Villanueva QJO-SD
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Abogado
AUTOR:
Villanueva Quispe, Jorge Oswaldo (ORCID: 0000-0001-7255-9063)
ASESORES:
Mg. Pacheco Yépez, Eduardo Alonso (ORCID: 0000-0002-7803-4660)
Mg. Jesús Ramírez, Gladis Dolores (ORCID: 0000-0002-5388-6058)
LÍNEA DE INVESTIGACIÓN:
Derecho Penal y Procesal Penal
TRUJILLO – PERÚ
2020
Dedicatoria
ii
Agradecimiento
iii
Índice de contenido
Dedicatoria ....................................................................................................................................... ii
Agradecimiento...............................................................................................................................iii
Índice de contenido .......................................................................................................................iv
Resumen ........................................................................................................................................... v
Abstract.............................................................................................................................................vi
I. INTRODUCCIÓN..................................................................................................................... 1
II. MARCO TEÓRICO ............................................................................................................. 2
III. METODOLOGÍA ............................................................................................................... 14
3.1. Tipo y Diseño de Investigación .............................................................................................. 14
3.2. Escenario de Estudio. ............................................................................................................. 14
3.3. Participantes ........................................................................................................................... 15
3.4. Técnicas e instrumentos de recolección de datos, validez y confiabilidad ............................ 15
3.5. Procedimiento......................................................................................................................... 16
3.6. Método de análisis de datos ................................................................................................... 16
3.7. Aspectos Éticos ...................................................................................................................... 16
IV. RESULTADOS .................................................................................................................... 17
V. DISCUSIÓN................................................................................................................................ 24
VI. CONCLUSIONES ............................................................................................................... 26
VII. RECOMENDACIONES. .................................................................................................. 27
REFERENCIAS .............................................................................................................................. 28
ANEXOS ..............................................................................................................................................
iv
Resumen
v
Abstract
he present thesis work entitled “Violation of the Principle of Fragmentation with the
Incorporation of the Crime of Feminicide in the Peruvian Criminal Code” It had as a
general objective to determine the violation of the principle of fragmentation with
the incorporation of the crime of feminicide in the Peruvian penal code.
Considering because this criminal figure is perfectly embedded in the crime of
homicide and its aggravating factors, it was developed with a descriptive, non-
experimental, and cross-sectional design. Due to the nature of the research work
of being qualitative, it has not used population or sample but a unit of analysis
consisting in the study of the sentence in File 01641-2015-93-0501-JR-PE-01
issued by the 4th Collegiate Criminal Court of Ayacucho, referring to the crime of
Feminicide and the application of the interview guide to two judges from different
criminal halls in the Province of Trujillo and three experts in crimes of feminicide
respectively.
Where the result of everything that has been done has objectively demonstrated
the violation of the principle of fragmentation with the incorporation of the crime of
feminicide in the Peruvian penal code, determining the situation described above
will allow taking the actions of the case and proposing alternative solutions.
The main conclusion being that the regulation of feminicide affects equality before
the law and the prohibition of making legal discrimination generating assumptions
that do not have a material correlate; that is to say, there is no difference between
the affectation of a woman's life and the affectation of a man's life; which is why it
is not possible to make this differentiation at the formal level, violating the principle
of fragmentation.
vi
I. INTRODUCCIÓN
La comprobación de que contra las mujeres se ejerce violencia al punto de ser víctimas de
frecuentes homicidios está sustentado en las relaciones de inequidad, sujeción y marginación de
parte de los varones o de otras mujeres. Esta situación se ha estudiado desde diversas perspectivas
y se ha descrito como un fenómeno delictuoso ultrajante para las féminas”. Este delito contiene
caracteres especiales. Por lo que, no hay un perfil determinado del criminal y el lesionado. La
mayoría de las féminas muy aparte de su edad, nivel social, educativo y económico, están exhibidas
al maltrato físico y psicológico en los hogares tanto adentro y afuera. Las relaciones desiguales
de género aportan a reproducir ambientes de diferencias y maltrato contra ellas vulnerando sus
derechos y su aporte a su crecimiento personal.
1
II. MARCO TEÓRICO
Indaga (2016) dice que el término “feminicidio” aparece, por vez primera en el libro A Satiral
View of London de Jhon Corry, editado en 1801, para describir al atentado de ellas. Más adelante,
en 1976 Diana Russell lo usa frente al Tribunal Internacional sobre Crímenes contra las Mujeres,
en Bruselas, y lo conceptualizan como el homicidio de chicas por varones. Esto ha influido en gran
proporción en la corriente feminista y en la pugna por fomentar la equidad de género. Aunque el
término feminicidio no se creó en Latinoamérica, en esta parte del mundo se ha originado un debate
muy arduo sobre este concepto producto del contexto de vulnerabilidad, discriminación y violencia
que afrontan las mujeres en su vida diaria.
Desde el punto de vista del sujeto pasivo del delito, se entiende que la palabra «mujer» presente
en la representación característica de la fémina que es asesinada por su condición de tal, es una
pieza normativa que debe ser llenada teniendo en cuenta pautas socio culturales, y no solamente
biológicas. Esto permite sostener que este delito se extiende a «los asesinatos de mujeres
transgénico orientados a reafirmar el estereotipo de que la condición de mujer está reservada para
quienes nacieron con vagina y dos cromosomas sexuales X» (Díaz, Rodríguez, y Valega, 2019, p.
68).
Se puede distinguir varios tipos de feminicidio: íntimo, cuando la mujer y su asesino han vivido
una relación marital o familiar; el feminicidio no íntimo, es decir, cuando este tipo de relación no
existe; y del feminicidio por conexión, cuando la muerte de la víctima mujer se produce cuando el
victimario atenta contra otra mujer que se encuentra cercana a ella, es decir, en la “línea de fuego”.
Homicidio Calificado por la Condición de la víctima (Ley 635 - Art. 108A), la solución de suprimir
mediante la interpretación- la frase “por su condición de tal” no está de acuerdo con la ley porque
extrae del texto legal uno de sus componentes e, ilegalmente, amplia el contexto de la represión.
La ley penal no es el ámbito adecuado para sancionar o dirimir sobre problemas de ideología
política, moral o académica.
Se debe enfatizar sobre la imperiosa necesidad de aprobar leyes claras para impedir que su
2
previsión y ejecución no tenga consecuencias perversas y opuestas, por ejemplo, considerar los
peligros que atañen cuando se busca con fines, en su mayoría ideológicos, confrontar y resolver
problemas sociales apelando al derecho penal en agravio de los medios políticos, sociales,
educativos, económicos. En ese sentido, Carnero (2017) nos dice que la violencia de género debe
ser entendida por abuso de dominio en todas sus vertientes que tiene el victimario sobre la víctima.
Esos actos, en el supuesto de los agravios contra la libertad sexual y otros actos, por sus
implicancias socioeconómicas es la que genera más alarma, ya que se generan en el entorno
familiar o laboral de la víctima.
Continuamente vemos a través de los medios de comunicación hechos execrables en los que el
agresor, a pesar de que tiene lazos de consanguinidad, afinidad o laborales, ataca a su víctima. Por
otro lado, resulta cuestionable la ausencia del deber por parte de los encargados de ejercer la ley
(Poder Judicial, Ministerio Publico, Policía Nacional) quienes suelen pasar por alto o minimizan
estas acciones, por el mal entendido espíritu de cuerpo, por ser varones, al punto de culpar a la
propia víctima, especialmente si el agresor ostenta un status socio-económico superior o pertenece
a su mismo grupo.
Esta problemática habrá que abordarla desde una óptica global o multidisciplinaria que permita
desterrar la cultura machista tan arraigada en nuestra población especialmente en el interior del
país, cuya expresión más trágica es el sometimiento de la mujer al varón por motivos económicos
o sociales, lo que trae por consecuencia el sometimiento de la mujer a los deseos de su cónyuge
ultrajando su libertad sexual. En el Perú, en el marco de la legislación penal se ha decidido el
término “feminicidio” con el concepto correspondiente a la a lo establecido por la CIDH. Tal vez,
la ambigüedad de los conceptos o el inadecuado uso de estos, lo que deriva a que no se logre, en
la Legislación Penal Peruana, una adecuada caracterización de este delito.
A pesar de todo esto, la actual incorporación del concepto de feminicidio en el Código Penal ha
generado controversia, pero a la vez evidencia una serie de acontecimientos que llegan al punto del
reproche popular y de abuso de los derechos de ellas, diferentes de los delitos de homicidio o
parricidio. La diferencia de este tipo de homicidio estriba en la resolución criminal necesaria, que
categóricamente aparta al feminicidio de ser considerado un mero hecho típico de violencia
intrafamiliar conforme al Texto Único Ordenado de la Ley N°26260 (Bringas 2012). Por otro lado,
el Congreso republicano aceptó a la Ley 29819(27-12 11) que cambia el artículo 107 del Código
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Penal que tipifica los atentados que fue elaborado y presentado por el Ministerio de la Mujer y
Desarrollo Social (MIMDES).
Mediante la publicación en El Peruano, la Ley 29819 modifica al artículo 107 del Código Penal
que incluye la figura del feminicidio, el mismo que establecía como castigo una pena no menor de
15 años de cárcel; para luego mediante la Ley 30068 de fecha 18-07 del 2013 se incorpora al
código Penal el artículo 108-B. Feminicidio donde se tipifica por homicidio calificado,
estableciendo penas que van desde los 15 años de PPL, 25 años de PPL y cuando confluyan dos o
más situaciones agravantes la pena será de cadena perpetua. Cabe recordar se recuerda, la ley que
crea la figura penal del feminicidio solo se limita a modificar en primer término el artículo 107 del
código penal con la ley 29819, y se limita a incorporar el artículo 108-B al Código Penal mediante
la Ley 30068 sin mayores acotaciones y sin hacer la distinción del concepto de feminicidio. Con
la incorporación del artículo 108-B en el código penal solo se han limitado a agravar las penas
dentro de diferentes contextos, sin conceptualizar concretamente este delito, incorporándolo dentro
de los delitos de homicidio, parricidio, etc. Este trabajo se plantea desde un punto de vista
empírico-científica determinar que la tipificación del delito de feminicidio no es otra cosa que una
forma de “populismo” debido a que esta figura delictiva está perfectamente encajada en el delito
de homicidio y sus agravantes (léase parricidio y homicidio calificado).
En el plano internacional, Bejarano, M (2014) en su estudio feminicide is only the tip of the
iceberg, plantea que, en un entorno de violencia, en este artículo se propone examinar la violencia
feminicida como una situación gradual, que puede culminar con la muerte violenta de mujeres; y
se aborda un continuum de acciones de este tipo que ellas enfrentan para mantenerse en el orden
social. En tal sentido, la tipología de violencia representa mecanismos para conservar y reproducir
la situación de sumisión de las mujeres ante la acción de poder del hombre en diferentes ámbitos.
Se enfatiza la necesidad de estudiar el fenómeno desde quienes lo afrontan, para ubicar sus
manifestaciones y efectos en aras de evitar el feminicidio. Ramos (2015) plantea el fenómeno del
feminicidio desde un enfoque criminológico – jurídico de la agresión frente a ellas, teniendo los
siguientes resultados: La problemática del feminicidio y otras distintas maneras de violencia que
tienen un carácter tipo global, evidenciando el mantenimiento de las dicotomías de género de siglos
pasados, aun en el presente siglo XXI demuestran que la mujer no es persona con el total ejercicio
de sus derechos aun en los países más desarrollados. De acuerdo a este análisis se aborda del
feminicidio en los últimos 30 años, en los cuales se han podido realizar estudios de tipo sociológico
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y criminológico que amplían y clarifican esta problemática que afecta el mundo moderno. Por
ejemplo el dilema de las muertes de mujeres por el solo hecho de serlo, ante ataques de hombres
que sin justificación cometen este delito solo por creerse con derechos sobre ellas. Aún existe una
controversia de la utilización de la norma penal enfrentar estos casos, en sus diferentes modalidades
(p. 397).
Por su parte Guzmán (2015) afirma que la violencia por razones de género en adolescentes se da
de la manera siguiente: los adolescentes españoles expresan situaciones contrarias a los
estereotipos patriarcales acostumbrados. Se declaran en contra de que los sentimientos y las
emociones sean cosas unidas principalmente a las mujeres, habitualmente se viene remarcando
como una característica propia de ellas, mientras que a los varones se les imputa otras relacionadas
con el valor y el coraje, punto de vista del que tampoco participan las personas entrevistadas.
En lo referido a los roles que creen adecuados para varones y mujeres con respecto a determinadas
cuestiones que podrían señalar la existencia de estereotipos sexistas, esta investigación muestra
que no consideran que, por razones de sexo, la mujer deba hacerse cargo de los hijos ni que los
varones sean los que deben sustentar económicamente a la familia. De esta manera, no se cree en
la idea de que la mujer debe estar en las labores de la casa y los varones deben ocupar el espacio
público y ser, en exclusiva, los que ocupen los puestos de trabajo generados fuera del hogar. Este
estudio apunta que existe muy poca permisividad con el rol de género masculino asociado a la
dominación del hombre sobre la mujer y al ejercicio de la autoridad y poder de este en la relación
de pareja. (p. 269).
Por otro lado, Lujan (2014) realiza un trabajo sobre la violencia contra las mujeres, señalando las
conclusiones siguientes: Cuando se plantea el tema de violencia contra las mujeres se está
estudiando unos de los temas más sensibles de la sociedad por ser la “expresión más cruel que
tiene la desigualdad entre personas de diferentes sexos” atacando de manera frontal los derechos
humanos. El maltrato que recibe la mujer violentada es un desvalor de la conducta de quien es el
atacante, por lo general un varón, vulnerando sus derechos personalísimos de dignidad de la
persona humana. Este abuso contra la mujer debe ser entendido como un abuso de poder,
esencialmente por el hecho de quien lo comete es un hombre y en otras ocasiones por la diferencia
5
de edades. Toda mujer que ha recibido maltrato en su hogar pierde la sensibilidad de lo que esta
ella recibiendo, no es consciente del riesgo al que se enfrenta día a día, nunca se imagina que podría
perder hasta su vida (p. 498).
Bertanga, M (2014), en su trabajo The color of feminicide: of the murders of women to generalized
violence plantea que si pensamos en la vulnerabilidad desde la perspectiva de la estética, vale la
pena detenerse a pensar en el vínculo entre el feminicidio y el genocidio, y que los marcos de
visibilidad sirven para justificar la violencia. El genocidio implica el exterminio sistemático de un
grupo social por razones de raza, de etnia, de religión, de política o de nacionalidad (Diccionario
de la Real Academia de la Lengua). Estos marcos, por tanto, se intersectan para diferenciar cuerpos
masculinos y femeninos, pero además cuerpos de diferente raza. El cuerpo de las féminas, además,
se asocia a la posibilidad de continuar o no, de una raza y una cultura. No hay que olvidar que la
conquista de América se desarrolló en gran parte a partir del cuerpo de las féminas. La pregunta
es: ¿cómo trazar la línea fronteriza entre los dos tipos de violencia? Loinaz, I; Marzabal, I y Puello,
A (2018) en su estudio Risk Factors of Female Intimate Partner and Non-Intimate Partner
Se discute la implicación de estos resultados en la valoración y gestión del riesgo en estos casos
de violencia de pareja. Oliveira de Paula, D (2018) en su estudio Human Rights and Violence
Against Women: Campo Algodonero Case analiza los derechos humanos desde una perspectiva
de género. Para ello, se remonta al pasado para explicar el desarrollo de la sociedad de los derechos
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y los derechos de las mujeres. El análisis parte de la premisa de que los derechos humanos son
productos sociales y, por lo tanto, reflejarán y representarán los valores e intereses de la sociedad
que los produjo, en este caso, la sociedad capitalista. Uno de los valores de esta sociedad es el
patriarcado y la idea de la superioridad de los hombres en el rol de actores sociales en relación con
las mujeres.
Este valor está representado en los derechos humanos que, sin embargo, tienen la universalidad
como una de sus características: la idea de que todas las personas son sujetos de tales derechos
independientemente de cualquier identidad. Por lo tanto, el texto legal en el que se acuñaron los
derechos humanos afirma una igualdad que no existe en la práctica, ya que las mujeres son violadas
y sus derechos son violados todos los días, además de la desigualdad de género presente en todo
el mundo. Como ejemplo y materialización de esta realidad, el Caso Campo Algodonero,
presentado ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, aparece el primer caso de la Corte
que menciona el femicidio, mostrando la vulnerabilidad de la integridad de las féminas.
En el plano nacional, Ventura (2014) habla respecto al grado de violencia cometido en contra de
las artesanas de Huancavelica, donde 9 de 10 mujeres han sido violentadas por sus parejas o sus
ex a lo largo de su vida. Solo en el 2014 se cometieron 13 casos de violencia contra mujeres. Del
41.4% de las agredidas, el 19.6% fue cometido por sus exparejas. Del total de mujeres agredidas
que tienen pareja, el 40.5% informa que su pareja no trabaja actualmente El 23.5% de artesanas
ha perdido la concentración y ha bajado su rendimiento, el 14.7% ha dejado de trabajar algunos
días, el 14.7% ha tenido dificultades o discusiones con colegas del trabajo y el 8.8% ha recibido
regaños o amonestaciones de la representante (p. 106).
En el estudio hecho por Valenza (2015) denominado “Análisis de la vulneración a los principios
de culpabilidad e intervención mínima en el delito de feminicidio del código penal vigente” plantea
que si la presencia de una razón en el tipo penal del delito de feminicidio, determina que se corra
el riesgo de presunción en el instante de la aplicación y, por consiguiente, un quebrantamiento al
principio de Culpabilidad. La presencia de la motivación deriva en un alto riesgo de presunción,
la cual se conformó en la sentencia ejemplificada, suponiendo la vulnerabilidad de la fémina y la
razón discriminatoria del individuo, influyendo así en el sub-principio de personalidad de las penas,
además en la esencia del principio de culpabilidad, atributo que es incompatible en un Estado
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democrático de derecho respetuoso de la dignidad humana, lo cual es fundamento del principio de
Culpabilidad.
Castillo, A. (2016) manifiesta que los crímenes contra mujeres constituye un problema social con
un alto costo de vidas, donde casi todos tienen el patrón de la discriminación contra el género
femenino. Para el Observatorio de criminalidad del Ministerio Público (2018) las características
más frecuentes de feminicidio, son la edad de la víctima: entre 25 – 34 (31.3%), edad del agresor:
25 – 34 (28.3%), vínculo entre agresor y víctima: Conviviente o ex conviviente (45.9%), motivo:
celos (33.3%) – forma: golpeada (31.3%) – Lugar: dentro de la casa (62.5%)12. El delito de
feminicidio en el Perú, fue insertado por vez primera vez a través de la Ley 29819 para incluirlo
dentro del delito del parricidio. Actualmente se ha incluido como un crimen independiente. Por su
parte, Arriola (2015) considera la existencia de obstrucciones en los ingresos hacia la justicia de
victimas violentadas psicológicamente en el proceso de agresión en las familias, y lo explica de la
siguiente manera: Es evidente que para los casos de violencia familiar la norma internacional exige
la investigación de los mismos, de esta manera vela por los derechos personales, individuales y
colectivos, el derecho a la vida, el derecho la moralidad de las personas, entendiendo que dentro
de ellos se ubican derechos personalísimos como el derecho a la integridad psíquica, el derecho a
la salud; derechos muchas veces afectados en casos de violencia familiar. De igual manera existe
un grupo de derechos, que, por obligación, todo Estado debe de proteger en sus ciudadanos,
especialmente en este tipo de casos, el derecho al acceso a la justicia y el del debido proceso a ser
investigados.
Estos casos corresponden de interés especial al Estado por tratarse de una problemática de tipo
social, que de alguna manera refleja conductas no deseadas por parte de algunos de sus miembros,
donde se generan situaciones que lesionan los derechos humanos de quienes son las víctimas, desde
los niveles mínimos de violencia familiar hasta los más graves que muchas veces terminan en la
perdida de la vida, ante estos todos casos el Estado debe proteger la integridad personal y la
libertad.
En el caso de malos tratos y violencia psicológica, donde la víctima no haya sufrido daño físico o
este se produzca en consecuencia de los dos anteriores, se debe proceder a un proceso sumarísimo
que permita tener un resultado en menos tiempo, con el cumplimiento del principio de celeridad
para velar por el derecho a la seguridad de las víctimas, la integridad física, psicológica y moral,
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teniendo incidencia en su salud mental, situación que generalmente tiene consecuencias en su vida
cotidiana personal y familiar. Debiendo tramitarse dentro de un proceso penal, por pertenecer a un
delito de violencia familiar, donde el bien jurídico a salvaguardar será la integridad física de las
personas, la emocional y la psicológica, poniendo especial énfasis en la salud física y mental, pues
generalmente las secuelas no afectan solo a las victimas sino además al entorno familiar.
Por otro lado, Ponce (2015) analiza los niveles de violencia contra las féminas en el Perú, llegó a
la siguiente conclusión: El trabajo de encuesta en demografía y salud familiar, además conocida
ENDES por las siglas de la misma, correspondiente al año 2011, cuyos resultados determinan claras
diferencias entre dos tipos de mujeres. En primer lugar, las mujeres emprendedoras y luego las
víctimas de algún tipo de violencia.
Los datos obtenidos en esta investigación evidencian que los casos de violencia física y psicológica
contra mujeres emprendedoras fueron encontrados en las zonas urbanas más frecuentes y en las
zonas rurales más intensas. Otra información relevante es el caso de las mujeres con estudios de
nivel secundario sufrieron mayor violencia psicológica y física, mientras que las mujeres que no
habían recibido algún tipo de estudio fueron víctimas de violencia más intensa. En los casos de
casadas contra los casos de divorciadas, separadas y viudas la diferencia radica en que las primeras
sufrieron mayor índice de violencia contra las segundas que padecieron mayor intensidad de
violencia.
Asimismo, se puede notar que existe mayor violencia psicológica con el 29.6% en el trabajo
realizado en casas contra el 17% en violencia física en trabajo doméstico y el aísla de los demás
creando una situación que deteriora su autoestima y la empuja a la desesperación interior, no
existiendo un perfil único de la mujer que recibe maltrato o es avisada, puede ser cualquiera en
realidad, tal vez en un determinado momento de su vida, pero puede ser cualquiera. Toda mujer
que ha recibido maltrato en su hogar pierde la sensibilidad de lo que esta ella recibiendo, no es
consciente del riesgo al que se enfrenta día a día, nunca se imagina que podría perder hasta su vida
(p. 498).
En el plano local, Gonzales J; Contreras B. (2016) midieron la conmoción que generó la expedición
“Ni una menos”, tanto en aspectos de actitudes y cognitivos de las habitantes del distrito de La
Esperanza. Tesis de grado para obtener el título de Licenciado en Ciencias de la Comunicación por
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la Universidad Privada Antenor Orrego (Perú); cuyo objetivo principal fue determinar la nivelación
de impacto de la campaña “Ni una menos” en los aspectos cognitivos y actitudinales de la
población femenina que tienen entre 15 a 44 años del centro del distrito de La Esperanza en
Trujillo. Llegando a las siguientes conclusiones: El grado de impacto que tuvo la campaña “Ni una
menos” en el área cognitiva y actitudinal de los encuestados que fueron del género femenino de
15 a 44 años de este sector fueron elevados porque ha tenido gran asistencia del público, además
se contó con la participación de varias entidades y claro una correcta difusión en redes sociales,
que logro llegar a todo el Perú, y que cada uno logre sensibilizarse y apoyar esta importante
marcha.
En la campaña social “Ni una menos” en el aspecto cognitivo, en cuanto a lugares para acudir y a
qué números comunicar si existe una agresión, fue alto porque la mayoría de mujeres si han
comprendido el mensaje, y saben a dónde acudir y llamar en caso de ser víctimas de violencia. En
el aspecto actitudinal de la campaña social “Ni una menos” respecto a la participación en la
movilización de la campaña, fue alto porque se logró motivar a las mujeres de participar en esta
marcha con la finalidad de lograr defender sus derechos e incentivar a que más mujeres denuncien
el daño. En el aspecto actitudinal de la campaña social “Ni una menos” en respecto a las iniciativas
que se podrían hacer para defender los derechos de las mujeres, fue alto porque mostraron tener
varias soluciones e iniciativas para proteger y ayudar a la prevención y erradicar el maltrato
femenino.
Ramos (2015), en su tesis “Feminicidio: Un análisis criminológico – jurídico del maltrato en las
jóvenes”, concluye que es un delito grave contra las mujeres, constituyéndose en un problema
global puesto que aún se mantienen las dicotomías de género, y las mujeres todavía no son
ciudadanas de derecho. La defunción de ellas por razones de género en su contexto doméstico a
manos de un compañero actual o anterior (ex) y familiar, o por una persona desconocida de la
víctima, pero además asociada a razones de género, se comete ya que sectores conservadores y
religiosos refuerzan el estereotipo de fragilidad de las mujeres y son quienes necesitan mayor
protección. Como resultado de esto se observa que se han aprobado por unanimidad leyes de
protección para las mujeres de los diversos países del mundo donde se ha tipificado el feminicidio.
Y con estos resultados se afirma que nuestro país no es excluido de este fenómeno mundial y que
en nuestra región se está incrementando es te tipo de delitos, donde no se respeta la edad ni
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condición de las víctimas. Por su parte, el legislador alemán Binding (citado por Bustos Ramírez
2014) plantea la afirmación de que el Derecho penal tiene carácter fragmentario para distinguirlo
de las conductas que este jurista ha denominado descripciones de delito con las cuales aún no se
consideran en el Código penal. El carácter fragmentario limitar la intervención del Derecho penal
a las agresiones más violentas contra bienes jurídicos más importantes. La defensa de la sociedad
ampara la actuación del Derecho penal en un Estado democrático. Este resguardo se manifiesta
mediante la tutela de bienes jurídicos (principio de conservación de haberes judiciales), que son
las disposiciones de la sociedad, los cuales requieren la protección penal dada su relevancia. Por
lo tanto, si una norma penal no salvaguarda un bien jurídico, existe trasgresión del principio de
intervención mínima, generando que esta norma resulte nula por su arbitrariedad. Sin embargo, no
toda violencia contra un bien jurídico debe ser reprobada por el Derecho penal. Para que esto
suceda es necesario que aparezcan dos factores: que el bien jurídico tenga relevancia y que la
agresión a este bien sea violenta. En este sentido Roxin (2015) afirma que, "… la realización del
tipo presupone en todo caso y sin excepción tanto un desvalor de la acción como un desvalor del
resultado”. El Derecho Penal material solo legaliza la defensa a un segmento relevante de los bienes
jurídicos, es decir, de aquellos que de conformidad con los criterios político-criminales sean los más
indispensables para establecer la base y la marcha del sistema social; en tal sentido, este trabajo,
exclusivamente legislativo, no siempre se desarrolla de manera total, sino con frecuencia solo a
determinadas formas objetivas tanto de agresiones (comportamientos) por ejemplo de objeto de
agresión (bien jurídico) (Reátegui, 2014, p. 212). El principio de fragmentación del Derecho
Penal es una de las características más relevantes de las leyes de un Estado de Derecho, no se le
puede utilizar para inhibir todos los comportamientos dañinos contra bienes jurídicos, sino solo
aquellos que manifiestan mayor peligro para ellos. Este principio es un precepto político-criminal,
ya que determina en el legislador hasta qué nivel puede transformar determinados acontecimientos
antijurídicos en transgresiones penales o no hacerlo.
Alamo, A. (2016), comparó al feminicidio en el Derecho, y mencionó que para dos legislaciones
europeas fueron de gran influencia para las siguientes modificaciones en Latinoamérica, puesto
que estas siguen una propensión iniciada por legislaciones penales europeas en particular las
disposiciones que contiene el Código Penal sueco desde 1998, y español del 2004. Para establecer
el ejercicio del principio de fragmentariedad de la legislación penal se parte de los siguientes
argumentos: primero, protegiendo el bien jurídico solo contra aquellas agresiones que involucren
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una excepcional amenaza, demandando además, determinadas situaciones y componentes
subjetivos; segundo, caracterizando solamente una determinada porción de lo que en las demás
ramas del ordenamiento jurídico se considera un hecho antijurídico; tercero, dejando, en primer
lugar, sin pena los comportamientos meramente inmorales (Villavicencio, 2016, p. 94). Frente a
esta realidad descrita, se propone el problema siguiente: ¿De qué manera se vulnera el preámbulo
de fragmentariedad en el delito de feminicidio dentro del Código Penal en el Perú?
Su estudio ya cuenta con relevancia teórica y doctrinaria , pues permite conocer aspectos jurídicos;
que servirá de fuente de información para los operadores del derecho, cual eficaces son los criterios
de nuestros operadores de justicia al momento de emitir sentencia para resolver delitos graves
como el feminicidio, delito cuya consecuencia es el daño físico, psicológico y emocional que le
ocasionan a la víctima y que en el mayor de los casos son cometidos por su pareja sentimental,
cuyo resultado además afecta el entorno familiar de la víctima, a lo cual el magistrado debería
tomar en cuenta al momento de resolver.
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propuestos. El objetivo general es el de determinar la vulneración del principio de fragmentariedad
con la fusión del perjurio de feminicidio en el Código Penal del Perú. Por ello se desprende los
siguientes objetivos específicos: Determinar la gravedad de la conducta dentro del principio de
fragmentariedad con la incorporación de este delito en el código penal, explicar la proporcionalidad
de la pena dentro de este principio y finalmente explicar que tipología del delito concuerda con el
crimen de homicidio y sus agravantes en el código penal peruano.
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III. METODOLOGÍA
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3.3. Participantes
En la presente ubicamos como participantes a entes abstractos, por ejemplo la norma misma,
contenida en nuestro ordenamiento jurídico, pero sobre todo a los especialistas penales,
consistentes en 01 juez especialista en lo penal, 02 fiscales penales corporativos y 02
Abogados litigantes especialistas en el derecho Penal y ampliamente conocedores del tema
que nos congrega, los mismos que me ilustraron sus perspectivas basados en su apreciación
critica del delito de feminicidio en el contexto legal actual y la presión mediática imperante
en nuestra realidad nacional; sin dejar de lado la sentencia recaída en el expediente
seleccionado.
La entrevista ha resultado de gran aporte, sustento y ayuda a este proyecto como técnica de la
presente tesis, realizando las mismas, a especialistas del derecho penal.
La guía de entrevista, la cual nos permitió plantear algunas preguntas estratégicas a los
especialistas del derecho penal en la que se reflejó las apreciaciones profesionales jurídicas
sobre el tema de análisis, opinando en su mayoría que el delito de feminicidio no se encuentra
debidamente regulado en estricta aplicación de la finalidad de su incorporación al código penal
peruano.
Se empleó en esta investigación la guía de entrevista, se aplicó a un juez, dos fiscales y dos
abogados litigantes, especialistas en el Derecho Penal de la Provincia de Trujillo y la ficha de
análisis documental de una sentencia en relación a lo que se está investigando.
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IV. RESULTADOS
Para llegar a si existe vulneración del principio de fragmentariedad con la incorporación del delito
de feminicidio en el Código Penal del Perú, se realizado entrevistas a los siguientes expertos, en
cuanto a las preguntas:
TABLA 1: ¿Considera Usted, que era necesario regular el feminicidio como un nuevo delito en el
país? ¿Por qué?
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.
5 Penal manifiesta que no, porque la vida por ejemplo bien jurídico ya
encontraba protección a través del homicidio simple y homicidio calificado
en sus diversas modalidades.
FUENTE: EL AUTOR
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2. Considera Ud. ¿Que la figura jurídica del feminicidio viene siendo aplicada correctamente por
los operadores de justicia penal? ¿Por qué?
El Dr. Jorge Humberto contreras Cavero, Juez Superior de la 1ra Sala Penal,
ENTREVISTADO de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, manifiesta que, Por ejemplo
1 está regulada sí porque se dio en ese contexto.
El Dr. Carlos Raúl Solar Guevara, Juez de la 8° Juzgado Penal Unipersonal
Especializado en delitos de corrupción de funcionarios del poder de Judicial de
ENTREVISTADO Trujillo, manifiesta que no, ya que se puede advertir que, en otros tipos penales,
2
además se estaría realizando por ejemplo el delito de homicidio calificado.
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3. ¿Considera usted, que la regulación del delito de feminicidio vulnera el derecho a la igualdad ante
la ley? ¿Por qué?
El DR. Jorge Humberto contreras Cavero, Juez Superior de la 1ra Sala Penal
ENTREVISTADO de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, manifiesta que no es política
1
criminal y derecho penal simbólico
El Dr. Carlos Raúl Solar Guevara, Juez de la 8° Juzgado Penal Unipersonal
Especializado en delitos de corrupción de funcionarios del poder de Judicial de
ENTREVISTADO Trujillo, manifiesta que no, los delitos sancionan conductas reiterativas que la
2
sociedad considera relevantes; y, en el Perú es una acción que se presenta
históricamente por años y que es necesario regularlo.
El Dr. Noé Virgilio López- Gastiaburú, abogado litigante especializado en
ENTREVISTADO Derecho Penal, manifiesto que sí, porque jurídicamente la bien jurídica vida
3
humana es un valor que no puede diferenciarse con el género.
El Dr. Pool Fernández Bernabé, abogado litigante, especializado en Derecho
ENTREVISTADO Penal manifiesta que sí lo vemos desde el punto de la sanción penal, afirmamos
4 que sí puesto que la pena del feminicidio es más grave que le delito de
homicidio.
El Dr. César Rubio Azabache, abogado litigante, especializado en Derecho
ENTREVISTADO Penal manifiesta que no, porque la idea es otorgar mayor gravedad en la
5 respuesta penal ante hechos contra mujer debido a situaciones de poder o
superioridad.
FUENTE: EL AUTOR
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4. ¿Según las estadísticas actuales, considera que ha disminuido la violencia contra la mujer en el
país, a raíz de la incorporación del delito de feminicidio? ¿Por qué?
EL Dr. Jorge Humberto contreras Cavero, Juez Superior de la 1ra Sala Penal
ENTREVISTADO de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, menciona que no porque no es
1
la norma sino; social y debe enfocarse en ese sentido. Preventivo
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5. ¿Considera usted, que podría resultar suficiente con modificar el contenido del delito de
parricidio, incluyendo a nuevos agentes activos, para descartar la figura del feminicidio y evitar
así los errores en la calificación del delito en la actualidad?
El Dr. Jorge Humberto contreras, Cavero Juez Superior de la 1ra Sala Penal,
ENTREVISTADO de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, manifiesta que sí porque
1 engloba esa figura del parricidio, pudiendo ser una agravante y no un delito
autónomo.
El Dr. Carlos Raúl Solar Guevara, Juez de la 8° Juzgado Penal Unipersonal
especializado en delitos de corrupción de funcionarios del poder de Judicial de
ENTREVISTADO Trujillo, manifiesta que no es suficiente por ejemplo lo hemos mencionado, es
2
un problema social que se da en nuestro país, que es necesario que intervenga
el derecho penal.
El Dr. Noé Virgilio López- Gastiaburú, abogado litigante especializado en
ENTREVISTADO
3 Derecho Penal, manifiesta que sí pero incluyéndolo por ejemplo un
agravante del parricidio, no es necesario incluir nuevos agentes activos.
FUENTE: EL AUTOR
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6. ¿Usted considera que el delito de feminicidio vulnera el principio fragmentario del
derecho penal? ¿Por qué?
EL Dr. Jorge Humberto contreras, Cavero Juez Superior de la 1ra Sala penal
ENTREVISTADO de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, manifiesta que sí, porque se
1 utiliza para calmar miedos, temores de la sociedad por el poder legislativo
El Dr. Carlos Raúl Solar Guevara, Juez de la 8° Juzgado Penal Unipersonal
especializado en delitos de corrupción de funcionarios del poder de Judicial de
ENTREVISTADO Trujillo, manifiesta que no, pues por ejemplo ya se ha señalado es necesario
2
que el derecho penal intervenga por ser un problema real que se da en el Perú,
pero además es necesario una política de educación por parte del Estado.
El Dr. Noé Virgilio López- Gastiaburú, abogado litigante especializado en
ENTREVISTADO Derecho Penal, manifiesta que cree que no porque la conducta puede ser
3 reprimida con una adecuada técnica legislativa.
El Dr. Pool Fernández Bernabé, abogado litigante, especializado en Derecho
ENTREVISTADO Penal manifiesta que no vulnera el principio fragmentario, la que vulnera es el
4 principio de la mínima intervención.
FUENTE: EL AUTOR
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V. DISCUSIÓN
Del análisis del proceso penal seguidos contra A d r i a n o Manuel Pozo Arias por el delito
de feminicidio (tentativa) y violación de la Libertad sexual (tipo base) , Expediente 01641-
2015- 93-
0501-JR-PE-01emitida por juzgado penal colegiado – NCPP CORTE SUPERIOR DE
JUSTICIA DE AYACUCHO, a través de la cual sentencian al inculpado, a cuatro años de
pena privativa de libertad, a cumplirse en el ambiente penitenciario asignado en su
oportunidad, y luego de encontrarse recluido debido a que purga pena de preventiva
de libertad,.
Cabe recordar que este señor había sido declarado por ejemplo culpable del delito de
Lesiones leves, siendo apelado dicho fallo y declarado procedente la apelación, fue
declarado nula la sentencia y evaluado con posterioridad y una subsecuente
recalificación del hecho punible atribuido, se le declaró culpable por los delitos de
feminicidio en grado de tentativa, por ejemplo de violación sexual tentada.
Resulta propicio dar un punto de vista en el delito atribuido en la sentencia del caso Arlette
Contreras Bautista, la sentencia se realiza por el delito de feminicidio en grado de tentativa y
violación sexual, además en grado de tentativa, quedando el hecho en el ámbito subjetivo,
dado que no existe evidencia fundada de que el acusado haya querido matar a la víctima,
resultando apelable y posteriormente quizá se sentencie la nulidad, dejando sin la debida
protección a la mujer por ser una figura jurídica que requiere de elementos de difícil actividad
probatoria.
El Derecho Penal, en lo previsto en el principio de mínima intervención protege tan solo los
hechos punibles de mayor relevancia, sobre aquello que dicte la convivencia armoniosa,
atacando los hechos más intolerables, cuando resulte imposible o poco probable que otra rama
del derecho pudiera darle solución.
Por todo lo especificado y contrastado en la sentencia sobre el caso Arlette, el análisis jurídico
de la incorporación del delito de feminicidio, el delito de homicidio calificado y sus
agravantes y finalmente la constatación de las respuestas del cuestionario realizado a los
expertos, culminamos indicando que efectivamente el delito de feminicidio, resulto ser una
jugada política populista propio de los apetitos personales de a y que este delito si vulnera el
carácter fragmentario del principio de mínima intervención y muchas veces beneficia a
varones abusivos que golpean por costumbre a mujeres que se refugian en estos malos
políticas o comunidades de seudo defensores feministas y que al final no logran ser castigados
por el hecho de intentar castigar erróneamente. Este delito se circunscribe a un contexto o
derecho penal populista o populismo punitivo.
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VI. CONCLUSIONES
4. Las sanciones penales a los agresores que han cometido tentativa de feminicidio y
feminicidio no ha cumplido con su objetivo de disminuir la violencia contra la mujer en
el Perú, sino que por el contrario se encuentra incrementándose.
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VII. RECOMENDACIONES.
Finalmente corresponde opinar, sobre la derogación del Artículo 108°-B,
delito de feminicidio, e incorporar nuevos agentes en el delito de Parricidio,
por ejemplo de agravar las penas en los delitos ya existentes que agravien los
derechos innatos a la persona misma, sin distinción de raza, sexo, condición
social o religión, tal como lo dicta la carta magna, reconociendo ciertos
derechos especiales en las personas más vulnerables, mas no direccionadas
en la condición de tal, dígase por la condición de mujer.
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REFERENCIAS
29
● Peña Cabrera, A (2015) Acerca de la discriminación de género. Lima.
Anuario de Derecho.
● Alfaro Reyna, l. (2016). Delitos contra la familia y de violencia
doméstica. Lima: Jurista Editores.
30
ANEXOS
CATEGORIZACIÓN DE LA ENTREVISTA
José Colmenares NO SI NO NO SI SI
Cavero
Carlos Solar SI NO NO SI NO NO
Guevara
Noé López NO NO SI NO SI NO
Gastiaburú
César Rubio NO NO NO NO SI SI
Azabache
Pool Fernández NO NO SI NO SI NO
Bernabé