Beba Coma CARTA
Beba Coma CARTA
Beba Coma CARTA
RECLUTA: - Pues sí señor, no faltaba más, hombre ¡y un jamón! Que si quita el polvo, que si dale
de comer al caballo, que si saca a hacer pipí al perrito. ¡Pero este mi sargento se ha creído que yo
soy una chacha para todo! ¡ Ay !, lo bien que estaría yo en mi casa. Al menos allí le digo a Petra:
¡ven! Y viene. Le digo al burro: ¡arre! Y el burro, arrea. Pero aquí resulta que yo soy para el
sargento la Petra, el burro, el perro y todo el zoológico. ¡Le tengo una hincha…! (Entra el sargento,
que trae una botella de vino y pasteles)
SARGENTO: Mira, será mejor que yo te dicte y escribas tú. Es que hoy me tiembla el pulso.
¡Escribe! Burgos…
SARGENTO: - Mira, deja a esa gente en paz. Tú pon los números y no me distraigas, que estoy
pensando
RECLUTA: - ¿Cómo?
SARGENTO: (Al público) - Es que se llama Genoveva y en casa la llamamos Beba. (Al soldado) -
Beba
SARGENTO: - ¡He dicho coma! Me va a enseñar a escribir o qué. (El soldado come pasteles con
cara de resignación y de no entender nada) - Espero, oh Beba, coma
SARGENTO: - ¡Pero será pesado! ¿Es que no me oye?. (Repite) - Espero, oh Beba, coma, que te
encuentres bien de salud, punto y coma, recordada tía Beba, que te guste este regalo, coma,
querida Beba, coma que te mando en tu cumpleaños, punto. Si más, coma, se despide, oh Beba,
coma, tu sobrina que te quiere, punto. Trae para acá que firme (ve la botella vacía y que no están
los pasteles) Me has engañado, ladrón (Le persigue, lo coge del cuello) ¡Vomita, ladrón, vomita!
RECLUTA: - ¡Socorro, socorro! ¡Que el sargento se ha vuelto loco! ¡Santa Rita, Rita, lo que se da no
se quita!
Julio Cortázar escribía: ‘La coma, esa puerta giratoria del pensamiento’
Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer andaría a cuatro patas en su búsqueda.
Si usted es varón, seguramente habrá colocado la coma tras «tiene». Si es mujer, la habrá puesto con toda
seguridad tras la palabra «mujer».
Curioso, ¿no?