Plegado Asda
Plegado Asda
Plegado Asda
Ventajas:
Geometrías variadas
Perfiles livianos y resistentes
Buenas Terminaciones
Desventajas:
Desperdicios de chapa
Uso longitudinal de la chapa
Defectos que afectan la soldabilidad
Defectos debido a la recuperación elástica de la chapa
Grandes fuerzas de proceso.
Límites por espesor y radios
Límites por matriz
TIPOS DE PLEGADO
Al realizar un plegado la chapa se ve sometida a una flexión gradual por el punzón y la matriz. La
deformación total en relación con la fuerza aplicada y las condiciones geométricas de un determinado
espesor puede representarse en un gráfico el proceso en función del ángulo que se pliega la chapa y la fuerza
aplicada. La chapa plana se corresponde con 180º. Este gráfico es orientativo y solamente representa las
variaciones de la fuerza utilizada y los valores dependerán del tipo de chapa y espesor
Al empezar a plegar se necesita superar cierta fuerza. Una fuerza inferior a esta no produce deformación en
la chapa cuando la fuerza cesa. Esto se debe a la elasticidad del material, la deformación se mantiene dentro
del límite elástico.
A medida que prosigue el plegado la fuerza debe aumentar hasta los 135º aproximadamente. A partir de aquí
la fuerza necesaria desciende ligeramente hasta los 100º. Esta zona está definida como región 1 (se
denomina plegado parcial)
A partir de este punto a medida que desciende el ángulo de plegado aumenta la fuerza necesaria. Para
conseguir plegar los 90º se necesitará una fuerza superior a la que se requiere para conseguir 130º. Esta
fuerza para plegar 90º se denomina “fuerza necesaria”. Si se sigue presionando la pieza se llega a unos pocos
grados por debajo de los 90º. A esta zona se la define como región 2. (se denomina plegado de fondo)
Si se sigue aplicando más fuerza el ángulo de plegado volverá a ser otra vez 90º. La fuerza necesaria será
una 6 veces mayor que la “fuerza necesaria”. En esta zona para conseguir una pequeña variación en el
ángulo de plegado es necesario un incremento muy grande de fuerza. A esta zona se define región 3. (se
denomina acuñado o estampado)
PROPIEDADES MECÁNICAS DE ACEROS ESTRUCTURALES
A partir de este punto al plegado parcial y al plegado a fondo los unificaremos y nos
referiremos a ellos como plegado al aire.
Recuperación elástica
En la figura inferior podemos observar el efecto del retorno elástico de una pieza plegada.
Mientras la chapa está siendo deformada el material recorre la curva de tensión-deformación
hasta F, al quitar la solicitación, el material vuelve a través de propiedades elásticas al punto
O’.
La elasticidad de la chapa no se elimina aunque el esfuerzo producido en la chapa haya
excedido el límite elástico. El nuevo límite elástico queda definido luego la deformación por
el punto F y la plasticidad está más allá de ese punto.
Cuando una chapa es plegada, los esfuerzos que son opuestos actúan en la cara interior y
exterior de la chapa. En general, la resistencia a la compresión de la chapa es mucho mayor
que su resistencia a la tracción (extensión). La presión ejercida deformará permanentemente
la parte exterior de la chapa, pero la parte interior no llega al límite elástico. Por tanto, la
parte interior tiende a recuperar su forma inicial. Puesto que el esfuerzo es una fuerza de
resistencia que actúa en oposición a la fuerza externa aplicada, el esfuerzo de compresión
actúa hacia fuera de la cara interior. Este esfuerzo de compresión se convierte en retorno
elástico.
Plegado fondo
El plegado a fondo es uno modo de plegado muy habitual porque se puede plegar con
precisión con un fuerza relativamente baja.
Entonces el espesor “e” define “l” y “ri” el radio interior de plegado de la pieza. En la tabla
se puede observar la relación de la longitud de apoyo de la matriz con relación al espesor de
la chapa. Esta longitud varia en una relación no lineal y a mayor espesor de chapa crece la
relación con “l”
Por experiencia se sabe que en este tipo de plegado el radio interior de la chapa plegada es un
sexto de “l” (ri = 1/6 x l). Por otro lado sabemos que la l varia entre 6 y 12 veces el espesor
de la chapa. Por tanto, el radio interior de plegado variará entre un valor igual al espesor de la
chapa (espesores finos) y el doble del espesor de la chapa (espesores gruesos).
En este tipo de plegado se ha de tener en cuenta el retorno elástico del material. Este es el
motivo por el que existen utillajes con diversos ángulos similares (90º-88º-85º).
𝑃. 𝑙 𝑏. 𝑒 2
=
4 6 𝑓
2. 𝑏. 𝑒 2
𝑃= 𝑓
3𝑙
Para la determinación de las fuerzas falta obtener el 𝑓 , esta variable es una propiedad de
particular de cada acero. Las chapas utilizadas generalmente son de aceros de bajo carbono.
Plegado parcial
El nombre de plegado parcial se debe al hecho de que la chapa durante el plegado está en contacto con 3
puntos (A, B y C del dibujo inferior) del utillaje.
Con este método de plegado es posible plegar una gran variedad de ángulos. Por ejemplo, con un punzón y
una matriz de 30º podemos realizar cualquier plegado desde 180º (chapa plana) hasta un plegado de 30º.
Esto se consigue controlando la penetración del punzón en la matriz.
Una plegadora con Control Numérico permite programar diferentes plegados aunque estos tengan
diferentes ángulos de plegado ya que para cada uno de ellos debe programarse la profundidad
correspondiente. Por otro lado este tipo de plegado permitirá compensar el retorno elástico ya que solo
debemos corregir la profundidad de plegado.
Acuñado / Estampado
Con el método de acuñado se consiguen dos ventajas; una precisión muy alta y un radio de plegado muy
pequeño. En el dibujo observamos el momento en que está acuñando la chapa y que el pequeño radio del
punzón penetra en la chapa. Si además le aplicamos una gran fuerza eliminaremos los posibles efectos del
retorno elástico de la chapa. Este es el motivo por el cual el acuñado necesita una fuerza entre 5 y 8 veces
superior al del plegado a fondo.
Para este tipo de plegado la distancia “l” suele ser de 5 veces el espesor de la chapa para reducir la
penetración de la punta del punzón en la pieza reduciendo el radio interno de plegado. También
conseguiremos aumentar la presión al reducir el área de contacto de la matriz.
Como ya se ha comentado con este sistema de plegado es necesario una plegadora de gran capacidad
(fuerza). En función de la capacidad instalada de la plegadora se tiene el espesor según el ancho a plegar.
Otro de los factores que determinarán el limite de que espesor podemos plegar es el límite de fuerza que
puede soportar el tablero superior (“trancha” o punzón) que suele ser de unas 100 toneladas por metro.
De una forma sencilla podríamos decir que la diferencia entre un plegado al aire y el acuñado es que en el
primero es donde existe “aire” en algún lugar entre la matriz y la chapa. De todas formas más adelante
explicaremos en detalle los 3 tipos de plegado.
La fuerza de plegado es relativamente pequeña. Por tanto la plegadora no deberá ser de gran fuerza,
lo que abaratará el precio de esta. Podríamos decir que es un sistema de plegado económico
Hay que tener muy en cuenta el retorno elástico del material para poder obtener una buena precisión
en el plegado
Las características principales del acuñado son:
Es necesario una plegadora de gran fuerza, de unas 5 a 8 veces más que una plegadora pensada para
plegar al aire. Por tanto el coste de la plegadora será elevado.
La precisión de plegado es muy buena, independientemente del retorno elástico. El utillaje debe ser
acorde de las necesidades de este tipo de plegado.
Debido a los adelantos de la tecnología actualmente se tiende a plegar al aire. La mayoría de plegadoras
tienen control numérico (CNC), ya sea porque son nuevas o porque a las más antiguas se les ha adaptado
uno. Por tanto el problema del retorno elástico se suele compensar fácilmente mediante el CNC tal como
hemos explicado en el apartado del plegado parcial.
Tabla de plegado
La tabla de plegado muestra la fuerza de plegado necesaria por metro para un plegado al aire. Los valores
que podemos obtener son:
Este dato nos indicará la fuerza total necesaria para realizar la pieza. Como límite
superior nos encontraremos la fuerza máxima de nuestra plegadora.
Para plegar longitudes pequeñas la fuerza será pequeña, lo cual resulta engañoso
con relación al fuerza máximo que puede soportar un punzón o una matriz. Para
saber si estos pueden soportar el fuerza se han de comparar siempre para la misma
longitud de plegado.
Por ejemplo, si necesitamos 8 t para realizar una plegado de 100 mm esto
implica que el utillaje que utilicemos debe soportar como mínimo 80 t por
metro. Esta es muchas veces la causa de deteriorar utillaje de plegadora.
Relación entre Fuerza de plegado F y la resistencia de la chapa,
Se han comentado los valores de fuerza que aparecen en la tabla es para un
material con una resistencia de acero = 45 – 50 kg/mm2 . Esta resistencia se
corresponde con un acero dulce (0,2% de Carbono). La fuerza necesaria para otro
tipo de material se puede calcular fácilmente ya que esta es directamente
proporcional a la resistencia de la chapa. Por tanto, para poder calcular la fuerza
necesaria para plegar acero inoxidable (inox = 65 kg/mm2) tenemos,
F=21,25 x 0,8 = 17 t
Además de la tabla de plegado existe una fórmula para poder calcular el fuerza
necesaria. En esta fórmula entran todos los parámetros anteriormente vistos. La
fórmula es la siguiente:
F = k x ( x b x e2) / (l x 1000) (t)
= Resistencia material (kg/mm2)
b = longitud de plegado
T = espesor de la chapa
l = Ancho matriz
k = Constante