Capítulo I-WPS Office
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Las aguas negras, son aguas recogidas en las aglomeraciones urbanas procedentes de los vertidos de la
actividad humana doméstica, o a la mezcla de éstas con las procedentes de actividades comerciales,
industriales y agrarias integradas en dicha aglomeración, y con las de drenaje y escorrentía de dicho
núcleo. Sus volúmenes son menores que los de las aguas blancas y sus caudales y contaminación mucho
más regulares.
En el Venezuela hay un problema silencioso pero a la vez muy latente: las aguas servidas. En distintas
comunidades de Venezuela se registra esta situación con una gran agravante: no obtienen respuesta de
las autoridades para atender un reclamo que pone en riesgo su salud y día a día.
Comunidades del estado Sucre se han enfrentado también ha dificultades en su vida por el desborde de
aguas servidas.
En Sucre pareciera que los habitantes han incorporado a su normalidad esta problemática. En el sector
Las Palomas, calles Corazón de Jesús y Caicaigüita de la parroquia Santa Inés del municipio Sucre las
aguas cloacales se han convertido en un problema permanente en la zona, hasta el punto, que la
mayoría de sus habitantes argumentan estar acostumbrados a vivir entre malos olores.
Este mal sueño que agobia la sana convivencia y afecta a más de 400 familias de La Llanada deriva del
estado de abandono en el que se encuentra la estación de bombeo del sector, la cual, al estar
inoperativa, no recicla las aguas servidas y ello, provoca su estancamiento en el canal que atraviesa y
recorre toda la comunidad.
Objetivo general:
Investigar las problemáticas ocasionadas a la vida diaria por las aguas servidas en la Urb. La Llanada,
Cumaná; Sucre-Venezuela.
Objetivos específicos:
Conocer el origen de la acumulación masiva de aguas negras en la Urb. Llanada, Cumaná, Sucre-
Venezuela
Evaluar los posibles daños ocasionados por las aguas negras a la vida diaria de los habitantes de la Urb la
Llanada, Cumaná, Sucre-Venzuela
Justificación
Desde hace más de 10 años los habitantes de la comunidad de La Llanada no logran despertar de la
pesadilla que se ha convertido vivir rodeados de aguas servidas. En época electoral candidatos visitan la
comunidad, pero ni siquiera las autoridades locales en ejercicio han respondido al clamor de más de 400
familias que hoy exigen la solución de esta problemática que expone tanto a adultos como a menores al
contagio de enfermedades como paludismo y amibiasis.
Se reporta que desde hace aproximadamente, 5 o 6 años se robaron la bomba que permitia se
reciclaran de manera correcta las aguas residuales y ningún organismo se ha comprometido a reponer
una pieza nueva para que la estación de bombeo cumpla con su función.
Vivir en estas condiciones, es vivir en zozobra porque se está en un constante riesgo de infección, tanto
adultos como los niños, porque la libre circulación de las aguas residuales por todas las calles que
además permanecen estancadas ya son criaderos de plagas, mosquitos, moscas que al final son
transmisores de enfermedades.