Los Esquemas de Young

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 12

LOS ESQUEMAS DESADAPTATIVOS

LAS TRAMPAS VITALES

El concepto técnico para trampa vital es “esquema desadaptativo”. Los esquemas son creencias
profundamente enraizadas, aprendidas en los primeros años de vida, que se aplican a uno mismo y al mundo.
Los esquemas organizan activamente la experiencia de las personas, son centrales en el concepto que tienen
de sí mismas, pues determinan cómo piensan, sienten, actúan y se relacionan con los demás. Renunciar a creer
en un esquema sería como abandonar la seguridad de saber quiénes son y cómo es el mundo; por lo tanto, se
aferran a él, incluso cuando puede perjudicarles. Cuando un esquema perjudica o resulta contraproducente
para la persona en la forma que actúa y siente para sí mismo y para el mundo que le rodea, se trata de un
“esquema desadaptativo” o trampa vital.

Las trampas vitales tienen tres características:

1. Es un patrón o tema de toda la vida.


2. Lucha por sobrevivir.
3. Es autodestructiva.

Los esquemas se desarrollan en la infancia, permitiendo a los niños adaptarse a su familia de forma adecuada.
Durante la niñez, las personas se acostumbran a ciertos roles y maneras de percibirse y de ser percibidos por
los demás. Estos patrones útiles en la infancia para sobrevivir, están tan perfectamente aprendidos que las
personas continúan repitiéndolos fuera del hogar infantil (1); esto se vuelve un problema cuando el esquema
ya no les sirve en lo absoluto fuera del hogar, y comienzan a perjudicar a la persona, por eso son “esquemas
desadaptativos”, convirtiéndose en trampas vitales.

El ser humano necesita pautas de comportamiento que sean consistentes, y que proporcionen un sentido de
predicción y seguridad; las trampas vitales son modelos que las personas conocen muy bien, y aunque les
perjudican, resultan cómodas y familiares. Por esto, es que las personas se sienten atraídas por aquellas
situaciones que ponen en funcionamiento sus trampas vitales; y cuando una trampa vital se activa, en su
interior sienten un fuerte impulso que les lleva a mantenerla (2). Éste es el motivo por el cual los psicólogos
cognitivos creen que los esquemas o trampas vitales son tan difíciles de cambiar.

Así, de adultos, por medio de las trampas vitales, las personas recrean las condiciones más dolorosas de su
infancia que ayudaron a crearlas. De esta forma, una trampa vital daña el concepto que tiene de sí mismo, la
salud, las relaciones con los demás, el trabajo, la felicidad, los estados de ánimo, es decir, se manifiesta en
todos los aspectos de su vida (3).

El enfoque de las trampas vitales implica un enfrentamiento constante con nosotros mismos. Proporciona una
serie de tareas estructuradas en forma de deberes conductuales y un enfrentamiento continuo que ayudan a
afianzar los progresos. También enseña con exactitud cuál es la relación más saludable que se debe buscar y
qué tipo de relación es conveniente evitar.
DESARROLLO DE LAS TRAMPAS VITALES

Varios factores contribuyen al desarrollo de las trampas vitales. Se describen a continuación.

Temperamento

El temperamento es innato. Determina la constitución emocional y la manera en que la persona está preparada
para responder a los hechos y situaciones. Al igual que otros rasgos innatos, el temperamento cambia y
presenta una gran variedad de emociones. A continuación, se detallan algunos ejemplos de rasgos que se creen
son heredados.

El temperamento y el entorno conforman e influyen en el desarrollo de una persona. La influencia más


importante es la familia, ya que sus dinámicas fueron las mismas de su mundo más precoz. Hay otros factores
que también son importantes, como por ejemplo la relación con otros niños, la escuela, etc. pero no son tan
decisivos como el ambiente familiar. En la mayoría de los casos, la influencia de la familia es más intensa en la
primera infancia y progresivamente declina a medida que el niño crece. Las trampas vitales aparecen cuando el
entorno de la primera infancia es destructivo.

Las influencias destructivas de la infancia de las personas interaccionan con su temperamento y conforman las
trampas vitales. Su temperamento determina en cierta medida cómo responden a las experiencias de la
infancia y al trato que recibe de sus padres, hermanos, compañeros de escuela y otras personas significativas. A
pesar de que tengan el mismo entorno, dos niños pueden reaccionar de forma muy diferente: ambos pueden
ser maltratados, pero quizá uno reaccionará de manera pasiva y miedosa, mientras que el otro luchará en
contra adoptando una actitud rebelde y desafiante. Asimismo, el temperamento influye en parte cuando se
elige a uno de los padres como modelo a seguir; si en una familia uno de los padres comete abusos hacia el
otro, los hijos pueden adoptar la actitud del padre abusivo o la que es víctima pasiva. Así el temperamento
facilita el aprendizaje de ciertas creencias y patrones de conducta, que orientarán la vida de la persona. Cuando
en la vida adulta reproduce la trampa vital, lo que casi siempre repite es el drama de su infancia familiar.

Necesidades emocionales nucleares

Un niño tiene ciertas necesidades primordiales que la familia debe satisfacer para su crecimiento y desarrollo
psicológico:
1. Vínculos seguros con los demás (incluye seguridad, estabilidad, cuidados y aceptación)
2. Autonomía, competencia y sentido de identidad.
3. Libertad para expresar necesidades y emociones válidas.
4. Espontaneidad y juego.
5. Límites realistas y auto-control.

Se consideran estas necesidades universales. Todas las personas las tienen, aunque las necesidades de algunos
individuos son más intensas que las de otros. Una persona psicológicamente sana es la que puede satisfacer de
manera funcional estas necesidades emociones nucleares.

Las trampas vitales se derivan de necesidades emocionales nucleares insatisfechas durante la infancia; lo que
conformaría un ambiente familiar destructivo. Según la forma en que estas necesidades se hayan insatisfecho,
se puede determinar el desarrollo de esquemas desadaptativos o trampas vitales.

Experiencias vitales de la infancia

En la práctica clínica se han observado 4 tipos de experiencias vitales tempranas tóxicas que promueven la
adquisición de esquemas, según haya sido la satisfacción de necesidades primordiales.

1. La frustración tóxica de las necesidades , se produce cuando el niño experimenta “muy poco de algo
bueno”. El ambiente del niño está perdiendo algo importante, como es la estabilidad, comprensión o amor.
2. La traumatización o victimización. Aquí, el niño es dañado, criticado, controlado o victimizado.
3. Recibir demasiado de algo bueno/necesidad: los padres dan al niño demasiado de algo (protección, amor,
guía, empatía, límites) que, en moderación, sería saludable para un niño.
4. La interiorización selectiva o identificación con otros significativos . El niño se identifica de modo selectivo, e
interioriza los pensamientos, sentimientos, experiencias y conductas de uno de sus padres. Básicamente, el
niño interioriza los esquemas de uno de sus padres.

NECEDIDAD DESCRIPCIÓN ESQUEMA


Seguridad básica: Contar con alguien estable
(constante) en la vida, en quien confiar, que brinde  Abandono/Inestabilidad
cuidados y con quien sentirse seguro  Desconfianza/abuso
Vínculos seguros con emocionalmente.
los demás Relación con los demás: Intensidad de las relaciones
 (De)Privación emocional
con los demás, ya sea en la intimidad como en las
 Defectuosidad/Vergüenza
relaciones sociales. Incluye la necesidad de afecto,
 Aislamiento social/Alienación
empatía, guía, aceptación, respeto y atención.
 Dependencia/Incompetencia
Autonomía,  Vulnerabilidad al daño o a la
Ser independiente: tener una identidad propia,
competencia y sentido enfermedad
aprender a ser autosuficiente y aceptar
de identidad  Entrampamiento emocional/Yo
responsabilidades y realizar juicios correctos.
inmaduro
 Fracaso
Surge del sentimiento interno de que se es digno en
la vida; sentirse querido, aceptado y respetado en la  Subyugación
Libertad para expresar
familia, amigos y escuela. Implica la creencia de que  Autosacrificio
emociones y deseos
las necesidades propias cuentan tanto como las de  Búsqueda de
válidos
las otras personas y que el ambiente (familia, amigos aprobación/reconocimiento.
y escuela) dé la libertad para expresarlas.
Espontaneidad y juego Autoexpresión: Habilidad para manifestar lo que se  Negatividad/Pesimismo
desea, expresar necesidades, sentimientos e  Inhibición
inclinaciones naturales. Se enseñó a mantener el emocional/Autocontrol excesivo
 Estándares
equilibrio entre el juego y el trabajo, el éxito y el
Implacables/Hipercrítica
placer.
 Condena/Punitividad
Habilidad para aceptar los límites reales de la vida,
tanto internos como externos. Implica reconocer
 Derecho/Grandiosidad
Límites realistas y que las necesidades de otras personas cuentan tanto
 Autocontrol
autocontrol como las nuestras, responsabilizarse de las propias
insuficiente/Autodisciplina
conductas y ejercitar las propias habilidades
enfocadas en la obtención de un objetivo.

ESTILOS DE AFRONTAMIENTO A LA TRAMPA VITAL

Rendirse/Mantenimiento

Rendirse significa que la persona organiza su vida de tal modo que continúa repitiendo los patrones de la
infancia que desarrollaron la trampa vital, es decir, mantiene la trampa vital:
 Adopta comportamientos que garantizan las creencias relacionadas con el esquema.
 Selecciona parejas y situaciones que refuerzan la trampa vital.
 Hay una fuerte predisposición a interpretar los acontecimientos como prueba de la trampa vital.
 Distorsiona la perspectiva de las situaciones de tal manera que se auto-confirma el esquema, aunque en la
realidad no haya pruebas que lo sustenten.
 Reacciona con desmesurados sentimientos cada vez que la trampa vital se activa.

Rendirse incluye todos los patrones autodestructivos, que repiten una y otra vez. Son todas las formas en que
reproduce su experiencia vital de la infancia; extiende su situación de la infancia a la vida adulta.

Escapar/Evitación

Con el escape la persona evita pensar en la trampa vital; la aparta de sus pensamientos y rehúye a sentirla; es
un intento de pasar por la vida sin sentir dolor:
 Cuando se generan los sentimientos, se sofocan a través de las drogas, comiendo en exceso, limpiando,
trabajando o cualquier tipo de actividad realizándola compulsivamente.
 Huye de las situaciones que podrían poner en funcionamiento la trampa vital, para no enfrentarla.
 Los pensamientos, sentimientos y conductas funcionan como si el esquema no existiera.

Con la estrategia de escapar, se renuncia a la vida emocional; la persona no siente y es incapaz de


experimentar el placer y el dolor real. La desventaja de escapar, es que nunca se supera la trampa vital.

Contraatacar/Compensación

Cuando contraataca, la persona intenta compensar la trampa vital convenciéndose a sí misma y a los demás de
que lo contrario a las creencias que fundamentan el esquema, son verdad. Se desarrolla como alternativa a ser
devaluado, criticado y humillado. Es una forma de salir de la vulnerabilidad, pero si es demasiado extremo, con
frecuencia sale mal. La persona:
 Parece saludable y aunque se adapte bien a la sociedad, frecuentemente se siente infeliz e inútil.
 Se siente, comporta y piensa como si fuera especial, superior, perfecto e infalible, aferrándose a esa
imagen con desespero.
 Se pone en situaciones donde obtendrá el aplauso de la audiencia.
 Maquilla sus defectos antes de ser descubierta y humillada.
 No le importa las consecuencias negativas ni las repercusiones que puede tener sus acciones.
 No aprende a enfrentarse a sus derrotas: no asume la responsabilidad de sus fracasos ni reconoce sus
limitaciones.
 Cuando hay contratiempo importante, el contraataque se hunde y se siente muy deprimida.

Los contraataques aíslan o hacen que los demás tomen represalias, se pierde la habilidad de confiar en los
demás y relacionarse en un nivel más profundo por miedo a mostrarse vulnerable.

CÓMO CAMBIAR LAS TRAMPAS VITALES

Para cambiar una trampa vital se requiere de una firme voluntad para aceptar e dolor, ya que se debe encarar
el esquema y entenderlo. El cambio también precisa disciplina, ya que se tiene que observar el patrón
sistemáticamente y modificar las conductas cada día; requiere de una práctica constante.

1. Autoconocimiento: Identificar y etiquetar las trampas vitales.

Que reconozca las trampas vitales y observe cómo afectan en su vida. Las sesiones de imaginación suelen ser
útiles.

2. Entender los orígenes de la trampa vital en la infancia.

Que recuerde la infancia a través de sesiones de imaginación: visualizar el recuerdo e intentar sentirlo de la
manera más real posible. Que sienta el dolor o las emociones relacionadas con la trampa vital. Que hable con
“su niño interior”, le escriba una carta (el adulto con la mano dominante, el niño responda con la otra), le
consuele y guíe, le defienda si es necesario.

3. Someter a juicio la trampa vital. Desaprobar su validez a nivel racional.

Atacar la trampa vital a nivel intelectual: probar que no es cierta o que se puede modificar.
- Enumerar hechos objetivos de su vida a favor y en contra de la trampa vital.
- Identificar pruebas que apoyen que la trampa vital sea inherentemente verdadera.
- Identificar pruebas de que la familia o compañeros de la infancia le convencieron de pensar así.
- Explorar qué podría hacer para remediar la situación.
- Resumir las conclusiones sobre la trampa vital en una tarjeta recordatorio.

4. Escribir cartas a padres, hermanos o compañeros que favorecieron la trampa vital.

El propósito no es enviar la carta ni cambiar a los padres y/o personas implicadas, sino desahogar la rabia y la
tristeza. Para escribir las cartas, tiene que superar la culpabilidad, ser crítico, y decir sólo la verdad al momento
de expresar sentimientos. Que exprese que su actitud le perjudicó y cómo le hicieron sentir, cómo se
equivocaron y cómo deseó que hubiera sido distinto.

5. Examinar el patrón de la trampa vital con detalle.

Identificar los hábitos contraproducentes que refuerzan el patrón. También describir el estilo de afrontamiento
al esquema que tiene y cómo puede cambiarlo.
6. Romper el patrón.

Utilizar los registros del punto cinco; seleccionar dos o tres formas que refuercen la trampa vital y que intente
llevar a cabo el plan para cambiarla. Que seleccione sólo los aspectos que se sienta capaz de superar, ya que la
experiencia del cambio ha de tener éxito. Trabajar en orden creciente la lista de conductas que refuerzan la
trampa vital.

7. Continuar intentándolo.

Recordar que debe ser paciente y ser perseverante: que ha de enfrentarse a uno mismo una y otra vez. El
cambio requiere tiempo y trabajo.

8. Perdonar a los padres.

No es necesario perdonar a los padres, sobre todo si ha sufrido un abuso o maltrato grave, en cuyo caso es
posible que nunca les pueda perdonar. Ésta es una decisión que depende totalmente de la persona en
cuestión. En la mayoría de los casos, perdonar los padres ocurre de forma natural a medida que avanza el
proceso de curación, pues se comienza a verlos con mayor objetividad; ya no se les ve como gigantes o figuras
negativas sino como personas con sus propios problemas o preocupaciones, y con sus propias trampas vitales.

LOS OBSTÁCULOS PARA EL CAMBIO

1. Está contraatacando en vez de reconocer y asumir la responsabilidad de la trampa vital

 Aún comprensa en exceso.


 Culpa a los demás de sus conflictos o de su falta de progreso. Tiene problemas para admitir errores o
asumir las responsabilidades del cambio.

Solución 1: Redactar una lista de todas las opciones que ha rechazado en su vida. ¿Y si fueran culpa suya,
cómo se sentiría? ¿Qué significaría si la crítica de los demás tiene alguna validez?

Solución 2: De una forma progresiva que empiece a trabajar o a ganar menos de lo que obtiene al
compensar la trampa vital. Que sienta lo que es parecerse a todo el mundo.

2. Escapa de sentir la trampa vital

 No desea pensar en sus problemas, su pasado, su familia o sus patrones vitales. Continúa apartando
sus sentimientos.
 Quizá alivia sentimientos con alguna adicción o conducta compulsiva.

Solución 1: Realizar cada día ejercicios de imaginación sobre la infancia, correspondientes a la trampa vital
que le describa. Escribir alguna crítica a sus padres o alguno de sus defectos y debilidades.

Solución 2: Hacer una lista de ventajas e inconvenientes que supone evitar sus sentimientos. Que relea esta
lista cada día y recuerde por qué lo hace.
Solución 3: Que acuda a un programa de autoayuda (12 pasos), para que deje sus conductas compulsivas o
adictivas por unos días. Durante este tiempo, que intente realizar sesiones de imaginación de sus infancia
correspondientes a la trampa vital que le describe. Que escriba un diario que refleje lo que siente.

3. No ha rechazado la trampa vital, todavía la asume a nivel racional.

 Cree que la trampa vital es verdad.


 No intenta superarla.

Solución 1: Comprometerse a luchar contra sus creencias. Repetir los ejercicios de cambio y rechazo de
trampas vitales cada día. Puede ser útil que pida ayuda de alguien de su confianza para hacer los ejercicios,
pues pudiera darle un punto de vista más objetivo.

Solución 2: Revisar exhaustivamente su vida, en busca de cualquier prueba o dato objetivo que rete a su
trampa vital, e indagar cualquier posibilidad de cambio. Reconocer los verdaderos motivos que
imposibilitaron el cambio en el pasado y en el presente.

Solución 3: Escribir una tarjeta recordatorio y leerla varias veces al día.

4. Se empezó con una trampa vital o tarea que era demasiado difícil.

 Se empezó con una trampa vital que era demasiado agobiantes.


 La trampa vital era la indicada, pero el plan demasiado ambicioso.

Solución 1: Dividir el plan en pasos más pequeños.

Solución 2: Empezar con el paso más fácil, que perciba la sensación de superar cada paso y trabajar para
lograr otros más difíciles.

5. Se da cuenta de que la trampa vital es errónea a nivel racional, pero emocionalmente todavía siente que
es válida.

Solución 1: Recordar que el cambio se consigue con lentitud; la trampa vital se aprendió y fortaleció
durante años y requiere tiempo y esfuerzo para aprender una nueva forma de vivir. A medida que la parte
sana se fortalece, la trampa vital se debilita.

Solución 2: Para acelerar el proceso, escribir diálogos entre su parte sana y su trampa vital; que se enfade
con su patrón, que se permita llorar y vivir sus sentimientos.

Solución 3: Para acelerar el proceso, trabajar con mayor esfuerzo el cambio de conductas que refuerzan la
trampa vital. A medida que cambie los viejos patrones, comprobará que hay más datos objetivos que
contradicen la trampa vital.

Solución 4: Pedir a amigos que le ayuden y apoyen, pues ellos pueden ayudar a ver que su trampa vital no
es válida.

6. No ha sido sistemático y disciplinado con el cambio.

 Sólo trabaja de vez en cuando.


 Olvida los pasos; se resiste a hacer todo el trabajo que se requiere.

Solución 1: Asegurarse de haber completado todos los ejercicios necesarios para el cambio.

Solución 2: Esforzarse a pensar, sentir y comportarse de manera distinta. Dedicar unos minutos cada día
para revisar su progreso y releer sus tarjetas recordatorio. Identificar si se activó la trampa vital durante el
día, si hiso alguna cosa para rendirse a su patrón y si hiso alguna cosa para evitar rendirse a su patrón.
Enfocarse en cómo puede mejorar.

7. Olvidó un elemento importante en su plan.

 No ha comprendido del todo los pensamientos, sentimientos y conductas que refuerzan la trampa
vital.
 Algún dato importante en la forma en que vive la trampa vital, no ha sido considerado.

Solución 1: Revisar la trampa vital y el plan con alguien de confianza, quizá esa persona se percatará de
algún aspecto del patrón vital que ha olvidado.

Solución 2: Revisar la lista de conductas que son típicas de la trampa vital con detenimiento, para
identificar lo que se ha pasado por alto del patrón.
DIMENSIONES Y PRINCIPALES ESQUEMAS DESADAPTATIVOS

Actualmente se distinguen 18 esquemas desadaptativos o trampas vitales, que se agrupan en 5 categorías


amplias de necesidades emocionales insatisfechas, llamadas “dimensiones”. Cada una de estas dimensiones
refleja una necesidad crítica de los niños relacionada con el funcionamiento adaptativo. Las dimensiones
describen, a su vez, relaciones tempranas disfuncionales con padres y amigos, donde radican los orígenes del
esquema, así como el funcionamiento interpersonal adulto. Se desacriben a continuación, brevemente, estas 5
dimensiones:

1. Desconexión y rechazo: Incluye personas cridas en ambientes que carecen de protección, afecto,
aceptación y estabilidad. Los adultos criados en este tipo de ambiente asumen que no van a encontrar en
la vida su deseo de amor, aceptación, seguridad y empatía.
2. Perjuicio en autonomía y desempeño: Refleja un ambiente infantil muy complicado y sobreprotector. En
sus relaciones en la vida adulta, estos individuos son demasiados dependientes de los demás y creen que
carecen de las habilidades adecuadas para afrontar situaciones por ellos mismos.
3. Tendencia hacia el otro: La infancia está fomentada por experiencias tempranas en las que las necesidades
del niño son secundarias a las necesidades de los demás. En sus interacciones en la vida adulta se
preocupan más del bienestar de los demás y de ganar su aprobación que de sus propias necesidades.
4. Sobrevigilancia e inhibición: Se desarrolla cuando se educa a los niños en el perfeccionismo, en una familia
rígida. En su vida adulta presenta un exceso de control, con reglas extremadamente elevadas.
5. Límites inadecuados: Los niños normalmente fueron criados por padres permisivos y demasiado
indulgentes, lo cual pudo contribuir a que se creyeran superiores, como adultos carecen de auto disciplina
y pueden tener un sentimiento de autoridad en sus relaciones con los demás, llegando incluso a ser
insensibles ante las necesidades y deseos de las otras personas.

DIMENSIÓN ESQUEMA DESCRIPCIÓN


Desconexión y rechazo Se refiere a la creencia de que los demás no
Abandono/inestabilidad
pueden darnos un apoyo fiable y estable.
La persona espera que los demás lo hieran
Desconfianza/Abuso.
o se aprovechen de ella.
Creencia en que no se logran las
necesidades propias de apoyo emocional,
(De)Privación emocional
sobre todo, en relación a la guía, la empatía
y la protección (afecto).
Recoge la visión de sí mismo como
Defectuosidad/Vergüenza
antipático e indeseable socialmente.
Aislamiento social/Alienación Creencia en que no se es parte del grupo o
la comunidad, que se está solo y que es
diferente de los demás.
La persona cree que es incompetente y está
Dependencia/Incompetencia desamparada y por tanto, necesita la
asistencia de los demás para funcionar.
Se espera tener experiencias negativas que
Vulnerabilidad al daño o la no controla, tales como crisis médicas,
enfermedad económicas o materiales, emocionales o
naturales.
Perjuicio en autonomía y La persona se relaciona demasiado con
desempeño personas significativas, a costa de su propio
Entrampamiento emocional/Yo
desarrollo; es decir, no consigue desarrollar
Inmaduro
una identidad individual segura, al margen
de los demás.
Refleja la visión de que se ha fracasado en
el pasado y se continuará haciéndolo,
Fracaso
debido a una ausencia inherente de
inteligencia, talento u otras habilidades.
Supone abandonar el control a causa de
sentimientos externos de coerción. La
persona espera que los demás sean
Subyugación
agresivos, revanchistas, o los abandonen si
expresa sus necesidades o sentimientos,
por lo que las suprime.
Tendencia hacia el otro
La persona descuida sus propias
Autosacrificio necesidades, pensando que puede ahorrar
el dolor a los demás.
Se quiere ganar la aceptación de los demás,
Búsqueda de aprobación/
a costa del desarrollo de la propia
reconocimiento
identidad.
Refleja la atención sobre los aspectos
negativos de la vida, así como la expectativa
Negatividad/Pesimismo de que nada irá bien. Se caracteriza por un
pesimismo omnipresente, tristeza y
preocupación.
La persona evita la espontaneidad para
Inhibición emocional/
mantener la sensación de que prevé y
Autocontrol excesivo
Sobrevigilancia e controla su vida o para evitar la vergüenza.
inhibición Recoge la creencia en que se debería
Estándares Implacables/ cumplir con reglas rigurosas de actuación,
Hipercrítica autoimpuestas, normalmente para alcanzar
el éxito, evitar el fracaso o evitar la crítica.
Recoge la visión de que los individuos
deberían ser fuertemente castigados por
Condena/Punitividad
sus errores. No se toleran los propios
errores ni los de los demás.
Límites Derecho /Grandiosidad Creencia en ser superior a los demás,
inadecuados/insuficientes pudiendo llegar a ser extremadamente
competitivo o dominante.
Personas que pueden ser impulsivas, tener
Autocontrol dificultad con la autodisciplina y tener
insuficiente/Autodisciplina problemas para controlar sus emociones.

ABANDONO

ABANDONO

En la trampa vital del abandono, la persona se basa en la creencia de que las personas estimadas se alejarán y
ella se quedará sola para siempre. La persona cree que las personas cercanas a ella morirán, se marcharán de
casa para siempre, le dejarán o abandonarán. Como consecuencia de esta creencia, se aferra demasiado a las
personas que están cerca de ellas y, paradójicamente, fuerza su distanciamiento. Hasta en las separaciones
normales puede sentirse muy frustrada, disgustada, enfadada.

DESCONFIANZA/ABUSO

En la trampa vital de la desconfianza y el abuso, la persona tiene la expectativa de que los otros abusarán de
ella: se burlarán, mentirán, manipularán, humillarán, harán daño físico o se aprovecharán de ella. Se esconde
detrás de un muro de desconfianza que le impide intimar demasiado con otras personas. Es suspicaz con las
intenciones de los demás y tiende a pensar en lo peor. Es posible que evite por completo las relaciones con los
demás. No obstante, si se relaciona, establece uniones superficiales en las que no se abre a los demás o busca
persona que la traten mal, lo que provoca que se sienta enfadado y con ganas de vengarse.

PRIVACIÓN EMOCIONAL

La persona que vive bajo esta trampa vital se basa en la creencia de que sus necesidades de amor nunca serán
satisfechas de forma adecuada, que no le querrán ni comprenderán cómo se siente. Le atraen las personas frías
y egoístas, por lo que inevitablemente las relaciones que establece le resultan insatisfactorias. Se siente
enfadada y el estado de ánimo le fluctúa entre el enfado por la insatisfacción y el dolor y la soledad.
Paradójicamente, el enfado sólo consigue distanciar a las personas, de modo que su carencia emocional
continúa presente.

La persona transmite una soledad conmovedora.

AISLAMIENTO SOCIAL/ALIENACIÓN

DEPENDENCIA/INCOMPETENCIA
En la trampa vital de la dependencia e incompetencia, la persona es incapaz de enfrentarse a la vida cotidiana
si no recibe ayuda de los demás. Busca figuras fuertes de las qué depender para que gobiernen su vida. En el
trabajo, no se atreve a actuar por sí misma.

VULNERABILIDAD

Las personas que padecen la vulnerabilidad viven con el temor de que va a ocurrir un desastre en cualquier
momento, ya sea natural, delictivo, médico o financiero. La persona no se siente segura en el mundo. Miedos
excesivos y poco realistas controlan su vida, y gasta su energía en sentir un poco de seguridad. La
vulnerabilidad puede surgir de otras situaciones fóbicas, tales como el miedo a volar, a ser asaltada o a los
terremotos.

También podría gustarte