CondSA.10 Motor Dos Tiempos
CondSA.10 Motor Dos Tiempos
CondSA.10 Motor Dos Tiempos
a) Refrigeración por agua, sin aletas. Temperatura del agua: 80 ºC. Coeficiente de
convección: 6000 W/m2·K.
b) Refrigeración con aletas anulares de aluminio (k= 155 W/m K). Camisa de radio
externo 37 mm. Aletas de radio 67 mm., espesor 4 mm. y separación entre aletas
10 mm. Temperatura del aire: 20 ºC. Coeficiente de convección: 100 W/m2·K.
c) Mismo caso que en b), pero con un coeficiente de convección del aire exterior reducido
hasta 50 W/m2 K, y la temperatura ambiente de 30 ºC.
Temperatura media del
ciclo de funcionamiento
Ti 600ºC
Conductividad del cilindro (acero)
1 1
k ac 54W m K
Coeficiente de convección
interior del cilindro
2 1
h i 100W m K
ri 2.7cm ec 5mm
Se considera una temperatura de funcionamiento promedio (Ti) del ciclo de trabajo del motor de
dos tiempos, de manera que permita analizar de forma estacionaria el proceso intrínsecamente
transitorio de funcionamiento del motor.
Puesto que no conocemos la altura del cilindro, los cálculos de todos los apartados se realizarán
para la base de un segmento de cilindro que contiene un conjunto unitario aleta+separación,
aunque también se expresarán por metro lineal de cilindro, q':
Conja_s ea sa 14 mm
En el caso del cilindro desnudo, sin ningún tipo de refrigeración asistida sino directamente en
contacto con el aire ambiente, el calor disipado vendría dado por la expresión:
Ti Tairec
q desnudo
ri ec
ln
1 1 ri
1 q desnudo 50.2 W
2 π Conj h r k ac h airec ri ec
a_s i i
o bien por metro lineal de altura del cilindro
Ti Tairec
q'desnudo
W
ri ec q'desnudo 3586.7
ln m
1 1 ri
1
2 π h i ri k ac h airec ri ec
Nótese que se han utilizado los datos del aire del apartado c), esto es, los más desfavorables para
la transmisión de calor desde el cilindro. Para estas condiciones, la temperatura de la superficie
interna del cilindro resultaría:
q'desnudo
Tsi_desnudo Ti 388.6 ºC
2 π ri h i
la cual es incompatible con la fiabilidad de los componentes, y con el buen funcionamiento del
motor, ya que por ejemplo la lubricación resultaría imposible.
a) Si se utiliza refrigeración por agua, a efectos de cálculo básico las únicas modificaciones
que se introducen con respecto al caso anterior afectan a la reducción del gradiente de
temperaturas, y al coeficiente de convección asociado al contacto con el agua, que se
incrementa de 50 a 6000 W/m2·K, con lo que se reduce en la misma proporción la resistencia
térmica de convección exterior resultando:
Ti Tagua
q a
ri ec
ln
1 1 ri
1 q a 120.8 W
2 π Conj h r k ac
h agua ri ec
a_s i i
Ti Tagua
q'a
W
ri ec q'a 8627
ln m
1 1 ri
1
2 π h i ri k ac h agua ri ec
b) En el caso de utilizar refrigeración por aire incorporando aletas, la expresión que permite calcular
el calor disipado es:
Ti Taireb
qb =
Rtconveccion_interior Rtconduccion_cilindro Rtconduccion_camisa Rtsuperficie_aleteada
1
Rtsuperficie_aleteada =
h aireb Atotal η'
Se calculan previamente los parámetros geométricos (superficies de aleta y libre del cilindro por
cada conjunto aleta+separación):
(se ha despreciado el área del extremo,
Aaleta 2 π ra re
2 2 2
0.0196 m porque las aletas anulares solo las podemos
calcular para la condición de contorno de flujo
de calor nulo en el extremo)
2 2
Acil 2 π re sa 0.0023 m Atotal Aaleta Acil 0.0219 m
Aaleta
β β 0.894
Atotal
Se calculan seguidamente los parámetros que permiten determinar, en este caso mediante gráfico,
la eficiencia de la aleta anular: 3
2
ra ea h aireb
1.8 ra re 0.41
re 2 ea
k al ra re e
2 a
que también podría calcularse recurriendo al fundamento de eficiencia de aleta (aunque sigue
requiriendo mirar en gráficos)
q aleta
η=
q ideal
Ti Taireb
q b
ri ec re
ln ln
ri ec q b 122.2 W
1 1 ri
1
2 π Conj h r
a_s i i k ac k al
haireb Atotal η'
o bien
Ti Taireb
q'b W
ri ec re q'b 8729.8
m
ln ln
1 1 ri ri ec 1
2 π i i
h r k ac k al h A total
aireb Conj η'
a_s
Valores similares a los obtenidos en el caso estudiado de refrigeración con agua, lo que es
razonable puesto que si ambos diseños son adecuados, deben de permitir el mantenimiento de
las mismas temperaturas en el material.
c) Ante la ventaja fundamental de su simplicidad, el problema de la refrigeración por aire es su
sensibilidad a la variación de las condiciones ambientales o de funcionamiento del vehículo.
Al modificarse el coeficiente de convección, los parámetros de entrada al gráfico deberían variar (y,
de hecho, lo hace el parámetro de las abscisas), pero la variación es mínima, y en consecuencia
la eficiencia es prácticamente la misma y, con ello, también la eficiencia ponderada.
η' 0.933
Ti Tairec
q c
ri ec re q c 108.9 W
ln ln
1 1 ri ri ec 1
2 π Conj h r
a_s i i k ac k al
h airec Atotal η'
Ti Tairec
q'c
W
ri ec re q'c 7778.1
ln ln m
1 1 ri ri ec 1
2 π h i ri k ac k al
h Atotal
airec Conj η'
a_s
Por tanto, en la refrigeración por aire las temperaturas que alcanzan los materiales dependen
fuertemente de las condiciones ambientales, por lo que si estas son muy desfavorables, las
condiciones de funcionamiento pueden llegar a ser críticas, forzando a elegir unas condiciones
nominales de refrigeración sobredimensionadas para los requerimientos reales del motor, lo que
en definitiva se traduce en una eficiencia menor y en mayores juegos entre las piezas móviles. La
refrigeración por agua resolvería estos problemas al funcionar siempre con temperatura y caudal
controlados.