ElcasoHBR POR EDWARD E. LAWLER Il CON COMENTARIOS DE ANNA PRINGLE, F. LEIGH BRANHAM JIM CORNELIUS Y JEAN MARTIN éPor qué estamos perdiendo a nuestra mejor gente? Sambian Partners siempre se ha enorgullecido de ser un gran lugar para trabajar, pero ahora se estén marchando empleados talentosos. Qué es lo que sucede? mary Dono, la jefa de re cursos humanos de Sambian Partners, hizo seflas a Tom Forsythe, el director adjunto de diseto comercial de Sam- bian, inviténdoto a sentarse en tun cOmodo sillén en su oficina, Era un jueves por Ja tarde y el cielo de Chicago lucfa un color gris oscuro, La ascuri dad afuera hacfa que las Tuces uorescentes de su oficina res- plandecieran ain més de lo normal. “Hola, Tom’, dijo Mary, agre- 140 un poco mas de calider vor. “Lamento de verdad que hayas decidido marcharte. Sé que no cambiaras de parecer, todos ya han intentado convencerte de que te quedes, Pero sj espero que puedas ayudarnos a entender el por que de tu decision’, Esperd un rato y luego ofrecié una sonrisa triste, Es una tremenda pérdida, pero tal vez podriamos aprender algo de ela" Tom estaba rigidamente sentado en el sillon, y parte de su staba cubierta por el pelo oscuro que se habla soltado de su mofo tipo cola de caballo. La luz resaltaba sus pesadas ojeras y al parecer no se habia rasurado hace un par de dias, ness Review | Junio 2008 ‘Con un bebé recign nacido en casa, Jo més probable es que le faltara el suefio, pensé Mary. “Bueno, creo que sabes que yo no andaba buscando ta bajo’, dijo Tom. “Su cazata lentos se comunics conmigo, ¥y gqueé te puedo deci? Es una ‘oferta que no puedo declinar (0 sea, estamos hablando de lle sgardirectamente asersogigen Mary no pudo evitar par padear al escuchar que Tom mencionara a J&N, un compe ‘tidor de Sambfan, mucho mas grande, Parecia que durante los ‘itimos 12 meses habia aumentado sus esfuerzos destinados a quitarle talentos a Sambian, levéndose a algunas personas muy capaces al “lado oscuro", como el CEO de Sambian, He Jen Gasbarian, denominaba a su competidor.*Me alegr0 POT 1",dijo Mary, a duras penas."Peto la verdad es que deseo q¥e hnubiese sido cualquier otra empresa menos ésa" Los casos HBR, sungue fiticos, pres fan dlemas ha la gestion de empresas y olrecen soluciones de experiospaw nora.cons Lose més cosas nuevas que cual Mary escudrii6 to cara Siitalaci Guia, Hay menos desafos de Tom unos segundos, Sretwesmasie ens proyectos estos das? tratando de decidir como: een Evité la pregunta mds obvia: presionarlo para que diera mas informacion. Ninguna partida inesperada era una buena no- ticia, pero ésta realmente le parecia alarmante. Tom estaba en Ia cima de su talento; tenia 35 afios y llevaba casi ocho en Sambian, La empresa habia sido como una familia para él, aun des- pués de casarse y tener hijos. Habia gae nado muchisimos premios de disefio, y figuraba en la lista corta del CEO de los gests descontento? Tom laded su cabeza y mind directamente hacia los ojos grises dde Mary, como si estuviera leyendo sus pensamientos. “He sido muy felie ac’, dijo. “La gente es maravillosa. No estoy arrancando de nada. Slo se trata de una ‘oportunidad increfble que aparecid en ‘un buen momento’ Mary sigui6 inquiriendo, haciendo todas las preguntas tipicas, pero Tom No habia otra cosa que Helen detestara mas que perder su personal a manos de su competidor mucho mas grande. ‘empleados de alto desempefio. Mary centendia el atractivo de ser socio. Pero ué era lo que realmente habia detris de todo esto? En Sambian, Tom gozaba el mismo grado de autoridad que ten- dria en JAN, si no mds, Elegia sus pro- -yectos, establecta sus prioridades. Sa bia cudn dificil seria ganarse ese nivel de autonomia en una nueva empresa, siendo socio 0 no? “Me imagino que ya sabias que pronto ibas a ser ascendido’,sefial6.*Si no este aflo, tal vez el proximo. :Habria hecho alguna diferencia si los aumen- tos de sueldos fueran mas grandes? hecho, harfa alguna diferencia ahora? Es decir, no hay deshonra en reconside- rar las cosas, después de todo, eves una persona muy respetada aca”. ‘Tom miré sus manos. “Es grato escu= charlo, Mary’, dijo. “Pero la verdad es due vt De aaa: tiempo de cambiar. hacer cosas nuevas’ “Pero td siempre has logrado hacer GRID ots a repetr i ue yale habia dicho. Cuando la entrevista llegéa su fin,y lo acompai6 a la puerta, Mary se sinti6 abatida, ‘Apenas se alej6 de la oficina de Mary, ‘Tom se dirigié al hnueco de la escalera, sacd su celular, y lamé de inmediato asuesposa, “;Alyson? Hola. Sf. Vas a estar orgu- osa de mi; logré mantener 1a boca bien cerrada. Si, tienes razén con eso de no quemar las naves, pero a estas altu- as me importa poco. Este I o ‘is Un triste memorandum ‘Temprano al dia siguiente, Mary tocé la puerta de Helen Gasbarian. Encontré a Helen, con su ceo fruncido, mirando Ja pantalla de su computadora. No ha- bfa ora cosa que Helen detestara mis ‘que perder su personal a manos de J&N, {su expresi6n lo decia todo. “gistés escribiendo el memorin- dum? pregunté suavemente Mary. Helen asinti6, “Es un tanto desagra dable. Estaba a punto de enviartelo para que le echaras una mirada. 2¢émo ‘estuvo la entrevista con Tom?" ‘Mary confes6 que Tom no habia re velado mucho.*No quiso explicitar por qué el pasto es més verde al otto lado ‘i tampoco me dijo nada sobre la que lo tenia descontento act” Cuando el padre de Helen, Peter Gas- barian, fundé Sambian, en 1975, la idea ‘eractearel anttesis de un monstruo de dimensiones como J&N. El queria co truit una ei primeta ofteciendo opor. tunidades mds atractivas a los talentos jovenes, En lugar de pasar aos como, “apoyos" andnimos para los socios pode- ‘os0s, las personas jGvenes de Sambian Podian empezar de inmediato a dejar su huella en proyectos interesantes, No fue una mera coincidencia el hecho de que haya transformado su idea en reali dad después de que su tinica hija anun- ci6 que estaba postulando para estudiar arquitectura en la universidad. ‘Tampoco sorprendié a nadie que He- len se hiciera cargo de la empresa tras el fallecimiento de su padre en 1997. sas alturas, Helen ya eva una galardo- hada arguitecta y adopts Ia de 0s s de la em- Presa, sus ingenieros y los ejecutivos de cuentas de clientes. Como resultado, la innovacién prospers en general, y en particular, la empresa estuvo en la van- guardia del movimiento de los “edis- ios verdes". Cuando las otras empresas ms grandes estaban recién implemen- tando as précticas verdes, Sambian ya habia lo Je edificios Aprove- chando la ola de crecimiento, Sambian abrié oficinas en San Francisco, Nueva York Deseaba fueta~ pero no podia hacerlo. “Sabes, desde que papa funds esta empresa nos hemos esforzado para que sea un gran Juno 2008 | Harvard Business Review 31___EUasaWBR Por qué estamos pordionde anuesira mejar gente? 7 lugar para trabajar” dijo, suspirando.“Y creo que tratamos muy bien a las perso: nas. En qué estamos fallando?”. “Honestamente, no lo sé”, contest delicadamente Mary, al escuchar el tono de confusion en la vor de Helen “Pero quiero ser cauta y no legar a de- siadas conclusiones al respecto. Evi entemente necesitamos llegar hasta el fondo del asunto, pero es posible que no sea una tendencia, solo una desagra able coincidencia. Las personas dejan sus trabajos por todo tipo de razones’, Helen pensé al respecto. “Si es ver dad: Pat Dougherty se fue a Irlanda por motivos familiares’. Irena Milkovic decidié independizarse,y ain estoy tra- tando de entenderlo. ¥ ahora Tom va a ser socio en una importante empresa tradicional". Movi6 la cabeza.“El hecho fe que de todos modos es una tenden: cia, iQuiero sabes ‘Tengo algunas teorias, Helen’, dijo ‘Mary, lo més suavemente posible." Pero para poder comprobarlas quisiera ade- Jantar la encuesta a los empleadas este “= Helen volvié a su computadora. “Si, haz la encuesta’ dijo."Lo antes posible” Lo que dice la gente El disefiador Hal Pope y la ingeniera Savannah Dorsey estaban dos pisos sms abajo en La amplia cocina de Sam ban, calentando sus almuerzos en los ‘microondas. Ambos estaban desanima- dos tras leer el memorndum sobre la partida de Tom, “Creo que Tom se dio por vencido cuando perdimos Ja licitacién de Marko’, dijo Savannah. “Realmente queria ver la construccién de ese di- sefio. Era hermoso, con tanta luz y tanto aire. ¥ era obvio para cualquiera que el precio era bueno Hal asintié. "EI diseio era inmejora ble’, Baj6 un poco su voz. “Es una lis tima que 32 Hervard Business Review | Junio 2008 sorprendida a Hal. “Ti también pen- saste lo mismo’, dijp.“Su argumento de venta era tan, ee: Adrienne Perle, otra colega de inge nierfa, no pudo evitar escuchar lo que hhablaban mientras se acercaba para tomar unos utensilios de cocina. “EI s insulso’, dijo Adrienne. *Y no es el inico. Es muy lamentable cuando hay personas que hacen un trabajo incr Digmente cre no cuentan con 1 ue les permite ee gente de ven- opinién, ésa es la razén por la que S° fue Tom. Es un arquitecto de primers adie. Es un érbol que cae en el bosav No sé. Tom Hal negé con su cabe ore RITES hacia arriba y se dio cuenta de que ®°que estés contenta. No quiero que |: Realmente te valoramos aca y quiero siquiera pienses en marcharte”. ‘ba a ningiin lado. No hay nadie del arcane silo eon una musea ae aman “Zeno gard como colo en JN? Il vrs sine Como ex.s tone dos hon Ya debe esa prasad en clo vn HOA 2 Seemnahlenld samen I conser, Spero 30 bis ' smbién i preoep radial Sree ase 5 son debe tes Sci vai Esto no es un simulacro Un mes después, Helen estaba leyendo tun analisis de utilizacién de personal cuando soné e] telefono. El visor mos: 16 que era Bob Wortham, vicepre- sidente de ingenieria. A través de su puerta abierta, Helen vio que su asis: tente, Jessie, estaba a punto de atender Ta Tlamada. 'Ya la tengo, Jess. Hola, Bob. Qué hay?’ ‘Creo que voy a necesitar tu ayuda. Me temo que estamos a punto de per der a Adrienne, Hasta ahora es s6lo un ‘rumor pero quiero resolver la situacién de inmediato” A Helen le cambié la expresién del rostro. *zAdrienne? Tienes raz6n, no queremos perderla, Por qué no suibes ahora”. Alcolgar, Helen le dijo Jessie." Puc es ver si Mary esté libre? Si pudiera venir ahora mismo serfa fantéstico’ 34 Harvard Business Review | Junfo 2008 Se paré, caminé hacia la ventana y apoy6 Ja frente en el ftio vidrio. En Ta plaza de abajo, un grupo pequefio de personas que almorzaban tarde se re- uunia en torno al carro metélico de un vendedor, Cerré los ojos. Otra pérdida para Bob, pens6. zEra él parte del pro- blema? Sacudié la cabeza, negéndose a seguir esa linea de pensamiento. La . wine de reducir semi En el pasillo afuera de la off cina de Helen, Bob se encontré con Mary. Cuando Je conté el rumor acerca de Adrienne, Mary sintié que empalidecia, “Perder a Adrienne serfa un tre- ‘mendo problema. Esta en medio de jo Bob. Dirigid a Mary una mirada suspicaz cuando pasaron por el escritorio de Jessie. "zQué es lo que ests pasando acd? Es como si los vam- piros estuvieran chupando todo nues- tro talento’, Al escucharlos entrar, Helen se alei6 de la ventana. "Bien, Bob", dijo. “De qué se trata exactamente este rumor?" "al parecer algunas personas creen ue Adrienne podria seguir los pasos de ‘Tom a J&N", dijo, y cerns la puerta. “Los dos estaban mas o menos en la misma frecuencia. No me sorprenderia si él qui siera encontrar allé un lugar para ella” Helen miré a Mary."2¥ qué pasa con la cléusula de no-competir?” Supuesta- mente, Tom habja firmado el contrato estindar que Por supuesto que lo firme" contests ‘Mary. “Dificil de hacer cumplir, sin em- bargo’ agreg6, e inmediatamente de- s@6:n0 haberlo dicho. "No te preocupes'; dijo con vehe- ‘mencia Helen.“Aun si no puedo ganar Mery Bob inteeambiaon mi: das len eet 3Bob, scan Scoeriasrprenieron per ambi txeysmpechand qv noha ech nada para atc Mary. "zY por qué estas esperando Teles rhe de a ees Ssrucon ae de hae ag a yun ce ptm pr en ahaha con el Vercmos puedo hace i comin hh Doers iat. “Jess, ama a Adrienne Perle y pre- giintale si estd disponible. Quiero verla Sabra ieee ti a aca", dijo finalmente. “Quiero que me digas la verdad. Con impacto.“Tom Forsythe ha estado bar bblando contigo?”Adcienne miré sorprendida y su res- puesta,en opinién de Helen, fue dema- slado répida. "Tom no tiene nada que ver con esto" dijo.“O sea,es verdad que s{ hablo con 1. Nos conocemos hace ‘mucho tiempo, desde que Hegué hace cinco afis, Probablemente sea lo mas cercano que he tenido a un mentor. ¥, aro ga i me siento un poco urn mfteesseguaoos de cue not erat pers Reslmente tealoramos 4 y quero aue ext coment No lee qu sles ple sesen macht sper uno egur dos" Pod ob desempear in pce de cerol de menor conn ademén én, seane erie orl una respuesta ca iba, “Hesoo, on et gore Y 8 ued calaca i ro. Ver on iid Gare que Aden oo Por ‘RSE fee teeemeteet ace zQué es peor? “Helen, ino puedes hacer eso! Adrienne 8 s6lo una empleada de nivel seis, ese puesto le quedaré enorme” Helen sabia que lo stbito de su de- cisidn ejecutiva no le agradaria a Mary, Pero de todos modos le sorprendié la intensidad de su reaccién. Después de todo, habia logado oo nes desesperadas requieren medidas desesperadas’ se defendié Helen. “Pero ése es exactamente el punto’, excuchado el rumor. ¥ peor adn, no 63 justo. Si ese puesto estd disponible, Sasa esta bien que en la Prato $6 Tes castigue por ser leas Qué tipo de mensaje se transite con ext?" “Te diré qué tipo de mensaje trans amie en mi opinién. Les dice alas pero nas que los sel post. Yen el easo de denne, note preocupes de ela Todos aqulere Blase mostrar cpaz” Mary sicutié Ta cabeza. “Per no es un asunco de populridad oactitud. Lo tue pasa es quella no tlene algunas de Tascompetencias. “Bueno, es asi para todos!" interrum- 16 Helen" veces _ —_ REEDS serene estuvera fuera de empresa, ynos enviar si cit eestor derma rer pea poe elpuesto. Dine ue wo esas La voz del pueblo Unas semanas después de los tensos desencuentros respecto de Adrienne, Mary tocé la puerta de Helen. “Hora de ver lo resultados de la en- cuesta’, cant6 Mary, contenta ahora porgue ella y Helen habfan resuelto sus diferencias. Se sent6 al otro lado del escritorio de Helen y le entregs uuna copia del informe saturado de grificos. “Antes que nada, te daré el Panorama global. En general, nuestros ‘empleados estin bastante satisfechos con casi todos los aspectos de su expe- riencia de trabajo”, Helen emitié un quejido. “si, ya lo sé", continud Mary, “pero cuando uno se adentra en. los detalles, hay ciertos matices”. Ofrecié algunos «ejemplos de divisiones cuyos resultados se alejaban de los promedios.¥, al igual que siempre, las respuestas a las pre- guntas abiertas ofrecian material para pensar. Los comentarios andnimos en Jos cuestionarios de algunos de los in- genleros y disefladores se quejaban de que habi plas filas de 1 0s. Un ‘miembro det personal hacia referencia mn seis a pa ant, oro peer i agunsesetan e Bcnocnlesnoches y te desman ue ocutan Los beneficios eran buenos. Los benef ios eran malos. Los beneficios favore: cian a los empleados mis jévenes. Los cempleados més j6venes no se sentian lo suficientemente valorados. Helen escuché unos 20 minutos; de- cia poco pero meneaba repetidamente la cabeza de lado a lado. Luego,cuando Mary estaba leyendo un comentario de un disefiador acerca de la eleccién de la comida y las bebidas en la cocina, interrumpis. h, ese comentario era mk Mary Ie siguis el juego. “Eso fue lo gue pensé. No te preocupes, ya lo estoy resolviendo”. Pero entendié que la jefa ee informe setae pe to Tecling hacia atras en la silla."Sé que en este caso es del, separar las verdaderas sefales del ruido, pero al menos me ofrece algunas ideas adicionales acerca de lo que debo inds- garen las entrevistas “¥ es0 podria ser ee - “Si d jc” 4Cémo puede Sambian saber qué (05 10 que osté impulsando a las personas a abandonar la empresa? Cuatro expartos ottacen consejos lexpertos a partir dels pagina 36, ‘marshall.usc.edu) es Distinguished Professor de Negocios en Marshall School of Business de University of Southern California, yes el fundador y director del Center for Effective ‘Organizations de esa universidad. Su libro mds reciente es Talent: Making People Your Competitive Advantage (Jossey-Bass, 2008). ‘Junio 2008 | Harvard Business Review 35