Clase 08 Interpretar-Ejercitación
Clase 08 Interpretar-Ejercitación
Clase 08 Interpretar-Ejercitación
Comprensión de Lectura II
1
COMPRENSIÓN DE LECTURA II:
HABILIDADES DE SEGUNDO NIVEL
Sin dejar de lado las marcas textuales, las habilidades que aprenderemos en esta guía les dan
un uso diferente. Las preguntas que trabajan habilidades de segundo nivel se responden
mediante el procedimiento de inferencia. Ya no se trata de localizar información y obtener la
respuesta, sino que esta vez deberemos tratar las marcas como indicios. En otras palabras,
mediante una marca o la suma de ellas se debe cruzar información para resolver las funciones,
jerarquías y énfasis en la información que contiene el texto.
La habilidad general de este segundo nivel de lectura se denomina Interpretar. Veamos en que
consiste.
Interpretar
Quien lee debe comprender el texto, construyendo significado a partir de la(s) relación(es) entre
diferentes partes de un texto. Los componentes del texto que se han de relacionar pueden estar
ubicados en la misma sección o en diferentes párrafos del texto (o incluso en diferentes textos).
El tema o el propósito pueden ser establecidos en forma explícita en el texto o bien presentarse
de manera implícita.
En palabras simples, se trata de que el lector o lectora demuestre la comprensión del texto leído,
relacionando diferentes partes del mismo para otorgarle un sentido. Este tipo de relaciones se
pueden establecer entre ideas al interior de un párrafo o bien directamente entre los
distintos párrafos que componen el texto. De la misma forma, también significa establecer la
idea principal del texto o bien de algunos de sus párrafos con el objetivo de
comprenderlo de forma más detallada. También, significa determinar el objetivo o
finalidad del texto o de algunas de sus partes, por lo que es de vital importancia conocer
el tipo de texto, su género y estructura. Por último, y especialmente, se trata también de
entender la información implícita del texto, es decir, sacar inferencias y conclusiones, a partir de
análisis y síntesis.
Tipos de inferencia:
● Implícito semántico: La intención de la frase puede ser concluido a partir del significado
mismo de las palabras.
Ejemplo: “La primera vez que la vi no me di cuenta”
Explicación: La presencia del ordinal “primera” implica que existen otras veces.
3
Ejercitación
Lectura 1 (preguntas 1 a 4)
Fragmento de un ensayo escrito por Lorena Amaro Castro, novelista e investigadora chilena.
1. «Las postales que integran el álbum de la infancia literaria chilena reflejan con su luz también
con la falta de ella— las imágenes de los niños y niñas que por atavismos sociales y
económicos en Chile nos trasmiten […] precariedad e incertidumbre. Precariedad, la del
infante marginado, encerrado en los conventillos húmedos y malolientes o golpeado y
olvidado por sus padres; una experiencia de la infancia que acaba al final de un largo corredor
donde solo es posible hallar un muro, como el que describe Manuel Rojas en Hijo de ladrón:
el de la imposibilidad de vivir un proyecto de vida adulto, el de la pobreza endémica, el de la
violencia y la muerte.
3. También están los niños que entre páginas leen, aprisionados, no solo los libros, sino también
sus propios cuerpos sorprendentes, sus sueños, el silencio incómodo de la adultez. Los niños
de Barrios, Yáñez, Oyarzún, Couve, Subercaseaux, Donoso, Wacquez.
4. En lo que va del siglo XXI, la infancia ha cobrado nuevo realce literario y social. Diversos
volúmenes dan cuenta de la necesidad de reconstruir una historia hasta hoy desde perspectivas
adultocéntricas, rescatando, a través de la recreación de las experiencias infantiles y su
relación con instituciones como la escuela y la familia, los escorzos de un relato nunca antes
dicho.»
4
1. Los párrafos segundo y tercero hacen referencia a
5
Lectura 2 (preguntas 5 a 7)
Discurso pronunciado por Gabriel García Márquez, escritor y periodista colombiano, en el foro
América Latina y el Caribe frente al Nuevo Milenio, desarrollado en París en 1999.
1. «El escritor italiano Giovanni Papini enfureció a nuestros abuelos en los años cuarenta con
una frase envenenada: “América está hecha de los desperdicios de Europa”. Hoy no solo
tenemos razones para sospechar que es cierto, sino algo más triste: que la culpa es nuestra.
2. Simón Bolívar lo había previsto, y quiso crearnos la conciencia de una identidad propia en la
línea genial de su Carta de Jamaica: “Somos un pequeño género humano”. Soñaba, y así lo
dijo, con que fuéramos la patria más grande, más poderosa y unida de la Tierra. Al final de
sus días mortificado por una deuda con los ingleses que todavía no acabamos de pagar, y
atormentado por los franceses que trataban de venderle los últimos trastos de su revolución,
les suplicó exasperado: “Déjennos hacer tranquilos nuestra Edad Media”. Terminamos por ser
un laboratorio de ilusiones fallidas. Nuestra virtud mayor es la creatividad y, sin embargo, no
hemos hecho mucho más que sobrevivir a doctrinas recalentadas y guerras ajenas, herederos
de un Cristóbal Colón desventurado que nos encontró por casualidad cuando andaba buscando
las Indias.
3. Hace pocos años era más fácil conocernos desde el Barrio Latino de París que desde
cualquiera de nuestros países. En los cafetines de Saint-Germain-des-Prés intercambiábamos
serenatas de Chapultepec por ventarrones de Comodoro Rivadavia, caldillos de congrio de
Pablo Neruda por atardeceres del Caribe, añoranzas de un mundo idílico y remoto donde
habíamos nacido sin preguntarnos siquiera quiénes éramos. Hoy, ya lo vemos, a nadie se le ha
hecho raro que hayamos tenido que atravesar el vasto Atlántico para encontrarnos en París
con nosotros mismos.
4. A ustedes, soñadores con menos de cuarenta años, les corresponde la tarea histórica de
componer estos entuertos descomunales. Recuerden que las cosas de este mundo, desde los
trasplantes de corazón hasta los cuartetos de Beethoven, estuvieron en la mente de sus
creadores antes de estar en la realidad. No esperen nada del siglo XXI, que el siglo XXI el que
lo espera de ustedes. Un siglo que no viene hecho de fábrica sino listo para ser forjado por
ustedes a nuestra imagen y semejanza, y que sólo será tan pacífico y nuestro como ustedes
sean capaces de imaginarlo.»
6
5. ¿Cuál es el tema del texto leído?
7
Lectura 3 (preguntas 8 a 11)
Fragmento de un cuento escrito por Amanda Teilliery, escritora y novelista chilena.
1. «Estoy sentada en el patio trasero de la casa. El pasto húmedo moja el pantalón que he traído
puesto todo el día mientras observo el anaranjado cielo del atardecer. Desde donde estoy,
alcanzo a ver el gran ventanal de la cocina. Ahí dentro, mi mamá, con un vestido que se
compró no hace mucho —prolijamente peinada y maquillada—, les habla a las dos
empleadas, que terminan de hacer los aperitivos para esta noche. Generalmente ella no trabaja
los sábados, pero hoy han hecho una excepción por la fiesta que mis papás organizan. Se
mezclan varias celebraciones: una buena racha en el trabajo de mi papá, la vuelta de mi tía de
su viaje a Europa y la simple oportunidad de reunir a la familia y amigos. Luego de un rato,
mi papá aparece en la escena, recién afeitado y poniéndose una corbata. Se acerca a mi mamá,
tomándola por la cintura y al atraerla hacia él le susurra algo al oído, que ella responde con
una sonrisa.
2. Mientras todo esto ocurre, una pregunta me da vueltas por la cabeza: ¿qué dirán si les contara
que me estoy enamorando de una mujer?
4. Fuimos compañeras de colegio. Ella iba un año más arriba que yo. Pero el año pasado repitió
y terminamos siendo compañeras. En mi curso, todas sabíamos un poco de Marina. Algunos
rumores, más verdaderos que falsos, le habían otorgado una desafortunada fama. Las demás
alumnas solían mirarla de reojo y hablar de ella a sus espaldas. En un colegio donde solo hay
mujeres, ese tipo de cosas vuelan. Y a pesar de que todas pretendían mostrar una cierta
aversión ante las actitudes de Marina, su ropa, lo que hacía los fines de semanas y sus
rumoreadas parejas, todas le guardaban un extraño respeto. Nadie decía nada de Marina
cuando ella estaba presente, es más, las escasas veces que se dirigían a ella, siempre lo hacían
con una actitud solícita, casi asustada. La verdad, todas se sentían un poco amenazadas por su
propia presencia. Es que nos sentíamos como si Marina hubiera sido varios años mayor que el
resto. Parecía ya haber vivido demasiado. Pero claro, aquello nunca nadie lo aceptaba en voz
alta.»
8
8. ¿Cuál es la relación entre el primer párrafo y el segundo?
En el primer párrafo mientras que en el segundo
11. Una síntesis adecuada para el primer párrafo del texto es:
A) Una protagonista de quien no se indica el nombre, observa como su familia realiza los preparativos de
una fiesta.
B) La protagonista se pregunta cómo reaccionaría su familia si ella les contase su verdad.
C) La protagonista nos describe como es su amada Marina.
D) Los padres hicieron trabajar a las empleadas domésticas aun siendo fin de semana.
9
Lectura 4 (preguntas 13 a 15)
Cuento escrito por Marta Navarro Callejas, escritora y ensayista española.
1. «Anochece sobre los campos de Montiel, las sombras tiñen el bosque de penumbra, la luna llena
despunta desolada y fría. A lo lejos, casi al final del camino, el viento azota con furia las aspas de los
molinos que entre la niebla por momentos se divisan. Hace mucho que nadie los visita. Pesa sobre ellos
una maldición: una leyenda antigua de encantamientos y hechicerías que, de tanto en tanto, revive en el
relato de algún caminante curioso; de algún peregrino incauto ahuyentado de inmediato del lugar por
los gritos del viejo loco que guarda sus puertas. Solo él conoce el secreto que tras ellas se oculta y,
cansado ya de vagar por el mundo, triste y derrotado en mil batallas, a protegerlo ha decido consagrar
sus últimas fuerzas.
2. El tacto frágil de una manita entre las suyas saca al viejo de sus ensoñaciones. Sonríe con dulzura y,
tras recostar sus huesos maltrechos sobre la encina fiel que cada noche vela su guardia junto al arroyo,
acurruca a la niña entre sus brazos. La más pequeña del grupo de expatriados que el azar puso un día en
su camino. Supervivientes doloridos de un naufragio de sueños cándidos e imposibles, resguardados
ahora del desamparo y el frío del invierno en este lugar perdido de la Mancha.
3. Refugiada en su abrazo la niña duerme tranquila. Tal vez sueña. Desde el primer instante fue su
favorita. Su nombre es Dulcinea.»
A) Un anciano resguarda los molinos de viento, en compañía de un grupo de personas, de entre quienes
su favorita es una pequeña niña llamada Dulcinea.
B) Los molinos de viento no son visitados hace mucho tiempo por una maldición.
C) Una pequeña niña hace sonreír al viejo guardián de los molinos.
D) Un grupo de expatriados acompaña al viejo en sus tareas de vigilancia.
10
14. A partir de la lectura del primer párrafo del texto, ¿Cuál de las siguientes opciones
corresponde a una inferencia válida?
15. A partir del título del cuento y del nombre de la niña mencionado al final del relato
es posible concluir que:
A) Solo II
B) Solo III
C) Solo I y II
D) I, II y III
11
Lectura 5 (preguntas 16 a 19)
Publicación escrita por OCAC (Organización Contra el Acoso Callejero) como presentación de su
organización en su página web.
1. «Caminar en paz por la calle es un derecho. Uno que no toda la gente disfruta por igual. Mujeres,
hombres, niños, niñas, transexuales, homosexuales, lesbianas y cualquier grupo divergente a la
masculinidad adulta y tradicional no sienten seguridad cuando caminan por las calles, cuando andan en
micro, cuando pasean en un mall. No sienten seguridad, no la sentimos. La sensación de seguridad se
anula cada vez que alguien nos mira con excesiva atención, que nos viola con las palabras, que nos toca
sin nuestro consentimiento.
2. Hay personas trabajando para cambiar esto. El Observatorio Contra el Acoso Callejero de Chile (OCAC
Chile) nace justamente por esta demanda ciudadana, para que el espacio público sea un lugar seguro, sin
agresiones ni agresores sexuales. El escenario es complejo, pues luchamos con imaginarios instalados
como “culturales” e incluso “pintorescos”. Hoy, decirle un “piropo” a una mujer -del tenor que sea,
“amable” o violento- está socialmente aceptado. Cambiar esa realidad considerada normal y natural es
uno de nuestros mayores desafíos.
3. Hay gente que dice “estoy de acuerdo con ustedes, pero es muy difícil cambiar a la sociedad”. Es cierto,
la tarea es monumental, sin embargo, hay cosas que sí podemos hacer, que podemos hacer ahora mismo,
que contribuirán a cambiar este escenario de una vez y para siempre: decir basta y dar la pelea.
4. Si el espacio es público, entonces nos pertenece a todas y todos. No es posible que la calle sea un lugar
de privilegios, un lugar donde un grupo ataca y otro es vulnerado. No es tolerable que algunos deseen
mantener esos privilegios, cuyo precio es menospreciar al resto. Los privilegiados tienen el deber de
despertar, razonar sobre el poder que ostentan, y comenzar a respetar a quienes alguna vez fueron sus
víctimas. Los demás tenemos el deber de reaccionar y no permitir que nuestros derechos sean
transgredidos. No hay una razón real para mantener y reproducir relaciones desiguales que nos dañan
como sociedad.
5. Necesitamos decir basta, necesitamos denunciar públicamente cuando sufrimos una agresión o cuando
somos testigos de la agresión hacia otra persona. Necesitamos que el acoso sexual callejero sea
reconocido como una forma de violencia de género, que existan cambios educativos y culturales
potentes para que la sociedad rechace estas conductas. Necesitamos reescribir los códigos culturales que
organizan nuestras acciones en las calles. Necesitamos una legislación responsable, con un enfoque
sancionatorio y sobre todo preventivo. Necesitamos dar la pelea por recuperar la calle para que mujeres
y hombres disfruten por igual del, hasta ahora, exclusivo privilegio de caminar sin miedo por las calles,
a cualquier hora del día y en cualquier circunstancia.
12
6. Esta lucha por la equidad de las personas la pensamos especialmente para quienes son más vulnerables:
mujeres, adolescentes, niños y niñas. Exigimos igualdad en un contexto de violencia de género,
apelamos a una sociedad mejor. Ésa es la cruzada del OCAC Chile: levantar la bandera de la igualdad de
derechos entre todos y todas. ¿Te nos unes?»
16. ¿Cuál de los siguiente es el título más adecuado para el texto leído?
A) Se necesitan cambios culturales y legales para cambiar la realidad respecto del acoso callejero.
B) Se necesita denunciar cuando se es víctima o testigo de una situación de acoso.
C) Se necesitan leyes que castiguen el acoso callejero.
D) Para combatir el acoso callejero, basta con que hombres y mujeres tomen conciencia.
19. Una inferencia válida del primer párrafo del texto anterior es que:
13