Diferencia de Usucapion y Regularizacion de Der. Prop.

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TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA

SALA CIVIL
Auto Supremo: 374/2013
Sucre: 22 de julio 2013
Expediente: PT-19-13-A
Partes: Rogelio Cordero c/ Sabino Alarcón C., Máxima Alarcón C y Petrona
            Alarcón C.
Proceso: Usucapión
Distrito: Potosí.

VISTOS: El recurso de casación en el fondo interpuesto por Rogelio Cordero


de fs. 26 a 27 y vlta., impugnando el Auto de Vista Nº 051/2013 de fecha 10
de abril 2013, pronunciado por la Sala Civil y Comercial del Tribunal
Departamental de Justicia de Potosí, dentro del proceso de Usucapión,
seguido por Rogelio Cordero contra Sabino Alarcón C., Máxima Alarcón C y
Petrona Alarcón C., la concesión de fs. 31 vlta, los antecedentes del proceso; y:

CONSIDERANDO I:
ANTECEDENTES DEL PROCESO:

Que, el Juez de Partido Cuarto Civil y Comercial del Departamento de Potosí,


emitió Auto Definitivo de fecha 9 de enero 2013, cursante a fs. 17 vlta., donde
falló declarando, no ha lugar a la admisión de la demanda interpuesta por el
recurrente, por falta de competencia en razón de la naturaleza del proceso.

Contra dicha resolución el demandante Rogelio Cordero interpuso recurso de


apelación, motivo por el cual, el Tribunal Departamental de Justicia de Potosí
emitió Auto de Vista Confirmando la resolución del A quo.

Resolución que dio lugar al recurso de casación en el fondo interpuesto por la


parte demandante, el mismo que se analiza.

CONSIDERANDO II:
DE LOS HECHOS QUE MOTIVAN LA IMPUGNACIÓN:

Acusa al Tribunal Ad quem de cometer error in judicando en la pretensión de


la aplicación de la Ley No. 247, mencionando que el objeto de esta ley es la
regularización del derecho propietario de personas naturales que se
encuentren en posesión, continua, pública, pacífica y de buena fe, de un bien
inmueble destinado a vivienda, ubicada dentro el radio urbano o área urbana,
recalcando que su inmueble no se encuentra en área urbana; menciona
además que dicha ley no anula, deroga o abroga el institución de la Usucapión
y con el rechazo a la admisión de su demanda se vulneraría su derecho a la
justicia, propiedad privada y asimismo a solicitar y hacer valer lo que en
derecho le corresponde.

Por otro lado acusa error in judicando por no hacerse valer las reglas de la
competencia de los juzgados, mencionando que la Ley del Órgano Judicial en
su art. 12 determina que la competencia es la “facultad que se tiene para
ejercer jurisdicción de un determinado asunto”.

Por ultimo indica, error in judicando al suponer que la puesta en vigencia de


la Ley No. 247 de fecha 05 de junio de 2012 derogó la institución de la
Usucapión, vulnerando su derecho de poder adquirir el derecho propietario
sobre el inmueble que viene ocupando en posesión por más de 23 años.
Por lo dicho, terminó peticionando que se case el Auto de Vista, ordenando
que se admita su demanda principal de Usucapión.

CONSIDERANDO III:
FUNDAMENTOS DE LA RESOLUCIÓN:

Que, en base a los fundamentos expuestos en el recurso de casación en el


fondo, es necesario entrar en análisis de la Ley No. 247, Ley de Regularización
del Derecho Propietario Sobre Bienes Inmuebles Urbanos destinados a
vivienda y recordar lo que es el instituto de la Usucapión, por dicho motivo se
considera lo siguiente:
El proceso de regularización del derecho propietario en Bolivia tiene sus
albores a partir de la promulgación de la Ley No 2372 (Ley de Regularización
del Derecho Propietario Urbano de 22 mayo de 2002) y su modificatoria, la Ley
No 2717 de 28 de mayo de 2004, ambas leyes contienen procedimientos de
regularización, los mismos que fueron aplicados durante el desarrollo del
proyecto piloto de regularización masiva del derecho propietario urbano a
través de los Acuerdos de Responsabilidad Compartida (ARCO) que durante su
ejecución no intervino todos los predios seleccionados, debido a que estas
normas no establecían parámetros concretos para su aplicación en los
diferentes procesos, tampoco consideraba la delimitación del área urbana y el
área rural; sin embargo frente a la dinámica y verdaderas necesidades
urbanas, el nuevo gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia dentro el
marco de lo establecido en la nueva Constitución Política del Estado, incorporó
a nuestro sistema legal la Ley No. 247 de 5 de junio de 2012. La misma que
conforme las “políticas generales de vivienda” establecidas en el art. 298
parágrafo II núm. 36 de la Constitución Política del Estado y de “vivienda y
vivienda social” instituidas en el art 299 núm.15 de la Carta Magna, aprobó
dicha ley; donde no se derogó mucho menos se moduló, el alcance del art. 138
del Código Civil, sino estableció reglas y parámetros técnicos para que los
beneficiarios con dicha ley puedan regularizar su derecho propietario, dentro
el marco de las políticas de vivienda social establecidas desde el nivel central
del Estado.

En ese entendido la Ley No. 247 en su art. 1 estableció: “La presente Ley tiene
por objeto la regularización del derecho propietario de personas
naturales que se encuentren en posesión continua, pública, pacífica y de buena
fe, de un bien inmueble destinado a vivienda, ubicada dentro el radio urbano o
área urbana.”, del análisis de este texto se puede resaltar que el objeto de
dicha ley es la regularización del derecho propietario de todas las personas
naturales.

En ese sentido el art. 2 de la citada Ley establece que la finalidad de la misma


es la de regularizar legal y técnicamente el derecho propietario de un bien
inmueble urbano destinado a vivienda, de aquellas personas que sean
poseedoras beneficiarias y/o poseedores beneficiarios sin título y de aquellos
propietarios que posean títulos sujetos a corrección.

De lo manifestado se concluye que, el objeto y finalidad de la ley en cuestión


radica en regularizar, ya sea legal o técnicamente, el derecho propietario de un
bien inmueble urbano que esté destinado a vivienda; nótese que la primera
característica refiere a la de regularizar, legal o técnicamente el derecho
propietario; y, la segunda característica señala que dicha regularización
recaerá sobre un bien inmueble urbano destinado a vivienda.

En cambio, la Usucapión de manera específica es un modo de adquirir la


propiedad, en cuya virtud el poseedor se convierte en propietario definitivo si
ha poseído de acuerdo con las condiciones establecidas por la ley y durante el
plazo marcado en ella.  La doctrina estableció que la Usucapión es la
institución del derecho civil que tiene por objeto que aquel que ha poseído
creyéndose dueño, tras poseer durante cierto tiempo puede adquirir la
propiedad si su posesión se ha dado bajo ciertos requisitos establecidos por la
norma aplicable. Por su parte, Gonzalo Castellanos Trigo nos indica “…
usucapión es una de las formas más comunes para adquirir el derecho de
propiedad por el transcurso del tiempo…”. Nuestra legislación norma el
instituto de la Usucapión en el Código Civil en los art. 134 al 138, los cuales
se encuentran en total vigencia y aplicación; dichas normas distinguen dos 
clases, USUCAPIÓN QUINQUENAL Y USUCAPIÓN DECENAL, la primera es
aquella que se suscita por la posesión de un bien durante cinco años
continuados (Art. 134 CC) donde se acortan los plazos para usucapir, siempre
y cuando se cumplan con los requisitos exigidos para dicha figura; y la
segunda se produce por la posesión de un bien durante diez años continuados
(Art. 138 C.C.), donde se exigen menores requisitos pero el plazo es más largo. 
Nótese que en ninguna de las dos modalidades de Usucapión está presente
aquella exigencia referida a que el objeto de la misma sea un bien inmueble
destinado a vivienda, que es precisamente una de las características
esenciales de la Ley Nº 247.

De todas estas definiciones y análisis de los artículos que regulan este


instituto en el Código Civil, de manera específica indican que lo que se busca
con la Usucapión es la adquisición, declaración o consagración del derecho de
propiedad y no su regularización como lo establece la Ley No. 247.

En ese marco, la Usucapión al constituirse en una forma de tantas que existen


para adquirir la propiedad, como lo es la donación o la compraventa, regulada
por sus propias disposiciones; significa que el objeto de este instituto del
derecho civil, es adquirir la propiedad; en cambio para la Ley No. 247 su
objeto es regularizar el derecho propietario; vocablos diametralmente distintos
el primero (adquirir) que significa, hacer propio un derecho o cosa que no
pertenece al peticionante.  El segundo (regularizar), significa legalizar, adecuar
a derecho una situación de hecho o irregular.

Por lo cual al ser diferentes los objetos de ambas figuras legales, también lo
son los efectos y su finalidad que ellas producen; para la Ley No. 247 será
regularizar legal y técnicamente el derecho propietario de un bien inmueble
urbano destinado a vivienda social, en cambio para la Usucapión sus efectos
son dobles, por una parte provoca la adquisición del derecho real que se
pretende, consolidando la situación posesoria del usucapiente, provocando así
la extinción del derecho real del antiguo titular, que deja de serlo en el
momento en que se consuma la Usucapión.

Por tanto concluiremos indicando que lo que se busca con la implementación


de la Ley de Regularización del Derecho Propietario Sobre Bienes Inmuebles
Urbanos destinados a vivienda, es regularizar legal y técnicamente el derecho
propietario de un bien inmueble urbano, destinado a vivienda, de aquellas
personas que sean poseedoras beneficiarias y/o poseedores beneficiarios sin
título y de aquellos propietarios que posean títulos sujetos a corrección
(entendiendo por título la acepción de documento), mediante mecanismos
rápidos y en un corto tiempo, sin la exigencia de los requisitos necesarios que
la doctrina y la jurisprudencia establecieron para la Usucapión normal.  En
cambio el instituto de la usucapión como se mencionó líneas arriba es para
adquirir la propiedad, sometiéndose a las reglas pre establecidas para este tipo
de procesos, que a diferencia de la Ley No. 247 de 5 de junio de 2012, cuenta
con requisitos mucho más específicos establecidos por la doctrina y la misma
jurisprudencia que modularon el entendimiento de este instituto.

En el caso en concreto:
Se constata que, Rogelio Cordero lo que pretende con el presente proceso es 
adquirir el derecho propietario sobre la totalidad de la extensión del inmueble
de 454 m2 al indicar que ha poseído por más de treinta y cuatro años; su
pretensión no es de regularizar dicho terreno como lo establece la Ley No. 247,
el actor prescinde de acogerse a lo normado dentro el marco de dicha ley, para
someterse voluntariamente a la vía legal de la Usucapión, amparándose en lo
dispuesto por el art. 138 del Código Civil, para que en dicho proceso, previo
cumplimiento de los requisitos establecidos doctrinal y jurisprudencialmente,
adquiera el derecho propietario.

Al no admitir su demanda de Usucapión, no solo estaríamos malinterpretando


los alcances y disposiciones de la Ley No. 247, sino que estaríamos vulnerando
la doctrina y la jurisprudencia establecida sobre la Usucapión, no obstante a
dicha vulneración también, al negarle la admisión de su demanda, estaríamos
vulnerando su derecho constitucional de acceso a la justicia consagrada en el
art. 115 de la Constitución Política del Estado, al igual que el principio
dispositivo que establece, las partes pueden disponer tanto del proceso como
de su objeto, y ello como consecuencia del poder de disposición de las mismas
sobre el interés privado y sobre la necesidad de acudir o no a los Órganos
Jurisdiccionales para que éstos decidan sobre la satisfacción de dicho interés,
éstas (las partes) son libres para iniciar el proceso civil, delimitar el objeto de
la discusión, oponer excepciones o no, así como poner término al mismo.

Por lo cual al estar sometida la administración de justicia a la pretensión  de


las partes conforme lo establece el principio dispositivo, se tiene que el actor lo
que pretende es adquirir la propiedad en el marco de lo normado por el art.
138 del Código Civil

Y conforme al análisis realizado líneas arriba con toda precisión se puede


concluir que la Ley de Regularización del Derecho Propietario sobre Bienes
Inmuebles Urbanos destinados a vivienda, en la cual basan su resolución los
Tribunales de Instancia para negar la admisión de la demanda de Usucapión,
cuenta con un espíritu, objetivo, requisitos y procedimientos diferentes a una
demanda ordinaria de Usucapión, la misma conforme a lo normado por los
arts. 134 al 138 del Código Civil, más las circulares emitidas por la ex Corte
Suprema de Justicia con la que se comparte criterio, sobre la tramitación de
dicho proceso en la competencia del Juzgado de Partido en lo Civil; la decisión
del Tribunal Departamental de Justicia de Potosí resulta errada y contraria a
la Ley, por el simple hecho de ser este instituto (Usucapión)totalmente distinto
a lo dispuesto por dicha Ley, máxime si el actor recalca una y otra vez
someterse a la vía de la Usucapión normada en el art. 138 del Sustantivo Civil,
que se encuentra en plena vigencia.
Finalmente, llama la atención a este Tribunal Supremo de Justicia que
mediante una decisión por demás unilateral y fuera de los alcances de la Ley
analizada se haya determinado generalizar la tramitación de los procesos de
Usucapión a la competencia de los Juzgados de Instrucción en completa
vulneración de lo establecido por la disposición transitoria séptima, que
indica:  “…las acciones de regularización del derecho de
prop iedad sobre un bien inmueble urbano destinado a vivienda, en el
marco de la presente ley, serán conocidos y resueltos por los Jueces de
Instrucción en Materia Civil…”, y de la revisión de la demanda principal la
acción o pretensión del actor no es de regularizar su derecho propietario, más
al contrario es de adquirirlo por Usucapión, además no se está sometiendo al
marco de lo que establece la Ley No. 247, sino al alcance del art. 138 del
Código Civil.

Por lo anterior, corresponde a este Tribunal Supremo de Justicia resolver el


caso en cuestión, conforme señala el art. 271 núm. 4) del Código de
Procedimiento Civil y en virtud a lo previsto en el art. 41 de la Ley del Órgano
Judicial que establece: "Las resoluciones que adopte la Sala especializada será
por mayoría absoluta de votos de sus miembros". Disposición legal que en
correspondencia a los principios de celeridad, eficacia y eficiencia reconocidos
por el art. 180 parágrafo I de la Constitución Política del Estado determina, sin
excepción alguna, que las resoluciones a ser emitidas por la Sala especializada
sean por mayoría absoluta de sus miembros, situación que es el caso presente
por estar constituida la Sala Civil por dos Magistrados.  Y conforme a la SC-
2537/2012 de 14 de diciembre de 2012.

POR TANTO: La Sala Civil del Tribunal Supremo de Justicia del Estado
Plurinacional de Bolivia, con la facultad conferida por el art. 41 y 42 parágrafo
I núm. 1) de la Ley del Órgano Judicial y en aplicación a lo previsto por los
arts. 271 núm. 4) y 274 del Código de Procedimiento Civil, CASA el Auto de
Vista Nº 051/2013 de fecha 10 de abril 2013, pronunciado por la Sala Civil y
Comercial del Tribunal Departamental de Justicia de Potosí, dentro del
proceso de Usucapión, seguido por Rogelio Cordero contra Sabino Alarcón C.,
Máxima Alarcón C y Petrona Alarcón C.; y declara la competencia del Juez
Cuarto de Partido en lo Civil y Comercial, disponiendo que el A quo previa
verificación de los requisitos de la Usucapión, admita la demanda y prosiga
con la sustanciación de la causa.
Se exhorta al Tribunal Departamental de Justicia de Potosí revisar su
determinación respecto a los alcances de aplicación de la Ley No. 247.
Sin responsabilidad por ser excusable.

Regístrese, comuníquese y devuélvase.

Relator: Mgdo. Rómulo Calle Mamani

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