Manual Electricidad

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2. Normativa

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Índice
1. La electricidad en E s paña .................................................................................................................... 3
1.1. As pectos bás icos de la electricidad ...................................................................................................... 3
1.2. His toria de la electricidad en E spaña .................................................................................................... 8
2. Normativa ............................................................................................................................................. 11
2.1. Normativa bás ica comunitaria ............................................................................................................... 11
2.2. E l marco normativo es pañol ................................................................................................................. 22
2.3. Actividades reguladas y actividades en libre competencia ................................................................... 33
2.4. G arantía de s uminis tro y planificación de las infraestructuras .............................................................. 41
3. G eneración ........................................................................................................................................... 46
3.1. T ecnologías y cos tes de la generación eléctrica .................................................................................. 46
3.2. E nergías renovables : tecnología, economía, evolución e integración en el S is tema E léctrico ............. 64
3.3. Objetivos de producción con fuentes renovables en la Unión E uropea y en E s paña ........................... 78
3.4. Mecanis mos de apoyo a las energías renovables ................................................................................ 87
3.5. R egulación es pañola de las energías renovables ................................................................................ 95
3.6. Autoconsumo y balance neto................................................................................................................ 106
4. Actividades reguladas en el sector eléctrico ......................................................................................... 116
4.1. E l proceso de liberalización y s eparación de actividades reguladas .................................................... 116
4.2. T ransporte y operación del s is tema ...................................................................................................... 119
4.3. Dis tribución ........................................................................................................................................... 125
4.4. C alidad de s uministro ........................................................................................................................... 130
4.5. S mart G rids ........................................................................................................................................... 133
5. C omercialización .................................................................................................................................. 136
5.1. E l mercado minoris ta de energía eléctrica ............................................................................................ 136
5.2. E l s uminis tro de referencia ................................................................................................................... 142
5.3. El precio voluntario para el pequeño consumidor ................................................................................. ¡Error! Marcador no
5.4. El bono social ....................................................................................................................................... 155
6. El mercado mayorista ........................................................................................................................... 161
6.1. Formación de precios en el mercado mayorista diario de electricidad ................................................. 161
6.2. Formación de precios en los mercados mayoristas a plazo de electricidad ......................................... 171
6.3. Análisis del beneficio del sector eléctrico.............................................................................................. 177
6.4. Windfall profits y Windfall looses .......................................................................................................... 184
6.5. Mecanismos de ajuste de demanda y producción ................................................................................ 191
6.6. Competencia y poder de Mercado ........................................................................................................ 197
6.7. Competencia en el mercado eléctrico ................................................................................................... 202
6.8. Barreras de entrada y atacabilidad del mercado eléctrico .................................................................... 208
6.9. Aplicación de la teoría económica de mercados y competencia al mercado eléctrico.......................... 214
7. Peajes de acceso, cargos y déficit tarifario........................................................................................... 221
7.1 Los peajes de acceso y cargos: estructura, costes y liquidación de los ingresos .................................. 221
7.2 El déficit tarifario: qué es, consecuencias y solución ............................................................................. 231

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1. La
electricidad en
E s paña

1. La electricidad en E s paña
1.1. As pectos bás icos de la electricidad
Definición de energía. En física, la energía se define como la capacidad de un cuerpo o
sustancia para realizar un trabajo. Atendiendo a aspectos tecnológicos y económicos, la energía
se refiere a un recurso natural que adecuadamente manipulado y transformado es capaz de
realizar un trabajo, es decir, a su transformación se le puede dar un uso industrial y tener, por
tanto, un sentido económico.

La energía como tal, ni se crea ni se destruye, sólo se transforma. No obstante, el hecho de que
las transformaciones empleadas no sean reversibles hace que la energía se degrade y que, a la
postre, no sea posible extraer más trabajo del recurso natural del que se parte inicialmente. Toda
trasformación del recurso natural para producir trabajo tiene un impacto, mayor o menor, sobre el
medio ambiente. La cantidad disponible de recursos naturales susceptibles de realizar trabajo es
lo que se conoce como “recursos energéticos”.

La electricidad es una forma de energía basada en que la materia posee cargas eléctricas
positivas y negativas. Cuando varias cargas eléctricas están en reposo relativo, se ejercen entre
ellas fuerzas electrostáticas. Cuando las cargas están en movimiento relativo, se establece una
corriente eléctrica (la electricidad ya no es estática) y se crean además campos magnéticos.

Los parámetros básicos que permiten cuantificar esta forma de energía son: la tensión o voltaje
(que se mide en voltios, V), la corriente o intensidad eléctrica (que se mide en amperios, A), la
potencia eléctrica (que se mide en vatios, W) y la energía eléctrica producida/consumida (que se
mide en vatios-hora, Wh). A partir de estas unidades de medida básicas, se definen sus múltiplos,
que son más utilizados en la práctica: kilovoltios (kV), kiloamperios (kA), kilovatios (kW), gigavatios
(GW), gigavatios-hora (GWh), etc.

Y, como características básicas de la electricidad, se puede citar que es limpia en el lugar de


consumo, no huele, no se detecta por la vista y no se aprecia por el oído. Además, la energía
eléctrica se puede obtener fácilmente de diferentes tipos de energías primarias (combustibles
fósiles, nuclear, biomasa, agua, viento, sol, etc.) (ver Tecnologías y costes de generación
eléctrica) a partir de un proceso de transformación y, posteriormente, transportarla desde los
lugares de generación hasta los centros de consumo a través de líneas eléctricas y cables
subterráneos (ver Actividades reguladas en el sector eléctrico).

La electricidad, ya sea estática o no, da lugar a la aparición de diferentes fenómenos, que pueden
manifestarse en forma de arcos eléctricos (p.e. los rayos) o como fenómenos mecánicos,
térmicos, luminosos, emisión de señales, etc. Es decir, la electricidad se puede utilizar para
generar movimiento, calor o frío, luz, así como poner en marcha dispositivos electrónicos,
sistemas de telecomunicaciones, sistemas de procesamiento de información, etc. Todas estas
aplicaciones, utilizadas en la industria, el sector terciario, los hogares, hospitales, medios de
transporte, etc. funcionan como consecuencia de la circulación de una corriente eléctrica.

Por lo tanto, se puede decir que la electrificación iniciada en el siglo XIX no sólo fue un proceso
técnico, sino un verdadero cambio social de implicaciones extraordinarias, por lo que, además de
ser un servicio, es una necesidad básica para poder realizar una gran cantidad de actividades en
el mundo actual (ver Energía y Sociedad).
No hay más que analizar las consecuencias de una interrupción de energía eléctrica para
observar con precisión la dependencia de nuestra sociedad de esta forma de energía: las fábricas

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1. La
electricidad en
E s paña

tendrían que parar s us proces os productivos ; no funcionarían los teléfonos , ordenadores , internet,
s emáforos, bombas de agua potable, refrigeradoras , equipos médicos, calderas de gas, etc.

S in embargo, también hay que tener en cuenta que la energía eléctrica no s e puede almacenar
económicamente en grandes cantidades (obligando a generarla al mis mo ritmo que s e cons ume
en cada ins tante) y neces ita que exis ta una continuidad eléctrica para s u exis tencia. E sta
continuidad es lo que define el circuito eléctrico y, s i s e interrumpe dicha continuidad, la circulación
de la corriente eléctrica s e interrumpe. E s tas dos caracterís ticas hacen que la dis ponibilidad de
es ta energía, neces aria en nues tra s ociedad, s e cons iga en bas e a un s is tema muy complejo que
integra un número muy elevado de componentes , abarcando: fuentes de generación de
electricidad con diferentes energías primarias , transformación, líneas eléctricas de trans porte y
dis tribución, maquinas eléctricas , s is temas de protección, control y ges tión, circuitos eléctricos
dentro de las viviendas , comercios e indus trias , etc., todos ellos interconectados entre s í,
conformando lo que s e ha denominado como “el S is tema E léctrico” o también “la máquina más
grande jamás cons truida por el hombre”.

F inalmente, res altar que los índices de cons umo eléctrico representan uno de los elementos más
relevantes del des arrollo indus trial de un país , s iendo s ignificativo s u paralelis mo con los índices
de crecimiento del P IB (ver C ontribución del s ector eléctrico y gas is ta a la s ociedad). P ero también
es una s eñal del des arrollo s ocial de un país . E l grado de cons umo eléctrico per cápita y, s obre
todo, el nivel de electrificación de un país s on señales claras del nivel de bienes tar. T ambién, es
s ignificativo que algunos país es en claro crecimiento económico hayan liberalizado y privatizado
s u s ector eléctrico en bus ca de capital privado e internacional (ver E l proces o de liberalización y
s eparación de actividades reguladas ). E l objetivo es poder afrontar las cuantios as invers iones que
los crecimientos de cons umo eléctrico exigen, cons cientes de que la falta de abas tecimiento
eléctrico s upone una importantís ima traba al des arrollo económico y s ocial del país .

F igura
1-1.
E s quema
bás ico
del
S is tema
E léctrico.

Fuente:
REE.

Dada la amplitud del concepto de Sistema Eléctrico, a continuación se presenta una breve
descripción de cada una de las etapas que forman parte de dicho sistema que se pueden ver
gráficamente en la Figura 1-1:

• C entrales eléctricas generadoras: la energía eléctrica s e obtiene a partir de diferentes tipos


de energías primarias (carbón, gas , agua, viento, s ol, combus tible nuclear, etc.), mediante

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1. La
electricidad en
E s paña

un proces o de transformación que da lugar a diferentes tipos de plantas productoras , tales


como las centrales hidroeléctricas, térmicas, nucleares, eólicas , solares , etc. C ada
tecnología cuenta con ventajas y des ventajas . P or ejemplo, las energías renovables s on
energías que ayudan a proteger el medio ambiente s in emitir gas es de efecto invernadero,
pero tienen un carácter intermitente (como cons ecuencia de las caracterís ticas de las
fuentes primarias ) y s on poco flexibles . P or s u parte, las centrales de ciclo combinado
pueden aportar s oluciones rápidas en es tas s ituaciones , pero emiten C O 2. Las centrales
nucleares aportan gran s eguridad de s uminis tro y s e utilizan como centrales de bas e,
aunque exigen un nivel de s eguridad mucho más elevado que otros tipos de centrales
(ver T ecnologías y cos tes de generación eléctrica).

Las res tricciones impues tas fundamentalmente por la dis ponibilidad fís ica de la energía
primaria, junto con otras cons ideraciones económicas , ambientales y s ociales han llevado
a la ubicación de las centrales de producción en puntos muchas veces alejados de los
grandes centros de cons umo. E ste hecho, junto con la impos ibilidad de almacenar la
energía eléctrica en cantidades apreciables , ha dado lugar a la neces idad de dis poner de
una red que interconecte los centros de producción con los centros de cons umo.

• E s taciones transformadoras elevadoras : s e ubican a la s alida de las centrales generadoras


y s u mis ión es elevar la tens ión de s alida de dichas centrales , a un valor de tens ión
adecuado para el trans porte de la energía eléctrica a alta tens ión.

• R edes de trans porte: son las líneas aéreas que unen las es taciones transformadoras
elevadoras de las centrales eléctricas con las subes taciones transformadoras reductoras .
E s decir, s on las encargadas de realizar el transporte de energía a larga dis tancia y alta
tens ión (en E s paña entre 220 y 400 kV ). E l desarrollo de la conectividad de las redes de
trans porte, tanto en el interior de los país es como en las interconexiones entre los mis mos ,
ha permitido el planteamiento de mercados eléctricos de dimens ión regional o
internacional.

Hace años, el crecimiento de este s is tema de trans porte E n E s paña, R ed


era más o menos paralelo a la generación y la demanda, E léctrica de E s paña
s in embargo, en la actualidad es ta as erción ya no s e
cumple. E n país es indus trializados la cons trucción de
(R E E ) es la
nuevas líneas eléctricas es un proces o complejo y largo. compañía
Los requis itos medioambientales han hecho más difícil y encargada de
cara la cons trucción de nuevas líneas y la obtención de los ges tionar la red de
permis os neces arios se demora un tiempo indefinido e
incierto. P or lo tanto, las redes de trans porte deben trans porte, des de
des arrollars e a lo largo de los años y no planificars e de que entrara en vigor
forma definitiva para quedar invariables en el futuro. E l la Ley 17/2007, que
problema de determinar dónde s e s itúa la es tación
generadora y la distancia de trans porte, es un problema
le otorgó la
técnico y económico. condición de
trans portista único
E n E s paña, R ed E léctrica de E s paña (R E E ) es la de la electricidad
compañía encargada de gestionar la red de trans porte,
des de que entrara en vigor la Ley 17/2007, que le otorgó la condición de transportis ta
único de la electricidad. La actividad del trans porte es una actividad regulada, ejercida en
régimen de monopolio y con una retribución es tablecida en bas e a objetivos . E n el año
2016 en E s paña exis tían 21.620 km de redes de 400kV y 19.496 km de redes de 220kV ,
de cuya ges tión y mantenimiento s e encarga R E E .

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electricidad en
E s paña

• S ubes taciones transformadoras reductoras. C umplen tres funciones principales : s on los


centros de interconexión de todas las líneas entre s í, s on los centros de transformación
des de donde s e alimentan las líneas de dis tribución que llegan hasta el cons umo y s on los
centros en donde s e ins talan los elementos de protección y maniobra del s is tema. E l
equipo eléctrico más repres entativo es el trasformador, encargado de reducir los valores
de tens ión a unos valores aptos para el reparto de la energía eléctrica en las cercanías de
las grandes áreas de cons umo.

• R edes de dis tribución: son las líneas eléctricas de aproximación a los grandes centros de
cons umo (ciudades o instalaciones indus triales de cierta importancia). E n la mayoría de las
ocas iones , estas redes s uelen s er aéreas, aunque una vez que llegan a los núcleos
urbanos , s e utilizan líneas s ubterráneas . E sta red tiene una extens ión varios miles de
veces mayor que la red de trans porte y, en E s paña, los rangos de tens ión abarcan valores
des de 13.8 hasta 132 kV . T ambién s e trata de una actividad regulada, aunque en este
cas o s on las empres as eléctricas las que invierten en esta actividad. C on la liberalización
del mercado, s e ha impedido que las empres as dis tribuidoras s ean las mis mas empres as
que las encargadas de la comercialización (ver Actividades reguladas y actividades en libre
competencia).

• C entros de transformación: transforman los valores de media tens ión de la red de


dis tribución a valores aptos para el cons umo en baja tens ión. E s te cons umo puede s er
extremadamente variable dependiendo de la hora del día, del día de la s emana, época del
año, país , etc. Los centros de transformación s on propiedad de la compañía eléctrica
dis tribuidora, aunque si el cliente s e conecta en media tens ión, dicho centro de
transformación s uele s er de s u propiedad. Los valores de s alida de estos centros s uelen
s er de 400/230 V .

La neces idad de generar y enviar la energía eléctrica a través de una red eléctrica lleva as ociado
que parte de es a energía s e pierda en el proces o. E n el cas o de las líneas de trans porte y
dis tribución, la cantidad de energía eléctrica que s e pierde depende de múltiples factores como
s on s u extens ión, ubicación de la generación y de la demanda, operación de la red eléctrica,
caracterís ticas técnicas de los equipos, etc. Aunque cada s is tema eléctrico es diferente, en los
s is temas eléctricos de los país es des arrollados las pérdidas s e deben fundamentalmente a
razones técnicas y repres entan aproximadamente un 7-9% del total de la energía demandada. A
es te nivel de pérdidas hay que s umarle otro valor de pérdidas del entorno del 45%, mínimo, en las
centrales generadoras. E s ta cantidad de energía que s e pierde tiene un impacto económico y
medioambiental elevado, ya que es neces ario producir es a energía previamente, cons umiendo
otra energía primaria.

C ons iderando as pectos técnicos , es te s istema eléctrico tiene que s er capaz de dar suminis tro de
energía eléctrica a todos los cons umidores, s in que s e produzcan interrupciones en el s uminis tro,
de tal forma que, s i ocurre algún fallo en alguna parte del s is tema, la interrupción del s uminis tro de
energía eléctrica a cada cons umidor dure lo menos pos ible y no afecte al res to del s is tema.
P or otra parte, la tens ión de alimentación que llega a los cons umidores debe manteners e dentro
de los márgenes es tipulados por la legis lación vigente, s ea cual s ea la carga demandada, para
evitar malfuncionamiento o deterioro de los equipos de dichos cons umidores . Dis eñar un s istema
perfecto s egún es tos criterios , s ería prohibitivo des de un punto de vis ta económico, por lo que s e
recurre a una red mallada en la etapa de transporte, que permite alimentar a las s ubestaciones
des de dos o más puntos diferentes de la red, y a redes radiales o en anillo en la etapa de
dis tribución. Otra diferencia entre el trans porte y la dis tribución radica en los niveles de tens ión
empleados .

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P or lo tanto, es neces ario realizar un dis eño que conduzca a pérdidas bajas en cada una de s us
etapas (generación, trans porte, dis tribución y cons umo), pero manteniendo unos niveles máximos
de s eguridad y continuidad de s uminis tro.

E s ta estructura de los s is temas eléctricos , mantenida prácticamente s in alterar des de mediados


del s iglo pas ado, s e encuentra en la actualidad inmers a en un proces o de cambio provocado por
la introducción en un grado creciente de pequeñas centrales de generación ubicadas cerca del
cons umo, la generación dis tribuida, que s e conecta directamente a la red de dis tribución y próxima
al cons umo. As í, año a año y de manera creciente, la producción de electricidad mediante
ins talaciones de generación dis tribuida es tá complementando/s us tituyendo a la producida en las
grandes centrales de generación. S in embargo, con independencia de dónde y por qué medios se
produzca la electricidad, s iempre s erá neces aria una red eléctrica que conecte los centros de
producción con los de cons umo.

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1. La
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1.2. His toria de la electricidad en E s paña


La primera referencia de la aplicación práctica de la electricidad en España data del año 1852, en
el que el farmacéutico Domenech fue capaz de iluminar su botica en Barcelona. En Madrid, ese
mismo año, se hicieron pruebas de iluminación en la plaza de la Armería y en el Congreso de los
Diputados. En 1875 se instala una dinamo en Barcelona que logró iluminar las Ramblas, la
Boquería, el Castillo de Montjuic y parte de los altos de Gracia. A partir del año siguiente, se
puede decir que comienza la electrificación industrial en España, dando pie a la constitución en
Barcelona de la Sociedad Española de Electricidad, sociedad que figura como primera empresa
eléctrica española.

En 1885 se publicó un primer decreto que ordenaba las instalaciones


Con la aparición eléctricas y, tres años más tarde, una Real Orden regula el alumbrado
de la corriente eléctrico de los teatros, prohibiendo expresamente el alumbrado con
eléctrica alterna, gas y autorizando las lámparas de aceite sólo como sistema de
a principios del emergencia. Este acelerado desarrollo de la industria eléctrica dio pie a
la creación de numerosas empresas en las últimas dos décadas del
siglo XX, se siglo XIX. En 1901 se publicó la primera estadística oficial, según la
abrió la cual, el 61% de la potencia instalada era de origen térmico, mientras
posibilidad de que el 39% restante utilizaba la energía hidráulica como fuerza motriz.
No obstante, en esos momentos, la electricidad era generada en forma
transportar de corriente continua y no era posible su transporte a largas distancias,
electricidad a por lo que su desarrollo se veía limitado a emplazamientos de las
gran distancia y, centrales próximas a los centros de consumo, normalmente a industrias
por tanto, de o municipios.
llevar a cabo un Sin embargo, con la aparición de la corriente eléctrica alterna, a
desarrollo a principios del siglo XX, se abrió la posibilidad de transportar electricidad
gran escala de a gran distancia y, por tanto, de llevar a cabo un desarrollo a gran
las centrales escala de las centrales hidroeléctricas. De esta forma, a finales de los
años veinte, la estructura de la generación eléctrica en España había
hidroeléctricas cambiado: se había multiplicado la potencia instalada por 12 hasta
alcanzar aproximadamente 1.500 MW, el 81% de la producción era de
origen hidroeléctrico y existía un exceso de capacidad de producción.

Posteriormente, durante los años de la guerra civil y los primeros años


de la posguerra se produjo un estancamiento de la capacidad de producción. Además, la sequía
de 1944-1945 impidió atender una demanda creciente, con lo que el exceso de capacidad de
producción de la década anterior se convirtió en un importante déficit. A este déficit también
contribuyeron los impresionantes crecimientos de la demanda, de hasta el 27% anual. Para
gestionar esta situación, en 1944 se fundó la empresa Unidad Eléctrica S.A. (UNESA), integrada
por las principales compañías del sector. A UNESA se le encomendó la promoción de las
interconexiones de los distintos sistemas eléctricos regionales y de éstos con las centrales
eléctricas que fueran necesarias para completar la red primaria o de transporte y la creación del
“Dispatching Central”, desde donde se dirigía la explotación conjunta del Sistema Eléctrico
Nacional, decidiendo qué centrales tenían que funcionar en cada momento y qué intercambios de
electricidad entre zonas eran necesarios para asegurar el abastecimiento al conjunto del país.

La aplicación a partir de enero de 1953 de las Tarifas Tope Unificadas incentivó el ritmo de
construcción de nuevas centrales, lo que trajo consigo una progresiva y rápida disminución del
déficit de capacidad de producción. Este nuevo tratamiento de las necesidades del sector eléctrico
contribuyó a una fase de consolidación y crecimiento rápido de la economía española, que a su
vez conllevaron importantes crecimientos de la demanda eléctrica. En estos años se puso

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1. La
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claramente de manifies to la ventaja que s uponía contar con una red interconectada para atender
ins tantáneamente a una demanda creciente, lo que permitió aumentar s us tancialmente la garantía
de s uminis tro a los clientes y aprovechar al máximo la potencia total dis ponible, logrando un
abaratamiento de las tarifas .

E n 1970, la producción de energía eléctrica se había triplicado, alcanzándos e en torno a los


56.500 G W h, con una potencia ins talada de 17.925 MW . La estructura de generación s e modificó
s us tancialmente: la producción hidroeléctrica pasó de s uponer un 84% de la producción en 1960 a
un 50% en 1970. T ambién s e incrementó s us tancialmente la producción con fuel-oil en un
contexto de bajos precios del petróleo. Además, en el año 1968 s e incorporó la primera central
nuclear en Zorita de los C anes (G uadalajara).

E s ta s ituación s e mantuvo has ta que en mayo de 1973 s e empezó a producir una es calada de los
precios del petróleo. Una parte s us tancial del parque térmico puesto en s ervicio en los años
anteriores utilizaba derivados del petróleo como combustible, debido a la estabilidad en precios y
s u facilidad de utilización has ta es os momentos . Dados los largos períodos de cons trucción de las
centrales, la mayor parte de los grupos de generación que entraron en s ervicio en el período
1973-76 eran grupos de fuel-oil, ya que res pondían a proyectos contratados con anterioridad a la
primera cris is del petróleo. T ras la s egunda cris is del petróleo, en 1979, se tomaron medidas para
contener la dependencia del petróleo.

E n línea con es as directrices , en la primera mitad de la década de los años 80 entraron en s ervicio
las centrales de carbón nacional. S imultáneamente, entre 1980 y 1986 entraron en s ervicio cinco
grupos nucleares. T ambién s e empezó a apostar por la cogeneración y las energías renovables . A
finales de los ochenta el s ector eléctrico es pañol s e encontraba en una s ituación con una elevada
capacidad ocios a, como cons ecuencia de la política que fomentó la construcción de centrales de
combustibles alternativos al petróleo, con crecimientos moderados de la demanda y, por otra
parte, un elevado endeudamiento con altos tipos de interés.

Los primeros pas os para estabilizar la s ituación económico-financiera de las empres as del s ector
s e dieron en 1985, en el que s e produjo un intercambio de activos , que permitió aliviar la s ituación
de aquellas empres as más activas en la política de s us titución del petróleo. P ero el mayor logro en
la es tabilización del s ector fue el establecimiento de un nuevo s is tema de cálculo de las tarifas
eléctricas que permitiera dis minuir el des equilibrio financiero. E ste s is tema, conocido como Marco
Legal y E s table, s e empezó a aplicar paulatinamente a partir de 1988 y tenía como parámetros
fundamentales una metodología de amortización y retribución de las invers iones , una retribución
de los costes de producción y dis tribución en bas e a valores es tándares , un s istema de
compens aciones entre los agentes y una corrección por des viaciones al finalizar el año.

P os teriormente, en 1996, s e aprobó la Directiva europea s obre normas comunes para el mercado
interior de la electricidad (ver Normativa bás ica comunitaria y el marco normativo es pañol), con
unos objetivos claros y unos criterios mínimos de liberalización e introducción de la competencia
en el S istema E léctrico. La mayoría de los país es comunitarios deberían adaptar s us legis laciones
eléctricas al nuevo esquema con anterioridad al 19 de febrero de 1999. E s paña fue uno de los
primeros país es en adoptar los criterios emanados de esta Directiva, de forma que el 1 de enero
de 1998 entró en vigor la Ley 54/1997 1 del S ector E léctrico (ver Normativa bás ica comunitaria y el
marco normativo es pañol), que introdujo los cambios normativos más importantes de la his toria
del s ector en E s paña. E s ta ley es tá ya derogada por la nueva Ley del S ector E léctrico, Ley
24/2013 2.

1
V er Ley 54/1997 .
2
V er Ley 24/2013

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1. La
electricidad en
E s paña

E n el período 1996-2001, la demanda de electricidad s e incrementó en más de un 30%, muy por


encima de las previs iones . E s te hecho fue acompañado de un incremento aún mayor de la
demanda punta (44%), que es la variable fundamental de cara a determinar las neces idades de
infraes tructuras eléctricas , tanto de generación como de trans porte y distribución. E n es te mis mo
período, los precios medios de la electricidad s e redujeron un 17% en términos corrientes, lo que
equivale, teniendo en cuenta la inflación, a una dis minución del 30% en términos reales . E l s ector
eléctrico, en s u conjunto, s e vio con importantes dificultades para atender puntualmente es te
crecimiento no previs to, debido a los plazos de des arrollo que requieren todas es tas
infraes tructuras (varios años en el mejor de los cas os ), en un entorno de creciente incertidumbre,
debido a la liberalización del s ector y a la aus encia de un s is tema regulatorio predecible. A es o,
había que s umarle una importante s ens ibilidad al precio de la electricidad y s in incentivos
encaminados a una mejor gestión de la curva de carga.

A partir de aquí, el s iglo XX I s e ha vis to abocado a hacer frente a numeros os retos . E l s is tema de
producción de energía eléctrica s e encuentra inmers o en un proces o de transformación en su
configuración, las fuentes de energía primaria que incluyen las renovables , las tecnologías a
utilizar y los requis itos medioambientales (compromis o 20-20-20) (ver C ambio climático a futuro y
el s ector eléctrico). T ambién, des de una concepción tradicional en la que grandes centros de
generación abas tecían a los lugares de cons umo por medio de redes de trans porte y distribución
de gran capacidad y dis tancia, s e está evolucionando hacia lo que s e ha denominado “G eneración
Dis tribuida” de energía eléctrica. E n esta nueva concepción, los puntos de generación y cons umo
s e encuentran más próximos , y las pérdidas de trasporte y dis tribución pueden dis minuir
s ignificativamente. E n es te contexto, cobra mayor importancia la adecuada integración de las
fuentes de generación renovables (con s u carácter intermitente y no ges tionable) (ver E nergías
renovables : tecnología, economía, evolución e integración en el s istema eléctrico) y el concepto
de eficiencia energética (ver E ficiencia energética y s u potencial). E n ambos cas os, tanto des de
un punto de vis ta técnico como económico. Adicionalmente, s urgen otros conceptos como
microrredes, vehículos eléctricos , tecnologías de almacenamiento, líneas de trans porte de
corriente continua (HV DC ), contadores inteligentes , redes inteligentes , gestión activa de la
demanda, autocons umo, etc. que s e van poniendo en marcha poco a poco.

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2. Normativa

2. Normativa
2.1. Normativa bás ica comunitaria
La energía en los tratados de la Unión Europea. A pesar de que la energía no estaba incluida
en el Tratado de la UE, se vio la necesidad de coordinar acciones a nivel europeo para resolver
los problemas comunes a los que se enfrentaba Europa en cuanto al cambio climático y a la
energía.

A partir de ese momento, la energía estuvo presente en dos de los tres Tratados Constitutivos de
lo que hoy es la Unión Europea (UE). En 1951 se firmó el Tratado CECA (Comunidad Europea del
Carbón y del Acero) que expiró en 2002. Posteriormente, en 1957 se firmaron el Tratado de Roma
con objetivos políticos y que ha tenido s uces ivas reformas hasta el actual T ratado de Lis boa 3, y el
T ratado E UR AT OM de la C omunidad de la E nergía Atómica 4. E n enero de 2007, la C omis ión
E uropea pres entó una comunicación denominada “Una política energética para E uropa 5” en la que
s e es tablecían las líneas generales de la política energética comunitaria de forma que s e
garantizas e el acces o a una energía s os tenible, s egura y competitiva (ver Ins os tenibilidad del
s is tema energético y vías de s olución).

E l objetivo general establecido era que s e negociara a nivel mundial el cons eguir una reducción de
gas es de efecto invernadero en los país es des arrollados del 30% en 2020, comprometiéndos e en
cualquier cas o, a que en la UE dicha reducción s ea como mínimo del 20%. La comunicación
incluía un P lan de Acción con diez medidas concretas as í como dos objetivos adicionales para
2020: lograr que el 20% del cons umo de energía final s e hiciera con energías renovables y que se
lograra una mejora de la eficiencia energética del 20% (s on los denominados “objetivos del 20-20-
20”).

La propues ta de la C omis ión E uropea fue aprobada por el C ons ejo E uropeo en marzo de 2007 y
ha dado lugar a una s erie de iniciativas regulatorias encaminadas a lograr los objetivos
propues tos.

Además , con bas e a estos objetivos , aparece en octubre de 2014 el Marco s obre C lima y E nergía
para 2030, con unos objetivos principales iguales que para 2020 pero con valores más
ambicios os .

S in embargo, hay que des tacar que, aparte de los temas es pecíficos s obre el carbón y la energía
nuclear recogidos en estos T ratados , la “política energética” en términos generales no ha es tado
nunca incluida en los ámbitos de competencia comunitaria, s alvo en el T ratado de Lis boa que ha
entró en vigor en enero de 2010. E n cons ecuencia, la política energética ha es tado s iempre dentro
del ámbito de competencia de los E stados miembro.

No obs tante, la UE ha venido actuando en materia energética de forma indirecta, a través de otras
políticas en las que s í tiene competencias, principalmente a través de las políticas de mercado
común y de las medioambientales .

C omo s e ha indicado antes , la s ituación ha cambiado con la entrada en vigor del T ratado de
Lis boa, que es tablece competencias comunitarias en el cas o de dificultades graves en el

3
V er T ratado de Lis boa.
4
V er T ratado E UR AT OM de la C omunidad de E nergía Atómica.
5
V er Una política energética para E uropa.

11
E lectricidad
2. Normativa

s uminis tro energético, as í como a la hora de definir una política energética bas ada en la
s olidaridad entre E s tados miembro y cubriendo as pectos tales como:

• G arantizar el funcionamiento del mercado de la energía.

• G arantizar la s eguridad del abas tecimiento energético en la Unión.

• F omentar la eficiencia energética y el ahorro energético, as í como el des arrollo de


energías nuevas y renovables .

• F omentar la interconexión de las redes energéticas .

P ara 2030, los objetivos fundamentales que s e pers iguen en el marco de C lima y E nergía s on:

• Objetivo vinculante de reducción de las emis iones de la UE , al menos el 40% en relación a


niveles de 1990.

• Objetivo vinculante a la es cala europea para impuls ar que las energías renovables
repres enten al menos el 27% del cons umo de energía final de la UE en 2030.

• Objetivo de ahorro energético indicativo del 27%.

La normativa energética comunitaria. Se hace a continuación una breve descripción de la


principal normativa europea que tiene repercusiones en el funcionamiento del sector energético,
agrupándola por grandes temas generales.

Normativa s obre los mercados interiores de gas y electricidad 6: s e bas a en el principio de la libre
circulación de mercancías y de la constitución del mercado único. S u objetivo principal es
cons tituir un mercado único comunitario para el gas y la electricidad de forma que cualquier
cons umidor de cualquier país comunitario pueda contratar el suminis tro con cualquier
s uminis trador europeo. E l objetivo final es conseguir una mejora de la eficiencia con lo que en
definitiva mejorará la competitividad de las empres as europeas (ver E l proces o de liberalización de
los s ectores energéticos ).

P ara cons eguirlo, en el cas o de la electricidad es tablece la libertad de ins talación en la actividad
de generación. E l funcionamiento de es ta actividad s e hace en bas e a un mercado mayoris ta que
s e rige por el principio de la oferta (generadores) y la demanda (comercializadores y
cons umidores finales ) (ver E l proces o de liberalización de los s ectores energéticos ). E l
cons umidor final puede elegir libremente entre las ofertas que les ofrecen los comercializadores
(ver F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad). La actividad de redes,
queda regulada y s ometida al principio de libre acces o de terceros a la red (ver Actividades
reguladas en el s ector eléctrico). E n el cas o del gas , la s ituación es s emejante con las s alvedades
propias de cada tipo de energía: cas i no hay actividad de generación (producción de gas natural),
pero exis ten ins talaciones de importación de G NL y pos ibilidad de almacenamiento (ver La cadena
de valor del gas natural).

Las primeras directivas s obre electricidad (1996) y gas (1998) propiciaron el cambio des de el
modelo regulado que exis tía has ta entonces, al de mercado. C omo el cambio era s ignificativo, en
aquel momento s ólo s e planteó una liberalización parcial del mercado de los clientes finales .

6
V er Información s obre mercados interiores de gas y electricidad.

12
E lectricidad
2. Normativa

P ronto s e vio que la liberalización s e había quedado corta, ya que, en el proces o de tras pos ición
de las directivas a normativa nacional, la mayor parte de los país es iban más allá de lo que la
propia directiva es tablecía. P or ello, el C ons ejo E uropeo de Lis boa de marzo de 2000 acordó
avanzar en los proces os de liberalización de los mercados energéticos y, en marzo de 2001, la
C omis ión E uropea presentó dos propues tas de directiva que modificaban s ustancialmente las
anteriores.

T ambién pres entó un reglamento de acces o a las interconexiones para el comercio transfronterizo
de electricidad, ya que se había vis to s u neces idad s i s e querían aumentar los intercambios entre
los país es . E l conjunto legis lativo s e aprobó en 2003 (Directiva 2003/54/C E 7 relativa a la
electricidad y Directiva 2003/55/C E 8 relativa al gas ).

C ada una de las Directivas tiene como objetivo el es tablecimiento de normas comunes en materia
de generación, almacenamiento, trans porte, dis tribución y s uminis tro de electricidad y gas natural
res pectivamente, definiendo también las obligaciones de s ervicio univers al, los derechos de los
cons umidores y las obligaciones en materia de competencia. Las normas pers iguen la
cons ecución de unos mercados de electricidad y gas competitivos , s eguros y s ostenibles
medioambientalmente.

No obs tante, el impuls o dado por esta nueva normativa no fue s uficiente para cons eguir el objetivo
final de constituir un “mercado único” europeo para los s ectores del gas y electricidad. E n un
informe de s eguimiento de la C omis ión E uropea de 2007 s e s eñalaban los problemas principales :
poca integración de los mercados nacionales , alta concentración que impide la competencia,
integración vertical entre las actividades de redes y las liberalizadas , pocas competencias de los
reguladores nacionales y neces idad de aumentar la protección a los cons umidores (ver
C ompetencia en el mercado eléctrico).

P ara res olver estos problemas , en s eptiembre de 2007, la C omis ión pres entó unas nuevas
propues tas, conocidas como el T ercer P aquete legis lativo, que tras la tramitación fueron
publicadas en agosto de 2009 y entraron en vigor en 2011, la Directiva 2009/72/C E 9 para el s ector
eléctrico y Directiva la 2009/73/C E 10 para el s ector gas ista.

En noviembre de 2012, el Council of European Energy Regulators (CEER) publicó un informe en


el que se analizaba el grado de implementación en los Estados miembro de los derechos de los
consumidores domésticos recogidos en este Tercer Paquete legislativo (Tabla 2-1). En él, se
examina el grado en el que las disposiciones sobre clientes y mercado minorista del Tercer
Paquete han sido implementadas hasta enero de 2012 y cómo han sido interpretadas por los
diferentes Estados miembro.

Tabla 2-1. Conclusiones del informe del CEER


Principales Servicio Universal (derecho a ser
suministrado) Trasposición adecuada
conclusiones del Switching (en 3 semanas y factura No se cumplen todas las exigencias
informe de la CEER. definitiva en 6 semanas) jurídicas y , en la práctica, existen
retrasos
Fuente: CEER y Información a clientes Bien informados pero existe margen
elaboración de mejora

7
Ver Directiva 2003/54/CE.
8
V er Directiva 2003/55/C E .
9 V er Directiva 2009/72/C E .
10 V er Directiva la 2009/73/C E .

13
E lectricidad
2. Normativa

propia. Gestión de reclamaciones (a resolver en 3 Implementación adecuada a sistemas


meses) de resolución alternativa de conflictos
(ADR), pero retrasos en el plazo legal
de resolución
Clientes vulnerables Buen nivel de protección de los
clientes vulnerables, si bien el
concepto difiere en los diferentes
EEMM
Supervivencia de los precios regulados Todavía subsisten en más de la mitad
de los EEMM. Existen planes para
eliminarlos en el sector eléctrico, pero
no en el gasista
Normativa sobre seguridad de suministro: por su importancia vital para el desarrollo
económico, garantizar el suministro tanto de electricidad como de gas, es uno de los objetivos
principales de la política de cualquier país. También la UE ha elaborado normativa específica
para garantizar este suministro (ver Seguridad de suministro).

Más concretamente, la UE tiene una alta dependencia de gas, teniendo que importarlo de
fuentes, o a través de instalaciones situadas en países inestables políticamente, por lo que son
relativamente frecuentes los problemas de abastecimiento. Por este motivo, en 2004 se
publicó una directiva 11 en la que s e es tablecían medidas que los E s tados miembro debían
adoptar para prevenir las cons ecuencia de una interrupción en el abas tecimiento de gas . S in
embargo, dados los frecuentes incidentes en el abas tecimiento de gas y de s us importantes
cons ecuencias , en octubre de 2010 s e pres entó un reglamento 12 que s us tituía a la directiva
anterior y que pretendía dar un enfoque comunitario, en lugar de nacional, a las actuaciones
en cas o de problemas en el abas tecimiento de gas, permitiendo, por parte de los E s tados
miembro, la aplicación de medidas excepcionales .

T ambién exis te normativa s emejante para la electricidad, aunque en este cas o los problemas
no vienen de fuera s ino que s uelen es tar producidos por una falta de adecuación o de
explotación de las ins talaciones exis tentes en la UE . As í, tras una s erie de incidentes en los
s is temas eléctricos de varios E s tados miembro, s e pres entó una P ropues ta de Directiva
dirigida a garantizar el suminis tro de electricidad que fue finalmente publicada 13 en enero de
2006. E n ella s e es tablecen normas de actuación en cuatro campos: de operación del s is tema
(corto plazo), equilibrio oferta-demanda (largo plazo), invers iones en red e información.

Normativa para la promoción de las energías renovables (ver Mecanis mos de apoyo a las
energías renovables ): debido a s u importante contribución para conseguir otros objetivos
comunitarios , el des arrollo de las energías renovables es una política prioritaria dentro de la
UE . As í, contribuyen a lograr los objetivos medioambientales s obre reducción de emis iones ,
tanto contaminantes como de gas es de efecto invernadero. T ambién contribuyen a reducir la
dependencia energética y, en cons ecuencia, a as egurar el s uminis tro. F inalmente, dado que
s e trata de un s ector en des arrollo y que cuenta con empres as europeas líderes mundiales en
el s ector, contribuye también al des arrollo económico y a la creación de empleo (ver Objetivos
de producción con fuentes renovables en la UE y en E s paña).

La primera directiva s e publicó 14 en 2001 y s u objetivo era la promoción de la electricidad


producida por fuentes renovables . E n ella s e es tablecía como objetivo que en 2010 el 21% de
la electricidad final consumida en la UE en s u conjunto, proviniera de fuentes renovables . S ólo
es tablecía objetivos orientativos para cada país .

11
V er Directiva 2004/67/C E .
12
V er R eglamento UE 994/2010.
13
V er Directiva 2006/32/C E .
14
V er Directiva 2001/77/C E .

14
E lectricidad
2. Normativa

E n la s egunda directiva, que s us tituye a la anterior y fue publicada 15 en 2009, s e pretende


lograr el objetivo general de que, en el año 2020, el 20% de la energía final cons umida
provenga de fuentes renovables junto con el es pecífico de que el 10% del cons umo de
combustible para el trans porte provenga as imis mo de fuentes renovables . E l objetivo
comunitario del 20% s e reparte en objetivos nacionales obligatorios , con objetivos intermedios
indicativos y con cierta flexibilidad para el cumplimiento de los objetivos nacionales (T abla 2-2).

Objetivos para 2020 de


consumo de energías
renovables
Malta 10%
Luxemburgo 11%
Bélgica 13%
República Checa 13%
Chipre 13%
Hungría 13%
Holanda 14%
Eslovaquia 14%
Polonia 15%
T abla 2-2. Objetivos nacionales
Reino Unido 15%
obligatorios de cons umo de energía Bulgaria 16%
procedente de fuentes renovables para Irlanda 16%
2020. Italia 17%
Alemania 18%
Fuente: Directiva 2009/28/CE Grecia 18%
España 20%
Francia 23%
Lituania 23%
Rumanía 24%
Estonia 25%
Eslovenia 25%
Dinamarca 30%
Portugal 31%
Austria 34%
Finlandia 38%
Letonia 40%
Suecia 49%

Todos los países han dado ya los primeros pasos para llevar a la práctica lo establecido en la
directiva, prueba de ello son los Planes de Acción Nacionales para el desarrollo de las
Energías Renovables (PANER) 16 que han tenido que elaborar e implementar cada uno de los
Estados miembro.
Según el Plan de Energías Renovables (PER) 2011-2020 17 publicado por el Instituto para la
Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), España va a superar el objetivo fijado por la
Comisión Europea alcanzando en 2020 el 20,8% del consumo de energía proveniente de
fuentes renovables. El último seguimiento que se ha producido de la situación de cumplimiento
de estos objetivos por parte de los Estados miembro se ha realizado en 2016 por parte de la
Comisión Europea, realizándose la siguiente en el año 2018. En el caso de que las memorias

15
Ver Directiva 2009/28/CE.
16
V er P lanes de Acción Nacionales para el des arrollo de las E nergías R enovables .
17
V er P lan E nergías R enovables 2011-2020.

15
E lectricidad
2. Normativa

de s eguimiento anual reflejen un des arrollo de las energías renovables inferiores a la


trayectoria indicativa previs ta, s e procederá a la revis ión parcial de P lan.

Normativa s obre comercio de derechos de emis ión de gas es de efecto invernadero 18: tras la
aprobación del P rotocolo de K ioto, la UE decidió as umir el papel de liderazgo mundial para
luchar contra el cambio climático y adoptó divers as iniciativas s obre este tema.

Una de las más novedos as fue poner en marcha un mercado


comunitario de derechos de emis ión de gases de efecto
Des de la 13 ª invernadero, uno de los mecanis mos flexibles contemplados
C onferencia de las en el P rotocolo. E l objetivo final era que dicho comercio
es tuviera plenamente operativo durante el período
P artes (C OP 13) de la contemplado en el P rotocolo, 2008-2012, de forma que
C onvención Marco de pudiera integrars e en el comercio que s e podría organizar a
las Naciones Unidas nivel mundial (ver El esquema cap and trade en Europa y los
incentivos a reducir emisiones).
s obre el C ambio
C limático, s e ha Para ello, en el año 2003 se publicó la primera directiva 19 que
es tado trabajando establecía el sistema de comercio de derechos. Establecía dos
para alcanzar un períodos, el periodo 2005-2007, que puede considerarse de
aprendizaje, y el 2008-2012, de vigencia del Protocolo de
acuerdo internacional Kioto y que está operativo en la actualidad. Su implantación, a
que fijara un marco pesar de los problemas surgidos, ha permitido, entre otras
que s ustituyera al cosas, que mediante procedimientos de mercado se
P rotocolo de K ioto establezca un precio para el CO2 que es incorporado a los
costes de producción, fomentando así, la utilización de las
instalaciones menos emisoras que aumentan su
competitividad. También se traslada el coste del CO2 al precio
final del producto, transmitiendo al consumidor una adecuada
señal medioambiental.

Posteriormente, en 2009 se aprobó una nueva Directiva 20 que afecta al período 2013-2020 y
que tiene en cuenta el objetivo general de reducción de emisiones del 20%. Esta directiva
introdujo importantes modificaciones respecto a la anterior, entre las que se encuentran que la
asignación de derechos a las instalaciones incluidas en el comercio se hace a nivel
comunitario y no por país y que se asignan mediante un sistema preferentemente de subastas
en lugar de hacerlo de forma gratuita.

La vigencia del Protocolo de Kioto finalizó en 2012, por lo que desde la 13ª Conferencia de las
Partes (COP 13) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático,
celebrada en Bali en 2007, se ha estado trabajando para alcanzar un acuerdo internacional
que fijara un marco que sustituyera al Protocolo de Kioto. Utilizando la hoja de ruta fijada en
Bali, se negoció intensamente durante dos años con el objetivo de alcanzar en diciembre de
2009, en la decimoquinta (COP 15) celebrada en Copenhague, un ambicioso acuerdo
internacional de lucha contra el cambio climático. A pesar de las altísimas expectativas
generadas, el documento que surgió de la reunión de alto nivel no recibió una valoración muy
positiva, ya que no permitió alcanzar un acuerdo legalmente vinculante de reducción de
emisiones para después de los objetivos establecidos para 2012 (ver El cambio climático y los
acuerdos internacionales).

18
Ver derechos de gases de efecto invernadero.
19
Ver Directiva 2003/87/CE.
20
Ver Directiva 2009/28/CE.

16
E lectricidad
2. Normativa

Has ta el momento, la Unión E uropea lidera la lucha contra el cambio climático. Ha adoptado
un objetivo vinculante de reducción del 20% de las emis iones en el horizonte 2020 y de al
menos , el 40% en 2030 y otros no vinculantes para reducirlas un 80-95% en 2050. P ara logar
es te último objetivo, la Unión E uropea ha presentado una Hoja de R uta de la E nergía para
2050, en la que s e analiza los cambios que habría que hacer en el s ector energético.

Normativa s obre eficiencia energética: mejorar la eficiencia energética contribuye de forma


pos itiva a todos los objetivos energéticos de la UE : dis minuye la dependencia energética,
reduce las emis iones de todo tipo y mejora la competitividad de las empres as cons umidoras
(ver E ficiencia energética y s u potencial).

P or este motivo, s on numeros as las iniciativas regulatorias dirigidas a mejorar la eficiencia


energética. S e pueden dividir en dos grandes bloques: las dirigidas a los equipos
cons umidores y las des tinadas a que el propio mercado energético actúe de manera más
eficiente.

E ntre las primeras s e pueden des tacar las s iguientes directivas :

• E codis eño 21 del año 2009 y que s ustituye a la de 2005, que tiene como objetivo
armonizar a es cala comunitaria los requis itos de dis eño ecológico para todos los
productos relacionados con la energía, estableciendo criterios técnicos para que el
funcionamiento de ciertos equipos cons umidores s ea eficiente des de el punto de vis ta
energético. Una cons ecuencia de es ta directiva es , por ejemplo, la prohibición de
fabricar lámparas incandes centes a partir de 2012.

• E tiquetado energético 22, por la que s e obliga a informar del grado de eficiencia
energética de ciertos productos cons umidores de us o domés tico con el fin de que el
comprador tenga más información a la hora de hacer la elección.

• E ficiencia en edificios , del año 2002, actualizada 23 en 2010, en la que se es tablecen


criterios mínimos que deben cumplir para reducir s u cons umo de
calefacción/refrigeración o iluminación.

E ntre las s egundas s e puede des tacar:

• P romoción de cogeneración 24, del año 2004, cuyo objetivo es promover ins talaciones
de producción combinada de calor y electricidad, que tiene un mayor rendimiento
energético que s u producción s eparada.

• E ficiencia 25 en el us o final y promoción de los s ervicios energéticos , del año 2006, en la


que s e crean condiciones para que actúen las empres as de s ervicios energéticos.

A finales de 2012, fue aprobada la Directiva de E ficiencia E nergética 26, que pretende impuls ar
la eficiencia energética a nivel global como una herramienta para cons eguir una energía
s egura, s ostenible y competitiva. La Directiva, que s us tituye a las dos anteriores , propone

21
V er Directiva 2009/125/C E .
22
V er Directiva 2010/30/UE .
23
V er Directiva 2010/31/UE .
24
V er Directiva 2004/8/C E .
25
V er Directiva 2006/32/C E .
26
V er Directiva 2012/27/UE .

17
E lectricidad
2. Normativa

medidas a acometer en toda la cadena de valor energética: des de la producción y distribución


has ta el cons umo.

E ntre las medidas para fomentar la eficiencia en la producción, la vigente directiva propone
hacer una evaluación de las pos ibilidades de des arrollo de redes de calor y frío urbanos y de
cogeneración de alta eficiencia (producción s imultánea de calor y frío) incluyendo un anális is
cos te/beneficio. E sto va acompañado de una prioridad de acces o a la red de las plantas de
cogeneración de alta eficiencia (particularmente la microcogeneración y las de pequeña
es cala) al igual que s ucede con las energías renovables .

P or otra parte, s e potencia la eficiencia en el trans porte y dis tribución de energía, identificando
medidas e invers iones concretas que incrementen la eficiencia en las redes , y as egurando la
s upres ión de incentivos en las tarifas que menoscaben dicha eficiencia.

R es pecto a la ges tión de la demanda, la


Adminis tración central adopta un rol ejemplarizante
E ntre las medidas para
– que debería promovers e a nivel regional y local - fomentar la eficiencia en la
en la ges tión energética en la edificación. P or otro producción, la directiva
lado, los E stados miembro deben es tablecer un propone hacer una evaluación
s is tema de obligaciones para que
dis tribuidores /comercializadores de energía
de las pos ibilidades de
cons igan un ahorro acumulado a 2020 equivalente des arrollo de redes de calor y
al 1,5% de las ventas de energía a clientes finales , frío urbanos y de
que s e permite escalonar en dis tintos tramos . cogeneración de alta
Además , en el Marco de C lima y E nergía aprobado en octubre de 2014, s e establece como
objetivo para 2030 una mejora de la eficiencia energética en, al menos , un 27%.
Normativa s obre emis iones contaminantes 27: la limitación de las emis iones contaminantes
entra dentro de las competencias medioambientales de la UE . E l objetivo principal es ,
lógicamente, s u máxima reducción. E xis te mucha normativa relacionada con este tema entre
la que s e pueden des tacar las s iguientes directivas que han tenido gran influencia en el s ector
energético:

• P ara la prevención y el control integrado de la contaminación (1996) 28, en la que s e


promueve la utilización de las mejores técnicas dis ponibles en el mercado y s e tomen
las medidas adecuadas para reducir la contaminación producida por las ins talaciones
contaminantes .

• P ara la limitación de las emis iones de grandes ins talaciones de combustión (2001) 29,
en la que s e establecen valores límites a las dis tintas emis iones contaminantes para
cada ins talación.

• De techos nacionales (2001) 30, en la que s e es tablecen valores máximos anuales de


emis ión a nivel nacional.

E n 2010 fue aprobada la Directiva de E mis iones Indus triales 31, que define las obligaciones que
deben res petar las actividades indus triales con mayor potencial de contaminación. E s ta

27
V er más información s obre emis iones contaminantes.
28
V er Directiva 1996/61/C E .
29
V er Directiva 2001/80/C E .
30
V er Directiva 2001/81/C E .
31
V er Directiva 2010/75/UE .

18
E lectricidad
2. Normativa

Directiva aglutina y amplia las 3 directivas arriba mencionadas . S u objetivo cons is te en evitar o
minimizar las emis iones contaminantes en la atmósfera, el agua y el s uelo, as í como los
res iduos procedentes de las ins talaciones indus triales y agrícolas con el fin de alcanzar un alto
nivel de protección del medio ambiente y la s alud. La Directiva es tablece unos requis itos y
obligaciones para las indus trias con emis iones :

• Adoptar medidas de prevención de la contaminación.

• Aplicar las mejores técnicas dis ponibles .

• No producir ninguna contaminación importante.

• Limitar, reciclar o eliminar los res iduos de la forma menos contaminante.

• Maximizar la eficiencia energética.

• P revenir accidentes y limitar s u impacto.

• Llevar a cabo ins pecciones medioambientales periódicas de las ins talaciones .

Paquete de energía limpia para todos los europeos. La Comisión Europea ha presentado a
finales de noviembre de 2016 una propuesta de medidas bajo el nombre de “Paquete de
Energía Limpia para todos los europeos” orientadas a alcanzar los objetivos climáticos
europeos a 2030, manteniendo la seguridad de suministro y la competitividad de los precios de
la energía.

El paquete legislativo presentado persigue la reducción de al menos un 40% las emisiones


contaminantes respecto a 1990, elevar la cuota de renovables por encima del 27% para 2030
y la mejora de al menos un 27% en eficiencia energética para el mismo horizonte, sin
considerar un reparto específico por países, además de seguir estableciendo medidas para el
desarrollo del mercado interior europeo de la energía. Estos objetivos se encuadran en los
compromisos de la UE de acuerdo con el Acuerdo de París recientemente ratificado.

Se trata, además, de una serie de iniciativas que pretenden que el consumidor adquiera el rol
de pieza clave en los mercados energéticos. De este modo, se les permitirá cambiar más
fácilmente su suministrador, el acceso a herramientas de comparación de precios, así como a
la posibilidad de producir y vender su propia electricidad, siempre y cuando cumplan una serie
de requisitos previamente establecidos y no se produzcan subvenciones cruzadas.

En términos globales, esta estrategia está cimentada sobre el diseño e implementación de un


sistema energético europeo más sostenible, seguro y competitivo que permita compatibilizar el
cumplimiento con los objetivos de cambio climático establecidos en el Acuerdo de París con la
entrega de energía al consumidor a precios asequibles

Las propuestas prevén cambios en materia de diseño de mercado y autoconsumo, para


facilitar una integración eficiente de las energías renovables sin perjuicio de la seguridad del
sistema, a la vez que potencia a los consumidores como agentes activos y vectores
fundamentales de la transición energética.

Las medidas más destacadas que supondrán un impacto directo en ambos mercados se
pueden encuadrar en 4 bloques fundamentales:

19
E lectricidad
2. Normativa

• Autocons umo y clientes – des taca la s upres ión de las tarifas reguladas (podrán s eguir
utilizándos e para los clientes vulnerables durante un periodo trans itorio de 5 años) y el
pago por parte de los cons umidores , tanto por la energía cons umida como por la
inyectada, excluyéndos e as í el balance neto, mecanis mo por el cual al cliente s e le
permitiría us ar la red eléctrica de forma gratuita.

• Mecanis mos de capacidad – s e permitirán tanto para la generación nueva o exis tente,
s iempre y cuando s ean aprobados por la DG de C ompetencia. S in embargo, quedará
excluida de es te mecanis mo la generación nueva que emita una cantidad s uperior a 550
gC O 2/KW h. Los país es , que a la entrada en vigor de esta norma tengan mecanis mos de
capacidad ya es tablecidos , deberán adaptarlos .

• R es ervas es tratégicas – se permitirán, pero solo para la capacidad existente y deberán


despacharse al valor de la energía no suministrada. Este mecanismo no será permitido
para las nuevas centrales de generación.

• DSO – Los operadores del sistema de distribución (DSO) jugarán un rol más activo a la
hora de la contratación de servicios, tanto de generación distribuida como de flexibilidad
de demanda. Además, se le permitirá el desarrollo de almacenamiento en ciertas
situaciones en las que la correcta operación del sistema lo requiera.

El paquete legislativo pretende que la Unión Europea se abastezca con energía limpia, para
ello se requerirán medidas relativas al marco de energías renovables, la utilización de
sistemas limpios de frío y calefacción, la descarbonización del transporte y el autoconsumo
eficiente.

Las renovables desempeñarán un papel clave en la transición hacia un sistema energético


más limpio y libre de emisiones, concretamente, la UE se ha comprometido a alcanzar un 27%
del consumo final de energía, procedente de renovables, para 2030. Además, el esfuerzo
realizado a nivel global para conseguir una reducción de las emisiones de efecto invernadero
en un 40% se plantea como un objetivo ambicioso.

El crecimiento en renovables tiene como una de las palancas fundamentales la utilización de


todas aquellas tecnologías encaminadas a la reducción de los niveles de emisiones. Esta
norma permitirá el desarrollo de Marcos de apoyo a las renovables siempre y cuando tengan
un carácter competitivo y no distorsionen el mercado.

El empleo de renovables avanzadas junto con la descarbonización de la economía supondría


un ahorro de 6,8 billones de euros a lo largo del período 2014-2035 con un potencial de
crecimiento, especialmente más allá de las fronteras europeas.

Las propuestas de un nuevo diseño del mercado de electricidad, junto con una nueva directiva
de renovables, fijará un marco regulatorio enfocado a la competencia de las diferentes
tecnologías, así como a favorecer las inversiones, pero sin poner en peligro los objetivos
fijados tanto de cambio climático como de eficiencia energética.

Entre las cuestiones más relevantes se contempla la libertad de cierre (o hibernación) de la


generación, la introducción de mecanismos de capacidad, la eliminación de la prioridad de
despacho, generalizando la responsabilidad de balance (a excepción de las renovables y la
cogeneración menor de 500 kW).

20
E lectricidad
2. Normativa

Además , la eficiencia energética s irve como palanca para el cumplimiento de las obligaciones
es tablecidas pues refuerza los objetivos de ahorro energético elevando la meta de mejora de
eficiencia has ta el 30%, mejorando las herramientas regulatorias y financieras , as í como
medidas en el ámbito de la eficiencia en las infraes tructuras , el trans porte, el ecodis eño.

Las modificaciones s e encuentran fundamentalmente orientadas tanto a la directiva de


eficiencia energética, alineando s us objetivos con aquellos que s e pretenden alcanzar en
2030, como a la renovación de edificios de cara al fortalecimiento a la hora de cumplir con las
directrices establecidas , ya que cons umen el 40% del total de la energía utilizada en la UE .

Un incremento de 23.800 millones de euros para 2030 encaminados a incrementar la


competitividad de la indus tria en materia de eficiencia en s us infraestructuras , un ahorro de 70
millones de euros, gracias a la reducción de las importaciones de combus tibles fós iles en un
12% para 2030, o un gas to en materia de ayudas a pers onas en vulnerables a través de
invers iones en eficiencia energética en viviendas , s on algunos de los principales compromis os
fijados.

Dichas medidas, con el horizonte 2020, tendrán que tramitars e a lo largo de los próximos
mes es por el P arlamento E uropeo y por los gobiernos nacionales para alcanzar un acuerdo.
T ras ello deberán tras ladars e a las regulaciones nacionales .

T ras esta publicación, s e inicia la tramitación legis lativa tanto por el P arlamento E uropeo como
por el C ons ejo (G obiernos nacionales ), proces o que puede durar 2 años has ta s u aprobación
definitiva, a la que s igue la trans pos ición a la legis lación de los E s tados para s u aplicación a
partir de 2020. Aun así, todavía s e requiere una profundización en temas como: el periodo de
medición de contadores inteligentes, eliminación del floor del precio del mercado mayorista o
el papel del ENTSO-E en los mecanismos de capacidad.

21
E lectricidad
2. Normativa

2.2. E l marco normativo español


Desde el inicio del año 1998, el sector eléctrico español ha experimentado una importante
transformación de la mano de las modificaciones regulatorias desarrolladas en nuestro país
tras la aprobación de la Directiva 96/92/CE 32, que tenía como objetivo fundamental dar los
primeros pas os para la creación de un mercado interior de electricidad en la Unión E uropea a
partir de la liberalización de las actividades de generación y comercialización de energía
eléctrica (ver E l proces o de liberalización de los s ectores energéticos).

Mediante la Ley 54/1997 33, de 27 de noviembre, del S ector E léctrico (Ley del S ector E léctrico o
LS E ) s e trans pus o la citada Directiva al ordenamiento jurídico es pañol, modificando de manera
s us tancial el marco regulador vigente has ta es e momento. 34 E l objeto bás ico de es ta ley, como
expresa su preámbulo, es “establecer la regulación del sector eléctrico, con el triple y
tradicional objetivo de garantizar el suministro eléctrico, garantizar la calidad de dicho
suministro y garantizar que se realice al menor coste posible, todo ello sin olvidar la protección
del medio ambiente”. Los principios regulatorios en los que se basa la reforma introducida por
la LSE son: a) la separación entre actividades reguladas (transporte y distribución) y aquellas
que se pueden desarrollar en régimen de libre competencia (generación y comercialización), b)
la progresiva liberalización de la contratación y elección del suministrador de los consumidores
finales, c) la libertad de acceso a las redes de transporte y distribución mediante el pago de
peajes y d) la creación de las figuras del operador del sistema encargado de la gestión técnica
y del operador del mercado encargado de la gestión económica del sistema.

Posteriormente, en el año 2003, con la aprobación de la Directiva 2003/54/CE 35, las


instituciones europeas dieron un nuevo impulso al proceso de liberalización del sector
eléctrico. La Ley 17/2007 36, de 4 de julio, transpuso la citada Directiva a la legislación
española, aunque lo cierto es que una gran parte de estas medidas ya se encontraban
incorporadas con anterioridad. La modificación más relevante de la Ley 17/2007 se refiere a la
eliminación de las tarifas integrales y a la introducción de la actividad de Suministro de Último
Recurso (hoy llamado Suministro de Referencia ver El Suministro de referencia). En Figura 2-1
se muestran los principales desarrollos legislativos, nacionales y comunitarios, que han guiado
la evolución de la regulación del sector eléctrico desde noviembre de 1997.

32
Ver Directiva 96/92/CE.
33
Ver Ley 54/1997.
34
Entre el 1 de enero de 1988 y finales de 1997 el sector estuvo regulado por el llamado "Marco Legal Estable" (MLE). El MLE,
resultado de un acuerdo entre las empresas eléctricas y el Gobierno, suponía la implantación de un nuevo sistema de cálculo de las
tarifas eléctricas, con el objeto de afrontar el problema de sobrecapacidad debido al bajo crecimiento de la demanda tras las crisis del
petróleo, emprender un proceso de sustitución progresiva del petróleo por energía nuclear y carbón y garantizar a las empresas una
retribución suficiente al capital invertido. Bajo el MLE, las tarifas cubrían los llamados “costes estándares” de explotación (i.e., costes
medios normalizados para reflejar una gestión eficiente), la amortización de las inversiones y la retribución del capital invertido. Ver
UNESA (2005), “El Sector Eléctrico a través de UNESA 1944-2004”.
35
Ver Directiva 2003/54/CE.
36
Ver Ley 17/2007.

22
E lectricidad
2. Normativa

F igura 2-1. Legis lación bás ica del s ector eléctrico en E s paña.

Fuente: Elaboración propia.


RD 223/2008
Reglamento sobre RD 947/2015
condiciones Subastas de energías
RD 277/2000 RDL 1/2012
técnicas y Directiva 2009/7/CE renovables
Separación jurídica Paraliza las primas a
de act. garantías de Tercer paquete de medidas
seguridad nuevas instalaciones de
RD 1634/2006 RDL 897/2015
en líneas de AT régimen especial
RD 6/2000 Incremento RD 437/2010 Se regula la figura del
Medidas para la retributivo Se desarrolla la regulación consumidor
intensificación de la Directiva distribución RD 222/2008 vulnerable, el bono
del proceso de titulización RDL 13/2012
competencia en 2003/54/CE Se establece el social y otras
deroga la régimen retributivo Medidas de reducción RD 1048/2013
bienes y servicios RD 3/2006 RD 134/2010 medidas de
Directiva de la act. de de costes en el sistema Metodología de
Modificaciones del Se establece el proced. de protección para los
96/92/CE distrib. de energía eléctrico cálculo de la
mecanismo de resolución de restricciones consumidores
RD 1955/ 2000 eléctrica actividad de
casación de las por garantía de suministro domésticos de
Regulación distribución RD 56/2016
ofertas de venta y energía eléctrica
actividades de Referente a auditorías
adq. de energía RD 325/2008 Ley 15/2012 de RD 900/2015
Directiva transporte, distrib., RD 436/2004 RD 14/2010 RDL 104/2013 energéticas
Se establece la medidas fiscales para Regula el suministro de
96/92/CE comerc., suministro y Marco Se establecen medidas Metodología de
retribución de la la sost. energética energía eléctrica con
procedimientos de retributivo del RD 7/2006 urgentes para la corrección cálculo de la RDL 7/2016
Ley 54/1997 actividad de Arm. del sist. fiscal autoconsumo y de
autorización de régimen Especial Modificaciones a la transp. de energía del déficit tarifario del sector actividad de Regula la financiación
Ley del Sector español producción con
instalaciones Ley 54/1997 eléctrico transporte del bono social
eléctrico eléctrica autoconsumo

1997 1998 2000 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017

RD 2819/1998 RD 1164/2001 RD 842/2002 RDL 5/2005 Ley 17/2007 RD 301/2011 Ley 3/2012 RDL 413/2014
RDL 6/2009 RDL 9/2013 RD 10/2017
Reg. aplicable a se establecen Reglamento Reformas para el Adecuación a la Medidas Creación de la Regula la
Se adoptan medidas Medidas Subida del canon de
transp. y distrib. tarifas de acceso electrotécnico impulso a la normativa europea equivalentes a CNMC actividad de
en el sector energético urgentes para utilización de aguas
a las redes de para baja tensión productividad y de las normas participación ETS producción de
y se aprueba el bono garantizar la continentales
transporte y mejora de la comunes para el RDL 29/2012 energía eléctrica
social estabilidad
RD 2818/1998 distribución contratación mercado interior de Eliminación del a partir de
financiera del
Marco retrib. del pública la electricidad límite de déficit fuentes de
RD 485/2009 sistema eléctrico RD 650/2017
Rég. Especial tarifario en 2012 energía
RD 661/2007 Regula la puesta en en el sistema Subastas de energías
y 2013 renovables,
Marco retrib. del Rég. marcha del SUR eléctrico y en el renovables
cogeneración y
Especial sector financiero
RDL 20/2012 residuos RD 359/2017
RD 1110/2007 Rev. de costes Subastas de energías
RDL 2/2013
Reglamento unificado asociados a renovables
Medidas
de puntos de medida garantía de
urgentes en el RD 897/2017
del sistema eléctrico potencia, retrib.
sistema eléctrico Regula la figura de
fin. de la inv. y
y en el sector consumidor vulnerable
valor reconocido
financiero bono social
de O&M
Legislación nacional
Legislación europea

2012 y 2013 fueron unos años con muchos cambios regulatorios en el sector eléctrico,
mientras que unas medidas perseguían la reducción de costes del sistema (primero las primas
al régimen especial con el Real Decreto-ley 1/2012 37, posteriormente el res to de cos tes del
s is tema en el R eal Decreto-ley 13/2012 38, R eal Decreto-ley 20/2012 39, el R eal Decreto-ley
2/2013 y el R eal Decreto-ley 9/2013), la Ley 15/2012 40 bus ca, mediante medidas fis cales a la
actividad de generación de electricidad, la recaudación de nuevos ingres os para el s is tema.
T odas es tas iniciativas bus caban resolver el grave problema del déficit tarifario del s is tema
eléctrico es pañol (ver E l déficit tarifario: qué es, cons ecuencias y s olución).

E l R eal Decreto-ley 1/2012 s uprime el procedimiento de ins cripción en el regis tro de pre-
as ignación, y por tanto los incentivos económicos para todas las ins talaciones del régimen
es pecial que no es tuvies en ins critas en dicho regis tro. Además , s us pende de forma indefinida
los procedimientos de ins cripción en el R egistro de preas ignación de retribución previs tos en el
R eal Decreto-ley 6/2009 y en el R eal Decreto 1578/2008 (para las ins talaciones de energía
s olar fotovoltaica) y deja s in efecto la celebración de convocatorias de preas ignación de
retribución para los años 2012 y s uces ivos .

37
V er B oletín de E nergía y S ociedad N º 69: R es umen del R eal Decreto Ley 1/2012.
38
V er B oletín de E nergía y S ociedad N º 73: R es umen del R eal Decreto Ley 13/2012.
39
V er B oletín de E nergía y S ociedad N º 77: R es umen del R eal Decreto Ley 20/2012.
40
V er B oletín de E nergía y S ociedad N º 82: R es umen del R eal Decreto Ley 15/2012.

23
E lectricidad
2. Normativa

E l R eal Decreto-ley 13/2012 de marzo de 2012 también es un paquete normativo relevante,


que afecta a la totalidad de las actividades de la cadena energética: generación, trans porte,
dis tribución, comercialización y cons umo, además de modificar algunas res pons abilidades y
as pectos relacionados con el funcionamiento o la retribución de organis mos o agentes como la
C omis ión Nacional de Mercados y C ompetencia (C NMC ), el Ins tituto para la Divers ificación y
el Ahorro de la E nergía (IDAE ) o el Operador del S is tema E léctrico. Impone nuevas medidas
con el objetivo de dis minuir los costes del s istema y la reducción del déficit tarifario a partir de
2013. P ara ello, propone, entre otras acciones , las s iguientes medidas:

• Minoración de la retribución a la dis tribución y al trans porte, que reabre el debate en


cuanto al principio de s eguridad jurídica.

• R educción de un 10%, para el año 2012, tanto el volumen máximo de producción con
carbón nacional por parte de las centrales ads critas a mecanis mo de restricciones por
garantía de s uminis tro como el precio al que s e retribuye dicha producción.

• Definición del auto consumidor como un cons umidor y no como un productor, dando
amparo legal a la reforma que s e está tramitando s obre el autocons umo.

• Dis minución del importe que había de s atisfacers e a las empres as de generación de
electricidad entre otros por el concepto de garantía de potencia.

• De igual forma, s e adoptaron medidas para corregir la retribución de la actividad de


generación en los s istemas eléctricos ins ulares y extrapenins ulares , a través del cos te
que s e reconocía por la adquis ición de combustible y vinculando el pago por garantía
de potencia a la dis ponibilidad real de las plantas .

E n julio de 2012 s e publicó el R eal Decreto-ley 20/2012 por el que se aprueban divers as
medidas para garantizar la es tabilidad pres upues taria y de fomento de la competitividad. Las
medidas aprobadas pivotan s obre dos ejes: la cons olidación fis cal y el impuls o de nuevas
reformas estructurales, entre las cuales des tacan:

• E l es tablecimiento de que los cos tes fijos y variables de las centrales de generación en
régimen ordinario que se produzcan en los s is temas ins ulares y extrapenins ulares que
res ulten de la aplicación de las revis iones establecidas en el R eal Decreto-ley 13/2012
s erán de aplicación a partir del 1 de enero de 2012.

• Adicionalmente a es ta medida s e toman las s iguientes : s e elimina la retribución de los


gastos de naturaleza recurrente incluidos en el cálculo de la garantía de potencia; s e
revis a la tas a para el cálculo de la retribución financiera de la invers ión, que se
corres ponde con el valor de los B onos del E s tado a 10 años más 200 puntos bás icos ,
en lugar de los 300 puntos anteriores; y s e reducen un 10% los valores unitarios de los
cos tes reconocidos de operación y mantenimiento fijos .

• La obligatoriedad de imponer a los peajes de acces o y a las tarifas de último recurs o un


s uplemento territorial que cubrirá la totalidad del s obrecos te provocado por los tributos
autonómicos y que debe s er abonado por los cons umidores ubicados en el ámbito
territorial de la res pectiva C omunidad autónoma.

24
E lectricidad
2. Normativa

• R educción de un 3,15% adicional de la retribución de la actividad de trans porte


res pecto a la es tablecida en el R eal Decreto-ley 13/2012 como cons ecuencia de
cambio de criterio en la retribución a la invers ión.

• La eliminación de la revis ión trimes tral de los peajes de acceso.

E n diciembre de 2012 se aprobó la Ley 15/2012 41 de medidas fis cales para la s os tenibilidad
energética. E sta Ley des taca por la creación de tres nuevos impues tos: el impues to s obre el
valor de la producción de la energía eléctrica (7%), el impues to s obre la producción de
combustible nuclear gastado y res iduos radiactivos res ultantes de la generación de energía
nucleoeléctrica y el impues to s obre el almacenamiento de combus tible nuclear gas tado y
res iduos radiactivos en ins talaciones centralizadas . Adicionalmente, crea un canon por
utilización de las aguas continentales para la producción de energía eléctrica, incrementado
recientemente al 25,5% en el R eal Decreto-ley 10/2017; s e modifican los tipos impos itivos
es tablecidos para el gas natural y el carbón, s uprimiéndos e además las exenciones previs tas
para los productos energéticos utilizados en la producción de energía eléctrica y en la
cogeneración de electricidad y calor útil.

Además , es ta Ley es tablece que los P res upuestos G enerales del E s tado (P G E ) de cada año
des tinarán un importe equivalente a la estimación de la recaudación anual de esta ley a
financiar los costes del S is tema E léctrico, as í como los ingres os estimados por la s ubas ta de
derechos de emisiones de CO2 (con un máximo de 500 M€).

Por último, modifica la Ley 54/1997 del Sector Eléctrico para excluir del régimen primado a la
electricidad generada a partir de combustibles fósiles en instalaciones renovables. (Tabla 2-3).

M€/Año

1. Impuesto del 6% 42 a toda la generación:


a. Rég. Ordinario 561
b. Rég. Especial 688

2. Canon generación hidráulica 304

Tabla 2-3. Valoración general


3. Impuestos nucleares:
Proyecto de Ley de medidas
a. Generación residuos radioactivos 270
fiscales para la sostenibilidad
b. Almacenamiento de residuos 0
energética (Ley 15/2012).
4. Céntimo verde:
Fuente: Elaboración propia, Valoración a. Al gas natural
804
según rueda de prensa del Ministro el 14 de b. Al carbón para generación eléctrica
septiembre de 2012. 268
c. Fuel-oil y gasóleo para producción de
38
energía eléctrica
5. Sin primas a la producción renovable con
60
combustibles fósiles

6. Ingresos de subastas de CO2 450

TOTAL 3.465

41
Ver Boletín de Energía y Sociedad Nº 82: Resumen Ley 17/2012 y Real Decreto Ley 29/2012.
42
El valor finalmente aprobado fue un 7% sobre el valor de la energía producida

25
E lectricidad
2. Normativa

E n los P res upuesto G enerales del E s tado para 2013, Ley 17/2013, el G obierno introdujo dos
medidas relativas al s ector eléctrico: s us pende para 2013 el mecanismo de compens ación
es tablecido para los cos tes ins ulares y extrapenins ulares , de modo que los costes de 2012
correrán a cargo de la tarifa eléctrica no s iendo financiados con los presupues tos de 2013; y,
es tablece que en las Leyes de P res upuestos G enerales del E stado de cada año s e des tinará
un importe a financiar el fomento de energías renovables , es te importe s erá la suma de la
es timación de la recaudación anual corres pondiente al E s tado derivada de los tributos
incluidos en la ley 15/2012 más el 90% del ingres o estimado por la s ubasta de los derechos de
emis ión de gas es de efecto invernadero, con un máximo de 450 M€. E l 10% restante, con un
máximo de 50 M€, s e afecta a la política de lucha contra el cambio climático.

E l paquete regulatorio de diciembre de 2012 termina con la aprobación del R eal Decreto-ley
29/2012 de mejora de ges tión y protección s ocial en el S is tema E s pecial para empleados de
hogar y otras medidas de carácter económica y social, entre las que s e cuelan dos medidas en
el capítulo III que afectan al s ector eléctrico:

• S e s uprimen los límites para el déficit de la tarifa eléctrica que el R eal Decreto-ley
14/2010 fijó en 1.500 millones de euros en 2012 y cero a partir de 2013. (ver E l déficit
tarifario: qué es, cons ecuencias y s olución)

• S e corrige o s uprime del régimen económico primado para las instalaciones de régimen
es pecial (renovables y cogeneración) que incumplan las obligaciones requeridas para
s u ins cripción definitiva en el registro de preas ignación.

2013 comenzó también con nuevas medidas urgentes aprobadas por el gobierno en el R eal
Decreto-ley 2/2013 43 de medidas urgentes en el S is tema E léctrico y en el s ector financiero,
donde s e es tablecen nuevos ajus tes en cos tes del s ector eléctrico:

• S e limita la capacidad de elección de opción de venta de energía a mercado, al impedir


que las ins talaciones de régimen es pecial que se acojan a la venta en mercado libre
puedan luego acogers e a la venta en tarifa regulada.

• Las ins talaciones adjudicatarias del concurs o de ins talaciones de tecnología s olar
termoeléctrica de carácter innovador mantendrán s u retribución fijada en concurrencia
competitiva.

• S e s uprime la prima de referencia exis tente hasta ahora (as í como los límites s uperior e
inferior del precio de producción) y s e fija una tarifa regulada para estas ins talaciones
(renovables y cogeneración).

• La actualización de retribuciones de actividades reguladas del S is tema E léctrico


vinculadas al Índice de P recios al C ons umo (IP C ) - actividades de trans porte,
dis tribución, tarifas y primas del R égimen E s pecial-, pasarán a efectuarse con el Índice
de P recios de C ons umo a impuestos cons tantes s in alimentos no elaborados ni
productos energéticos.

43
V er B oletín de E nergía y S ociedad N º 84: R es umen del R eal Decreto Ley 2/2013.

26
E lectricidad
2. Normativa

Además , el 13 de julio se publicó el R eal Decreto-ley 9/2013 44 por el que s e adoptan medidas
urgentes para garantizar la es tabilidad financiera del s is tema eléctrico y que forma parte de un
amplio paquete regulatorio cuyo fin principal es dotar de es tabilidad financiera al s is tema
eléctrico y en el que destacan las s iguientes medidas :

• E n las metodologías de retribución de las actividades reguladas s e cons iderarán los


cos tes neces arios para realizar la actividad por una empres a eficiente y bien
gestionada 45.

• Deroga los s is temas retributivos del régimen es pecial, habilitando al G obierno para
aprobar un nuevo régimen jurídico y económico para las instalaciones de producción
de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovables , cogeneración y
res iduos . E l nuevo régimen económico s e bas a en la percepción de los ingres os
derivados de la participación en el mercado, con una retribución adicional es pecífica
compuesta por:

 Un término por unidad de potencia instalada (€/MW ) que cubra, cuando proceda,
los cos tes de invers ión de una instalación tipo que no puedan s er recuperados por
la venta de energía.

 Un término a la operación (€/MW h) que cubra, en s u cas o, la diferencia entre cos tes
de explotación y los ingres os por la participación en el mercado de dicha ins talación
tipo.

P ara aquellas ins talaciones que a la fecha de la entrada en vigor del R D-l 9/2013
tuvieran derecho a un régimen económico primado, la rentabilidad razonable girará,
antes de impues tos, s obre el rendimiento medio en el mercado s ecundario de las
Obligaciones del E s tado a 10 años incrementada con un diferencial de 300 puntos
bás icos . S e procede a la s upres ión del complemento por eficiencia para las
ins talaciones que es tuvieran percibiéndolo y de la bonificación por energía reactiva (ver
R egulación es pañola de las energías renovables ) .

• Modifica la Ley 54/1997, de 27 de noviembre, del S ector E léctrico a fin de introducir


una s erie de principios retributivos adicionales para el trans porte y dis tribución de
energía eléctrica. E n primer lugar, s e s eñala que en las metodologías de retribución de
es tas actividades s e cons iderarán los cos tes neces arios para realizar la actividad por
una empres a eficiente y bien ges tionada, mediante la aplicación de criterios
homogéneos para todo el territorio es pañol. E n s egundo lugar, s e afirma que es tos
regímenes económicos permitirán una retribución adecuada a la de una actividad de
bajo riesgo. E n aplicación de este último principio, s e es tablecen las retribuciones de
es tas actividades para dis tintos frentes temporales :

 1 enero 2013-12 julio 2013: la parte proporcional de la retribución provis ional fijada
en la Orden IE T /221/201346 pas a a s er definitiva.

44
V er B oletín de E nergía y S ociedad Nº 93: R es umen del R eal Decreto-ley 9/2013
45
E l principio de empres a eficiente y bien ges tionada es tá generalmente aceptado cuando s e establece y aplica a futuro, no cuando s e cambia
y s e aplica a pas ado
46
V er Orden IE T 221/2013

27
E lectricidad
2. Normativa

 13 julio 2013-31 diciembre 2013: retribución conforme a una formulación y s e fija la


tas a de retribución en 100 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez
años en el mercado s ecundario de los tres meses anteriores a la entrada en vigor
de la norma.

 A partir 2014: retribución conforme a una formulación y s e fija la tas a de retribución


en 200 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez años en el
mercado s ecundario de los tres mes es anteriores a la entrada en vigor de la norma.

• Modifica la regulación de los pagos por capacidad, reduciendo el incentivo a la


invers ión en capacidad a largo plazo a 10.000 €/MW /año. A s u vez, s e alarga el plazo
de cobro al doble del que resta para cubrir el periodo de 10 años anteriormente
es tablecido. P or otro lado, s e limita la aplicación de es te incentivo a las ins talaciones
de producción que obtuvieran el acta de puesta en s ervicio definitiva con anterioridad al
1 de enero de 2016.

• F inanciación a cargo de los P res upuestos G enerales del E s tado del extracos te de
generación en los territorios ins ulares y extrapenins ulares . Los extracostes derivados
de las actividades de producción de energía eléctrica cuando s e des arrollen en
territorios ins ulares y extrapenins ulares s erán financiados en un 50% con cargo a los
P res upues tos G enerales del E s tados .

• Incremento del aval al F ondo de T itulización del Déficit del S is tema E léctrico (F ADE ).
S e incrementa el límite total de avales de la Adminis tración G eneral del E s tado a
otorgar en el ejercicio en curs o por importe de 4.000 M€, modificando la Ley 17/2012 47
de P res upuestos G enerales del E s tado para el año 2013. Adicionalmente, es tablece
que, en 2012, la liquidación de las actividades reguladas tuvo como res ultado un déficit
de 5.609 millones de euros , s uperior en 4.109 millones de euros al ex ante previs to en
el R eal Decreto-ley 14/2010.

• S e es tablece la as unción del cos te del bono s ocial a las matrices de las s ociedades
verticalmente integradas en las actividades del s ector eléctrico. E l reparto del cos te
s erá en función del número de s uminis tros conectados a las redes de dis tribución y el
número de clientes a los que s uminis tra la comercializadora.

• S e es tablece un tipo reducido de 0,15 €/G J para el carbón destinado a us os con fines
profes ionales , s iempre y cuando no s e utilice en proces os de generación y
cogeneración eléctrica.

• S e habilita al Minis terio a realizar revis iones de los peajes de acces o con una
periodicidad máxima trimes tral. E s te incremento de los peajes s upondrá un ingres o
adicional aproximadamente de 900 M€ para el s is tema.

• S e crea el R egis tro Adminis trativo de régimen retributivo es pecífico (obligado para las
ins talaciones que quieran percibir la retribución es pecífica) y el R egis tro Adminis trativo
de autocons umo de energía eléctrica.

47
V er Ley 17/2012

28
E lectricidad
2. Normativa

A finales de 2013, s e publicó la nueva Ley del S ector E léctrico, la Ley 24/2013 48 como
cons ecuencia de todos los cambios acontecidos en el s ector des de 1997, la impos ibilidad de
garantizar el equilibrio financiero del s is tema eléctrico y la reciente dispers ión normativa. La
Ley 24/2013 es tablece la regulación del s ector eléctrico con la finalidad de garantizar el
s uminis tro de energía eléctrica y de adecuarlo a las neces idades en términos de s eguridad,
calidad, eficiencia, objetividad, trans parencia y al mínimo coste para los cons umidores. E ntre
las principales novedades con res pecto a la Ley 54/1997, des tacan:

• C ons ideración del s uminis tro de energía eléctrica como s ervicio de interés económico
general, frente al anterior de s ervicio es encial.

• E s tablece como principio rector el principio de s os tenibilidad económica y financiera del


s is tema eléctrico, limitando los des ajustes por déficit de ingres os de tal forma que s u
cuantía no podrá s uperar el 2% de los ingres os es timados para es e ejercicio y la deuda
acumulada por des ajustes no podrá s uperar el 5% de dichos ingres os .

 E n el cas o de que no se cumplan dichos límites s e revis arán los peajes o cargos
que corres pondan.
 La parte del des ajus te que no se compens e por s ubida de peajes y cargos será
financiada por todos los s ujetos del s is tema de liquidación en función de los
derechos de cobro que generen.
 A diferencia del s is tema anterior, estos desfas es no s erán financiados
exclus ivamente por los grandes operadores y los derechos de cobro
corres pondientes a déficit de ingres os no podrán ceders e al F ondo de T itulización
del Déficit del s istema E léctrico des de el 1 de enero de 2013.
 Las cantidades aportadas por este concepto s erán devueltas en las liquidaciones
corres pondientes a los 5 años s iguientes reconociéndos e un tipo de interés
equivalente al de mercado.
 E n cuanto a los s uperávits de ingres os que pudieran res ultar s e des tinarán a
compens ar des ajus tes de años anteriores y mientras exis tan deudas pendientes de
años anteriores, los peajes de acces o o cargos no podrán s er revis ados a la baja.

• E n relación con la planificación eléctrica, se mantiene s u carácter vinculante para la red


de trans porte, incorporando herramientas para alinear el nivel de invers iones a la
s ituación del ciclo económico y a los principios de s os tenibilidad económica.

• P ara las actividades con retribución regulada, s e cons iderarán los costes necesarios
para realizar la actividad por una empres a eficiente y bien ges tionada, mediante la
aplicación de criterios homogéneos en todo el territorio es pañol.

• P ara los s is temas eléctricos no penins ulares , s e establece la pos ibilidad de


es tablecimiento de un régimen s ingular para el que s e tendrán en cons ideración
exclus ivamente los extracos tes de estos s istemas eléctricos as ociados a s u carácter
ais lado.

• S e abandonan los conceptos diferenciados de régimen ordinario y es pecial y s e


procede a una regulación unificada.

48 V er P res entación de E nergía y S ociedad Ley 24/2013

29
E lectricidad
2. Normativa

• E l régimen retributivo de las energías renovables , cogeneración y res iduos s e bas ará
en la participación en el mercado de es tas instalaciones , complementado los ingres os
de mercado con una retribución regulada es pecífica que permita a estas tecnologías
competir en nivel de igualdad con el res to de tecnologías en el mercado. La ley precis a
los criterios de prioridad de acces o y des pacho para la electricidad generada mediante
es tas tecnologías de acuerdo con lo es tablecido en las directivas comunitarias . As í
mis mo, s e cons agra el principio de rentabilidad razonable y s e establece el criterio de
revis ión de los parámetros retributivos cada s eis años .

• La tas a de retribución para las actividades de red y para la actividad de producción a


partir de fuentes de energía renovables , cogeneración y res iduos, para el primer
periodo regulatorio, s erán las establecidas en el R eal Decreto-ley 9/2013.

• E n relación a la actividad de producción y, más concretamente, a los mecanis mos de


capacidad, s e establece que en su cas o s u objetivo s erá dotar al s is tema de un margen
de cobertura adecuado e incentivar la dis ponibilidad de potencia gestionable.

• S e crea la figura del cierre temporal de instalaciones de generación, quedando


s ometida al régimen de autorizaciones .

• S e es tablece el denominado precio voluntario para el pequeño cons umidor (P V P C )


antigua T arifa de Último R ecurs o (T UR ) como precio máximo de referencia al que
podrán contratar los cons umidores de menos de una determinada potencia contratada.

• S e abandonan los conceptos de comercializadores de último recurs o (C UR ) y


s uminis tro de último recurs o (S UR ) por los del comercializador de referencia y
s uminis tro eléctrico de referencia.

• La T arifa de Último R ecurs o s on aquellos precios de aplicación a categorías concretas


de cons umidores entre los que s e encentran cons umidores que tengan la condición de
vulnerables (P V P C – bono s ocial) o cons umidor que s in cumplir los requis itos para la
aplicación del P V P C trans itoriamente no dis pongan de un contrato de s uminis tro en
vigor con un comercializador libre (P V P C + recargo). E l importe de este bono s erá con
cargo a los grupos empres ariales integrados .

• R es pecto al autocons umo, la ley es tablece la obligación de es tas ins talaciones de


contribuir a la financiación de los costes y s ervicios del s is tema en la mis ma cuantía
que el resto de los cons umidores.

• P ara el año 2013 s e reconoce la exis tencia de un déficit máximo de 3.600 millones de
euros , s in perjuicio de los des ajustes temporales que pudieran producirs e en el s is tema
de liquidaciones .

 E s te déficit s erá financiado por los grandes operadores y generará derechos de


cobro durante los quince años s uces ivos a contar des de el 1 de enero de 2014
has ta s u s atisfacción.

 Las cantidades aportadas por es te concepto s erán devueltas reconociéndos e el tipo


de interés del mercado que s e fijará en la orden por la que s e revis en los peajes y
cargos .

30
E lectricidad
2. Normativa

 P ara la financiación de dichos déficits , los derechos de cobro corres pondientes s e


podrán ceder de acuerdo al procedimiento que s e determine reglamentariamente
por el G obierno.

P ara terminar con los cambios normativos aprobados en 2013, s e publicaron el R eal Decreto
1047/2013 y el R eal Decreto 1048/2013 por los que s e establecen la metodología para el
cálculo de la retribución de la actividad de trans porte y dis tribución de energía eléctrica
res pectivamente.

La Ley 22/2013 de P resupues tos G enerales del E s tado para el año 2014 incluye las s iguientes
partidas para financiar los costes del s is tema eléctrico: 903 millones de euros para atender al
extracos te de generación procedente de los s istema extrapenins ulares , 2.907 millones de euros
procedentes de la recaudación de los impues tos de la Ley 15/2012 de medidas fis cales para la
s os tenibilidad energética y 343,8 millones por el ingres o es timado por la s ubasta de los
derechos de emis ión de gas es de efecto invernadero.

E n junio de 2014, s e publicó el R eal Decreto 413/2014 49 que es tablece la metodología del
régimen retributivo es pecífico, que s erá de aplicación a las ins talaciones de producción a partir
de fuentes de energía renovables , cogeneración de alta eficiencia y res iduos a las que les s ea
otorgado. P osteriormente s e publicó la Orden IE T /1045/2014 50, por la que s e aprueban los
parámetros retributivos de las ins talaciones tipo aplicables a determinadas ins talaciones de
producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovables , cogeneración y
res iduos . (V er R egulación es pañola de las energías renovables )

E n octubre de 2015, se publicó el R eal Decreto 900/2015 51 por el que s e regulan las
condiciones técnicas y económicas de las modalidades de s uminis tro de energía eléctrica con
autocons umo y de producción con autocons umo. C on este R eal Decreto s e crea el R egistro
Adminis trativo de Autocons umo en el que deben es tar ins critas todas las ins talaciones s alvo las
ais ladas , las cuales quedan fuera del ámbito de es te R eal Decreto y s e es tablecen dos tipos de
cons umidores (ver Autocons umo y balance neto)

E n 2016, s e aprueba el R eal Decreto 56/2017, de 12 de febrero, por el que s e trans pone la
Directiva 2012/27/UE del P arlamento E uropeo y del C ons ejo, del 25 de octubre de 2012,
relativo a la eficiencia energética, en lo referente a las auditorías energéticas. E l objetivo
principal que s e quiere cons eguir con es te R eal Decreto es impuls ar y promocionar un conjunto
de actuaciones a realizar dentro de los proces os de cons umo energético que pueden contribuir
al ahorro y a la eficiencia de la energía primaria cons umida.

E n diciembre de es te mis mo año, s e aprueba el R eal Decreto-ley 7/2016 por el que s e regula el
mecanis mo de financiación del cos te del bono s ocial y otras medidas de protección al
cons umidor vulnerable.

E n octubre de 2015 s e aprueba el R eal Decreto 947/2017, por el que s e es tablece una
convocatoria de para el otorgamiento del régimen retributivo a nuevas ins talaciones de
producción de energía eléctrica a partir de biomas a en el s is tema eléctrico penins ular y para
ins talaciones de energía eólica con cupo máximo de 700 MW , de los cuales 200 MW fueron
para ins talaciones de biomas a y 500 MW para tecnología eólica.

49
V er R eal Decreto 413/2014
50
V er Orden IE T /1045/2014
51
V er R eal Decreto 900/2015

31
E lectricidad
2. Normativa

Más adelante, en marzo de 2017 s e aprueba la convocatoria para la celebración de la s egunda


s ubas ta de energías renovables convocada al amparo del R eal decreto-ley 359/2017 para la
as ignación de 3.000 MW de potencia ins talada. P os teriormente, en abril s e aprueba la orden
E T U/315/2017, de 6 de abril, por la que s e regula el procedimiento de as ignación del régimen
retributivo es pecífico en la convocatoria para nuevas ins talaciones de producción de energía
eléctrica a partir de fuentes de energía renovables . E l res ultado de la s egunda s ubasta
realizada el 17 de mayo de 2017 s e s aldó con la adjudicación de 3.000 MW de ins talaciones
renovables , el máximo previs to y s in ningún cos te para el cons umidor pues los adjudicatarios
ofertaron el máximo des cuento pos ible. De estos 3.000 MW , 2.979 MW se adjudicaron a
ins talaciones eólicas , dejando tan s olo 1 MW para la fotovoltaica y 20 MW para el resto de
tecnologías , principalmente biomas a.

P or último, en junio del 2017, s e aprueba el R eal Decreto 650/2017 por el que s e es tablece un
cupo inicial de 3.000 MW de potencia ins talada, de nuevas ins talaciones de producción de
energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovable que pos teriormente s e amplió a
5.000MW . La s ubasta concluyó con 3.909 MW otorgados a la fotovoltaica y 1.128 para la eólica
cerrándos e la jornada con un total de 5.037 MW de renovables .

F inalmente, el 6 de octubre de 2017, el G obierno aprobó el R eal Decreto 897/2017, por el que
regula la figura del cons umidor vulnerable y otras medidas de protección al cons umidor
domés tico. S e dis tinguen dos tipos de cons umidores : cons umidor vulnerable, al cual se le
aplica un des cuento del 25% s obre el P V P C del 25%, y el cons umidor vulnerable s evero, al que
s e le hace un des cuento el 40% s obre el P V P C , introduciéndos e por primera vez el criterio de
la renta para acceder al bono s ocial (ver El bono social).

32
E lectricidad
2. Normativa

2.3. Actividades reguladas y actividades en libre competencia


La explotación de las redes eléctricas (de transporte y distribución) está sujeta a significativas
economías de escala, lo que hace que las mismas tengan carácter de monopolio natural,
haciendo ineficiente la introducción de competencia en estas actividades (ver Proceso de
liberalización y separación de actividades reguladas). La LSE estableció inicialmente la
obligación de separar jurídica y contablemente 52 dentro de las empres as eléctricas las
actividades reguladas (trans porte y dis tribución), que s e prestan bajo un régimen económico y
de funcionamiento regulado, de las actividades liberalizadas (generación y comercialización),
que s on des arrolladas por los operadores en régimen de libre competencia, rigiéndos e s u
retribución por las leyes de la oferta y la demanda (ver Actividades reguladas en el s ector
eléctrico )

La Directiva 2003/54/C E y s u posterior trans pos ición a la


normativa es pañola (Ley 17/2007 53) profundizaron en es te
as pecto e impus ieron a los grupos verticalmente La explotación de las
integrados la s eparación funcional de s us actividades , que redes eléctricas
tiene como objeto garantizar la autonomía de gestión y (de trans porte y
decis ión de los res ponsables de las redes de trans porte y dis tribución) está sujeta
dis tribución 54 y pres ervar la confidencialidad de la
información comercialmente s ens ible que dis ponen es tos a s ignificativas
res pons ables , de manera que no s e comprometa la economías de es cala, lo
competencia en las actividades liberalizadas . Actualmente, que hace que las
s on las propias empresas las que tienen que aplicar es ta
s eparación de actividades y des de el 31 de marzo de 2013
mis mas tengan carácter
s e configura como una obligación legal por la que las de monopolio natural
empres as tienen que pres entar información
periódicamente a la C NMC .

La actual LS E y la anterior con s us posteriores des arrollos legis lativos han es tablecido y
definido el papel de los diferentes s ujetos participantes en el s ector eléctrico (F igura 2-2):

• Los productores de energía eléctrica s on aquellas pers onas fís icas o jurídicas que
tienen la función de generar energía eléctrica, as í como las de cons truir, operar y
mantener las centrales de producción. E n ningún cas o tendrán la condición de
productores los cons umidores con autoproducción de energía eléctrica. Hasta la
entrada en vigor del R eal Decreto-ley 9/2013 y de la nueva ley del s ector, los
productores s e dividían en función de la modalidad de generación utilizada en
productores del régimen es pecial55 y productores del régimen ordinario (ver

52
La Directiva 96/92/C E es tablecía, simplemente, la s eparación contable entre las actividades reguladas y las liberalizadas , s in tener
en cuenta a quién corres pondía la propiedad de los activos. E n cambio, la normativa es pañola, mediante la LS E imponía, además , la
obligación de que ambas actividades fueran des arrolladas por s ociedades diferentes dentro de un mismo grupo integrado verticalmente
(s eparación jurídica) y que las s ociedades que des arrollaran las actividades reguladas tuvieran como “objeto s ocial exclus ivo”
precis amente es as actividades.
53
V er Ley 17/2007.
54
E l artículo 14 de la Ley 17/2007 introdujo nuevas normas en este s entido, como la prohibición a las s ociedades que des arrollen
actividades reguladas de tomar participaciones en empres as que realicen actividades de producción o de comercialización o la
prohibición de que las pers onas res pons ables de la ges tión de s ociedades que realicen actividades reguladas participen en estructuras
organizativas del grupo empres arial que s ean res pons ables de la ges tión cotidiana de actividades de generación o comercialización,
entre otras.
55
La actividad de generación en régimen es pecial englobaba la generación de energía eléctrica en instalaciones de potencia no
s uperior a 50 MW que utilizaban como energía primaria energías renovables o res iduos y aquellas otras como la cogeneración que
implicaban una tecnología con un nivel de eficiencia y ahorro energético cons iderable.

33
E lectricidad
2. Normativa

T ecnologías y cos tes de la generación eléctrica). Actualmente, s e ha eliminado los


conceptos diferenciados de régimen ordinario y es pecial s in perjuicio de las
cons ideraciones s ingulares que sea precis o establecer.

• E l trans portis ta 56 es aquella s ociedad mercantil que tiene la función de trans portar
energía eléctrica, as í como construir, mantener y maniobrar las instalaciones de
trans porte 57 (ver Actividades reguladas en el s ector eléctrico).

• Los dis tribuidores s on aquellas s ociedades mercantiles o s ociedades cooperativas de


cons umidores y us uarios, que tienen la función de dis tribuir energía eléctrica, as í como
cons truir, mantener y operar las ins talaciones de dis tribución destinadas a s ituar la
energía en los puntos de cons umo (ver Actividades reguladas en el s ector eléctrico).

• Los comercializadores s on aquellas s ociedades mercantiles , o s ociedades cooperativas


de cons umidores us uarios que, accediendo a las redes de trans porte o dis tribución,
adquieren energía para s u venta a los cons umidores , a otros s ujetos del s is tema o para
realizar operaciones de intercambio internacional. E ntre ellos , los comercializadores de
referencia (anteriormente los C omercializadores de Último R ecurs o (C UR )), des ignados
por el regulador, s e encargan de s uminis trar energía a aquellos cons umidores acogidos
al precio voluntario para el pequeño cons umidor (P V P C ) antes la T arifa de Último
R ecurs o (T UR ). (ver E l mercado minoris ta de energía eléctrica y E l S uminis tro de
referencia).

• Los cons umidores s on las pers onas fís icas o jurídicas que compran la energía para s u
propio cons umo. Aquellos cons umidores que adquieran energía directamente en el
mercado de producción s e denominarán C ons umidores Directos en Mercado.

• Los gestores de cargas del s is tema s on aquellas s ociedades mercantiles que, s iendo
cons umidores, es tán habilitados para la reventa de energía eléctrica para s ervicios de
recarga energética, es decir, des arrollan la actividad des tinada al s uminis tro de energía
eléctrica para la recarga de vehículos eléctricos .

• E l Operador del Mercado Ibérico (OMI) lleva a cabo la gestión del mercado ibérico de
electricidad (MIB E L). E s ta ges tión dis tingue, por un lado, la del mercado ibérico al
contado (mercado s pot), que es tá encomendada a OMI-P olo E s pañol, S .A. (OMIE ) y,
por otro, la ges tión de la P lataforma de Negociación del mercado de derivados
(mercado a plazo), que es res pons abilidad de OMI-P olo P ortugués , S .A. (OMIP ). (V er
F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad y F ormación de
precios en los mercados mayoris tas a plazo de electricidad)

• E l operador del s is tema, R ed E léctrica de E s paña (R E E ), es una s ociedad mercantil


que tiene como función principal llevar a cabo las actividades as ociadas a la operación
técnica del S istema E léctrico, garantizando la continuidad y s eguridad del s uminis tro
eléctrico y la correcta coordinación de los s is temas de producción y trans porte (V er
Mecanis mos de ajuste de demanda y producción).

56
La Ley 17/2007 es tablece que el gestor de la red de trans porte (R E E ) actuará como trans portis ta único en el s is tema eléctrico
es pañol, des arrollando la actividad en régimen de exclus ividad.
57
La red de trans porte de electricidad en E s paña está cons tituida por la red de trans porte primario (instalaciones con tens iones
nominales iguales o s uperiores a 380 kV e instalaciones de interconexión internacional) y la red de trans porte s ecundario (ins talaciones
con tens iones nominales iguales o s uperiores a 220 kV no incluidas en la categoría anterior).

34
E lectricidad
2. Normativa

F igura 2-2.
Des cripción
s implificada de
la organización
del S is tema
E léctrico en
E s paña.

Fuente: CNE y
elaboración
propia.

La LSE establece la libertad de acceso a las redes de transporte y distribución, de manera que
los agentes (productores, comercializadores y consumidores) pueden utilizar a las redes a
cambio del pago de unos peajes y cargos determinados (las tarifas de acceso) que son fijados
y actualizados de manera periódica por el regulador (en el caso español por el Ministerio
competente), estando los gestores de las redes obligados a aceptar las solicitudes de acceso
de los agentes, excepto en los casos en que no haya capacidad suficiente en las redes para
soportar el tránsito de electricidad pretendido (ver Los peajes de acceso y cargos: estructura,
costes y liquidación de los ingresos).

En España, desde el año 2000, las sucesivas tarifas aprobadas por los Gobiernos han
generado déficits tarifarios, diferencia entre el monto total recaudado por las tarifas y los
costes reales del suministro. Esta falta de respeto al principio de suficiencia tarifaria genera
importantes efectos negativos (incentivos ineficientes al consumo y a la inversión, carga
financiera para los consumidores futuros, riesgo regulatorio, etc.) (Ver El déficit tarifario: qué
es, consecuencias y solución).

El régimen económico del Sistema Eléctrico . Redes de transporte y distribución. De


manera general, la retribución de las actividades de redes debe proporcionar a las empresas
reguladas tanto el derecho a la recuperación de los costes incurridos, como una garantía
razonable de percibir una rentabilidad suficiente sobre el capital prudentemente invertido. La
retribución de estas actividades es fijada por la Administración teniendo en cuenta los costes
de inversión, de operación y mantenimiento y de gestión de las redes en los que incurren los

35
E lectricidad
2. Normativa

dis tintos agentes y es sufragada mediante los ingres os obtenidos por los peajes de acces o
definidos por el us o de las redes (ver Los peajes de acces o y cargos: es tructura, cos tes y
liquidación de los ingres os ). E l régimen retributivo de las actividades reguladas del s ector
eléctrico fue definido en primera ins tancia por el R eal Decreto 2819/1998 58, de 23 diciembre.

Dis tribución eléctrica. E n el cas o de la actividad de dis tribución, el R eal Decreto 222/2008 59
es tableció, al comienzo de cada periodo regulatorio (4 años ), una retribución bas e para cada
empres a distribuidora. E s ta retribución evoluciona a lo largo de los distintos años del periodo
regulatorio en función del aumento de actividad al que s e enfrenta cada una las empres as y de
las invers iones realizadas por ellas .

E l R eal Decreto-ley 13/2012 60 publicado en marzo de 2012, modificó algunos as pectos de la


retribución de la actividad de dis tribución indicando que s e retribuirá en concepto de invers ión
aquellos activos en s ervicio no amortizados y fijó que el devengo de la retribución generada
por instalaciones de dis tribución puestas en s ervicio en el año “n” s e iniciará a partir del 1 de
enero del año “n+2”. P or otro lado, s e indicaba que el Minis terio debería des arrollar una
normativa que vincule la retribución por los costes de invers ión al valor neto de los activos en
s ervicio.

P or otro lado, el R eal Decreto-ley 2/2013 61 publicado en enero de 2013, actualizó la retribución
de la dis tribución, pas ando a efectuars e con el Índice de P recios de C ons umo a impues tos
cons tantes s in alimentos no elaborados ni productos energéticos (IP C s ubyacente neto de
impues tos).

P os teriormente, el R eal Decreto-ley 9/2013, publicado en julio de 2013, modificó nuevamente


la metodología de retribución de la actividad de dis tribución, es tableciendo una retribución
detallada para un período trans itorio (hasta diciembre de 2014), bas ada en el rendimiento las
Obligaciones del T es oro a diez años más un diferencial de 200 puntos básicos (es te diferencial
es de 100 puntos bás icos des de la entrada en vigor del real decreto-ley has ta diciembre de
2013), y los principios para la retribución posterior (ver Actividades reguladas en el s ector
eléctrico) 62. E n diciembre de 2013 s e aprobó el R eal Decreto 1048/2013 63 por el que s e
es tablece la metodología para el cálculo de la retribución de la actividad de dis tribución de
energía eléctrica (ver Dis tribución).

T rans porte. P or s u parte, la retribución de la actividad de trans porte de energía eléctrica está
regulada mediante el R eal Decreto 2819/1998 64 para las instalaciones pues tas en s ervicio
antes del 1 de enero de 2008, y mediante el R eal Decreto 325/2008, para las ins talaciones
pues tas en s ervicio a partir del 1 de enero de 2008. E n virtud de ambos R eales Decretos,
es tas ins talaciones s on retribuidas , con carácter general, de acuerdo con costes unitarios
es tándares de invers ión y de explotación (operación, mantenimiento y es tructura), fijándos e
una retribución determinada para el capital invertido.

S in embargo, en el R eal Decreto-ley 13/2012 65 el G obierno pidió al Minis terio de Indus tria,
E nergía y T uris mo, actual Minis terio de E nergía, T uris mo y Agenda Digital, que elaborara una
propues ta de R eal Decreto que vinculara la retribución por invers ión de las ins talaciones de

58
V er R eal Decreto 2819/1998.
59
V er R eal Decreto 222/2008.
60
V er R eal Decreto Ley 13/2012.
61
V er R eal Decreto Ley 2/2013.
62
V er P res entación E nergía y S ociedad R eal Decreto Ley 9/2013.
63
V er P res entación E nergía y S ociedad R eal Decreto 1048/2013.
64
V er R eal Decreto 2819/1998.
65
V er R eal Decreto 1047/2013.

36
E lectricidad
2. Normativa

trans porte a los activos en s ervicio no amortizados , as í como establecer que el devengo y
cobro de la retribución generada por las ins talaciones puestas en s ervicio el año n s e iniciaría
des de el 1 de enero del año n+2. Además de es tas modificaciones en s u retribución, en el
R eal Decreto-ley 20/2012 aprobado por el G obierno en julio de 2012 s e reduce un 3,15%
adicional la retribución de la actividad de trans porte de energía eléctrica res pecto a la
es tablecida en el R eal Decreto-ley 13/2012 como cons ecuencia de un cambio de criterio en la
retribución a la invers ión, que se hará para aquellos activos en s ervicio no amortizados
tomando como bas e para s u retribución financiera s u valor neto.

E l R eal Decreto-ley 2/2013 66 publicado en enero de 2013, actualiza la retribución pas ando a
efectuars e con el Índice de P recios de C ons umo a impuestos cons tantes s in alimentos no
elaborados ni productos energéticos (IP C s ubyacente neto de impuestos).

E l R eal Decreto-ley 9/2013 67publicado en julio de 2013, modificó nuevamente la metodología


de retribución de la actividad de trans porte, estableciendo una retribución detallada para un
período trans itorio (hasta diciembre de 2014), bas ada en el rendimiento las Obligaciones del
T es oro a diez años más un diferencial de 200 puntos bás icos (este diferencial es de 100
puntos bás icos des de la entrada en vigor del real decreto-ley has ta diciembre de 2013), y los
principios para la retribución pos terior (ver Actividades reguladas en el sector eléctrico) 68. E n
diciembre de 2013 s e aprobó el R eal Decreto 1047/2013 69 por el que s e establece la
metodología para el cálculo de la retribución de la actividad de trans porte de energía eléctrica
(ver T rans porte y operación del s is tema).

F inalmente, la Ley 24/2013, de 26 de diciembre, del S ector E léctrico, establece en s u artículo


14 que las metodologías de retribución de las actividades de trans porte y dis tribución s e
es tablecerán reglamentariamente atendiendo a los cos tes neces arios para cons truir, operar y
mantener las instalaciones de acuerdo al principio de realización de la actividad al menor coste
para el s istema eléctrico s egún lo dis puesto en el artículo 1.1.

El régimen económico del Sistema Eléctrico . Generación eléctrica. Los productores de


energía eléctrica incluidos en el régimen ordinario perciben ingresos por la venta de energía y
capacidad en función de los precios fijados en los mercados spot y a plazo de electricidad y de
servicios de ajuste (resolución de restricciones técnicas, banda secundaria, energía
secundaria y terciaria, gestión de desvíos, etc.) y de algunos complementos regulados (en la
actualidad, el incentivo a la inversión, por ejemplo) (ver Formación de precios en el mercado
mayorista diario de electricidad y Formación de precios en los mercados mayoristas a plazo de
electricidad).

El Real Decreto-ley 13/2012 modifica el sistema de retribución de los costes fijos y variables
de las unidades de generación del régimen ordinario en los sistemas eléctricos insulares y
extrapeninsulares. Concretamente, se establecen nuevos criterios que se evaluarán en la
revisión del modelo retributivo.

El Real Decreto-ley 20/2012 profundiza aún más en los recortes a las actividades de
producción de energía eléctrica pertenecientes al antiguo régimen ordinario en los sistemas
eléctricos insulares y extrapeninsulares: se elimina la retribución de los gastos de naturaleza
recurrente incluidos en el cálculo de la garantía de potencia; se revisa la tasa para el cálculo

66
Ver Real Decreto Ley 13/2012.
67
Ver R eal Decreto Ley 2/2013
68
V er P res entación E nergía y S ociedad R eal Decreto Ley 9/2013.
69
V er P res entación E nergía y S ociedad R eal Decreto 1047/2013.

37
E lectricidad
2. Normativa

de la retribución financiera de la invers ión, que se corres ponderá con el valor de los B onos del
E s tado a 10 años más 200 puntos bás icos , en lugar de los 300 puntos anteriores ; y, s e
reducen un 10% los valores unitarios de los cos tes reconocidos de operación y mantenimiento
fijos.

La actividad de generación eléctrica s e vio afectada por la Ley 15/2012 70 de medidas fis cales
para la s ostenibilidad energética, en donde s e crean nuevos impues tos para el s ector eléctrico
y gas ista con la intención de reducir el déficit eléctrico. E n él, s e establece un impuesto para la
producción de la energía eléctrica (tanto de régimen ordinario como de régimen es pecial) que
grava la actividad de generación y la incorporación de la energía al S is tema E léctrico. A su
vez, s e crea un canon por utilización de aguas continentales del 22% para la producción de
energía eléctrica, el cual s e reduce un 90%, entre otros, para las centrales hidroeléctricas s ean
iguales o inferiores a 50 MW y para la energía nuclear. E stos valores s e han modificado
recientemente por el R eal Decreto-ley 10/2017 aumentando el canon a 25,5%, y s u reducción
a un 92% (ver E l déficit tarifario: qué es , cons ecuencias y s olución).

El régimen económico del Sistema Eléctrico . Energías renovables y cogeneración. Los


productores de electricidad incluidos en el antiguo régimen especial, gozan de un régimen
económico y jurídico distinto al del resto de productores incluidos en el antiguo régimen
ordinario. Estos productores podían elegir entre volcar a la red su producción a cambio de una
tarifa regulada o bien venderla en el mercado (en este caso, participando directamente en el
mercado o a través de un representante) y cobrando el precio del mercado más una prima
fijada administrativamente. Tanto las tarifas reguladas como las primas son establecidas por la
administración y se actualizan anualmente o trimestralmente, dependiendo del tipo de
instalación que se trate (ver Regulación española de las energías renovables).

En enero de 2012, se aprobó el Real Decreto-ley 1/2012, por el cual se suspendían los
incentivos económicos para los proyectos encaminados a la instalación de nuevas plantas de
producción de energía eléctrica por medio de fuentes renovables, cogeneración y residuos. Se
suprimieron así, en el Real Decreto 661/2007 todas las primas dedicadas a la actividad de
producción de energía, intentando aminorar el grave problema del déficit. Además, suspende
de forma indefinida los procedimientos de inscripción en el Registro de preasignación de
retribución previstos en el Real Decreto-ley 6/2009 y en el Real Decreto 1578/2008 (para las
instalaciones de energía solar fotovoltaica) y deja sin efecto la celebración de convocatorias de
preasignación de retribución para los años 2012 y sucesivos.

La Ley 15/2012 71 de medidas fiscales para la sostenibilidad energética, en donde se crean


nuevos impuestos para el sector eléctrico y gasista con la intención de reducir el déficit
eléctrico también afecta a la producción eléctrica en régimen especial (ver El déficit tarifario:
qué es, consecuencias y solución).

Esta ley también excluye del régimen económico primado a la electricidad generada a partir de
combustibles fósiles en instalaciones renovables (ya sean instalaciones híbridas o no
híbridas). Estas medidas suponen costes adicionales para los operadores, que se trasladarán
parcialmente a sus ofertas y que acabarán repercutiendo indirectamente en los consumidores
finales.

70
Ver Ley 15/2012.
71
V er Ley 15/2012.

38
E lectricidad
2. Normativa

A finales del año 2012 en relación al antiguo régimen es pecial, s e aprobó el R eal Decreto-ley
29/2012 72 para la eliminación del límite de déficit tarifario en 2012 y 2013 en el que s e corrige o
s uprime del régimen económico primado para las ins talaciones de régimen es pecial
(renovables y cogeneración) que incumplan las obligaciones requeridas para s u ins cripción
definitiva en el regis tro de preas ignación.

E l R eal Decreto-ley 2/2013, de medidas urgentes en el s is tema eléctrico y en el s ector


financiero actualiza la retribución a las actividades reguladas del S is tema E léctrico vinculadas
al Índice de P recios al C ons umo (IP C ), que pas ará a vincular al IP C s ubyacente neto de
impues tos. E n referencia a las energías renovables , s e modifica el R eal Decreto 661/2007, por
el cual s e regula la actividad de producción energética en régimen es pecial, s uprimiendo la
prima exis tente y los límites de producción s uperior e inferior, además de fijar una tarifa
regulada para las instalaciones de renovables y cogeneración.

A s u vez, s e limita la capacidad de elección de venta al mercado, para evitar que los
operadores del antiguo régimen es pecial que s e acojan al mercado libre, puedan luego vender
en el de tarifa regulada. P or último, s e mantienen las retribuciones fijadas por las instalaciones
adjudicatarias del concurs o de tecnología s olar termoeléctrica con carácter innovador.

E l R eal Decreto-ley 9/2013, publicado en julio de 2013, es tablece una nueva metodología de
retribución de las ins talaciones en el antiguo régimen es pecial, bas ada en una retribución
es pecífica a la invers ión y a la operación que garantiza una rentabilidad razonable definida en
300 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez años (ver Actividades reguladas
en el s ector eléctrico y E l marco normativo es pañol) 73.

E n el R eal Decreto 413/2014 74 s e concretan las propues tas realizadas en es ta normativa y en


la Orden Minis terial 1045/2014 s e aprueban los parámetros retributivos de las ins talaciones
tipo aplicables a determinadas ins talaciones de producción de energía eléctrica a partir de
fuentes de energía renovables , cogeneración y res iduos . (V er R egulación es pañola de las
energías renovables )

72
V er R eal Decreto Ley 29/2012.
73
V er P res entación E nergía y S ociedad R eal Decreto Ley 9/2013.
74
V er R eal Decreto 413/2014

39
E lectricidad
2. Normativa

El régimen económico del Sistema Eléctrico . Comercialización. Los comercializadores que


operan en el mercado libre compran energía en el mercado a precios mayoristas y venden esa
energía a los consumidores a precios pactados libremente por ambas partes, que incluyen un
margen por los servicios prestados (ver El mercado minorista de energía eléctrica).

Alternativamente, existe un régimen de comercialización regulada cuyo precio de venta es el


precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), que será único en todo el territorio
español y es el precio máximo que podrán cobrar los comercializadores que asuman las
obligaciones de suministro de referencia a aquellos consumidores que se puedan acoger a los
mismos. (Ver El suministro de referencia y El precio voluntario para el pequeño consumidor)

Según la ley del sector, el PVPC se fijará de forma que en su cálculo se respete el principio de
suficiencia de ingresos, aditividad y no ocasionen distorsiones de la competencia en el
mercado. Para su cálculo se incluirán de forma aditiva los siguientes conceptos: 75

• E l cos te de producción de energía eléctrica, que s e determinará con bas e en el precio


horario de los mercados diario e intradiario durante el período al que corres ponda la
facturación, los costes de los s ervicios de ajus te del s is tema y, en s u caso, otros cos tes
as ociados al s uminis tro.

• Los peajes de acces o y cargos que corres pondan.

• Los costes de comercialización que corres pondan.

P or último, las C omercializadoras de R eferencia es tán obligadas a realizar ofertas anuales en


las que el precio del suminis tro de energía eléctrica s ea fijo para los cons umidores con
derecho a P V P C .

75
V er R eal Decreto 216/2014

40
E lectricidad
2. Normativa

2.4. G arantía de s uminis tro y planificación de las infraes tructuras


Dado el carácter de servicio esencial del suministro eléctrico, una de las principales
preocupaciones de las autoridades reguladoras, tanto nacionales como europeas, es la de
garantizar que todos los consumidores tengan acceso a la energía eléctrica en igualdad de
condiciones 76. La LS E y s us res pectivas modificaciones establecen que todos los
cons umidores tienen derecho a acceder y conectars e a las redes de trans porte y dis tribución
de energía eléctrica en el territorio nacional y que las empres as de dis tribución tienen la
obligación de atender en condiciones de igualdad las demandas de nuevos s uminis tros
eléctricos y la ampliación de los exis tentes (ver Mecanis mos de protección de los cons umidores
de electricidad y de gas en E s paña).

E l s uminis tro de electricidad, as í como la pres tación de otros s ervicios energéticos , es tá


condicionado por la idoneidad de las infraes tructuras que dan s oporte a las actividades
relacionadas con el mismo. Debido a la naturaleza de las infraes tructuras de redes, el periodo
des de que s e identifica la neces idad de invertir has ta la puesta en funcionamiento de las
ins talaciones s uele extenders e varios años . La Ley 24/2013 del S ector E léctrico (LS E ), en su
Artículo 4, establece que la planificación eléctrica tendrá carácter indicativo s alvo en lo que s e
refiere a instalaciones de trans porte y que dicha planificación s erá realizada por el E s tado con
la participación de las C omunidades Autónomas , s iendo s ometida al C ongres o de los
Diputados 77.

E s ta planificación tiene en cuenta la previs ión de la demanda eléctrica y debe res petar el
principio de libre iniciativa empres arial en el s ector de generación en términos que fomente un
adecuado equilibrio entre la eficiencia del s is tema, la s eguridad de s uminis tro y la protección
del medio ambiente.

Los planes de des arrollo de la red de trans porte, que s e deberán incluir en la planificación
eléctrica, recogerán las líneas de trans porte y s ubes taciones previs tas, abarcarán periodos de
s eis años e incluirán criterios y mecanismos de flexibilidad en cuanto a s u implementación
temporal para adaptars e a la evolución real de la demanda de electricidad, s in perjuicio de s u
revis ión periódica cuando los parámetros y variables que s irvieron de bas e para s u elaboración
hubieran variado.

E l s uministro de electricidad, as í La planificación de la red de trans porte de


energía eléctrica s e llevará a cabo
como la prestación de otros s ervicios s ujetándos e al principio de s os tenibilidad
energéticos , es tá condicionado por la económica y financiera del s is tema
idoneidad de las infraestructuras que eléctrico teniendo en cuenta los límites de
dan s oporte a las actividades invers ión anual que s e establezcan
reglamentariamente.
relacionadas con el mis mo

Has ta el momento, la Adminis tración ha elaborado cuatro documentos de planificación


conjuntos para los s ectores de electricidad y gas.
76
La Directiva 2003/54/C E confiere al s uministro eléctrico la categoría de s ervicio univers al para los cons umidores domés ticos (y para
las pequeñas empres as cuando los E stados miembro lo cons ideren adecuado), lo que implica que dichos cons umidores tienen el
derecho (la opción) de optar al s uministro eléctrico en condiciones fijadas por el regulador. P ara garantizar la pres tación de es te
s ervicio univers al, la Directiva establece que los E s tados miembro podrán des ignar un s uministrador de último recurs o.
77
E l R eal Decreto 1955/2000 concretó que dicha planificación s erá realizada por el G obierno a propues ta del Minis terio de E conomía
con la participación de las C omunidades Autónomas .

41
E lectricidad
2. Normativa

• E n s eptiembre de 2002, s e publicó el primero de ellos , que abarcaba el periodo 2002-


2011.

• E n el año 2006 s e elaboró una revis ión del citado documento donde s e actualizaban
s us previs iones .

• E n mayo de 2008 s e publicó el tercero de ellos , que abarcaba el periodo 2008-2016. 78

• P or último, el 16 de octubre, el C ons ejo de Minis tros aprueba el P lan de des arrollo de
la R ed de T rans porte de E nergía E léctrica 2015-2020.

P or otro lado, el G obierno podrá aprobar, con carácter indicativo, planes relativos al
aprovechamiento energético de las fuentes de energía renovables y de eficiencia energética
en el s ector eléctrico, al objeto de favorecer el cumplimiento de los objetivos que pudieran
es tablecers e para E s paña en estas materias, derivados de la pertenencia a la Unión E uropea.

E l artículo 10 del R eal Decreto-ley 13/2012 publicado en marzo de 2012 por el G obierno
es tablece que, el Operador del S is tema (R E E ) tiene que realizar una revis ión de la nueva
planificación con el objetivo de adaptarla a la s ituación económica nacional y a las nuevas
previs iones de demanda y cons umo de electricidad.

El proceso de liberalización del sector eléctrico. La Directiva 2003/54/CE estableció un


calendario (Tabla 2-4) de apertura y liberalización gradual del mercado minorista de
electricidad, fijando como objetivo que antes del 1 de julio de 2007 todos los consumidores
pudieran elegir libremente su proveedor de electricidad. En España, la liberalización del
mercado minorista se inició en 1998, con la adopción de un calendario de elegibilidad
progresivo que determinaba la posibilidad de elección de los consumidores para participar en
el mercado eléctrico en función, en sus primeras etapas, del volumen de consumo, y luego, de
la tensión de suministro. Este proceso culminó antes de lo previsto inicialmente el 1 de enero
de 2003, fecha en la que se alcanzó la plena apertura del mercado. Desde entonces todos los
consumidores pueden, desde esa fecha, contratar el suministro en condiciones libremente
pactadas con el comercializador de su elección.

78
Ver: Planificación de los sectores de electricidad y gas 2008-2016.

42
E lectricidad
2. Normativa

Umbrales de
elegibilidad Nivel de apertura
T abla 2-4. Norma Fecha de efecto (consumo anual o del mercado (%
tensión de consumo)
C alendario de
suministro)
elegibilidad para
Ley 54/1997 01/01/1998 Superior a 15 GWh 26%
los cons umidores
Real Decreto
de electricidad. Ley 2820/1998
01/01/1999 Superior a 5 GWh

01/04/1999 Superior a 3 GWh


Fuente: CNMC y 01/07/1999 Superior a 2 GWh
elaboración propia. 01/10/1999 Superior a 1 GWh 46%
Tensión de suministro
01/07/2000 54%
> 1.000 V
Real Decreto Todos los
01/01/2003 100%
Ley 6/2000 consumidores

A lo largo de todo el periodo transcurrido desde la entrada en vigor de la primera LSE han
coexistido dos modalidades de contratación, libre y regulada. Los denominados clientes
cualificados 79 podían optar por negociar s u s uminis tro con los comercializadores en el
mercado libre. P or otra parte, la participación obligatoria en el mercado de los dis tintos tipos de
cons umidor venía marcada por la des aparición de las tarifas integrales corres pondientes.
Has ta la desaparición de las tarifas integrales en alta tens ión en julio de 2008, una gran parte
de los clientes elegibles podían cons umir a precios regulados fijados por la Adminis tración.

La evolución de la participación de los cons umidores en el mercado libre ha evolucionado de


manera lenta y dis continua, en parte debido al calendario de elegibilidad y en parte debido a la
exis tencia de tarifas integrales que des incentivaban la participación de los cons umidores en el
mercado.

A partir del 1 de enero de 2003, fecha en la que s e alcanzó la elegibilidad plena para todos los
cons umidores, la participación en el mercado liberalizado s e incrementó gradualmente has ta
julio de 2005. A partir de es e momento, esta tendencia s e invirtió debido al fuerte incremento
de precios de la energía en el mercado eléctrico, que no s e vio reflejado en las tarifas
reguladas , generando un déficit estructural de ingres os en el s ector (ver E l déficit tarifario: qué
es , cons ecuencias y s olución). E l des cens o en los precios del mercado acaecido a partir del
2007, junto con la reducción de las tarifas de acces o y la des aparición de las tarifas reguladas
de alta tens ión el 1 de julio de 2008, provocó un nuevo incremento de tasa de participación en
el mercado liberalizado.

79
La primera LS E definía a los cons umidores cualificados como aquellos que tienen capacidad para elegir s uminis trador de
electricidad.

43
E lectricidad
2. Normativa

99% 99% 99% 99% 99%


100
F igura 2-3.
P roporción
79%
del cons umo 80 75%
73%
total y del
número de 59%
Proporción [%]

60 57%
cons umidores 50% 49%
53%

en el
40%
mercado 40 35%
38% 36%
31% 31%
libre. 27%
25% 24%
20%
20
Fuente: CNMC 9% 9%
7% 7%
y elaboración 3%
0% 10%
propia. 0
2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017

% consumidores en el mercado liberalizado


% consumo en el mercado liberalizado

Según datos de la CNMC (Figura 2-3), en 2017 el 40,9% de los clientes (menos del 1% del
volumen de energía consumido) todavía están acogidos al Precio Voluntario para que
Pequeño Consumidor (PVPC) (ver El precio voluntario para el pequeño consumidor),
adquiriendo energía a un precio marcado por el Gobierno. Esto se debe a que esta tarifa es
muy competitiva y resulta difícil encontrar mejores ofertas en el mercado libre: la media de un
ahorro potencial anual en España se estima en menos de 5 €/año con respecto a la TUR,
actualmente PVPC, mientras que en otros países como Alemania o Bélgica los ahorros
pueden alcanzar hasta las 200 €/año y 190 €/año respectivamente 80. E s to s ugiere que hasta
que s e produzca una mayor liberalización del mercado, el P V P C va a s eguir s iendo la
referencia para el cons umidor doméstico.

El mercado ibérico de la electricidad (MIBEL). La colaboración entre España y Portugal


para la creación de un Mercado Ibérico de la Electricidad se inició en 2001, tras la entrada en
vigor de la primera Directiva comunitaria (Directiva 96/92/CE 81). En noviembre de ese año se
firmó un Protocolo de Colaboración entre los gobiernos de España y Portugal en el que se
estableció un calendario para la integración gradual de los respectivos sistemas eléctricos en
un mercado único ibérico, así como los principios rectores del MIBEL. Desde entonces se ha
ido avanzando progresivamente en la creación del MIBEL con los sucesivos convenios y
acuerdos alcanzados entre los dos gobiernos en los últimos años. 82

El MIBEL es, por definición, un conjunto de mercados, organizados o no, donde se realizan
transacciones de energía eléctrica y se negocian instrumentos financieros. Con la aparición del
MIBEL se contribuye a crear un mercado regional cumpliendo con lo establecido en la
Directiva 2003/54/CE 83 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 26 de junio de 2003, sobre

80
V er Diez temas candentes del s ector eléctrico es pañol para 2012
81
V er Directiva 96/92/C E .
82
E n octubre de 2004 s e firmó el Acuerdo de S antiago de C ompostela entre P ortugal y E s paña, que ponía en marcha un plan de
acción para avanzar en la creación del MIB E L. E n enero de 2008 s e firmó en B raga el C onvenio que revis a el C onvenio firmado
anteriormente en S antiago de C ompos tela en 2004.
83
V er Directiva 2003/54/C E .

44
E lectricidad
2. Normativa

normas comunes para el Mercado Interior de la E lectricidad, para favorecer los intercambios y
la competencia entre las empres as de es te s ector.

La creación del MIB E L 84 implica que cualquier cons umidor dentro de la peníns ula ibérica tiene
la pos ibilidad de adquirir energía eléctrica, en un entorno de libre competencia, a cualquier
productor o comercializador que actúe en P ortugal o E s paña. E l principal objetivo del MIB E L
es beneficiar a los consumidores de electricidad de los dos país es mediante la integración de
los res pectivos s is temas eléctricos , des arrollando un mercado único competitivo que genere
un precio de referencia único para toda la peníns ula Ibérica y permita a todos los participantes
acceder libremente al mercado, en condiciones de igualdad de derechos y obligaciones ,
incentivando la eficiencia económica de las empres as que operan en el mercado.

La Comisión Europea junto con The Council of European Energy Regulators (CEER) han
diseñado un modelo objetivo de cómo debería ser el Mercado Interior de la Electricidad en
2014. El objetivo de este modelo es asegurar un óptimo uso de las plantas de generación de
electricidad y de la red de infraestructuras de transporte en toda Europa. La creación entre
España y Portugal del MIBEL supone un adelanto en Europa con respecto a este modelo.

84
El MIBEL está formado por un conjunto de mercados organizados de energía y capacidad y mercados no organizados (contratación
bilateral “over the counter”) en los que se realizan transacciones de contratos de compra y venta de energía eléctrica y otros servicios
(p. ej., servicios de ajuste). El mercado ibérico de energía eléctrica de contado (mercado diario), en operación desde julio de 2007, es
gestionado por el Operador del Mercado español (OMEL), mientras que el mercado organizado a plazo es gestionado por una
sociedad portuguesa (OMIP).Para más información sobre el funcionamiento del MIBEL consultar el documento ”Descripción del
funcionamiento del MIBEL”, Consejo de Reguladores del MIBEL, noviembre de 2009.

45
E lectricidad
3. G eneración

3. G eneración
3.1 T ecnologías y cos tes de la generación eléctrica
Definición de energía. En física, la energía se define como la capacidad de un cuerpo o
sustancia para realizar un trabajo. Atendiendo a aspectos tecnológicos y económicos, la
energía se refiere a un recurso natural que adecuadamente manipulado y transformado es
capaz de realizar un trabajo, es decir, a su transformación se le puede dar un uso industrial y
tener, por tanto, un sentido económico.

La energía como tal, ni se crea ni se destruye, sólo se transforma. No obstante, el hecho de


que las transformaciones empleadas no sean reversibles hace que la energía se degrade y
que, a la postre, no sea posible extraer más trabajo del recurso natural del que se parte
inicialmente. Toda trasformación del recurso natural para producir trabajo tiene un impacto,
mayor o menor, sobre el medio ambiente. La cantidad disponible de recursos naturales
susceptibles de realizar trabajo es lo que se conoce como “recursos energéticos”.

La actividad de generación. La actividad de generación consiste, de forma simplificada, en


transformar – mediante una tecnología concreta – una energía primaria (nuclear, térmica,
hidráulica, eólica, solar, etc.) en energía eléctrica. Cada tecnología de generación tiene su
propia estructura de costes y características técnicas:

• C ada tecnología res ulta es pecialmente adecuada técnica y económicamente para


pres tar un s ervicio concreto en relación con la cobertura de la demanda eléctrica.

• T odas las tecnologías son neces arias , ya que se complementan para s uminis trar de la
forma más adecuada pos ible (en términos de cos te y s eguridad de s uminis tro) la
energía que demandan los cons umidores en cada momento.

A modo de ejemplo, hay tecnologías con cos tes fijos muy altos (amortización de la invers ión,
parte fija del cos te de operación y mantenimiento, etc.) pero con cos tes variables muy bajos.
E s tas tecnologías s on las más adecuadas para producir un número de horas al año muy
elevado. P or el contrario, hay tecnologías con cos tes fijos muy bajos , pero con costes
variables muy altos . E s tas tecnologías s on las más adecuadas para producir durante un
número reducido de horas al año (aquellas en las que la demanda es más alta).

Adicionalmente, una caracterís tica propia de la electricidad es la impos ibilidad de almacenar


energía en cantidades elevadas . P or ello, s e debe producir en cada instante exactamente la
energía que s e demanda. Dada la volatilidad en el corto plazo de la demanda y de la
producción con energías renovables , s on neces arias tecnologías que puedan
incrementar/reducir s u producción muy rápidamente para poder s eguir las variaciones de la
demanda neta de la producción con renovables (ver E nergías R enovables : tecnología,
economía, evolución e integración en el s istema eléctrico).

P or último, es cada vez más neces ario dis poner de tecnologías que permitan s atisfacer las
res tricciones medioambientales (generar electricidad s in contaminar) y que aporten s eguridad
de s uminis tro en el s entido de mitigar el riesgo de, por ejemplo, des abas tecimiento de
combustibles provenientes del exterior (riesgo geopolítico) o el derivado de factores no
controlables , por ejemplo, la hidraulicidad (ver Ins os tenibilidad del s is tema energético y vías de
s olución).

46
E lectricidad
3. G eneración

As í, es evidente que cada tecnología pres ta un s ervicio concreto en la cobertura de la


demanda total que todas ellas s on neces arias ya que s e complementan unas con otras para
s uminis trar la energía demandada en cada momento de la forma más adecuada pos ible en
términos técnicos , económicos y medioambientales .

A continuación, s e pres entan de forma breve las caracterís ticas más relevantes de las distintas
tecnologías de generación de energía eléctrica:

Tecnologías de generación eléctrica. Centrales hidráulicas. Estas centrales aprovechan la


energía de una masa de agua situada en el cauce de un río o retenida en un embalse,
convirtiéndola en energía eléctrica a través de un generador acoplado a una turbina. Se
pueden distinguir tres tipos:

• C on agua embals ada, las cuales almacenan agua en un embals e de gran capacidad y
producen electricidad en función de las expectativas s obre el valor futuro de dicha agua
embals ada (precio es perado del mercado) y las precipitaciones futuras (aportes de
agua al embals e).

• Hidráulicas fluyentes , las cuales no dis ponen de grandes embals es (almacenamiento


limitado), dependiendo su producción bás icamente del aporte de agua recibido en cada
momento.

• De bombeo o revers ibles , que cons iguen la energía a bas e de bombear agua des de un
nivel s ituado a una altura inferior a la de las turbinas , has ta un embals e s ituado por
encima de las mismas (cons umiendo electricidad para ello), para, con pos terioridad,
producir electricidad turbinando el agua previamente elevada. G eneralmente, bombean
cuando el precio de la electricidad es bajo y generan (turbinando el agua previamente
bombeada) cuando el precio de la electricidad es elevado, obteniendo as í un margen y
contribuyendo a estabilizar los precios del mercado. S e pueden clas ificar en dos tipos:
las de bombeo puro, en las que el embals e s uperior es un gran depós ito cuya única
aportación de agua es la que s e bombea del embals e inferior, y las de bombeo mixto,
en las que el embals e s uperior tiene también aportaciones naturales.

Las centrales con agua embals ada y de bombeo s on, por lo general, muy flexibles
(pueden incrementar/reducir s u producción muy rápidamente), por lo que s on
técnicamente adecuadas para res ponder a variaciones de la demanda y/o de la
producción con renovables intermitentes y a fallos imprevis tos en otras unidades de
generación o interconexiones internacionales en el corto plazo.

La energía que las centrales con agua embals ada y las fluyentes producen en un horizonte
anual depende directamente de las aportaciones hidráulicas anuales (año s eco/ año húmedo).

Los costes fijos de todas es tas tecnologías s on elevados (maquinaria compleja, grandes obras
hidráulicas y embals es ) y s us cos tes variables no s on nulos. E sto último es es pecialmente
relevante en el cas o de las centrales de bombeo, las cuales :

• Deben comprar electricidad para bombear.

• S ufren una pérdida de rendimiento (la energía obtenida al turbinar es menor que la
utilizada para bombear).

47
E lectricidad
3. G eneración

Aunque los ingres os unitarios de las centrales con agua embals ada y de bombeo s on mayores
que el precio medio del mercado (ya que concentran s u producción en las horas de precios
elevados ), s us ingres os abs olutos no lo s on tanto, ya que producen un reducido número de
horas al año. E sto, junto con s us elevados costes fijos y costes variables no nulos
(es pecialmente en el caso del bombeo), hace que la rentabilidad realmente obtenida por estas
tecnologías s ea moderada (en la línea con la obtenida por otras tecnologías de producción).

Adicionalmente, y en contra de lo que pudiera parecer cons iderando que la hidráulica s e trata
de una tecnología madura, la mis ma no es tá ni mucho menos agotada en E s paña. E n T abla
3-1, s e pres enta el potencial des arrollado a día de hoy en este tipo de recurs o.

T abla 3-1.
P otencial
actualmente
des arrollado, de
futura utilización
y bruto en Potencial Potencial de futura utilización Total
E s paña Actualment
potencial Potenci
Cuenc técnicament al
[G W h/año]. e Aprovechamien
Aprovechamient
a e fluvial
desarrollad to medianos y Total
os pequeños desarrollabl bruto
Fuente: o grandes
e
MINETAD, Plan Total
de Energías cuenca 31.600 27.300 6.700 34.000 65.600 150.360
Renovables en s
España 2011-
2020 y
elaboración
propia.

Tecnologías de generación eléctrica. Centrales nucleares. Esta tecnología se basa en la


fisión (rotura) de los núcleos de uranio. El calor obtenido de la misma se utiliza para producir
vapor, el cual se turbina para producir electricidad.

Las centrales nucleares no emiten ningún tipo de gas contaminante a la atmósfera, aunque sí
generan residuos nucleares que deben ser albergados en depósitos aislados y controlados
durante largo tiempo debido a su impacto radiactivo.

Las centrales nucleares tienen un régimen de funcionamiento significativamente rígido (tardan


días en arrancar y alcanzar el máximo nivel de producción). Por ello, su capacidad para variar
su nivel de producción en el corto plazo es limitado.

Desde un punto de vista económico, sus costes fijos son muy elevados y sus costes variables
relativamente bajos. Las cada vez mayores exigencias de seguridad, así como el incremento
de las inversiones para extender su vida útil, hacen que los costes fijos hayan crecido
significativamente respecto a los existentes en el pasado (ver Competencia en el mercado
eléctrico). No obstante, la introducción de los derechos de emisión (ver El esquema cap and
trade en Europa y los incentivos a reducir emisiones) ha aumentado la competitividad de esta
tecnología debido a los siguientes factores:

• Incremento de s us ingres os debido a la internalización del cos te del C O 2 en el precio


del mercado (ver La internalización del cos te del C O 2 en el precio de la energía).

48
E lectricidad
3. G eneración

• S us cos tes no s e ven afectados , ya que esta tecnología no emite C O 2.

As í, la introducción de los derechos de emis ión res ulta en un incremento del beneficio
es perado de las nucleares , lo que implica una mejora de s u competitividad frente a otras
tecnologías . E s ta mejora es coherente con el objetivo de reducción de emis iones (incentivo a
una tecnología no emis ora).

S in embargo, a través de los R eal Decreto-ley 3/2006 y 11/2007, a las centrales nucleares en
E s paña s e les impus o la detracción de los mayores ingres os por el C O 2 internalizado en el
precio del mercado, a pes ar de no recibir derechos gratuitos, lo que eliminaba dicha mejora de
s u competitividad/incentivo a una tecnología no emis ora. E l R eal Decreto-ley 6/2009 vino a
derogar dichas detracciones a partir del 1 de julio de 2009.

C on la Ley 15/2012, la carga fis cal de las centrales nucleares s e ha vis to incrementada con
nuevos tributos y tas as medioambientales que gravan entre otros , los ingres os por la venta de
electricidad o el combustible nuclear gas tado, generando un des equilibrio en la es tructura de
ingres os y cos tes convencional de las centrales . P or es te motivo, aunque las centrales
nucleares s on competitivas en cos tes operativos , s e enfrentan a un problema de elevada
fis calidad.

S i s e contras tan los costes de las centrales de los últimos cuatro años , s e puede obs ervar que
los ingres os recibidos por el pool cubren estrictamente los costes variables, esto es, los costes
operativos, los tributos y la tasa de ENRESA. Sin embargo, los ingresos no cubren las
amortizaciones actuales, es decir, no se recuperan las inversiones ya realizadas. (Figura 3-1)

+10,8
54,9

18,1 44,1

Figura 3-1. Desglose de costes e


ingresos de las centrales
7,0
nucleares (2013-2016). 43% de Amortización
los Tasa ENRESA
ingresos Tributos
Fuente: Cuentas anuales, OMIE y 12,0
elaboración propia Costes de operación
Mercado (pool)

17,8

Costes Ingresos

Relacionado con la industria nuclear, la sociedad


percibe como preocupante la generación de R elacionado con la indus tria
residuos radiactivos. Las centrales generan dos nuclear, la s ociedad percibe
tipos de residuos, los residuos de baja y media como preocupante la
actividad (RBMA), que contienen básicamente
productos de fisión y activación con periodos de vida generación de res iduos
cortos y que, por tanto, pasan a ser inocuos en radiactivos . Las centrales
pocas decenas de años; y los residuos de alta generan dos tipos de
actividad (RAA), formado por productos de vida
larga, principalmente el combustible gastado. En
res iduos, los res iduos de baja
y media actividad (R B MA) y
los res iduos de alta actividad
(R AA)49
E lectricidad
3. G eneración

realidad, la generación de res iduos de “alta actividad”, s upone un problema cuya s olución
tendrá s eguramente una dinámica evolutiva, en función del des arrollo tecnológico de algunas
líneas de actuación que s e es tán llevando a cabo en la actualidad. Hay que tener en cuenta,
que, con la tecnología actual, s olo una pequeña parte del combustible nuclear “s e quema”
(algo más del 1%) y cuanto menos s e queme, mayor s erá la producción es pecífica de
res iduos .

E l combustible ya utilizado y des cargado de los reactores puede ges tionars e de dos formas
diferentes:

• C iclo abierto: s e utiliza es te procedimiento cuando el combustible gastado es


cons iderado como res iduo radiactivo de alta actividad y s e ges tiona almacenándolo en
unas ins talaciones es pecíficas para es e fin y durante un tiempo determinado. E s to s on
los denominados almacenes nucleares o “cementerios nucleares ” y s u vida útil varía
s egún los diferentes país es s ituándos e entre los 50 y 100 años.

• C iclo cerrado: s e utiliza es te procedimiento cuando s e quiere reutilizar parte del


combustible que ya ha s ido previamente irradiado. C ons is te en la recuperación de
ciertos componentes del combustible us ado que tienen potencial energético, como
uranio y plutonio, para emplearlos de nuevo en otros reactores . E l res to de los
componentes que no s e van a utilizar s e acondicionan y s e trans porte a un almacén
temporal de res iduos radiactivos .

La gestión final en ambos cas os de los res iduos s e s itúa en un emplazamiento geológico
es table.

E n cualquier cas o, el volumen de res iduos de alta actividad, es una pequeñís ima fracción de
los generados con cualquier otra tecnología convencional. C omo ejemplo, puede citars e, que
todos los res iduos de alta actividad producidos por la C entral Nuclear J os é C abrera (E s paña),
en s us cas i 40 años de operación, caben en 16 contenedores de 3m de diámetro y 3m de alto.

Además , la energía nuclear aporta firmeza al s istema eléctrico produciendo 24 horas al día.
C on tan s olo el 8% de la potencia ins talada, produce el 22% de la generación nacional
penins ular, libre de emis iones de C O 2, contribuyendo al cumplimiento de los objetivos de
política energética de la Unión E uropea.

Tecnologías de generación eléctrica. Centrales térmicas convencionales (carbón, gas


natural y fuelóleo). Esta tecnología se basa en quemar algún tipo de combustible fósil para
producir vapor, el cual es turbinado para producir electricidad. Los combustibles utilizados
básicamente son carbón, gas natural y fuelóleo.

Este tipo de centrales (muy especialmente las de carbón y fuelóleo) tienen un gran impacto
ambiental debido a la emisión de gases contaminantes y partículas a la atmósfera. Para paliar
en la medida de lo posible este efecto negativo, se están incorporando a las centrales diversos
elementos y sistemas que permiten reducir dichas emisiones (p.ej., desulfuradoras).

Las centrales de carbón pueden ser, a su vez, de carbón importado o de carbón autóctono.
Aunque podría argumentarse que el carbón autóctono mejora el grado de autoabastecimiento
energético nacional (el cual no es problemático gracias a la amplia diversificación de orígenes
de combustibles de la que disfruta España/infraestructuras de entrada de los mismos), el
carbón importado tiene un coste normalmente inferior (el precio del carbón en los mercados
internacionales está generalmente por debajo del coste de extracción del carbón autóctono),

50
E lectricidad
3. G eneración

mayor poder calorífico, mejores cualidades medioambientales (menos emis iones y partículas
en s u combus tión), divers ificado geográficamente y exis tente en país es con reducido riesgo
geopolítico.

Las centrales de fuelóleo y las de gas natural son flexibles (modifican su nivel de producción
con cierta rapidez), mientras que las de carbón son s ignificativamente rígidas .

Tecnologías de generación eléctrica. Centrales térmicas de ciclo combinado. En estas


centrales, la energía térmica del gas natural es transformada en electricidad mediante dos
ciclos termodinámicos consecutivos – primero una turbina de gas y después una turbina de
vapor.

Esta tecnología tiene una alta eficiencia (rendimiento muy superior al de cualquier otra central
térmica convencional) y es poco contaminante (emisiones de CO2 por unidad producida
menores que las de centrales térmicas convencionales, emisiones de SOx y NOx
prácticamente nulas y tasas de emisión de partículas muy reducidas).

Son muy fiables (las tasas de fallo más bajas de todo el parque de generación) y muy flexibles.
El principal inconveniente es la dependencia de un combustible que proviene, en su mayor
parte, de países con poca estabilidad política. Para contrarrestar este riesgo, España es uno
de los países del mundo con un mayor potencial de diversificación de orígenes de gas natural
gracias al fuerte desarrollo de regasificadoras, lo cual de hecho resulta en una elevada
seguridad de suministro.

Tecnologías de generación eléctrica. Cogeneración. Son instalaciones en las que se


obtiene de forma simultánea electricidad y energía térmica útil (calor o frío). Estas centrales
tienen tamaños que van desde unos pocos MW a grandes instalaciones (más de 50 MW). Esta
tecnología reduce la emisión de contaminantes debido a su elevado rendimiento (en torno al
80-90%) ya que es necesario utilizar menos combustible que si se produjeran electricidad y
calor/frío mediante procesos separados. La Figura 3-2 representa de manera gráfica el
proceso de una de estas plantas.

Figura 3-2. Industria


Proceso de Hasta un
una central Combustible
Sistema CHP 90% de
de (Combined Heat & Electricidad y Comercios
10 0
cogeneración Power) Calor
.
Calor/Frío a
Pérdidas viviendas
Fuente: Cogen 10 %
España y
elaboración
propia.

Tecnologías de generación eléctrica. Generación eólica. Estas instalaciones producen


electricidad a partir de la energía cinética del viento. Generalmente se agrupan en un mismo
emplazamiento varios aerogeneradores, formando “parques eólicos”, que pueden superar los
100 MW. No produce ninguna emisión contaminante y no requiere de energías primarias
suministradas desde mercados internacionales (favorecen el autoabastecimiento). No

51
E lectricidad
3. G eneración

obs tante, puede producir impacto vis ual y ofrecen una producción intermitente (dependen de la
ocurrencia del viento).

E n la actualidad, la energía eólica es una de las fuentes renovables que ha alcanzado un


mayor grado de madurez, especialmente la terrestre (u “on-shore”). Por ello, presenta unas
importantes expectativas de incrementar su contribución futura al abastecimiento energético
interno –nacional y europeo.

Asimismo, está proliferando también el desarrollo de parques de generación eólica marina (u


“off-shore”), con características diferenciadas frente a las instalaciones en tierra – el recurso
eólico en el mar es superior (mayor utilización de la instalación), el impacto visual y acústico es
menor.

Tecnologías de generación eléctrica. Generación solar. Existen básicamente dos formas


de aprovechar la energía solar para producir electricidad:

• T ecnología s olar fotovoltaica (transforma directamente la energía s olar en electricidad


mediante “células s olares ” bas adas en materiales s emiconductores que generan
electricidad cuando incide s obre ellos la radiación s olar).

• T ecnología s olar termoeléctrica (bas ada en el aprovechamiento de la energía del s ol


para la obtención de energía eléctrica a través del calentamiento de un fluido).

La generación con es tas ins talaciones (que pueden s uperar los 50 MW ) no produce emis iones
contaminantes . S in embargo, tienen cos tes de invers ión muy elevados , s iendo por el momento
tecnologías inmaduras .

Tecnologías de generación eléctrica. Biomasa. E stas centrales s on s imilares a las térmicas


convencionales , con la diferencia de que el combus tible utilizado es de origen orgánico. La
As ociación E s pañola de Normalización y C ertificación (AE NOR ), utiliza la definición de la
E s pecificación T écnica E uropea C E N/T S 14588 para catalogar la “biomas a” como “todo
material de origen biológico excluyendo aquellos que han s ido englobados en formaciones
geológicas s ufriendo un proces o de mineralización”. E fectivamente, es tas instalaciones ,
normalmente de pequeño tamaño (actualmente de 30-40 MW ), aprovechan materias orgánicas
de origen vegetal o animal (“biomas a”) procedentes de res iduos (fores tales , agrícolas , de
transformación agropecuaria o de la madera, etc.) o de cultivos energéticos .

De acuerdo con s u procedencia s e pueden establecer los s iguientes s ubs ectores :

• F ores tal: biomas a generada en los tratamientos y aprovechamientos de las mas as


vegetales .

• Agrícolas : biomas a generada en las labores de cultivos agrícolas , leños os y herbáceos ,


tanto en las labores de poda de árboles como en la cos echa y actividades de recogida
de productos finales .

• Industrial fores tal y agrícola: biomas a a partir de los productos, s ubproductos y


res iduos generados en las actividades indus triales fores tales y agrícolas .

• C ultivos energéticos: biomas a a partir de cultivos y/o aprovechamientos de es pecies


vegetales destinados específicamente a la producción para us o energético.

52
E lectricidad
3. G eneración

Tecnologías de generación eléctrica. Energías del mar. Los mares y océanos constituyen
el mayor colector solar y el sistema de almacenamiento de energía más grande del mundo, lo
que supone un enorme potencial energético que, mediante diferentes tecnologías, puede
contribuir a satisfacer las necesidades energéticas actuales. El recurso energético existente en
el mar se manifiesta de distintas formas, como oleaje, corrientes marinas, mareas, diferencias
de temperaturas o gradientes térmicos y diferencias de salinidad, lo que da lugar a las
diferentes tecnologías para el aprovechamiento de la energía del mar:

• E nergía de las mareas o mareomotriz – bas ada en el as cens o y des cens o del agua del
mar producido por la acción gravitatoria del S ol y la Luna.

• E nergía de las corrientes – bas ada en la energía cinética contenida en las corrientes
marinas, que proporcionan un flujo energético cons tante y predecible, a diferencia de
otros s is temas.

• E nergía maremotérmica – bas ada en el gradiente térmico definido por la diferencia de


temperaturas entre la superficie y las aguas profundas , como res ultado del grado de
penetración del calor s olar en el agua del mar.

• E nergía de las olas o undimotriz – producida por el movimiento ondulatorio de la


s uperficie del agua del mar.

• E nergía azul o potencia os mótica – obtenida por la diferencia en la concentración de


s al entre el agua de mar y el agua dulce de los ríos mediante los proces os de ós mos is .

Tecnologías de generación eléctrica. Geotermia. La energía geotérmica es la almacenada


en forma de calor bajo la s uperficie de la tierra s ólida y s upone el recurs o energético renovable
más importante, des pués del s ol. S e trata de una de las fuentes menos conocidas y que, a
diferencia del resto de renovables , s u origen proviene del calor del interior de la T ierra.

E n la T abla 3-2 s e encuentra un res umen de las caracterís ticas principales de las tecnologías
de generación eléctrica en E s paña.

53
E lectricidad
3. G eneración

Coste de Coste fijo Coste variable Funcionamien Seguridad de


de de generación to (horas a
Tecnología Emisiones
explotación en el corto plena
1 2 4
inversión plazo 3 potencia/año) suministro

• T écnica: alta

• Abas tecimiento: alta (pes e a que res ervas


de uranio limitadas , des arrollos tecnológicos No emiten (aunque
Nuclear Muy alto Alto Muy bajo 8.000 permitirán mayor aprovechamiento / genera residuos con
reutilización combus tible / combus tibles larga vida)
alternativos)

• F lexibilidad: muy baja

• T écnica: alta

Hidráulica • Abas tecimiento: media-alta (en función de


Muy alto Medio Muy bajo 1.500-2.000 No emiten
regulable capacidad del embals e)

• F lexibilidad: muy alta

• T écnica: alta

Hidráulica • Abas tecimiento: baja (en función de las


Alto Medio Muy bajo 1.500-2000 No emiten
fluyente aportaciones hidráulicas de corto plazo)

• F lexibilidad: baja

• T écnica: alta
S in emis iones
T abla 3-2. Bombeo Muy alto Medio Medio 1.000-1.500 • Abas tecimiento: alta
directas (indirectas al
cons umir para
C aracterís tica bombear)
• F lexibilidad: muy alta
s de las
principales 3.500 • T écnica: alta

tecnologías de Medio (carbón (des plazadas


por renovables ; • Abas tecimiento: alta (abundancia de
generación en Carbón * Alto Medio
importado) o
alto (carbón his tóricamente, res ervas ; sin ries go geopolítico)
Niveles altos de C O 2,
S O 2, NO x
E s paña. autóctono) 6.000-7.000)

• F lexibilidad: media
Fuente: 2.000 • T écnica: alta
Elaboración
propia. ( des plazadas
• Abas tecimiento: alta (abundancia de Niveles moderados
por renovables ;
Ciclo combinado * Moderado B ajo Medio res ervas ; ries go geopolítico compens ado de C O 2 y reducidos
his tóricamente,
con fuerte diversificación de orígenes ) de S O 2, NO x
5.000-6.000)

• F lexibilidad: muy alta

• T écnica: media-alta (ries go ante


condiciones extremas )

• Abas tecimiento: baja a corto plazo (viento


Eólica Alto B ajo C as i nulo 2.100 intermitente) alta a largo plazo (evita No emiten
importación combus tibles / independencia)

• F lexibilidad: nula

• T écnica: alta

• Abas tecimiento: B ajo (determinado por la


Fotovoltaica Alto B ajo C as i nulo 2.000 No emiten
dis ponibilidad de recurs o s olar)

• F lexibilidad: nula

• T écnica: alta

Nivel bajo o
• Abas tecimiento: B ajo (determinado por la
Termosolar Alto B ajo C as i nulo 2.000 moderado de C O 2 por
dis ponibilidad de recurs o s olar)
s u cons umo de gas

• F lexibilidad: nula

(1) Adquis ición de los equipos de generación y a la construcción (ingeniería, obra civil, etc.).
(2) C os tes de explotación independientes del nivel de producción (s alarios , alquileres, tas as , parte del mantenimiento, etc.).

54
E lectricidad
3. G eneración

(3) E s importante no confundir “costes variables ” con “costes de oportunidad”. Los s egundos s on los que los generadores han de
cons iderar a la hora de realizar s us ofertas al mercado (ver F ormación de precios en el mercado mayorista diario de la
electricidad).
(4) Medida en términos de a) garantía de dis ponibilidad técnica en los momentos de mayor demanda; b) garantía de
abas tecimiento de energía primaria; y c) contribución a la gestionabilidad del S is tema (flexibilidad para ajus tar s u producción
rápidamente, contribuyendo a mantener el equilibrio producción- demanda eléctrica en todo momento).
(*) Depende mucho de la competitividad relativa entre carbón-gas -C O 2.

Características económicas de las tecnologías de generación . Desde el punto de vista


económico, las tecnologías se caracterizan por sus diferentes estructuras de costes y por su
capacidad para adaptarse a las variaciones de la demanda con la suficiente rapidez. Esto hace que
sea eficiente que, en un mismo instante, estén produciendo varias tecnologías diferentes.

Figura 3-3.
Cobertura
ilustrativa de la
curva de
demanda
horaria en un
cierto día por las
distintas
tecnologías.

Fuente: REE y
elaboración
propia.

En la Figura 3-3, se representa la cobertura de una manera simplificada e ilustrativa


eliminando las volatilidades de la oferta y la demanda – la producción renovable no es
constante ni fácilmente predecible, ya que depende de las condiciones climáticas - y se
observa cómo se clasifican las tecnologías atendiendo a las estructuras de costes de cada una
de la siguiente manera:

• T ecnologías de bas e (nucleares, algunas de las centrales de carbón y ciclos


combinados exis tentes), con cos tes fijos relativamente elevados y variables
relativamente bajos.

• T ecnologías de punta (centrales de fuelóleo, turbinas de gas), con cos tes fijos bajos y
variables altos .

55
E lectricidad
3. G eneración

• T ecnologías intermedias (algunas centrales de carbón y ciclos combinados exis tentes ,


centrales hidráulicas regulables ), con cos tes fijos y variables intermedios res pecto a los
de las centrales de bas e y punta.

C ons iderando que hubiera únicamente una tecnología corres pondiente a cada una de las tres
categorías anteriores, el coste total de 1 MW de potencia instalada en función del número de
horas de funcionamiento al año de cada una de ellas s e podría repres entar s egún la F igura 3-
4 85:

Costes [€ ]

CTpunta

CTi =Coste Total de la tecnología i


F igura 3-4. C oste total CVpunta
CFi = Coste Fijo de la tecnología i
CVi =Coste Variable de la tecnología i
en función del número
de horas de CTinterm
. CTi =CFi + (CVi x Horas)
funcionamiento al año. CVinterm.
CTbase
CVbase
Fuente: Elaboración
propia.
CFbase

CFinterm.

CFpunta

Horas de
funcionamiento/año
8.760

A la vista de estas curvas, resulta evidente que cada tecnología es óptima (mínimo coste total)
para un determinado número de horas de funcionamiento esperado al año (Figura 3-5):

Costes [€ ]

CTpunta
• Para unas horas de funcionamiento
esperadas al año entre 0 y P, la tecnología
Figura 3-5.
óptima (mínimo coste total) es la de punta
Tecnologías óptimas • Para unas horas de funcionamiento
en función de las CTinterm
.
esperadas al año entre P y B, la tecnología
horas de óptima es la intermedia
funcionamiento al CTbase • Para unas horas de funcionamiento
año. esperadas al año mayores que B, la
tecnología óptima es la de base

Fuente: Elaboración
propia.

P B 8.760
Horas de
funcionamiento/año

Atendiendo a la demanda, ésta se muestra muy volátil a lo largo de cada una de las horas del año,
mostrando una diferencia muy significativa entre la hora de mínima y máxima demanda anual.
Ordenando la demanda en cada hora del año de mayor a menor, resultaría una curva como la mostrada
en la Figura 3-6, generalmente conocida como “curva monótona de demanda”.

85
El contenido de esta sección se basa, en parte, en el artículo de O. Arnedillo “Modelos de Mercado Eléctrico. Paradigma Competitivo
y Alternativas de Diseño”, publicado en la revista Economía Industrial, número 364/2007.

56
E lectricidad
3. G eneración

Demanda horaria [MW]

F igura 3-6. C urva monótona de


demanda.

Fuente: Elaboración propia.

Horas
8.760

Para cubrir esta demanda de forma óptima (al mínimo coste total) habría que utilizar cada una
de las tecnologías óptimas para cada uno de los rangos de horas de funcionamiento
anteriormente descritos. Cubriendo la demanda de acuerdo a este criterio resulta que cada
tecnología funciona al año un número de horas dentro del cual la misma es óptima, es decir,
es la tecnología de mínimo coste (ver 1º en la Figura 3-6). Así, resulta un parque de
generación (potencia instalada de cada tipo de tecnología) que minimiza el coste total de la
generación eléctrica (ver 2º en la Figura 3-7).

Demanda horaria [MW] Demanda horaria [MW]

Potencia
punta
Potencia
Figura 3-7. intermedia

Cobertura de la Potencia
base
curva monótona
de demanda a º Horas
1ª 8.760 1 8.760
mínimo coste y
Horas Costes [€ ]
potencia Costes [€ ]
CT punta
instalada CT punta

óptima de cada
tipo de
tecnología. CT interm. CT interm.

Fuente: CT base CT base

Elaboración
propia.

B 8.760 P B 8.760
P
Horas de funcionamiento/año
Horas de funcionamiento/año

Por tanto, se observa que para satisfacer la demanda de forma óptima (al mínimo coste) es
necesario que en determinados instantes haya más de una tecnología generando electricidad.
Asimismo, es importante resaltar que sólo si la demanda se satisface al mínimo coste de
producción será posible ofrecer a los consumidores los precios más bajos posibles.

Por último, es necesario considerar que:

57
E lectricidad
3. G eneración

• E n los momentos en los que la demanda varía de forma brus ca (incrementándose o


reduciéndos e), no todas las tecnologías s on capaces de variar s u producción con la
neces aria rapidez. R ecordar que, al no s er la electricidad almacenable, la producción
debe igualar a la demanda en todo momento.

• Lo mismo s ucede cuando las renovables (es pecialmente eólica) varían rápidamente s u
producción (por cambio en las condiciones del viento – cons iderar el caso de tormentas
o temporales). E sta variación de la producción renovable tiene que s er compens ado
con otras tecnologías , las cuales deberán a s u vez variar s u producción en s entido
opues to para mantener el equilibrio producción-demanda (ver E nergías R enovables :
tecnología, economía, evolución e integración en el s is tema eléctrico).

As í, es ta res tricción fís ica hace que, en dichos momentos, parte de la demanda deba s er
s atisfecha por aquellas tecnologías con capacidad de “s eguir” las variaciones de la demanda
y/o de las renovables , aunque éstas no s ean las de menor coste. E ste es otro factor que
explica que en un mis mo ins tante haya diferentes tecnologías generando electricidad.

Estructura de la generación eléctrica en España. Potencia instalada. El parque de


centrales de generación de electricidad en España está caracterizado por un alto nivel de
diversificación. La capacidad instalada en territorio peninsular y extrapeninsular a 31 de
diciembre de 2016 era, según REE, de 105.088 MW (Figura 3-8) De esta capacidad instalada
25% correspondía a ciclos combinados, 19% a hidráulica, 22% a eólica, 10% a carbón y el
resto a nuclear (7%), fuel/gas (2%) y otras tecnologías de energía renovables, cogeneración y
residuos (renovables distintas de la eólica o de alta eficiencia - cogeneración; 15%) (Figura 3-
9). En 2016 se redujo la potencia instalada en un 1% respecto al año 2015 en el sistema
peninsular, debido al cierre de cinco centrales de carbón que sumaban un total de 932 MW.

0 108 106 106 106 105


105 106
99
0 96
90
Figura 3-8. 0 83
Evolución de la 0 78
72
potencia instalada 0
62 65
por tecnología en 0
el sistema 0
español. 0
0
Fuente: REE 0
y elaboración 0
propia.
0
2002 2004 2006 2008 2010 2012 2014 2016

Otra térmica convencional Hidráulica Ciclo combinado


Nuclear RECORE

58
E lectricidad
3. G eneración

100%
90%
F igura 3-9.
80%
E volución de la

Mix energético [%]


compos ición, en 70%
porcentaje, del 60%
parque de 50%
generación en el
40%
s is tema es pañol.
30%

Fuente: REE y 20%


elaboración 10%
propia. 0%
2002 2004 2006 2008 2010 2012 2014 2016

Otra térmica convencional Hidráulica Ciclo combinado


Nuclear RECORE

En el sistema extrapeninsular (islas y Ciudades Autónomas) la capacidad instalada en 2016


era de 5.216 MW, en su mayor parte correspondiente a instalaciones de fuel y gas (2.490 MW)
y de ciclo combinado (1.722 MW).

Estructura de la generación eléctrica en España. Generación de electricidad y cobertura


de la demanda. La estructura de producción es distinta de la estructura de potencia instalada
(Tabla 3-3). En 2016, por ejemplo, el 14% de la demanda en barras de central fue servida por
centrales de carbón, el 11% por ciclos combinados y el 21% por centrales nucleares. La
generación eólica alcanzó el 18%, mientras que la generación hidráulica supuso el 15%.

2014 2015 2016


GWh % GWh % GWh %
Hidráulica 35.459 14% 31.221 12% 39.171 15%
Nuclear 54.870 21% 54.755 21% 56.099 21%
Tabla 3-3. Carbón 43.320 17% 52.789 20% 37.491 14%
Generación de Fuel + Gas 6.257 2% 6.497 2% 6.765 3%
electricidad por Ciclo combinado 25.075 10% 29.291 11% 29.260 11%
tecnología en
Régimen Ordinario 164.981 64% 174.553 66% 168.787 64%
2014-2016 en el
Sistema Eléctrico Hidroeólica 1 0% 9 0% 18 0%
peninsular. Resto hidráulica 7.073 3% 0 0% 0 0%
Eólica 51.031 20% 48.115 18% 47.695 18%
Fuente: REE y
Elaboración propia. Solar fotovoltaica 8.208 3% 8.243 3% 7.965 3%
Solar termoeléctrica 4.959 2% 5.085 2% 5.060 2%
Otras renovables 4.729 2% 3.184 1% 3.426 1%
Cogeneración 25.886 10% 25.449 10% 25.817 10%
Residuos 0 0% 3.298 1% 3.392 1%

59
E lectricidad
3. G eneración

RECORE 101.886 39% 93.384 35% 93.374 35%


Generación 266.867 103% 267.936 102% 262.161 99%
Consumos en bombeo -5.330 -2% -4.520 -2% -4.819 -2%
Intercambios
-3.406 -1% -133 0% 7.667 3%
internacionales
Demanda (b.c.) 258.131 100% 263.283 100% 265.009 100%

Estructura de la generación eléctrica en España. Utilización de la potencia instalada. La


diferencia entre las estructuras de la potencia instalada y de la producción se explica por la
utilización de cada una de las tecnologías de generación. Por “utilización” se entiende la
relación entre energía producida y la potencia instalada, y suele expresarse en horas de
funcionamiento anual a plena carga (considerando que un año tiene 8.760 horas). Así, las
horas de utilización indican el nivel de funcionamiento de la capacidad instalada, el cual viene
marcado por condicionantes físicos y económicos:

• La utilización de las centrales hidráulicas tiende a depender de las aportaciones


hidráulicas del año.

• E s ta dependencia es muy elevada, cas o de la hidráulica s in embals e (fluyente).

• Las hidráulicas con grandes embals es tienen una dependencia menor, al darles dichos
grandes embals es la capacidad de llevar aportaciones hidráulicas de un año a años
futuros .

• E n el cas o de las centrales de bombeo, esta dependencia no exis te. S us horas de


funcionamiento depende en realidad del perfil de precios del mercado (horas de precios
bajos en las que adquieren energía para bombear y horas de precios altos en las que
venden energía).

• E n el período 2006-2012, la hidraulicidad estuvo por debajo de s u media his tórica,


aunque en 2016 s upus o un 15% de la generación eléctrica.

• La utilización de las centrales nucleares es relativamente estable año tras año. Al


tratars e de generación de bas e con unos cos tes variables muy bajos , producen
prácticamente s iempre, independientemente del precio del mercado. As í, la producción
nuclear s e cons idera fluyente.

• La utilización de la potencia de tecnologías de producción a partir de fuentes de


energía renovables , cogeneración y res iduos depende, en s u gran mayoría, de la
dis ponibilidad de s u energía primaria (viento, s ol, biomas a, etc.). E s tán s ubvencionadas
y, en la mayoría de los cas os, tienen costes variables muy bajos, y producen
independientemente del precio del mercado, lo que las convierte igualmente en
fluyentes (ver E nergías R enovables : tecnología, economía, evolución e integración en
el s is tema eléctrico).

• La utilización de la potencia ins talada en centrales térmicas convencionales (como las


de carbón o fuelóleo) y en ciclos combinados depende en gran medida de la
producción de las tecnologías fluyentes y de la de las hidráulicas con embals e y de
bombeo. La parte de la demanda no cubierta por estas tecnologías es lo que s e
denomina “hueco térmico”, que ha de s er cubierto con térmicas convencionales y ciclos
combinados . E n la F igura 3-10 se obs erva una repres entación del hueco térmico en un

60
E lectricidad
3. G eneración

día, s uponiendo una cobertura de la demanda s implificada e ilus trativa eliminando las
volatilidades de la oferta y la demanda.

Hueco térmico

F igura 3-10. Hidráulica regulable / Bombeo


Hueco térmico a
Cobertura de la demanda

cubrir con
térmicas
convencionales y
[GW]

Ciclos/ Carbón / Fuel


ciclos
combinados en
un día
(ilus trativo).

Fuente: Nuclear
Elaboración propia.

No constante ni fácilmente Renovables e hidráulica fluyente


predecible

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24

Hora

Una disminución de la demanda total o un incremento de la producción de las tecnologías


fluyentes / hidráulicas regulables / bombeos lleva a un menor hueco térmico y, por tanto, a una
reducción de la utilización de la capacidad térmica convencional y de ciclos combinados
(Figura 3-11).

61
E lectricidad
3. G eneración

F igura 3-11. Reducción de


F actores que Hueco térmico demanda
Hueco térmico
afectan al
Hidráulica regulable / Bombeo

Reducción demanda
Cobertura de la

Cobertura de la
demanda [GW]

demanda [GW]
Hidráulica regulable / Bombeo

hueco térmico Ciclos/ Carbón / Fuel Ciclos/ Carbón / Fuel


y, por tanto, a
la utilización Nuclear Nuclear

de la
Renovables e hidráulica fluyente Renovables e hidráulica fluyente
capacidad de 0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24 0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24

térmica Hora Hora

convencional y
de ciclos Hueco térmico Hueco térmico
combinados . Hidráulica regulable / Bombeo Hidráulica regulable / Bombeo

Incremento fluyente
Cobertura de la
demanda [GW]

Cobertura de la
demanda [GW]
Ciclos/ Carbón / Fuel
Ciclos/ Carbón / Fuel
Fuente:
Elaboración Nuclear

propia. Nuclear
Incremento de renovables

Renovables e hidráulica fluyente Renovables e hidráulica fluyente


0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24 0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24

Hora Hora

En los últimos años el hueco térmico en el sistema peninsular español se ha venido


reduciendo debido a la combinación de los dos factores antes expuestos:

• La cris is económica provocado una reducción de la demanda de electricidad.

• S e ha producido una entrada mas iva de renovables fluyentes (principalmente eólica y


s olar).

E videntemente, la reducción del hueco térmico ha llevado a una s ignificativa reducción de las
horas de funcionamiento de las tecnologías térmicas convencionales y de los ciclos
combinados , como s e mues tra en la F igura 3-12.

62
E lectricidad
3. G eneración

Ciclos combinados
5.500 5.159
5.000
4.872
4.979
4.500 4.249
3.979 3.983

(1 hora = 8760 horas)


4.000 3.639

Horas de utilización
3.500 3.256
F igura 3-12 3.000
2.492
E volución de las 2.500
2.067 2.066
horas de 2.000 1.736 1.698
utilización de la 1.500

capacidad 1.000

térmica 500

convencional y 0
2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016
ciclos
combinados .
7.000 6.603
Fuente: REE y 6.306
6.500 6.733
Elaboración propia. 6.000 5.778
5.500
4.704 4.726 4.865
(1 hora = 8760 horas)

5.000
Horas de utilización

4.500 4.788 3.929


4.000 3.504 3.690
3.500 3.022
3.000 2.757
2.500
2.000
1.500
1.000
500
0
2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

Esta tendencia de reducción del hueco térmico y de la utilización de la capacidad térmica


convencional y de ciclos combinados continuará a futuro, ya que:

• Aunque es previs ible que la demanda de electricidad s e recupere una vez s uperada la
cris is económica, la introducción de medidas para alcanzar los objetivos de la UE de
eficiencia energética (20% de reducción res pecto al cons umo tendencial a 2020 y al
menos un 27% a 2030) harán que la demanda tenga crecimientos muy modes tos .

• E l objetivo de la UE de alcanzar un 20% a 2020 y al menos un 27% a 2030 de energía


renovable hará que s e siga introduciendo capacidad de generación renovable, la cual
en s u gran mayoría tiene carácter fluyente.

La s uma de una demanda eléctrica que no crecerá y de una introducción adicional de


renovables lleva irremediablemente a una reducción del hueco térmico y de la utilización de la
capacidad térmica convencional y de ciclos combinados (ver E nergías R enovables : tecnología,
economía, evolución e integración en el s istema eléctrico).

63
E lectricidad
3. G eneración

3.2 E nergías R enovables : tecnología, economía, evolución e integración


en el S is tema E léctrico
La energía s e clas ifica en renovable y no renovable en E n fís ica, la energía s e
función de s u capacidad de renovación. S e define
como “recurs o renovable” aquel que no se agota con define como la capacidad
su utilización, debido a que vuelve a su estado original de un cuerpo o s ustancia
después de su uso o se regenera a una tasa mayor o para realizar un trabajo.
igual a la tasa con que el mismo es disminuido por su Atendiendo a as pectos
utilización. Atendiendo a esta definición, es cierto que
algunos recursos renovables podrían dejar de serlo si tecnológicos y
su tasa de utilización fuera tan alta que se impidiera su económicos , la energía s e
total renovación; sin embargo, algunos de esos refiere a un recurs o natural
recursos renovables se pueden clasificar como
perpetuos, ya que no es posible su agotamiento por
que adecuadamente
muy intensiva que sea su utilización 86. Normalmente, la manipulado y
utilización de un recurso o energía renovable tiene la trans formado es capaz de
caracterís tica intríns eca de producir un impacto mucho realizar un trabajo.
menor en el medio ambiente res pecto a la utilización o
transformación de energía no renovable. 87

Recursos o energía renovable. Caracterización y tecnologías. Con fines ilustrativos, se


pueden citar algunos de los recursos renovables actualmente utilizados para la producción de
energía renovable, que son: agua, biomasa, radiación solar, viento. De esta manera (ver
Tecnologías y costes de generación eléctrica):

• E l agua s e utiliza para producir energía eléctrica en centrales hidroeléctricas . La


cantidad de energía que s e puede extraer del agua, en una zona geográfica concreta,
depende del volumen dis ponible as í como de las caracterís ticas orográficas del terreno
por el que trans curre. Las centrales hidráulicas s e s ubdividen en: regulables , fluyentes
y de bombeo.

• La biomas a s e define como “todo material de origen biológico excluyendo aquellos que
han s ido englobados en formaciones geológicas s ufriendo un proces o de
mineralización”. La caracterización de la biomas a es muy compleja debido a la
divers idad de s us tancias que s e incluyen bajo esta denominación: cultivos energéticos
(es pecies leños as y herbáceas ), res iduos forestales y de la indus tria fores tal, res iduos
procedentes de la ganadería y lodos , etc. La combus tión de la biomas a permite obtener
vapor de agua y posteriormente energía eléctrica de forma análoga a lo que s e hace en
las centrales térmicas convencionales . E n general, s e cons idera que la emis ión neta de
C O 2 de la energía producida por la biomas a es nula, ya que el C O 2 emitido (en s u
combustión) ha s ido previamente captado en la formación de la materia orgánica. S e
puede afirmar, por tanto, que la biomas a es un recurs o renovable, s iempre que los
ritmos de explotación sean los adecuados para la zona geográfica de la cual s e
obtiene, evitando un mal us o de este recurs o que pueda conducir a s u agotamiento.

86
A escala humana s e encuentran dentro de esta categoría los recurs os renovables : eólico y s olar.
87
Ins tituto para la Divers ificación y Ahorro de E nergía (IDAE ). “Impactos Ambientales de la P roducción E léctrica: Anális is de C iclo de
V ida de ocho tecnologías de generación eléctrica ”. Madrid, 1999, Y el informe de la C omis ión E uropea “New research reveals the real
costs of electricity in Europe” .2001.

64
E lectricidad
3. G eneración

• E l aprovechamiento de la energía del viento da lugar a lo que s e conoce como energía


eólica. La energía s e obtiene mediante aerogeneradores que aprovechan la energía
cinética del viento transformándola en energía eléctrica. E s te recurso puede calificars e
como perpetuo, y la cantidad potencialmente obtenible en una zona geográfica
concreta depende del régimen de vientos y de la orografía del lugar.

• E l aprovechamiento de la energía de la radiación s olar para la producción de energía


eléctrica s e concreta en dos tecnologías diferentes : fotovoltaica y s olar térmica, y s u
potencial es tá directamente ligado a la latitud geográfica del lugar (horas de luz diaria)
as í como al régimen de nubos idad y al índice de claridad de la zona.

 E n la tecnología fotovoltaica s e produce energía eléctrica directamente


mediante paneles s olares , que s on unos dis pos itivos de material s emiconductor
que transforman la energía de la radiación s olar en energía eléctrica de
corriente continua 88.

 La tecnología s olar térmica utiliza la energía térmica de la radiación s olar para


producir vapor de agua y a partir del mis mo producir energía eléctrica, de forma
análoga a lo que s e hace en una central térmica convencional.

Adicionalmente s e puede decir que, de los cuatro tipos de recurs os renovables des critos, dos
de ellos , el eólico y en menor medida el s olar, pueden pres entar, y de hecho as í lo hacen, un
elevado nivel de aleatoriedad e impredictibilidad en s u producción. Además , estos dos tipos de
energía renovable podrían clas ificars e como intermitentes y de carácter poco ges tionable, y s u
papel s e limita a dis minuir el cons umo de combus tibles fós iles y las emis iones de C O 2, pero al
s er intermitente s u producción no aportan s eguridad de s uminis tro al S is tema en un ins tante
concreto por lo que la seguridad de s uminis tro que requiere la demanda no ges tionable, debe
s er aportada por otras tecnologías . E s tas caracterís ticas intríns ecas de es tas energías tienen
gran importancia a la hora de integrar la energía eléctrica producida a partir de las mismas en
el S is tema E léctrico, como s e verá más adelante (ver S eguridad de s uminis tro).

Economía de las energías renovables. De acuerdo con lo anterior, puede decirse que cada
tecnología renovable presenta unas características propias que condicionan su desarrollo así
como las necesidades de apoyo que le son necesarios. En general, las tecnologías renovables
tienen costes de desarrollo más elevados que las tecnologías convencionales y, a su vez, muy
diferentes entre sí, como puede verse en la Figura 3-13.

La tecnología eólica terrestre y la fotovoltaica son las únicas que están relativamente cerca de
la competitividad. Las tecnologías solar termoeléctrica y eólica marina se encuentran muy lejos
de ser competitivas y todavía necesitan elevados apoyos para asegurar su rentabilidad
económica. A medio camino podría encontrarse la utilización de la biomasa, con una
estimación del coste medio de producción en el entorno de los 4,82 c€/kWh para 2016 según
recoge el PER 89 para biomasa procedente de instalaciones industriales del sector agrícola y
procedente de cultivos energéticos, que en el pasado fueron las fuentes más consumidas; el
coste medio definitivo dependerá de la disponibilidad de biomasa y de que se pueda
establecer un sistema de recogida y transporte de la misma hasta el lugar de quemado que
sea competitivo económicamente.

88
Posteriormente se convierte en corriente alterna y se inyecta al Sistema.
89
Ver Plan de Energías Renovables

65
E lectricidad
3. G eneración

La s ituación actual de cada una de las energías renovables en E s paña y s us horas de


utilización anual s e res ume en lo s iguiente:

• Hidráulica: exis te potencial para el des arrollo de bombeos y ampliación de las centrales
exis tentes , s i bien exis te una limitación importante de nuevos emplazamientos debido a
motivos medioambientales . E n la actualidad exis ten proyectos que totalizan 2.040 MW
de potencia hidráulica ins talada. Las previs iones s egún el P E R para el año 2020
acerca de la potencia ins talada de energía hidráulica alcanza los 26.950 MW en un
es cenario óptimo. Durante el año 2016 la producción hidráulica fue de 39,2 T W h
aproximadamente, lo que repres enta un 15% de la cobertura de la demanda energética
anual (ver T ecnologías y cos tes de generación eléctrica). E s ta cifra es muy matizable
ya que hay que des tacar la variabilidad anual en la producción hidráulica debido al
régimen de pluvios idad que da una variabilidad tan grande que puede ir des de los 20
T W h hasta los 42 TW h.

• E ólica: la terres tre está próxima a la competitividad (dependiendo s iempre del nivel de
precios del mercado) y actualmente la media de utilización (periodo 2006-2016) de la
potencia ins talada es de unas 2.103 horas .

• B iomas a: en nues tro país , s u des arrollo dependerá de s i s e res uelven de forma
s atisfactoria las barreras de integración exis tentes para es te tipo de energía, entre las
que s e pueden citar:

 F alta de continuidad o de s eguridad en el s uminis tro de biomas a.

 Inexis tencia de un mercado de logís tica de s uminis tro de biomas a.

 E levados cos tes del recurs o (la biomas a procedente de cultivos energéticos
tiene un precio muy s uperior al cos te del carbón).

 P roblemas de competencia con el s ector agrícola.

 R es olución de los problemas técnicos exis tentes para la combus tión de


biomas a en las grandes centrales de generación eléctrica.

E n cualquier cas o, el cos te de producción con biomas a, al margen del cos te de


combustible, s ale penalizado res pecto al de las grandes plantas de generación debido
al pequeño tamaño de s us plantas (economía de es cala del cos te de invers ión) y
relativamente bajo rendimiento de s u ciclo termodinámico. Las horas de utilización de la
potencia ins talada fueron de 4.597 horas/año aproximadamente en 2016.

• S olar fotovoltaica: en la actualidad es ta tecnología es tá inmers a en un proces o de


des arrollo y transformación tecnológica importante, por lo que es previs ible que s u
cos te de producción disminuya a corto plazo las horas de utilización de la potencia
ins talada 1.708 horas /año aproximadamente en 2016.

• S olar térmica: en la actualidad es tán identificadas tres tecnologías de concentración


s olar como las de mayor viabilidad técnica y económica. E n orden inverso a s u pos ible
des arrollo: dis cos parabólicos , s istemas de torre y concentradores cilindro -
parabólicos , y, como extens ión de es ta última tecnología, s e encuentran los
concentradores tipo F resnel; en la actualidad s e es pera mejorar la tecnología de todas
ellas . Los as pectos más importantes a mejorar, de cara a mejorar el rendimiento

66
E lectricidad
3. G eneración

tecnológico, s on la reducción de los cos tes en los proces os de fabricación, la mejora de


los s is temas de limpieza de los concentradores y el des arrollo de nuevos fluidos
portadores de calor que permitan el almacenamiento del mis mo. Aparte, cada una de
las tecnologías pres entan s us propios retos ; as í, para los receptores cilindro
parabólicos es neces ario des arrollar receptores más eficientes , de forma que s e
minimicen las pérdidas de captura, s e aumente s u vida útil y s e generen menos
pérdidas al final de cada lazo, mientras que para las centrales de tipo “torre” es
fundamental encontrar materiales que trabajen a mayores temperaturas. Las horas de
utilización de la potencia ins talada varían en función de s i la instalación dis pone o no
de almacenamiento térmico, s uponiendo en el año 2016 una media de 2.201
horas /año. E n el primero de los cas os las horas de utilización podrían alcanzar las
3.500 horas /año y 2.000 horas /año en el cas o de no dis poner de almacenamiento.

C omo res umen, s e puede decir que las tres primeras tecnologías han alcanzado un nivel de
madurez, por lo que no s e es peran cambios importantes ni en s u cos te de des arrollo ni en s us
caracterís ticas tecnológicas , mientras que las dos últimas es tán inmersas en un proces o de
des arrollo y mejora. E sto s e refleja en las curvas de aprendizaje de la F igura 3-13, que
mues tran una reducción en los costes de estas tecnologías en los próximos años .

300

Fotovoltaica
Termoeléctrica
Eólica
Costes de las tecnologías [ €/MWh]

F igura 3-13. C urvas de


200
aprendizaje de
tecnologías renovables .

Fuente: Elaboración
propia. 100

Banda de precios de mercado

0
2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020

Las energías renovables en España. La Directiva 28/CE/2009 90 del P arlamento E uropeo


contempla objetivos obligatorios de energías renovables para la UE y para cada uno de los
E s tados miembro en 2020, y la elaboración por parte de éstos de planes de acción nacionales
para alcanzar dichos objetivos (ver Normativa bás ica comunitaria y marco normativo es pañol e
ins tituciones energéticas comunitarias y es pañolas y Objetivos de producción con fuentes
renovables en la E U y en E s paña).

S i bien en es te marco E s paña tiene como objetivo que el 20% de s u cons umo de energía
provenga de fuentes renovables , el P lan de E nergías R enovables 2011-2020 recoge que las
energías renovables aportarán en el año 2020 un 20,8% del cons umo final bruto de energía en
E s paña, con una contribución del 11,3% al s ector del transporte, s uperando as í los objetivos
que vienen des de los órganos europeos . E s te plan propone un aumento del 87% de la
potencia renovable ins talada y un aumento del 100% de la producción, pero tan s olo un

90
V er Directiva 28/C E /2009.

67
E lectricidad
3. G eneración

aumento del 20% de los cos tes. De todas formas , las cifras finalmente alcanzadas podrán
diferir por las recientes medidas regulatorias introducidas des de enero 2012 (ver Normativa
bás ica comunitaria y marco normativo es pañol).

R es pecto a la producción eléctrica de origen renovable previs ta en E s paña, en la T abla 3-4 s e


mues tra un es cenario elaborado a partir del P lan de E nergías R enovables 2011-2020. Hay que
tener en cuenta que el P E R excluye la producción hidráulica procedente de ins talaciones de
bombeo a efectos de cómputo para la consecución de los objetivos de renovables , por lo que
és ta no s e refleja en las producciones de la tabla.

2010 2015 2020


MW GWh MW GWh MW GWh
T abla 3-4. Objetivos Hidráulica sin bombeo 13.22 31.614 13.548 32.538 13.861 32.814
2010 y 2020 del P lan de
Eólica terrestre 20.74 42.337 27.847 55.703 35.000 70.734
E nergías R enovables
2011-2020 en el s ector Eólica marina 0 0 22 66 750 1.822
E léctrico (P otencia Solar fotovoltaica 3.787 6.279 5.416 9.060 7.250 12.356
ins talada y generación 91)
Solar termoeléctrica 632 691 3.001 8.287 4.800 14.379
Fuente: PER 2011-2020 Biomasa, residuos, biogás 825 4.228 1.162 7.142 1.950 12.200
Otras renovables 0 0 0 0 150 520
( )
TOTAL 39.21 85.149 50.996 111.464 63.761 144.825
4
En resumen, las previsiones realizadas a principio de década para 2020 apuntan a valores de
potencia instalada de origen renovable en el entorno de los 64 GW, de los cuales 48 GW
corresponderían a instalaciones de carácter no gestionable (en términos de energía supondrán
unos 100 TWh).

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. El crecimiento de


la energía inyectada al Sistema Eléctrico procedente de energías de origen renovable y, en
particular las de origen no gestionable, principalmente la de origen eólico y en menor medida
la de origen solar, supondrá sin duda un reto para los agentes involucrados en la operación y
desarrollo del Sistema.

La necesidad de equilibrar en todo momento la generación y la demanda del Sistema, unido a


la variabilidad intrínseca de las energías no gestionables exigirá disponer de una oferta de
generación convencional y de una demanda flexibles, lo que supondrá implementar diversas
modificaciones en el funcionamiento y operación del Sistema orientadas a incrementar su
flexibilidad y asegurar la calidad de suministro.

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. Impredecibilidad.


Como se observa en la tabla anterior, el desarrollo de las instalaciones eólicas previsto para
2020 podría suponer un gran impacto en el Sistema Eléctrico al incrementarse en torno a un
70% la potencia instalada y su consiguiente incremento de producción.

Al considerar las implicaciones que la generación eólica u otro tipo de renovables no


gestionables, como las solares, tendrán en el Sistema Eléctrico, conviene pensar en que son

91
La producción (G W h) repres enta valores normalizados para la hidráulica y la eólica s egún s e recoge en el Artículo 5, Apartado 3 de
la Directiva 2009/28/C E , utilizando las fórmulas de normalización contenidas en s u Anexo II. E s te método estima la producción media
de los últimos años para evitar que la producción es té influida por la eolicidad o pluvios idad de un año concreto.

68
E lectricidad
3. G eneración

una fuente de energía y no una fuente de potencia garantizada, ya que no s e puede predecir
en ningún momento del tiempo concreto cuál s erá la potencia inyectada en el S is tema;
s olamente en términos estadís ticos s e puede afirmar que la energía producida s erá la
corres pondiente a un factor de carga 92 del orden del 25% en el cas o, por ejemplo, de la eólica.
La F igura 3-14 mues tra la evolución cronológica de la inyección de potencia en el S is tema
durante 2016.
100%

90%

80%
F igura 3-14. C urva 70%
cronológica del 60%
factor de carga de
las centrales eólicas 50%

en las 8.760 horas 40%

del año 2016. 30%


24%
20%
Fuente: Elaboración
propia. 10%

0%

Dado que la energía primaria de estas instalaciones es el viento, y éste se produce como
consecuencia de diferencias en presiones atmosféricas, es muy improbable que pueda haber
tales diferencias a lo largo de toda la geografía española, por lo que no es posible que en un
instante concreto estén produciendo todas las instalaciones a su potencia nominal. Asimismo,
es prácticamente imposible que la cronológica de un año presente similitudes, a nivel horario,
con las de otro año. También, por otro lado, es prácticamente imposible que no esté
produciendo ninguna tecnología en ningún momento, siempre habrá alguna que está
produciendo algo de electricidad en un momento dado.

El Operador del Sistema (OS) es el encargado de equilibrar en todo momento la generación y


la demanda. Se le podrán presentar dos casos:

• Que s e incremente brus camente la producción eólica. E n este cas o el OS puede


reducir la producción de centrales convencionales . S i es to no fuera s uficiente daría la
orden de des conectar ins talaciones renovables 93, s i bien es to s upone des aprovechar la
energía renovable producida durante el tiempo que dura la des conexión.

• Que dis minuya brus camente la producción eólica. E n este cas o el OS puede dar orden
de incrementar la producción de las centrales convencionales y, s i ello no fuera
pos ible 94, des conectar parte de la demanda del S istema.

E n el S istema E léctrico es pañol todas las centrales eléctricas están obligadas a pres entar
ofertas en el mercado por s u energía. C iertamente, para una instalación eólica res ulta muy
difícil predecir cuál s erá s u producción en un ins tante concreto, s i bien pres entando ofertas de
forma agrupada s e dis minuye la incertidumbre as ociada a la predicción del conjunto.

92
E n E s paña, las horas de utilización media de la potencia eólica ins talada es del orden de 2.100 horas.
93
E s ta acción de des aprovechar energía renovable s e conoce con el nombre de “vertidos eólicos ”.
94
P ara que ello s ea pos ible el OS debe as egurar que las centrales convencionales, cuya producción s í es ges tionable, es tán en todo
momento en dis pos ición de cubrir la disminución de potencia producida.

69
E lectricidad
3. G eneración

P os teriormente, s e compara la producción real con la previs ión (des víos ) y s e imputan los
cos tes que dicha diferencia ha producido en el S is tema.

Actualmente s e ha mejorado mucho en las herramientas de predicción de las horas de


funcionamiento de la energía eólica. P or ejemplo, R ed E léctrica de E s paña pos ee una
herramienta propia para la es timación de la producción del parque de generación eólico
llamado S ipreólico 95 (F igura 3-15) en donde puede predecir la producción con un horizonte de
48 horas . E l error en la predicción dis minuye a medida que la mis ma s e acerca al momento en
tiempo real.

F igura 3-15. E jemplo de


predicción en la herramienta
S ipreólico.

Fuente: Red Eléctrica de España.

Aunque la energía eólica puede contribuir de forma relevante en términos de energía anual
suministrada, no se puede garantizar cuál será su producción de energía en una hora concreta
(potencia) ni cuánto tiempo será capaz de mantener dicha producción. Esto se pone de
manifiesto en la Figura 3-16 (previsión para 2020), donde en ordenadas se representa la
relación de la potencia inyectada en una hora y la potencia instalada; en abscisas se indican
horas, pero puede trasladarse de forma rápida a probabilidad dividiendo entre 8.760.

95
Ver Wind Power Forecasting for Efficient System Integration.

70
E lectricidad
3. G eneración

0,9

0,8

P.Inyectada / P. Instalada
0,7
F igura 3-4. Horas
0,6
de
funcionamiento 0,5
de la energía 0,4
eólica 2016.
0,3
Fuente: ESIOS y 0,2
elaboración propia.
0,1

De la información mostrada en el gráfico, se deduce que no es posible garantizar una


producción superior al 7,5% de la potencia instalada con una probabilidad de ser superada del
95% .

Esto quiere decir, como se ha indicado anteriormente, que la energia eólica no aporta fiabilidad
al sistema, sino que únicamente aporta energía de bajo coste variable y sin emisiones, que
debe poder reemplazar a energías más caras y más contaminantes. La firmeza que la
demanda exija al suministro, deberá ser aportada por otras tecnologías (ver Energías
renovables: tecnología, economía, evolución e integración en el sistema eléctrico).

Esto no quiere decir, como a veces se indica, que cada vez que se construya un MW eólico se
debe construir un MW térmico. Los MW térmicos se construirán con independencia de si hay o
va a haber eólica, ya que es la demanda la que requiere dicha potencia.

45.000,00
40.000,00
35.000,00
30.000,00
Figura 3-57. Curvas de 25.000,00
MW

demanda del Sistema.


20.000,00
Impacto de la energía
eólica al sistema. 15.000,00
10.000,00
Fuente: ESIOS y
5.000,00
elaboración propia.
0,00
1
367
733
1099
1465
1831
2197
2563
2929
3295
3661
4027
4393
4759
5125
5491
5857
6223
6589
6955
7321
7687
8053
8419

Demanda Real Generación Eólica

En la Figura 3-17 se aprecia cómo las curvas convergen para valores altos de la demanda, o
lo que es igual, la aportación de energía eólica al Sistema apenas reduce su punta de
potencia. Estadísticamente, este fenómeno se explica porque no están correlacionados los
valores de demanda y producción eólica. El parque térmico se debería optimizar para cubrir la

71
E lectricidad
3. G eneración

demanda “res idual” o “neta”, es decir, la demanda de los cons umidores menos la aportación
eólica.

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. Vertidos de las


energías renovables. En la actualidad, el Sistema Eléctrico peninsular tiene una potencia
instalada de 7.573 MW de origen nuclear; la previsión para 2020 es que continúen en servicio
las mismas centrales, por lo que se mantendría esta potencia instalada, a excepción de la
central nuclear de Garoña (460 MW), la cual no pudo renovar su licencia de actividad,
reduciéndose por tanto la potencia instalada total de energía nuclear en España a 7.113 MW.
La reserva caliente 96 estimada para 2020 se estima en otros 7.000 MW .

La inspección visual de la figura anterior pone de manifiesto que en las horas de valle
(demanda baja) la necesidad de generación disminuye hasta tal extremo que no se puede
garantizar el funcionamiento continuo de las instalaciones nucleares 97 más el equipo que está
funcionando en reserva caliente. Así pues, durante un periodo determinado de horas al año
(suma de las horas valle) la generación podría ser mayor que la demanda, lo que es imposible
dado que en un sistema eléctrico se debe cumplir siempre la igualdad generación igual a
demanda.

En el caso de que la energía producida sea superior a la demanda, y las medidas tomadas a
cabo no fueran suficientes como para corregir este desequilibrio, causaría un excedente de
energía desaprovechada, denominado “vertido”. Este término solo hace referencia a
excedentes de energía de origen renovable. La capacidad del Sistema Eléctrico es limitada a
la hora de integrar este tipo de energías de régimen especial en función de las condiciones del
sistema y de diversos otros factores. Por tanto, los vertidos en España suelen ocurrir cuando la
producción energética es muy alta, fundamentalmente en horas valle, donde la energía
demandada es muy reducida y no hay otros medios disponibles, distintos a los renovables,
que puedan reducir su producción. Se estima que en los años venideros se incrementarán los
vertidos, debido principalmente a la imposibilidad de integrar todo el recurso primario en todas
las horas del año, a la posible inflexibilidad del parque así como a la falta de interconexiones.
Un desarrollo de la gestión de la demanda y de las tecnologías de almacenamiento reducirían
estos vertidos (Figura 3-18).

35.000

30.000

25.000
Demanda b.c.
Figura 3-6. Ejemplo 20.000
Potencia [MW]

ilustrativo de vertido
eólico. 15.000 Demanda neta

10.000
Fuente: Elaboración propia.
Vertidos
5.000
Potencia necesaria por
Producción no gestionable seguridad de suministro
0
8650 8670 8690 8710 8730 8750
Horas

96
Centrales que están funcionando a mínimo técnico esperando que crezca la demanda o disminuya la generación como consecuencia
de algún suceso: fallo de una central, disminución brusca de la generación eólica, variación de la demanda, etc.
97
Estas centrales se consideran como generación inflexible, lo que significa que no pueden hacer seguimiento de carga o les resulta
muy difícil hacerlo. Por otra parte, no es posible desconectar una central nuclear un día y arrancarla al día siguiente debido a
restricciones técnicas propias de esta tecnología.

72
E lectricidad
3. G eneración

La s olución al problema planteado pas a por as egurar, en los momentos neces arios , el
equilibrio del binomio generación-demanda mediante alguna o varias de las actuaciones
s iguientes:

• Des conectar la generación renovable neces aria para equilibrar el s is tema.

• Introducir en el s is tema tecnologías de almacenamiento que permitan almacenar el


excedente de energía para s u cons umo en horas de mayor demanda.

• Aumentar la potencia instalada en bombeo.

• P romover la utilización del vehículo eléctrico (ver vehículo eléctrico).

• P romover la gestión activa de la demanda.

• Incrementar de las interconexiones de modo que la energía s obrante pueda s er


exportada.

C ualquiera que s ea la alternativa o alternativas que finalmente s e des arrollen vendrán


condicionadas por s u viabilidad, tanto técnica como económica.

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. Gradientes de


demanda. La volatilidad del régimen de vientos y, en consecuencia, de la producción eólica
resultante implica que de una hora para otra pueden producirse elevados gradientes de
demanda neta en el sistema.

En la Figura 3-19 se muestra una estimación, realizada con el perfil de producción eólica de
2008 escalada a 2020, de la magnitud de las rampas que podrán presentarse en ese
horizonte. Se han tabulado los saltos de generación eólica que resultan de considerar 1, 2 ó 3
horas consecutivas.

30

20
Producción eólica en 2020 [GW]

Figura 3-79. Rampas en la 10


2001

4001
3001
1001

producción eólica.

Fuente: Elaboración propia. 0 Horas


8001
7001
5001

6001

-10

-20 1h 2h 3h

Como conclusión importante se puede observar que, en el caso de considerar la rampa de una
hora pueden presentarse valores a subir/bajar del orden de los 4.500/-3.200 MW
respectivamente. Estos valores podrían alcanzar los 8.000/-6.000 MW en el caso de las tres
horas.

73
E lectricidad
3. G eneración

E s importante res altar que las rampas res ultantes en la demanda horaria s on mucho más
s uaves que las anteriores , por lo que no es correcto extrapolar los res ultados de los anális is de
rampas realizados hoy día al es cenario de 2020. S in embargo, hay que s eñalar que s e ha
comprobado, con la experiencia de los parques exis tentes , que las rampas res ultantes de la
demanda neta (demanda de cons umo menos aportación eólica) son del mis mo orden de
magnitud que las exis tentes s in incorporar la eólica. E s to quiere decir que, aunque cuando s e
producen es más impredecible que s in eólica, lo que hará que s e tenga que dis poner de
potencia de res erva con más frecuencia, la potencia requerida no s erá mayor.

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. Efecto sobre las


redes de transporte. El desarrollo futuro de la red de transporte se deberá realizar de forma
que sea posible evacuar la energía de todos los parques en condiciones normales.

Como ya se ha dicho, la energía eléctrica de origen eólico, por si sola, nunca podrá asegurar
el suministro ya que su producción es muy volátil. El impacto de la producción eólica no se
reducirá con el paso del tiempo ya que los nuevos parques se construirán siguiendo una
distribución geográfica similar a los existentes.

Así pues, será necesario diseñar y ampliar la red de transporte para conectar las nuevas
instalaciones de origen renovable, así como el nuevo parque térmico necesario para cubrir la
demanda y satisfacer los nuevos requerimientos de cobertura de la punta de potencia del
Sistema, asegurando su operatividad en los momentos en los que la energía eólica sea
residual y sea necesario suplir su carencia con las instalaciones de generación
convencionales. Ello supondrá, sin duda, un mayor coste de desarrollo de la red de transporte.
La volatilidad de la energía eólica podrá ser mitigada por diversos métodos, entre los que sin
duda se encuentra el reforzamiento de las interconexiones con Francia y Portugal.

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. Efecto en el


precio de mercado.

En la actualidad, las energías renovables tienen un efecto importante en el precio de mercado


al desplazar la curva de oferta y hacer que el precio de mercado quede fijado por tecnologías
más baratas 98, tal como s e pone de manifiesto en la F igura 3-20. E n el cas o en el cual la
demanda s e cubra en su totalidad con energía nuclear y renovable, el precio entonces del
mercado mayoris ta de la electricidad s erá de 0 €/MW h. E s to puede llegar a ocurrir en
s ituaciones de alta dis ponibilidad de energía renovable y bajo cons umo, como ocurrió en
marzo de 2013, donde las lluvias intens as junto con elevado porcentaje de viento y una
reducida demanda cons iguieron que el precio de la electricidad fuera 0 €/MW h o valores muy
por debajo a los precios habituales (ver E l mercado mayoris ta).

98
Las energías renovables s on a día de hoy una de las tecnologías más competitivas del mercado. S i además le s umamos los
objetivos de la Unión E uropea a 2020 y 2030, s e es pera que la capacidad de energía renovable aumente cada año provocando que las
centrales más caras s e des placen hacia la derecha de las curvas de oferta. E sta s ituación hace que los C iclos C ombinados funcionen
marcando precio en numeros as ocas iones o no funcionen, lo que les impide recuperar s us costes fijos.

74
E lectricidad
3. G eneración

Precio Turbinas
[€ /MWh] de gas
Demanda

F igura 3-89. E fecto en el


CCC/Carbón
precio de la entrada de Precio con
eólica baja
energías renovables .

Fuente: Elaboración propia.

Precio con eólica N uclear


alta Eólica (alta)

Cantidad [MWh]

Este hecho, está ocasionando que centrales térmicas que se construyeron sin considerar la
alta penetración actual de plantas renovables y con unos factores de utilización de más de
5.000 horas, actualmente funcionen muy pocas horas y tengan dificultades para recuperar sus
costes. Este problema no sólo afecta a las instalaciones actuales sino también a las futuras.
Cuando sea necesario incorporar nuevo parque térmico, los promotores tendrán miedo de que
esas centrales tengan un funcionamiento diferente al que puedan prever, si no se establece un
esquema que de una certeza razonable a las previsiones. Por ello, se está planteando en
muchos países, establecer unos sistemas de incentivación a la inversión (ver Seguridad de
suministro).

A largo plazo, cuando se requiera nuevas inversiones para garantizar el suministro, el precio
de mercado necesariamente tendrá que tender al coste de dichas incorporaciones, con
independencia de que algunas tecnologías renovables tengan costes variables cercanos a
cero. Si no fuese así, no habría nuevas inversiones.

Es conveniente señalar que las tecnologías renovables tienen un patrón de funcionamiento


que no es acorde con los precios del mercado. Es decir, no pueden elegir cuándo funcionar.
Por tanto, el precio que perciben del mercado es función de la correlación que existe entre su
perfil de producción y el perfil de precios del mercado. Por ejemplo, en el caso de la tecnología
eólica, esta correlación implica que esta tecnología percibe del mercado del orden de un 7-8%
menos que el precio medio en términos anuales (si bien este porcentaje depende de cada año,
siempre es positivo, es decir, la eólica “ve” un precio de mercado inferior al medio) (ver
Seguridad de suministro).

Integración de las energías renovables. Alternativas y consecuencias. Implicaciones de


la integración de la energía solar. La integración de la energía solar presenta también
problemas de integración en el Sistema Eléctrico, si bien presenta diferencias respecto a la
energía eólica. Así pues:

75
E lectricidad
3. G eneración

• E s más predecible que la energía eólica. A nivel extraterres tre la energía s olar es tá
totalmente determinada para cada ins tante de tiempo en función de la latitud
geográfica. E l índice de claridad asociado a cada localización concreta as í como la
nubos idad introducen cierta aleatoriedad en s u predicción, s i bien mucho menor que la
as ociada al régimen de vientos .

• De las dos tecnologías exis tentes , fotovoltaica y térmica la primera es menos s ens ible
al efecto de las nubes dis pers as (que ocultan el s ol momentáneamente) dado que
aprovecha la energía del albedo. P or el contrario, la s olar térmica es más s ens ible a
es te fenómeno, s i bien en la actualidad exis ten dis eños con cierto grado de
almacenamiento de energía térmica, lo que permite a es tas instalaciones s uminis trar
energía inclus o en aquellas horas en las que no hay radiación s olar. E n definitiva, s e
puede decir que estas tecnologías pres entan una mayor garantía de potencia, des de el
punto de vis ta de la cobertura de potencia del S is tema, que la energía eólica. T ambién
s on menores los gradientes de producción.

E s tas tecnologías no están dis ponibles en los momentos de máxima demanda, que
s uelen pres entars e entre las 8 y las 10 de la noche (podrían participar en la cobertura
de la máxima demanda aquellas ins talaciones que dis pongan de almacenamiento
térmico), s i bien pueden participar de manera importante en la cobertura de la punta de
demanda de la mañana.

• Otro tema es s u impacto económico en el S is tema. C omo todas las renovables


pres entan dos efectos económicos, el primero s obre el precio de mercado, que
dis minuye como cons ecuencia de s u penetración en el S is tema al des plazar a las
tecnologías más caras de las actividades de producción de energía eléctrica, por otra
parte, al s er unas tecnologías con elevados cos tes de invers ión, elevan el cos te de
s uminis tro del S is tema en una cantidad mucho mayor que la energía eólica (en
términos unitarios ).

E n la actualidad el coste de producción de estas tecnologías en el mercado mayoris ta es pañol


s e encuentra entre los 40 y 50 €/MW h para la fotovoltaica y entre 85 y 120 €/MW h para la
termos olar. S in embargo, los precios de la energía fotovoltaica es tán bajando rápidamente y
prueba de ello s on las s ubas ta realizadas en Dubai en el año 2016 donde las Autoridades
informaron que la puja más barata de las cinco pres eleccionadas fue de 29,9 $/MW h, o lo que
es lo mis mo, 26 €/MW h. (F igura 3-21)

76
E lectricidad
3. G eneración

80
73.9
F igura 3-21 70
E volución de 61.7
60
los cos tes de 50.9 49.6
energía 50
42.6 42.6
fotovoltaica / 39.1
40
34.3
pujados en 31.7 31.3
diferentes 30 26.0
proyectos 20
mundiales .
10

Fuente: 0
Elaboración Nuevo Texas, Dubai, Texas, Arabia Peru Mexico Dubai, Dubai, Mexico Dubai,
Méjico EE.UU EE.AA EE.UU. Saudi, (2016) (2016) EE.AA EE.AA (2016) EE.AA
propia. (2013) (2014) (2014) (2015) EE.AA (2014) (2016) (2016)
(2015)

77
E lectricidad
3. G eneración

3.3 Objetivos de producción con fuentes renovables en la Unión E uropea


y en E s paña
Objetivo de energías renovables de la UE en 2020. El Protocolo de Kioto de la Convención
Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, estableció una serie de acciones y
medidas (control del consumo de energía en Europa, mayor utilización de las energías
renovables, ahorro energético y mayor eficiencia energética), que fueron el punto inicial para el
desarrollo de las Directivas Europeas que se presentan a continuación (ver El cambio climático
y los acuerdos internacionales).

La primera Revisión Estratégica de la energía en la UE se centró fundamentalmente en los


aspectos de “competitividad” y “sostenibilidad” de la energía, y desembocó en el acuerdo
alcanzado en el Consejo Europeo de marzo de 2007 sobre los objetivos en materia energética
y ambiental denominados 20/20/20 para 2020, es decir, que ese año el 20% de la energía final
provenga de fuentes renovables, mejorar la eficiencia energética en un 20% en la UE frente al
escenario tendencial y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20% (ver
Normativa básica comunitaria y marco normativo español).

En el marco de estos objetivos se aprobó el llamado Paquete Verde, que incluía la Directiva de
Energías Renovables (Directiva 2009/28), la Directiva por la que se modifica la Directiva
2003/87/CE para perfeccionar y ampliar el régimen comunitario de comercio de derechos de
emisión de gases de efecto invernadero (Directiva 2009/29) y la Decisión sobre el esfuerzo de
los Estados miembro para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero (Decisión
406/2009)

Centrándonos en la Directiva 2009/28/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 23 de abril


de 2009 relativa al fomento y uso de energía procedente de fuentes renovables 99, los objetivos
globales y vinculantes s on alcanzar una cuota del 20% de energías renovables s obre el
cons umo de energía final total y del 10% s obre el cons umo de energía renovable para el
trans porte.

E s te objetivo global del 20% s e ha distribuido en objetivos individuales por E stado miembro
bas ados en criterios que tienen en cuenta las diferentes s ituaciones de partida, potencial de
energías renovables y combinaciones energéticas pos ibles de cada uno, además de ponderar
el esfuerzo en función del P IB de cada uno de los país es .

E n la F igura 3-22, s e pres enta la s ituación de la que partía cada país en 2005 en cuanto a
cuota de energía renovable, la cuota de renovables en el año 2015 y el objetivo individual
vinculante para 2020:

99
V er Directiva 2009/28/C E .

78
E lectricidad
3. G eneración

2020
41% 54% 49%
29% 39% 38%
32% 38% 40%
24% 33% 34%
16% 31% 30%
24% 29% 20%
18% 29% 25%
20% 28% 31%
F igura 3-22. 17% 26% 23%
C uota de 17% 25% 24%
energías 16% 22% 25%
renovables 9% 18% 16%
8% 18% 17%
para 2020. 8% 16% 20%
7% 15% 20%
Fuente: 10% 15% 18%
Elaboración 7% 15% 23%
propia. 7% 15% 13%
5% 15% 18%
6% 13% 14%
7% 12% 15%
3% 9% 13%
3% 9% 16%
1% 8% 15%
2% 8% Cuota EERR 2005 13%
3% 6% Cuota EERR 2015 14%
1% 5% 11%
5% 10%
0%

Medidas flexibles de colaboración entre Estados miembro. Teniendo en cuenta las


diferencias mencionadas entre los Estados miembro, en cuanto a potenciales, puntos de
partida y situación económica, la UE permite las siguientes medidas flexibles para alcanzar los
objetivos individuales y así facilitar la consecución del objetivo global de la forma más eficiente:

• T ransferencias estadís ticas : acordada entre dos E s tados miembro, de manera que
aquellos E stados que cedan energía renovable res tarán la cantidad de su s aldo, y los
que reciban la agregarán a los s uyos .

• P royectos conjuntos: entre E stados miembro o con terceros país es , son proyectos
relacionados con la producción de energía procedente de fuentes renovables , pudiendo
participar en los mismos operadores privados .

• S is temas de apoyo conjuntos : de forma que dos o más E s tados podrán coordinar s us
s is temas de apoyo nacionales . De es ta manera, una cantidad determinada de energía
procedente de fuentes renovables producida en un E s tado podrá teners e en cuenta de
cara al cumplimiento del objetivo nacional del otro con el que está coordinado.

Trayectoria indicativa. P ara alcanzar s us objetivos individuales en 2020, los E stados


miembro procurarán s eguir una trayectoria indicativa con el año 2005 como punto de partida.
Las trayectorias indicativas (%) vienen dadas por la Directiva 2009/28/C E a través de fórmulas
por las que s e obtienen medias bienales como se puede ver en la F igura 3-23.

79
E lectricidad
3. G eneración

16,4%
16,0%
15,0%
14,3%

12,8% 13,1%
12,4%
11,0%
10,4%
9,6%
9,1%
8,5%

F igura 3-23. C uota de energía


renovable en E s paña y
T rayectoria indicativa.

Fuente: Informe de situación en


2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020
materia de energías renovables 100
Cuota de EE.RR. Trayectoria indicativa PER
y elaboración propia.

E n virtud de la parte B del anexo I de la


Directiva 2009/28C E , T rayectoria Indicativa
por E s tado Miembro

2011-2012 S 2005 + 20% (S 2020 – S 2005 )

2013-2014 S 2005 + 30% (S 2020 – S 2005 )

2015-2016 S 2005 + 20% (S 2020 – S 2005 )

2017-2018 S 2005 + 20% (S 2020 – S 2005 )

2020 S 2020
S iendo,
S 2005 la cuota corres pondiente a es e es tado miembro en 2005;
S 2020 la cuota-objetivo corres pondiente a es e es tado miembro en 2020.

100
V er informe de situación en materia de energía renovables

80
E lectricidad
3. G eneración

E n la T abla 3-5 s e pres entan los res ultados de la trayectoria indicativa, media por bienios :

País 2011-2012 2013-2014 2015-2016 2017-2018 2020

Alemania 8,24% 9,46% 11,29% 13,73% 18%


Austria 25,44% 26,51% 28,12% 30,26% 34%
Bélgica 4,36% 5,44% 7.06% 9,22% 13%
Bulgaria 10,72% 11,38% 12,37% 13,69% 16%
Chipre 4,92% 5,93% 7,45% 9,47% 13%
Dinamarca 19,60% 20,90% 22,85% 25,45% 30
Eslovaquia 8,16% 8,89% 9,99% 11,45% 14%
Eslovenia 17,80% 18,70% 20,05% 21,85% 25%
España 10,96% 12,09% 13,79% 16,05% 20%
T abla 3-5. R es ultados Estonia 19,40% 20,10% 21,15% 22,55% 25%
de la trayectoria Finlandia 30,40% 31,35% 32,78% 34,68% 38%
indicativa. Francia 12,84% 14,11% 16,02% 18,56% 23%
Grecia 9,12% 10,23% 11,90% 14,12% 18%
Fuente: Directiva Holanda 4,72% 5,88% 7,62% 9,94% 14%
2009/28/CE y elaboración
Hungría 6,04% 6,91% 8,22% 9,96% 13%
propia.
Irlanda 5,68% 6,97% 8,91% 11,49% 16%
Italia 7,56% 8,74% 10,51% 12,87% 17%
Letonia 34,08% 34,82% 35,93% 37,41% 40%
Lituania 16,60% 17,40% 18,60% 20,20% 23%
Luxemburgo 2,92% 3,93% 5,45% 7,47% 11%
Malta 2,00% 3,00% 4,50% 6,50% 10%
Polonia 8,76% 9,54% 10,71% 12,27% 15%
Portugal 22,60% 23,65% 25,23% 27,33% 31%
Reino Unido 4,04% 5,41% 7,47% 10,21% 15%
República Checa 7,48% 8,17% 9,21% 10,59% 13%
Rumanía 19,04% 19,66% 20,59% 21,83% 24%
Suecia 41,64% 42,56% 43,94% 45,78% 49%

Si la cuota de energía renovable de un Estado miembro está por debajo de la trayectoria


indicativa en el periodo de 2 años inmediatamente anterior, tendrá hasta el 30 de junio del año
siguiente para presentar un Plan Modificado de Acción Nacional a la Comisión Europea
indicando las medidas adecuadas para cumplir en un calendario razonable la trayectoria
indicativa. Si el incumplimiento es por un margen limitado, la Comisión Europea podrá liberar
al Estado miembro de presentar el Plan Modificado.

Plan de Acción Nacional de Energías Renovables (PANER). Cada Estado miembro elaboró
un Plan de Acción Nacional en materia de Energía Renovable “PANER” 101 antes de junio de
2010, en el que s e determinaron los objetivos nacionales en relación a las cuotas de energías
renovables cons umidas en trans porte, electricidad y producción de calor y frio para 2020.

101
V er Decis ión por la que s e es tablece un modelo para los P lanes de Acción Nacional en materia de E nergía R enovable.

81
E lectricidad
3. G eneración

E s paña aprobó en noviembre 2011 un P lan de E nergías R enovables 102 (P E R ) para el periodo
2011-2020 que s ustituyó tanto al P lan de E nergías R enovables de 2005-2010 del país , como
al P ANE R enviado a la C omis ión E uropea en 2010.

E l modelo P ANE R es es tándar y obligatorio para todos los E stados miembro y recoge:

• E l cons umo final bruto previs to de energía en electricidad, trans porte y calefacción y
refrigeración para 2020, teniendo en cuenta las medidas políticas de eficiencia
energética.

• Los objetivos nacionales s ectoriales para 2020 y estimación de cuotas de energía


renovable en electricidad, trans porte, calefacción y refrigeración.

• Las medidas para alcanzar los objetivos como políticas y medidas para el fomento del
us o de energías renovables , s istemas de apoyo y us o previs to de transferencias
es tadís ticas entre E stados miembro y proyectos conjuntos con otros E s tados miembro
y terceros país es .

• Las evaluaciones de la contribución de cada tecnología de energía renovable para el


cumplimiento del objetivo 2020 y la trayectoria indicativa de cuotas de energía
renovable para electricidad, trans porte, calefacción y refrigeración.

P ara manejar e intercambiar la información s e ha creado una P lataforma de T rans parencia 103,
que ayudará a aumentar la trans parencia, fomentar y facilitar la cooperación entre los E s tados
miembro, y publicar la información de la C omis ión E uropea o de un es tado relevante para esta
Directiva.

Previsiones del grado de cumplimiento del objetivo 2020. En los PANER enviados a la
Comisión Europea en 2010, los Estados miembro incluyeron las previsiones no vinculantes del
grado de cumplimiento de los objetivos que cada uno tenía. La Tabla 3-6 muestra los excesos
y déficits comparando el consumo final bruto de energía renovable con la trayectoria indicativa
de cada Estado miembro (se ha actualizado con la información enviada por España en el PER
2011).

102
Ver Plan de Energías Renovables.
103
Ver Plataforma de Transparencia.

82
E lectricidad
3. G eneración

P aís 2011-2012 2013-2014 2015-2016 2017-2018 2020 S 2020

Alemania 11,10% 12,40% 13,95% 16,20% 19,60% 18%


Aus tria 31,25% 31,75% 32,25% 33,00% 34,20% 34%
B élgica 4,80% 6,30% 8,05% 10,10% 13,00% 13%
B ulgaria 10,72% 11,38% 12,37% 13,69% 16,00% 16%
C hipre 6,95% 8,10% 9,35% 10,80% 13,00% 13%
Dinamarca 19,20% 20,50% 22,60% 25,30% 30,00% 30%
E s lovaquia 8,20% 8,90% 10,00% 11,40% 14,00% 14%
E s lovenia 18,45% 19,80% 21,50% 23,00% 25,30% 25%
T abla 3-6. España (PER) 14,75% 15,85% 17,00% 18,50% 20,80% 20%
C omparativa por
E s tonia 21,60% 23,35% 23,65% 24,35% 25,00% 25%
país es entre
F inlandia 30,55% 31,90% 33,10% 35,20% 38,00% 38%
cons umo final de
F rancia 13,75% 15,50% 17,50% 20,00% 23,00% 23%
energía renovable y
la trayectoria G recia 9,15% 10,20% 11,90% 14,15% 18,00% 18%
indicativa. Holanda 5,10% 7,15% 9,10% 11,50% 14,50% 14%
Hungría 7,35% 7,75% 8,80% 11,50% 14,65% 13%
Fuente: Comisión Irlanda 8,55% 10,75% 12,00% 13,45% 16,00% 16%
Europea 104 y Italia 8,94% 9,69% 11,63% 13,36% 17,00% 17%
elaboración propia. Letonia 34,10% 34,85% 35,95% 37,25% 40,00% 40%
Lituania 17,50% 19,50% 21,50% 24,00% 24,00% 23%
Luxemburgo 2,90% 3,90% 5,40% 7,50% 11,00% 11%
Malta 2,45% 4,60% 6,15% 9,65% 10,20% 10%
P olonia 10,35% 11,25% 12,20% 13,45% 15,50% 15%
P ortugal 26,05% 27,25% 28,65% 30,15% 31,00% 31%
R eino Unido 4,00% 5,50% 7,50% 10,00% 15,00% 15%
R epública C heca 9,75% 11,05% 11,95% 12,70% 13,50% 13%
R umanía 18,52% 19,51% 20,36% 21,52% 24,00% 24%

S uecia 44,55% 45,95% 47,35% 48,65% 50,20% 49%

> que TI de la Directiva


< que TI de la Directiva
= que TI de la Directiva

Luxemburgo e Italia fueron los únicos E s tados miembro que reconocieron que por s us propios
medios no s erían capaces de lograr s u objetivo vinculante, pero previeron la utilización de los
mecanis mos flexibles para alcanzarlos (por ello en es ta tabla aparecen como s i lograran s u
objetivo 2020).

E l res to de los país es , a pes ar de que algunos no es peraban alcanzar s us trayectorias


indicativas intermedias (en gris ), en general cons iguen cumplir con s u objetivo en 2020 (en
azul) o inclus o s uperarlo (en verde), s iendo los exces os totales alrededor de 102 T W h, y los
déficits de Italia y Luxemburgo de unos 14 TW h, alcanzando en conjunto alrededor del 0,6%
de s uperávit s obre el objetivo del 20% 105.

104
V er C omisión E uropea.
105
R ecientemente Italia ha publicado un nuevo P lan E nergético en el que, en contra de lo previs to en s u P ANE R de 2010, no s olo
logran el objetivo del 17% por s us propios medios , s ino que lo s uperan. P ortugal también ha modificado es te año 2013 s u P lan de

83
E lectricidad
3. G eneración

Informe de progreso 2012 para los años 2009 y 2010. A mediados de 2012, todos los
Estados miembro enviaron a la CE un Informe de Progreso 106 donde analizaban el grado de
avance de implantación de las tecnologías renovables en los años 2009 y 2010 con res pecto a
la previs ión de los P ANE R 2010 y los objetivos fijados para 2020, s iguiendo lo es tablecido en
el artículo 22 de la Directiva 2009/28/C E .

C entrándonos en E s paña, la T abla 3-7 compara las previs iones tanto del P ANE R 2010 como
del P E R 2011 para el año 2010, con el dato real para 2015 enviado por el Ins tituto de Ahorro y
Divers ificación E nergética (IDAE ) a la C omis ión E uropea en el Informe de P rogres o 107.

T abla 3-7. C uotas


s ectoriales Progress Progress
PANER 2010 PER 2011
(electricidad, 2010
(previsión) (previsión)
Report 2012 Report 2015
calefacción y (reales) (reales)
refrigeración y Cuota de energías
11,3% 11,0% 11,9% 18,1%
trans porte) y cuotas renovables en calefacción y
globales de energía Cuota de energías
procedente de fuentes renovables en electricidad
28,8% 29,2% 29,2% 28,3%
renovables en E s paña
Cuota de energías
para 2015. 6,0% 5,0% 4,8% 6%
renovables en transporte

Fuente: Comisión Cuota global de fuentes


13,6% 13,2% 13,5% 16,4%
europea y elaboración renovables
propia.

España: Plan de Energías Renovables (PER) 2011-2020. El Plan de Energías Renovables


(PER) 2011-2020 108, aprobado en noviembre de 2011, tuvo en cuenta las previsiones de
demanda y la situación económica en aquel momento. Los escenarios de demanda energética
y de crecimiento económico se someten a revisiones constantes todos los años, tanto los
escenarios futuros como los balances pasados, debido a que el proceso de obtención de
estadísticas es iterativo y se va ajustando mejor a la realidad de una mayor información
disponible.

En la Tabla 3-7 se puede resaltar del PER enviado en su día por el ministerio a la Comisión
Europea:

• E l cons umo final bruto previs to para 2020 en el conjunto de los 3 s ectores fue de 1.374
T W h, que con las medidas de ahorro y eficiencia energética previs tas s e reduce a
1.148 TW h, es decir, un decremento del 16,5%. A continuación, una tabla con las
previs iones para los 3 s ectores.

E nergías R enovables manteniendo s u objetivo del 31% , pero neces itando menos energía renovable para cumplirlo por la disminución
de la demanda de energía final previs ta para 2020.
106
V er C omisión E uropea informe de progres o.
107
V er Informe de P rogres o.
108
V er P lan de E nergías R enovables.

84
E lectricidad
3. G eneración

T abla 3-8. P revis iones


2005 2020
de cons umo final
Previsiones de Consumo
bruto de energía de final bruto (TWh) Eficiencia
Año de
E s paña en referencia
BAU energética Ahorro
adicional
calefacción y
refrigeración, 1. Calefacción y
468 405 360 11,11%
refrigeración
electricidad y
trans porte hasta 2. Electricidad 292 430 372 13,47%
2020, teniendo en
3. Transporte 377 490 376 23-38%
cuenta los efectos de
la eficiencia y de las 4. Consumo final bruto de
1.184 1.374 1.148 16,47%
medidas de ahorro energía
energético.

Fuente: Elaboración
propia.

• La aportación de las energías renovables al cons umo final bruto de energía s e es tima
que s erá del 20,8% en 2020 (frente a un objetivo para E s paña del 20% en 2020)
mientras en el P ANE R dicha aportación alcanzaba el 22,7%. E n la T abla 3-9 s e puede
ver el desglos e 109:

2005
P revis iones de energía 2020
(año de referencia)
procedente de fuentes
T abla 3-9. Objetivo de renovables % TW h % TW h
E s paña para 2020 y
A) P revis iones de cons umo
trayectoria es timada de la
final bruto de F E R para 8,9 41.175 17,3 62.291
energía procedente de calefacción y refrigeración
fuentes renovables (F E R )
en los s ectores de la B ) P revis iones de cons umo
final bruto de electricidad 18,4 53.768 39,0 144.827
calefacción y la
producida a partir de F E R
refrigeración, la electricidad
y el trans porte. C ) P revis iones de cons umo
final de energía procedente de 0,8 2.849 11,3 37.396
Fuente: Elaboración propia. F E R en el s ector de trans porte

D) P revis iones de cons umo


8,2 96.536 20,8 238.665
total de F E R

109
E l valor de la línea D "P revis iones de cons umo total de F E R " NO tiene porqué coincidir en cada año con la s uma de las tres líneas
precedentes, ya que, el gas , la electricidad y el hidrógeno, s e deben contabilizar una s ola vez en el total. A título de ejemplo, una parte
de la electricidad producida a partir de F E R , puede aparecer tanto en la línea "B " como en la línea "C ", ya que s e cons ume también por
el trans porte. As í, para evitar la doble contabilización, habría que s ustraerla, una vez, del total (línea "D").

85
E lectricidad
3. G eneración

C omo s e obs erva en la tabla, el s ector eléctrico es el que hace un mayor esfuerzo de
implantación de tecnologías /centrales renovables para lograr el objetivo: de toda la
electricidad cons umida, un 39% s e producirá a través de fuentes de energía renovable, y
de toda la energía renovable cons umida entre los 3 s ectores, es el s ector eléctrico el que
s oporta el mayor pes o (alrededor del 60%).

Objetivo de Energías Renovables de la UE a 2030. Uno de los objetivos principales que


tiene el marco sobre clima y energía para 2030 es que la cuota de renovables se
corresponda al menos en un 27% de la energía final consumida en la Unión Europea.
Dada la gran reducción de costes que están viviendo este tipo de tecnologías, la Comisión
Europea quiere apoyar la idea de ser más ambiciosos y aumentar la cuota de renovables
en un 3% alcanzado por tanto un objetivo mínimo de que al menos el 30% de la energía
final producida en la UE sea generada por fuentes de energía renovable.

86
E lectricidad
2. Normativa

3.4 Mecanis mos de apoyo a las energías renovables


Introducción. El modelo energético actual se caracteriza por un crecimiento constante del
consumo energético, basado en recursos finitos, principalmente combustibles fósiles, dando
como resultado un modelo insostenible a largo plazo (ver Insostenibilidad del sistema
energético y vías de solución).

Las principales soluciones al modelo energético se pueden agrupar en dos grandes bloques
de medidas: de demanda y de oferta. Las primeras se centran en actuaciones encaminadas a
mejorar la eficiencia energética. Las medidas de oferta están dirigidas a la descarbonización
del mix energético, siendo predominantes las actuaciones encaminadas a fomentar las
energías renovables, la energía nuclear y la captura y almacenamiento de CO2 (ver
Tecnologías y costes de la generación eléctrica y Energías renovables: tecnología, economía,
evolución e integración en el sistema eléctrico). Estos mecanismos, además, deben ser
compatibles con las ayudas del Estado.

Para poder alcanzar el objetivo de producción con energías renovables del 20% para 2020 y
de al menos un 27% para 2030, establecido por el Consejo Europeo, este tipo de tecnologías
requieren apoyo, dado que, en general, tienen costes totales más elevados que las
tecnologías convencionales.

Mecanismos de apoyo: Tipología general . En Europa y en el resto del mundo, se han


puesto en marcha distintos sistemas de apoyo al desarrollo de las energías renovables. Dichos
sistemas se pueden clasificar, entre otras maneras, atendiendo a estos dos criterios
fundamentales:

• S i la intervención regulatoria actúa s obre el precio o retribución recibida o s i lo hace


s obre la cantidad de potencia a ins talar o de energía a generar.

• S i dicha intervención actúa en la fas e inicial de invers ión o en la fas e pos terior de
generación de electricidad.

As í, los s is temas de apoyo pueden actuar regulando el precio de venta de la electricidad


generada a partir de fuentes renovables , ya s ea a través de una ayuda fis cal o financiera por
kW de capacidad ins talada, o a través de la fijación total o parcial de las tarifas a percibir por
cada kW h de origen renovable generado e incorporado a la red. E n ambos cas os , s e dejaría
en manos del mercado el res ultado de la cantidad de potencia a ins talar.

Alternativamente, la intervención regulatoria puede decantars e por establecer legalmente el


nivel abs oluto o relativo de potencia o generación a alcanzar (cantidad), dejando en manos del
mercado el res ultado de la fijación del precio.

E n la T abla 3-10 s e clas ifican los principales s is temas de apoyo vigentes a partir de la
combinación de tales criterios .

87
E lectricidad
3. G eneración

Precios Cantidades
regulados reguladas
T abla 3-10. T ipología de
los s is temas de apoyo a la Subvención a la inversión
electricidad de origen Basados en Subastas
Inversión
renovable. Desgravaciones fiscales

Fuente: Elaboración propia. Basados en Tarifas o primas reguladas Cuotas y Certificados


Generación (FIT), (FIP) Verdes.

En este apartado, se va a limitar el análisis al sistema de tarifas o primas reguladas (FIT 110) y
al de cuota y certificados verdes (C V ), ambos bajo el criterio de intervención regulatoria en la
fas e posterior de generación de electricidad, por s er los dos s is temas actualmente más
extendidos en E uropa. Además , dado que la energía eólica es la tecnología renovable que
más s e ha des arrollado, s e tomará como ejemplo de aplicación de estos s is temas . S e puede
obs ervar en la T abla 3-11 cómo los país es europeos en los que mayor éxito ha obtenido la
energía eólica s e han decantado por uno de es tos dos s istemas. Muchos de ellos es tán
cambiando actualmente los mecanis mos de apoyo principal, y s e podría decir que no exis te
una idea clara de s i s e mantendrán en el futuro.

Aun as í, lo que s e quiere repres entar en la T abla 3-11 es el des arrollo del parque eólico en
función del mecanismo de apoyo que impuls ó es te des arrollo.

110
F IT : F eed-in T ariffs , en inglés . .

88
E lectricidad
3. G eneración

País Sistema MW 2016


Alemania FIP 50.019
Rentabilida
España 23.075
d razonable
Reino Unido CfD/CV 14.542
Francia FIP 12.065
T abla 3-11. Marcos de apoyo a la Italia CV 9.257
energía eólica en la UE - P aís es con Suecia CV 6.519
más de 500 MW ins talados de Polonia CV 5.782
renovables . Portugal FIT 5.316
Dinamarca FIT 5.227
Fuente: CEER y elaboración propia. Holanda FIP 4.328
Rumania CV 3.028
Irlanda FIT 2.830
Austria FIT 2.632
Bélgica CV 2.386
Grecia FIT 2.374
Finlandia FIP 1.539
Bulgaria FIT 691

*El sistema de FIT en España quedó suspendido a principios de 2012 para las nuevas instalaciones de régimen especial y fue
eliminado para las instalaciones existentes con la aprobación del Real Decreto-ley 9/2013. Actualmente solo existe un sistema
basado en el concepto de rentabilidad razonable que se aplica sobre una inversión inicial teórica y que se calcula desde el
momento en que la instalación entra en explotación

Las tarifas o primas reguladas (feed-in tariffs, feed-in premiums ). De entre todos los
sistemas de apoyo, uno de los que actualmente prevalece de forma mayoritaria en la Unión
Europea es, como muestra la Tabla 3-11, el de tarifas o primas reguladas, un sistema con
distintas variantes agrupadas generalmente bajo la denominación inglesa de Feed-in Tariffs
(FIT).

De acuerdo con este sistema, los generadores de electricidad de origen renovable tienen
derecho a vender toda su producción a un precio fijado legalmente en su totalidad (tarifa
regulada total) o fijado solamente en parte (prima o incentivo regulado que se suma al precio
del kWh en el mercado eléctrico).

Mientras que la primera variante (precio regulado total) se aplica como opción única en países
como Francia, Portugal, Grecia, Austria, etc., el sistema regulatorio español permitía hasta
2013 a los generadores eólicos optar cada doce meses por seguir una u otra variante, esto es,
la tarifa regulada total o la opción prima o incentivo compensatorio sobre el precio del mercado
eléctrico. Con los cambios normativos sufridos en España a finales de 2012 y principios de
2013, se eliminó la opción de mercado más prima en el Real Decreto-ley 2/2013. Actualmente,
con la aprobación del Real Decreto-ley 9/2013 111 s e ha modificado el régimen económico de
las ins talaciones de energías renovables , cogeneración y res iduos , eliminado la tarifa regulada
y retribuyendo a las instalaciones de acuerdo a una rentabilidad razonable definida por el
G obierno (ver R egulación es pañola de las energías renovables ).

111
B oletín de E nergía y S ociedad Nº93: R es umen del R eal Decreto-ley 9/2013

89
E lectricidad
3. G eneración

E n cualquiera de s us variantes , los s is temas F IT s e caracterizan por fijar adminis trativamente


los precios o incentivos , cuyas cuantías varían adaptándose a las características de las
diversas tecnologías renovables (eólica, minihidráulica, biomasa, solar, etc.).

En la mayoría de los países donde se aplica, el cobro del precio o prima queda, además,
garantizado durante un periodo de tiempo que oscila entre un mínimo de 12 años y un máximo
que coincide con la vida útil de la instalación.

Entre las distintas variantes, se pueden encontrar FIT planas o FIT que evolucionan cada año
según algún índice referido a la inflación; FIT al mismo nivel durante toda la vida útil o FIT en
dos niveles, uno alto durante una serie de años y otro bajo después y cuyo salto de uno a otro
nivel depende del recurso eólico, bien en función del número de horas como en Francia, o bien
del momento en que la máquina alcance un rendimiento definido por el regulador como, por
ejemplo, en Alemania.

Lo importante del sistema FIT no es, por lo tanto, su forma sino su estabilidad, esto es, que
esté bien definido, tanto su nivel inicial como la forma en que evoluciona anualmente, para que
los inversores puedan predecir su retribución durante prácticamente la totalidad de la vida del
proyecto, lo que les animará a acometer la inversión si se obtiene una rentabilidad razonable
con un menor riesgo y con un coste de capital también menor.

La aplicación de este sistema de apoyo ha demostrado, en general, ser muy eficaz para
promover la expansión de las fuentes renovables de electricidad en aquellos casos en que la
tarifa o incentivo se sitúe en un nivel suficientemente elevado para asegurar rentabilidades
atractivas.

En todo caso, cuando las tarifas o incentivos se sitúan en un nivel demasiado bajo para
garantizar una rentabilidad adecuada, incluso el sistema FIT será incapaz de incentivar una
expansión apreciable de la tecnología correspondiente. También pueden darse casos de que
los incentivos a la actividad estén por encima de lo que resulta necesario para que se
recuperen los costes más la rentabilidad permitida, sobre-retribuyendo las instalaciones. En el
caso de que las tarifas no sean actualizadas y la FIT no evolucione, se podría primar a una
instalación con valores calculados en años previos, con los costes que en aquel momento
exigía la actividad en cuestión y que, por motivos de desarrollo, estos costes se vean
reducidos creando una situación de desajuste en la prima. Por tanto, depende de cómo esté
aplicada la FIT y de cómo evolucione para que se pueda considerar que es un buen
mecanismo de apoyo.

También debe matizarse que, en la medida en que las barreras a las que se enfrentan las
energías renovables no sean sólo económicas sino también políticas, administrativas, sociales,
tecnológicas y ambientales, disponer de una tarifa favorable es una condición necesaria pero
en ningún caso el único elemento necesario para impulsar las energías limpias. Un ejemplo de
una barrera tecnológica es el sistema de redes. Cuando la red de transporte no está lo
suficientemente desarrollada, o cuando las interconexiones internacionales son escasas, la
generación energética renovable ha de ser parada ya que no puede ser evacuada (ver
Energías renovables: tecnología, economía, evolución e integración en el Sistema Eléctrico).

Algunos países con tarifas FIT atractivas, como por ejemplo Grecia, no han conseguido
despegar en su desarrollo eólico, o lo han hecho en menor medida que otros Estados
miembro, debido a las graves barreras existentes a nivel administrativo y de conexión a la red.
Es éste un buen ejemplo de que un buen sistema de apoyo, entendido en sentido amplio,
requiere algo más que un régimen económico de tarifas o incentivos atractivos. Identificar las

90
E lectricidad
3. G eneración

razones clave por las que una tecnología renovable s e des arrolla o no adecuadamente en un
lugar determinado es , por tanto, un anális is complejo pero crucial para evaluar de forma global
el éxito o el fracas o de los s is temas de apoyo.

El sistema de cuota y certificados verdes (CV). El sistema de cuota y certificados verdes,


con variantes, está en funcionamiento desde hace varios años en algunos países de la UE
como Gran Bretaña, Suecia, Bélgica, Polonia, Rumanía e Italia.

Este sistema de apoyo a las energías renovables se caracteriza por la imposición legal a los
consumidores, suministradores o generadores de electricidad, según los casos, de la
obligación de que un determinado porcentaje o cuota, generalmente creciente en el tiempo, de
su suministro o producción de electricidad provenga de energías renovables.

A la finalización de cada periodo sucesivo considerado, generalmente un año, los sujetos


obligados por la cuota deberán demostrar su cumplimiento mediante la entrega virtual a la
correspondiente Autoridad Regulatoria Nacional de una cantidad de certificados verdes
equivalentes a la cuota fijada. Un certificado verde equivale habitualmente a un MWh de
energía renovable.

Los certificados verdes son otorgados


previamente y de forma gratuita por la El sistema de certificados verdes
Autoridad Regulatoria Nacional a los se caracteriza por la imposición
generadores de electricidad con fuentes
renovables en función de su producción y legal a los consumidores,
siguiendo generalmente la proporción de un suministradores o generadores de
certificado verde por cada MWh generado. electricidad, según los casos, de la
Así, se trata de un sistema tecnológicamente
neutro que fomenta únicamente el desarrollo
obligación de que un determinado
de las tecnologías más competitivas, por lo porcentaje o cuota, generalmente
que la mayoría de los países que lo emplean creciente en el tiempo
han introducido modificaciones para fomentar
el resto de tecnologías.

Países como el Reino Unido y Rumanía han introducido la diferenciación tecnológica a través
del denominado “banding”, de forma que, cada tecnología recibe un número distinto de CVs
por cada kWh generado. Así, las tecnologías que por tener mayor coste quedarían fuera del
mercado reciben más CVs por cada kWh generado que las tecnologías más baratas y por lo
tanto más competitivas. Otros países como Italia han introducido FIT para tecnologías más
caras como la solar fotovoltaica, dejando el mercado para tecnologías más competitivas.

Los generadores disponen así de dos bienes o commodities diferentes que venden en
mercados distintos: por un lado, la electricidad física y, por otro lado, los certificados verdes
como atributos de los beneficios ambientales asociados a cada unidad de electricidad física
producida a partir de fuentes renovables.

Los sujetos obligados, como por ejemplo en Gran Bretaña los suministradores, pueden
conseguir certificados verdes comprándolos directamente a los generadores, ya sea
separadamente o empaquetados junto a la electricidad renovable, o bien pueden comprar los
certificados verdes por separado en un mercado de certificados verdes que se pone en
marcha paralelamente al mercado eléctrico. Por cada kWh que no presenten se impone
legalmente una penalización.

91
E lectricidad
3. G eneración

E l concepto de la penalización es es trictamente neces ario para que es tos mecanis mos puedan
lograr s u objetivo. E n cas o de que no exis ties en multas por el incumplimiento de lo que dicta el
s is tema, s ignificaría que el cos te de no cumplir con este s is tema s ería nulo, con lo que no
exis te ningún incentivo para que las empres as compren certificados verdes . E sto caus aría que
los precios de los contratos verdes s e vies en muy reducidos (en cas o de que no intervinies e el
regulador), ya que el precio máximo de es tos contratos lo dicta la cuantía de las multas . P or
tanto, s i no exis te esta penalización, s ería muy difícil que s e pudiera des arrollar el plan.

E n ciertos cas os , la penalización no es económica. E s el cas o de Italia, por ejemplo, en donde


la penalización cons is te en la pos ible retirada de la licencia. E s to puede s uponer un
contratiempo mayor que hacer frente a la cuantía de la multa y por tanto las cons ecuencias
s on las mis mas, fomentando el des arrollo del s is tema. Además, s e puede acompañar es te tipo
de penalizaciones con una intervención regulatoria a través de precios regulados con
obligaciones de compra. C on esta fijación de los precios , s e impide la devaluación del valor de
los certificados verdes, impidiendo que el s is tema pierda s u función.

T al como s e ha vis to, el precio de los certificados también puede quedar definido por el
regulador. De es ta manera, ambos s is temas (C V , F IT ) podrían s ufrir el mis mo problema de
s obre-retribución, que sucede en el cas o en que las tecnologías es tán retribuidas por encima
de lo neces ario para recuperar costes más su rentabilidad. Un buen ejemplo s e puede
obs ervar en R umanía donde un s is tema de banding a la eólica de 2 CV/MWh en los primeros
años provocó una instalación masiva de esta tecnología y su posterior intervención regulatoria
para corregir este precio.

FIT versus certificados verdes. La comparación entre estos dos sistemas, fuera de las
diferencias de procedimiento existentes y que ya han sido explicadas, reside en poder
distinguir las ventajas y desventajas de cada uno de ellos.

Los mecanismos de apoyo FIT, en el caso de que estén bien formulados, pueden ser de gran
ayuda al fomento de las energías renovable, como ya se ha demostrado en algún país
europeo como España y Alemania, aunque en España este mecanismo ya no está vigente
desde el 13 de julio de 2013. Este sistema garantiza una retribución a la actividad de
producción durante un periodo específico de años. Además, ofrece la ventaja de ser un
sistema ágil, que aporta ventajas y resultados en un corto-medio plazo.

Por otro lado, y pese a ser probablemente el mecanismo con mayor éxito de los analizados
aquí, también se pueden encontrar inconvenientes. Como ya se ha explicado anteriormente,
es necesario que este mecanismo se mantenga bajo control, y con ajustes previstos para
rectificar a tiempo posibles casos de sobre-retribución de determinadas tecnologías que
deriven en burbujas, las cuales deberán posteriormente ser intervenidas por el regulador.
Existe un riesgo regulatorio del precio evidente en estos sistemas, que ha de ser tenido en
cuenta.

En el caso de los certificados verdes, y a pesar de lo que dice la teoría, el precio no queda tan
en manos de mercado como podría parecer a primera vista. Algunos ejemplos son los
siguientes:

• P ara que el s is tema funcione, esto es , con objeto de incentivar el cumplimiento de la


cuota, la legis lación impone a los s ujetos obligados por la mis ma el pago de una multa
por cada certificado verde que les falte para cumplir s u cuota. La cuantía de la multa
marca as í el precio teórico máximo de los certificados verdes , ya que nadie estará
dis pues to a pagar más por un C V que la multa as ignada por no pres entar este título.

92
E lectricidad
3. G eneración

E s tas intervenciones del regulador al fijar la cantidad de la cuota o la multa alejan el


precio de las condiciones de mercado que dictan la oferta y la demanda.

• La intervención política en el precio alcanzó s u máxima expres ión en Italia. La


legis lación permitía al G S E (operador del s istema) actuar en el mercado. As í, ante la
falta de C V introducía él mismo los que faltaban y, en cas o de exces o, compraban los
s obrantes. E n ambos cas os a un precio de referencia definido por la legis lación.

• E n el R eino Unido, s e ideó un s is tema conocido como headroom que consiste en


determinar la cuota obligatoria de los suministradores sumando un 10% a la energía
renovable prevista, de manera que la demanda de certificados verdes sea siempre
mayor que la oferta y así proteger el precio del certificado verde de posibles caídas.

Otro de los argumentos para sustentar la supuesta mayor orientación al mercado del sistema
de cuota y certificados verdes frente a los sistemas FIT afirma que sólo el primer sistema
impulsa la competencia entre los generadores y que, gracias a ellos, se reducen los costes del
sistema de apoyo. Sin embargo, una mirada a la realidad muestra que varios de los países
que superan la media de los precios unitarios por MWh de la energía eólica en Europa utilizan
sistemas de apoyo de cuota y certificados.

Otros tipos de apoyos. A continuación, se presenta un breve resumen de las posibilidades


existentes de otros tipos de apoyos, clasificados en directos o indirectos.

• Apoyo directo. Como apoyos considerados directos, los más relevantes son:

 Subastas: los promotores s on invitados a enviar ofertas por una cantidad


limitada de potencia o energía en un periodo dado. Las compañías que oferten
el s uminis tro al menor cos te ganan contratos a largo plazo para llevarlo a cabo
los proyectos, generalmente a lo largo de un periodo determinado. S uelen
alrededor de 12-15 años, pudiendo llegar hasta 20 años .

Des de un punto de vis ta puramente teórico, las s ubas tas ofrecen mejores
caracterís ticas que otros mecanismos de apoyo a las energías renovables ; por
un lado, permiten competencia entre promotores , lo que llevaría a maximizar la
eficiencia; por otro, limitan la capacidad máxima de energía renovable ins talada,
lo que permitiría un control de los riesgos de cantidad por parte del regulador;
además , ofrecen es tabilidad en la remuneración, por lo que reducirían la
incertidumbre y los riesgos as ociados a los proyectos .

No obs tante, las s ubastas pres entan algunas des ventajas prácticas que no han
permitido obs ervar resultados pos itivos en las experiencias internacionales
exis tentes hasta la fecha, tales como:

o Altos costes de preparación, llegando inclus o a s er un factor


des incentivador para participar en las mismas y caus a de que los precios
res ultantes no s iempre reflejen los costes marginales de generación.

o S uponen ries gos para el regulador res pecto al número de proyectos que
finalmente s e des arrollarán, ya que la alta incertidumbre en s u
realización puede provocar que ganadores de las s ubastas no culminen
finalmente s us planes. Una pos ible s olución a esto es poner una

93
E lectricidad
3. G eneración

penalización a quien incumpla, pero es ta medida s ube aún más el coste


de participación en la s ubas ta y s u precio final.

o Los generadores tienen una menor expos ición a las s eñales del mercado
en comparación con los certificados verdes o con los es cenarios de
primas , por lo que reciben menos incentivos a que s u operación s ea más
eficiente.

 Subsidios a la inversión: algunos país es conceden ayudas por un porcentaje


del cos te de la invers ión en algunas tecnologías , lo que reduce el cos te del
capital.

 Incentivos Fiscales: s e us an diferentes opciones para fomentar la generación


de fuentes renovables con ins trumentos fis cales, por ejemplo la aplicación de
un IV A reducido, exenciones de impuestos de los dividendos generados por
es tas invers iones , amortizaciones aceleradas , etc. S egún s u dis eño pueden
res ultar muy eficaces en el fomento, como ocurrió en E E .UU. e India, que ya
cuentan en 2017 con 73.393 MW y 28.700 MW de energía eólica
res pectivamente, ocupando los puestos nº 2 y nº 4 del ranking mundial en el año
2016. S in embargo, en ambos país es s e han acompañado de otros apoyos
como FIT en India y sistemas de cuota (llamados Renewable Portfolio
Standard) en muchos de los estados de EEUU que completan los incentivos
fiscales.

• Apoyo indirecto. Al margen de las es trategias anteriormente des critas , hay otras
es trategias que pueden tener un impacto indirecto en la proliferación de las energías
renovables . Las más importantes s on:

 E cotas as a la electricidad producida con fuente no renovables .

 P olíticas de C O 2 como tas as o derechos de emis ión (ver E l esquema “cap and
trade” en E uropa y los incentivos a reducir emis iones )

 R educciones de las s ubvenciones a la energía nuclear o de origen fós il.

94
E lectricidad
3. G eneración

3.5 R egulación española de las energías renovables

Evolución normativa. La Regulación de las energías renovables en España no empieza a


desarrollarse hasta la década de 1980, con una ley que fomenta la minihidráulica (Ley 82/1980
de conservación de la energía) con el fin de hacer frente a la crisis del petróleo y mejorar la
eficiencia energética, reduciendo así la dependencia del exterior. Ya en la década siguiente, el
Plan Energético Nacional 1991-2000 incentiva la producción con energías renovables y,
mediante la Ley 40/1994 del sistema eléctrico nacional (LOSEN), se consolida el concepto de
régimen especial. Así, el Real Decreto 2366/1994 sobre producción de energía eléctrica por
instalaciones hidráulicas, de cogeneración y otras abastecidas por recursos o fuentes
renovables, regula la energía eléctrica del régimen especial. Este Real Decreto incluye en el
régimen especial instalaciones, de residuos, plantas de cogeneración, plantas que utilizan
calor residual y centrales hidráulicas, todas con una potencia menor o igual a 100 MVA. En
virtud de este Real Decreto, la empresa distribuidora más cercana tiene la obligación de
adquirir la energía excedentaria de estas instalaciones siempre que sea técnicamente viable.
El precio de venta de la energía se fija en función de las tarifas eléctricas, en función de la
potencia instalada y del tipo de instalación, constando de un término de potencia y de un
término de energía, además de otros
complementos.

La Ley 54/1997 112 del S ector E léctrico La Ley 54/1997 del S ector
dis tingue la producción en régimen ordinario E léctrico distingue la producción
de la producción en régimen es pecial e en régimen ordinario de la
identifica también el marco económico de
retribución para cada uno de estos modelos de producción en régimen especial e
generación de electricidad. La actividad de identifica también el marco
generación en régimen es pecial recoge la económico de retribución para
generación de energía eléctrica en
ins talaciones de potencia no s uperior a 50 MW
cada uno de estos modelos de
que utilicen como energía primaria energías generación de electricidad
renovables o res iduos, y aquellas otras como
la cogeneración que implican una tecnología con un nivel de eficiencia y ahorro energético
cons iderable.

E l R eal Decreto 2818/1998, s obre producción de energía eléctrica por instalaciones


abas tecidas por recursos o fuentes de energías renovables , res iduos y cogeneración
(derogado por el R eal Decreto 436/2004 113), es tablece que las primas del régimen es pecial
deberían s er actualizadas anualmente y revis adas cada 4 años.

E l P lan de F omento de las E nergías R enovables (P F E R ), de 1999, s eñala objetivos de


crecimiento de cada tecnología renovable de forma que las fuentes de energía renovable
cubran al menos el 12% del cons umo de energía primaria en E s paña en el año 2010 (F igura 3-
24).

112
V er Ley 54/1997.
113
V er R eal Decreto 436/2004.

95
E lectricidad
3. G eneración

0% 9%
F igura 3-9. 1%
20% 0,80% Geotérmica
Contribución de las Biocarburantes
12% 2,53%
Energías Hidráulica
Renovables al 2,60% solar
consumo de
energía primaria en 14% 3,40% Eólica
España en 2016
(123.500 ktep).
4,60% Biomasa, biogás y RSU
44%
Fuente: IDAE y
elaboración propia. Carbón Energías Renovables
Gas Natural Residuos no renovables
Nuclear Saldo eléctrico
Petróleo

El Real Decreto-ley 6/2000 114, de medidas urgentes de intens ificación de la competencia en


mercados de bienes y servicios , incentiva la participación en el mercado de las ins talaciones
del régimen es pecial, previendo la pos ibilidad de contratos de venta de energía con
comercializadores .

E l R eal Decreto 1663/2000 115 s obre conexión de ins talaciones fotovoltaicas a la red de baja
tens ión, da un pas o más al s implificar las condiciones de conexión de es tas ins talaciones de
has ta 100 kV A.

E l R eal Decreto 841/2002 116 por el que s e regula, para las ins talaciones de producción de
energía eléctrica en régimen es pecial, s u incentivación en la participación en el mercado de
producción, determinadas obligaciones de información de s us previs iones de producción y al
adquis ición por los comercializadores de s u energía eléctrica producida, des arrolla el R eal
Decreto Ley 6/2000, y es tablece la obligatoriedad de participación en el mercado para las
ins talaciones de potencia >50 MW , que quedan as í incluidas en el régimen ordinario. Además ,
s e permite la opción de contratación entre generadores en régimen es pecial y
comercializadores , percibiendo la prima corres pondiente por la energía vendida.

E l R eal Decreto 436/2004 117, (que deroga al R eal Decreto 2818/1998) por el que se establece
la metodología para la actualización y s is tematización del régimen jurídico y económico de la
actividad de producción de energía eléctrica en régimen es pecial, des arrolla la Ley del S ector
E léctrico y es tablece el es quema legal y económico para el régimen es pecial, con el fin de
cons olidar el marco regulador y crear as í un sis tema es table y previs ible. E l titular de la
ins talación tiene dos alternativas para la remuneración de la energía eléctrica generada:

• V ender la electricidad a la empres a distribuidora a tarifa regulada, cuyo importe


depende de la potencia y de los años trans curridos des de la fecha de pues ta en
marcha de la ins talación, imputándos e el cos te de los des víos .

114
V er R eal Decreto Ley 6/2000.
115
V er R eal Decreto 1663/2000.
116
V er R eal Decreto 841/2002.
117
V er R eal Decreto 436/2004.

96
E lectricidad
3. G eneración

• V ender la electricidad libremente en el mercado, acudiendo directamente al mis mo o


bien a través de un contrato bilateral o a plazo con una comercializadora, percibiendo
por ello el precio de mercado más un incentivo por participar en él, as í como una prima.

E l P lan de E nergías R enovables (P E R ) 2005-2010 s ustituye al P F E R , cuyos res ultados fueron


ins uficientes . C on esta revis ión s e trató de mantener el compromis o de cubrir con fuentes
renovables al menos el 12% del consumo total de energía primaria en 2010, as í como la
incorporación de los otros dos objetivos comunitarios indicativos de 29,4% de generación
eléctrica con renovables y 5,75% de biocarburantes en trans porte para 2010. C on esta idea s e
aumentó el objetivo de las energías eólica (de 9.000 MW a 20.155 MW ) y s olar (en la s olar
fotovoltaica s e pas ó de 135 a 400 MW ; en la s olar térmica de 309 ktep a 809 ktep; y la s olar
termoeléctrica multiplicó s us objetivos pas ando de 200 MW a 500 MW ), y dis minuyó el de la
potencia ins talada de biomas a en 154 MW , fijándos e en 1.695 MW .

E n es ta línea, el R eal Decreto 314/2006 118 por el que s e aprueba el C ódigo T écnico de la
E dificación (C T E ), es tablece la obligatoriedad de incorporar instalaciones s olares térmicas y
paneles fotovoltaicos en ciertas edificaciones .

E l R eal Decreto-ley 7/2006 119 por el que s e adoptan medidas urgentes en el s ector energético,
des vincula la variación de las primas del régimen es pecial de la T arifa media eléctrica o de
R eferencia.

E l R eal Decreto 661/2007 120, por el que se regula la actividad de producción de energía
eléctrica a partir de energías renovables , cogeneración y res iduos (antiguo régimen es pecial),
deroga al R eal Decreto 436/2004, pero manteniendo s u esquema bás ico. As í, s e mantiene la
doble opción de retribución, es decir, venta a tarifa regulada, que es el precio fijo que recibe el
productor por la energía vertida al s istema, o directamente en el mercado, percibiendo el
precio negociado en el mis mo más una prima, teniendo la retribución total unos límites
s uperior e inferior horarios ( cap and floor). Este Real Decreto también elimina el incentivo a
participar en el mercado ((Figura 3-25, Figura 3-26).

F igura 3-105.
E s quema de
la retribución • FLOOR < (Precio mercado ref. + Prima ref.) < CAP:
de las → Prima = Prima ref.
energías • (Precio mercado ref. + Prima ref.) ≤ FLOOR:
renovables , → Prima = FLOOR – Precio mercado ref.
cogeneración
Precio mercado ref. ≥ CAP:
y res iduos . •
→ Prima = 0

Fuente: IDAE
y elaboración
propia.

118
Ver Real Decreto 314/2006.
119
Ver R eal Decreto Ley 7/2006.
120
V er R D 661/2007.

97
E lectricidad
3. G eneración

F igura 3-116.
R etribución de Retribución Prima
total
las energías Precios 2008 [€/MWh]
[€/MWh] Precios 2008
renovables , [€/MWh]
cogeneración y
res iduos .
87 Cap 73

75 Tariff
Fuente: 73 Floor
Elaboración
propia. 30

Precio pool Precio pool


43 57 87 43 57 87

Prima Prima Sin prima:


decrece de Prima de decrece solo
73 a 30 30 € /MWh de 30 a 0 precio
€ / MWh € / MWh pool

Según el Real Decreto 661/2007, la condición de instalación de régimen especial, actualmente


energías renovables, cogeneración y residuos (RECORE), la otorga la Comunidad autónoma
correspondiente, siendo la inscripción definitiva de la instalación en el Registro administrativo de
instalaciones de producción en régimen especial la condición necesaria para acceder al régimen
económico regulado por dicho Real Decreto, siempre que el objetivo de potencia instalada fijado
para cada tecnología en el propio Real Decreto no haya sido cubierto.

Tabla 3-12. Límites de potencia para Categoría MW en RD 661


acceder a la retribución del Real
Decreto 661/2007. Solar Térmica 500

Eólica 20.155
Fuente: RD 661/2007 y elaboración
propia. Hidráulica < 10MW 2.400

Biomasa 1.317

Biogás 250

Alcanzado el 85% del objetivo de potencia (Tabla 3-12) se definió, mediante Resolución, el
plazo máximo durante el cual las instalaciones que obtenían su inscripción definitiva tendrían
derecho al régimen económico del Real Decreto 661/2007, que en ningún caso será inferior a
1 año. La Comisión Nacional de la Energía (CNE), actual CNMC, estableció un sistema de
información en su web que determinaba en cada momento y para cada tecnología la potencia
total con inscripción definitiva, el grado de avance con respecto a los objetivos de potencia y el
plazo estimado de cumplimiento de dichos objetivos.

La Ley 17/2007 121 por la que s e modifica la Ley 54/1997, adapta la Ley del S ector E léctrico a
la Directiva 2003/54/C E s obre normas comunes para el mercado interior de electricidad. As í, el
G obierno podía es tablecer una prima para las ins talaciones de energías renovables aun
cuando la potencia ins talada fuera s uperior a 50 MW .

121
V er 17/2007.

98
E lectricidad
3. G eneración

E l R eal Decreto 1578/2008 modifica el régimen económico de la actividad de producción de


energía eléctrica mediante tecnología s olar fotovoltaica para las ins talaciones pos teriores a la
fecha límite de mantenimiento de la retribución del R eal Decreto 661/2007 122 para dicha
tecnología, clas ifica las nuevas ins talaciones en dos tipologías s egún es tén ubicadas en
cubiertas (tipo I) o en el s uelo (tipo II). La retribución de es tas ins talaciones s e bas a en
diferentes convocatorias anuales con cupo de potencia por tipología y s e ajusta a la curva de
aprendizaje de la tecnología (para cada convocatoria s e es pecifica el precio y el cupo de
potencia), lo que s e traduce en un abaratamiento del coste de la electricidad en relación al
modelo anterior. T ambién, este R eal Decreto 1578/2008 limita la aplicación del R eal Decreto
661/2007.

Debido al impacto económico que s obre el s is tema tarifario tienen las energías renovables , s e
aprueba el R eal Decreto Ley 6/2009 con el fin de es tablecer unos mecanis mos res pecto al
s is tema retributivo de las ins talaciones de régimen es pecial (s alvo para tecnología fotovoltaica,
ya regulado en el R eal Decreto 1578/2008), y as í garantizar la s os tenibilidad del s is tema, tanto
des de el punto de vis ta técnico como económico. (V er E l déficit tarifario: qué es,
cons ecuencias y s olución).

As í, s e crea un R egistro de P reas ignación de R etribución 123 que permite conocer qué
proyectos cumplen con las condiciones de poder ejecutars e, s u volumen de potencia, el
impacto en los costes de la tarifa eléctrica y s u calendario. De esta manera, la ins cripción en
dicho R egistro de P reas ignación pas a a s er condición neces aria para obtener el régimen
económico es tablecido en el R eal Decreto 661/2007. P os teriormente, las instalaciones
ins critas en el R egistro de P reas ignación deberán s er ins critas en el R egistro adminis trativo de
ins talaciones de producción en régimen es pecial.

S e prevé as í mis mo un régimen trans itorio para garantizar la s eguridad jurídica de aquéllos
que ya habían realizado invers iones bajo el amparo del R eal Decreto 661/2007 antes de la
entrada en vigor del R eal Decreto-ley 6/2009. As í, los proyectos que a la entrada en vigor de
es te R eal Decreto-ley 6/2009 cumplieran todos los requis itos del R egis tro de P reas ignación,
s alvo el referido al depós ito del aval en favor de la Dirección G eneral de P olítica E nergética y
de Minas , podrán pres entar s u s olicitud de ins cripción en un plazo determinado, y contarán
con un plazo adicional para cumplir con el requis ito del aval. C uando la potencia ins crita s ea
inferior al objetivo previs to en el R eal Decreto 661/2007, el régimen económico previs to en el
mis mo s e extenderá has ta s u cumplimiento. P ero s i la potencia ins crita es mayor al objetivo
previs to, el régimen económico s e aplicará y s e agotará con dichas instalaciones ins critas . E n
es te cas o se podrán es tablecer restricciones anuales a la ejecución y entrada en operación de
las ins talaciones ins critas y la priorización de las mismas para no comprometer la
s os tenibilidad técnica y económica del s is tema.

La potencia s olicitada para las tecnologías termos olar y eólica excede ya los objetivos fijados
en el R eal Decreto 661/2007, y con el fin de no comprometer el s istema, s ólo s e podrán
incorporar al s is tema 3.100 MW (porque s on los que realmente cumplen las condiciones ) de
nueva potencia renovable al año hasta 2014, s egún establece la R es olución de 19 de
noviembre de 2009 s obre la ordenación de los proyectos o instalaciones pres entados al
regis tro de preas ignación.

122
V er R eal Decreto 661/2007.
123
R egistro de P reas ignación de R etribución.

99
E lectricidad
3. G eneración

As í, s e acuerda ordenar los proyectos atendiendo a un criterio cronológico, y s e dis pone la


pues ta en marcha de las ins talaciones en fases s uces ivas de acuerdo al s iguiente ritmo
acumulado de implantación:

• F as e 1:

 S olar termoeléctrica: 850 MW

 E ólica: 3.719 MW

• F as e 2: vertido de energía > 1.1.2011; ins cripción definitiva < 1.1.2013

 S ola termoeléctrica: 1.350 MW

 E ólica: 5.419 MW

• F as e 3: vertido de energía >1.1.2012; ins cripción definitiva < 1.1.2013

 S olar termoeléctrica: 1.850 MW

 E ólica: resto de potencia ins crita al amparo de DT 5 ª R eal Decreto Ley 6/2009

• F as e 4: vertido de energía > 1.1.2013; ins cripción definitiva < 1.1.2014

 S olar termoeléctrica: resto de potencia ins crita al amparo de DT 5 ª R eal Decreto


Ley 6/2009

E l régimen económico del R eal Decreto 661/2007 s e agota cuando el objetivo de potencia s ea
alcanzado, y s e apruebe, mediante R eal Decreto, un nuevo marco jurídico económico.

E n junio de 2010 s e pres entó en la C omis ión E uropea el P lan de Acción Nacional de E nergías
R enovables 2011-2020 (P ANE R ) que incorporaba los objetivos marcados por la Directiva
2009/28/C E del P arlamento E uropeo y del C ons ejo, relativo al fomento del us o de energía
procedente de fuentes renovables (ver Objetivos de producción con fuentes renovables en la
UE y en E s paña).

F inalmente, en noviembre de 2011 s e aprobó el nuevo P lan de E nergías R enovables (P E R )


2011-2020 124, que s us tituye tanto al P E R 2005-2010 como al P ANE R 2011-2020, atendiendo a
los mandatos del R eal Decreto 661/2007, por el que s e regula la actividad de producción de
energía eléctrica en régimen es pecial y de la Ley 2/2011 de E conomía S os tenible. E l P E R
2011-2020 propone que las energías renovables repres enten en 2020 un 20,8% del cons umo
final bruto de energía en E s paña, con una contribución de es tas fuentes al consumo del
trans porte del 11,3% en es e mis mo año, s uperando as í los objetivos mínimos obligatorios
es tablecidos para E s paña en la directiva de energías renovables , que coinciden con los
objetivos globales medios de la Unión E uropea. E s te 20,8% de cons umo final bruto de energía
mediante contribución de energías renovables , s upone un cons umo de un 39% s obre el total
del cons umo eléctrico (ver Objetivos de producción con fuentes renovables en la UE y en
E s paña). Debido a la coyuntura económica actual es te documento s e encuentra de nuevo en
revis ión.

124
V er P E R 2011-2020.

100
E lectricidad
3. G eneración

Situación actual de las energías renovables en España. Anteriormente, la normativa que se


ha ido aprobando en relación a las energías renovables se ha destinado a su desarrollo y
fomento, sin embargo, en años anteriores de crisis económica y de tendencia creciente del
déficit de tarifa del sector eléctrico, las medidas que el Gobierno aprobó estaban orientadas a
la reducción del coste que suponen estas tecnologías al sistema.

En enero de 2012, con el fin de que acometer la resolución del problema del elevado déficit
tarifario del sistema eléctrico en un entorno más favorable, se aprobó el Real Decreto-ley
1/2012 125, por el cual se s us pendieron los incentivos económicos para los proyectos
encaminados a la instalación de nuevas plantas de producción de energía eléctrica por medio
de fuentes renovables , cogeneración y res iduos. Además , s us pende de forma indefinida los
procedimientos de ins cripción en el R egistro de preas ignación de retribución previs tos en el
R eal Decreto-ley 6/2009 y dejó s in efecto, para las ins talaciones fotovoltaicas , la celebración
de convocatorias de preas ignación de retribución para los años 2012 y s uces ivos del R eal
Decreto-ley 1578/2008.

A esta primera reforma del s ector (R eal Decreto-ley 1/2012), le s iguieron el R eal Decreto-ley
13/2012 126, por el que se trans ponen directivas en materia de mercados interiores de
electricidad y gas y en materia de comunicaciones electrónicas y por el que s e adoptan
medidas para la corrección de las des viaciones por des ajustes entre los cos tes e ingres os de
los s ectores eléctrico y gas is ta y el R eal Decreto-ley 20/2012 127 de medidas para garantizar la
es tabilidad pres upuestaria y de fomento de la competitividad. Más tarde, s e adoptó la ley
15/2012 128de medidas fis cales para la s os tenibilidad energética, en donde s e marca la
creación de nuevos impues tos para el s ector eléctrico con fines estrictamente recaudatorios
con la intención de reducir el déficit eléctrico. R ecientemente, en el R eal Decreto-ley 10/2017,
s e establece un impuesto para la producción de la energía eléctrica, que grava la actividad de
generación y la incorporación de la energía al s is tema eléctrico con un tipo impos itivo de un
7%. A su vez, s e crea un canon por utilización de aguas continentales del 22% para la
producción de energía eléctrica, el cual s e reduce un 90%, entre otros , para las centrales
hidroeléctricas s ean iguales o inferiores a 50 MW y para la energía nuclear. E stos valores s e
han modificado recientemente por el R eal Decreto-ley 10/2017 aumentándolo el canon a
25,5% y la reducción a un 92% (ver E l déficit tarifario: qué es, cons ecuencias y s olución). E s ta
ley también excluye del régimen económico primado a la electricidad generada a partir de
combustibles fós iles en ins talaciones renovables (ya s ean ins talaciones híbridas o no
híbridas ).

A finales del año 2012, s e aprobó el R eal Decreto-ley 29/2012 129 para la eliminación del límite
de déficit tarifario en 2012 y 2013 en el que s e corrige o s uprime del régimen económico
primado para las ins talaciones de régimen es pecial (renovables y cogeneración) que
incumplan las obligaciones requeridas para s u ins cripción definitiva en el registro de
preas ignación.

T ras es tablecers e las medidas urgentes de 2012, unos mes es más tarde s e continuó con la
reforma eléctrica por medio del R eal Decreto-ley 2/2013. E n él s e s ustituye la metodología por
la que s e actualizan las retribuciones, tarifas y primas de las actividades del s is tema eléctrico
vinculadas al IP C , IP C que s e s ustituye por el IP C s ubyacente a impues tos constantes.

125
V er R eal Decreto-ley 1/2012.
126
V er R eal Decreto 13/2012.
127
V er R eal Decreto-ley 20/2012.
128
V er Ley 15/2012.
129
V er R eal Decreto-ley 29/2012.

101
E lectricidad
3. G eneración

T ambién, s e modifica el R eal Decreto 661/2007 130, por el cual s e regula la actividad de
producción de energía eléctrica en régimen especial, s uprimiendo las primas exis tentes y
eliminando la pos ibilidad de poder acogers e con posterioridad a la opción de retribución a
tarifa a aquellas ins talaciones que a la entrada en vigor de es te R eal Decreto-ley opten por
vender s u energía en el mercado.

S e mantienen las retribuciones fijadas por las ins talaciones adjudicatarias del concurs o de
tecnología s olar termoeléctrica con carácter innovador.

E l 16 de febrero de 2013 s e aprobó la Orden IE T /221/2013 131, por la que s e es tablecen los
peajes de acces o a partir del 1 de enero de 2013 y las tarifas y primas de las ins talaciones de
régimen es pecial.

E l 13 de julio de 2013 s e aprobó el R eal Decreto-ley 9/2013 132, por el que s e adoptan medidas
urgentes para garantizar la estabilidad financiera del s istema eléctrico. E s te nuevo marco
normativo es tablece un nuevo régimen jurídico y económico para las ins talaciones de
producción de energía eléctrica a partir de energías renovables , cogeneración y res iduos . S e
abandona el modelo de incentivo bas ado en la producción eléctrica establecido des de la Ley
54/1997.

E n primer lugar, des aparece el régimen es pecial, pas ando todas las ins talaciones a regirs e por
la mis ma normativa y as umir las obligaciones del mercado.

E l nuevo régimen económico s e bas a en la percepción, en el cas o en el que proceda, de los


ingres os derivados de la participación en el mercado, con una retribución adicional es pecífica
articulada en:

• Un término por unidad de potencia instalada (€/MW ) que cubra, cuando proceda, los
cos tes de invers ión de una ins talación tipo que no puedan s er recuperados por la
venta de energía. E sta retribución a la invers ión permite a la ins talación poder alcanzar
la rentabilidad razonable definida por el G obierno. La ins talación de energías
renovables , cogeneración o res iduos percibirá es ta retribución a la invers ión s iempre
que no haya alcanzado en el momento de la publicación del R eal Decreto-ley 9/2013
la rentabilidad razonable definida.

• Un término a la operación (€/MW h) que cubra la diferencia entre cos tes de explotación
y los ingres os por la participación en el mercado de dicha ins talación tipo. E s ta
retribución a la operación pers igue hacer el E B IT DA de la instalación nulo con el
objetivo de que no tenga pérdidas de operación durante el proces o de generación de
electricidad. La ins talación de energías renovables , cogeneración o res iduos no
percibirá esta retribución a la operación s iempre y cuando s us ingres os por venta de
electricidad en el s is tema s ean superiores a s us cos tes de explotación.

P ara las ins talaciones con derecho a prima, con anterioridad a es ta Ley el nuevo s is tema
retributivo garantiza una rentabilidad razonable para una ins talación tipo que s e es tima, antes
de impuestos, como las Obligaciones del E stado a 10 años (media de los últimos 10 años )
incrementada con un diferencial de 300 puntos bás icos y que en todo caso, podrá s er revis ada

130
V er R eal Decreto 661/2007.
131
V er Orden IE T /221/2013.
132
B oletín de E nergía y S ociedad Nº93: R es umen del R eal Decreto-ley 9/2013

102
E lectricidad
3. G eneración

a los s eis años. Además , este nuevo marco s uprime el complemento por eficiencia para las
ins talaciones que estuvieran percibiéndolo y la bonificación por energía reactiva.

La Ley 24/2013 cons agra es tos principios y es tablece que el régimen retributivo de las
ins talaciones con derecho a prima, con anterioridad a es ta Ley, se referenciará a las
Obligaciones del E stado a diez años más un diferencial de 300 puntos bás icos durante el
primer periodo regulatorio que finalizará el 31 de diciembre de 2019. A partir del 1 de enero de
2020 s e s ucederán los s iguientes periodos regulatorios de forma cons ecutiva.

E xcepcionalmente, el G obierno podrá establecer un régimen retributivo es pecífico para


fomentar la producción a partir de fuentes de energía renovables , cogeneración de alta
eficiencia y res iduos , cuando exis ta una obligación de cumplimiento de objetivos energéticos
derivados de Directivas u otras normas de Derecho de la Unión E uropea o cuando s u
introducción s uponga una reducción del coste energético y de la dependencia energética
exterior, en los términos es tablecidos a continuación:

• E l otorgamiento de este régimen retributivo es pecífico s e es tablecerá mediante


procedimientos de concurrencia competitiva. E ste régimen retributivo, adicional a la
retribución por la venta de la energía generada valorada al precio del mercado de
producción, es tará compues to por un término por unidad de potencia ins talada que
cubra, cuando proceda, los cos tes de invers ión para cada instalación tipo que no
pueden s er recuperados por la venta de la energía en el mercado, y un término a la
operación que cubra, en s u cas o, la diferencia entre los costes de explotación y los
ingres os por la participación en el mercado de producción de dicha ins talación tipo.

• P ara el cálculo de dicha retribución es pecífica s e cons iderarán, para una ins talación
tipo, a lo largo de s u vida útil regulatoria y en referencia a la actividad realizada por una
empres a eficiente y bien gestionada, los valores que res ulten de cons iderar:

 Los ingres os estándar por la venta de la energía generada valorada al precio del
mercado de producción.

 Los costes es tándar de explotación.

 E l valor es tándar de la invers ión inicial.

E n cada periodo regulatorio de s eis años s e podrá modificar todos los parámetros retributivos
(incluido la rentabilidad razonable) s in que se pueda modificar la vida útil y el valor es tándar de
la invers ión inicial de una ins talación; cada tres años s e revis arán para el resto del periodo
regulatorio las estimaciones de ingres os por la venta de la energía generada, valorada al
precio del mercado de producción en función de la evolución de los precios del mercado y las
previs iones de horas de funcionamiento. Al menos anualmente, s e actualizarán los valores de
retribución a la operación para aquellas tecnologías cuyos cos tes de explotación que
dependan es encialmente del precio del combus tible. 133

F inalmente, y des arrollando el R eal Decreto-ley 9/2013 s e publica el R eal Decreto 413/2014
por el que s e regula la actividad de producción de energía eléctrica a partir de fuentes de
energía renovables , cogeneración y res iduos y la Orden Minis terial 1045/2014 por la que s e
aprueban los parámetros retributivos de las ins talaciones tipo aplicables a determinadas
ins talaciones de producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovables ,
133
V er Ley 24/2013

103
E lectricidad
3. G eneración

cogeneración y res iduos. E n esta mis ma Orden Minis terial también s e indica la retribución a la
operación y la retribución a la invers ión para el primer s emiperiodo regulatorio que termina en
2016 para todas las instalaciones tipo definidas.

Subastas. Dado que el marco normativo de las renovables y el propio mercado eléctrico no
estaban dando seguridad y señales de precio adecuadas para motivar la financiación de los
proyectos debido a la sucesión de cambios regulatorios ocurridos en años anteriores, se
produjo un parón en la instalación de energías renovables. Para poder superar esta situación y
alcanzar los objetivos a 2020 y 2030, recientemente se han celebrado tres subastas de
capacidad renovable en nuestro país.

La primera de ellas se celebró el 14 de enero de 2016. Acorde al Real Decreto 947/2016 134, de
16 de octubre, s e establece una convocatoria para el otorgamiento del régimen retributivo
es pecífico a nuevas ins talaciones de producción de energía eléctrica a partir de biomas a y
tecnología eólica, en concreto 200 MW y 500 MW res pectivamente, alcanzando por tanto un
total de 700 MW .

Debido al dudos o res ultado obtenido en la s ubas ta, en la cual s e adjudicaron todos los
megavatios s in ninguna prima, es decir, tan solo perciben el precio del “pool”, las dos
siguientes subastas celebradas el 17 de mayo de 2017 (ETU/315/2015 135, de 6 de abril de
2017) y 26 de julio de 2017 (RD 650/2017 136, de 16 de junio de 2017) han sido modificadas a
una subasta más compleja y extensa en cuanto a normativa.

Mediante estas subastas los proyectos adjudicatarios de las mismas tienen la oportunidad de
asegurar una rentabilidad mínima para los proyectos a lo largo de su vida útil. Se trata de un
mecanismo que da un incentivo a la inversión sobre el CAPEX del proyecto (€/MW) para que
este alcance siempre dicha rentabilidad razonable.

De esta forma, en las subastas, los participantes ofertan un descuento al CAPEX del proyecto
sobre unos valores estándar según el tipo de instalación (instalaciones tipo de referencias
publicadas en el BOE). Los proyectos que oferten mayores descuentos con respecto a estos
valores de referencia, y que por tanto, causen un menor sobrecoste en el sistema, resultan
vencedores de las subastas.

Contrariamente a como estaba pensado en su diseño, actualmente este mecanismo está


ofreciendo unos ingresos por debajo de los que proporciona el mercado. Además las subastas,
en España no constituyen una referencia del precio de la energía, sino que son una referencia
del “floor” de precio asegurado que garantiza la financiación de los proyectos (Figura 3-12).

134
Ver Real Decreto 947/2016
135
Ver Orden ETU/315/2017
136
Ver Real Decreto 650/2017

104
E lectricidad
3. G eneración

1 Los megavatios a subastar son para todas las tecnologías renovables sin distinguir
si son parques eólicos, plantas fotovoltaicas, biomasa o termosolar. Todas las
Cantidad a subastar
F igura 3-137. empresas que hayan decidido participar en la subasta deben depositar un aval de
60.00€/MW que pretendan ofertar.
Modelo de
s ubas ta acorde 2
Ayuda económica a la Una de los aspectos más llamativos es que la ayuda económica sea a la potencia
a la orden potencia instalada [MW]
instalada y no a la energía generada, es decir, que las empresas ahora cobran por
cada megavatio que consigan en la subasta y finalmente construyan.
E T U/315/2017.
3
Fuente: En esta subasta, el precio que se puja representa el porcentaje de la ayuda a la que
elaboració Subasta Marginalista estás dispuesto a renunciar por instalar tu generación renovable, ordenándose de
precio más bajo a más alto. En caso de empate, se hace una discriminación por
n propia tecnologías, beneficiándose las que más horas equivalentes tienen (eólica).

4
El Gobierno, para fomentar y garantizar a los inversores la recuperación de su
Precio de la energía inversión, se establece un precio mínimo a cobrar por la energía que esa planta
garantizado venda en el mercado mayorista, garantizando por tanto un precio suelo en caso
que el precio del “pool” sea bajo.

5 Para garantizar el avance del proyecto, el ministerio a puesto tres hitos de control:
Hitos después de la • Enero de 2018: Especificar el lugar en el que se va a construir el proyecto.
• Junio 2018: Autorización administrativa de construcción.
realización de la subasta • Finalmente, inscribir la instalación en el RAIPEE (Registro Administrativo de
Instalaciones de Producción de Energía Eléctrica).

El resultado de la segunda subasta realizada el 17 de mayo de 2017 se saldó con la


adjudicación de 3.000 MW de instalaciones renovables, el máximo previsto y sin ningún coste
para el consumidor pues los adjudicatarios ofertaron el máximo descuento posible. De estos
3.000 MW, 2.979 MW se adjudicaron a instalaciones eólicas, dejando tan solo 1 MW para la
fotovoltaica y 20 MW para el resto de tecnologías, principalmente biomasa.

En la tercera subasta realizada el 26 de julio de 2017 los papeles se tornaron en comparación


a la subasta anterior. Esta subasta estaba prevista de 3.000 MW pero la demanda obligó a
incrementar a 5.000 MW, de los cuales 3.900 MW se adjudicaron a potencia fotovoltaica y los
restantes 1.100 MW a eólica.

Adicionalmente a los MW ya subastados en 2017, se estima que si España quiere cumplir con
los objetivos a 2030 de: (i) reducir las emisiones procedentes de GEI en un 40%; (ii) mejorar
de la eficiencia energética en al menos un 27%; (iii) que las energías renovables constituyan
al menos un 27% de la electricidad final, necesita la instalación de aproximadamente 22.000
MW, lo que significa que el Gobierno tendrá que planificar nuevas subastas en los próximos
años.

105
E lectricidad
3. G eneración

3.6 Autocons umo y balance neto


Concepto de autoconsumo. Frente al modelo tradicional, en donde el flujo de la energía es
unidireccional y las plantas de generación normalmente están alejadas de los centros de
consumo, se presenta el de la generación distribuida, en el que las centrales de generación
son de reducido tamaño, conectadas a las redes de distribución y situadas más cerca de los
puntos de consumo. Un caso particular del concepto de generación distribuida es el de
autoproducción, donde son los propios consumidores (hogar, empresa o ente público) los que
instalarían pequeños generadores (microgeneradores) en sus instalaciones que producirían
parte o toda la electricidad que necesitan para su propio consumo (Figura 3-28).

Figura 3-14.
Sistema de
generación
tradicional vs
autoconsumo.

Fuente: “La
paridad de red
eléctrica y el
balance neto”.
Fundación
Ciudadanía y
Valores 137.

E ntre las ventajas que se le atribuyen a la generación dis tribuida destacan:

• Acercamiento del s uminis tro eléctrico a puntos alejados o de difícil acces o para la red
de dis tribución.
• R educción de pérdidas en las redes de trans porte o distribución, al estar conectadas
es tas ins talaciones en puntos cercanos al cons umo, lo cual genera una mayor
eficiencia 138.

P or el contrario, la generación dis tribuida pres enta dos des ventajas principales :

• E l control no es tá centralizado en el operador del s is tema y depende de las


circuns tancias de s us titulares , lo cual podría s er s olucionado mediante el us o de redes
inteligentes.

• Los cos tes s on, por lo general, s uperiores a la electricidad producida en grandes
ins talaciones de generación, ya que no permite aprovechars e de economías de escala.

E l concepto de autocons umo por balance neto cons ta de dos términos con un s ignificado
propio:

137
V er “La paridad de red eléctrica y el balance neto”.
138
Una penetración mas iva de la generación dis tribuida s upone flujos de energía entre redes de diferente nivel de tens ión, con lo que
las pérdidas de red podrían vers e incrementadas .

106
E lectricidad
3. G eneración

• Autocons umo: producción individual de electricidad para el propio cons umo.

• B alance neto: cons umo diferido de un excedente de energía eléctrica que haya s ido
producido durante una s ituación de autocons umo donde hubies e mayor generación
eléctrica que cons umo y que, pos teriormente, en una s ituación contraria, se obtenga un
equivalente a es e excedente producido, por medio de la red del s is tema eléctrico

E n nuestro s is tema eléctrico, el balance neto s e plantea como un complemento regulatorio que
facilite e incentive el desarrollo del autocons umo, ya que, normalmente, la generación que s e
produce en las instalaciones de los cons umidores no está en relación a s u cons umo. E s decir,
hay momentos en los que el propietario de la ins talación es tá consumiendo más energía de la
que realmente está produciendo y vicevers a. E l balance neto permitiría compens ar los
exces os de energía producida y no cons umida vertida a la red con cons umos que s e realicen
en otros momentos . De es ta forma, el cons umidor que produce energía para s u propio
cons umo puede compatibilizar s u curva de producción con s u curva de demanda. E s te s istema
puede s er es pecialmente interes ante para las ins talaciones no ges tionables renovables , como
la eólica y la fotovoltaica, ya que s u curva de producción no s e s olapa con la de cons umo
(F igura 3-29).

Generación
Consumo

Consumo
F igura 3-15. G eneración en diferido
autocons umo vs cons umo
res idencial.

Fuente: Elaboración propia.

Consumo
instantáneo

0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24
horas

A este respecto, hay que tener en cuenta dos aspectos fundamentales que, a su vez, están
relacionados y casados porque la electricidad no es almacenable:

• La energía vertida por un autoproductor implica que otro generador debe generar
menos energía para suministrar al resto de la demanda. Y cuando el autoproductor
compense esos vertidos en otros momentos en los que consuma, implica que otro
generador debe generar esa energía que se consume, pero no se autogenera.

• La energía eléctrica tiene precios diferentes según cuando se consuma. Por lo tanto,
compensar vertidos en un momento con consumos de otro momento implica estar
inyectando energía al sistema con un valor y consumirlo con otro. Esto puede ser
favorable o contrario al consumidor (y viceversa para el resto del sistema) según
cuándo se produzca y cuándo se consuma. Desde una perspectiva económica, un
consumidor se planteará producir su propia energía cuando le sea más rentable que

107
E lectricidad
3. G eneración

s uminis trars e del s istema, es decir, cuando s u cos te s ea inferior a los cos tes que deje
de pagar en s u factura eléctrica. E n el cas o es pañol, el cons umidor paga a través de s u
factura dos conceptos principales de cos te: el cos te de la energía (cos te variable) y las
tarifas de acces o o peajes (un término fijo y un término variable).

E n la F igura 3-30 s e reflejan los cos tes a los que hace frente el cons umidor por s u s uminis tro
en el cas o de s uminis trars e del s is tema eléctrico o en el cas o de autocons umo, cons iderando
que el cons umidor es tá conectado a las redes del s is tema eléctrico:

F igura 3-30.
C omparativa
de cos tes que
Costes de energía
as ume el
cons umidor C. Vble
Coste para el
convencional consumidor
Costes de energía C. Vble
frente a uno Tarifa de acceso (CV)
que
autocons ume
C. Fijo C. Fijo
con una Tarifa de acceso (CF) Tarifa de acceso (CF)
ins talación
FV. Suministro del comercializador Autoconsumo
(energía procedente del conjunto del sistema) (ej. energía procedente de la pequeña instalación FV)

Fuente:
Elaboración
propia.

Cuando el consumidor se suministra del sistema pagaría el término fijo y variable de las tarifas
de acceso más el coste de la energía. En el caso de autoconsumo, el consumidor soportaría la
parte fija de las tarifas de acceso más el coste de generación con una instalación. Es decir, en
el ejemplo expuesto, al consumidor le compensaría instalar una placa fotovoltaica para dejar
de pagar el coste de la energía del sistema y la parte variable de la tarifa de acceso cuando su
placa fotovoltaica produzca electricidad.

Pero, ¿es eficiente esta decisión desde el punto de vista del sistema eléctrico? Para
responder a esta pregunta se van a analizar cuáles son los costes que ahorra el sistema
cuando el consumidor autoconsume para relacionarlos, posteriormente, con la estructura de
tarifas española.

Como se puede observar gráficamente en la Figura 3-31, el coste del suministro se compone
del coste de la energía más las tarifas de acceso.

108
E lectricidad
3. G eneración

F igura 3-31. Costespolíticaenergética:


Costesdeenergía
Des glos e Costede CostesredesTransporte Régimen Especial,
suministro (generacióny
del cos te de comercialización)
Distribución extrapeninsulares,
anualidadesdéficit…
s uminis tro.

Fuente:
Tarifasdeacceso
Elaboración
propia.

Los costes de la energía son eminentemente variables: si se consume energía, debe


adquirirse en el mercado y si no se consume energía no hay que hacer frente a ningún coste.

Las tarifas de acceso cubren los costes regulados (redes de transporte y distribución y otros
relacionadas con decisiones de distintas políticas), y la práctica totalidad de estos costes son
fijos, es decir, no varían con las decisiones de consumo de los consumidores.

En definitiva, cuando un consumidor consume su energía autoproducida el sistema se ahorra


el coste de la energía, pero los costes regulados han de sufragarse igualmente.

Sin embargo, la estructura de las tarifas de acceso actualmente existente en España tiene una
parte fija independiente del consumo (término de potencia) que depende de la potencia
contratada del consumidor, y una parte variable que sí está relacionada con el consumo
(término de energía), pero que también engloba gran parte de los costes fijos.

Así, cuando un consumidor consume la generación autoproducida, se ahorra la energía más el


término variable de los peajes y, sin embargo, el sistema eléctrico solo se ahorra la energía.
Los costes fijos que el consumidor deja de pagar al autoconsumir no desaparecen y deberán
ser recuperados por el resto de consumidores, ya que, por definición, los peajes deben ser
suficientes para recuperar la totalidad de costes regulados.

¿Qué es la paridad de red? La “paridad de red” o “grid parity” es un concepto entendido


como la coincidencia entre el coste de producir un kWh directamente en un punto de consumo
y el coste de otro kWh suministrado por la red en ese mismo punto de consumo. También se
puede decir que el concepto de paridad de red se define como el momento temporal en el que
una fuente de generación de energía eléctrica puede producir electricidad a un precio inferior o
igual al precio del mercado mayorista, es en esos momentos cuando se produce la paridad de
red. Alcanzar la paridad de red implica un punto muy importante en el desarrollo de las
tecnologías de generación distribuidas ya que les convierte en competidoras directas de las
tecnologías de generación convencionales.

Para un usuario, los beneficios aportados por esta actividad se deben al ahorro que se
produce en la factura al consumir la energía eléctrica producida en el mismo punto de
consumo, con los consiguientes ahorros en la factura, mientras que para el sistema, este
ahorro se produce debido al ahorro de costes derivados de cada cliente. Solo cuando estos
dos conceptos se igualan, la paridad de red es eficiente (Figura 3-32).

109
E lectricidad
3. G eneración

€ /MWh
El momento de
paridad de red
Coste de la
electricidad

F igura 3-32. C oncepto de


paridad de red.
Coste de
Fuente: Elaboración propia. autoproducción

2013 Años

Se pueden diferenciar tres tipos de paridad de red diferentes:

• P untos de cons umo ais lados : el cos te de la autoproducción es igual o inferior al coste
de des arrollar las redes eléctricas has ta el punto de cons umo más el cos te del
s uminis tro pos terior. P or ejemplo, es mucho más económico poner una placa
fotovoltaica y una batería en una s eñal de circulación luminos a de una autovía que
llevar la red de distribución has ta es e punto.

• C os te total del s uminis tro: el cos te de autoproducción es igual o inferior al cos te total
del s uminis tro que incluiría los cos tes de generación, trans porte y dis tribución y otros
cos tes que deban s er s ufragados.

• C os te de generación: el cos te de autoproducción es igual o inferior al cos te de la


generación del s istema eléctrico centralizado.

E n los dos últimos casos , el cons umidor, además de producir energía para s u cons umo,
permanece conectado al s is tema por dos razones : primero, para garantizars e el s uminis tro
eléctrico cuando s u instalación de generación no es té dis ponible o no s ea s uficiente para
cubrir s us neces idades y, s egundo, para verter al s is tema la energía producida que no s e
cons uma.

P ero en la práctica, s i s e tiene en cuenta una pers pectiva económica, un cons umidor de
electricidad s e planteará ins talar una central de generación de electricidad y producir s u propia
energía cuando s u cos te s ea inferior a los cos tes de s u factura eléctrica actual.

Situación actual del autoconsumo en España. El 9 de octubre de 2015, el Gobierno aprobó


la publicación del Real Decreto 900/2015 139 por el que s e regulan las condiciones
adminis trativas , técnicas y económicas de las modalidades de s uminis tro de energía eléctrica
con autocons umo y de producción con autocons umo.

139
V er R eal Decreto 900/2015

110
E lectricidad
3. G eneración

Acorde a la Ley 24/2013 del S ector E léctrico, el autocons umo tiene por finalidad garantizar un
des arrollo ordenado de la actividad, compatible con la neces idad de garantizar la
s os tenibilidad técnica y económica del s is tema eléctrico en s u conjunto.

Además de los as pectos adminis trativos (procedimiento de acces o y conexión, registro,


ins pección y régimen s ancionador) y técnicos (requis itos de medida y ges tión de energía), los
as pectos económicos regulados por es te R eal Decreto más relevantes son los s iguientes:

• Dos categorías de autocons umo des de una pers pectiva del s is tema: (i) un s ujeto
cons umidor (la ins talación de producción as ociada, des tinada al cons umo propio, no
es tará en el regis tro de ins talaciones de producción), (ii) dos s ujetos, el cons umidor y
el productor, y la ins talación s i deberá es tar convenientemente ins crita en el registro.

• Los autoconsumidores de tipo 1 tendrán no podrán contratar una potencia s uperior a


100 kW y no percibirán retribución económica por la energía que generen y no
cons uman.

• Los autocons umidores de tipo 2 no tienen un límite de potencia, y percibirán una


contrapres tación económica por la energía que viertan horariamente a la red, pero s i
deberán pagar el peaje de generación corres pondiente a dicha energía como marca la
normativa.

• Los autocons umidores que permanezcan conectados a la red s eguirán pagando los
peajes de acces o al s istema vinculados a la energía que s igan demandando de la
mis ma.

• S e define un cargo fijo y un cargo trans itorio que s e aplicará s obre la energía
autocons umida (este cargo incluye los cargos as ociados a los cos tes del s is tema
des contando las pérdidas corres pondientes, los pagos por capacidad y otros s ervicios
del s is tema).

• Los autocons umidores de tipo 1 conectados con potencia contratada inferior o igual a
10 kW es tarán exentos del pago del cargo trans itorio por energía autocons umida.

• E n los s istemas eléctricos de territorios no penins ulares , hay una reducción s obre el
mis mo cargo para el autocons umo. E n el caso de C anarias, C euta y Melilla dicha
reducción s e convierte en exención.

Tecnologías usadas en el autoconsumo. Diferentes tecnologías permiten generar


electricidad a pequeña escala en los centros de consumo. A continuación se exponen las
principales según su energía primaria, pero nos vamos a detener más en la explicación de las
relacionadas con las fuentes renovables (ver Tecnologías y costes de generación eléctrica):

• Generación con hidrocarburos: motor de combustión interna o microturbinas de gas


(microcogeneración).

• Renovables: placas fotovoltaicas y pequeñas turbinas eólicas, fundamentalmente.

• Pilas de combustible: utilizan hidrógeno como fuente de energía, aunque todavía es


una tecnología en fase experimental.

111
E lectricidad
3. G eneración

Experiencias internacionales. El modelo que se está planteando en estos momentos en


nuestro país, en donde la generación distribuida cada vez podría jugar un papel más relevante
en el suministro eléctrico y en donde los consumidores pueden optar por el autoconsumo en
balance neto, no es un modelo nuevo que no esté ya siendo probado en otro países sino que
existen actualmente experiencias internacionales que pueden servir de base para el desarrollo
de un marco normativo adecuado y estable en relación a este concepto.

EE.UU. (California). California ha sido un estado pionero en la implantación de sistemas de


autoconsumo y balance neto. Desde sus comienzos en 1996 en donde se implantó el balance
neto solo para fotovoltaica y eólica y con un límite de autoconsumo de un máximo de un 0,5%
de la punta del sistema, se han ido abriendo progresivamente a diferentes tecnologías y a
diferentes cupos de consumo.

En California están empleando el denominado “net metering” que se define como un acuerdo
existente entre la compañía y el consumidor-generador mediante el que se otorgan créditos a
éste último por el exceso de la electricidad generada (el consumidor paga únicamente la
cantidad neta, además de parte de los gastos de distribución y otros servicios); el período de
regularización es de 12 meses (mensualmente se netea por kWh, sin identificar valor
económico); pueden acogerse a esta modalidad instalaciones renovables de hasta 1 MW y el
límite de autoconsumo se ha ampliado hasta un 5,0% de la demanda punta agregada de cada
empresa eléctrica. El sistema permite conocer el momento del día o semana en el que es
utilizada la energía. Actualmente en California existen tres tipos de contratos de “net metering”:

• Net energy metering: el contrato incluye una cláus ula por la que la compañía tiene que
compens ar al cons umidor-generador una cierta cantidad económica s i produce más
energía de la que realmente ha cons umido, aunque s e puede transferir el crédito a los
12 s iguientes mes es.

• Virtual net metering: s e permite que la electricidad producida por una única ins talación
s olar genere créditos para varios inquilinos en viviendas multifamiliares sin neces idad
de que el s is tema de medición esté fís icamente conectado a cada uno de los
medidores de cada inquilino. S e permite que un conjunto de us uarios cons uman
energía de una misma ins talación de generación eléctrica bajo la modalidad de banco
de energía colectivo. S e trata de un proyecto piloto.

• Renewable energy self-generation: s e permite la transferencia de los créditos obtenidos


por el autocons umo de una ins talación propia a otra del mis mo titular.

Dado que desde California se busca un objetivo de instalación de 12.000 MW en 2020, y que
actualmente tiene una potencia instalada de 8.618 MW, es uno de los lugares en los que más
se apuesta por el autoconsumo. Para ello, el Operador del Sistema desarrolló una normativa
que reduce a la mitad el tiempo necesario para la conexión a la red, favoreciendo así el
desarrollo del autoconsumo.

Algunos de los Estados con más desarrollo de la generación solar como Maine, Arizona,
Hawái o Arizona han anunciado la supresión de la aplicación de políticas de balance neto.,
quedando por tanto obsoletas en estos Estados.
EE.UU. (Maine). Maine, ha presentado un proyecto de Ley en el que propone sustituir el
balance neto por contratos de compra de excedentes con el objetivo de desarrollar la energía
solar fotovoltaica de forma más eficiente. Entrará en vigor en el año 2018, salvo para aquellos
que ya tienen instalaciones existentes se les mantiene el balance neto por un total 15 años
desde la instalación.

112
E lectricidad
3. G eneración

Además , ha introducido contadores diferentes para poder dis tinguir entre cons umo y
generación, de tal forma que el de cons umo s e pagará en la mis ma tarifa que el resto de los
cons umidores y la s erá remunerada a precio mayoris ta más certificados medioambientales .

F inalmente, el tope máximo a la capacidad punta as ciende a un valor del 3% y no s e permite


el autocons umo comunitario.

EE.UU. (Arizona). Arizona, que cuenta con 2,3 GW de potencia instalada (7% de la potencia
instalada total), ha aprobado 2016 la eliminación del balance neto para evitar tanto
ineficiencias como trasvases de costes entre los distintos agentes.

La remuneración de las distribuidoras no está regulada, sino que tienen un precio diferente
para cada una. Además, las distribuidoras tienen dos métodos para determinar los precios de
exportación:

• V alores de referencia de proyectos s olares de gran es cala


• C os tes evitados .
• P ara las ins talaciones exis tentes s e aplicará el método de retribución
“grandfathering”, es decir, se les aplica la normativa anterior a la aprobada,
durante un máximo de 20 años desde su instalación.

EE.UU. (Hawái). Hawái, en el año 2015 eliminó el balance neto dejando a los
autoconsumidores conectados a la red dos opciones entre las cuales podían elegir:
• “Propia suministro del consumidor” – en la cual no se compensan los excedentes
que se penalizan por encima de cierto nivel y no se aplica ningún tope máximo a
esta opción;
• “Suministro de red del consumidor” – En la cual se remunera el excedente de
energía a un coste medio degeneración (150 – 280 $/MWh), con una
interconexión sujeta a la capacidad disponible y una cuota de capacidad que
aplica a instalaciones bajo esta opción (entre 5 y 25 MW dependiendo de la isla).

Australia. En Australia, el balance neto no existe y es cada estado el que decide como regular
el autoconsumo. Además, en el 2017 el Gobierno Australiano redujo la retribución a la
fotovoltaica debido al desarrollo masivo en ciertos estados como Victoria, South Australia y
New South Wales.

Alemania. Desde julio 2012, se eliminó la tarifa que se recibía por la energía autoconsumida,
manteniéndose solo la tarifa por la energía vertida a la red.

Hasta el año 2014 en Alemania se fomentó el autoconsumo a través de instalaciones


fotovoltaicas, año en el que desaparece parcialmente la opción de las FIT (“feed-In-Tariff”) y
aparecen cargos al autoconsumo: (i) Un 40% del recargo renovables para potencias
superiores a 10 kW; (ii) límite de capacidad instalada de 2,5 GW/año.

Además, en el año 2016 se empezaron a aplicar tasas de autoconsumo para instalaciones


superiores a 10 kW.

Actualmente, la forma de fomentar el autoconsumo es penalizando sin tarifa el 10% de la


energía vertida a la red para las instalaciones FV > 10 kW (las instalaciones < 10 kW sin
embargo recibirán la tarifa por el 100% de la energía eléctrica vertida a la red).

113
E lectricidad
3. G eneración

Dinamarca. La regulación sobre el autoconsumo y el balance neto en Dinamarca empezó en


2001, sin embargo, no fue hasta 2010 cuando se reguló el balance neto doméstico y se
designó al Energinet.dk como autoridad responsable del buen funcionamiento del sistema. La
última novedad en la regulación danesa ha supuesto la inclusión del resto de las tecnologías
renovables en el autoconsumo, exceptuando a la geotérmica.

El modelo de desarrollo del autoconsumo en Dinamarca ha tenido unas consecuencias muy


negativas para la recaudación de tasas e impuestos del país. El precio de la electricidad para
un consumidor doméstico en Dinamarca fue el mayor de Europa en 2011, siendo la tasas e
impuestos un 56% de la factura final. Sin embargo, debido a la gran acogida del autoconsumo
en el país, Dinamarca ha dejado de ingresar 270 M€ anualmente en concepto de tasas e
impuestos. Además de la disminución de la recaudación de impuestos vía factura eléctrica,
existen también exenciones fiscales por la instalación de paneles fotovoltaicos, lo que
minimiza el neteo de este efecto en el momento de la inversión.

En este caso y dado el descontrol en la instalación de paneles fotovoltaicos, el cual a finales


del año 2012 ya superaba el objetivo marcado por el gobierno para 2020, se alcanzó un
acuerdo político por el que se acordó un nuevo esquema de balance neto para las nuevas
instalaciones donde se veían reducidos los incentivos que fomentaban la instalación de
dispositivos para generación de energía eléctrica para autoconsumo. Además, la rápida
adopción de la energía solar fotovoltaica en el país no iba más que provocar sobrecostes para
el sistema y es por ello que el Gobierno Danés ha decidido imponer un impuesto sobre la
energía producida con paneles solares para autoconsumo y que estén bajo el esquema de
balance neto.

Esta experiencia internacional en regulación del autoconsumo por balance neto sugiere la
necesidad de establecer una regulación que favorezca el autoconsumo pero siempre que se
cuide la recaudación fiscal del sistema y no suponga una minoración en los ingresos del
sistema.

México. La regulación mexicana contempla desde marzo de 2010 la posibilidad de


autogenerar energía eléctrica con la posibilidad de hacer balance neto a través tanto de
energías renovables como cogeneración.

Si se autogenera más de lo que se autoconsume, se generará un crédito a favor del


autogenerador que se conservará en un banco de energía, clasificándose en el periodo horario
y mes en el que el crédito fue generado, y que deberá ser compensado en los 12 meses
siguientes (si no el crédito se cancelará). Si por el contrario, se autogenera menos de lo que se
autoconsume, se realizarán las compensaciones que sean posibles siempre que exista
energía en el banco (en caso contrario, tendrá que comprar la energía como si de un
consumidor convencional se tratara).

Italia. En agosto de 2012 entró en vigor la prima para el autoconsumo a través del “V Conto
Energia”. Esta regulación permite cobrar una tarifa (Feed-in tariff) por el exceso de energía
eléctrica vertida a la red, y además una prima por la energía autoconsumida para instalaciones
< 5 MW. Este V Conto se acabó el 6 de julio de 2013, debido a que se ha alcanzado el cupo
máximo presupuestario (6.700 M€) marcado en la legislación.

A partir de 6 de julio de 2013, los proyectos < 200 kW (tanto renovables como cogeneración)
verterán la energía eléctrica sobrante a la red a cambio del precio del mercado mayorista
(unos 80 €/MWh), valor que puede ser cobrado o acumularse para el próximo año. A pesar de

114
E lectricidad
3. G eneración

es te último cambio normativo, s igue s iendo más ventajos o autocons umir que comprar la
energía al comercializador.

115
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

4. Actividades reguladas en el s ector eléctrico


4.1 E l proces o de liberalización y s eparación de actividades reguladas
Liberalización y separación de actividades. Desde el comienzo de los procesos de
liberalización (ver El proceso de liberalización de los sectores energéticos) se planteó que
algunas de las actividades de las compañías tradicionales de suministro eléctrico y de gas
debían continuar siendo reguladas por sus características intrínsecas. Efectivamente, el
desarrollo y la explotación de redes físicas de cables y gasoductos está sujeta a significativas
economías de escala, lo que hace que las mismas tengan carácter de monopolio natural 140.
P or ello, las empres as de redes no pueden ni deben competir entre s í duplicando de forma
ineficiente las ins talaciones en una mis ma zona, dado que ello s upondría para el cons umidor
un fuerte e injus tificado aumento de los costes regulados .

E l T rans porte, la Dis tribución y la Operación del S is tema s on las actividades del s ector
eléctrico que s e mantienen reguladas (F igura 4-1).

Generación Transporte Distribución Comercialización

F igura 4-1. S eparación de actividades reguladas y liberalizadas .

Fuente: Elaboración propia.

Por estas razones, para posibilitar la liberalización (competencia en generación y


comercialización), se ha de garantizar el libre acceso a las redes. Esto significa que, mediante
el pago de las tarifas de acceso (transparentes y no discriminatorias) – (ver Los peajes de
acceso y cargos: estructura, costes y liquidación de los ingresos), cualquier generador,
consumidor o comercializador puede utilizar las redes para transportar la energía que genere,
consuma o comercialice.

140
Ver FAQ.

116
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

Las dis tintas Directivas europeas han s ido tras pues tas a la legis lación nacional modificando el
marco de actuación en el que s e des arrolla la actividad. La tras pos ición de las últimas
Directivas relativas al mercado interior de la electricidad y del gas natural, realizadas en
E s paña por las Leyes 17/2007 y 12/2007, modificaron la antigua ley del sector eléctrico (la Ley
54/1997) y la Ley de Hidrocarburos res pectivamente (ver Normativa bás ica comunitaria y
marco normativo es pañol). E n estas leyes , s e es tablece la s eparación jurídica, contable y
funcional, para el cas o de grupos empres ariales verticalmente integrados , de las actividades
reguladas (trans porte y dis tribución) de aquéllas que s e llevan a cabo en competencia
(generación y comercialización). Adicionalmente, la nueva ley del s ector eléctrico incluye la
s eparación de marca e imagen de marca res pecto a la identidad propia de las filiales de s u
mis mo grupo que realicen actividades de comercialización.

C on las s eparaciones contable y jurídica s e pretende evitar la exis tencia de s ubvenciones


cruzadas que puedan dis tors ionar la as ignación de costes entre ambos tipos de actividades , lo
que podría afectar tanto a la competencia en las liberalizadas como a la retribución en las
reguladas .

P or s u parte, la s eparación funcional bus ca una gestión independiente de los activos de red,
frente al res to del grupo verticalmente integrado 141. S us principales objetivos s on:

• Que las actividades reguladas tengan independencia plena en s u gestión frente al res to
del grupo, incluyendo recurs os s uficientes (técnicos , económicos, humanos , etc.).

• Que los ges tores de las actividades reguladas no participen en es tructuras del grupo
que tengan relación con la gestión del día a día de las actividades liberalizadas .

• G arantizar la confidencialidad de la información comercialmente s ens ible de las


actividades reguladas .

Adicionalmente y hasta el 30 de junio de 2014, con el fin de garantizar un adecuado


funcionamiento en la actividad de comercialización minoris ta, la Oficina de C ambios de
S uminis trador, OC S UM, tuvo como cometido as egurar y favorecer el cambio de s uminis trador
libre para los cons umidores , bajo criterios de objetividad tras parencia y no dis criminación.
P os teriormente, es ta función fue transferida a la C NMC . 142

Las últimas directivas del mercado interior de gas natural y electricidad (ver Normativa bás ica
comunitaria y marco normativo es pañol) introducen cambios s ignificativos en la s eparación de
actividades de la actividad de trans porte, permitiendo la exis tencia de tres modelos diferentes :

• TSO (Transmission System Operator): se realizan las actividades de operación del


sistema y transporte de la electricidad (o gas) por un agente único. En este modelo, el
operador y gestor de la red es también propietario de las instalaciones de transporte.
Este modelo es el que existe actualmente en España.

• ISO (Independent System Operator): modelo caracterizado por una entidad


independiente que asume la operación y coordinación técnica del sistema (eléctrico o
de gas). En este modelo, el operador y gestor de la red no es propietario de
instalaciones de transporte, que pueden pertenecer a empresas del sector

141
La separación correspondiente también ha sido desarrollada para el operador del sistema, Red eléctrica de España (REE), y el
operador del mercado, OMIE.
142 V er P res entación de la Ley 24/2013

117
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

verticalmente integradas o a otros agentes (fondos de invers ión, operadores


es pecializados , etc.).

• IT O ( Independent Transmission Operator): modelo caracterizado por la realización de


las actividades de transporte y de la operación del sistema dentro de una empresa
verticalmente integrada. En este caso se debe asegurar una adecuada separación
funcional.

118
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

4.2 T ransporte y operación del sis tema


La actividad de trans porte tiene por objeto llevar la electricidad des de el punto donde s e
genera has ta los puntos de cons umo de grandes cons umidores indus triales conectados
directamente a la red de trans porte y hasta los puntos de entronque con las redes de
dis tribución (s ubes taciones ) a través de las cuales s e lleva la energía al res to de
cons umidores, s iempre garantizando la calidad y aumentando la s eguridad de s uminis tro.

P or definición en E s paña, la red de trans porte de electricidad está constituida por las líneas ,
transformadores y otros elementos de tens ión igual o s uperior a 220 kV, aquellas otras
ins talaciones que, s iendo de tens ión inferior a 220 kV, cumplan funciones de trans porte (en las
is las el trans porte s e realiza a tens iones inferiores ) y las ins talaciones de interconexiones
internacionales y con los s is temas ins ulares y extrapenins ulares .

La red de trans porte es tá compues ta por más de 43.600 km de líneas , más de 5.400
pos iciones de s ubes taciones y más de 85.000 MV A de capacidad de transformación. E s tos
activos configuran en la actualidad una red mallada, fiable y s egura, que ofrece unos altos
índices de calidad de s ervicio y que cumple una serie de funciones críticas :

• G arantizar el equilibrio y la s eguridad del s is tema eléctrico nacional.

• T ransferencia neta de energía entre dis tintas s ubes taciones de la red, pudiendo
invertirs e el s entido del flujo de energía en función de las circunstancias .

• Minimización de pérdidas .

• Mantenimiento en todos los puntos de la red de los parámetros bás icos (frecuencia,
tens ión) dentro de los límites aceptables.

• Utilización de los medios de producción óptimos en función de la topología de la


demanda en cada momento.

La Ley 17/2007 es tableció el modelo de trans portis ta único, s iendo R ed E léctrica de E s paña el
titular de toda la red de trans porte. C omo gestor de la red, debe pres entar s us planes de
invers ión para cumplir con la planificación que s ea aprobada.

La planificación de la red de trans porte atiende a criterios técnicos y económicos , de forma que
las nuevas invers iones puedan justificars e por los beneficios derivados de una eficiente
gestión del s is tema (aumento de la fiabilidad, reducción de las pérdidas de trans porte,
eliminación de res tricciones que pudieran generar un coste global más elevado de la energía
s uminis trada e incorporación eficiente al s is tema de nuevos generadores ) y los beneficios
derivados de una operación más s egura que minimice la energía no s ervida.

Los nuevos des arrollos de red s e aprueban con carácter plurianual en el documento de
“P lanificación de los s ectores de electricidad y gas – Des arrollo de las redes de trans porte” del
Minis terio de E nergía, T urismo y Agenda Digital143. La cons trucción de las ins talaciones
incluidas en es ta P lanificación es de obligado cumplimiento; y la última planificación aprobada
comprende el horizonte 2015-2020.

143
V er planificación energética.

119
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

E n la actualidad, y debido a la ralentización económica y del crecimiento del cons umo


eléctrico, el artículo 10 del R eal Decreto-ley 13/2012 144, publicado en marzo de 2012, limita la
cons trucción de nuevas infraes tructuras eléctricas a aquellas infraestructuras impres cindibles
para asegurar el funcionamiento del s istema en condiciones de s eguridad. E n bas e a ello, s e
ha modificado el programa anual de ins talaciones de las redes de transporte, aprobándos e en
octubre de 2015 el nuevo plan de des arrollo de la red de trans porte para el horizonte 2015-
2020 145, con el objetivo de adecuarla a las nuevas previs iones de demanda y cons umo de
electricidad (F igura 4-2) (ver Normativa bás ica comunitaria y marco normativo es pañol).

F igura 4-2.
Mapa de la red
de trans porte
electricidad en
E s paña.

Fuente: REE.

La retribución de la actividad de transporte. Se establece administrativamente atendiendo a


los costes de inversión, de operación y mantenimiento y de gestión de las redes. La
metodología de retribución busca cubrir todos los costes de prestación del servicio (incluyendo
una retribución para el capital invertido) y, a su vez, incentivar una gestión eficiente.
Anualmente se calcula como la suma de:

• Un término de remuneración ligado al valor actualizado de las invers iones .

• Un término que permite recuperar los costes de operación y mantenimiento.

• Unos incentivos a la dis ponibilidad y eficiencia de las ins talaciones .

E l valor de los inmovilizados retribuidos s e calcula s obre la bas e de unos costes unitarios de
referencia aprobados por el regulador. La retribución anual de los capitales invertidos en este
inmovilizado s e calcula como la s uma de la amortización anual (valor del inmovilizado dividido
por los años de vida útil) más una retribución s obre el capital invertido y no amortizado 146. E l

144
V er R eal Decreto-ley 13/2012.
145
V er P lanificación y des arrollo de la red.
146
La retribución del capital s e calcula como el producto de una tas a de rentabilidad, obtenida agregando a la rentabilidad de las
Obligaciones del E stado a 10 años una prima de rentabilidad adicional (estimada por el regulador en función de los ries gos de la
actividad y del cos te de la financiación) y el valor actualizado del activo (s egún el valor inicial del inmovilizado reconocido por el
regulador).

120
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

R eal Decreto 325/2008 detalla el s istema retributivo que aplica a las ins talaciones pues tas en
s ervicio con pos terioridad al 1 de enero de 2008 147.

Adicionalmente y s egún es tablece el R eal Decreto-ley 13/2012 aprobado en marzo de 2012, la


retribución por invers ión de las instalaciones de trans porte debe estar vinculada a los activos
en s ervicio no amortizados . E s te R eal Decreto-ley también ha modificado la fecha de cobro de
la retribución generada por una instalación de trans porte, que pas a a cobrars e a los dos años
des de s u pues ta en s ervicio a partir de enero de 2012.

T ras el R eal Decreto-ley 13/2012, s e aprobó el R eal Decreto-ley 20/2012 148, el cual es tablece
una reducción de los ingres os de la actividad de trans porte en un 3,15% adicional con
res pecto a lo establecido en el R eal Decreto-ley 13/2012, debido a cambios en los criterios de
retribución a la invers ión, que s e hará para aquellos activos en s ervicio no amortizados
tomando como bas e para s u retribución s u valor neto. E n la F igura 4-3 s e obs erva el des cens o
de la retribución en el año 2012 con res pecto a los años anteriores .

F igura 4-3.
E volución de la
retribución de 1.674
1.728 1.710 1.735
+7% 1.604
la actividad de 1.397
1.534
1.477
1.344
trans porte [M€]. 1.246
1.090
1.013
937
834
Fuente:
696
627
Liquidaciones 550 582

definitivas CNMC
y elaboración
propia.
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017
previsto

El Real Decreto-ley 9/2013 establece la metodología de retribución de la actividad de


transporte en donde se tendrá en cuenta los costes necesarios para realizar la actividad por
una empresa eficiente y bien gestionada, mediante la aplicación de criterios homogéneos para
todo el territorio nacional. Para fijar su rentabilidad se considera que es una actividad de bajo
riesgo.

Se establece la retribución de esta actividad para distintos frentes temporales:

• 1 enero 2013-12 julio 2013: la parte proporcional de la retribución provis ional fijada en
la Orden IE T /221/2013 pas a a s er definitiva.

• 13 julio 2013-31 diciembre 2013: retribución conforme a una formulación y s e fija la


tas a de retribución en 100 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez
años en el mercado s ecundario de los tres mes es anteriores a la entrada en vigor de la
norma.

147
Las anteriores a dicha fecha s on retribuidas s egún R eal Decreto 2819/1998.
148
V er R eal Decreto-ley 20/2012.

121
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

• A partir de 2014: retribución conforme a una formulación y s e fija la tas a de retribución


en 200 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez años en el mercado
s ecundario de los tres mes es anteriores a la entrada en vigor de la norma.

E n diciembre de 2013 s e aprobó el R eal Decreto 1047/2013 149 por el que s e establece la
metodología para el cálculo de la retribución de la actividad de trans porte de energía eléctrica.
E s te R eal Decreto s e bas a y cons olida los principios retributivos establecidos en el R eal
Decreto-ley 9/2013 y en la Ley 24/2013 y es tablece una formulación para retribuir los activos
de trans porte con una única metodología independientemente de la fecha de obtención de la
autorización de explotación de cada activo. Además , prevé una revis ión del conjunto de
parámetros técnicos y económicos por periodos regulatorios de s eis años . P or otra parte,
introduce criterios de eficiencia tanto en la construcción de las infraestructuras, es pecialmente
las de carácter s ingular, como en la operación y mantenimiento de las redes . As imismo, s e
introducen criterios des tinados al control del volumen de invers ión y al control de costes
derivados de la proliferación de normativa de carácter autonómico y local.

E n res umen, el régimen económico del trans porte tomará como bas e los s iguientes principios :

• La retribución por invers ión s erá de los activos en s ervicio no amortizados

• La tas a de retribución financiera referenciada a las Obligaciones del E s tado a diez años
más un diferencial adecuado para una actividad de bajo riesgo (200 pb en el primer
periodo regulatorio, es to es has ta el 31 de diciembre de 2019)

• E l devengo y el cobro de la retribución generada por ins talaciones puestas en s ervicio


el año n s e inicia el año n+2

• La metodología incluirá incentivos que corres pondan por calidad de s uminis tro,
reducción de pérdidas

149
Ver Presentación Energía y Sociedad Real Decreto 1047/2013.

122
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

F igura 4-4.
C ambios en
la
remuneració
n de la
actividad de
trans porte.

Fuente:
Elaboración
propia.

La operación del sistema. Al no ser la electricidad económicamente almacenable, la


demanda y la oferta de electricidad deben ser prácticamente iguales en cada instante con el fin
de mantener las condiciones técnicas (tensión y frecuencia) necesarias para garantizar la
calidad y seguridad del suministro. Los procesos de operación que aplica el operador del
sistema hacen posible que se mantenga un equilibrio entre generación y demanda de forma
continuada.

La operación adecuada, segura y eficiente del sistema eléctrico, recogida en los


Procedimientos de Operación del Sistema 150, junto con los mercados de operación exis tentes
que ges tiona el Operador del S is tema, requieren, por un lado, el anális is de la viabilidad del
programa diario de transacciones comerciales res ultante del mercado diario (ver F ormación de
precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad) y, por otro, corregir las pos ibles
res tricciones res ultantes en la red de transporte y as egurar el s uminis tro ante las pos ibles
indis ponibilidades imprevis tas de grupos de generación u otro tipo de contingencias.

R ed E léctrica de E s paña (R E E ) es el operador del s is tema eléctrico es pañol, tanto en la


peníns ula como en los s is temas ins ulares y extrapenins ulares . R E E debe garantizar la
ejecución de los procedimientos de operación técnicos precis os para que la electricidad fluya
adecuadamente des de los centros de generación has ta los centros de cons umo.

P rocedimientos de operación y mercados de regulación: el Operador del S is tema actúa según


unos P rocedimientos de Operación propues tos por el propio operador y aprobados por el
Minis terio para realizar una ges tión adecuada del s is tema eléctrico. E s tos procedimientos
des criben los criterios y las normas de actuación neces arias para poder realizar previs iones de
demanda, previs iones de cobertura y anális is de la s eguridad del s uminis tro eléctrico, planes
programados de mantenimiento de las centrales de generación, as í como otros procedimientos
que res uelven las conges tiones en la red y los des víos ins tantáneos entre demanda y oferta.
150
V er P rocedimientos de operación.

123
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

Des de mayo de 2006, el operador del s is tema es el res pons able (anteriormente lo era el
operador del mercado) de la liquidación de los mercados de operación, que comprenden la
res olución de restricciones técnicas, el s uminis tro de s ervicios complementarios , la gestión de
des víos y los pagos por capacidad (ver S eguridad de s uminis tro).

E l operador del s istema es también el res pons able de proponer a la Adminis tración G eneral
del E s tado la planificación de la red de trans porte, que es la única que tiene carácter
vinculante. E s ta planificación requiere informe de la C NMC y trámite de audiencia,
pos teriormente, es s ometida al C ongres o de los Diputados antes de la aprobación por el
G obierno y abarca periodos de seis años. (V er S eguridad de s uminis tro).

124
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

4.3 Dis tribución


La dis tribución eléctrica es la actividad que tiene como objetivo llevar la electricidad des de la
s alida de las redes de trans porte hasta el cons umidor final.

E n E s paña, tienen cons ideración de ins talaciones de dis tribución eléctrica las líneas de tens ión
inferior a 220 kV que no s e cons ideren parte de la red trans porte y todos aquellos otros
elementos (comunicaciones , protecciones, control, etc.) neces arios para realizar la actividad
de forma adecuada y en los términos de calidad que exige la regulación. 151

Has ta junio de 2009, las empres as distribuidoras fueron también La dis tribución
res pons ables de realizar el s ervicio de s uminis tro regulado a eléctrica es la
tarifa integral para los cons umidores acogidos al mis mo. A partir
de dicha fecha, es te s uminis tro regulado des pareció, creándos e, actividad que tiene
el “S uminis tro de Último R ecurs o”, el cual era ges tionado por los como objetivo llevar
comercializadores de último recurs o ahora comercializadores de la electricidad
referencia (ver E l s uminis tro de referencia). P or tanto, en la
actualidad, los dis tribuidores en E s paña s olo tienen relación con
des de la s alida de
la actividad de dis tribución propiamente dicha, no pudiendo las redes de
realizar ninguna actividad relacionada con actividades trans porte hasta el
liberalizadas (generación o comercialización). cons umidor final
E l marco jurídico de la dis tribución: las funciones del dis tribuidor s egún la normativa vigente
s on las s iguientes:

• C ons truir, mantener y operar las redes eléctricas que unen el trans porte con los centros
de cons umo.

• Ampliar las instalaciones para atender a nuevas demandas de s uminis tro eléctrico.

• As egurar un nivel adecuado de calidad de s ervicio.

• R es ponder en igualdad a todas las s olicitudes de acces o y conexión.

• Medir el cons umo.

• Aplicar a los cons umidores los peajes o tarifas de acces o.

• Mantener actualizada la bas e de datos de puntos de s uminis tro.

• Informar a los agentes y clientes involucrados .

• P res entar anualmente sus planes de invers ión a las C omunidades Autónomas .

Dichas funciones s on realizadas en las dis tintas zonas de dis tribución de cada empres a. E n
E s paña, exis ten 5 dis tribuidoras de gran tamaño y más de 300 pequeñas dis tribuidoras con
menos de 100.000 clientes , que des arrollan s u actividad en las zonas his tóricas donde han
es tado implantadas (F igura 4-5).

151
P ara el gas natural s e cons ideran instalaciones de dis tribución los gas oductos de pres ión máxima menor o igual a 16 bares.

125
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

F igura 4-5. Mapa de las Endesa


Iberdrola
zonas de dis tribución.
Gas Natural Fenosa
HC Energía
Fuente: Elaboración E.ON España
propia.

La retribución de la actividad de distribución. La retribución de la actividad de distribución


se establece administrativamente atendiendo a los costes de inversión, de operación y
mantenimiento y de gestión de las redes para asegurar el suministro de energía en las
condiciones de calidad fijadas reglamentariamente. Dadas las características de la distribución
y la complejidad de sus activos (número y tipología), la retribución sigue un esquema diferente
al del transporte, de forma que no se valora individualmente cada uno de los elementos que
componen la red de distribución.

Antiguamente, el esquema retributivo de la actividad de distribución en España estaba basado


en el reparto de una “bolsa” entre las empresas, en función de unos porcentajes fijados
administrativamente. La cantidad de la “bolsa” global se modificaba cada año en función del
IPC y de diversos factores que se aplicaban sobre la estimación del aumento de la demanda y
la mejora de la eficiencia.

Con la entrada en vigor para del Real Decreto 222/2008 se estableció una metodología
retributiva que tenía como fin lograr la gestión eficiente por parte de las empresas
distribuidoras, para trasladar al usuario final el mínimo coste con una calidad adecuada. La
retribución de dichas empresas distribuidoras es fijada anualmente por el Ministerio de
Energía, Turismo y Agenda Digital tras haber sido informada por el regulador. Para ello, ambos
contaban con los planes de inversión que tenían que presentar a las Comunidades Autónomas
anualmente, los resultados obtenidos del modelo de red de referencia y con la contabilidad
regulatoria de costes. Ésta última se basa en la información solicitada por el regulador (antes
la CNE, ahora la CNMC) anualmente a las empresas distribuidoras a través de las circulares.
Dicha información incluye los costes y gastos en los que incurren las empresas distribuidoras,
anualmente, asociados a determinados centros de coste.

La retribución de las empresas distribuidoras se fijaba al inicio de cada periodo regulatorio de


cuatro años, estableciendo la retribución de referencia. Esta retribución tenía en cuenta los
costes de inversión (amortización y retribución del activo neto a una tasa determinada), la
retribución de los costes de operación y mantenimiento (mediante la utilización de costes
unitarios medios) y la retribución por otros costes (gestión comercial y tasas de ocupación de
vía pública).

Una vez fijada la retribución inicial, dentro de cada periodo regulatorio, dicha retribución se
actualizaba teniendo en cuenta la evolución de índices macroeconómicos, Índice de Precios al

126
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

C ons umo (IP C ) e Índice de P recios Indus triales (IP R I), los incentivos de calidad y pérdidas
(que podían s uponer un ±3% y ±2% res pectivamente cada año pero que no cons olidándos e
para el año s iguiente) y en función del incremento de actividad. Has ta la aplicación de la
metodología bas ada en el Modelo de R ed de R eferencia y en la contabilidad regulatoria de
cos tes, la retribución por incremento de actividad era proporcional a la variación de la
demanda anual, no corres pondiéndos e el incremento de la actividad neces ariamente con la
variación de dicha demanda, es pecialmente en aquellos años en los que és ta es negativa. Al
término de cada periodo regulatorio, la retribución era revis ada y fijada la retribución de
referencia de nuevo para el s iguiente periodo de cuatro años .

E l R eal Decreto-ley 13/2012 aprobado por el G obierno a principios de 2012 modificó algunos
conceptos de la retribución a la dis tribución (tal y como hizo con el trans porte), ya que
es tableció que s e retribuiría en concepto de invers ión aquellos activos en s ervicio no
amortizados tomando como bas e para s u retribución financiera el valor neto de los mismos .
T ambién modificó el devengo de la retribución generada por ins talaciones de distribución
pues tas en s ervicio, del año n al año n+2 a partir de enero de 2012 (F igura 4-5).

F igura 4-6. 5.498 5.461


E volución de la 4.947 5.098 5.014 5.039
5.174 5.158

4.454 4.538
retribución de la 4.250

actividad de
3.666
3.402 3.568
3.017
2.824 2.899 2.957
dis tribución [M€].

Fuente:
Liquidaciones
definitivas CNMC y
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017
elaboración propia. previsto

El Real Decreto-ley 9/2013 establece una nueva metodología de retribución de la actividad de


distribución en donde se tendrá en cuenta los costes necesarios para realizar la actividad por
una empresa eficiente y bien gestionada, mediante la aplicación de criterios homogéneos para
todo el territorio nacional. Para fijar su rentabilidad se considera que es una actividad de bajo
riesgo.

Se establece la retribución de esta actividad para distintos frentes temporales, análogos a los
del transporte, pero detallados en los Anexos I y II del Real Decreto-ley:

• 1 enero 2013-12 julio 2013: la parte proporcional de la retribución provis ional fijada en
la Orden IE T /221/2013 pas a a s er definitiva.

• 13 julio 2013-31 diciembre 2013: retribución conforme a una formulación y s e fija la


tas a de retribución en 100 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez
años en el mercado s ecundario de los tres mes es anteriores a la entrada en vigor de la
norma.

• A partir 2014: retribución conforme a una formulación y s e fija la tas a de retribución en


200 puntos bás icos s obre las Obligaciones del T es oro a diez años en el mercado
s ecundario de los tres mes es anteriores a la entrada en vigor de la norma.

127
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

La retribución de las actividades de red (tanto trans porte como dis tribución) tiene
cons ideración de cos te regulado del s is tema y, como tal, es recaudado a través de las tarifas
de acces o o peajes . Las empres as ingres an los importes que les corres ponden a través del
s is tema de liquidaciones gestionado por el MINE T AD (trans itoriamente estas funciones las
s igue realizando la C NMC , antigua C NE ).

E n diciembre de 2013 se aprobó el R eal Decreto 1048/2013152 por el que s e establece la


metodología para el cálculo de la retribución de la actividad de dis tribución de energía
eléctrica. E s te R eal Decreto s e bas a y cons olida los principios retributivos establecidos en el
R eal Decreto-ley 9/2013 y en la Ley 24/2013. E s tablece un nuevo modelo que introduce un
límite máximo a la invers ión reconocida anualmente con dos años de anterioridad a la
percepción de la retribución debida a es tas actuaciones , con el fin de aportar una previs ión
razonable de la evolución de los cos tes del s istema motivados por esta actividad y de vincular
la retribución al plan de invers iones pres entado y a las invers iones finalmente ejecutadas.
T ambién, introduce parámetros y establece formulaciones que permitan lograr aumentos de
eficiencia tanto en la construcción de las infraes tructuras como en la operación y
mantenimiento de las redes . R es pecto a los incentivos , es tablece a cada una de las empres as
un incentivo a mejorar los objetivos marcados por ellas mis mas los años anteriores en lo
relativo a calidad de s ervicio y a la mejora de las pérdidas en s u red. Adicionalmente, s e ha
introducido un nuevo incentivo a las empres as dis tribuidoras para lograr una dis minución de
fraude de energía pues to que s on las titulares de las redes y las encargadas de lectura.

E n res umen, el régimen económico de la distribución tomará como bas e los s iguientes
principios :
• La retribución por invers ión s erá de los activos en s ervicio no amortizados
• La tas a de retribución financiera referenciada a las Obligaciones del E s tado a diez años
más un diferencial adecuado para una actividad de bajo riesgo (200 pb en el primer
periodo regulatorio, es to es has ta el 31 de diciembre de 2019)
• E l devengo y el cobro de la retribución generada por ins talaciones puestas en s ervicio
el año n s e inicia el año n+2
• La metodología incluirá incentivos que corres pondan por calidad de s uminis tro,
reducción de pérdidas

152
V er P res entación E nergía y S ociedad R eal Decreto 1048/2013.

128
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

F igura 4-7.
C ambios en la
remuneración
de la actividad
de dis tribución.

Fuente:
Elaboración
propia.

129
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

4.4 C alidad de suminis tro


La calidad del suministro 153 s e define como las caracterís ticas del s ervicio eléctrico, tanto a
nivel técnico como a nivel comercial, que s on exigibles por los cons umidores y la
Adminis tración a las empres as que pres tan el s ervicio. S e mide en dis tintas variables como
s on la continuidad de s uminis tro, la calidad del producto y la calidad de la atención y relación
con el cliente.

C ontinuidad de s uminis tro: S e refiere al número de interrupciones del s uminis tro y s u duración.
E s tos valores s e calculan mediante dos variables llamadas T IE P I y NIE P I. E l primer indicador
contabiliza el tiempo de interrupción del s uminis tro (T IE P I), mientras que el s egundo (NIE P I)
repres enta el número de interrupciones. Ambos s on calculados como el equivalente de la
potencia instalada en media tens ión y en ambos cas os también s ólo se contabilizan los cortes
de más de 3 minutos.

P or las caracterís ticas de la red de distribución, los niveles de continuidad de s uminis tro
exigibles dis tinguen entre calidad individual (cuando que s e refiere a cada cons umidor) y
calidad zonal (cuando se refiere a una determinada zona geográfica). La clas ificación de las
zonas es la s iguiente ( T abla 4-1):

• Zona Urbana (U): C onjunto de municipios de más de 20.000 s uminis tros . T odas las
capitales de provincia aun no llegando a los 20.000 s uminis tros también están
englobados en este tipo.

• Zona S emiurbana (S ): C onjunto de municipios con entre 2.000 y 20.000 suminis tros.

• Zona R ural C oncentrada (R C ): C onjunto de municipios con entre 200 y 2.000


s uminis tros .

• Zona R ural Dis pers a (R D): C onjunto de municipios con menos de 200 s uminis tros .
Incluyen los s uminis tros fuera de la zona poblacional, exceptuando los que s e
encuentran en polígonos indus triales .

153
Des arrollada en detalle en los artículos 99 a 107 del R eal Decreto 1955/2000.

130
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

Calidad Individual

Tiepi
Nivel de Tensión Tipo de Zona Niepi [Nºinterrup.]
[horas]
AT Todas 3,5 7
Urbana 3,5 7
Semi urbana 7 11
MT
T abla 4-1. Niveles Rural concentrado 11 14

exigibles en la Rural disperso 15 19


actualidad. Urbana 5 10
Semi urbana 9 13
Fuente: Real Decreto BT
1955/2000 y elaboración Rural concentrado 14 16
propia. Rural disperso 19 22

Calidad Zonal

Percentil
Tiepi Niepi
Tipo de Zona 80 Tiepi
[horas] [Nºinterrup.]
[horas]
Urbana 1,5 2,5 3
Semi urbana 3,5 5 5
Rural
6 10 8
concentrado
Rural
9 15 12
disperso

Los incumplimientos en la calidad individual que recibe un consumidor, dan lugar a descuentos
en su factura de electricidad, limitados a un 10% de su importe anual.

El tiempo medio de interrupciones en España se ha conseguido disminuir considerablemente


en los últimos años (a excepción de 2009 y 2010, debido a los fuertes temporales y huracanes
registrados esos años). En la actualidad, el sistema eléctrico tiene una interrupción de 1,097
horas, lo que supone una disponibilidad anual del 99,97% (Figura 4-8).

6 5,40
Figura 4-8. 5
Tiempo medio de 4 3,70 3,50
interrupciones.
Horas

3 2,60
2,40 2,50

2 1,70
Fuente: 1,05 1,10
1
Elaboración
0
propia. 1990 1992 1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006 2008 2010 2012 2014 2016

Calidad de producto: los criterios establecidos de lo que se considera una buena calidad de
producto se encuentran en la norma UNE-EN 50.160.

131
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

C alidad de la atención y relación con el cliente: s e determina en función de una s erie de


cues tiones relacionadas con las caracterís ticas del s ervicio ofrecido, como s on la elaboración
de pres upues tos para nuevos s uminis tros, tiempo de ejecución de las ins talaciones , as í como
plazos de ins talación del contador, de atención de reclamaciones y de cortes y reconexiones
por impagos , o el as es oramiento en el momento de la contratación.

132
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

4.5 S mart G rids


Debido a los nuevos retos que existen en el sector eléctrico, se hace necesario desarrollar
tecnologías y sistemas más flexibles que favorezcan el desarrollo de las denominadas redes
inteligentes o “Smart Grids”. Los objetivos de Europa para 2020, 2030 y 2050, la integración en
la red del fuerte incremento de la generación de origen renovable o la necesidad de gestionar
de manera más activa la demanda son algunos de estos retos (ver Energías renovables:
tecnología, economía, evolución e integración en el sistema eléctrico).

Una Smart Grid se puede definir como “una red que integra de manera inteligente las acciones
de los usuarios que se encuentran conectados a ella -generadores, consumidores y aquellos
que son ambas cosas a la vez-, con el fin de conseguir un suministro eléctrico, seguro y
sostenible” (Figura 4-9)

2010

Figura 4-9.
Esquema del
2020
concepto de una
red inteligente o
“Smart Grid”.

Fuente: Trilliant.

2050

Las redes inteligentes tienen un papel fundamental que jugar en el futuro próximo del
transporte y distribución de electricidad. Para conseguir los retos anteriormente expuestos, las
redes inteligentes deberán:

• R obus tecer y automatizar la red, mejorando s u operación, los índices de calidad y las
pérdidas en la misma.

• Optimizar la conexión de las zonas con fuentes de energía renovable, optimizando las
capacidades de conexión y minimizando el cos te de conexión de las mismas .

• Des arrollar arquitecturas de generación des centralizadas , permitiendo el


funcionamiento de instalaciones de menor tamaño (generación dis tribuida) en armonía
con el s is tema.

• Mejorar la integración de la generación intermitente y de nuevas tecnologías de


almacenamiento.

• Avanzar en el des arrollo del mercado de la electricidad, pos ibilitando nuevas


funcionalidades y s ervicios a los comercializadores y a millones de cons umidores en el
mercado.

133
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

• G es tionar de forma activa la demanda, permitiendo que los cons umidores gestionen de
manera más eficiente s us cons umos y mejorando la eficiencia energética.

• P os ibilitar la penetración del vehículo eléctrico, acomodando es tas nuevas cargas


móviles y dis pers as en la red, minimizando el des arrollo de nueva infraestructura y
habilitando las funcionalidades de almacenamiento de energía que pos een.

P ero para s u correcta implantación, es importante conocer y dar una adecuada res puesta a las
principales barreras a las que s e está teniendo que enfrentar esta tecnología:

• Madurez tecnológica y ries go de “first mover” la falta de tecnologías estándares y


suficientemente maduras, suponen un elevado riesgo de inversión. Por otro lado, y
aunque cada vez se están realizando más pruebas piloto de escala relevante, las
estimaciones y análisis de coste/beneficio aún muestran una alta sensibilidad según los
supuestos que se consideren (los costes pueden ser más elevados de los inicialmente
considerados y los potenciales beneficios identificados no siempre se consiguen).

• “Business case”: como se desprende de los análisis coste/beneficio realizados, los


costes de inversión y operación son aún demasiado altos (no existen aún economías
de escala) y los beneficios que pretenden conseguir son difícilmente cuantificables e
imputables a cada agente. Esto dificulta el nuevo modelo de negocio de la actividad.
Por otro lado, cuando se cambia el modelo de negocio y se aumentan los riesgos de
una actividad regulada, aumentan los costes de financiación, lo que hace menos
rentables las inversiones.

• Normativa y regulación: la normativa vigente, en algunos casos impone limitaciones o


barreras técnicas y en otras no genera incentivos suficientes para la inversión. Es
necesario que, por parte de los reguladores, se tome conciencia de la importancia del
papel que van a jugar las Smart Grids y se adecúe la normativa para facilitar su
implantación tanto a nivel técnico como económico.

• Seguridad y privacidad de los datos: el detalle y volumen de la información que estará


disponible sobre cada consumidor puede generar graves perjuicios si se usa de
manera inadecuada o no se implantan las suficientes garantías para el tratamiento de
los datos.

En España, como primer paso hacia una futura red


inteligente, se ha establecido un plan para la sustitución
E n E s paña, como primer de todos los contadores domés ticos (≤ 15kW ) por
pas o hacia una futura red nuevos equipos electrónicos antes del fin de 2018, as í
como s u gestión y lectura a través un s is tema de
inteligente, s e ha telegestión implantado por la dis tribuidora. E s te plan de
es tablecido un plan para la s us titución, que fue establecido inicialmente en la orden
s ustitución de todos los IT C /3860/2007, adolecía de los problemas de madurez
tecnológica indicados . P or ello, cuando los fabricantes
contadores domésticos de equipos dis pus ieron de la s uficiente capacidad
técnica para s uminis trar los contadores que cumplían
con los requis itos exigibles , el plan de s ustitución fue
actualizado por la orden IE T /290/2012.

E l plan de sus titución actualmente vigente contempla actualmente varios plazos e hitos de
s us titución (F igura 4-10).

134
E lectricidad
4. Actividades
reguladas en el
s ector eléctrico

Presentación CCAA y DGPEM 100% EM


Informes evolución del Plan (3 sustituidos
meses antes fin periodo)

F igura 4-10. P lan


de s us titución de
30% 20% 20% 30%
contadores Sustitución Sustitución Sustitución Sustitución
vigente.
1ene 2008 1ene 2011 1ene 2013 1ene 2016 31ene 2018

Fuente: Elaboración El Ministerio nos autoriza el sistema Implantación efectiva Sistema


de telegestión, los equipos y los Telegestión y Telemedida en los
propia. protocolos específicos (11Mayo 2009) equipos ya instalados (1Enero 2014)

Por otro lado, la Comisión Nacional de Energía (antigua CNE y actual CNMC) creó durante
2012 un grupo de trabajo sobre Smart Grids denominado: "Análisis regulatorio para el
desarrollo de las redes inteligentes y la integración eficiente de recursos distribuidos. Vehículo
eléctrico y generación de pequeña potencia". En dicho grupo participaron tanto las empresas
distribuidoras como el Operador del Sistema y dos empresas tecnológicas (Indra y Tecnalia),
con el objetivo de analizar la situación en España y elaborar propuestas normativas para
facilitar la integración de los recursos distribuidos en la red de distribución, fundamentalmente
el vehículo eléctrico y generación distribuida de pequeña potencia. 154

R es pecto a la normativa de la Unión E uropea, en 2011 s e publicó una comunicación s obre


Smart Grids y en 2012 identificó una s erie de medidas para realizar el des pliegue de los
contadores inteligentes , además de una guía para analizar el coste-beneficio de los proyectos
de Smart Grids. No obs tante, no ha s ido hasta el 14 de noviembre de 2012 con la publicación
de la Directiva 2012/27/UE 155 s obre eficiencia energética, cuando s e ha establecido la
obligación de que los E s tados miembros implanten contadores inteligentes que permitan
facilitar información en tiempo real, s iempre que es té económicamente justificado (ver La
nueva directiva de eficiencia energética, Directiva 2012/27/UE ).

Situación actual del despliegue de contadores inteligentes en España. Según los


objetivos que fija el Plan de sustitución de contadores 156 el objetivo para finales del año 2016
es haber sustituido el 70% de los contadores analógicos. Acorde al último informe publicado
por la CNMC 157, el número de contadores inteligentes integrados en la red superó los 21
millones a finales del año 2016, representando el 74,5% del total de los contadores con una
potencia inferior a los 15 kW, cumpliéndose por tanto con el segundo de los hitos marcados.

Sin embargo, el grado de sustitución no ha sido equitativo en las diferentes provincias, siendo
Ceuta y Melilla las zonas en las que menos contadores se han instalado, mientas que
Salamanca y Castellón fueron a finales de 2016 las zonas en las que más contadores se
instalaron.

154
Ver actas del grupo de trabajo perteneciente a la CNE dedicado a las Smart Grids.
155
Ver Directiva 2012/27/UE.
156
Ver Plan de sustitución de contadores
157
Ver informe de la CNMC sobre la efectiva integración de los contadores con telemedida y telegestión

135
E lectricidad
5.
C omercialización

5. C omercialización
5.1 E l mercado minoris ta de energía eléctrica
La actividad de comercialización. El suministro de electricidad consiste en la entrega de
energía a clientes finales a cambio de una contraprestación económica. Esta actividad es
ejercida por las empresas comercializadoras en régimen de competencia.

Estas empresas adquieren la energía en el mercado de producción (ver Formación de precios


en el mercado mayorista diario de electricidad y Formación de precios en el mercado
mayorista a plazo de electricidad) y la suministran a los clientes finales, que la han de destinar
a su propio consumo. Esta adquisición de energía es el principal valor añadido de la actividad
de comercialización. Para ello, la empresa suministradora ha de realizar una previsión de
consumo del cliente (o segmento de clientes) y planificar la adquisición de energía mediante
las distintas formas de contratación (mercado diario, mercados a plazo o contratación
bilateral).

Para llevar la energía al consumidor, las empresas comercializadoras hacen uso de las redes
de transporte y distribución, mediante la contratación y el pago de los peajes de acceso. Las
condiciones de acceso a las redes y los precios de los peajes correspondientes están
regulados por la Administración, de forma que se realiza en las mismas condiciones para
todas las comercializadoras (ver Los peajes de acceso y cargos: estructura, costes y
liquidación de los ingresos).

Por lo tanto, las empresas comercializadoras son sociedades mercantiles que, accediendo a
las redes de transporte o distribución, adquieren energía para su venta a los consumidores, a
otros sujetos del sistema o para realizar operaciones de intercambio internacional según está
establecido en la Ley 24/2013 158 del S ector E léctrico.

E s tas s ociedades deben cumplir los s iguientes requis itos:

• C omunicar el inicio y el ces e de s u actividad como comercializadoras de energía


eléctrica y el ces e de la mis ma, acompañada de la declaración res pons able s obre el
cumplimiento de los requis itos que s e establezcan reglamentariamente para el ejercicio
de la misma, ante el Minis terio de E nergía, T urismo y Agenda Digital.

C uando la actividad s e vaya a des arrollar exclus ivamente en el ámbito territorial de una
s ola comunidad autónoma, deberá comunicarse al órgano competente en materia de
energía de la comunidad autónoma corres pondiente quien, en el plazo máximo de un
mes , dará tras lado al Minis terio de E nergía, T uris mo y Agenda Digital, acompañada de
la declaración res pons able y la documentación pres entada por el interes ado.

• Manteners e en el cumplimiento de los requisitos de capacidad legal, técnica y


económica que s e determinen en relación al s uminis tro de energía eléctrica.

• P res tar las garantías que reglamentariamente s e es tablezcan.


Las empres as comercializadoras tienen como principales obligaciones :

158
V er Ley 24/2013

136
E lectricidad
5.
C omercialización

• Adquirir la energía neces aria para el des arrollo de s us actividades , realizando el pago
de s us adquis iciones .

• C ontratar y abonar el peaje de acces o a las redes de trans porte y dis tribución
corres pondiente a la empres a dis tribuidora a partir de los datos de facturación, con
independencia de s u cobro del cons umidor final, as í como abonar los precios y cargos
conforme a lo que reglamentariamente s e determine, con independencia de s u cobro
del cons umidor final.

• F ormalizar los contratos de s uminis tro con los cons umidores de acuerdo a la normativa
en vigor que res ulte de aplicación. As imis mo, realizar las facturaciones a s us
cons umidores de acuerdo a las condiciones de los contratos que hubiera formalizado.

A es tos efectos, es tarán obligadas a formalizar los contratos con los consumidores que
lo s oliciten conforme a un modelo de contrato normalizado. E l plazo de duración y el
res to de condiciones del contrato s e fijarán reglamentariamente.

• Las C omercializadoras de R eferencia tienen la obligación de:

 S uminis trar a aquellos cons umidores con derecho al precio voluntario para el
pequeño cons umidor (P V P C ). T ienen derecho a esta modalidad los
cons umidores con una potencia contratada hasta 10 kW y que des een utilizar
es ta modalidad frente a una negociación bilateral con una comercializadora.

 R ealizar ofertas a los cons umidores con derecho al P V P C en las que el precio
del s uminis tro de energía eléctrica s ea fijo para un periodo determinado, s in
perjuicio de las revis iones que procedan de los peajes , cargos y otros costes
regulados . (V er S uminis tro de referencia).

 S uminis trar a aquellos cons umidores que tengan la condición de vulnerables .

 S uminis trar a aquellos cons umidores que, s in tener derecho a los P V P C ,


carezcan trans itoriamente de un contrato de s uminis tro con un comercializador.

• P oner en práctica los programas de ges tión de la demanda aprobados por la


Adminis tración.

• P rocurar un us o racional de la energía.

• T omar las medidas adecuadas de protección del consumidor de acuerdo con lo


es tablecido reglamentariamente.

• P ara el s uminis tro a cons umidores finales deberán dis poner de un s ervicio de atención a
s us quejas, reclamaciones e incidencias en relación al s ervicio contratado u ofertado,
as í como s olicitudes de información s obre los as pectos relativos a la contratación y
s uminis tro o comunicaciones , poniendo a s u dis pos ición una dirección postal, un
s ervicio de atención telefónica y un número de teléfono, ambos gratuitos, y un número
de fax o una dirección de correo electrónico al que los mismos puedan dirigirs e
directamente.

• P res ervar el carácter confidencial de la información de la que tenga conocimiento en el


des empeño de s u actividad, cuando de s u divulgación puedan derivars e problemas de

137
E lectricidad
5.
C omercialización

índole comercial, s in perjuicio de la obligación de información a las Adminis traciones


P úblicas .

• Informar a s us clientes acerca del origen de la energía s uminis trada, as í como de los
impactos ambientales de las distintas fuentes de energía y de la proporción utilizada
entre ellas .

• Informar a s us clientes s obre s us derechos res pecto de las vías de s olución de


conflictos de que dis ponen en cas o de litigio. A es tos efectos las empres as
comercializadoras deberán ofrecer a s us cons umidores , la pos ibilidad de s olucionar s us
conflictos a través de una entidad de res olución alternativa de litigios en materia de
cons umo.

• C umplir los plazos que se es tablezcan reglamentariamente para las actuaciones que les
corres ponden en relación con los cambios de s uminis trador.

P or otra parte, tienen como principales derechos :

• F acturar y cobrar el s uminis tro realizado.

• C ontratar la adquis ición y venta de energía eléctrica en los términos previs tos en la Ley
y s us dis pos iciones de des arrollo.

• Acceder a las redes de trans porte y dis tribución en la forma que reglamentariamente s e
determine por el G obierno.

• E xigir que los equipos de medida de los us uarios reúnan las condiciones técnicas y de
s eguridad que reglamentariamente s e determinen, as í como el buen us o de los mis mos.

Principales procesos comerciales. Además de la adquisición de energía, las empresas


comercializadoras realizan varios procesos en su relación con los clientes finales:

• Oferta: las empresas comercializadoras elaboran ofertas


La facturación a los para sus clientes, y se las hacen llegar a través de su estructura
consumidores se de canales de atención y venta. Una vez que la oferta es
efectuará por las aceptada por el cliente, se pasa al proceso de contratación del
empresas suministro eléctrico.
comercializadoras • Facturación: la facturación a los consumidores se
en las condiciones efectuará por las empresas comercializadoras en las condiciones
que se hubieran que se hubieran pactado entre las partes y se realizará en base a
pactado entre las las lecturas mensuales o bimestrales de los equipos de medida
instalados al efecto y facilitadas por los distribuidores en su
partes factura de acceso correspondiente. Dichas lecturas son
responsabilidad de las empresas distribuidoras, conforme a la
normativa vigente.

En el caso de los consumidores acogidos al precio voluntario para el pequeño


consumidor, antes de la ley 24/2013 tarifa de último recurso, el comercializador de
referencia realiza la facturación habitualmente de forma bimestral, en base a las lecturas

138
E lectricidad
5.
C omercialización

bimes trales de los equipos de medida ins talados al efecto o, cuando no s e dis ponga de
lectura real, a las estimaciones de medida realizadas por el dis tribuidor, conforme al
procedimiento es tablecido, que s e aplica homogéneamente a nivel s ectorial (ver E l
s uminis tro de referencia).

E l G obierno ha regulado que la facturación de los cons umidores domés ticos y P Y ME s s e


calculará en bas e a la lectura real de los contadores realizada cada dos mes es 159. La
norma, con la que el G obierno bus ca que el cons umidor pague en bas e a s us cons umos
reales , entró en vigor en el mes de abril de 2013. E l s is tema de facturación bimestral
s us tituyó a la factura mens ual que estuvo en vigor des de s eptiembre de 2008, y que
incluía una facturación es timada que s e realizaba en mes es alternos. Dicho s is tema
generó un importante número de reclamaciones por parte de los cons umidores debido a
la complejidad as ociada a las regularizaciones de los cons umos.

La lectura y facturación de cons umidores que contraten s u s uminis tro a través de una
comercializadora en mercado libre estará s ujeta a lo acordado libremente entre las partes
y recogido en el corres pondiente contrato de s uminis tro.

P revio acuerdo expres o entre las partes, la empres a comercializadora podrá facturar una
cuota fija mens ual proporcional a los cons umos his tóricos y, cuando no los haya, con una
es timación de horas de utilización diaria, previamente acordada, más el término de
potencia. E n todo cas o, s e producirá como mínimo una regularización anual y en bas e a
lecturas reales .

P ara s uminis tros que cuenten con equipos de medida digitales y con la telemedida
operativa, la lectura se realizará con una periodicidad mens ual y en el cas o de
cons umidores acogidos al P V P C antigua T UR , la facturación s e realizará cons iderando
los valores horarios de cons umo.

• Atención pos t-venta: E l s ervicio de atención a los cons umidores que es tablezcan las
empres as comercializadoras deberá adecuars e, en todo cas o, a los parámetros mínimos
de calidad es tablecidos en la legis lación de defens a de los cons umidores y us uarios .

Los consumidores serán debidamente avisados, de forma transparente y comprensible,


de cualquier intención de modificar las condiciones del contrato e informados de su
derecho a rescindir el contrato sin coste alguno cuando reciban el aviso. Asimismo, serán
notificados de forma directa por su suministrador sobre cualquier revisión de los precios
derivada de las condiciones previstas en el contrato en el momento en que ésta se
produzca, y no más tarde de un período de facturación después de que haya entrado en
vigor dicha revisión, de forma transparente y comprensible.

Las reclamaciones o discrepancias que se susciten en relación con el contrato de


suministro con una empresa comercializadora, o con las facturaciones derivadas de los
mismos, son resueltas administrativamente por el órgano competente en materia de
energía de la Comunidad autónoma o Ciudades de Ceuta y Melilla, en cuyo territorio se
efectúe el suministro, independientemente de las actuaciones en vía jurisdiccional que
pudieran producirse a instancia de cualquiera de las partes.

Etiquetado de electricidad. De acuerdo con lo establecido por la normativa europea, las


empresas comercializadoras tienen la obligación de informar a sus clientes sobre el origen de la

159
Ver Real Decreto 1718/2012

139
E lectricidad
5.
C omercialización

energía s uminis trada, así como de los impactos ambientales de las dis tintas fuentes de energía y
de la proporción utilizada entre ellas 160.

T ambién está es tablecido que s erá la C omis ión Nacional de los Mercados y la C ompetencia
(C NMC ) la encargada de aprobar un formato de etiquetado tipo, que deberán utilizar las empres as
comercializadoras en s us facturas para reflejar la información, as í como el método utilizado para el
cálculo de la contribución de cada fuente energética primaria en el conjunto de la energía eléctrica
s uminis trada por las empres as comercializadoras y s u impacto ambiental as ociado.

E l método de cálculo s e concreta en la C ircular 1/2008 y s e res ume en los pas os s iguientes :

• C alcular el mix nacional, a partir de la información aportada por el Operador del S is tema.
P ara ello, s e recaba la información relativa al año natural anterior al 1 de abril de cada año,
fecha en la que s e inicia la obligación.

• Del mix nacional s e res tan las garantías de origen emitidas a favor de la producción
procedente de fuentes de energía renovables o de cogeneración de alta eficiencia.

• P ara cada comercializadora, a partir del mix nacional, s e añaden las garantías de origen
transferidas a favor de dicha comercializadora.

C omo res ultado, cada empres a comercializadora debe informar del origen de su electricidad
calculado a partir del mix nacional al que s e añaden las garantías de origen adquiridas . E ste
método de cálculo implica que la forma de mejorar el mix cons is te en adquirir garantías de origen
de energía renovable o de cogeneración de alta eficiencia.

E n la C ircular 6/2012 de la C NE , ahora C NMC , s e han actualizado las normas de organización y


funcionamiento del S is tema de G arantía de origen de la electricidad.

E l formato del etiquetado en las facturas es tá es tandarizado y s e pres enta en forma de figuras y
tablas que reflejan el mix medio del s ector (F igura 5-1) y de la comercializadora que realiza el
s uminis tro:

7% Hidráulica
12%
Nuclear
F igura 5-1. E jemplo de mix de 4% Carbón
Fuel/Gas
producción eléctrica presentado 22%
Ciclo combinado
en la factura de la electricidad. Eólica
17% Solar
Fuente: Factura tipo de una Otros
empresa comercializadora y
elaboración propia.
21%
15%
3%

También se proporciona información sobre las emisiones de CO2 y sobre los residuos radiactivos
con el formato que se muestra en la Figura 5-2.
160
Esta obligación se concreta en el artículo 46, apartado m) de la Ley 24/2013, del Sector Eléctrico, y en el artículo 110 bis del Real
Decreto 1955/2000, por el que se regulan las actividades de transporte, distribución, comercialización, suministro y procedimientos de
autorización de instalaciones de energía eléctrica.

140
E lectricidad
5.
C omercialización

Emisiones de dióxido de carbono CO2 Residuos radiactivos AA

F igura 5-2. E jemplo


de los gráficos de Menos dióxido de carbono Menos residuos radiactivos
emis iones de carbono
A A
y res iduos radiactivos B B
pres entados en la Media C Media C C
factura de la Nacional
D
Nacional
D
electricidad. 0,27
E E
0,58
E
Fuente: Factura tipo de F F
una empresa G G
comercializadora y
Más dióxido de carbono Más residuos radiactivos
elaboración propia.
Contenido de carbono Residuos Radiactivos
Kg de dióxido de carbono por kWh
0 ,30 Miligramos por kWh
0 ,52

Formas de suministro: en el sector eléctrico español existen tres formas por las que las
comercializadoras pueden suministrar energía a los consumidores:

• Suministro de referencia (V er E l s uminis tro de referencia).

 P recio V oluntario para el P equeño C ons umidor (P V P C ), que es un precio calculado


por R ed E léctrica de E spaña que s e determina en función del precio horario de los
mercados diario e intradiario durante el período al que corresponda la facturación, y
mediante la aplicación de un perfil de un consumidor promedio. E s la modalidad
que s e aplica por defecto a partir del 1 de julio de 2014 s i el cons umidor estaba
acogido a la anterior T arifa de Último R ecurs o (T UR ).

 P recio F ijo Anual en Mercado R egulado ofrecido por la comercializadora de


referencia.

• Contratación en el Mercado Liberalizado mediante la contratación libre con una


comercializadora.

• Suministro del Último Recurso (ver el bono s ocial): s uminis tro que aplica a los s iguientes
cons umidores:

 C ons umidores vulnerables .

 C ons umidores que no cumplen los requis itos para la aplicación del P V P C y que
trans itoriamente no dispongan de un contrato de s uminis tro en vigor con un
comercializador en mercado libre.

141
E lectricidad
5.
C omercialización

5.2 E l s uministro de referencia


E l s uminis tro de referencia es de aplicación a los cons umidores conectados en baja tens ión con
potencia contratada has ta 10 kW y viene a s us tituir al S uminis tro de Último R ecurs o (S UR )
exis tente has ta la aprobación de la Ley 24/2013 del s ector eléctrico. E l cons umidor que opte por
es ta modalidad s e le aplicará los precios voluntarios para el pequeño cons umidor (P V P C ) que
s erán únicos para todo el territorio es pañol y s erán los precios máximos que podrán cobrar los
comercializadores que as uman las obligaciones de s uminis tro de referencia (anteriormente
denominados C omercializadores de Último R ecurs o (C UR )) (ver E l precio voluntario para el
pequeño cons umidor).

P or otro lado, la ley del s ector define las tarifas de último recurs o como aquellos precios de
aplicación a categorías concretas de cons umidores . E stas tarifas res ultarán de aplicación a:

• Los cons umidores que tengan la condición de vulnerables : a los que s erá de aplicación el
P V P C menos el bono s ocial (ver el bono s ocial).

• Aquellos que, s in cumplir los requis itos para la aplicación del precio voluntario para el
pequeño cons umidor, trans itoriamente no dis pongan de un contrato de suminis tro en vigor
con un comercializador en mercado libre: a los que s erá de aplicación el P V P C más un
recargo.

E n es te s entido, el S uminis tro de Último R ecurs o (S UR ) es , dentro del modelo de mercado


liberalizado que s e aplica en los s ectores de electricidad y gas natural en E uropa, una modalidad
de s uminis tro para determinados cons umidores para quienes las Directivas europeas conciben el
s uminis tro de dichas energías como s ervicio univers al.

La Directiva 2003/54/C E y pos teriormente la Directiva 2009/72/C E 161, establecen las condiciones
de este s ervicio y la pos ibilidad de des ignar un s uminis trador de último recurs o. Más
concretamente 162:

“Los Estados miembro deberán garantizar que todos los clientes domésticos y, cuando los
Estados miembro lo consideren adecuado, las pequeñas empresas, es decir, las empresas que
empleen a menos de 50 personas y cuyo volumen de negocios o balance general anual no
exceda de 10 millones de euros, disfruten en su territorio del derecho a un servicio universal, es
decir, del derecho al suministro de electricidad de una calidad determinada, y a unos precios
razonables, fácil y claramente comparables y transparentes. Para garantizar la prestación del
servicio universal, los Estados miembro podrán designar un suministrador de último recurso.”

Estas mismas Directivas también mencionan una protección especial para los llamados clientes
vulnerables, de la siguiente forma:

“Los Estados miembro adoptarán las medidas oportunas para proteger a los clientes finales y, en
particular, garantizarán una protección adecuada de los clientes vulnerables. A este respecto,
cada uno de los Estados miembro definirá el concepto de cliente vulnerable que podrá referirse a
la pobreza energética y, entre otras cosas, a la prohibición de desconexión de la electricidad a
dichos clientes en períodos críticos. Los Estados miembro garantizarán la aplicación de los
derechos y las obligaciones relacionados con los clientes vulnerables.”

161
Ver directivas de electricidad.
162
Ver Directiva 2009/72/CE, Artículo 3 “Obligaciones de servicio público y protección del cliente”, párrafos 3 y 7.

142
E lectricidad
5.
C omercialización

E n E s paña, el S UR s e implantó en el s ector de la electricidad el 1 de julio de 2009. B ás icamente,


cons is tía en el derecho de determinados clientes (los de potencia contratada menor o igual a 10
kW ) a es coger una oferta comercial en mercado libre o s er s uminis trados a precios establecidos
por la Adminis tración. P os teriormente, como ya s e ha mencionado la ley 24/2013 cambió esta
denominación s ustituyéndola por suministro de referencia.

Los clientes acogidos al precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) son suministrados
por alguno de los comercializadores de referencia, empresas comercializadoras designadas por el
Gobierno y que realizan su actividad en el mismo régimen de acceso de terceros a las redes y
pagando el mismo peaje de acceso. Estos comercializadores adquieren la energía para su venta a
los consumidores, a otros sujetos del sistema o para realizar operaciones de intercambio
internacional. (Figura 5-3)

Figura 5-3. Calendario


de desaparición de
tarifas integrales.

Fuente: Elaboración
propia a partir de la
normativa.

Conviene distinguir entre el derecho al suministro en el marco del suministro de referencia y el


SUR con el bono social, que es un mecanismo de protección al consumidor vulnerable con unas
características específicas ligadas a la situación social, la capacidad económica y las necesidades
imprescindibles de energía en el hogar. Es decir, el suministro de referencia garantiza el derecho
al suministro en unas condiciones razonables, mientras que el bono social se configura como una
protección social para consumidores desfavorecidos económicamente (ver El bono social).

La solución dada en España con la creación del bono social es una medida parcial que requiere
de mayor definición y adaptación acorde a la experiencia obtenida (ver El bono social).

Finalmente, no hay que olvidar, que en la propia Directiva 2009/72/CE 163 s e menciona la
pos ibilidad de adoptar otros tipos de medidas – “Los Estados miembro adoptarán las medidas
adecuadas, tales como planes nacionales de acción en materia de energía, prestaciones en el
marco de regímenes de la seguridad social para garantizar el necesario suministro de electricidad
a los clientes vulnerables o el apoyo a mejoras de la eficiencia energética, con el fin de atajar la
pobreza energética donde se haya constatado, también en el contexto más amplio de la pobreza
en general.”

Los comercializadores de referencia. Los comercializadores de referencia, anteriormente


comercializadores de último recurs o (C UR ) des ignados por la Adminis tración para as umir la
obligación del s uminis tro de referencia en todo el territorio es pañol s on, des de octubre de 2017,
las s iguientes empres as comercializadoras tanto de gas como de electricidad:

163
V er Directiva 2009/72/C E .

143
E lectricidad
5.
C omercialización

• Iberdrola C omercialización de Último R ecurs o, S .A.U. (electricidad y gas )

• E ndes a E nergía XX I, S .L.U. (electricidad y gas )

• G as Natural S .U.R ., S DG , S .A. (electricidad y gas )

• E DP C omercializadora de Último R ecurs o S .A. (electricidad y gas )

• V ies go comercializadora de R eferencia S .L. (electricidad)

• C HC C omercializador de R eferencia S .L.U. (electricidad)

• T eramelcor, S .L (electricidad)

• E mpres a de alumbrado E léctrico de C euta C omercialización de referencia S .A. (electricidad)

E l R eal Decreto 216/2014, por el que s e es tablece la metodología de cálculo de los precios
voluntarios para el pequeño cons umidor de energía eléctrica y s u régimen jurídico de contratación
es tablece las empres as que as umen la obligación del s uminis tro de referencia de electricidad.
E s ta des ignación es continuis ta con la establecida en el R eal Decreto 485/2009, por el que s e
regulaba la pues ta en marcha del s uminis tro de último recurs o; es ta des ignación s e realizó
tomando en cons ideración que dichas empres as dis ponían de los medios s uficientes para poder
as umir el riesgo de una actividad libre, con la obligación adicional de s ometers e a las condiciones
es tablecidas para el S UR .

E l R eal Decreto 216/2014 es tablece, al igual que el derogado 485/2009, la pos ibilidad de que los
grupos empres ariales que tengan obligaciones de s uminis tro de comercializador de referencia o
de último recurs o en los s ectores de electricidad y gas res pectivamente, podrán proceder a
unificar dichas obligaciones en una única empres a de comercialización de referencia o de último
recurs o. A estos efectos , dichos grupos empresariales o empres as deberán remitir s u s olicitud al
Minis terio de E nergía, T uris mo y Agenda Digital indicando el nombre de la s ociedad que as umirá
las obligaciones de referencia en ambos s ectores . E l Minis terio de E nergía, T urismo y Agenda
Digital determinará la fecha a partir de la cual s e hará efectiva la transferencia a dicha s ociedad de
los cons umidores acogidos a la tarifa de último recurs o de gas o en s u cas o, al precio voluntario
para el pequeño cons umidor de energía eléctrica.

La relación de empres as puede s er revis ada por el G obierno, quien ha establecido como medida
de promoción de la competencia y para mejorar la información a los cons umidores, que la C NMC
debe facilitar, a través de s u página web164, el lis tado actualizado de empres as comercializadoras ,
tanto de referencia como en el mercado libre.

T ambién s e obliga a facilitar los datos de todos los comercializadores en las propias facturas de
cada uno de los comercializadores de referencia. La T abla 2-1 mues tra un ejemplo del tipo de
información que s e incluye en las facturas de los comercializadores de referencia en marzo de
2017:

164
V er listado de C omercializadores de referencia.

144
E lectricidad
5.
C omercialización

Teléfono Otros
gratuito de teléfonos de
Comercializadora de referencia Dirección de la página web
atención al atención al
cliente cliente
Endesa Energía XXI, S.L.U. 800 760 333 www.endesaonline.com
T abla 5-1. E jemplo
Iberdrola Comercialización de
de información Último Recurso, S.A.U
900 225 235 900 224 522 www.iberdrola.com
incluida en las
Gas Natural S.U.R., SDG, S.A. 900 100 259 901 40 40 40 www.gasnaturalfenosa.com
facturas de los
EDP Comercializadora de
comercializadores . 900 907 000 www.edpenergia.com
Último Recurso
Viesgo Comercializadora de
Fuente: CNMC y 910911464 www.viesgoclientes.com
Referencia
elaboración propia. CHC Comercializador de
984115538 www.chcenergía.es
Referencia
Teramelcor S.L. 951481180 www.teramelcor.es
Empresa de alumbrado
Eléctrico de Ceuta
956519534 www.electricadeceuta.com
Comercialización de referencia
S.A

Obligaciones del suministro de referencia. Los comercializadores de referencia de electricidad,


además de los derechos y obligaciones generales establecidos para todos los comercializadores
en el artículo 45 de la Ley 17/2007, tienen las siguientes obligaciones adicionales según el Real
Decreto 216/2014:

• Atender las s olicitudes de s uminis tro y formalizar los corres pondientes contratos con
aquellos cons umidores que tengan derecho a acogers e al precio voluntario para el
pequeño cons umidor (P V P C ) antes denominada T UR (ver E l precio voluntario para el
pequeño cons umidor).

• Atender las s olicitudes de los cons umidores que s oliciten contratar al precio fijo anual de
s uminis tro.

• Atender a los cons umidores que tengan la condición de vulnerables y les res ulte de
aplicación las tarifas de último recurs o de la ley 24/2013.

• Atender a los cons umidores que, s in cumplir los requis itos para la aplicación del precio
voluntario para el pequeño cons umidor, trans itoriamente carecen de contrato en vigor con
un comercializador libre y les res ulten de aplicación las corres pondientes tarifas de último
recurs o.

• Atender a los cons umidores que, como cons ecuencia del incumplimiento de los requis itos
exigidos para el ejercicio de la actividad de comercialización de una empres a
comercializadora, s ean objeto de tras pas o.

• Llevar en s u contabilidad interna cuentas s eparadas , diferenciando los ingres os y los


gastos estrictamente imputables al s uminis tro realizado a aquellos cons umidores acogidos
a precio voluntario para el pequeño cons umidor (P V P C )

145
E lectricidad
5.
C omercialización

Los cons umidores acogidos al P recio V oluntario para el P equeño C ons umidor (P V P C ) s erán
cons iderados , a efectos de la gestión del acces o a las redes , como consumidores en el mercado
liberalizado, por lo que se les aplica todo lo es tablecido actualmente en la reglamentación o la que
s e pueda es tablecer en el futuro s obre el mercado libre. Hasta que no se actualice la normativa
corres pondiente, s e mantiene la aplicación que s e hacía anteriormente por el distribuidor en lo
referido a las condiciones de pago y de s us pens ión del s uminis tro incluidas en el R eal Decreto
1955/2000. A s u vez, los comercializadores de referencia deberán atender las s olicitudes de
s uminis tro de energía eléctrica y formalizar los corres pondientes contratos con es tos
cons umidores.

El traspaso de la tarifa al suministro de último recurso (ahora suministro de referencia). En


junio de 2009 se publicó la Orden ITC/1659/2009, que incluía el mecanismo de traspaso de
clientes del mercado a tarifa al SUR (Suministro del Último Recurso) de energía eléctrica, con lo
que más de 23 millones de consumidores de electricidad que hasta el 1 de julio de 2009 tenían un
contrato en vigor con un distribuidor en el mercado a tarifa fueron traspasados al SUR.

En la citada Orden, en la que también se estableció el procedimiento de cálculo y estructura de las


tarifas de último recurso, se definieron los siguientes aspectos en relación al sistema del SUR.

• Los contratos a tarifa que es taban s us critos entre los cons umidores y los dis tribuidores s e
extinguieron de forma automática.

• Los cons umidores que no habían contratado con una comercializadora a s u elección antes
del 1 de julio de 2009, fueron tras pas ados automáticamente al C omercializador de Último
R ecurs o-C UR (ahora comercializador de referencia) del grupo empres arial de la empres a
dis tribuidora de la zona.

• E l C UR s e s ubrogaba en la obligación del s uminis tro con los mismos parámetros técnicos
y datos del anterior contrato a tarifa que tuviera el cons umidor con el distribuidor.

• Los C UR comenzaron a facturar a los cons umidores des de el 1 de julio de 2009, debiendo
incluir en s u factura los cons umos a tarifa pendientes de facturación por el dis tribuidor, al
que pos teriormente debían liquidar las cantidades que les fueran de aplicación.

Los consumidores en el mercado de referencia. La legis lación actual es tablece que, con
carácter general, s ólo podrán acogers e a precio voluntario para el pequeño cons umidor (P V P C )
los cons umidores de energía eléctrica conectados en baja tens ión cuya potencia contratada s ea
inferior o igual a 10 kW . No obstante, dicho límite de potencia puede modificars e por Orden
Minis terial, y es previs ible que a medio plazo s e reduzca el colectivo de cons umidores con
derecho a P V P C como la C NMC ha recomendado s iempre que exis ta una competencia efectiva
en la comercialización y s e incremente de forma importante el número de clientes s uminis trados
por los comercializadores en libre competencia.

C on la información dis ponible en los boletines indicadores publicados por la C NMC , s e pres enta
en la F igura 5-4 el volumen de energía cons umida por consumidores con derecho a acogers e bajo
el s uminis tro de último recurs o, ahora P V P C , detallando s u es tado a diciembre de 2017 y s u
evolución his tórica.

146
E lectricidad
5.
C omercialización

F igura 5-4. E volución


43.0% 40.0%
de la es tructura del 51.0% 47.0%
61.0%
mercado de electricidad 67.0%
56.1%
76.0% 53.5%
en volumen de energía 90.0%
84.0% 48.8%
45.1%
para cons umidores con
34.8%
derecho a acogers e al 28.0%
P V P C . E s tado a 19.0%
49.3% 53.3% 57.1% 60.0%

diciembre de 2017. 12.0%


33.0%
39.2%
6.4%
23.8%
16.2%
9.8%
Fuente: Boletín
Indicadores CNMC y 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017

elaboración propia % de clientes bajo comercializador libre TUR/PVPC Comercializador libre

Como se puede apreciar en la Figura 5-5, a finales de diciembre de 2017, el número total de
suministros de electricidad en el mercado minorista español superaba los 27,3 millones. Del total
del mercado minorista español, más de 26,2 millones (que suponen el 95,2% de los mismos con
un consumo agregado de casi el 46,7% de la energía suministrada), corresponden al segmento
doméstico más pymes.

Del total de suministros, un total de 10,5 millones aún permanecen en el PVPC, suministrados
mediante un comercializador de referencia y el resto están en el mercado liberalizado.

Figura 5-5. Energía


suministrada y puntos de
suministro según tipología de 60% Mercado libre
mercado. Estado a diciembre
de 2017. 100%

Fuente: CNMC y elaboración


propia 40% PVPC

Industrial Pymes + Doméstico

147
E lectricidad
5.
C omercialización

5.3 E l precio voluntario para el pequeño consumidor


E l precio para el pequeño cons umidor (P V P C ) es el precio máximo de referencia al que podrán
contratar los consumidores de has ta 10 KW de potencia contratada que des een utilizar es ta
modalidad frente a una negociación bilateral con una comercializadora. V iene a s ustituir a las
tarifas de último recurs o (T UR ) exis tentes hasta la aprobación de la Ley 24/2013.

El cálculo del precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC). El PVPC se debe
calcular respetando el principio de suficiencia de ingresos, aditividad y de forma que no ocasione
distorsiones de la competencia en el mercado. Se calcula incluyendo de forma aditiva los peajes
de acceso y cargos que correspondan, el coste de producción de energía eléctrica y el coste
regulado de gestión comercial. Su metodología de cálculo se regula en el Real Decreto 216/2014
y la principal novedad respecto a las TUR es que el coste de producción de energía eléctrica se
determina con base en el precio horario de los mercados diario e intradiario durante el período al
que corresponda la facturación. Hasta la entrada en vigor de este Real Decreto, el citado coste de
producción se fijaba a priori a partir del método de cálculo previsto en la normativa anterior
tomando como referencia el resultado de las subastas CESUR.

Desde el punto de vista del Comercializador, el cálculo se realiza de forma aditiva recogiendo los
mismos costes que tendría cualquier comercializador en el mercado libre. Así, se incluyen los
costes de adquisición de energía, el coste de acceso y un coste de gestión comercial.

Sin embargo, desde el punto de vista del sistema eléctrico, el cálculo continúa sin ser suficiente
para recuperar todos los costes. Esto se debe a que los peajes de acceso y cargos no cubren la
suma de los costes regulados incluidos en su cálculo, produciendo el llamado déficit tarifario (ver
El déficit tarifario: qué es, consecuencias y solución). En todo caso, el déficit de las tarifas de
acceso no tiene impacto económico directo en el comercializador de referencia, al igual que
tampoco lo tiene para cualquier comercializador en mercado libre.

Por lo tanto, los costes considerados en el cálculo del precio E l P V P C , antes tarifa
voluntario para el pequeño consumidor son:
de último recurs o, se
• Coste de adquisición de energía: refleja el cos te de aplica a los
producción de energía para los clientes con derecho a cons umidores con
P V P C . Has ta finales de 2013, s e calculaba en bas e a un potencia contratada
procedimiento competitivo, las s ubas tas para el
aprovis ionamiento del S UR : s ubas tas C E S UR . Al
has ta 10 kW y s e
res ultado de las s ubastas s e incorporaban otros costes calcula s umando los
como los res ultantes de la participación en los mercados peajes de acces o y
s pot (diario o de ajustes ) y los pagos regulados de cargos que
capacidad y las pérdidas . T ambién s e incorporaban los
pagos de los comercializadores para la financiación de la corres pondan, el cos te
retribución del Operador del Mercado Ibérico de E nergía, de producción de
P olo E s pañol (OME L) y al Operador del S is tema (R E E ), energía y el coste
s egún la normativa de aplicación vigente en cada regulado de gestión
momento.
comercial
S in embargo, la última s ubas ta C E S UR celebrada el 19
de diciembre de 2013 no fue validada por la C omis ión

148
E lectricidad
5.
C omercialización

Nacional de los Mercados y la C ompetencia (C NMC ), como entidad s upervis ora de la


mis ma, a la vis ta de la concurrencia de determinadas circunstancias atípicas .

Ante la neces idad de fijación de un P V P C con anterioridad al 1 de enero de 2014, el


G obierno determinó mediante el R eal Decreto-ley 17/2013 el precio de 48 €/MW h para el
primer trimestre de 2014.

P os teriormente, el R eal Decreto 216/2014 es tablece la metodología de cálculo de los


P V P C bas ado en el precio horario del mercado durante el periodo al que corres ponda la
facturación. E ste nuevo mecanis mo es de aplicación a partir del 1 de abril de 2014, s i bien
es tablece un periodo trans itorio máximo de tres mes es, has ta el 1 de julio de 2014, para la
adaptación de los s is temas por parte de los comercializadores de referencia. Durante es te
periodo, s i tuvieran que emitir alguna factura y no tuvieran lis to el nuevo s is tema, aplicarán
el precio fijado para el primer trimes tre (48 €/MW h).

La facturación s e efectuará por el comercializador de referencia que corres ponda con bas e
en lecturas reales y cons iderando los perfiles de cons umo s alvo para aquellos s uminis tros
que cuenten con equipos de medida con capacidad para telemedida y telegestión, y
efectivamente integrados en los corres pondientes s istemas, en los que la facturación s e
realizará cons iderando los valores horarios de cons umo.

De es te modo, el mecanis mo es tablecido en es te R eal Decreto s upone un cambio de


modelo, pas ando de un modelo en el que el precio del cos te es timado de la energía se
fijaba a priori a través de un mecanismo con un precio de futuro como era el cas o de las
s ubas tas C E S UR , a un mecanis mo en el que el cons umidor abonará el cos te que ha
tenido en el mercado la energía cons umida en el periodo.

P or otro lado, R ed E léctrica publicará el precio promedio que s e aplicará a la factura de


cada cons umidor en función de s u periodo de facturación y la C NMC dis pondrá también de
un s imulador de factura donde introduciendo el día inicial y final del periodo de facturación,
el cons umo y la potencia contratada, s e obtendrá el precio final a pagar por el cons umidor.
.
• Peaje de acceso y cargos: incorpora el precio vigente de los peajes de acceso y cargos
que correspondan según el tipo de consumidor. Se trata de los peajes de acceso 2.0A para
clientes con contador de un solo periodo o 2.0DHA para clientes con contador de dos
periodos, es decir, con discriminación horaria.

• Gestión comercial: se trata de un valor establecido en la metodología de cálculo que trata


de reflejar el coste de los procesos de gestión de los clientes con derecho al precio
voluntario para el pequeño consumidor.

Figura 5-6. Cálculo del


Precio Voluntario para el
Pequeño Consumidor.

Fuente: Elaboración propia.

149
E lectricidad
5.
C omercialización

El coste de adquisición de energía. La metodología de cálculo del precio voluntario para el


pequeño consumidor de electricidad refleja el coste de adquisición de la energía que tendría
cualquier comercializador en el mercado libre, con el fin de no crear un déficit en su compra de
energía y que los PVPC no supongan una barrera a la liberalización.

El cálculo del coste de adquisición de energía desde el 1 de abril de 2014 recoge los siguientes
conceptos de coste:

• P recio horario del mercado mayoris ta: refleja el precio horario que se es tablece entre
oferta y demanda en el mercado mayoris ta de electricidad. (V er F ormación de precios en el
mercado diario de electricidad y F ormación de precios en los mercados mayoris tas a plazo
de electricidad)

• S ervicios de ajuste: recoge el coste de los s ervicios de ajuste del s is tema (resto de
componentes del precio final excepto el cos te en el mercado diario). (ver Mecanis mos de
ajus te de demanda y producción).

• P ago por capacidad: s e aplican los valores vigentes , en función del peaje de acces o (con o
s in dis criminación horaria) y para cada periodo tarifario.

• P ago a otros agentes del s istema: cuantías que corres pondan al pago de los
comercializadores para la financiación de la retribución del Operador del Mercado Ibérico
de E nergía y al Operador del S is tema, s egún la normativa de aplicación vigente en cada
momento.

• P érdidas estándar: s e aplican los valores vigentes , en función del peaje de acces o (con o
s in dis criminación horaria) y para cada periodo tarifario.

Los peajes de acceso y cargos. Las redes de trans porte y dis tribución permanecen bajo un
es quema regulado, por ser actividades que, dadas s us caracterís ticas intríns ecas , s on monopolios
naturales (ver Actividades reguladas y actividades en libre competencia). P or es te motivo, los
cos tes de las redes (junto con otros cos tes regulados del S istema, los cargos ), s on repercutidos a
todos los cons umidores s egún sus caracterís ticas , independientemente de la forma de adquis ición
de s u energía, a través de los peajes de acces o y cargos. Los precios los fija el Minis terio de
E nergía, T urismo y Agenda Digital, y podían s er revis ados trimes tralmente has ta la aprobación del
R eal Decreto-ley 20/2012 que ha fijado s u revis ión anual (ver P eajes de acces o y cargos:
es tructura, cos tes y liquidación de ingres os ).

El coste de gestión comercial. E l cos te de ges tión comercial trata de reflejar el coste de los
proces os de ges tión de los clientes con derecho al precio voluntario para el pequeño cons umidor.
S u valor es es pecialmente importante, ya que s e trata del único valor fijado adminis trativamente y
que puede s uponer una diferencia res pecto al mercado liberalizado (F igura 5-7). S i el valor del
cos te de gestión comercial es demas iado ajus tado, s erá difícil que los comercializadores puedan
dis eñar precios que mejoren el precio voluntario para el pequeño cons umidor.

150
E lectricidad
5.
C omercialización

F igura 5-7. P V P C
vs mercado libre.

Fuente:
Elaboración propia.

3,113 €/kW y año

Según la orden ETU/1948/2016, de 22 de diciembre, el valor fijado anteriormente de 4 €/kW se


sustituyó por un valor de 3,113 €/kW contratado/año. Esta cifra se revisará de nuevo por el
ministerio en el año 2019. Con este importe, los comercializadores de referencia deberían
gestionar el proceso de atención, facturación y cobro a los clientes, más otros procesos
relacionados con la actividad, como la gestión del bono social y, además, tener un margen de
beneficio razonable para la actividad.

Explicación de la factura de electricidad. A la hora de analizar una factura de electricidad típica,


se pueden diferenciar tres bloques como se puede observar en la Figura 5-8:

151
E lectricidad
5.
C omercialización

F igura 5-8. F actura eléctrica


tipo.

Fuente: Comercializadora tipo.

1. Información del cliente y del suministro: la cabecera de la factura permite identificar el


suministro (número de suministro, tipo de contrato, periodo de facturación, número y fecha de la
factura, etc.) y el cliente al que se está facturando (nombre, dirección, forma de pago, etc.).

2. Facturación: término fijo y variable. A continuación aparece el detalle de los conceptos


propiamente facturados. La factura de la electricidad está compuesta de un término fijo y un
término variable. El término fijo (potencia) se calcula multiplicando la potencia contratada de cada
cliente (kW) por el número de días del período de facturación y por el precio del término fijo
(€/kW/día). El término variable (energía) se calcula multiplicando el consumo de dicho periodo
(kWh) por el precio del término de energía (€/kWh).

Para los clientes con precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), la determinación del
coste de producción de energía eléctrica se realizará con base en el precio horario del mercado
diario durante el período al que corresponda la facturación. En el mercado libre, los precios y
periodicidad de revisión de los mismos son los establecidos en las condiciones económicas o
particulares de cada contrato. La suma del término fijo y del término variable constituye el importe
base de facturación, al que se le aplican los posibles descuentos, según promociones que haya
obtenido el cliente y, finalmente, se le añaden los impuestos.

Como se ha explicado anteriormente, la facturación se efectuará por el comercializador de


referencia que corresponda con base en lecturas reales y considerando los perfiles de consumo
salvo para aquellos suministros que cuenten con equipos de medida con capacidad para
telemedida y telegestión, y efectivamente integrados en los correspondientes sistemas, en los que
la facturación se realizará considerando los valores horarios de consumo.

3. ¿A qué se destina esta factura? Los ingresos recaudados a través de la factura eléctrica se
emplean en cubrir los costes del sistema eléctrico y en particular (Figura 5-9):

• C os tes regulados del s is tema: trans porte, dis tribución, regulador.

• C os tes de política energética: incentivos a las energías renovables y cogeneración,


s ervicios de interrumpibilidad que s e abonan a los grandes cons umidores por poder limitar
s u cons umo en un momento de s aturación del s is tema y el s obrecoste de los s is temas
extrapenins ulares . T ambién incluyen las anualidades corres pondientes a los déficits
tarifarios generados en años anteriores.

152
E lectricidad
5.
C omercialización

• C os te de la energía: en el cas o de cons umidores acogidos al P V P C el precio de la energía


es tará fijado a partir del 1 de abril de 2014 por el precio horario del mercado mayoris ta.

F igura 5-9. Detalle del des tino de lo que


paga el cons umidor en su factura.

Fuente: Comercializadora tipo.

En la Figura 5-10 se recogen los valores históricos de los precios medios por MWh para un
consumidor medio:
250
Figura 5-10. Evolución 235
Subida de peajes
de acceso por la
240
refacturación 215
del costes de la energía
210
190
y los peajes para los 180
185
€/MWh consumido

consumidores acogidos 150


al PVPC sin 120
discriminación horaria a 90
julio de 2017. 60

30
Fuente: Boletín de 0
indicadores diciembre 2017
elaborado por la CNMC y
elaboración propia. Peajes de acceso Margen de comercialización Coste de la energía

4. Información adicional. En la parte final de la factura, los comercializadores incluyen un gráfico


con la evolución histórica del consumo facturado y los datos de contacto de la comercializadora.

Igualmente, en este bloque aparece también cualquier información complementaria sobre la


facturación. Este es el caso de la corrección que se realizó en las facturas emitidas entre el 1 de

153
E lectricidad
5.
C omercialización

agosto y el 31 de diciembre de 2012, donde figuró un nuevo concepto de ajus te ("ajuste en precio"
o "ajuste en peajes ") es tablecido por el Minis terio como cons ecuencia de s endos Autos del
T ribunal S upremo. Dicha modificación fue debida a la variación de los precios de los peajes de
acces o del cuarto trimes tre de 2011 y primer trimestre de 2012 res pecto a lo originalmente
publicado, as í como por los peajes aplicables a partir del 1 de abril de 2012.

154
E lectricidad
5.
C omercialización

5.4 E l bono s ocial


E l bono s ocial, aprobado por el G obierno en el R eal Decreto 897/2017 165, de 6 de octubre, por el
que regula la aplicación del bono s ocial de electricidad para los cons umidores vulnerables , es un
mecanis mo para la protección de determinados cons umidores con ciertos niveles de renta y
circuns tancias pers onales , que fue creado en el proces o de la liberalización completa del
s uminis tro (ver E l s uminis tro de referencia).

E s ta figura s e definió inicialmente en el R eal Decreto-ley 6/2009, con la idea de favorecer


económicamente a determinados cons umidores de electricidad que cumplieran con unas
caracterís ticas s ociales , de cons umo y poder adquis itivo determinados por la Adminis tración (ver
E l precio voluntario para el pequeño cons umidor). P osteriormente, en el R eal Decreto-ley 13/2012,
s e es tableció de forma trans itoria una equivalencia entre el bono social y el concepto de
cons umidor vulnerable definido en la normativa comunitaria.

¿Cómo se calcula? El bono social consiste en una bonificación en las facturas del suministro de
electricidad, equivalente a la diferencia entre el precio voluntario al pequeño consumidor (PVPC) y
un valor base, que se denomina tarifa de último recurso a partir de la publicación de la Ley
24/2013 y será aplicado por el correspondiente comercializador de referencia en las facturas de
los consumidores que puedan acogerse al mismo.

Con el Real Decreto 897/2017 se calcula descontando un 25 % en todos los términos que
componen el PVPC para aquellos consumidores considerados vulnerables y un 40% para
aquellos consumidores considerados vulnerables severos 166. Desde 2009 y hasta la publicación
del anterior Real Decreto (216/2014), el bono social suponía congelar los precios que se estaban
aplicando al consumidor antes del 1 de julio de 2009, calculándose en cada factura el importe con
los precios actuales y descontando la diferencia que resulte (Figura 5-11).

165 Ver Real Decreto 897/2017


166
Se considera consumidor en riesgo de exclusión social al consumidor que reúna los requisitos para ser vulnerable severo y que sea
atendido por los servicios sociales de una Administración autonómica o local que financie al menos el 50% del importe de su factura

155
E lectricidad
5.
C omercialización

F igura 5-12. C uantificación del


bono s ocial.

Fuente: Elaboración propia.

En un mercado en competencia, las políticas sociales dentro de las cuales se enmarca el bono
social, no deberían tomar la forma de ayudas directas al consumo eléctrico, sino que deberían ser
aplicadas de forma que interfieran lo menos posible con el principio de asignación eficiente en el
mercado. Estas medidas se pueden canalizar a través de instrumentos específicos de
redistribución de la renta, como ayudas sociales para los colectivos más vulnerables, haciendo de
esta manera que las ayudas sean independientes del consumo y que no distorsionen el precio del
mercado.

Como segunda alternativa, se podría repercutir el coste de apoyo a los consumidores vulnerables
entre el resto de consumidores eléctricos, especialmente sobre aquellos con demandas más
inelásticas. El principal aspecto positivo de esta medida es que no se interfiere o se hace
mínimamente sobre las decisiones de consumo de los agentes. De hecho, pese al mayor precio
del suministro, los consumidores con demandas más inelásticas seguirían consumiendo
prácticamente la misma cantidad de electricidad.

Solo de estas dos formas se podría resolver el aparente conflicto entre la eficiencia de un sistema
de mercado y las políticas sociales de ayuda a consumidores vulnerables (ver Eficiencia
económica).

¿A quién aplica? Como ya se ha señalado, el bono social se definió con la idea de favorecer
económicamente a determinados consumidores de electricidad y que cumplieran con unas
características sociales, de consumo y poder adquisitivo determinados por la Administración.
(Tabla 5-2)

156
E lectricidad
5.
C omercialización

T abla 5-2.
C ondiciones bono
s ocial.

Fuente: Elaboración
propia.

(1)
IPREM: Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples, índice empleado en España como referencia para la
concesión de ayudas, subvenciones o el subsidio de desempleo. En 2017: 7.519,58 €/año.
(2)
Estos umbrales se incrementarán en 0,5 si es consumidor vulnerable y en 0,25 si es un consumidor vulnerable
severo para:
• Hogares con algún miembro con discapacidad reconocida ≥33%.
• Hogares con algún miembro que acredite la situación de violencia de género.
• Hogares con algún miembro bajo la condición de víctima del terrorismo.
(3)
Se considera consumidor en riesgo de exclusión social al consumidor que reúna los requisitos para ser
vulnerable severo y que sea atendido por los servicios sociales de una Administración autonómica o local que
financie al menos el 50% del importe de su factura.
(4)
El bono social se aplica por períodos prorrogables de 2 años (salvo familias numerosas, válido sin renovación
mientras no caduque el título). Además, se establece un periodo transitorio de 6 meses para que los que están
acogidos al actual bono social acrediten que cumplen con las nuevas condiciones

La tramitación del bono s ocial la debe realizar el cons umidor ante una empres a comercializadora
de referencia antes de último recurs o, mediante la s olicitud y el es crito de declaración res pons able
que corres pondan, s egún los modelos que han sido es tablecidos por la R es olución de 26 de junio
de 2009, de la S ecretaría de E stado de E nergía 167.

La empres a comprobará la validez de los datos de la s olicitud y de la documentación aportada, y


cuando s e complete s u acreditación iniciará la facturación del bono social en la factura más
próxima a dicha fecha.

Des de julio de 2012, y en cumplimiento del R eal Decreto- S e dis tinguen dos tipos
ley 13/2012, las empres as comercializadoras de último de consumidores
recurs o ahora de referencia han puesto a dis pos ición de
vulnerables y s e
los cons umidores acogidos al bono s ocial un servicio de
atención telefónica y un número de teléfono, ambos introduce por primera
gratuitos, para atender sus s olicitudes de información. vez el criterio de la renta
para acceder al bono
s ocial

167
Ver Resolución de 26 de junio de 2009.

157
E lectricidad
5.
C omercialización

¿Quién lo financia y quién lo supervisa? El Real Decreto-ley 6/2009 168 es tableció que la
financiación de es te mecanis mo fuera as umida por algunas empres as titulares de ins talaciones de
generación del s istema eléctrico es pañol.

S in embargo, el T ribunal S upremo lo declaró inaplicable en febrero de 2012 por s er un criterio no


jus tificado y dis criminatorio (esto último por no aplicar a todos los generadores). T ras es ta
s entencia el bono s ocial s e incluyó en los peajes de acces o.

P os teriormente, el R eal Decreto-ley 9/2013 reconoce el carácter obligatorio para el s ervicio


público del bono s ocial, s iendo las matrices de las s ociedades verticalmente integradas en las
actividades del s ector eléctrico quienes deben as umir s u cos te. E l reparto de dicho cos te s e
realiza en función del número de s uminis tros conectados a las redes de dis tribución y al número
de clientes a los que s uminis tra la actividad comercial.

C on la entrada en vigor del R eal Decreto-ley 7/2016 169, de 23 de diciembre, s e mantiene que s ean
las matrices de los grupos de s ociedades que des arrollen la actividad de comercialización de
energía eléctrica, o a las propias s ociedades que as í lo hagan, s i no forman parte de ningún
grupo, la que as uman el cos te del bono s ocial. Dicha obligación no tiene carácter permanente,
previéndos e que s e proceda a s u revis ión cada 4 años para adecuarla a la s ituación del s ector
eléctrico. La T abla 5-3 mues tra s u relación y cuotas de aportación, que s e fijaron de la s iguiente
forma:

Empresa Cuota
IBERDROLA CLIENTES, S.A.U. 21,96%
ENDESA ENERGÍA XXI, S.L.U. 20,70%
ENDESA ENERGÍA, S.A. 16,97%
T abla 5-3.
IBERDROLA COMERCIALIZACIÓN DE ÚLTIMO RECURSO, 13,54%
F inanciación del
GAS NATURAL S.U.R., SDG S.A. 8,19%
bono s ocial.
GAS NATURAL SERVICIOS SDG, S.A. 7,44%
EDP ENERGÍA, S.A.U. 2,29%
Fuente: BOE y
elaboración propia. CIDE HCENERGIA 1,43%
VIESGO ENERGIA, S.L. 1,36%
VIESGO COMERCIALIZADORA DE REFERENCIA, S.L. 0,81%
EDP COMERCIALIZADORA DE ÚLTIMO RECURSO, S.A. 0,81%
FENIE ENERGÍA, S.A. 0,75%
TOTAL 100,00%

Este Real Decreto-ley, establece que la recíproca participación de cada una de las empresas o
matrices de grupos de empresas en la asunción del coste sea proporcional al porcentaje que
corresponda sobre una cuantía calculada considerando el número de clientes a los que
suministran

La CNMC es la encargada de supervisar la correcta aplicación del bono social, estando los
consumidores obligados a comunicar a su comercializadora de último recurso cualquier cambio
que suponga la pérdida del derecho a percibir el bono social.

169
Ver Real Decreto-ley 7/2016

158
E lectricidad
5.
C omercialización

P or s u parte, los comercializadores de referencia s on los que comprueban que el cons umidor
cumple los requis itos neces arios para acogers e al bono s ocial, por lo que pueden firmar convenios
de colaboración con las ins tituciones públicas res pons ables de algunos de los requis itos , como
s on la T es orería G eneral de la S eguridad S ocial, el Ins tituto Nacional de E mpleo y el Ins tituto
Nacional de E s tadís tica.

E s tá reglamentado que el incumplimiento de los requis itos para la aplicación del bono s ocial dará
lugar a la refacturación del s uminis tro des de la fecha en que éste s e produzca, aplicando el precio
voluntario al pequeño cons umidor más un recargo del 10%, en la factura inmediatamente posterior
a la detección del incumplimiento.

Comparación con otros países europeos. En Reino Unido, donde ya no existen tarifas
integrales y todos los consumidores acuden al mercado liberalizado, las empresas, junto con la
Administración, buscan sistemas variados de apoyos para aquellos clientes desfavorecidos
(ayudas directas al consumo, subvenciones a la eficiencia energética –como iluminación o
aislamiento, etc.). Estos sistemas se engloban bajo el concepto de “fuel poverty” o “pobreza
energética” según la traducción de la Directiva, y se aplican a todos aquellos consumidores que
dedican más del 10% de su renta al consumo energético (gas y electricidad).

En Italia existe una medida similar para los consumidores de electricidad, que se puso en marcha
a en enero de 2016 bajo el nombre de “bonus sociale”. Las principales características del bono
social italiano son:

• 20% de des cuento en el cos te anual de la electricidad y un des cuento del 15% en el coste
anual del gas .

• E s financiado a través de los pres upues tos es tatales, as í como mediante impuestos
incluidos en las facturas de energía.

• T odas las compañías ofrecen el “bonus sociale” por tanto todos los us uarios pueden
cambiar de compañía s in perder la ayuda.

• Alrededor de un millón de familias s e pueden acoger a es te tipo de ayudas y 24.000


pers onas con problemas fís icos .

E n P ortugal, los cons umidores económicamente vulnerables s on s uminis trados por el


comercializador de último recurs o a una tarifa regulada por el regulador nacional E R S E ,
habiéndos e cons iderado cons umidores económicamente vulnerables los que tengan derecho a
alguna de las s iguientes pres taciones s ociales : pens ión s ocial de invalidez, familia numeros a de 1ª
categoría, s ubs idio s ocial de des empleo, renta s ocial de ins erción y complemento s olidario para
pers onas de edad avanzada. E s un des cuento en la factura que s e aplica exclus ivamente para los
contratos de s uminis tro de electricidad (descuento de 33,8%) y gas natural (des cuento de 31,2%)
en viviendas , de us o permanente y con unos límites (en el cas o de la electricidad de una potencia
contratada hasta 4,6 kW , y en el cas o del gas de un cons umo anual has ta 500 m3). Los
comercializadores en régimen de mercado también es tán obligados a efectuar un des cuento fijado
por el G obierno a los colectivos anteriormente indicados mediante lo que s e denomina AS E C E ,
que corres ponde a Apoyo S ocial E xtraordinario al C ons umidor de E nergía.

E n F rancia, des de marzo de 2012, s e aplican de forma automática las denominadas tarifas
s ociales T P N-T arifa de P rimera Neces idad para el s uminis tro de electricidad, y T S S -T arifa
E s pecial de S olidaridad para el s uminis tro de gas natural. Ambas s e aplican para la vivienda
principal y la T S S también para edificios res idenciales con calefacción central de gas natural. Los

159
E lectricidad
5.
C omercialización

cons umidores con derecho a estas tarifas s on aquellos cuya s ituación de precariedad está
reconocida por la Administración y son beneficiarios de ayudas especiales (CMU-C Couverture
Maladie Universelle Complementaire, ACS Aide pour una Complementaire de Santé), con un
límite máximo de renta que es función del número de personas en el hogar. Según los datos
publicados por el regulador CRE, la situación en mayo de 2013 es la siguiente:

• E n el s uminis tro de electricidad s e aplica un descuento en los primeros 100 kW h al mes ,


en función del número de pers onas en el hogar, y con un tope anual entre 71 y 140 €/año,
s egún los cas os .

• E n el s uminis tro de gas natural s e aplica un des cuento fijo, en función del número de
pers onas en el hogar y el tramo de cons umo anual, entre 22 y 156 €/año. P ara inmuebles
con calefacción central el beneficiario de la T S S recibe un cheque individual de 119 €/año,
en el cas o de más de una pers ona en la vivienda.

E n Alemania, el bono social aplica a todos los hogares , que, bajo criterio de exclus ión s ocial,
percibe una renta anual inferior a los 12.000€. La s eguridad s ocial y el Minis terio de trabajo,
entidades encargadas de financiar el bono s ocial, otorgan a estos hogares una ayuda de hasta
400€ anuales .

E n G recia, ocurre algo similar a Alemania, s iendo las familias con rentas inferiores a 12.000€ las
que pueden percibir el bono s ocial. E n este cas o, en vez de recibir una ayuda económica, reciben
un des cuento de has ta el 42% del cons umo anual, pero con un límite s uperior que no pueden
rebas ar. La entidad que encargada de financiar el bono s ocial es del G obierno, práctica común en
muchos país es europeos .

160
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6. E l mercado mayoris ta

6.1. F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad

Secuencia de mercados. El mercado de electricidad en España, al igual que en otros países, se


organiza en una secuencia de mercados en los que generación y demanda intercambian energía y
reservas para distintos plazos (Figura 6-1).

tiempo

Antes del Mercado Gestor Producto


despacho Mercado de contratos Contratos a plazo Mercado a
(hasta D-1) bilaterales OTC, OMIP físicos financieros plazo

Mercado del día anterior Energía horaria


Mercado
Figura 6-1. OMIE diario
Secuencia de Restricciones técnicas y por
Día anterior Mercado de Restricciones REE
garantía de suministro
mercados en el al despacho
(D-1)
mercado ibérico de Mercados de SSCC:
Reserva Secundaria Secundaria: MW
electricidad (MIBEL). REE Terciaria: MWh
Reserva Potencia Subir

Mercados de
Intradiarios OMIE Energía Horaria corto plazo
Fuente: Elaboración
propia. Día del Gestión de desvíos y
despacho restricciones técnicas en
(D) tiempo real
REE Energía a subir y bajar
Restricciones técnicas tras
intradiarios
Reserva Terciaria

Días, semanas, meses e incluso años antes del momento en que la energía sea generada
y consumida, los agentes intercambian contratos con períodos de entrega de distinta duración
(anual, trimestral, mensual, etc.). Estas transacciones se realizan en los llamados mercados a
plazo (ver Formación de precios en los mercados mayoristas a plazo de electricidad).

Al llegar al día D-1 (un día antes de que la energía sea generada y consumida), los agentes
intercambian energía para cada una de las horas del día D en el mercado diario organizado por el
Operador del Mercado Eléctrico (OMIE). Además, ya dentro de las 24 horas anteriores al
momento de generación y consumo, los agentes pueden ajustar sus posiciones contractuales
comprando y vendiendo energía en los mercados intradiarios, también gestionados por el OMIE
(ver Mecanismos de ajuste de demanda y producción).

En el muy corto plazo (desde unas pocas horas hasta unos pocos minutos antes de la generación
y consumo) los generadores, y en algunos casos también la demanda, ofrecen una serie de
servicios al Sistema en varios mercados organizados por el Operador del Sistema (REE). Estos
servicios son necesarios para que la generación iguale exactamente a la demanda en todo
momento, manteniendo así al Sistema en equilibrio físico y con un nivel de seguridad y calidad de
suministro adecuado (ver Mecanismos de ajuste de demanda y producción).

¿En qué consiste el mercado diario de electricidad? El mercado diario está organizado de
acuerdo con lo dispuesto en la Ley 54/1997 y Ley 24/2013 (Ley del Sector Eléctrico). Sus reglas
de funcionamiento están recogidas en las Reglas de Funcionamiento del Mercado de
Producción. 170 E s tá ges tionado por OMIE , entidad privada cuya principal función es llevar a cabo

170
R es olución de la S ecretaría G eneral de E nergía de 24/05/2006 (más información en OMIE ).

161
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

la ges tión del mercado y garantizar que la contratación en el mis mo s e lleva a cabo en
condiciones de trans parencia, objetividad e independencia. 171

E l mercado diario s e celebra el día anterior al de la entrega de la energía y en él compradores y


vendedores intercambian energía para cada una de las horas del día s iguiente. As í, en es te
mercado en realidad hay 24 productos diferentes (energía en cada una de las 24 horas del día
s iguiente). 172 E s quemáticamente s e repres enta en la F igura 6-2.

• Los vendedores (generadores , importadores , “traders”, otros intermediarios) presentan


ofertas de venta y los compradores (comercializadores, consumidores finales,
exportadores, “traders”, otros intermediarios) presentan ofertas de compra a OMIE para
cada hora del día siguiente.

• Con estas ofertas, OMIE construye las curvas de oferta y demanda de cada hora del día
siguiente.

• Del cruce de las curvas de oferta y demanda resulta el precio del mercado para cada hora
del día siguiente y se identifican las ofertas “casadas” (las ofertas de venta y de compra
que se convierten en compromisos firmes de entrega de energía).

1. Los agentes envían a


3. OMIE cruza oferta y demanda:
OMIE sus ofertas para 2. OMIE construye las curvas de oferta y
precio de mercado horario (PMh)
cada hora del día siguiente demanda para cada hora
y ofertas casadas
(cantidad y precio)

Precio [€/MWh]
Precio [€/MWh]
Figura 6-2. Agente 1 Oferta de venta
Curva de oferta
para Hora 1

Esquema del
Vendedores

Cantidad PM 1
Agente 2 Curva de demanda
Hora 1 [MWh]
funcionamiento del Precio [€/MWh]
para Hora 1

Cantidad

mercado diario de Ofertas de [MWh]


compra Ofertas de compra
Agente n
OMIE. Cantidad
[MWh]
y venta casada en
la Hora 1

Fuente: Elaboración
Agente 1
propia. Precio [€/MWh]
Curva de oferta

Compradores

Oferta de venta
Agente 2 para Hora 24

Hora 24 PM 24

Curva de demanda
para Hora 24

Agente m Ofertas de … Cantidad


[MWh]
compra
Ofertas de compra
y venta casada en
Oferta de venta
OMIE la Hora 24
Oferta de compra

¿Que son las ofertas de venta de energía en el mercado diario? En general, existen dos tipos
de mercados en función de cómo se forma el precio en los mismos:

171
Desde 2007, el mercado diario se ha integrado formalmente en la estructura del Mercado Ibérico de Electricidad (MIBEL) en virtud
de los acuerdos entre los gobiernos español y portugués para el desarrollo progresivo de un mercado único de electricidad en España
y Portugal. Esto significa que los agentes españoles y portugueses realizan sus ofertas en un mismo mercado.
172
El hecho de que la energía no sea almacenable hace que en realidad el producto sea “energía en un instante concreto”. Sin
embargo, con esta definición “exacta” resultarían infinitos productos, lo cual en la práctica no es posible. Así, es necesario un
compromiso entre “lo exacto” y “lo realista”. En el caso español, este compromiso se concreta en establecer la hora como unidad
temporal mínima de intercambio, con lo que el número de productos s e limita a 24 (cada una de las horas del día).

162
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• Mercados “pay as bid”, en los que un generador recibe exactamente el precio que él ha
ofertado.

• Mercados marginalistas, en los que todos los generadores casados reciben un mismo
precio, el cual se determina por el cruce de las curvas de oferta y demanda.

A pesar de las diferencias en cuanto a cómo se forma el precio, la teoría económica muestra que
en ambos tipos de mercados (“pay as bid” y marginalistas) se obtienen los mismos resultados (es
decir, mismos precios y cantidades) siempre que funcionen correctamente.

En España, el mercado diario pertenece al tipo marginalista. En este tipo de mercados, la oferta
de un generador representa la cantidad de energía que está dispuesto a vender a partir de un
cierto precio mínimo. Así, las ofertas competitivas de un generador reflejan:

• En cuanto a la cantidad, las restricciones físicas a las que está sujeta su instalación (por
ejemplo, la potencia disponible, la potencia mínima a la que ha de operar la central para
que la misma sea estable y segura o mínimo técnico, la disponibilidad de combustible o de
producible hidráulico, la rapidez con la que pueden incrementar su producción entre una
hora y la siguiente, etc.). Es importante destacar que las Reglas del Mercado obligan a las
instalaciones de generación a ofertar toda su capacidad disponible a lo largo de toda la
secuencia de mercados (Figura 6-1).

• En cuanto al precio ofertado, éste refleja el coste de oportunidad que le supone generar
electricidad:

 Los cos tes en los que evitaría incurrir de optar por no producir (p.ej., cos te de
arranque de la central, cos te variable de operación y mantenimiento as ociado a la
producción, etc.).

 Los ingres os a los que renuncia por el hecho de producir (p.ej., para una central
térmica generar s upone renunciar a revender a un tercero el combustible y los
derechos de emis ión de C O 2; para una hidráulica con embals e, utilizar el producible
hidráulico “ahora” s upone renunciar a utilizar es a mis ma agua en otro ins tante
futuro en el que el precio es perado del mercado s ea mayor), es decir, el cos te de
oportunidad.

E s importante resaltar que cos te de oportunidad no es lo mismo que cos te variable. B ajo un
comportamiento racional y eficiente, las ofertas de los generadores no deben reflejar s us cos tes
variables s ino los de oportunidad173. E s to es fácil de entender mediante los siguientes ejemplos :

• P ara un generador térmico, el cos te del combustible es un cos te variable. S i el generador


puede revender dicho combustible a un tercero, entonces cons umir dicho combustible
tiene un cos te de oportunidad que deberá incorporar en s u oferta al mercado eléctrico.
E s te cos te de oportunidad no es el precio al que s e adquirió el combustible, s ino el precio
al que puede revenderlo (s i exis te un mercado para el combus tible, el precio del
combustible en dicho mercado en el momento en que es cons umido para producir
173
E n un mercado “pay as bid” los generadores también ofertan su cos te de oportunidad, aunque és te es ligeramente diferente.
E fectivamente, el coste de oportunidad en un mercado “pay as bid” es igual al máximo entre a) el precio es perado del mercado
eléctrico, y b) la oferta que la misma central haría en un mercado marginalista (s uma de los cos tes que s e evitarían de no producir y de
los ingres os a los que renuncia por producir). E sto es debido a que no tendría s entido vender s u producción a un precio menor al de
mercado. As í, el precio de mercado es perado es el mismo en un mercado marginalista que en un “pay as bid”, pues funcionan las
mismas centrales , con los mismos costes de operación, etc. P or ello, aunque las ofertas de las centrales s ean diferentes, el precio que
recibe y la cantidad que produce cada central es el mismo en un mercado marginalista que en un mercado “pay as bid”.

163
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

electricidad). P or el contrario, s i el generador no tiene la pos ibilidad de revender el


combustible a un tercero (p.ej., por cláus ulas res trictivas en el contrato de
aprovis ionamiento), entonces dicho combus tible no s upondrá cos te de oportunidad alguno
y, por tanto, no debería incorporarlo en s u oferta al mercado eléctrico.

• P ara un generador hidráulico con embals e, consumir el agua para producir electricidad no
s upone cos te variable alguno, pero s í un coste de oportunidad. E sto es as í porque, gracias
al embals e, el generador tiene la pos ibilidad de cons umir el agua en otro ins tante futuro en
el que el precio del mercado s ea mayor. Luego, aunque el cos te variable del agua es nulo,
no lo es s u coste de oportunidad (igual al precio es perado del mercado eléctrico en un
horizonte de pos ible utilización del agua), el cual el generador incorporará en s u oferta al
mercado eléctrico.

De hecho, el que los agentes construyan s us ofertas a partir de s us costes de oportunidad es lo


que hace que el mercado s ea un mecanis mo de as ignación eficiente (es decir, utilización óptima
de los recurs os dis ponibles ). E sta as ignación eficiente no s e lograría s i las ofertas reflejaran los
cos tes variables .

S in embargo, en ocas iones s e aducen equivocadamente problemas de competencia debido a la


confus ión entre los conceptos de coste variable y cos te de oportunidad. E fectivamente, para
evaluar s i la oferta de una central es competitiva, no es correcto compararla con el cos te variable
es timado para dicha central. C omo s e ha explicado, la oferta competitiva de un generador s erá
aquella que refleje s u cos te de oportunidad, ya que es es to lo que hace que el mercado s ea un
mecanis mo de as ignación eficiente. P or tanto, evaluar s i la oferta de una central es competitiva
comparándola con el coste variable es timado de la misma es claramente erróneo.

E s importante des tacar que los generadores no incorporan a s us ofertas al mercado diario s us
cos tes fijos (amortización de la invers ión, parte fija de los costes de operación y mantenimiento,
etc.) al no s er es tos cos tes de oportunidad. E sto es as í porque, en el momento de realizar la
oferta, no exis te la pos ibilidad de evitar incurrir en ellos (s on independientes de que s e genere o
no). E videntemente, es to no s ignifica que los generadores no deban recuperar s us costes fijos . De
hecho, s i la expectativa fuera no recuperarlos , entonces nadie invertiría, lo cual tendría un claro
efecto negativo s obre la s eguridad del s uminis tro (ver S eguridad de s uminis tro).

¿Cómo recuperan los costes fijos? La recuperación de los costes fijos se produce a través de
dos vías complementarias:

Margen del mercado: el margen del mercado es la diferencia entre el precio del mercado recibido
y los costes variables incurridos (como ya se ha expuesto, diferentes de los costes de oportunidad
con los que se construyen las ofertas).

Si los costes fijos se recuperasen únicamente a través de este margen (lo que se conoce como
“mercado de sólo energía”), entonces la capacidad de generación disponible sería
necesariamente menor que la demanda máxima. Esto implica que en unas pocas horas/año:

• Al no haber suficiente capacidad de generación, no todos los consumidores son totalmente


abastecidos.

• El precio del mercado es varios órdenes de magnitud mayor que la oferta de una central de
punta (entre 10.000 y 20.000 €/MWh – ver Contribución del sector eléctrico y gasista a la
sociedad), ya que reflejaría el valor que para los consumidores tiene la disponibilidad de
suministro eléctrico (Tabla 6-1).

164
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

E s pos ible que para un regulador no s ea aceptable tener un cierto número de horas al año en las
que a) no todos los consumidores s on abas tecidos y b) el precio del mercado es muy elevado. E n
es te cas o, y con el objetivo de reducir (o inclus o eliminar) el número de horas al año en las que
hay déficit de capacidad y precios muy elevados , el regulador puede optar por introducir pagos por
capacidad

Posible equilibrio: Exceso de


Posible equilibrio: Déficit de Capacidad
Capacidad
En situación de oferta máxima y demanda máxima
• Al s er s iempre oferta > demanda, • E n las horas del año de mayor demanda no
todos los cons umidores podrán s er todos los cons umidores podrán s er totalmente
abastecidos todas las horas del año abastecidos ; habrá “competencia” entre ellos
T abla 6-1. En un (incluso en aquellas horas de mayor por no s er los que se queden s in s uminis tro
demanda) • E s ta competencia hace que el precio del
“mercado de sólo
• As í, en las horas de demanda alta el mercado incremente has ta el valor que los
energía”, ¿cuál es precio del mercado lo fijará la oferta de cons umidores dan a la energía: varios órdenes
el equilibrio, las centrales de punta de magnitud mayor que la oferta de una
• La oferta de una central es igual a s u central de punta
exceso o déficit de cos te de oportunidad, el cual no • Luego en es tas horas una central de punta
capacidad? incluye su cos te fijo obtiene un margen con el que recuperar s u
• Luego s i s iempre oferta> demanda, cos te fijo. S e puede demos trar
entonces las centrales de punta no matemáticamente que es te margen es
Fuente: Elaboración recuperarán sus cos tes fijos neces ario para que cualquier central (incluso
propia. • De hecho, s e puede demos trar las de bas e) recupere su cos te fijo
matemáticamente que ninguna central • P ara recuperar la totalidad del coste fijo s on
(incluso las de bas e) recuperarán sus neces arias un cierto número de horas /año en
cos tes las que demanda > oferta, el cual viene dado
• Ante la expectativa de no recuperar los por la relación (coste fijo de una central de
cos tes fijos , nadie invertirá en nueva punta) / (valor que los consumidores dan a la
capacidad de generación. Dado que la energía)
demanda s eguirá creciendo, • Luego habrá invers ión en nueva capacidad de
irremediablemente s e pas a de E xces o generación pero manteniendo el número de
de C apacidad a Déficit de horas al año en las que demanda > oferta
C apacidad…(ver parte derecha) neces ario para recuperar el cos te fijo
Por tanto, en un “ mercado de sólo energía” inevitablemente habrá un Déficit de
Capacidad

P agos por capacidad: los pagos por capacidad s on ingres os regulados que reciben todos los
generadores y que s e determinan a partir del cos te fijo de una central de punta. E ste pago reduce
la parte de coste fijo que las centrales han de recuperar mediante el margen del mercado, lo que
hace que:

• E l número de horas al año de déficit de capacidad neces arias para recuperar el cos te fijo
s ea menor (relación entre el coste fijo neto del pago por capacidad y el precio de es cas ez).

• La invers ión en nueva capacidad de generación s erá mayor, al habers e reducido el


número de horas al año de déficit de capacidad neces aria para recuperar el cos te fijo.

Adicionalmente, en algunos mercados exis te un tope al precio del mercado impuesto por el
regulador. E n el cas o del mercado es pañol, dicho tope exis te y tiene un valor de 180 €/MW h (no
s e pueden realizar ofertas por encima de este valor). Dado que al exis tir este tope el precio no
puede llegar a reflejar la es cas ez, el pago por capacidad ha de elevars e con el objetivo de cubrir la
diferencia entre el tope y el precio de es cas ez. E n cas o contrario, no será pos ible recuperar los
cos tes fijos, lo que hará que s e detraiga la inversión has ta que en el mercado haya un número de

165
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

horas de déficit de capacidad (en las que el precio s erá igual al tope) tal que permita la
recuperación de los cos tes fijos. E videntemente, es to implica una menor s eguridad de s uminis tro
(ver S eguridad de s uminis tro).

E n el extremo, s i el pago por capacidad fuera exactamente igual al coste fijo de la central de punta
(es decir, todo el coste fijo s e recuperara con el pago por capacidad), entonces :

• No s ería neces aria ninguna hora de déficit de capacidad, ya que el precio del mercado lo
fijaría s iempre el cruce entre la oferta y la demanda, inclus o con valores muy elevados de
precios .

• Dado que la recuperación del coste fijo estaría as egurada, habría una fuerte dis pos ición a
invertir, res ultando eventualmente un s ignificativo exces o de capacidad, s iendo incluso
neces ario que el regulador impus iera limitaciones a la cons trucción de nueva capacidad de
generación (ver S eguridad de s uminis tro).

Agregación de ofertas de venta: la curva de oferta. Una vez que los vendedores han
presentado sus ofertas al mercado para cada una de las horas del día siguiente, OMIE las agrega
y ordena por precio ascendente, resultando así la curva de oferta del mercado para cada hora
(Figura 6-3).

Esta curva refleja los tramos o escalones que corresponden a ofertas de centrales de la misma
tecnología. A la vista de ella, es importante resaltar nuevamente que las ofertas de los vendedores
reflejan sus costes de oportunidad, y no sus costes totales o variables, de ahí que:

• Las centrales hidráulicas fluyentes o nucleares, pese a sus altos costes fijos, aparecen en
la parte baja de la curva al ser su coste de oportunidad muy bajo.

• Las centrales hidráulicas regulables aparecen en la parte alta de la curva, ya que su coste
de oportunidad es muy alto (tienen la opción de reservar el agua para producir en un
instante futuro en el que el precio del mercado sea alto).

166
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Precio [€/MWh]
Centrales de punta (fuelóleo)
y otras obsoletas; hidráulicas
Carbón y ciclos regulables
combinados menos
competitivos, hidráulica
regulable, etcétera

F igura 6-3. La curva Carbón y ciclos


de oferta de combinados más
competitivos
electricidad del
mercado. Centrales
nucleares
eólicas,
Fuente: Elaboración hidráulicas
fluyentes
propia.

Cantidad [MWh]

Por otra parte, las ofertas de los generadores en el mercado diario deben cumplir con los
principios de la Ley de Defensa de la Competencia (ver Competencia y poder de mercado). Por
ello, tanto la disponibilidad de las unidades de generación como los precios ofertados por ellas
están sujetos al escrutinio de las instituciones de supervisión del mercado.

En España, la función de velar para que los sujetos que actúan en los mercados energéticos
lleven a cabo su actividad respetando los principios de libre competencia, es ejercida por la
Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia 174. E n cas o de que la C NMC detecte
prácticas restrictivas , és ta tiene potestad para actuar en el conflicto e imponer s anciones.

La demanda de energía eléctrica en el mercado diario. Los consumidores finales suelen


clasificarse en función de la magnitud de su consumo y del fin para el que utilizan la energía. Se
suele distinguir entre grandes consumidores industriales (por ejemplo, las grandes industrias –
metalúrgica, cerámica, etc. – o el transporte ferroviario), consumidores de tamaño medio en
sectores industriales y de servicios y, finalmente, pequeños consumidores conectados a las redes
de baja tensión (como los domésticos y los pequeños negocios) (ver El mercado minorista de
energía eléctrica).

La demanda de energía eléctrica de los distintos tipos de consumidores depende, en el corto


plazo, fundamentalmente de dos factores: (a) si el día es laborable o festivo, y (b) las condiciones
ambientales. 175

La participación de los distintos tipos de consumidor en el mercado depende de la modalidad de


suministro a la que estén acogidos (”Suministro de referencia” o “mercado liberalizado” – (ver El
suministro de referencia).

174
ver Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
175
Cuando el plazo de tiempo se alarga, aparecen otros factores determinantes de la demanda eléctrica, como los cambios en los
equipamientos de los consumidores o la coyuntura económica nacional.

167
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• B ajo la modalidad de S uminis tro de referencia (actualmente s ólo accesible a potencias


contratadas iguales o menores de 10 kW ), los cons umidores participan indirectamente en
el mercado – lo hacen a través del comercializador de referencia que hayan es cogido. E s te
es el agente encargado de es timar la demanda de s us cons umidores y,
cons ecuentemente, realizar en el mercado las ofertas de compra de energía que s ean
precis as .

• La mayoría de los cons umidores en el mercado liberalizado participan indirectamente en el


mercado – lo hacen a través de s u comercializador. É ste ofrece unos precios (fijos o
s emifijos) adaptados a las preferencias de cada cons umidor.

Al igual que en el cas o de la curva de oferta, la curva de demanda también tiene tramos en los
que indirectamente s e agrupan determinados tipos de cons umidores , como muestra la F igura 6-4.

• Los comercializadores de referencia y muchos comercializadores s uelen ofertar al máximo


precio permitido (180 €/MW h). La razón de es te proceder es as egurar que los
cons umidores tendrán la energía que demandan (es decir, as egurar que s erán
abas tecidos ). E videntemente, esto no s ignifica que pagarán dicho precio, pagarán el que
res ulte de la cas ación en el mercado.

• Una parte limitada de los cons umidores s ólo están dis puestos a tomar energía s i s u precio
es menor o igual a un cierto valor (el cual reflejan en s us ofertas al mercado). S on és tos
cons umidores que tienen la pos ibilidad de adaptar s u cons umo a los precios del mercado
(p.ej., algunos cons umidores industriales o generadores hidráulicos de bombeo cons umen
electricidad preferentemente en los períodos de precios bajos). E n la curva de demanda
del mercado, estos cons umidores (directamente o a través de s u comercializador)
repres entan la parte de la curva con una cierta pendiente.

F igura 6-4. La curva


de demanda de
electricidad del
mercado.

Fuente: Elaboración
propia.

¿Cómo se determina el precio del mercado diario? Casación. El precio del mercado para la
hora h del día D se determina por la intersección de la curva de oferta y demanda de electricidad
del mercado para esa hora. Este precio determina las ofertas de compra y de venta que resultan
casadas (es decir, la energía que se intercambiará finalmente al precio del mercado). En cada

168
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

hora, todas las ofertas de venta (compra) que res ulten cas adas reciben (pagan) el precio del
mercado.

La F igura 6-5 mues tra un ejemplo de las cas aciones de oferta y demanda que lleva a cabo
diariamente el OMIE para cada hora del día s iguiente.

200
180
F igura 6-5. E jemplo 150
Ofertas de compra
y de venta casadas
de determinación del
Precio [€/MWh]

precio en el 100
mercado diario.
50
Fuente: OMIE.
0
1.000 2.000 4.000 Energía[MWh]

Oferta de venta Oferta de compra

Desde julio de 2007, el mercado diario que gestiona OMIE se desarrolla para todo el mercado
ibérico (España y Portugal, peninsulares). Esto significa que en el mismo mercado diario (e
intradiarios) participan las unidades de producción y de consumo tanto portuguesas como
españolas. El método de casación descrito anteriormente es totalmente válido, resultando, con
carácter general, en un único precio para todo el sistema ibérico y un flujo de energía entre ambos
países.

En el caso de saturación de la interconexión España-Portugal en cualquiera de los sentidos, se


ejecuta la “separación de mercados” (o “market-splitting”), que consiste básicamente en hacer dos
casaciones separadas, una para los agentes portugueses y otra para los agentes españoles,
teniendo en cuenta la cantidad máxima de energía que puede intercambiarse entre ambos
sistemas y resultando en un precio distinto para cada uno de los dos países. Estas limitaciones
han ido disminuyendo en los últimos años fruto del esfuerzo inversor en la conexión internacional
entre España y Portugal con el objetivo de crear un mercado único entre ambos países, y de la
progresiva homogeneización de los parques de generación.

Tabla 6-2.
Diferencia de Precio [€/MWh]
precios media anual 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016
entre España y 42,1 37,0
España 64,43 36,96 49,93 47,23 44,26 42,13 50,32 39,67
9 1
Portugal. 52,1 37,3
Portugal 69,98 37,63 50,45 48,07 43,65 41,86 50,43 39,44
7 3
Fuente: OMIE y Diferencia -9,98 -5,55 -0,67 -0,32 -0,52 -0,84 0,61 0,27 -0,11 0,23
elaboración propia.

Actualmente el acoplamiento del precio de ambos mercados es cas i total como puede vers e en la
T abla 6-2), s iendo el s aldo neto, importador, con P ortugal de 7,020 T W h en 2016 176.

Des de el 13 de mayo de 2013, el mercado diario del MIB E L es tá acoplado en precios con el de
centro-norte de E uropa. E s to s upone que el MIB E L utiliza el mis mo algoritmo para res olver la
cas ación (“E uphemia”) y que la capacidad de interconexión E s paña-F rancia, comercialmente

176
V er informe de precios 2016. OMIE

169
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

dis ponible de acuerdo a los Operadores del S is tema (R E E y R T E ), s e as igne de forma implícita en
dicho mercado.

170
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.2. F ormación de precios en los mercados mayoris tas a plazo de


electricidad

¿Qué es un mercado a plazo? El mercado de electricidad en España, al igual que en otros


países, se organiza en una secuencia de sucesivos mercados en los que generación y demanda
intercambian energía para distintos plazos (Figura 6-6).

tiempo
Mercado Gestor Producto
Antes del Mercado de contratos Contratos a plazo
despacho OTC, OMIP
bilaterales físicos financieros Mercado a
(hasta D-1) Subastas suministro de plazo
Figura 6-6. OMEL Contratos financieros
último recurso (CESUR)
Secuencia de Mercado del día
OMEL Energía horaria
Mercado
anterior diario
mercados en el Día
Mercado de Restricciones técnicas y
mercado eléctrico anterior al Restricciones
REE
por garantía de suminist.
despacho
ibérico. (D-1)
Mercados de SSCC:
Secundaria: MW
Reserva Secundaria REE Terciaria: MWh
Fuente: Elaboración Reserva Potencia Subir

propia. Mercados de
Intradiarios OMEL Energía Horaria corto plazo
Día del
despacho Gestión de desvíos y
(D) restricciones técnicas
en tiempo real
REE Energía a subir y bajar
Restricciones técnicas
tras intradiarios
Reserva Terciaria

Los mercados a plazo de electricidad son un conjunto de mercados en los que con años, meses,
semanas o días de antelación a la entrega física de la energía, se intercambian contratos de
compra-venta de electricidad con plazos de entrega superiores a 24 horas (semanas, meses,
trimestres, años, etc.).

Al llegar el día anterior al despacho de las centrales/entrega física de la energía (D-1), los agentes
intercambian energía para el día D (ver Formación de precios en el mercado mayorista diario de
electricidad).

En el muy corto plazo (dentro de las 24 horas anteriores al momento de la entrega física de la
energía), existen otros mercados en los que los agentes (generadores, comercializadores, etc.)
pueden ajustar sus posiciones contractuales y en los que los generadores (y en algunos casos
también la demanda) ofrecen una serie de servicios de gestión técnica al sistema (ver
Mecanismos de ajuste de demanda y producción).

En el largo y medio plazo, los agentes intercambian diferentes tipos de contratos, con periodos de
entrega de distinta duración (año, trimestre, mes, etc.) y en diversos mercados a plazo:

• C ontratos bilaterales adaptados a las neces idades de los agentes, compradores y


vendedores , y con entrega fís ica de la energía o con liquidación financiera. 177
177
La liquidación financiera cons is te en el pago/cobro de la diferencia entre el precio del mercado diario y un cierto precio pactado en el
contrato. No s e produce entrega fís ica de energía. E n realidad, el efecto de un contrato con liquidación financiera es el mismo que el de
un contrato con entrega física. E sto res ulta s encillo de entender con un ejemplo. Imaginemos un agente que quiera comprar a plazo
energía a recibir dentro de 1 mes :
a) Si lo hace con un contrato con entrega física, obtendrá la energía física dentro de un mes al precio fijado en el contrato (p.ej., 50
€/MWh).

171
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• C ontratación de productos es tandarizados a través de mercados organizados , s ubas tas


organizadas o el conocido como “over the counter” (OTC). Este último no está organizado
ni estandarizado y en él los agentes cierran transacciones a través de
intermediarios/brokers, pudiendo estos ser físicos ó virtuales (p.ej., plataformas de trading
basadas en internet).

El papel de un mercado a plazo. Los mercados a plazo cumplen un papel crucial en un mercado
liberalizado desarrollado. Efectivamente, cuando son suficientemente profundos y líquidos, 178
permiten a los agentes compradores y vendedores gestionar sus riesgos , al tiempo que facilitan la
competencia en los mercados mayoris ta y minorista.

• A modo de ejemplo, un comercializador deberá adquirir energía para abastecer a s us


clientes . E n aus encia de mercados a plazo profundos , tendrá que adquirir es ta energía en
el mercado diario, cuyo precio es des conocido en el momento de ofertar a s us clientes.
As í, es tará expues to al ries go de que el precio en el mercado diario res ulte más elevado
que el que cons ideró a la hora de ofertar a s us clientes , corriendo por tanto el riesgo de
incurrir en pérdidas .

S in embargo, s i el comercializador contrata


la energía que prevé neces itar por Los mercados a plazo cumplen
adelantado y a un precio cerrado, podrá un papel crucial en un mercado
reflejar en s us ofertas no s us costes liberalizado desarrollado. C uando
es timados, s ino aquellos en los que
realmente incurrirá. De es ta forma elimina el s on s uficientemente profundos y
ries go de incurrir en pérdidas debidas a líquidos, permiten a los agentes
errores en la es timación del precio del compradores y vendedores
mercado (lo que s e conoce como riesgo de
precio).
ges tionar s us ries gos , al tiempo
que facilitan la competencia en
As í, un mercado a plazo s uficientemente los mercados mayoris ta y
profundo y líquido a) facilita la cobertura de minorista.
ries go, y b) facilita la entrada de nuevos
competidores al reducir la expos ición al
ries go.

• Des de el punto de vis ta de los generadores, el mercado a plazo también es relevante


debido a las mis mas razones . E fectivamente, un mercado a plazo s uficientemente
profundo y líquido a) facilita la cobertura de riesgos (para un generador, el riesgo as ociado
a la volatilidad de s us ingres os – fijar el precio al que vende s u producción), y b) facilita la
entrada de nuevos competidores al reducir la expos ición al riesgo.

b) S i lo hace con un contrato financiero, lo que recibirá dentro de un mes es la diferencia entre el precio del contrato (50 €/MW h) y el
precio del mercado diario en el momento de liquidar el contrato. S i, p.ej., el precio del mercado diario es de 55 €/MW h, entonces
recibirá 5 €/MW h. E n cualquier cas o, no recibe energía alguna, por lo que, de neces itarla, tendrá que comprarla en el mercado diario.
Lo que pagará por es ta energía s erán los 55 €/MW h, que res tando los 5 €/MW h recibidos del contrato financiero, res ulta en un cos te
total de 50 MW h – lo mismo que con el contrato con entrega física de la energía.
178
A los efectos de esta nota:
a) Un mercado s e dice que es profundo cuando la oferta / demanda de producto es lo s uficientemente amplia como para que los
agentes que acuden a él no s e encuentren con limitaciones s ignificativas res pecto a la cantidad que pueden comprar / vender.
b) Un mercado s e dice que es líquido cuando un agente puede comprar o vender cantidades s ignificativas del producto s in alterar
indebidamente el precio del mismo.

172
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• Adicionalmente, los mercados a plazo también res ultan interes antes para cons umidores
que adquieran la energía directamente en el mercado, ya que les permiten es tabilizar los
pagos por la misma. Normalmente, la contratación a plazo s e la ofrece un comercializador,
quien, gracias a es pecializars e en la gestión de riesgos energéticos , puede ofrecer una
cobertura de precios más interes ante que la que normalmente pueda obtener un
cons umidor por s í mis mo. 179

E s importante tener en cuenta que contratar a plazo no tiene por qué s ignificar precios más bajos
que los que res ultarían de adquirir la energía en el mercado diario. E fectivamente, contratar a
plazo s implemente es una manera de fijar un precio con el que el comprador y el vendedor s e
encuentran confortables de cara al futuro, de manera que s e es tabilizan los flujos de
pagos/cobros . As í, podría s uceder que, llegado el momento de la entrega, el precio del mercado
diario s ea s uperior al pactado en el contrato a plazo. E n es e cas o, el comprador habrá s acado
más ventajas de la contratación que el vendedor, aunque podría haber ocurrido exactamente lo
contrario. Lo que es importante es que: a) en el momento de la contratación a plazo, el precio
complacía las previs iones de ambas partes, y b) la eliminación del ries go de precio de las dos
partes induce ventajas para ambos .

¿Qué mercados a plazo hay en España? Los mercados a plazo de electricidad en España son
los siguientes:

• El mercado no organizado de contratos bilaterales (conocido como OTC), en el que se


negocian contratos físicos y financieros.

• El mercado organizado de futuros eléctricos gestionado por OMIP. 180

Cada uno de estos mercados está caracterizado por distintos grados de organización
(estandarización de contratos, gestión centralizada por una entidad independiente, cámara de
compensación, etc.).

• El mercado de contratos bilaterales físicos es un mercado no organizado en el que los


agentes compradores (principalmente comercializadores y consumidores finales) y
vendedores (principalmente generadores) intercambian bilateralmente contratos diseñados
en función de sus necesidades. En este mercado se intercambia actualmente un
porcentaje relativamente bajo de contratos.

• El mercado financiero OTC es otro mercado no organizado en el que los agentes


intercambian, a través de intermediarios o brokers, contratos con liquidación financiera
diseñados en función de sus preferencias y sin someterse a reglas de
participación/negociación distintas de las que ellos mismos imponen.

179
Adicionalmente, el coste de la propia gestión de riesgos realizada por un comercializador será con toda probabilidad menor que el
coste que asumiría un consumidor de realizarla por sí mismo. Esto es debido a la existencia de economías de escala y alcance en el
caso del comercializador. Así, resulta más eficiente que la gestión de riesgos sea realizada por un comercializador (el margen que
cargará al consumidor por realizar la gestión será menor que el coste en que el consumidor incurriría de realizarla por sí mismo).
180
Ver OMIP.

173
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Volumen negociado
en mercado a
plazo [TWh]

F igura 6-7. V olumen 2011 10.6% 8.7% 1.1% 79.7% 318

anual de electricidad
2012 11.9% 9.9% 3.2% 75.0% 282
negociado en los
mercados a plazo. 2013 11.2% 10.4% 9.1% 69.3% 370

Fuente: CNMC, 2014 10.7% 14.2% 10.3% 64.8% 317


Informe de
seguimiento de 2015 10.2% 19.4% 15.3% 13.7% 41.4% 157

mercados a plazo de
energía, 2017. 2016 10.1% 3.8% 18.5% 12.2% 32.7% 22.8% 198

2017 6.1% 3.7% 10.7% 14.0% 40.2% 25.2% 107

OMIP EEX OTC OMI Clear OTC BME Clearing OTC EEX-ECC OTC sin registrar

• E l mercado OMIP es un ejemplo de mercado organizado. E n él la liquidez es facilitada y


garantizada por un conjunto de instituciones que tienden a reducir los costes de
trans acción. E xis ten procedimientos de participación explícitos y conocidos por todos los
participantes, que deben firmar contratos de adhes ión a las R eglas de Mercado aprobadas
por la entidad que ges tiona el mismo.

OMIP , una entidad privada independiente (OMIP ) 181 ges tiona un mercado –de forma s imilar a
como lo hace OMIE en el cas o del mercado diario e intradiario – en el que los contratos es tán
es tandarizados y los participantes s e adhieren a unas reglas determinadas de participación y
negociación). E s te mercado s e ha creado en virtud de los acuerdos entre los gobiernos es pañol y
portugués para el desarrollo progres ivo de un mercado único de electricidad en E s paña y
P ortugal. E l volumen intercambiado en OMIP (contratación continua y s ubas tas ) en 2017 fue de
alrededor de un 6% del total del volumen de energía negociada en los mercados a plazo en dicho
año.

¿Cómo se determina el precio de un mercado a plazo? De acuerdo a la teoría económica, el


precio esperado del mercado diario es el coste de oportunidad de los contratos a plazo, por lo que
el precio del mercado a plazo refleja el precio del mercado diario esperado a futuro. Para facilitar
la comprensión de este concepto, a continuación se presenta el proceso paso a paso:

• Un agente siempre tiene la opción de comprar/vender: a) a plazo o b) en el mercado diario.

• Dado que el mercado a plazo precede al mercado diario, un agente que compra/vende a
plazo está renunciando a hacerlo en el mercado diario.

• Es por esto que los agentes valoran los contratos a plazo en función de los precios
esperados en el mercado diario. Así, en términos económicos, el precio esperado del
mercado diario constituye el coste de oportunidad del mercado a plazo (en cualquier
mercado competitivo el precio refleja el coste de oportunidad marginal de los agentes – ver
Formación de precios en el mercado mayorista diario de electricidad).

181
Ver OMIP.

174
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• As í, dado que el coste de oportunidad en el mercado a plazo es el precio es perado en el


mercado diario, el precio del mercado a plazo refleja el precio es perado del mercado diario.

Y a a nivel operativo, en los mercados a plazo, como en cualquier otro mercado, el precio s e
determina por el cruce entre la curva de oferta (integrada por todas las ofertas que realizan los
vendedores ) y la curva de demanda (integrada por todas las ofertas que realizan los
compradores). E s to s e articula de acuerdo a las reglas particulares de cada tipo/dis eño de
mercado a plazo:

• E n el mercado organizado del OMIP los vendedores y compradores hacen pública s us


ofertas de venta y compra, res pectivamente, en la plataforma electrónica gestionada por el
propio OMIP . C uando algún agente encuentra una oferta interes ante puede cerrar la
trans acción a través de la propia plataforma mediante un procedimiento es tandarizado.

• E n el cas o de los contratos bilaterales fís icos , s on las partes quienes , de forma privada y
únicamente s ujetos a la negociación bilateral, fijan el precio de la energía en el contrato. E l
precio de los contratos financieros OT C s e fija de una forma s imilar, mediante contactos
bilaterales entre las partes a través de un intermediario o broker.

Factores que influyen en el precio del mercado a plazo. Los factores que influyen sobre el
precio del mercado a plazo son aquellos que afectan tanto directa como indirectamente sobre el
precio del mercado diario:

• A la hora de intercambiar energía a plazo, tanto los vendedores como los compradores
realizan previsiones sobre cuál será en el futuro el precio del mercado diario, el cual
depende de factores de oferta (precios de los combustibles y de los derechos de emisión
de CO2, aportaciones hidráulicas, previsión de producción renovable, disponibilidad de las
instalaciones de generación, entrada de nuevas instalaciones de generación, etc.) y de
factores de demanda (crecimiento de la demanda en términos de energía y potencia
máxima, laboralidad, temperatura, etc.) (ver Formación de precios en el mercado mayorista
diario de la electricidad).

• Los agentes preparan sus ofertas de venta y de compra de energía a plazo en función de
las expectativas, que dependen de la evolución esperada de las variables anteriores.
Además, incorporan en sus ofertas una prima de riesgo que refleja la incertidumbre acerca
de sus previsiones y la potencial falta de profundidad y/o liquidez que en un momento dado
pueda haber en el mercado a plazo.

• Para un momento dado, los precios a los que se está intercambiando la electricidad a
distintos plazos se conoce como “curva forward” (o curva a plazo). La curva forward
cambia constantemente, ya que los agentes actualizan de forma continua sus expectativas
sobre la evolución de los precios (al mismo ritmo que cambian las expectativas sobre los
factores que afectan al precio del mercado diario) (Figura 6-8).

175
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

F igura 6-8. Lacurvaforwardconexpectativasalcistas Lacurvaforwardconexpectativasbajistas


La curva Curvaen“Contango” Curvaen“Backwardation”
forward de
Precios[€/MWh] Precios[€/MWh]
precios de la
electricidad. Precio del
mercado
diario en t0
Fuente: Precio del
Elaboración mercado
diario en t0 tiempo t0 +1 t0 +3 t0 +6 t0 +12 tiempo
t0 +1 t0 +3 t0 +6 t0 +12
propia. mes meses meses meses mes meses meses meses

• C uando los agentes esperan condiciones de mercado futuras que darán lugar a precios
más altos en el mercado diario que los que s e obs ervan en la actualidad, curva en
“contango” (debido a una demanda mayor, precios de combus tibles o C O 2 mayores , menor
producción hidráulica y eólica, menor dis ponibilidad de las ins talaciones de generación,
etc.), la curva forward de precios refleja precios a plazo por encima del precio actual del
mercado diario y s uele tener pendiente pos itiva.

• P or el contrario, cuando los agentes es peran condiciones de mercado futuras que darán
lugar a precios más bajos en el mercado diario que los que s e obs ervan en la actualidad,
curva en “backwardation” (debido a una demanda menor, precios de combus tibles o C O 2
menores, mayor producción hidráulica y eólica, mayor dis ponibilidad de las ins talaciones
de generación, etc.), la curva forward de precios a plazo s e s itúa por debajo del precio
actual del mercado diario y s uele tener pendiente negativa.

• La autoridad de competencia o el regulador, la C NMC , s e encargan de s upervis ar que s e


res petan las normas de competencia en los mercados para velar por los interes es de todos
los agentes involucrados . T ambién s upervis a el buen funcionamiento del mercado la
C omis ión E uropea.

176
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.3. Anális is del beneficio del sector eléctrico

¿Las empresas eléctricas españolas tienen beneficios supra-normales? A menudo se


informa en los medios de comunicación que las empresas eléctricas que operan en España
presentan beneficios elevados y crecientes en el tiempo por el desarrollo de sus actividades
eléctricas. Así, estas informaciones generan la percepción entre los consumidores (y también
entre las autoridades reguladoras) de que las empresas eléctricas obtienen rentabilidades muy
elevadas (como si se tratara de rentas de monopolio) por el desarrollo de las actividades eléctricas
en España. (Ver Windfall profits y windfall losses)

Sin embargo, estas noticias sobre los elevados beneficios de las empresas contrastan con la
demanda por parte de éstas de subidas de las tarifas que permitan a) asegurar que se producirá
la inversión necesaria en generación, transporte y distribución para la continuidad del suministro
en los niveles de calidad demandados, y b) resolver la situación estructural de insuficiencia de
ingresos en el sector (ver El déficit tarifario: qué es, consecuencias y solución).

A continuación se analiza la estructura de los negocios del conjunto de las principales empresas
eléctricas con el objetivo de definir las fuentes de los beneficios reportados y de evaluar si los
beneficios que obtienen las empresas por las actividades eléctricas en España pueden ser
calificados como excesivos.
Las principales conclusiones del análisis realizado son las siguientes:

• P ara el conjunto de las empres as , el pes o del negocio eléctrico en E s paña en la cifra de
negocio ha disminuido de forma muy s ignificativa en los últimos años. E n 2016, el 66% de
la cifra de negocio es timada de las principales empres as provenía de los negocios
eléctricos fuera de E s paña y de los negocios no eléctricos .

• De la mis ma forma, el negocio eléctrico es timado en E s paña tiene un pes o cada vez
menor en s us beneficios totales , llegando en 2016 a únicamente el 34%. 182

• As í, el beneficio cons olidado (total) de las empres as no refleja la realidad del negocio
eléctrico en E s paña al es tar dicho beneficio fuertemente afectado por s u progres iva
divers ificación e internacionalización.

• E n cualquier cas o, desde el inicio de la liberalización del s ector, en 1998, s e viene


obs ervando un s ignificativo incremento de los beneficios de las empres as exclus ivamente
procedentes de s us actividades eléctricas en E s paña (tas a de crecimiento compuesta
media anual de 2,7%).

• E s ta evolución de los beneficios s e encuadra en un contexto de fuerte incremento de la


demanda (tas a de crecimiento compues ta media anual de 2% des de el inicio de la
liberalización).

• Atender una mayor demanda requiere la realización de las corres pondientes invers iones ,
tal como refleja la evolución de las mismas por parte de las empres as del s ector eléctrico
en E s paña, las cuales crecieron des de el inicio de la liberalización a una tas a compuesta
media anual de -2%.

182 V er Memoria E s tadística-Informe E léctrico 2015, UNE S A

177
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• La evolución de la rentabilidad obtenida por los negocios eléctricos en E s paña pres enta
valores relativamente estables en torno a un valor medio de 5,2% hasta 2008, aunque con
una tendencia ligeramente decreciente des de el inicio de la liberalización. E s ta tendencia
s e ha mantenido de una manera notable has ta 2015 con un R OA es timado de la actividad
eléctrica nacional de un 3,5%.

• A la vis ta de la evidencia dis ponible no parece correcto concluir que los beneficios de las
empres as por s us negocios eléctricos en E s paña han s ido – o es tán s iendo –
s upranormales .

Cambio de la estructura de negocios. El primer factor a considerar a la hora de analizar los


resultados de las empresas eléctricas españolas tiene que ver con el progresivo cambio de su
estructura de negocios, el cual viene manifestándose desde el comienzo del proceso de
liberalización.

Efectivamente, del análisis de los datos financieros se desprende que la aportación del negocio
eléctrico español (generación, transporte, distribución y comercialización) a la cifra de negocio
total de las empresas es cada vez menor. Como se muestra en la Figura 6-9, en la actualidad el
66% de la cifra de negocio de las principales empresas eléctricas proviene de los negocios
eléctricos fuera de España y de los negocios no eléctricos.

Figura 6-9. 100%


7
Evolución de la 90%
31
estructura de la 80% 37
43 41 40 42
50 52
cifra de negocio de 70% 58 60
66 66
69 69 69 68 71 67
las principales 60%

empresas 50%
93
eléctricas 40%
españolas. 30%
69
63 60
57 59 58
50 48
20% 42 40
Fuente: Memorias 34 31 31 31 32 29
33 34
10%
Estadísticas de
UNESA y 0%
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016
elaboración propia.
Otros negocios Eléctrico nacional

A la vista de esta estructura de negocios, resulta evidente que los beneficios consolidados
(totales) obtenidos por las empresas no reflejan los correspondientes a su negocio eléctrico en
España.

Así, la primera conclusión que se obtiene es que, para realizar el análisis financiero del negocio
eléctrico en España, es incorrecto utilizar las cifras consolidadas de las empresas. Se deben
considerar únicamente las cifras propias del negocio eléctrico nacional, las cuales reflejan una
realidad sensiblemente diferente.

Contribución de los distintos negocios al beneficio. La disminución de la contribución de la actividad


eléctrica en España a la cifra de negocio normalmente debería ir acompañado por una disminución de la

178
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

contribución al beneficio. La F igura 6-10, como era de es perar, expone la relación entre la es tructura de
negocio y la contribución de los distintos negocios al beneficio de las empres as eléctricas es pañolas .

100%
15
90%
28 30
34 33 34
F igura 6-11. C ontribución 80% 39 39 41
47 48
52 52
26 55 56
de los dis tintos negocios 70% 57 58 59 60

al E B IT de las principales 60% 24


26 20
24 23
empres as eléctricas
15 11
50% 20

es pañolas . 40%
19 19
17
25
22 20 25 23
30% 59 25 22
Fuente: Memorias 48
44 42 44 46
41
46 48
20%
Estadísticas de UNESA y 34 33 31
10% 21 21 20 23 21
elaboración propia. 16 18

0%
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

Otros negocios Distribución Generación y comercialización

El resultado neto de explotación (o EBIT) ofrece información acerca de los resultados de las
empresas sin tener en cuenta sus fuentes de financiación (deja fuera de su cálculo los intereses
de la deuda, los impuestos sobre el beneficio, los dividendos y la autofinanciación). Por tanto, el
EBIT es un buen estimador de la capacidad de las empresas para hacer frente a los intereses de
la deuda, los impuestos y la remuneración a los accionistas.

Se observa – desde el mismo inicio de la liberalización – una tendencia decreciente de la contribución


de la actividad eléctrica en España al EBIT de las empresas (Figura 6-12) llegando en 2016 a la cifra
estimada de un 44%.

Deben destacarse la estacionalidad de los resultados de la Generación (dependiente de factores


de naturaleza muy volátil como la hidraulicidad, la producción eólica o el coste de los
combustibles), así como la tendencia aparentemente decreciente en la contribución a los
resultados de la Distribución de electricidad (es decir, de las actividades reguladas).

Así, la segunda conclusión que se obtiene es que la actividad eléctrica en España desarrollada
por las empresas tiene un peso cada vez menor en los beneficios totales obtenidos por las
mismas, llegando en 2016 a únicamente el 44% del total.

Negocio eléctrico en España: beneficio, demanda, activo y rentabilidad. En cuanto al


beneficio de las empresas exclusivamente procedente de sus actividades eléctricas en España,
desde el inicio de la liberalización se ha observado un significativo incremento de los mismos (tasa
de crecimiento compuesta media anual de 2,7%), tal como se muestra en la Figura 6-13

179
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

+2,7% 6,3
6,5
6,1
6,0
5,6
F igura 6-14. 5,5 5,4 5,4
5,2
5,4
5,0
E volución del E B IT 5,0 4,8
4,4 4,5
del negocio eléctrico
EBIT (miles de millones de €)
4,5 4,2 4,3
64% 65%
3,9 49% 38% 49%
en E s paña, 4,0 3,7
3,5 65% 52%
3,5 3,3 3,3
total y por actividad 3,2 73% 45% 45% 49%
3,0 76%
(M€). 64%
64%
2,5 70% 68%
70% 70% 63%
2,0
Fuente: Memorias 62%
1,5
51% 51%
Estadísticas de 36% 35%
48% 55% 55% 51%
1,0 35%
UNESA y elaboración 38% 36% 36%
30% 32% 24%
27%
0,5 30% 30%
propia.
0,0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

Generación y comercialización Distribución

Respecto a cada una de las actividades realizadas, es de destacar lo siguiente:

• P ara la actividad regulada (Dis tribución) la caída en el beneficio obs ervada en 2003-2005
s e debería principalmente a la venta de activos de trans porte a R ed E léctrica de E s paña
por parte de las principales empres as eléctricas .

• P ara las actividades liberalizadas (G eneración-C omercialización), pes e a la tendencia


creciente del beneficio, se obs erva una volatilidad elevada, la cual es taría ligada a factores
como la hidraulicidad, la producción eólica o la evolución al alza de los precios de los
combustibles fós iles , los cuáles en último término determinan en gran medida el precio del
mercado eléctrico mayoris ta.

S iendo es to importante, el factor que s in duda res ulta más explicativo de la evolución del beneficio
procedente de ambas actividades es la evolución de la demanda de electricidad en E s paña
(F igura 6-15), la cual creció en el período 1998-2016 a una tas a compuesta media anual de 2,3%.
E videntemente, una mayor demanda s e traduce directamente en mayores ingresos para las
empres as y, cons ecuentemente, en mayores beneficios .

2.3%
F igura 6-15. 0
269 270
261 261 258 263 265
256
E volución de la 0 243
254 254 249 247
231
demanda total en 198
210 216
0 187
E s paña (TW h). 175

0
Fuente: REE, Informes
0
del Sistema Eléctrico y
elaboración propia. 0

0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

180
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

S in embargo, y en paralelo, atender a la mayor demanda requiere de la realización de las


corres pondientes invers iones , tanto en activos liberalizados (G eneración-C omercialización) como
en regulados (Dis tribución-T rans porte). E n este s entido, es de des tacar la evolución de las
invers iones en el activo corres pondiente al negocio eléctrico de las empres as en E s paña (F igura
6-16), el cual creció en el período 2002-2016 a una tas a compues ta media anual de -3,5%.

7,0
F igura 6-16. E volución 7 6,6

de las invers iones en 6 5,7


5,3
activo corres pondientes 5 4,9
4,5 4,4
al negocio eléctrico en 4,2
4 3,8 3,6
E s paña, 3,2
total y por actividad 3
2,3 2,3 2,3
2,3
(M€). 2

1
Fuente: Memorias
Estadísticas de UNESA y 0
2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016
elaboración propia.
Total eléctrico nacional Distribución Reg. Ordinario+
Renovables

Así, teniendo en cuenta el fuerte incremento de la base de activos construidos en respuesta a la


mayor demanda, el indicador adecuado para medir si los beneficios obtenidos por las empresas
son o no supranormales no sería el monto total de los mismos, sino su rentabilidad.
Efectivamente, es el beneficio obtenido por unidad de capital empleado el que da idea de lo
normal o anormal (por elevado o bajo) de dicho beneficio.

En este sentido, es común en el mundo financiero la utilización del ratio ROA o “Return on Assets”
(cociente entre el beneficio antes de intereses y después de impuestos y el activo neto total) para
medir la rentabilidad. Como se muestra en la Figura 6-17:

• La evolución del R OA corres pondiente al conjunto de los negocios eléctricos en E s paña


pres enta valores relativamente estables en torno a un valor medio de 5,2% hasta 2008,
aunque con una tendencia ligeramente decreciente des de el año 1998, lo que implica un
beneficio des cendente por unidad de activo con el pas o del tiempo. E sta tendencia s e ha
mantenido de una manera notable has ta 2016 con un R OA estimado de la actividad
eléctrica nacional de un 6%.

• E n el cas o de las actividades en competencia (G eneración-C omercialización), el R OA


también pres enta una tendencia decreciente alrededor de un nivel medio del 6,0% has ta
2008 con un claro alcanzando el valor de 4,8% en 2016.

Las actividades reguladas (T rans porte-Dis tribución), s in embargo, mues tran un R OA


marcadamente descendente des de el año 2002, has ta alcanzar un nivel mínimo cercano al 3% en
2005. La mejora de la retribución aplicada al negocio regulado a partir de 2007 ha paliado es te
efecto, dejando el R OA medio obtenido en el período 1998-2008 en un valor de 5,0% . E s ta
tendencia creciente en el R OA de estas actividades reguladas s e está manteniendo alcanzando
un valor en 2010 de 6,1%. S in embargo, el R OA en dis tribución ha dis minuido des de 2011
alcanzando el 7,5% en 2016.

181
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

A la vis ta de es tos valores , difícilmente s ería pos ible concluir que los beneficios de las empres as
por s us negocios eléctricos en E s paña han s ido o es tán s iendo s upranormales .

F igura 6-17.
E volución de la 7,7 7,5

rentabilidad (R OA)* 7,0


6,6
6,6
del negocio 6,2
6,0
5,7 5,6
5,8 5,8
5,5
eléctrico en E s paña, 5,5
5,0
total y por actividad.
4,8
4,5 5,1 5,0 5,0
4,4 4,1
ROA [%]

4,0
Fuente: Informe 3,3 3,7
3,3
eléctrico, memoria de
2,2
actividades, memoria
estadística UNESA y 1,1
elaboración propia . Generación+Comercialización Eléctrica nacional Distribución
0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

* Definido como el cociente entre beneficios antes de intereses y después de impuestos y activo neto.

Siendo esto así, cabría preguntarse si los beneficios de las empresas eléctricas por sus
actividades eléctricas en España son comparables con:

• Los beneficios de empres as eléctricas operando en otros mercados eléctricos europeos.

• Los beneficios de empres as repres entativas de otros s ectores de actividad en E s paña.

E l anális is realizado en las s iguientes s ecciones mues tra que la rentabilidad y los beneficios
unitarios que obtienen las empres as eléctricas es pañolas es tán por debajo de los valores medios
obs ervados en una mues tra amplia de empres as eléctricas europeas repres entativas de dis tintos
país es y en línea con las rentabilidades que obtienen empres as repres entativas en otros s ectores
en E s paña (gas natural, telefonía, trans porte, cons trucción, etc.) (ver Windfall profits y windfall
losses).

Beneficios de empresas eléctricas europeas representativas. La Tabla 6-3 muestra los


valores homogeneizados de los principales indicadores financieros de varias de las principales
empresas eléctricas europeas para el último año para el que la información está disponible (2016),
incluyendo el resultado neto de explotación (EBIT), los activos totales y el ROA.

Los indicadores financieros muestran que las empresas españolas en la muestra (empresas
energéticas integradas en UNESA) obtienen una rentabilidad en el mercado doméstico por debajo
de la media en términos de ROA (EBIT sobre el total de activos), respecto a la que obtienen otras
empresas energéticas en el desarrollo de su actividad.

182
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Empresa Cuota [M€] (1) Activos [M€] (1) ROA [%] (1)

T abla 6-3. Indicadores financieros ENEL 8.921 155.596 5,73


de empres as eléctricas europeas en EDP 2.264 44.084 5,13
2016 (1). RWE 3.082 108.900 2,83

Fuente: Elaboración propia. EON 3.112 113.400 2,74

EDF 7.514 281.600 2,67

Empresas eléctricas en España (2) 3,50

Media internacional ponderada por el activo 3,53


(1) Cifras estimadas a partir de las cifras de negocio publicadas por las empresas.
(2) Fuente: UNESA – Negocio en España. 2015

183
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.4. W indfall profits y W indfall loos es


¿Qué son los “ Windfall profits ” ? Los “windfall profits” (WP) o “beneficios sobrevenidos” se
definen como aquellos beneficios “supranormales”, de magnitud significativa y sostenidos durante
un cierto período de tiempo, debidos a circunstancias de mercado extraordinarias, inesperadas y
fuera del control de las empresas o a cambios significativos en la regulación de sus actividades.

Este concepto, que sería aplicable a cualquier sector económico, es cuanto menos discutible y
tiene unas connotaciones de discrecionalidad/subjetividad por parte del regulador muy
significativas:

• P or “beneficios s upranormales ” s e entienden aquellos beneficios superiores a los


corres pondientes al coste de oportunidad del capital invertido, el cual s e puede definir
como el beneficio que s e obtendría de optar por invertir en un negocio distinto con un nivel
de riesgo no divers ificable s imilar. 183 S in embargo, no exis te una metodología
mínimamente precis a con la que estimar dicho cos te de oportunidad. As í, quedaría a la
dis creción del regulador decidir qué s on beneficios “s upranormales ”, especialmente en el
cas o de un s ector que funciona con criterios de mercado (ingres os y beneficios no
regulados ) y s ujeto a los riesgos propios del mis mo (obs oles cencia tecnológica,
s obrecapacidad, nuevos competidores , etc.).

• La misma dis crecionalidad exis tiría en relación a qué s e debería entender por “magnitud
s ignificativa”, “s os tenidos en el tiempo” o “circuns tancias de mercado extraordinarias”.

• E n cuanto a “circuns tancias ines peradas y


fuera del control de las empres as”, és tas
s on innumerables y de hecho en s u mayor
parte forman parte del ries go propio y Los “windfall profits” (W P ) o
normal de la mayoría de
actividades /s ectores . De hecho, riesgos “beneficios s obrevenidos ” s e
tales como el des arrollo tecnológico o el definen como aquellos beneficios
cambio en las preferencias de los “s upranormales ”, de magnitud
cons umidores tienen evidentemente una
naturaleza “ines perada y fuera del control
s ignificativa y s ostenidos durante
de las empres as ”, s iendo s in embargo, un cierto período de tiempo,
circuns tancias perfectamente normales. debidos a circunstancias de
mercado extraordinarias,
• Los cambios s ignificativos en la regulación
res ponden en realidad a cambios en las
ines peradas y fuera del control
preferencias de los cons umidores de las empres as o a cambios
(articuladas a través de las actuaciones de s ignificativos en la regulación de
s us repres entantes políticos ). As í, s urge la s us actividades
pregunta de has ta qué punto estos
cambios no s on perfectamente normales y
propios de actividades /s ectores en un
entorno liberalizado.

183
P ara atraer la invers ión requerida (el capital es un recurs o escas o), una actividad ha de ofrecer una expectativa de rentabilidad
coherente con s u nivel de ries go no divers ificable (a mayor ries go, mayor rentabilidad). Diferentes actividades , cada una de ellas con
un cierto nivel de ries go no diversificable, compiten en los mercados financieros por el capital necesario. As í, el coste de oportunidad
del capital de una actividad viene dado por la máxima rentabilidad es perada del conjunto de actividades con un nivel de ries go no
divers ificable s imilar.

184
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

La dis cus ión s obre la definición de W P no es trivial, ya que en ciertos cas os s e utiliza para
jus tificar la intervención del regulador en el mercado (es decir, la detracción de los beneficios
“s upranormales” obtenidos por una empres a). As í, de manera excepcional, en algunos país es s e
aprobaron en el pas ado medidas para detraer s upues tos W P de ciertos s ectores en bas e a
diferentes razones . P or ejemplo (ver C ompetencia en el mercado eléctrico):

• E n 1980 el C ongres o norteamericano aprobó un “Windfall Profit Tax” sobre las compañías
petrolíferas que implicaba la devolución de parte de los beneficios obtenidos como
consecuencia de la política de embargo a Occidente aplicada por los países árabes
productores de petróleo. Sin embargo, esta medida no obtuvo los resultados esperados
debido a:

 Los precios del petróleo en los años posteriores fueron inferiores a los es perados
en el momento de aprobar la Ley.

 E fectos pernicios os s obre las decis iones productivas y de invers ión (la producción
domés tica de petróleo en E E UU s e redujo entre un 3% y un 6% como
cons ecuencia del impues to). 184

• E n el R eino Unido s e aplicó el "Windfall Tax" s obre las “utilities” (empres as de


telecomunicaciones, energía, agua, trans porte) privatizadas a finales de los noventa bajo el
argumento de que s u precio de venta había s ido inferior a s u valor real. S in embargo:

 La medida no afectó a los accionis tas que acudieron a la privatización y vendieron


s us acciones antes de la aplicación del impuesto, lo cual puede entenders e como
dis criminatorio o expropiatorio.

 Dado que el impuesto gravaba beneficios pas ados , s e es peraba que la medida no
afectara a las decis iones de invers ión futuras , s iempre que fuera creíble que el
impues to no s ería recurrente. 185 S in embargo, el comportamiento pasado del
regulador inevitablemente crea expectativas s obre cuál s erá s u comportamiento en
el futuro.

A pes ar de los es cas os precedentes dis ponibles , la detracción de W P es tá aún abierta a un


intens o debate. 186 E ntre los argumentos a favor y en contra de la detracción de W P estarían los
des arrollados en la T abla 6-4.

184
V er S hapiro, R .J . y P ham, N.D., “T he economic impact of W indfall P rofit T ax for S avers and S hareholders ”, S ONE C ON, noviembre
de 2005.
185
V er C hennel, L., “T he W indfall T ax”, F iscal S tudies, vol. 18, pp. 279-91, 1997.
186
P or ejemplo, en E E UU y E uropa s e ha debatido recientemente acerca de la conveniencia de gravar los ingres os adicionales de las
empres as petrolíferas debidos al incremento de los precios del petróleo. S in embargo, no hubo cons ens o s obre s i la situación del
mercado era o no extraordinaria y s e temían los efectos que s obre la eficiencia y s eguridad de s uministro tal medida podría tener
(reducción de las invers iones en exploración).

185
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

A FAVOR EN CONTRA

Es muy difícil identificar inequívocamente


situaciones en las que existan WP.
Al ser beneficios extraordinarios,
Además, las detracciones pueden alterar
inesperados y fuera del control de las
el comportamiento de las empresas y, por
empresas, no tienen por qué afectar a sus
tanto, generar ineficiencias (decisiones de
decisiones de producción e inversión, con
producción que no tienen en cuenta de
lo que la detracción no tendría efectos
forma adecuada el valor económico de los
perniciosos desde el punto de vista de la
bienes/servicios y/o decisiones de
eficiencia
inversión que no reflejen adecuadamente
los beneficios y costes sociales).
Los beneficios extraordinarios debidos a Incluso para los bienes/servicios
razones fuera del control de las empresas esenciales, la detracción de los WP podría
y, por tanto, “no merecidos”, pueden reducir o incluso eliminar los incentivos a
considerarse injustos desde el punto de la innovación y a la productividad si las
vista de la distribución de la renta si los empresas perciben un riesgo de que
consumidores soportan un coste que se cualquier beneficio extraordinario futuro
perciba como elevado por será considerado WP y, por tanto, les será
T abla 6-4. bienes/servicios esenciales. detraído.
Argumentos a favor y La experiencia histórica muestra que la
en contra de la puesta en práctica de la detracción de WP
detracción de los W P . es compleja y cara, a menudo no alcanza
los objetivos buscados y tiene en la
mayoría de los casos efectos perniciosos
Fuente: Elaboración significativos (discriminación, pérdida de
propia. La detracción de los WP (en cualquiera eficiencia, etc.). Así, la detracción puede
de sus formas) supone una buena fuente conllevar un coste social incluso mayor
de ingresos para el Estado y, siempre que que el que trata de corregir, lo cual es
esté bien diseñado, no generará síntoma de una actuación ineficiente.
distorsiones significativas sobre la Una aplicación sistemática de los WP a
eficiencia. todos los sectores llevaría a una
economía altamente intervenida, lo que
significaría la pérdida de los beneficios
que los mercados ofrecen (optimización
de la eficiencia asignativa, productiva y
Competencia en el
dinámica). (ver
mercado eléctrico).
La dificultad de identificar la existencia de
WP puede provocar que su aplicación
(puntual o sistemática) aumente la
precepción de riesgo regulatorio, lo que
aumentará la prima de riesgo,
disminuyendo el nivel de inversión (y la
calidad de suministro) y aumentando los
costes de suministro.

Windfall profits y windfall losses. Si se contempla la existencia de “beneficios sobrevenidos”,


entonces será necesario considerar también la existencia de “pérdidas sobrevenidas” o “windfall
losses” (WL). Por simetría, los WL se definirían como beneficios “infranormales”, de magnitud
significativa y sostenidos durante un cierto periodo de tiempo, debido a circunstancias de mercado

186
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

extraordinarias , ines peradas y fuera del control de las empres as o a cambios s ignificativos en la
regulación o legis lación de s us actividades .

P or coherencia, s i s e cons idera la exis tencia de W P y s e actúa s obre ellos (p.ej., mediante
impues tos o tas as), entonces s e debería aceptar también la exis tencia de W L y s e debería actuar
s obre ellos de forma s imilar (p.ej., desgravaciones fis cales ). E l argumento para ello s ería paralelo
al de los W P , dado que los W L s on menores beneficios /pérdidas, ines perados y fuera del control
de las empres as , compens ar es tos W L no afectaría a las decis iones ni de invers ión ni de
operación de los activos de las empres as (es decir, no afectaría a la eficiencia). Adicionalmente, el
monto a compens ar serviría para as egurar la viabilidad de las empres as y, por tanto, la
continuidad del s ervicio a los cons umidores y de los pues tos de trabajo.

E n cas o de detraer los W P y no compens ar los W L s e estarían introduciendo ineficiencias ,


es pecialmente en relación a las decis iones de invers ión:

• S e es taría s ometiendo a las empres as a un esquema de ries go as imétrico, ya que los W P


(beneficios s upranormales ) s e los apropiaría el regulador y los W L (beneficios
infranormales ) s erían s oportados por los accionis tas de las empres as .

• Detraer los W P y no compens ar W L implicaría que la probabilidad de obtener beneficios


s upranormales s ería mayor que la de obtener beneficios infranormales . E s to hace que la
rentabilidad es perada (media) de las invers iones s ea menor, lo que s upone un
des incentivo a acometer las mismas , que daría lugar a ineficiencias (p.ej., menor invers ión
que la s ocialmente óptima).

• P ara evitar esta ineficiencia, sería neces ario cons iderar también la compens ación de W L.
S i s e detrae a las empres as s us W P , pero también s e les compens a por s us W L, entonces
la rentabilidad es perada de las invers iones permanecería inalterada, con lo que s e
mantendría inalterado también el incentivo a la invers ión, evitándos e las ineficiencias (es
decir, la falta de invers ión).

La F igura 6-18 des cribe gráficamente cómo la detracción de W P produce ineficiencias en la


invers ión y cómo la introducción de la compens ación de W L corrige es ta s ituación.

187
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Distribución de probabilidad de la
rentabilidad (R) esperada por un agente a la
hora de acometer una inversión
F igura 6-18. E fecto

Probabilidad
de las W P / W L • Para acometer la inversión, la rentabilidad
media (Rmedia) esperada ha de ser mayor o
s obre los incentivos igual al coste de oportunidad del capital.
• La introducción de WP/WL modifica la
a la invers ión. distribución de probabilidad de la rentabilidad
esperada, y esta, a su vez, el incentivo a la
R media Rentabilidad (R) inversión: posible ineficiencia.
Rinfranormal Rsupranormal
Fuente: Elaboración
propia. Solo con Con WP y
WP WL

Umbral de WP Umbral de WL Umbral de WP


Probabilidad

Probabilidad
R R
R media Desincentivo a R media Incentivo a la
se reduce la inversión inalterada inversión inalterado

INVERSIÓN INEFICIENTE INVERSIÓN EFICIENTE

A la vista de esto, parecería que aplicar sólo la detracción de WP, olvidándose de los WL,
supondría un caso de oportunismo regulatorio, ya que su único resultado sería la detracción del
WP (recaudación) a costa de introducir ineficiencias en la inversión:

• P ara evitar la ineficiencia en la invers ión, un regulador podría proponer aplicar la


detracción de W P únicamente a los activos ya exis tentes , comprometiéndos e a no hacerlo
s obre las nuevas invers iones en el futuro. E videntemente, es ta propues ta no res olvería el
problema, ya que las acciones del regulador en el pas ado determinan las expectativas
s obre s us acciones futuras (es decir, las detracciones pas adas crean la expectativa s obre
las detracciones futuras ). P or ello, es te tipo de propues tas no res uelven el problema de la
ineficiencia creada por la detracción de los W P .

• E n el entorno legis lativo/regulatorio europeo, la compens ación de W L sería muy difícil de


poner en práctica, ya que con una alta probabilidad s erían cons ideradas Ayudas de
E s tado, las cuales no es tán en general permitidas . As í, exis te la seguridad de que
detracciones de W P realizadas en el presente no podrán s er equilibradas con
compens aciones de W L en el futuro. E sto, evidentemente, determina la expectativa de las
empres as res pecto al comportamiento del regulador, haciendo inevitable que de la
detracción de W P s e deriven ineficiencias en la invers ión.

P or último, es importante des tacar que rara vez exis ten s ituaciones en las que aparezcan
únicamente W P o W L, sino que un mis mo s uceso caus a ambos a la vez. C omo ejemplo, el cas o
del “Windfall Profit Tax” aplicado s obre las compañías petrolíferas en E E UU citado anteriormente.
E l embargo a Occidente aplicado por los país es árabes productores de petróleo s ignificó mayores
precios del petróleo en E E UU, lo cual implicó:

• B eneficios s upranormales para los productores de petróleo locales – W P .

188
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• P érdida de competitividad de la indus tria local cons umidora de petróleo res pecto a la
localizada en país es que no s ufrieron el embargo debido al mayor cos te de s u ins umo –
W L.

As í, pes e a que el embargo habría dado lugar a W P que fueron detraídos , también dio lugar a W L
que no fueron compens ados . E ste proceder podría s er cons iderado oportunis ta, intervencionis ta y
dis criminatorio (ver C ompetencia en el mercado eléctrico).

Sistematización de los windfall profits y windfall looses . De acuerdo a la definición de WP y


WL inicialmente dada, podría concluirse que los mismos se producen en prácticamente todos los
sectores y actividades, por ejemplo:

• Recalificaciones de terrenos. ¿Hasta qué punto aplicar WP en este caso no supondría


intervenir los beneficios legítimos de acuerdo a los riesgos asumidos por los inversores,
incluso en el caso de que la recalificación fuera inesperada? Éste sería el caso, por
ejemplo, de terrenos de costa adquiridos antes de que existiera una expectativa
mínimamente razonable del desarrollo turístico que posteriormente se produjo. 187

• Des arrollo de infraes tructuras de trans porte que incrementan el valor de los activos de la
población anteriormente incomunicada. A modo de ejemplo, cons iderar el cas o del
des arrollo del AV E en E s paña, el cual conllevó una fuerte revalorización de los activos
inmobiliarios ubicados cerca de las ciudades por las que pas aba (el AVE incrementó s u
demanda, que a s u vez incrementó s u valor).

• C ambios en las es pecificaciones técnicas de productos /s ervicios impues tas por la


Adminis tración. Un ejemplo en E s paña s ería el llamado “apagón analógico”, el cual
s ignificó el incremento de la demanda de tecnologías vis uales digitales (W P ) y una
reducción de las analógicas (W L).

• C ambios en las regulaciones s ectoriales (gas , electricidad, combustibles ,


telecomunicaciones, etc.) que generan W L. C omo ejemplo, en el propio sector eléctrico, la
normativa medioambiental podría beneficiar a las tecnologías con bajas emis iones de C O 2
y perjudicar a tecnologías térmicas y flexibles que ven reducidas s us horas de utilización
(ver La internalización del cos te del C O 2 en el precio de la energía y E nergías renovables :
tecnología, economía, evolución e integración en el s is tema eléctrico).

• Dentro de un determinado s ector, activos únicos (no replicables ) y con un valor de


mercado s uperior al de los s í replicables dentro del mis mo s ector. C omo ejemplo,
cons iderar el cas o de centros comerciales s ituados en lugares del centro de las ciudades
con alta dens idad de población. E s tos activos , que tienen acces o a una elevada demanda
potencial, no pueden s er replicados (ubicaciones limitadas ) y obtienen beneficios
s uperiores a los medios del s ector. Lo mis mo podría decirs e de es taciones de s ervicio
s ituadas en vías de tráfico elevado o en el centro de las ciudades , productores agrarios
con las tierras más fértiles , refinerías ubicadas en s itios estratégicos, etc.

E n todos es tos cas os , la Adminis tración no ha aplicado medidas para tratar los pos ibles W P y/o
W L (ni tan s iquiera las habría cons iderado). De hacerlo, res ultaría en una economía con un nivel
de intervención muy elevado e inevitablemente ineficiente (s e des incentivaría la toma de ries gos,

187
E sta s ituación parecería comparable a las invers iones acometidas por las empres as eléctricas anteriores a que hubiera expectativa
razonable alguna de la introducción de los derechos de emis ión.

189
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

la innovación, las ganancias de productividad, etc.). E ntonces ¿ por qué s í aplicarlas al s ector
eléctrico?

E n cualquier cas o, las actuaciones de la Adminis tración en relación con los W P y W L deberían
regirs e de acuerdo a una doctrina ortodoxa, estable, predecible y aplicada de forma s istemática a
todos los s ectores económicos . E n la actualidad, dicha doctrina no está definida en E s paña. E n
cas o contrario, las actuaciones de la Adminis tración s erán vis tas por los agentes económicos
como medidas ad-hoc que no siguen modelo de comportamiento alguno y que tendrían un fin
únicamente recaudatorio. Esto inevitablemente dañará la percepción de seguridad jurídica no sólo
de la actividad directamente afectada, sino del conjunto de actividades económicas, lo que en
último término repercutirá sobre la valoración del riesgo del país.

190
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.5. Mecanis mos de ajus te de demanda y producción

La secuencia de mercados eléctricos en España. El mercado de electricidad consiste, en


realidad, en una secuencia de mercados en los que la generación y la demanda intercambian
energía eléctrica en distintos plazos temporales. La Figura 6-19 resume la secuencia completa de
mercados en los que los generadores y los comercializadores (o consumidores que participan en
el mercado) pueden comprar y vender energía para cada hora en distintos plazos.

tiempo
Mercado Gestor Producto
Antes del Mercado de contratos Contratos a plazo
despacho OTC, OMIP
bilaterales físicos financieros Mercado a
(hasta D-1) Subastas suministro de plazo
Figura 6-19. OMEL Contratos financieros
último recurso (CESUR)
Secuencia de Mercado del día
OMEL Energía horaria
Mercado
anterior diario
mercados en el Día
Mercado de Restricciones técnicas y
mercado ibérico de anterior al Restricciones
REE
por garantía de suminist.
despacho
electricidad (MIBEL). (D-1)
Mercados de SSCC:
Secundaria: MW
Reserva Secundaria REE Terciaria: MWh
Fuente: Elaboración Reserva Potencia Subir

propia. Mercados de
Intradiarios OMEL Energía Horaria corto plazo
Día del
despacho Gestión de desvíos y
(D) restricciones técnicas
en tiempo real
REE Energía a subir y bajar
Restricciones técnicas
tras intradiarios
Reserva Terciaria

Semanas, meses e incluso años antes del momento de la generación y el consumo, los agentes
intercambian contratos con periodos de entrega de distinta duración (año, trimestre, mes, etc.) en
diversos mercados llamados “mercados a plazo” (ver Formación de precios en los mercados
mayoristas a plazo de electricidad).

Al llegar el día D-1 (un día antes de la entrega física de la energía/despacho de las centrales), los
agentes intercambian energía para el día D en el mercado diario organizado por el OMEL 188 (ver
F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad).

Además , en el corto plazo, dentro de las 24 horas anteriores al momento del des pacho de la
energía, los generadores y los comercializadores pueden ajustar s us pos iciones comerciales
comprando y vendiendo energía en los s eis mercados intradiarios actualmente exis tentes, también
gestionados por OME L, y cuyo funcionamiento es muy s imilar al del mercado diario. Los periodos
de ejecución de es tos mercados y s u s ecuencia, as í como los horizontes a los que aplican s us
res ultados s e muestran en el s iguiente gráfico (F igura 6-20):

188
V er información s obre OME L: Operador del Mercado Ibérico de E nergía.

191
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

F igura 6-20.
S ecuencia de
ejecución y
horizontes de
aplicación de los
mercados del
Operador del
Mercado.

Fuente: Red Eléctrica


de España.
En el muy corto plazo (desde unos pocos minutos antes del despacho hasta unas pocas horas
antes) los generadores (y, en algunos casos, también la demanda), ofrecen una serie de servicios
al Sistema a través de varios mercados organizados por el Operador del Sistema (Red Eléctrica
de España; en adelante, OS). Estos servicios son necesarios para mantener el Sistema Eléctrico
en equilibrio físico y dentro de un nivel de seguridad adecuado.

La operación del sistema se centra en tres tipos de actuaciones por parte del OS:

• Gestión de restricciones técnicas. Permite resolver las congestiones ocasionadas por


las limitaciones de la red de transporte y distribución sobre la programación prevista para
el día siguiente, así como las que surjan en tiempo real.

• Gestión de los servicios complementarios. Dentro de este concepto de servicios


complementarios se consideran los siguientes aspectos: Sistema de control de frecuencia-
potencia y tensión, así como Reserva de Potencia Adicional a subir, necesarios para
garantizar la calidad y seguridad del suministro en todo momento.

• Gestión de desvíos. Resuelve, casi en tiempo real, los desajustes entre la oferta y la
demanda de electricidad.

A continuación, se desarrollan estos tres conceptos con más detalle:

Gestión de restricciones técnicas. El Procedimiento de Operación 3.2. 189 define una restricción
técnica como cualquier circuns tancia o incidencia derivada de la s ituación del s is tema producción-
trans porte que, por afectar a las condiciones de s eguridad, calidad y fiabilidad del s uminis tro
es tablecidas reglamentariamente y a través de los corres pondientes procedimientos de operación,
requiera, a criterio técnico del OS , la modificación de los programas de energía. E n particular
pueden identificars e res tricciones debidas a:

• Incumplimiento de las condiciones de s eguridad en régimen permanente y/o tras una


contingencia, definidas en el procedimiento de operación por el que s e establecen los
criterios de funcionamiento y s eguridad para la operación del S is tema E léctrico.

• Ins uficiente res erva de regulación s ecundaria y/o terciaria.

• Ins uficiente res erva de potencia adicional para garantizar la cobertura de la demanda
previs ta.

189
V er P rocedimiento de operación 3.2.

192
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• Ins uficiente res erva de capacidad para el control de la tens ión en la red de trans porte.

• Ins uficiente res erva de capacidad para la repos ición del s ervicio.

Una vez las empres as generadoras han realizado s us ofertas al mercado diario (24 horas antes
del des pacho) y una vez el agente res pons able de la gestión económica del s is tema (OMIE )
res uelve la casación igualando la oferta a la demanda (ver F ormación de precios en el mercado
mayoris ta diario de electricidad), y teniendo en cuenta los contratos bilaterales fís icos , el OS
realiza el proces o de anális is de res tricciones técnicas de la red de trans porte en el que s e verifica
la viabilidad del programa de generación y cons umo res ultante.

P ara este anális is , el OS utiliza modelos de flujos de red y otros algoritmos que s imulan el es tado
en que quedaría el S is tema E léctrico ante determinados fallos predefinidos en ciertos elementos
de la red, como s on dis paros de grupos generadores, de líneas y/o de transformadores,
identificando as í las res tricciones técnicas a resolver. E l OS res uelve entonces las congestiones
de la red alterando el programa de generación aplicando criterios técnicos de s eguridad, pero
también económicos (ofertas a s ubir y bajar energía enviadas por los generadores al OS ), pero
manteniendo en todo cas o el equilibrio generación-demanda. 190

Gestión de los servicios complementarios. Los servicios complementarios, ofrecidos por los
generadores y gestionados por el OS, tienen como objetivo que el suministro se realice en
condiciones de seguridad y fiabilidad en todo momento y que puedan resolverse desequilibrios
entre la generación y la demanda en tiempo real. Existen tres servicios complementarios básicos,
descritos en el Procedimiento de Operación 1.5. 191 del Sistema Eléctrico:

• Regulación Primaria: se define como el margen de potencia en el que los grupos


generadores pueden modificar su potencia generada de forma automática y en los dos
sentidos, mediante la actuación de su regulador de velocidad, en caso de producirse un
desvío de frecuencia. Su objetivo es la corrección automática y casi instantánea (respuesta
completa como máximo en 30 segundos) de los desequilibrios de frecuencia, y deberá
mantenerse durante un tiempo de 15 minutos hasta poder ser reemplazada por la
regulación secundaria. Este servicio es obligatorio y no tiene una remuneración adicional.

• Regulación Secundaria o Banda de Regulación: se define como el margen de variación de


potencia en el que el regulador secundario del sistema peninsular español puede actuar
automáticamente y en los dos sentidos, partiendo del punto de funcionamiento en que se
encuentre en cada instante. Viene dada por la suma, en valor absoluto, de las
contribuciones individuales de todos los grupos generadores sometidos a este tipo de
regulación. Permite al OS disponer de una reserva de capacidad disponible muy flexible
(comienzo de la respuesta en no más de 30 segundos y con capacidad de mantenerse
durante un tiempo de 15 minutos hasta poder ser reemplazada por la regulación terciaria)
para resolver de forma automática desequilibrios significativos entre generación y
demanda.

Cada día, el OS estima la ‘reserva de banda de regulación secundaria’, en términos de


potencia (MW), necesaria para asegurar el suministro en condiciones de fiabilidad en caso
de desequilibrios producción/consumo en tiempo real, y convoca el mercado
correspondiente después de la celebración del mercado diario y del de restricciones. Las
empresas generadoras, con carácter voluntario, presentan sus ofertas de capacidad

190
V er “Operación del S istema E léctrico” (P rocedimientos de Operación) en la página web del Operador del S is tema.
191
V er P rocedimiento de Operación 1.5.

193
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

dis ponible, as ignándos e la banda requerida por el OS entre éstas utilizando un criterio de
mínimo cos te. E l coste marginal de la banda de potencia para cada hora marca el precio
con el que s e remunera toda la capacidad as ignada en este mercado.

E l s ervicio de regulación s ecundaria es ges tionado por ‘zonas de regulación’, es decir,


agrupaciones de centrales con capacidad de pres tar el s ervicio de regulación s ecundaria, a
requerimiento automático del programa de control de la generación del OS , con exigencias
de res puesta con cons tante de tiempo de 100 s egundos.

E n la actualidad hay diez zonas de regulación en el S is tema E léctrico es pañol que agrupan
las centrales de generación de los agentes productores, aunque no todas las unidades de
generación forman parte de una zona de regulación, quedando limitada su participación en
es te s ervicio a aquellas que cumplen los requis itos es tablecidos en los P rocedimientos de
Operación del OS 192.

E l s ervicio complementario de res erva s ecundaria remunera no s ólo la banda de potencia,


s ino también la energía eventualmente utilizada, valorada al precio de s us titución de la
energía terciaria.

• R egulación T erciaria: es tá constituida por la variación máxima de potencia a subir o a bajar


de todos los grupos generadores del s is tema que puede s er movilizada en un tiempo no
s uperior a quince minutos , y que puede ser mantenida, al menos , durante dos horas
cons ecutivas , con objetivo de reconstruir la res erva de regulación secundaria. Es el
mecanismo que tiene por objetivo que, en caso de que se haga uso de la banda
secundaria por causa de una contingencia, pueda restituirse la reserva de banda.

Este servicio es de carácter obligatorio para las unidades de producción que pueden
ofrecerlo. Así, todas las unidades de generación del sistema que pueden variar su
producción en un tiempo no superior a 15 minutos y mantener la variación durante 2 horas
deben ofrecer toda su capacidad excedentaria (no contratada en otros mercados o
servicios) al OS.

El mercado de energía terciaria se celebra a última hora del día anterior al despacho. En
él, los generadores envían ofertas por la variación máxima de su potencia a subir y a bajar.
El precio de la energía terciaria utilizada a subir o a bajar es el precio marginal resultante
de las ofertas realizadas por los generadores frente a una demanda (establecida por el OS
según sus requerimientos) a subir o bajar respectivamente. Al contrario que en el caso de
la reserva secundaria, los generadores sólo perciben ingresos por este servicio si es
utilizado por el OS.

La reserva terciaria se activa de forma manual, subiendo o bajando la potencia de las


centrales de generación o consumo de bombeo (ver Tecnologías y costes de generación
eléctrica) que hubieran ofertado al menor precio, en el caso de energía a subir, o al mayor
precio de recompra de energía en el caso de energía a bajar.

La gestión de desvíos. La gestión de desvíos es el mecanismo que utiliza el OS para resolver


desequilibrios entre la oferta y la demanda que puedan identificarse unas pocas horas antes del
despacho, tras la celebración de cada mercado intradiario y está descrito en el Procedimiento de

192
Ver “Operación del Sistema Eléctrico” (Procedimientos de Operación) en la página web del Operador del Sistema.

194
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Operación 3.3. 193 del S is tema E léctrico (ver F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario
de la electricidad).

Durante la operación normal, los agentes de producción de energía eléctrica comunican al OS las
previs iones de des víos generación-cons umo originados por dis tintas caus as , a lo que s e añaden
las variaciones en la previs ión de producción renovable que realiza el OS . S ólo en el cas o de que
el conjunto de los des víos previs tos durante el periodo entre dos mercados intradiarios s uperen
los 300 MW en media horaria, da lugar a que el OS convoque el mercado de ges tión de des víos .

E s te mercado de ges tión de des víos cons is te en pedir ofertas a los generadores en el s entido
opues to a los des víos previs tos en el s is tema. E s to es, s i s e cons idera que el s is tema es tá corto
con el programa de generación exis tente, s e piden ofertas de mayor producción a los agentes
productores para generar más energía (incluyendo al bombeo por reducir s u cons umo de
energía), y en el cas o opues to, cuando en el s is tema exis te un programa largo de producción
res pecto a la demanda, y, por tanto, s e cons idera que s obra energía, s e piden ofertas a los
generadores por reducir s u programa de producción (incluyendo al bombeo por aumentar s u
cons umo de energía).

E n tiempo real (dentro de los 15 minutos anteriores al des pacho), el OS tiene a s u dis pos ición,
aparte de los s ervicios de regulación y de los mecanis mos de res olución de res tricciones en
tiempo real, mecanismos de emergencia por los que podría obligar, en caso de extrema neces idad
para el s istema, a determinadas unidades de generación a modificar s us niveles de producción.

E s tos proces os que realiza el Operador del s is tema, s u s ecuencia y alcance temporal de
programación s e repres entan en la F igura 6-21:

Figura 6-21.
Secuencia de
ejecución y
horizontes de
aplicación de los
principales
mercados del
Operador del
Sistema.

Fuente: Red
Eléctrica de España.

La liquidación de los desvíos. El sobrecoste horario originado por la aparición de desvíos en el


sistema que han tenido que ser gestionados por el OS (servicios complementarios de secundaria
y terciaria y gestión de desvíos) es posteriormente repercutido a los agentes que se hayan
comportado en contra de las necesidades del sistema. Si el desvío neto horario del sistema era a
subir, significa que había más demanda que producción y, por tanto, ha sido necesario utilizar más
generación o solicitar menor consumo, por lo que el sobrecoste lo pagarán aquellos agentes que
hayan producido de menos en esa hora o hayan consumido de más respecto a su programa. En el
caso de que el desvío neto horario del sistema sea a bajar, significa que sobraba producción
respecto a la demanda, por lo que los sobrecostes de los desvíos serán repercutidos a aquellos

193
Ver procedimiento de Operación 3.3.

195
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

productores que hayan producido de más y a los cons umidores que hayan cons umido de menos
res pecto a s u programa horario.

F inalizado el alcance temporal diario de los programas de los agentes , cons umidores y
generadores, s e entra en los proces os de liquidación (cobros y pagos) de s us energías realmente
producidas y cons umidas , repercutiendo a cada uno los costes de los des víos en que han
incurrido por haber “incumplido” s us res pectivos programas de producción y cons umo. As í, a
aquellos que s e han desviado a s ubir en una determinada hora (generadores que han producido
más que s u programa y cons umidores que han cons umido menos que s us programas) s e les
repercute el coste corres pondiente en cas o de que es e des vío haya ido en dirección contraria a
las neces idades del s is tema en dicha hora (los generadores cobran un precio inferior al precio
marginal de la hora por s u producción adicional, y los cons umidores reciben un precio inferior al
precio marginal que pagaron en es a hora por su menor cons umo), mientras que s i s u des vío fue
en el mismo s entido de las neces idades del s is tema, no s e les repercute cos te alguno (los
generadores cobran el marginal y los cons umidores reciben el marginal). R azonamiento idéntico
es para el cas o de des víos a bajar, en los que productores han generado menos energía que s u
programa y los cons umidores han cons umido más que lo es tablecido en s u programa.

196
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.6. C ompetencia y poder de Mercado


El problema del ejercicio del poder de mercado. Inevitablemente ligado a la liberalización de
los mercados eléctricos y a los beneficios que ésta crea (mayores eficiencias asignativas y
productivas, riesgo de recuperación de la inversión soportado de forma exclusiva por los
generadores y no por los consumidores, etc.) (ver El proceso de liberalización de los sectores
energéticos) se encuentra el problema del potencial ejercicio de poder de mercado por parte de
las empresas de generación. Este problema es común a todos los sectores abiertos a la
competencia, no es exclusivo del sector eléctrico.

Antes de analizar las situaciones en las que el ejercicio de poder de mercado puede convertirse
en un problema, debe diferenciarse entre poder de mercado y ejercicio o abuso del poder de
mercado. El poder de mercado implica la capacidad por parte de una o varias empresas de
alterar el resultado del mercado (precio y/o cantidades) en beneficio propio. Al igual que no se
castiga la capacidad de cometer un delito, sino la comisión del mismo, la legislación actual no
encuentra punible el hecho de tener poder de mercado, sino el hecho de ejercerlo en beneficio
propio.

El poder de mercado se ha definido en múltiples ocasiones y documentos. Por su relevancia


teórica y práctica, una de las definiciones más extendidas y comúnmente citadas es la acuñada
por el Departamento de Justicia y la Comisión Federal de Comercio de los EE.UU. en sus
evaluaciones de fusiones horizontales entre empresas.

“Poder de mercado es la capacidad de una única empresa o de varias empresas competidoras


para elevar los precios en beneficio propio por encima de los niveles de precios de competencia y
restringir ofertas por debajo de los niveles de competencia durante un periodo sostenido de
tiempo.”

La comparación de esta definición con otras definiciones más académicas 194 trae a la luz dos
matices de especial relevancia, en cualquier s ector de la actividad económica:

• E l primero es la pos ibilidad de que el poder de mercado s e ejerza no s ólo alterando


directamente el nivel del precio ofertado, s ino alterando las cantidades ofertadas (ver
F igura 6-22). E s ta s egunda forma de ejercer poder de mercado a través de una “retirada
de capacidad” implica que un agente es tá dispues to a vender una cantidad menor a
cambio de que el precio de mercado res ultante que percibe por el res to de s u generación
s ea mayor, con lo que en conjunto obtiene un incremento de s u beneficio.

• E l s egundo matiz es que esta conducta no competitiva debe manteners e durante un


período s os tenido de tiempo (es decir, que no sean conductas es porádicas , puntuales o
aleatorias ) para que pueda s er catalogada como “ejercicio de poder de mercado”. E s to es
importante, pues una s ituación puntual de precios altos en el mercado puede debers e a
multitud de caus as diferentes al ejercicio de poder de mercado (p.ej., un error de un agente
a la hora de pres entar sus ofertas al mercado, un fallo en el propio diseño del mercado,
una es cas ez puntual de capacidad dis ponible de una central grande, una demanda mayor
de la es perada, etc.).

194
P or ejemplo “Poder de mercado es la capacidad de alterar, en beneficio propio, los precios respecto a los niveles de competencia” –
ver S toft, S . (2002), “Power System Economics. Designing Markets for Electricity”, W iley; o Newbery, D. (2004), “Electricity
Liberalisation in Britain: the quest for a satisfactory wholesale market design”, C ambridge W orking P apers in E conomics, C W P E 0469.

197
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Conducta: Incremento de precios de oferta Conducta: Retirada de capacidad

[€ /MWh]
F igura 6-22.
[€ /MWh]
Ofertas con precio
Demanda incrementado Demanda
E jemplos de Incremento de Ofertas con
ejercicio de poder precios de oferta retirada
Ofertas
de mercado. ∆ Precio competitivas ∆ Precio
Ofertas
competitivas

Fuente: Elaboración
propia.

[MWh] [MWh]
∇ Cantidad ∇ Cantidad
Retirada de
capacidad

La legislación española utiliza el concepto de “poder de dominio” en lugar del de “poder de


mercado” para evaluar el comportamiento de las empresas que operan en sectores abiertos a la
competencia 195. La definición más veces citada de pos ición de dominio por la C omis ión de
Defens a de la C ompetencia, por haber s entado juris prudencia, es la que se utilizó en la s entencia
del T ribunal de J us ticia de las C omunidades E uropeas en el cas o United Brands vs Commission:

“Es la situación de poder económico de una empresa que le permite obstaculizar el mantenimiento
de la competencia efectiva en el mercado relevante al poder comportarse con suficiente
independencia de sus competidores, clientes, y en última instancia de los consumidores.”

E n es ta definición hay dos conceptos a destacar:

• La independencia de comportamiento, que s e refiere al hecho de que una empres a pueda


actuar s in tener en cuenta ni las reacciones de la demanda ni las de otros competidores ,
es decir, que és tas no pueden compens ar el efecto de s u comportamiento abus ivo.

• La obstaculización de la competencia efectiva, que s e refiere a que el res ultado de la


anterior actuación independiente s ea un menor nivel de competencia en el mercado, lo que
conlleva por regla general mayores precios (aunque también s erían pos ibles precios
artificialmente bajos o “predatorios ” dirigidos a impedir la entrada en el mercado o a forzar
la s alida de competidores ).

Estructura del mercado. E l poder de mercado o de dominio es tá muy relacionado con el número
de empres as que operan en el mercado y con el tamaño relativo de las mis mas (cuotas de
mercado), y s e conoce como “estructura del mercado”. C iertamente, un mercado con una
es tructura muy concentrada (pocas empres as y/o con cuotas elevadas ) facilita la creación de
pos iciones dominantes y aumenta el ries go de ejercicio de las mis mas . S in embargo, es muy
importante s eñalar que una es tructura concentrada no es condición s uficiente para que exis ta
poder de mercado y mucho menos para que és te s ea automáticamente ejercido.

P ara analizar la es tructura del mercado s e utilizan índices de concentración. Los índices no
s eñalan per se la capacidad de abus o, s ino que vendrían a dar una orientación del riesgo
potencial de ejercicio de poder de mercado. E ntre estos indicadores s e encuentra el índice

195
La C omis ión Nacional de competencia quedo integrada en la C omis ión Nacional de los Mercados y la C ompetencia. P ara más
información ver C reación de la C omisión Nacional de los Mercados y la C ompetencia (C NMC ).

198
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Herfindahl-Hirschman (HHI), 196 o la cuota de mercado de cada empres a. Otros índices


es tructurales más complejos , que tienen en cuenta la elas ticidad de la demanda y el papel relativo
de cada empres a en el mercado, s on los que recurren a la demanda res idual de cada empres a (la
demanda a la que s e enfrenta una empres a una vez des contada la demanda que s irve el res to de
empres as ) y el carácter pivotal o no de s u oferta (has ta qué punto la capacidad de producción de
una empres a es impres cindible para s atisfacer la demanda).

En la práctica, la Comisión Europea estima que es improbable que existan problemas de


competencia horizontal en situaciones en las que el índice Herfindahl sea menor que 2.000 y la
cuota de mercado de la empresa más grande sea inferior a 25% 197 (ver Competencia en el
mercado eléctrico).

Incentivos a ejercer poder de mercado. Como se ha discutido anteriormente, una determinada


estructura de mercado no es condición suficiente para concluir que en el mismo se ejercerá poder
de mercado. Para que un agente ejerza poder de mercado es necesario que tenga incentivos a
hacerlo. Más concretamente, es necesario que del ejercicio de poder de mercado resulte un
beneficio mayor que de un comportamiento perfectamente competitivo.

En este sentido, existen al menos tres factores que condicionan en gran medida los incentivos a
ejercer poder de mercado y que deben ser tenidos en cuenta a la hora de evaluar el nivel
competitivo de un determinado mercado:

• La exis tencia de una amenaza de entrada de nuevos competidores creíble mitiga


s ens iblemente el incentivo a ejercer el poder de mercado por parte de los agentes ya
es tablecidos . C uando res ulta fácil entrar en un mercado y hay agentes que pueden
s eñalar de forma creíble que entrarán en el mercado s i res ulta atractivo, una elevación
s os tenida de los precios atraerá a nuevos competidores al mercado, lo que conllevará una
mayor competencia y menores beneficios en el futuro. De esta manera, la amenaza de
entrada dis ciplina las pos ibles conductas anticompetitivas de las empresas , inclus o s i estas
s on cas i monopolís ticas .

P ara que una amenaza de entrada s ea creíble es neces ario que no exis tan “barreras de
entrada” s ignificativas (ver B arreras de entrada y atacabilidad del mercado eléctrico 198).
S iguiendo s u definición académica más común, exis ten barreras cuando hay cos tes que
deben as umir los nuevos entrantes que, s in embargo, s on menores para los agentes ya
es tablecidos . E n los mercados energéticos , en la gran mayoría de los cas os , las barreras
(de exis tir) s uelen tener un origen regulatorio (permis os /autorizaciones adminis trativas ,
dis eño del mercado, etc.), las cuales no s on creadas por los agentes ya es tablecidos . La
larga maduración de las invers iones o el monto de las mis mas no pueden, en rigor,
cons iderars e como barreras de entrada, en relación a otros s ectores indus triales , y en
relación también a los competidores potenciales en un mercado relevante dado.

• E jercer poder de mercado conlleva afrontar la expectativa de s er sancionado por la


Autoridad de C ompetencia. E s ta expectativa, en la que tiene un papel fundamental la
exis tencia de autoridades con fuerte capacidad de s upervis ión (el mercado ibérico –
E s paña y P ortugal – es s upervis ado por la C NMC es pañola y por la C omis ión de
196
E l índice HHI s e define como la s uma de los cuadrados de las cuotas de mercado de cada una de las “n” empres as . As í, cuantas
más empres as haya y menores sean s us cuotas (s eñal de una estructura muy desconcentrada) el HHI s erá menor. E n el cas o de una
empres a con el 100% del mercado, el HHI s ería 10.000 y en el cas o de 10 empres as con el 10% s ería 1.000.
197
V er “Commission Notice – Guidelines on the assessment of horizontal mergers under the Council Regulation on the control of
concentrations between undertakings”, DG C OMP , 28 de enero de 2004.
198
La literatura s e refiere al concepto de “atacabilidad del mercado” también como “contes tabilidad del mercado” como una traducción
libre del inglés “market contestability”.

199
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

C ompetencia portuguesa ADC , más s u regulador s ectorial, E R S E y los res pectivos


departamentos gubernamentales, as í como las autoridades de defens a de la competencia
de las C omunidades Autónomas, s in olvidar a la propia C omis ión E uropea) reduce el
incentivo a ejercer poder de mercado. Además del impacto financiero, es ta penalización
lleva as ociada un daño para la imagen de la empres a, que no es s ólo un “intangible”, s ino
que tiene repercus iones directas tales como la credibilidad de la empres a a la hora de
pres entar ofertas a los cons umidores finales .

• La información con la que cuentan las empres as s obre la evolución de las principales
variables del mercado y s obre el comportamiento de s us competidores no es perfecta.
P ara poder abus ar, una empres a ha de s aber con un nivel de certidumbre muy elevado
cuál va a s er la demanda total, las es trategias de oferta de s us rivales , la producción de las
tecnologías no ges tionables (hidráulica fluyente y eólica es pecialmente relevantes en el
cas o del mercado ibérico), etc. S in es ta información, o con conjeturas muy dis pers as , una
empres a no tendrá la mínima certeza de que una determinada conducta/estrategia de
ofertas producirá mayores beneficios . As í, la información imperfecta no s ólo s upone un
fuerte des incentivo al abus o, s ino la misma impos ibilidad técnica del abuso.

C ons iderando estos factores adicionales , los incentivos a ejercer poder de mercado s on
s ignificativamente menores que los que s ugeriría una primera aproximación al problema (F igura
6-23).

F igura 6-23. E l incentivo Un agente tendrá incentivo a ejercer poder de mercadosi:

real a ejercer poder de Reducción del beneficio


+Reducción del beneficio futuro por la entrada de nuevos competidores
Incremento de Ingresos >
mercado: +Penalización esperada por abuso
+Daño a la imagen de la empresa
efecto de los factores
adicionales a la
es tructura s ectorial.

Fuente: Elaboración propia.

Supervisión y medidas de mitigación del poder de mercado. En primer término debe


resaltarse que la propia dinámica de los mercados energéticos en los últimos años ha llevado,
debido a la entrada importantísima de nuevos competidores (apoyados en ciclos combinados de
gas y renovables) a que los índices de concentración en España no den signos de
comportamientos abusivos potenciales. Por otra parte, la integración de los mercados de España
y Portugal en el MIBEL es tan sólo un primer paso que vendrá reforzándose con los proyectos de
mejora de las infraestructuras a medio plazo y con los procesos de integración de mercados
promovidos desde las Instituciones Comunitarias, lo que conlleva la ampliación de los mercados
relevantes.

Coherentemente con lo expuesto anteriormente respecto a los incentivos a ejercer poder de


mercado, la Ley de Defensa de la Competencia (Ley 15/2007, de 3 de julio) sanciona
exclusivamente los comportamientos de los agentes (es decir, las conductas colusorias, las
conductas abusivas de posición dominante y los comportamientos desleales) y no las estructuras
sectoriales. Así, el objetivo prioritario de las autoridades de defensa de la competencia es, en
realidad, actuar sobre las conductas de los agentes a través de la supervisión (en contraposición a
actuar directamente sobre la estructura del mercado).

200
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

E ntre los mecanis mos que dis ponen las autoridades s upervis oras s e incluyen los s iguientes:

• S upervis ión ex-pos t de los res ultados del mercado y de las conductas de las empres as a
través de comis iones de s eguimiento de los mercados, des arrollo de herramientas
es pecializadas en la detección de conductas no competitivas y dis eño de penalizaciones
dis uas orias .

• E liminación de las pos ibles barreras de entrada al mercado, de forma que la amenaza de
entrada s ea creíble (agilización de los permis os y autorizaciones adminis trativos , hacer
dis ponibles nuevos emplazamientos , crear liquidez en los mercados a plazo, s ubs anar
pos ibles deficiencias en el dis eño del mercado, eliminar tarifas s ubvencionadas que
impiden el des arrollo de la actividad de comercialización a cons umidores finales, etc.).
F omentar la credibilidad de que la amenaza de entrada actúa como factor dis uas orio de
potenciales conductas anticompetitivas .

• Optimización del us o de la capacidad de interconexión mediante la implantación de


mecanis mos de mercado para la as ignación de dicha capacidad. Una de las medidas que,
con menor coste y mayor eficacia, puede conducir a un mercado eléctrico europeo con
mayor rivalidad es el fortalecimiento de las interconexiones entre áreas de operación del
s is tema diferenciadas y la armonización de procedimientos de operación y ges tión de las
interconexiones entre los dis tintos s is temas eléctricos .

E n cuanto a la pos ibilidad de actuar s obre la es tructura del mercado, la experiencia pas ada indica
que las autoridades de defens a de la competencia tenderán a analizarla en detalle s ólo en cas os
excepcionales – bás icamente concentraciones entre empresas que impliquen la reducción del
número de competidores o la creación de una empres a con una cuota de mercado muy elevada.

201
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.7. C ompetencia en el mercado eléctrico


Competencia efectiva y rivalidad. En sus inicios, 199 la política de competencia s e orientaba a
combatir prácticas anticompetitivas explícitas (p.ej., la organización de cárteles ) y conductas
monopolís ticas (p.ej., la impos ición de precios abus ivos o predatorios , es tos últimos con el objetivo
de expuls ar a competidores del mercado) (ver C ompetencia y poder de mercado).

C onforme avanza la teoría económica y s u aplicación al


E n s us inicios , la política derecho de competencia, a principios del s iglo XX , las ideas
de C ournot conducen a vigilar los proces os de fus ión entre
de competencia s e empres as para evitar la formación de oligopolios . S e s upone
orientaba a combatir que el oligopolio conduce a precios exces ivos s iempre que,
prácticas anticompetitivas s egún el modelo de C ournot, cada competidor pueda
explícitas (p.ej., la anticipar las cantidades que van a ser ofrecidas por los
demás competidores (es to es , s iempre que s e compita por
organización de cárteles ) y las cuotas de mercado y no por los precios ).
conductas monopolísticas
(p.ej., la impos ición de La incorporación de la teoría de juegos al anális is
precios abus ivos o económico, a mediados del s iglo XX , modifica este enfoque
tradicional, afinando la definición de comportamientos
predatorios, estos últimos contrarios a la competencia en un mercado. B ajo es ta nueva
con el objetivo de expuls ar vis ión, exis ten múltiples s ituaciones de equilibrio en un
a competidores del mercado (competitivo o no) y res ulta impos ible predecir cuál
es la que acabará ocurriendo s i s e analizan exclus ivamente
mercado) la es tructura del mercado y/o las condiciones de acces o y la
difus ión y tratamiento de la información en el mismo.

Unos equilibrios u otros s e alcanzan, bás icamente, como cons ecuencia de las distintas
pos ibilidades de actuación de las empres as (p.ej., decidiendo las invers iones que acometen) que,
como todo comportamiento es tratégico, dependen a s u vez de las expectativas s obre el
comportamiento del res to de los agentes del mercado. As í, los comportamientos anticompetitivos
deben identificars e a pos teriori, cons iderando todas las variables y circuns tancias que rodean
cada mercado y cada s ituación.

Los efectos derivados de la integración vertical, 200 la exis tencia de efectos de red, 201 el poder de
comunicación e información de las ofertas, 202 la diferenciación entre costes hundidos y cos tes fijos
incrementales , 203 el cos te de oportunidad que s uponen las decis iones de invers ión (en la medida
en que pueden s er cons ideradas como opciones reales ), la diferencia entre costes de es cas ez,
cos tes de oportunidad y cos tes variables , etc., (ver F ormación de precios en el mercado mayoris ta
diario de electricidad) son caracterís ticas de los mercados que res ultan bás icas para identificar
comportamientos contrarios a la competencia.

E n E s paña, los anális is que s e conocen s obre competencia efectiva en los mercados eléctricos,
s on, bás icamente, referidos a la evolución de la es tructura del mercado a través del us o de índices

199
Los comienzos de la política de competencia s uelen referirs e a la Ley S herman de 1890 en E E .UU.
200
P res encia s imultánea en las s uces ivas etapas de la cadena de valor de un mismo s ector.
201
Un efecto de red cons iste en que el valor de un bien para un cons umidor aumenta con el número de cons umidores de es e bien.
202
S eñalización de pos ibles colaboraciones a competidores (colus ión) a través de los niveles de precios y cantidades ofertadas.
203
C ostes hundidos s on aquellos cos tes que, una vez s e incurre en ellos , no s e puede modificar s u nivel. P or ejemplo, el cos te de un
billete de avión s in opción de reembols o s e convierte en un cos te hundido, pues aunque el billete no s e utilice, no s e podrá modificar.
C os tes fijos incrementales s on aquellos en los que s e incurre independientemente de la cantidad producida una vez realizada la
invers ión.

202
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

de concentración 204 (ver C ompetencia y poder de mercado). S alvo en los expedientes de


comportamiento en el mercado de res tricciones de generación (inducidos por un mal dis eño de las
reglas del mercado), 205 no exis ten expedientes res ueltos acerca de pos ibles comportamientos
colus ivos (acuerdos anticompetitivos entre empres as ), abus o de poder de mercado o fals eamiento
de la libre competencia por actos des leales contra las empres as de generación o comercialización
de energía.

Los precios en el mercado eléctrico español. El precio del mercado diario español presenta un
nivel y un comportamiento similar a los de otros mercados europeos (Figura 6-24). Como se
puede observar, los precios muestran una alta correlación en los distintos mercados.

70
65
Precio Spot de la Electricidad (€/MWh)

60
55
Figura 6-24. Evolución 50
45
de los precios del
40
mercado diario en varios 35
países desde 2017. 30
25
20
Fuente: OMEL, UNESA y 15
elaboración propia. 10
5
0

2014 2015 2016


España (OMEL) Italia (GME) EPEX Francia MEDIA PX
Portugal (OMEL) EPEX Alemania NordPool

Dentro de la UE la electricidad no se puede trasladar de unos Estados miembro a otros en


grandes cantidades dado el relativamente bajo nivel de interconexión existente entre muchos de
ellos. Sin embargo, la globalización de los mercados de insumos (derechos de CO2, uranio,
carbón o gas natural, los cuales además determinan el coste oportunidad del agua embalsada)
hace que los precios de todos los mercados necesariamente reflejen un nivel y un comportamiento
similar, en la medida en la que no existan impactos locales tales como peajes de acceso a los
generadores, impuestos sobre la producción eléctrica, etc. significativamente distintos.

En cualquier caso, es importante considerar que factores como la eolicidad o la hidraulicidad, así
como los diferenciales de temperaturas entre países, son capaces de explicar gran parte de las
diferencias de precio que se observan entre los distintos países.

204
Ver, por ejemplo, el Informe 1/08 de la CNE “Informe de valoración preliminar sobre las subastas de emisiones primarias de energía
y CESUR”, aprobado por el Consejo de la CNE el 22 de febrero de 2008.
205
Ver, por ejemplo, los expedientes 552/02, 601/05 y 602/05 del Tribunal de Defensa de la Competencia. Los expedientes se
resolvieron declarando un abuso de posición dominante por ofertar en el mercado diario con precios encaminados no a su casación,
sino a generar en situación de restricciones técnicas. En opinión de las empresas demandas, estos expedientes fueron originados por
un incorrecto diseño del mercado, el cual fue de hecho modificado en 2005. El problema consistía en que se utilizaban las ofertas
hechas por las centrales al mercado diario para resolver las restricciones. Dado que los costes de las centrales eran diferentes en
ambos casos (básicamente porque operar en restricciones podría suponer arrancar la central para unas pocas horas y no para las 24
horas con la que se configuran las ofertas para el mercado diario, lo cual tiene un coste muy elevado), se introducía una distorsión a la
hora de ofertar las centrales. De hecho, tanto la CNE como los agentes identificaron el problema al poco de crearse el mercado (1998)
y solicitaron cambios en la regulación para resolverlo, aunque éste no fue modificado hasta 2005. Tras diversas vicisitudes jurídicas, el
Tribunal Supremo resuelve en enero de 2010 la anulación definitiva de las sanciones para los primeros casos denunciados de
noviembre de 2010, reconociendo la validez de los argumentos de las empresas. La doctrina del Tribunal Supremo ha sido de
aplicación en expedientes abiertos con posterioridad a éstos.

203
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

E n definitiva, la evolución de los precios de la electricidad en los dis tintos mercados no parece
indicar que exis tan rentas diferenciales en el mercado es pañol respecto a otros mercados
europeos , lo que s upone un indicio de s u competitividad.

Evolución de la estructura del mercado español. La Tabla 6-5 muestra la evolución histórica de
la estructura del mercado peninsular español desde el inicio de la liberalización y la evolución
esperada de la estructura del mercado ibérico. Las conclusiones pueden extraer son las
s iguientes:

1997 2012 2015


Mercado relevante España MIBEL MIBEL
Cuota del mayor agente 47% 21% 21%
Cuota de los 2 mayores agentes
76% 41% 39%
(energía)
T abla 6-5. E volución de HHI 3.218 1.068 1.299
la es tructura del Número de agentes en el 4 16 16
mercado es pañol e Capacidad en el marginal (GW) 19 45 45
ibérico.
Agentes tomadores de precio y
Pocos Muchos Muchos
capacidad
Fuente: REE, MINETAD y Transparencia/disponibilidad de
elaboración propia. Poca Total Total
información
OS y OM independientes No Sí Sí
Elegibilidad 0% 100% 100%
España: MINETAD y
Supervisores del mercado
CNMC

• E l índice de concentración HHI (ver C ompetencia y poder de mercado) del mercado


penins ular es pañol bajó des de 3.218 al inicio de la liberalización (1997) hasta 1.299 en
2015 (cons iderando además la integración del mercado ibérico). E n es te s entido, es
importante des tacar que la C omis ión E uropea cons idera que es improbable que exis tan
problemas de competencia en un mercado con un HHI menor que 2.000. 206

• Igualmente, la C omis ión E uropea cons idera que es improbable que exis tan problemas de
competencia en un mercado en el que el mayor agente tenga una cuota inferior al 25%.

• A la vis ta de es to, parece evidente que la es tructura del s ector eléctrico en E s paña s e ha
vuelto s ignificativamente más competitiva des de el inicio de la liberalización, es pecialmente
s i s e compara con la evolución de otros país es del entorno. De hecho, E s paña es el
mercado europeo en el que han entrado más nuevos competidores en generación y en el
que más ha caído la cuota de los mayores generadores . Y más s ignificativo, esta
tendencia tiene una clara continuidad a futuro a la vis ta de los valores de concentración
actuales , aunque las cifras para 2008 ya eran s uficientemente expres ivas de una s ituación
competitiva. E llo s e reconoció en el “Benchmarking Report” 207 de la C omis ión E uropea
publicado en marzo de 2010, que s ituaba ya a E s paña entre el grupo de país es de menor

206
V er DG C OMP (2004), “Commission Notice – Guidelines on the assessment of horizontal mergers under the Council Regulation on
the control of concentrations between undertakings” 28 de enero.
207
V er B enchmarking R eport.

204
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

concentración de mercado en electricidad, s eñalando la evolución a la baja res pecto a los


datos de años anteriores.

• E s to es más relevante cuando s e constata que exis te una enorme competencia entre las
empres as que fijan precios , en la actualidad hay compitiendo 16 agentes con una
capacidad de aproximadamente 45 G W , lo que implica una elevadís ima rivalidad.

• La competencia en el mercado ibérico (MIB E L) estaba s upervis ada por cinco agencias
(C NE , MINE T AD y C NC en E s paña, más E R S E y la ADC en P ortugal, más AC E R en s u
función de s upervis or definida en el R E MIT ). Actualmente, con la unificación de los
reguladores , la competencia de la C NE y C NC pas a a manos de la C NMC . 208
E videntemente, la probabilidad de que comportamientos anticompetitivos s ean detectados
es prácticamente total, tanto en el mercado fís ico como en el financiero, lo cual crea un
fuerte des incentivo a que es tos s ean pues tos en práctica por parte de los agentes .

• P or otro lado, la trans parencia de la información que genera el mercado es pañol


(importante para que los nuevos entrantes no es tén en des ventaja res pecto a los ya
es tablecidos ) ha s ido reconocida por la propia C omis ión E uropea como una de las más
elevadas de la Unión E uropea 209 (basta cons ultar los numeros os informes exis tentes en las
webs públicas de OME L y en R E E ). E sta trans parencia permite, además , aumentar la
s upervis ión de los mercados , que también es realizada por todos los competidores , los
cuales pueden denunciar comportamientos anticompetitivos de s us rivales . E n la mayoría
de mercados eléctricos internacionales no exis te un nivel de acces o a la información
comparable. E n todo caso, es ta transparencia s erá inclus o mayor con la pues ta en práctica
del R E MIT 210.

• E l hecho de que las dos ins tituciones (Operador del Mercado y Operador del S is tema) no
tengan en s u accionariado influencia de ningún agente del mercado, aumenta también el
nivel de competencia. E s evidente que esta s ituación no exis te en otros sectores eléctricos
en el entorno es pañol.

De hecho, las cifras indican que muy pocos país es de la Unión E uropea pueden mostrar una
evolución hacia una s ituación de mayor competencia s imilar a la del mercado es pañol. As í, tal
como s e muestra en la F igura 6-25, tan s ólo el R eino Unido pres entaría en la actualidad una
es tructura del s ector eléctrico más competitiva que E s paña.

208
V er C omisión Nacional de los Mercados y la C ompetencia (C NMC ).
209
La Comisión Europea, en el “DG Competition Report on Energy Sector Inquiry” (enero de 2007), incluye cifras sobre el número de
asuntos investigados sobre los que los Estados miembro publican información. España se encuentra en segundo lugar, tras el Reino
Unido.
210
Ver Reglamento 1227/2011/UE.

205
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80 85 90 95 100
%
Chipre
Malta
Estonia
F igura 6-25. Francia
Letonia
C omparación del nivel Croacia
de concentración en el Bélgica
Eslovenia
s ector eléctrico en R. Checa
dis tintos país es da la Eslovaquia
Lituania
UE . Irlanda
Dinamarca
Suecia
Fuente: Elaboración propia Hungría
a partir de información Italia
Alemania
pública de reguladores, Rumanía
asociaciones, anuarios Finlandia
España
sectoriales, etc. Reino Unido
Polonia

Cuota mayor operador Operadores cuota > 5%

Asimismo, el nivel pro-competitivo de la estructura del sector eléctrico español es igualmente


significativo en comparación al de otros sectores de la economía abiertos a la competencia. El
análisis de los indicadores básicos de competencia en el mercado muestra que parece
injustificada la percepción de falta de competencia en el sector de generación de electricidad en
comparación con otros sectores productivos (Figura 6-26).

%
81%
%

Figura 6-27. Comparación del nivel de %


63%
concentración del sector eléctrico %
español con otros sectores económicos % 48% 46%
46%
en competencia en España (2015-
%
2016). 32%
30%
%

Fuente: Elaboración propia a partir de % 16%


información proveniente de informes %
sectoriales de competencia, CNMC.
%
Gas Natural Lineas Autopistas Gasolineras
banda ancha
Principal empresa Las dos principales

Según los informes sectoriales de competencia publicados por la CNCM, como consecuencia de
la situación de excesos de oferta de electricidad que se viene registrando desde 2009, ningún
generador tiene una condición de especial pivotalidad.

206
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

E l nivel de concentración y/o la pivotalidad de los agentes s on indicadores preliminares y


orientativos del grado de competencia, no s iendo condiciones neces arias , ni s uficientes , para el
ejercicio de poder de mercado en el mercado de generación eléctrica. S in embargo, el informe
des taca que s e mantiene la diferenciación entre nuevos agentes entrantes e incumbentes en
cuanto al grado de integración vertical.

T odo lo anterior implica que, debe realizars e un diagnós tico correcto, ya s ea bas ado en la nueva
es tructura de mercado o en comportamientos reales de los agentes previamente a plantear
intervenciones s obre el s ector eléctrico es pañol para poder valorar s i s on neces arias y eficientes.
P ara ayudar en esta valoración, puede s er interes ante s i también s e llegan a plantear para otros
s ectores de la economía es pañola con una es tructura, a priori, menos competitiva.

Competencia en la reforma de precios. En los mercados eléctricos de corto plazo, en los que se
envían ofertas de compra y venta para cada una de las horas del día, el precio se forma por la
intersección de la curva de oferta y demanda (ver Formación de precios en el mercado mayorista
diario de la electricidad). Así, las tecnologías relevantes en términos de competencia a la hora de
fijar el precio del mercado serían el fuelóleo, los ciclos combinados y el carbón (ver Tecnologías y
costes de la generación eléctrica).

207
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.8. B arreras de entrada y atacabilidad del mercado eléctrico

¿Qué son las barreras de entrada a un mercado? En general, la existencia de barreras de


entrada da lugar a un mercado no contestable (no atacable). 211 É s te s e caracteriza porque la
amenaza de potenciales nuevos entrantes en el mercado no es creíble, lo que reduce los
incentivos de los agentes ya establecidos a comportars e de forma competitiva (ver C ompetencia y
poder de mercado):

• Las barreras de entrada hacen que no puedan entrar nuevos competidores al mercado.

• La potencial entrada de nuevos competidores es un factor que dis ciplina los pos ibles
comportamientos anticompetitivos de los agentes ya es tablecidos . Más concretamente,
una s ituación de precios exces ivos es ins os tenible s i no exis ten barreras de entrada.
E fectivamente, la expectativa de precios elevados atrae al mercado a nuevos entrantes, lo
que a s u vez hace que se incremente la competencia a medio plazo en el propio mercado,
lo que a s u vez lleva a los precios a s u nivel competitivo, s ólo con la expectativa de que
dicha entrada s e haga efectiva.

• E s por es to que la inexis tencia de barreras de entrada des empeña un papel fundamental
en la dinámica competitiva de un mercado, s iendo inclus o más importantes que la propia
es tructura del mercado (nivel de concentración – número de competidores y tamaño
relativo de los mismos). E fectivamente, un mercado con una es tructura concentrada
(pocos competidores y grandes – a priori poco competitivo) puede ser perfectamente
competitivo si no existen barreras de entrada. 212

A la vista de esto, resulta evidente tanto la relevancia de las barreras de entrada en cuanto a
asegurar el adecuado nivel de competencia en un mercado, como la atención que los reguladores
deben prestar a las mismas. Es decir, los reguladores deben actuar en las siguientes líneas:

• Identificando y sancionando los posibles comportamientos de los agentes que puedan dar
lugar al surgimiento de dichas barreras.

• Evitando que las propias decisiones del regulador actúen como barrera de entrada para
nuevos entrantes (p.ej., restricciones excesivas en las autorizaciones de emplazamientos
para nuevas instalaciones, diseño del mercado y pago por capacidad que hacen imposible
una expectativa razonable de recuperación de la inversión para las nuevas instalaciones,
etc.) o que la demora en la tramitación de las autorizaciones de los nuevos proyectos se
constituya como un freno para la instalación de dichos entrantes.

Definición de barreras de entrada. El concepto económico de barreras de entrada es


ampliamente utilizado en procedimientos de defensa de la competencia y en la regulación
sectorial. Sin embargo, se trata de un concepto con diferentes acepciones que distan mucho de
una definición unívoca e incuestionable. 213 Por ello, resulta útil revisar los fundamentos

211
De forma simplificada, un mercado no contestable es aquel en el que existen barreras de entrada. La literatura se refiere al
concepto de “atacabilidad del mercado” también como “contestabilidad del mercado” como una traducción libre del inglés “market
contestability”.
212
Esta es la teoría desarrollada en Baumol, Panzar y Willig (1982), op. cit., a partir de las ideas de Demsetz, H. (1968), “Why
Regulate Utilities?”, Journal of Law and Economics, 11, reimpreso en Demsetz, H. (1988), “The Organization of Economic Activity”,
Blacwell, Oxford, volumen 2.
213
Ver una revisión de definiciones en McAfee, R. P., Mialon, H. M. y Williams, M. (2004), “What is a Barrier to Entry?”, American
Economic Review, Vol. 94 , No. 2, Mayo, pp. 461-465 y Baumol, W., J. Panzar y R. Willig (1982), “Contestable Markets and the Theory
of Industry Structure”, Nueva York, Harcourt Brace Jovanovich.

208
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

económicos que lo res paldan y las implicaciones de s u pos ible exis tencia. C ons iderando es tos
fundamentos e implicaciones s erá pos ible utilizarlo adecuadamente, evitando la aplicación de
decis iones de competencia y/o medidas regulatorias que puedan de hecho provocar la eros ión del
bienes tar s ocial (en vez de s u protección o defens a). 214

E l T ribunal de Defens a de la C ompetencia es pañol definía las barreras de entrada como “…todas
aquellas dificultades y costes que desalientan o directamente imposibilitan la entrada de nuevos
operadores en un determinado mercado...”. 215 Por otro lado, siguiendo su acepción más común
en el mundo académico, las barreras de entrada existen cuando hay costes que deben asumir las
empresas que quieran entrar en un mercado y que son menores para (o no tienen que soportar)
los agentes ya están establecidos en el mismo.

Sin embargo, tradicionalmente se ha considerado que un nivel de concentración alto en un


mercado (pocos agentes y grandes) es señal inequívoca de la existencia de barreras de entrada y
que lleva inevitablemente a precios excesivos (anticompetitivos). Esta idea ha sido criticada desde
principios de los años 90 básicamente por tres razones: 216

• E l precio que se obs erva en un mercado con pocos operadores es el res ultado de un juego
de estrategia competitiva en el que el nivel de rivalidad no es neces ariamente directamente
proporcional al número de agentes es tablecidos (es decir, no neces ariamente a mayor
número de agentes, mayor rivalidad).

• La dinámica temporal del mercado (costes de invers ión, adaptación a nuevas tecnologías ,
etc.) puede cambiar drásticamente los res ultados obtenidos mediante anális is es táticos del
nivel de competencia en un mercado.

• Las invers iones s ignificativas en costes fijos (hundidos o no) 217 s iempre s e realizan en un
horizonte de incertidumbre que podría dar lugar a rentas (beneficios) temporales para la
empres a que decidió as umir el riesgo y tuvo éxito. 218 E s tos beneficios no pueden
cons iderars e un s íntoma de un comportamiento anticompetitivo, s ino el res ultado pos ible
de una as unción de riesgos y la retribución as ociada a la mis ma correspondiente a una
mayor prima de riesgo.

Des de la pers pectiva del Derecho de Defens a de la C ompetencia, identificar barreras de entrada
en un determinado mercado permite proceder a s u correcta eliminación y s u relevancia es triba
cuanto menos en los s iguientes tres as pectos :

• S i las barreras s on creadas voluntariamente por las empres as pres entes en el mercado, de
manera individual o como res ultado de algún tipo de colus ión, con el fin de protegers e y
afectar el precio en beneficio propio, entonces deben s er legalmente perseguidas .

214
A modo de ejemplo, considerar que, en términos de eficiencia, tan costos o puede res ultar para los cons umidores un mercado con
muchos operadores de tamaño pequeño (es tructura de mercado des concentrada) que con pocos operadores de tamaño muy grande
(es tructura concentrada). B as te para ello cons iderar, por ejemplo, la exis tencia de economías de escala (en es te cas o res ulta eficiente
tener empres as más grandes que podrán ofertar unos costes menores ) o los pos ibles factores competitivos distintos de la estructura
del mercado (como la propia inexis tencia de barreras de entrada).
215
V er T ribunal de Defens a de la C ompetencia (2005), “Expediente de Concentración C95/05 Gas Natural/ENDESA”.
216
V er C arlton, D. W . (2005), “Barriers to Entry”, NB E R W orking P aper 11645.
217
C os tes hundidos s on aquellos cos tes que, una vez s e incurre en ellos , s u nivel no s e puede modificar (p.ej., el coste de un billete de
avión s in opción de reembols o s e convierte en un cos te hundido, pues aunque el billete no se utilice, no s e podrá modificar
pos teriormente s u nivel). C os tes fijos s on aquellos que no dependen de la cantidad producida, independientemente de que s u nivel s e
pueda o no modificar con otros factores distintos de la cantidad producida.
218
V er P indyck, R . (2005), “Sunk Costs and Real Option Theory in Antitrust”, NB E R W orking P aper 11430.

209
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• S i las barreras s on creadas por medidas regulatorias , entonces s e debe reformar la


normativa con el objetivo de eliminarlas.

R es pecto a es tos dos primeros as pectos, s e denota la importancia de analizar el origen de


cada pos ible barrera de cara a proceder a s u correcta eliminación. E fectivamente, en el
cas o de barreras creadas por la regulación, la solución pas a por reformar la normativa en
cues tión y no por actuar s obre los agentes.

É s te es un cas o de lo que s e conoce por “círculo vicios o regulatorio”, donde nuevas


medidas regulatorias no sólo no solucionan el problema original, sino que crean nuevos
inconvenientes (las asimetrías creadas empeoran los resultados del mercado en cuanto a
– principalmente – eficiencia asignativa, lo cual de hecho es contrario a los intereses de los
consumidores a los que se pretendía proteger), propiciando que el regulador vuelva a
intervenir incorrectamente.

En este sentido, es importante destacar que la nueva Ley de Defensa de la Competencia


española permite actuar contra reguladores que creen condiciones anticompetitivas. La
Comisión Nacional de Competencia publicó en 2008 el informe “Recomendaciones a las
Administraciones Públicas para una regulación de los mercados más eficiente y
favorecedora de la competencia” 219 donde s e es tablecen los principios de una buena
regulación des de el punto de vis ta de la competencia: neces idad y proporcionalidad,
mínima dis tors ión, eficacia, trans parencia y predictibilidad.

• Adicionalmente, la cons ideración de las barreras de entrada juega un papel fundamental a


la hora de valorar pos ibles fus iones y adquis iciones .

E n aus encia de barreras, la amenaza de entrada de nuevos operadores en el mercado dis ciplina
la política de precios de las empres as exis tentes s in neces idad de que el número de empres as
que en él operan aumente. De esta manera, un mercado “atacable” o “expugnable” (as í s e
denomina un mercado sin barreras de entrada), puede dar lugar a precios competitivos inclus o
con muy pocos operadores . 220

E videntemente, esta conclus ión afecta de forma muy s ignificativa al anális is de concentraciones
(fus iones/adquis iciones ), dando un papel fundamental en el mis mo a las potenciales barreras de
entrada. As í, la aus encia de barreras de entrada puede conducir a reducir o eliminar los
impedimentos y/o condiciones (medidas de mitigación) impues tas por los reguladores a una
fus ión/adquis ición. 221

Análisis de las barreras de entrada en el mercado eléctrico español. En el sector eléctrico las
principales barreras de entrada que suelen identificarse son de naturaleza administrativa o
regulatoria. El Tribunal de Defensa de la Competencia, siguiendo declaraciones anteriores y la
doctrina establecida por otras instituciones, como la CNMC, ha identificado en el pasado las
siguientes barreras en el sector eléctrico, en el contexto del análisis de una operación reciente de
concentración entre empresas del sector: 222

219
Ver “Recomendaciones a las Administraciones Públicas para una regulación de los mercados más eficiente y favorecedora de la
competencia”.
220
Esta es la teoría desarrollada en Baumol, Panzar y Willig (1982), op. cit., a partir de las ideas de Demsetz, H. (1968), “Why Regulate
Utilities?”, Journal of Law and Economics, 11, reimpreso en Demsetz, H. (1988), “The Organization of Economic Activity”, Blacwell,
Oxford, volumen 2.
221
Así se reconoce en el Artículo 10.1.e) de la Ley de Defensa de la Competencia (Ley 15/2007).
222
Ver Tribunal de Defensa de la Competencia (2005), “Expediente de Concentración C95/05 Gas Natural/ENDESA”.

210
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• E l ais lamiento exterior, debido a la es cas a capacidad de interconexión del S is tema


E léctrico es pañol.

• La propiedad de activos es tratégicos , concentrada en los operadores incumbentes.

• La “alta probabilidad” de que exis tan cos tes hundidos significativos, debido a los costes de
instalación y diversificación del parque de generación, el largo período de maduración de
las inversiones y la incertidumbre asociada a los precios de los combustibles.

• La concentración en el mercado mayorista, el elevado volumen de energía intercambiada


entre empresas de un mismo grupo y el corto plazo de los intercambios.

• Los Costes de Transición a la Competencia (CTCs).

• La integración vertical, que puede dar lugar a subsidios cruzados y a información


privilegiada.

• La fidelización o captura del cliente, mediante estrategias agresivas de marketing y


publicidad o a través de la relación entre distribuidor y comercializador.

Como se puede observar, la mayor parte de estas barreras de entrada tienen su origen en el
marco legal o en decisiones regulatorias de las autoridades españolas o europeas, y asimismo,
muchas están también superadas. Así, la resolución de estas posibles barreras pasa
necesariamente por actuaciones sobre la regulación y no sobre las empresas (lo segundo, como
ya se ha expuesto, significaría a caer en lo conocido como “círculo vicioso regulatorio”).

Adicionalmente, es importante destacar que la principal causa del retraso en el desarrollo del
mercado minorista, de la liberalización efectiva y de que los comercializadores, nuevos y
existentes, hayan tenido problemas de viabilidad, es el mantenimiento de tarifas subsidiadas (por
debajo de costes), que han competido deslealmente con los citados comercializadores (ver Déficit
tarifario: qué es, consecuencias y solución). Esta es una clara barrera regulatoria, como ya han
señalado los reguladores Ibéricos 223 y cuya eliminación ha dependido únicamente de la
Adminis tración. As í, la implantación del modelo C omercializador de Último R ecurs o (C UR ) y el
es tablecimiento de tarifas aditivas han facilitado un rápido avance de la liberalización del
s uminis tro eléctrico des de la s egunda mitad de 2009 (ver E l s uminis tro de referencia).

Factores de expugnabilidad del mercado eléctrico en España. Las anteriores barreras de


entrada identificadas por el Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) podrían no tener
impacto sobre los precios si están compensadas por otras características del mercado y por los
procedimientos de supervisión del funcionamiento de los mercados que acentúen su nivel de
expugnabilidad, contestabilidad o atacabilidad.

La evolución del mercado eléctrico en España en los últimos años (y también del mercado gasista)
indica que existen factores que han incrementado de forma significativa la atacabilidad del
mercado, por lo que la mayor parte de las barreras de entrada identificadas por el TDC, o bien no
son relevantes en la actualidad, o bien podrían no provocar precios alejados de los precios de
competencia o eficiencia.

• Desaparición de los CTCs. El mecanismo de recuperación de CTCs dejó de tener efecto


en 2006 (Real-Decreto Ley 7/2006).

223
Descripción del Mibel. CNE – ERSE. Noviembre de 2009.

211
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• Des arrollo de los mercados a plazo y el des arrollo cons iguiente del mercado de coberturas
financieras abren, nuevos mercados para los nuevos entrantes, y permiten una ges tión de
ries gos más adecuada a los operadores no integrados (ver F ormación de precios en los
mercados mayoris tas a plazo de electricidad).

• Oficina de C ambios de S uminis trador. Las Leyes 12/2007 y 17/2007 crearon esta
ins titución para eliminar las pos ibles barreras de entrada relacionadas con la información
en la actividad de comercialización. S e pretende garantizar que cualquier comercializador
pueda acceder en condiciones no dis criminatorias a información sobre los patrones de
cons umo de los clientes finales y a otra información relevante (por ejemplo, la calidad
crediticia de los cons umidores ). S egún la Ley 24/2013, des de del 30 de junio de 2014 las
funciones de es ta oficina las des empeña la C omis ión Nacional de los Mercados y la
C ompetencia, s iendo los res pons ables de la s upervis ión de los cambios de s uminis trador
en los s ectores de electricidad y gas natural, conforme a los objetivos de tras parencia,
objetividad e independencia.

• As ignación de capacidad en las interconexiones fís icas . La as ignación de capacidad en las


interconexiones fís icas con E uropa, de acuerdo con mecanis mos de mercado
trans parentes , está favoreciendo la entrada en el mercado de nuevas empres as de
comercialización y trading de energía.

• La s eparación de actividades establecida en la Ley del S ector E léctrico: contable, jurídica,


funcional y de marca e imagen de marca minimizan los ries gos de s ubs idios cruzados o de
dis criminación por parte de empres as verticalmente integradas.

• Nuevas ins talaciones de generación de electricidad que compiten en el margen. La F igura


6-28 muestra la evolución de la entrada de nueva capacidad de generación de electricidad
en el mercado es pañol durante el periodo 2000-2016.

7.000

Figura 6-28. Adiciones a


Nueva capacidad instalada (MW)

6.000
la capacidad instalada
(total neto, ciclos 5.000

combinados, 4.000
eólica y resto del
3.000
régimen especial) en el
período 2000-2016. 2.000

1.000
Fuente: REE.
0
2000 2002 2004 2006 2008 2010 2012 2014 2016

Todas las tecnologías Ciclos combinados Eólica Resto del R.E.

Se observa en la Figura 6-28 cómo la inversión anual en ciclos combinados, a partir del
año 2002 hasta el año 2007 es muy significativa. La entrada de tecnologías que compiten
en el margen en el mercado eléctrico, impulsada por inversiones realizadas por nuevos

212
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

entrantes , mues tra que, aunque s iempre res ulta complicado entrar en cualquier mercado
eléctrico debido a la complejidad de la regulación y de la operación técnica del S is tema, en
el cas o de E s paña no ha res ultado ni mucho menos impos ible en los últimos años .

213
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

6.9. Aplicación de la teoría económica de mercados y competencia al


mercado eléctrico

La teoría económica s obre el funcionamiento de los mercados (ver E l proces o de liberalización de


los s ectores energéticos, F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad,
F ormación de precios en los mercados mayoris tas a plazo de electricidad, T ecnologías y cos tes
de la generación eléctrica) y la competencia (ver C ompetencia y poder de mercado, C ompetencia
en el mercado eléctrico y B arreras de entrada y atacabilidad del mercado eléctrico) ha de s er la
clave con la que s e evalúe tanto lo adecuado de un dis eño de mercado concreto como las
pos ibles propuestas de reforma del mis mo. E s to es as í debido a que mercado (correctamente
dis eñado) y competencia (entendida en el s entido moderno de es tructura-barreras-incentivos -
s upervis ión) s on las herramientas eficientes para la optimización del bienes tar s ocial (s uma de los
excedentes de cons umidores y productores) (ver E l papel de la regulación en la maximización del
bienes tar).

As í, a la hora de tomar decis iones regulatorias que afectan al dis eño del mercado o a la
competencia en el mis mo, la cons ideración de res tricciones s uperpues tas al objetivo fundamental
de optimización del bienes tar s ocial (p.ej., oportunidad política, ventajas cortoplacis tas, balance de
interes es de diferentes grupos particulares, etc.) deberían s er debidamente identificadas y
cuantificadas en términos de cos te del propio bienes tar s ocial.

E ntre estas restricciones s uperpuestas al objetivo fundamental de optimización del bienes tar
s ocial s e encuentra en los últimos años, y de forma muy relevante, la relativa al problema de la
exis tencia de un déficit de tarifas s ignificativo y recurrente (ver E l déficit tarifario: qué es,
cons ecuencias y s olución). E n cualquier cas o, la pues ta en marcha del modelo de S uminis tro de
Último R ecurs o ahora suminis tro de referencia (ver E l s uminis tro de referencia) ha s ignificado la
aplicación de tarifas aditivas a los cons umidores domésticos y pymes , y de precios de mercado
para el resto. No obs tante, y a pes ar de los avances obs ervados , las cons ecuencias del déficit
tarifario acumulado s e harán notar durante muchos años. E sta s ituación permite aún que las
tarifas no s e adecuen a los cos tes del S is tema (la s olución óptima en términos de eficiencia
económica). De esta mala praxis s e deriva a) la recurrencia y magnitud creciente de dicho déficit
tarifario, y b) la pres ión por bus car s oluciones alternativas . E n relación a las s oluciones aplicadas ,
s e pueden mencionar los s iguientes as pectos :

• S on ineficientes en el sentido económico amplio (no optimizan el bienestar social sin que
suponen un coste en términos de bienestar social).

• Implican una involución contra el mercado y a favor de mecanismos de intervención


(inevitable al rechazarse la propia solución de mercado, es decir la adecuación de tarifas a
costes).

• Son contrarias a las directrices liberalizadoras incluidas en la legislación española y


comunitaria.

• Se justifican no en la auto-imposición de la restricción descrita (rechazo a adecuar tarifas a


costes para evitar el déficit tarifario), sino en la supuesta falta de credibilidad del precio del
mercado/inexistencia de un nivel de competencia suficiente. Según esta justificación, los
generadores ejercerían poder de mercado (ver Competencia y poder de mercado) dando
lugar a precios excesivos, siendo estos la causa del déficit tarifario. “Existencia de fallos en
el diseño del mercado de producción”. Según esta justificación, el déficit de tarifas sería
debido a que algunas tecnologías de generación obtienen beneficios excesivos debidos a

214
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

dichos fallos . E stos beneficios exces ivos tendrían la condición de “windfall profits” y
deberían ser detraídos (ver La internalización del coste del CO2 en el precio de la energía y
Windfall profits y windfall losses).

Beneficios de algunas tecnologías de generación. En relación al mercado de producción, una


de las cuestiones que se argumentan para proponer reformas al mismo es que determinadas
tecnologías (más en concreto, hidráulica y nuclear), obtienen beneficios excesivos debido a que:

• R eciben el precio de mercado (marcado por el cos te de oportunidad de la última central


cas ada, (ver F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de electricidad) mientras
que s us cos tes variables s on prácticamente nulos , lo que hace que obtengan un margen
“exces ivo” en el mercado (excedente del productor) (ver Windfall profits y windfall losses).

• E s tas centrales están totalmente amortizadas , por lo que dicho margen s e convierte
directamente en beneficio para la empres a.

E s tas argumentaciones no s on correctas por las s iguientes – entre otras – razones :

• La hidráulica no tiene un cos te variable nulo. Las centrales hidráulicas en general tienen
cos tes variables relevantes , como s on los cos tes de operación y mantenimiento, tas as y
tributos crecientes, etc. Más es pecíficamente para las hidráulicas de bombeo, s e incurre en
cos tes s ignificativos por adquis ición de energía. E stas centrales compran energía en
periodos valle para producir en periodos punta, con unas pérdidas de rendimiento del
orden del 40% (ver T ecnologías y costes de la generación eléctrica). As í, a modo de
ejemplo, s i s e compra energía para bombear 1 MW h a 50 €/MW h, es e MW h bombeado s e
convierte al turbinar en únicamente 0,6 MW h. P ara no incurrir en una pérdida s e debe
vender es tos 0,6 MW h a un precio tal que recupere los 50 € de coste, por lo que dicho
precio ha de s er al menos de 83 €, esto s in obtener rentabilidad alguna ni margen para la
recuperación de los cos tes fijos .

• La hidráulica no es tá totalmente amortizada y por lo tanto tiene unos cos tes fijos muy
elevados . E n es te s entido, s e s uele argumentar que la mis ma s e cons truyó a principios de
s iglo pas ado. S in embargo, como s e puede apreciar en la T abla 6-6, una gran parte del
parque de grandes centrales hidráulicas (centrales de más de 200 MW , que s uponen el
43% del parque total hidráulico de R égimen Ordinario, con 20.330 MW en 2017) tiene una
vida de menos de 35 años . C ons iderando una vida útil de 35 años para el equipo
electromecánico y de 65 años para la obra civil, exis tiría aún una parte de la invers ión muy
s ignificativa por amortizar. 224 Además , muchas de las unidades hidráulicas de menor
tamaño y las unidades mini-hidráulicas fueron cons truidas en los últimos 30 años .

224
Además de las inversiones pendientes de amortizar en unidades de menos de 35 años , hay que tener en cuenta las inversiones
realizadas en el equipo electromecánico en las centrales de más de 35 años que s iguen en funcionamiento.

215
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

Año de
Central puesta en Potencia [MW]
servicio
Aguayo 1982 362
Aldeadávila I 1962 792
Aldeadávila II 1986 435
Belesar 1963 225
Bolarque 1973 208
Cedillo 1976 473
Conso 1975 228
Costés II 1988 280
T abla 6-6. C entrales Estany Gento-Sallente 1985 451
hidroeléctricas en Guillena 1973 210
E s paña de más de 200 José Mª Oriol (Alcántara) 1969 934
MW . La Muela 1989 628
Mequinenza 1964 324
Fuente: UNESA y Moralets 1985 221
MINETAD. Puente Bibey 1964 285
Ribarroja 1967 263
San Esteban 1955 265
Saucelle I 1956 247
Saucelle II 1989 269
Soutelo 1994 206
Tajo de la Encantada 1977 360
Valdecañas 1964 225
Villarino 1970 810
TOTAL 8.701
TOTAL CON MENOS DE 35 2.852
AÑOS (32,7 % del
t t l)

• La hidráulica requiere ingres os unitarios elevados . S e tiende a confundir tener ingres os


unitarios elevados con tener una rentabilidad elevada. E n primer lugar, la rentabilidad
dependerá de los costes que s e tengan, que como s e ha expues to no s on ni mucho menos
nulos . P ero un hecho muy relevante, y que s e s uele olvidar, es que las hidráulicas
producen muy poca energía en relación con s u potencia ins talada. De hecho, funcionan
pocas horas al año y es en es as pocas horas en las deben recuperar tanto el cos te
variable como el fijo. As í, aunque la gestión eficiente hace que es as pocas horas de
producción s e concentre en los momentos de mayores precios (en los que más coste
ahorra al s istema al s ustituir a centrales térmicas caras), el margen obtenido es neces ario
para cubrir la totalidad de los costes fijos y variables incurridos en el año. E s decir,
confundir ingres os unitarios recibidos con ingres os abs olutos es erróneo. Los ingres os
abs olutos s e obtienen multiplicando los unitarios por el número de horas y, en es e s entido,
a diferencia de otras tecnologías que producen entre 5.000 y 8.000 horas al año, la
hidráulica tiene unas horas de utilización de s u potencia máxima por debajo de las 1.500
horas .

• P or todo lo anterior, el argumento de que las centrales hidráulicas obtienen márgenes


“exces ivos ” no es tá justificado, debido a unos cos tes muy s uperiores a los comúnmente
percibidos y a la neces idad de obtener ingres os unitarios elevados (para poder retribuir los

216
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

elevados cos tes de invers ión mediante los ingres os obtenidos en las es cas as horas de
funcionamiento).

• Las centrales nucleares tienen unos costes variables que han crecido s ignificativamente en
los últimos años . E ntre es tos s e encontrarían el precio del propio combustible nuclear (de 7
$/lb en 2000 a cerca de 23,5 $/lb en 2017) 225, los corres pondientes a la s egunda parte del
ciclo del combus tible nuclear, s eguros , as í como el incremento de diferentes tas as y
tributos, teniendo en cuenta que la regulación es pañola ha llevado a los generadores a
as umir todos es os cos tes (no repercutibles en el mercado mayoris ta al tratars e de una
tecnología s ubmarginal) que antes estaban parcialmente reflejados en las tarifas .

• Las centrales nucleares no es tán totalmente amortizadas . Como se puede observar en la


Tabla 6-7, la construcción de las centrales nucleares es relativamente reciente en relación
con la vida administrativa considerada (40 años). Así, un monto muy significativo de la
inversión está aún pendiente de ser amortizada.

Central Primera conexión Potencia


(MW)
SªMª de Garoña 1971 466
Almaraz I 1981 977
Tabla 6-7. Centrales nucleares Almaraz II 1983 980
en España. Ascó I 1983 1.033
Ascó II 1985 1.027
Fuente: UNESA. Cofrentes 1984 1.092
Vandellós II 1987 1.087
Trillo 1988 1.066
TOTAL 7.728

Creación de mercados específicos para cada tecnología. Resulta importante recordar que en
un mercado competitivo (ver Formación de precios en el mercado mayorista diario de electricidad):

• El “kWh” es un producto homogéneo, independientemente de la tecnología utilizada.

• El precio tiende hacia el coste de entrada, con independencia del diseño del mercado
(marginalista o “pay as bid”).

• Conforme la demanda va superando a la oferta disponible, el precio medio del mercado se


incrementa al haber mayor escasez de energía.

• Se producirá entrada de nueva generación cuando la expectativa del precio del mercado
sea mayor o igual al coste total de dicha nueva generación (o coste de entrada, condición
necesaria para recuperar la inversión).

• El margen entre el precio y el coste variable (diferente del “coste de oportunidad” utilizado
por las centrales para realizar sus ofertas) es lo que permite a una central recuperar su
coste fijo.

• La amenaza de entrada elimina cualquier incentivo a ejercer poder de mercado (ver


Competencia y poder de mercado).

225
Ver Cameco Uranium spot prices

217
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

• C ualquier dis tors ión a la formación de precios redunda en una menor eficiencia, en
perjuicio de los cons umidores .

C on es to s e tiene ya un marco conceptual con el que evaluar una pos ible reforma del dis eño del
mercado, en el s entido de s eparar el mismo por tecnologías . C on es ta reforma s e pretendería
evitar que algunas tecnologías obtengan márgenes “exces ivos ”, ya que s e s upone que es la
competencia entre todas las tecnologías en un único mercado lo que da lugar a dicho margen
“exces ivo”.

As í, y s i fuera pos ible delimitar es tos “exces os ” y fuera conveniente intervenir, aplicando el anterior
marco conceptual, s urgen cuanto menos las s iguientes dudas :

• ¿ C uándo operarían, en qué orden y qué vínculos deberían es tablecers e entre los dis tintos
mercados para s atisfacer a la demanda (indeferenciable) de todo el mercado?

• ¿ C ómo s e determinaría la producción de cada tecnología en cada mercado de forma que


s e as egure el us o eficiente de los recurs os ? O lo que es lo mis mo, ¿ cómo as egurar que
cada central produce lo mis mo que lo que produciría en el cas o de haber un único
mercado para todas las tecnologías ?

• ¿ C ómo se eliminarían los arbitrajes entre los diferentes mercados , dado el hecho
incues tionable de que al final el producto en todos ellos es el mismo?

• ¿ S erían mercados marginalis tas o “pay as bid”? Si marginalistas, ¿cómo recuperarían las
centrales sus costes fijos? Y si son mercados “pay as bid”, ¿cómo se evitaría que centrales
con costes fijos bajos pero con costes variables elevados funcionaran más horas que
centrales con menores costes variables?

• Si las centrales hidráulicas compiten entre sí, ¿cómo se aseguraría el uso eficiente de la
capacidad hidroeléctrica disponible en cada momento?, ¿cómo se utilizarían las centrales
de bombeo?

• ¿Habría que discriminar las importaciones según su tecnología?

• ¿Cómo se asignaría la demanda entre los diferentes mercados? ¿Qué clientes podrían
comprar en el mercado barato y cuáles tendrían que hacerlo en el caro?

Resulta difícil encontrar respuestas a las cuestiones anteriores que sean compatibles con los
principios que emanan de las Directivas europeas sobre el Mercado Interior de energía y con la
legislación vigente. De hecho, un diseño de mercado eléctrico basado en mercados específicos
por tecnología estaría sujeto necesariamente a un elevado grado de intervención (en línea con el
marco regulatorio vigente con anterioridad a 1998 –Marco Legal y Estable) y supondría un paso
atrás en el proceso de liberalización y desarrollo de los mercados de energía.

En realidad, cualquier diseño de mercado que resulte en precios diferentes para energía
suministrada en el mismo instante y el mismo lugar distorsionará las señales de inversión y de
consumo, redundando en decisiones de inversión y consumo ineficientes, lo cual en última
instancia va en perjuicio de los consumidores. De hecho, este planteamiento no se aplica en
ningún mercado en los que también existen distintas tecnologías (o tecnologías con distinto grado

218
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

de evolución) para producir un mismo bien, como puede s er, por ejemplo, el mercado del petróleo,
el de los cultivos (s ecano frente a regadío), el turis mo, etc.

Imposición de tasas ad-hoc a determinadas tecnologías. Suponiendo que es la competencia


entre todas las tecnologías de generación en un único mercado lo que da lugar al supuesto
margen “excesivo” de algunas de ellas, una alternativa a la reforma del mercado anteriormente
discutida podría buscarse en la fiscalidad. Efectivamente, podría considerarse la posibilidad de
imponer tasas específicas a aquellas tecnologías que supuestamente obtienen márgenes
“excesivos” en el mercado.

Esta posibilidad ya ha sido considerada por el Gobierno hasta tal punto que en diciembre de 2012
el Gobierno aprobó la Ley 15/2012 de medidas fiscales para la sostenibilidad energética en la que
se crean, además de un impuesto común a todas las tecnologías sobre el valor de la producción
de la energía eléctrica con un tipo del 7%, impuestos específicos para las tecnologías hidráulica y
nuclear.

Para analizar los efectos/eficiencia de esta nueva situación se propone un ejemplo. Supongamos
dos empresas con un cash-flow de 100 M€ generado por sus instalaciones existentes. Basándose
en un marco regulatorio no expropiatorio, una decide reinvertirlo en una central nuclear o
hidráulica (mejora de sus procesos, prolongación de su vida útil, etc.) bajo la expectativa de que
en el futuro la electricidad generada con tecnologías no emisoras de gases de efecto invernadero
tendrá un valor diferencial. La otra empresa, sin embargo, opta por invertir en
telecomunicaciones. Si pasado el tiempo la primera ha acertado en sus previsiones y la
Administración considera que dicho acierto es un beneficio extraordinario y se expropian sólo las
plusvalías que genera la tecnología nuclear y/o hidráulica, ¿no se está realizando un tratamiento
asimétrico y discriminatorio al no expropiar las plusvalías de quien invirtió en telecomunicaciones,
sector no sujeto a la súbita expropiación que se hace en el sector eléctrico?

Otra justificación de la intervención podría buscarse en la percepción de que las inversiones en


determinadas tecnologías (principalmente nuclear e hidráulica) se realizaron en un contexto
histórico de planificación centralizada. Sin embargo, en el momento en que se acometieron las
inversiones en estas tecnologías existía libertad de inversión por parte de las empresas, con lo
que cualquier empresa podía de hecho invertir en capacidad de generación hidráulica o nuclear.

Un problema adicional de este tipo de intervención sería la distorsión de los incentivos de los
agentes que invierten en un entorno de mercado, pues, salvo que se garantizara una rentabilidad
determinada a posteriori, ¿qué justificación tendrían las inversiones en mejora de la explotación y
prolongación de la vida útil de las centrales? ¿Qué incentivos tendrían los generadores en invertir
en extensiones de vida y mejoras si no se les permite alcanzar beneficios con los que justificar
dichas inversiones?

Finalmente, en el caso de la generación hidráulica, otro argumento con el que se podría tratar de
justificar la posible intervención (la introducción de tasas ad-hoc) es la percepción de
“agotamiento” de las tecnologías; esto es, la imposibilidad de invertir en nueva capacidad de
generación hidráulica por falta de ubicaciones para nuevos embalses, etc. Sin embargo, esto no
es necesariamente cierto. En Portugal se han resuelto concursos para construir cerca de 2.000
MW de nueva capacidad hidráulica regulable.
En España, según las estimaciones del IDAE, se podrían instalar otros 6.700 MW más, aparte de
los aproximadamente 2.000 MW que ya hay disponibles.

Este tipo de actuaciones regulatorias se encuadrarían en el ámbito de los “windfall profits” (ver La
internalización del coste del CO2 en el precio de la energía y Windfall profits y windfall losses),

219
E lectricidad
6. E l mercado
mayoris ta

los cuales llevan a una economía altamente intervenida e inevitablemente ineficiente, ya que se
des incentiva la toma de riesgos, la innovación y la productividad (cualquier tipo de ganancia de
eficiencia corre el riesgo de s er confiscada por el regulador, por lo que los invers ores pierden los
incentivos a pers eguirlas).

E n último término, es te tipo de intervenciones inevitablemente dañan la percepción de ries go


regulatorio/s eguridad jurídica, no s ólo de la actividad directamente afectada, s ino del conjunto de
actividades económicas , lo que repercute negativamente s obre la valoración del riesgo del país .

220
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

7. P eajes de acces o, cargos y déficit tarifario


7.1 Los peajes de acces o y cargos : es tructura, cos tes y liquidación de los
ingres os
Los peajes de acceso. Las redes de transporte y distribución permanecen bajo un esquema
regulado por ser actividades que, dadas sus características intrínsecas, son monopolios naturales
(ver Actividades reguladas en el sector eléctrico). Por este motivo, los costes de las redes (junto
con los cargos) son repercutidos a todos

los consumidores según sus características, independientemente de que se adquiera la energía a


precio libre o precio regulado (ver El precio voluntario para el pequeño consumidor), a través de
los peajes de acceso y cargos. Estos peajes son fijados por el Ministerio de Energía, Turismo y
Agenda Digital y deben ser revisados anualmente 226, aunque en circunstancias que afecten de un
modo relevante a los cos tes regulados , el Minis terio podrá hacer revis iones con una periodicidad
máxima trimestral. 227

Los peajes de acces o s on únicos en todo el territorio es pañol228, con independencia de las
particularidades económicas y geográficas de las redes en las dis tintas zonas en las que s e
ubican los cons umidores , y deben s er calculados , junto con los cargos , para cubrir todos los
cos tes del s is tema exceptuando el cos te de la energía y el cos te de ges tión del comercializador.

Los peajes de acces o es tán compues tos de un término de potencia (T p) y un término de energía
(T e). De esta manera, el cos te de acces o depende tanto de la potencia que el cons umidor tenga
contratada (término fijo, debido a que las redes deben s er dis eñadas para garantizar en cualquier
momento el s uminis tro de las potencias que los cons umidores tienen contratadas) como del
cons umo que haya realizado (término variable, en función del cons umo de energía que haya
circulado por la red). Los peajes de acces o en vigor des de el 23 de diciembre de 2016, s on los
mos trados en la T abla 7-1 exceptuando las tarifas de baja tens ión 2.0A y 2.1A s in dis criminación
horaria (DH), el precio de los términos de energía y potencia varía en función del momento o
período en que s e realice el cons umo.

E s to es as í para reflejar que el cons umo de energía no tiene el mis mo cos te en una hora punta (a
la que hay mayor demanda y por tanto los costes s on mayores) que en una hora valle (en la que
los cos tes s on menores ). Las horas de punta, llano y valle de las tarifas de 2 y 3 periodos varían
s egún s ea verano o invierno, y s on las que s e detallan en la T abla 7-1. E stos términos recogen los
recientes cambios de es tructura de la tarifa, que dan más pes o al término de potencia (con
incrementos s uperiores a 150% para la tarifa 3.0 A, de cons umidores de más de 15 kW de
potencia contratada en B T , e inferiores para el res to de tarifas res pecto a los valores anteriores ) y
menor pes o al término de energía.

226
Des de s eptiembre de 2010 has ta julio de 2012, cuando el R eal Decreto Ley 20/2012 la derogó, la revisión podía s er trimes tral.
227
P recepto incluido en el R eal Decreto ley 9/2013 de julio de 2013.
228
La ley vigente del s ector eléctrico (Ley 54/1997, de 27 de noviembre), permite que las actividades eléctricas s ean gravadas con
tributos de carácter autonómico o local que podrán dar lugar a un suplemento territorial al peaje de acces o que podría s er diferente en
cada C omunidad autónoma o entidad local.

221
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Tarifas BT
Colectivo de Tp [€/kW y
Te [€/kWh]
aplicación año]

P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3 P eriodo 4

2.0 A P c ≤ 10kW 38,043426 0,043187 - - -

2.0 DHA P c ≤ 10kW 38,043426 0,062012 0,002215 - -

2.0 DHS P c ≤ 10kW 38,043426 0,062012 0,002879 0,000886 -

2.1 A 10kW < P ≤15kW 44,444710 0,05736 - - -

2.1 DHA 10kW < P ≤ 15kW 44,444710 0,074568 0,013192 - -

2.1 DHS 10kW < P ≤ 15kW 44,444710 0,074568 0,017809 0,006596 -

Colectivo de
Tp [€/kW año] Te [€/kWh]
aplicación

P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3 P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3

3.0 A P c > 15kW 40,728885 24,437330 16,291555 0,018762 0,012575 0,004670

Tarifas AT
Colectivo de
Tp [€/kW año] Te [€/kWh]
aplicación

P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3 P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3

3.1 A 1 kV < T ≤ 36kV 59,173468 36,490689 8,3677310 0,014335 0,012754 0,007805

Colectivo de
Tp [€/kW año]
aplicación

P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3 P eriodo 4 P eriodo 5 P eriodo 6

6.1A 1 kV < T ≤ 30 kV 39,139427 19,586654 14,334178 14,334178 14,334178 6,540177


6.1B 30 K V < T < 36 K V
31,020989 15,523919 11,360932 11,360932 11,360932 5,183592
6.2 36 kV < T ≤ 72 kV 22,158348 11,088763 8,115134 8,115134 8,115134 3,702649
72 kV < T ≤ 145
6.3 kV 18,916198 9,466286 6,927750 6,927750 6,927750 3,160887
6.4 T > 145 kV
13,706285 6,859077 5,019707 5,019707 5,019707 2,290315
C onexiones
6.5 internacionales 13,706285 6,859077 5,019707 5,019707 5,019707 2,290315
Colectivo de
Te [€/kWh]
aplicación

P eriodo 1 P eriodo 2 P eriodo 3 P eriodo 4 P eriodo 5 P eriodo 6

6.1A 1 kV < T ≤ 36 kV
0,026674 0,019921 0,010615 0,005283 0,005283 0,002137
6.1B 30 K V < T < 36K V
0,021822 0,016297 0,008685 0,004322 0,002791 0,001746
6.2 36 kV < T ≤ 72 kV
0,015587 0,011641 0,006204 0,003087 0,001993 0,001247
6.3 72kV < T ≤ 145 kV
0,015048 0,011237 0,005987 0,002979 0,001924 0,001206
6.4 T > 145 kV
0,008465 0,007022 0,004025 0,002285 0,001475 0,001018
C onexiones
6.5 internacionales 0,008465 0,007022 0,004025 0,002285 0,001475 0,001018

T abla 7-1. P eajes de acces o de energía eléctrica para 2017

Fuente: IDAE y elaboración propia.

222
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

E l 1 de octubre de 2011 entraron en vigor los nuevos tipos de tarifas de acces o s upervalle
aplicables a s uminis tros en baja tens ión (1 kV o menos ), la 2.0 DHS , para cons umidores con una
potencia contratada menor o igual a 10 kW , y la 2.1 DHS , para los que tienen una potencia
contratada mayor que 10 kW y menor o igual a 15 kW . E stas tarifas de acces o están dis eñadas
es pecialmente para la actividad de los ges tores de cargas del s istema, agentes que ofrecen
s ervicios de recarga energética (e.g. de vehículos eléctricos ).

DH en las tarifas de acceso BT y AT (T≤36kV)


2.0DHA y 2.1DHA, 2p (BT con Pc ≤ 15 kW)
11 12 13 14 11 12 13 14
10 10
9 15 9 15
8 16 8 16 10 h diarias de punta
7 17 7 17
6 VERANO
INVIERNO 18 6 INVIERNO
INVIERNO 18 14 h diarias de valle
5 19 5 19
4 20 4 20
3 21 3 21
2 22 2 22
1 0 23 1 0 23

2.0DHS y 2.1DHS, 3p supervalle (BT con Pc ≤ 15 kW)


11 12 13 14
10
9 15
8 16 10 h diarias de punta
7 INVIERNO 17
6 INVIERNO 18 6 h diarias de supervalle
5 Y VERANO 19
4 20 8 h diarias de llano
3 21
2 22
1 0 23

3.0A, 3p (BT con Pc > 15 kW) (**)


F igura 7-1. P eríodos de
cons umo punta, valle y 9
10
11 12 13 14
15 9
10
11 12 13 14
15
8 8 4 h diarias de punta
llano 7
16
17 7
16
17
6 INVIERNO 18 6 VERANO 18 8 h diarias de supervalle
5 19 5 19
4 20 4 20 10 h diarias de llano
Fuente: Elaboración propia. 3
2 22
21 3
2 22
21
1 0 23 1 0 23

3.1A, 3p (AT con T≤36kV)


Lunes a viernes laborales
11 12 13 14 11 12 13 14
10 10
9 15 9 15
8 16 8 16 6 h diarias de punta
7 17 7 17
6 INVIERNO 18 6 VERANO 18 8 h diarias de valle
5 19 5 19
4 20 4 20 10 h diarias de llano
3 21 3 21
2 22 2 22
1 0 23 1 0 23

Sábado, domingo y festivos nacionales


11 12 13 14 11 12 13 14
10 10
9 15 9 15
8 16 8 16 18 h diarias de punta
7 17 7 17
6 INVIERNO 18 6 VERANO 18 6 h diarias de llano
5 19 5 19
4 20 4 20
3 21 3 21
2 22 2 22
1 0 23 1 0 23

(**) Para suministros fuera del territorio peninsular los horarios son diferentes

Adicionalmente, a todas las tarifas anteriores se les aplica un recargo por energía reactiva en caso
de que el factor de potencia 229 s ea inferior a 0,95 y un recargo por exces o de potencia en cas o de
que la potencia demandada s upere la contratada.

Peajes de acceso para las instalaciones de A finales de 2011, el


generación. A finales del año 2011, el Gobierno aprobó
G obierno aprobó la
aplicación de un peaje para
229 laseninstalaciones
El factor de potencia es un indicador que describe la cantidad de energía eléctrica que se convierte de
trabajo en una determinada

suministrar un determinado nivel de consumo, debido a mayores pérdidas de red, etc.generación,


La energía reactiva con
puede el
estarobjetivo
instalación. Si es menor que 1, existe energía reactiva, lo que implica que se requiere una mayor cantidad de energía generada para
causada por
de corregir el déficit tarifario
equipamientos eléctricos como resistencias, motores, transformadores, condensadores, etc.

223
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

mediante el R eal Decreto 1544/2011 230 la aplicación de un nuevo peaje de acces o a las redes de
trans porte y dis tribución para las ins talaciones de generación, tal y como preveía la Ley del S ector
E léctrico (Ley 54/1997) y en el contexto de las medidas adoptadas en el R eal Decreto-ley
14/2010 231 para corregir el déficit tarifario.

E l nuevo peaje es aplicable a todas las ins talaciones de generación, tanto del régimen ordinario
como del es pecial, des de el 1 de enero de 2011 y tiene un valor de 0,5 €/MW h, valor máximo
aplicable s egún la normativa europea.

Cargos. La ley 24/2013 232, del 26 de diciembre, diferencia los peajes de los cargos para ajustarse
a la terminología utilizada en las directivas europeas y a la conveniencia de diferenciar 1) los
pagos por contribución a la cobertura de los costes de las redes de transporte y distribución,
peajes, 2) de aquellos pagos relacionados con otros aspectos regulados del sistema, cargos.

Así, entre otros, los cargos cubrirán el régimen retributivo específico de la actividad de generación
a partir de fuentes de energía renovables, cogeneración de alta eficiencia y residuos, retribución
del extracoste de la actividad de producción en los sistemas eléctricos en los territorios no
peninsulares con régimen retributivo adicional, retribución asociada a la aplicación de mecanismos
de capacidad y anualidades correspondientes a los déficit del sistema eléctrico, con sus
correspondientes intereses y ajustes.

Al igual que los peajes, los cargos son únicos en todo el territorio nacional y se establecerán
anualmente de acuerdo con la metodología que establezca el Gobierno.

Concepto de aditividad. De manera genérica, los componentes del precio final de la electricidad
para los consumidores serían los que aparecen en la Figura 7-2. Para garantizar el principio de
suficiencia de ingresos (que éstos sean suficientes para la cobertura de todos los costes
regulados del Sistema) y para generar señales económicas eficientes, los peajes de acceso deben
ser calculados por la Administración como la adición de todos los costes que los componen. Los
peajes así diseñados se conocen como tarifas aditivas y suficientes. De esta manera, junto con la
señal de precio de la energía en el mercado que le debe llegar al consumidor, se refleja el coste
social de consumir electricidad en cada momento y en cada nivel de tensión de la red,
incentivándose un consumo y unas decisiones de inversión eficientes.

230
Ver el Boletín de Energía y Sociedad nº 66, 29 de diciembre de 2011.
231
Ver resumen de Energía y Sociedad del Real Decreto-ley 14/2010.
232
Ver Ley 24/2013

224
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Coste de la
energía

Margen comercialización

F igura 7-2. E structura del cos te Transporte


de s uminis tro Distribución
Gestión Comercial
Fuente: Elaboración propia Operador del Sistema y
Comisión Nacional de
Energía
Déficits años anteriores Peaje de Acceso
Retribución específica
Generación RECORE
Otros Costes
(Extrapeninsulares,
residuos nucleares,
gestión de la demanda)
COSTE DEL SUMINISTRO

Si el nivel del peaje de acceso no es suficiente para asegurar la cobertura de dichos costes, se
producirá un déficit de recaudación (ver Peajes de acceso, cargos y déficit tarifario). La existencia
de este déficit, produce los siguientes efectos negativos para el Sistema:

• Debe s er pagado en el futuro por los cons umidores , incrementado por el cos te financiero,
lo que provocará un aumento de los peajes futuros para s u recuperación. Mientras s e
produce dicha recuperación, el déficit debe ser financiado por cinco empres as eléctricas.
P os teriormente, la Ley 24/2013 establece que el déficit s erá financiado por todos los
s ujetos del s istema de liquidación en función de los derechos de cobro que generen.

• Incrementa el riesgo regulatorio percibido por los agentes del s ector, por lo que éstos o
bien exigirán una mayor rentabilidad por sus invers iones (al exis tir una mayor
incertidumbre res pecto a que los ingres os cubran los cos tes), o bien no tendrán incentivos
para arries gar s u capital en actividades cuyos ingres os no cubren cos tes (efecto de
detracción de la invers ión).

• P res enta problemas de eficiencia, porque bajar los precios de la electricidad de forma
artificial favorece el consumo, yendo en contra de uno de los objetivos claves de la política
energética europea y nacional, como es la eficiencia energética (ver E ficiencia energética y
s u potencial).

• P erjudica el medioambiente, porque favorecer un mayor cons umo, no s ólo implica producir
más energía, s ino que obliga a funcionar a centrales de generación más ineficientes des de
el punto de vis ta medioambiental, generando más emis iones de C O 2, NOx, partículas y
S O 2, lo cual aleja a E s paña aún más del cumplimento de los compromisos internacionales

225
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

adquiridos en materia medioambiental (ver El Esquema "Cap and Trade” en Europa y los
incentivos a reducir emisiones).

• Aumenta la dependencia energética, porque dicho cons umo adicional obliga a generar
más electricidad con fuentes de energía de terceros país es , agravando la s ituación de la
balanza comercial de la economía es pañola (ver S eguridad de s uminis tro).

Desglose de los costes regulados o de acceso y los cargos. El detalle de los costes
estimados de las distintas actividades del Sistema Eléctrico que se deben recuperar vía los peajes
de acceso y cargos (también conocidos como costes del ATR, o Acceso de Terceros a la Red) en
el año 2017, son los que se muestran en la Tabla 7-2.

De esta manera, para que en el año 2017 no se produjera déficit, se deberían recaudar 17.878 M€
a través del cobro de los peajes de acceso.

Costes de acceso [Miles €] 2017e


Coste Transporte 1.735.090
Coste Distribución y Gestión Comercial 5.157.776
Tasa de la CNMC (Sector Eléctrico) (0,15%) 20.512
Tabla 7-2. Previsión de los Parte del ciclo de combustible nuclear (0,001%) 137
costes de actividades 2017. Retribución específica RECORE sistema peninsular 6.987.080
Retribución sistemas no peninsulares 740.632
Fuente: Informe sobre la Sistema de interrumpibilidad SNP 8.300
liquidación provisional 1/2017 Costes Pagos por Capacidad 390.000
del sector eléctrico. Análisis de
resultados y seguimiento Incentivo a la Inversión 223.000
mensual de la proyección anual Incentivo a la disponibilidad 167.000
de los ingresos y costes del
Pagos de anualidades déficit de actividades reguladas 2.838.359
sector eléctrico y elaboración
propia Fondo de titulación 2.185.022
Déficit ingresos liquidaciones de actividades reguladas
2005 281.138
Déficit ingresos liquidaciones de actividades reguladas
2007 94.437
Déficit ingresos liquidaciones de actividades reguladas
2013 277.761
Total Costes 17.877.886

Agregados por conceptos, los costes de acceso y cargos han presentado una evolución en el
tiempo como la recogida en la Figura 7-3.

226
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

2
21,14
1 20,51
0
9 18,31 18,44
17,75 17,88
8
16,81 16,96
7
6 15,69
5
4

F igura 7-3. E volución de 3 12,47

los cos tes de AT R .


2
1
10,02
0
9
Fuente: Liquidaciones 8 7,77
7,16 6,92
provisionales de las 7 6,266,32 5,97
6 5,72
actividades reguladas del
5
sector eléctrico CNMC y 4
elaboración propia. 3
2
1
0
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017e

Cuotas y otros costes regulados Retribución específica generación RECORE Transporte


Desajuste tarifario y servicio de la deuda Distribución

Se puede apreciar el fuerte incremento de costes que han supuesto las primas a las instalaciones
del régimen especial ahora denominado instalaciones de energía renovables, cogeneración y
residuos 233 des de 2006. Además , el aumento de los cos tes corres pondientes a “Des ajuste tarifario
y s ervicio de la deuda” se debe fundamentalmente a las anualidades para recuperar los déficits de
ingres os que s e han producido des de dicho año 2006.

Adicionalmente, dentro de los costes previs tos por la retribución es pecífica de la generación
R E C OR E para el año 2017, el desglos e por tecnologías es el que s e mues tra en la T abla 7-3.

Desglose retribución específica RECORE


Millones de € %
S olar F V 2.482 35%
E ólica 1.424 20%
T abla 7-3. R etribución es pecífica previs ta de las
S olar T E 1.321 19%
ins talaciones de producción a partir de fuentes
C ogeneración 1.112 16%
renovables , cogeneración y alta eficiencia y res iduos
para el año 2017. B iomas a 302 4%
R es iduos 144 2%
T rat.
Fuente: Liquidaciones CNMC y elaboración propia. R es iduos 117 1%
Hidráulica 81 1%
Total 6.987 100%

P or otro lado, en la evolución de los cos tes de acces o des taca que los cos tes de las actividades
propiamente de red (trans porte y dis tribución) han crecido a un ritmo muy inferior al de partidas

233
E l incremento de las primas del régimen es pecial y del déficit tarifario acumulado llevó al G obierno a s us pender la concesión de
primas a nuevas ins talaciones del régimen es pecial a finales de enero de 2012 (ver el B oletín de E nergía y S ociedad nº 69, 16 de
enero de 2012).

227
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

como la retribución específica a las ins talaciones de energía renovables , cogeneración y res iduos
o los costes permanentes , perdiendo paulatinamente pes o dentro de los costes totales del
S is tema. As í, los costes de trans porte y dis tribución han pas ado de representar el 54% del total de
cos tes de acces o a la red en el año 2000 a un 39% en el año 2017 (10% trans porte y 29%
dis tribución) (F igura 7-4).
100%
6%
90%
16%
Evolución de los costes de acceso [%]

80%

F igura 7-4. E volución 70%


de los costes en
60%
porcentaje total. 39%

50%

Fuente: Liquidaciones 40%


provisionales de las
30% 45%
actividades reguladas
del sector eléctrico 29%
20%
CNMC y elaboración
propia. 10%
9% 10%
0%
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 20162017e

Cuotas y otros costes regulados Retribución específica generación RECORE Transporte


Desajuste tarifario y servicio de la deuda Distribución

Liquidación de los ingresos por el MINETAD. Es importante resaltar que las empresas de
distribución no retienen los ingresos procedentes de la facturación de los peajes de acceso y
cargos, sino que actúan como meros recaudadores del Sistema. Los ingresos correspondientes a
estos peajes y cargos pasan a formar parte del sistema de liquidaciones de las actividades
reguladas. Se siguen liquidando de forma transitoria por la CNMC, pero se prevé que esta función
pase a manos del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital (MINETAD) según se establece
en la Ley 3/2013 234.

De es ta forma, el MINE T AD, aún la C NMC de forma trans itoria, s erá el agente res pons able de
efectuar las liquidaciones a los agentes con derechos de cobro y agentes con obligaciones de
pago de las actividades reguladas en el s is tema eléctrico es pañol. La neces idad de es te s is tema
de liquidaciones proviene de la exis tencia de una tarifa única para todo el territorio nacional que
recauda de los cons umidores para retribuir a todas las actividades reguladas .

E n es te proces o de liquidaciones , s e establecen los cobros y pagos que corres ponden a cada uno
de los dis tintos agentes en bas e a los ingres os recaudados por éstos por la aplicación de los
peajes regulados y a los cos tes que originan las retribuciones reales que corres ponden a cada
uno de ellos por la actividad que realizan. De manera esquemática, el proces o s e des cribe en la
F igura 7-5.

234
V er Ley 3/2013

228
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Clientes
Comercializadores 1
CUR
7
Empresas Distribuidores
eléctricas Generadores
obligadas a
financiar
F igura Peajes de acceso
Déficit CNMC
7-5.
FADE y otras
E s quema MINETAD
6 entidades Costes con
de la finan. Transitoriamente destino
Moratoria
liquidación Entidades está realizando específico
de los financieras esta función la
2ºPCCN 2
CNMC
ingres os y
Actividades reguladas
cos tes
Productores
regulados . Distribuidores
REE y
en régimen
Operador del
sistema especial
Fuente: 5
Transportista Retribución
Elaboración Saldo
3
Pagos por específica
propia. pérdidas Generación
capacidad
RECORE
4 Tránsitos/Peajes
Interrumpibilidad
internacionales

1. Los comercializadores y los consumidores directos en el mercado abonan al distribuidor los


peajes de acceso y cargos que les correspondan. Igualmente, los generadores abonan a
transportistas y distribuidores las cantidades resultantes de la aplicación de los peajes de
acceso y cargos de las instalaciones de generación. Transportistas y distribuidores entregan
las cantidades recaudadas al MINETAD.

2. El MINETAD abona los denominados costes con destino específico.

3. El MINETAD abona los complementos a las instalaciones de producción en régimen especial


cambiado de denominación en la Ley 24/2013 por instalaciones de energía renovables,
cogeneración y residuos.

4. Se ajusta con Red Eléctrica de España el saldo de ingresos y cobros que ha realizado como
Operador del Sistema (pagos por capacidad, incentivo a la inversión y disponibilidad a
centrales de generación, y complemento retributivo a las centrales de carbón nacional por el
proceso de restricciones por garantía de suministro, pagos por interrumpibilidad a los grandes
consumidores, ajustes de los intercambios de energía internacionales y saldos de pérdidas en
la red).

5. Se abona la retribución de las actividades reguladas (transporte y distribución).

6. Se abonan las anualidades para amortización de los déficits al FADE (ver Peajes de acceso,
cargos y déficit tarifario) y otras entidades financiadoras.

7. Se abonan otros costes regulados, tales como bono social, desvíos de los sobrecostes
extrapeninsulares, etc.

229
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Has ta el momento, de acuerdo con la Ley 3/2013, de 4 de junio, el órgano encargado de realizar
las liquidaciones previs ta en el R eal Decreto 680/2014 s erá la C NMC has ta que el MINE T AD
as uma es tas funciones .

E l s aldo pendiente (pos itivo o negativo) s irve para ajus tar el déficit (reducirlo o aumentarlo) y es
abonado por las empres as eléctricas obligadas a financiarlo (ver P eajes de acces o, cargos y
déficit tarifario).

230
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

7.2 E l déficit tarifario: qué es, cons ecuencias y s olución


El déficit tarifario. El déficit de tarifa es la diferencia entre el monto total recaudado a través de
los peajes de acceso a las redes y cargos (precios regulados que fija la Administración y pagan
los consumidores por acceder al Sistema) y los costes reales asociados a dichas tarifas (costes de
transportar, distribuir, subvencionar determinadas energías y otras actividades y servicios que
según el ordenamiento jurídico se retribuyen con cargo al Sistema) (ver Los peajes de acceso y
cargos: estructura, costes y liquidación de los ingresos).

A modo de ejemplo, la Figura 7-6 ilustra el año 2013 dado que fue el último año hasta la fecha en
la que se produjo déficit en el sector. El desajuste entre los costes de suministro eléctrico del año
2013, que ascendieron a 17.596 M€, y los ingresos recaudados a través de los peajes de acceso y
cargos, que ascendieron a 14.056 M€, fue de 3.540 M€.

17.596 3.540
Figura 7-6. Ejemplo del euda 14%

déficit de tarifa porte 9% 14.056


generado en el año
2013 [millones de €]. ución 27%

Fuente: Liquidación
definitiva de las
actividades reguladas del
ecial 53%
sistema eléctrico en el
ejercicio de 2013, CNMC.

ados
Costes incluidos en Ingresos esperados Déficit de tarifas
las tarifas de acceso por los peajes

Origen del déficit tarifario Las diferencias entre la recaudación por peajes y los costes reales
correspondientes se originan básicamente por dos motivos: (i) errores de estimación y
(ii) objetivos políticos/económicos de los sucesivos gobiernos, quienes en último término
establecen los peajes.

Teóricamente, los peajes se determinan como la suma


de los costes en que se incurre para la provisión de un
servicio regulado (ver Actividades reguladas en el
E l déficit tarifario es la
sector eléctrico). Dado que las tarifas se establecen diferencia entre los ingres os
antes de incurrir en ciertos costes (ya que se fijan recaudados a través de las
antes de que se consuma la electricidad, tarifas reguladas y los cos tes
frecuentemente a principios de año), el Gobierno tiene
que realizar previsiones de cuál será el nivel de éstos reales corres pondientes a las
y también de cuáles serán los volúmenes de energía mis mas
que demandarán los diferentes consumidores
(residenciales, industriales, etc.).

Obviamente, estas previsiones están sujetas a errores de estimación. Dos ejemplos de costes que
deben preverse y de posibles errores de estimación asociados a ellos serían los siguientes:

• E l volumen de producción de energía renovable, cogeneración y res iduos . Uno de los


cos tes que s ufragan los peajes es el de las ayudas a las ins talaciones de energía

231
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

renovables , cogeneración y res iduos . S implificadamente, estas ayudas suponen un monto


igual a una prima unitaria equivalente a la diferencia entre el coste de la energía renovable
y el precio de la energía en el mercado mayoris ta (€/MW h) multiplicada por la energía
realmente producida (MW h) (ver E nergías renovables : tecnología, economía, evolución e
integración en el s is tema eléctrico). As í, en el momento de fijar los peajes , es neces ario
hacer una previs ión de cuál s erá el precio de mercado y dicha producción, teniendo en
cuenta que es ta última depende de la capacidad ins talada (invers ión de los productores ) y
de la dis ponibilidad de energía primaria (agua, viento, etc.; variables claramente volátiles ).
E videntemente, es ta previs ión es tá s ujeta a un error que podrá dar lugar a un déficit o un
s uperávit.

• La facturación por aplicación de los peajes . La energía realmente consumida, medida en


los contadores de los cons umidores, es facturada a los peajes previamente establecidos
(p.ej. a principios de año). S i el cons umo real es dis tinto al previs to en el momento de fijar
los peajes , el volumen de ingres os facturado s erá diferente, pudiendo dar lugar a un déficit
(s i la previs ión es mayor de la realidad) o un s uperávit (s i la s ituación es invers a).

E s importante cons iderar que es tos errores de previs ión crearían un déficit coyuntural (no
es tructural) s iempre y cuando la probabilidad de error al alza y a la baja fuera la mis ma a lo largo
del tiempo (lo que técnicamente s e conoce como previs iones centradas o ins esgadas).
E fectivamente, en es te cas o los errores en s entido negativo (déficits ) vendrían a compens ars e con
los errores en s entido pos itivo (s uperávits ) a lo largo del tiempo, con lo que a largo plazo el déficit
promedio o acumulado tendería a s er nulo.

E n E s paña, y des de el año 2000, los s uces ivos peajes aprobados por los gobiernos han generado
reiteradamente déficits de tarifa, que s e han ido acumulando (). C ons iderando el plazo de tiempo
en el que es te fenómeno s e viene obs ervando, s e podría concluir que las previs iones de cos te
utilizadas para determinar los peajes no han s ido objetivas . E s decir, las previs iones de costes
habrían s is temáticamente s ubes timado los costes reales . E sto podría cons iderars e como un
indicio de es trategia/intencionalidad por parte de los suces ivos gobiernos, que de hecho acabaría
por dar lugar a un déficit no ya coyuntural, s ino estructural.

E n es te s entido, s e argumenta frecuentemente que la s is temática divergencia obs ervada entre los
cos tes realmente es perados y los que el regulador cons idera para determinar las tarifas s e debe,
entre otros, al cos te en términos políticos de las s ubidas de precios de electricidad (es pecialmente
relevantes en un entorno de cris is económica y ajuste fis cal con impacto s ignificativo s obre la
renta dis ponible de los ciudadanos y de tendencia al alza en el precio de las materias primas
energéticas), a s u s upues to impacto s obre la inflación o al efecto s obre la competitividad de
algunos s ectores indus triales intens ivos en energía. E s tas motivaciones habrían llevado a que los
gobiernos corres pondientes hubieran preferido cons iderar para la determinación de los peajes los
cos tes “des eados ” en lugar de los costes realmente es perados.

El problema de combinar precios regulados y libres. Inicialmente el déficit de tarifas provino de


la dificultad de combinar el coste de energía implícito en las tarifas integrales (precios finales
aprobados por los gobiernos que integraban costes de acceso y de energía), con los precios
resultantes de la interacción entre la oferta y la demanda en un mercado de energía liberalizado.
Desde el 1 de julio de 2009, fecha de la total liberalización del suministro eléctrico, el déficit de
tarifas no es más que el resultado de la insistente decisión de los sucesivos gobiernos de no
acompasar las subidas de los peajes con el aumento de los costes regulados (ver Actividades
reguladas en el sector eléctrico).

232
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

T odos los país es que han abordado proces os de


liberalización, de una u otra manera, han padecido es te
Desde la liberalización del problema de combinar precios libres y regulados . E l R eino
suministro eléctrico, el Unido y los país es nórdicos de E uropa lo han s olucionado
eliminando las tarifas reguladas mientras que otros , como
déficit de tarifas es el los es tados del es te de E E .UU. y gran parte de
resultado de la decisión de S udamérica, fijan las tarifas mediante la agregación de las
los gobiernos de no retribuciones corres pondientes a todas las actividades
acompasar los eléctricas que la componen (tarifa aditiva que agrega los
cos tes de generación, trans porte, dis tribución y
incrementos de los peajes comercialización). E l problema aparece en los país es que
con los de los costes s eparan la evolución de las tarifas eléctricas con precios
regulados regulados de la evolución de los precios en los mercados
mayoris tas y costes de s uminis tro, como ocurrió en
C alifornia en 2001.

Hay que tener en cuenta que los proces os de liberalización de los s is temas eléctricos comenzaron
en épocas en que las expectativas de evolución de los precios de la energía eran bajis tas. S in
embargo, des de finales de los 90, estas expectativas han dado la vuelta, por la evolución de los
cos tes de las materias primas energéticas y los precios han adquirido una tendencia alcista. Al
cambiar la tendencia de los precios , los gobiernos o las autoridades regulatorias en E s paña
comenzaron a aprobar tarifas reguladas por debajo de los cos tes explícitos de la energía, con el
fin de controlar la inflación o s uavizar las s ubidas a los cons umidores , abandonando, por tanto, el
principio de s uficiencia tarifaria (que los ingres os recaudados por las tarifas reguladas s ean
s uficientes para cubrir todos los costes del s ervicio).

T ambién s e ha argumentado como caus a de es ta divergencia entre tarifas aprobadas y precios


mayoris tas , la falta de “fiabilidad” de es tos últimos . S e han aducido multitud de caus as de
des confianza hacia el precio del mercado:

• E l pos ible ejercicio del poder de mercado de empres as que antiguamente actuaban como
monopolios . S in embargo, no parece s er és te el motivo, ya que no s ólo la evolución pro-
competitiva en E s paña es la mayor de E uropa, s ino que los precios obedecen a los
s ubyacentes de los ins umos para producir electricidad (ver Competencia en el mercado
eléctrico).

• La aparición en Europa del debate sobre la supuesta existencia de “windfall profits” (ver
Windfall profits y windfall losses), o beneficios sobrevenidos, originados por la
implementación del esquema “Cap and Trade” europeo de derechos de emisión, y que ha
afectado a los mercados eléctricos europeos desde 2005 (ver La internalización del coste
del CO2 en el precio de la energía).

• El sistema de fijación de precios del mercado español, marginalista, en el que se basa la


Ley del Sector Eléctrico, cuando es el sistema económicamente más eficiente y cuando
todos los mercados, por definición, son marginalistas (ver Formación de precios en el
mercado mayorista diario de electricidad y Competencia al mercado eléctrico).

Evolución del precio de la electricidad en España. El precio de la electricidad, antes tarifa


media o de referencia, es la suma del precio de la energía más la tarifa de acceso que paga el
conjunto de clientes por sus consumos, antes de impuestos.

233
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

La F igura 7-7 mues tra la evolución del precio de la electricidad en diferentes país es referentes
europeos para un cons umidor medio.

0,26
Alemania

Precio consumidor doméstico medio antes de impuestos [€/KWh]


0,25
F igura 7-7. 0,24
Dinamarca
E volución del Bélgica
0,23
precio de la
0,22
electricidad para
0,21
un cons umidor
0,20
medio (cons umo Italia
0,19 España
de 3.500 kW h) Portugal
0,18
en los EU-28
0,17
principales Reino Unido
país es europeos 0,16 Austria
0,15
Francia
Fuente: Eurostat 0,14
y elaboración 0,13 Holanda
propia 0,12
0,11
2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

Se puede ver que el precio medio para un consumidor doméstico en España oscila en torno a los
0,19 €/kWh antes de impuestos, situando a España como uno de los países Europeos con precios
de la electricidad por encima de la media. Este precio elevado se debe a que actualmente la tarifa
incluye una gran variedad de costes ajenos al suministro que incrementan de manera artificial el
precio de la electricidad.

Los efectos del déficit para consumidores y empresas. La solución adoptada en España de
financiar el déficit tarifario (en la actualidad, la diferencia entre las tarifas de acceso aprobadas por
la Administración y los costes reconocidos de las actividades reguladas) con cargo al consumo
futuro, plantea problemas de eficiencia y barreras al desarrollo de la actividad de comercialización.

Estas son señales contrarias a la eficiencia energética, porque al bajar los precios actuales y
elevar los precios futuros se favorece el incremento del consumo presente en unos momentos en
que la consecución de la eficiencia energética, para facilitar la transición hacia modelos
energéticos más sostenibles que los actuales, constituye un objetivo clave de la política energética
europea.

El mantenimiento artificial de tarifas bajas, por tanto, induce un mayor consumo energético, que
obliga a generar más energía con centrales más ineficientes medioambientalmente hablando,
generando más emisiones de CO2, NOx, partículas y SO2, lo cual aleja a España aún más de los
compromisos internacionales adquiridos en materia medioambiental (ver El esquema “Cap and
Trade” en Europa y los incentivos a reducir emisiones).

Este consumo adicional e ineficiente genera, además, un


empeoramiento del grado de autoabastecimiento energético, E l déficit de tarifa ha
al ser España importador neto de los combustibles s upues to un grave
necesarios para alimentar esos consumos. Dichas
importaciones, tanto de combustibles como de derechos de impedimento al
CO2, empeoran la balanza comercial de la economía des arrollo del mercado
lib

234
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

es pañola (ver Ins ostenibilidad del s is tema energético y vías de s olución).

P or otro lado, y has ta la total des aparición de las tarifas integrales el 1 de julio de 2009, el déficit
de tarifa s upus o un grave impedimento al des arrollo del mercado libre debido a la impos ibilidad de
que los comercializadores pudieran batir en el mercado a unas tarifas integrales (cuyo nivel s e
s ituaba por debajo de los costes que debían cubrir), que s irvieron de refugio a los cons umidores .

La aparente contención de precios que s upone el déficit de tarifas no ha conllevado, s in embargo,


un menor ingres o o quebranto directo para las empres as que realizan las actividades eléctricas.
E fectivamente, por imperativo legal éstas s on retribuidas s egún s u coste reconocido cuando s on
actividades reguladas (redes ) y s egún el precio que emana de los mercados mayoris tas cuando
s on actividades liberalizadas (generación). As í, el déficit tarifario tiene las s iguientes
cons ecuencias para las empres as :

• No es una reducción de s us ingres os, s ino únicamente es un diferimiento de s u cobro por


un monto igual al déficit tarifario.

• Neces idad de tener que financiar (con recurs os propios y/o de terceros) dichos ingres os
diferidos , lo cual les origina un cos te financiero adicional.

S in embargo, la pres ión de la Adminis tración de reducir el déficit tarifario ha llevado a la


aprobación de numerosa regulación cuyo objetivo ha s ido la reducción de cos tes regulados a
través de la disminución de s u retribución y la creación de nuevos impues tos a las empres as
generadoras (con el fin de destinar parte de es ta recaudación a financiar parte de los costes
regulados de la tarifa). E s tas medidas han creado una s ituación de gran incertidumbre regulatoria
en el s ector, estando la percepción del riesgo en E s paña s uperior a la del res to de los país es de
s u entorno (E rror! Not a valid bookmark s elf-reference.).

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Mapa de los
Moderado
riesgos
regulatorios Bajo

en la Unión
Europea.

Fuente:
Elaboración
propia.

Desde el punto de vista de los consumidores, el déficit tarifario no es otra cosa que una deuda con
el Sistema Eléctrico. Más concretamente, y en la medida en que dicha deuda se iría amortizando

235
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

en un cierto número de años , una deuda que s erá pagada por los cons umidores futuros pero
originada por los cons umos pres entes 235.

E n relación con el argumento de controlar la inflación, a veces citado como motivador de las
decis iones políticas de contención tarifaria y que conducen a la creación de déficit, a la vis ta de lo
que éste s ignifica para empres as y cons umidores , s e trataría de un control de la inflación
momentáneo, más aparente que real, al tratars e de una “inflación aplazada” hacia el futuro. De la
mis ma forma, algo s imilar s ucedería con el argumento de que la contención de las tarifas
reguladas protege la competitividad de algunos s ectores indus triales intens ivos en el cons umo de
energía, además de estar introduciendo distors iones adicionales en dichos mercados.

El marco normativo relacionado con el déficit tarifario. El desacoplamiento entre las tarifas
reguladas y los costes incurridos en la provisión de las mismas se articuló principalmente a través
del Real Decreto 1432/2002 236. En esta norma, se fijó una tasa de crecimiento máxima permitida a
las tarifas reguladas, en la medida en que esta tasa de crecimiento máxima era totalmente
independiente de la evolución de los costes realmente incurridos, sujetos a las dinámicas de sus
respectivos mercados.

Los efectos de esta normativa podrían considerarse negativos en términos de eficiencia,


desarrollo de la liberalización y el elevado déficit de tarifas acumulado al que dio lugar (ver Figura
7-9). Efectivamente, el sistema creado:

• E s ins os tenible a futuro, tanto para las empres as (impos ibilidad de financiar continuamente
un déficit acumulado s iempre creciente) 237 como para los cons umidores (inviabilidad en
términos de s eguridad de s uminis tro de un modelo en el que el precio de un producto es
s is temáticamente menor que s u coste).

• R educe los incentivos a la eficiencia, es pecialmente para los cons umidores , los cuales
es tan ais lados de la s eñal de precios del mercado (ineficiencia en el cons umo y en las
decis iones relativas a equipamientos ).

• E s incompatible con la liberalización mis ma, ya que impos ibilita el des arrollo del mercado
de comercialización de electricidad: los s uminis tros a mercado (cuyo precio de s uminis tro
es la s uma del precio de la energía en el mercado más los peajes ) tiene un precio
inevitablemente mayor que el de los s uminis tros regulados (cuyo precio regulado está
limitado por el mencionado R eal Decreto).

235
La cris is financiera y macroeconómica que s e hizo tangible en la última parte del verano de 2008 (y que tenía s u origen en el verano
de 2007) ha pues to de manifies to la dificultad que s upone para las empres as (por ende, para todo el sistema eléctrico) financiar el
déficit tarifario. T ras fracas ar dis tintas estrategias regulatorias para financiar el déficit, el G obierno decidió facilitar la titulización de la
deuda contraída con las empresas a través de un F ondo de T itulización (ver la s ección “La s olución al déficit: E l R eal Decreto-ley
6/2009”, más adelante). P ara poder “colocar” deuda tarifaria entre las entidades financieras (y, de esa manera, obtener flujos de caja
neces arios para que las empresas continúen invirtiendo, operando activos y ofreciendo el s ervicio de s uministro eléctrico a los
cons umidores en los mismos términos de s eguridad y calidad), el G obierno otorgó la garantía del R eino de E s paña a los títulos de
deuda. S in embargo, debido a la crisis fis cal y de deuda s oberana que s ufre la E urozona des de 2009, los tipos de interés que deben
pagar los cons umidores para poder financiar el déficit tarifario s e s itúan en niveles s imilares al cos te de financiación del E stado, que en
la actualidad incluye una prima de ries go de cien puntos bás icos s obre el interés de la deuda alemana equivalente.
236
V er R eal Decreto 1432/2002.
237
E ste problema es más relevante en s ituaciones de iliquidez en los mercados financieros (dificultad o, inclus o, impos ibilidad para
obtener nuevos capitales con los que financiar el incremento del déficit tarifario), lo que s e materializó con la cris is financiera que
comenzó en el verano de 2007.

236
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

1.000
550 469
F igura 7-9. 500 421

E volución del 0
-178 -178
Déficit de
-500
-1.000
T arifa en el -1.500
-1.527
período 2002 – -2.000
-1.910
2017 [miles de -2.500
-3.000
millones de €]. -3.500
-3.026
-3.540
-4.000 3.119
-4.008
Fuente: -4.500 -4.300
Liquidaciones -5.000
-5.108
de la CNMC. -5.500
-5.554
-6.000 -5.609
<2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

Posteriormente, el Real Decreto 1634/2006 238 aunque no imponía un límite legal a los incrementos
de tarifas reguladas , reconoció la pos ibilidad de que exis ties e déficit tarifario. De hecho, en el
mis mo momento de la fijación de las tarifas s e reconocía la exis tencia de un déficit tarifario ex-
ante, igual a la diferencia entre los ingres os y los costes regulados previs tos . As í, la normativa no
as eguraba la s uficiencia tarifaria dentro del año, y ni s iquiera que este déficit fuera coyuntural y no
es tructural, por lo que puede cons iderars e que mantenía buena parte de los problemas
identificados en la normativa precedente. 239

Adicionalmente, a lo largo de los últimos años s e han emitido normativas y regulaciones


relacionadas – de forma más o menos evidente – con el ámbito y contención del problema del
déficit de tarifas:

• E n marzo de 2006, el G obierno trató de contener la creación de un nuevo déficit


s ignificativo publicando el R eal Decreto-ley 3/2006 240. E n és te, por un lado, s e fijaba
provis ionalmente el precio de las trans acciones de compra-venta de energía en el mercado
diario entre empresas de un mis mo grupo empres arial en un valor regulado de
42,35 €/MW h 241 (ver F ormación de precios en el mercado mayoris ta diario de la
electricidad). E sta intervención del mercado dio lugar a numeros os problemas y fue
finalmente s uprimida al inicio del año s iguiente. E s e mis mo R eal Decreto-ley obligaba a
devolver el valor de los derechos de C O 2 que habían s ido otorgados gratuitamente a las
empres as con centrales emis oras en el P lan Nacional de As ignaciones (P NA) 2005-2007.
E l des arrollo de esta norma tardó dos años en realizars e, provocando numeros os
problemas por el vacío normativo y la incertidumbre generada. A finales de 2007 s e aprobó
la Orden Minis terial IT C /3315/2007 242, que des arrollaba el citado R eal Decreto-ley. E n ella,
s e obligaba a las empres as a devolver con carácter retroactivo el valor de los derechos
as ignados de forma gratuita tanto a centrales que recibieron derechos como a centrales
que, ni recibieron dichos derechos ni emiten C O 2, como las nucleares y las hidráulicas (ver
La internalización del cos te del C O 2 en el precio de la energía).

238
V er R eal Decreto 1634/2006
239
E n este s entido, es importante precis ar que la normativa trataba de eliminar el ries go de falta de des arrollo de la actividad de
comercialización eléctrica. E sto era as í ya que el déficit previsto (ex-ante) s e tras ladaba a los preajes reflejándos e igualmente en las
tarifas integrales y peajes, tratando de que el precio de la tarifa integral no fuera s is temáticamente menor que las ofertas competitivas
que pidiera realizar una empres a comercializadora.
240
V er R eal Decreto-ley 3/2006.
241
P os teriormente dicho valor s e modificó al alza a un valor más cercano al de mercado (49,23 €/MW h).
242
V er Orden Minis terial IT C /3315/2007.

237
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

• A finales del año 2006 se publicó el R eal Decreto 1634/2006 243, de 29 de diciembre, por el
que s e establecen las tarifas de 2007. E n él s e toman varias medidas para intentar
s olventar el problema del déficit (aunque en realidad ninguna de ellas actúa directamente
s obre el origen del problema, la adecuación de las tarifas a los cos tes reales de proveer el
s ervicio):

 E n primer lugar, y como ya s e ha expues to, s e reconoció un déficit ex-ante al inicio


del periodo. E sto s ignificó una tarifa eléctrica ins uficiente para cubrir los verdaderos
cos tes de la energía.

 E n s egundo lugar, s e es tableció que el


proces o de compra-venta de energía para A lo largo de los últimos años
el s uminis tro a tarifa s e realizaría a través
de unas s ubas tas (dando comienzo en s e han emitido normativas y
junio 2007) creadas para tal fin (ver E l regulaciones relacionadas
s uminis tro de referencia). C on es ta con el ámbito y contención
medida s e logró un precio de la
electricidad para el s uminis tro a tarifa más
del problema del déficit de
es table, limitando as í el riesgo de la tarifas
magnitud final del déficit.

• Durante el año 2007, el G obierno s iguió s in adecuar las tarifas reguladas a s u nivel real,
jus tificando s u decis ión bajo el argumento de “res pons abilidad política”. P ara evitar un
incremento mayor del desfas e entre ingres os y costes regulados , s e redujeron algunos
conceptos de cos te incluidos en las tarifas . La motivación de es tas modificaciones s e
encontraba en el objetivo de reducir los cos tes soportados por la tarifa regulada, lo cual s e
traduce directamente en una reducción del déficit tarifario. E ntre es tas modificaciones s e
encontraban la reduccion de los pagos por capacidad (ver S eguridad de S uminis tro) o el
tras pas o de cos tes a los titulares de instalaciones de generacion eléctrica nucleares
cuando antes eran s oportados por la tarifa. E ste tipo de motivaciones , en ningún cas o
podría cons iderars e una buena práctica regulatoria y res ultan inevitablemente en una
mayor percepción de ines tabilidad y ries go regulatorio.

• E n noviembre de 2007 s e aprobó el R eal Decreto-ley 11/2007 244, el cual bus ca aplicar
principios s imilares a los que planteó la Orden Minis terial de des arrollo del R eal Decreto-
ley 3/2006 (Orden IT C /3315/2007) en lo concerniente a devolución del valor de los
derechos de emis ión de C O 2 as ignados gratuitamente, extendiendo s u ámbito de
aplicación al periodo 2008-2012. Dicha norma fue recurrida por divers as empres as y
denunciada por UNE S A ante la C omis ión E uropea y finalmente derogada a partir de julio
de 2009 con la aprobación del R eal Decreto-ley 6/2009 245.

La financiación del déficit. Hasta la publicación del Real Decreto-ley 6/2009, como se ha
señalado, cinco empresas eléctricas estaban obligadas a financiar el déficit de la tarifa eléctrica
sin un reconocimiento explícito a su derecho a recuperarlo. El 93% de este déficit acumulado ha
sido financiado desde hace más de 10 años por las mayores empresas eléctricas españolas:
Endesa, Iberdrola y Unión Fenosa (posteriormente Gas Natural Fenosa), y el resto por
Hidroeléctrica del Cantábrico y E.ON (temporalmente Elcogás participó en dicha financiación con
un porcentaje marginal).

243
Ver Real Decreto 1634/2006.
244
Ver Real Decreto-ley 11/2007.
245
V er R eal Decreto 6/2009 y res umen de E nergía y S ociedad (R eal Decreto 6/2009 ).

238
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

E l déficit tarifario tiene como impacto directo el incremento del endeudamiento de dichas
empres as , perjudicando directamente s u pos ición en los mercados y, por tanto, s u capacidad para
financiar las invers iones as ociadas a las actividades eléctricas, que s on s u principal negocio y,
además , muy intens ivas en capital.

P ues to que esta s ituación tiene una consecuencia


patrimonial directa s obre los es tados financieros de las
empres as , és tas pueden s oportarlo directamente o
cederlo a terceros, que bien lo mantienen como una Las empresas eléctricas han
invers ión o bien lo pueden titulizar. La titulización cons is te estado obligadas a financiar
en trans mitir a terceros (entidades financieras o fondos de el déficit de la tarifa eléctrica
titulización de activos ) la deuda acumulada en los
balances de las empresas , convirtiendo los derechos de sin un reconocimiento
cobro de dicho déficit en un título negociable a cambio de explícito a su derecho de
un tipo de interés . E s neces ario puntualizar que el proces o recuperarlo.
de titulización no s upone la obtención de ingres os o
beneficios adicionales para las empresas , s ino
exclus ivamente la eliminación de s u balance de una
deuda que tiene s u origen en decis iones de los G obiernos .

E l G obierno autorizó por vez primera es ta opción en 2003. La Orden Minis terial E C O
2714/2003 246, de 25 de s eptiembre, autorizó la ces ión o titulización del cos te corres pondiente al
des ajuste de ingres os de las actividades reguladas anterior a 2003 y la revis ión de los cos tes
extrapenins ulares . As í:

• La ces ión del déficit evita que las empres as eléctricas tengan que endeudars e para poder
financiar el déficit del S is tema.

• S e facilita que las empres as eléctricas dediquen s us recurs os a lo que es s u función –


invertir y operar el s is tema energético.

A raíz de es a operación, s e han transmitido los derechos de cobro (actualizados anualmente con
el E uribor) para la recuperación del déficit tarifario a divers os agentes financieros, lo que ha
permitido a las empres as percibir anticipadamente las cantidades objeto de la ces ión, de forma
que pueden des tinar s us recurs os financieros a su negocio habitual.

La Figura 7-10 muestra la deuda del sistema eléctrico Español y las cuatro categorías de derechos de
cobro a las que está asociada la deuda eléctrica: (i) El déficit de 2005; (ii) Los derechos de cobro de los
adjudicatarios de la 2ª subasta del déficit ex ante; (iii) Los derechos de cobro del déficit de 2013 y (iv)
los derechos de cobro del Fondo de Titulación del Déficit del Sistema Eléctrico (FADE).

246
Ver Orden Ministerial ECO 2714/2003.

239
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Déficit ex ante Déficit ex ante


Déficit 2013 Déficit 2013
F igura 7-10. 2,80% 2,60%
2,80%

Importe total de 12,40% 12,60%


12,40%

la deuda y Déficit 2005 Déficit 2005


5,60% 5,60%
des glos e por
tipo de derecho Deuda 2015 Deuda 2016
- 7,93%
de cobro. 25.000 M€ 23.000 M€

Fuente: Informe
de la deuda del 79,20% 79,20%
79,90%
sector eléctrico FADE FADE
(CNMC) y
elaboración propia

La Ley 24/2013, nueva Ley del Sector Eléctrico, en su artículo 19, indica que la parte del desajuste
que, sin sobrepasar los límites establecidos, no se compense por subida de peajes y cargos será
financiada por los sujetos del sistema de liquidación de forma proporcional a la retribución que les
corresponda por la actividad que realicen.

Las subastas del déficit ex ante. En el Real Decreto 1634/2006 247, de 29 de diciembre, por el
que s e es tablece la tarifa eléctrica para 2007, el G obierno reconoció un déficit ex ante de 1.500
M€ has ta s eptiembre de 2007 y es tableció que se financiaría vía los ingres os obtenidos mediante
s ubas tas del derecho a percibir mensualmente un determinado porcentaje de la facturación
mens ual por tarifas reguladas de s uminis tro y peajes , como máximo, en los s iguientes 15 años.

E l procedimiento y las bas es para la celebración de las s ubas tas s e des arrollaron en la Orden
694/2008 publicada en el B OE del 15 de marzo y que s us tituyó a la Orden 2017/2007.

E n es tas s ubastas podía participar cualquier agente jurídico (o grupo de agentes a través de un
repres entante único) que previamente es tuviera ins crito en el regis tro de la s ubas ta. La antigua
C NE , actual C NMC , fue la entidad encargada de la ges tión de las s ubas tas . C ada agente s ólo
podía hacer una oferta, que entregaba en un s obre cerrado, de un mínimo de 25 M€ a
adjudicars e, o múltiplos de es ta cantidad, es pecificando el diferencial s obre el tipo de interés de
referencia (E uribor a tres mes es ).

Los agentes adjudicados en la s ubasta adquirían el derecho de cobro de una parte de las
cantidades recaudadas con la tarifa integral y peajes en un período, como máximo, de 15 años .

De es te modo, las empres as del s ector eléctrico podían des vinculars e de la financiación del déficit
ex-ante que pas a directamente a los adjudicatarios de la s ubasta. Las empres as eléctricas
financiadoras del déficit ingres arían la parte corres pondiente en una cuenta abierta para tal efecto
y gestionada por la C NMC , que s egún el R D 2017/1997, era el agente respons able de efectuar las
liquidaciones (agente de cobros y pagos del S is tema E léctrico E s pañol).

Des graciadamente, la primera s ubas ta de derechos de cobro bajo es ta nueva fórmula no tuvo
éxito, en parte debido a la es pecial coyuntura de los mercados financieros durante el año 2007,
pues no aparecieron compradores a los precios de referencia que al parecer s e barajaron. Los
cambios normativos que afectaron al déficit ex ante entre el final de 2007 y el principio de 2008
permitieron que s e adjudicas en 1.300 M€ en junio de 2008, corres pondientes a la totalidad del
déficit de 2007 y una fracción del de 2008. S in embargo, la s iguiente subas ta, que s e celebró a

247
V er R eal Decreto 1634/2006.

240
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

finales de s eptiembre del mismo año cerró con un nuevo fracas o, al no poders e adjudicar importe
alguno, en un contexto de gran turbulencia de los mercados financieros internacionales . No s e han
vuelto a celebrar s ubastas del déficit ex-ante.

La solución al déficit. La primera solución más sencilla y eficiente al problema del déficit
financiado con cargo al consumo futuro sería que la totalidad de los costes actuales se trasladen
al precio presente sin restricción alguna. Esto llevaría a unas subidas instantáneas (o en un corto
plazo de tiempo) de los peajes aproximadamente del 70%. El efecto en el precio final de venta de
la electricidad al consumidor de esta subida al incorporar el coste de la energía resultante del
mercado se situaría entre el 30-35%, según la tensión y el tipo de suministro. A medio-largo plazo,
la subida necesaria se sitúa en torno al 100% de los peajes.

Realizar un ajuste de peajes de este calado en un corto espacio de tiempo podría tener efectos
negativos sobre los consumidores finales de electricidad. Por un lado, aquellos consumidores en
los que la electricidad es una materia prima, recibirían en el corto plazo señales ineficientes en los
precios de la misma que básicamente se trasladarían a precio final del producto, encareciendo los
mismos para el consumidor final y perdiendo competitividad en los mercados internacionales. Una
adecuación progresiva de las tarifas daría las señales adecuadas para reconvertir las cadenas de
producción buscando métodos más eficientes de aprovechamiento de la electricidad, con menor
impacto en los precios finales de los productos.

En cuanto al consumidor doméstico, el encarecimiento


rápido de la electricidad se convertiría directamente en E l encarecimiento rápido de
un decremento de su renta disponible. la electricidad, como medida
para s olucionar el déficit,
Estos efectos se verían agravados en una situación de
crisis económica generalizada, con estancamiento del s upondría un decremento de
crecimiento económico, precios y rentas, y aumento del la renta del cons umidor
paro, como la ocurrida en España entre los años 2008 y domés tico
2015.

Además, los peajes eléctricos no solo contemplan los costes propios del suministro de
electricidad, sino que como se ha señalado anteriormente, recoge otros costes vinculados a
políticas económicas y energéticas no relacionadas directamente con el suministro eléctrico.

En este contexto se aprobó el Real Decreto-ley 6/2009 248, de 30 de abril, cuya finalidad era acabar
con los efectos pernicios os del déficit de tarifas, permitiendo una adaptación progres iva de los
cons umidores a los nuevos precios neces arios de las tarifas de acces o. E s te R eal Decreto-ley fue
pos teriormente actualizado por los R eales Decretos -ley 6/2010 y 14/2010 249, y le s iguieron una
s erie de cambios regulatorios des tinados a controlar y eliminar la generación de déficit en el s ector
eléctrico.

El Real Decreto-ley 6/2009. Los principales mecanis mos que s e definen en es ta norma s on 250:

• E liminación definitiva del déficit de tarifa en el año 2013, de manera que los ingres os en
es e año s ean s uficientes para cubrir los cos tes (es to s e conoce como “principio s uficiencia
tarifaria”). S e es tablece un período trans itorio en el que el déficit anual no puede s uperar
los 3.500, 3.000, 2.000 y 1.000 M€ en 2009, 2010, 2011 y 2012 res pectivamente. De esta
248
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto 6/2009
249
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto 14/2010
250
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto 6/2009

241
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

manera s e permite laminar en varios años el incremento neces ario de las tarifas de
acces o, permitiendo que los cons umidores puedan adaptar métodos más eficientes a s us
cons umos eléctricos .
3.500

3.000

F igura 7-11. Limites futuros al déficit ex ante 2.000

Déficit [Millones de €]
s egún el R eal Decreto-ley 6/2009.

Fuente: Elaboración propia.


1.000

2009 2010 2011 2012

• P ues to que podría haber una s erie de cons umidores finales que por s us es peciales
condiciones de cons umo, renta, s ituación familiar o laboral no podrían cons eguir ofertas
competitivas por parte de los s uminis tradores en un cas o, ni podrían tener capacidad de
adaptación de s us consumos en otro, s e es tablecen mecanismos que permiten s atisfacer
requerimientos de protección y eficiencia a la vez, como s on la T arifa de Último R ecurso
ahora P V P C y el bono social (ver E l precio voluntario para el pequeño cons umidor (P V P C ),
E ficiencia económica y protección a clientes vulnerables y E l bono s ocial).

• Adicionalmente, s e eliminan progres ivamente los s obrecos tes de la generación


extrapenins ular de la tarifa eléctrica tras ladándos e a los P res upuestos G enerales del
E s tado. E s tos cos tes obedecen a políticas de s olidaridad territorial, s i bien quedan aún
incluidos otros cos tes derivados de políticas energéticas de ámbito nacional, políticas
s ociales , etc.

• T ambién s e establece que las empres as eléctricas no tienen la obligación de s er quienes


as uman el déficit en s us cuentas . E sto permite que liberen recurs os financieros para el
ejercicio de s u actividad y mejorar s u s ituación patrimonial de deuda.

P ara la financiación de los déficits anuales máximos es tablecidos en este R eal Decreto-ley, en
enero de 2011 s e creó un F ondo de T itulización, F ondo de Amortización del Déficit E léctrico
(F ADE ). Has ta es e momento la volatilidad de los mercados había impedido la constitución del
fondo y la realización de la primera emis ión. La finalidad del F ADE es la emis ión de ins trumentos
financieros para la colocación de la deuda a terceros , con el aval del E s tado, para la cobertura de
los importes máximos anuales referidos . E l importe de los derechos de cobro cedidos por las
empres as al F ADE ascendió a finales del 2016 a 18.500 M€ (79,9% del déficit res tante) 251.

S egún el R eal Decreto-ley, los pos ibles des ajus tes temporales que s urjan entre los costes o
ingres os reales res pecto a los previs tos para la fijación de los peajes s erán financiados
trans itoriamente por las empres as eléctricas, s i bien es os des ajus tes habrán de recogers e
íntegramente en la revis ión tarifaria inmediatamente posterior al momento en que s e produzcan,

251
V er informe s obre el estado actual de la deuda, C NMC

242
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

de manera que las empres as tendrán únicamente que financiar los des víos coyunturales que s e
produzcan entre cada revis ión de tarifas.

As imis mo, s e es tablece en este R eal Decreto-ley que las cuantías pendientes por los déficits
pas ados que aún permanecen en los es tados financieros de las empres as s ean tras pas adas al
mencionado F ondo de T itulización, liberando de es ta carga a las empres as eléctricas .

Real Decreto-ley 6/2010 252. C on es te R eal Decreto-ley de medidas para el impuls o de la


recuperación económica y el empleo s e incorporan actuaciones en divers os s ectores estratégicos
de la economía es pañola. P or lo que s e refiere al s ector energético, se incluyen medidas que
tienen como objetivo crear las condiciones para impuls ar las empres as de s ervicios energéticos,
as í como otras relativas a la titulización del déficit de tarifa del S is tema E léctrico y a la creación y
regulación de la figura del ges tor de recarga energética para impuls ar el us o del vehículo eléctrico,
además de la pos ibilidad de que la Adminis tración pueda adoptar programas de ahorro y eficiencia
energética en relación con es te último.

Real Decreto-ley 14/2010 253. P es e a los límites al déficit ex ante impues tos por el R eal Decreto-
ley 6/2009, la evolución de los costes del s uminis tro y, s obre todo, las decis iones del G obierno en
relación con la evolución de los peajes eléctricos dio lugar a un fuerte incremento del déficit en
2009 y, es pecialmente, 2010.

E l R eal Decreto-ley 14/2010 modificó los límites de déficit ex ante fijados por el R eal Decreto-ley
6/2010, estableciéndolos en las s iguientes cantidades : de 2.000 a 3.000 M€ para 2011 y de 1.000
a 1.500 M€ para 2012 (F igura 7-12).

Además , el R eal Decreto-ley 14/2010 dis pus o que los des ajustes temporales de liquidaciones del
S is tema E léctrico que s e produjeran en 2010, has ta una cuantía máxima de 2.500 M€, tendrían la
cons ideración de déficit de ingres os del s is tema de liquidaciones eléctrico para 2010, generando
derechos de cobro que podrían s er cedidos por sus titulares al F ondo de T itulización del Déficit del
S is tema E léctrico.

E n cons ecuencia, el déficit real en los años 2009, 2010 y 2011 s e s ituó muy por encima de los
límites es tablecidos inicialmente en el R eal Decreto 6/2009.

F inalmente, de acuerdo con este R eal Decreto-ley 14/2010, el déficit adicional en el que s e
pudiera incurrir has ta 2013 y los des ajus tes entre ingres os y cos tes regulados que s e produzcan a
partir de 2013, s e reconocerá de forma expres a en las dis pos iciones por las que s e revis en las
tarifas de acces o del período s iguiente, incluyendo los interes es que pudieran devengar.

252
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto-ley 6/2010
253
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto 14/2010

243
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

F igura 7-12. 5.554

Límites al 5.500 5.609

déficit ex
5.108

ante en el 4.300
R eal Decreto 4.008

Déficit de tarifa [Millones de €]


Ley 6/2009 y 3.119

en el R eal 3.026 3.500 3.000

Decreto Ley 3.000

14/2010 y 1.910 1.500


déficit real. 1.527
1.500

Fuente: 1.000

Liquidaciones 178 178

de la CNMC. <2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012

Límite de déficit anual fijado en el RDL 14/2010 Límite de déficit anual fijado en el RDL 6/2009

Real Decreto 437/2010. Este Real Decreto 254 culmina el des arrollo normativo de la titulización del
déficit de tarifa del S is tema E léctrico, determinando los as pectos operativos y procedimentales,
bás icamente, el precio y las condiciones de la ces ión de los derechos de cobro al F ondo de
T itulización creado al efecto (F ondo de Amortización del Déficit E léctrico, F ADE ), tanto de los
acumulados hasta 2009, como los que s e produzcan has ta el final del año 2012, momento en el
cual s e debería alcanzar la s uficiencia tarifaria. S egún la referencia pública del C ons ejo de
Minis tros que aprobó es ta norma: “E l proceso de titulización del déficit tarifario s e iniciará
inmediatamente y estará s upervis ado por una C omis ión Interminis terial”.

Emisiones de deuda tarifaria y Real Decreto 1307/2011. E n enero de 2011, s e llevó a cabo la
primera emis ión de títulos de deuda tarifaria por parte del F ADE (2.000 M€ a un plazo de 3 años y
al 4,9% de interés ) 255. Has ta s eptiembre de 2011 el F ADE había colocado en el mercado
financiero, mediante s ubas tas , títulos con un valor nominal de 8.500 M€. S in embargo, la cris is en
los mercados financieros y de deuda s oberana dificultaba la colocación de emis iones de deuda de
gran volumen.

P ara agilizar el proces o de titulización de la deuda tarifaria, el G obierno aprobó un R eal Decreto
en s eptiembre de 2011 que modificaba el R eal Decreto 437/2010, ampliando a tres las pos ibles
vías para colocar los títulos de deuda tarifaria en el mercado: (i) s ubastas , (ii) emis iones a precio
convenido (previs tas , como las s ubas tas , en el R eal Decreto 437/2010) y (iii) operaciones de
venta s imple de valores .

E n términos prácticos, es ta modificación abrió la pos ibilidad de que el F ADE realizara


“colocaciones privadas ” de títulos de deuda tarifaria, permitiéndole ofrecer a las entidades
financieras productos más acordes con s us preferencias (e.g. en términos de plazos , volumen,
etc.). La T abla 7- res ume las emis iones de deuda tarifaria del F ADE has ta finales de febrero de
2012.

254
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto 437/2010.
255
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto 437/2010.

244
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Real Decreto-ley 1/2012 256. E n es te R eal Decreto-ley s e procedió a la s us pens ión de los
procedimientos de preas ignación de retribución y a la s upres ión de los incentivos económicos
para nuevas instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de la cogeneración, fuentes
de energía renovables y res iduos, limitando s u alcance a las ins talaciones mencionadas que no
hubieran obtenido aún la ins cripción en el R egis tro de preas ignación de retribución. S e
s uprimieron as í los valores de las tarifas reguladas , primas y límites previs tos en el R eal Decreto
661/2007 257, de 25 de mayo, por el que se regula la actividad de producción de energía eléctrica
en régimen es pecial, con carácter temporal hasta la s olución del problema del déficit.

Real Decreto-ley 13/2012 258. E l R eal Decreto-ley 13/2012 de marzo de 2012 impone unas
medidas más fuertes y res trictivas con el objetivo de dis minuir los costes del s is tema y la no
creación de déficit tarifario a partir de 2013. P ara ello, propone, entre otras acciones , las
s iguientes medidas :

• Incrementa el ámbito competencial de la C NE , ahora C NMC , pero no le otorga la potes tad


de fijación de los peajes .

• P araliza la cons trucción de nuevas infraes tructuras de trans porte de gas y electricidad
has ta evaluar primero las neces idades del s is tema en el nuevo contexto s ocioeconómico.

• Minora la retribución a la dis tribución y al trans porte reabriendo el debate s obre el principio
de s eguridad jurídica.

• Define al autocons umidor como un cons umidor y no como un productor, dando amparo
legal a es te nuevo agente en el sector.

J unto a las medidas del R eal Decreto-ley 13/2012, que redujeron los costes del S is tema E léctrico
en 1.700 M€, s e incrementó la T UR eléctrica un 7%. P or otro lado, las medidas adoptadas en el
s ector del gas fueron complementadas por un incremento de la T UR de un 5%.

256
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto-ley 1/2012.
257
V er R eal Decreto 661/2007
258
V er res umen de E nergía y S ociedad del R eal Decreto-ley 13/2012.

245
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

TIR
Emisión Nº serie Fecha Fecha Importe para
nominal el
Nº bonos emisión vencimiento (M€) inversor
1 1 14-ene 17-mar-14 2.000,00 4,88%
2 2 18-feb 17-jun-15 2.000,00 5,09%
3 3 25-mar 17-mar-21 2.000,00 5,99%
4 4 16-may 17-sep-18 1.000,00 5,63%
5 5 30-sep 17-sep-13 1.500,00 4,48%
6 Ampl. 4 18-nov 17-sep-18 325 6,42%
7 6 18-nov 17-dic-26 125 7,70%
8 Ampl. 2 30-nov 17-jun-15 125 6,72%
9 7 09-dic 17-jun-26 125 7,81%
10 Ampl. 5 20-dic 17-sep-13 566 4,93%
11 Ampl. 1 20-dic 17-mar-14 140 4,72%
12 Ampl. 2 31-ene 17-jun-15 235 4,11%
13 Ampl. 1 31-ene 17-mar-14 212 3,75%
14 Ampl. 2 03-feb 17-jun-15 340 3,67%
15 Ampl. 1 07-feb 17-mar-14 153 3,36%
16 Ampl. 2 07-feb 17-jun-15 150 3,73%
17 8 07-feb 17-dic-14 200 3,46%
18 9 10-feb 17-mar-25 236,1 6,37%
19 10 15-feb 17-mar-27 580 6,55%
20 Ampl. 9 15-feb 17-mar-25 133,7 6,49%
T abla 7-4. 21 11 22-feb 17-mar-26 125 6,61%
E mis iones de deuda 22 12 29-feb 17-dic-17 844 4,92%
tarifaria del F ADE . 23 Ampl. 9 31-oct 17-mar-25 122,5 6,78%
24 Ampl. 4 07-nov 17-sep-18 75 5,49%
Fuente: CNMV. 25 Ampl. 3 07-nov 17-mar-21 76 6,24%
26 Ampl. 4 16-nov 17-sep-18 110 5,44%
27 13 07-dic 17-dic-15 1.750,00 4,12%
28 Ampl. 12 14-dic 17-dic-17 100 5,06%
29 Ampl. 4 21-dic 17-sep-18 155 5,21%
30 Ampl. 4 28-dic 17-sep-18 160 4,98%
31 14 16-ene 17-mar-17 1.000,00 4,24%
32 15 08-feb 17-dic-26 89 5,96%
33 Ampl. 3 13-feb 17-mar-21 154,8 5,35%
34 Ampl. 6 13-feb 17-dic-26 75 6,17%
35 Ampl. 3 22-feb 17-mar-21 87 5,11%
36 Ampl. 3 13-mar 17-mar-21 83,2 5,04%
37 16 15-mar 17-mar-18 1.500,00 3,92%
38 Ampl. 16 03-abr 17-mar-18 75 3,85%
39 17 30-abr 17-sep-16 1.800,00 3,21%
40 Ampl. 3 8-may 17-mar-21 248 4,52%
41 18 2-oct 17-mar-19 2.000,00 3,73%
42 Ampl. 16 16-oct 17-mar-19 250 2,96%
43 Ampl. 4 16-oct 17-sep-18 400 3,24%
44 Ampl. 17 16-oct 17-sep-16 300 2,38%
45 19 6-nov 17-dic-16 1.500 2,28%
46 20 19-feb 17-sep-17 1.500 1,95%
47 Ampl. 18 28-feb 17-mar-19 125 2,36%
48 Ampl. 17 28-feb 17-sep-16 225 1,45%
TOTAL 27.075,30

246
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Real Decreto-ley 20/2012 259. Las medidas aprobadas en es te R eal Decreto-ley pivotan s obre dos
ejes ; la cons olidación fis cal y el impuls o de nuevas reformas es tructurales . E ntre éstas , s e
encuentran las des tinadas a reducir el déficit de tarifa del s ector eléctrico, cuya s olución es
urgente por la amenaza que s upone para s u sos tenibilidad económica, repres entando un pas o
más para garantizar el cumplimiento legal de alcanzar la s uficiencia tarifaria en 2013. S egún es te
R eal Decreto-ley, es tos ajus tes s erían completados con otras medidas adicionales antes de la
finalización del año 2012.

As í, s e establece que los costes fijos y variables de


las centrales de generación en régimen ordinario de E l R eal Decreto-ley 20/2012,
los s is temas ins ulares y extrapenins ulares, que busca la cons olidación fiscal
res ulten como cons ecuencia de las revis iones
es tablecidas en el R eal Decreto-ley 13/2012, serán y el impuls o de nuevas
de aplicación a partir del 1 de enero de 2012. reformas estructurales
Adicionalmente, a las revis iones del modelo
retributivo s e es tablecen las s iguientes medidas , a aplicar también des de el 1 de enero de 2012:

• S e elimina la retribución de los gastos de naturaleza recurrente incluidos en el cálculo de la


garantía de potencia.

• S e revis a la tas a para el cálculo de la retribución financiera de la invers ión, que se


corres ponderá con el valor de los B onos del E s tado a 10 años más 200 puntos bás icos, en
lugar de los 300 puntos anteriores.

• S e reducen un 10% los valores unitarios de los cos tes reconocidos de operación y
mantenimiento fijos.

Además , s e aprueban otra s erie de medidas que afectan a diferentes agentes del s ector:

• E n cuanto a la actividad de trans porte, s u retribución s e


reduce un 3,15% adicional res pecto a la establecida en el E n el R eal Decreto-
R eal Decreto-ley 13/2012 como cons ecuencia de cambio de ley 20/2012 s e
criterio en la retribución a la invers ión, que s e hará para
aquellos activos en s ervicio no amortizados tomando como adoptaron medidas
bas e para s u retribución financiera s u valor neto. en torno a la
retribución de los
• S e modifica el tipo de interés a aplicar al importe pendiente s istemas ins ulares y
de pago del déficit de ingres os generado en el año 2006,
para dar cumplimiento a s entencias del T ribunal S upremo. extra-penins ulares
entre otros
• S e modifican los fines y funciones del Ins tituto para la
Divers ificación y Ahorro de la E nergía (IDAE ), dotándole de la condición de medio propio
ins trumental y s ervicio técnico de la Adminis tración.

• Habilita al Minis terio de Indus tria, E nergía y T uris mo a aplicar criterios de progres ividad a
las tarifas de acces o.

• S e elimina la revis ión trimes tral de peajes los de acces o.

259
V er res umen en E nergía y S ociedad del R eal Decreto-ley 20/2012.

247
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Ley 15/2012 260 de medidas fiscales para la sostenibilidad energética. E s ta ley continúa con la
reforma del s ector energético que el G obierno inició en enero de 2012 con el R eal Decreto-ley
1/2012 261, por el que s e s us pendieron los procedimientos de preas ignación y la s upres ión de
incentivos económicos del régimen es pecial (energías renovables y cogeneración) y a la que
s iguió en marzo el R eal Decreto-ley 13/2012 262 por el que s e redujeron los costes del s is tema,
es encialmente por un ajus te de la retribución del trans porte y la dis tribución, y en julio el R eal
Decreto-ley 20/2012 263 donde s e adoptaron medidas en torno a la retribución de los s istemas
ins ulares y extrapenins ulares , los s uplementos territoriales , un ajus te de la retribución de la
actividad de trans porte y la progres ividad de las tarifas de acces o, entre otros.

La Ley 15/2012 planteó las s iguientes medidas principales :

• S e crea un impues to s obre el valor de la producción de la energía eléctrica, que grava con
un tipo impos itivo del 7% la realización de actividades de producción e incorporación de
energía eléctrica en el s is tema eléctrico.

• S e modifican los tipos impos itivos establecidos para el gas natural y el carbón,
s uprimiéndos e además las exenciones previs tas para los productos energéticos utilizados
en la producción de energía eléctrica y en la cogeneración de electricidad y calor útil. S e
fijan los s iguientes tipos :

 G as Natural des tinado a us os dis tintos a los de carburantes , as í como el gas


natural des tinado al uso como carburante en motores es tacionarios : 0,65 €/G J ,
es tableciendo un tipo reducido de 0,15 €/G J para el des tinado a us os con fines
profes ionales (s iempre que no se utilicen en proces os de generación y
cogeneración eléctrica). Has ta ahora, el gas natural gozaba de un tipo cero.

 G as óleo para producción de electricidad: 29,15 €/1.000 litros.

 F uelóleos para producción de electricidad: 12 €/tonelada.

 C arbón para producción de electricidad: 0,65 €/G J .

• S e crea un canon por utilización de aguas continentales para la producción de energía


eléctrica, por el que s e grava con un tipo impos itivo del 22% el valor económico de la
energía hidroeléctrica producida. E s te canon s e reduce un 90% para las ins talaciones con
potencia igual o inferior a 50 MW , para las ins talaciones de bombeo y para otras
ins talaciones que s e deban incentivar por motivos de política energética general. E l 2% de
s u recaudación s erá un ingres o del organis mo de cuencas y el 98% restante s e ingres ará
en el T es oro P úblico. E s te cánon ha s ido modificado por el R eal Decreto-ley 10/2017
264
aumentándolo a 25,5% y aumentando tambien la reducción a un 92%.

• S e crean impuestos s obre la producción de combus tible nuclear gastado y res iduos
radiactivos res ultantes de la generación de energía nucleoeléctrica y del almacenamiento
de combus tible nuclear gas tado y res iduos radiactivos en ins talaciones centralizadas .

261
V er boletín de E nergía y S ociedad nº69.
261
V er boletín de E nergía y S ociedad nº69.
262
V er boletín de E nergía y S ociedad nº73.
263
V er boletín de E nergía y S ociedad nº77.
264
V er R eal Decreto-ley 10/2017

248
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

• S e excluyen del régimen económico primado a la electricidad generada a partir de


combustibles fós iles en ins talaciones renovables (ya s ean ins talaciones híbridas o no
híbridas ).

• S e es tablece que los P res upues tos G enerales del E stado de cada año destinarán un
importe equivalente a la es timación de la recaudación anual de esta ley a financiar los
cos tes del S is tema E léctrico, as í como los ingresos es timados por la s ubas ta de derechos
de emis iones de C O 2 (con un máximo de 500 M€).

E l Minis terio es timó que es tas medidas podían incrementar los ingres os regulados del s is tema en
un total de 3.465 M€ al año (ver E l marco normativo es pañol).

Ley 17/2012 265 de Presupuestos Generales del Estado para el año 2013. E l G obierno ha
incluido en es ta ley dos medidas que afectan directamente al s ector eléctrico:

• La dis pos ición adicional primera del R eal Decreto-ley 6/2009 establecía que los
extracos tes de generación eléctrica de los s is temas ins ulares y extrapenins ulares s e
compens arían con cargo a los P resupues tos G enerales del E stado de manera progres iva,
de forma que en 2012 un 75% de estos cos tes serían s ufragados por los pres upues tos y el
100% a partir de 2013.

S in embargo, la dis pos ición adicional cuarta de la Ley 17/2012 s us pende para 2013 este
mecanis mo de compensación, de modo que los cos tes ins ulares y extrapenins ulares de
2012 correrán a cargo de la tarifa eléctrica y no s e financiarán con los pres upuestos de
2013. E l 75% de estos cos tes ascendieron a más de 1.217 M€ en 2012, incrementando la
pres ión s obre el déficit tarifario de es e año, s egún lo apuntado en el R eal Decreto-
ley 29/2012.

• E l S is tema E léctrico recibirá ingres os derivados de los tributos de la Ley 15/2012 de


medidas fiscales y de las s ubas tas de los derechos de emis ión de gas es de efecto
invernadero. La dis pos ición adicional quinta de la Ley trata las aportaciones para la
financiación del des arrollo de las energías renovables en el S ector E léctrico. S e explica
que las Leyes de P res upues tos G enerales del E s tado de cada año destinarán a financiar
los cos tes del S is tema E léctrico previs tos en el artículo 16 de la Ley 54/1997 del S ector
E léctrico, referidos al fomento de energías renovables , un importe equivalente a la s uma
de los s iguientes conceptos :

 La mejor es timación de la recaudación anual corres pondiente al E s tado derivada de


los tributos incluidos en la ley de medidas fis cales para la s ostenibilidad energética.
S i, finalmente, la recaudación es menor s e reajus tará.

 E l 90% del ingres o es timado por las s ubastas de los derechos de emis ión de gas es
de efecto invernadero, con un máximo de 450 M€.

265
V er res umen del paquete regulatorio en E nergía y S ociedad de la Ley 15/2012.

249
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

Real Decreto-ley 29/2012 de Empleados del Hogar y otras medidas de carácter económico y
social 266.

E n el C apítulo III de este R eal Decreto-ley, s e adoptan medidas


para el sector eléctrico y de hidrocarburos, motivadas por el
nuevo des ajus te entre los cos tes e ingres os regulados del E n el R eal Decreto-
s is tema en el último trimes tre del año. C oncretamente, s e pueden ley 29/2012 s e
des tacar los s iguientes as pectos de esta Ley: adoptan medidas en
• S e s uprimieron los límites para el déficit de la tarifa el sector eléctrico y
eléctrica que el R eal Decreto-ley 14/2010 había fijado en de hidrocarburos ,
1.500 M€ en 2012 y cero a partir de 2013. motivadas por el
nuevo des ajus te
Los des ajus tes temporales de liquidaciones del S is tema
E léctrico que s e produzcan en 2012, tendrán la entre los cos tes e
cons ideración de déficit de ingres os del s istema para ingres os regulados
2012, que generará derechos de cobro los cuales podrán del s istema en el
s er cedidos por s us titulares al F ondo de T itulización del
Déficit del S is tema E léctrico. E s to s erá adicional a los
último trimes tre del
1.500 M€ de déficit ya reconocidos por el R eal Decreto-ley año 2012
14/2010.

• S e corrige o s uprime del régimen económico primado para las ins talaciones del antiguo
régimen especial (renovables , cogeneración y res iduos ) que incumplan las obligaciones
requeridas para s u ins cripción definitiva en el regis tro de preas ignación; es decir, s i no
es tán totalmente ejecutadas y en s ervicio todas las infraestructuras de evacuación
neces arias para verter la energía a la red de dis tribución o trans porte, todos los equipos
generadores de electricidad, s i no está instalada y en s ervicio la totalidad del campo s olar
o s i no es tá operativo la totalidad del almacenamiento previs to en el proyecto de ejecución.

• E n el s ector hidrocarburos , el R eal Decreto-ley mantiene trans itoriamente el precio máximo


vigente de los gas es licuados del petróleo envas ados en envas es de capacidad igual o
s uperior a 8 kg, e inferior a 20 kg 267. Quedan excluidos los envas es de mezcla para us os
de los gas es licuados del petróleo como carburante des de el 1 de octubre de 2012, hasta
la próxima revis ión que s e efectúe por res olución del Director G eneral de P olítica
E nergética y Minas .

Real Decreto-ley 2/2013 268. E l R eal Decreto-ley 2/2013 planteó las s iguientes medidas dentro del
s ector eléctrico:

• La actualización de retribuciones de actividades reguladas del S is tema E léctrico vinculadas


al Índice de P recios al C ons umo (IP C ) (actividades de trans porte, dis tribución, tarifas y
primas del régimen es pecia), pas arán a efectuarse con el Índice de P recios de C ons umo a

266
V er res umen del paquete regulatorio en E nergía y S ociedad de la R eal Decreto-ley 29/2012.
267
E s te mantenimiento transitorio en el precio máximo vigente de los gas es licuados del petróleo envas ados afecta a la bombona de
butano de us o domés tico.
268
V er boletín de E nergía y S ociedad nº 84.

250
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

impues tos constantes s in alimentos no elaborados ni productos energéticos (IP C


s ubyacente neto de impues tos ).

• S e modifica el R eal Decreto 661/2007, de 25 de mayo, por el que s e regula la actividad de


producción de energía eléctrica en régimen especial, s uprimiendo la prima de referencia
exis tente has ta ahora (as í como los límites s uperior e inferior del precio de producción), y
manteniéndos e una tarifa regulada para es tas ins talaciones (renovables y cogeneración).

• S e limita la capacidad de elección de opción de venta de energía a mercado, al impedir


que las instalaciones de régimen es pecial ahora denominado energía renovables ,
cogeneración y res iduos que s e acojan a la venta en mercado libre puedan luego acogers e
a la venta en tarifa regulada.

• Las ins talaciones adjudicatarias del concurso de instalaciones de tecnología s olar


termoeléctrica de carácter innovador mantendrán s u retribución fijada en concurrencia
competitiva (para instalaciones s olares termoeléctricas de hasta 50 MW ).

E s tas medidas s on adoptadas con carácter de urgencia y con carácter retroactivo al 1 de enero,
de modo que s e eviten nuevas des viaciones entre costes e ingres os, y s e pueda elaborar un
pres upues to anual en el que s e fijen las tarifas de acces o a las redes para es te ejercicio.

Real Decreto-ley 9/2013 por el que se adoptan medidas urgentes para garantizar la
estabilidad financiera del sistema eléctrico 269. E s te R eal Decreto-ley anuncia el inminente
es tablecimiento de un nuevo régimen económico y jurídico para el régimen es pecial actualmente
ins talaciones de energía renovables , cogeneración y res iduos y un nuevo régimen retributivo de
las actividades de trans porte y dis tribución.

C on es tas medidas el G obierno pretende evitar el déficit de tarifa previs to para 2013 de 4.500 M€,
reduciendo la retribución de las actividades reguladas del s is tema en 2.700 M€, financiando el
50% de los cos tes de la generación extrapenins ular con los P res upuesto G enerales del E stado
(900 M€) e incrementando los ingres os del s is tema por medio de la revis ión de los peajes de
acces o (900 M€).

Las medidas adoptadas dentro de la evolución del nuevo régimen jurídico y económico para las
energías renovables , cogeneración y res iduos, son las s iguientes:

• S e deroga el R eal Decreto 661/2007 por el que s e regulaba la actividad de producción de


energía eléctrica en régimen es pecial y el R eal Decreto 1578/2008 de retribución de la
actividad de producción de energía eléctrica mediante tecnología s olar fotovoltaica.

• E s te nuevo régimen s e bas ará en los ingres os obtenidos de la participación en el mercado,


con una retribución adicional, la cual s e calculará en función del tipo de tecnología.

• S e define como una rentabilidad razonable como las Obligaciones del E s tado en el
mercado s ecundario a 10 años , más un diferencial de 300 puntos bás icos.

• S e elimina el complemento por eficiencia y eliminación de la bonificación por energía reactiva.

E n cuanto a los cambios en las actividades de trans porte y distribución s e establece una
metodología para la retribución de la actividad de dis tribución y trans porte mediante la aplicación

269
V er R eal Decreto-ley 9/2013 y resumen de energía y s ociedad (R eal Decreto-ley 9/2013).

251
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

de criterios homogéneos en todo el territorio español. Además s e establecen retribuciones para


dis tintos frentes temporales , donde a partir de 2014 s e fija la tas a en 200 puntos bás icos s obre las
Obligaciones del T es oro a 10 años.

Además , s e toman medidas entre otras, entorno a la titulización del déficit, a la reducción de la
retribución del incentivo por invers ión en los pagos por capacidad, al cos te del bono s ocial, y a la
creación del R egis tro adminis trativo de régimen retributivo es pecífico para el s eguimiento de la
retribución de las ins talaciones dentro del régimen es pecial.

De es ta forma, el Minis terio cuantifica los esfuerzos des de enero de 2012, incluyendo las medidas
de es te R eal Decreto-ley s egún el reparto de la F igura 7-6:

F igura 7-6. R eparto de los


esfuerzos de las últimas 19%
medidas regulatorias.

Fuente: Pág. 10 Presentación


“Reforma del sistema eléctrico: 9%
una reforma necesaria” del
MINETUR en la rueda de prensa
del 12 de julio de 2013. 270
72%
Administración
Consumidor
Empresas

Ley 22/2013 de Presupuestos Generales del Estado para el año 2014. En la documentación
anexa al proyecto de ley se incluyen las siguientes partidas para financiar los costes del sistema
eléctrico en 2014: 903 millones de euros para atender al extracoste de generación procedente de
los sistema extrapeninsulares, 2.907 millones de euros procedentes de la recaudación de los
impuestos de la Ley 15/2012 de medidas fiscales para la sostenibilidad energética y 343,8
millones por el ingreso estimado por la subasta de los derechos de emisión de gases de efecto
invernadero.

Ley 24/2013, ley del Sector Eléctrico 271. Esta nueva Ley del Sector Eléctrico establece el
principio rector de sostenibilidad económica y financiera limitando el desajuste por déficit de
ingresos en un ejercicio a un máximo de un 2% de los ingresos estimados del sistema para dicho
ejercicio, además de indicar que la deuda acumulada por desajustes de ejercicios anteriores no
podrá superar el 5% de los ingresos estimados del sistema para dicho ejercicio. En el caso de que
no se cumplan dichos límites se revisarán automáticamente los peajes o cargos que
correspondan.

La parte del desajuste que, sin sobrepasar los citados límites, no se compense por subida de
peajes y cargos será financiada por los sujetos del sistema de liquidación de forma proporcional a
la retribución que les corresponde por la actividad que realicen (en el sistema anterior eran
financiados exclusivamente por los grandes operadores). La ley considera sujetos del sistema de

270
“ Reforma del sistema eléctrico: una reforma necesaria” Ministerio de Industria, Energía y Turismo. 12 de julio de 2013
271
Ver Ley 24/2013 y resumen de energía y sociedad (Ley 24/2013).

252
E lectricidad
7. P eajes de
acces o, cargos
y déficit tarifario

liquidaciones a aquellos que reciben la liquidación de s u retribución con cargo a las diferentes
partidas de cos tes del s is tema, tanto directamente como a través del operador del s istema o de
los dis tribuidores. Las cantidades aportadas por este concepto serán devueltas en las
liquidaciones corres pondientes a los cinco años s iguientes reconociéndos e un tipo de interés.

E n cuanto a los superávit de ingres os que pudieran res ultar se destinarán a compens ar des ajustes
de años anteriores y mientras exis tan deudas pendientes de años anteriores , los peajes de acceso
o cargos no podrán s er revis ados a la baja.

T ambién s e es tablece la impos ibilidad de ces ión del déficit al F ondo de T itulización del Déficit del
s is tema eléctrico des de el 1 de enero de 2013. F inalmente, la ley reconoce la exis tencia de un
déficit de ingres os de liquidaciones del s istema eléctrico por importe máximo de 3.600 M€ en
2013, s in perjuicio de los des ajustes temporales que pudieran producirs e en el s istema de
liquidaciones eléctrico para dicho año. E ste déficit s erá financiado por los grandes operadores y
generará derechos de cobro durante los quince años s uces ivos a contar des de el 1 de enero de
2014 has ta s u s atisfacción. Las cantidades aportadas por es te concepto s erán devueltas
reconociéndos e el tipo de interés del mercado.

Des de la reforma del s ector que s e produjo entre 2012 y 2013 no s e ha vuelto a aprobar nueva
legis lación orientada a la contención del déficit del s is tema eléctrico. S in embargo, aunque no ha
habido nueva legis lación parece que s e ha logrado controlar la generación del déficit de tarifas en
el s ector. Des de 2014 el s ector eléctrico produce superávit, acumulando hasta ahora
aproximadamente 1.450M€ de s uperávit (F igura 7-6)

F igura 7-7. 1.000


550 469
E volución del 500 421

Déficit de 0
-178 -178
T arifa en el
-500
-1.000
período 2002 – -1.500
-1.527
2017 [miles de -2.000
-1.910
millones de €]. -2.500
-3.000
-3.026
-3.500
Fuente: -3.540
-4.000 3.119
-4.008
Liquidaciones -4.500 -4.300
de la CNMC. -5.000
-5.500 -5.108
-5.554 -5.609
-6.000
<2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

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