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ES  

LXXIX
“Mi más preciado, querido mío,
mi universo,

¿me llevarías contigo?

A un lugar donde no pueda soñar

con mi pobre imaginación.

Quiero entristecerme contigo, mi

amor.

Estrújame en tus brazos,

regálame un beso aún más

hermoso.

Nuestro amor gana todo,

el amor lo gana todo”

“El trato es así” Jimin dijo y lo bonito

no le quitaba lo intimidante. “Hobi
hyung y yo lo cuidamos esta noche,
mañana y pasado. Tú y Seokjin hyung
lo cuidan el resto de la semana. ¿Les
parece bien?”

Seokjin resopló, mirando a Gyeoul

dormir en los brazos de Hoseok, en
donde no había tardado en
acostumbrarse, a diferencia suya, pues
el bebé parecía odiarlo.

“¿Puede ser nosotros esta noche y

ustedes el resto de la semana?”
preguntó, recibiendo una mirada de
Yoongi. “¿Qué? Además estoy muy
seguro de que Jungkook tiene gente
disponible para hacerlo”

“Le prometí a Jungkook que lo

cuidaríamos nosotros porque sé que no
se habría ido tranquilo si dejaba a
Gyeoul con alguien que no fuéramos
nosotros” Yoongi le dijo, recibiendo un
puchero del alfa que fue a pegarse a su
lado. Miró a Jimin, ya con la noche
presente sobre ellos, con la fiesta
habiendo terminado demasiado pronto
porque los novios decidieron irse en
cuanto terminó la recepción.

Yoongi aún no decidía cómo iría a

quejarse con Jungkook por los desaires,
pero lo dejó ser, después de todo,
¿cuándo ha tenido libertad Jeon
Jungkook de festejar realmente? Sabía
que el único pesar de su primo en aquel
momento era su cachorro, por lo que
Yoongi se comprometió a que Gyeoul
estuviera perfecto en la ausencia de sus
padres, para dejar que Jungkook, por
una vez en su vida, pudiera disfrutar
unos días.

No sabía qué tanto aguantaría su primo

sin su cachorro, pero por el tiempo que
se permitiera, Yoongi se aseguraría de
que Gyeoul estuviera bien cuidado y no
podía confiar aquello a nadie más que
no fuera sí mismo o Jimin.

“No puedo creer que te intimide cuidar

a un bebé, Seokjin hyung” Hoseok dijo,
con una ceja arriba. “Gyeoulie se porta
bastante bien a mi parecer”

Seokjin contuvo un bufido indignado,

yendo a Yoongi por consuelo, mas el
omega no reaccionó cuando el cuerpo
del alfa se pesó en él.

“Yo me tengo que quedar hasta que

todo quede en orden” suspiró,
recibiendo una mirada de Jimin que
había estado ayudando a Hoseok a
buscar una posición más cómoda para
recostar a Gyeoul en sus brazos, que
continuaba dormido, envuelto en una
fina manta que olía a sus papás.
“Ustedes pueden ir ya, se quedarán en
la residencia de tu clan, ¿no, Hoba?”

“Sí” fue Jimin quien asintió.

“Mantendremos a Jungkook y a ti al
tanto aunque no sé qué tan rápido
pueda comunicarme con él”

Jimin alzó las cejas a él y Yoongi puso

los ojos en blanco, pero una pequeña
sonrisa estaba amagando con curvarle
las esquinas de la boca.

“Buen punto. Démosle un par de horas”

“Ah~ eres un hijo de puta”

Taehyung se rió.

“Mire que yo no insultaría a la persona

que-”

“Ah, cállate y termina” Jungkook

exhaló, pegajoso, incómodo, caliente y
muy, muy complacido.

Taehyung le besó el hombro, apoyando

los labios en la piel caliente que
probaba y lentamente retiró su
miembro de Jungkook, que suspiró
aliviado, pues si bien disfrutaba todo el
acto de principio a más de la mitad, no
le apetecía tenerlo dentro por tanto
tiempo. Al menos no quieto. No tan
grande.

Se movió y se sintió escurrir entre las

piernas, por lo que gruñó, pero el alfa a
su espalda lo mimó con besos y abrazos,
con la nariz apoyada en toda la piel que
alcanzaba, respirando largo y sonoro,
haciendo al omega reír.

Se quedaron en silencio, abrazados en

la enorme cama, en la semi oscuridad
de aquella noche, debía ser pasada la
medianoche, y Jungkook entrelazó sus
manos con las del otro que estaban
sobre su abdomen, con el alfa apoyado
a su espalda, sosteniéndolo como a
Jungkook le gustaba.

Porque a pesar de su aspecto y de lo que

cualquiera pensaría según su
personalidad, Jeon Jungkook era un
omega que disfrutaba ser mimado.

Sólo por el alfa que él había elegido.

“Debería darme un baño” el omega

murmuró pero no hizo amago en
levantarse. El alfa le gruñó.

“¿Por qué quiere sacarse mi olor de

encima?” le preguntó y aferró los brazos
alrededor del líder con más fuerza, que
se rio cuando le quitó todo el aire.
“Quédese así”

“¿Para que tu semen fermente? No,

gracias” dijo y quiso levantarse de la
cama, pero cayó nuevamente en la
misma, sin poder desprenderse del
agarre del alfa, que volvió a gruñirle.

“Mío, todo mío. Quiero que la gente que

se le acerque sepa que es mío”

Jungkook exhaló, sintiendo el sutil

ardor en su cuello, mas
sorprendentemente, se había
acostumbrado a la sensación más
rápido de lo que pensaba. Era una
cosquilla que ardía, si tenía que
describirla de alguna manera, pero era
agradable, el escalofrío que le causaba
era agradable y la boca de Taehyung en
él, caliente y húmeda, era bastante
reconfortante.

Podía dejársela a la vista y sin cuidado

alguno si significaba que tendría al alfa
sobre él mimando la herida a cualquier
oportunidad presentada.

“Creo que cualquiera que me vea el

cuello no tendrá duda de eso” dijo,
tratando de hacerlo sonar como si no
fuera nada, pero sabía que no podía
esconder la sensación que lo llenó al
decirlo, no del alfa que sentía todo lo
que originaba de su propio pecho.

Taehyung murmuró, satisfecho.

“Cierto” dijo y fue a apoyar los labios en

el hombro del omega, no en la marca,
pero cerca, haciéndolo estremecerse.
“Aunque no sé si quiero que alguien vea
mi marca en su cuello”

Jungkook alzó las cejas.

“¿Quieres que la gente sepa que soy

tuyo pero no quieres que me vean con
tu marca?”

“No dije eso” él defendió, aunque sí, sí

lo había dicho. “No quiero que miren su
cuello”

“Es mi cuello”

Taehyung se quejó y sonó más a un

lloriqueo esta vez.

“Mi omega” dijo. “Sé que no debo

preocuparme por otros alfas, pero aún
así”

Jungkook trató de mantener el orgullo,

pero sentir al alfa frotándose contra él
lo hizo derretirse.

“Te dejaré que me marques con tu olor

y me cubriré el cuello. ¿Está bien eso
para ti?” le preguntó y el alfa murmuró
contento, dejando un sonoro beso en la
nuca de Jungkook. “A veces no te
entiendo. De todas formas, me gusta
estar cubierto todo lo posible, no me
supondrá un problema”

“Ah, ¿como ahora?” el alfa le preguntó y

es que estaban los dos desnudos en la
cama, cubiertos por nada más que una
ligera capa de sudor y nada más.
Jungkook resopló.

“Me iré a bañar” amenazó y el alfa

volvió a lloriquear, oh, Jungkook sólo
pudo girarse en esos brazos para
encarar al alfa y fue muy poco lo que
pudo ver de su rostro, pero ¿hacía falta
cuando lo sentía en todos lados?

Alzó las manos y le tocó la cara con la

punta de los dedos, terminando por
delinearle los labios con la yema de su
dedo índice, acercándose un poco para
rozar la boca en él.

“Taehyung” le llamó y el alfa apretó un

poquito más sus brazos a su alrededor,
tocando su nariz con la del omega, tan
juntos que estaban a nada de fundirse
en el otro. “Me hace feliz ser tu omega”

A la mañana siguiente, Jungkook se

despertó solo.

Una breve angustia lo llenó cuando

abrió los ojos y no vio a Taehyung a su
lado, ni lo sintió cerca. Estaba cubierto
con la sábana y aferró las manos a esta
cuando se enderezó, revisando la
habitación para asegurarse que estaba
solo y sólo porque vio las cortinas del
ventanal cerradas, se levantó de la
cama, completamente desnudo, en
busca de algo de ropa.

Tomó únicamente su ropa interior y

una bata del armario, Jungkook no
dudó en salir de la habitación,
peinándose el cabello con las manos
para sacarlo de su cara y bajó las
escaleras, sólo siguiendo al instinto,
más allá del corto pasillo, a la puerta
corrediza del balcón abierta.

Taehyung estaba sentado en el suelo de

madera del balcón, observando el mar
que rompía sus olas en la playa unos
metros más adelante. El alfa alzó la
cabeza a él y le extendió su mano, oh,
Jungkook se la tomó y Taehyung tiró de
él, recibiéndolo en su regazo y no dudó
en esconder el rostro en el cuello al que
había acostumbrado ir a refugiarse.

Llevaba camiseta y ropa interior, sus

muslos estaban fríos, Jungkook lo sintió
cuando se sentó sobre él y la
temperatura de su cuerpo recién salido
de la cama chocó con la del alfa, que no
parecía estar ahí hacía poco tiempo.

El omega revisó el cielo y debía ser

temprano, el fresco de la mañana
estaba presente y el sol no había
tomado altura aún, por lo que era fácil
asumir la hora.

“Estás frío” Jungkook le dijo, pasándole

las manos por los brazos y el alfa lo
miró a los ojos, alzando la cabeza para
encararlo, pues el tener al omega
sentado sobre él le concedió un poco
más de altura.

Jungkook alzó las manos por sus

hombros a su pelo y se lo sacó del
rostro.

“¿Quieres que desayunemos?” le sugirió

y Taehyung sonrió suavemente, un poco
aliviado de que el omega no interrogara,
aunque de seguro ya sabía.

“Mh” murmuró y Jungkook se acercó a

apoyar la mejilla en su cabeza,
abrazándose a él, mirando su propia
mano en el cabello del alfa con los
anillos que representaban los lazos más
valiosos que tenía.

Miró la mano derecha de Taehyung, la

cual reposaba sobre su muslo desnudo y
se encontró con los mismos anillos,
representando los mismos lazos y le
hizo sonreír un poco más, esperando
que la calma en su corazón alcanzase al
alfa.

Debió surtir efecto, porque Taehyung se

relajó, en los hombros y el abrazo
alrededor del omega, dejando un beso
en su clavícula.

“Si quieres después salimos a dar un

paseo” Jungkook le sugirió y Taehyung
alzó la cabeza para mirarlo a los ojos.
“¿Te gustaría ir a la playa? Organicé
unas cuantas cosas, pero podemos
hacer lo que quieras. Estaremos aquí un
par de días, así que podemos hacer lo
que gustes”

“Mh” Taehyung sonrió, sin separar los

labios. “Cualquier cosa me parece bien.
Una manta en la playa y usted debajo
me parece un excelente plan”

“Cerdo” Jungkook se rió,

estremeciéndose cuando Taehyung se
acercó a rozar los labios en la mordida
en su cuello, la cual lo hacía temblar
cuando el alfa respiraba sobre ella.
“Vamos a vestirnos y a desayunar”

“Mh” Taehyung repitió y paseó las

manos por la carne que había besado
toda la noche. “Mi desayuno lo tengo
aquí”

“Ya” el omega se quejó, pero estaba

sonriendo. “Tenemos mucho tiempo
para todo esto”

Y de hecho, lo tenían.

Taehyung lo dejó ir porque lo siguió por

detrás, literalmente, rodeando al omega
con los brazos por detrás, apoyado a él,
caminando incómodamente a la cocina
de la casa de la playa, teniendo que
dejarlo ir cuando Jungkook se propuso
a hacer el desayuno.

“Ponte pantalones” el omega le indicó

mientras Taehyung abría el refrigerador
por curiosidad, tomando de inmediato
de adentro la bandeja de fresas frescas
que notó en un estante. Cerró la puerta
y fue a sentarse en la isla de la cocina,
no haciendo caso a su omega que sólo lo
miró con advertencia, pero Taehyung ya
se había sentado, con los ojos grandes
en el omega mientras comía,
masticando con la boca abierta.

Jungkook no replicó, sólo continuó con

su quehacer y ¿con qué cara? Porque
Taehyung lo veía y el omega sólo
llevaba una bata negra encima,
Taehyung notaba sus muslos
descubrirse cuando el líder se giraba a
alcanzarse algún utensilio entre la
abertura de la bata, parte de su pecho
era visible también y se había
arremangado las mangas, lo que dejaba
a la vista gran parte de sus antebrazos.

Ah…

Taehyung se levantó de su asiento en el

que no estuvo más de cinco minutos
porque mirar era demasiado poco para
sí, tuvo que acercarse al omega para
rodearlo con los brazos por detrás y lo
sintió derretirse contra él cuando el alfa
hundió la cara en su cuello, directo a
probar su piel herida con su marca.

“No” Jungkook le pidió, pero sonaba

demasiado excitado como para que el
alfa tomara su negativa como una
orden. El omega tuvo que empujarlo
con un codo para mantener el personaje
y su compostura. “Aléjate. Vas a hacer
que me queme”

Inkitt lloriqueó.
Taehyung
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“Han pasado más de dos horas” él