Guerras Punicas - Grupo 4
Guerras Punicas - Grupo 4
Guerras Punicas - Grupo 4
INTEGRANTES:
1
DEDICATORIA
2
Índice
I.- Introducción……………………………………………………………….4
IV.-Guerras púnicas………………………………………………………….6
VI.-Anexo…………………………………………………………………….10
VII.- Conclusiones…………………………………………………………..11
VIII.- Bibliografía…………………………………………………………….11
3
I.- INTRODUCION
Se conoce como guerras púnicas a la larga serie de conflictos que enfrentaron Roma y
Cartago, durante más de un siglo concretamente desde 264- 146 a.c. El origen del
nombre guerras púnicas reside en la forma que tenían los romanos de llamar a los
cartagineses apelando el anónimo punici (Púnicos). La gran duración de las guerras
púnicas a lo largo de 118 años no fue continuada o interrumpida en el tiempo, sino que
se dividió en tres fases distintas.
La primera de las guerras púnicas tuvo lugar en el 264 a.c tomando como escenario la
principal isla Sicilia. La segunda guerra púnica, la más famosa de todas se desarrolló
entre 218 – 201 a.c en multitud de escenarios marítimos y terrestres de todo el
mediterráneo. La definitiva tercera guerra púnica 149 y el 149 a.c sobre todo en el
norte de África, concluyendo con la destrucción total de Cartago y el alzamiento de
Roma como dueña indiscutible del mediterráneo.
4
MARCO TEORICO
II.- UBICACIÓN GEOGRAFICA Y CRONOLOGICA
- 1ra Guerra Púnica: La guerra comenzó en el 264 a. C. cuando los romanos se
apoderaron de Mesina, en Sicilia. Entonces los romanos presionaron a Siracusa, la
única potencia independiente significativa de la isla, para que se aliara con ellos y
sitiaron la base principal de Cartago, Agrigento.
- 2da Guerra Púnica: Fue el segundo gran enfrentamiento militar entre las dos
potencias que entonces dominaban el Mediterráneo occidental: Roma y Cartago. La
contienda se suele datar desde el año 218 a. C., fecha de la declaración de guerra
de Roma tras la destrucción de Sagunto, hasta el 201 a. C. en el que Aníbal y
Escipión el Africano acordaron las condiciones de la rendición de Cartago.
- 3ra Guerra Púnica: La tercera guerra púnica fue el último enfrentamiento militar
entre la República romana y los remanentes del Estado púnico liderados por
Cartago entre los años 149 y 146 a. C. Esta guerra fue mucho más corta que las
dos anteriores y consistió principalmente en el asedio romano a la ciudad de
Cartago, llevando finalmente a la destrucción total de la misma.
5
III.-ORGANIZACIÓN SOCIAL Y POLITICA.
La organización social:
Roma: En los primeros tiempos, la sociedad romana estaba dividida entre los patricios,
comerciante que ocupaba todos los cargos políticos y religiosos importantes, pero por
La Organización Política:
Roma: En un principio Roma fue una ciudad-estado monárquica. El rey era elegido por
una asamblea y su cargo era vitalicio, pero a su muerte el poder volvía al estado.
Cartago: Cartago no tenía una monarquía, sino que su política estaba dominada por
una élite aristocrática compuesta por clanes que competían entre sí.
Causas:
6
V.-DESARROLLO.
Tuvo inicio entre (264-241 a.C.) la antigua Cartago y Roma. Las preocupaciones
romanas eran los samnitas, griegos, etruscos y celtas con los que limitaban sus
fronteras en expansión. Cartago y Sicilia no estaban en la mente romana.
Los cartagineses, por su parte, estaban expandiéndose por Sicilia isla en la cual tenían
numerosos enclaves los griegos. Debido a esto, y a la presión de los romanos al norte
(Magna Grecia), las colonias griegas enviaron a la patria, pidiendo ayuda.
7
En el 256 a.C. después de otro éxito en el mar en Cabo Ecónomo, en el extremo sur
de Sicilia, una fuerza expedicionaria dirigida por el cónsul Marco Atilio
Régulo desembarcó en la costa africana capturando la ciudad de Aspis (Clypea) y
estableciendo allí una base de operaciones en tierras púnicas.
Roma trató de rescatar a los supervivientes (unos 2,000) que pudieron refugiarse en
varios puntos de la zona, pero a su regreso, una tempestad destrozó los barcos
romanos sobreviviendo 80 soldados de todo el contingente enviado. Con este desastre
Roma finaliza su asalto africano.
La Primera Guerra Púnica continuó durante otros 13 años. En el 249 a.C., Cartago.
Luego esta decisiva victoria, Cátulo conquistó Lilibea, haciendo retroceder a Amílcar y
a su ejército hasta las pocas fortificaciones cartaginesas. Sin recursos para construir
una nueva flota o para reforzar las tropas terrestres, Cartago admitió su derrota y firmó
un tratado de paz con Roma, dando conclusión así a la primera guerra púnica.
Aparte de unas pocas ciudades, como Siracusa y Messina, que obtuvieron el estatus
de aliados de Roma, Sicilia se convirtió en la primera Provincia Romana.
8
Mientras tanto en la Península Ibérica, que servia como la principal fuente de mano de
obra para el ejército cartaginés es amenazada por una expedición romana bajo el
mando de Publio Cornelio Escipión el Africano quien tomó nueva Cartago (Hispania)
por asalto y puso fin al dominio cartaginés en Iberia. Finalmente, Aníbal hizo un retiro
apresurado de vuelta a Cartago para cenfrentarse con Escipión el Africano en África
del Norte en la batalla de Zama, aquí los romanos vencieron a Cartago, Poniendo fin a
la Segunda Guerra Púnica. Cartago nunca más ozo desafiar la hegemonía de Roma
sobre el Mediterráneo y dejó de ser una gran potencia y se convirtió en un estado de
cliente romano, que medio siglo más tarde, sería conquistada completamente por
Roma en la Tercera Guerra Púnica, que era simplemente un sitio de la ciudad de
Cartago por Roma.
La llamada tercera guerra púnica (149 a. C.-146 a C.) comprende casi en exclusiva la
batalla de Cartago, una operación de asedio de larga duración que acabó con el
saqueo y la destrucción completa de la ciudad de Cartago. Las causas de la guerra
fueron, por un lado, el creciente sentimiento anti-romano en Hispania y Grecia, y
por el otro, el visible resurgir del poderío militar cartaginés, reducido artificialmente
por Roma tras la segunda guerra púnica.
Obligada a un ejército puramente nominal por las condiciones del tratado de paz
con Roma, Cartago sufría regularmente incursiones de saqueo desde la vecina
Numidia, las cuales, a raíz del mismo tratado, eran arbitradas por el Senado
romano, quien solía favorecer a ésta en la mayoría de sus resoluciones. Tras
soportar esta situación durante casi cincuenta años, Cartago consiguió pagar todas
las indemnizaciones de guerra que le debía a Roma, tras lo cual comunicó
públicamente que dejaba de considerarse ligada a las restricciones del tratado, en
contra de la opinión de Roma. Organizó un ejército para resistir a la siguiente
incursión númida, aunque perdió, lo que le supuso el pago de más
indemnizaciones, esta vez a Numidia.
Durante el año 149 a C., Roma realizó una serie de reclamaciones, a cual más
exigente, con la clara intención de empujar a Cartago a una guerra abierta,
proporcionando un casus belli que esgrimir ante el resto del mundo antiguo. Tras
exigir la entrega de 300 hijos de la nobleza cartaginesa como rehenes, se demandó
que la ciudad fuera demolida y trasladada a otro punto más hacia el interior de
África, lejos de la costa. Esa fue la gota que colmó el vaso de la paciencia
cartaginesa. Se negaron a aceptar tal demanda, y Roma declaró el inicio de la
tercera guerra púnica. La población de Cartago, que hasta el momento había
9
confiado principalmente en el uso de mercenarios, tuvo que tomar una parte mucho
más activa en la defensa de la ciudad. Se fabricaron miles de armas improvisadas
en un corto espacio de tiempo, llegándose incluso a emplear pelo de las mujeres
cartaginesas para trenzar cuerdas de catapulta, con lo que se logró rechazar el
ataque inicial romano.
V) Anexos:
10
VII.-CONCLUCIONES
El fin de las Guerras Púnicas sobrevino junto con su principal consecuencias, que fue
la destrucción total de Cártago y la absorción de su imperio comercial por parte de la
República Romana. Tras derrotar también a los Macedonios y a los Sirios, Roma
instauró desde entonces como el poder supremo del Mar mediterráneo.
VII.-BIBLIOGRAFIA
-https://www.romaimperial.com/guerras-punicas/
-Mira Guardiola, Miguel Ángel (2000). Cartago contra Roma: las guerras púnicas.
-Madrid: Aldebarán. ISBN 84-88676-89-1. Polibio de Megalópolis. Traducción de Juan
Díaz Casamada. (1968).
-Historia universal bajo la República romana. Vol II. Barcelona: Editorial Iberia, S. A.
ISBN 978-84-7082-100-4.
-Hans Delbrück; Warfare in Antiquity; 1920; ISBN 0-8032-9199-X (en inglés).
-Theodore Ayrault Dodge; Hannibal: A History of the Art of War among the
Carthaginians and Romans down to the Battle of Pydna, 168 B. C., with a Detailed
Account of the Second Punic War; 1891; ISBN 0-306-81362-9 (en inglés).
11