La Crónica de Chac Xulub Chen

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KinKaban, Año I, N° 1 (ene-jun, 2012), pp.

58-63
Revista electrónica del CEIC M
Centro de Estudios Interdisciplinarios de las Culturas Mesoamericanas, A.C.

LA CRÓNICA DE CHAC XULUB CHEN:


EL DISCURSO Y LA SUMISIÓN DEL LINAJE
Dossier PECH COMO ARMA DE LUCHA
Deyanira Dávalos Arellano
Programa de Maestría en Historia-UNAM

Resumen
La Crónica de Chac Xulub Chen es un texto del siglo XVI escrito en maya yucateco por indígenas pertenecientes a la
familia Pech. Es una interesante obra colonial que ha sido escasamente abordada bajo el lente del análisis historiográfico.
En este espacio se ha elaborado, como un primer acercamiento, parte del análisis historiográfico de dicha obra. El mismo se
enfoca en buscar las formas en que fue construido el discurso que contiene este documento, a partir de las posibles
manifestaciones de resistencia, lucha, negociación, adaptación o integración que se pudieran haber expresado como
respuesta o reacción hacia el nuevo orden, es decir el del régimen colonial.

Abstract
The Chronicle of Chac Xulub Chen is a text of the Sixteenth Century, written in Maya Yucateco by the Pech family Indians.
It is an interesting colonial document which has not been sufficiently studied under the historiographic lens. We have made,
as a first approach, part of the historiographic analysis of this story. In order to do so, we have chosen to focus on the
expressions of resistance, fight, negotiation, adaptation or integration that these indigenous Maya people could have
demonstrated as response towards the new order, the colonial regime.

Chen. En otras partes, el escrito se refiere al tiempo en


¿Quién escribió la obra y cómo? que el mandatario del lugar se dice ser Nakuk Pech, es
Como pasa con muchos otros documentos coloniales no decir cuando llegaron los conquistadores españoles a tie-
conocemos la fecha exacta en que este documento fue rra yucateca. Esto lleva a pensar que el autor podría ser el
escrito, aunque se puede ubicar hacia la segunda mitad del hijo de Nakuk Pech o tal vez algún otro de sus descen-
siglo XVI. La autoría de la Crónica de Chac Xulub Chen dientes. La idea también se ve reforzada por lo que de-
1 muestra otra obra conocida bajo el nombre de Crónica de
se ha atribuido hasta ahora a Ah Nakuk Pech, batab de
Yaxkukul, escrita por Ah Macan Pech, hermano del men-
dicho lugar o cacique, debido a que la narración del texto cionado Nakuk. Dicho texto guarda una gran similitud con
está hecha en primera persona del singular bajo este nom- la Crónica de Chac Xulub. Es probable que ambas deriva-
bre. Él se dice autor del texto y reafirma su participación ran de un mismo escrito, tal vez una especie de modelo
como tal a todo lo largo del mismo. Sin embargo, hay que fue compartido para diferentes lugares o que hayan
elementos que sugieren que la crónica pudo haber sido sido copiadas unas de otras. La Crónica de Yaxkukul fue
escrita por más de un autor y probablemente en distintos traducida al español por Juan Martínez en 1926. En este
momentos. Por ejemplo, casi al principio de la obra apare- caso, su contenido revela claramente que el escrito paso
cen las siguientes líneas: de generación en generación y cuenta con partes redacta-
Esta era la cuenta del año cuando, a saber, recibí de mi das por distintos miembros de la familia Pech.
padre, Nakuk Pech, Y Ursula Pech, su mujer, la vara, La traducción de la Historia y Crónica de Chac
aquí en el pueblo de Chac Xulub Chen, para servir a
Xulub que utilizamos para la elaboración de este artículo
Dios y a nuestro gran príncipe, el rey que reina; para go-
bernar este pueblo, a saber, aquí, en la provincia de Chac es la que elaboró Héctor Pérez Martínez en 1936. Se sabe
Xulub Chen (Pérez 1936: 24). que el texto está dividido en 41 párrafos pues existe una
versión en maya yucateco que publicó Daniel Brinton
Este pequeño pasaje nos habla del día en que el hijo (1969) junto con la traducción de ésta al inglés. Desafor-
de Nakuk Pech recibió la vara para gobernar Chac Xulub tunadamente no se ha podido encontrar la fotocopia del
original, por lo que no se puede saber cuál era la disposi-
1
El término batab se ha traducido como jefe de un pueblo, jefe de un ción primaria del texto. La crónica, como se explicará
lugar, o cacique. Véase Sergio Quezada, Pueblos y Caciques Yucatecos enseguida, no guarda un orden cronológico estricto sino
1550-1580, México, El Colegio de México, 1993.

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que da saltos en el tiempo y no es lineal. Esta situación y rompieron el equilibrio, cualquiera que éste hubiera sido,
otros detalles que contiene la obra ponen en duda la auto- y que transgredieron en un entorno que funcionaba con
ría de Nakuk Pech como único responsable de su narra- una lógica interna previa al contacto. El escenario cambió
ción. Por momentos parece estar compuesta de una forma y presentó nuevos actores, nuevas situaciones y un nuevo
cíclica que da pie a un ir y venir en el tiempo y espacio contexto al que dichos mayas habrían de tener que adap-
que fueron motivo de su producción. tarse por diferentes medios, en busca de restaurar en la
Sin embargo, se necesitaría profundizar en este as- medida de lo posible el balance en una nueva forma de
pecto para poder afirmar con total certeza esta idea, pero vida traída por los conquistadores, funcionarios, colonos y Dossier
por motivos de espacio habrá de ser materia particular de frailes españoles.
otro estudio. Por lo pronto es preciso centrarnos en el La Crónica de Chac Xulub Chen también narra, si
tema que ocupa este artículo. bien en un tenor mucho más discreto y atenuado, las an-
gustias y el sufrimiento que padecieron los hombres ma-
La imagen del Linaje Pech yas bajo el dominio hispano. Y aunque éste no fuera el
en la construcción del discurso motivo o la intención principal que propició la redacción
de la Crónica de Chac Xulub Chen. del texto, es claro que no perdieron la oportunidad de
incluir sutilmente entre todas las cosas que cuentan el
La sumisión como arma de lucha
hecho de que, dentro de todo lo que vivieron y entre los
En gran medida el tenor de la obra es reiterar y afirmar las diversos cambios impuestos, también hubo momentos de
posiciones que ocupaban varios miembros del linaje Pech dolor y temor en sus corazones.
antes y en el momento en que llegaron los conquistadores Por momentos el texto pareciera recuperado de
y colonos españoles. Con gran énfasis y orgullo los Pech viejas anotaciones, de la memoria, o de agregados que
dan noticia de que pertenecen a un linaje antiguo de hidal- fueron insertados a lo largo de los años, donde se tiene un
gos y conquistadores porque sus antepasados se ganaron registro de hechos que mencionan una y otra vez, a veces
el gobierno de las tierras yucatecas que ocupaban. Hablan en diferentes fechas o a veces en las mismas y realizadas
de sus méritos y de que cómo llegaron a estar en donde por distintos sujetos. Las siguientes líneas pueden
estaban al momento del contacto. Esto les otorgaba un ejemplificar mejor lo que refiero:
gran prestigio que vieron amenazado bajo el nuevo orden,
De 1519 años fue el año en que vinieron los españoles
al que vislumbraron obscurecido al ver sus dominios re- aquí, a la ciudad de nosotros At Ytzá, aquí, a la tierra de
partidos en encomiendas. En el relato se observa clara- Yucatán. Yo, Don Pablo Pech, hijo de Don Martín Pech
mente una intención de expresar quiénes fueron y quiénes conquistador de Xulkum Cheel, aquí, a saber, en Maxtu-
eran cuando redactaron el texto, a qué linaje pertenecían y nil y Chac Xulub Chen, señalé arriba el día, mes y año en
la importancia y peso de su antigua ascendencia. Fue su que recibimos a los señores extranjeros con afecto en el
identidad y su posición entre sus iguales y desiguales la corazón. Y nosotros no dimos guerra contra ellos: Don
que buscaron resaltar. Asimismo, hay una integración del Juan de Montejo, el Adelantado, y los demás capitanes
lenguaje castellano en el texto que incorporaron para como son nombrados en el libro. Nosotros, los conquis-
tadores, Don Martín Pech, hijo de Don Fernando Pech,
elaborar su discurso. Algunos términos como ―hidalgos y
Don Pablo Pech, hijo de Don Martín Pech, fuimos los
conquistadores‖ no están escritos en lengua maya sino en primeros en recibir el cristianismo. A los trece días de
castellano. Puede ser porque ambas fueron palabras que octubre de 1518 entró el agua en la cabeza de quienes
no tuvieron un equivalente preciso en maya yucateco. Sin gobernábamos las ciudades congregadas en Maxtunil.
embargo, es importante resaltar el uso que hacen del Aquí entró el agua en las cabezas el primer obispo de los
nuevo lenguaje en el que se hallan un espacio para encar- hombres mayas, Don Francisco Toral (Pérez 1936: 33-
nar posiciones que los equiparen con lo desconocido y de 34).
esta forma asimilarse a ello. El autor señala que la llegada de los españoles a Yu-
Yo soy Nakuk Pech, descendiente de los antiguos catán fue en 1519. No obstante, hay menciones anteriores
hidalgos conquistadores de esta tierra, en la región de en el texto, como en el párrafo primero, en donde se co-
Maxtunil. Yo fui puesto para guardarlo por mi señor Ah
menta que la llegada de los españoles fue en 1511. Más
Naum Pech (Pérez 1936: 19).
adelante se cambia el nombre del adelantado Francisco de
Como ya se ha mencionado, el orden que guardan las Montejo por el de Juan, mención que aparece en otras
fechas en el texto no siempre es lineal, por lo que existen ocasiones. Después el autor da la fecha 13 de octubre de
vaivenes en el tiempo. Es decir que el autor o los autores 1518 para indicar que fueron bautizados los gobernantes
dan brincos en el tiempo probablemente de forma inten- de las ciudades de Maxtunil. En ese año no habían llegado
cional. Se incluyen fechas importantes en la historia de los franciscanos a Yucatán, ni había comenzado la labor
Yucatán y específicas, que aunque a veces imprecisas, son evangelizadora allí. Y para terminar menciona que fue el
utilizadas como marcadores temporales, fechas que regis- obispo Toral quien les ―entró el agua en las cabezas‖.
tran momentos clave para denotar no solo el hecho de que Francisco Toral, como es sabido, llegó a esas tierras por el
algo pasó sino el cambio que trajo tal o cual suceso, alte- año de 1562.
raciones en el orden conocido, finalmente variaciones que

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A partir de todos estos datos que parecieran jugar nuestro alto príncipe Dios que tiene poder sobre todo.
con el devenir en el tiempo, la obra deja ver que dichos La declaración de que vinieron los españoles aquí, a la
sucesos, junto con muchos otros más, son utilizados, tierra, a saber, por la voluntad de nuestro señor Dios‖
como dije antes, como marcadores temporales que señalan (Pérez 1936: 24).
momentos importantes de cambio, ruptura e incluso irrup- Existe una reiteración explícita de que fue por man-
ción de lo ajeno en un escenario determinado. Hay varios dato de Dios que las cosas cambiaron, por su voluntad. Es
párrafos en los que se habla del linaje Pech y se resalta el importante notar que aquí hay ya un reconocimiento y una
Dossier hecho de que Nakuk Pech y sus familiares fueron con- aceptación del cristianismo, y por ende de Dios como
quistadores y gobernadores de tierras yucatecas. Esta figura significativa y sagrada. Y al señalar que Dios tiene
declaración es especialmente recurrente a lo largo de todo poder sobre todo, el responsable o responsables del texto
el escrito. Más allá del hecho histórico que mencione el dejaron escapar un sutil tono de resignación acerca de la
autor, lo acompaña la afirmación de que varios miembros nueva situación en que se hallaba la tierra. El texto nos
de la familia Pech fueron conquistadores y gobernadores indica que los Pech supieron adaptarse a las nuevas
de las provincias posteriormente tomadas por los españo- creencias impuestas o incluso que asimilaron éstas con las
les. El discurso que está presente a lo largo del texto propias y antiguas. Quizá buscaban tener un medio que les
tiende puentes con el pasado, evoca otros tiempos en los pudiese ayudar a sobrellevar ciertas situaciones, es decir,
que las cosas eran diferentes, ordenadas de distinta forma tal vez detectaron que una buena relación con los frailes
y decididas por la gente indígena. Hay alusiones del pa- les podía traer determinados beneficios y alguna especie
sado que remiten bajo un tono sólido y seguro al tiempo de amparo que en un momento dado fuera útil para
en que los Pech mandaron en aquella tierra. Se despliegan enfrentar el áspero trato que se pudiera haber tenido con
orgullosas las menciones que de ello contiene el relato en los conquistadores o funcionarios españoles. Asimismo,
donde no hay espacio para el olvido de lo que una vez fue cabe suponer que el recibimiento del nuevo Dios sin opo-
y para entonces se había transformado. Este fue el espacio sición los convertía en buenos cristianos, algo considera-
que aprovecharon los miembros de la familia Pech para ble dentro de las nuevas circunstancias. Los Pech se
contar de dónde venían, a dónde llegaron y por qué su asumieron como cristianos, como parte del universo de la
historia se volvió otra. nueva religión y de esta forma se incluían e insertaban en
A continuación se citan los tres párrafos en los que el escenario que había sido fruto del contacto entre dos
se halla parte de la intención que tuvo quien escribió la culturas. Finalmente se señala:
obra para hacerlo. Primeramente se expresa: Y, a saber, esta es toda la historia de cómo pasaron los
Y fueron muchos quienes miraron cumplidos los sucesos señores españoles y cómo fueron recibidos los primeros
que cuento dentro de mi información, a saber, para que padres. Y los nombres de los primeros señores extranje-
sean conocidos por los de mi linaje y por mis hijos, y por ros los pongo en orden para ser mostrados. [Esta es la
los que vengan detrás hasta que tenga lugar la muerte historia que] aderezo para que se conozca cómo vino la
aquí, en la tierra. Y, a saber, porque mi título, mi pro- conquista, y cuántas angustias pasamos aquí, bajo los
banza me fue entregada por nuestro señor Dios y nuestro árboles, bajo los bejucos, bajo las ramas, dentro de este
gran príncipe y rey, el que reina, no doy el tributo, no tiempo y además los hombres principales y los mayores,
puedo pagar el tributo, ni lo pagarán mis hijos, ni mis porque pasaron dos, tres años de que estaban estableci-
hijas (Pérez 1936: 26-27). dos [los españoles] entre tanto que se daban por nuestros
amos, los señores extranjeros, los pueblos, a saber (Pérez
Uno de los motivos por los que se escribió la obra 1936: 38-39).
fue para que los sucesos fueran conocidos por los descen-
dientes de quien escribe el texto, así pues, como tantas En esta parte la posible intención de escribir la obra
veces durante el discurso, se vuelve a resaltar de nueva es mucho más explícita que en las anteriores. Esta vez el
cuenta el linaje. Y justamente por la pertenencia a una autor deja ver que el proceso de conquista, los cambios y
antigua estirpe su descendencia no pagaría el tributo. El el nuevo orden les trajeron muchas angustias. Aunque en
pago del tributo es otro de los temas a los que se refiere de el texto no predomina un tenor de constante desazón
forma continua la obra. Esto porque las cuestiones de acerca de los malos tratos que recibieron los indígenas por
pertenecer a un linaje antiguo y la exención de pago de parte de los conquistadores y frailes, como se ha leído, sí
tributo estuvieron muy relacionadas durante el periodo hay escuetas alusiones a ello. El texto se ocupó más de
colonial. En caso de que alguna persona indígena hubiera señalar cuestiones prácticas que afectaron la vida de los
sido nombrada para el cargo de cacique, por haber perte- indígenas de la región, es decir que se exaltaron más los
necido a un antiguo linaje gobernante quedaba libre del cambios habidos en las estructuras de poder, en la eco-
pago de tributo. Pero sobre esta materia abundaré más nomía, en la organización geográfica y política que los
adelante. Otras de las líneas que refieren algo de lo que temas referentes a la inconformidad explícitamente expre-
motivó la escritura del texto son las siguientes: sada respecto a la nueva religión o los castigos que pudie-
―Esta es la crónica de todo lo que reúno aquí, en los li- ran haber recibido por no someterse a lo establecido por
bros, para que los mismos hombres entiendan, y quien las políticas coloniales. Más bien estas letras revelan
quiera saberlo después, el cumplimiento de la fama de cómo los conquistadores se adueñaron de la tierra, misma

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que fue repartida, reordenada de forma diferente. Incluso y engañados fuimos detrás de la guerra yo y mi señor Ah
hay fragmentos que refieren las reducciones de pueblos en Macan Pech, del antiguo linaje de Yaxkukul, e Ixkil
las que se percibe un tono mucho menos rígido y se des- Itzám Pech, del antiguo linaje de Conkal. Fue cuando
cubre el sentir del mundo indígena en el que se denota y entró el tributo a los cochuahes. Gobernaban como due-
ños de la tierra los santos hombres cuando fuimos a
devela un pensamiento meramente arraigado al suelo hacer la guerra bebiendo todos hiel a causa de que nos
yucateco. odiaban los santos hombres‖ (Pérez 1936: 26).
Tras haber citado los motivos que al parecer origina-
ron la redacción de la Crónica es importante ligar dichas Aunque aquí se menciona que los mayas les hicieron Dossier
causas al resto del texto, puesto que es en esa coyuntura la guerra a los españoles por engaño hay otras líneas que
en la que se puede apreciar de manera amplia la construc- refieren que los hombres de la región, incluidos los Pech,
ción del discurso en sí. No obstante, repito, aquí solo se les hicieron guerra a los españoles, sobre todo en los pri-
rescatan aquellas formas que se consideran relacionadas meros tiempos antes de que los conquistadores lograran
con la adaptación, resistencia o lucha hacia el orden colo- asentarse en la ciudad de Ti-hó, es decir Mérida. Pero
nial que se manifestó en esta interesante crónica. después esta idea cambia y de manera insistente se señala
Como se ha dicho, una de los contenidos más recu- que los Pech recibieron siempre en paz a los españoles en
rrentes en el texto es la afirmación del linaje Pech como su tierra:
señores y gobernadores de ciertas tierras yucatecas antes Así también, dijeron nuestro gran señor Ah Naum Pech,
de la llegada de los conquistadores. Pero ¿qué buscó decir Don Francisco de Montejo Pech, Don Juan Pech, como
el discurso por medio de dichas palabras? Sin duda, ésta fueron nombrados cuando les entró el agua en sus cabe-
es una pregunta que podría ser fuente de diversas res- zas por los padres. Y el Adelantado es el capitán que
puestas, pero la que pretendemos darle aquí es la que tiene vino cuando llegaron aquí, a la tierra de Yocol-Petén,
que fue nombrada de Yucatán por nuestros primeros
que ver con un sentido de legitimación frente al nuevo amos, los españoles. Cuando hicieron y dijeron que no-
gobierno. Esto, a su vez, está ligado a otras cosas como sotros viviríamos siempre con Dios, y los hombres ma-
los privilegios de pertenecer a un antiguo linaje. En otras yas oyeron los cuales nombres, a saber, entonces dijo
palabras, los Pech no hicieron ese tipo de menciones –las Naum Pech a los gobernados de los diversos pueblos:
que tienen que ver con su antiguo dominio en la tierra— ―Conoceréis que viene el único Dios a la comarca, el
por querer traer de vuelta ese poder o aquellas posiciones. cual es el verdadero Dios, el señalado verdadero Dios. Id
Lo más probable es que lo hayan expresado como una a vivir y consideradamente aceptadlo. No deis guerra
forma de reconocimiento ante su pueblo y ante los ex- contra ellos. Si no tienen su comida y su bebida, maíz,
gallinas, pavos silvestres, miel, frijoles, [dádselos] para
tranjeros, y tal vez ante otros indígenas que quisieran
comer para que entre el cristianismo y seamos siervos de
tomar el cargo de caciques o que hubieran sido impuestos nuestro Dios.‖ Así lo concedieron y ninguno hizo la gue-
por los conquistadores, de que los Pech no fueron miem- rra ni se amotinó y fueron a la conquista con los españo-
bros comunes y corrientes en su antigua organización les, y fueron por el camino con los señores extranjeros
socio-política. Esto los ponía directamente en un lugar (Pérez 1936: 35).
superior frente a otros indígenas y en una postura afortu-
nada frente a los españoles. El que no tuvieran ya el poder Estas líneas son especialmente interesantes en lo que
para mandar como lo hacían antiguamente en sus pueblos respecta al manejo del discurso puesto que se remontan al
no les quitaba necesariamente el prestigio y el peso que su mandato de un antepasado de este tronco. Naum Pech fue
linaje les proporcionaba y los aventajaba dentro del dis- uno de los señores que gobernó en la región que dominaba
tinto orden en que se estaban acomodando las cosas. Esta dicha familia en tiempos del periodo posclásico. La
fue probablemente una de las formas en que los Pech se crónica lo menciona y se hace hincapié en que fue un
incorporaron a la naciente organización socio-política y se importante ancestro, aquél que nombró a otros para regir
adaptaron a las nuevas circunstancias. Si no había manera la tierra. La importancia no es por lo tanto poca cuando se
de recuperar de facto el completo poderío que tenían de expresa que por orden de dicho personaje se mandó que
antaño en ese territorio, se dieron cuenta de que podían los pueblos no hicieran guerra contra los españoles. Esto
recuperar y mantener otras cosas, como el prestigio y la da a entender que desde los primeros tiempos en que hubo
antigüedad de su línea de sangre, puesto que les eran úti- extranjeros en la península se ordenó que no se les com-
les ante el dominio extranjero. batiera. Es decir que con esto se pretendió afirmar que los
Otra de los elementos que le ayudaría a esta familia a Pech y otros linajes recibieron pacíficamente a los con-
construir la imagen que nos presentan en este discurso es quistadores desde los primeros momentos. Lo que es más,
el viraje casi total que hacen al referir una cosa al princi- estas palabras indican que hubo una colaboración con los
pio y otra diferente sobre lo mismo al final de la obra. españoles desde que llegaron. Así también se percibe que
Esto sucede cuando los autores hablan de la guerra contra no hubo resistencia ni oposición hacia la nueva religión y
los españoles, de la cual en los primeros momentos del que el cristianismo fue aceptado por orden de un impor-
texto expresaron lo siguiente: tante hombre maya. En este sentido el texto es mucho más
congruente, pues prácticamente no hay en él ninguna
―Y, a saber, entonces, a saber, fue que por este tiempo
mención que muestre rechazo hacia el nuevo y verdadero
comenzaron la guerra contra los españoles los de Ichmul;

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Dios. Todas las referencias que hay sobre esta cuestión príncipe y rey, el que reina en Castilla, a protegernos de
son empáticas y dan la idea de que el cristianismo fue las manos de los españoles. Y puso término a que nos
bienvenido desde siempre. Pero es importante no perder quemaran los españoles; y puso término a que nos mor-
de vista que en ese territorio la labor evangelizadora aun- dieran los perros. Y comenzó a poner príncipes de pue-
blo en pueblo. Y aquí dio la vara y aquí dio la medida de
que tardía fue bastante sustantiva. Por otra parte, como he los nuevos tributos por la tercera vez. Cuando comenzó
dicho antes, cabe la posibilidad de que la supuesta acepta- el tributo para los españoles, mantas, cera, pavos silves-
ción de la religión cristiana tuviera que ver con el refugio tres, maíz, cubos, sogas, sal de espuma, chile, frijoles,
Dossier o apoyo que los indígenas quizá hayan encontrado en los habas, ollas, comales y cántaros nosotros llevábamos,
frailes. atentos al tributo, a nuestros amos, los señores extranje-
Creo que no es posible saber exactamente a qué se ros. Y era lo que nosotros pagábamos antes de que el Oi-
debe el cambio en el discurso en lo concerniente a la gue- dor diera la declaración de la cantidad (Pérez 1936: 33).
rra con los españoles, pero sería una postura ingenua des- Son varias las veces que dan cuenta de todo lo que
cartar que el motivo de tal acción pudiera ser que alguno les entregaron a los españoles, pero sobre todo se ocupa-
de sus autores escribiera lo que había sucedido en los ron de insistir en que nunca se resistieron al pago de tri-
primeros tiempos, y después otro autor haya corregido o buto. El afán de cooperación con los hispanos se comienza
cambiado este hecho debido a que con el paso de los años a enfatizar y se va gestando una imagen hasta cierto punto
los Pech se dieron cuenta que no era conveniente que se idealizada de los Pech, imagen que indudablemente hizo
les concibiera y recordara como enemigos o insumisos, contraste con otros linajes, como el de los Cocom que
sino como obedientes súbditos de la Corona. Una vez que pasó a la historia de Yucatán como una familia rebelde y
comenzó a tener más consistencia y forma el sistema co- en franca oposición a los españoles.
lonial y los indígenas aprendieron que podían obtener
cosas de él, algunas de ellas en su beneficio, adaptaron la
Consideraciones finales
historia que quisieron narrar a las nuevas necesidades con
el propósito de que respondieran a fines concretos. Sin Como se ha visto, mucha de la información contenida en
duda, ellos conocieron poco a poco cómo funcionaban las la crónica hizo ver a varios señores del linaje Pech como
cosas y cómo podían conseguir lo que necesitaban o de- buenos cristianos, dispuestos colaboradores y obedientes
fenderse de la mejor manera posible de lo que los afec- súbditos. La imagen que quisieron dar de sí mismos por
taba. Ser obedientes súbditos siempre iba a traer mejores medio del texto es ideal y supieron manejar su discurso
resultados que ser identificados como insurrectos. para lograrlo. Es por eso que tal vez el relato no se centra
Los Pech se presentan integrados al nuevo sistema y en las atrocidades y daños cometidos por los conquistado-
como adeptos al cristianismo. A pesar de que hay en el res, encomenderos, funcionarios o frailes. Al parecer, no
relato brevísimas menciones sobre: ―cuanta angustia pa- es que lo olvidaran sino que lo atenuaron en función de
samos nosotros y los señores españoles, porque los hom- conseguir algo más como el prestigio y los privilegios
bres mayas no tenían voluntad para entregarse a Dios. Y, perdidos. Creemos que en este caso la aparente docilidad
finalmente, yo, Don Pablo Pech, di la orden para que la se utiliza como un arma de lucha para obtener algo, para
oyesen los de la región de Maxtunil‖ (Pérez 1936: 39), colocarse, para encontrar un lugar más satisfactorio en el
nuevamente quien media las cosas para que pueda ser nuevo orden. Bajo este lente la lucha sí se dio pero de otra
recibida de buena voluntad la religión cristiana es otro manera. Los instrumentos no fueron lanzas ni flechas sino
miembro de esta estirpe, que en todo caso imitó a uno de la palabra que entonces se tornó poderosa para que los
sus antepasados para colaborar en esta ardua labor. Pech la dejaran hablar de tal forma que por medio de ésta
Así también, los Pech no olvidaron apuntar que sí les fuera posible crear una imagen específica de sí mis-
pagaron tributo cuando se les pidió y que fue hasta que el mos. Los elementos que formaron dicha imagen fueron
oidor Tomas López lo tasó que quedaron exentos de éste, seleccionados y ordenados de manera que pudieran servir
además de que se redujo la cantidad que injustamente le como una llave que les abriera las puertas para entrar en
solicitaban pagar a los encomenderos. El oidor se presentó un escenario ajeno e impuesto en el que habrían de apren-
como una figura un tanto benefactora o correctora que der a actuar encarnando los roles que les permitieran sub-
llegó a hacerles justicia frente a la pesada exigencia de la sistir y recrear su nueva forma de vida. Al final los Pech
contribución, y también lo mencionan como una especie se percataron de lo que presentaba e implicaba la nueva
de respaldo histórico para explicar por qué ya no pagaban realidad y buscaron distintas formas para poder reubicarse
y no volverían a pagar tributo. Es en parte una justifica- en el nuevo ámbito, para poder seguir adelante en medio
ción que les pudo haber sido útil ante diversas circunstan- de la tribulación y para que las generaciones venideras
cias o en dado momento ante los posibles aprendieran de ello. Por ende, el registro era valioso y
cuestionamientos realizados por parte de alguna autoridad, necesario pues enseñaba, registraba y, además, perduraría
por lo que de forma puntual lo refirieron como sigue: en el tiempo.
A saber, 1553 años fue el año en que vino el Oidor
Tomás López aquí, a la tierra de Yucatán. A saber, vino
de Castilla y llegó como mensajero de nuestro gran

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