El Lenguaje
El Lenguaje
El cerebro está compuesto por 100 mil millones de neuronas, miles de millones de fibras
interconectadas y a cada segundo suceden innumerables sinapsis entre ellas: "La riqueza
de estas interconexiones sinápticas es el elemento principal en la mentalidad humana"
(Rodríguez, 2009, p. 213).
La característica más fundamental del cerebro es su alta interconexión: "ninguna neurona
está separada de cualquier otra por más allá de 4 conexiones" (González, 2007, p. 2). De
tal modo, el cerebro se caracteriza por sus funciones paralelas (reconociendo formas,
intuyendo patrones, abstrayendo conceptos, etc.) y su alta distribución, es decir, la
información no se almacena localmente, sino que se distribuye ampliamente por el cerebro
(González, 2007).
Desde que nacemos tenemos la capacidad de extraer las reglas y construir un lenguaje
articulado en menos de dos años de vida y dada la enorme cantidad de información del
mundo en que vivimos esto sería imposible si no naciésemos con el instinto del lenguaje.
Los expertos sostienen que a los 4 meses de edad los bebés son capaces de distinguir dos
lenguas diferentes. No les causa confusión, tampoco retrasa su aprendizaje.
El desarrollo del lenguaje se produce a lo largo de todo el ciclo vital; a medida que las
personas van haciéndose mayores, adquieren nuevas habilidades en cada etapa de
su vida, y en los años de madurez son vulnerables a un conjunto de incapacidades
relacionadas con el lenguaje. El desarrollo del lenguaje requiere una interacción
social, pero el lenguaje hablado de los humanos solo ha sido gracias a la evolución
de mecanismos neuronales especializados que subyacen tras el lenguaje. Estos son
áreas especiales del cerebro como el área de Broca, el área de Wernicke y el fascículo
arqueado.
El carácter articulado del lenguaje es lo que nos diferencia de los demás sistemas de
comunicación.
Con el presente trabajo intentamos aproximarnos a conocer las teorías que sustentan
cómo es que el lenguaje se da en el cerebro humano, qué áreas intervienen para tal
efecto y los enfoques que han explicado su funcionalidad.
EL LENGUAJE, DEFINICIONES:
Para el profesor Michael Corballis (1976) experto en cómo evolucionó el lenguaje humano
apoya la idea que el lenguaje es gestual y que nos comunicamos por gestos y que incluso el
habla es una forma de gestualizar pero que el lenguaje evolucionó por gestos manuales y
corporales que eran visibles en vez de audibles, cuanto se intentó que los primates imiten el
lenguaje, no funcionó al intentar hacerlos hablar, pero si son muy buenos con los gestos. El
lenguaje de señas puede ser enseñado a chimpancés y monos bonobos, además cuando
las personas hablan hacen gestos.
Eric Lenneberg (1967) sostiene que el desarrollo del lenguaje en los humanos está
relacionado con otros acontecimientos del proceso de maduración. La aparición del
lenguaje es un hito del desarrollo, correlacionado a grandes rasgos con la locomoción.
Lenneberg (1967) elaboró una lista de rasgos adicionales como prueba de que el
lenguaje es específico de los humanos y uniforme en nuestra especie en lo que respecta a
sus características principales:
1. La aparición del habla es regular. El orden de aparición de los hitos del desarrollo,
incluyendo el habla, es regular en la especie: no depende ni de la cultura ni del
idioma que se esté aprendiendo.
Las funciones cerebrales superiores tales como el lenguaje, son un sistema funcional que
depende del trabajo integrado de todo un grupo de zonas corticales y subcorticales, cada
una de las cuales aporta su propia contribución al resultado final. La lesión de uno de los
componentes alterará todo el sistema. Los componentes principales del lenguaje se
encuentran en el hemisferio dominante (izquierdo). Aproximadamente, el 95% de los
diestros tiene localizado el lenguaje en el hemisferio izquierdo y sólo un 5% en el hemisferio
derecho. En cambio los zurdos, el 70% lo tiene representado en el hemisferio izquierdo, un
15% en el hemisferio derecho y un 15% en forma bilateral. El género influye en la
representación cerebral del lenguaje. Las mujeres lo tienden a tener en forma bilateral. En
cambio, en los hombres está más lateralizado a la izquierda. Esta distribución repercute en
la incidencia de la afasia. Este trastorno es más frecuente en hombres que en mujeres en
una relación de 2 a 1.
EL PENSAMIENTO Y LENGUAJE
La relación entre pensamiento y lenguaje ha generado discusiones entre las diversas
corrientes y autores: ¿Qué se produce primero, la maduración del pensamiento o la
capacidad para hablar?".
Hay tres teorías fundamentales que responden a esta pregunta:
El pensamiento depende del lenguaje. Primero aparece el lenguaje y luego el
pensamiento, el lenguaje influye o determina la actividad mental (pensamiento).
El lenguaje depende del pensamiento. Para adquirir el lenguaje necesitamos previamente
cierta maduración cognitiva (pensamiento), la capacidad de pensar influye en el lenguaje.
Esta postura es defendida por la corriente cognitiva: Jean Piaget: "El grado de asimilación
del lenguaje por parte del niño y también el grado de significación y utilidad que aporta el
lenguaje a su actividad mental depende hasta cierto punto de las acciones mentales que
desempeñe, es decir, del grado de desarrollo evolutivo en que se encuentre".
La teoría simultánea. Sustentada por Vygotsky, señalando que tanto el lenguaje como el
pensamiento se desarrollan simultáneamente, entre ambos hay una interrelación absoluta,
no existiría uno sin el otro. El lenguaje surge por influencia social, se origina primero como
medio de
comunicación entre el niño y las personas de su entorno, después se convierte en lenguaje
interno, se transforma en función mental constituyendo la conciencia y proporcionando los
medios para el pensamiento del niño. Es decir, en sus orígenes, el lenguaje es un fenómeno
social; con el paso del tiempo se va transformando en un lenguaje interior. Para Vygotsky el
lenguaje está particularmente ligado al pensamiento: el pensamiento es lingüístico por su
naturaleza y el lenguaje es el instrumento del pensamiento y no sólo del pensamiento sino
también de la memoria y de la percepción.
Conclusión: El doctor Herbert Terrace, que trabajó con Nim Chimpsky, cosnidera
que Alex ha usado más la memoria que el idioma; llama a las respuestas de Alex “un
funcionamiento complejo discriminatorio”.
3. Otros:
Caso del caballo Clever Hans que al parecer podía contar, pero que en realidad
respondía a señales sutiles de su entrenador. En otro caso, se creía que Nim
Chimpsky, un chimpancé así llamado en alusión a Noam Chomsky, sabía hablar,
aunque sostienen que sólo había estado imitando a su profesor.
Mientras que el enfoque clásico sostiene que hay al menos tres áreas fundamentales bien
establecidas del lenguaje en el hemisferio izquierdo del cerebro humano.
1. El área de Broca, ubicada en la región frontal izquierda (circunvolución frontal
inferior) está muy próxima a la parte de la franja motriz que controla la lengua y los
labios, por lo que una lesión en el área de Broca suele dar lugar a un síndrome
afásico típico, conocido como afasia de Broca, por el que el paciente tiene una
buena comprensión pero una gran dificultad con la pronunciación y la producción de
palabras pequeñas, como artículos y preposiciones. El habla tiende a ser telegráfica:
solo contiene las palabras más importantes. Por ejemplo, cuando se le preguntó a
un paciente de Boston cómo pensaba pasar el fin de semana en casa, contestó, con
problemas de articulación: “Boston College. Fútbol. Sábado”.
También hay áreas del cerebro que se sabe que están relacionadas con el lenguaje
escrito; por ejemplo, una lesión de la circunvolución angular afecta a la capacidad de
leer.
Para producir lenguaje interviene el área de Broca que planea el proceso de pronunciación
de esa palabra, esta información viaja a la corteza motora que controla los músculos que
usamos para pronunciarla, este modelo aplica al lenguaje oral, escrito o de señas, la
conexión entre el área de Wernicke y Broca se da de igual manera en personas sordas que
utilizan el lenguaje de señas.
Fuente: http://www.scielo.org.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2071-
081X2019000100007
TRASTORNOS DEL HABLA Y DEL LENGUAJE:
Se presenta en caso de lesiones o enfermedades que afectan las funciones mentales
superiores.
Fundamentalmente son: CONFUSION- DELIRIO- DEMENCIA
AFASIAS
Las alteraciones del lenguaje son cada vez más frecuentes, por ello, su estudio y
diagnóstico están promoviendo cada vez más eventos académicos como congresos,
reuniones, publicaciones y a la vez están surgiendo subespecialidades de la Neurología que
se dedican exclusivamente a este tema.
4. AFASIA NOMINATIVA donde se destaca la dificultad para nominar los objetos. Por
el tipo de servicio asistencial donde tiene sede la cátedra, la vemos frecuentemente.
GLOSARIO:
REFERENCIAS
- Según el enfoque clásico, las lesiones cerebrales que afectan las regiones del
lenguaje (Área de Broca, Wernicke y fascículo arqueado) pueden provocar
alteraciones del lenguaje.
- El lenguaje activa una red o varias redes cerebrales pero hay zonas críticas como el
área de Broca (para la producción del lenguaje) o el parea de Wernicke (para la
comprensión del lenguaje).
- Se piensa que los gestos y la memoria episódica del dónde y cuándo influyeron
decisivamente para el desarrollo del lenguaje en la especie humana.