niversidad de Guayaquil

Facultad de Jurisprudencia, Ciencias Sociales y Políticas

Estudiante: Alexandra Yadira Luna Herrera
Curso: 3-7
Materia: Derecho de Familia

Es aquel en el que los cónyuges están de acuerdo en el divorcio. La demanda

puede ser presentada por ambos cónyuges o por uno de ellos con el
consentimiento del otro. Es necesario acompañar a la demanda un convenio
regulador, en el que los cónyuges deben alcanzar un acuerdo sobre la
guardia y custodia de los hijos e hijas, el régimen de visitas, las pensiones
alimenticia y compensatoria, si procede, el uso de la vivienda familiar, etc.
El procedimiento judicial es rápido y sencillo.
1. Requisitos Legales:

• Verificación de que ambos cónyuges estén de acuerdo

con el divorcio y lo soliciten de manera voluntaria.
• Cumplimiento de los plazos legales establecidos por la
jurisdicción en la que se presenta la solicitud.

2. Acuerdo entre las Partes:

• Detalle explícito de los términos del acuerdo,

incluyendo la división de bienes, custodia de hijos (si los hay),
pensión alimenticia y cualquier otro aspecto pertinente.
• Garantía de que el acuerdo no sea producto de coacción
o engaño.

3. Proceso Judicial:

• Revisión del acuerdo presentado por los cónyuges para

asegurar que cumple con las leyes y regulaciones locales.
• Confirmación de que se han respetado los
procedimientos legales establecidos para este tipo de divorcio.

4. Evaluación del Juez:

• Aseguramiento de que los derechos y obligaciones de

ambas partes estén debidamente contemplados y protegidos en el
acuerdo.
• Verificación de que el divorcio por mutuo
consentimiento sea la mejor opción para las partes involucradas.
5. Resolución de la Sentencia:

• Declaración de disolución del matrimonio de acuerdo

con el pedido de ambas partes.
• Establecimiento de las condiciones acordadas como
parte del proceso de divorcio.

6. Aspectos Financieros y de Custodia:

• Confirmación de que los acuerdos respecto a bienes,

deudas y manutención de hijos (si aplicable) sean justos y
equitativos para ambas partes.

7. Ejecución y Vigencia:

• Determinación de la fecha en que la sentencia de

divorcio entrará en vigencia.
• Indicación de los pasos a seguir para ejecutar el acuerdo
de divorcio.

Estos puntos reflejan las consideraciones jurídicas clave que un

juez debe tener en cuenta al emitir una sentencia de divorcio por
mutuo consentimiento, asegurando que se respeten los derechos y
obligaciones de ambas partes de manera justa y legal.
En el Ecuador hasta la actualidad los procesos para disolver el
vínculo matrimonial se limitan a dos alternativas dependiendo el
caso, el primero tiene que ver con el ámbito jurisdiccional cuando
se trata de un divorcio controvertido, y el segundo tiene que ver
con el ámbito notarial. Es así que, cuando dentro de la institución
jurídica del matrimonio se presentan conflictos irreconciliables
entre los cónyuges y como consecuencia de esto deciden terminar
con su matrimonio se inician procesos jurídicos con esa finalidad y
para ese efecto la Ley determina que cuando se trate de procesos
de divorcio controvertidos, esto es, aquellos divorcios en los que se
busca la terminación de la relación matrimonial con el fundamento
jurídico de las causales que determina para ese efecto el Código
Civil ecuatoriano o cuando se trate de matrimonios en los que
existan hijos menores de edad. Y cuando se trata de que los
cónyuges de mutuo consentimiento deciden divorciarse en
matrimonios donde no existan hijos menores de edad la Ley
determina que el divorcio se debe realizar por la vía notarial. Los
dos procedimientos de terminación del vínculo matrimonial antes
mencionados obedecen a una estructura rígida procedimental pero
que no brinda una efectividad en los resultados con respecto a los
principios jurídicos de celeridad y economía procesal, en ese
sentido la ley faculta que cuando se trate de procedimientos de
divorcios controvertidos en los que para declarar disuelto el
vínculo matrimonial se necesite una sentencia judicial el
procedimiento obligue a realizar la prueba necesaria a través de la
presentación de testigos, testimonios y evidencias que de una
manera objetiva determinen que se ha incurrido en una de las
causales que determina el Código Civil para la terminación del
matrimonio efectivamente se necesita de este procedimiento
jurisdiccional en forma rigurosa. Sin embargo de lo manifestado
en líneas anteriores en este procedimiento jurisdiccional
controvertido previo a sentenciar el divorcio, el Juez debe resolver
los asuntos relacionados con los menores, esto es, con cuál de los
padres van a permanecer los menores, qué pensión alimenticia se
va a suministrar a favor de los menores por parte de aquel padre
que no vaya a convivir con los menores, y, sobre los asuntos
relacionados con los bienes adquiridos dentro de la sociedad
conyugal, esto es, aquellos asuntos que tienen que ver con la
disolución de la sociedad conyugal y con la liquidación de la
sociedad conyugal.
El Artículo 107 del Código Civil ecuatoriano, establece que el
consentimiento, voluntad y deseo de terminar con el vínculo
matrimonial debe expresarse por escrito. El divorcio por mutuo
consentimiento, puede tramitarse de dos maneras: el divorcio por
mutuo en vía judicial y el divorcio por mutuo en vía notarial. Para
iniciar un divorcio por mutuo consentimiento en vía judicial, se
debe presentar la correspondiente demanda bajo un proceso
voluntario y el juez convocará a audiencia única, donde se
resolverá el divorcio en sentencia. Si se tuviera hijos menores de
edad, el juez será competente para resolver la situación familiar y
socio-económica de los hijos menores de edad concebidos dentro del
matrimonio. No obstante, el divorcio por mutuo consentimiento,
no sólo puede tramitarse por vía judicial, como mencionamos,
también puede efectuarse en una Notaría. El primer paso para
comenzar con este procedimiento, es llenar el formulario único
para petición de divorcio por mutuo consentimiento y elaborar una
minuta manifestando la voluntad de divorciarse. En caso de
existir hijos menores de edad o dependientes, los temas de visitas,
alimentos y tenencia deberán estar previamente resueltos, bien
sea por sentencia ejecutoriada o por acta de mediación.

Los documentos habilitantes más importantes para este proceso

son: a) Acta de matrimonio de los cónyuges; b) Copias de cédulas y
papeletas de votación; c) Acta de mediación y/o sentencia de
situación de los menores de edad respecto a tenencia, visitas y
alimentos. Se recomienda la revisión documental y asesoría de un
abogado de confianza para la tramitación de un divorcio por mutuo
consentimiento, sea en vía notarial, o en vía judicial. El divorcio
por mutuo acuerdo implica que los esposos aceptan el principio de
ruptura. Para llevarlo a cabo, necesitan de un abogado en el
procedimiento de separación. Resulta ser más rápido por la
conciliación en cuanto a bienes, manutención y custodia de niños,
si los hay. Cuando el divorcio se ejecuta sin hijos de por medio, el
Código Orgánico mencionado establece que el cese del matrimonio
podrá realizarse en notarías, con la debida intervención de
abogados. Cuando el divorcio se ejecuta sin hijos de por medio, el
Código Orgánico mencionado establece que el cese del matrimonio
podrá realizarse en notarías, con la debida intervención de
abogados. Es un proceso a través del cual las partes se pueden
divorciar sin necesidad de declarar culpables o inocentes ni de
discutir las razones por las cuales desean divorciarse, respetando
así su privacidad e intimidad. El proceso respeta la
confidencialidad de las partes al no requerir las razones por las
cuales decidieron divorciarse.

Para empezar este proceso las partes deben, de manera libre y

voluntaria, someter un escrito conjunto al Tribunal, informando
su deseo de divorciarse. Es importante resaltar que si la persona
se siente obligada a presentar el documento entonces no se puede
divorciar a través de este proceso.

También se permite el divorcio por esta causal en sede notarial,

siempre que:

• No haya personas judicialmente incapaces,

• ambas personas casadas entre sí manifiesten en escritura
pública que consienten al divorcio,
• se incluyan estipulaciones sobre división de bienes y deudas
gananciales, custodia, patria potestad, alimentos, relaciones
filiales y hogar seguro para las menores, si hay.

El divorcio por mutuo acuerdo es un procedimiento legal en el

que ambas partes, es decir, los cónyuges, deciden de manera
consensuada poner fin a su matrimonio. A diferencia de otros
tipos de divorcio que pueden requerir presentar pruebas de
culpabilidad o responsabilidad por parte de alguno de los
cónyuges (como el divorcio por causa), en el divorcio por mutuo
acuerdo no se busca atribuir la responsabilidad del fin del
matrimonio a ninguno de ellos.

En este proceso, los cónyuges colaboran para llegar a un

acuerdo sobre aspectos fundamentales de la separación, como la
división de bienes, la custodia de los hijos (si los hay), las visitas,
la pensión alimenticia y otros aspectos relevantes para la
disolución del vínculo matrimonial. Este acuerdo, una vez
alcanzado, se presenta conjuntamente ante un juez o tribunal
competente, acompañado de la solicitud formal de divorcio.

La principal ventaja de este tipo de divorcio radica en su

carácter consensuado y pacífico. Al no haber controversia sobre
la decisión de divorciarse ni conflictos sobre la responsabilidad
de la ruptura matrimonial, suele ser un proceso más rápido,
económico y menos estresante emocionalmente para ambas
partes. Además, al ser un acuerdo consensuado, los cónyuges
tienen un mayor control sobre los términos y condiciones de la
separación, lo que puede generar un ambiente más colaborativo
y menos confrontativo.

Es importante destacar que, a pesar de ser un proceso menos

litigioso, es fundamental contar con asesoramiento legal para
garantizar que los acuerdos sean equitativos y estén en
conformidad con las leyes y regulaciones locales. Este tipo de
divorcio puede variar en su complejidad dependiendo de la
cantidad de bienes a repartir, la existencia de hijos y otras
circunstancias particulares de cada caso, pero en general, ofrece
una vía más amigable y menos adversarial para finalizar
legalmente un matrimonio.
El divorcio por mutuo acuerdo presenta diversas ventajas para
las parejas que deciden disolver su matrimonio de manera
consensuada:

1. Proceso más rápido: Al evitar disputas legales sobre la

culpa o responsabilidad, el divorcio por mutuo acuerdo tiende a
ser más rápido que otros tipos de divorcio. Los acuerdos
preestablecidos agilizan el proceso judicial.

2. Menos costoso: Al reducir la necesidad de abogados

para litigar y presentar pruebas extensas, el divorcio amistoso
suele ser más económico, lo que beneficia a ambas partes en
términos financieros.

3. Menos conflicto emocional: Al no enfrentar disputas

legales prolongadas, el divorcio por mutuo acuerdo puede ser
menos estresante emocionalmente para ambas partes,
permitiéndoles enfocarse en cerrar ese capítulo y avanzar.

4. Control del proceso: Los cónyuges tienen mayor control

sobre los términos y condiciones del divorcio, permitiéndoles
negociar y llegar a acuerdos que consideren justos y equitativos
para ambos.

5. Preservación de la relación futura: Al evitar

confrontaciones legales y acordar la separación de manera
amistosa, el divorcio por mutuo acuerdo puede facilitar una
relación más cordial en el futuro, especialmente si hay hijos en
común, al fomentar una comunicación más pacífica entre los
padres.

6. Confidencialidad: Al llegar a acuerdos privados, se

puede mantener cierta privacidad en relación con los detalles
del divorcio, a diferencia de los procesos litigiosos que podrían
hacer públicos ciertos aspectos.

Estas ventajas hacen del divorcio por mutuo acuerdo una opción
atractiva para muchas parejas que desean terminar su
matrimonio de manera pacífica, rápida y con un menor impacto
emocional y financiero.
A pesar de sus numerosas ventajas, el divorcio por mutuo
acuerdo también puede presentar algunas desventajas:

1. Posibles desacuerdos: Aunque ambas partes intenten

llegar a un consenso, a veces puede resultar difícil ponerse de
acuerdo en todos los aspectos del divorcio, como la distribución
de bienes, la custodia de los hijos, las pensiones, entre otros. Los
desacuerdos pueden generar tensiones y retrasar el proceso.

2. Asimetría de poder: Existe la posibilidad de que una de

las partes tenga más poder de negociación o influencia sobre la
otra, lo que podría resultar en un acuerdo desigual o injusto
para una de las partes.

3. Complejidad de algunos aspectos: En casos donde hay

propiedades complejas, inversiones o negocios conjuntos, el
proceso puede volverse más complicado y requerir la asistencia
de abogados especializados, lo que aumentaría los costos y la
duración del proceso.

4. Cambios posteriores: Aunque se llegue a un acuerdo,

ciertas circunstancias pueden cambiar con el tiempo, como las
finanzas, las necesidades de los hijos o la situación laboral, lo
que podría requerir modificar los términos originales del
acuerdo.

5. Posible falta de asesoramiento legal adecuado: Al

tratar de minimizar los costos, algunas parejas podrían optar
por no buscar asesoramiento legal adecuado, lo que puede llevar
a acuerdos que no reflejen completamente sus derechos legales.

6. Impacto emocional: Aunque se trata de un proceso

menos conflictivo, el divorcio por mutuo acuerdo aún puede ser
emocionalmente difícil para ambas partes, ya que implica el fin
de una relación significativa.

Estas desventajas varían según las circunstancias individuales

de cada pareja y su capacidad para llegar a acuerdos. Es
importante considerar estas posibles dificultades al optar por
un divorcio por mutuo acuerdo y buscar el asesoramiento
adecuado para tomar decisiones informadas y equitativas.