Ba52 56-71 Del+territorio+a+la+escalera
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DOI: 10.22201/fa.14058901p.2023.52.87270
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Sin datos sobre el lugar. Escalera efímera que resuelve eficazmente el ascenso y la En su evolución sedentaria, las comunidades han mani-
carga, produciendo una imagen poética. Dibujos de la autora a partir de imágenes
del libro de Herman Hertzberger, Space and the architect,
pulado la naturaleza mediante la construcción de compo-
Rotterdam, 010 Publishers, 2000, p. 254 (año de elaboración: 2022). nentes arquitectónicos, desde la colocación inicial de una
piedra o una estaca para denotar un lugar, un antes y un
tectura, “[…] todo hombre que elige un lugar de su am- después, hasta llegar a concebir espacios interiores a par-
biente para establecerse y vivir es un creador de espacio tir del uso de plataformas, columnas, muros y cubiertas,
expresivo. Da significado a su ambiente, asimilándolo a primero para su cobijo y como expresión simbólica.
sus propósitos, al mismo tiempo que se acomoda a las Al conocer y abarcar los límites de una región o te-
condiciones que ofrece”.3 El ser humano, en su relación rritorio, escalar montañas, serranías y al mismo tiempo
con la naturaleza, establece una relación de orden con el admirar y asombrarse del lugar, el ser humano va confi-
mundo que le rodea: la salida y la puesta del sol, el reco- gurando el territorio para facilitar su accesibilidad, habi-
nocimiento de los puntos cardinales oriente y poniente, tarlo e incorporarlo a su experiencia. A partir de ello va
norte y sur, la dirección de los vientos, la proximidad de desarrollando diferentes destrezas para acceder a ellos,
la lluvia, étcetera. Así también, al situarse en el lugar, buscando la manera de conectarlos.
ya sea a la derecha o izquierda, adelante o atrás, arriba o La escalera y sus distintas versiones a lo largo de la
abajo, adquiere conciencia de sí mismo en el espacio y historia han facilitado el encuentro entre las diferentes
de la relatividad del aquí y del allá. cotas del territorio. La condición de verticalidad siempre
Es desde esta perspectiva de análisis que abordamos ha ido en relación dialéctica con la condición de horizon-
en este artículo la relación territorio-escalera, naturaleza talidad; el horizonte es una línea de reposo, la vertical
y arquitectura. una línea de movimiento. El horizonte, abstracción hu-
mana a partir de la naturaleza, es la línea que define la
tierra y el cielo, esto es la superficie o plano sobre el que
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Christian Norberg-Schulz, Existencia, Espacio Arquitectura, Barcelona, Blume, 1975, se posa el ser humano, y el espacio sobre él. Asimismo,
p. 12. la horizontalidad y la verticalidad no pueden existir in-
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dependientemente una de la otra, están siempre pre- sotros, unido a sensaciones de seguridad, tranquilidad,
sentes en la experiencia espacial. asombro, como condiciones humanas de estar y ser par-
Reflexionando a partir de los escritos de Sigfried Gie- te del mundo, contribuyen al anhelo, deseo, y posterior
dion4 y los comienzos de la arquitectura, la verticalidad necesidad de construir conexiones que faciliten nuestra
es un principio relacionado con el estar en el mundo llegada a lo inicialmente inaccesible. Hay siempre, por
natural a partir de una característica humana esencial: ello, unido a la condición práctica de subir y bajar, una
estar de pie, el “homo erectus”. Con el devenir cultural mirada poética.5 El ascender y descender, incorpora tam-
hemos dado un valor simbólico a la vertical, donde el bién aspectos ceremoniales, así como de misterio y re-
abajo y el arriba han sido considerados por los seres hu- compensa, asociados al producto cultural-arquitectónico
manos como una dimensión sagrada. denominado escalera.
Las nociones de cielo y tierra o de dioses del supra La acción de bajar a una cañada, una barranca, un ce-
e infra mundo en antiguas culturas, o el concepto cris- note, como una necesidad de explorar y descubrir que
tiano de paraíso “cielo”, e infierno “debajo de la tierra”, hay en el “adentro” de la tierra, el espacio debajo de la
nos remiten a la importancia existencial del concepto de llanura, una planicie o al interior de una montaña, lleva-
verticalidad, ligada a los primeros pensamientos huma- ron al hombre a comprender la noción del adentro y del
nos sobre las divinidades, dioses del arriba y del abajo y afuera de algo, y después utilizarlo metafóricamente.
lugares “inalcanzables”. La escalera como producto de una acción del hombre
Por otro lado, la verticalidad y sus sombras sobre el pla- y su cultura, marcada por una condición utilitaria, ha
no horizontal, segunda abstracción de estar en el mundo, sido enriquecida desde la idea de que al unir dos ex-
proporciona una noción de temporalidad que actúa en el tremos (arriba y abajo), se van concatenando múltiples
paisaje y nuestra experiencia, a partir de la longitud de
la sombra, como un factor que colabora en nuestra pro-
pia noción de tiempo y el espacio. 5
En realidad, la belleza no se posa sobre las cosas, sino que la mirada poética reconfi-
El acto de subir al punto más elevado posible para gura como bello aquello que una mirada menos creativa interpretaría como prosaico.
La belleza conexa con el impulso evocador del que mira, no con lo mirado. La palabra
contemplar la inmensidad del paisaje más allá de no- poesía tiene su genética léxica en la palabra griega poiesis. Significa crear, compo-
ner, adoptar, fabricar, así que la mirada poética crea la belleza del mundo al mirarlo
de un modo novedoso y sorprendente. José Miguel Valle, “La mirada poética es la
mirada que ve belleza en el mundo”, Espacio Suma no Cero, 22 de marzo de 2022,
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Sigfried Giedion, El presente eterno: los inicios de la arquitectura, Madrid, Alianza, <https://espaciosumanocero.blogspot.com/2022/03/la-mirada-poetica-es-la-mira-
1981. da-que-ve.html>. Consultado: 20 de mayo de 2023.
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La escalera
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Casa-estudio de Amadeo Ozenfant, París, 1922. Plantas arquitectónicas en la que se destacan tipologías varias de escaleras, pensadas como espacios donde se propician
distintas experiencias espaciales, que vinculan a las personas con la doble altura dsel estudio y viceversa. Es importante destacar que, siendo el estudio, para un pintor las
distancias variadas contribuyen a la apreciación de la obra pictórica. Dibujos de los autores, a partir de las plantas publicadas en Willy Boesiger y O. Stonorov, Le Corbusier:
Oeuvre complète 1910-1929, Berlín, Birkhaüser Publishers, Basel, Boston, 1999, p. 56 (año de elaboración: 2022).
tíbulo recibe y zonifica en dos la casa: la zona de trabajo que se reúnen en la decisión de hacer participar en el
y la zona privada. espacio opciones de escalera que ofrezcan múltiples
Refiriéndonos a la misma casa-estudio realizada hace maneras de experimentarlo.
exactamente un siglo, destaca una escalera como conector De manera similar, en la emblemática villa Savoye, Le
directo entre el taller de doble altura y una pequeña habi- Corbusier establece un paseo continuo desde la planta
tación privada, arriba, que se resuelve con gran ligereza. baja utilitaria, hasta el solárium, mediante una rampa
En sus obras, Le Corbusier recurre siempre al uso de jerárquicamente localizada al centro de la casa. La ram-
distintas tipologías de escaleras, conformando espacia- pa una suerte de negociación entre el eje vertical y el
lidades diversas en las que destaca el claro propósito de horizontal, prolonga y facilita la experiencia del ascen-
sublimar la experiencia plástica y la emoción estética en so ofreciendo diversas pausas espacio temporales en el
el recorrido. El uso de tipologías diversas obedece a varios recorrido, hasta llegar finalmente a la recompensa final
aspectos: la jerarquía de la escalera o rampa, su función, del solárium, en el que destacan recursos plásticos de
su localización, los espacios que conecta, su posición en gran libertad compositiva para ir ofreciendo al visitan-
el espacio, su dirección y finalmente el o los propósitos te, poco a poco, experiencias previas del lugar hasta fi-
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Exploración compositiva donde el espacio es escalera y viceversa, y que a su vez Juan O’Gorman nunca negó la influencia de Le Corbu-
resulta imposible su disociación. Expresa una búsqueda de esencia, de raíz, de la
condición espacial que supone este recurso arquitectónico. La plástica se observa
sier en su hacer arquitectónico; muy por el contrario, en
completamente coherente con el trazo y el material, generando ligereza y levedad las primeras obras de Altavista resaltan las condiciones
en su solución. Fotografía de la autora, 2022. espaciales de la “planta libre”, el lenguaje utilizado en
la cancelería y los volúmenes, así como los recorridos y
las diversas escaleras utilizadas, algunas marcadamente
similares a las diseñadas por Le Corbusier, su gran re-
ferente moderno, como la escalera que da acceso a las
plantas altas del estudio para el pintor Diego Rivera y
la escalera que dirige al acceso principal del estudio del
pintor Amadeo Ozenfant.
Múltiples proyectos y obras de Le Corbusier: el pro-
yecto de la Casa Citrohan (1920), el de la casa para
artistas (1922), el de la casa para artesanos (1924), el
proyecto de una casa en Auteuil (1922), la casa de fin de
semana en Rambouillet (1924), la casa “Gratte-ciel” (del
proyecto de Pessac), la casa Plainex (1927) en París, la Vi-
lla Savoy (1929) en Poissy, el proyecto para la Casa M.X.
(1929) en Bruselas, y muchos más, son claros ejemplos
de la importancia que el arquitecto otorgó a la escalera
y/o la rampa, las que exploró en su condición plástica y
fundamentalmente en su condición espacial reforzando
el recorrido, como recurso protagónico de la propuesta
arquitectónica.
El arquitecto Juan O’Gorman, al comprender la im-
portancia de la escalera como un componente espacial
y simbólico de la arquitectura moderna, explora y lleva
al límite la condición de ligereza y dinamismo. Con el
material y el procedimiento constructivo conocido como
Este grabado de Piranesi, anterior a la escalera de la imagen 15, expresa una concreto armado explora, en el caso del estudio de Al-
búsqueda similar, enfatizando la condición aérea de las escalera que juegan como tavista, la máxima resistencia y la esbeltez de la forma.
espacios dentro del espacio, espacio finalmente arquitectónico, <www.metalocus.
es/es/noticias/museo-de-arte-kunsthal-exposicion-de-grabados-de-giovanni-battis-
Las escaleras de las casas de Altavista están pensadas
ta-piranesi>, imagen descargada el 19 de mayo de 2022. como recorrido y experiencia espacial, en las que explo-
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