Primer Examen de Superación
Primer Examen de Superación
Primer Examen de Superación
NOMBRE Y APELLIDO:
FECHA:
Lee atentamente el siguiente texto y responde a las preguntas de selección múltiple con única respuesta.
“Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde
remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y
cañabrava construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho de piedras pulidas,
blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para
mencionarlas había que señalarlas con el dedo.
(…) José Arcadio Buendía, que era el hombre más emprendedor que se vería jamás en la aldea, había dispuesto de tal
modo la posición de las casas, que desde todas podía llegarse al río y abastecerse de agua con igual esfuerzo, y trazó
las calles con tan buen sentido que ninguna casa recibía más sol que otra a la hora del calor. En pocos años, Macondo
fue una aldea más ordenada y laboriosa que cualquiera de las conocidas hasta entonces por sus 300 habitantes. Era en
verdad una aldea feliz, donde nadie era mayor de treinta años y donde nadie había muerto.
(…) Vio una mujer vestida de oro en el cogote de un elefante. Vio un dromedario triste. Vio un oso vestido de holandesa
que marcaba el compás de la música con un cucharón y una cacerola. Vio a los payasos haciendo maromas en la cola
del desfile, y le vio otra vez la cara a su soledad miserable cuando todo acabó de pasar, y no quedó sino el luminoso
espacio en la calle, y el aire lleno de hormigas voladoras, y unos cuantos curiosos asomados al precipicio de la
incertidumbre. Entonces fue el castaño, pensando en el circo, y mientras orinaba trató de seguir pensando en el circo,
pero ya no encontró el recuerdo. Metió la cabeza entre los hombros, como un pollito, y se quedó inmóvil con la frente
apoyada en el tronco del castaño.
(…) En aquél Macondo olvidado hasta por los pájaros, dónde el polvo y el calor se habían hecho tan tenaces que
costaba trabajo respirar, recluidos por la soledad y el amor y por la soledad del amor en una casa dónde era casi
imposible dormir por el estruendo de las hormigas coloradas, Aureliano y Amaranta Úrsula eran los únicos seres felices,
y los más felices sobre la tierra. " (García Márquez, 2007).
Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si
por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago
nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre
todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no
busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez
más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran,
respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando
apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume
viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu
pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de
fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber
simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y
yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua. (Cortázar, 1996)
Texto 2
Mario Vargas Llosa
“Todas las mujeres bellas son las que yo he visto, las que andan por la calle con abrigos largos y minifaldas,
las que huelen a limpio y sonríen cuando las miran. Sin medidas perfectas, sin tacones de vértigo. Las mujeres
más bellas esperan el autobús de mi barrio, o se compran bolsos en tiendas de saldo. Se pintan los ojos como
les gusta y los labios de carmín de chino. Las flores del desierto son las mujeres que tienen sonrisas en los
ojos, que te acarician las manos cuando estás triste, que pierden las llaves al fondo del abrigo, las que cenan
pizza en grupos de amigos y lloran sólo con unos pocos, las que se lavan el pelo y lo secan al viento. Las
bellezas reales son las que toman cerveza y no miden cuántas patatas han comido, las que se sientan en
bancos del parque con bolsas de pipas, las que acarician con ternura a los perros que se acercan a olerlas.
Las preciosas damas de chándal de domingo. Las que huelen a mora y a caramelos de regaliz. Las mujeres
hermosas no salen en revistas, las ojean en el médico, y esperan al novio ilusionadas con vestidos de fresas.
Y se ríen libres de los chistes de la tele, y se tragan el fútbol a cambio de un beso. Las mujeres normales
derrochan belleza, no glamour, desgastan las sonrisas mirando a los ojos, y cruzan las piernas y arquean la
espalda. Salen en las fotos rodeadas de gente sin retoques, riéndose a carcajadas, abrazando a los suyos con
la felicidad embotellada de los grandes grupos. Las mujeres normales son las auténticas bellezas, sin gomas ni
lápices. Las flores del desierto son las que están a tu lado. Las que te aman y las que amamos. Sólo hay que
saber mirar más allá del tipazo, de los ojazos, de las piernas torneadas, de los pechos de vértigo. Efímeros
adornos, vestigios del tiempo, enemigo de la forma y enemigo del alma. Vértigo de divas y llanto de princesas.
La verdadera belleza está en las arrugas de la felicidad.” (Ghersi, s.f ).
a. ¿Qué tema trata el texto de Cortázar? ¿Amplíe su respuesta?
b. ¿Qué tema trata el texto de Vargas Llosa? ¿Amplíe su respuesta?
c. ¿Encuentras diferentes o similares temas en los dos textos? ¿Cuáles?
d. ¿Cuáles características del boom literario encuentras en ambos textos?
La literatura precolombina
Los géneros y los temas de la literatura precolombina
La poesía y el teatro fueron los géneros más habituales de la literatura precolombina. También existen textos
narrativos, como el Popol Vuh, de los mayas, pero fueron los dos primeros los que más importancia tuvieron y
de los que más ejemplos prevalecen.
En general, la literatura precolombina versó sobre el origen del mundo, la organización de la sociedad, las
leyes de los pueblos, el nacimiento de los dioses, las fuerzas de la naturaleza, así como, en algunas
ocasiones, dirigió su mirada hacia las emociones y los grandes acontecimientos de los pueblos. Podría decirse
que el mito fue el tema por excelencia, aunque como se dijo, se ocupó de distintas temáticas pertinentes a la
humanidad.
La literatura maya
Los textos mayas que conservamos hoy son producto del trabajo de redacción de indígenas, instruidos por
frailes evangelizadores, que aprendieron el alfabeto latino y lo utilizaron para escribir sus lenguas vernáculas,
ya entrado el período de la colonia.
Algunos de los textos que se conservan son:
•En maya yucateco, una colección de crónicas históricas y profecías conocidas como el libro de Chilam Balam
de Chumayel.
•En maya quiché:
•el Rabinal Achí, única obra de teatro conocida hasta ahora en esta lengua.
•y el Popol Vuh, Libro del Consejo o Manuscrito de Chichicastenango.
Los mitos
El mito fue un tema muy importante en la literatura maya. Se identifican distintos tipos de mito, por ejemplo:
aquello que se ocupan del origen del cosmos y de los dioses, los que narran hazañas de personajes le-
gendarios y aquellos que explican las relaciones entre dioses y gobernantes.
El teatro
En la literatura maya se aprecia el teatro como uno de los géneros más importantes. Dada su relevancia es
comprensible la variedad que hay, identificándose tres clases: danzas con cantos, danzas con recitaciones y
dramas completos con música, diálogo, baile y actores con máscaras y vestuario.
Literatura azteca
La literatura azteca, escrita en lengua náhuatl, tuvo como géneros principales a la prosa y a la poesía. Sus
temas fueron el orden del cosmos, los dioses, las costumbres y las festividades religiosas. Además, la poesía
(o expresión poética) se vinculaba también a la danza y al teatro, y se identifican en ella tres vertientes: la
religiosa, en la que juegan un papel protagónico los dioses; la épica, en la que se canta la tradición colectiva; y
la lírica, que expresa las emociones del poeta.
Los poemas aztecas podían ser cantados al son de tambores y trompetas, incluyendo, a veces, palabras sin
significado cuyo único propósito era marcar el ritmo. Con frecuencia estuvieron dedicados a los dioses, aunque
no de modo exclusivo pues también cantaron sobre temas como la amistad, la guerra, el amor y la vida.
Literatura inca
Debido al carácter oral de la literatura inca, no se conservan manuscritos precolombinos de ella. Lo que se
tiene y sabe de literatura inca corresponde a momentos posteriores a la Conquista.
Se identifican dos vertientes principales: la oficial, de finalidad educativa e impuesta por la corte del Inca, cuyos
creadores eran los amautas, maestros encargados de transmitir la cultura del imperio; y la popular constituida
por canciones y poemas que expresan los sentimientos del pueblo, cuyos creadores eran los haravicus o
poetas.
La lírica
En el mundo andino, la lírica ve su nacimiento y desarrollo de la mano de la música. Si bien al principio los
poemas eran solo un acompañamiento para la melodía, poco a poco los versos van logrando independencia.
Escrita en lengua quechua, se identifican principalmente dos vertientes: los cantos a los dioses, a los incas o a
la fertilidad de la tierra, conocidas como hailly; y aquellas composiciones que expresaban la subjetividad
(emociones) del poeta, conocidas como harawi.
Ahora, escribe para cada ejemplo de texto precolombino las características que puedas identificar.
TEXTO 1
“Aquí comenzaremos la antigua historia llamada Quiché. Aquí escribiremos, comenzaremos el antiguo relato
del principio, del origen, de todo lo que hicieron en la ciudad Quiché los hombres de las tribus Quiché. Aquí
recogeremos la declaración, la manifestación, la aclaración de lo que estaba escondido, de lo que fue
iluminado por los Constructores, los Formadores, los Procreadores, los Engendradores; sus nombres: Maestro
Mago del Alba, Maestro Mago del Día [Gran Cerdo del Alba], Gran Tapir del Alba, Dominadores, Poderosos del
Cielo, Espíritus de los Lagos, Espíritus del Mar, Los de la Verde Jadeita, Los de la Verde Copa; así decíase.
Rogábase con ellos, invocábase con ellos, a los llamados Abuela, Abuelo, Antiguo Secreto, Antigua
Ocultadora, Guarda Secreto, Ocultadora, Abuela [que forma parte] de la Pareja [Mágica de Abuelos], Abuelo
de la [misma] Pareja. Así está dicho en la historia Quiché todo lo que ellos dijeron, lo que ellos hicieron, en el
alba de la vida, en el alba de la historia (Popol_Vuh, s.f.).”
TEXTO 2
“Huillca-Uma, con una larga túnica negra y un cuchillo en la mano, observa el Sol.
Huillca-Uma.– ¡Sol vivo! Postrado delante de voz, adoro vuestra marcha. Para vos solo he separado cien
llamas, que debo sacrificar el día de vuestra fiesta. Derramaré su sangre en presencia de vos. Quemadas en el
fuero arderán, después de hecho el ayuno.
Ollanta.– He allí, Piqui-Chaqui, que viene el sabio Huillca-Uma: ese león anda acompañado de mal presagio.
Aborrezco a este agorero que siempre que habla anuncia negros cuidados y vaticina el infortunio.
Piqui-Chaqui.– Calla; no hables, pues ya aquel agorero sabe mejor que tú lo que has dicho. (Se sienta y
duerme). (Ollantay, s.f.).”
TEXTO 3
En la casa de las pinturas Comienza a cantar, Ensaya el canto, Derrama flores,
Alegra el canto.
Resuena el canto,
Los cascabeles se hacen oír, A ellos responden
Nuestras sonajas floridas. Derrama flores,
Alegra el canto.
Sobre las flores canta El hermoso faisán, Su canto despliega
En el interior de las aguas. A él responden
Variados pájaros rojos. El hermoso pájaro rojo Bellamente canta.
(Poesía de Nezahualcóyotl, s.f.).