistieron al incidente no intervinieron y luego
declararon que creían que se estaba rodando una película, por
la sangre fría y lo bien vestidos que iban los atracadores. El
botín fue de casi treinta y cinco millones de francos, cuando el
dinero legal de las contribuciones de miembros del MLE‒CNT
que se preveía para España ascendía en 1946 a 5.180.201299.
que era ciego, combatió en la CNT clandestina del interior y fue encarcelado, hasta que
pasó a Francia en 1959.
298 Manuel Huet Piera ‘Murciano’ (1908‒1984) era taxista en Barcelona antes de la
Guerra Civil, miembro de la FAI y de los grupos de acción. A menudo trasladaba en su taxi
a las acciones a compañeros. En 1941 ingresó en la red de Ponzán y estuvo transportando
personas por mar, desde y a España. Colaboró con Sabaté e hicieron algunos viajes juntos
a Barcelona. Huet no cesó en su actividad clandestina hasta finales de la década de los
cincuenta, cuando el acoso continuo de las autoridades francesas y la muerte de Sabaté le
impulsaron a emigrar a Bolivia durante un tiempo. Murió en España en un accidente
automovilístico. Su nombre no aparece sino muy escasamente en la historiografia del
movimiento, ya que su actividad era conocida solamente por sus allegados. De Huet nos
habló bastante Pons Prades en Barcelona, 3/10/2006. También, vid. Íñiguez (2008), tomo
I, p. 842.
299 Vid. Herrerín (2004), p. 108. Sobre el atraco, vid. Pons (1977), ps. 265‒266.
Las autoridades francesas, incapaces de rastrear el caso,
atribuyeron el atraco a ‘Pierrot el Loco’, conocido criminal
francés. Una gran parte del dinero se utilizó para alquilar bases
y embarcaciones para comprar y transportar armas
clandestinamente desde Génova a Francia, misión de la que se
encargó Manuel Huet y en la que le ayudó Raúl Carballeira.
300 En ciertas provincias con guerrilla fuerte estaba prohibido establecerse en más de la
mitad de sus comunidades. Vid. Molina (1976), ps. 245‒246.
el 18 de abril de 1947 y coincidió con la agudización de la
actividad de los anarquistas en Cataluña.
301 Sobre ambos atentados hay detalles en Paz (2001), ps. 235‒238. Las informaciones
sobre esos atentados proceden de Domingo Ibars, quien, tras su prolongada prisión, dio
muestras de alteraciones psicológicas y muchos compañeros consideran que exageró en la
narración de los sucesos, magnificando su papel en ellos (sin que eso signifique que Ibars
no fuese un miembro protagonista de los grupos armados). En principio tenía la intención
de suprimir ambos atentados en este libro, ya que Ibars se presenta a sí mismo como
protagonista en los dos, aunque hay unos pocos días de diferencia. Luego conocí la
historia del atentado de Barcelona por un conocido de Emilio Oliva, anarquista andaluz
que participó en él. Oliva murió a principios de siglo en Barcelona. Los miembros del
grupo al que pertenecía no fueron detenidos nunca ni tampoco dejaron registro alguno de
su actividad como grupo. La relación de Ibars con el atentado en cuestión ‒dado que lo
conocía‒ no está acreditada.
Cazorla ‘Tom Mix’ y Ramón González ‘Nano’, que antiguamente
había trabajado en esa fábrica. Pocos días más tarde, ‘Celes’ y
Falceto, acompañados por Enrique Martínez ‘Quique’,
colocaron una bomba en la torre de telecomunicaciones del
Tibidabo, en Barcelona, que se descubrió antes de que la
mecha prendiese.
302 Félix Perpiñán tenía veintidós años. La policía lo torturó cruelmente para arrancarle
información y murió poco tiempo después por infección de las heridas que le habían
causado.
303 Sobre el atraco y las investigaciones, vid. Téllez (1978), ps. 73‒74.
periodo de tiempo que Sabaté permaneció en Barcelona
luchando, fue juzgado en ausencia por la justicia francesa por
tenencia ilegal de explosivos. El asunto de Rhóne‒Poulenc
causó muchos problemas a ‘Quico’ hasta el fin de su vida, como
se analizará a continuación.
gestionase fuera de los comités provocó fricciones. Cerrada fue encarcelado de nuevo en
1957, 1970 y 1974. Fue asesinado en París por un mafioso español. Es una de las
personalidades más controvertidas del movimiento libertario español.
Ginés Urrea, Francisco Martínez y Santiago Amir‒ en ese
mismo periodo atracó el Banco Central y la compañía Ferrero.
Ferrero, el propietario, fue herido de muerte al intentar atacar
a los atracadores. Los atracos continuos provocaron la
movilización de la policía, que logró arrancar la información
relativa a la localización de una cita clandestina el 26 de
febrero.
310 El taxi era el medio de transporte habitual para los comandos de Barcelona. En
muchas acciones, los anarquistas detenían un taxi, llevaban al conductor a un punto
alejado, le aconsejaban que no denunciase el incidente inmediatamente y utilizaban el
vehículo para la acción. Téllez (1978), ps. 83‒84.
311 José López Penedo (1915‒1950) estaba casado y tenía tres niñas pequeñas en
Francia. Era redactor del material propagandístico que distribuía la partida de Sabaté.
Carlos Vidal Pasanau (1913‒1950) era discípulo de José Xena en la escuela libertaria de
Sabaté logró huir pese a estar herido. ‘Quico’ lo localizó dos
días después, tras una angustiosa búsqueda, en una casa
amiga. Dispuso que lo viese un médico y se preocupó de
transportarlo de manera segura a Francia, para que se
recuperase.
313 Los Maños entregaron más tarde en Francia al SI los datos concretos del asalto. El
Pardo, con un bosque privado para cazar a las afueras de Madrid, estaba vigilado por mil
cuatrocientos soldados de infantería, doscientos noventa y ocho de caballería y una
compañía de mauritanos que era la guardia personal de Franco. Veinte policías secretos
deambulaban por las inmediaciones fingiendo ser amantes de la naturaleza. El informe
contenía una descripción pormenorizada de los uniformes que llevaban los guardias, los
nombres de los oficiales, un horario de los cambios de guardia y las marcas de los coches
que utilizaba el dictador. Los automóviles se probaban durante cincuenta kilómetros antes
de cada traslado de Franco y los conductores estaban acompañados continuamente por
soldados. El informe se encuentra en el archivo Ester Borras, carpeta 130.
‘Chófer’, con Jesús Martínez de guía, hacía el recorrido inverso.
Poco antes de llegar a Barcelona, cayeron en una trampa de la
Guardia Civil, en la que Ganuza perdió la vida. Los demás
lograron escapar tirando granadas para romper el cerco y
llegaron a la ciudad sin más problemas. Allí participaron en una
reunión de los grupos armados para coordinar su actividad. El
15 de mayo se había fijado una votación en la ONU para
levantar las sanciones al régimen de Franco. La votación la
habían suscitado los regímenes filofranquistas de Bolivia, Brasil
y Perú. Quico Sabaté y Facerías propusieron una acción
coordinada contra los consulados de los tres países en
Barcelona. Se decidió colocar bombas al mismo tiempo en los
tres.
315 La prensa comunista del exilio ‒el PCE había abjurado de la lucha armada‒ decía
que las bombas las habían colocado agentes de Franco. Vid. Téllez (2004), ps. 239‒240.
316 Francisco Denís Diez ‘Catalá’ (1899‒1949) era uno de los más capacitados guías de
los pasos pirenaicos y disfrutó de gran estima en el movimiento libertario. Los últimos seis
años de su vida estuvo desplazándose constantemente desde y a Francia.
clientes, mientras con su acción desenmascaraban a los
‒supuestamente respetables‒ cabezas de familia católicos,
pilares de una sociedad puritana y fascista.
317 Así dice el comunicado oficial de la Guardia Civil. Vid. Sánchez Agustí (2006), p.
78.
fácil para los fascistas, cuando intentaba buscar alimentos.
Cuando se descubrió su identidad real, su detención fue
festejada por todas las fuerzas policiales de Cataluña. En su
juicio no había ninguna prueba contra él que justificase una
pena grave. Manolo fue ejecutado por venganza el 24 de
febrero de 1950 única y exclusivamente por el nombre de sus
hermanos y las acciones que ellos habían cometido. A su lado
estuvo en el pelotón Saturnino Culebras. Tampoco él había
cometido ningún delito grave cuando fue detenido en
Barcelona en octubre, pero se le consideró jefe del grupo
guerrillero, calidad que ‒con la ley antiterrorista de 1947‒ le
comportó la pena de muerte. Con ellos iba a ser ejecutado
también Joan Busquets, pero en el último instante se le
conmutó la pena por cadena perpetua318.
318 Joan Busquets Vergés ‘Senzill’ (1928) era un obrero fabril que, perseguido por la
policía tras una huelga ilegal en 1946, se refugió en Francia. En 1948 regresó a España con
los grupos armados. Participó con Gómez Casas en el fracasado intento de fuga de 1956 y
salió de la cárcel en 1969, cuando huyó a Francia. Durante la visita del rey Juan Carlos a
París en 1976, la policía francesa lo incluyó entre los once libertarios que fueron detenidos
preventivamente y retenido en un lugar de veraneo de cinco estrellas, mientras durase la
visita. Con él tuvieron “vacaciones” Octavio Alberola y Alicia Mur, combatientes a los
que nos referiremos en los capítulos siguientes.
Francia a principios de septiembre. Guerrero fue herido en las
inmediaciones de Manresa y ‒cuando llegó un médico de
Barcelona para examinarle las heridas‒ fue trasladado a
principios de octubre a una casa de la capital catalana para
restablecerse. Los demás miembros del grupo Talión ya
estaban allí, preparando asaltos en colaboración con el grupo
de José Sabaté.
Luciano Alpuente procedía de Valdecuenca de Teruel y había organizado ‒con otros dos
compañeros de la CNT‒ el gran atraco del tren de Caudé con el que se financió la
fundación de la guerrilla ‒de jefatura comunista‒ de Levante y de Aragón, que se contará
en el capítulo siguiente.
arriesgarse a detenciones que concluyesen con más agentes de
seguridad muertos. En la zona del Poblé Sec mataron a sangre
fría a José Luis Barrao y Víctor Espallargas 321 mientras paseaban
por la calle tranquilamente. Poco tiempo después, un coche
lleno de agentes de seguridad se acercó a Julio Rodríguez
‘Cubano’322, que estaba en la avenida Diagonal, y los agentes lo
cosieron desde las ventanas abiertas antes de que pudiera
defenderse. Por la noche mataron a sangre fría otra vez,
ametrallando a Francisco Martínez ‘Paco’ en la calle Dos de
Maig, el barrio en el que había crecido. Miguel García y José
Corral tuvieron más suerte, ya que fueron localizados en sus
escondrijos y se entregaron323. Ese mismo día, la Guardia Civil
asesinó en los Pirineos a los combatientes anarquistas Manuel
Oltra, Cecilio Galdós y Carlos Cuevas.
324 Giuseppe de Luisi (1886‒1962) tenía sesenta y cuatro años cuando fue detenido en
Roma. Fue condenado a seis años por tenencia ilícita de armamento pesado. De Luisi
había pasado ya veintitrés años en los calabozos de Mussolini, condenado a veinticinco
años por actividad insurreccional, pena que se incrementó cuatro años por intentar huir del
tribunal utilizando una granada. Fue liberado por los partisanos en 1945 y se distinguió en
las batallas por la liberación de Italia. Murió en un asilo de Livomo en 1962.
325 Los fascistas no le entregaron pasaporte. ‘Chaval’ fue detenido en París por atracos y
salió de la cárcel en 1954. Un grupo de anarquistas lo localizó y le dieron una paliza hasta
que perdió el sentido, creyendo que hahía muerto. Mientras los compañeros debatían
dónde enterrarlo, ‘Chaval’ desapareció en la noche. En 1976 se editó en Barcelona un
homenaje a Los Maños, que revelaba la traición de ‘Chaval’ y tenía su fotografía. ‘Chaval’
trabajaba en la imprenta del periódico La Vanguardia, con documentación falsa y
desapareció para evitar las represalias. Vid. Téllez (2004), ps. 255‒258.
Aguayo.
327 Santiago Amir Gruañas ‘Sherif´ y Ginés Urrea Piña fueron ejecutados el 14 de marzo
de 1952 junto a ‘Yayo’, ‘Tarántula’ y ‘Tragapanes’. Urrea habia ajusticiado antes de la
Guerra Civil al verdugo de Barcelona, cumpliendo la amenaza de la FAI a las autoridades
judiciales en caso de aplicación de penas de muerte a compañeros anarquistas. Pedro Meca
López fue condenado a veinte años, José Iglesias Paz a treinta (salió de prisión en 1963) y
Antonio Moreno Alarcón vio su condena a muerte conmutada por cadena perpetua, para
finalmente salir en libertad condicional en 1964.
Al regreso de Facerías a Francia le acompañó un suceso
desafortunado. En un control que había en Perpiñán los
franceses lo detuvieron por llevar armas. Pese a su carnet de
identidad francés falso, la policía española fue informada
inmediatamente de la detención y solicitó su extradición. La
demanda no fue aceptada y Facerías permaneció en las
cárceles francesas hasta noviembre de 1950. Las autoridades
francesas lo dejaron libre, pero le prohibieron circular por las
provincias fronterizas con España. Mientras estaba en la cárcel,
el comité de defensa del MLE proyectó un plan para asesinar a
Quintela, de cuya ejecución se encargó un grupo cuyo
responsable era César Saborit. Cuando los compañeros
llegaron a Barcelona, comprobaron que los datos que les
habían entregado eran falsos o estaban quemados y
regresaron con apuros a Francia. Los chivatos de los fascistas
habían erosionado el hermetismo conspirador del movimiento.
comarca de Berga, donde había nacido y que constituyó su campo de actividad más
habitual, era conocido entre los campesinos como ‘Maroto’ o ‘Pasos Largos’.
Al año siguiente Massana atracó los jornales de la mina de
lignita de Serchs, con la colaboración de los hermanos Sabaté.
Pocos meses después, en marzo de 1947, repitió el mismo
atraco, obteniendo un botín de 40.000 pesetas. Durante todo
el bienio 1946‒47 la partida de Massana apoyó los esfuerzos
de la FIJL de Francia, pero también de la de Barcelona,
contribuyendo económicamente a su lucha y trasladando por
su cuenta documentos y armas. Se le atribuyó un atraco a la
casa de un conocido fascista en agosto de 1947. En septiembre
le siguió otro atraco impresionante en la masía tienda‒bar Les
Lloses. Los guerrilleros confiscaron más de 50.000 pesetas,
carabinas y objetos de primera necesidad, ya que encerraron a
los clientes en una habitación. El propietario, que era un
conocido partidario del régimen y no estaba en el momento del
asalto hizo alarde de que, si él hubiese estado presente, habría
matado a Massana. ‘Pancho’ regresó después de cuatro meses
‒en esa ocasión el propietario estaba allí‒ y, una vez que le dio
una paliza, sustrajo todos los víveres del restaurante, dinero,
alhajas y ropa y se fue de noche con sus hombres.
332 Hay datos sobre muchísimos de los hombres de estas partidas que tuvieron a
Massana de jefe, pero no se añaden sus nombres para que la narración sea fluida. La
mayoría sobrevivieron a la represión y luego vivieron en Francia.
333 Massana dio mil pesetas a sus rehenes. Quinientas para regresar cómodamente a
Barcelona y las quinientas restantes las había perdido jugando a las cartas con el político.
Vid. Sánchez Agustí (2006), ps. 72‒73.
arrancarles confesiones. Además, uno de ellos fue ejecutado in
situ por la ley de fugas una vez que confesó la culpabilidad de
‘Pancho’. Massana no asumió nunca esa ejecución. Hasta su
muerte sostuvo que nunca había matado a nadie. Según se ha
referido más arriba, noviembre de 1949 constituyó un punto
de inflexión también para la guerrilla rural catalana. La muerte
a sangre fría de cinco campesinos enlaces de Massana ‒entre
ellos un tío suyo‒ con la ley de fugas y las decenas de
detenciones de miembros de su red lo pusieron en una
situación muy difícil 334.
334 Entre los detenidos estaba también el enterrador del cementerio de Berga, que era
miembro del comité local de la CNT. Muchas veces los guerrilleros, y también los comités
sindicales clandestinos, celebraron asambleas a altas horas de la madrugada en el depósito
de cadáveres del cementerio de Berga. Sánchez Agustí (2006) p. 132.
Cuando regresó a Francia, fue detenido, pasó un mes en la
cárcel y fue desterrado a una provincia francesa lejos de la
frontera. Los franquistas solicitaron su extradición por el triple
asesinato de Alpens, pero también por el resto del código
penal español entero. El proceso de demanda de extradición
era un medio de presión de las autoridades francesas sobre la
CNT del exilio. Finalmente, en 1956 acabó su destierro y se le
permitió la libre circulación 335.
335 Mientras trabajaba como minero en el pueblo donde estaba desterrado, tuvo
comunicación continua con compañeros y habia acordado la activación de su lucha en
España en caso de aceptación de la demanda de extradición. Los comités de Francia no lo
apoyaron como debían; al contrario, lo difamaban hablando del dinero que había sacado de
los atracos. Era la época en que el Secretariado Intercontinental del MLE intentaba
repudiar el carácter armado del movimiento y especialmente la tendencia ilegalista.
Massana era ‒como ‘Quico’ y Facerías‒ un símbolo del movimiento, un atracador sin
blanca que puso en peligro su vida durante años con abnegación. Cuando en 1956 acabó su
destierro, estaba tan decepcionado por el comportamiento del movimiento que decidió no
volver a la lucha armada. Murió en Francia en 1981.
Libertad, que actuaba en las costas del Atlántico. Al final de la
guerra se dedicó en exclusiva a la guerrilla anarquista de
Cataluña.
Vila colaboró mucho con los hermanos Sabaté, así como con
Massana, de quien era amigo desde los años treinta. Era de los
guías y correos de más confianza del movimiento y ejecutó
muchas misiones durante su vida. En abril de 1946 salvó a
‘Quico’, ejecutando a un policía que quería detenerlo para
comprobar sus datos. En 1948 fue detenido en Francia por
tenencia de armas y municiones y pasó dos meses encarcelado.
Apenas fue liberado, pasó a España y voló el suministro de
agua de la acería de Berga, provocando daños importantes y la
interrupción del funcionamiento de la fábrica. En mayo de
1949 se le atribuyó un sabotaje en la línea ferroviaria
Vic‒Manlleu. En septiembre del mismo año fue herido en el
hombro durante el viaje que costó la vida a Ziglioli y Manolo
Sabaté. En enero de 1950, pasó por la frontera a la partida de
Los Maños y aprovechó su presencia en España para volar dos
torres de alta tensión en las inmediaciones de Manresa. Dos
meses después repitió el viaje a la comarca y en cuatro meses
golpeó tres objetivos diferentes: torres en Santa María, en
Ceres, pero también la línea ferroviaria Ripoll‒Torelló. Pero a
su vuelta a Francia fue encarcelado otros tres meses por paso
ilegal de la frontera. El verano de 1951 continuó sus acciones
preferidas, volando torres del tendido eléctrico en Manresa y
Vic, aunque se le atribuyó también un sabotaje ferroviario. La
última acción probada que llevó a cabo durante el periodo que
se estudia fue su colaboración en la fuga de Luis Agustín
‘Metralla’ en noviembre de 1952. "Metralla’, miembro activo
de la guerrilla y amigo de Facerías, había sido detenido en
verano de 1947 e iba a ser juzgado poco después de su fuga.
Escapó del castillo de Montjuic, fuera del cual le esperaban Vila
y Jesús Martínez ‘el Maño’, que lo trasladaron a Francia de
manera segura.
337 Pons (1977), ps. 255‒256, da las cifras de los anarquistas. Esa cifra quizás sea un
poco mayor, si nos basamos en investigaciones posteriores. Por lo que se refiere a los
cálculos globales, vid. Moreno (2001), ps. 685‒693, 735. Estas cifras reflejan la situación
del periodo 1939‒1952. No olvidemos que miles de guerrilleros (al menos mil en
Extremadura, dos mil en Asturias, pero también en otras partes) se habían echado al monte
cuando los fascistas conquistaron sus zonas y muchos de ellos estaban ya muertos antes de
1939. Si se incluye a éstos, a los anarquistas de Francia y también a los guerrilleros que
actuaron en los Pirineos durante la fracasada invasión de 1944, la cifra que guerrilleros que
actuaron en España es seguramente superior con mucho a diez mil. Vid. también Casanova
et alii (2004), p. 292‒294.
la canalla estalinista por orden de la dirección del partido en
París.
338 Hay muchos ejemplos semejantes de comunistas que cayeron en desgracia cuando
huyeron a Francia, después de más de diez años continuos de actividad en el monte.
Habian visto que sus familias eran encarceladas o ejecutadas, que sus hijos iban a
hospicios católicos y que sus compañeros habían muerto. Fieles al partido, cuando
perdieron todo contacto con sus tutores del PCE ‒que en muchas regiones habían
desaparecido después de 1947/48‒, atravesaron centenares de kilómetros de tierra
desconocida por el monte para llegar a Francia. La mayoría que lo intentaron fueron
asesinados por el camino. Su partido los abandonaba a merced de las autoridades francesas
y muchos fueron deportados a España. En Moreno, (2001), ps. 599‒606, hay un caso
característico, pero también una estimación general del fenómeno.
339 El único que siguió la linea del partido fue el jefe de la guerrilla comunista de
otra mentira más, que se debe a la propaganda fascista y no ha
sido desmentida por el PCE, es que las guerrillas comunistas
estaban financiadas por Moscú. La verdad es que el aparato
clandestino del partido en Madrid ‒constituido también por
delegados de Francia‒ solicitaba a los guerrilleros de Toledo y
de la sierra de Gredos que procediesen a atracar para financiar
al comité central de la capital340.
342 Se calcula que unos cinco mil libertarios participaron en la UNE. En la invasión
participaron algunos de ellos, que dotaron de personal a sus propias unidades.
fuerzas franquistas perdieron en torno a cien hombres y
trescientos detenidos, que fueron trasladados a Francia 343. Casi
doscientos combatientes lograron romper las líneas enemigas y
pasar al interior del país, para engrosar las líneas de la guerrilla
local.
343 Esas cifras comprenden a los guerrilleros del conjunto de la región de los Pirineos
durante la invasión, pero también a los que intentaron avanzar hacia el interior y perdieron
la vida en las zonas fronterizas, sin lograr el objetivo de la invasión. Sobre la invasión, vid.
Sánchez Cervelló (2003), ps. 61‒68; Sánchez Agustí, (2006), ps. 19‒20; Moreno (2001),
ps. 245‒250.
344 Esos términos militares no se correspondían con la realidad. Algunas “divisiones”
estaban constituidas por menos de diez guerrilleros, mientras que habitualmente una
división tenia de veinte a treinta miembros, aunque en ciertos casos, mínimos,
sobrepasaban los cincuenta.
Las guerrillas del centro y del sur.
345 Jesús Bayón González ‘Carlos’ dio cuerpo al plan que diseñó el comisario del partido
José Isasa. ‘Carlos’ fue acorralado por los fascistas en un maizal de Talavera de la Reina el
13 de septiembre de 1946. Observando con fidelidad el código de disciplina guerrillera
‒que él mismo habia redactado‒ se suicidó con un compañero suyo para no ser atrapado
vivo. Confiaba los puestos de responsabilidad a guerrilleros de fuera del PCE cuando
consideraba que eran los más apropiados y nunca ordenó la ejecución de un guerrillero por
razones políticas. Poco antes de suicidarse, el partido lo había degradado de jefe de la Ia
Agrupación a simple guerrillero.
346 Se define como guerrilleros locales a los que no tenían identidad política clara o
conocida. Muchos de ellos combatían la injusticia del régimen fascista o eran enlaces que
se habían visto obligados a echarse al monte para evitar ser detenidos. Una gran parte de
los historiadores considera equivocadamente que eran comunistas, puesto que estaban
bajo jefatura comunista.
347 Solo la división que cubría Jaén estaba totalmente compuesta y controlada por
comunistas, aunque orgánicamente pertenecía a la 2a Agrupación. Después de la
aniquilación del anarquista ‘Salsipuedes’ en 1943, los libertarios de la región, bajo el
mando de su subjefe, encontraron refugio en la subjefatura de Granada, según se ha
referido en el capítulo anterior.
para la 5a Agrupación de Albacete. Por el contrario, en la 3a
Agrupación de Córdoba participaban muchos anarquistas ‒que
al final la controlaron de verdad‒ y colaboraron con los
comunistas. En Córdoba más de cien guerrilleros, locales,
anarquistas y socialistas, se negaron a militarizarse. Más abajo
se presenta detalladamente la actividad de los guerrilleros
libertarios en el sistema de las sierras centrales del país.
348 El teniente Gómez Cantos, que ordenó la ejecución, fue depuesto de su cargo. ¡La
razón no fue la ejecución en sí misma, sino que no permitiese a los que iban a morir
confesarse y comulgar, hecho que provocó la protesta por escrito del cardenal primado de
España! Gómez fue responsable de centenares de ejecuciones colectivas sin juicio de
ciudadanos, tanto durante la Guerra Civil como más tarde, ejecuciones que disfrutaron del
favor del estado y de la iglesia...
muchas bajas, entre las que estuvieron también las de
‘Francés’ y de ‘Carlos’.
351 Merece la pena decir que el comunista Francisco Expósito, comisario político de la
21 división de la 2a Agrupación, controlada por los comunistas, afirma en sus memorias
que el 80% de los guerrilleros de Ciudad Real eran comunistas, pero la dirección del
partido en Madrid cedió la jefatura a los anarquistas para no dar la impresión de que los
comunistas aspiraban a cargos y puestos de mando. Vid. Moreno (2001), p. 344. Para
quien tenga un mínimo conocimiento histórico y un análisis político más cualificado que
el de un niño, eso es una mentira evidente.
Francisco Corchado ‘Lazarete’. En la partida de ‘Lazarete’
participaba su mujer, Sergia Flores, los combatientes
anarquistas Manuel Fernández ‘Secretario’ y Raimundo Flores
‘Arroyo’ y varios guerrilleros más de su zona.
352 El autor del libro más detallado sobre el tema se basa, para esta información, en la
declaración del guerrillero comunista ‘Timoshenko’, que prestó cuando se entregó y
empezó a delatar a compañeros. Desgraciadamente el autor repite ¡ocho veces! la
afirmación de ‘Timoshenko’ de que los jefes anarquistas ‘Veneno’ y ‘Lavija’ declararon el
“sálvese quien pueda” el verano de 1946. Invalida esa subestimación la colaboración de
anarquistas con comunistas incluso después de esa fecha, pero también la permanencia de
los anarquistas en la guerrilla de la región. Tal vez los comunistas decidieron disociarse de
los anarquistas y conservar el nombre de 2a Agrupación sin que los anarquistas se
Los anarquistas, por supuesto, no habían abandonado la
guerrilla; al contrario, ‘Lavija’ organizó otro atraco
deslumbrante el 24 de septiembre de 1946, en esta ocasión al
tren correo Madrid‒Badajoz. Los guerrilleros subieron al tren
en la estación de Puertollano sin hacerse notar y en su
recorrido irrumpieron en el último vagón, desarmaron a los
guardias y robaron trece sacas con dinero. La cantidad no se
dio a conocer, pero seguro que fue muy grande.
contado, fue asesinado en Barcelona en 1949. De ‘Joven’ hay datos escasos, sabemos
solamente que también él fue asesinado por la policía en Barcelona en 1947. Vid. Mera
(2006), ps. 410‒411 y Moreno (2001), ps. 356‒357.
los guerrilleros. Limia se concentró en dos tácticas. La primera
consistió en transformar a los guerrilleros en delatores a
cambio de recompensas económicas o reducciones de penas.
La segunda fue la creación de las “contrapartidas”, que eran
partidas de policías que se disfrazaban y transitaban por el
monte haciéndose pasar por guerrilleros. Compraban víveres a
fincas y majadas remotas y, cuando su propietario no
denunciaba inmediatamente su presencia a las autoridades,
volvían, lo detenían y lo torturaban como sospechoso de ser
enlace de los guerrilleros.
355 ‘Corruco’ se había echado al monte en 1939 con ‘Lavija’ y ‘Joven’, los dos
guerrilleros anarquistas de Ciudad Real. El único superviviente del desastre de Los
Blázquez fue ‘Joven’, sobre el que desde antes había sospechas de que era traidor. Los
hombres de Habas descubrieron mediante un trabajo sistemático la identidad del soplón y
lo ejecutaron el 18 de marzo de 1947. Moreno (2001), p. 481.
356 Moreno (2001), p. 480.
El agresivo comportamiento de los anarquistas de Córdoba
no tenía nada que ver con su carácter, pero tampoco con un
intento de aterrorizar en general a la población. Reflejaba más
el talante positivo con el que la población de los pueblos de la
zona ‒gente sin tierra con una larga tradición política‒
abordaba la guerrilla. El auxilio activo de los habitantes a los
anarquistas imponía la venganza ejemplar de los delatores,
porque no solo ponían en peligro a los hombres armados, sino
también a la vasta red de enlaces y simpatizantes. Eso lo
comprendió bien el jefe de la Guardia Civil de la región, que
decidió responder a la acción de los guerrilleros con una
campaña de terror sobre los habitantes de la zona para aislar la
ayuda a la lucha armada. Hasta 1949 las autoridades habían
ejecutado sin juicio a más de ciento sesenta personas 357. Los
cadáveres de los ciudadanos se dejaban en las plazas o en
puntos donde los guerrilleros habían hecho sabotajes, para dar
ejemplo a la población.
357 La mayoría ‒al menos ochenta‒ fueron ejecutados en 1948. Los datos oficiales de los
ejecutados están en Moreno (2001), ps. 570‒574, aunque hay sospechas de que esa lista es
mayor. Más de cien muertos corresponden a una comarca que cubre seis o siete pueblos de
montaña.
Mientras atravesaban a pie un elevado puente sobre el río,
Salado se lanzó sobre un guardia para arrastrarlo consigo a la
muerte tirándolo puente abajo. Consiguió llevarse consigo solo
la capa del policía, que conservó en el último instante su vida y
no siguió a Salado en su fatal caída.
358 Las estadísticas oficiales del estado refieren veintiséis sabotajes, pero todas las cifras
de las estadísticas del estado están ‒intencionadamente‒ reducidas. Córdoba era una
provincia con un elevado número de sabotajes en comparación con otras regiones. La
cantidad de explosivos expropiada, que ofrecía la posibilidad de ataques con bomba,
desempeñó un papel importante. Vid. Pons (1977), ps. 86,433.
Ambas emboscadas las tendió la partida de ‘Vicente del
Puerto’, que era uno de los cinco hermanos Benítez,
Florencio 359. Las patrullas de la Guardia Civil se dieron a la fuga
en ambas ocasiones con bastantes heridos.
359 Los hermanos Martín Benítez eran los siguientes: José ‘Pedro’ (muerto en un
enfrentamiento el 23 de marzo de 1949), Cándido ‘Rafaelito del Puerto’ (que fue
asesinado el 21 de agosto de 1950 por la Guardia Civil tras una larga persecución y cuando
se había apartado de sus compañeros), Julián ‘Daniel’ (que fue ejecutado por sus
compañeros por una falta grave, y Florencio ‘Vicente del Puerto’, el último guerrillero de
la 3a Agrupación ejecutado el 11 de mayo de 1953 en Sevilla.
generosamente su ayuda a los guerrilleros. Ofreció a los
perseguidos de Córdoba techo y alimento y señalaba objetivos
para cometer atracos a partidarios del régimen de la zona. La
partida de Habas consiguió expropiar casi 300.000 pesetas en
un periodo de tiempo muy pequeño. El dinero se destinó a
ayudar a los presos y a sus familias y se utilizó también para
alquilar o comprar apriscos y huertos en la comarca, para que
los combatientes tuviesen bases seguras. Además, algunos
jóvenes anarquistas de Cazalla decidieron hacerse guerrilleros
en un periodo en que la guerrilla tenía enormes bajas.
360 Miguel García Vázquez ‘Botasfinas’ fue la pesadilla de los confidentes y de los
fascistas de Córdoba, ya que era quien habitualmente se hacía cargo de las ejecuciones.
361 Bernabé López Calle ‘Bernabé’ o ‘Comandante Abril’ (1889‒1949) era miembro de
habían puesto en marcha su propia organización, con la
Agrupación Stalingrado de Málaga. Ambas agrupaciones
llegaron a un acuerdo en agosto de 1945 y fundaron la
Agrupación Fermín Galán, que se incorporó primero a la UNE y
luego a la ANFD. Bernabé asumió la jefatura. La Agrupación
Fermín Galán es el único caso en la guerrilla española en el que
comunistas y anarquistas se coordinaron y colaboraron desde
el principio hasta su derrota, sin interrupción. En ello
desempeñó un papel importante tanto el carácter de Bernabé
como el predominio de los anarquistas en la zona.
362 Pocos meses antes había sido detenido el guerrillero anarquista Antonio Núñez,
fundador de las partidas de Ubrique con ‘Libertario’. Fue ejecutado en Sevilla el 28 de
febrero de 1952. El único superviviente de la agrupación fue Pablo Pérez ‘Manolo el
Rubio’, comunista, fundador de la Agrupación Stalingrado y colaborador de Bernabé.
Pérez abandonó la guerrilla en 1949 y se ocultó en un aprisco bajo la protección de una
pastora. Las autoridades lo localizaron y lo prendieron después de veintisiete años, ¡en
1976! Los jueces decidieron que su encierro durante veintisiete años en el aprisco era
suficiente castigo y lo absolvieron por decreto...
guerrilleros comunistas en la recién fundada Agrupación
Granada‒Málaga, que siguió siendo conocida con el nombre de
su comandante ‘Roberto’ 363 . Los guerrilleros anarquistas
continuaron sus actividades de manera independiente, en
connivencia con la CNT clandestina de Granada y de Málaga.
Especialmente en Granada los anarquistas tuvieron una
presencia muy intensa, con los legendarios hermanos Quero
como figuras más reconocidas.
364 La región de Granada está muy arriba en las listas oficiales de las estadisticas de la
guerrilla (en las que las cifras están adulteradas a la baja para minusvalorar el fenómeno).
Es la primera en enfrentamientos armados con 151, la primera en policías muertos con 43
(la cifra real es al menos el triple), la primera en secuestros con 188, pero también en
atracos con 423, mientras que es la cuarta en número de sabotajes con 34. Vid. Pons
(1977), ps. 433‒434. Esas cifras resultan de la actividad continua de comunistas
‒Agrupación Roberto‒ y anarquistas en la comarca, actividad de características violentas
y agresivas, que fue detonada por el extremo terror de estado que conoció Granada, ya
desde el comienzo de la Guerra Civil. Es significativo que en 1941 los tribunales de
Granada tuviesen 20.174 casos por enjuiciar, cifra mayor que las de Madrid y Barcelona,
que la multiplicaban en población. Vid Casanova et alii (2004), p. 22. En la región de
Granada actuaron, verificados, más de seiscientos guerrilleros.
que les tenderían los anarquistas para diezmarlos. En principio,
las fuerzas de policía cayeron en la trampa y comenzaron a
organizar la operación, pero ciertos detalles traicionaron a los
dos compañeros, que se vieron obligados a volver al monte. La
partida aguantó la represión al menos hasta noviembre de
1949, cuando murió Félix Castillo "Clares".
367 José Castro Veiga ‘Piloto’ era un guerrillero socialista muy capacitado. En 1949
abandonó la insurgencia y anduvo escondiéndose en casas. La década de 1960 decidió
ayudar a reconstruir el partido socialista en la comarca, pero alguien delató su escondite y
la policía irrumpió en él y lo mató en 1965.
corazón. Quien lo escondía lo trasladó a un cruce de la aldea de
Villamor. Cuando se dio a conocer la identidad del cadáver, se
realizó una colecta entre los aldeanos de la comarca para
asegurarle una tumba digna, muestra de la simpatía hacia su
persona y de la conformidad con su lucha.
368 Algunas fuentes cuentan que dos hijos eran miembros del PCE, quizá por su
participación en la Agrupación. Pons (1977), p. 190.
asesinados, causando solamente un muerto en la Guardia Civil.
A este duro golpe le siguió otro aún peor cuando el 28 de enero
de 1948 una operación bien organizada de las autoridades, en
la que también participaron muchos chivatos que se habían
enrolado en la Agrupación, concluyó con el asesinato de trece
guerrilleros y seis enlaces y con la detención también de
cientos de enlaces.
369 En Asturias la guerrilla ejecutó al menos a 148 confidentes y chivatos, cifra mayor
que en cualquier otra región. La política represiva en la región se basaba en la denuncia.
Vid Casanova et alii (2004), p. 265.
comunistas intentaron controlar la región a través de un
delegado que reunió a los guerrilleros y trató de incorporarlos
a la UNE, pero ellos se negaron y se incorporaron a la ANFD.
Protagonistas de la lucha armada en León fueron los
anarquistas Casimiro y Amable Fernández ‘Arias’, que eran
jefes de una partida, y Calixto López ‘Zara’. Su actividad
violenta ya desde el período de los huidos, continuó hasta
1947. En la primavera de 1947, las autoridades asestaron
golpes decisivos a la partida de los ‘Arias’. Entre las partidas en
las que los anarquistas eran mayoría poco a poco prevaleció la
opinión de que su lucha no conducía a ninguna parte y, por
tanto, en la primavera de 1948, muchos guerrilleros de León
emprendieron el viaje a Francia. Su relación con los guerrilleros
anarquistas de Cantabria, en el norte, jugó un papel catalizador
en su decisión.
370 Los tres guerrilleros eran Saturnino Colomer, Jesús Borrás y José Alarcón. No hay
datos de cuándo fueron ejecutados.
de la nómina de una mina de Teruel, con un botín de 200.000
pesetas. La acción congregó en torno a ellos a otros fugitivos y
guerrilleros de la zona. Durante el mismo periodo la AGL
permaneció relativamente inactiva, montando redes y creando
bases en la región. La principal preocupación de los fundadores
de AGL era el proselitismo político de los guerrilleros, ya que la
mayoría de ellos o bien eran miembros de la CNT o bien eran
simpatizantes. Para facilitar su labor, los comunistas
dispersaron a los miembros de la CNT en diferentes áreas con
el fin de evitar la oposición interna371.
371 Para informes detallados de los comunistas al PCE de Francia, vid. Sánchez Cervelló
(2003), ps. 107‒108.
372 Tiburcio Ferrer (¿?‒1989) fue comandante de la Columna Durruti. Cuando se
conoció su actividad clandestina, pasó a Francia.
depuración de Delicado. El histórico fundador de la AGL y
héroe de la resistencia francesa cayó víctima de sus
compañeros, a causa de su política unitaria 373.
373 Pocos días antes había sido depurado otro comunista de la partida original de
Delicado. De ambos se difundió que se habían ido a una misión, ya que era inconcebible
que se dijese la verdad, dada su forma de ser y su popularidad. Sánchez Cervelló (2003),
ps. 91‒92. ¡Fue tan unánime la ocultación del hecho y tal el repudio del PCE a Delicado,
que algunos historiadores creen que Delicado era miembro de la CNT! Vid Casanova et
alii (2004), p. 239.
374 Dos de ellos, Pedro Navarro y Jesús Hernández, fueron más tarde expulsados por los
comunistas y acabaron en Valencia. El tercero pasó después solo a Francia, participó en
expediciones a Aragón y finalmente cayó muerto por las balas de los policías en el octubre
Así, en el otoño de 1946 la AGL se sintió preparada para
llevar a cabo ciertas acciones violentas. Había adquirido gran
parte de sus armas a través de los anarquistas de Valencia, se
financió con un plan que habían proyectado miembros de la
CNT, engrosó sus líneas con combatientes libertarios locales,
estuvo conectada a través de enlaces anarquistas que querían
ayudar a derrocar el régimen tiránico. Mientras los anarquistas
ayudaban a la jefatura comunista de la Agrupación a
mantenerse en pie, ellos se mostraban incapaces de organizar
su propia guerrilla independiente. La iniciativa para algo
semejante fue tomada por los mineros anarquistas de Utrillas,
que, fieles a su práctica de unificación, quisieron entenderse
con los comunistas, antes de la fundación. Por desgracia, la
CNT del interior no les dio facilidades, ya que estaba
consagrada a la labor sindical y a las alianzas y entendimientos
políticos. La CNT ortodoxa de Francia no les ayudaba a causa de
su postura unionista y sus relaciones con los comunistas.
375 Carta del jefe de la AGL al partido el 12 de septiembre de 1946, escrita en clave, para
que fuese de difícil descodificación en caso de ser hallada por las autoridades. Vid.
Sánchez Cervelló (2003), p. 108. Por tanto, incluso estaba en juego el predominio político
en la región.
376 Los comunistas continuaron desacreditando a ‘Petrol’, al que calificaron de
bandolero, justamente como las autoridades los calificaban a ellos mismos. En marzo de
2008, localizamos en Aguaviva al hijo de ‘Rabos’, compañero inseparable de ‘Petrol’.
Durante su adolescencia admitió toda la propaganda de las autoridades contra los
guerrilleros y de los comunistas contra ‘Petrol’. Exceptuando su padre ‒a quien
Partido Comunista ya se había hecho con la primacía en
Levante y Teruel. Además, no había ningún guerrillero
anarquista de prestigio que pudiese poner en cuestión esa
primacía.
consideraba aparte‒ estaba de acuerdo con el parecer sin fundamento del PCE de que
‘Petrol’ y el resto de la partida eran bandidos corrientes. La prolongada falta de réplica a
esa difamación indujo, durante el franquismo, a una gran parte de los habitantes de la
región a aceptar la propaganda comunista.
377 ¡Los cuadros dirigentes de la AGL se alarmaron con el ingreso masivo de libertarios,
hasta tal punto que, según escribían al partido, se insinuaba el dedo de la policía para la
disolución de la guerrilla! Al mismo tiempo, se negaron a reclutar bastantes enlaces que se
descubrían, con el único criterio de su identidad política libertaria. Por la pureza de la
linea, los comunistas preferían dejar a sus colaboradores en manos de las autoridades,
hecho que más tarde admitieron incluso ellos mismos. Sánchez Cervelló (2003), p.
113‒114.
La AGL pasó al ataque en la primavera de 1947,
aprovechando el gran número de guerrilleros que tenía ya en
sus filas. Hasta agosto había hecho cerca de cincuenta
sabotajes en líneas ferroviarias, instalaciones de tendido
eléctrico y fábricas. Al mismo tiempo, comandos de guerrilleros
ocupaban pueblos, distribuían material impreso y ejecutaban a
confidentes y falangistas. Varios jefes de esos comandos eran
libertarios, como ‘Cinctorrá’ 378 y ‘Carlos’ 379 en la sierra del
Maestrazgo y ‘Manco de la Pesquera’ en Cuenca. La
Agrupación fue implacable con los confidentes y ejecutó a más
de cincuenta personas en ese periodo. También constituyeron
un éxito importante las ejecuciones de dos reconocidos
torturadores de la región, autoridades en los pueblos de
Castellote y Mas de las Matas. Este segundo ‒que durante
décadas había sido responsable de torturas y asesinatos de
parientes de guerrilleros‒ murió cuando trasladaba el cadáver
bomba de un confidente ejecutado que los guerrilleros habían
dejado en los límites de su jurisdicción. La explosión mató
también a un médico y un falangista e hirió gravemente a tres
policías, al juez, al alcalde pedáneo y al secretario de Mas de
las Matas.
382 Los tres muertos en el enfrentamiento fueron Fabián Nuez, Jorge Camón y Rogelio
Burillo. Los seis ejecutados fueron Alfredo Cervera, Roger Ramos, Mariano Llovet, Josep
Capdevila, Manuel Rodenas y Marcos Sánchez. Los dos jóvenes eran Ángel Fernández
(dieciséis años de prisión) y Josep Ibáñez (veinte años de prisión). Ibáñez murió en 1966
en la calle, en Valencia, mendigo y sin techo. El estado español no reconoció la cualidad
de la resistencia ‒salvo a unos pocos‒, para evitar pagar jubilación e indemnizaciones a los
guerrilleros antifascistas. Vid. Marín (2002), p. 295.
383 Los muertos fueron Antonio Rivera y Aurelio Martí. Los demás eran Jaime Jordán,
Alejandro Tiburcio, Eusebio Ontes, Antonio Alquézar, Antonio Carruesco y tres
compañeros cuyo nombre se ha perdido.
política. Vinieron de Francia nuevos delegados del partido para
imponer la nueva línea. Muchos de los antiguos guerrilleros
discreparon de esas perspectivas. Bastantes se independizaron
y empezaron a actuar fuera del control de la Agrupación. Otros
fueron liquidados por sus compañeros porque querían
continuar la lucha. Entre ellos se encontraba en 1950 el
comunista Francisco Corredor, ex jefe de la AGLA y miembro
fundador con Delicado.
386 Antes de empezar su frenética ruta hacia la frontera, ‘Maquinista’ mató a su antigua
prometida, que lo abandonó cuando se hizo guerrillero.
insurgentes. No está registrada la identidad política de
‘Pastora’, pero el apodo que eligió para sí mismo (‘Durruti’), la
tradición libertaria de su pueblo y su ruptura con los
comunistas, llevan a clasificarlo al menos como no identificado.
387 Su soledad era tal que algunas noches iba a praderas y llevaba a las vacas a lugares
con hierba fresca para sentir que se comunicaba. Las noches en que el viento soplaba
fuerte, salía de la cueva y corría por el claro gritando al cielo. Cuando necesitó volver a
hablar, dos años después, le costaba mucho esfuerzo articular las palabras. Sánchez
Cervelló (2003), p. 399‒401.
agricultor. En 1960, lo denunció a la policía un contrabandista,
antiguo conocido suyo, al que había prestado algo de dinero.
Las autoridades del Principado se lo entregaron a la Guardia
Civil y ‘Pastora’ fue condenado a sesenta años de prisión.
Permaneció en la cárcel más de diecisiete años y no fue
incluido en la amnistía de los presos políticos que se proclamó
en la Transición. En 1977, Florencio Pía seguía siendo para el
estado español un bandolero y un malhechor común. La
amnistía abarcaba a los sindicalistas, a los mandos de partidos,
a los combatientes destacados. A los antiguos guerrilleros los
tapaba la amnesia...
Valoración y conclusiones.
388 Puede establecerse una comparación interesante de esta realidad con otro ejército
guerrillero que nació en Europa en ese mismo periodo: el Ejército Democrático de Grecia.
El DSE estaba compuesto casi en su totalidad por gentes de provincias, más vulnerables a
la reacción debido a las circunstancias especificas del campo. Vid. Yorgos Margaritis,
Iaiopía too eááqvikov e/urpváwv noáéluov 1946‒1949 [Historia de la Guerra Civil
Griega 1946‒1949], Atenas, Vivliorama, 2001, tomo I, ps. 210‒212, 333.
nunca fue su prioridad. La Confederación se centró en la
creación de sindicatos y en los debates con las otras fuerzas
políticas. Pese a estar en contacto con la casi totalidad de los
núcleos guerrilleros libertarios, los compañeros del interior no
se preocuparon de la coordinación y el fortalecimiento de la
lucha armada. Al contrario, durante el período en que fue
secretario Enrique Marco hubo una discreta desaprobación de
la lucha armada para facilitar las negociaciones con las demás
fuerzas políticas. Más tarde, cuando todo había terminado, la
tendencia reformista se esforzó en poner de manifiesto sus
relaciones con la guerrilla, apropiándose de la lucha de las
personas con las que estaban en contacto 389.
389 ‘Juanel’ ‒figura central de los reformistas‒ registra las relaciones de los guerrilleros
con la CNT del interior, cuenta la disposición que habían mostrado a coordinarse con el
Consejo Nacional, pero no llega a una conclusión clara: el comité de la CNT del interior no
ayudó nada a los guerrilleros y no tuvo nunca la lucha armada entre sus prioridades. Vid.
Molina (1976), ps.189‒194, pero también constantes referencias en el resto del libro.
propia guerrilla cerca de regiones fronterizas fracasaron por la
infiltración de agentes en las estructuras organizativas de
Francia.
390 Estos datos se publicaron por vez primera en 1968 en investigaciones de la Guardia
Civil y desde entonces los reproducen los analistas del régimen. Hay valoraciones de ellos
en todos los libros sobre la guerrilla. Pons Prades los presenta pormenorizados por
provincias. Vid. Pons (1977), ps. 433‒436.
estudiosos391 y el análisis comparativo de otras fuentes ‒tales
como el registro de mortalidad anual de la Guardia Civil 392‒ han
ofrecido una mejor aproximación a la estampa cuantitativa de
la guerrilla. Los guerrilleros antifascistas eran por lo menos diez
mil, de los cuales murieron alrededor de una tercera parte en
combates o pelotones de ejecución. Los grupos armados se
apoyaron en los denominados "guerrilleros de llano", es decir,
enlaces que constituían la necesaria red de apoyo. Al menos
100.000 combatientes actuaron como enlaces y pagaron el
precio correspondiente: de ellos aproximadamente 70.000
fueron encarcelados durante algún tiempo, mientras que unos
mil fueron ejecutados in situ ‒sin juicio‒ por la Guardia Civil y
los paraestatales.
391 La enorme investigación de Francisco Moreno en siete zonas del centro y del sur del
país demostró que los datos oficiales ocultaban la existencia de al menos trescientos
noventa y siete guerrilleros, es decir, del 26% de esas comarcas. Vid. Moreno (2001), ps.
685‒690.
392 El registro anual se publica cada año y refiere la cifra de muertos de la Guardia Civil,
independientemente de la causa (p.ej. enfermedades, accidentes). El aumento del número
de muertos durante el periodo investigado es grande, de cien a doscientos muertos al año
por encima del término medio. Vid. Heine (1983), p. 434.
Pese a las dimensiones cuantificables ‒aunque con
dificultades‒, el resultado real de esta prolongada lucha fue
una mancha negra en las sociedades provincianas donde se
desarrolló. Los desplazamientos de población y las represalias
contra poblaciones enteras borraron del mapa bastantes
aldeas de montaña. Las áreas donde se desarrolló la guerrilla
vivieron un segundo periodo de terror, tras el del triunfo
fascista en la Guerra Civil. Ese terror no sólo se manifestó en las
ejecuciones, los encarcelamientos y las torturas. Los bienes de
guerrilleros y enlaces fueron confiscados y se impusieron
sanciones económicas devastadoras por faltas muy leves.
Mucha gente se vio obligada a emigrar a los centros urbanos y
a abandonar los afanes de su vida en manos de sus paisanos de
derecha. Los combatientes que se quedaron en sus pueblos, lo
hicieron a menudo en un régimen de miedo y aislamiento
social, que se ha mantenido incluso después de la Transición.
El decenio de rigidez.
395 El Opus Dei es una organización católica que se fundó en 1928 en Madrid con
carácter educativo y posiciones conservadoras extremas. En realidad es una organización
religiosa de tipo masón que floreció bajo el régimen franquista, fundó universidades e
incrementó su influencia económica y social. Hoy ‒su fundador y colaborador de Franco
ha sido beatificado mediante el procedimiento exprés por la iglesia católica‒ la
organización cuenta con unos noventa mil miembros en todo el mundo ‒clérigos y laicos‒
y su fortuna asciende a tres mil millones de dólares.
tradicionales del bando antifascista. El PCE decidió no hacer
manifiesta su presencia en la esfera pública, sino defender a
sus miembros y sus mandos, esperando una oportunidad
mejor. Su retórica cambió en el exilio y pasó de la lucha armada
que promovía hasta 1950 a la lógica de la reconciliación
nacional, de modo que todos los españoles juntos creasen una
sociedad que garantizase las libertades individuales y la
convivencia democrática 396. La postura del Partido Comunista
quedó sellada desde el 6o Congreso del PCE en Praga en 1960,
en el que la dirección consideró que Franco caería por sí solo
en pocos años. Así, se decidió que no se debía sacrificar a la
gente en las luchas contra el régimen, sino mantener
incólumes sus mandos para que se hiciesen cargo de la acción
durante la transición 397.
400 Hay sospechas de que Juan José Gimeno mantenía la falsa impresión de la existencia
de la organización para cobrar el dinero. Por otra parte es cierto que era el punto de
referencia de los libertarios que eran excarcelados. Los datos sobre su persona son escasos.
Vid. Herrerín (2004), ps. 172‒173.
sindicalismo del régimen, para fortalecer la postura de la
negociación ante la patronal. El único partido que animó a sus
miembros a incorporarse al Sindicato Vertical y trabajar desde
dentro fue el Partido Comunista. Esas luchas obreras
precipitaron la liberalización de la economía franquista y
crearon un nuevo terreno de lucha en la estancada sociedad
española de los años cincuenta.
401 Olegario Pachón Núñez (1907‒¿1982?) era un campesino sin tierra de Extremadura.
Estaba ya activo en la organización en su región antes de la Guerra Civil, pero ganó fama
principalmente a causa de sus cualidades guerreras (al final de la Guerra Civil era jefe de
división). Escapó en el último momento a su ejecución por los estalinistas, fue detenido en
Alicante y escapó de un campo de concentración en Andalucía. En enero de 1940 llegó a
Francia después de haber atravesado a pie casi mil kilómetros. Fue encerrado en los
campos de concentración y siguió el destino común de sus compañeros exilados. Siguió
siendo permanentemente fiel a la línea de la participación política.
Fueron necesarios otros dos años de procesos internos para
que tuviese éxito el intento de reconstrucción real de CNT a
nivel nacional, que se discutirá en el siguiente capítulo.
406 El secretario de Esgleas, Juan Sans Sicart, admitió más tarde que habia montado
bastantes “apaños” locales de tal tipo por indicación de Esgleas. Herrerín (2004), p.194.
reuniones locales y nacionales la noche anterior de las
respectivas de la CNT. De ese modo evitaban los gastos de
transporte de los miembros de la organización, pero también
aparecían listos y concertados de antemano en las asambleas
de la CNT e influían en las decisiones hacia su propia tendencia.
La única esperanza de evitar ese sistema de control de
decisiones y de tesis orgánicas era la organización de un
congreso en el que pudiesen estar directamente representadas
las federaciones locales, trasladando más fielmente la voluntad
política de las bases.
407 Pese a que muchos sabían que esa tentativa carecía de fundamento, era difícil de
refutar, ya que casi todos los exilados tenían un pariente o amigo que había estado o estaba
en prisión. Vid. Peirats (2009), p. 634.
ortodoxos‒ dentro de España, pero daban información falsa a
las bases e impedían el planteamiento sereno de la
situación 408.
408 Para que se entienda qué significaba para los ortodoxos un “comité nacional”, baste
con decir que, cuando la policía descubrió la guarida de Facerías tras el tiroteo de la plaza
Molina en 1951, encontró tres sellos diferentes. Uno era del comité nacional, otro del
comité de defensa de Cataluña y Baleares y el tercero del comité catalán de solidaridad con
los presos. Facerías, además de todo lo que hacía, enviaba informes a Francia con tres
identidades diferentes. Hasta en los informes policiales sobre el incidente queda claro que
se trataba de aumentar el prestigio del comité de los ortodoxos. Vid. Herrerín (2004), ps.
200‒202.
influencia de los aparatos de la FAI a costa de las
manifestaciones de las bases de la organización. El amplio
rechazo que recibió Esgleas por ocupar continuadamente el
puesto de secretario en el Secretariado Intercontinental, le
obligó a adelantar su marcha en el pleno de 1958 409. El otro
tema sobre el que había creciente presión era la reunificación
de CNT.
La consecución de la unidad.
410 Manuel Buenacasa Torneo (1886‒1964) era de las figuras más reconocidas del
movimiento. Secretario del comité nacional en 1919 y también de la regional de Aragón en
varias ocasiones, pagó su actividad con sucesivos destierros y encarcelamientos. Se le
considera una de las mejores mentes organizativas de la Confederación, ya que organizó
tanto los congresos de 1919, 1931 y 1936 como el congreso de grupos anarquistas de 1922,
que precedió a la fundación de la FAI. En 1923 organizó la fuga de Ascaso de la prisión de
Zaragoza.
ambas tendencias, que llevaron a las federaciones locales de
París a la vanguardia de la lucha por la reunificación. Esfuerzos
similares en favor de la unidad se desarrollaron también en
núcleos del continente americano, como Venezuela y México.
La tendencia reformista estaba permanentemente abierta a los
ortodoxos, ya que una mayoría abrumadora deseaba volver a
la acción común. En su sesión plenaria, en 1960, dio a conocer
un comité de tres miembros ‒con Cipriano Mera como figura
política central‒ que tenía la misión de negociar con la otra
parte con el fin de lograr la unificación.
411 En Peirats (2009), ps. 657‒658 hay fragmentos extensos del comunicado.
clave ‒y única concesión de los ortodoxos‒ para la unidad fue
que los miembros de los reformistas podían incorporarse en
masa a las federaciones locales de la CNT, hecho que evitaba la
exclusión y las represalias a nivel individual. Prácticamente no
hubo reunificación, sino una absorción de una tendencia por
otra.
413 A principios de los años cincuenta hubo una intensa polémica en Italia entre algunos
grupos de la FAI y los recién constituidos GAAP, fundados por Masini. La evolución de
esta controversia condujo a la fragmentación del movimiento y a la fuga de militantes
hacia los socialistas y los neocomunistas. Vid. Téllez (2004), ps. 329‒331.
labor subversiva a través de la acción directa.
El nuevo año fue muy difícil para Facerías, que tenía fuertes
414 Jesús del Olmo Sáez ‘Malatesta’ (1924‒1958) había perdido con catorce años tres
dedos cuando le explotó en las manos un detonador que había encontrado en la playa. La
vida en Italia no le satisfacía, pero se había quedado a ayudar a su íntimo amigo para
sufragar su sueño del campamento. Ayudó a Facerías de diversas maneras hasta el final.
Murió en un accidente de tráfico.
415 ‘Rodolfo’ ‒cuyo nombre real sigue siendo desconocido‒ regresó a Francia y desde
allí fue a Israel para escapar de las persecuciones y vivir en un kibutz. Su suerte desde
entonces es desconocida.
discrepancias políticas con sus compañeros y no podía llevar
adelante su plan de fundar una organización anarquista de la
juventud italiana. Su fracaso en esta tentativa fue seguido por
un intento fallido de robo en un banco de Roma, robo que
preparaba hacía tiempo y en el que se basaba para cubrir la
organización del tercer campamento. Este se llevó a cabo de
julio a agosto de 1955, pero la asistencia fue muy reducida.
Facerías se decepcionó y muchos de sus allegados se alejaron
de él. Estudió la perspectiva de emigrar a Latinoamérica, cosa
muy difícil, ya que con la documentación falsa no podía sacar
un visado legal y tenía que viajar como polizón.
416 El atraco acabó normalmente, pero, durante las investigaciones, un lugareño dio
informaciones que llevaron a la policía a la guarida de los atracadores. Facerías ya se había
ido. La policía ordenó a los presentes que los siguiesen a pie hasta la comisaría de la
ciudad. Durante el traslado, ‘Metralla’ disparó al aire para intimidar y huyó en mitad de la
noche.
en Francia y planeaban su expedición a Barcelona. Su primer
objetivo era establecer bases, reactivar los enlaces, pero
también ejecutar a ‘Chaval’, delator de la partida de Los
Maños. En Francia conocieron a Goliardo Fiaschi 417 , que
deseaba participar en la lucha antifranquista y acordó
acompañarlos. Mientras estaban en Francia, Facerías estuvo
intentando continuamente ponerse en contacto con Sabaté,
pero ‘Quico’ lo rehuía.
418 La única excepción fue la revista Atalaya de Femando Gómez, que en su primer
número se refirió con duras palabras a ese silenciamiento. Reprobó la actitud de los
comités, recordó los inestimables servicios que Facerías había rendido a la causa
revolucionaria y comparó su actividad con la de Durruti. Finalmente lanzó la sospecha de
que la traición del grupo de Facerías había partido de Francia. Téllez (2004), p. 382‒383.
419 Luis Agustín Vicente ‘Metralla’ (1920‒¿?) era miembro de las partidas guerrilleras
de 1942 a 1947, cuando fue detenido. Según una información, salió de la cárcel de Burgos
en 1973, aunque la pérdida total de su rastro hace sospechar que nunca salió vivo de la
cárcel.
acusación de haber participado en un atraco, el de 1948, en el
que había perdido la vida un vigilante de la fábrica. El 13 de
noviembre de 1952 salió de la cárcel en libertad condicional,
puesto que el tribunal reconoció que se le había arrancado la
confesión mediante torturas. Una de las condiciones era la
prohibición de trasladarse a las provincias fronterizas. Cuando
esa condición expiró a principios de 1955, Sabaté se preparó
para volver a la acción dentro de España.
420 La composición de los grupos en Francia sigue siendo hoy casi desconocida. Su corta
vida, su controversia con los comités y el extremo secretismo de sus miembros han dejado
para la historia solo los nombres de los detenidos en España y pocas cosas más sobre las
que no es posible encontrar más datos.
en Francia, se hizo necesario rellenar la tesorería con la táctica
favorita de ‘Quico’. Promotor involuntario de la organización
fue el Banco de Vizcaya. Los cuatro compañeros atracaron la
sucursal de la calle Mallorca el 6 de mayo 1955 y expropiaron
700.000 pesetas. La respuesta de las autoridades fue
inmediata. Decenas de registros en casas y los interrogatorios
de anarquistas y sospechosos no pudieron llevar al grupo de
Sabaté, pero descubrieron la imprenta clandestina de
Solidaridad Obrera. El periódico se imprimía por una pequeña
iniciativa de compañeros de común acuerdo con el comité
regional ‒anquilosado‒ de la CNT. Pocos días después, Sabaté
se puso en contacto con el comité, para entregar dinero para
apoyar a los presos y para los gastos de la organización. En uno
de sus encuentros con el secretario, se vio obligado a atacar
con su ametralladora a una furgoneta de la policía que los
seguía, hiriendo al conductor 421.
421 Una detallada estampa del suceso se encuentra en Téllez (1978), ps. 125‒127. La
policía siguió al secretario del comité sin saber que se iba a encontrar con Sabaté.
Toulouse, Sabaté bombardeaba a distancia con material
propagandístico el centro de la ciudad. Hacia el final del año
‘Quico’ regresó a Francia.
423 Ángel Marqués Urdí ‘Pepito’ (1922‒¿?) salió de la cárcel en 1976, después de
veinte años. Participó en la guerrilla desde 1946, tras conocer a Facerías.
424 Entre los detenidos mencionamos de manera representativa a Josep Prat Closa
(1914‒1983) ‒obrero textil y responsable de la gran organización de la CNT en Terrassa‒
que salió de la cárcel en 1964, pero también a Santiago Marcos Rodríguez, que fue
acusado de atender en 1949 a José Sabaté, que estaba herido, y fue excarcelado en 1961.
del atraco. ‘Quico’ lo localizó, le quitó el dinero, pero
acordaron seguir todos juntos el camino hasta la frontera. En
Francia dio una cantidad al ‘Asturiano’ 425 y le dijo que
desapareciese de su vista. La situación en el país vecino era
muy difícil. El Secretariado Intercontinental había acusado
públicamente a Sabaté de desarticular el movimiento en julio
de 1956 y la policía francesa había descubierto ‒con la ayuda
de la española y el interrogatorio de Marqués‒ el arsenal de los
Pirineos. Su nueva aventura con la justicia francesa le privó de
libertad desde diciembre de 1957 hasta mayo de 1958.
Después de su liberación, se le impuso una pena de
confinamiento durante cinco años en la ciudad de Dijon.
429 Las actas del pleno no se han publicado nunca, aunque habitualmente se publicaban
en la prensa de los exilados. Los testimonios de los presentes son contradictorios, sin
embargo parece que hubo acuerdo para renegociar el tema de la lucha armada y se le dio
luz verde a un intento de asesinato de Franco. La FIJL habia organizado su propia reunión
unos días antes y había decidido apoyar la vuelta a la acción directa. Vid. Íñiguez (2008),
tomo 2, p. 1795.
‘Quico’ recibió una llamada de la justicia francesa en relación
con la causa de su solicitud de prescripción del confinamiento
por el atraco de 1948. La solicitud fue rechazada a principios de
diciembre. Eso significaba que podía ser arrestado en cualquier
momento y juzgado de nuevo. Ante esta amenaza, unos
compañeros le arreglaron o bien que Yugoslavia le ofreciese
asilo político o bien que se le facilitase la huida a
Latinoamérica. Pero ‘Quico’ sabía que eso equivaldría a la
muerte de su actividad revolucionaria y decidió volver a luchar
a España.
430 Sabaté mantenía un contacto estrecho con el grupo de Lucio Urtubia y Luis Andrés
Edo en París. Urtubia le había ayudado en un atraco para financiar la misión. Ambos
jóvenes le habían puesto en contacto con otros grupos de la FIJL, entre los que se reclutó el
comando. Edo y Urtubia, al igual que muchos otros compañeros suyos, trataron de
disuadir a ‘Quico’ de su último viaje, tanto porque consideraban obsoleta y peligrosa su
forma de cruzar la frontera como porque se había filtrado la información de que se iba a
realizar. Vid. Edo (2006), ps.138‒ 139.
conductor en Lyon. Todos eran inexpertos en el uso de las
armas. Su plan era establecer una red de enlaces y proceder al
secuestro de los hermanos Creix, conocidos torturadores de la
policía franquista, a quienes Sabaté quería llevarse de vuelta a
Francia.
431 Toda la historia del viaje y los enfrentamientos está en griego en Téllez (1978), ps.
177‒186. Algunos errores en el relato de Téllez, que se deben a la imposibilidad de
consultar fuentes oficiales y testigos presenciales cuando se escribió el libro en 1970, están
corregidos en la versión de más arriba.
el continente americano. El anuncio de su muerte en la prensa
oficial de la CNT de Francia con un artículo de Federica
Montseny, levantó una tormenta de protestas, ya que, aunque
le rendía tributo, recordaba sus “desintegradoras” iniciativas y
consideraba que el móvil de su acción era vengar a sus
hermanos. Los burócratas rígidos de los comités no podían ‒y
no querían‒ comprender el espíritu de Sabaté. Pero la acción
del enemigo del régimen más buscado y de sus cuatro
compañeros funcionó como un ejemplo entre todos los
jóvenes combatientes que ansiaban desenterrar el hacha de
guerra. Los albores de la década de los sesenta marcaron el
comienzo de un nuevo ataque contra Franco, de una
generación de combatientes que querían parecerse
LA CNT UNIDA Y LA DI (1961‒1965)
433 Muchos consideran, equivocadamente, que ETA se creó en 1959 y que su primera
acción fue el intento de descarrilamiento de un tren con falangistas en julio de 1961. Su
nacimiento se remonta al año 1958, a unos jóvenes vascos que se oponían a la pasividad
del PNV y querían combinar el elemento nacionalista vasco con una perspectiva social
socialista. Los jóvenes de ETA fueron ayudados en sus primeros pasos por los anarquistas
‒principalmente en el suministro de armas‒ y colaboraron con ellos en algunas
circunstancias. Se supone que el logotipo de la organización es obra de Félix Likiniano,
anarquista vasco que poco a poco se fue orientando hacia el nacionalismo vasco. Vid
Íñiguez, (2001), p. 927. Sobre ETA y su trayectoria posterior, vid. Casanova (2007).
434 Valentín González ‘El Campesino’ fue el más famoso dirigente militar durante la
Guerra Civil. Tras la derrota fue a la URSS, donde discrepó de los estalinistas y fue
recluido en un gulag. Logró escapar en 1949 por el Cáucaso y pasó a pie a Irán y de allí a
Europa. En 1959 se había reunido con Quico Sabaté, quien se había reservado el derecho
de reconsiderar el caso de colaborar con él. Vid. Edo (2006), ps. 129‒130.
actividad del DRIL en 1960 y 1961, así como el resto de
tentativas fracasadas de actividad antifranquista. En el período
que se estudia, la tentativa de resistencia más organizada y
capaz era la de los anarquistas.
438 Juan Jimeno era representante de África del Norte y no tiene relación con Juan José
Gimeno, quien mantuvo el comité del interior falso en los años 50. Acracio Ruiz es el
seudónimo de José Molina Ortega (1908‒1994). Ruiz era representante de Gran Bretaña,
adonde habia emigrado tras la derrota. En la Guerra Civil estaba constantemente en
primera linea del frente, a menudo colaborando con Mera. Fue uno de los jefes que
participaron en el golpe de Estado de 1939. Vicente Llansola Renau (1915‒1996) era
hombre de confianza del Esgleas, secretario de Defensa de 1945 a 1949 y miembro fijo de
los comités hasta su muerte. Muchos lo llamaban irónicamente “compadre” y “chófer” de
Esgleas.
439 Vid. Alberola‒Gransac (1975), p. 63.
Los miembros de DI se asignaron diversas competencias.
Esgleas asumió la propaganda y Llansola la organización del
tiranicidio. Octavio Alberola era el responsable de la
coordinación de los grupos y las acciones, ya que tenía la
experiencia necesaria y contacto directo con la FIJL. Los
restantes miembros sirvieron de enlaces y activaron todos los
contactos que podrían ser útiles para reiniciar la acción directa.
DI tenía que confiar en el dinero que recibía del Secretariado
Intercontinental y no recurrir a las prácticas ilegales del
pasado. En el congreso de Limoges se había decidido
respaldarla económicamente con una cuota especial y se
calculó que para iniciar la actividad se necesitaban diez
millones de francos. La suma era elevada y se había fijado ese
nivel a propósito para retrasar el inicio de la acción. En la
primavera de 1962 se habían recogido poco más de cuatro
millones. Esgleas solicitó cien mil para propaganda y otro
millón se le entregó a Llansola para organizar la ejecución de
Franco. DI decidió entrar en acción con el resto.
440 Merece la pena hacer mención especial a Antonio Verardini Díaz‒Serreti (1910‒¿?).
Verardini fue colaborador directo de Cipriano Mera en la Guerra Civil y jefe de su estado
mayor durante la victoriosa batalla de Brihuega. Fue capturado y detenido por los
estalinistas en Madrid, pero escapó cuando Mera envió un batallón acompañado por
tanques a liberarlo. Al final de la guerra huyó al norte de África y de allí a París. Trabajó
estrechamente con Cerrada en la falsificación de la peseta española y se vio obligado a
vivir el resto de su vida con documentación falsa, para evitar el arresto. En 1962 trabajaba
en el Instituto Curie, ya que era un ingeniero con una gran inteligencia. Proveyó a DI de
dispositivos de comunicación experimentales sin cable y sistemas de control remoto.
Intentó durante años perfeccionar un pequeño avión teledirigido capaz de transportar
explosivos para atentar contra Franco. Vid. Edo (2006), ps..161‒164.
hasta de personalidades de la derecha. La huelga terminó el 6
de junio, sin ningún resultado positivo para los trabajadores.
443 Alberola sostiene que Esgleas tomó esa iniciativa para hacer ostentación de labor
conspiratíva ante los miembros de DI. La acción de Vila estaba fuera de la planificación
general de la organización. Entrevista con O. Alberola, Perpiñán, 12/5/2007.
444 El Valle de los Caídos es un enorme monumento inspirado por Franco que se
construyó al final de la Guerra Civil. Su construcción duró diecinueve años. Para erigirlo,
miles de presos políticos, muchos de los cuales perdieron la vida por las calamidades,
hicieron trabajos forzados. Tallaron en la roca una gran basílica de doscientos sesenta
metros de largo bajo cuyo altar está enterrado el dictador Francisco Franco. En la cima del
monte, sobre la roca, una enorme cruz de granito de ciento cincuenta metros es visible
desde una distancia de decenas de kilómetros. En el mismo lugar se encuentra también la
tumba del fundador de la Falange. Este monumento se supone que está dedicado a todos
los muertos de la Guerra Civil y simboliza la reconciliación. En realidad es un monumento
al odio y la sumisión, un mausoleo del dictador carnicero, donde se reúnen en el
aniversario de su muerte extremoderechistas y nostálgicos del régimen para rendirle
tributo.
445 Vid. Alberola‒Gransac (1975), p. 76.
preparado un atentado contra el dictador que tenía muchas
posibilidades de éxito.
446 Jacinto Guerrero Lucas ‘Peque’ (1939) se alistó oficialmente en el cuerpo de policía
en 1978, cuando regresó del exilio francés. Alberola ‒de quien fue estrecho colaborador‒
considera a posteriori que era un infiltrado en la organización. Entrevista con O. Alberola,
Perpiñán, 12/5/2007. Salvador Gurucharri cree que fue confidente de la policía francesa
solo en tomo a 1970 y que ingresó en la policía española en 1978, recomendado por logias
masónicas. Entrevista con Salvador Gurucharri, Barcelona, 14/5/2007. Edo no toma
postura en su libro, mientras que Íñiguez dice en su enciclopedia que, pese a las
informaciones contradictorias, Guerrero era un infiltrado desde el principio. Además,
Ramón Álvarez afirma que había hecho una investigación en tomo a su persona y había
comprobado ya desde 1962 que Guerrero era hijo de un policía y que tal vez él mismo
trabajaba para ella. Vid. Íñiguez (2001), p. 802. El hecho es que Guerrero siguió trabajando
en el movimiento hasta 1971, aunque lejos de las estructuras clandestinas, después de su
sospechoso papel en el caso Granados‒Delgado en 1963, que se estudia más abajo. En
1978 regresó a España y en 1984 apareció como representante sindical de la policía
española en un congreso internacional. Ejerció como asesor especial del ministro
socialista Vera, quien apoyó los grupos paraestatales de asesinos GAL, que actuaron
contra ETA, pero también contra civiles inocentes.
atentados‒bomba. Por desgracia la policía llegó a su objetivo
en uno de los pogromos de detenciones que se desencadenó
contra estudiantes disidentes en Barcelona. Los estudiantes
pertenecían al FLP, pero uno de ellos tenía en su casa la
dirección de un joven anarquista, Jorge Conill. Registrando la
casa de Conill, la policía encontró pruebas que lo vinculaban
con los atentados con bomba de Barcelona. Sus colaboradores
eran Antonio Mur y Marcelino Jiménez y la detención de los
tres anarquistas se comunicó el 19 de septiembre de 1962. Tres
días después fueron remitidos a un consejo de guerra
extraordinario.
447 La reivindicación de esa acción, asi como de las dos bombas incendiarias que habían
estallado en el Vaticano el 23 de septiembre, la hizo la organización Mano Negra, que
envió al Papa notas amenazantes en relación con su actitud hacia Franco. Vid.
Alberola‒Gransac (1975), p. 363.
448 Los seis anarquistas italianos que llevaron a cabo el secuestro fueron juzgados en
noviembre en Várese. El juicio se convirtió en una condena del régimen franquista por
personalidades de todo el espectro político italiano. Las condenas fueron mínimas y
formales y los seis fueron puestos en libertad solemnemente al final del juicio.
449 Cuatro acusados en uno de los juicios habían asistido a clases de paracaidismo y se
tenía la convicción de que organizaban un secuestro aéreo.
en esa misma época por participar en el aparato del partido,
fueron castigados con penas mucho más leves.
450 Julián Grimau García fue acusado por delitos durante la Guerra Civil (era director de
prisiones de Barcelona y responsable de ejecuciones de fascistas, pero también de algunos
anarquistas y trotskistas) y fue condenado a muerte. A pesar del clamor mundial, fue
ejecutado el 20 de abril de 1963. En su última carta expresó la certeza de que sería la
última victima antes del inminente cambio de régimen. El PCE lo bautizó “mártir de la
reconciliación nacional”.
451 Consejo Ibérico de Liberación.
federaciones y núcleos locales donde ambas tendencias no
estaban unificadas. Durante el congreso hubo voces de
protesta por la actividad, no sometida a control, de la
secretaría de coordinación, que era responsable de las
relaciones con DI. Un gran número de compañeros creía que el
coste del mantenimiento de la lucha armada era grande y se
basaba en procedimientos opacos, aunque no faltaban
tampoco los que afirmaban que la lucha armada ‒dirigida
desde el exilio‒ obstruía la reorganización de la Confederación
dentro de España. Paradójicamente, esas acusaciones fueron
dirigidas principalmente contra Esgleas ‒como miembro de la
estructura clandestina‒, mientras que en la realidad Esgleas y
Llansola eran los que ponían los mayores obstáculos dentro de
DI. Pese a las protestas, el congreso dio un voto de confianza a
DI. En efecto, el nuevo secretario de coordinación, Marcelino
Boticario, era partidario de la acción de las Juventudes.
452 La OAS era una organización terrorista de fascistas franceses que actuaba por la
independencia de Argelia mediante ataques con bombas ciegas. Sus miembros
encontraban refugio seguro ‒y ayuda‒ en España.
453 Alberola‒Gransac (1975), p. 99
fueron detenidos los anarquistas franceses Alain Pecunia, de
diecisiete años, y Bernard Ferry, de veinte. Un tercer francés,
de veintitrés años, Guy Batoux, fue localizado al intentar
colocar una bomba en la embajada de Estados Unidos en
Madrid 454. El CIL reivindicó la responsabilidad de este aluvión
de acciones, como también de la siguiente, el 6 de junio de
1963, cuando unas bombas incendiarias destruyeron aviones
de Iberia en Londres, Frankfurt y Ginebra. [...] Las campañas y
operaciones que el CIL ha montado en los últimos meses
responden a los planes que se han trazado para llevar la lucha
hasta su punto decisivo, después de crear las condiciones
favorables para el entendimiento y unión de todas las fuerzas
auténticamente antifascistas, verdaderamente interesadas no
en una lucha protocolaria y platónica de condenas
intrascendentes, sino en una lucha efectiva contra el
franquismo y el salazarismo […] 455.
454 Los tres fueron condenados a largas penas de prisión en el otoño, pero fueron puestos
en libertad después de tres años, tras las presiones del gobierno francés.
455 Alberola‒Gransac (1975), p. 107.
en un palacio concreto para que le entregasen sus
credenciales. En el camino hacia el palacio, necesariamente
pasaba por un puente, que los anarquistas tenían intención de
hacer explotar por control remoto. Las ceremonias de entrega
de credenciales no se anunciaban en la prensa, pero la llegada
de nuevos diplomáticos salía con letra pequeña en los
periódicos. Nada más llegar un embajador, pondrían bombas
en el puente, a la espera de la comitiva. Esta vez se había
previsto una pila de vida más larga para el sistema de
detonación por control remoto.
456 Francisco Granados Gata (1935‒1963) emigró a Francia en 1960. Padecía una
leucemia e insistió en hacerse cargo de la ejecución de Franco, para dejar algo antes de que
la enfermedad le atacase. Estaba casado y tenía tres hijos.
a Joaquín Delgado con la misión de encontrar a Ariño y
Granados y decirles que abandonasen el país una vez que
ocultasen los explosivos. De hecho Delgado encontró a Ariño
‒que se fue en tren el 28 de julio‒ y al día siguiente informó
también a Granados. Su propósito era irse ese mismo día, pero
una avería en el coche les obligó a permanecer más tiempo en
la capital.
457 Antonio Martín Bellido (1938) participó también en el atentado del Valle de los
Caídos y en acciones en Italia. Después de mayo de 1968, fue encarcelado en Francia
como secretario de las Juventudes Libertarias de París acusado de pertenecer a una
organización criminal. Sergio Hernández dejó el movimiento, tras la ejecución de
Granados y Delgado, con problemas psicológicos. Ambos asumieron en 1994 la
responsabilidad de los ataques en un intento de reparación jurídica de los dos compañeros
ejecutados. Pese a su confesión, la justicia española se niega hasta hoy a reabrir el caso.
458 Oficialmente la detención fue fortuita y fue provocada porque los dos compañeros
estaban molestando a unas turistas. Treinta años después el jefe de policía de Madrid
admitió que los dos anarquistas estaban bajo vigilancia. ¿Quién los había delatado? Hay
dos versiones. La primera es que Jacinto Guerrero ‒si ya era colaborador de la policía‒
delató la llegada de Ariño y los secretas lo siguieron para llegar a Delgado y, por
consiguiente, a Granados. La segunda versión atiende al nombre de Inocencio Martínez.
Martínez era miembro de los grupos de acción y se había puesto en contacto antes con
Granados en Madrid. Ya está demostrado que Martínez era confidente, simplemente no
está verificado cuál de los dos es responsable de esta detención en concreto. Fuentes de la
policía filtraron, casi cuarenta años después del suceso, que el responsable fue Martínez,
pero la muerte de Martínez y el cargo de Guerrero en la policía española hacen inciertas
cualesquiera conclusiones. Entrevista con O. Alberola, Perpiñán, 12/5/2007. Sobre el
asunto se ha filmado el documental Granados y Delgado. Un crimen legal, Lala Gomá y
Xavier Montanyá, 1996. Vid. Carlos Fonseca, Garrote vil para dos inocentes. El caso
Delgado‒ Granados, Temas de Hoy, Madrid, 1998.
confesión, ya que no había ninguna prueba que los relacionase
con las explosiones. Una vez arrancadas las confesiones, fueron
conducidos a un tribunal militar.
461 Vid. Sánchez Agustí (2006), p. 208. La leyenda de este guerrillero catalán pervivió
en su tierra patria durante años. El intento de la CNT de organizar un evento en su honor en
1978, fue la causa de que los jubilados de la Guardia Civil amenazasen con un ataque
armado y fue cancelado. Su almacén de municiones, que estaba oculto en una masía
semiderruida se quemó, abandonado, en un incendio forestal en 1983. Se registraron
sucesivas explosiones y fue necesaria la ayuda de técnicos en desactivación de minas para
limpiar la zona.
Guardia Civil le quitó las botas para exhibirlas en su museo de
Madrid. Lo mismo hizo con sus últimas armas, un Colt 45 y una
9 mm.
462 De los grupos de acción nadie volvió a confiar en Guerrero. La confidencialidad que
caracteriza la actividad de los miembros de DI hasta hoy es notable. Los datos sobre los
autores de ataques específicos son principalmente conjeturas policiales. Mencionamos a
modo de ejemplo que de los ocho o nueve militantes de la FIJL que vinieron de Gran
Bretaña, sólo conocemos los nombres de tres. Salvador Gurucharri afirma que los que
siguen siendo ignorados por el registro histórico fueron los que hicieron la mayoría del
trabajo. Entrevista a S. Gurucharri, Barcelona, 14/5/2007. De la mayoría de los detenidos
en el pogromo de septiembre de 1963 no hay datos satisfactorios en la bibliografía
anarquista, a pesar de que han pasado más de 45 años desde su detención. Para mayor
información vid Gurucharri, Salvador y Ibáñez, Tomás. Insurgencia Libertaria. Las
Juventudes Libertarias en la Lucha contra el Franquismo, Barcelona, Virus, 2010.
recibido para organizar la ejecución de Franco, sin haber
llevado a cabo ninguna acción. El dinero no se devolvió. Antes
de discutir ese tema ‒que no concluyó en ese congreso‒ los
adversarios de Esgleas consiguieron aprobar la constitución de
un comité que supervisaría el balance económico del consejo
general del MLE en el período de 1939‒1944. El propósito de
este comité era desacreditar al dirigente de la FAI. Por último,
el congreso, a pesar de los problemas, renovó su confianza en
DI y en las acciones subversivas.
463 El recuento de los votos se hacía solo entre las federaciones directamente
representadas. Algunas federaciones remotas, a las que les era imposible enviar miembros,
podían registrar sus opiniones por escrito, pero sin voto. Si se hubiesen contado los votos
de los no representados, el resultado habría sido de 2.659 para Ruiz y 2.366 para Esgleas,
sin contar los mil votos a favor de Ruiz de la federación en París. Ver Alberola‒Gransac
(1975), p.124 y Peirats (2009), p. 679.
denunciaron la incompatibilidad de este procedimiento, pero
no podían cambiar nada. Los burócratas de los comités ya
habían empezado su ataque contra la acción directa. El
congreso de 1963 fue el comienzo de la crisis global del
movimiento anarquista español, que disolvió tanto la tentativa
unitaria de los años anteriores como cualquier perspectiva
anarcosindicalista organizada de resistencia a la dictadura.
464 La FIJL había tomado esa decisión ya en 1961 y en esta reunión simplemente la
confirmó. La clarividencia de las Juventudes en los momentos de euforia de la
reunificación era notable.
465 La tendencia de Esgleas no respondía a las acusaciones, invocando el carácter
secreto de DI.
problemas graves queden sin solución [...] 3.° La existencia
de intereses creados, de toda índole y condición, en el exilio,
que lo desvincula y desolidariza, en gran parte, de las
luchas de nuestro pueblo y que, a su vez, convierten a esa
parte del exilio en masa conservadora, impropio de un
movimiento revolucionario 466. 4° El abandono de toda labor
proselitista [...] particularmente entre la juventud española.
5.° El sabotaje y descrédito sistemático de la línea de acción
directa, acordada en el Dictamen del 61, por quienes no
están ya dispuestos a comprometerse, ni directa ni
indirectamente, con las responsabilidades de una acción
revolucionaria. 6.° La influencia creciente y determinante en
el seno del Movimiento de la mentalidad derrotista que lo
está castrando y llevando al inmovilismo, cayendo cada vez
más en la pendiente de la demagogia y en la dejación de lo
que un día fue su razón de ser.
468 Agustín Sánchez Fuster (1936) participó en muchas misiones en España entre 1960 y
1965. En 1968 protagonizó los acontecimientos del mayo francés, como muchos otros
anarquistas españoles.
La actitud hostil del Secretariado Intercontinental no
amedrentó a las Juventudes. Sus miembros continuaron
preparando golpes en España y elaboraron nuevos planes para
ejecutar a Franco. En septiembre del año anterior, pero
también en junio de 1964, decenas de atentados bomba de
poca potencia conmocionaron Madrid cada día. Esos golpes los
dio un exmilitar, socialista, que estaba en contacto con el
‘Campesino’. Su detención a finales de junio puso fin a su
actividad continua, pero tres explosiones de las decenas que se
le atribuyeron, no las había provocado él. Fernando Carballo,
enlace de las Juventudes Libertarias en el interior, había
tomado por sí solo la iniciativa de actuar para fortalecer la
campaña de bombas de la época.
469 El viaje de Christie, el encuentro con Gurucharri, Mera, Alberola, Ros, entre otros, la
detención, los interrogatorios y lo que siguió los presenta de manera especialmente
elocuente él mismo en Christie (2005). Christie, uno de los anarquistas británicos mejor
conocidos, fue acusado y encarcelado por participar en la Brigada Iracunda, en los años
setenta.
470 Femando Carballo Blanco (1922‒1993) se quedó huérfano cuando los fascistas
ejecutaron a su padre anarcosindicalista. Fue encarcelado en muchas ocasiones desde el
final de la Guerra Civil por atraco y actividad política. Quedó en libertad con la amnistía
de 1976. Stuart Christie (1946) fue puesto en libertad después de tres años. El único
anarquista extranjero que cumplió su condena en las cárceles franquistas fue el
colaborador de Facerías: Goliardo Fiaschi.
El congreso de 1964 se pospuso después de las maniobras
del Secretariado Intercontinental, que trataba de conseguir las
mejores relaciones posibles para celebrarlo. Finalmente se hizo
pública la fecha de inicio, que fue el 31 de julio de 1965, en
Montpellier. La facción de Esgleas se hizo cargo de los gastos
de viaje y alojamiento de todos los representantes de las
federaciones locales que lo apoyaban. En efecto, como
secretario del SI, Esgleas sacó un comunicado en el que
destacaba: [...] De todo lo que se hace y se dice en contra de un
Secretariado Intercontinental no es el SI finalmente el
perjudicado, sino toda la Confederación Nacional del Trabajo,
todo el pueblo español [...]. La FIJL respondió lo siguiente: Esta
forma de autodefensa de los Comités superiores, de corte y
concepción genuinamente estaliniana (el secretario general es
el partido y el partido es la revolución...), resulta una
innovación de muy graves alcances para la vida de nuestro
Movimiento como entidad libertaria.[…] 471.
472 El texto completo de la acusación de Mera se halla en Álvarez (1982), ps. 254‒256.
473 Cipriano Mera Sanz (1897‒1975), cuya trayectoria en el movimiento sigue este
libro, trabajó como albañil hasta la edad de setenta y dos años (decía en broma que iba a
morir con la paleta en las manos). Es significativo que compartiese su salario como albañil
con los aprendices. A pesar de su carácter irreprochable, los ortodoxos no olvidaron nunca
su apoyo a la tendencia reformista. En 1970 fue expulsado de la CNT de París, por seguir
con su dura crítica a la casta de Esgleas‒Montseny.
Bastantes representantes creyeron ciertamente esa versión.
La comunicación entre los núcleos dispersos de exilio era difícil
y sólo el SI tenía todos los contactos, monopolizando en
muchos casos la información. Los representantes mayores de
núcleos distantes, pero también aquellos cuyas federaciones
habían sido creadas por la tendencia ortodoxa encontraban
más lógicos los argumentos del equipo de dirigentes históricos
del movimiento que las acusaciones de una juventud
desenfrenada (aunque apoyada por personalidades bien
conocidas, como Mera y Pascual). Por desgracia, la conciencia
política de los representantes declinaba y el abismo
generacional y de ideas se hacía evidente. Tras las
explicaciones de las partes implicadas, muchos de los
mencionados representantes tomaron la palabra y acusaron a
las Juventudes de teorías infundadas y violación del secreto en
los procesos conspirativos 474 . Las Juventudes se vieron de
acusadores en reos y muchas federaciones locales solicitaron la
aplicación de sanciones a Mera y Alberola. Se formó una
comisión para investigar el asunto, que absolvió a los
miembros del SI y consideró inaceptable la conducta de sus
acusadores, pero no propuso sanciones con objeto de
mantener la armonía del movimiento. Lo que propuso
públicamente esa comisión fue una revocación de la decisión
de 1961 sobre la acción directa.
474 Esa acusación fue en principio manifestada por Esgleas, que consideró que, cuando
la FIJL habló de la incompatibilidad de sus cargos tras el congreso de 1963, en realidad
reveló que Esgleas y Llansola eran miembros de DI. Ciertamente, cuando se constituyó
DI, ambos eran los que filtraban en todas direcciones los nombres de los miembros, en un
intento de neutralizar la iniciativa, pero también de granjearse el título de
revolucionarios...
los congresistas de que la votación se haría sobre la base de un
voto por federación local, lo que garantizaba la victoria para las
numerosas federaciones inventadas de la FAI. Las dos mayores
federaciones del exilio, la de París y Toulouse, se salieron del
congreso, seguidas de otras once federaciones mayores y
menores. La voluntad de la mitad de los miembros de la CNT
no se expresó nunca y el nuevo golpe de estado de la facción
dirigente condenó al movimiento a la inacción y al cisma
definitivo 475. La facción del secretario quedó con las manos
libres. Los que se quedaron en el congreso, suspendieron la
acción directa y volvieron a votar a Esgleas para el cargo de
secretario, puesto que ocupó bastantes años más. Los
congresos se interrumpieron ‒como ya antiguamente‒ y
fueron sustituidos desde entonces por plenarias de núcleos
hasta 1975. La CNT, tras el congreso de Montpellier, entró en
una de las épocas más oscuras, llena de expulsiones, disputas y
centralización.
479 Entre ellos Agustín García Calvo (1926‒2012), activista social y pensador con
abundante obra literaria. En griego se ha editado Evavzíov zov amoiavqzov [Contra el
automóvil], Scópelos, Nisides, 2002.
480 Ácratas (“los que persiguen la acracia”), palabra que se introdujo en el español en
1886 y proviene de la raíz griega antigua ms.uq y el prefijo privativo α. Su actividad llegó
a su apogeo en 1967, año que diversas fuentes refieren como el de la fundación del grupo.
La renuencia de los fundadores del grupo a dar forma reglamentaria o estable a su
provocadora empresa significó su final cuando se fueron de la universidad.
Después de 1966 comenzó a desarrollarse en España ‒y
especialmente en las comarcas industriales de Madrid, de
Cataluña y del norte‒ una rápida politización, tanto en los
lugares de trabajo como en las universidades. El movimiento
obrero había abrazado al principio con fervor la tentativa de CC
OO 481, pero cuando se hizo ampliamente evidente que los
comités eran manipulados por el Partido Comunista, muchos
las abandonaron y crearon nuevas formaciones políticas. Los
puntos de referencia de estos grupos eran diversos. Hubo
grupos que se volcaron hacia el maoísmo, hacia el trotskismo,
pero también hacia teorías marxistas heterodoxas, como el
comunismo consejista. La amplitud y la diversidad de puntos
de vista fueron tales que llevaron a la aparición de una
agrupación sindical anarquista cristiana, que se congregó en
torno a ediciones XYZ.
481 En 1967 el estado declaró ilegal a CCOO, pero sus representantes siguieron
operando dentro del sindicato vertical, sin mencionar que eran miembros suyos. La línea
política moderada de los sindicalistas comunistas ‒pese al prestigio que otorgaba la
“clandestinidad”‒ condujo a un éxodo masivo de los trabajadores más activos y
concienciados de los comités.
por la traición de los cincopuntistas, no pudo ni actuar ni influir
en ninguna medida en este movimiento.
482 El clima entre los expulsados queda estampado en una carta de Peirats a Stuart
Christie en la que escribe: [...] Por lo menos los estalinistas y el capitalismo ofrecen un
simulacro de juicio. Aquí eres condenado a la pena capital (expulsión y vergüenza
pública), sin siquiera estar presente [...]. Vid. Archivo Peirats, correspondencia
Peirats‒Christie, 2/2/1974, carpeta 109. Es sintomático el caso de expulsión de un
miembro de la CNT por “delito de opinión”. Mientras se discutía su expulsión, alguien
informó a la Comisión de que en el ínterin el miembro había muerto. La respuesta fue
desconcertante: Es lo mismo. Vid. Herrerín (2004), p. 292.
editó la revista Frente Libertario, desde cuyas páginas los
expulsados apoyaron las huelgas salvajes en la Península
Ibérica y las formas activas que adoptaba la lucha del
movimiento obrero, al tiempo que condenaba la inacción del
Secretariado Intercontinental y su lógica sectaria. La tirada de
la revista oscilaba entre dos mil y cuatro mil quinientos
ejemplares. Entre los que publicaron textos en Frente
Libertario destacan Peirats 483, Cohn‒Bendit, Alberola y Mera.
La publicación concluyó en 1977, tras el restablecimiento de la
CNT en España.
483 Durante ese mismo periodo se pidió a Peirats que escribiese artículos en una revista
clandestina de Barcelona. Su respuesta fue: [...] preferiría escribir en una revista sobre
cuestiones teóricas sobre el anarquismo y no en la prensa revolucionaria de combate. A
mis sesenta y seis años y con un delicado estado de salud, tengo que ser prudente en
aconsejar a los jóvenes que hagan lo que yo ya no puedo. Es una cuestión de honestidad
intelectual [...]. Es importante hacer hincapié en el aspecto prudente y reacio al
protagonismo del carácter de muchos de los militantes en el período referido, para no dar
la impresión al lector de que todas las figuras importantes del movimiento estaban
imbuidas de la pertinacia autoritaria y protagonista de la camarilla dirigente de la FAI. Vid.
archivo Peirats, correspondencia Peirats‒Christie, 26/2/1974, carpeta 109.
que apoyaban la línea de la participación política y una minoría
vergonzosa que apoyó la negociación de los cinco puntos.
prisión y no a muerte por las reacciones de los cuadros de alto rango del régimen que le
debían la vida. Luchó con todas sus fuerzas por la reconstitución de la CNT en España,
participó en los comités y fue encarcelado en repetidas ocasiones. Muchos fascistas
consideraban que le debían la vida, hecho que explotó para conseguir la salvación de
muchos compañeros o la reducción de sus penas. Fue un enemigo fanático de los
cincopuntistas. Rodríguez, humanista y pacifista declarado, fue detenido en treinta y
cuatro ocasiones y pasó una gran parte de su vida en prisión.
487 Alberola‒Gransac (1975), p. 186.
488 Alberola‒Gransac (1975), p. 188.
una amplia referencia al hecho, afirmaba el deseo del Vaticano
de que la convivencia pacífica de todos los españoles llegase en
breve. Al día siguiente los anarquistas dejaron libre a Marcos
Ussía, ya que tenían primero que asegurarse de que Edo estaba
a salvo en Francia. En caso contrario, se había decidido retener
al rehén e intercambiarlo con Edo. El éxito del plan fue
completo. La iglesia se había expresado en favor de un cambio
de régimen en España, la cuestión de los presos políticos había
vuelto al escenario mundial y los manejos del sindicalismo
colaboracionista habían sido desenmascarados. Además, no
hubo bajas; al contrario, se provocó el despido del jefe de
policía de Roma y rivalidades internas en la policía española
por la imposibilidad de localizar a Edo. Los anarquistas
españoles estuvieron en primera línea de la actualidad durante
dos semanas consecutivas y los comentarios positivos
continuaron aún durante mucho tiempo en la prensa
internacional.
491 Todos creían que las informaciones sobre una liberación por las armas era un ardid
para crear un clima. Más tarde se supo que Floreal Rodríguez ‒que esos días hacía un porte
por España‒ estuvo llamando desde cada parada que hacía en la ruta Bilbao‒Valencia a la
dirección de la policía en Madrid y profería amenazas. Vid. Edo (2006), p. 397.
miembros de la FIJL. Se consideró que la continuación de la
actividad revolucionaria era la orientación más oportuna del
movimiento de solidaridad.
492 Vid. Alberola‒Gransac (1975), ps. 219‒220. El texto completo del llamamiento está
traducido en Meltzer, (1977), ps. 33‒37.
493 Alberola conocía a Castro y a Guevara, ya que antes de la revolución cubana habían
participado juntos en el Frente Antidictatorial de Suramérica. Además, había colaborado
con los movimientos contra la dictadura de la República Dominicana y Venezuela. Vid.
Christie (2005), p. 237.
494 Julio Millán Hernández (1934) permaneció cinco años en prisión preventiva sin
juicio. Fue acusado de las acciones de 1963 (era amigo de Delgado y Granados) y
condenado a veintitrés años de cárcel en 1972. Fue liberado con la amnistía de presos
políticos en la Transición.
David Urbano 495 , que estaba en Madrid, por estar
relacionado con Primero de Mayo. Aparte de las detenciones,
hubo también una liberación inopinada, la del escocés Stuart
Christie, a quien el dictador otorgó el indulto en septiembre de
1967. Ese gesto pretendía mejorar el perfil europeo del
régimen y se precipitó tanto por las presiones británicas como
por la acción directa solidaria anarquista.
495 David Urbano Bermúdez fue condenado a seis años de prisión y estuvo entrando y
saliendo de prisión con diversas acusaciones hasta la Transición. La última fue la de 1974
por contactar con los GARI.
de la acción directa estaba vinculado a una constatación:
Puesto que no se trata de oponer al terrorismo a escala
planetaria de las grandes potencias técnicas un terrorismo
«artesanal», sino más bien de generalizar un movimiento
ofensivo capaz de romper la pasividad en que los gobiernos
intentan someternos por medio de un condicionamiento cada
vez más científico496.
498 En todos los años de la DI y del Grupo Primero de Mayo, los únicos militantes que
fueron sostenidos económicamente con las contribuciones de dinero de los miembros de la
CNT fueron los miembros de la DI. Eso sucedió alrededor de dos años, pero el dinero era
tan escaso que al mismo tiempo tenían que trabajar. De hecho, Alberola ‒que circulaba
con documentación falsa‒ trabajó en la economía sumergida para no vivir de prestado. Su
oposición al robo sigue siendo firme en la actualidad. Entrevista con O. Alberola,
Perpiñán, 12/5/2007.
propagandístico ilegal. Los periódicos españoles vincularon a
Floreal con Primero de Mayo. En el juicio consiguiente él fue
condenado a dieciocho años de prisión y sus compañeros a
penas menores. Así terminó la masiva y libre entrada de
material en España. Muchos habían aconsejado a Floreal que
se abstuviese de otras actividades en el interior, a fin de no
poner en peligro la operación. Sin embargo, las evidencias
posteriores apuntan a que su detención finalmente fue el
resultado de la información que envió el Scotland Yard
británico y no fruto de su imprudencia499.
499 Meltzer (1977), p. 74. Floreal había sido deportado de Gran Bretaña durante un viaje
suyo allí. Floreal Rodríguez de la Paz y González Nicolás (1938) intentó escapar de la
prisión en Alicante en 1970 junto con un conocido preso común. El plan de Floreal
funcionó para su colaborador, pero no para él, lo que le costó ocho meses en celda de
aislamiento. Más tarde, participó en la preparación de la célebre fuga masiva de la cárcel
de Segovia, pero sus colaboradores ‒miembros de ETA‒ no lo incluyeron entre los que
finalmente se fueron. Floreal salió con la amnistía de 1976 y sigue siendo hasta hoy un
miembro activo de la CNT.
su impronta a través de la selección de textos para publicar y
también a través de los prólogos de los libros. El prólogo del
libro sobre Sabaté expresa sus opiniones:
501 Tomás Ibáñez Gracia (1944) era miembro de la FIJL clandestina y ejerció como
miembro del comité de relaciones de la organización. Después de mayo, la justicia
francesa lo desterró durante seis meses de París. A él se le atribuye la creación gráfica en
1964 del símbolo de los anarquistas ‒ya universal‒ con la A en el círculo.
federaciones y sindicatos anarquistas tradicionales. En lugar de
llevar a cabo una síntesis de las opiniones basadas en los
recientes disturbios, el congreso simplemente ratificó la brecha
generacional, que tan claramente se había manifestado en el
movimiento español hacía unos años. Tras una demostración
de formalismo y maniobras politiqueras, el congreso se celebró
en un estrecho círculo y condenó las opiniones políticas de los
jóvenes rebeldes. Federica Montseny se desató contra la FIJL y
logró que no se permitiese su participación en el proceso. En la
calle, fuera de la sala del congreso, cientos de jóvenes
anarquistas celebraban sus propias asambleas, oponiéndose al
anquilosamiento del anarquismo tradicional. En un discurso en
Carrara, Daniel Cohn‒Bendit señaló las discrepancias: ¿Por qué
nos oponemos a la marcha de este Congreso? Porque el
Congreso vuelve la espalda a la espontaneidad, que es, según
nosotros, la clave de la revolución. [...] Para nosotros el
problema no está entre marxismo y anarquismo. El problema
está en descubrir y poner en acción métodos más radicales con
vistas a la revolución 502.
502 Vid. Alberola‒Gransac (1975), p. 259. Según Alberola y Gransac, el resumen del
dilema era atemporal: o servir al anarquismo como a un ideal o servirse de él para preparar
la revolución.
haber realizado un ataque con bomba contra el Banco de
Bilbao, en el Covent Garden de Londres. Los dos ingleses
habían puesto mecha corta en la dinamita que habían colocado
‒muy corta, según se demostró después‒, por lo que la
explosión se produjo cuando se alejaban corriendo del lugar.
Scodand Yard los detuvo ya que vigilaban el banco tras una
información de la policía española. En su poder encontró una
nota con la reivindicación en nombre del Grupo Primero de
Mayo.
503 No insinúo en ningún caso que los seis anarquistas fuesen responsables de los demás
ataques, ya que ellos no asumieron nunca esa responsabilidad. Sólo señalo el hecho porque
fue la primera persecución de anarquistas en el marco de la estrategia de tensión que puso
en marcha el estado italiano en colaboración con los grupos neofascistas y los servicios de
inteligencia americanos. Su objetivo era establecer un régimen militar en Italia y sus
agentes eran entrenados y financiados por la Junta de los Coroneles griega. Un documento
público que probaba la financiación griega de los golpes fascistas fue entregado por Stuart
Christie ‒cofundador de la Cruz Negra Anarquista‒ al anarquista milanés Giuseppe
Pinelli, para que lo utilizara en defensa de sus compañeros. El juez lo desestimó. Le
siguieron unos dias más tarde una provocadora explosión en la Piazza Fontana, la
persecución de los anarquistas italianos y el asesinato de Pinelli en la comisaría de Milán.
Los seis fueron absueltos dos años después. Algunos de ellos pertenecían al circulo de
conocidos de Feltrinelli. Christie, viejo conocido de los anarquistas españoles y figura
clave en la solidaridad revolucionaria internacionalista en los años 60 y 70, describe los
acontecimientos en Christie (2005), ps. 308‒313. En griego se ha publicado la colección
de textos O wiwg dávamg svóg avapxikov. Hvnóosoq Giuseppe Pinelli [Muerte accidental
de un anarquista. El caso de Giuseppe Pinelli], Atenas, AUTONOMÍA de 1999, donde se
presentan más en detalle los datos de este caso.
provocó una explosión en la embajada española en Bonn. La
reivindicó la FAI ‒obviamente no la canónica, sino algún
nostálgico del nombre‒ porque la embajada española había
aprobado ya la deportación de un grupo de obreras españolas
por participar en una huelga.
504 El “Juicio de Burgos” fue un juicio montado contra dieciséis miembros de ETA que
habían sido detenidos en 1968‒69. El régimen había reunido sus casos en uno solo,
considerando que al hacerlo heriría de muerte a la organización vasca. El resultado fue
exactamente el contrario. ETA salió reforzada del juicio y se organizó un amplio
movimiento internacional en solidaridad con los procesados vascos. Las nueve condenas a
muerte que se dictáronse conmutaron por penas de prisión. Vid. Casanova (2007), ps.
117‒131.
europeos, a la que pertenecían los compañeros españoles,
procedió a nuevos ataques, como los reabzados contra
intereses de empresas italianas en cuatro ciudades europeas
con el fin de probar la conspiración fascista en el país vecino. El
3 de diciembre el Grupo Primero de Mayo prendió fuego a la
embajada española en Londres. Esta fue la última vez que
Primero de Mayo reivindicó un atentado 505. Los golpes de
integrantes de Primero de Mayo y compañeros suyos que
tuvieron lugar posteriormente en el continente europeo o bien
fueron reivindicados con algún otro nombre (Grupo Marius
Jacob, Movimiento de Solidaridad Revolucionaria
Internacional, etc), o bien su simbología era tan evidente que
ni siquiera fue necesario.
505 En tomo al nombre bajo el que se hizo la reivindicación del golpe reina una
confusión. Alberola en su libro se lo atribuye a Primero de Mayo. Meltzer lo deja sin
comentarios. Después de este golpe se hizo público el primer comunicado de la Brigada
Iracunda, que relacionó ese ataque con otros anteriores. Es evidente que la sección inglesa
del Primero de Mayo estaba estrechamente vinculada ‒a partir de entonces casi se
identificó‒ con la Brigada Iracunda, nombre que adoptaron diversos núcleos armados
anarquistas para golpes que se llevaron a cabo en Gran Bretaña. Sobre este grupo en
detalle hay en griego Opykjpévq Taijiapxía [Brigada Iracunda], Atenas, Sispírosi
Anarjicón, 1994.
París. Ese mismo día estalló una bomba en la jefatura de policía
de Londres. Los golpes se llevaron a cabo como muestra de
solidaridad con los presos anarquistas británicos. El 6 de
noviembre del mismo año hubo ataques con bomba en el
Banco Lloyd's de Ámsterdam, en el consulado italiano en
Basilea y en la embajada inglesa en Roma. El propósito de las
acciones era solidarizarse de hecho con los presos italianos y
los detenidos de la Brigada Iracunda. Con el mismo propósito el
23 de febrero de 1972 se puso una bomba en la embajada de
Italia en Bruselas. El 24 de marzo, en la misma ciudad, se
produjo un atentado fallido contra la embajada inglesa. Dos
meses después, el 26 de mayo, explosiones simultáneas
pusieron patas arriba el consulado de Estados Unidos y las
oficinas de la Legión Americana en París, así como el consulado
español en Stuttgart. El 12 de junio le tocó el turno al
consulado español en Munich. El 18 de julio de 1972 una
explosión destruyó la oficina española de turismo en
Estocolmo, el mismo día del trigésimo sexto aniversario del
golpe de estado fascista.
El MIL‒GAC.
511 Quizá, más exactamente, del mito (intento de apropiación del mito) que se desarrolló
en tomo a él. El mito lo reforzaron los medios de comunicación y la forma en que
presentaron la actividad del grupo, por el brutal asesinato de Salvador Puig Antich y los
actos de solidaridad ‒y posterior memoria‒ hacia su persona, pero también por el posterior
asesinato de Oriol Solé, después de la espectacular fuga de Segovia. Dos años después del
asesinato de Puig, era muy difícil encontrar los textos del grupo que explicaban su
actividad, pero muy fácil comprar un póster con la fotografía de Puig.
512 Equipo Teórico ‒ ET, Equipo Exterior ‒ EE, Equipo Obrero ‒ EO.
a grupos informales de personas con intereses y objetivos
comunes y no a grupos políticos 513. En realidad, el MIL‒GAC fue
el resultado de la colaboración de los que Soler denomina EE
con algunos activistas que decidieron participar en esta
experiencia revolucionaria. En el siguiente relato de los
acontecimientos se prefieren los términos ET para el equipo
teórico (puesto que incluye a su inspirador), 1000 para el
equipo del exterior (cuando adquirió su forma más típica) y
“EO” para el obrero (entre comillas, ya que nunca ha existido
como tal en relación con el MIL). Pero refiramos los hechos en
orden cronológico.
513 La primera referencia a los grupos se hizo en un texto de Soler a finales de 1971,
antes de la “fundación” del MIL. El texto “Notas para el análisis del conjunto de ‘Nuestra
Tendencia’ y sus perspectivas” se puede encontrar traducido como “ETUÍEUBCJEU yta pía
aváxnari oxókxqpqi; rpi; xáaripa? xat xrav npoomikévx”, en Cortade (2009), ps. 55‒64.
En nota a pie de página se refiere que es un texto de 1973, pero en realidad en 1973 Soler le
dio forma, lo reimprimió y lo distribuyó internamente.
514 Acción Comunista. Esta organización surgió en 1965 de la escisión del FLP en el
exterior. La tendencia de AC seguía un marxismo independiente, abierto a los teóricos
antileninistas olvidados, y estaba influida por la producción teórica de la extrema
izquierda francesa.
515 Santiago Soler Amigó ‘Fede’ y ‘Petit’ (1940 o 1944‒1999) había estudiado Filosofía
y Filología y trabajaba como profesor, a pesar de la poliomielitis y la epilepsia que lo
atormentaban desde la infancia. Después de su liberación en 1976, escribió artículos en
numerosas publicaciones, trabajó en la reconstitución de la CNT y fue editor de
Solidaridad Obrera en 1978‒79.
516 Ignasi Solé Sugranyes ‘Montes’ (1950) es uno de los hermanos Solé, que fueron el
eslabón de unión para muchas personas que luego formaron el MIL. Tras la disolución del
grupo continuó con su actividad y fue deportado de Francia, Italia y Bélgica. Fue
encarcelado en España en 1978 durante un año.
política. Ese año se reunieron en Francia con Raoul Vaneigem,
quien puede que no les diese especial importancia, pero les dio
bastantes textos que no circulaban en España y la dirección de
una librería en París: La Vieille Taupe 517 . El ET desarrolló
relaciones con el grupo informal de la librería y especialmente
con Gilles Dauvé 518 , que tuvo bastante influencia en su
orientación política a través de fecundas conversaciones y
correspondencia. En 1969 ambos jóvenes adoptaron una
actitud crítica con AC, instigados por la huelga en
AEG‒Telefunken de Terrassa, donde los trabajadores se
organizaron participando en asambleas y se negaron a la
intermediación sindical de CC OO. La inclinación del ET por el
comunismo de consejos y su crítica al modelo leninista de la
organización los llevaron a la salida de AC a principios de 1970.
517 La Vieile Taupe (El Viejo Topo) era una librería fundada en 1965 por Pierre
Guillaume que cerró en 1972. Aparte de librería fue un lugar de encuentro de partidarios
de las teorías marxistas revolucionarias y situacionistas.
518 Gilles Dauvé ‒conocido también con el pseudónimo de Jean Barrot‒ es un activista y
pensador francés, con abundante obra escrita.
519 Círculos de Formación de Cuadros. El propósito de los trabajadores que formaron los
CFC era la formación política de los trabajadores afiliados con el fin de fortalecer la
tendencia autónoma en luchas políticas que se daban con los cuadros de los partidos en las
fábricas.
‒aunque nunca se incorporaron a estos grupos‒ tenían
estrechos contactos políticos con la tercera corriente del
movimiento obrero. Lo que Soler denomina “EO” no es sino el
grupo dirigente de Nuestra Clase, partidario de un sindicalismo
revolucionario, independiente de partidos y organizaciones
políticas. Las figuras centrales del “EO” eran autodidactas
obreros del metal en industrias pesadas de Barcelona.
520 En el libro Cortade (2009), p.48, “Cortade” dice que el ET corrigió el texto
tergiversando algo la realidad. ‘Andró Cortade’ es el pseudónimo de una o más personas,
probablemente francesas, que publicaron el libro en Francia en 1985. Aunque es de los
pocos libros que se han ocupado del tema de una manera políticamente cualificada, su
proximidad a los hechos que describe, la consiguiente falta de información y textos clave
(la cual el autor admite en p. 33) y la disposición a distorsionar los hechos en aras de la
justificación de la tesis política del autor, restan bastante credibilidad a la narración. (Mi
comentario no se dirige a la calidad científica de la obra, sino a la falta de fiabilidad
política de las conclusiones que no se basan en hechos reales). La cronología de “Cortade”
‒que se inicia simbólicamente en 1937‒ está llena de inexactitudes. Elimina el papel del
Partido Comunista de España en la guerrilla (en lugar de criticarlo), subestima la función
de la CNT en la clandestinidad, oculta la envergadura de la actividad de DI y del Grupo
Primero de Mayo en favor de noticias más importantes (como que los Beatles tenían
éxito), refiere que los Nueve de Burgos fueron ejecutados (aunque lo desaconsejó la
solidaridad internacional), que los episodios de San Adrián fueron los más violentos desde
la Guerra Civil (exageración), tiene errores evidentes en la cronología de acontecimientos
Toulouse y se registró como editor el EE,‒Nuestra Clase. De ahí
deriva la idea de Soler del nombre del EE. En realidad, el
EE‒Nuestra Clase era una y la misma persona: Oriol Solé 521.
del MIL, así como muchas otras inexactitudes. El plano de la p. 230 (si procede del mismo
libro) es ‒siendo benévolo‒ deficiente y erróneo. Los errores continúan también en el texto
que se inserta entre los textos originales del MIL. El ET y el EE no pertenecían a los GOA
ni discrepaban del “EO” respecto a las elecciones sindicales. El empleado del Banco
Hispano‒Americano no resultó levemente herido por los activistas “parcos en violencia”,
sino que recibió un disparo a quemarropa en la cabeza porque presionó la alarma. Aparte
de estos errores significativos, el autor saca conclusiones sin fundamento: [...]La calidad
de sus acciones (MIL) era una crítica viva del idealismo anarquista ingenuo [...]& 69).
¿Cuál es la diferencia cualitativa entre la manera de atracar bancos de Facerías y la de
MIL? El redactor califica la acción de los GARI como acción defensiva y cataloga a
Jean‒Marc Rouillan como vil terrorista (p. 94) ¿Por qué no estigmatiza su “vil”
comportamiento cuando ‒en el MIL‒ planificó con Oriol Solé el asesinato del jefe de
policía de Barcelona? ¿Por qué el autor califica el texto de disolución como [...] el texto
más importante del MIL [...] que no [...] fue entendido en absoluto por sus redactores
[...]? (p.77). ¿No sería más honesto admitir que en la alternativa concreta y en el texto
había desempeñado un papel clave la mediación de Gilles Dauvé, ya que sabe que [...] se
echaron de menos mediadores [...]? (p. 76). La traducción de los textos del MIL al griego
‒más allá de mi opinión‒ es un paso notable y la crítica de “Cortade” ‒pese a los errores‒
es en muchas ocasiones especialmente creativa y de calidad.
521 Oriol Solé Sugranyes (1948‒1976) fue uno de los once hijos de una familia
pequeñoburguesa catalana. Cinco de los hermanos participaron más o menos en los grupos
autónomos. Oriol ‒paradigma del hombre de acción‒ fue encarcelado en repetidas
ocasiones a lo largo de su vida y fue asesinado el 6 de abril de 1976, a apenas cien metros
de la frontera francesa, tras su fuga de la cárcel de Segovia.
muy estrecha con ETA ‒a cuyos miembros había ayudado de
varias maneras‒, con los anarquistas exilados y también con los
separatistas catalanes. Pero quienes se ganaron sus mayores
simpatías fueron unos jóvenes del grupo anarquista Groupe
Autonome Libertaire‒1871‒Vive La Commune 522 . Esos
compañeros eran Jean‒Marc Rouillan ‘Sebas’, Jean Claude
Torres ‘Cri‒Cri’ y Enríc Oller ‘La Carpe’523.
525 Eso se cuenta en los textos del MIL‒GAC y en la mayoría de los libros que han
contado su historia. Pero los componentes del “EO” nunca aceptaron que hubiese
unificación de ningún tipo más allá de la simple colaboración. Vid. Rosés (2002), ps.
84‒87.
artefacto explosivo en el consulado español. El grupo de
Toulouse ya había decidido tomar las armas. En enero ETA, con
la que colaboraba, proveyó de armas a Oriol Solé. El 19 de
enero de 1971 Oller, Rouillan, Torres y Oriol Solé fundaron el
grupo en una reunión en la que también estaba presente Ignasi
Solé. El nombre simbolizaba la intención de difusión numérica
de esta práctica. El propósito del 1000 era funcionar como un
grupo de apoyo a la clase obrera, mediante expropiaciones y
acciones violentas. Ignasi sería el enlace con la clase obrera
revolucionaria de Barcelona. Un día antes de la fundación del
1000, sus miembros habían procedido a su primera
socialización, obteniendo equipos y materiales de impresión. El
1 de febrero Rouillan y Oriol, con Oller de conductor, hicieron
la primera tentativa de robo en una empresa de transporte de
mercancías valiosas que acabó en un tiroteo, sin que pudiesen
llevarse dinero.
526 Vicente Sánchez‒Bermejo participó en acciones con el 1000, pero tras esta detención
se asustó y abandonó el grupo.
La ruptura ET‒“EO” llevó al 1000 a una relación más estrecha
con el ET. Ambos grupos habían perdido muchos contactos que
les garantizaba la buena relación con el “EO”, sin que eso
significase que se hubiesen aislado de las relaciones con el
movimiento obrero. Los miembros del “EO” se congregaron en
los GOA 527 . El vacío de Oriol en el 1000 lo cubrieron su
hermano, Jordi Solé ‘Pancho’ y Salvador Puig Antich, ‘Gustavo’
(luego ‘Metge’). En constante movimiento entre España y
Francia, los miembros del 1000 socializaron bastantes
máquinas de escribir y accesorios de impresión que se
enviaban a los obreros de Barcelona. Por desgracia, el folleto
“La revolución hasta el fin” finalmente no se editó 528. Tras un
corto periodo de entrenamiento en Toulouse (robo de
automóviles, manejo de armas, etc...), los miembros del 1000
pasaron a Barcelona. En Francia se habían provisto de armas de
viejos combatientes anarquistas como Teófilo Navarro,
compañero de armas de Sabaté. Por lo general, bastantes
guerrilleros y guerrilleras de la CNT ayudaron como pudieron a
los jóvenes combatientes.
527 Grupos Obreros Autónomos. Los miembros del MIL no participaron nunca en los
GOA, como erróneamente se dice en Tajuelo (1977).
528 Sigue sin saberse hasta hoy si el original está en alguna parte. Hay fragmentos
extensos en un archivo privado y hay datos sobre él en correos intemos, así como en un
prólogo escrito para su edición. El “Mamotreto”, como se denominaba al folleto de
cincuenta páginas, dejaba claro que la lucha debía ser anticapitalista y no antifranquista,
con la revolución socialista y la abolición del trabajo asalariado como objetivos, no la
democracia o la revolución socialdemócrata. El texto arremetía contra los partidos, el
leninismo y la lógica obrerista. La clase obrera tenia que poner fin a su alienación social,
económica y de conciencia. Revolucionarios podían ser también los no trabajadores. Su
desaño era la renovación constante de la teoría revolucionaria, los objetivos, los medios y
las formas de lucha. Pese a todo, no se habló de lucha armada, típica de la iniciativa del
1000 sobre la lucha armada, antes de su reivindicación teórica del ET. Vid. Roses (2002),
ps. 69‒72,112‒113.
Los activistas del 1000 permanecieron en actitud de espera a
principios de 1972. Pero la liberación de Oriol a finales de mayo
dio otra vez un ritmo frenético a su actividad. En la prisión Oriol
se había convencido de que había que pasar a una lucha más
dura, influido tanto por la experiencia de las guerrillas del
Tercer Mundo como por un nacionalismo catalán latente, ya
que contaba con grupos armados que luchaban por la
independencia catalana. También tenía contactos con los
separatistas catalanes Ignasi Solé. A pesar de estas influencias,
no había perdido de vista el objetivo inicial, es decir, la función
ancilar del grupo con respecto al movimiento obrero.
529 Tal como se refiere más abajo, el MIL colaboró en muchas ocasiones con grupos
autónomos de Barcelona (que la policía luego denominó “OLLA”). Las acciones citadas
aquí corresponden a las que llevaron a cabo solo los activistas del MIL, ya que en algunas
incluso colaboraron con miembros de la “OLLA”. En el CIA n° 1, que editó el MIL en
1973, hay una reivindicación de los atracos y se hace una clara referencia a [...] otras
acciones que pueden complicar a militantes legales de los dos lados de la frontera y de
otras acciones efectuadas por grupos de autodefensa obrera, que son un poco flojas para
revindicar acciones armadas [...] debido a que no actúan en la clandestinidad. Vid. C.I.A.:
Conspiración Internacional Anarquista, n° 1, Ediciones por un Movimiento Ibérico de
Liberación, 1973, archivo Martínez Guerricabeitia, carpeta 1547.
530 Vid. Roses (2002), ps. 151‒152.
clandestinidad Salvador Puig Antich y José Luis Pons ‘Queso’531.
Los otros tres, que participaban indefectiblemente en las
acciones armadas, eran Rouillan, Torres y Jordi Solé. El 21 de
octubre de 1972, atracaron un banco en Mataré, con un botín
de alrededor de un millón de pesetas.
531 José Luis Pons Llobet ‘Queso’ tenia apenas diecisiete años entonces y era
compañero de estudios de un hermano menor de los Solé. Fue el último miembro del MIL
excarcelado, en 1977. Había participado anteriormente en la fuga de Segovia y estaba
junto a Oriol cuando fue asesinado.
532 “Tareas político‒prácticas de una biblioteca socialista”, Roses (2002), ps. 132‒133.
núcleo de lucha militar no busca planteamientos políticos de lucha
de clases sino que se considera a sí mismo como la vanguardia o
punta de lanza de la lucha y halla en sí mismo toda justificación. En
cambio, un núcleo de agitación armada no puede admitir que se
mitifique su actividad considerándose autosuficiente sino que se
define por su relación con la lucha de clases. Es decir, un grupo de
agitación armada es un grupo de apoyo que sitúa su propia
actividad en el seno del conjunto de la lucha de clases del
proletariado, que forma parte de dicha lucha de clases. [...] Un
núcleo dedicado a la agitación armada tiene varios objetivos:
533 En griego hay dos traducciones completas de este texto. La primera en el tiempo en
Pesodromio 4, Oxaijikói; róxap,os oxqv bapketaávq [La guerra de clases en Barcelona],
Atenas, Dieznis Vivliociki, 1974, ps. 124‒125; y la segunda en Cortade (2009), ps. 78‒81.
534 Organització de la Lluita Armada.
sabotajes. Por lo tanto, el texto sobre la agitación armada
quería responder a una pregunta que se había puesto sobre la
mesa de una manera apremiante.
535 Parte del panfleto que dejaron en el atraco del 20 noviembre está traducido, Cortade
(2009), p. 77. En un panfleto posterior, el MIL aclaraba que su acción se encuadraba en las
necesidades inmediatas de la lucha de clases y censuraba a los grupos armados
pequeñoburgueses, que intentaban virar la lucha de clases hacia objetivos separatistas
(catalán y vasco obviamente). Ver Roses (2002), p. 165.
536 Emili Pardillas Viladrich ‘Pedrals’ era traductor y habia sido encarcelado durante
tres meses después de los incidentes del mayo parisino. Junto con Nicole Entremont
‘Aurora’ estaba encargado de cruzar la frontera, de la intendencia de los grupos armados y
de alquilar vehículos y escondites. Pardillas había participado en algunos atracos como
conductor.
de las ediciones, pero habían dejado claro que no querían
participar en atracos. El nuevo “EO”, según se dice en algunos
libros, eran Ernest Núñez y Marcelo López, obreros industriales
con especial influencia en las fábricas y en los comités obreros
de sus barrios.
542 Por descontado que Soler y Rouillan estaban en tendencias diferentes. Versiones en
detalle, Roses (2002), ps. 199‒207.
543 Soler afirma que, simultáneamente a estos contactos, Garriga se entrevistó con
Alberola para tener su opinión. Roses (2002), p. 201.
544 Roses (2002), p. 224.
545 El texto íntegro de disolución está en griego en Cortade (2009), ps. 82‒87.
del grupo. Ni siquiera hubo mención al término “agitación
armada”, que fue sustituido por lucha armada. No hubo
ninguna valoración de la experiencia armada para sacar una
conclusión sobre si había contribuido y en qué medida o sobre
si fue correcto limitarse a las expropiaciones de dinero y
materiales. Por último, en la medida en que en el texto se
justifica tanto la línea de la biblioteca como la de la opción
armada, queda claro que el MIL‒GAC no fracasó ‒según sus
miembros‒ en su actividad, sino que se disolvió porque había
fracasado actuando conjuntamente, como se había anunciado
a través de sus textos y sus tesis. La oportunidad de que las
personas que formaron parte de él ofreciesen una valoración
convincente y exhaustiva del MIL se perdió para siempre.
Parece que la disolución fue recibida con alivio por las dos
tendencias enfrentadas. Ahora ya cualquiera podía avanzar por
el camino que le interesase. El texto de disolución se imprimió
en el segundo número de la C.I.A., que salió con la anuencia de
todos y contenía bastantes textos más en una orientación más
marxista en relación con la acción armada. La estancia en
Toulouse actuó beneficiosamente también sobre Ediciones
Mayo ’37, ya que se imprimieron algunos folletos que se
habían puesto en marcha hacía tiempo. Ediciones Mayo ’37
desde ese momento en adelante procedió a editar más de diez
textos, entre ellos “Los consejos obreros en Alemania” de
Pannekoek, “Entre la revolución y las trincheras” de Berneri,
“Violencia y solidaridad revolucionarias: el proceso de los
comunistas de Barcelona” de Dauvé, “Lenin y la Revolución
Rusa” de Ciliga, etc, cumpliendo así su objetivo inicial.
546 Muchos libros sobre el MIL o la vida de Puig, y también la versión dramatizada de la
película ‒históricamente ridicula‒ "Salvador", presentan la muerte del policía como más o
menos fortuita o como resultado del fuego cruzado de sus colegas. En el juicio de Puig, su
abogado ‒que luego se presentó como resistente antifranquista‒ sostuvo que Puig había
perdido la razón por los golpes que había recibido en la cabeza y que creyó que el policía
era un gángster de una banda rival. Sobre la base de la declaración del médico forense de
que el cuerpo del policía tenía siete u ocho heridas de bala, mientras que la carpeta del
juicio refiere tres, la familia de Puig trata en los últimos años de que se revise la sentencia.
Patrocinadores de esa tentativa son muchos de los posteriores admiradores de Puig Antich
y principalmente los catalanes separatistas, que intentan santificarlo y quitarle de encima el
de la organización, la represión vino para pasar página. Seis de
los doce participantes en el congreso de disolución fueron
encarcelados. En los juicios que siguieron, Puig Antich fue
condenado a muerte, Pons a treinta años de prisión y Mateos a
cinco. Los demás esperaban su turno. Los miembros del
antiguo MIL continuaron sacando textos a través de los centros
penitenciarios. En el más significativo de ellos establecieron la
forma de solidaridad que deseaban: [...] Los comunistas del
GAC‒septiembre‒73 consideramos que la intensificación de la lucha
por la destrucción del sistema que engendra la represión es la mejor
manera de desarrollar la solidaridad revolucionaria con los
represaliados. [...]547.
548 Datos de la charla de Ricard Vargas, miembro del MIL, con título “L’ OLLA”, el
13/3/2008 en Barcelona, en el marco del seminario Histories deis grups autónoms que
organizó la asamblea libertaria de la Universidad de Barcelona.
‒hombres y mujeres‒ participaron en las acciones armadas,
que eran principalmente atracos a bancos y atentados con
bombas. Con el dinero de estas acciones se financió el comité
de solidaridad con los presos del MIL. Este comité hizo un
trabajo enorme, ya que era el único que poseía bastantes
textos de los detenidos y logró dar a conocer, tanto en España
como en el extranjero, el carácter político de la actividad del
MIL549. Los textos fueron impresos en las sucesivas ediciones
del llamado “Archivo MIL”. Empezaron a crearse desde octubre
por toda Francia, Bélgica y Suiza los respectivos comités de
solidaridad. En Ginebra se llevó a cabo el 20 de octubre un
atentado contra las oficinas de Iberia.
550 Muchos consideran todavía que esa ejecución costó ‒como represalia‒ la vida a
Puig. La película “Salvador” ‒históricamente ridicula‒, va un paso más allá y pone en la
hoca del activista la frase: “ETA me ha matado”. En realidad, la ejecución de Puig era
irreversible. El asesinato del policía durante su detención, su participación en el tiroteo con
la policía, etc., no permitían ningún optimismo en cuanto a la condena. El ambiente en las
filas conservadoras del gobierno ya estaba tenso desde el 1 de Mayo de 1973, cuando otro
policía había perdido la vida en enfrentamientos en una manifestación convocada por el
FRAP en Madrid. Es imposible para un activista demandar ‒en muestra de solidaridad‒ la
intensificación de la lucha por la destrucción del sistema y tres meses después hacer
responsable de su ejecución a la guerrilla de ETA. La atribución de responsabilidades a
ETA es una lectura cómoda, a posteriori, de la situación, al servicio de la campaña
antiterrorista contra la organización vasca. El beneplácito de los rebeldes a ese golpe se
expresó entonces tanto con consignas en las manifestaciones como en la prensa
revolucionaria: “Frente Libertario", portavoz anarcosindicalista de la emigración y
expresión militante del Movimiento Libertario que actúa dentro de España, se solidariza y
saluda con efusión a los autores del atentado efectuado contra el siniestro Carrero
Blanco. En oposición a las declaraciones lamentablemente contemporizadoras del P.C.E.
y otros grupos políticos que se pretenden representantes de la oposición, entendemos y
proclamamos que esta ejecución constituye un acto liberador para la clase obrera y para
todos los pueblos oprimidos por el Estado Español. Al abatir a Carrero Blanco, los
responsables del atentado han atacado directamente a Franco, a su Policía y a su
Ejército, probando así que no puede haber “paz civil" en España bajo un poder
dictatorial fundado en una concepción ultraautoritaria del orden. ¡Viva, pues, la acción
directa contra el franquismo! Frente Libertario, n° 38, enero de 1974. Archivo Gómez
Peláez, carpeta 337.
de veinte años) y cinco años para Mateos. Cuando se
notificaron las penas, el 10 de enero, hubo una conflictiva
marcha por el centro de la ciudad y ataques con cócteles
molotov contra la policía.
551 Hay una relación bastante detallada de las acciones a nivel europeo en Cortade
(2009), ps. 25‒26. Algunas acciones que llevaron a cabo los GARI en ese periodo serán
relatadas más adelante.
552 Su nombre real era Georg Welzel y había declarado un nombre falso y nacionalidad
polaca a los policías que lo detuvieron por el asesinato de un guardia civil.
553 El Frente Revolucionario Antifascista y Patriota fue fundado en noviembre de 1973
por el PCE m‒1, una escisión izquierdista del PCE. El verano de 1975 el Frente decidió
pasar a la lucha armada y ejecutó a dos hombres de las fuerzas de seguridad e hirió a otro.
Por estas acciones fueron fusilados tres de sus miembros. El FRAP se disolvió en 1978.
Las noticias sobre la ejecución dieron la vuelta al mundo. Ese
mismo día estallaron en Barcelona violentos enfrentamientos
en muchos puntos de la ciudad. Todas las facultades
universitarias permanecieron cerradas y muchos bancos y
vehículos del estado fueron entregados a las llamas. Por la
noche un grupo de la “OLLA” dio a conocer a los demás grupos
su intención de atentar contra la jefatura de la BPS en la Vía
Laietana. Para ese plan tenían preparado armamento pesado
cargado en vehículos robados. El plan no se llevó a cabo
porque la mayoría de los miembros se oponían a tal acción, ya
que provocaría un gran número de muertos de uno y otro lado
y una intensificación de la represión desproporcionada. Era la
segunda vez que la “OLLA” cancelaba un plan de atentado en la
Vía Laietana. El primero, poco antes, preveía la voladura del
edificio con dinamita, pero se canceló debido al riesgo de que
muriesen presos en las mazmorras de la jefatura.
554 En la revista Solidaridad España (mayo‒junio de 1974) hay una lista pormenorizada
de los atentados. Archivo Gómez Peláez, carpeta 553.
Manifestaciones conflictivas se celebraron también en
Bruselas, Lieja, Luxemburgo, Bayona, París, Nimes, Ginebra,
Perpiñán, Toulouse, así como en muchas otras ciudades.
Los GARI.
556 Vid. CNT‒Informa, junio de 1974, p. 2, archivo Gómez Peláez, carpeta 553.
557 Grupos Autónomos de Intervención. Estas acciones fueron reivindicadas más tarde
por los GARI. Vid. Dossier G.A.R.I., archivo Gómez Peláez, carpeta 553.
entre ambos países. Dos semanas más tarde, los miembros de
los GARI atracaron un banco en Toulouse para financiar su plan
principal, que era el secuestro del director del Banco de Bilbao.
558 Seguramente había un canal de comunicación antes de ese encuentro, tanto el de Edo
y Urtubia con alguno de los hermanos Solé como el de Alberola con Rouillan. Vid. Edo
(2006), p. 234 y Roses (2002), p. 223.
Urbano. Las demandas de los GARI eran las siguientes: 1) La
publicación de los comunicados de la organización en los
medios de comunicación. 2) La libertad condicional de Santi
Soler por razones de salud. 3) La publicación de la acusación
contra los miembros del FRAP que habían sido detenidos por
los incidentes del 1 de mayo de 1973 en Madrid, ya que se
sospechaba de una posible sentencia de muerte. 4) La
liberación inmediata de los presos políticos (de todas las
tendencias), que habían cumplido una parte de la pena, de
manera que tenían derecho a ser puestos en libertad
condicional.
561 Un mes después los GARI enviaron una caja de champán a los tres bomberos como
reparación por haber resultado heridos. La policía confiscó la caja. El responsable de la
explosión prematura fue el inspector de policía, que, sin esperar la llegada del técnico en
desactivación de explosivos, sacó la bomba para transportarla a otro lugar. Su estupidez
precipitó la explosión en diez minutos y le costó un brazo. Tajuelo (1977), p. 121.
participar en la “OLLA” y los GARI), Txema Bofill Condom,
Floreal Cuadrado, Raymond Delgado y Jean‒Marc Rouillan.
565 En ese periodo comenzaron a actuar también los GRAPO: Grupos de Resistencia
Antifascista Primero de Octubre. Los GRAPO eran el brazo armado del PCE (r), una
escisión intransigente del Partido Comunista. Su primera acción fue la ejecución de un
policía el 2 de agosto de 1975, mientras que, en respuesta a los fusilamientos de 27 de
septiembre, el 29 de septiembre y el 1 de octubre ejecutaron cinco policías en Madrid. Más
tarde la democracia presentó a los GRAPO como brazo armado de la CNT y
filoanarquistas, montando una teoría interesada sin fundamento alguno.
566 Las cifras proceden de estadísticas del estado y periódicos españoles de la época.
Vid. Gurutazoiak (2003), p. 8994.
de dos cosas. La primera era la industria turística que lo
mantenía y la segunda el enorme aparato represivo que
garantizaba su perpetuación.
567 A principios de los años 70, el SI de Esgleas intentó establecer bases en España. La
renuencia de muchos militantes del interior a colaborar con los ortodoxos de Toulouse
llevó al SI a buscar aliados entre los circuios estudiantiles radicales. La premura del SI por
encontrar aliados le hizo ponerse en contacto hasta con marxistas (!). La figura central del
grupo de Valencia fue Juan Ferrer, que más tarde resultó ser un trotskista que intentaba
transformar la naturaleza política de la CNT. Los colaboradores del SI en otras zonas eran
pocos y por lo general estudiantes.
568 Hay información sobre Solidaridad en el capítulo 10: “Descomposición de CNT, las
juventudes internacionalizan el conflicto. 1966‒1975”.
militantes, que no tenía fundamento real y se disolvió a
principios de 1976 569.
569 La existencia de este comité nacional se dio a conocer mediante una supuesta
plenaria organizada en Madrid en febrero de 1976. En su comunicado ‒evidentemente
extraído de la reconstrucción real de la CNT‒ advertía de la “estafa” del nombre de la CNT
y de la “traición”. Después de esa sesión plenaria el comité en concreto se disuelve. Vid.
Gómez Casas (1984), p.10. En relación con los grupos y las publicaciones que había en
España en 1975, hay una exposición más detallada en Meltzer (1977), ps.128‒136. El
autor del texto es Freddy Gómez, hijo del jefe de redacción de Frente Libertario en París.
muerte de Franco. 1976 iba a ser el año más explosivo de las
reivindicaciones obreras desde la Guerra Civil.
570 Hay fotografías típicas de la época en que policías armados hasta los dientes
garantizan por la fuerza el funcionamiento del metro madrileño.
policías a retirarse. La situación evolucionó de modo trágico.
Cuando los trabajadores se reunieron en la iglesia de la ciudad
para celebrar la asamblea general prevista, la policía los rodeó
y les ordenó disolverse. Tras la negativa de los cinco mil
trabajadores a salir de la iglesia, los policías lanzaron gases
lacrimógenos desde las puertas. A continuación se produjo el
pánico. La multitud empezó a romper las ventanas intentando
respirar. Fuera de la iglesia las fuerzas de policía recibieron un
ataque de otros habitantes y trabajadores de la ciudad, que
pretendían rescatar a sus compañeros. Cuando comenzó la
salida masiva de los trabajadores que participaron en la
asamblea, la policía los recibió nuevamente con gases
lacrimógenos, pelotas de goma y una lluvia de munición real.
Cinco personas murieron y otras ciento cincuenta resultaron
heridas, treinta de gravedad. Alrededor de treinta más fueron
gravemente heridas por pelotas de goma o palizas. Las
comunicaciones se interrumpieron y el acceso a la ciudad fue
prohibido, en un intento de retrasar la difusión de la noticia 571.
572 Esa opinión expresa Margaret Torres Ryan en su tesis doctoral y cree que en este
doble polo la organización del exilio (Esgleas‒Montseny) encontró ocasión de intervenir
en el interior para controlar el proceso de reconstrucción. La teoría de la imposición de la
FAI del exterior en la reconstrucción de la CNT es una constante que recorre todos los
relatos que provienen del lado de los renovadores, que en 1979 procedieron a la ruptura de
la organización y cuya continuidad histórica es la CGT (Confederación General de
extracción social de los miembros era bastante heterogénea.
Cuando Gómez Casas escribió la historia de la reconstrucción
de la CNT distinguió quince tendencias, corrientes y grupos
‒más o menos formales‒ que la componían 573 . Fueron,
ordenadas casualmente, las siguientes:
574 Eso no significa que los obreristas no se interesasen por esas cuestiones,
simplemente creían que no era competencia de la CNT ocuparse de todo y que las
iniciativas para esas cosas debían provenir de grupos especializados, ateneos libertarios
(locales) u otras colectividades.
575 Gómez Casas (1984), p. 39.
politiquería y los ataques personales.
579 El PCE convocó una manifestación en Madrid, en la que participaron cerca de cien
mil manifestantes. No hubo el menor incidente y la policía no interfirió en su desarrollo, a
pesar de que el PCE era un partido ilegal. Además protegió el recorrido de las reacciones
de ultraderechistas y falangistas.
580 La matanza de Atocha se presentó como obra de falangistas fanáticos contrarios a la
influencia comunista en el sindicato de transportes de Madrid. De hecho, uno de los
asesinos era miembro de la Falange y sindicalista de CNS del Transporte. Pero ¿quiénes
fueron los autores intelectuales y cuántos participaron en última instancia en la acción? No
se darán nunca respuestas concretas. De los cuatro principales acusados, sólo uno cumplió
su condena. El segundo se escapó en su primer permiso después de catorce años y huyó a
Colombia, donde fue encarcelado por tráfico de drogas. El tercero escapó de la cárcel unos
meses después de su detención y antes del juicio. El cuarto murió en circunstancias poco
claras en la cárcel antes del juicio. En 1990 los archivos italianos revelaron que en la
acción había participado también un neofascista italiano de Gladio ‒la conocida
organización neofascista fundada por la CIA‒ que se había refugiado en España en 1972,
cuando se demostró su participación en actos terroristas. El Estado, la fiscalía y la policía
cerraron el expediente con procedimientos exprés, pese a las protestas de los ahogados de
las victimas.
una reunión de la FAI catalana y detuvo a cincuenta y tres
personas 581. Reuniones secretas de contenido político eran
habituales en aquella época y la policía, a pesar de que sabía
que se celebraban, no intervenía. Pero ésta en concreto fue
asunto de portada en los medios de comunicación y se
presentó como un intento de fundación de una organización
terrorista. Los arrestados fueron retenidos durante muchos
días sin ningún tipo de pruebas reales. Una semana más tarde
las pruebas se cocinaron en Murcia. La policía detuvo a cinco
personas que se encontraban en posesión de dos maletas con
armas y municiones. Los detenidos fueron acusados de
participar en la FAI, trasladados a Barcelona y su caso se unificó
con el de los catalanes. El caso fue una provocación
perfectamente elaborada por la BPS con la colaboración de los
medios de comunicación. El proveedor de las armas fue
Joaquín Gambín en una misión encomendada 582 . Las
581 La FAI nunca tuvo pujanza real durante la Transición. La fundación de los grupos de
la FAI se cimentó ‒y en muchos casos fue suscitada ‒ sobre la FAI del exilio, que quería
ejercer control político sobre ellos. Apenas en diciembre de 1978 se celebró un congreso
de la sección española de la FAI, en el que participaron sesenta delegaciones (cifra que
prefiguraba un número de miembros inferior con mucho a quinientas personas). En
realidad, la FAI de la Transición era un fantasma abocado al fracaso desde su nacimiento,
con influencia mínima y el valor único de la historicidad de su nombre. Fue útil sólo para
la oposición sindical de la CNT y ‒como enemigo inexistente‒ para las conjeturas y
provocaciones policiales. Vid. Íñiguez (2001), p. 571.
582 Joaquín Gambín nació en 1929. En 1946 empezó su carrera por las prisiones
españolas, donde entraba y salía constantemente acusado por robos y asaltos. En sus
reclusiones sucesivas siempre tuvo excelentes relaciones con los directores y guardias ya
que era informante. En la Transición fue protagonista en dos casos de provocación, el de la
FAI de Murcia y en el “caso Scala”. Explotando su edad, sus informaciones y su
experiencia, Gambín se presentaba a los jóvenes anarquistas haciéndose pasar por
guerrillero de la época de la guerrilla, ofreciéndoles armas y explosivos. Su papel lo
revelaron algunos compañeros tras el caso de Murcia, pero ‒sin saber por qué‒ la
información se perdió al ser transmitida por el comité nacional de la CNT al comité
peninsular de la FAI y de allí a la FAI de Murcia. Sobre el caso Gambín, véase Tinta
Negra, ps.10‒13 y Cañadas (2008), ps. 28‒67.
acusaciones se desmoronaron mucho más tarde, pero el daño
ya estaba hecho. Parte de la opinión pública registró a la FAI y a
los anarquistas en el bando de los “extremistas”, antes de que
la sangre de Atocha se secase.
586 Uno de ellos fue Agustín Rueda, que murió en prisión meses más tarde. Hay
sospechas de que su asesinato estaba relacionado con el intento de encubrir la
provocación. A este caso se refiere también el anexo sobre la COPEL al final de este libro.
El informante de la policía en el caso Rueda también desempeñó un papel importante en el
desarrollo de los GAL, organización paramilitar de inspiración socialista, que asesinó a
miembros de ETA en los años 80. Vid. Tinta Negra, p.10.
bombas. La verdad fue que hubo un dedo incendiario que
prendió la solidaridad sindical. La huelga terminó de manera
apresurada con la satisfacción parcial de las demandas de los
huelguistas, un fenómeno poco frecuente en medio de una
crisis económica.
587 Hasta enero de 1978, la CNT de Cataluña había repartido 140.000 carnés a sus
miembros. Vid. Edo (2006), p. 276. Dado que en septiembre de 1977 los miembros de la
CNT en toda España eran 120.000, es evidente que muchos trabajadores en Cataluña
habían abandonado los sindicatos del régimen en otoño de 1977 e ingresaron en la CNT.
Vid. Gómez Casas (1984), p. 85.
firma de los Pactos de la Moncloa, organizaron una
concentración de protesta en Barcelona, en la que participaron
los sectores catalanes de CC OO y UGT. Cuatrocientos mil
trabajadores y gente solidaria inundaron las calles de la ciudad.
Los partidos de la democracia española fueron sacudidos por la
rebelión de los sindicatos y se entregaron a una carrera por
restaurar el orden acordado. CC OO de Cataluña puso de
manifiesto cismas y tendencias de disolución. El partido
socialista se mostró más capaz de reducir a sus sindicalistas. Lo
que le quedó claro al sistema político fue la capacidad del
movimiento libertario de torpedear el pacto de estabilidad, si
podía extender por todo el país la unidad de la lucha sindical.
588 Algunos de los miembros del grupo estaban afiliados a la CNT, pero habían decidido
actuar de forma independiente de la Confederación y pasar a la lucha armada. Los
acusados por el caso, aunque fueron auxiliados por la CNT, que no rechazó su condición
de miembros, se identificaron en prisión como autónomos. Es significativo que antes de la
manifestación se presentaron en las oficinas de la CNT catalana, donde era mayoría la
tendencia sindicalista, informaron de los cócteles molotov que llevaban y preguntaron si
necesitaban su presencia en algún punto de los piquetes de defensa. Los organizadores
respondieron que todo estaba en orden (la seguridad tenía cócteles por razones de
autoprotección). Vid. Cañadas (2008), p. 29‒32.
Gambín señaló como objetivo adecuado de los molotov ‒si no
se producían incidentes en la manifestación‒ la sala de fiestas
Scala, un edificio de siete plantas al otro lado de la zona centro
de la ciudad, donde se divertían los nuevos ricos de la clase
burguesa catalana.
589 Los participantes en el ataque aseguraron más tarde que el fuego de los molotov se
había extinguido casi antes de que se perdieran por los callejones de enfrente y que cuando
fueron al Scala ya salía una columna de humo de la parte trasera, que ellos creían que
procedía de las chimeneas de una industria. Cañadas (2008), p. 34. La descripción de los
hechos por la tendencia sindicalista de la CNT ‒y posteriormente la CGT‒ es a menudo
incompleta y selectiva en relación con la responsabilidad de los servicios secretos y la
planificación estatal más amplia. Hay una referencia completamente errónea en griego en
el prólogo de Ceacero et alii, p. 11. donde se dice: [...] La manifestación de la CNT en
Barcelona contra el Pacto es ahogada en sangre cuando del bloque de la FAI sale un
cóctel explosivo hacia la ópera (Scala) de la ciudad [...].
incendio a motivos políticos antes incluso de que se redactase
la acusación. Esa misma tarde comenzaron las detenciones de
siete jóvenes, chicos y chicas, que Gambín delató a la policía. El
mismo “escapó” tras reunirse con el inspector de policía y se
emitió la orden de detención contra él590. Los jóvenes fueron
cruelmente torturados hasta que firmaron sus confesiones.
590 El propio Gambín aceptó su papel en el “caso Scala”, cuando fue detenido por error
en diciembre de 1981, por posesión de explosivos que no había conseguido trasladar a
ETA. Pasó menos de un año de prisión, fue liberado y continuó su vida con un nombre
falso. En 1978 había delatado a miembros del ERAT, el grupo autónomo de trabajadores
de SEAT, que había cometido atracos para financiar las huelgas. Hay una referencia
pormenorizada al ERAT en Cortade (2009), ps. 168‒178. Debord, en los textos traducidos
en este libro sobre los autónomos, muestra una gran diligencia difamando en conjunto a las
Brigadas Rojas y GRAPO como corrompidos por la policía, pero se le escapa que los
combatientes autónomos de España habían caído, desgraciadamente, también ellos
víctimas de la provocación en algunos casos, dato que crea desigualdades en su análisis.
591 La referencia al nazi Goebbels no es casual ni grandilocuente. El ministro del Interior
del gobierno democrático, que organizó el “caso Scala”, fue Martín Villa. Éste había
ejercido durante la dictadura como secretario nacional del sindicato vertical y era un fírme
defensor del modelo de organización nacionalsocialista (nazi). El responsable de la
ejecución del plan ‒está probado que se reunió con Gambín‒ fue el inspector de la BPS,
Conesa. Éste había comenzado su carrera en la policía franquista en 1939 y durante la
Segunda Guerra Mundial fue enviado a cursos de formación con la Gestapo en la Francia
ocupada, con la tarea de vigilar a los refugiados españoles. Antes de la Transición fue
responsable de contactos con neofascistas italianos, franceses, croatas, argentinos y
portugueses, a los que daba asilo ‒y trabajo‒ en España. Vid. Edo (2006), ps. 296‒297.
Antes del caso Scala, los medios de comunicación habían intentado culpar a la CNT
también de muchos otros hechos, tales como ¡ataques a separatistas catalanes, acciones del
GRAPO y planes para secuestrar ministros!
democracia. La policía lanzó una campaña de represión contra
los libertarios, con detenciones, interrogatorios y acusaciones
infundadas. La doctrina de la responsabilidad colectiva de la
Confederación en el “caso Scala” asustó a muchos miembros
de la CNT y sirvió como pretexto de la represión. El cambio en
la opinión pública en detrimento de los anarquistas fue
inmediato. Aún más desastrosas para la organización fueron las
desavenencias que estallaron en torno a la cuestión de la
solidaridad con los detenidos. La mayoría de la organización se
solidarizó con los jóvenes detenidos, bien reconociendo la
provocación o bien porque los detenidos eran miembros de la
CNT. La tendencia sindicalista condenó a la FAI como
responsable de los hechos y manifestó sus reparos a
solidarizarse con los detenidos si no era acompañada por la
renuncia a las acciones individuales.
592 Es un error entender la historia de la CNT, desde el principio hasta nuestros días,
como una lucha dialéctica anarquismo‒sindicalismo, FAI‒treintistas,
ortodoxia‒reformismo. A pesar de la importancia crucial de esta hipolaridad, huho
siempre implicaciones de ideologías, injerencias externas, terceras vías, razones
personales superiores a las políticas y militantes que estaban en ambos bandos. En cada
momento de la historia de la Confederación hay que tener en cuenta muchos factores en el
análisis y no basarse en modelos maniqueos.
593 No hay un recuento exacto de los miembros de la CNT en ese periodo. El secretario
general Enrique Marco Batlle calculó en abril de 1978 como número máximo 250.000
por la fundación en secreto de los GAA594. Los GAA los creó la
minoría sindicalista que quería modernizar la CNT, es decir, su
participación en las elecciones sindicales y los comités de
empresa y la desconexión de las decisiones del Congreso de
Zaragoza en 1936. En esencia, los GAA aspiraban a convertirse
en un equivalente sindicalista a la FAI que pudiese influir en las
decisiones de los sindicatos de la CNT, funcionando en paralelo
a ellos. Su funcionamiento les llevó a ser denominados
despectivamente “paralelos”. La revelación de su existencia dio
la posibilidad a la otra paralela, la FAI, de difamarla y solicitar la
baja de los miembros de la CNT que participaban en los GAA.
De hecho, la mayoría de las asambleas de sindicatos ‒en las
que los reformistas no tenían mayoría‒ dieron de baja a los
miembros de los paralelos, entre ellos dos miembros del
comité regional de Cataluña595.
miembros. Vid. Gómez Casas (1984), p. 133. La enciclopedia de la Íñiguez habla de cerca
de 200.000 miembros a principios de 1978. Vid. Iñiguez (2001), p. 413. La mayoría de los
historiadores de la época toman como base los 120.000 miembros que pagaron la cuota en
septiembre de 1977. En el 5o Congreso de la CNT en Madrid, en diciembre de 1979,
estuvieron representados aproximadamente 30.000 miembros (cifra que dio Miguel
Amorós en su presentación en la feria del libro de Santiago de Compostela, 25/10/2008).
594 Grupos de Afinidad Anarcosindicalista.
595 Como son raros los textos griegos que se refieren a ese periodo, se impone una crítica
a la perspectiva de Emilio Cortavitarte en Ceacero et alii, (p. 47), donde dice que los GAA
[...] intentaban restaurar la democracia interna en la CNT, si bien es evidente que el
propósito de los GAA era intentar imponer la linea sindicalista en la política de la CNT.
Además el hecho de que las decisiones sobre las bajas se tomasen en asambleas generales
de sindicatos hace un poco débil su argumento de que [...] la mayor parte de los que
hicieron efectivas las bajas estaban relacionados (con la FAI). En cambio, es acertada la
pregunta retórica sobre si la FAI y los GAA tenían una actividad paralela de tipo diferente,
ya que tenían las mismas características.
596 Federación Ibérica de Grupos Anarquistas.
FIGA la fundaron en diciembre de 1978 siete grupos
anarquistas que pretendían crear una organización sobre el
modelo de la FAI del periodo anterior al comienzo de la Guerra
Civil. Su objetivo era fortalecer la corriente anarcosindicalista
dentro de la CNT y tomar parte activa contra el Estado y el
capitalismo apoyando las huelgas salvajes, llevando a cabo
expropiaciones y secuestros y realizando sabotajes. La
evolución y la disolución de la FIGA fueron rápidas. Hasta mayo
de 1979 el número de grupos anarquistas que se habían
incorporado a ella llegaba a treinta y tres. Sus miembros habían
atracado bastantes bancos (fueron acusados de más de veinte)
y con el dinero habían apoyado iniciativas de la CNT y del
movimiento libertario, así como huelgas en Extremadura,
Galicia y Madrid. También habían robado armas a la policía en
España y Portugal para reforzar su arsenal. En mayo de 1979 la
policía detuvo a Alejandro Mata y mató a Agustín Valiente en
un enfrentamiento armado. Ambos estuvieron entre los
fundadores de la FIGA y eran muy conocidos en el movimiento
libertario. A continuación hubo muchas detenciones y la
organización fue prácticamente desarticulada597.
RAMÓN RUFAT
‒Me parece bien ‒respondí‒. Por un día que voy a estar con
vosotros no quiero causaros ninguna molestia.
601 Los dos días siguientes, 7 y 8 de noviembre (1939), se realizaron dos nuevas sacas:
en cada una de ellas se asesinó a 15 presos.
Tocaron salida al patio, y también nosotros salimos, pero con
una formación menos perfecta. Nuestro patio era el de la
enfermería, y allí nos juntábamos con los enfermos, los
sarnosos y los viejos. Era el único patio por el que se podía dar
algún paso sin hacinamiento. Nos dieron el café en el patio, y
pronto se formaron corrillos comentando las ejecuciones. Los
paisanos y conocidos acudían, como podían, a ese patio para
dar la enhorabuena a los que habían quedado y la condolencia
por los que se habían ido. Nos volvieron a la celda para darnos
la comida y una hora de reposo. Todos mis compañeros
durmieron esta hora, sentados o medio tendidos. Yo no tenía
ánimos ni para dejarme dormir. Nos llevaron de nuevo al patio,
y en este rato de la tarde todo el empeño de los condenados
era saber cuántos tenían que sacar la mañana siguiente y
quiénes eran los desgraciados.
602 No se trataba de los frailes carmelitas sino de los capuchinos. Su convento, llamado
de San Antonio de Torrero, estaba próximo a la prisión. En 1940, se inauguró su basílica,
financiada por el régimen fascista de Benito Mussolini. En su torre se ubicó el “Sacrario
Militare Italiano”, en donde hasta hace unos años, reposaron los restos de 2.889 soldados
mussolinianos muertos en combate durante la guerra civil española. El capellán de la
prisión de Torrero publicó en 1980 sus memorias, en las que reconoció que la mayoría de
los ejecutados eran completamente inocentes y condenó el genocidio que se había llevado
a cabo en España en nombre de la patria y de dios.
para ir a cumplir su cometido y recorría la prisión con la cabeza
cubierta. Tengo que reconocer que el día que se enteró de este
detalle enmendó radicalmente su descuido y hubiera o no saca
colgaba la teja en la percha. Pero hoy no había venido siquiera.
Era una razón de un peso enorme en aquellos momentos y nos
quisimos convencer todos de que podíamos dormir tranquilos.
Tanto, que el veterano se puso a estudiar francés como hacía
todas las noches que no se temía la saca. Un hombre de
Binéfar603, optimista, se atrevió a entonar una jota. Lo hacía
muy mal. A mí me sonaba a funeral.
603 Se llamaba Manuel Feres Alzuria, tenia veinte años y fue fusilado en la saca
siguiente, la del 7 de noviembre de 1939.
Todo ocurría lejos, tan lejos, que nos parecía en otro mundo.
Fueron cesando las voces y los ruidos, y nosotros seguíamos en
la mirilla sin ver nada.
604 Ante el piquete de fusilamiento, los presos solían proclamar a voz en grito su
inocencia y lo injusto de su muerte. En cuanto a los gritos, eran muy fiecuentes los mueras
a Franco; en cuanto a los vivas, iban dirigidos a la República, a Azaña, la FAI y también a
Rusia.
chocolate, y además, esto infalible, la peor ropa de los que
estuviéramos allí. Ya me habían advertido que, en el caso de
que saliera yo solo, me tenía que poner aquella ropa y dejar la
mía para los compañeros que se quedaban. Asentí sin pedir
explicaciones; pero me las dieron diciéndome que, después de
fusilados les quitaban a todos las ropas y la llevaban a los
asilos. Y como entonces los más necesitados del mundo
éramos nosotros, era preferible que lo bueno se quedara allí.
Yo había mirado aquellas alpargatas cansadas de hacer un
verano en chancleta, con el suelo por suela y llenas de mugre,
aquel pantalón que hubiera rechazado un leproso y una
guerrera de uniforme de soldado que había pasado todas las
campañas de la sarna, de los piojos y de mil buitres
desgarrándole hasta los dos botones que le quedaban. Casi me
alegré de tener que salir con esta vestimenta, sin más
calzoncillo ni camisa ni nada, convencido de que mi propio
padre no me conocería si me viera.
605 No se incluyen en el texto griego todas las notas ni se traducen literalmente las que se
incluyen. En la traducción española se incluyen las notas del libro griego.
Aunque demostró su inocencia y logró esquivar el pelotón de
fusilamiento, admitió después de mucho tiempo ante Rufat que
sí había delatado a los fascistas.
VICENTE ESPÍN ‒ ANTONIO CEREZO
Los ángulos del patio estaban ocupados por los guardias. Con
mucha precaución escondí el chocolate entre el vientre y los
calzoncillos. Conducidos que fuimos a las celdas me desnudé y
descubrí que lo que mis carnes sentían como algo anormal era
debido a que, con el calor del cuerpo, el chocolate se había
derretido en gran parte, pegándose a mi cuerpo. Despacito,
con mucha paciencia y cuidado para no perder ni un ápice de
aquel suculento manjar, fui limpiándome llevando a la boca
cuanto recogía, sin reparo en recoger cuidadosamente lo que
se había pegado a la pelambre del pubis. [...]
[...] En el curso de los años que pasamos en Ocaña
sometidos a las celdas de castigo, los esbirros utilizaron todos
los medios destinados a “triturarnos” física y moralmente. ¡No
pudieron con nosotros! El malvado que dirigía la Prisión trató,
en primer lugar, de matarnos a palos. El Juez Eymar se le
opuso. No porque fuera buena persona, que de bueno no tenía
nada, pues era un monstruo de iniquidad. Se opuso porque se
había armado tal revuelo en Europa con nuestra evasión, que
procuraban dar motivos de repulsa hacia la dictadura
franquista. Sabía que todos los corresponsales de prensa
extranjeros y las Embajadas estaban al acecho para ver lo que
se hacía con nosotros.
606 (N. del a.) Se refiere a Pedro Adróver, José Sabaté y Santiago Amir.
humanitario de los directores de prisiones, y menos aún de
éste.
“Le esperare”.
‒Sí.
607 Se trataba de que cada grupo designara a alguno de sus miembros de retirarse de la
protesta para eludir el castigo y así poder comunicar a los familiares sobre la situación.
preciso momento un nutrido grupo de presos políticos nos
encontrábamos dando la cara, en primera línea del rastrillo de
la 5a galería (llamada, como ya se ha dicho más arriba “El
Submarino”).
610 Tenga en cuenta lector que en marzo de 1977 se restituyeron la libertad sindical y el
derecho de huelga y en abril se abolió la censura de la prensa. Las elecciones fueron el 15
de junio de 1977.
políticos (de ETA y otras organizaciones), en mayo se organizó
una semana por la amnistía. Estallaron manifestaciones
violentas e incidentes por toda la región y siete personas
perdieron la vida en los enfrentamientos. El gobierno
provisional sucumbió a las presiones y extendió la amnistía a
una gran parte de presos políticos. De marzo a mayo fueron
liberados muchos políticos, mientras que sólo en octubre ‒y
después de haber sido elegido un gobierno de derechas‒ la
medida tuvo validez para todos los políticos,
independientemente de las acusaciones. El propósito del
gobierno era dividir la unidad de los presos políticos y sociales
y restringir la solidaridad que mostraban las organizaciones
políticas con los sociales.
611 En 1977 se registraron más de nueve mil consejos disciplinarios por faltas graves o
muy graves, cifra más del doble que la del año precedente.
612 Entrevista en la revista Ajoblanco, n° 28, diciembre de 1977.
1978 se ordenó el traslado de casi quinientos presos ‒los
pilares de la COPEL‒ al Dueso (Santander). Poco después, esos
presos publicaron un comunicado en el que admitían: Se ha
demostrado que la COPEL ‒como vanguardia de la lucha en las
cárceles‒ se ha visto superada por el caos y la violencia
incontrolada. Las asambleas habían perdido fuerza y muchos
presos afrontaban personalmente las cuestiones que se
derivaban, torpedeando la unidad. En el mismo periodo
empezó a circular heroína dentro de las cárceles y a crearse
una nueva casta de “líderes” que se beneficiaban de esa
situación. Pese a todo, la lucha continuaba.
613 Agustín Rueda Sierra (1952‒1978) era obrero de la industria textil y en 1972
participó en las movilizaciones de su sector. Fue despedido, acusado y encarcelado por su
actividad. En 1977 cayó en una trampa de la policía y compró armas a un secreta, hecho
que lo condujo a prisión.
espalda, sin nuestra ropa, nos daban un mono lleno de polvos,
nos daban zotal, y nos rapaban el pelo... bueno pues a los que
veían más así cabecillas nos separaron nos llevaron por todos
los lados a Santoña, al Puerto, a Burgos... y a los otros les
dieron su vis a vis, los hincharon a permisos y así los
contentaron. Divide y vencerás esa fue la reforma de García
Valdés.
http://www.uclm.es/Grupo/EPIP/pdf/CesarLorenzo/El%20M
al%20necesario%20o%201a%20pol%C3%ADtica%20penitenciar
ia%20en%201a%20transic i%C3%B3n.pdf
http://www.uclm.es/Grupo/EPIP/pdf/CesarLorenzo/LA%20R
EVUELTA %20DE%20LOS%20COMUNES.pdf)
‒Balfour, Sebastian; Paul Preston (ed.). Spain and the Great Powers in
the Twentieth Century, London, Routledge, 1999. (Hay
traducción española: España y las grandes potencias en el siglo
XX, Barcelona, Critica, 2002). Balfour‒Preston (1999).
‒García Oliver, Juan. El eco de los pasos, Madrid, FELA, Rosa de Foc,
CNT‒ Catalunya, 2008. García Oliver (2008).
‒Gómez Casas, Juan. Anarchist Organisation. The History of the FAI,
Montreal, Black Rose Books, 1986. Gómez Casas (1986).
MATERIAL DE ARCHIVO
AC Acción Comunista
AGLA Agrupación Guerrillera de Levante y Aragón
AIT Asociación Internacional de Trabajadores
ANFD Alianza Nacional de Fuerzas Democráticas
ASO Alianza Sindical Obrera
BBC British Broadcasting Corporation
BOC Bloc Obrer i Camperol
CC OO Comisiones Obreras
CGT Confederación General del Trabajo
CIA Agencia Central de Inteligencia
CIC Comité de Coordinación Interior
CIL Consejo de ibéricoLiberación
CI‒MLE‒MLE Comité Intercontinental
CFC Circuios de Cuadros de Formación
CNT Confederación Nacional del Trabajo
CNS Confederación Nacional de Sindicatos
COPEL Coordinadora de Presos en Lucha
DI Defensa Interior
CEE Comunidad Económica Europea
ERAT Ejército Revolucionario de Ayuda a los Trabajadores
ETA Euskadi Ta Askatasuna
FAI Federación Anarquista Ibérica
FAI Federazione Anarchica Italiana
FIGA Federación Ibérica de Grupos Anarquistas
FIJL Federación Ibérica de Juventudes Libertarias
FLP Frente de Liberación Popular
FORA Federación Obrera Regional Argentina
FRAP Frente Revolucionario Antifascista y Patriota
FSL Federación Sindicalista Libertaria
GAA Grupos de Acción Anarquista
GAA Grupos de Afinidad Anarcosindicalista
GAAP Gruppi Anarchici di Azione Proletaria Anarchici
GAI Grupos Autónomos Internacionalistas
GAI Grupos Autónomos de Intervención
GAL Grupos Antiterroristas de Liberación
GARI Grupos de Acción Revolucionaria Internacionalista
GAROT Grupo de Acción Revolucionaria Ocasionalmente Terrorista
GOA Gmp os Obreros Autónomos
GRAPO Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre
HOAC Hermandades Obreras de Acción Católica
ICO Information et Correspondance Ouvriére
JEL Junta de Española de Liberación
JOC Juventud Obrera Cristiana
MIL‒GAC Movimiento Ibérico de Liberación ‒ Grupos Autónomos de
Combate
MIR Movimiento Ibérico de Resistencia
ML‒CNT Movimiento Libertario‒CNT
MLE Movimiento Libertario Español
MLR Movimiento Libertario de Resistencia
MPR Movimiento Popular de Resistencia
OLLA Organització de la Lluita Armada
OEA Organisation de l’ Armée Secréte
PCE Partido Comunista de España
PCE (m‒l) Partido Comunista de España (marxista‒leninista)
PCE (r) Partido Comunista de España (reconstituido)
PNV Partido Nacionalista Vasco
POUM Partido Obrero de Unificación Marxista
PSOE Partido Socialista Obrero Español
PSUC Partit Socialista Unificat de Catalunya
SI‒CNT Secretariado Intercontinental de la CNT
STV Solidaridad de Trabajadores Vascos
UFD Unión de Fuerzas Democráticas
UGT Unión General de Trabajadores
UJA Unión de Juventudes Antifascistas
UNE Unión Nacional Española