Neuroeducacion y Educacion Emociomnal 15
Neuroeducacion y Educacion Emociomnal 15
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8. Dialoga con tus educandos. Comentar con ellos temas variados les
ayudará a comprender la realidad y a desarrollar el juicio crítico.
11. Como docentes, se debe tratar a los educandos “como le gustaría que
lo tratasen ellos a uno”, siendo conscientes de cómo se controlan las
propias emociones y qué actitudes se tienen con los otros, de esta
manera, se enseña al educando cómo desarrollar estas conductas.
14. Parte importante del rol del docente es saber captar los distintos
mensajes que le transmiten sus alumnos y alumnas, respondiendo a sus
intereses y necesidades, favoreciendo la comunicación con ellos y
adecuando las estrategias educativas para tratar de integrarlos a todos al
proceso de aprendizaje. Las interacciones educador-educando son un
espacio socio-emocional ideal para la educación afectiva con actividades
cotidianas como:
Los niños sienten una sed insaciable de comprender las leyes de la vida. La
experiencia lo confirma día a día. Y estas leyes sobrepasan con mucho la
escala de valores del consumo. Nuestro sistema cae con todo su peso para
arrancar a los jóvenes de la búsqueda de sí mismos, que los llamaría
espontáneamente a un poco más de interioridad. ¿Tendremos que
resignarnos a dejarles en la situación de alguien que acaba de perder sus
llaves y se agita en vano delante de la puerta a falta de cerrajero? El yoga
en clase permite restablecer el equilibrio introduciendo una dimensión
olvidada: la de la vida interior, del silencio y la presencia propia. Tales
momentos son breves y por tanto preciosos. Permiten contrarrestar los
efectos de la agitación que nos rodea. Cuando la inflación de los fracasos
escolares preocupa a todos los espíritus, estos momentos de vuelta al
centro favorecen tanto el equilibrio nervioso como el trabajo en clase.
Preparan para los momentos fuertes del aprendizaje y tonifican la salud.
Resulta indispensable trabajar en esta nueva cultura. Podríamos comparar
al niño de hoy con una tierra pedregosa donde se siembran semillas
seleccionadas (nuestros maravillosos programas educativos), sin siquiera
pensar en arar el suelo para hacerlo mullido y receptivo. Agobiada por las
tensiones, la sustancia gris no es más que un terreno rocoso e
improductivo. Reaccionemos para evitar esa bancarrota de nuestras
fuerzas vitales. La calidad de la enseñanza debe ser la primera
preocupación de nuestras sociedades. Necesitamos educadores que
enseñen en la escuela cómo deshacerse de los gérmenes de la violencia,
del odio y de los fanatismos. La sabiduría se obtiene. La alquimia que
transforma los instintos salvajes se apoya sobre verdades esenciales, que
hacen surgir en nosotros sentimientos nobles. Es extrañamente hermoso
que nuestra educación pueda pasar, en todas las edades de la vida, por
experiencias muy simples: “Sé que estoy aquí…sé que respiro…siento
tensiones en la espalda, en los hombros, en el pecho. Las suelto…me
siento revivir. Estoy aquí con los demás”. Hoy, una de las necesidades
fundamentales de la raza humana es desarrollar una conciencia
planetaria, una conciencia que debemos darnos el tiempo de vivir, día a
día. A este nivel, poco importa que tengamos estudios o no. En esos
momentos, por breves que sean, volvemos a ser lo que somos:
ciudadanos del cosmos. No dejemos que los niños corran el riesgo de
olvidar que son eso.
- EJERCICIOS
YAMAS
1. Los niños pueden estar sentados o de pie. En una primera fase, frotan
las palmas de las manos entre sí, hasta que estén bien calientes. Entonces
acercan una palma a la otra sin que se toquen. Les instamos a
concentrarse en la sensación de la energía que se desprende del
frotamiento; luego van alejando las palmas hasta que dejen de sentir este
ambiente vibratorio.
Ejercicios-YAMAS 3
-Segunda etapa
“En silencio, cuando yo dé la señal haréis estos gestos los cuatro juntos.
Dentro del mismo grupo los brazos se abren y se cierran al mismo tiempo.
Adelante” -Tercera etapa El mismo ejercicio, pero todos los grupos
coordinan sus gestos: toda la clase respira al unísono. Observaciones para
el profesor Este tipo de ejercicio despierta la consciencia de ser uno
mismo pero sin dejar de estar atento al otro. El objetivo es lograr que el
niño viva la sensación de pertenecer a un grupo que viaja en el mismo
barco. Según la edad, la presentación de la práctica puede variarse. Para
los pequeños, por ejemplo, podría titularse “El jardín florido” o “La noche
y el día”. Efectos En primer lugar, tiene un efecto calmante por los
ademanes rítmicos que induce. Enseguida, ejerce el mismo efecto en el
grupo al sincronizar un movimiento fisiológico esencial: la respiración.
Oxigena todo el organismo, especialmente el cerebro. Por tanto aclara las
ideas. El contacto con el “otro”, tan importante para favorecer el
desarrollo de la tolerancia, se facilita gracias a la atención prestada a sí
mismo y al grupo. Momento favorable Al inicio de las clases predispone a
los alumnos a trabajar en grupo. También es muy recomendable cuando
se siente cansancio o tensión a raíz de un ejercicio muy competitivo, pues
relaja el ambiente. Es especialmente bueno después de haber estado
largo tiempo sentados.
Ejercicios-YAMAS 4
Ejercicios-YAMAS 5
Ejercicios-YAMAS 6
Mirarse a los ojos .En círculo también, los niños van trasmitiendo la
mirada. Primero miran a la izquierda para recibir la mirada del compañero,
y después giran la cabeza a la derecha para mirar al otro compañero. Este
ejercicio es mucho mejor si se añade a la mirada una apreciación positiva.
Cuando miramos a nuestro compañero de la derecha, pensamos en algo
que nos guste mucho de él, expresando esta valoración positiva con la
mirada. El maestro debe ser el primero en hacerlo, para que los niños
comprendan el ejercicio. Momento favorable: En cualquier momento en
que se quiera trabajar la convivencia. Edad apropiada: A partir del
segundo septenio. Se puede probar con niños más pequeños, pero
probablemente no tenga ningún efecto.