Leccion 2024 Trimestre 1

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Lecciones Bíblicas Sabáticas (USPS

005–118), Volumen 100, Nro. 1, ene-


Contenido ro–marzo de 2024. Una publicación
trimestral del Departamento de Escue-
la Sabática de la Conferencia General
de los Adventistas del Séptimo Día
Movimiento de Reforma. Impresas y
1. El Hijo de Dios: Creador del Universo......... 5 distribuidas por Reformation Herald
Publishing Association, 5240 Hollins
Road, Roanoke, Virginia 24019–5048,
2. El Hijo del Hombre: Un Poco Menor EEUU. Envíos periódicos pagados en
Roanoke, Virginia 24022–9993.
que los Ángeles........................................ 10
• EE.UU. Y CANADÁ
Contacto: Teléfono 1-540-366-9400
3. Jesús: Apóstol y Sumo Sacerdote ............. 15 • Web: www.reformationherald.com
• E-mail: [email protected]
4. El Reposo de Dios ..................................... 20
Traducción y Diagramación:
5. Cristo: El Autor de la Salvación Eterna.... 26 Paulo Devai

6. Creciendo en el Entendimiento............... 31

7. Dos Pactos.................................................. 36

8. El Pacto Antiguo........................................ 41

9. El Santuario Terrenal y el Celestial.......... 47

10. La Superioridad del Sacrificio de Cristo.. 52

11. Héroes de la Fe........................................... 57

12. Puestos los Ojos en Jesús........................... 62

13. Advertencias para Recordar....................... 67

Las Lecciones Bíblicas Sabáticas, son un programa de


estudio diario basado solamente en la Biblia y el Espíri-
tu de Profecía sin comentarios adicionales. Los párrafos
son breves, por lo general, para asegurar que los pensa-
mientos sean concisos y directos. Se usan corchetes [] en
algunos casos para asegurar un contexto claro y adecua-
do, y fluidez en la lectura, o la traducción de una frase
no disponible en español. Para un estudio adicional se
recomienda el uso de las fuentes originales.
Ilustraciones: GoodSalt en la portada; Adobe Stock en pp. 25,
72; Map Resources en pp. 46, 72.

Copyright © 2023 Adventistas del Séptimo Día Movimiento de Reforma,


Departamento de Escuela Sabática, 5240 Hollins Road, Roanoke, Vir-
ginia 24019, USA. Teléfono: 1-540-362-1800 * www.sdarm.org * E-mail:
[email protected]
Prefacio
¡Cuán importante es comprender las verdades vitales que están involucradas
en nuestra salvación! La oscuridad está cubriendo la tierra y densas tinieblas a la
gente; pero nuestro Creador está ansioso de hacer brillar la preciosa luz celestial
sobre todos los que la buscan fervientemente. Muchos temas de las Escrituras
son maravillosos faros de luz para este mundo oscuro. Por lo tanto, durante
los próximos tres meses, los alumnos de la Escuela Sabática de todo el mundo
estudiarán El Evangelio según Pablo: Hebreos.
El libro de Hebreos nos enseña mucho sobre la naturaleza de Dios y de Cristo,
su reposo sabático, su ministerio en el santuario celestial en nuestro favor y los
pactos hechos con nosotros. También nos animan los edificantes testimonios de
los héroes de la fe y del Autor y Consumador de nuestra fe, Jesucristo. Al estudiar
estas lecciones con oración, podemos asociarnos en una relación más profunda y
cercana con nuestro Señor.
“Cristo era el fundamento y la vida del templo. Sus servicios eran típicos del
sacrificio del Hijo de Dios. El sacerdocio había sido establecido para representar el
carácter y la obra mediadora de Cristo. Todo el plan del culto de los sacrificios era
una predicción de la muerte del Salvador para redimir al mundo.”—El Deseado de
Todas las Gentes, p. 137.
“El verdadero cristiano participa de experiencias que producen santificación.
Queda sin una mancha de culpa en la conciencia, sin una mancha de corrupción
en el alma. La espiritualidad de la ley de Dios con sus principios restrictivos,
penetra en su vida. La luz de la verdad irradia en su entendimiento. Un resplandor
de perfecto amor por el Redentor despeja el miasma que se ha interpuesto entre su
alma y Dios.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 921.
A medida que nos acercamos a Cristo, también nos acercamos los unos a los
otros. Se verán resultados asombrosos en preparación para el derramamiento del
Espíritu Santo con el poder de la lluvia tardía.
“Cuando las iglesias se conviertan en iglesias vivas y activas, el Espíritu Santo
será otorgado en respuesta a su sincera petición. Entonces la verdad de la palabra
de Dios se considerará con nuevo interés, y se examinará como si fuera una
revelación recién venida de los atrios de lo alto. Toda declaración inspirada acerca
de Cristo se apoderará de lo más íntimo del alma de los que le aman. Cesarán la
envidia, los celos, las conjeturas malignas. La Biblia será considerada como una
carta del cielo. Su estudio absorberá la mente, y sus verdades deleitarán el alma.
Las promesas de Dios que ahora se repiten como si el alma nunca hubiera probado
su amor, resplandecerán entonces sobre el altar del corazón, y se presentarán como
palabras ardientes en los labios de los mensajeros de Dios. Entonces suplicarán a
las almas con una intensidad que no podrá ser rechazada. En aquel momento se
abrirán las ventanas del cielo para los aguaceros de la lluvia tardía.”—The Review
and Herald, 25 de febrero, 1890.
Es nuestra oración que esta bendita experiencia llegue a todos los que estudian
estas lecciones y fortalezca nuestros corazones en el poder de nuestro Redentor.
El Departamento de Escuela Sabática de la Conferencia General

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 3


SÁBADO, 6 DE ENERO DE 2024
Ofrenda del Primer Sábado
Para el Centro de Salud “Edén”, Breaza,
Rumanía

Por la gracia de Dios, el Centro


de Salud “Edén” de Rumanía abrió
sus puertas hace casi 25 años. A lo
largo de los años, esta institución
ha ofrecido alivio, tanto físico
como espiritual, a los que sufren,
siendo un oasis en el que personas
abrumadas por el sufrimiento han
entrado en contacto con nuestras
enseñanzas tanto espirituales como
de salud. Aquí se siembra la semilla,
que Dios hace crecer y fructificar a su
debido tiempo.
A raíz de los cambios generales de la le-
gislación en toda Europa, junto con algunos vio-
lentos incendios de edificios en Rumanía que causaron la pérdida de muchas
vidas, la legislación relativa a la seguridad contra incendios ha cambiado sig-
nificativamente en los últimos seis años, imponiendo medidas mucho más es-
trictas. En nuestra institución, se han tomado medidas para aplicar las exigen-
cias legislativas que superan ampliamente nuestras posibilidades financieras.
Hermanos generosos de Rumanía, así como de otras partes de Europa y Estados
Unidos, conociendo nuestras necesidades, han ayudado rápidamente según sus
posibilidades, enviando dinero para el avance de la obra. Pero las necesida-
des son aún muy grandes. Por lo tanto, apelamos a su generosidad, queridos
hermanos de todo el mundo, para que tengan la amabilidad de ayudar con la
remodelación de este centro médico misionero para que pueda continuar su
actividad sin ser obstaculizado por inspecciones, restricciones o multas de las
autoridades locales.
“La obra de Dios se ha de extender. Si su pueblo sigue su consejo, no con-
servará muchos recursos que serán consumidos en la conflagración final. Se
habrá hecho tesoros donde la polilla y el orín no pueden corromper, no habrá
vínculo que lo ligue a esta tierra.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 1, p. 181.
En vista de las necesidades actuales, hagamos todo lo posible por ayudar a
los que nos rodean mientras aún sea posible. “Cada uno dé como propuso en
su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.
Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de
que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda
buena obra” (2 Corintios 9:7, 8). Que Dios bendiga las ofrendas y a los dadores.

Sus hermanos del Centro de Salud “Edén”, Breaza, Rumanía

4 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero-marzo, 2024


Sábado, 6 de enero de 2024
Lección 1 ^ Año Bíblico: Génesis 16-18

El Hijo de Dios: Creador del Universo


“[Dios] en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a
quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo
el universo” (Hebreos 1:2).

Ofrenda del Primer Sábado—Para el Centro de Salud “Edén”, Breaza, Rumanía


“Fue Cristo quien extendió los cielos y echó los cimientos de la tierra.
Fue su mano la que colgó los mundos en el espacio, y modeló las flores del
campo. Él ‘asienta las montañas con su fortaleza,’ ‘suyo es el mar, pues que él
lo hizo.’ Salmos 65:6; 95:5 VM. Fue él quien llenó la tierra de hermosura y el
aire con cantos. Y sobre todas las cosas de la tierra, del aire y el cielo, escribió
el mensaje del amor del Padre.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 11.
Lectura adicional: El Deseado de Todas las Gentes, pp. 11–18.

Domingo ^
31 de diciembre
Año Bíblico: Apocalipsis 21-22

1. COMUNICACIÓN DE DIOS
a. Después del pecado, ¿cómo habló Dios a los padres? Hebreos 1:1; 2 Pedro
1:21.

“Antes que el pecado entrara en el mundo, Adán gozaba de libre trato con
su Creador; pero desde que el hombre se separó de Dios por causa del peca-
do, aquel gran privilegio le ha sido negado a la raza humana. No obstante, el
plan de redención abrió el camino para que los habitantes de la tierra volvie-
ran a relacionarse con el cielo. Dios se comunicó con los hombres mediante
su Espíritu y, mediante las revelaciones hechas a sus siervos escogidos, la luz
divina se esparció por el mundo. ‘Los santos hombres de Dios hablaron sien-
do inspirados del Espíritu Santo.’ 2 Pedro 1:21.”— El Conflicto de los Siglos, p. 9.

b. ¿Cómo se reveló Dios a sí mismo en los últimos días? Hebreos 1:2; Juan
14:8, 9.

“El Creador del hombre, Aquel que en el monte Sinaí proclamó la ley
eterna, en su agonía reivindicó su derecho a perdonar la transgresión y el
pecado.”—The Review and Herald, 26 de agosto, 1909.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 5


1 de enero
Lunes ^ Año Bíblico: Génesis 1-3

2. CRISTO, EL PADRE Y LOS ÁNGELES


a. ¿Cuál es la relación entre Cristo y el Padre? Hebreos 1:3; Juan 10:30.

“Como ser personal, Dios se ha revelado a sí mismo en su Hijo. El esplen-


dor de la gloria del Padre, ‘y la misma imagen de su sustancia,’ Jesús, como
Salvador personal, vino al mundo. Como Salvador personal ascendió tam-
bién al cielo. Como Salvador personal, intercede en las cortes celestiales.”—
La Fe por la Cual Vivo, p. 42.
“Cristo era la misma imagen de la persona de su Padre, y vino a nuestro
mundo para restaurar en el hombre la imagen moral de Dios, para que el
hombre, aunque caído, por medio de la obediencia a los mandamientos de
Dios pudiera llegar a recibir el sello de la imagen divina y del carácter divino,
adornados con la belleza del encanto celestial.”— Comentario Bíblico ASD [Co-
mentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 933.

b. ¿Cuál es la posición de Cristo en relación con los ángeles? Hebreos 1:4–6.

“En el primer capítulo de Hebreos se contrasta el nivel que ocupan los


ángeles y el que ocupa Cristo. Dios ha pronunciado palabras acerca de Cristo
que no deben ser aplicadas a los ángeles. Ellos son ‘enviados para servicio en
favor de los que serán herederos de la salvación’; pero Cristo, como Mediador,
es el gran Ministro en la obra de redención. El Espíritu Santo es su represen-
tante en nuestro mundo para ejecutar el propósito divino de proporcionar
poder de lo alto a los hombres caídos a fin de que puedan ser vencedores.
Todos los que entran en un pacto con Jesucristo, se convierten en hijos de
Dios por adopción. Son limpiados por el poder regenerador de la Palabra, y
los ángeles tienen la comisión de ministrar a favor de ellos.”— Ibíd., p. 933.
“Si el ángel Gabriel fuera enviado a este mundo para tomar sobre sí la
naturaleza humana, y para enseñar el conocimiento de Dios, cuán ansiosa-
mente escucharían sus instrucciones los seres humanos. Supongamos que
nos ofreciera un ejemplo perfecto de pureza y santidad, y que simpatizara
con nosotros a causa de todas nuestras tristezas, congojas y aflicciones, y
que sufriera el castigo de nuestros pecados, con cuánto afán lo seguiríamos.
Cuánta exaltación recibiría…
“Pero Uno que sobrepasa todo lo que la imaginación puede ofrecer vino
del cielo a este mundo. Hace cerca de dos mil años, se escuchó una voz prove-
niente del trono de Dios, de significado extraño y misterioso, que decía: ‘Sacri-
ficio y ofrenda no quisiste; más me preparaste cuerpo… He aquí que vengo, oh
Dios, para hacer tu voluntad’. Hebreos 10:5, 9.”— Exaltad a Jesús, p. 28.

6 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


2 de enero
Martes ^ Año Bíblico: Génesis 4-6

3. “TÚ ERES MI HIJO”


a. ¿Qué profetizó el salmista con respecto a Jesucristo? Salmos 2:7. ¿Cuándo
y cómo se cumplió esta profecía?
I. En Su encarnación. Hebreos 1:6.
II. En Su bautismo. Mateo 3:16, 17.

Ofrenda del Primer Sábado—Para el Centro de Salud “Edén”, Breaza, Rumanía


III. En Su resurrección. Hechos 13:33; Colosenses 1:18; Apocalipsis 1:5.
IV. Su sacerdocio. Hechos 2:33; Filipenses 2:9; Hebreos 5:5, 6.

b. ¿Cómo el Padre se dirige al Hijo? Hebreos 1:7–13.

[Se cita Heb. 1: 4–12.] Con este lenguaje se expone la omnipotencia del
Señor Jesús. Es presentado al estudiante de la Biblia como el Creador del
mundo, y fue su legítimo Gobernante. [Se cita Heb. 1: 13–14.]”— Comentario
Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 933.

c. ¿Quién es el Único que debe ser adorado? Mateo 4:10.

“Satanás había pedido a Cristo que le diera evidencias de que Él era el


Hijo de Dios, y en este caso, obtuvo la prueba que había pedido. A la orden
divina de Cristo, se vio obligado a obedecer. Fue repelido y silenciado. No
tuvo poder para resistir la perentoria expulsión. Fue forzado, sin decir una
palabra más, a rendirse instantáneamente y a alejarse del Redentor del mun-
do.”— Confrontation, p. 54.

d. Cuando el profeta Juan se inclinó para adorar al ángel Gabriel, ¿qué ad-
vertencia recibió del ángel? Apocalipsis 19:10; 22:8–10.

e. ¿Por qué Jesús aceptó ser adorado? Mateo 8:2, 3; Hebreos 1:8–10.

“Se oye entonces la voz de Dios proclamando que la justicia está satis-
fecha. Satanás está vencido. Los hijos de Cristo, que trabajan y luchan en
la tierra, son ‘aceptos en el Amado’. Efesios 1:6. Delante de los ángeles ce-
lestiales y los representantes de los mundos que no cayeron, son declarados
justificados. Donde él esté, allí estará su iglesia. ‘La misericordia y la verdad
se encontraron: la justicia y la paz se besaron.’ Salmos 85:10. Los brazos del
Padre rodean a su Hijo, y se da la orden: ‘Adórenlo todos los ángeles de Dios’.
Hebreos 1:6.”— El Deseado de Todas las Gentes, pp. 773, 774.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 7


3 de enero
Miércoles ^ Año Bíblico: Génesis 7-9

4. ÁNGELES CELESTIALES, MINISTROS DE DIOS


a. ¿Cuál es la misión de los ángeles de Dios con respecto a los creyentes?
Hebreos 1:14.
“La ministración divina es necesaria para dar poder y eficacia a la iglesia
en este mundo. La familia de Dios en la tierra, sujeta a tentaciones y pruebas,
está muy cerca de Su corazón de amor. Él ha ordenado que se mantenga la
comunicación entre las inteligencias celestiales y sus hijos en esta tierra. Los
ángeles de las cortes celestiales son enviados para ministrar a aquellos que
serán herederos de la salvación, aquellos que como fieles guerreros partici-
pan de los sufrimientos de Cristo. Se representa a Cristo como morando en
su pueblo. Ellos deben ser alimentados con su carne a su debido tiempo. Por
lo tanto, se ha establecido una conexión entre ellos y la iglesia de lo alto. Dios
cuida de su creación humana como un labrador cuida de una viña.”—The
Signs of the Times, 14 de febrero, 1900.

b. ¿Qué es prometido a aquellos que temen al Señor? Salmos 34:7.


“Los principados y las potestades de los cielos están contemplando la
guerra que, en circunstancias aparentemente desalentadoras, están riñendo
los siervos de Dios. Se verifican nuevas conquistas, se ganan nuevos honores
a medida que los cristianos, congregándose en derredor del estandarte de su
Redentor, salen a pelear la buena batalla de la fe. Todos los ángeles celestiales
están al servicio de los humildes y creyentes hijos de Dios; y cuando el ejérci-
to de obreros canta aquí en la tierra sus himnos de alabanza, el coro celestial
se une a él para tributar loor a Dios y a su Hijo.
“Necesitamos comprender más plenamente la misión de los ángeles. Sería
bueno recordar que cada verdadero hijo de Dios cuenta con la cooperación
de los seres celestiales. Ejércitos invisibles de luz y poder acompañan a los
mansos y humildes que creen y aceptan las promesas de Dios; hay a la diestra
de Dios querubines y serafines, y ángeles poderosos en fortaleza, ‘son todos
espíritus administradores, enviados para servicio a favor de los que serán he-
rederos de salud’. Hebreos 1:14.”— Los Hechos de los Apóstoles, pp. 124, 125.
“Cuando se levantan por la mañana, ¿sienten la impotencia y la necesi-
dad de fuerza divina? ¿Y dan a conocer humildemente, de todo corazón, sus
necesidades al Padre celestial? En tal caso, los ángeles notan esas oraciones, y
si estas no han salido de labios fingidores, cuando estén en peligro de pecar
inconscientemente y de ejercer una influencia que induciría a otros a hacer
el mal, el ángel custodio estará al lado de ustedes para inducirlos a seguir una
conducta mejor, escoger las palabras que han de pronunciar e influir en sus
acciones.”— Mensajes para los Jóvenes, p. 63.

8 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


4 de enero
Jueves ^ Año Bíblico: Génesis 10-12

5. PODEROSOS GUERREROS CELESTIALES


a. ¿Qué desafío planteó Senaquerib, rey de Asiria, a Ezequías, rey de Judá?
Isaías 36:1–8.

Ofrenda del Primer Sábado—Para el Centro de Salud “Edén”, Breaza, Rumanía


“Dios era ahora la única esperanza de Judá. Este se veía cortado de toda
ayuda que pudiera prestarle Egipto, y no había otra nación cercana para ex-
tenderle una mano amistosa.
“Los oficiales asirios, seguros de la fuerza de sus tropas disciplinadas, dis-
pusieron celebrar con los príncipes de Judá una conferencia durante la cual
exigieron insolentemente la entrega de la ciudad. Esta exigencia fue acom-
pañada por blasfemias y vilipendios contra el Dios de los hebreos. A causa
de la debilidad y la apostasía de Israel y de Judá, el nombre de Dios ya no era
temido entre las naciones, sino que había llegado a ser motivo de continuo
oprobio. Isaías 52:5.”— Profetas y Reyes, p. 261.

b. Cuando el pueblo de Dios fue amenazado de ser destruido por el ejército


asirio, ¿dónde buscó ayuda Ezequías? Isaías 37:1–5; 2 Crónicas 32:20.

c. ¿Cómo respondió el Señor a las súplicas de sus hijos en estos momentos


difíciles? 2 Reyes 19:6, 7; Isaías 37:6, 7.

“Dios contestó las oraciones de sus siervos. A Isaías se le comunicó este


mensaje para Ezequías: [se cita 2 Reyes 19:6, 7].”— Ibíd., p. 263.

d. ¿Cuántos ángeles usó el Señor para derrotar al orgulloso rey asirio? Isaías
37:36–38; 2 Crónicas 32:21.

“Esa misma noche se produjo la liberación.”— Ibíd., p. 266.

5 de enero
Viernes ^ Año Bíblico: Génesis 13-15

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. Explica cómo el Creador del Cielo habla a la raza humana en la Tierra.
2. Nombra las diferencias significativas entre Cristo y los ángeles.
3. ¿Qué nos es revelado sobre la relación entre el Padre y el Hijo?
4. ¿Por qué debemos estar agradecidos a los santos ángeles?
5. ¿Qué aprendemos de la crisis a la cual se enfrentó Ezequías?

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 9


Sábado, 13 de enero de 2024
Lección 2 ^ Año Bíblico: Génesis 37-39

El Hijo del Hombre:


Un Poco Menor que los Ángeles
“Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que los
ángeles, a Jesús, coronado de gloria y de honra, a causa del
padecimiento de la muerte, para que por la gracia de Dios
gustase la muerte por todos” (Hebreos 2:9).

“Cristo iba a ser hecho ‘un poco… inferior a los ángeles, para que… gusta-
se la muerte.’ Hebreos 2:9 (VM). Cuando adoptara la naturaleza humana, su
poder no sería semejante al de los ángeles, y ellos habrían de servirle, fortale-
cerle y mitigar su profundo sufrimiento.”— Patriarcas y Profetas, p. 50.
Lectura adicional: Patriarcas y Profetas, pp. 48–57.

7 de enero
Domingo ^ Año Bíblico: Génesis 19-21

1. UNA ATENCIÓN MÁS FERVOROSA


a. ¿Qué solemne llamamiento se dirige a cada uno de nosotros? Hebreos
2:1, 2.

b. ¿Queda alguna esperanza para nosotros “si descuidamos una salvación


tan grande”? Hebreos 2:3.
“Si el lugar más prominente y la consideración más devota es dado a au-
tores que no tienen más que una idea confusa de lo que significa la religión,
descuidamos nuestra salvación y hacemos de la Biblia algo secundario. Aque-
llos que han sido iluminados en referencia a la verdad para estos últimos
días no encontrarán instrucción en los libros generalmente estudiados hoy,
en relación con las cosas que están por venir sobre nuestro mundo; pero la
Biblia está llena del conocimiento de Dios, y es competente para educar al
estudiante para la utilidad en esta vida y para la vida eterna.”— Fundamentals
of Christian Education, p. 403.
“El deber del pueblo de Dios es tener sus lámparas despabiladas y ardien-
do, ser como los hombres que esperan que el Novio vuelva de la boda. No
tenéis un momento que perder descuidando la gran salvación que os ha sido
provista. Está llegando a su fin el tiempo de gracia de las almas. Está siendo
sellado el destino de los hombres día tras día, y aun de esta congregación no
sabemos cuán pronto cerrarán los ojos muchos en la muerte y serán prepara-
dos para la tumba. Ahora debiéramos considerar que nuestra vida transcurre
rápidamente, que no estamos seguros ni un momento, a menos que nuestra
vida esté escondida con Cristo en Dios.”— Mensajes Selectos, tomo 1, p. 222.

10 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


8 de enero
Lunes ^ Año Bíblico: Génesis 22-24

2. EL HOMBRE, REY DE ESTE PLANETA


a. ¿Cuál era el propósito de Dios con la creación del hombre? Génesis 1:26,
27.

“Adán fue coronado rey en el Edén. A él le fue dado el dominio sobre


todo ser viviente que Dios había creado. El Señor bendijo a Adán y Eva con
una inteligencia tal que no había dado a ninguna otra criatura. Hizo a Adán
soberano legítimo de todas las obras de sus manos. El hombre, hecho a ima-
gen divina, podía contemplar y apreciar las gloriosas obras de Dios en la
naturaleza.”— Confrontation, pp. 10, 11.

b. A consecuencia de la transgresión del hombre, ¿quién se convirtió en el


príncipe de este mundo? Juan 12:31; 14:30.

“Grandes eran para el mundo los resultados que estaban en juego en el


conflicto entre el Príncipe de la Luz y el caudillo del reino de las tinieblas.
Después de inducir al hombre a pecar, Satanás reclamó la tierra como suya,
y se llamó príncipe de este mundo. Habiendo hecho conformar a su propia
naturaleza al padre y a la madre de nuestra especie, pensó establecer aquí su
imperio. Declaró que el hombre le había elegido como soberano suyo. Me-
diante su dominio de los hombres, dominaba el mundo. Cristo había venido
para desmentir la pretensión de Satanás. Como Hijo del hombre, Cristo iba
a permanecer leal a Dios. Así se demostraría que Satanás no había obtenido
completo dominio de la especie humana, y que su pretensión al reino del
mundo era falsa. Todos los que deseasen liberación de su poder, podrían ser
librados. El dominio que Adán había perdido por causa del pecado, sería re-
cuperado.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 89.

c. ¿Qué sucedió en la victoria de Cristo sobre la cruz? Apocalipsis 12:10.

“La expulsión del cielo de Satanás como acusador de sus hermanos fue
llevada a cabo por la gran obra de Cristo al dar su vida. El plan de redención
siguió adelante a pesar de la persistente oposición de Satanás. El hombre fue
estimado de suficiente valor para que Cristo sacrificara su vida por él. Como
Satanás sabía que el imperio que había usurpado al fin le sería arrebatado,
resolvió no ahorrar esfuerzos para destruir al mayor número posible de las
criaturas que Dios había hecho a su imagen.”— Comentario Bíblico ASD [Comen-
tarios de E. G. de White], tomo 7, pp. 984, 985.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 11


9 de enero
Martes ^ Año Bíblico: Génesis 25-27

3. ESPERANZA PARA LA RAZA CAÍDA


a. ¿Cuántas personas fueron compradas por la sangre de Cristo? Hebreos
2:9; Juan 3:16.

“‘¿Que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio… ¡Qué
precio se pagó para redimir a la raza caída!”— Cada Día con Dios, p. 253.
“Pensad cuánto le costó a Cristo dejar los atrios celestiales y ocupar su
puesto a la cabeza de la humanidad. ¿Por qué hizo eso? Porque era el único
que podía redimir la raza caída. No había un ser humano en el mundo que
estuviera sin pecado. El Hijo de Dios descendió de su trono celestial, depuso
su manto real y corona regia y revistió su divinidad con humanidad. Vino
a morir por nosotros, a yacer en la tumba como deben hacerlo los seres hu-
manos y a ser resucitado para nuestra justificación. Vino a familiarizarse
con todas las tentaciones con las que es acosado el hombre. Se levantó de la
tumba y proclamó sobre el rasgado sepulcro de José: ‘Yo soy la resurrección
y la vida’. Uno igual a Dios pasó por la muerte en nuestro favor. Probó la
muerte por cada hombre para que por medio de él cada hombre pudiera ser
participante de vida eterna.”— En los Lugares Celestiales, p. 15.

b. ¿A quiénes llama Jesús sus hermanos y por qué? Hebreos 2:11; Juan 17:17.

“Jesucristo es nuestro ejemplo en todas las cosas. Él comenzó la vida,


pasó por sus experiencias, y terminó su historial, con una voluntad humana
santificada. Fue tentado en todo como nosotros, y sin embargo, porque man-
tuvo su voluntad sometida y santificada, nunca se inclinó en el más mínimo
grado a hacer el mal, o a manifestar rebelión contra Dios…
“Los que tienen una voluntad santificada, que está en armonía con la
voluntad de Cristo, tendrán día tras día sus voluntades unidas a la voluntad
de Cristo, lo cual actuará bendiciendo a otros, y repercutirá sobre ellos mis-
mos mediante el poder divino. Muchos cultivan aquellas cosas que batallan
contra el alma; porque sus deseos y su voluntad están dirigidos contra Dios,
y empleados en el servicio de Satanás.
“No complazcamos más al enemigo quejándonos de la fuerza de nuestra
mala voluntad; porque así alimentamos y fomentamos nuestra voluntad con-
tra Dios, y complacemos al maligno. Recordemos que somos hijos de Dios,
comprometidos a abrigar una voluntad santa que procede de Dios. ‘Mas a
todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad
de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de
voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios’.”—The Signs of the
Times, 29 de octubre, 1894.

12 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


10 de enero
Miércoles ^ Año Bíblico: Génesis 28-30

4. UN PARTICIPANTE DE CARNE Y SANGRE


a. ¿Qué naturaleza tomó Cristo en Su encarnación y por qué fue esto nece-
sario? Hebreos 2:14–16.

“Habría sido una humillación casi infinita para el Hijo de Dios revestirse
de la naturaleza humana, aun cuando Adán poseía la inocencia del Edén.
Pero Jesús aceptó la humanidad cuando la especie se hallaba debilitada por
cuatro mil años de pecado. Como cualquier hijo de Adán, aceptó los efectos
de la gran ley de la herencia. Y la historia de sus antepasados terrenales de-
muestra cuáles eran aquellos efectos. Mas él vino con una herencia tal para
compartir nuestras penas y tentaciones, y darnos el ejemplo de una vida sin
pecado.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 32.
“Aunque no tenía ninguna mancha de pecado en su carácter, condescen-
dió en relacionar nuestra naturaleza humana caída con su divinidad. Al to-
mar sobre sí mismo la humanidad, honró a la humanidad. Al tomar nuestra
naturaleza caída, mostró lo que ésta podría llegar a ser si aceptaba la amplia
provisión que él había hecho para ello y llegaba a ser participante de la natu-
raleza divina.”— Mensajes Selectos, tomo 3, p. 151.

b. Si bien Cristo tomó nuestra naturaleza caída, ¿qué debemos entender


acerca de su vida? Hebreos 7:26; 4:15; 1 Pedro 2:21, 22.

“[Cristo] es nuestro ejemplo en todas las cosas. Es un hermano en nues-


tras debilidades, ‘tentado en todo así como nosotros,’ pero como ser inma-
culado, rehuyó el mal; su alma sufrió las luchas y torturas de un mundo de
pecado.”— El Camino a Cristo, pp. 93, 94.
“Al tomar sobre sí la naturaleza del hombre en su condición caída, Cristo
no participó de su pecado en lo más mínimo. Estuvo sujeto a las flaquezas y
debilidades que rodean al hombre, ‘para que se cumpliese lo dicho por el pro-
feta Isaías, cuando dijo: Él mismo tomó nuestras enfermedades y llevó nues-
tras dolencias’. Mateo 8:17. Fue conmovido por el sentimiento de nuestras
debilidades y fue en todo tentado a nuestra semejanza. Y, sin embargo, no
conoció pecado. Fue el Cordero ‘sin mancha y sin contaminación’. 1 Pedro
1:19. Si Satanás hubiera logrado con su tentación que Cristo pecara en lo
mínimo, habría herido la cabeza del Salvador. Tal como sucedieron las cosas,
sólo le pudo herir el talón. Si hubiera sido tocada la cabeza de Cristo, habría
perecido la esperanza de la raza humana. La ira divina habría descendido so-
bre Cristo así como descendió sobre Adán. Hubieran quedado sin esperanza
Cristo y la iglesia.”— Mensajes Selectos, tomo 1, pp. 299, 300.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 13


11 de enero
Jueves ^ Año Bíblico: Génesis 31-33

5. UN SUMO SACERDOTE MISERICORDIOSO Y FIEL


a. ¿Qué clase de Amigo tenemos en el santuario celestial? Hebreos 2:17.
“[Cristo] fue hecho, en todas las cosas, semejante a sus hermanos. Se re-
vistió de carne humana igualándose a nosotros. Él sabía lo que significaba
tener hambre, sed y cansancio. Fue sustentado por el alimento y refrigerado
por el sueño. Fue un extranjero y advenedizo sobre la tierra,—en el mundo,
pero no del mundo. Tentado y probado como lo son los hombres de la actua-
lidad, vivió, sin embargo, una vida libre del pecado. Lleno de ternura, com-
pasión, simpatía, siempre considerado con los demás, representó el carácter
de Dios. ‘Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros,… lleno de
gracia y de verdad.’ Juan 1:14.”— Los Hechos de los Apóstoles, p. 376.

b. Siendo humano y divino, ¿qué está dispuesto a hacer Cristo por cada uno
de nosotros? Hebreos 2:18; Salmos 40:8.
“Desde que Jesús vino a morar con nosotros, sabemos que Dios conoce
nuestras pruebas y simpatiza con nuestros pesares. Cada hijo e hija de Adán
puede comprender que nuestro Creador es el amigo de los pecadores. Porque
en toda doctrina de gracia, toda promesa de gozo, todo acto de amor, toda
atracción divina presentada en la vida del Salvador en la tierra, vemos a ‘Dios
con nosotros’.
“Si tuviésemos que soportar algo que Jesús no soportó, en este detalle
Satanás representaría el poder de Dios como insuficiente para nosotros. Por
lo tanto, Jesús fue ‘tentado en todo punto, así como nosotros’. Hebreos 2:17.
Soportó toda prueba a la cual estemos sujetos. Y no ejerció en favor suyo
poder alguno que no nos sea ofrecido generosamente. Como hombre, hizo
frente a la tentación, y venció en la fuerza que Dios le daba… Su vida testifica
que para nosotros también es posible obedecer la ley de Dios.”— El Deseado de
Todas las Gentes, p. 15.

12 de enero
Viernes ^ Año Bíblico: Génesis 34-36

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Por qué es peligroso descuidar el estudio de la Biblia, la oración y la entrega
a Dios?
2. Compara el poder del verdadero Príncipe de luz con la pretensión jactanciosa
de Satanás.
3. ¿Cómo nos beneficia el ofrecimiento divino de salvación por parte de Cristo?
4. Explica el perfecto equilibrio de la naturaleza divina y humana de Cristo.
5. ¿Por qué podemos estar especialmente agradecidos por la obra de Cristo en el
cielo?

14 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


Sábado, 20 de enero de 2024
Lección 3 ^ Año Bíblico: Éxodo 8-10

Jesús: Apóstol y Sumo Sacerdote


“Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento
celestial, considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra
profesión, Cristo Jesús” (Hebreos 3:1).

“Estudiad a Cristo. Estudiad su carácter, rasgo por rasgo. Él es nuestro


Modelo, que se nos pide que copiemos en nuestras vidas y caracteres, pues
de otro modo dejamos de representar a Jesús; pero presentaremos ante el
mundo una copia falsa. No imitéis a ningún hombre, porque los hombres
son defectuosos en sus hábitos, en su lenguaje, en sus maneras, en su carác-
ter. Presento delante de vosotros al Hombre: a Cristo Jesús. Debéis conocerlo
individualmente como vuestro Salvador antes que podáis estudiarlo como
vuestro modelo y ejemplo.”— Mensajes Selectos, tomo 3, p. 192.
Lectura adicional: Mensajes Selectos, tomo 1, pp. 399–404.

14 de enero
Domingo ^ Año Bíblico: Génesis 40-42

1. MAYOR QUE MOISÉS


a. ¿En qué sentido es Cristo mayor que Moisés? Hebreos 3:1–6.

b. ¿Cuándo debemos entregar nuestra vida a Jesús nuestro Salvador?


Hebreos 3:7, 8 (primera parte).
“¡Oh, que ahora, mientras se dice hoy, te volvieras al Señor! Cada uno
de tus actos te hace mejor o peor. Si tus acciones están del lado de Satanás,
dejan tras de sí una influencia que continúa obrando sus funestos resultados.
Sólo los puros, los limpios y los santos pueden entrar en la ciudad de Dios. ‘Si
oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones’, sino volveos al Señor,
para que el camino que recorráis no deje desolación a su paso.”— El Hogar
Cristiano, pp. 325, 326.
“Cristo está listo para libertarnos del pecado, pero no fuerza la voluntad;
y si ésta, por la persistencia en la transgresión, se inclina por completo al mal,
y no deseamos ser libres ni queremos aceptar la gracia de Cristo, ¿qué más
puede Él hacer? Al rechazar deliberadamente su amor, hemos labrado nuestra
propia destrucción. ‘¡He aquí ahora es el tiempo acepto! ¡He aquí ahora es
el día de salvación!’ 2 Corintios 6:2. ‘¡Hoy, si oyereis su voz, no endurezcáis
vuestros corazones!’ Hebreos 3:7, 8.”— El Camino a Cristo, p. 34.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 15


15 de enero
Lunes ^ Año Bíblico: Génesis 43-45

2. LECCIONES DEL ANTIGUO ISRAEL


a. ¿Cómo el ejemplo del antiguo Israel reveló la incredulidad del pueblo, y
cuál fue el inevitable resultado? Hebreos 3:8–11.

b. Considerando esta realidad, ¿qué solemne llamamiento se nos dirige a


los que vivimos en estos últimos días? Hebreos 3:12, 13.

“No hay nada que fomente la incredulidad. El Señor manifiesta su gracia


y su poder vez tras vez, y esto debe enseñarnos que siempre es provechoso,
en todas las circunstancias, fomentar la fe, hablar de la fe, proceder con fe.
No debemos permitir que nuestros corazones y nuestras manos se debiliten
al permitir que las sugestiones de mentes incrédulas planten en nuestros co-
razones las semillas de duda y desconfianza [se cita Heb. 3:12].
“El Señor obra en cooperación con la voluntad y la acción del ser huma-
no. Cada persona tiene el privilegio y el deber de aceptar lo que dice Dios,
creer en Jesús como su Salvador personal y responder anhelante e inmedia-
tamente a las bondadosas propuestas que Dios hace. El hombre debe estudiar
para creer y obedecer las instrucciones divinas de las Escrituras. Debe basar
su fe no en sentimientos, sino en evidencias y en la Palabra de Dios.”— Co-
mentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, pp. 939, 940.
“Muchos recuerdan a los israelitas de antaño, y se maravillan de su in-
credulidad y murmuración, creyendo que ellos no habrían sido tan ingratos;
pero cuando se prueba su fe, aun en las menores dificultades, no manifiestan
más fe o paciencia que los antiguos israelitas. Cuando se los coloca en situa-
ciones estrechas, murmuran contra los medios que Dios eligió para purificar-
los.”— Patriarcas y Profetas, pp. 298, 299.
“Dios… dio a los suyos un cáliz de amargura que beber, para limpiarlos
y purificarlos. Es un trago muy acerbo, pero ellos pueden amargarlo todavía
más con sus murmuraciones, quejas y lamentos. Quienes no lo reciban ha-
brán de beber otro trago, porque el primero no hizo en su carácter el efecto
asignado. Y si el segundo tampoco les aprovecha, habrán de ir bebiendo otro
y otro, hasta que cumpla su efecto, o serán dejados sucios e impuros de cora-
zón… El amargo cáliz puede dulcificarse con la paciencia, la resignación y la
oración, y que producirá en el corazón de quienes así lo reciban el efecto que
le fue asignado, con lo cual Dios quedará honrado y glorificado…
“Si procuramos nuestros propios intereses y placeres en vez de agradar a
Dios y hacer prosperar su valiosa causa, que sufre, deshonramos a Dios y a la
santa causa que profesamos amar.”— Primeros Escritos, p. 47.

16 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


16 de enero
Martes ^ Año Bíblico: Génesis 46-48

3. PARTÍCIPES DE LA NATURALEZA DIVINA


a. ¿Cómo podemos ser partícipes de Cristo? Hebreos 3:14, 15; 2 Pedro 1:4.

“Debemos aprender de Cristo. Debemos saber lo que él es para los que


ha rescatado. Debemos comprender que creyendo en él tenemos el privilegio
de participar de la naturaleza divina y huir así de la corrupción que hay en
el mundo a causa de la concupiscencia. Entonces quedamos limpios de todo
pecado, de todo defecto de carácter. No debemos retener una sola tendencia
pecaminosa… [Se cita Efe. 2:1–6]…
“Las tendencias al mal, hereditarias y cultivadas, son eliminadas del ca-
rácter a medida que participamos de la naturaleza divina, y somos conver-
tidos en un poder viviente para el bien. Cooperamos con Dios en el triunfo
sobre las tentaciones de Satanás aprendiendo siempre del divino Maestro,
participando diariamente de su naturaleza. Dios actúa y el hombre actúa
para que éste pueda ser uno con Cristo como Cristo es uno con Dios. En-
tonces nos sentamos con Cristo en los lugares celestiales. La mente reposa
con paz y seguridad en Jesús.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de
White], tomo 7, p. 954.

b. ¿Cómo provocaron los israelitas al Señor? Hebreos 3:16. ¿Cuál fue el re-
sultado fatal de su provocación? Hebreos 3:17.
“En su rebelión el pueblo había exclamado: ‘¡Ojalá muriéramos en este
desierto!’ Ahora se les había de conceder lo pedido. El Señor declaró: ‘Vivo
yo,… que según habéis hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros: en
este desierto caerán vuestros cuerpos; todos vuestros contados según toda
vuestra cuenta, de veinte años arriba, los cuales habéis murmurado contra
mí; vosotros a la verdad no entraréis en la tierra,… mas vuestros chiquitos,
de los cuales dijisteis que serían por presa, yo los introduciré, y ellos conoce-
rán la tierra que vosotros despreciasteis…’ Así como los espías habían estado
cuarenta días de viaje, las huestes de Israel iban a peregrinar en el desierto
durante cuarenta años.”— Patriarcas y Profetas, pp. 411, 412.

c. ¿Qué pecado fue la causa principal de esta rebelión? Hebreos 3:18, 19.

“No era voluntad de Dios que Israel peregrinase durante cuarenta años en
el desierto; lo que él quería era conducirlo a la tierra de Canaán y establecerlo
allí como pueblo santo y feliz. Pero ‘no pudieron entrar a causa de increduli-
dad’. Hebreos 3:19.”— El Conflicto de los Siglos, p. 451.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 17


17 de enero
Miércoles ^ Año Bíblico: Génesis 49–Éxodo 1

4. BUSCANDO DESCANSO EN JESÚS


a. ¿Qué invitación especial recibimos de Jesús, nuestro Salvador, y qué de-
bemos aprender de Él? Mateo 11:28–30.
“‘Venid a mí,’ es su invitación. Cualesquiera que sean nuestras ansiedades
y pruebas, presentemos nuestro caso ante el Señor. Nuestro espíritu será for-
talecido para poder resistir. Se nos abrirá el camino para librarnos de estorbos
y dificultades. Cuanto más débiles e impotentes nos reconozcamos, tanto
más fuertes llegaremos a ser en su fortaleza. Cuanto más pesadas nuestras
cargas, más bienaventurado el descanso que hallaremos al echarlas sobre el
que las puede llevar. El descanso que Cristo ofrece depende de ciertas condi-
ciones, pero éstas están claramente especificadas. Son tales que todos pueden
cumplirlas. Él nos dice exactamente cómo se ha de hallar su descanso.”— El
Deseado de Todas las Gentes, p. 295.
“Nadie sino Dios puede subyugar el orgullo del corazón humano. No
podemos salvarnos a nosotros mismos. No podemos regenerarnos a nosotros
mismos. En los atrios del cielo no se cantará ningún cántico que diga: A mí
que me he amado, que me he lavado, que me he redimido a mí mismo, a mí
sea tributada la gloria, la honra, la bendición y la alabanza. Sin embargo ésta
es la nota tónica del cántico que muchos entonan aquí en este mundo. No
saben lo que significa ser manso y humilde de corazón; y no se proponen
saberlo, si pueden evitarlo. Todo el Evangelio consiste en que aprendamos de
Cristo, su humildad y mansedumbre.
“¿Qué es la justificación por la fe? Es la obra de Dios que abate en el polvo
la gloria del hombre, y hace por el hombre lo que éste no puede hacer por sí
mismo.”—Testimonios para los Ministros, p. 456.

b. ¿Cuál es el yugo que Cristo nos ofrece a cada uno? Mateo 11:29.
“‘Llevad mi yugo sobre vosotros,’ dice Jesús. El yugo es un instrumento
de servicio. Se enyuga a los bueyes para el trabajo, y el yugo es esencial para
que puedan trabajar eficazmente. Por esta ilustración, Cristo nos enseña que
somos llamados a servir mientras dure la vida. Hemos de tomar sobre noso-
tros su yugo, a fin de ser colaboradores con él.
“El yugo que nos liga al servicio es la ley de Dios. La gran ley de amor
revelada en el Edén, proclamada en el Sinaí, y en el nuevo pacto escrita en el
corazón, es la que liga al obrero humano a la voluntad de Dios. Si fuésemos
abandonados a nuestras propias inclinaciones para ir adonde nos condujese
nuestra voluntad, caeríamos en las filas de Satanás y llegaríamos a poseer sus
atributos. Por lo tanto, Dios nos encierra en su voluntad, que es alta, noble y
elevadora.”— El Deseado de Todas las Gentes, pp. 295, 296.

18 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


18 de enero
Jueves ^ Año Bíblico: Éxodo 2-4

5. EL YUGO DE CRISTO
a. ¿Qué dijo Jesús con respecto a Su yugo? Mateo 11:30; 1 Juan 5:2, 3.

“El yugo se coloca sobre los bueyes para ayudarles a arrastrar la carga,
para aliviar esa carga. Así también sucede con el yugo de Cristo. Cuando
nuestra voluntad esté absorbida en la voluntad de Dios, y empleemos sus do-
nes para beneficiar a otros, hallaremos liviana la carga de la vida. El que anda
en el camino de los mandamientos de Dios, anda en compañía de Cristo, y
en su amor el corazón descansa. Cuando Moisés oró: ‘Ruégote que me mues-
tres ahora tu camino, para que te conozca,’ el Señor le contestó: ‘Mi rostro irá
contigo, y te haré descansar’. Y por los profetas fue dado el mensaje: ‘Así dijo
Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas,
cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra
alma’. Éxodo 33:13, 14. Y él dice: ‘¡Ojalá miraras tú a mis mandamientos!
fuera entonces tu paz como un río, y tu justicia como las ondas de la mar’.
Isaías 48:18.
“Los que aceptan la palabra de Cristo al pie de la letra, y entregan su
alma a su custodia, y su vida para que él la ordene, hallarán paz y quietud.
Ninguna cosa del mundo puede entristecerlos cuando Jesús los alegra con su
presencia. En la perfecta aquiescencia hay descanso perfecto. El Señor dice:
‘Tú le guardarás en completa paz, cuyo pensamiento en ti persevera; porque
en ti se ha confiado’. Isaías 26:3. Nuestra vida puede parecer enredada, pero
al confiarnos al sabio Artífice Maestro, él desentrañará el modelo de vida y
carácter que sea para su propia gloria. Y ese carácter que expresa la gloria—o
carácter —de Cristo, será recibido en el Paraíso de Dios. Los miembros de una
raza renovada andarán con él en vestiduras blancas porque son dignos.”— El
Deseado de Todas las Gentes, p. 298.

19 de enero
Viernes ^ Año Bíblico: Éxodo 5-7

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. Cuando la luz del Cielo brilla en nuestros corazones, ¿qué acción debemos
emprender?
2. ¿De qué maneras estoy en peligro de repetir el pecado de los israelitas?
3. Describe los resultados milagrosos de participar de la naturaleza divina.
4. Describe el descanso que Jesús está dispuesto a proporcionar a quien lo
busque.
5. Explica los beneficios de aceptar el yugo de Cristo.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 19


Sábado, 27 de enero de 2024
Lección 4 ^ Año Bíblico: Éxodo 29-31

El Reposo de Dios
“Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado
de sus obras, como Dios de las suyas” (Hebreos 4:10).

“Dios bendijo y santificó el séptimo día porque había descansado en él


de toda su maravillosa obra de la creación. El sábado fue hecho para el hom-
bre, y Dios quiere que en ese día dejemos de lado nuestro trabajo, así como
él descansó después de trabajar seis días en la creación.”—Testimonios para la
Iglesia, tomo 4, p. 244.

Lectura adicional: El Deseado de Todas las Gentes, pp. 248–255.

21 de enero
Domingo ^ Año Bíblico: Éxodo 11-13

1. EL VERDADERO DESCANSO DIVINO


a. ¿De qué descanso habla Pablo en Hebreos 4? Hebreos 4:1.
“El descanso se encuentra cuando se abandona toda justicia propia, todo
razonamiento hecho desde un punto de vista egoísta. El reposo perfecto en
su amor, está en una entrega completa, y en la aceptación de sus caminos…
Haced lo que él os ha pedido, y estad seguros de que Dios hará todo lo que
ha prometido… ¿Habéis acudido a él, renunciando a vuestros expedientes,
a vuestra incredulidad y a vuestra justicia propia? Id tal como sois, débiles,
desvalidos y listos para morir.
“¿Cuál es el ‘descanso’ prometido? Es la conciencia de que Dios es fiel,
de que nunca chasquea a quien acude a él. Su perdón es pleno y gratuito, y
su aceptación significa descanso para el alma, reposo en su amor.”— Nuestra
Elevada Vocación, p. 99.

b. ¿Por qué el evangelio no produce el resultado esperado en algunas perso-


nas? Hebreos 4:2, 6; Romanos 9:30–32.

“A menos que mezclemos la fe con el oír la Palabra, a menos que reciba-


mos las verdades que escuchamos como un mensaje proveniente del Cielo
para ser cuidadosamente estudiado, para ser ingerido por el alma y asimilado
en la vida espiritual, perderemos las impresiones que hizo el Espíritu de Dios.
No comprendemos por experiencia lo que significa hallar descanso por la
aceptación de la divina seguridad de la Palabra.”—Alza Tus Ojos, p. 73.

20 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


22 de enero
Lunes ^ Año Bíblico: Éxodo 14-16

2. ENTRANDO EN EL DESCANSO DE DIOS


a. ¿Cuándo disfrutamos verdaderamente del descanso divino de Dios?
Hebreos 4:3 (primera parte). Describe la relación entre el sábado del sép-
timo día y este reposo divino. Hebreos 4:4.

“Por haber reposado en sábado, ‘bendijo Dios el día séptimo y santificólo,’


es decir, que lo puso aparte para un uso santo. Lo dio a Adán como día de
descanso. Era un monumento recordativo de la obra de la creación, y así una
señal del poder de Dios y de su amor.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 248.
“Ninguna otra institución confiada a los judíos propendía tan plenamen-
te como el sábado a distinguirlos de las naciones que los rodeaban. Dios se
propuso que su observancia los designase como adoradores suyos. Había de
ser una señal de su separación de la idolatría, y de su relación con el verda-
dero Dios. Pero a fin de santificar el sábado, los hombres mismos deben ser
santos. Por la fe, deben llegar a ser partícipes de la justicia de Cristo. Cuando
fue dado a Israel el mandato: ‘Acordarte has del día del reposo, para santi-
ficarlo,’ el Señor también les dijo: ‘Habéis de serme varones santos’. Éxodo
20:8; 22:31. Únicamente en esa forma podía el sábado distinguir a los israeli-
tas como adoradores de Dios.
“Al apartarse los judíos de Dios, y dejar de apropiarse la justicia de Cristo
por la fe, el sábado perdió su significado para ellos. Satanás estaba tratando
de exaltarse a sí mismo, y de apartar a los hombres de Cristo, y obró para
pervertir el sábado, porque es la señal del poder de Cristo. Los dirigentes
judíos cumplían la voluntad de Satanás rodeando de requisitos pesados el
día de reposo de Dios. En los días de Cristo, el sábado había quedado tan
pervertido, que su observancia reflejaba el carácter de hombres egoístas y
arbitrarios, más bien que el carácter del amante Padre celestial. Los rabinos
representaban virtualmente a Dios como autor de leyes cuyo cumplimiento
era imposible para los hombres. Inducían a la gente a considerar a Dios como
un tirano, y a pensar que la observancia del sábado, que él les exigía, hacía a
los hombres duros y crueles. Era obra de Cristo disipar estos conceptos falsos.
Aunque los rabinos le perseguían con una hostilidad implacable, ni siquiera
aparentaba conformarse a sus requerimientos, sino que seguía adelante, ob-
servando el sábado según la ley de Dios.”— Ibíd., pp. 249, 250.
“Lo que se demanda a Dios en sábado es aún más que en los otros días.
Sus hijos dejan entonces su ocupación corriente, y dedican su tiempo a la
meditación y el culto. Le piden más favores el sábado que los demás días.
Requieren su atención especial. Anhelan sus bendiciones más selectas. Dios
no espera que haya transcurrido el sábado para otorgar lo que le han pedi-
do.”— Ibíd., p. 177.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 21


23 de enero
Martes ^ Año Bíblico: Éxodo 17-19

3. TRABAJO Y DESCANSO
a. ¿Qué clase de labor debemos desarrollar antes de alcanzar el descanso
prometido? Hebreos 4:9, 11.
[Se cita Heb. 4:9, 11] El reposo que aquí se menciona es el reposo de la
gracia que se obtiene siguiendo la prescripción ‘Trabaja diligentemente’. Los
que aprenden de Jesús su humildad y mansedumbre, encuentran reposo en
la experiencia de practicar las lecciones de Cristo. No se obtiene reposo en la
indolencia, el egoísmo y la búsqueda de placeres. Los que no están dispuestos
a dar al Señor un servicio fiel, ferviente y amante, no encontrarán reposo
espiritual ni en esta vida ni en la venidera. El trabajo diligente es lo único
que produce paz y gozo en el Espíritu Santo: felicidad en esta tierra y gloria
en el más allá.
“Por lo tanto, trabajemos. Hablemos con frecuencia palabras que forta-
lezcan e inspiren a los que oyen. Somos demasiado indiferentes en cuanto
a nuestra relación mutua. Olvidamos que nuestros colaboradores necesitan
con frecuencia palabras de esperanza y ánimo. Cuando uno esté en dificulta-
des, id a él y habladle palabras de consuelo. Esta es verdadera amistad.”— Co-
mentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 940.

b. ¿Qué sucede con nuestras propias obras cuando hallamos descanso en el


Señor? Hebreos 4:10; Éxodo 20:10; Isaías 58:13; Romanos 14:23 (última
parte).

“Dios hizo al hombre a su imagen, y luego le dio ejemplo al observar el


séptimo día que había santificado. Ordenó que en aquel día el hombre lo
adorara y no se entregase a ninguna ocupación mundana. Nadie que des-
precie el cuarto mandamiento después de haber recibido luz acerca de las
exigencias del sábado puede ser tenido por inocente a la vista de Dios.”—Tes-
timonios para la Iglesia, tomo 4, p. 244.

c. ¿Qué clase de obras están en armonía con el descanso sabático? Isaías


58:6–8.
“Jesús les declaró [a los rabinos] que la obra de aliviar a los afligidos esta-
ba en armonía con la ley del sábado…
“No será tenido por inocente quien descuide el alivio del sufrimiento ese
día. El santo día de reposo de Dios fue hecho para el hombre, y las obras de
misericordia están en perfecta armonía con su propósito. Dios no desea que
sus criaturas sufran una hora de dolor que pueda ser aliviada en sábado o
cualquier otro día.”— El Deseado de Todas las Gentes, pp. 176, 177.

22 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


24 de enero
Miércoles ^ Año Bíblico: Éxodo 20-22

4. EL PODER DE LA PALABRA DE DIOS


a. ¿Cuán poderosa es la Palabra de Dios? Salmos 33:6, 9; Hebreos 4:12.
“Hay un punto más allá del cual son vanos los esfuerzos humanos. Si
bien es cierto que hemos de predicar la palabra, no podemos impartir el po-
der que vivificará el alma y hará que broten la justicia y la alabanza. En la
predicación de la Palabra debe obrar un agente que esté más allá del poder
humano. Sólo mediante el Espíritu divino será viviente y poderosa la palabra
para renovar el alma para vida eterna. Esto es lo que Cristo se esforzó por
inculcar a sus discípulos. Les enseñó que ninguna cosa de las que poseían en
sí mismos les daría éxito en su obra, sino que el poder milagroso de Dios es el
que da eficiencia a su propia palabra.”— Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 44.

b. ¿Cuán profundamente somos conocidos ante Dios? Hebreos 4:13;


Eclesiastés 12:14.
“Atañe al interés eterno de cada uno el escudriñamiento de su propio
corazón y que se mejore cada facultad dada por Dios. Recuerden todos que
no hay un motivo en el corazón de hombre alguno que el Señor no vea cla-
ramente. Los motivos de cada uno se pesan tan cuidadosamente como si el
destino del instrumento humano dependiera de ese resultado. Necesitamos
relacionarnos con el poder divino para que aumente nuestra clara compren-
sión y nuestro entendimiento de cómo razonar de causa a efecto. Es preciso
que cultivemos las facultades de comprensión haciéndonos participantes de
la naturaleza divina, por haber huido de la corrupción que hay en el mun-
do a causa de la concupiscencia. Considere cada uno cuidadosamente la so-
lemne verdad: Dios en el cielo es verdadero, y no hay un solo designio, por
intrincado que sea, ni un solo motivo, por más cuidadosamente que se haya
ocultado, que él no comprenda claramente. Él lee las maquinaciones secretas
de cada corazón. Los hombres pueden tramar planes siniestros para el futuro,
y pensar que Dios no los entiende; pero en aquel gran día cuando se abran
los libros y cada hombre sea juzgado por las cosas escritas en los libros, esos
hechos aparecerán tales como son.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E.
G. de White], tomo 3, p. 1178.
“El ojo de Dios no dormita. Conoce todo pecado oculto ante el ojo mor-
tal. Los culpables saben exactamente qué pecados han de confesar para que
sus almas queden limpias delante de Dios. Jesús les está dando ahora opor-
tunidad de confesarlos, y arrepentirse con profunda humildad y purificar su
vida obedeciendo a la verdad y viviendo de acuerdo con ella. Ahora es el mo-
mento de corregir los males y de confesar los pecados, o aparecerán delante
del pecador en el día de la ira de Dios.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 1, p. 146.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 23


25 de enero
Jueves ^ Año Bíblico: Éxodo 23-25

5. MISERICORDIA Y GRACIA EN TIEMPOS DE NECESIDAD


a. ¿Quién es el único que puede ser nuestro abogado ante el Padre y por
qué? Hebreos 2:17, 18; 4:14; 7:25; 1 Juan 2:1, 2.
“Como sacerdote, Cristo está sentado ahora con el Padre en su trono. En
el trono, en compañía del Dios eterno que existe por sí mismo, está Aquel
que ‘ha llevado nuestros padecimientos, y con nuestros dolores… se cargó’
(Isaías 53:4), quien fue ‘tentado en todo punto, así como nosotros, mas sin
pecado’. Hebreos 4:15.”— La Maravillosa Gracia de Dios, p. 69.
“Vosotros no tenéis una dificultad, que no haya gravitado con el mismo
peso sobre él [Jesús], no tenéis una tristeza que su corazón no haya experi-
mentado. Sus sentimientos podían ser heridos, por el descuido y la indife-
rencia de sus amigos profesos, tan fácilmente como los vuestros. ¿Es espinoso
vuestro camino? El de Cristo lo fue diez veces más. ¿Estáis angustiados? Tam-
bién él lo estuvo.”— Nuestra Elevada Vocación, p. 61.
b. ¿Qué podemos hallar en el santuario celestial que nos ayude en nuestros
momentos de necesidad? Hebreos 4:15, 16.
“En el lugar santísimo está su ley, la gran regla de justicia por la cual es
probada toda la humanidad. El arca, que contiene las tablas de la ley, está
cubierta con el propiciatorio, ante el cual Cristo ofrece su sangre a favor del
pecador. Así se representa la unión de la justicia y de la misericordia en el
plan de la redención humana.”— El Conflicto de los Siglos, p. 410.
“Cristo ofreció su cuerpo quebrantado para recuperar la heredad de Dios,
para dar al hombre otra oportunidad… Cristo intercede por la raza perdida
mediante su vida inmaculada, su obediencia, su muerte en la cruz del Calva-
rio. Y ahora, no como un mero suplicante intercede por nosotros el Capitán
de nuestra salvación, sino como un Vencedor que reclama su victoria. [Su
ofrenda es completa, y como nuestro intercesor ejecuta su obra que Él mis-
mo se ha encomendado, sosteniendo ante Dios el incensario que contiene
sus propios méritos inmaculados y las oraciones, confesiones y acciones de
gracias de su pueblo. Perfumados con la fragancia de su justicia, ascienden a
Dios como un dulce aroma. La ofrenda es plenamente aceptable, y el perdón
cubre toda transgresión.]”—A Fin de Conocerle, p. 76.

26 de enero
Viernes ^ Año Bíblico: Éxodo 26-28

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. Describe lo que significa entrar en el reposo de Dios.
2. ¿Qué tiene de singular el descanso de Dios en el sábado del séptimo día?
3. Al descansar en el Señor, ¿cómo somos transformados?
4. Explica la poderosa profundidad de la Palabra de Dios en la vida cristiana.
5. ¿Por qué debemos estar muy agradecidos por el ministerio de Cristo en el cielo?

24 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


SÁBADO, 3 DE FEBRERO DE 2024
Ofrenda del Primer Sábado
Para la Asistencia a las Catástrofes Mundiales

Los últimos años han mostrado el cumpli-


miento de profecías que hemos estudiado du-
rante décadas: guerras, conflictos, terribles
accidentes y pandemias, son palabras que
se han convertido en parte integrante de
nuestro vocabulario, a las que se suman
inundaciones, huracanes y terremotos, en-
tre otras muchas tragedias. De muchas ma-
neras, hemos oído claramente los pasos de
un Dios que se acerca. Como consecuencia
de estos tristes acontecimientos, cientos de
personas sufren dificultades extremas y necesi-
tan ayuda para cubrir desde las necesidades más
básicas hasta las más difíciles y costosas.
En estas situaciones, el Departamento de Asistencia Social de la CG ha com-
partido las bendiciones proporcionadas por nuestro fondo a través de las ofrendas
enviadas por ustedes, nuestros hermanos de todo el mundo. Estas son enviadas de
manera personal y específica para cubrir las necesidades, así como a través de las
Ofrendas del Primer Sábado. Queridos hermanos, vuestras ofrendas han servido
de refugio para aquellos que han perdido sus hogares en catástrofes naturales.
Han proporcionado alimentos a cientos de familias y cuidado de huérfanos y
viudas, extendiéndoles sustento y ayuda. Estas ofrendas también han ayudado a
los padres a obtener semillas para plantar cultivos con los que alimentar a sus fa-
milias o iniciar una pequeña empresa. De este modo, muchas personas de nuestra
fe pueden trabajar y generar alguna fuente de ingresos y trabajo que de otra forma
les resultaría imposible.
Gracias a Dios que en estos tiempos de prueba, muchos han sido tocados para
colocar sus donaciones en el altar del Señor. En nombre de los que son ayudados,
¡les agradecemos profundamente!
Sin embargo, las necesidades no cesan, al contrario, aumentan cada día, y
vuestra generosidad marca la diferencia.
“La cruz de Cristo es un llamamiento a la generosidad de todo discípulo del
Salvador. El principio que proclama es de dar, dar siempre. Su realización por la
benevolencia y las buenas obras es el verdadero fruto de la vida cristiana.”—Con-
sejos sobre Mayordomía Cristiana, p. 16.
Hoy, al dar su ofrenda especial para el primer sábado, disponga lo mejor de
sí mismo ante Dios. No se preocupe si es muy poco o mucho. No importa. Lo im-
portante es que den lo mejor de ustedes. Y de la suma de este amor compartido,
seguiremos repartiendo bendiciones a nuestros hermanos de todo el mundo. “El
que ayuda a los menesterosos es una bendición para ellos y él mismo recibe una
bendición mayor aún.” (Ibíd., p. 15). ¡Que Dios les bendiga grandemente!

Departamento de Asistencia Social de la Conferencia General

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 25


Sábado, 3 de febrero de 2024
Lección 5 ^ Año Bíblico: Levítico 7-8

Cristo: El Autor de la Salvación Eterna


“Y habiendo sido perfeccionado, [Cristo] vino a ser autor de eterna
salvación para todos los que le obedecen” (Hebreos 5:9).

“La totalidad de nuestra salvación proviene del don de nuestro Señor y


Salvador Jesucristo. ¡Cuánto me alegro! Proviene de una fuente de la que no
podemos dudar. Él es ‘el autor’, pero, ¿se detiene allí? ‘Él es el autor y consu-
mador de nuestra fe’. Hebreos 12:2. ¡Gracias a Dios! Nos ayuda a cada paso
del camino que tenemos que recorrer, si estamos dispuestos a salvarnos de
acuerdo con el plan señalado por Cristo, mediante la obediencia a sus reque-
rimientos.”— Cada Día con Dios, p. 70.
Lectura adicional: El Conflicto de los Siglos, pp. 478–481.

28 de enero
Domingo ^ Año Bíblico: Éxodo 32-34

1. EL SUMO SACERDOTE ELEGIDO


a. ¿Cuál era la función de un sumo sacerdote en tiempos del Antiguo Testa-
mento? Hebreos 5:1, 2.

“El sumo sacerdote fue diseñado de manera especial para representar a


Cristo.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 5, p. 1076.

b. ¿A qué orden de sacerdocio estaba relacionado Cristo, y qué significa Su


sacerdocio para nosotros? Hebreos 5:5, 6, 10.

“Cristo no se glorificó a sí mismo al ser hecho Sumo Sacerdote. Dios lo


designó para el sacerdocio. Debía ser un ejemplo para toda la familia huma-
na. Él se calificó para ser no sólo el representante de la raza humana, sino
su Abogado, de modo que cada alma, si así lo desea, pudiera decir: Tengo un
Amigo en el tribunal. Es un Sumo Sacerdote que puede conmoverse con el
sentimiento de nuestras flaquezas.”— Ibíd., tomo 7, p. 942.
“Recordemos que nuestro gran Sumo Sacerdote está intercediendo ante
el propiciatorio en favor de su pueblo rescatado. Vive siempre para interceder
por nosotros.”— Ibíd., p. 960.

26 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


29 de enero
Lunes ^ Año Bíblico: Éxodo 35-37

2. MELQUISEDEC
a. ¿De qué manera prefiguraba Melquisedec a Cristo? Génesis 14:18;
Hebreos 7:1–4.
“Dios nunca se ha quedado sin testigos en la tierra. En un tiempo,
Melquisedec representó al Señor Jesucristo en persona para revelar la verdad

Ofrenda del Primer Sábado—Para la Asistencia a las Catástrofes Mundiales


del cielo y perpetuar la ley de Dios.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E.
G. de White], tomo 1, pp. 1106, 1107.
“Fue Cristo quien habló por medio de Melquisedec, el sacerdote del Dios
altísimo. Melquisedec no era Cristo, sino la voz de Dios en el mundo, el re-
presentante del Padre.”— Ibíd., p. 1107.

b. ¿Por qué Cristo no podría ser el Sumo Sacerdote en la tierra? Hebreos


7:14–17.
“Cristo no se glorificó a sí mismo al ser hecho Sumo Sacerdote. Dios lo
designó para el sacerdocio. Debía ser un ejemplo para toda la familia huma-
na. Él se calificó para ser no sólo el representante de la raza humana, sino
su Abogado, de modo que cada alma, si así lo desea, pudiera decir: Tengo un
Amigo en el tribunal. Es un Sumo Sacerdote que puede conmoverse con el
sentimiento de nuestras flaquezas.”— Ibíd., tomo 7, p. 942.
“Jesús está oficiando en la presencia de Dios, ofreciendo su sangre derra-
mada, como si hubiera sido un cordero [literal] sacrificado. Jesús presenta la
oblación ofrecida por cada culpa y por cada falta del pecador.”— Ibíd., tomo
6, p. 1077.

c. ¿Cómo se preparó Cristo para ser nuestro misericordioso Sumo Sacerdo-


te? Hebreos 5:7, 8.
“Mientras la ciudad estaba sumida en el silencio, y los discípulos habían
regresado a sus hogares para un reparador descanso, Jesús no dormía. Sus
divinos ruegos ascendían a su Padre desde el monte de los Olivos para que
sus discípulos pudieran ser guardados de las malas influencias que enfrenta-
rían a diario en el mundo, y para que su propia alma pudiera ser fortalecida
y vigorizada para enfrentar las obligaciones y las pruebas del día siguiente.
Mientras que sus discípulos dormían, su divino Maestro pasaba toda la no-
che orando. El rocío y la escarcha de la noche caían sobre su cabeza inclinada
en oración. Ha dejado su ejemplo para sus seguidores.”—Testimonios para la
Iglesia, tomo 2, p. 450.
“Cristo, el Capitán de nuestra salvación, fue hecho perfecto mediante
el sufrimiento. Sus seguidores tendrán que encararse frecuentemente con el
enemigo y serán probados severamente, pero no deberán desesperar. Cristo
les dice: ‘Confiad, yo he vencido al mundo’. Juan 16:33.”— Ibíd., tomo 8, p. 224.
Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 27
30 de enero
Martes ^ Año Bíblico: Éxodo 38-39

3. SALVOS PARA OBEDECER


a. ¿Podemos ser salvos si elegimos ser desobedientes? Explícalo. Mateo 1:21;
Hebreos 5:9.

“Aquí están las condiciones sobre las cuales cada alma será elegida para
la vida eterna. Su obediencia a los mandamientos de Dios probará su dere-
cho a una herencia con los santos en luz. Dios ha elegido cierta excelencia
de carácter; y todo aquel que, por la gracia de Cristo, alcance la norma de su
demanda, tendrá una entrada abundante en el reino de gloria. Todos los que
quieran alcanzar esta norma de carácter, tendrán que emplear los medios
que Dios ha provisto para este fin. Si queréis heredar el descanso que queda
para los hijos de Dios, debéis convertiros en colaboradores de Dios. Habéis
sido elegidos para llevar el yugo de Cristo, para llevar Su carga, para levantar
Su cruz. Debéis ser diligentes para ‘hacer firme vuestra vocación y elección’.
Escudriñad las Escrituras, y veréis que ni un hijo ni una hija de Adán es ele-
gido para ser salvo en desobediencia a la ley de Dios. El mundo invalida la
ley de Dios; pero los cristianos son elegidos para la santificación mediante la
obediencia a la verdad. Si quieren portar la corona, son elegidos para llevar la
cruz.”— Fundamentals of Christian Education, p. 125.

b. ¿Qué testimonio dio Pedro ante el consejo del Sanedrín, y qué nos enseña
esta experiencia? Hechos 5:29–32.

“No debiéramos preguntar, ¿cuál es la práctica de los hombres?, ni ¿cuál


es la costumbre del mundo? No debemos preguntar, ¿cómo procederé para
tener la aprobación de los hombres?, ni ¿qué tolerará el mundo? La pregunta
de intenso interés para cada alma es: ¿qué ha dicho Dios? Debiéramos leer
su Palabra y obedecerla, sin distorsionar una jota o una tilde de sus requeri-
mientos, sino actuar sin tener en cuenta las tradiciones humanas y su auto-
ridad.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 6, p. 1056.
“Si se la estudia y obedece, la Palabra de Dios obra en el corazón, subyu-
gando todo atributo no santificado. El Espíritu Santo viene a convencer del
pecado, y la fe que nace en el corazón obra por amor a Cristo, y nos conforma
en cuerpo, alma y espíritu a su propia imagen. Entonces Dios puede usarnos
para hacer su voluntad. El poder que se nos da obra desde adentro hacia
afuera, induciéndonos a comunicar a otros la verdad que nos ha sido trans-
mitida.”— Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 71.

28 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


31 de enero
Miércoles ^ Año Bíblico: Éxodo 40

4. AVANZANDO HACIA LA MADUREZ


a. Describe la triste condición de muchos profesos creyentes. Hebreos 5:11–13.

“Pablo no podía hablar a los conversos de origen judío tan claramente

Ofrenda del Primer Sábado—Para la Asistencia a las Catástrofes Mundiales


como deseaba acerca del misterio de la piedad. Debido a la debilidad espi-
ritual de ellos, a su falta de percepción, no podía expresar la verdad que, si
pudiesen haber escuchado correctamente, con una comprensión inteligente
habría sido para ellos un sabor de vida para vida.”— Comentario Bíblico ASD
[Comentarios de E. G. de White], tomo 6, p. 1085.
“Durante el año y medio que Pablo había pasado en Corinto, había pre-
sentado intencionalmente el Evangelio en su sencillez… Pablo había adapta-
do necesariamente su método de enseñanza a la condición de la iglesia. ‘Yo,
hermanos, no pude hablaros como a espirituales—les explicó más tarde,—
sino como a carnales, como a niños en Cristo. Os di a beber leche, y no vian-
da: porque aún no podíais, ni aun podéis ahora.’ 1 Corintios 3:1, 2. Muchos
de los creyentes corintios habían sido lentos para aprender las lecciones que
él se había esforzado por enseñarles. Su progreso en el conocimiento espi-
ritual no había estado en proporción con sus privilegios y oportunidades.
Cuando hubieran tenido que estar muy adelantados en la vida cristiana, y
hubieran debido ser capaces de comprender y practicar las verdades más pro-
fundas de la Palabra, estaban donde se hallaban los discípulos cuando Cristo
les dijo: ‘Aun tengo muchas cosas que deciros, mas ahora no las podéis lle-
var’. Juan 16:12. Los celos, las malas sospechas y la acusación habían cerrado
el corazón de muchos de los creyentes corintios a la obra plena del Espíritu
Santo, el cual ‘todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios’. 1 Corintios 2:10.
Por sabios que pudieran ser en el conocimiento mundano, no eran sino ni-
ños en el conocimiento de Cristo.”— Los Hechos de los Apóstoles, p. 219.

b. ¿Cómo debemos avanzar hacia la perfección cristiana y qué bendición


espera a todos los que lo hacen? Hebreos 5:14; 6:1 (primera parte); 1 Juan
3:18; Oseas 6:3.

“La iglesia en su conjunto nunca recibirá la lluvia tardía a menos que


deseche toda envidia, malas conjeturas y maledicencia. Aquellos que han
abrigado el odio en el corazón hasta que se ha fortalecido y se ha convertido
en parte de su carácter, deben tener una experiencia diferente si quieren par-
ticipar de la lluvia tardía.”—The Home Missionary, 1 de agosto, 1896.
Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 29
1 de febrero
Jueves ^ Año Bíblico: Levítico 1-3

5. ASEMEJÁNDONOS A CRISTO
a. Describe el designio de Dios para sus hijos. Filipenses 3:12–16; Apocalip-
sis 3:18–21.
“El ideal que Dios tiene para sus hijos está por encima del alcance del más
elevado pensamiento humano. La meta a alcanzar es la piedad, la semejanza
a Dios.”— La Educación, p. 18.
“‘Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cie-
los es perfecto.’ Esta orden es una promesa. El plan de redención contempla
nuestro completo rescate del poder de Satanás. Cristo separa siempre del pe-
cado al alma contrita. Vino para destruir las obras del diablo, y ha hecho
provisión para que el Espíritu Santo sea impartido a toda alma arrepentida,
para guardarla de pecar.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 277.
“El Testigo verdadero infunde ánimo a todos los que están procurando
caminar por la senda de humilde obediencia, mediante la fe en su nombre. Él
declara: ‘Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como
yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono’.
“Estas son las palabras de nuestro Sustituto y Fiador. Aquel que es la di-
vina Cabeza de la iglesia, el más poderoso de los vencedores, quiere que sus
seguidores vean su vida, sus esfuerzos, sus actos de abnegación, sus luchas y
sufrimientos causados por el desprecio, por el rechazo, el ridículo, la burla,
los insultos, los remedos, las falsedades mientras subía la cuesta del Calvario
hasta el lugar de la crucifixión, para que ellos pudieran ser animados a prose-
guir hacia adelante a la meta del premio y la recompensa de los vencedores.
La victoria queda asegurada por la fe y la obediencia.
“Apliquemos las palabras de Cristo a nuestros casos individuales. ¿Somos
pobres, y ciegos, y desventurados, y miserables? Entonces, busquemos el oro
y las vestiduras blancas que él ofrece. La obra de vencer no está restringida
a la era de los mártires. El conflicto es para nosotros, en estos días de sutiles
tentaciones hacia la mundanalidad, la seguridad egoísta, la complacencia del
orgullo, la ambición, falsas doctrinas e inmoralidad en la vida.”— Comentario
Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 977.

2 de febrero
Viernes ^ Año Bíblico: Levítico 4-6

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿En qué posición designó Dios a Cristo además de Sumo Sacerdote?
2. ¿Qué tiene de significativo el sacerdocio de Melquisedec?
3. ¿Cómo se relaciona la obediencia a la Palabra de Dios con nuestra recepción
del Espíritu Santo?
4. Nombra algunos requisitos necesarios para recibir la lluvia tardía.
5. ¿Qué debemos comprender sobre la meta de Dios para nosotros y cómo se logra?

30 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


Sábado, 10 de febrero de 2024
Lección 6 ^ Año Bíblico: Levítico 24-25

Creciendo en Entendimiento
“Creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y
Salvador Jesucristo” (2 Pedro 3:18).

“Al apropiarnos de la bendición de Dios estaremos en condiciones


de recibir mayores cantidades de su gracia. Al aprender a mantenernos
como viendo al Invisible, seremos transformados a la imagen de Cristo…
“El crecimiento en la gracia no os inducirá a ser orgullosos o jactanciosos,
ni alimentará vuestra confianza propia, [sino que os hará más conscientes de
vuestra propia nulidad, de vuestra entera dependencia del Señor].”— La Maravi-
llosa Gracia de Dios, p. 296.

Lectura adicional: El Deseado de Todas las Gentes, pp. 288–294.

4 de febrero
Domingo ^ Año Bíblico: Levítico 9-10

1. CRECIMIENTO CONTINUO
a. ¿Qué está escrito acerca de la infancia de Jesús? Lucas 2:40.
“Él, la Majestad del cielo, el Rey de gloria, se hizo criatura en Belén, y
representó por un tiempo a la infancia impotente que depende del cuidado
materno. En su niñez habló y se condujo como niño, honró a sus padres,
y realizó sus deseos en forma útil. Pero a partir del primer destello de inte-
ligencia, fue creciendo constantemente en gracia y en conocimiento de la
verdad.”— La Educación, p. 106.

b. ¿Y qué se dice acerca del niño Juan, primo de Jesús? Lucas 1:80. De
hecho, ¿cuál es el plan de Dios para todos sus hijos? 1 Tesalonicenses
5:23, 24.
“Santificación, ¿cuántos entienden su significado pleno? La mente está
nublada por la malaria sensual. Los pensamientos necesitan purificación.
¡Qué no podrían haber sido los hombres y las mujeres si hubieran compren-
dido que la manera en que se trata el cuerpo es de vital importancia para el
vigor y la pureza de la mente y del corazón!
“El verdadero cristiano participa de experiencias que producen santifica-
ción. Queda sin una mancha de culpa en la conciencia, sin una mancha de
corrupción en el alma.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White],
tomo 7, p. 921.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 31


5 de febrero
Lunes ^ Año Bíblico: Levítico 11-13

2. EL PECADO CONTRA EL ESPÍRITU SANTO


a. ¿Cuál es la terrible condición de aquellos que una vez gozaron de la luz
del Cielo, pero luego la rechazaron? Hebreos 6:4–6.

b. ¿Qué seria advertencia hizo Jesús a los judíos que lo rechazaron? Mateo
12:31, 32.
“Nadie necesita considerar el pecado contra el Espíritu Santo como algo
misterioso e indefinible. El pecado contra el Espíritu Santo consiste en recha-
zar persistentemente la invitación al arrepentimiento.
“No hay… esperanza de una vida más elevada, sino mediante la sumisión
del alma a Cristo.”— La Fe por la Cual Vivo, p. 60.
“Los que habían hablado contra Jesús mismo, sin discernir su carácter
divino, podrían ser perdonados; porque podían ser inducidos por el Espíritu
Santo a ver su error y arrepentirse. Cualquiera que sea el pecado, si el alma
se arrepiente y cree, la culpa queda lavada en la sangre de Cristo; pero el que
rechaza la obra del Espíritu Santo se coloca donde el arrepentimiento y la fe
no pueden alcanzarle. Es por el Espíritu Santo cómo obra Dios en el corazón;
cuando los hombres rechazan voluntariamente al Espíritu y declaran que es
de Satanás, cortan el conducto por el cual Dios puede comunicarse con ellos.
Cuando se rechaza finalmente al Espíritu, no hay más nada que Dios pueda
hacer para el alma.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 288.

c. ¿Qué influencia tienen nuestras palabras sobre nuestro carácter? Mateo


12:36.
“Estrechamente relacionada con la amonestación de Cristo acerca del pe-
cado contra el Espíritu Santo, se halla la amonestación contra las palabras
ociosas y perversas. Las palabras son un indicio de lo que hay en el corazón.
‘Porque de la abundancia del corazón habla la boca.’ Pero las palabras son
más que un indicio del carácter; tienen poder para reaccionar sobre el carác-
ter. Los hombres sienten la influencia de sus propias palabras… Habiendo
expresado una vez una opinión o decisión, son, con frecuencia, demasiado
orgullosos para retractarse, y tratan de demostrar que tienen razón, hasta
que llegan a creer que realmente la tienen. Es peligroso pronunciar una pala-
bra de duda, peligroso poner en tela de juicio y criticar la verdad divina. La
costumbre de hacer críticas descuidadas e irreverentes reacciona sobre el ca-
rácter y fomenta la irreverencia e incredulidad. Más de un hombre que seguía
esta costumbre ha proseguido, inconsciente del peligro, hasta que estuvo
dispuesto a criticar y rechazar la obra del Espíritu Santo.”— Ibíd., pp. 289, 290.

32 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


6 de febrero
Martes ^ Año Bíblico: Levítico 14-15

3. DIOS AMA NUESTRAS OBRAS ABNEGADAS


a. ¿Cómo escribe Pablo sobre la visión que Dios tiene de nuestras activida-
des en favor del prójimo? Hebreos 6:10.

“Nuestra fortaleza y bendición espirituales estarán en proporción con el


trabajo hecho con amor y con las buenas obras realizadas. El apóstol ordena:
‘Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo’.
Gálatas 6:2. El cumplimiento de los mandamientos de Dios requiere de no-
sotros buenas obras, abnegación, sacrificio y dedicación al bienestar de los
demás; pero esto no significa que solamente nuestras buenas obras nos salva-
rán, sino que ciertamente no podremos salvarnos sin buenas obras. Después
de hacer todo lo que somos capaces de hacer, debemos decir: Únicamente
hemos cumplido nuestro deber, y en el mejor de los casos somos siervos
inútiles, indignos del favor más pequeño de Dios. Cristo debe ser nuestra
justicia…
“[A nuestro alrededor hay quienes tienen hambre en el alma y anhelan
el amor expresado en palabras y hechos.] La simpatía y el tierno interés por
otros proporcionarán a nuestra alma bendiciones que no hemos experimen-
tado, y nos pondrán en estrecha relación con nuestro Redentor, [cuyo adve-
nimiento al mundo fue con el propósito de hacer el bien, y cuya vida hemos
de copiar. ¿Qué estamos haciendo por Cristo?]”—A Fin de Conocerle, p. 333.

b. Aunque no somos salvos por nuestras propias obras, ¿qué importancia


tienen éstas en nuestra carrera cristiana? Tito 2:13, 14; 3:8.

“La fe genuina siempre obra impulsada por el amor. Cuando miráis el


Calvario, no lo hacéis para tranquilizar vuestra alma en el incumplimiento
de vuestro deber, ni para disponeros a dormir, sino para generar fe en Jesús,
una fe que obrará purificando el alma del fango del egoísmo. Cuando nos
aferramos a Cristo por la fe, nuestra obra acaba de comenzar. Cada hombre
tiene hábitos corrompidos y pecaminosos que deben ser vencidos mediante
una lucha vigorosa. Cada alma tiene que pelear la batalla de la fe. El que es
seguidor de Cristo no puede actuar con falta de honradez en los negocios; no
puede ser insensible ni carecer de simpatía. No puede hablar con aspereza.
No puede estar lleno de ostentación y amor propio. No puede ser dominante
ni emplear palabras ásperas, y censurar y condenar… Debemos buscar ce-
losamente las buenas obras, y debemos mantenerlas cuidadosamente. Y el
Testigo fiel dice: ‘Yo conozco tus obras’. Apocalipsis 2:2.”— Mensajes Selectos,
tomo 2, pp. 21, 22.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 33


7 de febrero
Miércoles ^ Año Bíblico: Levítico 16-18

4. LA CERTIDUMBRE DE LA ESPERANZA CRISTIANA


a. ¿Qué podemos aprender sobre la fiabilidad de las promesas de Dios?
Hebreos 6:13–15.

b. ¿Qué declara Dios respecto a Sus promesas? Hebreos 6:16–18.

“Dios puede y quiere dar ‘más abundantemente’ (Hebreos 6:17) a sus sier-
vos la fuerza que necesitan para las pruebas. Los planes de los enemigos de su
obra pueden parecer bien trazados y firmemente asentados; pero Dios puede
anular los más enérgicos de ellos. Y lo hace cómo y cuándo quiere; a saber,
cuando ve que la fe de sus siervos ha sido suficientemente probada.”— Profetas
y Reyes, p. 120.

c. ¿Dónde está nuestra ancla del alma? Hebreos 6:19, 20.

“Nuestra fe debe atravesar hasta más allá del velo, viendo las cosas que
son invisibles. Nadie puede mirar [esto] por usted. Usted debe contemplar
personalmente. En lugar de murmurar por las bendiciones que son retenidas,
recordemos y apreciemos las bendiciones ya concedidas.”— Comentario Bíblico
ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 942.
“No podemos aceptar con seguridad las opiniones de ningún hombre,
por muy erudito que sea, a menos que estén en armonía con las palabras
del gran Maestro. Se nos presentarán las opiniones de hombres que yerran
para que las aceptemos, pero la Palabra de Dios es nuestra autoridad, y nunca
debemos aceptar las enseñanzas humanas sin tener la evidencia más conclu-
yente de que concuerdan con la enseñanza de la Palabra de Dios. Debemos
tener la certeza de que estamos sobre la plataforma de la verdad eterna: la
Palabra del Dios vivo.
“Hay que presentar la verdad, la preciosa verdad de la Palabra de Dios,
tanto en público como en los hogares. Tenemos un mensaje que ha de prepa-
rar a un pueblo para que resista a los peligros de los días postreros... La verdad
soportará cada prueba que se le imponga. No puede ser desbaratada por los
sofismas satánicos. Cuanto más se la asedie, tanto más brillará. Al ver los
activos y decididos esfuerzos del enemigo, ¿no procuraremos definidamente
predicar el mensaje en forma clara? ¿No avanzaremos en el poder del Espíritu
Santo y recibiremos e impartiremos lecciones del gran Maestro?… [‘Jehová,
tú eres mi Dios; te exaltaré, alabaré tu nombre, porque has hecho maravillas;
tus consejos antiguos son verdad y firmeza’ (Isaías 25:1)… Anclemos nuestra
fe en las palabras del Señor, Dios de Israel.]”—A Fin de Conocerle, p. 210.

34 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


8 de febrero
Jueves ^ Año Bíblico: Levítico 19-21

5. EL SACERDOCIO COMO SÍMBOLO DE CRISTO


a. ¿Qué familia había sido elegida por Dios para el sacerdocio en el santua-
rio terrenal, y por qué? Éxodo 28:1, 2; 32:7, 8, 25, 26.
“En virtud de las instrucciones divinas, se apartó a la tribu de Leví para el
servicio del santuario. En tiempos anteriores, cada hombre era sacerdote de
su propia casa. En los días de Abrahán, por derecho de nacimiento, el sacer-
docio recaía en el hijo mayor. Ahora, en vez del primogénito de todo Israel,
el Señor aceptó a la tribu de Leví para la obra del santuario. Mediante este
señalado honor, Dios manifestó su aprobación por la fidelidad de los levitas,
tanto por haberse adherido a su servicio como por haber ejecutado sus juicios
cuando Israel apostató al rendir culto al becerro de oro. El sacerdocio, no
obstante, se restringió a la familia de Aarón. Aarón y sus hijos fueron los úni-
cos a quienes se les permitía ministrar ante el Señor; al resto de la tribu se le
encargó el cuidado del tabernáculo y su mobiliario; además debían ayudar a
los sacerdotes en su ministerio, pero no podían ofrecer sacrificios, ni quemar
incienso, ni mirar los santos objetos hasta que estuviesen cubiertos.”— Patriar-
cas y Profetas, pp. 361, 362.

b. ¿Por qué fue reemplazado este plan por otro sacerdocio que prefiguraba
a Cristo? Hebreos 7:11, 15–17, 21–23.

c. Compara el sacerdocio terrenal con el de Cristo y explica cuál es la efica-


cia del sacerdocio de Cristo para nuestra salvación. Hebreos 7:25–28.
“Cristo puede salvar hasta lo último porque siempre vive para interceder
por nosotros. Todo lo que el hombre tiene la posibilidad de hacer por su pro-
pia salvación es aceptar la invitación: ‘El que quiera, tome del agua de la vida
gratuitamente’. Apocalipsis 22:17. No hay ningún pecado que pueda cometer
el hombre para el cual no se haya hecho provisión en el Calvario.”— Mensajes
Selectos, tomo 1, p. 402.

9 de febrero
Viernes ^ Año Bíblico: Levítico 22-23

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Cómo puede inspirarnos la educación de Jesús y de Juan el Bautista?
2. Explica el proceso descendente del pecado contra el Espíritu Santo.
3. ¿Cómo se motivan las verdaderas buenas obras?
4. ¿Qué evidencias he visto en mi vida de que las promesas de Dios son verdaderas?
5. Al buscar la salvación, ¿por qué el sacerdocio de Cristo es importante para mí?

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 35


Sábado, 17 de febrero de 2024
Lección 7 ^ Año Bíblico: Números 10-11

Dos Pactos
“Al decir: Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que
se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer”
(Hebreos 8:13).

“Así como la Biblia presenta dos leyes, una inmutable y eterna, la otra
provisional y temporaria, así también hay dos pactos.”— Patriarcas y Profetas,
p. 386.

Lectura adicional: Patriarcas y Profetas, pp. 378–390.

11 de febrero
Domingo ^ Año Bíblico: Levítico 26-27

1. LA ETERNA LEY DE DIOS


a. ¿Cuál era el objeto principal dentro del arca del pacto, y qué significado
tenía? Éxodo 25:16; 26:33, 34; 31:18; Salmo 85:10.

“La ley de Dios, guardada como reliquia dentro del arca, era la gran regla
de la rectitud y del juicio. Esa ley determinaba la muerte del transgresor; pero
encima de la ley estaba el propiciatorio, donde se revelaba la presencia de
Dios y desde el cual, en virtud de la expiación, se otorgaba perdón al pecador
arrepentido.”— Patriarcas y Profetas, pp. 360, 361.
“Cuando Adán y Eva fueron creados recibieron el conocimiento de la
ley de Dios; conocieron los derechos que la ley tenía sobre ellos; sus precep-
tos estaban escritos en sus corazones. Cuando el hombre cayó a causa de su
transgresión, la ley no fue cambiada, sino que se estableció un sistema de
redención para hacerle volver a la obediencia. Se le dio la promesa de un
Salvador, y se establecieron sacrificios que dirigían sus pensamientos hacia
el futuro, hacia la muerte de Cristo como supremo sacrificio.”— Ibíd., p. 378.

b. ¿Qué dijo Cristo sobre la jurisdicción de la ley de Dios? Mateo 5:17–19.

“Mientras muchos murmuraban en sus corazones que él había venido


para destruir la ley, Jesús, en términos inequívocos, reveló su actitud hacia
los estatutos divinos: ‘No penséis—dijo—que he venido para abrogar la ley o
los profetas’.”— El Discurso Maestro de Jesucristo, p. 45.

36 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


12 de febrero
Lunes ^ Año Bíblico: Números 1-2

2. FELICIDAD VERDADERA
a. ¿Qué relación tiene la obediencia con la felicidad? Salmos 1:1, 2; Prover-
bios 6:23; 13:13.
“Fue el Creador de los hombres, el Dador de la ley, quien declaró que no
albergaba el propósito de anular sus preceptos. Todo en la naturaleza, desde
la diminuta partícula que baila en un rayo de sol hasta los astros en los cie-
los, está sometido a leyes. De la obediencia a estas leyes dependen el orden
y la armonía del mundo natural. Es decir, que grandes principios de justicia
gobiernan la vida de todos los seres inteligentes, y de la conformidad a estos
principios depende el bienestar del universo. Antes que se creara la tierra
existía la ley de Dios. Los ángeles se rigen por sus principios y, para que este
mundo esté en armonía con el cielo, el hombre también debe obedecer los
estatutos divinos. Cristo dio a conocer al hombre en el Edén los preceptos de
la ley, ‘cuando alababan todas las estrellas del alba, y se regocijaban todos los
hijos de Dios’. Job 38:7. La misión de Cristo en la tierra no fue abrogar la ley,
sino hacer volver a los hombres por su gracia a la obediencia de sus precep-
tos.”— El Discurso Maestro de Jesucristo, p. 45.

b. Luego de haber pecado, ¿podemos obedecer la ley moral divina de los


Diez Mandamientos con nuestras propias fuerzas? ¿Por qué sí, o por qué
no? Romanos 8:3, 4.
“El apóstol Pablo presenta claramente la relación que existe entre la fe
y la ley bajo el nuevo pacto. Dice: ‘Justificados pues por la fe, tenemos paz
para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo’. ‘¿Luego deshacemos la
ley por la fe? En ninguna manera; antes establecemos la ley.’ ‘Porque lo que
era imposible a la ley, por cuanto era débil por la carne [no podía justificar
al hombre, porque éste en su naturaleza pecaminosa no podía guardar la
ley], Dios enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado, y a causa del
pecado, condenó al pecado en la carne; para que la justicia de la ley fuese
cumplida en nosotros, que no andamos conforme a la carne, mas conforme
al espíritu.’ Romanos 5:1; 3:31; 8:3, 4.”— Patriarcas y Profetas, p. 389.
“Antes que Adán cayese le era posible desarrollar un carácter justo por la
obediencia a la ley de Dios. Mas no lo hizo, y por causa de su caída tenemos
una naturaleza pecaminosa y no podemos hacernos justos a nosotros mis-
mos. Puesto que somos pecadores y malos, no podemos obedecer perfecta-
mente una ley santa. No tenemos justicia propia con que cumplir lo que la
ley de Dios exige.”— El Camino a Cristo, p. 62.
“Somos completamente impotentes para rescatarnos de las garras de Sa-
tanás; pero Dios ha señalado una vía de escape. El Hijo del Altísimo tiene
fuerza para pelear la batalla por nosotros; y por ‘Aquel que nos amó’, pode-
mos hacer ‘más que vencer’. Romanos 8:37.”—Testimonios para la Iglesia, tomo
5, p. 692.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 37


13 de febrero
Martes ^ Año Bíblico: Números 3-4

3. OBEDIENCIA PERFECTA BAJO EL NUEVO PACTO


a. ¿Cómo podemos presentar una obediencia perfecta a la ley de Dios?
Romanos 3:31; 1:16, 17.

“La condición para alcanzar la vida eterna es ahora exactamente la mis-


ma de siempre, tal cual era en el paraíso antes de la caída de nuestros pri-
meros padres: la perfecta obediencia a la ley de Dios, la perfecta justicia. Si
la vida eterna se concediera con alguna condición inferior a ésta, peligraría
la felicidad de todo el universo. Se le abriría la puerta al pecado con toda su
secuela de dolor y miseria para siempre…
“Cristo nos preparó una vía de escape. Vivió en esta tierra en medio de
pruebas y tentaciones como las que nosotros tenemos que arrostrar. Sin em-
bargo, su vida fue impecable. Murió por nosotros, y ahora ofrece quitar nues-
tros pecados y vestirnos de su justicia. Si os entregáis a Él y le aceptáis como
vuestro Salvador, por pecaminosa que haya sido vuestra vida, seréis contados
entre los justos, por consideración hacia Él. El carácter de Cristo reemplaza el
vuestro, y sois aceptados por Dios como si no hubierais pecado.
“Más aún, Cristo cambia el corazón, y habita en el vuestro por la fe. De-
béis mantener esta comunión con Cristo por la fe y la sumisión continua de
vuestra voluntad a Él. Mientras lo hagáis, Él obrará en vosotros para que que-
ráis y hagáis conforme a su beneplácito. Así podréis decir: ‘Aquella vida que
ahora vivo en la carne, la vivo por la fe en el Hijo de Dios, el cual me amó, y
se dio a sí mismo por mí’. Gálatas 2:20. Así dijo el Señor Jesús a sus discípulos:
‘No sois vosotros quienes habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla
en vosotros’. Mateo 10:20. De modo que si Cristo obra en vosotros, manifes-
taréis el mismo espíritu y haréis las mismas obras que Él: obras de justicia y
obediencia.”— El Camino a Cristo, pp. 62, 63.

b. ¿Cuál es la promesa de Dios bajo el nuevo pacto? Hebreos 8:10; Jeremías


31:33, 34.

“La obra que el cristianismo debe cumplir en el mundo no consiste en


despreciar la ley de Dios ni apartarse de su sagrada dignidad en lo más míni-
mo, sino escribir esa ley en la mente y el corazón. Cuando la ley de Dios se
implanta de ese modo en el alma del creyente, éste se acerca a la vida eterna
por los méritos de Jesús.”— Hijos e Hijas de Dios, p. 52.
“El nuevo pacto se estableció sobre ‘mejores promesas,’ la promesa del
perdón de los pecados, y de la gracia de Dios para renovar el corazón y poner-
lo en armonía con los principios de la ley de Dios.”— Patriarcas y Profetas, p. 389.

38 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


14 de febrero
Miércoles ^ Año Bíblico: Números 5-6

4. LA LEY DE DIOS EN EL CORAZÓN


a. ¿Cuándo es escrita la ley de Dios en el corazón de los creyentes? Romanos
5:1–5.
“La misma ley que fue grabada en tablas de piedra es escrita por el Espí-
ritu Santo sobre las tablas del corazón. En vez de tratar de establecer nues-
tra propia justicia, aceptamos la justicia de Cristo. Su sangre expía nuestros
pecados. Su obediencia es aceptada en nuestro favor. Entonces el corazón
renovado por el Espíritu Santo producirá los frutos del Espíritu. Mediante la
gracia de Cristo viviremos obedeciendo a la ley de Dios escrita en nuestro co-
razón. Al poseer el Espíritu de Cristo, andaremos como él anduvo. Por medio
del profeta, Cristo declaró respecto a sí mismo: ‘El hacer tu voluntad, Dios
mío, hame agradado; y tu ley está en medio de mis entrañas’. Salmos 40:8. Y
cuando vivió entre los hombres, dijo: ‘No me ha dejado solo el Padre; porque
yo, lo que a él agrada, hago siempre’. Juan 8:29.”— Patriarcas y Profetas, p. 389.

b. ¿Qué maravillosas promesas se nos proporcionan bajo el nuevo pacto?


Hebreos 8:11, 12.
“La fuente del corazón debe ser purificada antes que los raudales puedan
ser puros. El que está tratando de alcanzar el cielo por sus propias obras ob-
servando la ley, está intentando lo imposible. No hay seguridad para el que
tenga sólo una religión legal, sólo una forma de la piedad. La vida del cristia-
no no es una modificación o mejora de la antigua, sino una transformación
de la naturaleza. Se produce una muerte al yo y al pecado, y una vida entera-
mente nueva. Este cambio puede ser efectuado únicamente por la obra eficaz
del Espíritu Santo.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 143.
“Las bendiciones del nuevo pacto se basan únicamente en la misericor-
dia manifestada en el perdón de la injusticia y el pecado. El Señor especifi-
ca: ‘Porque seré propicio a sus injusticias, y nunca más me acordaré de sus
pecados y de sus iniquidades’. Hebreos 8:12. Todos los que se humillan de
corazón, confesando sus pecados, hallarán misericordia, gracia y seguridad.
“¿Ha dejado Dios de ser justo al manifestar misericordia con los pecado-
res? ¿Ha deshonrado su santa ley, y pasará, por lo tanto, por encima de ella?
Dios es fiel. No cambia. Las condiciones de la salvación siguen siendo las
mismas. La vida, la vida eterna, es para todos los que obedecen la ley de Dios.
La perfecta obediencia, manifestada en pensamiento, palabra y obra, es aho-
ra tan esencial como cuando el intérprete de la ley dijo: ‘Maestro, ¿haciendo
qué cosa heredaré la vida eterna?’ Jesús le contestó: ‘¿Qué está escrito en la
ley? ¿Cómo lees?… haz esto y vivirás’. Lucas 10:25–28.”—A Fin de Conocerle, p.
297.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 39


15 de febrero
Jueves ^ Año Bíblico: Números 7

5. EL PUEBLO DE DIOS QUE GUARDA LOS MANDAMIENTOS


a. ¿Qué está escrito concerniente al pueblo de Dios bajo el mensaje del ter-
cer ángel? Apocalipsis 12:17; 14:12.
“Bajo el nuevo pacto, las condiciones por las que se puede obtener la vida
eterna son las mismas que bajo el antiguo: una obediencia perfecta… En el
nuevo y mejor pacto, Cristo ha satisfecho la ley en lugar de los transgresores
de la ley, si ellos quieren recibirlo por fe como un Salvador personal... Mi-
sericordia y perdón son las recompensas de todos los que acuden a Cristo
confiando en sus méritos para que les quite los pecados. En el mejor pacto,
somos limpiados del pecado por la sangre de Cristo... El pecador es incapaz
de expiar un solo pecado. El poder está en el don gratuito de Cristo, una
promesa apreciada únicamente por los que se percatan de sus pecados y los
olvidan poniendo su alma desvalida sobre Cristo, [el Salvador que perdona
los pecados. Pondrá en sus corazones Su ley perfecta, que es ‘santa, justa y
buena’ (Romanos 7:12)].”—A Fin de Conocerle, p. 298.

b. Con base en las promesas del nuevo pacto, ¿quién forma realmente parte
del pueblo de Dios en estos últimos días? Hebreos 8:10; Isaías 51:7, 8.
“El gran obstáculo que se opone a la aceptación y a la proclamación de la
verdad, es la circunstancia de que ella acarrea inconvenientes y oprobio. Este
es el único argumento contra la verdad que sus defensores no han podido
nunca refutar. Pero esto no arredra a los verdaderos siervos de Cristo. Ellos
no esperan hasta que la verdad se haga popular. Convencidos como lo están
de su deber, aceptan resueltamente la cruz…
“Debemos escoger lo justo porque es justo, y dejar a Dios las consecuen-
cias. El mundo debe sus grandes reformas a los hombres de principios, fe y
arrojo. Esos son los hombres capaces de llevar adelante la obra de reforma
para nuestra época.”— El Conflicto de los Siglos, p. 453.

16 de febrero
Viernes ^ Año Bíblico: Números 8-9

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Por qué los Diez Mandamientos se colocaron en el arca en el lugar santísimo?
2. ¿Qué hábito aumentará enormemente mi felicidad en la vida?
3. ¿Cómo puedo cultivar y desarrollar este hábito?
4. Describe el mayor milagro del poder creador de Dios en nuestro beneficio.
5. ¿Cómo la experiencia del nuevo pacto distinguirá al remanente final del pue-
blo de Dios?

40 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


Sábado, 24 de febrero de 2024
Lección 8 ^ Año Bíblico: Números 26-27

El Pacto Antiguo
“Porque si aquel [pacto] primero hubiera sido sin defecto,
ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo”
(Hebreos 8:7).

“Los términos del pacto antiguo eran: Obedece y vivirás. ‘El hombre que
los hiciere, vivirá en ellos’ (Ezequiel 20:11; Levítico 18:5); pero ‘maldito el
que no confirmare las palabras de esta ley para cumplirlas.’ Deuteronomio
27:26.”— Patriarcas y Profetas, pp. 388, 389.
Lectura adicional: La Maravillosa Gracia de Dios, p. 135;
El Deseado de Todas las Gentes, pp. 629–631.

18 de febrero
Domingo ^ Año Bíblico: Números 12-13

1. UN PACTO MONUMENTAL
a. ¿Cuándo y dónde se estableció el antiguo pacto? Éxodo 19:1, 2.

“Poco tiempo después de acampar junto al Sinaí, se le indicó a Moisés que


subiera al monte a encontrarse con Dios. Trepó solo el escabroso y empinado
sendero, y llegó cerca de la nube que señalaba el lugar donde estaba Jehová.
Israel iba a entrar ahora en una relación más estrecha y más peculiar con el
Altísimo, iba a ser recibido como iglesia y como nación bajo el gobierno de
Dios.”— Patriarcas y Profetas, p. 310.

b. ¿Cuál fue la condición del pacto en el Sinaí, y por qué es importante este
principio? Éxodo 19:3–6. ¿Cómo respondió el pueblo? Éxodo 19:8.

“La obediencia era la única condición por la que el antiguo Israel había
de recibir el cumplimiento de las promesas que lo convirtieran en el pueblo
grandemente favorecido por Dios, y la obediencia a esa ley traerá tan grandes
bendiciones a los individuos y a las naciones hoy día como las que hubiera
traído a los hebreos.”— Mensajes Selectos, tomo 1, p. 255.
“Moisés regresó al campamento, y reuniendo a los ancianos de Israel, les
repitió el mensaje divino. Su contestación fue: ‘Todo lo que Jehová ha dicho
haremos.’ Así concertaron un solemne pacto con Dios, prometiendo acep-
tarle como su Soberano, por lo cual se convirtieron, en sentido especial, en
súbditos de su autoridad.”— Patriarcas y Profetas, p. 310.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 41


19 de febrero
Lunes ^ Año Bíblico: Números 14-15

2. CELO SIN CONOCIMIENTO


a. ¿En qué depositaron su confianza los israelitas cuando hicieron su pro-
mesa de obedecer la ley de Dios? Romanos 10:1–3.

“Los israelitas no percibían la pecaminosidad de su propio corazón, y no


comprendían que sin Cristo les era imposible guardar la ley de Dios; y con
excesiva premura concertaron su pacto con Dios. Creyéndose capaces de ser
justos por sí mismos, declararon: ‘Haremos todas las cosas que Jehová ha di-
cho, y obedeceremos’. Éxodo 24:7.”— Patriarcas y Profetas, p. 388.

b. ¿Cuándo cometió el mismo error el pueblo judío en tiempos de Cristo?


Mateo 5:20; Romanos 9:31, 32.

“Aunque la ley es santa, los judíos no podían alcanzar la justicia por sus
propios esfuerzos para guardarla. Los discípulos de Cristo debían buscar una
justicia diferente de la justicia de los fariseos, si querían entrar en el reino de
los cielos. Dios les ofreció, en su Hijo, la justicia perfecta de la ley. Si querían
abrir sus corazones para recibir plenamente a Cristo, entonces la vida misma
de Dios, su amor, moraría en ellos, transformándolos a su semejanza; así,
por el don generoso de Dios, poseerían la justicia exigida por la ley. Pero los
fariseos rechazaron a Cristo; ‘ignorando la justicia de Dios, y procurando
establecer la suya propia’ (Romanos 10:3), no querían someterse a la justicia
de Dios.”— El Discurso Maestro de Jesucristo, p. 50.

c. ¿Qué está escrito acerca de nuestra propia justicia? Isaías 64:6.


“[Se cita Isaías 64:6.] Todo cuanto podamos hacer por nosotros mismos
está manchado por el pecado. Pero el Hijo de Dios ‘apareció para quitar nues-
tros pecados, y no hay pecado en él’.”— Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 253.
“A menos que el Espíritu Santo actúe sobre el corazón humano, tropeza-
remos y caeremos a cada paso. Los esfuerzos del hombre solo no son nada
sino inutilidad, pero la cooperación con Cristo significa victoria.”— Mensajes
Selectos, tomo 1, p. 446.
“Cuando la luz de Cristo resplandezca en nuestra alma, veremos cuán
impuros somos; discerniremos el egoísmo de nuestros motivos y la enemis-
tad contra Dios, que han manchado todos los actos de nuestra vida. Entonces
conoceremos que nuestra propia justicia es en verdad como trapos de inmun-
dicia y que solamente la sangre de Cristo puede limpiarnos de la contami-
nación del pecado y renovar nuestro corazón a la semejanza del Señor.”— El
Camino a Cristo, pp. 28, 29.

42 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


20 de febrero
Martes ^ Año Bíblico: Números 16-18

3. EL PROPÓSITO DEL PACTO ANTIGUO


a. Puesto que el pacto de gracia era suficiente para la salvación, ¿por qué se
estableció otro pacto en el Sinaí? Gálatas 3:19; Salmo 119:18; Apocalipsis
3:17, 18.

“Si el pacto confirmado a Abrahán contenía la promesa de la redención,


¿por qué se hizo otro pacto en el Sinaí? Durante su servidumbre, el pueblo
había perdido en alto grado el conocimiento de Dios y de los principios del
pacto de Abrahán. Al libertarlos de Egipto, Dios trató de revelarles su poder y
su misericordia para inducirlos a amarle y a confiar en él. Los llevó al mar Rojo,
donde, perseguidos por los egipcios, parecía imposible que escaparan, para que
pudieran ver su total desamparo y necesidad de ayuda divina; y entonces los
libró. Así se llenaron de amor y gratitud hacia él, y confiaron en su poder para
ayudarles. Los ligó a sí mismo como su libertador de la esclavitud temporal.
“Pero había una verdad aun mayor que debía grabarse en sus mentes.
Como habían vivido en un ambiente de idolatría y corrupción, no tenían
un concepto verdadero de la santidad de Dios, de la extrema pecaminosidad
de su propio corazón, de su total incapacidad para obedecer la ley de Dios, y
de la necesidad de un Salvador. Todo esto se les debía enseñar.”— Patriarcas y
Profetas, p. 387, 388.

b. ¿Qué sucedió unas pocas semanas después que los israelitas prometieran
cumplir la ley de Dios? Éxodo 32:1–6. ¿En quién se hallaba la falta en el
pacto hecho en el Sinaí? Hebreos 8:8.

“Con profundo desánimo e ira debido al gran pecado de ellos, él [Moi-


sés] arrojó al suelo las tablas de piedra, por orden divina, con el propósito de
romperlas a la vista del pueblo, mostrando así que éste había quebrantado el
pacto tan recientemente hecho con Dios.”— Comentario Bíblico ASD [Comenta-
rios de E. G. de White], tomo 1, p. 1123.
“[Los israelitas] habían temblado de terror ante el monte; y sin embargo,
apenas unas pocas semanas después, quebrantaron su pacto con Dios al pos-
trarse a adorar una imagen fundida. No podían esperar el favor de Dios por
medio de un pacto que ya habían roto; y entonces viendo su pecaminosidad
y su necesidad de perdón, llegaron a sentir la necesidad del Salvador revela-
do en el pacto de Abrahán y simbolizado en los sacrificios. De manera que
mediante la fe y el amor se vincularon con Dios como su libertador de la
esclavitud del pecado. Ya estaban capacitados para apreciar las bendiciones
del nuevo pacto.”— Patriarcas y Profetas, p. 341.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 43


21 de febrero
Miércoles ^ Año Bíblico: Números 19-20

4. LA EXPERIENCIA DE PEDRO CON EL “PACTO ANTIGUO”


a. Antes de ir al Getsemaní, ¿qué le prometió Pedro a Jesús? Lucas 22:33.

b. ¿Cuál fue la respuesta de Cristo a Pedro? Lucas 22:34.


“Pedro se conceptuaba fuerte al comienzo de su discipulado. Como el
fariseo, en su propia estima no era ‘como los otros hombres’. Cuando Cristo,
la víspera de ser traicionado, amonestó de antemano a sus discípulos: ‘Todos
seréis escandalizados en mí esta noche’, Pedro le dijo confiadamente: ‘Aun-
que todos sean escandalizados, mas no yo’. Marcos 14:27. Pedro no conocía
el peligro que corría, y lo descarrió la confianza propia. Se creyó capaz de
resistir la tentación.”— Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 118.

c. Poco después, ¿cuál fue la conducta de Pedro cuando le preguntaron por


su relación con Jesús? Mateo 26:69–74.

d. ¿Cómo respondió Jesús cuando Pedro le negó? Lucas 22:61, 62.

“Cuando el canto del gallo le hizo recordar las palabras de Cristo, sor-
prendido y emocionado por lo que acababa de hacer, se volvió y miró a su
Maestro. En ese momento Cristo miró a Pedro, y éste se comprendió a sí
mismo ante la triste mirada, en la que se mezclaban la compasión y el amor
hacia él. Salió y lloró amargamente, pues aquella mirada de Cristo quebrantó
su corazón. Pedro había llegado al punto de la conversión, y amargamente se
arrepintió de su pecado. Fue semejante al publicano en su contrición y arre-
pentimiento, y como éste, también alcanzó misericordia. La mirada de Cristo
le dio la seguridad del perdón.”— Ibíd., pp. 117, 118.
“Por haber dormido cuando Jesús le había invitado a velar y orar, Pedro
había preparado el terreno para su grave pecado. Todos los discípulos, por
dormir en esa hora crítica, sufrieron una gran pérdida. Cristo conocía la
prueba de fuego por la cual iban a pasar. Sabía cómo iba a obrar Satanás para
paralizar sus sentidos a fin de que no estuviesen preparados para la prueba.
Por lo tanto, los había amonestado. Si hubiesen pasado en vigilia y oración
aquellas horas transcurridas en el huerto, Pedro no habría tenido que depen-
der de su propia y débil fuerza. No habría negado a su Señor. Si los discípulos
hubiesen velado con Cristo en su agonía, habrían estado preparados para
contemplar sus sufrimientos en la cruz. Habrían comprendido en cierto gra-
do la naturaleza de su angustia abrumadora. Habrían podido recordar sus
palabras que predecían sus sufrimientos, su muerte y su resurrección.”— El
Deseado de Todas las Gentes, p. 660.

44 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


22 de febrero
Jueves ^ Año Bíblico: Números 21-22

5. SIN CRISTO, NADA SE PUEDE HACER


a. ¿Cuán inútil es nuestra batalla contra el pecado por nosotros mismos?
Romanos 7:14, 15, 18–25; Hebreos 8:7.
“El espíritu de servidumbre se engendra cuando se procura vivir de acuer-
do con una religión legal, mediante esfuerzos para cumplir las demandas de
la ley por nuestra propia fuerza. Sólo hay esperanza para nosotros cuando
nos ponemos bajo el pacto hecho con Abrahán, que es el pacto de gracia por
la fe en Cristo Jesús. El Evangelio predicado a Abrahán, por medio del cual
tuvo esperanza, es el mismo Evangelio que nos es predicado a nosotros hoy,
mediante el cual tenemos esperanza. Abrahán contempló a Jesús, quien es
también el Autor y Consumador de nuestra fe.”— Comentario Bíblico ASD [Co-
mentarios de E. G. de White], tomo 6, p. 1077.

b. ¿Qué dijo Cristo acerca de nuestros esfuerzos sin Él? Juan 15:5.
“La vida de la vid llega a ser la vida del pámpano. Así también el alma
muerta en delitos y pecados recibe vida por su unión con Cristo. Por la fe en
él como Salvador personal, se forma esa unión. El pecador une su debilidad a
la fuerza de Cristo, su vacuidad a la plenitud de Cristo, su fragilidad a la per-
durable potencia de Cristo. Entonces tiene el sentir de Cristo. La humanidad
de Cristo ha tocado nuestra humanidad, y nuestra humanidad ha tocado la
divinidad. Así, por la intervención del Espíritu Santo, el hombre viene a ser
participante de la naturaleza divina. Es acepto en el Amado.
“Esta unión con Cristo, una vez formada, debe ser mantenida. [Se cita
Juan 15:5.] Este no es un contacto casual, ninguna unión que se realiza y se
corta luego. El sarmiento llega a ser parte de la vid viviente. La comunicación
de la vida, la fuerza y el carácter fructífero de la raíz a las ramas se verifica
en forma constante y sin obstrucción. Separado de la vid, el sarmiento no
puede vivir. Así tampoco, dijo Jesús, podéis vivir separados de mí. La vida
que habéis recibido de mí puede conservarse únicamente por la comunión
continua. Sin mí, no podéis vencer un solo pecado, ni resistir una sola tenta-
ción.”— El Deseado de Todas las Gentes, pp. 629, 630.

23 de febrero
Viernes ^ Año Bíblico: Números 23-25

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. Considera los aspectos positivos y negativos de la promesa de Israel en el Sinaí.
2. ¿Qué advertencias debemos extraer de la debilidad de Israel?
3. ¿Cómo puede Dios sacarle partido a nuestros propios errores y fracasos?
4. ¿Qué debemos recordar siempre de la actitud de Cristo cuando Pedro cayó?
5. ¿Por qué Jesús se compara a sí mismo con una vid?

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 45


SÁBADO, 2 DE MARZO DE 2024
Ofrenda del Primer Sábado
Para una Capilla y Escuela en Hîncesti, Moldavia
Hîncesti es el municipio administrativo del dis-
UKRAINE tr
trito del mismo nombre situado en el noroeste Dnes
UCRANIA
de la República de Moldavia. El distrito tiene Edinita

una población de 122.000 habitantes y está Balti


Botosani
surcado por carreteras muy transitadas
que conducen a Rumanía y Ucrania. La MOLDAVIA
economía de esta zona se basa en la agri- RUMANÍA Kishinev
cultura (incluidos viñedos y huertos),


así como en otros productos como cal-

rp
Comrat

a
tos
zados, indumentaria, muebles y bloques
de hormigón para la construcción. Mar
La religión ortodoxa es la predomi-
Braila
Negro
nante (casi el 96%) en esta zona, mientras
que otras confesiones protestantes Bucharest
constitu- be
nu Constanta
Da
yen el 4% restante. El mensaje de los ASD Movi-
miento de Reforma fue introducido en esta ciudad
por una familia que se trasladó aquí en 1959. Otras dos familias se unieron a la
iglesia en 1973 y 1983, respectivamente. Así, por la gracia de Dios, el número
de miembros de la iglesia aumentó y, como resultado, se organizó aquí una
congregación en 1990.
Al principio, los miembros se reunían en casas de familias locales donde ce-
lebraban el culto. Luego, en 2000, se compró una casa particular, que sirvió de
lugar de culto durante 20 años. Hoy, la mayoría de los miembros son familias
jóvenes y niños. En las afueras de la ciudad, se ha adquirido una parcela de te-
rreno más grande para construir una casa de culto donde difundir el Evangelio,
junto con un aula educativa para enseñar a nuestros hijos a prepararse para los
últimos momentos de la historia de la Tierra. “No solamente debe construirse
una sencilla casa de adoración, sino que también deberían hacerse todos los
arreglos necesarios para el establecimiento permanente de una escuela de igle-
sia.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 6, p. 113.
“El Señor cuenta con personas para que se ocupen en la obra de establecer
escuelas de iglesia tan pronto como se hace algo para preparar el camino para
ellos…
“Es apremiante para los observadores del sábado separar a sus hijos de las
asociaciones mundanales y colocarlos bajo los mejores maestros, quienes harán
de la Biblia el fundamento de todo estudio.”—Ibíd., p. 114.
Que el Señor toque los corazones y bendiga a nuestros queridos hermanos
de todo el mundo para que contribuyan generosamente a este proyecto, a fin
de que la luz se difunda aquí y juntos podamos apresurar la venida de nuestro
Salvador, Jesucristo. Les agradecemos de antemano.

Sus hermanos de Hîncesti

46 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


Sábado, 2 de marzo de 2024
Lección 9 ^ Año Bíblico: Deuteronomio 3-4

El Santuario Terrenal y el Celestial


“Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin
derramamiento de sangre no se hace remisión” (Hebreos 9:22).

Ofrenda del Primer Sábado—Para una Capilla y Escuela en Hîncesti, Moldavia


“Cristo dio su vida para asegurarnos este inestimable tesoro; pero sin la
regeneración por medio de la fe en su sangre, no hay remisión de pecados, ni
tesoro alguno para el alma que perece.”— Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 84.
Lectura adicional: El Conflicto de los Siglos, pp. 405–416.

25 de febrero
Domingo ^ Año Bíblico: Números 28-29

1. EL PROPÓSITO DEL SANTUARIO


a. ¿Cuál era el propósito de Dios al edificar el santuario? Éxodo 25:8.

“En cuanto a la construcción del santuario, como morada de Dios, Moi-


sés recibió instrucciones para hacerlo de acuerdo con el modelo de las cosas
que estaban en los cielos. Dios lo llamó al monte y le reveló las cosas celestia-
les; y el tabernáculo, con todo lo perteneciente a él, fue hecho a semejanza
de ellas.
“Así reveló Dios a Israel, al cual deseaba hacer morada suya, su glorioso
ideal de carácter. [El modelo les fue mostrado en el monte cuando la ley les
fue dada desde el Sinaí…]
“Pero por sí mismos, eran impotentes para alcanzar ese ideal. La revela-
ción del Sinaí sólo podía impresionarlos con su necesidad e impotencia. Otra
lección debía enseñar el tabernáculo mediante su servicio de sacrificios: la
lección del perdón del pecado y el poder de obedecer para vida, por medio
del Salvador.”— La Fe por la Cual Vivo, p. 194.

b. ¿Quién cumpliría el verdadero propósito del santuario? Juan 1:14;


1 Corintios 3:16, 17.

“Por medio de Cristo se había de cumplir el propósito simbolizado por el


tabernáculo: ese glorioso edificio.”— Ibíd.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 47


26 de febrero
Lunes ^ Año Bíblico: Números 30-31

2. EL SANTUARIO TERRENAL
a. Describe el primer departamento del santuario terrenal y sus objetos
principales. Hebreos 9:1, 2.

“En el primer departamento, o lugar santo, estaban la mesa para el pan


de la proposición, el candelero o la lámpara y el altar del incienso. La mesa
del pan de la proposición estaba hacia el norte. Así como su cornisa decora-
da, estaba revestida de oro puro. Sobre esta mesa los sacerdotes debían poner
cada sábado doce panes, arreglados en dos pilas y rociados con incienso. Por
ser santos, los panes que se quitaban, debían ser comidos por los sacerdotes.
Al sur, estaba el candelero de siete brazos, con sus siete lámparas. Sus brazos
estaban decorados con flores exquisitamente labradas y parecidas a lirios; el
conjunto estaba hecho de una pieza sólida de oro. Como no había ventanas
en el tabernáculo, las lámparas nunca se extinguían todas al mismo tiempo,
sino que ardían día y noche. Exactamente frente al velo que separaba el lugar
santo del santísimo y de la inmediata presencia de Dios, estaba el altar de
oro del incienso. Sobre este altar el sacerdote debía quemar incienso todas
las mañanas y todas las tardes; sobre sus cuernos se aplicaba la sangre de la
víctima de la expiación, y el gran día de la expiación era rociado con san-
gre. El fuego que estaba sobre este altar fue encendido por Dios mismo, y se
mantenía como sagrado. Día y noche, el santo incienso difundía su fragancia
por los recintos sagrados del tabernáculo y por sus alrededores.”— Patriarcas y
Profetas, pp. 359, 360.

b. Describe el lugar santísimo y su servicio. Hebreos 9:3–7.

“Más allá del velo interior estaba el lugar santísimo que era el centro del
servicio de expiación e intercesión, y constituía el eslabón que unía el cielo y
la tierra. En este departamento estaba el arca, que era un cofre de madera de
acacia, recubierto de oro por dentro y por fuera, y que tenía una cornisa de
oro encima. Era el repositorio de las tablas de piedra, en las cuales Dios mis-
mo había grabado los diez mandamientos. Por consiguiente, se lo llamaba
arca del testamento de Dios, o arca de la alianza, puesto que los diez manda-
mientos eran la base de la alianza hecha entre Dios e Israel.”— Ibíd.
“Una vez al año, en el gran día de la expiación, el sacerdote entraba en el
lugar santísimo para limpiar el santuario. La obra que se llevaba a cabo allí
completaba el ciclo anual de ceremonias.”— Ibíd., p. 368.

48 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


27 de febrero
Martes ^ Año Bíblico: Números 32-33

3. REDENCIÓN ETERNA
a. ¿Cuál es el resultado seguro de la intercesión de Cristo? Hebreos 9:11, 12.
“Nuestro gran Sumo Sacerdote completó la ofrenda de sacrificio de sí
mismo cuando sufrió fuera de la puerta. Entonces efectuó una perfecta ex-
piación por los pecados del pueblo. Jesús es nuestro Abogado, nuestro Sumo

Ofrenda del Primer Sábado—Para una Capilla y Escuela en Hîncesti, Moldavia


Sacerdote, nuestro Intercesor. Por lo tanto, nuestra posición actual es como
la de los israelitas, que estaban en el atrio externo, esperando esa bendita
esperanza, el glorioso aparecimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo…
“Cuando el sumo sacerdote entraba en el lugar santo, que representa el
lugar donde nuestro Sumo Sacerdote está ahora intercediendo, y ofrecía sa-
crificios en el altar, afuera no se ofrecían sacrificios propiciatorios. Mientras
el sumo sacerdote estaba intercediendo adentro, cada corazón había de incli-
narse contrito delante de Dios, rogando el perdón de las transgresiones. A la
muerte de Cristo, el símbolo se encontró con la realidad, el Cordero muerto
por los pecados del mundo. El gran Sumo Sacerdote ha efectuado el único
sacrificio que será de valor alguno…
“En su intercesión como nuestro Abogado, Cristo no necesita de la virtud
del hombre, de la intercesión del hombre. Cristo es el único que lleva los
pecados, la única ofrenda por el pecado. La oración y la confesión han de ser
ofrecidas únicamente a Aquel que ha entrado una sola vez para siempre en el
lugar santo.”—A Fin de Conocerle, p. 74.

b. ¿Cómo nuestra vida puede ser beneficiada por la sangre de Cristo?


Hebreos 9:13, 14.
“Mientras confesamos nuestros pecados e invocamos la eficacia de la san-
gre expiatoria de Cristo, nuestras oraciones han de ascender al cielo, con la
fragancia de los méritos del carácter de nuestro Salvador. A pesar de nuestra
indignidad, siempre hemos de tener en cuenta que hay Uno que puede quitar
el pecado y salvar al pecador. Cristo quitará todo pecado reconocido delante
de Dios con corazón contrito. Esta creencia es la vida de la iglesia.”—Testimo-
nios para los Ministros, p. 92.
“Decid al Señor: Mis iniquidades han hecho separación entre mí y mi
Dios. Señor, perdona mis transgresiones. Borra mis pecados de tu libro de
memoria. Gracias a su santo nombre, hay perdón en él, y podéis ser conver-
tidos y transformados.”— Ibíd., p. 97.
“La sangre de Cristo es eficaz, pero debe ser aplicada continuamente…
“Si en la antigüedad era necesario que lo impuro fuera purificado por la
sangre de la aspersión, cuán esencial es para quienes viven en los peligros de
los últimos días, y están expuestos a las tentaciones de Satanás, que la sangre
de Cristo sea aplicada diariamente a sus corazones.”—The Faith I Live By, p. 200.
Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 49
28 de febrero
Miércoles ^ Año Bíblico: Números 34-35

4. LA VALIDACIÓN DEL NUEVO PACTO


a. ¿Cuándo se ratificó el pacto de la gracia? Hebreos 9:22–24.
“El pacto de la gracia se estableció primeramente con el hombre en el
Edén, cuando después de la caída se dio la promesa divina de que la simiente
de la mujer heriría a la serpiente en la cabeza. Este pacto puso al alcance de
todos los hombres el perdón y la ayuda de la gracia de Dios para obedecer
en lo futuro mediante la fe en Cristo. También les prometía la vida eterna
si eran fieles a la ley de Dios. Así recibieron los patriarcas la esperanza de la
salvación.
“Este mismo pacto le fue renovado a Abrahán en la promesa: ‘En tu si-
miente serán benditas todas las gentes de la tierra’. Génesis 22:18. Esta pro-
mesa dirigía los pensamientos hacia Cristo. Así la entendió Abrahán, (véase
Gálatas 3:8, 16), y confió en Cristo para obtener el perdón de sus pecados. Fue
esta fe la que se le contó como justicia. El pacto con Abrahán también man-
tuvo la autoridad de la ley de Dios. El Señor se le apareció y le dijo: ‘Yo soy el
Dios Todopoderoso; anda delante de mí, y sé perfecto’. El testimonio de Dios
respecto a su siervo fiel fue: ‘Oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis
mandamientos, mis estatutos y mis leyes,’ y el Señor le declaró: ‘Estableceré
mi pacto entre mí y ti, y tu simiente después de ti en sus generaciones’…
“Aunque este pacto fue hecho con Adán, y más tarde se le renovó a
Abrahán, no pudo ratificarse sino hasta la muerte de Cristo. Existió en vir-
tud de la promesa de Dios desde que se indicó por primera vez la posibilidad
de redención. Fue aceptado por fe: no obstante, cuando Cristo lo ratificó fue
llamado el pacto nuevo. La ley de Dios fue la base de este pacto, que era sen-
cillamente un arreglo para restituir al hombre a la armonía con la voluntad
divina, colocándolo en situación de poder obedecer la ley de Dios.”— Patriar-
cas y Profetas, pp. 386, 387.

b. ¿Cómo explicó el apóstol Pablo el cumplimiento en Cristo del sistema


hebreo de sacrificios? Hebreos 9:24–26.
“Escuchad mientras [Pablo] explica claramente la obra del Redentor como
el gran sumo sacerdote de la humanidad: el que por el sacrificio de su propia
vida había de expiar el pecado una vez por todas, y emprender entonces su
ministerio en el santuario celestial. Se hizo entender a los oyentes de Pablo
que el Mesías cuyo advenimiento habían anhelado, había venido ya; que su
muerte era la realidad prefigurada por todas las ofrendas de los sacrificios, y
que su ministerio en el santuario celestial era el gran objeto que arrojaba su
sombra hacia atrás y aclaraba el ministerio del sacerdocio judío.”— Los Hechos
de los Apóstoles, p. 200.

50 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


29 de febrero
Jueves ^ Año Bíblico: Números 36

5. LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO


a. ¿Qué es prometido a los que aceptan el pacto de la gracia? Hebreos 9:27,
28; Salmos 50:1–5; Isaías 25:9.

Ofrenda del Primer Sábado—Para una Capilla y Escuela en Hîncesti, Moldavia


“El Señor desea que apreciemos el gran plan de la redención, que com-
prendamos nuestro elevado privilegio como hijos de Dios, y que caminemos
delante de él en obediencia y agradecimiento. Desea que le sirvamos en no-
vedad de vida, con alegría cada día. Anhela que la gratitud brote de nuestro
corazón porque nuestro nombre está escrito en el libro de la vida del Corde-
ro, porque podemos poner todos nuestros cuidados sobre Aquel que cuida de
nosotros. Él nos ordena que nos regocijemos porque somos la herencia del
Señor, porque la justicia de Cristo es el manto blanco de sus santos, porque
tenemos la bendita esperanza de la pronta venida de nuestro Salvador.”— Pa-
labras de Vida del Gran Maestro, p. 240.
“Somos peregrinos y extranjeros que esperamos la bienaventurada es-
peranza, la manifestación gloriosa de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, y
oramos por ella. Si creemos esto y lo manifestamos en nuestra vida práctica,
¡qué acción vigorosa inspirarán esta fe y esta esperanza; qué ferviente amor
mutuo; qué vida cuidadosa y santa para la gloria de Dios; y en el respeto que
manifestemos por la remuneración, qué nítidas líneas de demarcación nos
distinguirán con evidencia del mundo!
“La verdad de que Cristo viene debe ser mantenida ante toda mente.”— El
Evangelismo, p. 164.

b. ¿Qué petición debemos incluir en nuestras oraciones? Apocalipsis 22:20.

1 de marzo
Viernes ^ Año Bíblico: Deuteronomio 1-2

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Qué bendiciones tiene Dios para mí al estudiar el santuario?
2. Explica el significado de cada uno de los objetos del santuario.
3. ¿Qué debemos entender acerca del sacrificio de Cristo en nuestro beneficio?
4. ¿Por qué el nuevo pacto se llama así, a pesar de que ya existía en tiempos de
Abrahán?
5. ¿Cuál es la culminación de todas nuestras esperanzas y cómo ha de influir en
nuestra vida diaria?

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 51


Sábado, 9 de marzo de 2024
Lección 10 ^ Año Bíblico: Deuteronomio 24-27

La Superioridad del
Sacrificio de Cristo
“Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo
sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios, de
ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos
por estrado de sus pies; porque con una sola ofrenda hizo
perfectos para siempre a los santificados” (Hebreos 10:12–14).

“Pablo y sus colaboradores proclamaron la doctrina de la justicia por la fe


en el sacrificio expiatorio de Cristo. Presentaban a Cristo como Aquel que, al
ver la impotente condición de la especie caída, vino a redimir a los hombres
y mujeres viviendo una vida de obediencia a la ley de Dios y pagando la pe-
nalidad de la desobediencia. Y a la luz de la cruz, muchos que nunca habían
conocido antes al Dios verdadero empezaron a comprender la grandeza del
amor del Padre.”— Los Hechos de los Apóstoles, pp. 168, 169.
Lectura adicional: El Deseado de Todas las Gentes, pp. 130–138.

3 de marzo
Domingo ^ Año Bíblico: Deuteronomio 5-7

1. LA INEFICACIA DE LOS SACRIFICIOS DE ANIMALES


a. ¿Por qué los sacrificios ofrecidos en el santuario terrenal no podían per-
donar los pecados? Hebreos 10:1–4.

“La sangre de los animales no podía satisfacer las demandas de Dios como
sacrificio expiatorio por la transgresión de su ley. La vida de un animal era de
valor inferior a la del pecador delincuente, por lo tanto no podía constituir
un rescate por el pecado. Dios podía aceptarla sólo como una representación
de la ofrenda de su Hijo…
“Dios hizo al hombre perfecto y recto, y después de la transgresión nin-
gún sacrificio podía ser aceptable para Dios en favor del ser humano, a menos
que el valor de la ofrenda fuera superior al del hombre como era éste cuando
se encontraba en su estado de perfección e inocencia.”— Exaltad a Jesús, p. 18.
“Todo el plan del culto de los sacrificios era una predicción de la muerte
del Salvador para redimir al mundo. No habría eficacia en estas ofrendas
cuando el gran suceso al cual señalaran durante siglos fuese consumado.”—
El Deseado de Todas las Gentes, p. 137.

52 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


4 de marzo
Lunes ^ Año Bíblico: Deuteronomio 8-10

2. EL SUMO SACERDOTE PLENAMENTE CUALIFICADO


a. ¿Quién es el único que puede redimir al pecador, y por qué? Hebreos
10:5–10.
“Sobre Cristo no se impuso ningún requisito. Él tenía poder para depo-
ner su vida y para volverla a tomar. No se ejerció sobre él ningún grado de
coerción para que aceptara la tarea de redimir a los seres humanos. Su sacri-
ficio fue enteramente voluntario. Su vida era suficientemente valiosa como
para rescatar a los seres humanos de su condición caída.”— Exaltad a Jesús, p. 18.

b. ¿Qué le otorgó autoridad a Cristo para ser nuestro Sumo Sacerdote?


Hebreos 10:11–14.
“El inmaculado Hijo de Dios pendía de la cruz: su carne estaba lacerada
por los azotes; aquellas manos que tantas veces se habían extendido para
bendecir, estaban clavadas en el madero; aquellos pies tan incansables en los
ministerios de amor estaban también clavados a la cruz; esa cabeza real esta-
ba herida por la corona de espinas; aquellos labios temblorosos formulaban
clamores de dolor. Y todo lo que sufrió: las gotas de sangre que cayeron de
su cabeza, sus manos y sus pies, la agonía que torturó su cuerpo y la inefable
angustia que llenó su alma al ocultarse el rostro de su Padre, habla a cada hijo
de la humanidad y declara: Por ti consiente el Hijo de Dios en llevar esta car-
ga de culpabilidad; por ti saquea el dominio de la muerte y abre las puertas
del Paraíso. El que calmó las airadas ondas y anduvo sobre la cresta espumosa
de las olas, el que hizo temblar a los demonios y huir a la enfermedad, el que
abrió los ojos de los ciegos y devolvió la vida a los muertos, se ofrece como
sacrificio en la cruz, y esto por amor a ti.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 703.

c. ¿Por qué, siendo completamente inocente, murió Cristo en la cruz?


2 Corintios 5:21; Isaías 53:5, 6, 8, 11.
“No fue sólo por su muerte en la cruz como Cristo realizó su obra de sal-
var a los hombres. Ignominia, sufrimiento y humillación fueron una parte
de la misión: [se cita Isaías 53:5.] Cristo llevó este castigo por los pecados del
transgresor. Ha llevado el castigo por cada hombre y por eso puede rescatar
a cada alma, no importa cuán caída sea su condición, si acepta la ley de Dios
como su norma de justicia.”— Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de
White], tomo 4, p. 1169.
“Cristo fue tratado como nosotros merecemos a fin de que nosotros pu-
diésemos ser tratados como él merece. Fue condenado por nuestros pecados,
en los que no había participado, a fin de que nosotros pudiésemos ser justifi-
cados por su justicia, en la cual no habíamos participado. Él sufrió la muerte
nuestra, a fin de que pudiésemos recibir la vida suya.”— El Deseado de Todas las
Gentes, p. 16.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 53


5 de marzo
Martes ^ Año Bíblico: Deuteronomio 11-13

3. LIBRE ACCESO AL TRONO DE LA GRACIA


a. Teniendo a Cristo como Sumo Sacerdote, ¿cómo podemos acercarnos al
trono de la gracia? Efesios 2:17, 18; Hebreos 4:16; 10:19, 22.

“Nuestra voluntad debe entregarse completamente a la voluntad divina.


Nuestros sentimientos, deseos, intereses y honor deben identificarse con la
prosperidad del reino de Cristo y el honor de su causa, recibiendo nosotros
constantemente la gracia de él y aceptando Cristo nuestra gratitud. “Cuando
se ha formado esta intimidad de conexión y comunión, nuestros pecados
son puestos sobre Cristo, su justicia nos es imputada. Él fue hecho pecado
por nosotros, para que pudiésemos ser hechos justicia de Dios en él. Tenemos
acceso a Dios por él; somos aceptos en el Amado.”—Testimonios para la Iglesia,
tomo 5, p. 212.
“Que cada uno de vosotros examine su propio corazón, limpie el conta-
minado templo del alma, y vele en oración. Determinad que buscaréis a Jesús
hasta que lo encontréis; que no lo soltaréis hasta que su amor more en vues-
tro corazón y el Espíritu subyugue vuestra vida y amolde vuestro carácter.
Luego creed, y con confianza acercaos a su trono, sabiendo que él escuchará
vuestras oraciones.”— Ibíd., p. 123.

b. ¿Cuál será el resultado de nuestra conexión con Cristo? Hebreos 10:23–25.

“Los que no sienten la necesidad de buscar la reunión de los santos, con


la preciosa seguridad de que el Señor se reunirá con ellos, demuestran cuán
livianamente aprecian la ayuda que Dios les ha proporcionado.”— Comentario
Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 7, p. 945.
“Jesús está en el Lugar Santísimo, para comparecer por nosotros ante la
presencia de Dios. Allí, no cesa de presentar a su pueblo momento tras mo-
mento, como completo en Él. Pero, por estar así representados delante del
Padre, no hemos de imaginar que podemos abusar de su misericordia y vol-
vernos descuidados, indiferentes y licenciosos. Cristo no es el ministro del
pecado. Estamos completos en Él, aceptados en el Amado, únicamente si
permanecemos en Él por fe.
“Nunca podemos alcanzar la perfección por medio de nuestras propias
obras buenas. El alma que contempla a Jesús mediante la fe, repudia su pro-
pia justicia. Se ve a sí misma incompleta, y considera su arrepentimiento
como insuficiente, débil su fe más vigorosa, magro su sacrificio más costoso;
y se abate con humildad al pie de la cruz. Pero una voz le habla desde los orá-
culos de la Palabra de Dios. Con asombro escucha el mensaje: ‘Vosotros estáis
completos en él’. Ahora todo está en paz en su alma.”— Fe y Obras, pp. 111, 112.
54 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024
6 de marzo
Miércoles ^ Año Bíblico: Deuteronomio 14-16

4. MANTENIENDO LA BONDAD DE DIOS SIEMPRE PRESENTE


a. ¿Cuál será el resultado si descuidamos una salvación tan grande?
Hebreos 2:3; 10:26–31.
“Por la manifestación de su Espíritu, Dios obra para reprender y conven-
cer al pecador; y si se rechaza finalmente la obra del Espíritu, nada queda ya
que Dios pueda hacer por el alma. Se empleó el último recurso de la miseri-
cordia divina. El transgresor se aisló totalmente de Dios; y el pecado no tiene
ya cura. No hay ya reserva de poder mediante la cual Dios pueda obrar para
convencer y convertir al pecador. ‘Déjalo’ (Oseas 4:17), es la orden divina.”—
Patriarcas y Profetas, p. 429.

b. ¿Por qué debemos recordar la liberación de Dios en nuestro favor, y qué


ejemplo dan los pioneros adventistas al respecto? Hebreos 10:32, 33.
“El trato de Dios con su pueblo debe mencionarse con frecuencia. ¡Cuán
a menudo levantó el Señor, en su trato con el antiguo Israel, los hitos del
camino! A fin de que no olvidasen la historia pasada, ordenó a Moisés que
inmortalizase esos acontecimientos en cantos, a fin de que los padres pudie-
sen enseñárselos a sus hijos. Habían de levantar monumentos recordativos
bien a la vista. Debían esmerarse para conservarlos, a fin de que cuando los
niños preguntasen acerca de esas cosas, les pudiesen repetir toda la historia.
Así eran recordados, el trato providencial y la señalada bondad y misericor-
dia de Dios manifestadas en su cuidado y en la liberación de su pueblo. Se
nos exhorta a traer ‘a la memoria los días pasados, en los cuales, después de
haber sido iluminados, sostuvisteis gran combate de padecimientos’. Hebreos
10:32. El Señor ha obrado como un Dios realizador de prodigios en favor
de su pueblo en esta generación. Es necesario recordar con frecuencia a los
hermanos jóvenes y ancianos, la historia pasada de la causa de Dios. Necesi-
tamos relatar a menudo la bondad de Dios y alabarle por sus obras admira-
bles.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 6, p. 365.
“Al referirnos a nuestra experiencia pasada, llevamos a cabo la exhorta-
ción del apóstol a los Hebreos: [se cita Hebreos 10:32.]
“Nuestras vidas están entretejidas con la causa de Dios. No tenemos otros
intereses aparte de esta obra. Y cuando vemos el progreso que ha hecho la
causa desde un comienzo muy pequeño, avanzando lenta pero seguramente
a una posición de fuerza y seguridad; cuando vemos el éxito de la causa en la
cual nos hemos afanado, y sufrido, y casi sacrificado nuestras vidas, ¿quién
nos impedirá o prohibirá nuestra jactancia en Dios? Nuestra experiencia en
esta causa nos es valiosa. Hemos invertido todo en ella.”— Ibíd., tomo 3, pp.
350, 351.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 55


7 de marzo
Jueves ^ Año Bíblico: Deuteronomio 17-20

5. SENDAS SEGURAS
a. ¿Cómo podemos estar seguros en el camino hacia la vida eterna? Hebreos
10:35–39.

“No puede jactarse de la victoria el que se reviste de la armadura, pues


tiene todavía que pelear la batalla y ganar la victoria. El que soporte hasta
el fin, es el que será salvo… Si no avanzamos de victoria en victoria, el alma
retrogradará para la perdición. No debiéramos erigir normas humanas por
las cuales medir el carácter. Hemos visto suficiente de lo que los hombres
llaman perfección aquí abajo. La santa ley de Dios es la única cosa por la cual
podemos determinar si estamos caminando de acuerdo con él, o no. Si so-
mos desobedientes, nuestros caracteres no están en armonía con la norma de
gobierno moral de Dios, y es una falsedad que digamos: ‘Estoy salvado’. No
está salvado ningún transgresor de la ley de Dios, la cual es el fundamento
del gobierno divino en el cielo y en la tierra.”— Mensajes Selectos, tomo 1, p. 369.

b. ¿Cuáles son las principales características del pueblo de Dios en estos


últimos días? Apocalipsis 12:17; 14:12.

“Sólo hay dos grupos en la tierra: los que están bajo el estandarte ensan-
grentado de Jesucristo y los que están bajo el negro estandarte de la rebe-
lión.”— Manuscript Releases, tomo 14, p. 161.
“En este tiempo la iglesia debe ponerse sus hermosas vestiduras: ‘Cristo
justicia nuestra’. Hay distinciones claras y precisas que deben ser restauradas
y expuestas ante el mundo, exaltando por encima de todo los mandamientos
de Dios y la fe de Jesús.”— Christian Experience and Teachings, p. 207.
“La fe en la capacidad de Cristo para salvarnos en forma amplia, comple-
ta y total, es la fe de Jesús.”— Mensajes Selectos, tomo 3, p. 195.

8 de marzo
Viernes ^ Año Bíblico: Deuteronomio 21-23

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Por qué la sangre de los animales no era suficiente para la salvación?
2. Explica, en la medida de lo posible, la profundidad del sacrificio de Cristo por
nosotros.
3. ¿Qué es lo que más aprecias del ministerio de Cristo por ti?
4. ¿Por qué debemos recordar experiencias pasadas en nuestra vida religiosa?
5. ¿Qué no entienden muchos hoy en día acerca de la salvación?

56 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


Sábado, 16 de marzo de 2024
Lección 11 ^ Año Bíblico: Josué 9-10

Héroes de la Fe
“Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de
lo que no se ve. Porque por ella alcanzaron buen testimonio los
antiguos” (Hebreos 11:1, 2).

“La fe salvadora es una transacción por la cual los que reciben a Cristo se
unen con Dios mediante un pacto. La fe genuina es vida. Una fe viva signi-
fica un aumento de vigor, una confianza implícita por la cual el alma llega a
ser una potencia vencedora.”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 312.
Lectura adicional: Obreros Evangélicos, pp. 271–278.

10 de marzo
Domingo ^ Año Bíblico: Deuteronomio 28

1. ABEL
a. ¿Por qué Dios aceptó a Abel y su ofrenda? Hebreos 11:4.

“Abel comprendía los grandes principios de la redención. Veía que era


pecador, y que el pecado y su pena de muerte se interponían entre su alma
y la comunión con Dios. Trajo la víctima inmolada, la vida sacrificada, y así
reconoció las demandas de la ley que había sido quebrantada. En la sangre
derramada contempló el futuro sacrificio, a Cristo muriendo en la cruz del
Calvario; y al confiar en la expiación que iba a realizarse allí, obtuvo testi-
monio de que era justo, y de que su ofrenda había sido aceptada.”— Patriarcas
y Profetas, p. 59.

b. ¿Por qué Dios rechazó a Caín y su ofrenda? Hebreos 9:22.

“Abel eligió la fe y la obediencia; Caín, en cambio, escogió la increduli-


dad y la rebelión. Todo dependió de esta elección.
“Caín y Abel representan dos clases de personas que existirán en el mun-
do hasta el fin del tiempo. Una clase se acoge al sacrificio indicado; la otra se
aventura a depender de sus propios méritos; el sacrificio de éstos no posee la
virtud de la divina intervención y, por lo tanto, no puede llevar al hombre
al favor de Dios. Sólo por los méritos de Jesús son perdonadas nuestras trans-
gresiones.”— Ibíd., pp. 59, 60.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 57


11 de marzo
Lunes ^ Año Bíblico: Deuteronomio 29-31

2. NOÉ
a. ¿Qué está escrito sobre Noé? Génesis 6:8, 9, 22; Hebreos 11:7.
“Mientras Noé daba al mundo su mensaje de amonestación, sus obras
demostraban su sinceridad. Así se perfeccionó y manifestó su fe. Dio al mun-
do el ejemplo de creer exactamente lo que Dios dice. Todo lo que poseía
lo invirtió en el arca. Cuando empezó a construir aquel inmenso barco en
tierra seca, multitudes vinieron de todos los rumbos a ver aquella extraña
escena, y a oír las palabras serias y fervientes de aquel singular predicador.
Cada martillazo dado en la construcción del arca era un testimonio para la
gente.”— Patriarcas y Profetas, p. 82.

b. ¿Qué comparación hizo Jesús sobre estos últimos días? Mateo 24:37–39.
“Los pecados que acarrearon la venganza sobre el mundo antediluviano,
existen hoy. El temor de Dios ha desaparecido de los corazones de los hom-
bres, y su ley se trata con indiferencia y desdén. La intensa mundanalidad de
aquella generación es igualada por la de la presente…
“Dios no condenó a los antediluvianos porque comían y bebían; les había
dado los frutos de la tierra en gran abundancia para satisfacer sus necesidades
materiales. Su pecado consistió en que tomaron estas dádivas sin ninguna
gratitud hacia el Dador, y se rebajaron entregándose desenfrenadamente a la
glotonería. Era lícito que se casaran. El matrimonio formaba parte del plan
de Dios; fue una de las primeras instituciones que él estableció. Dio instruc-
ciones especiales tocante a esta institución, revistiéndola de santidad y belle-
za; pero estas instrucciones fueron olvidadas y el matrimonio fue pervertido
y puesto al servicio de las pasiones humanas.
“Condiciones semejantes prevalecen hoy día. Lo que es lícito en sí es lle-
vado al exceso. Se complace al apetito sin restricción. Hoy muchos de los que
profesan ser cristianos comen y beben en compañía de los borrachos mientras
sus nombres aparecen en las listas de honor de las iglesias. La intemperancia
entorpece las facultades morales y espirituales, y prepara el dominio de las pa-
siones bajas. Multitudes de personas no sienten la obligación moral de dominar
sus apetitos sensuales y se vuelven esclavos de la concupiscencia. Los hombres
viven sólo para el placer de los sentidos; únicamente para este mundo y para
esta vida. El despilfarro prevalece en todos los círculos sociales. La integridad
se sacrifica en aras del lujo y la ostentación. Los que quieren enriquecerse rápi-
damente corrompen la justicia y oprimen a los pobres; y todavía se compran y
venden ‘siervos, y las almas de los hombres’. El engaño, el soborno y el robo se
cometen libremente entre humildes y encumbrados. La prensa abunda en noti-
cias de asesinatos y crímenes ejecutados tan a sangre fría y sin causa, que pare-
cería que todo instinto de humanidad hubiese desaparecido.”—Ibíd., pp. 89, 90.

58 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


12 de marzo
Martes ^ Año Bíblico: Deuteronomio 32-34

3. JACOB
a. ¿Qué terrible pecado dejó una mancha oscura en la experiencia de Jacob?
Génesis 25:29–33; 27:18–24.
“Jacob y Rebeca triunfaron en su propósito, pero por su engaño no se
granjearon más que tristeza y aflicción. Dios había declarado que Jacob de-
bía recibir la primogenitura y si hubiesen esperado con confianza hasta que
Dios obrara en su favor, la promesa se habría cumplido a su debido tiempo.
Pero, como muchos que hoy profesan ser hijos de Dios, no quisieron dejar el
asunto en las manos del Señor. Rebeca se arrepintió amargamente del mal
consejo que había dado a su hijo; pues fue la causa de que quedara separada
de él y nunca más volviera a ver su rostro. Desde la hora en que recibió la
primogenitura, Jacob se sintió agobiado por la condenación propia. Había
pecado contra su padre, contra su hermano, contra su propia alma, y contra
Dios. En sólo una hora se había acarreado una larga vida de arrepentimiento.
Esta escena estuvo siempre presente ante él en sus años postrimeros, cuando
la mala conducta de sus propios hijos oprimía su alma.”— Patriarcas y Profetas,
pp. 178, 179.

b. ¿Cuándo fue Jacob completamente perdonado y justificado? Génesis


32:24–31.
“Con vehementes exclamaciones y lágrimas [Jacob] oró delante de Dios.
De pronto sintió una mano fuerte sobre él… Mientras así luchaba por su vida,
el sentimiento de su culpa pesaba sobre su alma; sus pecados surgieron ante
él, para alejarlo de Dios. Pero en su terrible aflicción recordaba las promesas
del Señor, y su corazón exhalaba súplicas de misericordia… Era Cristo, ‘el Án-
gel del pacto,’ el que se había revelado a Jacob. El patriarca estaba imposibili-
tado y sufría el dolor más agudo, pero no aflojó su asidero. Completamente
arrepentido y quebrantado, se aferró al Ángel y ‘lloró, y rogóle’ (Oseas 12:4),
pidiéndole la bendición. Debía tener la seguridad de que su pecado estaba
perdonado. El dolor físico no bastaba para apartar su mente de este objetivo.
Su resolución se fortaleció y su fe se intensificó en fervor y perseverancia
hasta el fin. El Ángel trató de librarse de él y le exhortó: ‘Déjame, que raya el
alba;’ pero Jacob contestó: ‘No te dejaré, si no me bendices’. Si ésta hubiese
sido una confianza jactanciosa y presumida, Jacob habría sido aniquilado en
el acto; pero tenía la seguridad del que confiesa su propia indignidad, y sin
embargo confía en la fidelidad del Dios que cumple su pacto.
“Jacob ‘venció al Ángel, y prevaleció’. Por su humillación, su arrepenti-
miento y la entrega de sí mismo, este pecador y extraviado mortal prevaleció
ante la Majestad del cielo. Se había asido con temblorosa mano de las pro-
mesas de Dios, y el corazón del Amor infinito no pudo desoír los ruegos del
pecador.”— Ibíd., pp. 196, 197.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 59


13 de marzo
Miércoles ^ Año Bíblico: Josué 1-3

4. SANSÓN
a. Explica el plan de Dios para Sansón. Jueces 13:4, 5.
“A la mujer estéril de Manoa se le apareció ‘el ángel del Señor’ y le comu-
nicó que tendría un hijo, por medio del cual Dios comenzaría a libertar a
Israel. En vista de esto, el ángel le dio instrucciones especiales con respecto a
sus propios hábitos y al trato que debía dar a su hijo… Y la misma prohibición
debía imponerse desde un principio al niño, al que, además, no se le había
de cortar el pelo; pues debía ser consagrado a Dios como nazareo.”— Patriarcas
y Profetas, p. 603.

b. ¿Cómo somos advertidos por el primer gran error de Sansón? Jueces


14:1–3.
“Precisamente cuando llegaba a la edad viril, cuando debía cumplir su
misión divina, el momento en que más fiel a Dios debiera haber sido, Sansón
se emparentó con los enemigos de Israel. No se preguntó si al unirse con el
objeto de su elección podría glorificar mejor a Dios o si se estaba colocando
en una posición que no le permitiría cumplir el propósito que debía alcanzar
su vida. A todos los que tratan primero de honrarle a él, Dios les ha prome-
tido sabiduría; pero no existe promesa para los que se obstinan en satisfacer
sus propios deseos.”— Ibíd., p. 606.
“Muchos consideran erróneamente las pasiones fuertes como equivalente
de un carácter fuerte; pero lo cierto es que el que se deja dominar por sus pa-
siones es un hombre débil. La verdadera grandeza de un hombre se mide por
el poder de las emociones que él domina, y no por las que le dominan a él…
“Los que mientras cumplen su deber son sometidos a pruebas pueden
tener la seguridad de que Dios los guardará; pero si los hombres se colocan
voluntariamente bajo el poder de la tentación, caerán tarde o temprano.
“Aquellos mismos a quienes Dios quiere usar como sus instrumentos para
una obra especial son los que con todo su poder Satanás procura extraviar.
Nos ataca en nuestros puntos débiles y obra por medio de los defectos de
nuestro carácter para obtener el dominio de todo nuestro ser, pues sabe que
si conservamos estos defectos, él tendrá éxito.”— Ibíd., pp. 612, 613.

c. ¿Qué sucedió con Sansón después de haber sido infiel a su voto? Jue-
ces 16:4, 21. ¿Cuán profundamente se arrepintió de sus pecados? Jueces
16:22, 28–30; Hebreos 11:32.
“En el sufrimiento y la humillación, mientras era juguete de los filisteos,
Sansón aprendió más que nunca antes acerca de sus debilidades; y sus aflic-
ciones le llevaron al arrepentimiento.”— Conflicto y Valor, p. 136.

60 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


14 de marzo
Jueves ^ Año Bíblico: Josué 4-6

5. JOSÉ
a. ¿Qué errores cometieron José y su padre Jacob con respecto al resto de los
hijos? Génesis 37:2, 3. Debido a su odio contra José, ¿qué le hicieron sus
hermanos? Génesis 37:28–36.

“Este cariño [de Jacob] había de ser motivo de pena y dolor. Imprudente-
mente Jacob dejó ver su predilección por José, y esto motivó los celos de sus
demás hijos. Al ver José la mala conducta de sus hermanos, se afligía mucho;
se atrevió a reconvenirlos suavemente, pero esto despertó tanto más el odio
y el resentimiento de ellos. A José le era insufrible verlos pecar contra Dios,
y expuso la situación a su padre, esperando que su autoridad los indujera a
enmendarse.”— Patriarcas y Profetas, p. 209.
“Llegar a ser esclavo era una suerte más temible que la misma muerte. En
la agonía de su terror [José] imploró a uno y a otro de sus hermanos, pero en
vano… Endureciendo sus corazones a las súplicas de José, le entregaron en
manos de los mercaderes paganos.”— Ibíd., p. 212.

b. ¿Cómo cambió Dios el destino de José? Romanos 8:28; Génesis 45:4–8.

“La vida de José ilustra la vida de Cristo…


“Mediante su servidumbre en Egipto, José se convirtió en el salvador de la
familia de su padre. No obstante, este hecho no aminoró la culpa de sus her-
manos. Asimismo la crucifixión de Cristo por sus enemigos le hizo Redentor
de la humanidad, Salvador de la raza perdida y soberano de todo el mundo;
pero el crimen de sus asesinos fue tan execrable como si la mano providen-
cial de Dios no hubiese dirigido los acontecimientos para su propia gloria y
para bien de los hombres.”— Ibíd., pp. 243, 244.

15 de marzo
Viernes ^ Año Bíblico: Josué 7-8

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Cómo podemos seguir la senda espiritual de Abel en lugar de la de Caín?
2. ¿Qué nos sería revelado al ser cristianos en la senda de Noé?
3. Explica la clave de la victoria de Jacob pese a su gran pecado.
4. ¿Cómo pueden los padres guiar a sus hijos a fin de evitar la caída de Sansón?
5. ¿Por qué puede ser alentadora la actuación de Dios en la vida de Jacob?

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 61


Sábado, 23 de marzo de 2024
Lección 12 ^ Año Bíblico: Jueces 3-5

Puestos los Ojos en Jesús


“Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la
fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz,
menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de
Dios” (Hebreos 12:2).

“Si los que hoy enseñan la Palabra de Dios elevaran más y más la cruz de
Cristo, su ministerio tendría mucho más éxito. Si los pecadores pudieran ser in-
ducidos a dirigir una ferviente mirada a la cruz, y pudieran obtener una visión
plena del Salvador crucificado, comprenderían la profundidad de la compasión
de Dios y la pecaminosidad del pecado.”—Los Hechos de los Apóstoles, p. 170.
Lectura adicional: Testimonios para la Iglesia, tomo 5, pp. 185–188.

17 de marzo
Domingo ^ Año Bíblico: Josué 11-13

1. DEJANDO TODO PESO A UN LADO


a. ¿Qué nos pesa en nuestro caminar cristiano? Hebreos 12:1.

“La envidia, la malicia, los malos pensamientos, las malas palabras, la


codicia: éstos son pesos que el cristiano debe deponer para correr con éxito
la carrera de la inmortalidad. Todo hábito o práctica que conduce al pecado
o deshonra a Cristo, debe abandonarse, cualquiera que sea el sacrificio. La
bendición del cielo no puede descender sobre ningún hombre que viola los
eternos principios de la justicia. Un solo pecado acariciado es suficiente para
degradar el carácter y extraviar a otros.”— Los Hechos de los Apóstoles, pp. 251, 252.

b. ¿Cómo podemos vencer estos defectos de carácter? Hebreos 12:2.

“Mirando a Jesús obtenemos vislumbres más claras y distintas de Dios, y


por la contemplación somos transformados. La bondad, el amor por nuestros
semejantes, llega a ser nuestro instinto natural. Desarrollamos un carácter
que será la copia del carácter divino. Creciendo a su semejanza, ampliamos
nuestra capacidad de conocer a Dios. Entramos cada vez en mayor relación
con el mundo celestial, y llegamos a poseer un poder creciente para recibir
las riquezas del conocimiento y la sabiduría de la eternidad.”— Palabras de Vida
del Gran Maestro, p. 289.

62 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


18 de marzo
Lunes ^ Año Bíblico: Josué 14-16

2. EL GOZO DE CRISTO
a. ¿Cuál fue el motivo principal para que Cristo muriera en nuestro lugar?
Hebreos 12:2 (última parte); Isaías 53:11.

“Ofreciéndose a sí mismo para interceder por la transgresión de la raza


humana, Cristo desempeñó el oficio de sacerdote. Como galardón, vería los
dolores de su alma y quedaría complacido. Su descendencia prolongaría sus
días sobre la tierra para siempre.”— Fundamentals of Christian Education, p. 402.
“¿Qué sostuvo al Hijo de Dios en su vida de pruebas y sacrificios? Vio los
resultados del trabajo de su alma y fue saciado. Mirando hacia la eternidad,
contempló la felicidad de los que por su humillación obtuvieron el perdón y la
vida eterna. Su oído captó la aclamación de los redimidos. Oyó a los rescatados
cantar el himno de Moisés y del Cordero.”— Los Hechos de los Apóstoles, p. 480.

b. ¿Cómo podemos seguir el ejemplo de abnegación de Cristo? Hebreos


12:3; Mateo 16:24.

“Los que quieren alcanzar la bendición de la santidad deben aprender


primero el significado de la abnegación. La cruz de Cristo es la columna
central sobre la cual descansa el ‘sobremanera alto y eterno peso de gloria’…
Es la fragancia del amor para con nuestros semejantes lo que revela nuestro
amor para con Dios. Es la paciencia en el servicio lo que otorga descanso al
alma. Es mediante el trabajo humilde, diligente y fiel cómo se promueve el
bienestar de Israel. Dios sostiene y fortalece al que desea seguir en la senda
de Cristo.”— Ibíd., p. 447.
“Hombres que han vivido lo más cerca de Dios, hombres que sacrificaron
sus vidas antes de cometer a sabiendas un acto pecaminoso, hombres a quienes
Dios honró con luz divina y poder, confesaron su naturaleza pecaminosa. No
pusieron su confianza en la carne, no pretendieron poseer una justicia propia,
sino que confiaron completamente en la justicia de Cristo.”—Ibíd., p. 448.
“Dios los intima para que con una mano, la mano de la fe, se aferren de
su brazo poderoso, y con la otra mano, la del amor, alcancen a las almas que
perecen. Cristo es el camino, la verdad y la vida. Síganlo. No anden según la
carne, sino según el Espíritu. Anden como él anduvo. La voluntad de Dios es
que ustedes sean santificados. La obra que tienen que llevar a cabo es hacer
la voluntad del que sostiene su vida para su gloria. Si trabajan para sí mismos,
nada aprovecharán. Trabajar para el bien de los demás, preocuparse menos
de uno mismo y ser más fervorosos en la dedicación de todo a Dios, es algo
que a él le resultará aceptable y que recompensará mediante las riquezas de
su gracia.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 2, p. 154.
Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 63
19 de marzo
Martes ^ Año Bíblico: Josué 17-19

3. LA RELACIÓN PADRE–HIJO
a. ¿Cómo trata un padre amoroso a sus hijos descarriados? Hebreos 12:5–11;
Apocalipsis 3:19.

“David aprendió sabiduría de la manera en que Dios le trató, y se postró


humildemente bajo el castigo del Altísimo. El cuadro fiel que de su estado
presentó el profeta Natán, hizo conocer a David sus propios pecados y le
ayudó a abandonarlos. Aceptó mansamente el consejo y se humilló delante
de Dios…
“Nuestro Señor ha dicho: ‘Yo reprendo y castigo a todos los que amo’. ‘Es
verdad que ningún castigo al presente parece ser causa de gozo, sino de tris-
teza; mas después da fruto apacible de justicia a los que en él son ejercitados’
Apocalipsis 3:19; Hebreos 12:11. Aunque la disciplina sea amarga, la adminis-
tra el tierno amor del Padre, para que por ella seamos ‘hechos participantes
de la naturaleza divina’. 2 Pedro 1:4.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 5, p. 640.

b. ¿Qué propósito tiene Dios para nosotros en nuestras pruebas? Mateo 5:4.
“Dios ‘no aflige ni entristece voluntariamente a los hijos de los hombres’.
Cuando él permite que suframos pruebas y aflicciones, es ‘para lo que nos es
provechoso, para que participemos de su santidad’. Lamentaciones 3:33, He-
breos 12:10. Si la recibimos con fe, la prueba que parece tan amarga y difícil
de soportar resultará una bendición. El golpe cruel que marchita los gozos te-
rrenales nos hará dirigir los ojos al cielo. ¡Cuántos son los que nunca habrían
conocido a Jesús si la tristeza no los hubiera movido a buscar consuelo en él!
“Las pruebas de la vida son los instrumentos de Dios para eliminar de
nuestro carácter toda impureza y tosquedad. Mientras nos labran, escuadran,
cincelan, pulen y bruñen, el proceso resulta penoso, y es duro ser oprimido
contra la muela de esmeril. Pero la piedra sale preparada para ocupar su lugar
en el templo celestial. El Señor no ejecuta trabajo tan consumado y cuidado-
so en material inútil. Únicamente sus piedras preciosas se labran a manera de
las de un palacio.”— El Discurso Maestro de Jesucristo, pp. 14, 15.
“Es Dios quien lo ha conducido en medio de dificultades. Él tenía un
propósito en esto, para que la tribulación pudiera obrar en usted paciencia,
y la paciencia piedad, y la piedad esperanza. Permitió que le sobrevinieran
pruebas para que, mediante ellas, usted pudiera experimentar los apacibles
frutos de justicia.
“Dios lo condujo a usted a través de la aflicción y las pruebas para que
pudiera confiar más perfectamente en él, y apoyarse menos en su propio jui-
cio.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 3, pp. 457, 458.

64 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


20 de marzo
Miércoles ^ Año Bíblico: Josué 20-21

4. SIGUIENDO LA SANTIDAD
a. ¿Cuál es el significado de santidad y santificación? 1 Tesalonicenses 4:3–
7; 5:23, 24.

“El apóstol Pablo escribió: ‘Porque la voluntad de Dios es vuestra santi-


ficación’. 1 Tesalonicenses 4:3. La santificación de la iglesia es el propósito
de Dios en todo su trato con su pueblo. Lo escogió desde la eternidad, para
que fuese santo. Dio a su Hijo para que muriese por él, a fin de que fuese
santificado por medio de la obediencia a la verdad, despojándose de todas las
pequeñeces del yo. Requiere de él una obra personal, una entrega individual.
Dios puede ser honrado por los que profesan creer en él únicamente cuan-
do se asemejan a su imagen y son dirigidos por su Espíritu. Entonces, como
testigos del Salvador, pueden dar a conocer lo que ha hecho la gracia divina
por ellos.
“La verdadera santificación es consecuencia del desarrollo del principio
del amor. ‘Dios es amor; y el que vive en amor, vive en Dios, y Dios en él.’ 1
Juan 4:16. La vida de aquel en cuyo corazón habita Cristo revelará una pie-
dad práctica. El carácter será purificado, elevado, ennoblecido y glorificado.
Una doctrina pura acompañará a las obras de justicia; y los preceptos celes-
tiales a las costumbres santas.”— Los Hechos de los Apóstoles, pp. 446, 447.

b. ¿Cuál es uno de los principales agentes de nuestra santificación? Juan


17:17.
“A medida que las tinieblas se intensifican y el error aumenta, debemos
obtener un conocimiento más cabal de la verdad y estar preparados para sos-
tener nuestra posición mediante las Escrituras.
“Debemos estar santificados por la verdad, ser completamente consagra-
dos a Dios, y vivir de tal manera la santidad que profesamos, que el Señor
pueda derramar cada vez más luz sobre nosotros, y podamos ver luz en su
luz, y ser fortalecidos con su fortaleza.”— Primeros Escritos, p. 104.
“‘La fe es por el oír; y el oír por la palabra de Dios’. Romanos 10:17. Las
Escrituras constituyen el gran agente en la transformación del carácter. Cris-
to oró: ‘Santifícalos en tu verdad: tu palabra es verdad’. Juan 17:17. Si se la
estudia y obedece, la Palabra de Dios obra en el corazón, subyugando todo
atributo no santificado. El Espíritu Santo viene a convencer del pecado, y la
fe que nace en el corazón obra por amor a Cristo, y nos conforma en cuerpo,
alma y espíritu a su propia imagen. Entonces Dios puede usarnos para hacer
su voluntad. El poder que se nos da obra desde adentro hacia afuera, indu-
ciéndonos a comunicar a otros la verdad que nos ha sido transmitida.”— Pa-
labras de Vida del Gran Maestro, p. 71.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 65


21 de marzo
Jueves ^ Año Bíblico: Josué 22-24

5. EL ESPÍRITU SANTO Y LA SANTIFICACIÓN


a. ¿Cómo podemos recibir la justicia de Cristo en nuestra vida? Mateo 5:6;
Hebreos 10:37–39.
“El sentimiento de su indignidad inducirá al corazón a tener hambre y
sed de justicia, y este deseo no quedará frustrado. Los que den lugar a Jesús
en su corazón, llegarán a sentir su amor. Todos los que anhelan poseer la se-
mejanza del carácter de Dios quedarán satisfechos. El Espíritu Santo no deja
nunca sin ayuda al alma que mira a Jesús. Toma de las cosas de Cristo y se
las revela. Si la mirada se mantiene fija en Cristo, la obra del Espíritu no cesa
hasta que el alma queda conformada a su imagen. El elemento puro del amor
dará expansión al alma y la capacitará para llegar a un nivel superior, un co-
nocimiento acrecentado de las cosas celestiales, de manera que alcanzará la
plenitud. [Se cita Mateo 5:6.]”— El Deseado de Todas las Gentes, p. 269.
“Mirando constantemente a Jesús con el ojo de la fe, seremos fortalecidos.
Dios hará las revelaciones más preciosas a sus hijos hambrientos y sedientos.
Hallarán que Cristo es un Salvador personal. A medida que se alimenten de
su Palabra, hallarán que es espíritu y vida. La Palabra destruye la naturaleza
terrenal y natural e imparte nueva vida en Cristo Jesús. El Espíritu Santo
viene al alma como Consolador. Por el factor transformador de su gracia, la
imagen de Dios se reproduce en el discípulo; viene a ser una nueva criatura.
El amor reemplaza al odio y el corazón recibe la semejanza divina. Esto es
lo que quiere decir vivir de ‘toda palabra que sale de la boca de Dios.’ Esto es
comer el Pan que descendió del cielo.”— Ibíd., p. 355.
“Para el pecado, dondequiera que se encuentre, ‘nuestro Dios es fuego
consumidor’. Hebreos 12:29. En todos los que se sometan a su poder, el Espí-
ritu de Dios consumirá el pecado. Pero si los hombres se aferran al pecado,
llegan a identificarse con él. Entonces la gloria de Dios, que destruye el peca-
do, debe destruirlos a ellos también.”— Ibíd., p. 82.

22 de marzo
Viernes ^ Año Bíblico: Jueces 1-2

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Cuáles son las cargas que pueden estar estorbando mi carrera hacia la inmor-
talidad?
2. ¿Cómo puedo compartir el gozo que motivó a Cristo mientras estaba en la
tierra?
3. Explica la responsabilidad equilibrada de un padre bueno y cariñoso.
4. ¿Qué ocurre cuando nos impregnamos de las Escrituras y aplicamos sus ense-
ñanzas?
5. ¿Por qué la reverencia y el temor piadoso son tan importantes —aunque tan
escasos— hoy en día?

66 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


Sábado, 30 de marzo de 2024
Lección 13 ^ Año Bíblico: Jueces 20-21

Advertencias para Recordar


“Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante
su propia sangre, padeció fuera de la puerta. Salgamos, pues, a
él, fuera del campamento, llevando su vituperio”
(Hebreos 13:12, 13).

“Cristo, nuestro substituto, iba a sufrir fuera de los límites de Jerusalén.


Murió fuera de la puerta, donde eran ejecutados los criminales y homicidas.
Rebosan de significado las palabras: ‘Cristo nos redimió de la maldición de
la ley, hecho por nosotros maldición’. Gálatas 3:13.”— El Deseado de Todas las
Gentes, p. 690.

Lectura adicional: El Hogar Cristiano, pp. 405–411.

24 de marzo
Domingo ^ Año Bíblico: Jueces 6-7

1. AMOR FRATERNAL
a. ¿Cuál era el problema específico de la iglesia de Éfeso? Apocalipsis 2:4, 5.
“Los miembros de la iglesia [de Éfeso] estaban unidos en sentimiento y
acción. El amor a Cristo era la cadena de oro que los unía. Progresaban en un
conocimiento del Señor cada vez más perfecto, y en sus vidas se revelaba el
gozo y la paz de Cristo. Visitaban a los huérfanos y a las viudas en su aflic-
ción, y se guardaban sin mancha del mundo…
“Pero después de un tiempo el celo de los creyentes comenzó a disminuir,
y su amor hacia Dios y su amor mutuo decreció. La frialdad penetró en la
iglesia. Algunos se olvidaron de la manera maravillosa en que habían recibi-
do la verdad. Uno tras otro, los viejos portaestandartes cayeron en su puesto.
Algunos de los obreros más jóvenes, que podrían haber sobrellevado las car-
gas de los soldados de vanguardia, y así haberse preparado para dirigir sabia-
mente la obra, se habían cansado de las verdades tan a menudo repetidas.
En su deseo de algo novedoso y sorprendente, intentaron introducir nuevas
fases de doctrina, más placenteras para muchas mentes, pero en desarmonía
con los principios fundamentales del Evangelio…
“Al insistirse en esas doctrinas falsas y aparecer diferencias, la vista de
muchos fue desviada de Jesús, como el autor y consumador de su fe. La discu-
sión de asuntos de doctrina sin importancia, y la contemplación de agrada-
bles fábulas de invención humana, ocuparon el tiempo que debiera haberse
dedicado a predicar el Evangelio.”— Los Hechos de los Apóstoles, pp. 462, 463.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 67


25 de marzo
Lunes ^ Año Bíblico: Jueces 8-9

2. UNA BELLA CUALIDAD CRISTIANA


a. ¿Qué característica cristiana enfatiza el apóstol Pablo? Tito 1:7, 8;
Hebreos 13:1, 2.

“‘Amador de la hospitalidad’ es una de las cualidades que, según el Espí-


ritu Santo, han de señalar al que debe llevar responsabilidad en la iglesia. Y a
toda la iglesia es dada la orden: ‘Hospedaos los unos a los otros sin murmu-
raciones. Cada uno según el don que ha recibido, adminístrelo a los otros,
como buenos dispensadores de las diferentes gracias de Dios’.
“Estas amonestaciones han sido extrañamente descuidadas. Aun entre
los que profesan ser cristianos se ejercita poco la verdadera hospitalidad. En-
tre nuestro propio pueblo la oportunidad de manifestar hospitalidad no es
considerada como debiera serlo: como un privilegio y una bendición. Es en
absoluto demasiado escasa la sociabilidad y disposición para hacer lugar para
dos o tres más en la mesa de la familia, sin molestia u ostentación…
“A Dios le desagrada el interés egoísta tan a menudo manifestado para
‘mí y mi familia’…
“Cuando muere el espíritu de la hospitalidad, el corazón queda paraliza-
do de egoísmo.”— El Hogar Cristiano, pp. 405–407.

b. Nombra dos ejemplos de hospitalidad cristiana en el Antiguo Testamen-


to. Génesis 18:1–8; 19:1–3.

“La Biblia da mucho realce a la práctica de la hospitalidad. No sólo or-


dena la hospitalidad como un deber, sino que presenta muchos hermosos
cuadros del ejercicio de esta gracia y las bendiciones que reporta. Entre ellos
se destaca el caso de Abrahán…
“Dios atribuyó suficiente importancia a estos actos de cortesía para regis-
trarlos en su Palabra; y más de mil años más tarde fueron mencionados por
un apóstol inspirado: ‘No olvidéis la hospitalidad, porque por ésta algunos,
sin saberlo, hospedaron ángeles’.
“El privilegio concedido a Abrahán y Lot no nos es negado. Manifestan-
do hospitalidad a los hijos de Dios, nosotros también podemos recibir a sus
ángeles en nuestras moradas. Aun en nuestro tiempo los ángeles entran en
forma humana en los hogares de las gentes, y son agasajados por ellas. Y los
cristianos que viven a la luz del rostro de Dios están siempre acompañados
por ángeles invisibles, y estos seres santos dejan tras sí una bendición en
nuestros hogares.”— Ibíd., p. 405.

68 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


26 de marzo
Martes ^ Año Bíblico: Jueces 10-11

3. EL MATRIMONIO ES HONORABLE
a. ¿Cuándo estableció Dios la institución del matrimonio? Génesis 1:26–28;
2:18, 21–24. ¿Cómo bendijo Cristo el matrimonio en su ministerio? Juan
2:1–5.

“Dios celebró la primera boda. De manera que la institución del matri-


monio tiene como su autor al Creador del universo. ‘Honroso es en todos el
matrimonio.’ Fue una de las primeras dádivas de Dios al hombre, y es una
de las dos instituciones que, después de la caída, llevó Adán consigo al salir
del paraíso. Cuando se reconocen y obedecen los principios divinos en esta
materia, el matrimonio es una bendición: salvaguarda la felicidad y la pureza
de la raza, satisface las necesidades sociales del hombre y eleva su naturaleza
física, intelectual y moral.
“El que creó a Eva para que fuese compañera de Adán realizó su primer
milagro en una boda. En la sala donde los amigos y parientes se regocijaban,
Cristo principió su ministerio público. Con su presencia sancionó el matri-
monio, reconociéndolo como institución que él mismo había fundado…
“Cristo honró también las relaciones matrimoniales al hacerlas símbolo
de su unión con los redimidos. Él es el Esposo, y la esposa es la iglesia, de la
cual, como escogida por él, dice: ‘Toda tú eres hermosa, amiga mía, y en ti no
hay mancha’.”— El Hogar Cristiano, pp. 21, 22.
“[Cristo] cumplió su primer milagro en ocasión de un casamiento. Anun-
ció así al mundo que cuando el matrimonio se mantiene puro y sin contami-
nación es una institución sagrada.”— Ibíd., p. 310.

b. Cuando le cuestionaron acerca del divorcio, ¿qué les dijo Cristo a los fa-
riseos? Mateo 19:1–8. ¿Cuánto debe durar el voto matrimonial? Romanos
7:1–3; 1 Corintios 7:39; Malaquías 2:14–16.

“En las mentes juveniles el matrimonio está revestido de romanticismo y


es difícil despojarlo de ese carácter que le presta la imaginación, para hacer
que la mente comprenda cuán pesadas responsabilidades entraña el voto ma-
trimonial. Liga los destinos de dos personas con vínculos que sólo la muerte
puede cortar.
“Todo compromiso matrimonial debe ser considerado cuidadosamente,
pues el casamiento es un paso que se da para toda la vida. Tanto el hombre
como la mujer deben considerar cuidadosamente si pueden mantenerse uni-
dos a través de las vicisitudes de la existencia mientras ambos vivan.”— Ibíd.,
p. 309.

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 69


27 de marzo
Miércoles ^ Año Bíblico: Jueces 12-14

4. RESPETO HACIA LOS DIRIGENTES FIELES


a. De acuerdo con la Inspiración, ¿cómo deben considerar los miembros de
la iglesia a sus dirigentes fieles? Hebreos 13:7; 1 Tesalonicenses 5:12, 13.
“La Biblia nos enseña en forma especial que prestemos cuidado a no acu-
sar precipitadamente a los llamados por Dios para que actúen como sus em-
bajadores. El apóstol Pedro, al describir una clase de pecadores empedernidos,
los llama ‘atrevidos, contumaces, que no temen decir mal de las potestades
superiores: como quiera que los mismos ángeles, que son mayores en fuerza
y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del
Señor’. 2 Pedro 2:10, 11. Y Pablo, en sus instrucciones dadas a los que dirigen
las iglesias, dice: ‘Contra el anciano no recibas acusación sino con dos o tres
testigos’. 1 Timoteo 5:19. El que impuso a ciertos hombres la pesada carga de
ser dirigentes y maestros de su pueblo, hará a éste responsable de la manera
en que trate a sus siervos. Hemos de honrar a quienes Dios honró.”— Patriarcas
y Profetas, p. 405.

b. Cuando Aarón y María se rebelaron contra el liderazgo de Moisés, ¿cómo


los trató Dios? Números 12:1–10; Éxodo 20:12.
“El castigo que cayó sobre María debe servir de reprensión para todos los
que, cediendo a los celos, murmuren contra aquellos sobre quienes Dios puso
la pesada carga de su obra.”— Ibíd.
“Se debe a los padres mayor grado de amor y respeto que a ninguna otra
persona. Dios mismo, que les impuso la responsabilidad de guiar las almas
puestas bajo su cuidado, ordenó que durante los primeros años de la vida, los
padres estén en lugar de Dios respecto a sus hijos. El que desecha la legítima
autoridad de sus padres, desecha la autoridad de Dios. El quinto mandamien-
to no sólo requiere que los hijos sean respetuosos, sumisos y obedientes a
sus padres, sino que también los amen y sean tiernos con ellos, que alivien
sus cuidados, que escuden su reputación, y que les ayuden y consuelen en su
vejez. También encarga sean considerados con los ministros y gobernantes,
y con todos aquellos en quienes Dios ha delegado autoridad.”— Ibíd., p. 316.

c. ¿Qué concepto bíblico ha sido extrañamente olvidado, con demasiada


frecuencia, en la sociedad moderna—y por qué? Hebreos 13:17, 18; Leví-
tico 19:32.
“A menudo pone usted sus opiniones por encima de las de hombres y mu-
jeres que han tenido muchos más años de experiencia, y que están en mucho
mejores condiciones de dirigir y dar palabras de sano juicio que usted.”—Tes-
timonios para la Iglesia, tomo 2, p. 147.

70 Lecciones Bíblicas Sabáticas, enero–marzo, 2024


28 de marzo
Jueves ^ Año Bíblico: Jueces 15-17

5. JESÚS, SIEMPRE EL MISMO


a. ¿Qué está escrito sobre las dos naturalezas de Cristo? Isaías 9:6; Juan 1:1–
3, 14; Hebreos 1:1–3, 6–10.

“Por su humanidad, Cristo tocaba a la humanidad; por su divinidad, se


asía del trono de Dios. Como Hijo del hombre, nos dio un ejemplo de obe-
diencia; como Hijo de Dios, nos imparte poder para obedecer. Fue Cristo
quien habló a Moisés desde la zarza del monte Horeb diciendo: ‘YO SOY EL
QUE SOY… Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me ha enviado a vosotros’.
Éxodo 3:14. Tal era la garantía de la liberación de Israel. Asimismo cuando
vino ‘en semejanza de los hombres,’ se declaró el YO SOY. El Niño de Belén,
el manso y humilde Salvador, es Dios, ‘manifestado en carne’. 1 Timoteo
3:16. Y a nosotros nos dice: ‘YO SOY el buen pastor’. ‘YO SOY el pan vivo.’ ‘YO
SOY el camino, y la verdad, y la vida.’ ‘Toda potestad me es dada en el cielo y
en la tierra.’ Juan 10:11; 6:51; 14:6; Mateo 28:18. ‘YO SOY la seguridad de toda
promesa.’ ‘YO SOY; no tengáis miedo.’ ‘Dios con nosotros’ es la seguridad de
nuestra liberación del pecado, la garantía de nuestro poder para obedecer la
ley del cielo.”— El Deseado de Todas las Gentes, pp. 15, 16.

b. Durante su encarnación, ¿perdió Cristo alguno de sus atributos divinos?


Explícalo. Malaquías 3:6; Hebreos 13:8; Santiago 1:17.

“Dios siempre ha sido. Él es el gran Yo Soy. El salmista declara: ‘Antes que


naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta
el siglo, tú eres Dios’. Él es el Alto y Sublime que habita la eternidad… Él es
infinito y omnipresente. No hay palabras humanas que puedan describir su
grandeza y majestad.”— El Ministerio Médico, p. 120.

29 de marzo
Viernes ^ Año Bíblico: Jueces 18-19

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL


1. ¿Cómo puedo escapar de la situación que se produjo en Éfeso?
2. ¿Por qué la hospitalidad es tan valiosa en la iglesia?
3. Si consideramos debidamente las Escrituras, ¿cómo debemos entender el
matrimonio?
4. Explica el extenso alcance del quinto mandamiento.
5. ¿Por qué es vital que apreciemos las dos naturalezas de Cristo?

Lecciones Bíblicas Sabáticas, Vol. 100, No. 1 71

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