TOPOGRAFÍA I (G1.

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TEMA 4 – MEDICIÓN DIRECTA DE LONGITUDES

1. Procedimientos expeditivos y regulares
La determinación de distancias puede hacerse en forma directa o indirecta. Lo
hacemos en forma directa cuando obtenemos su valor por aplicación sucesiva en toda
su extensión, de la unidad de medida o un múltiplo o submúltiplo de ésta; mientras que
lo realizamos en forma indirecta cuando nos valemos de otras determinaciones que nos
permitan, sin aplicar el elemento de medición sobre la línea a medir y obtener por
cálculo su longitud.
La medición directa de distancias puede efectuarse de las siguientes maneras:
1)Métodos expeditivos: Recorriendo la línea caminando, y contando los pasos
dados.(se estima que el hombre cada dos pasos recorre su altura ). El error relativo
que cometemos es del orden de 1/100, dependiendo principalmente del tipo de terreno
(arena, tierra suelta, compactada, etc.), del valor de su pendiente y del sentido en que
se la recorre (ascendente o descendente). Long. Paso= long. Metros/Nº pasos
Otro método consiste en contar las vueltas que da una rueda al hacerla rodar por la
alineación a medir (odómetro).
2)Medición con instrumental de precisión: En la mayor parte de los trabajos
topográficos debemos obtener las distancias con errores menores que los que pueden
esperarse con la aplicación de los métodos anteriores. Para ello se recurre a
instrumental adecuado que además facilita la operación.
2. TRAZADO DE ALINEACIONES Y VERTICALIZACION
2.1. Jalón
Son bastones rectos de unos 2,50 m. de longitud; 4 a 5 cm. de diámetro; de sección
circular u octogonal. En su extremo inferior llevan un azuche de hierro para facilitar su
hincamiento. Están pintadas franjas alternadas de colores blanco y rojo para facilitar su
visibilidad.
Jalón metalico compuesto por dos tramos enchufables de 1.25 m.

Jalón telescopico de 3 tramos de 3 metros de altura

2.2. Alineación
Definimos como alineación recta a la intersección con el terreno de un plano vertical
que pase por dos puntos dados. Para materializarla hincamos un jalón en cada extremo
de la misma. Puede ocurrir que dichos jalones queden muy distanciados, siendo
necesario entonces colocar otros intermedios. A esta operación se le llama "rellenar" la
alineación y para ello el operador se coloca detrás de uno de los jalones observando el
otro extremo a "ojo desnudo", e indica a un ayudante la ubicación de los jalones
intermedios.
Si en lugar de tener que rellenar una alineación tuviéramos necesidad de prolongarla
se procede en forma análoga.
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Definidos en el terreno los vértices del

polígono por medio de estacas o
mojones, pasaremos a medir sus lados.
Para ello trataremos de establecer las
alineaciones determinadas por dos
vértices consecutivos es decir, los lados
del polígono. Recordando que
consideramos plana la superficie de
representación de nuestro polígono,
podemos decir que cuando se verticaliza
un jalón en un vértice se está
materializando una recta que, pasando
por ese punto, es perpendicular al plano
de referencia.
 = plano horizontal de referencia  plano 
Si se colocan jalones correctamente verticalizados en dos vértices consecutivos,
existirá un plano vertical que los contenga y su intersección con el plano horizontal de
referencia definirá la recta que une los dos vértices. Así podemos materializar o
señalizar en el terreno cada uno de los lados del polígono a medir.
Generalmente, para que el operador pueda transportar la cinta siguiendo
perfectamente cada alineación, habrá que intercalar todos aquellos jalones que sean
necesarios para asegurar su intervisibilidad.
Si hay visual entre los extremos de una línea, será fácil colocar jalones intermedios,
pues el operador ubicado en un vértice podrá, con señas claras, indicarle a su
ayudante los desplazamientos que deberá efectuar con el jalón intermedio para que
quede alineado.
En caso de no ser intervisibles los extremos, se efectuará una alineación desde el
medio o alineación recíproca, atendiendo al siguiente esquema de movimientos:
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Sea colocar dos jalones intermedios en la línea MN.

El operador 1 coloca un jalón en el punto A, lo más cerca posible de la alineación

correcta. Desde allí le indica al operador 2 que coloque el jalón en la posición B,
alineado con el punto N. Luego, el operador 2 alinea el jalón sostenido por el operador
1 (posición A1) con el vértice M. Continuando con este procedimiento, llega un
momento en que ambos jalones intermedios están alineados simultáneamente con los
puntos extremos.
Este procedimiento se utiliza también cuando hay desniveles intermedios que impiden
la visual entre los extremos.
Cuando se trate de alinear un punto intermedio situado en una depresión, un método a
utilizar será el instalarse el operador, con una plomada, en uno de los vértices. Desde
allí, visualizando el hilo de la plomada suspendida y el jalón colocado en el extremo,
hará desplazar el jalón intermedio sostenido por el ayudante hasta que su imagen
coincida con la del hilo de la plomada.

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3. PROLONGACION DE DOS ALINEACIONES

Si tenemos dos alineaciones como las AA' y BB', y deseamos colocar un jalón en el
punto de intersección de ellas, punto C,

Se debe proceder de la siguiente manera: el operador 1 alinea al jalón que sostiene el

ayudante en la dirección AA', luego el operador 2 alinea al ayudante con la dirección
BB', teniendo cuidado de que el ayudante se desplace sobre la dirección AA', repitiendo
el proceso cada vez con mayor aproximación al punto C, finalmente el jalón quedará
alineado simultáneamente con las direcciones AA' y BB', quedando así materializada la
intersección entre las dos alineaciones.
Conviene destacar que, a 100 m de distancia, el espesor de un jalón
(aproximadamente 3 cm ) equivale a un ángulo de un minuto.

A esa distancia y a ojo desnudo es fácil advertir cuando un jalón se separa de la línea
en una distancia mayor que su propio espesor.
Podemos decir entonces que, en esas condiciones,
lograremos alineaciones con un error menor que 1'.
4. INSTRUMENTALES UTILIZADO
4.1. Juego de fichas: Una ficha es una varilla
de metal con uno de sus extremos aguzado y el otro
terminado en forma de anillo, sus dimensiones son:
largo 30 a 40 cm., diámetro 4 a 5 mm. Un juego consta
de 11 fichas y dos aros porta fichas.

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Nivel esférico de mano

Jalón metalico compuesto por dos tramos enchufables de 1.25 m.

Jalón telescopico de 3 tramos de 3 metros de altura
Fig. 21

4.2. Cinta de agrimensor: Está constituída en esencia por un fleje de acero de buena
calidad cuyas dimensiones más usuales
son: ancho 10 a 15 mm., espesor 0,4 a 0,5
mm. longitud 50 ó100m. Para su uso debe
sacarse totalmente de la caja en que se
guarda, extendiéndola cuidadosamente
evitando la formación de nudos o quiebres
que puedan fracturarse. Está marcada de
la siguiente forma: cada 2 m. tiene una
chapita elíptica en la que figuran su
distancia en metros a ambos extremos de
la cinta; cada metro un remache grande y
cada 0,2 m. un remache chico.
Posee una manija en cada extremo, siendo la longitud total la que
existe entre los ejes de dichas manijas, o entre sus bordes
exteriores, según los tipos de cintas.
4.3. Cinta de fibra de vidrio de caja abierta, de poco peso,
flexible, larga duración, lavables, no conductoras de la

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electricidad y resistentes a la abrasión. Modelos de 50 m y 100 m

Cinta de nylon. Modelo de carrete

Cinta de acero cubierta con polímero.

Modelo de cruceta
Las cintas de lienzo y nylon son muy frágiles y tienen grandes deformaciones con la
tensión y la temperatura, por lo que se deben utilizar solo en levantamientos
preliminares o de baja precisión. Prefiriéndose las cintas de acero por su menor
deformación y resistencia para trabajos de mayor precisión.
4.4. Ruleta o rodete: Son cintas, que se denominan así por el sistema de
recuperación en su caja de resguardo. Su
longitud, generalmente, es menor que las de
agrimensor. Vienen de 1, 2, 3, 5, 8, 10, 15, 25,
30 y 50 metros; para facilitar la medición de
pequeñas longitudes están marcados los
centímetros y en algunas están señaladas los
milímetros. Generalmente se construyen de
acero. En el proceso de medida, las cintas son
sometidas a diferentes tensiones y temperaturas,
por lo que dependiendo del material con el que han sido construidas, su tamaño
original variará. Por esta razón, las cintas vienen calibradas de fábrica para que a una
temperatura, tensión y condiciones de apoyo dadas, su longitud sea igual a la longitud
nominal.
Las cintas métricas empleadas en trabajos topográficos deben ser de acero, resistentes
a esfuerzos de tensión y a la corrosión.
4.5. Cintas y alambres de invar: Se los utiliza en las operaciones topográficas cuando
se requiere una precisión mayor que la que podemos obtener con las cintas de acero.
El invar es una aleación de hierro y níquel (36% de Ni) que tiene la propiedad
fundamental de tener coeficiente de dilatación tan pequeño, que se puede considerar
prácticamente nulo ( = 0,000001).
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4.6. Patrón: el 20 de Octubre de 1983 al metro fue redefinido en función de la velocidad

de la luz (299.792,792 m/s) como la longitud del trayecto recorrido por la luz en el vacío
durante un intervalo de tiempo 1/299.792,458 de segundo.
4.7. Accesorios:
4.7.1. Plomada: Instrumento con
forma de cono, construido
generalmente en bronce, con un
peso que varia entre 225 y 500 gr,
que al dejarse colgar libremente
de la cuerda sigue la dirección de
la vertical del lugar, por lo que con
su auxilio podemos proyectar el punto de terreno sobre la cinta métrica.
4.7.2. Termómetro: Como se mencionó previamente, las cintas métricas vienen
calibradas por los fabricantes, para que a una temperatura y tensión dada su longitud
sea igual a la longitud nominal. En el
proceso de medida de distancias, las cintas
son sometidas a condiciones diferentes de
tensión y temperatura, por lo que se hace
necesario medir la tensión y temperatura a
las cuales se hacen las mediciones para
poder aplicar las correcciones
correspondientes. El termómetro utilizado
en la medición de distancias con cinta
viene graduado en grados centígrados, con lecturas que varían entre – 40 a + 50 ºC de
grado en grado, colocado, para su protección, en una estructura metálica de
aproximadamente 14 cm de largo, la cual se ajusta a la cinta mediante dos sujetadores.
4.7.3. Tensiómetro. Es un dispositivo que se
coloca en el extremo de la cinta para
asegurar que la tensión aplicada a la cinta
sea igual a la tensión de calibración, evitando
de esta manera la corrección por tensión y
por catenaria de la distancia medida.
5. EJECUCION PRACTICA DE LA MEDICION CON CINTA
Dados los puntos A y B entre los cuales se quiere determinar la distancia existente, la
primera operación consiste en materializar la alineación que ellos determinan, tal como
se ha indicado precedentemente. Luego se procede a medirla. Para ello el equipo de
medición debe estar integrado como mínimo, por dos operadores que designaremos
zaguero y delantero, que dispondrán de una cinta de agrimensor y un juego de fichas.
Inicia la medición el zaguero clavando una de ellas en el extremo A. Luego avanza el
delantero hacia B llevando un extremo de la cinta y un aro conteniendo las diez fichas
restantes, quedándose el zaguero con el otro aro. Cuando la cinta queda extendida, el
zaguero, que es el que dirige las operaciones coloca la manija trasera de manera que
la ficha quede dentro de ella en contacto con su borde y pisando el extremo de la cinta,
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impide con la parte externa de la pantorrilla, que la ficha se incline al tensar la cinta el
delantero. Este hinca a su vez una ficha tangente a la parte externa de la manija, con lo
que queda concluida la primera cintada. Luego el delantero avanza hacia B; el zaguero
recoge la ficha colocada en A, la inserta en el aro y se desplaza hasta la próxima ficha.
La operación se repite hasta que al delantero no le queden más fichas; entonces
espera al zaguero y proceden a intercambiar sus aros controlando que estén las 10
fichas, además de la clavada. Han recorrido una distancia llamada "tiro" (500 m para
cinta de 50 m ). Cuando llegan al extremo B de la línea la longitud de la misma estará
dada por el número de tiros multiplicados por 500 m., más el número de fichas del
zaguero por la longitud de la cinta, más la fracción que se lea desde la última ficha
clavada, (obsérvese que la ficha clavada no debe contabilizarse, razón por la cual el
juego consta de 11).
Como regla práctica para leer correctamente, el observador debe colocarse frente a la
cinta de forma tal que el origen del segmento a medir, quede a su izquierda, y leer en la
chapita ovalada el valor que se presente en posición derecha. La longitud total leída
deberá reducirse al horizonte para obtener la distancia topográfica AB.
Si el terreno es ondulado se lo divide en tramos de pendiente uniforme y se calculan las
longitudes parciales reducidas.
En general, si la línea a medir es sensiblemente horizontal no será necesario efectuar
esta corrección. (Este problema es similar al de "falta de alineación" que se trata más
adelante ).
6. ERRORES SISTEMATICOS EN LA MEDICION CON CINTA
Error por falta de contraste:
Error por falta de alineación
Errores Sistemáticos: Error de catenaria
Error por temperatura
Error de tracción:

6.1. Error por falta de contraste:

Ej: Long. de contraste = 49,997 m. Longitud atribuída erróneamente durante la
medición = 50,00 m., por lo cual siempre se miden 3mm. de más por cada cintada.
(error positivo ).
No debe utilizarse una cinta sin conocer su longitud contrastada, máxime si ha sufrido
roturas con las consiguientes reparaciones. Dicho contraste debe efectuarse aunque
sea en forma expeditiva, comparándola con una cinta nueva de la cual se posea el
certificado de contraste correspondiente. Procediendo con cierto cuidado es posible
determinar su longitud con una vacilación de 2 ó 3 mm., suficiente en la mayoría de los
casos.
Existen organismos técnicos oficiales que realizan el contraste con un error medio de
±1 mm. (“Certif. de Verificación Primitiva” del Dpto. de Pesas y Medidas Minist. de
Economía)

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6.2. Error por falta de alineación: Cuando el delantero no está bien alineado, al
clavar la ficha lo hace fuera de la alineación, cometiendo un error acumulativo, siendo
en todos los casos la longitud real menor que la medida. (Error positivo).

l2 = l’2 + a2 = (l – Δl )2 + a2
Efectuando el cuadrado del binomio,
eliminando los términos que se anulan y
multiplicando en ambos miembros por
l/Δl, obtenemos que :
Δl = a2 / (2 l – Δl )
Si en el denominador despreciamos Δl, dada su pequeñez frente a 2l, nos queda
finalmente:
Eal = Δl = a2 / 2 l
Obsérvese que esta expresión es válida también para el caso en que a sea el desnivel
entre los extremos de la cinta.
6.3. Error de catenaria: Cuando la cinta no asienta sobre el terreno quedando
suspendida de sus extremos, adopta la forma de una catenaria, originándose un error
que como el anterior es también acumulativo, siendo la longitud real menor que la
medida.
Ec = l – c = (c3 . p2) / ( 24 . F2)
Siendo:
c: longitud de la cuerda
l : longitud de la cinta
p: peso por unidad de longitud de la cinta
F: fuerza aplicada
Este error es tenido en cuenta en las mediciones de gran precisión, como las que se
efectúan en Geodesia, con la cinta suspendida entre trípodes. Es poco frecuente en
Topográfia.
6.4. Error por temperatura: Como la cinta se dilata y se contrae por efecto
térmico origina un error, en relación a su temperatura de contraste.
lt = lo ( 1 +  . Δt )
Siendo :
Δl = lt - lo
Δl = lo  . Δt
lo :longitud de contraste
lt : longitud de la cinta a t° C
 : coeficiente de la dilatación lineal (  1/80.000 a 1/100.000)
Δt: diferencia entre la temperatura de contraste y la de la cinta.
Esta variación lineal Δl = lt - lo es de aproximadamente 0,5 mm. por cintada y por grado
de diferencia de temperatura.
6.5. Error de tracción: Al contrastarse una cinta nueva se consigna
generalmente en una de sus manijas el valor de la fuerza de tracción aplicada (también

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su temperatura ). Si hay diferencias con dicho valor, cuando se tensa en el terreno, se

origina un error que está dado por:
ETr = (ΔF . l) / E . S
ΔF : diferencia entre la fuerza aplicada y la de contraste.
E : módulo de elasticidad o de Young = 2,106 kgr./cm2
S : sección de la cinta
l : longitud de la cinta
Tiene también como valor aproximado 0,5 mm por cintada y por kg. de diferencia entre
la fuerza aplicada y la de contraste.
 En general se toman para nuestro país 20°C y 5 kg. como temperatura y
tracción de contraste, respectivamente.
De todos los errores sistemáticos consignados precedentemente el más importante es
el producido por la temperatura; en cuanto a los errores por tracción y catenaria,
además de su menor incidencia, tienden a compensarse mutuamente.
7. ERRORES ACCIDENTALES
Los errores de la naturaleza accidental en la medición directa de longitud son de menor
incidencia, que los sistemáticos. Entre aquellos, el más importante es el debido a la
falta de coincidencia entre los extremos de la cinta, al ser ésta colocada sucesivamente
a lo largo del segmento a medir. Cuando el terreno es llano y el suelo consistente, la
magnitud del error es pequeña, pues hay firmeza y seguridad en la colocación de las
fichas. Pero en la generalidad de los casos ello no ocurre así, debido a distintas
circunstancias: suelos con vegetación, arenosos, barrosos o pedregosos. O bien con
desniveles u obstáculos que, aunque de pequeña altura, obligarían a un quiebre de la
cinta, tanto más pronunciado cuanto más cercano se halle del extremo de la cinta.
En tal supuesto la expresión Δl = a2 / 2 l indica que el error sistemático puede ser
importante para un valor de " l " pequeño.

Fig. 27

±2 mm y ±1 cm
Es por ello que para evitar este error sistemático, el delantero sostiene elevada la
manija (por ejemplo 20 cm. sobre el suelo, que sería la altura del supuesto obstáculo)
mientras tensa la cinta tratando de que ésta permanezca lo más rectilínea posible. Es
evidente que en tal circunstancia la ficha no quedará hincada en la vertical pasante por
el borde de la manija, sino por delante o por detrás de la misma. Este error accidental
producido por la falta de verticalización de la ficha que en general puede oscilar entre
±2 mm y ±1 cm según la naturaleza del suelo a lo largo de la línea, intencionalmente
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despreciado por parte del operador, en razón de que su propagación es función de la

raíz cuadrada del número de cintadas. De ahí que no se justifique tomar recaudos
especiales, como podría ser la utilización de una plomada, por ejemplo. Ello
evidenciaría claramente al analizar la propagación de los errores sistemáticos y
accidentales, que pasamos a tratar.
8. PROPAGACION DE ERRORES SISTEMATICOS Y ACCIDENTALES
Como ya se ha expresado, en la medición directa de longitudes inciden
fundamentalmente los errores sistemáticos, siendo el más dificultoso de evaluar el
debido a la temperatura de la cinta (que incluso es variable a lo largo de la misma ). Si
se pretendiese medir con gran precisión, por ejemplo de 1:20.000, habría que evaluar
dicha temperatura con una vacilación inferior a ±5,0°C (recuérdese que la incidencia es
de 0,5 mm / 1°C / cintada). A tal efecto tendría que adosarse a la cinta un termómetro
metálico. Pero en la práctica topográfica se utilizan otros procedimientos cuando se
requiere la mencionada precisión (por ejemplo el paraláctico o el electrónico, tratados
en más adelante).
Para precisiones menores, entre 1:5.000 y 1:10.000, es posible utilizar la cinta de
agrimensor con relativa comodidad, inclusive estimando "al tacto" la temperatura
aproximada de la cinta, con plena conciencia de que el error residual resultante no
afectará la precisión preestablecida. Este proceder expeditivo se aplica en la inmensa
mayoría de los casos, lográndose gran celeridad en la medición.
Podemos expresar que la propagación de errores para n cintadas, será:
Error accidental total : Ea = ea . ¯n
(*)
Error sistemático total : Es = es . n
Donde:
ea = error accidental de una cintada
es = error sistemático de una cintada
(residual)
L= longitud a medir
l = longitud de la cinta
n= número de cintadas = L/l
Obsérvese que en general es será el
error sistemático residual, ya que se
supone que todos los errores
sistemáticos han sido evaluados
(dentro de una cierta vacilación, como
en el caso ya citado de la
temperatura) y consecuentemente
anulados sus efectos en gran parte.
La parte restante (o residual ) será
pequeña, y , aunque desconozcamos
su signo, sabemos que la función de

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su propagación será lineal, como se observa en la figura. En dicha gráfica hemos

supuesto un error residual sistemático pequeño en relación al error accidental (e s =
3mm ; ea = ± 1 cm).
Si se mide una longitud L= n.l , (l = 50 m ) el error medio total resultante de la
propagación conjunta de los errores accidentales y sistemáticos estará dado por la
siguiente expresión :
mL = ¯(Ea2 + Es2)
y según (*):
mL = ¯ (ea2 . n + es2 . n2) = ¯ {(ea2 . L)/l + (es2 . L2/l2)}
Los valores de ea2/l y de es2/l2 se determinan experimentalmente, en distintos tipos de
terreno. Extrayendo del radical la parte común de ambos, se llega a la expresión:
mL = K ¯( A L + B L2)
Para las tolerancias, como es sabido, en general se adopta el valor : TL  3 mL
Obsérvese que la gráfica se ha dibujado en concordancia con los valores del subradical
de la expresión de la Tolerancia para Zonas urbanas y suburbanas. En efecto, para
distintos valores de L, resultan los siguientes para el subradical :
L
Parte Accidental Parte Sistemática
0,3 L 0,0005 L2
100 m 30 5
600 m 180 180
1.000 m 300 500
5.000 m 1.500 12.500
O sea que dichas expresiones de Tolerancias implican adoptar, para una cintada, una
incidencia del error sistemático igual al 30% del error accidental.
De la observación del cuadro de valores precedente (y de la gráfica ) surge que para
valores de "L" hasta de 600 m (n  12) prevalece la influencia del error accidental.
Luego comienza a predominar la del error sistemático, en forma muy significativa a
medida que aumenta la longitud "L".
A continuación se especifican las tolerancias fijadas por el Reglamento Nacional de
Mensuras, para distintas zonas y condiciones del terreno ("L" y "T" expresadas en
metros):
ZONA Condiciones Tolerancia (T)
Favorables 0,015 ¯(0,3L + 0,0005 L2)
Urbana
Desfavorables 0,02 ¯(0,3L + 0,0005 L2)

Favorables 0,02 ¯(0,3L + 0,0005 L2)

Suburbana
Desfavorables 0,03 ¯(0,3L + 0,0005 L2)

Favorables 0,01 ¯(1,5L + 0,003 L2)

Rural Desfavorables 0,015 ¯(1,5L + 0,003 L2)
Muy desfavorable 0,02 ¯(1,5L + 0,003 L2)

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Según lasInstrucciones Generales para Agrimensores de la Dirección de Geosesia de

la Pcia. de Bs. As.

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9. ERROR RELATIVO EN LA MEDICION CON CINTA

De las expresiones (*) que transcribimos:
Error accidental total : Ea = ea . ¯n

Error sistemático total : Es = es . n

Surge que los errores relativos sistemático y accidental de la longitud total "L" serán
respectivamente:
Ls = Es / L = (es . n) / (n . l) = es / l = s (1)

La = Ea / L = (ea . ¯n) / (n . l) = ea / (l. ¯n) = a/¯n (2)

La (1) indica que el error relativo sistemático del lado "L" es igual al error relativo
sistemático de una cintada; y por tanto su valor es independiente del número "n" de
cintadas (o del valor de "L").
La (2) expresa que el error relativo accidental del lado "L" es igual al error relativo
accidental de una cintada dividida por ¯n.
Es evidente que al crecer n el valor de dicho error tiende a ser insignificante. Se ve
claramente ahora por qué indicamos al comienzo que en la medición directa de
longitudes es mucho más importante la incidencia de los errores sistemáticos, en razón
de su dificultosa evaluación, sobre todo el producido por la temperatura. En cambio,
nos despreocupamos del accidental, sobre todo tratándose de longitudes largas.
10. MEDICION EN PENDIENTE
Recordemos nuevamente que la superficie de representación adoptada es un plano
horizontal.
Por lo tanto, si se presenta la necesidad
de medir una distancia entre dos puntos
que se encuentren a distinta altura, será
necesario determinar la proyección
horizontal de la distancia inclinada que
podemos medir.
El ángulo  puede medirse con un
inclinómetro o clisímetro o eclímetro,
que son aparatos de construcción muy
sencilla, que nos permiten medir
indistintamente el ángulo de altura o depresión  
y la pendiente  i del terreno.

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Con ellos se pueden apreciar valores enteros de pendiente o ángulo de altura y estimar
la mitad de esas divisiones.
El modo de operar con ellos es el siguiente: Supongamos que se quiere medir la
distancia AD, compuesta de tres tramos AB, BC y CD de distinta pendiente cada uno.
Se inicia la medición colocándose el operador en el punto A, sosteniendo en su mano
el eclímetro, y su ayudante en el punto de quiebre de pendiente sosteniendo un jalón o
señal con una regleta colocada horizontalmente a la misma altura (distancia al suelo)
que a la que se encuentra el ojo del operador.
Bisectando esa señal con el eclímetro, el operador podrá determinar el ángulo de
inclinación de la visual paralela al terreno. Midiendo la distancia entre los extremos de
ese tramo de pendiente se podrá luego calcular fácilmente la proyección horizontal
correspondiente.: dh1 = d1 . cos 

Procediendo de la misma manera en todos los sectores de distinta pendiente que

componen el lado a medir y sumando sus respectivas proyecciones horizontales, se
tendrá la proyección horizontal del mismo.

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Si se requiere una precisión muy elevada en la obtención de la proyección horizontal se

miden los ángulos de altura con el teodolito, instrumento que se estudiará con todo
detalle en el desarrollo de Curso.
En el caso de no disponer de ninguno de los instrumentos mencionados, se puede
medir la distancia inclinada descomponiéndola en resaltos horizontales de igual
longitud que la regla de que se disponga.
El procedimiento también es muy sencillo y se puede desarrollar de acuerdo al
siguiente esquema:

Se apoya el extremo de la regla de longitud conocida sobre la estaca de arranque y con

un nivel de burbuja sencillo (tipo albañil) se horizontaliza. Con una plomada se señala
sobre el terreno la proyección del otro extremo de la regla. Se repite este procedimiento
todas las veces que fuera necesario y el resto se mide directamente con una cinta.
Estos procedimientos de medición en pendiente serán utilizados únicamente cuando la
inclinación del terreno provoque diferencias apreciables en la medición, que puedan
distorsionar los resultados, haciéndolos quedar fuera de las tolerancias fijadas.
Téngase en cuenta que cuando se trata de terrenos fuertemente ondulados, las
tolerancias son mucho más amplias.
Se puede también medir la distancia inclinada descomponiéndola en resaltos
horizontales de igual longitud con la cinta horizontal y la ayuda de una plomada.

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TOPOGRAFÍA I (G1.0)- APUNTES – INGENIERIA EN AGRIMENSURA
FACULTAD DE INGENIERIA – U.N.C.P.B.A.

Errores Groseros
 Confundir marcas en el terreno
 Error de lectura
 Error de anotación
 Errores aritméticos al sumar distancias parciales

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