Populus Romanus
Populus Romanus
Populus Romanus
Populus Romanus
La expresión “populus romanus” es una sigla que proviene de la frase latina Senātus
Populusque Rōmānus (que se traduce como “El Senado y el Pueblo Romano”). Así que por
sí sola, el uso de esta palabra hace referencia al pueblo romano.
"Romanus" se refiere a ciudadanos romanos, de ascendencia romana o "viejos latinos"
cuyas familias se han establecido en Roma desde su fundación. Los romanos se mencionan
a menudo en la ley y se asocian con términos como "dignitās", "maiestās", "auctoritās" y
"libertās populi Rōmānī", es decir, "dignidad", "sire" (soberanía), "autoridad" y "libertad
del pueblo romano". Participaron en el exercitus, imperium, iudicia, honores, cónsules,
voluntas lo que significa "el ejército, el gobierno, el poder judicial, la burocracia, los
consulados y el futuro del pueblo romano". En latín aparecen como "popolus" o "poplus".
La idea de un pueblo libre y soberano estaba muy arraigada, pero sólo para garantizar que
no obedecieran al monarca.
Se desconoce el origen de esta frase, pero aparece por primera vez en una inscripción al
final de la República Romana en el año 80 a.C. C. más. Anteriormente, el nombre oficial
del estado romano se expresaba simplemente con la palabra "Roma". La última vez que
aparecieron iniciales en monedas romanas fue en el siglo IV d.C. Durante el reinado de
Constantino I.
Las dos entidades mencionadas, el Senado y el pueblo (populus), constituían la soberanía
del estado romano. Sin embargo, sólo el "pueblo romano" era considerado soberano, de lo
que carecía el propio Senado. Durante el período principalista, el emperador se veía a sí
mismo como el representante del pueblo, cuya soberanía nunca fue abolida formalmente,
pero los poderes legislativo, judicial y electoral fueron transferidos de la Asamblea al
Senado. Aunque el Emperador y el Senado eran legalmente iguales, en la práctica el poder
real del Senado era insignificante, ya que el Emperador ejercía el poder real del estado a
través del ejército. Por tanto, su función era dar legitimidad a las decisiones imperiales.
Para acercarnos a su contexto en la historia de roma, este término abarcaba a todos los
ciudadanos romanos libres, excluyendo a los esclavos, extranjeros y no ciudadanos. La
expresión "Senatus Populusque Romanus" (El Senado y el Pueblo Romano) fue utilizada
comúnmente en inscripciones, monedas, documentos legales y otros objetos para referirse a
la autoridad del gobierno romano y su pueblo.
Durante la República Romana, el poder político estaba en manos de la aristocracia
senatorial y los ciudadanos romanos disfrutaban de ciertos derechos y obligaciones dentro
de la estructura política. El Senado está compuesto por élites aristocráticas que representan
una parte importante del gobierno e influyen en la toma de decisiones. El "álamo romano"
también jugó un papel importante en la vida política de Roma. Aunque la República
Romana evolucionó hasta convertirse en el Imperio Romano, con el poder cada vez más
concentrado en el emperador y su corte, el concepto de "Yang romano" persistió. Los
líderes políticos, incluidos los emperadores, a menudo buscaban el apoyo y la aprobación
del pueblo romano para legitimar su gobierno.
Esta desempeñó un papel fundamental en la historia del derecho romano.
Personalidad del Populus Romanus:
El populus romanus adquiere una personalidad propia y se considera que sobrevive a las
personas que lo forman en cada etapa histórica.
Su capacidad patrimonial se incluye en la esfera del derecho público, al que pertenecen las
funciones y los actos que en nombre del pueblo realizan los magistrados.
El pueblo posee un patrimonio propio y esclavos que adquieren bienes para él. Por
extensión, también se reconoce la personalidad jurídica de las ciudades, municipios y
colonias, cada una con su propio ordenamiento.
Entes Públicos:
Además del populus romanus, se reconocía la personalidad jurídica de las ciudades,
municipios y colonias.
Cada una de estas entidades tenía su propio ordenamiento y patrimonio.
Estos entes públicos podían actuar en la esfera negocial mediante contratos, concesiones de
servicios públicos o arrendamientos de terrenos.
5. Familias, gens y curias
En la Antigua Roma, la familia desempeñaba un papel fundamental en la organización
social y política.
Paterfamilias:
El paterfamilias era el cabeza de familia, generalmente el padre o, en su ausencia, el varón
vivo de mayor edad.
Poseía un poder paternal absoluto (llamado patria potestas) sobre su esposa, hijos, nietos y
esclavos que vivían bajo su techo.
Incluso podía castigar físicamente a su hijo adulto, aunque esto era poco común.
Su reputación y dignidad (llamada dignitas) estaban vinculadas a su linaje y ascendencia.
Matrimonios:
Los matrimonios romanos no se basaban en el amor, sino en razones políticas, sociales o
financieras.
Las mujeres tenían poco control sobre con quién se casaban.
Las niñas solían casarse entre los 12 y 15 años, a veces incluso antes.
El comandante Pompeyo se casó con la hija de Julio César por razones políticas, y Augusto
obligó a su hijastro Tiberio a divorciarse para casarse con la hija del emperador.
Familia Nuclear y Ampliada:
La familia nuclear era la base, pero también incluía miembros de la familia ampliada,
esclavos domésticos y esclavos liberados.
Los lazos de sangre (conocidos como cognati) eran los más fuertes, mientras que los
parientes adquiridos por matrimonio (llamados adfinitas) eran secundarios.
En la Antigua Roma, la gens era una agrupación civil o sistema social fundamental.
Permíteme explicarte más sobre este concepto:
Definición:
La gens estaba compuesta por varias familias que se identificaban a través del cognomen de
los individuos.
Los integrantes de una gens eran agnados o gentiles entre sí.
Estaban dirigidos por varios pater familias (cabezas de familia).
Características:
La gentilidad era un título de nobleza que indicaba la antigüedad e ingenuidad del grupo.
Cada gens tenía su propia divinidad protectora, costumbres particulares y territorio.
Vigilaban para que estas costumbres (mores) fueran respetadas y podían excluir a quienes
las contravinieran mediante las notae gentiliciae.
Todos los miembros de una gens compartían una sepultura común.
El interés económico también unía a la gens, ya que cultivaban en común un mismo
territorio.
Comparación con la Familia:
La familia era una unidad más reducida, pero de naturaleza similar.
En la familia, además del padre, la madre y los hijos, se incluían nietos, adoptados,
prisioneros por deudas, esclavos libertados, animales y los dioses tutelares del hogar.
El pater familias tenía autoridad como sacerdote, juez y rey dentro de su familia.
En la Antigua Roma, las curias eran estructuras políticas de gran importancia para el
gobierno. Permíteme explicarte más sobre ellas:
Origen y Composición:
Las curias eran asambleas compuestas por ciudadanos romanos.
Originalmente, había trescientas personas en cada curia, representando diferentes grupos
sociales.
Estos ciudadanos se conocían como el Senado.
Funciones:
Las curias se reunían para discutir asuntos públicos y tomar decisiones importantes.
Cada curia tenía su propio líder, llamado Censor, quien organizaba las asambleas y presidía
las reuniones.
Las decisiones se tomaban por consenso de los miembros, no solo por el Censor.
Además, las curias juzgaban a quienes violaban las leyes romanas.
Composición Social:
Las curias estaban formadas por diversos grupos sociales:
Patricios: Ciudadanos ricos y privilegiados.
Plebeyos: Ciudadanos de clase media.
Libertos: Ciudadanos libres, un escalón por debajo de los plebeyos.
Esclavos: Sin derechos ni responsabilidades en la curia.
Importancia Continua:
Aunque el gobierno romano evolucionó hacia el Imperio Romano, las curias siguieron
siendo relevantes.
El Imperio adoptó muchas leyes y costumbres de la Antigua Roma, incluyendo el uso de las
curias para gobernar.
La idea de las curias pervive en formas modernas de gobierno.
6. La Rex. El senado
El Senado romano fue una institución política fundamental en la Antigua Roma, desde la
Monarquía hasta el Dominado. Mas sobre su historia y funciones:
Origen y Composición:
El Senado nació como una institución consultiva durante la Monarquía romana.
Inicialmente, estaba formado exclusivamente por 30 patricios (un representante de cada
gens), y más tarde aumentó a 300.
Durante la República, su composición varió, pero generalmente incluía exmagistrados y
patres (cabezas de familias patricias).
Funciones del Senado Romano:
Asesoramiento: El Senado aconsejaba a los magistrados y al rex (rey).
Ratificación de Leyes: Refrendaba las leyes votadas por los comicios.
Política Exterior: Dirigía la política exterior y tomaba decisiones en temas militares.
Religión y Finanzas: También tenía competencias en asuntos religiosos y financieros.
Época Republicana:
Durante la República, el Senado alcanzó su cenit de influencia y poder político.
Aunque perdió algunas competencias a favor de otras magistraturas, obtuvo un papel
crucial en la administración de Roma.
Decadencia y Reformas:
Las reformas de Silas y Julio César aumentaron el número de senadores.
Sin embargo, esto también contribuyó a la decadencia del Senado.
En la antigua Roma, el término "Rex" se refería al rey, el monarca que gobernaba la ciudad
antes de la instauración de la República. Durante el período monárquico, Roma era
gobernada por una serie de siete reyes legendarios, según la tradición romana. Sin embargo,
después de la expulsión del último rey, Tarquinio el Soberbio, en el año 509 a.C., se
estableció la República Romana, y el título de "Rex" perdió su relevancia política.
La República Romana estaba basada en un sistema de gobierno mixto, en el que el poder
estaba dividido entre varias instituciones, siendo el Senado una de las más importantes. El
Senado romano, conocido como Senatus, era un cuerpo deliberativo compuesto
inicialmente por miembros de la aristocracia patricia, aunque con el tiempo se admitieron
también plebeyos. El Senado tenía una gran influencia en la toma de decisiones políticas y
legislativas en Roma.
La relación entre el Senado y el derecho en la antigua Roma era estrecha. El Senado tenía
un papel fundamental en la elaboración de leyes y en la administración de justicia. Aunque
formalmente no tenía poder legislativo, sus decisiones tenían una gran influencia en la
formulación de leyes y políticas públicas. Además, el Senado tenía autoridad para
interpretar las leyes y pronunciar opiniones consultivas sobre cuestiones legales.
El Senado también desempeñaba un papel importante en la supervisión de la conducta de
los magistrados y funcionarios públicos, así como en la dirección de la política exterior y
militar de Roma. En resumen, el Senado romano tenía una relación íntima con el derecho
romano, ya que desempeñaba un papel central en su creación, interpretación y aplicación.
Su influencia perduró a lo largo de la historia de la República Romana y continuó durante
el período imperial, aunque con cambios en su composición y poder a lo largo del tiempo.