Contaminación Tecnológica
Contaminación Tecnológica
Contaminación Tecnológica
Introducción
A pesar de todas las ventajas que ha traído la era de la información con la irrupción de
la tecnología en todas las esferas de la vida moderna, uno de los problemas más
acuciantes a los que vamos a tener que hacer frente en el presente y en las futuras
décadas es la ingente cantidad de basura electrónica o tecnológica que producimos.
Este tipo de basura es especialmente peligroso, ya que, además de contaminar,
puede conllevar problemas muy serios para la salud, tanto de las personas como de
los ecosistemas naturales de forma relativamente rápida si no se gestiona
correctamente.
Proyección social
Está en relación con la obsolescencia percibida pero, en este caso, el objetivo no es
directamente tener un equipo más nuevo, sino obtener una imagen social favorecida
por el hecho de tenerlo. Todas las sociedades a lo largo de la historia han tenido
ciertos usos que los individuos usaban para demostrar su posición social o económica.
Actualmente, estos usos siguen existiendo pero se han modificado. Hoy en día, uno
de los usos más comunes a la hora de proyectar una posición social o económica
favorable sobre el resto de la sociedad pasa por poseer los equipos tecnológicos más
novedosos disponibles en el mercado. Esto genera un ciclo vicioso de compra y
desecho de los equipos tecnológicos (especialmente en el caso de los teléfonos
móviles) que conlleva un perjuicio gravísimo para el medio ambiente y para la propia
persona que lo practica, ya que intenta proyectar una imagen social que dependerá,
siempre, de algo que no será su propia persona, lo que conlleva necesariamente a la
insatisfacción propia de las sociedades consumistas que manipulan al individuo a su
voluntad.
Hipertecnologización
Por otro lado, más allá de las prácticas irresponsables y cuestionables que fomentan
la creación de basura tecnológica, también hay que tener en cuenta que una de las
causas de la ingente cantidad de basura tecnológica se debe al auge de este tipo de
artefactos. La hipertecnologización conlleva la presencia de equipos tecnológicos casi
en cualquier esfera de la existencia humana y, en consecuencia, esto conlleva mayor
cantidad de equipos que tengan que ser eliminados cuando dejan de funcionar.
Mala gestión de los residuos
Finalmente, la última causa de la generación de basura tecnológica la encontramos en
una mala gestión de este tipo de residuos. A pesar de las prácticas irresponsables que
se han venido mencionando, no se puede obviar el hecho de que, los artefactos
tecnológicos, se terminan rompiendo. Incluso, después de varias reparaciones, puede
darse la situación en la que, efectivamente, el equipo tecnológico no pueda seguir
siendo útil. En este caso, lo correcto será llevar dicho equipo a un punto limpio donde
se pueda gestionar como residuo de forma correcta, lo que conllevará reciclar la
mayor parte de sus componentes y, sobre todo, retirar de manera controlada aquellos
elementos que puedan ser peligrosos para el medio ambiente y para la salud y
gestionarlos de la forma adecuada.
Vertederos tecnológicos
Así mismo, otro de los problemas que conlleva la ingente generación de basura
tecnológica reside en la incapacidad a la hora de gestionar estos residuos. La
consecuencia es que esta basura se acumula en vertederos tecnológicos que, además
de contaminar el área local, conlleva el riesgo de ampliar su radio de contaminación en
el caso de que tenga lugar un incendio y los elementos tóxicos pasen al aire.
Explotación de comunidades y personas desfavorecidas
Finalmente, otra de las consecuencias de la generación de basura tecnológica y de la
mala gestión de este tipo de residuos es que surgen actividades que comprometen a
comunidades y personas de entornos desfavorecidos. Por un lado, hay que tener en
cuenta que la extracción de muchos de los metales que se usan en la elaboración de
artefactos tecnológicos se llevan a cabo en países donde la legislación laboral no
protege al trabajador (un buen ejemplo son muchos países de África).
En consecuencia, surge un sector que, si bien es cierto que genera trabajo, este se
lleva a cabo en condiciones nefastas y sin ningún tipo de seguridad en las minas. Esto
conlleva que muchas personas que trabajan en estas condiciones terminan
enfermando como consecuencia del contacto directo con este tipo de metales