Poscosecha Yuca Minimamente Procesada
Poscosecha Yuca Minimamente Procesada
Poscosecha Yuca Minimamente Procesada
Las raíces de yuca in natura son cada vez menos frecuentes en mercados y
supermercados de grandes ciudades. El aspecto visual de estas no atrae a los
consumidores debido a la tierra adherida, variación de tamaño y rápida deterioración
(HENRIQUE, 2010). Por tal motivo los productos mínimamente procesados se han
convertido cada vez más populares por la conveniencia, por los beneficios de un
producto natural fresco, calidad del producto, por ser embalado en pequeñas cantidades
y, principalmente por estar listos para el consumo.
Las raíces de yuca, después de la cosecha, presentan alta Peresibilidad, que ha sido una
preocupación para los productores y las industrias, debido al corto periodo de
conservación de estas. El oscurecimiento enzimático de las raíces de la yuca es un factor
importante a ser considerado en el procesamiento de la yuca, esto puede ser evitado o
minimizado con la aplicación de tratamientos por lavado en frio y almacenado en
refrigeración.
Objetivo:
Evaluar el efecto del lavado en frio para la inhibición del oscurecimiento enzimático en
la yuca mínimamente procesada, envasadas en bandejas de poliestireno (PS) envueltas
con películas PVC y almacenada en refrigeración.
MARCO TEÓRICO
Antecedentes de la investigación
Bases teóricas
Es una planta erecta de hasta 2,5 m de altura. Eje con 2 o 3 ramas. Tallo verde con rayas
verticales rojo claras cuando es joven y pardo en la madurez. Las hojas son en forma de
vaina globosa rojo púrpura, pecíolo rojo púrpura de 20-25 cm, limbo palmatihendido,
lóbulos aovados de 5-8, base auriculada, ápice atenuado, margen entero, haz morado y
verde claro, el envés de 19-22 cm, nervadura principal haz morado, envés rojo claro,
nervaduras secundarias, haz morado, envés rojo claro de 13-15 pares. Presenta cicatriz
foliar moderadamente prominente, distancia intermodal de 20-24 cm, látex blanco
lechoso de regular abundancia. Flor femenina y masculina, sépalos rosados de 7 mm,
ovario de 3 mm morado verdoso, estambres amarillos de 7 mm, respectivamente. Fruto
morado verdoso de 1,5 cm de diámetro, con 6 aristas rojas. La raíz tuberosa presenta
epidermis o cáscara parda, felodermo blanco y parénquima amiláceo blanco. Se cultiva
en suelos inundables (restinga) y suelos no inundables (terraza alta). Las matas
presentan una regular conformación. Se cosecha a los 8 y los 12 meses de edad, pasada
esta edad las raíces se ponen duras. Sufre un escaso ataque de insectos y enfermedades.
Esta variedad contiene un promedio de 3,5 de raíces tuberosas. mata-1, peso de la mata
en promedio: 0,9 kg, longitud de la raíz tuberosa en promedio: 28,0 cm y diámetro de la
raíz tuberosa en promedio: 6,0 cm (LASCIVA, 2018).
Cosecha y recolección
MATERIALES Y MÉTODOS
Materiales:
- Yuca
- Embaces
- Cuchillo
- Tabla de picar
- Hielo
- Plástico
- Tazones
- Selladora
Métodos:
Las frutas y hortalizas, después dela cosecha, deben ser manipuladas con cuidado y
transportadas rápidamente para el local de procesamiento, la recepción de la materia
prima se realiza en el local apropiado, donde el material impropio para el procesamiento
sea descartado. La materia prima debe de ser de excelente calidad, debiendo ser
seleccionada en cuanto al punto de maduración (en el caso de frutos), ausencia de
deterioración y daños mecánicos. Las hortalizas que presentan hojas deben ser frescas y
tiernas.
Limpieza
Las frutas y hortalizas deben ser lavadas en agua corriente limpia y de buena calidad o
por inmersión, utilizando sustancias químicas permitidas y utilizadas (desinfectantes)
apropiado para la sanitización de frutas y hortalizas, con la finalidad de remover las
suciedades y los microorganismos adheridos a la superficie del producto, evitando la
contaminación del área de procesamiento y la obtención de un producto final de calidad
y con vida útil satisfactorio. Después de la limpieza las frutas y hortalizas pueden ser
nuevamente seleccionadas y clasificadas.
Las frutas y hortalizas deben ser almacenadas en cámara fría por un periodo de
aproximadamente 12 horas para retirar el calor de campo y reducción del metabolismo
respetándose la temperatura mínima de seguridad, previniendo así el riego de daños por
el frio.
Sanitización
Las frutas y hortalizas deben ser inmersas en solución sanitizante para la eliminación de
microorganismos deterioradores y patógenos. El sanitizante a base de cloro es el más
utilizado, como hipoclorito de sodio y dicloroisocianurato de sódico. El uso de agua
refrigerada en la Sanitización es recomendado, pues reduce el metabolismo del
producto.
Descascarado o corte
Dependiendo del producto se debe retirar la cascara antes del corte. El proceso de
descascaramiento puede ser realizado manual o mecánicamente. El tipo de corte debe
ser apropiado para cada tipo de fruta y hortaliza, variando con su forma de presentación
en el mercado consumidor. El corte debe ser realizado utilizando cuchillos afilados de
acero inoxidable o cortador mecánico adecuado al producto, ambos higienizados.
Drenaje o escurrido
Después del corte, el producto ya procesado debe ser colocado en bandejas de plásticos
por un tiempo suficiente para retirar el exceso del líquido acumulado en la superficie del
producto, en el caso principalmente de frutas. Las hortalizas que presentan hojas, raíces
y tubérculos pueden ser centrifugados para retirar el exceso de líquido.
Embalaje
Almacenamiento
Respiración y temperatura
Oscurecimiento enzimático
El oscurecimiento enzimático consiste en la oxidación de sustratos fenólicos por la PFO
y la subsecuente polimerización no enzimática de las o-quinonas, moléculas muy
relativas que se condensan rápidamente, combinándose con grupos aminos o
sulfhídricos de las proteínas y de los azúcares reductores, formando pigmentos oscuros
de alto peso molecular - las melaninas. Los factores más importantes en la evolución del
oscurecimiento enzimático son la concentración de PFO activa e de compuestos
fenólicos, el pH, la temperatura y el Oxigeno disponible en el tejido.
Varios inhibidores del oscurecimiento enzimático vienen siendo probado por la industria
de alimentos como los agentes reductores y antioxidantes (sulfitos), quelantes,
acidulantes (ácido cítrico), entre otros, que actúan por medio de la reducción de las o-
quinonas a difenoles incoloros correspondientes, pudiendo reaccionar irreversiblemente
con las o-quinonas formando compuestos incoloros estables.
M.P Pesado
Lavado
Secado
Cáscara
Semilla
Troceado
Refrigeración
Tratamiento térmico
Almacenado en
Empaquetado Refrigeración
Resultados
BIBLIOGRÁFIA