Ley Org Poder Público Municipal
Ley Org Poder Público Municipal
Ley Org Poder Público Municipal
Artículo 1.- La presente Ley Orgánica tiene por objeto desarrollar los principios
constitucionales, relativos al Poder Público Municipal, su autonomía, organización y
funcionamiento, gobierno, administración y control, para el efectivo ejercicio de la
participación protagónica del pueblo en los asuntos propios de la vida local, conforme a
los valores de la democracia participativa, la corresponsabilidad social, la planificación,
la descentralización y la transferencia a las comunidades y grupos sociales
organizados.
Artículo 2.- El Municipio constituye la unidad política primaria de la organización
nacional de la República Bolivariana de Venezuela, goza de personalidad jurídica y
ejerce sus competencias de manera autónoma, conforme a la Constitución y la ley. Sus
actuaciones incorporarán la participación ciudadana, de manera efectiva, suficiente y
oportuna, en la definición y ejecución de la gestión pública y en el control y evaluación
de sus resultados.
Artículo 3.- La autonomía es la facultad que tiene el Municipio para elegir sus
autoridades, gestionar las materias de su competencia, crear, recaudar e invertir sus
ingresos, dictar el ordenamiento jurídico municipal, así como organizarse con la
finalidad de impulsar el desarrollo social, cultural y económico sustentable de las
comunidades locales, y los fines del Estado.
Artículo 4- En el ejercicio de su autonomía corresponde al Municipio:
1.- Elegir sus autoridades
2.- Crear parroquias y otras entidades locales.
3.- Crear instancias, mecanismos y sujetos de descentralización, conforme a la
Constitución y la Ley.
4.- Asociarse en mancomunidades y demás formas asociativas intergubernamentales
para fines de interés público determinados.
5.- Legislar en materia de su competencia, y sobre la organización y funcionamiento de
los distintos órganos del Municipio.
6.- Gestionar las materias de su competencia.
7.- Crear, recaudar e invertir sus ingresos.
8.- Controlar, vigilar y fiscalizar los ingresos, gastos y bienes municipales, así como las
operaciones relativas a los mismos.
9.- Impulsar y promover la participación ciudadana, en el ejercicio de sus actuaciones.
10.- Las demás actuaciones relativas a los asuntos propios de la vida local conforme a
su naturaleza.
Los actos del Municipio sólo podrán ser impugnados por ante los tribunales
competentes.
Artículo 5.- Los municipios y las demás entidades locales se regirán por las normas
constitucionales, las disposiciones de la presente Ley Orgánica, por la legislación
orgánica aplicable, por las leyes estadales y por lo establecido en las ordenanzas y
demás instrumentos jurídicos municipales.
Artículo 6.- Los procesos de formación de las leyes estadales relativos al régimen y la
organización de los municipios y demás entidades locales, atenderán a las condiciones
peculiares de población, desarrollo económico, capacidad fiscal, situación geográfica,
de historia, cultura y otros factores relevantes.
El Consejo Legislativo deberá consultar y considerar las opiniones de los Alcaldes y
Alcaldesas y Concejos, de las Juntas Parroquiales y de los ciudadanos y ciudadanas y
de sus organizaciones, en la correspondiente jurisdicción. Para tales fines deberá
aplicar los mecanismos apropiados de acuerdo a la ley.
Artículo 7.- El Municipio y las demás entidades locales conforman espacios primarios
para la participación ciudadana en la planificación, diseño, ejecución, control y
evaluación de la gestión pública.
Los órganos del Municipio y demás entes locales, deberán crear los mecanismos para
garantizar la participación de las comunidades y grupos sociales organizados en su
ejercicio de acuerdo a la ley.
Artículo 8.- Las autoridades del Municipio, de sus entes descentralizados y de las
entidades locales deberán presentar informe sobre su gestión y rendir cuentas
públicas, transparentes, periódicas y oportunas ante las comunidades de su
jurisdicción.
A tales fines, garantizarán la información y convocatoria oportunas y los mecanismos
de evaluación pertinentes, acerca de los recursos asignados y los efectivamente
dispuestos con los resultados obtenidos.
TÍTULO II
DE LOS MUNICIPIOS Y OTRAS ENTIDADES LOCALES
CAPÍTULO I
DE LA CREACIÓN, FUSIÓN Y SEGREGACIÓN DE MUNICIPIOS
Artículo 9.- La potestad de los estados para organizar sus municipios y demás
entidades locales se regirá por lo dispuesto en la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela y en las disposiciones de esta ley, así como en la constitución
y leyes estadales respectivas.
Artículo 10.- Para que el Consejo Legislativo pueda crear un Municipio deben
concurrir las siguientes condiciones:
1. Una población asentada establemente en un territorio determinado, con vínculos de
vecindad permanente;
2. Un centro poblado no menor a la media poblacional de los municipios preexistentes
en el estado, excluidos los dos de mayor población. Este requisito deberá ser
certificado por el servicio nacional de estadística. En caso de no existir otro Municipio
en esa entidad para hacer comparación, se requerirá de una población no menor de
diez mil (10.000) habitantes;
3. Capacidad para generar recursos propios suficientes para atender los gastos de
gobierno y administración general y proveer la prestación de los servicios mínimos
obligatorios. A los efectos del cumplimiento de este requisito, deberá constar en acta la
opinión favorable del órgano rector nacional en la materia de presupuesto público.
Igualmente, deberá constar la opinión del Consejo de Planificación y Coordinación de
Políticas Públicas. En dicha opinión motivada, se determinarán los efectos socio
económicos en el o los municipios que resulten segregados. Cumplidas estas
condiciones, el Consejo Legislativo requerirá la consulta a la población de o los
municipios a los que pertenezca el territorio afectado.
4. Los municipios indígenas serán creados, previa solicitud de los pueblos y
comunidades u organizaciones indígenas, formulada ante el respectivo Consejo
Legislativo y atendiendo a las condiciones geográficas, poblacionales, elementos
históricos y socioculturales de estos pueblos y comunidades.
Artículo 11.- Por razones de interés nacional, relativas al desarrollo fronterizo o
exigencias especiales, derivadas del plan de desarrollo económico social de la Nación;
los Consejos Legislativos podrán crear, excepcionalmente, municipios de régimen
especial, atendiendo a iniciativa reservada al Ejecutivo Nacional por órgano del
Presidente o Presidenta de la República en Consejo de Ministros; aun cuando las
comunidades postuladas a tal categoría no cumplan con los requisitos establecidos en
el artículo anterior. La ley de creación definirá el régimen especial atendiendo a la
fundamentación que motiva la iniciativa.
Artículo 12.- Dos o más municipios limítrofes de un mismo estado podrán fusionarse
y constituir uno nuevo cuando sus ámbitos vecinales se confundan como consecuencia
de la conurbación y existan evidentes motivos de conveniencia o necesidad.
Artículo 13.- La iniciativa para la creación, fusión o segregación de municipios, salvo
la hipótesis de iniciativa reservada, establecida en el artículo 11, corresponderá:
1. A un número de electores, con residencia en los municipios a los cuales pertenezca
el territorio afectado, no menor al quince por ciento de los inscritos en el registro
electoral permanente.
2. Al Consejo Legislativo por acuerdo de las dos terceras (2/3) partes de sus
integrantes.
3. A los Concejos Municipales que estén comprendidos en el territorio afectado,
mediante acuerdo de las dos terceras (2/3) partes de sus integrantes.
4. Al respectivo Gobernador con la aprobación de la mayoría de los integrantes del
Consejo Legislativo.
5. A los Alcaldes y Alcaldesas de los municipios a los que pertenezca el territorio
afectado, con la anuencia de los Consejos Locales de Planificación Pública.
Artículo 14.- Antes de ser sancionado el proyecto de ley de creación, fusión o
segregación de municipios deberá ser sometido a referéndum consultivo de la
población.
Artículo 15.- La Ley de creación del nuevo Municipio deberá Públicarse en la Gaceta
Oficial del Estado, con al menos seis (6) meses de anticipación a la fecha de las
elecciones para un nuevo periodo municipal.
El Consejo Legislativo establecerá en el mismo acto, el régimen de transición que
regirá entre la creación del Municipio y su efectivo funcionamiento, con las previsiones
relativas al inventario de los bienes y obligaciones de la hacienda municipal, en
especial el saneamiento de las obligaciones con los trabajadores al servicio del o de los
municipios.
Artículo 16.- Mientras se elabora el ordenamiento jurídico propio en el nuevo
Municipio, estará vigente el ordenamiento jurídico del Municipio segregado, salvo
cuando se haya afectado el territorio de varios municipios, en cuyo caso el
ordenamiento jurídico a regir durante la transición será determinado por decisión del
Consejo Legislativo.
Artículo 17.- Las solicitudes y asuntos que se encuentren en proceso, para la fecha de
la toma de posesión de las autoridades del nuevo Municipio, continuarán su tramitación
ante éstas.
Los actos firmes de efectos particulares, dictados por las autoridades competentes de o
los municipios a los que pertenezca el territorio afectado, surtirán sus efectos en la
nueva jurisdicción. Si los actos en referencia no están firmes para esa fecha, podrán
ser revisados de oficio por los órganos municipales competentes del nuevo Municipio, o
recurridos ante ellos por los interesados, de conformidad con el ordenamiento jurídico
vigente.
El nuevo Municipio iniciará sus actuaciones propias sin pasivos laborales.
Artículo 18.- Además de los municipios, son entidades locales territoriales:
1. Los distritos metropolitanos;
2. Las parroquias y demás demarcaciones dentro del territorio del Municipio, tales
como la urbanización, el barrio, la aldea, y el caserío.
Los supuestos y condiciones establecidos en esta Ley para la creación de estas
demarcaciones dentro del territorio del Municipio, así como los recursos que
dispondrán, concatenados a las funciones que se les asignen, incluso su participación
en los ingresos propios del Municipio, deberán ser considerados en la ley estadal que la
desarrolle.
CAPÍTULO II
DE LOS DISTRITOS METROPOLITANOS
Artículo 19.- Cuando dos o más municipios tengan entre sí relaciones económicas,
sociales y físicas que den al conjunto urbano las características de un área
metropolitana con población mayor de quinientos mil habitantes y que hayan
desarrollado previamente experiencias de mancomunidades u otras figuras asociativas,
durante al menos dos períodos municipales continuos, podrán organizarse en distrito
metropolitano.
Los Distritos Metropolitanos son entidades locales territoriales con personalidad
jurídica, cuya creación corresponderá al Consejo Legislativo de la entidad federal a la
que pertenezcan los municipios. Cuando los municipios pertenezcan a entidades
federales distintas la competencia corresponderá a la Asamblea Nacional.
Artículo 20.- La iniciativa para la creación de un Distrito Metropolitano corresponderá:
1. Al quince por ciento, por lo menos, de los vecinos inscritos en el registro electoral
permanente de los municipios afectados.
2. A los Alcaldes y Alcaldesas de los respectivos municipios con acuerdo de los
Concejos correspondientes, aprobado por la mayoría de sus integrantes.
3. A los Concejos respectivos mediante acuerdo aprobado por las dos terceras partes
de sus integrantes;
4. Al Gobernador del Estado con acuerdo del Consejo Legislativo aprobado por la
mayoría de sus integrantes;
5. Al Consejo Legislativo aprobada por las dos terceras partes de sus integrantes.
6. Cuando se trate de municipios pertenecientes a varias entidades federales, la
iniciativa también podrá tomarse con el apoyo de la mayoría de los diputados de la
Asamblea Nacional electos o electas en cada una de las respectivas entidades
federales.
Artículo 21.- La iniciativa deberá ser presentada dentro de los dos primeros años del
período del poder público municipal. Admitida la iniciativa por el Consejo Legislativo o
por ante la Asamblea Nacional según el caso, y realizados los informes técnicos
relativos a la viabilidad del Distrito Metropolitano, se procederá a la convocatoria de
referendo consultivo entre la población de los municipios involucrados. Aprobada la
creación del Distrito Metropolitano, se elaborará la ley de creación correspondiente.
La declaratoria de creación del Distrito Metropolitano se tomará con el voto favorable
de las dos terceras partes de los integrantes del Consejo Legislativo o de la Asamblea
Nacional según el caso, y deberá Públicarse en la Gaceta Oficial del Estado o de la
República según el caso, con al menos un año de anticipación a la fecha de las
elecciones para un nuevo periodo municipal.
El proceso de elaboración de la ley respectiva se hará con la efectiva participación
ciudadana, y en especial con la participación de las autoridades de los municipios
involucrados.
Artículo 22.- La ley de creación del Distrito Metropolitano definirá los límites del
mismo y su organización, con determinación expresa de las competencias
metropolitanas que deberán asumir sus órganos de gobierno, administración y
legislación.
Artículo 23.- El gobierno y la administración del Distrito Metropolitano corresponden a
la autoridad ejecutiva metropolitana que funcionará bajo la denominación que
establezca la correspondiente ley de creación.
La función legislativa será ejercida por el Consejo Metropolitano, el cual estará
integrado de la manera que se establezca en la Ley de creación del respectivo distrito.
En la Ordenanza de Reglamento Interior y de Debates del Consejo Metropolitano se
preverá la participación permanente con derecho a voz de un representante del
Organismo Nacional de Desarrollo de la jurisdicción del Distrito Metropolitano, la cual
será solicitada a ese organismo dentro de los quince días siguientes a la instalación del
cuerpo.
Artículo 24.- El Distrito Metropolitano contará con los ingresos que le sean asignados
en la ley de creación respectiva. Dicha ley también regulará la transferencia de bienes
municipales que se hará al Distrito Metropolitano para la prestación de los servicios o
la gestión de las actividades transferidas.
Artículo 25.- Los Distritos Metropolitanos contarán con los siguientes ingresos:
1. Los que obtengan por derechos y tarifas en los servicio públicos que presten en
ejercicio de su competencia;
2. Las rentas y productos de su patrimonio;
3. Los provenientes de la enajenación de sus bienes;
4. La cuota parte del situado que se le haya asignado;
5. Un porcentaje de los impuestos creados y recaudados por los municipios agrupados,
no menor al treinta por ciento y con incrementos vinculados al costo del ejercicio de
las competencias que le sean asignadas;
6. Los aportes especiales, y cualesquiera otros que por disposición legal le
correspondan o le sean asignados.
El Distrito Metropolitano podrá asumir mediante convenio con los municipios
agrupados, la recaudación de los impuestos municipales previstos en el numeral 5º del
presente artículo.
Artículo 26.- En los casos de creación de un Distrito Metropolitano y dentro del lapso
de treinta (30) días hábiles siguientes a la Públicación de la Ley de su creación, el
Consejo Legislativo o la Asamblea Nacional según el caso, nombrará una Comisión
compuesta por uno de sus miembros, quien la presidirá, el funcionario responsable por
la hacienda municipal por cada uno de los municipios que lo integran, un Concejal o
Concejala por cada uno de ellos, y un representante de la Contraloría General de la
República, con el objeto de elaborar un inventario de la hacienda pública de cada uno
de los municipios integrantes del Distrito Metropolitano.
Artículo 27.- Efectuado el inventario a que se refiere el artículo anterior la comisión,
dentro de los noventa (90) días siguientes a su instalación, presentará el informe al
Consejo Legislativo o a la Asamblea Nacional según el caso, para que el órgano
legislativo correspondiente decida sobre el traspaso de los bienes municipales
afectados a la prestación de los servicios transferidos o a la realización de las
actividades asignadas a la competencia del Distrito Metropolitano.
La decisión que refiere este artículo será de obligatoria ejecución por los municipios
correspondientes a través de acuerdo del Concejo Municipal respectivo. En caso de no
hacerlo dentro de los sesenta (60) días subsiguientes a la decisión del órgano
legislativo, la autoridad metropolitana solicitará la ejecución por los órganos
jurisdiccionales competentes.
Las obligaciones de carácter laboral que surjan con ocasión de la creación del Distrito
Metropolitano, serán asumidas por éste, para lo cual deberán hacerse las previsiones
presupuestarias y financieras y los aportes proporcionales por parte de los municipios
involucrados. Las demás obligaciones serán distribuidas en proporción al monto de la
respectiva cuota de bienes asignados, conforme lo determine el Consejo Legislativo.
Artículo 28.- Las normas contenidas en la presente Ley, incluidas las relativas a los
privilegios y prerrogativas serán aplicables a los Distritos Metropolitanos en cuanto
sean procedentes.
CAPÍTULO III
DE LAS PARROQUIAS Y OTRAS ENTIDADES LOCALES
Artículo 29.- Las parroquias y las otras entidades locales dentro del territorio
municipal son demarcaciones, creadas con el objeto de desconcentrar la gestión
municipal, promover la participación ciudadana y una mejor prestación de los servicios
públicos municipales.
Artículo 30.- Las parroquias y las otras entidades locales dentro del territorio
municipal sólo podrán ser creadas mediante ordenanza, con la organización, funciones,
atribuciones y recursos que se les confieran en el momento de su creación, sobre la
base de las características sociológicas, culturales y económicas del asentamiento de la
población en el territorio municipal, sin perjuicio de la unidad de gobierno y de gestión
del Municipio. Las parroquias podrán ser urbanas o no urbanas y en ningún caso
constituirán divisiones exhaustivas del territorio municipal.
Artículo 31.- La iniciativa para creación de las parroquias y las otras entidades locales
dentro del territorio municipal corresponderá en forma alternativa:
1. A los vecinos, en un número no menor al quince por ciento de residentes en el
territorio municipal que servirá de base a la entidad local, mediante solicitud escrita al
Concejo.
2. Al Alcalde o Alcaldesa mediante solicitud razonada ante el Concejo.
3. Al Concejo Municipal mediante acuerdo razonado de la mayoría de sus integrantes.
Artículo 32: Para crear una parroquia u otra de las entidades locales dentro del
Municipio, se requiere que en el territorio correspondiente exista:
1. Una población con residencia estable, igual o superior a la exigida en la ley estadal
para tales fines;
2. En los espacios urbanos, un Plan de Desarrollo Urbano Local debidamente
sancionado y Públicado. En los espacios no urbanos, los lineamientos de la ordenación
y ocupación del territorio;
3. Organización de la comunidad mediante agrupaciones sociales, electas
democráticamente y debidamente registradas por ante los órganos competentes del
Municipio;
4. Estructura social de actuación para el desarrollo de la justicia de paz;
5. Organización de servicios públicos básicos;
6. Registro catastral, con sujetos de tributación y contribuciones municipales, de modo
especial los inmobiliarios.
El proyecto de creación será informado en forma pública y sometido a consulta de la
población asentada en el espacio territorial de la parroquia o entidad local territorial
propuesta.
Artículo 33.- En la ordenanza de creación y administración de la parroquia u otra
entidad local dentro del territorio del Municipio, se deberá indicar:
1. Las atribuciones, actividades y funciones que le puedan ser delegadas y las bases
para la delegación de estas atribuciones por otros actos normativos;
2. El órgano de la administración municipal que ejercerá la supervisión de las
atribuciones, actividades y funciones delegadas;
3. Los recursos humanos y de equipos asignados a la parroquia o entidad local
territorial, y los medios necesarios para su eficaz ejecución;
4. La asignación del ingreso propio del Municipio que tendrá carácter de ingreso de la
parroquia o entidad local territorial a los efectos de su creación y funcionamiento, de
acuerdo a las atribuciones, actividades y funciones delegadas.
Artículo 34.- La parroquia tendrá facultades de gestión, consultivas y de evaluación
de la gestión municipal en sus respectivos ámbitos territoriales, en los términos y
alcance que se les señale en la ordenanza respectiva.
Sin perjuicio de la unidad de gobierno y gestión del Municipio, la parroquia será
gestionada por una junta parroquial integrada por tres (3) miembros electos
democráticamente por los vecinos, según la legislación electoral.
Artículo 35.- Para ser miembro de la Junta Parroquial, se requiere ser venezolano o
venezolana, mayor de dieciocho (18) años de edad, y tener residencia en el Municipio
durante, al menos, los tres últimos años previos a su elección.
Artículo 36.- La parroquia tendrá atribuida facultad expresa para gestionar los
asuntos y procesos siguientes:
1. Servir como centros de información, producción y promoción de procesos
participativos, para la identificación de prioridades presupuestarias;
2. Promover los principios de corresponsabilidad, protagonismo y participación
ciudadana en la gestión Pública municipal.
3. Promover los servicios de justicia de paz, de seguridad ciudadana, de protección
civil y a la infancia, a la adolescencia, a la tercera edad y a las personas
discapacitadas;
4. Promover procesos comunitarios de contraloría social.
5. Proteger el ambiente y fortalecer las áreas de los parques naturales, en coordinación
con el ente responsable del parque y conforme a las pautas que le señalen las
autoridades del Municipio.
6. Velar por el cumplimiento de la limpieza urbana y aseo domiciliario
7. Fiscalizar los servicios de agua potable, electricidad y gas doméstico.
8. Cuidar y mantener plazas, parques y jardines.
9. Fiscalizar el servicio de transporte público de pasajeros;
10. Promover y fiscalizar el cumplimiento de las obligaciones tributarias en la
parroquia.
Artículo 37.- Las juntas parroquiales están en la obligación de requerir toda la
información de la gestión municipal para ponerla a disposición de todos los ciudadanos
y ciudadanas de la parroquia que se la soliciten.
Artículo 38.- El presupuesto municipal de cada ejercicio fiscal incorporará los planes,
programas, proyectos y actividades encomendados a la parroquia o a la entidad local
territorial, con previsión de los respectivos créditos presupuestarios, así como de los
resultados que se esperan obtener en términos de producción de bienes y servicios,
cuando sea posible cuantificarlos. En la ordenanza respectiva se establecerá el órgano
de la administración pública municipal que hará el seguimiento de las atribuciones
señaladas.
CAPÍTULO IV
DE LAS MANCOMUNIDADES Y DEMÁS FIGURAS ASOCIATIVAS
TÍTULO III
CAPÍTULO I
CAPÍTULO I
SECCIÓN PRIMERA
DE LA SECRETARÍA
Artículo 111.- Para ser Secretario o Secretaria se requiere ser venezolano o
venezolana, mayor de edad y gozar de sus derechos civiles y políticos. Los candidatos
deberán tener idoneidad y competencia para el ejercicio del cargo y en lo posible,
poseer título universitario o de técnico superior.
Artículo 112.- Son atribuciones del Secretario o Secretaria del Consejo:
1. Asistir a las sesiones del Concejo y elaborar las actas;
2. Refrendar las ordenanzas y demás instrumentos jurídicos que dicte el Cuerpo;
3. Hacer llegar a los Concejales o Concejalas las convocatorias para las sesiones
extraordinarias del Concejo;
4. Llevar con regularidad los libros, expedientes y documentos del Concejo, custodiar
su archivo y conservarlo organizado, de acuerdo con las técnicas más adecuadas;
5. Despachar las comunicaciones que emanen del Concejo y llevar con exactitud el
registro de todos los expedientes o documentos que se entreguen por su órgano;
6. Expedir, de conformidad con la ley, certificaciones de las actas del Concejo o de
cualquier otro documento que repose en los archivos del órgano, previa autorización
del Presidente o Presidenta del Cuerpo.
7. Dirigir los trabajos de la Secretaría;
8. Auxiliar a las Comisiones del Concejo; y,
9. Las demás que le señalen las leyes, ordenanzas y otros instrumentos jurídicos
aplicables.
Artículo 113.- El Secretario o Secretaria podrá ser destituido o destituida por decisión
de la mayoría de los integrantes del Concejo, previa formación del respectivo
expediente instruido con audiencia del funcionario.
CENTÉSIMO TERCERO: Se propone incluir la Sección Segunda que quedaría con la
siguiente denominación para la segunda discusión:
SECCIÓN SEGUNDA
DE LA SÍNDICATURA
Artículo 114.- En cada Municipio existirá una Sindicatura de apoyo al Poder Público
Municipal a cargo de un Síndico Procurador o Síndica Procuradora quien deberá ser
venezolano o venezolana, mayor de edad, abogado o abogada, gozar de sus derechos
civiles y políticos y no tener interés personal directo en asunto relacionado con el
Municipio o Distrito.
El desempeño del cargo es a dedicación exclusiva e incompatible con el libre ejercicio
de la profesión.
Artículo 115.- El Síndico Procurador o Síndica Procuradora será designado o
designada por el Alcalde o la Alcaldesa, previa autorización del Concejo, en la sesión
ordinaria siguiente a la de instalación de este último órgano o dentro de la sesión más
inmediata posible. Cuando el Concejo no apruebe tal designación, deberá hacerlo
mediante acto explícito y motivado.
Artículo 116.- Cuando el Concejo no apruebe la designación hecha por el Alcalde o
Alcaldesa, éste o ésta deberá proponer una terna acompañada de los soportes
académicos y de cualquier otro orden que sustenten sus postulaciones y el Concejo
deberá pronunciarse dentro de los treinta días siguientes en favor de una de las
postulaciones presentadas; en defecto de lo cual, el Alcalde o Alcaldesa podrá designar
a quien estime más apropiado dentro de la terna de postulados.
Artículo 117.- Corresponde al Síndico Procurador o Síndica Procuradora:
1. Representar y defender judicial y extrajudicialmente, los intereses del Municipio en
relación con los bienes y derechos de la entidad, de acuerdo al ordenamiento jurídico e
instrucciones del Alcalde o Alcaldesa o del Concejo;
2. Representar y defender al Municipio conforme a las instrucciones impartidas por el
Alcalde o la Alcaldesa, o el Concejo en cuanto a los derechos relacionados con el
Tesoro Municipal y conforme a lo determinado por las leyes y ordenanzas. Cumplirá las
mismas funciones en los juicios contenciosos administrativos que involucren al
Municipio.
3. Asesorar jurídicamente al Alcalde o Alcaldesa y al Concejo, mediante dictamen legal
e informes que respondan a sus solicitudes;
4. Someter a la consideración del Alcalde o Alcaldesa proyectos de ordenanzas y
reglamentos o de reforma de los mismos;
5. Asistir, con derecho de palabra, a las sesiones del Concejo en las materias
relacionadas con su competencia o aquellas a las cuales sea convocado;
6. Denunciar los hechos ilícitos en que incurran los funcionarios o empleados en el
ejercicio de sus funciones y, previa autorización del Alcalde o Alcaldesa, intentar las
acciones jurídicas a que haya lugar; y
7. Asesorar jurídicamente y orientar a los ciudadanos y ciudadanas, organizados o no,
en todos los asuntos de su competencia.
8. Cumplir con los demás deberes y atribuciones que le señalen las leyes y
ordenanzas.
Artículo 118.- Los informes y dictámenes del Síndico Procurador o Síndica
Procuradora no tienen carácter vinculante, salvo disposición expresa en contrario.
Artículo 119.- El Síndico o Síndica durará en sus funciones el lapso que se establezca
por ordenanza
TÍTULO V
DE LA HACIENDA PÚBLICA MUNICIPAL
CAPÍTULO I
PRINCIPIOS GENERALES SOBRE LA HACIENDA MUNICIPAL
Artículo 120.- La Hacienda Pública Municipal del Municipio está constituida por los
bienes, ingresos y obligaciones que forman su activo y pasivo, así como los demás
bienes y rentas cuya administración corresponda al ente municipal.
El Tesoro Municipal está conformado por el dinero y los valores de la entidad municipal
así como por las obligaciones a su cargo.
Artículo 121.- La administración financiera de la Hacienda Pública del Municipio está
conformada por los sistemas de bienes, planificación, presupuesto, tesorería,
contabilidad y tributario regulados en esta ley.
Artículo 122.- La administración financiera de la Hacienda Pública Municipal se
ejercerá en forma planificada con arreglo a los principios de legalidad, eficiencia,
celeridad, solvencia, transparencia, rendición de cuentas, responsabilidad, equilibrio
fiscal y de manera coordinada con la hacienda de la República y la de los Estados, sin
perjuicio de la autonomía que la Constitución consagra a favor de los municipios para
la gestión de las materias de su competencia y para la creación, recaudación e
inversión de sus ingresos.
Artículo 123.- El Alcalde o Alcaldesa es el o la responsable de la Hacienda Pública
Municipal y le corresponde la dirección de su administración financiera, sin perjuicio del
régimen de control atribuido al Concejo, al Consejo Local de Planificación Pública, a la
Contraloría y al control ciudadano.
Artículo 124.- También están sujetos a las regulaciones de este Título en cuanto le
sean aplicables, los demás entes u organismos que conforman el sector público
municipal, a saber:
1. Los distritos metropolitanos.
2. Los institutos autónomos municipales.
3. Los servicios autónomos sin personalidad jurídica creados por los municipios
4. Las sociedades mercantiles en las cuales los municipios tengan participación igual o
mayor al cincuenta por ciento de su capital social.
5. Las fundaciones, sociedades civiles, asociaciones civiles y demás instituciones
constituidas con fondos públicos municipales que representen el cincuenta por ciento o
más de su patrimonio.
6. Las demás personas jurídicas municipales de derecho público, con o sin fines
empresariales no contempladas en los numerales anteriores.
Artículo 125.- El Municipio responderá patrimonialmente por los daños que cause con
ocasión del funcionamiento de sus servicios; queda a salvo el derecho del particular
para exigir la responsabilidad del funcionario y el derecho del Municipio de actuar
contra éste, de conformidad con las leyes que regulan la materia.
Artículo 126.- El Alcalde o la Alcaldesa, los Concejales o Concejalas, el Contralor o
Contralora, el Síndico o Síndica y demás funcionarios y trabajadores municipales serán
responsables patrimonialmente ante el Municipio por los daños que le causaren por
incumplimiento de sus deberes o por negligencia o impericia en el desempeño de sus
funciones.
Cualquier vecino del Municipio podrá exigir a las autoridades municipales competentes
el ejercicio de las acciones respectivas. Cuando la autoridad competente no las ejerza,
el o los vecinos interesados podrán accionar legalmente, sin perjuicio de la
intervención del Fiscal del Ministerio Público a fin de que inicie la averiguación a que
hubiere lugar.
CAPÍTULO II
DE LOS BIENES Y OBLIGACIONES MUNICIPALES
Artículo 127.- Son bienes municipales, sin menoscabo de legítimos derechos de
terceros, los bienes muebles e inmuebles que por cualquier título formen parte del
patrimonio del Municipio, o aquellos destinados en forma permanente a algún
establecimiento público o servicio del Municipio o a algún ramo de su administración,
salvo disposición o convenio expresos en contrario.
Los bienes municipales se dividen en bienes del dominio público y bienes del dominio
privado.
Artículo 128.- Los bienes de dominio público son:
1. Los ejidos. Se exceptúan las tierras correspondientes a los pueblos y comunidades
indígenas.
2. Las vías terrestres urbanas, rurales y de usos comunales
3. Los que adquiera el Municipio mediante expropiación conforme a la Ley.
Artículo 129.- Los bienes del dominio público del Municipio son inalienables e
imprescriptibles, salvo que el Concejo proceda a su desafectación con el voto favorable
de las tres cuartas (3/4) partes de sus integrantes, previa consulta con los Consejos
Locales de Planificación. En el expediente administrativo de desafectación debe constar
la opinión del Síndico Procurador o Síndica Procuradora y del Contralor o Contralora
Municipal.
En el caso de los ejidos se procederá conforme a esta ley y las ordenanzas.
Artículo 130.- La adquisición, enajenación, administración, conservación, custodia,
mejora, restitución, desincorporación y demás operaciones que tengan por objeto
bienes municipales se rigen por las ordenanzas y reglamentos dictados en la materia
por los municipios. La legislación sobre bienes nacionales se aplicará con carácter
supletorio en cuanto sea procedente.
Artículo 131.- La adquisición de los bienes inmuebles necesarios para el uso público o
servicio oficial del Municipio se hará por el Alcalde o Alcaldesa, siempre que conste el
informe favorable del Contralor o Contralora, conforme a las disposiciones aplicables.
Artículo 132-. Los municipios no podrán donar ni dar en usufructo o comodato bienes
inmuebles de su dominio privado, salvo a entes públicos o privados para la ejecución
de programas y proyectos de interés público en materia de desarrollo económico o
social. En cada caso se requerirá, a solicitud motivada del Alcalde o Alcaldesa,
autorización del Concejo dada con el voto de las dos terceras (2/3) partes de sus
integrantes.
Cuando los inmuebles a que se refiere este artículo dejen de cumplir el fin específico
para el cual se hizo la adjudicación, revertirán o se restituirán de pleno derecho al
Municipio, libres de gravamen y sin pago alguno por parte de la entidad. A fin de
promover la transparencia de estos procesos, el Alcalde o Alcaldesa incluirá en la
Cuenta Anual, información actualizada sobre el estado de ejecución de los proyectos
cuya realización fue causa de la adjudicación.
Artículo 133.- Son ingresos ordinarios del Municipio:
1. Los procedentes de la administración de su patrimonio, incluido el producto de sus
ejidos y bienes;
2. Las tasas por el uso de sus bienes o servicios; las tasas administrativas por licencias
o autorizaciones; los impuestos sobre actividades económicas de industria, comercio,
servicios o de índole similar, con las limitaciones establecidas en la Constitución; los
impuestos sobre inmuebles urbanos, vehículos, espectáculos públicos, juegos y
apuestas lícitas, propaganda y publicidad comercial; las contribuciones especiales por
mejoras sobre plusvalía de las propiedades generadas por cambio de uso o de
intensidad de aprovechamiento con que se vean favorecidas por los planes de
ordenación urbanística y cualesquiera otros que le sean asignados por ley;
3. El impuesto territorial rural o sobre predios rurales y otros ramos tributarios
nacionales o estadales, conforme a las leyes de creación de estos tributos;
4. Los derivados del Situado Constitucional y otras transferencias o subvenciones
nacionales o estadales;
5. El producto de las multas y sanciones en el ámbito de sus competencias y las demás
que le sean atribuidas;
6. Los dividendos o intereses por suscripción de capital;
7. Los provenientes del Fondo de Compensación Interterritorial;
8. Los demás que determine la ley.
Artículo 134.- El situado es el ingreso que le corresponde a los municipios en cada
ejercicio fiscal, de conformidad con lo dispuesto en el numeral cuarto del artículo 167
de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela; el cual comprende:
1. Una cantidad no menor al veinte por ciento (20%) de la correspondiente al
respectivo Estado en el presupuesto de los ingresos ordinarios del Fisco Nacional; y
2. Una participación no menor del veinte por ciento (20%) de los demás ingresos
ordinarios del mismo Estado.
La distribución del situado entre los municipios de cada Estado se hará conforme a los
siguientes parámetros: treinta por ciento (30%) en partes iguales, cincuenta por ciento
(50%) en proporción a la población de los municipios y veinte por ciento (20%) en
proporción a su extensión territorial.
Artículo 135.- Son ingresos extraordinarios del Municipio:
1. El precio de venta de los ejidos y demás bienes inmuebles municipales salvo lo
establecido en el Artículo 184 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela.
2. Los bienes que se donaren o legaren a su favor;
3. Los aportes especiales que le acuerden organismos Nacionales o Estadales.
4. La participación en la contribución por mejoras, conforme a la ley de creación de
este tributo.
Artículo 136.- Los ingresos públicos extraordinarios sólo podrán destinarse a inversión
en obras o servicios que aseguren la recuperación de la inversión o el incremento
efectivo del patrimonio del Municipio. Excepcionalmente y sólo en caso de emergencia
por catástrofe o calamidad pública, podrán destinarse para atenderla; este destino
requerirá la autorización del Concejo.
Cuando dichos ingresos provengan de la enajenación de terrenos de origen ejidal y
demás bienes inmuebles del Municipio, deberán necesariamente ser invertidos en
bienes que produzcan nuevos ingresos al Municipio.
Los Concejales o Concejalas velarán por el cumplimiento de este artículo y
responderán solidariamente con el Alcalde o Alcaldesa por la contravención de esta
norma, a menos que demostraren el respectivo procedimiento para hacer efectiva la
responsabilidad administrativa y civil del Alcalde o Alcaldesa.
Artículo 137.- Las ordenanzas de creación de institutos autónomos municipales y
demás actos por los cuales se crearen mancomunidades, sociedades, fundaciones o
asociaciones civiles por cada Municipio o se decidiere su participación en ellas, deberán
especificar los ingresos de dichos entes, así como su naturaleza y origen, de
conformidad con lo dispuesto en la ley respectiva.
Artículo 138.- Los municipios y los entes creados por ellos no podrán realizar
operaciones de crédito público externo ni en moneda extranjera, ni garantizar
obligaciones de terceros. Para realizar operaciones de crédito público interno, los
municipios seguirán el procedimiento establecido en la ley nacional que rige la materia
Artículo 139.- Sin perjuicio del privilegio de cobro ejecutivo establecido en la ley, el
retardo en el cumplimiento de las obligaciones relativas a acreencias no tributarias de
los municipios genera intereses moratorios, calculado a la tasa mensual que fije la
ordenanza, conforme a la legislación nacional aplicable, y se causarán desde la fecha
que se haya hecho exigible el pago. En materia tributaria la tasa aplicable para el
cálculo de los intereses moratorios, tanto los que se causen a favor del Tesoro
Municipal como a favor de los contribuyentes por pagos indebidos de tributos , será
como máximo, la prevista en el Código Orgánico Tributario.
Artículo 140.- Las multas que aplique la administración de la Hacienda Municipal por
causa de infracciones, serán impuestas en virtud de resolución motivada que dicte el
funcionario autorizado para imponerla.
La autoridad que imponga las multas deberá participarlo a la oficina recaudadora de
ingresos municipales, que será la única autorizada para hacerlas efectivas.
Artículo 141.- Constituye el pasivo de la Hacienda Pública Municipal:
1. Las obligaciones legalmente contraídas derivadas de la ejecución del Presupuesto de
Gastos.
2. Las deudas válidamente contraídas provenientes de la ejecución de presupuestos
anteriores.
3. Las acreencias o derechos reconocidos administrativamente a favor de terceros de
conformidad con los procedimientos legales aplicables, y las obligaciones del Municipio
por sentencia definitivamente firme.
4. Los valores consignados por terceros, que el Municipio esté legalmente obligado a
entregar.
5. Cualquier otro que califique como tal, según la Ley
CAPÍTULO III
DE LOS EJIDOS
Artículo 142.- Los ejidos son bienes del dominio público destinados al desarrollo local.
Sólo podrán enajenarse para construcción de viviendas o para usos productivos, de
servicios y cualquier otro de interés público, de acuerdo con los planes de ordenación
urbanística y lo dispuesto en las respectivas ordenanzas municipales.
Son también ejidos los terrenos situados dentro del área urbana de las poblaciones del
Municipio que no tengan dueño, sin menoscabo de los legítimos derechos de terceros
válidamente constituidos. Igualmente se consideran ejidos las tierras baldías ubicadas
en el área urbana. Se exceptúan las tierras correspondientes a las comunidades y
pueblos indígenas.
Artículo 143.- En caso de que la construcción o uso convenido no se realice en el
plazo previsto en el respectivo contrato o sin haber solicitado la prórroga, con la
correspondiente justificación o cuando dicha prórroga fuere negada, el Alcalde o
Alcaldesa, previo el cumplimiento del debido proceso, con audiencia de la parte
afectada, con la autorización del Concejo, declarará resuelto el contrato, mediante
Resolución motivada, y procederá a rescatar el terreno sin pago de indemnización
alguna. Esta penalidad se considerará inserta en todos los contratos que celebre el
Municipio, mediante los cuales ceda el uso, el dominio o la propiedad sobre terrenos
ejidos o de origen ejidal o propios. En caso de que se trate de operaciones, cuyo
documento se haya autenticado o protocolizado bastará que el Alcalde o Alcaldesa
remita al Registro o Notaría correspondiente, la resolución respectiva, a los fines de
que se coloque la correspondiente nota de resolución de la venta o cualquiera otra
operación.
Artículo 144.- La compra de terrenos que resulte de la parcelación de ejidos, así
como de terrenos propios del Municipio, se hará a riesgo del comprador, quién no
podrá reclamar saneamiento por evicción.
Artículo 145.- Se declara de utilidad pública y de interés social la concesión y
ampliación de los ejidos municipales.
Se consideran de utilidad pública e interés social las tierras pertenecientes al Poder
Nacional o a los Estados que estén comprendidas dentro del perímetro urbano del
Municipio descrito en el plan de ordenación urbanística y que sean necesarias para la
expansión urbana.
Quedan excluidos de esta afectación ejidal los parques nacionales, los monumentos
naturales y demás áreas de especial importancia ecológica, así como las tierras que,
por su calidad, sean aptas para la agricultura.
Artículo 146.-El Concejo podrá adoptar, por ordenanza, una política general de no-
enajenación de sus terrenos de origen ejidal o propios, así como sujetar su
administración, uso y disposición a las restricciones que considere más convenientes al
desarrollo de las poblaciones y al interés del Municipio, debiendo reservar áreas
suficientes para fines de servicio público.
Artículo 147.- En el caso de la adquisición de tierras particulares para la concesión o
ampliación de ejidos, el pago podrá hacerse en bonos emitidos por la República,
redimibles en un plazo no mayor de veinte (20) años y al interés que se fije en cada
emisión, previa la autorización del Ejecutivo Nacional. Los bonos y sus intereses serán
pagados en el plazo convenido entre la República y el Municipio, con un tanto por
ciento de la proporción del situado municipal que corresponda al respectivo Municipio,
porcentaje que podrá ser retenido por el Ejecutivo Nacional.
CAPÍTULO IV
DE LA ACTUACIÓN DEL MUNICIPIO EN JUICIO
Artículo 148.- Los funcionarios judiciales están obligados a citar al Síndico Procurador
o Síndica Procuradora Municipal o al funcionario o funcionaria en el caso de demandas
contra el Municipio, o al funcionario que ejerza la representación judicial de la
correspondiente entidad municipal y notificar al Alcalde o Alcaldesa de toda demanda o
solicitud de cualquier naturaleza que directa o indirectamente obre contra los intereses
patrimoniales del municipio o la correspondiente entidad municipal.
Dicha citación se hará por oficio y se acompañará de copias certificadas de la demanda
y todos sus anexos. Mientras no conste en el expediente la citación realizada con las
formalidades aquí exigidas, no se considerará practicada. La falta de citación o la
citación practicada sin las formalidades aquí previstas, será causal de nulidad y en
consecuencia se repondrá la causa. Una vez practicada la citación el Síndico o Síndica
o el funcionario competente de la respectiva entidad municipal tendrá un termino de
cuarenta y cinco (45) días continuos para dar contestación a la demanda.
Los funcionarios judiciales están obligados a notificar al Síndico Procurador o Síndica
Procuradora Municipal o al funcionario que ejerza la representación judicial de la
correspondiente entidad municipal, de toda sentencia definitiva o interlocutoria.
Artículo 149.- Cuando la autoridad municipal competente, debidamente citada, no
compareciere al acto de contestación a la demanda o no diere contestación a las
cuestiones previas que le hayan sido opuestas, se las tendrá como contradichas en
todas sus partes, sin perjuicio de la responsabilidad que dicha omisión comporte para
el funcionario encargado de la representación judicial de los intereses patrimoniales de
la entidad.
Artículo 150.- El Síndico Procurador o Síndica Procuradora Municipal o el apoderado
judicial de la entidad municipal, no podrá convenir, desistir, transigir ni comprometer
en árbitros sin la previa autorización dada por escrito por el Alcalde o Alcaldesa, o por
la autoridad competente de la respectiva entidad municipal. Las ordenanzas
respectivas podrán requerir la previa autorización del Concejo al Alcalde o Alcaldesa,
cuando el monto comprometido supere el equivalente de las unidades tributaria
señaladas en ellas.
Artículo 151.- Los bienes, rentas, derechos o acciones pertenecientes al Municipio o,
a una entidad municipal, no estarán sujetos a medidas preventivas; tampoco estarán
sometidos a medidas ejecutivas, salvo en los casos previstos en esta Ley.
Artículo 152.- El Municipio o las entidades municipales, podrán ser condenadas en
costas. Para que proceda la condenatoria en costas, será necesario que resulten
totalmente vencidas en juicio por sentencia definitivamente firme.
El monto de la condenatoria en costas, cuando proceda, no podrá exceder del diez por
ciento (10%) del valor de la demanda. En todo caso, el Juez o Jueza, podrá eximir de
costas al Municipio o a las entidades municipales cuando éstas hayan tenido motivos
racionales para litigar.
Artículo 153.- Cuando el Municipio o una entidad municipal resultaren condenados
por sentencia definitivamente firme, el Tribunal, a petición de parte interesada,
ordenará su ejecución. A estos fines, notificará al Alcalde o Alcaldesa o a la autoridad
ejecutiva de la entidad municipal, que debe dar cumplimiento voluntario a la sentencia
dentro de los diez días siguientes a la notificación. Dentro de ese lapso, el Municipio o
la entidad municipal, según el caso, podrá proponer al ejecutante una forma de
cumplir con la sentencia. Si esa forma fuere rechazada, las partes podrán suspender el
lapso fijado para la ejecución voluntaria por el tiempo que se convenga o realizar actos
de composición voluntaria. Transcurrido el lapso para la ejecución voluntaria sin que la
sentencia se haya cumplido, se procederá a la ejecución forzosa.
Artículo 154.- Vencido el lapso para la ejecución voluntaria de la sentencia, el
Tribunal determinará la forma y oportunidad de dar cumplimiento a lo ordenado por la
sentencia, según los procedimientos siguientes:
1. Cuando la condena hubiere recaído sobre cantidad líquida de dinero, el Tribunal, a
petición de parte, ordenará a la máxima autoridad administrativa del Municipio o de la
entidad municipal para que incluya el monto a pagar en el presupuesto del año
próximo y siguientes, a menos que exista provisión de fondos en el presupuesto
vigente. Cuando la orden del Tribunal no fuere cumplida o la partida prevista no fuere
ejecutada, el Tribunal, a petición de parte, ejecutará la sentencia conforme al
procedimiento previsto en el Código de Procedimiento Civil para la ejecución de
sentencias de condena sobre cantidades líquidas de dinero. El monto anual de dicha
partida no excederá del cinco por ciento (5%) de los ingresos ordinarios del
presupuesto del Municipio o Distrito.
2. Cuando en la sentencia se hubiere ordenado la entrega de algún bien el tribunal
llevará a efecto la entrega. Si tales bienes estuvieren afectados al uso público, a un
servicio público o a una actividad de utilidad pública, el Tribunal, a petición de parte,
acordará que el precio sea fijado mediante peritos en la forma establecida por la Ley
de Expropiación por Causa de Utilidad Pública o Social. Fijado el precio, se procederá
como si se tratare del pago de cantidades de dinero.
3. Cuando en la sentencia se hubiere condenado al cumplimiento de una obligación de
hacer, el Tribunal, a petición de parte, fijará un lapso de treinta (30) días consecutivos
para que el Municipio o la entidad municipal correspondiente proceda a cumplir con la
obligación. Si ella no fuere cumplida, el Tribunal, a petición de parte, procederá él
mismo a ejecutar la sentencia. A estos fines, se trasladará a la oficina municipal
correspondiente y requerirá al ente municipal para que cumpla con la obligación. Si a
pesar de este requerimiento la obligación no fuere cumplida, entonces el Tribunal
sustituirá al ente municipal y hará que la obligación de hacer sea cumplida. Para el
caso de que, por la naturaleza de la obligación, no fuere posible que el Tribunal la
ejecutare en la misma forma en que fue contraída, entonces se estimará su valor y se
procederá a su ejecución como si fuere una cantidad de dinero.
4. Cuando en la sentencia se hubiere condenado a una obligación de no hacer, el
Tribunal, a petición de parte, ordenará el resarcimiento del daño que se derive del
incumplimiento de la obligación de no hacer.
CAPÍTULO V
DE LA POTESTAD TRIBUTARIA DEL MUNICIPIO
SECCIÓN I
DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 155. El Municipio podrá crear, modificar o suprimir los tributos que le
corresponden por disposición Constitucional o que les sean asignados por ley nacional
o estadal de conformidad con la Ordenanza. Asimismo, los Municipios podránestablecer
los supuestos de exención, exoneración o rebajas de esos tributos.
Artículo 156.- En la creación de sus tributos los municipios actuarán conforme a lo
establecido en los Artículos 316 y 317 de la Constitución. En consecuencia, los tributos
municipales no podrán tener efecto confiscatorio, ni permitir la múltiple imposición
interjurisdiccional o convertirse en obstáculo para el normal desarrollo de las
actividades económicas.
Asimismo, los municipios ejercerán su poder tributario de conformidad con los
principios, parámetros y limitaciones que se prevean en esta ley, sin perjuicio de otras
normas de armonización que con esos fines, dicte la Asamblea Nacional.
Artículo 157.- Los municipios podrán celebrar Acuerdos entre ellos y con otras
entidades político-territoriales con el fin de propiciar la coordinación y armonización
tributaria y evitar la doble o múltiple tributación interjurisdiccional. Dichos convenios
entrarán en vigencia en la fecha de su Publicación en la respectiva Gaceta Municipal o
en la fecha posterior que se indique.
Artículo 158.-No podrá cobrarse impuesto, tasa, ni contribución municipal alguna que
no esté establecido en ordenanza. Las ordenanzas que regulen los tributos municipales
deberán contener:
1. La determinación del hecho imponible y de los sujetos pasivos.
2. La base imponible, los tipos o alícuotas de gravamen o las cuotas exigibles, así
como los demás elementos que determinan la cuantía de la deuda tributaria.
3. Los plazos y forma de la declaración de ingresos o del hecho imponible.
4. El régimen de infracciones y sanciones. Las multas por infracciones tributarias no
podrán exceder en cuantía a aquéllas que contemple el Código Orgánico Tributario.
5. Las fechas de su aprobación y el comienzo de su vigencia.
6. Las demás particularidades que señalen las leyes nacionales y estadales que
transfieran tributos.
Los impuestos, tasas y contribuciones especiales no podrán tener como base imponible
el monto a pagar por concepto de otro tributo
Artículo 159.- Los Municipios podrán crear tasas con ocasión de la utilización
privativa de bienes de su dominio público, así como por servicios públicos o actividades
de su competencia, cuando se presente cualquiera de las circunstancias siguientes:
1. Que sean de solicitud o recepción obligatoria por los usuarios.
2. Que no puedan realizarse por el sector privado, por requerir intervención o ejercicio
de autoridad o por estar reservados legalmente al sector público.
La recaudación estimada por concepto de tasas guardará proporción con el costo del
servicio o con el valor de la utilización del bien del dominio público objeto del uso
privativo.
Artículo 160.- Los municipios podrán celebrar contratos de estabilidad tributaria con
contribuyentes o categoría de contribuyentes a fin de asegurar la continuidad en el
régimen relativo a sus tributos, en lo concerniente a alícuotas, criterios para distribuir
base imponible cuando sean varias las jurisdicciones en las cuales un mismo
contribuyente desarrolle un proceso económico único u otros elementos determinativos
del tributo. El Alcalde o Alcaldesa podrá celebrar dichos convenios y entrarán en vigor
previa autorización del Concejo. La duración de tales contratos será de cuatro (4) años
como plazo máximo; al término del mismo, el Alcalde o Alcaldesa podrá otorgar una
prórroga, como máximo, hasta por el mismo plazo. Estos contratos no podrán ser
celebrados, ni prologados en el último año de la gestión municipal.
Artículo 161.- Los municipios en sus contrataciones no podrán obligarse a renunciar
al cobro de sus tributos, así como tampoco podrán comprometerse contractualmente a
obtener la liberación del pago de impuestos nacionales o estadales. Tales
estipulaciones serán nulas de pleno derecho y asimIsmo lo serán las exenciones o
exoneraciones de tributos municipales concedidas por el Poder Nacional o los Estados.
Artículo 162.- El régimen de prescripción de las deudas tributarias se regirá por lo
dispuesto en el Código Orgánico Tributario. Dicho Código aplicará de manera supletoria
a la materia tributaria municipal que no esté expresamente regulada en esta ley o en
las ordenanzas.
Artículo 163.- El Municipio sólo podrá acordar exenciones, exoneraciones o rebajas de
impuestos o contribuciones municipales especiales, en los casos y con las formalidades
previstas en las ordenanzas. La ordenanza que autorice al Alcalde o Alcaldesa para
conceder exoneraciones especificará los tributos que comprende, los presupuestos
necesarios para que proceda, las condiciones a las cuales está sometido el beneficio y
el plazo máximo de duración de aquél. En todos los casos, el plazo máximo de
duración de las exoneraciones o rebajas será de cuatro (4) años; vencido el término de
la exoneración o rebaja, el Alcalde o Alcaldesa podrá renovarla hasta por el plazo
máximo fijado en la ordenanza o, en su defecto, el previsto como máximo en este
artículo.
SECCIÓN II
DE LA ADMINISTRACIÓN TRIBUTARIA MUNICIPAL
Artículo 164.- Las relaciones fiscales entre la República, los Estados y los Municipios
estarán regidas por los principios de integridad territorial, autonomía, coordinación,
cooperación, solidaridad interterritorial y subsidiariedad. En consecuencia, en el
ejercicio de sus competencias propias, los municipios deberán ponderar la totalidad de
los intereses públicos implicados.
Artículo 165.- En atención al principio de colaboración entre los distintos niveles de la
Administración Pública y en relación de reciprocidad que permita la efectividad de la
coordinación administrativa, los municipios deberán:
1. Facilitar a las otras Administraciones información sobre antecedentes, datos o
informaciones que obren en su poder y resulten relevantes para el adecuado desarrollo
de los cometidos de aquéllas.
2. Prestar la cooperación y asistencia activa que las otras Administraciones pudieran
requerir para el eficaz cumplimiento de sus tareas.
3. Suministrar la información estadística relacionada con la recaudación de sus
ingresos, padrones de contribuyentes y otras de similar naturaleza, a los entes
estadales o nacionales con competencias en materia de planificación y estadísticas, así
como a las Administraciones Tributarias que lo soliciten, para lo cual podrán establecer
un mecanismo de intercomunicación técnica.
Lo previsto en este artículo se entiende sin perjuicio del régimen legal al que están
sometidos el uso y la cesión de la información tributaria.
Artículo 166.- La Administración Tributaria del Municipio podrá elaborar y ejecutar
planes de inspección conjunta o coordinada con las demás Administraciones Tributarias
Municipal, Estadal o Nacional.
Artículo 167.- Todas las autoridades civiles, políticas, administrativas, militares y
fiscales de la República, de los Estados y del Distrito Capital, los Registradores,
Notarios y Jueces, así como los particulares, están obligados a prestar su concurso
para la inspección, fiscalización, recaudación, administración y resguardo de los
ingresos municipales y a denunciar los hechos de que tuviere conocimiento que
pudiesen constituir ilícito tributario contra la Hacienda Municipal.
Artículo 168.- Es competencia de los municipios la fiscalización, gestión y recaudación
de sus tributos propios, sin perjuicio de las delegaciones que puedan otorgar a favor de
otras entidades locales, de los Estados o de la Nación.
SECCIÓN III
INGRESOS TRIBUTARIOS DE LOS MUNICIPIOS
SUB-SECCIÓN CUARTA
CONTRIBUCIONES ESPECIALES
Artículo 174.- Los municipios podrán crear las siguientes contribuciones especiales:
a. Sobre plusvalía de propiedades inmuebles causada por cambios de uso o de
intensidad en el aprovechamiento.
b. Por mejoras.
Estas contribuciones podrán ser creadas mediante ordenanza cuando sea acordado un
cambio de uso o de intensidad de aprovechamiento o la realización de la obra o
servicio que origine la mejora.
Artículo 175.- La contribución especial sobre plusvalía de las propiedades inmuebles
originada por cambios de uso o de intensidad en el aprovechamiento, se causará por el
incremento en el valor de la propiedad como consecuencia de los cambios de uso o de
intensidad de aprovechamiento previstos en los planes de ordenación urbanística con
que esa propiedad resulte beneficiada. Esta contribución estará destinada a la
realización de las obras o prestación de los servicios urbanos que se determinen en la
Ordenanza.
Artículo 176.- La contribución especial sobre plusvalía de las propiedades inmuebles
causada por cambios de uso o de intensidad en el aprovechamiento, sólo podrá crearse
cuando el aumento del valor de las propiedades inmuebles sea igual o superior al 25%
de su valor antes del cambio de uso o de intensidad de aprovechamiento. A los fines
de la determinación de la contribución, se presumirá que todo cambio de uso o de
intensidad de aprovechamiento producirá en los bienes afectados un aumento de valor
de al menos un 25%. Esta presunción podrá ser desvirtuada en el curso de los
procedimientos que se establezcan para la determinación del monto de la contribución
por los sujetos afectados.
Artículo 177.-La contribución especial sobre plusvalía de las propiedades inmuebles por
cambio de uso o de intensidad en el aprovechamiento no podrá exceder de un 15% del
monto total de la plusvalía que experimente cada inmueble. La ordenanza respectiva
podrá disponer que esta contribución sea exigida en forma fraccionada, por una sola
vez dentro del plazo máximo de pago de cinco (5) años y las cuotas correspondientes
podrán devengar un interés máximo equivalente a la tasa fijada por el Banco Central
de Venezuela para el cálculo de las prestaciones sociales.
Artículo 178.- La contribución especial por mejoras se causará por la ejecución de
obras públicas o prestación de un servicio público que sea de evidente interés para la
comunidad, siempre que, como consecuencia de esas obras o servicios, resulten
especialmente beneficiadas determinadas personas. El importe de esta contribución
será determinado por el Concejo en función del coste presupuestado de las obras o de
los servicios pero no excederá, en ningún caso, del cincuenta por ciento (50%) del
costo de las obras o servicios. El porcentaje de la base imponible que corresponderá a
cada beneficiario de la obra o servicio y las demás condiciones de procedencia se
regirán por lo previsto en las respectivas ordenanzas.
Artículo 179.- A los efectos del artículo anterior, podrán ser considerados obras y
servicio financiados por los municipios:
a. Los que ejecuten total o parcialmente los municipios dentro del ámbito de sus
competencias para cumplir los fines que les estén atribuidos, a excepción de los que
realicen a título de propietarios de sus bienes patrimoniales.
b. Los que realicen los municipios por haberles sido atribuidos o delegados por el Poder
Nacional o Estadal.
c. Los que realicen otras entidades públicas o privadas concesionarios, con
aportaciones económicas del Municipio.
Artículo 180.- Las cantidades recaudadas por la contribución especial por mejoras sólo
podrán destinarse a recuperar los gastos de la obra o servicio por cuya razón se
hubiesen exigido.
Artículo 181.- Son sujetos pasivos de las contribuciones especiales previstas en esta
Sub-sección, las personas naturales o jurídicas propietarias de los inmuebles que
resulten especialmente beneficiados por los cambios de uso o de intensidad de
aprovechamiento o por la realización de las obras o el establecimiento o ampliación de
los servicios municipales que originan la obligación de contribuir.
Artículo 182.- El costo de la obra o servicio estará integrado, por los siguientes
conceptos:
a. El costo de los proyectos, estudios planes y programas técnicos.
b. El importe de las obras o de los trabajos de establecimiento o ampliación de los
servicios.
c. El precio de los terrenos que hubieren de ocupar permanentemente las obras o
servicios salvo que se trate de bienes de uso público o de terrenos cedidos
gratuitamente al Municipio.
d. Las indemnizaciones procedentes por expropiación o demolición de construcciones,
obras, plantaciones o instalaciones, así como las que correspondan a los arrendatarios
de los bienes que hayan de ser demolidos o desocupados.
Artículo 183.- La base imponible de las contribuciones por mejoras se repartirá entre
los sujetos pasivos beneficiados, para lo cual se tendrán en cuenta, entre otros, la
clase y naturaleza de las obras y servicios, la ubicación de los inmuebles, los metros
lineales de fachada, sus superficies, el volumen edificable de los mismos y su precio
corriente en el mercado. El monto de la base imponible será determinado por el
porcentaje en la correspondiente ordenanza.
Artículo 184.- Cuando las obras y servicios de la competencia municipal sean
realizados o prestados por un Municipio con la colaboración económica de otra entidad,
y siempre que puedan ser impuestas contribuciones especiales con arreglo a lo
dispuesto en esta ley, la gestión y recaudación de las mismas se hará por la entidad
que convencionalmente tome a su cargo la dirección de las obras o el establecimiento
o ampliación de los servicios. En cualquier caso, las entidades involucradas deberán
uniformar criterios y efectuar una sola determinación al contribuyente.
Artículo 185.- Las ordenanzas de creación de las respectivas contribuciones
especiales contendrán, además de los elementos constitutivos del tributo, un
procedimiento público que garantice la adecuada participación de los potenciales
contribuyentes en la determinación de la obligación tributaria el cual incluirá la previa
consulta no vinculante con los potenciales contribuyentes para permitirles formular
observaciones generales acerca de la realización de la obra o el establecimiento o
ampliación de un servicio que deba costearse mediante contribuciones especiales. La
consulta contendrá la determinación del costo previsto de las obras y servicios, la
cantidad a repartir entre los beneficiarios y los criterios de reparto y será expuesta al
público por un período prudencial para la recepción de las observaciones y comentarios
que se formulen, dentro de las condiciones que establecerá la Ordenanza.
Artículo 186.- Las contribuciones especiales por mejoras sólo podrán ser exigidas por
el Municipio una vez cada diez (10) años respecto de los mismos inmuebles.
Artículo 187.- El pago que se haga por concepto de contribución por mejoras o
contribución sobre plusvalía de propiedades por cambios en el uso o en la intensidad
del aprovechamiento aceptará como rebaja el pago que corresponda efectuar en el
mismo año por concepto de Impuesto sobre inmuebles urbanos.
SUB-SECCIÓN QUINTA
IMPUESTO SOBRE VEHÍCULOS
Artículo 188.- El Impuesto sobre vehículos grava la propiedad de vehículos de
tracción mecánica, cualesquiera sea su clase o categoría y sean propiedad de una
persona natural residente o una persona jurídica domiciliada en el Municipio
respectivo.
Artículo 189.- A los fines de este impuesto, se entiende por:
Sujeto residente: quien, siendo persona natural propietario o asimilado, tenga en el
Municipio respectivo su vivienda principal. Se presumirá que este domicilio será el
declarado para la inscripción en el Registro Automotor Permanente.
Sujeto domiciliado: quien, siendo persona jurídica propietaria o asimilada, ubique en el
Municipio de que se trate un establecimiento permanente al cual destine el uso del
referido vehículo.
Se considerarán domiciliados en el municipios los concesiones de rutas otorgadas por
el municipios respectivo para la prestación del servicio del transporte.
Artículo 190.- A los fines del gravamen previsto en esta Ley, podrán ser considerados
contribuyentes asimilados a los propietarios, las siguientes personas:
1. En los casos de ventas con reserva de dominio, el comprador, aún cuando la
titularidad del dominio subsista en el vendedor.
2. En los casos de opciones de compra, quien tenga la opción de comprar.
3. En los casos de arrendamientos financieros, el arrendatario.
Artículo 191.- Los Jueces, Notarios y Registradores cuyas oficinas se encuentren
ubicadas en jurisdicción del Municipio correspondiente, colaborarán con la
Administración Tributaria Municipal para el control del cobro del tributo previsto en
esta Ordenanza. A tal fin, cuando deban presenciar el otorgamiento de documentos de
venta o arrendamiento financiero de vehículos que sean propiedad de residentes o
domiciliados en ese Municipio, deberán exigir comprobante de pago del impuesto
previsto en esta sub-sección, sin perjuicio de la colaboración que pueda requerirse a
oficinas notariales o regístrales ubicadas en jurisdicciones distintas.
SUB-SECCIÓN SEXTA EL IMPUESTO SOBRE ESPECTÁCULOS PÚBLICOS
SUB-SECCIÓN DÉCIMA
TÍTULO VI
CAPÍTULO I
DE LOS PRINCIPIOS DE LA PARTICIPACIÓN
TÍTULO VII