El Pueblo Como Formacion Natural
El Pueblo Como Formacion Natural
El Pueblo Como Formacion Natural
Al hablar de las condiciones de la actividad estatal que se relacionan con el pueblo, queremos referirnos a todas aquellas denominaciones fsico espiritual del grupo humano que actualiza el estado, en cuanto tales determinaciones presenten importancia destacada para la existencia de la unidad estatal. La extraordinaria variedad de acepciones en que es usada la voz pueblo da a lugar a tantas y tan peligrosas confusiones y errores que se hace preciso , previamente, investigar los diverso sentidos en la que la palabra se emplea, superndolas ntidamente. Cumple hacer, en primer lugar, una distincin fundamental entre la consideracin del pueblo como formacin natural y como formacin cultural. En el primer caso se entiende por pueblo solo lo que se tiene de natural, ya en cuanto poblacin, ya en cuanto raza. Pero por su parte, la consideracin del pueblo como formacin de cultura se supone un concepto univoco y requiere un anlisis preciso. La significacin naturalista que se da al concepto de pueblo corresponde a una actitud espiritual de nuestro tiempo que, en reaccin contra el espiritualismo unilateral de la ilustracin, sangre contra espritu. Una corriente muy popular de la antropologa poltica pretende relativizar el estado reducindolo a la raza y referir la conducta poltica a la herencia racial relativamente invariable, es decir, al modo al ser corporal heredado. El influjo que llego a alcanzar sobre la masa, en la post guerra anterior, la teora poltica de la raza- aunque ciertamente solo en Alemania y, en grado mucho ms reducido, en los Estados Unidos, se debe a la creencia de la ciencia ha conseguido por fin descubrir el motor autnomo del acaecer poltico y , en general, cultural determinndolo con la seguridad de una verdad de la ciencia de la naturaleza. Segn tal creencia, supuesta una raza fsica constante, no solo se da en ella, a la vez, en reciproca dependencia y correspondencia , una raza anmico espiritual igualmente constante sino, que adems, ello es cosa que se puede conocer por la razn y por consiguiente es polticamente utilizable . Las dificultades casi insuperables con que tropieza la antropologa social, tanto en lo poltico como en otros ordenes, empiezan ya con el concepto de raza. no se salva este obstculo distinguiendo un concepto primario de raza, o raza natural, y otros secundario o cultural. La raza virtual vendra a ser una comunidad de origen cuyas esenciales caractersticas serian hereditarias. Es cosa que no puede estimarse cientficamente determinada de manera definitiva si existen tales razas naturales, es decir, si los caracteres transmitidos por herencia, y cules de ellos son determinados por el germen y no por el medio; si , a la larga y en tal caso en q lapsus, el paisaje, el clima, la alimentacin , la posicin social, etc; desempean el papel decisivo en la formacin de la raza secundaria, como aceptan siguiendo a Lamarck, Ratzelr y Kruse y muchos otros . O si este papel corresponde a la seleccin natural que produce la supervivencia de los mejores, al modo como, siguiendo a Darwin, piensan, por ejemplo, Fisher y Lenz y los partidarios de la doctrina vulgar de la raza: Es, en todo caso, seguro que el modo de vida social da lugar tambin, de un modo constante a una seleccin inconsciente por otra parte, las leyes de la herencia descubiertas en 1901 por el agustino Gregor Mendel demuestran que ciertos caracteres corporales son, en su raz,
independientes del medio, por mucho tiempo. No hay duda, empero que pueden nacer nuevas razas mediante repetidos matrimonias mixtos y la gradual consolidacin de las mezclas de sangre. En este postulado, as como en la teora de las mutaciones, se basa la doctrina dominante de la unidad de origen del gnero humano. La clasificacin de las razas es algo muy vacilante. Hay investigadores que solo distinguen tres razas, otros treinta y dos y hay algunos que sealan sesenta y an ms. En general se clasifican las razas, segn sus zonas principales de dispersin en las diversas partes de la tierra por regiones, por regiones. Dentro de la regin Europea distinguen Eugen Fisher las razas nrdicas, occidental (mediterrnea), dinarica y alpina (oriental), sin que con eso el panorama de las razas en Europa quede agotado ni mucho menos como caracteres raciales determinado por la herencia se consideran la forma y el color del pelo y los ojos, la forma del rostro, el color de la piel y los ndices de estatura y craneano. La importancia de cada uno de estos caracteres para la clasificacin de la raza es tambin muy discutida hasta hoy no ce ha obtenido resultado alguna de la investigacin de los grupos sanguneos que sea aplicable a la clasificacin de las razas. Como serios investigadores afirman, en antropologa fsica todo es , todava, inestable. En vista de llo no es extrao que Plotz pretenda la antropologa social de la teora de la raza prescindiendo por completo de la cuestin de las transmisin por herencia de las diferencias humanas . El concepto de razas segn las ciencias solo puede tener, sin embargo, la aplicacin para la antropologa poltica si se se admite una correspondencia necesaria y cognoscible entre la infraestructura fsica y la superestructura psquico poltica es decir que cada raza fsica corresponde un alma racial especial, con ciertos y determinado modos de reaccin en el aspecto estatal o contenidos mentales especficos en lo poltico. No se discute pues la cuestione si son transmisibles por herencia caracteres familiares o unidades hereditarias individuales dentro de una raza. El responder afirmativamente a tal cuestin, como cosa patente, nada tiene que ver con el problema de la transmisin hereditaria de un carcter racial determinado lo que supondra negar el hecho dentro de una misma raza fsica se transmite por herencia predisposiciones individuales de carcter espiritual diferente o incluso opuestas, en proporciones casi iguales. La valoracin de la razas segn sus cualidades culturales tanto polticas como de otra ndole, no ha variado desde los tempos de Gobineau, aunque hayan cambiado el nmero y los nombres de aquellas as como el material auxiliar antropolgico. La raza hoy llamada nrdica segn Gunther, es el de ms juicio, el ms veraz y activo, el hombre verdaderamente libre en que se mueve, ante todo, por el sentido de la justicia. Tiende al aislamiento de la estirpe en la vida estatal: en su ms alto desenvolvimiento la raza nrdica solo ella , es la que ha dado y da actualmente los grandes hombre de estado. En algunos casos debido casi siempre a contaminaciones casi siempre de la raza oriental las esencias nrdicas pueden degenerar en una gris imitacin de lo extranjero. El hombre nrdico se haya singularmente dotado para emprender grandes acciones y conquistas para la guerra, el arte de gobernar, la formacin de estados, as mismo, para la reflexin filosfica y cientfica y para la creacin artstica. Al modo como las altas capas sociales del pueblo son las que tienen mayor cantidad de sangre nrdica as tambin los pueblos conductores de la tierra son aquellos los que tienen mayor dosis de ingrediente nrdico: Segn Otto Hauser, los hombres de
estado y los caudillos de todos los tiempos y pueblos son de genero puramente nrdico, incluso los verdaderos jefes de pueblos negros que muy pocos viajeros pueden ver ya que, de ordinario, aparecen ate ellos como jefes solo son menos sustitutivos o reemplazantes sera mucho ms claros q su pueblo. Por su religin el hombre nrdico serio protestante la raza dinarica, que para Gunther, se haya en segundo lugar entre las razas Europeas por sus cualidades espirituales poseera fortaleza, rectitud, espritu Guerrero y laboriosidad; as como una cierta capacidad para el comercio. Como raza hermana de la del Asia anterior (armenoide), es racialmente semejante a la juda; sus cualidades psquicas se diferenciaran harto fuertemente de las de la raza hermana, afiracion que contradicen las supuesta conexin entre cuerpo y el alma de una raza. En tercer lugar corresponde a la raza occidental la cual sera apasionada e inquieta pero carecera de una fuerza espiritual creadora sobresaliente. Aparte de esto el hombre occidental estara obsesivamente por el sexo, aunque sin la debida profundidad, y de aqu nacera su inclinacin a la crueldad y la pereza. El espritu del protestantismo le sera extrao. Su honor consistira ms en valer que en ser; y l lo poltica es verstil y amigo de los cambios. Pero la peor calificacin se la lleva la Raza alpina u oriental que se estima descendiente de mongoles asiticos. Esta raza se extiendo hoy por la Alemania central y meridional, especialmente por Franconia, Turingia, Baden. Wurttemberg, Alsacia- Lorena. Suiza, Austria y las regiones de este alemn. Respecto a la proporcin en que entra cada raza en la composicin de los diferentes pueblos es cosa sobre la que varan considerablemente las apreciaciones siendo todas ms o menos arbitrarias. La parte de sangre nrdica que entra en la composicin de pueblo alemn varan, por ejemplo, en Gunther : en la 4 asciende el 60% y el 5 es solo 50% el elemento racial oriental seria de un 20% el dinarico seria de un 15% y el occidental de un 2%. El teorico norteamericano de la raza, Grant, a quien por lo dems se refiere con complacencia Gunther en otros caso, estima probablemente para rebajar el pueblo alemn- que los alemanes tienes solo un 10% de sangre nrdica contra un 90 % de sangre oriental .
LA NACION: ETIMOLOGIA Y CONCEPTO La voz Nacin tiene su raz en el verbo nascor (nacer), de donde viene nato, e indica un origen comn o una relacin de procedencia, como en las expresiones espaolas ciego de nacin, griego de nacin, etc. Se atribuye a Madame stael haber sido la primera que empleo el vocablo, con la acepcin hoy corriente, en su obra de l Allemagne(1810);mas es lo cierto que ya en los textos de la poca revolucionaria francesa aparece usado en sentido idntico, y que entre nosotros la constitucin de Cdiz lo utiliza reiteradamente como anlogo significado. Son muchas, muchsimas las definiciones que de la nacin se han dado, nos limitaremos a trascribir dos: la de Mancini que pasa por ser la primera y la de Hauriou, muy interesante Mancini, en el discurso con que inauguro en el ao en el ao 1891 sus selecciones de Derecho internacional de las universidades de Turn, la defini as: sociedad natural de hombres, con unidad de territorio, origen, costumbres e idioma formada por la comunidad de vida y de conciencia social. Haurio dice : Agrupacin de formaciones tnicas primarias en q la convivencia prolongada en un mismo pas, unida a ciertas comunidades de raza, lengua, religin y recuerdos histricos han engendrado una comunin espiritual, base de una formacin tnica superior. Ms completa esta ltima tuvo, sin embargo inmensa resonancia la primera, por el tono poltico que la alienta, no en balde era un arma en manos de la italianita aun sojuzgada pero ya amenazadora y se apresur Austria a pedir de que se prohibiera el curso, como a su vez el rey de Npoles confisco los bienes del autor. La dificultad de precisar un concepto de nacin que permita reconocer cuando exista esta, obedece a la misma naturaleza de fenmeno, que surge en el rpido e incesante fluir de la historia, tiene mucho de subjetivo, responde ms bien a un determinado contenido de conciencia y lleva en si un principio dinmico, Tiene razn Jellinek al hacer notar que se trata de una manifestacin moderna con la tesis del derecho natural, por ejemplo ya que esta escuela parta del individuo humano abstracto, y que, adems, exiga una contraposicin con otras grupos semejantes , por contraste por los cuales es como mejor se afirma. As, era imposible para los Helenos que se fuera de su crculo solo vean barbaros, y an lo es hoy para nosotros con respecto a pueblos salvajes o razas de color. Pero no basta con eso; la mera comunin espiritual, sin otro habitamiento no es suficiente para cualificar la nacin. De all las tentativas hechas para averiguar cul sea el rasgo distintivo, el sntoma patognomnico de lo nacional. Indicaremos las principales.
INFLUENCIA DE LA POBLACION SOBRE EL ESTADO En la poblacin, concepto genrico, entra la nacin como especie; pero la tcnica recibida suele seguir hablando de aquella al platera estos problemas. Acaso porque en la poblacin entran elementos nacionales y extranjeros por igual; y aunque se trata de materia en que dominan consideraciones estadsticas, sanitarias, etc. Y falte el sentido de pueblo cultural en que la nacin
consiste, es obligado abordar estas cuestiones con referencia al conjunto de elemento humano que forma el estado, incluso porque esa conjuncin de indgenas y exgenas es ya por si, un problema importante. La primera manifestacin que interesa es la del volumen de la poblacin, que determina la clasificacin de Estados e pequeos, medianos, o grandes, segn que tengan, respectivamente, menos de 10 millones de almas, menos de 100 millones o ms de esta cifra, de acuerdo con la tesis de Ratzel(y en conexin tambin con el territorio, como es natural). Esta poblacin absoluta, que es la decisiva a tales efectos, sirven de apoyo a la potencia Estatal; sin que ello implique desconocer el valor de la poblacin relativa que repercute en otras manifestaciones (de riquezas, explotacin nacional del suelo, etc.) , y debe orientar una sana poltica de la poblacin (emigracin, inmigracin, colonizacin interior, etc.,). A nuestro propsito pueden darse o las indicaciones que sobre todo la forma poltica instituciones del estado hicimos a tratar del territorio. No esta dems, sin embargo, afirmar que no hay cantidad mnima, fsica y segura, que debe estimarse como indispensable para la constitucin de un estado. Y que , frente al criterio macroestatista han sentido amor frente a las pequeas comunidades polticas autores eminentes: as, Aristteles, que, seducido por el ambiente griego, estimaba como ideal un estado con el nmero de habitantes suficientes para la buena vida de la colectividad; as Rousseau, que tomaba como tipo el Estado con 10000 ciudadanos para que no disminuyera la libertad a agrandarse el mbito; as, finalmente, Pi y Margall, que defenda entre nosotros con cierta ternura, las ventajas de los pueblos pequeos, sobre todo si estn regidos democrticamente. Una alusin por ltimo, al tema de lo rural y lo urbano. La manifestacin ms interesante del fenmeno la ofrecen, de una parte, las grandes ciudades modernas creadoras de un nuevo tipo de vida, y baluartes de la democracia.
Relacin jurdica entre el estado y la poblacin como conjunto A tres pueden reducirse en sntesis las teoras sostenidas, que guardan cierto paralelismo con las expuestas, respecto al territorio. Para unos, la poblacin es objeto de imperium estatal: pueblo y estado se contraponen entonces como factores distintos, que quedando cada uno fuera del otro, y recibiendo la poblacin los mandatos, las ordenes en que se traducen el poder de dominacin del estado ( a este grupo perecen las teoras patrimonialistas, las del absolutismo y aun ciertas posiciones imperialistas: citemos por va de ejemplo a Laband) . Para otros, el pueblo es sujeto del Estado, que crean a este y funda sus instituciones para sus propios fines y servicios (cabria recordar al Locke y a Altusio): finalmente, para Kelsen, que no puede ver en el pueblo una masa compacta de naturaleza homognea, y solamente concibe como unidad en sentido normativo. La poblacin constituya la esfera personal de validez de las normas esfera que sita al hombre al hombre de posicin de pasividad, actividad y negatividad segn que obedezca el precepto, lo cree o no se encuentren en relacin ninguna con l ; doctrina con el cual coincide en cierto modo
Duguit, al considerar la Nacin como lmite de la potencia estatal. Y reputarla medio sociolgico, en que se produce el fenmeno social que llamamos Estado. En realidad la Poblacin acta como elemento integrante y constitutivo del Estado y se manifiesta como titular del poder, constituyente cuando acta como sujeto, aunque se descomponga en sujetos aislados obligados a obediencia y ofrezca cierto carcter de objeto. Y de all Las manifestaciones activa y pasiva que presenta la poblacin como conjunto, y que se traduce en la elaboracin de la norma y en su cumplimiento; facultades de los extranjeros, principios de identidad y representacin. RELACION JURIDICA ENTRE EL ESTADO Y LOS HOMBRES QUE FORMAN SU POBLACION Bastaran sumarias indicaciones, que tendrn su complemento en derecho civil i en Internacional privado. Los individuos que forman la poblacin se dividen en dos categoras: nacionales y extranjeros. Los primero estn sujetos al imperium estatal por razn de su misma condicin de nacionales, por el vnculo que los une con la comunidad espiritual (Nacin) y con la poltica (estado),lazo que supone intimidad de conexin, ttulo de cooperaciones y motivo de obediencia, y que no desaparece por la usencia de territorio. En cambio, los extranjeros slo a travs de ste, y mientras dure su estancia all, estn sometidos al estado (cuestin independientes la de sus bienes). Han de distinguirse, a su vez, nacionales y ciudadanos, entendiendo por esos ltimos a aquellos del pas que tienen la capacidad poltica legalmente conocida para intervenir en la cosa pblica. Un menor de edad es nacional; un elector es ciudadano. Los principios que rigen en materia de nacionalidad son dos: la sangre y el suelo, segn que la nacionalidad se adquiera por la herencia de los padres, o por haber venido al mundo en el pas. Los estados suelen combinar uno y otro criterio, aunque el primero prevalece en Europa (pases de emigracin). A ms de esta nacionalidad originaria, que acompaa al hombre por el hecho de su nacimiento, hay la nacionalidad derivativa o adquirida, que supone un cambio de la nacionalidad originaria. Tiempo hubo en que prevaleca la mxima de la perpetuidad del vnculo nacional, ms las exigencias modernas han impuesto solucin contraria (admitida ya tambin por Inglaterra, que tan refractaria se mostr a ello, por suiza, que as ha querido evitar conflictos de doble nacionalidad). Ahora bien: la adquisicin de una nueva nacionalidad y la prdida de la anterior de la anterior han de ir correlativas, para impedir fraudes. Por lo dems, el acto de adquirir la condicin de nacional un extranjero se llama naturalizacin, y debe construirse jurdicamente no como un contrato de derecho pblico (segn pretendiera Laband), sino como manifestacin librrima, discrecional y no revisable del estado a quien afecte.