Erika Dorville Sanchez Tarea 1.3 Auditoría Interna
Erika Dorville Sanchez Tarea 1.3 Auditoría Interna
Erika Dorville Sanchez Tarea 1.3 Auditoría Interna
Nombre:
Matrícula:
100419126
Asignatura:
Auditoría Interna
Profesor:
Sección:
03
Tema:
Según el Instituto de Auditores Internos de los Estados Unidos se define como, una
actividad independiente que tiene lugar dentro de la empresa y que está encaminada a la
revisión de operaciones contables y de otra naturaleza, con la finalidad de prestar un
servicio a la dirección.
Una auditoría interna se realiza por la necesidad que tienen las organizaciones de mantener
el control para hacer más eficaz su funcionamiento. A través de la auditoría se revisa el
sistema de control interno, las políticas y procedimientos definidos para proteger los activos
del negocio y, de esta forma, poder evitar fraudes, sabotajes e incrementar la eficiencia y
eficacia operativa.
Además, verificar que la información contable sea confiable y vigilar que el sistema de
control esté teniendo buen funcionamiento. Este sistema debe partir de un plan establecido
anteriormente, en el que se incluyan las políticas y procedimientos que se van a
implementar.
Debes tener en cuenta que cuanto más crece la empresa, más se le dificulta a la dirección
controlar todos los procesos internos.
Para una auditoría interna basada en riesgo es clave tenerlo identificado, evaluado y
controlado para disminuir sus probabilidad de ocurrencia o mitigar su impacto.
Cuando se realiza la auditoría interna, que por regla debe hacerse una vez al año y puede
durar entre tres días o una semana según el tamaño de la empresa, es posible facilitar el
cumplimiento de los objetivos organizacionales.
Después de realizar la evaluación, lo que sigue es la presentación de una serie de reportes
que sirven para analizar con mayor detalle el sistema de gestión y además, facilitar a la
junta directiva la revisión para que puedan ver oportunidades de mejora. La auditoría interna
tiene la misión de poder realizar un seguimiento de todo lo relacionado a la gestión de
riesgos.
-Integridad: ser un auditor íntegro genera confianza y esto permite creer fiarse de su juicio.
-Capacidad de alinearse con las estrategias, los objetivos y los riesgos de la organización:
todo auditor interno debe adaptarse a las necesidades y políticas de la organización a la
que audita.
-Cuenta con los recursos adecuados: un buen auditor tiene todos los recursos que necesita
para hacer su labor, por eso, tiene acceso a toda la información indispensable para hacer la
auditoría.
-Calidad y mejora continua: el auditor nunca se limita así mismo, siempre retroalimenta su
aprendizaje y constantemente busca el cambio y la mejora de la organización.
-Hace análisis profundo, es proactivo y está orientado al futuro: un buen auditor interno está
a la vanguardia, no espera a adaptarse al cambio sino que se anticipa a este y es capaz de
generarlo, demostrando así su habilidad para orientarse al futuro gracias a sus análisis y
observaciones.
Marco jurídico: este es el contexto legal que regula la empresa, su actuación y la forma en
la que se asocia con otras organizaciones.
Regulación interna: aquí se incluye la información que ha generado la propia entidad como
mecanismo de autorregulación. Por ejemplo, los reglamentos, los acuerdos, las actas de
junta directiva, resoluciones, etc.
Estructura organizacional: son los elementos que ayudan a alinear todos los niveles de la
organización, como ideas rectoras, misión, principios, valores, objetivos, metas, procesos,
métodos, tecnología, finanzas, etc.
Auditor líder: se asegura de que se cumpla el plan de auditoría, de que las actividades sean
efectivas y de que se mantenga el alcance definido previamente.
Auditores: son los encargados de planear y desarrollar las tareas asignadas. Recopilan y
analizan las evidencias y extraen las conclusiones, además, documentan los resultados y
redactan los informes.
Después de que se recopila toda la evidencia, los auditores se reúnen con la gerencia y con
los responsables de las funciones auditadas. En esta reunión se presentan los resultados,
se resuelven los desacuerdos y se plantean las conclusiones.
También es una buena práctica incluir en el proceso de auditoría una lista de chequeo que
ayude a identificar los aspectos más críticos.
Por eso es tan importante contar con un comité de auditoría interna, que tiene entre sus
labores supervisar las acciones de control, trazar estrategias para mejorar los procesos,
supervisar el cumplimiento de políticas internas e identificar los principales riesgos
financieros y de negocios de la compañía para gestionarlos.
Así mismo, este órgano, conformado por miembros de la junta o del consejo directivo y por
personas independientes a la administración de la entidad, hace una regulación al interior
de la organización y analiza la información propia que recopiló como mecanismo de
autorregulación en la que se incluyen reglamentos, acuerdos, actas de junta directiva,
resoluciones y políticas.
El equipo de auditoría interna está conformado por un auditor líder y auditores. El primero
se asegura de que se cumpla el plan que se trazó; mientras que los auditores se encargan
de planear y desarrollar las tareas asignadas, de recopilar y analizar las evidencias para
proponer conclusiones, documentar los resultados, así como redactar informes.
Generalmente, el comité se reúne cuatro veces al año, una vez cada trimestre, pero eso no
significa que no tengan encuentros extraordinarios si se llegase a presentar un imprevisto.
En las cuatro reuniones se evalúa la efectividad del programa anual, los impedimentos, las
principales deficiencias de control interno o cumplimiento normativo y los resultados del
trabajo de control.
El comité de auditoría interna es clave para que la organización sea eficaz, sostenible y
confiable. La autorregulación ayuda a tener transparencia en el manejo de los recursos y de
la información interna, beneficia el gobierno corporativo, ayuda a cumplir los objetivos y a
reforzar los valores éticos de los miembros de la organización.