Metodologia 1.1
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CARRERA DE MEDICINA
MONOGRAFIA
Guayaramerín – Bolivia
2023
FACTORES RELACIONADO EN EMBARAZOS EN LA ADOLESCENCIA
Guayaramerín – Bolivia
2023
Índice
1.DEDICATORIAS......................................
2.AGRADECIMIENTOS.............................
3.RESUMEN..............................................
1.1 INTRODUCCIÓN...................................
1.2 ANTECENDENTES.................................
1.3 PROBLEMATIZACIÓN.............................
1.4 OBJETIVOS.............................................
1.5 JUSTIFICACIÓN.........................................
2.0 ADOLESCENCIA...............................
2.2.3. FAMILIA…………………………………………………..
2.2.4 ESCUELA……………………………………..
REFERENCIA BIBLIOGRAFICA………………………………………….
DEDICATORIAS
La adolescencia es una fase de la vida que pasa por varias modificaciones físicas, biológicas y
psicológicas, con la aparición de un embarazo que posiblemente ocurran implicaciones en esta etapa de
la vida. En Bolivia hoy en día, el embarazo precoz se ha convertido en un importante problema de salud
pública. Con poca información y una vida sexual cada vez más activa y temprana, muchas adolescentes
quedan embarazadas en un momento de la vida en que no están preparadas para asumir las
responsabilidades de la madre. Cuando se convierten en madres, estas adolescentes terminan dejando
de lado una fase importante de desarrollo e incluso abandonan sus estudios, generando varios factores
que les dificultan la vida.
1.1 INTRODUCCIÓN
Según la ECA, la adolescencia es un período entre 12 y 18 años, el período de la pubertad en el
que los genitales se desarrollan y estimulan las hormonas.
Las adolescentes tienen un momento marcado en la vida que es su primera menstruación,
conocida como menarquia donde las adolescentes están seguras de que está pasando a la edad adulta,
una fase de transición que conduce a estímulos sexuales que también pasarán por múltiples formaciones
físicas y psicológicas, buscando una formación de identidad y autonomía rodeándose de dudas e
incertidumbres que proporcionan voluntad de experimentar, crear y producir, fase de descubrimientos
sobre uno mismo, sobre sexualidad, independencia y vínculos afectivos que pueden estar relacionados
con el consumo de drogas, bebidas alcohólicas, trabajo temprano, abandono escolar, violencia dentro y
fuera del hogar y las altas tasas de embarazo precoz no deseado (MACEDO, 2014).
El embarazo adolescente es un problema de salud pública, debido a la gran cantidad de
adolescentes embarazadas con deserción escolar, paternidad irresponsable, familia despreocupada,
bajos ingresos y también las complicaciones biológicas y psicológicas que pueden afectar a la
adolescente (IBGE, 2015). Hay razones que llevan a las adolescentes a querer tener libertad, ya sea por
una dificultad familiar para interactuar con sus padres que no tienen retorno de ellos, por miedo a terminar
su relación con el "novio", dificultad de acceso a anticonceptivos o por el simple hecho de pensar que la
maternidad traerá beneficios y estatus en la sociedad (RYLO, 2015).
Según la encuesta de 2012 y 2013 creció el número de madres que no trabajan ni estudian, el
54% de ellas no completaron la escuela primaria. El PNAD mostró que Brasil tenía 5,2 millones de niñas
de 15 a 17 años. De ellos, 414.105 tuvieron al menos un hijo. En este grupo, solo 104.731 estudian. Los
otros 309.374 están fuera de la escuela. Un pequeño grupo solo trabaja 52.062 (PNAD, 2013).
Hoy en día hay un gran bloqueo entre la adolescente y sus padres que se agrava en el diálogo
con la privación de información sobre sexo y embarazo para que no haya intervención de un posible
embarazo precoz, hay en todos los medios donde ponen sexo y embarazo con algo tan normal para la
sociedad y no es así como funciona, El sexo tiene que ser responsable a la hora de practicarlo, tener
conocimiento de lo que puede resultar si no se utilizan medios que protejan de las enfermedades de
transmisión sexual y del embarazo. Para formar una familia debe haber una preparación tanto financiera
como emocional, porque hoy en día los medicamentos, la ropa, los pañales y la alimentación de un niño
aumentan en una proporción no acompañada (DUARTE, 2016).
1.2 ANTECENDENTES
La adolescencia se define, según la Organización Mundial de la Salud - OMS, como una fase que
va de los diez a los diecinueve años de edad. Es un período de grandes cambios anatómicos, fisiológicos,
emocionales y sociales.
El embarazo en esta etapa del ciclo de vida conlleva algunos riesgos obstétricos
aumentó. La anemia es más común en los adolescentes, especialmente en aquellos con bajos
ingresos, que tienen una mala nutrición y una mayor incidencia de lombrices (OMS,
2007; LEVANDOWSKI; PICCININI; LOPES, 2008). Según estos autores, el parto prematuro
también es una complicación que afecta más a las gestantes adolescentes y conlleva estancias
hospitalarias más prolongadas, bajo peso al nacer y mayor riesgo de muerte neonatal e infantil.
El embarazo adolescente tiene importantes repercusiones sociales. La joven, muchas
a veces abandonan la escuela y les resulta más difícil ingresar y permanecer en el mercado
laboral. Esto prolonga el tiempo de dependencia económica familiar de esta joven. Cabe destacar que
estos puntos negativos en relación a lo social no parecen darse en jóvenes que cuentan con una buena
red de apoyo social.
(LEVANDOWSKI; PICCININI; LOPES, 2008; BRANDÃO; HEIBORN, 2006).
El embarazo adolescente es un problema mundial. Alrededor de 16 millones de mujeres de 15 a
19 años quedan embarazadas cada año. De estos embarazos, el 95% ocurren en países de bajo o
mediano desarrollo. La proporción de nacimientos de niños de madres adolescentes por área en el mundo
es: 2% en China, 18% en América Latina y el Caribe y más del 50% en África subsahariana. La mitad de
los nacimientos de adolescentes en el mundo ocurren en siete países: Bangladesh, Brasil, República
Dominicana del Congo,
1.3 PROBLEMATIZACIÓN
¿Cuál es la tasa de niñas que quedan embarazadas más de una vez durante la adolescencia?
¿Cuáles son los factores relacionados con el embarazo en la adolescencia?
¿Cuáles son las atribuciones del médico en la prevención de un segundo embarazo en la adolescencia?
1.4 OBJETIVOS
1.5 JUSTIFICACIÓN
En nuestro trabajo y en el que hacer diario de los profesionales de la salud, nos enfrentamos a diversas
situaciones que están siendo abordadas por grupos, familias o comunidades, pues muchas de estas
situaciones ameritan una mirada diferenciada y calificada, pues cuando aparece una adolescente
embarazada, se va a través de un proceso de dificultades durante esta transición, la adolescente debe
ser acompañada por un profesional que debe estar preparado, además de buscar y descubrir los factores
que influyen en las adolescentes para tener uno o más embarazos.
Se sabe que un embarazo adolescente es de alto riesgo, ya que el cuerpo no es capaz de sufrir cambios,
ya que estos cambios están ocurriendo en el cuerpo de la adolescente y el embarazo acelera los cambios
que ocurren naturalmente durante el período gestacional. También refleja la dificultad para acceder a un
control prenatal de calidad, por lo que requiere una doble atención con profesionales multidisciplinarios
calificados para ayudar y aclarar las dudas de la adolescente y su familia.
1.6 OBJETIVO DE ESTUDIO Y CAMPO DE ACCIÓN;
• La importancia en conoces los medios de comprender mejor la salud sexual de los ninõs y
adolescentes
• Campo de investigación, en los centros de salud y los hospitales que atenden las ninãs
Consideramos factible realizar esta investigación ya se cuenta con la posibilidad de contar con el
apoyo de las autoridades locales de salud de Guayaramerin, además del personal que presta
servicios, en la ciudad de Guayamerin en el departamento de Beni, hubo un estudio de embarazos
en la adolescencia que se realizó se en el área de salud de influencia del centro de salud san Isidro
en el año 2009
✓ Construcción de un proyecto de vida más sólido, apoyo a niñas de familias mal estructuradas,
empoderamiento de las niñas más pobres, permanencia en la escuela, acceso a métodos
anticonceptivos y centros de salud con atención diferenciada son algunas de las posibilidades
mencionada.
✓ reducir significativamente la interrupción de embarazos en condiciones peligrosas;
✓ aumentar la atención calificada antes, durante y después del parto
✓ incluir a las mujeres jóvenes en el diseño e implementación de programas de prevención del
embarazo adolescente
✓ crear y mantener Un entorno favorable a la igualdad de género, la salud y los derechos sexuales
y reproductivos de los adolescentes.
• Toda la población en la edad inferior a 16 años, que tiene falta de acceso a las informaciones a
lo cual el gobierno y los agentes de salud no alcazó..
2.0 Adolescencia
La adolescencia se considera una etapa especial del desarrollo (físico, moral, espiritual y social); con el
derecho a la protección, la vida y la salud, a través de la implementación de políticas públicas y define
que el SUS es responsable de estas acciones (GURGEL et al., 2010). Siendo considerado por
Wieczorkievicz y Souza (2010) una población prioritaria con respecto a la atención médica. Muuss (1996,
p. 14) apud Santos y Carvalho (2006, p. 136) "la palabra adolescencia deriva del verbo latino adolescere,
que significa crecer o crecer hasta la madurez". En la adolescencia se producen cambios profundos,
caracterizados principalmente por el rápido crecimiento, la conciencia de la sexualidad, la estructuración
de la personalidad, la adaptación ambiental y la integración social (SILVA, F. N. et al., 2012). "En los
cambios biológicos, hay grandes transformaciones del cuerpo y el desarrollo de características sexuales
secundarias, siendo común el interés por el sexo y el comienzo de las primeras relaciones sexuales"
(SOUZA, T. A. et al., 2012, p. 795).
Mientras que la adolescencia temprana coincide con las primeras modificaciones corporales de
la pubertad, la adolescencia final, tanto en la teoría como en la práctica, no establece criterios rígidos. Ser
adolescente sería salir de la dependencia de la infancia, buscando una independencia en la vida adulta,
no una independencia sin restricciones, sino una sana interdependencia con la sociedad, la escuela, la
familia y el entorno en el que viven (MINAS GERAL, 2007).
Según el Ministerio de Salud (2016), el embarazo se conoce como el período que va desde la fecundación
del óvulo por el espermatozoide hasta el momento del parto, dura un total de 40 a 41 semanas o 9 meses.
En este período incluye diversos procesos dentro del útero, cambios físicos, aumento de peso, cambio
de comportamiento entre otros. Montenegro y Rezende (2014) enumeran algunas de las numerosas
modificaciones que sufre el cuerpo de la mujer embarazada durante un embarazo, entre ellas se
encuentran: postura, debido a la expansión del útero, así como deterioro de la deambulación; el
metabolismo presenta alteraciones para satisfacer las necesidades del concepto; en el sistema vascular,
es evidente un aumento en el gasto cardíaco; El sistema urinario sufre cambios anatómicos y fisiológicos,
entre muchos otros.
Entonces, ¿qué factores pueden influir en el embarazo adolescente y su repetición? ¿Son cuestiones
como la escolaridad, el nivel socioeconómico, el inicio de la vida sexual/educación sexual, el matrimonio
o la unión consensual, los factores familiares, factores que pueden influir en el embarazo adolescente?
Para Gonçalves (2021), el embarazo y la maternidad en la adolescencia se experimentan de manera
diferente entre las adolescentes según su clase social. En las clases menos acomodadas, el embarazo
viene como un beneficio, ya que a menudo esta adolescente no tiene perspectiva con respecto a su
futuro. Mientras que en las clases más favorecidas, el adolescente recibe una educación de mejor calidad,
tiene estructura familiar, el embarazo parece estar más relacionado con los aspectos psíquicos
omnipotencia, dificultad para asumir la propia sexualidad y la de los demás. El inicio temprano de la vida
sexual y el no uso de métodos anticonceptivos, expone a los adolescentes no sólo a un embarazo no
deseado sino también a las ITS (infecciones de transmisión sexual). La baja escolaridad es mencionada
por Gonçalves (2021) como un factor de embarazo adolescente.
2.2.3 Familia
Los casos previos de embarazo precoz en la familia de la joven son señalados como un factor
predisponente según Vianna (2000) apud por Guimarães y Witter (2006) para que la historia se repita.
"Los valores familiares se enfrentan a información dudosa, distorsionada y contradictoria de los medios
de comunicación, dando apertura a actitudes de desafío y autoafirmación de los jóvenes, que a veces
resultan en embarazos no deseados" (MINAS GERAL, 2007, p. 118).
Además del hecho de que los padres no ofrecen la información necesaria sobre el tema, incluso porque
creen que esta es una tarea de la escuela y/o de los servicios de salud, a menudo elementos culturales,
como los casos de embarazo en otras mujeres adolescentes de la familia, influyen fuertemente en el
comportamiento de los jóvenes, comprometiendo el ejercicio saludable de la sexualidad (SILVA, K. L. et
al. 2009).
Roca; Minervino (2008) y Gontijo; Medeiros (2008) citado por Santos, R. A. B. (2010) señala otros factores
familiares que pueden contribuir al embarazo adolescente. Familias perturbadas por el desempleo, la falta
de condiciones socioeconómicas y culturales, la falta de amor y diálogo, el exceso de conflictos
interpersonales y el uso de drogas lícitas e ilícitas.
2.2.4 Escuela
La escuela es considerada un factor protector con respecto al problema del embarazo adolescente, por
lo que el sistema educativo brasileño debe estar alerta a las altas tasas de adolescentes fuera de la
escuela que quedan embarazadas debido a la falta de información (MINAS GERAL, 2007). Las niñas que
tienen baja escolaridad tienen peores perspectivas para el futuro, de esta manera, el embarazo se
convierte en un medio para ser alguien en la vida, o al menos para ser madre, ejerciendo un papel de
responsabilidad en la sociedad (CARNIEL et al., 2006, GONTIJO y MEDEIROS, 2008, OLIVEIRA, 2008
apud SANTOS, R. A. B., 2010).
3 Aspectos socioeconómicos
Aunque el embarazo precoz está presente en todas las clases sociales, lo que se observa en varios
estudios, es el autoíndice de embarazo en la adolescencia en estratos sociales con menor poder
adquisitivo, que está estrechamente vinculado a la pobreza. La falta de un proyecto de vida, de
oportunidad para continuar estudios y conseguir un buen trabajo, para muchas niñas la maternidad es
vista como un "pasaporte", una alternativa para sus vidas (PANTOJA, 2003 apud SANTOS, R. A. B.,
2010; Nery y otros, 2011; SOUZA, T. A. et al., 2012; SILVA, F. N. et al., 2012; FERREIRA et al., 2012).
4 Pensamiento mágico
El "pensamiento mágico" es típico de los adolescentes. Cree que nada malo le puede pasar, incluido el
embarazo, incluso presentando una vida sexual activa y conociendo el método anticonceptivo, no lo use
debido al pensamiento mágico, siendo a menudo sorprendido cuando se confirma el embarazo (MINAS
GERAL, 2007; BENINCASA; REZENDE; CONIARIC, 2008; SOUZA; NOBREGA; COUTINHO, 2012).
Azevedo et al. (2014) mencionan que, desde el punto de vista biológico, sobre las consecuencias del
embarazo para el adolescente, apunta a una mayor incidencia de síndrome de embarazo hipertensivo
(SHG), que puede aumentar el riesgo de preeclampsia / eclampsia; anemia, diabetes gestacional;
complicaciones en el parto; que determinan el aumento de la mortalidad materna e infantil.
En cuanto a los problemas con el recién nacido, hay mayores posibilidades de bajo peso al nacer (BPN),
parto prematuro, enfermedades respiratorias y tocotraumatismo, así como una mayor frecuencia de
complicaciones neonatales y mortalidad infantil.
Bacelar et al. (2017), agrega que, en las niñas con primer embarazo menores de 17 años, existe una
mayor tendencia a desarrollar SHG (Síndrome Hipertensivo Gestacional), en comparación con las adultas
jóvenes, porque aún no tienen madurez orgánica. La diabetes gestacional, se puede definir como
cualquier nivel de intolerancia a los carbohidratos, causando hiperglucemia de diversa gravedad, teniendo
inicio o diagnóstico durante el embarazo, también es un factor de riesgo, pero no impide un embarazo
tranquilo, siempre que se diagnostique precozmente y la embarazada reciba seguimiento médico, durante
el embarazo y después del nacimiento del bebé. (Sociedad Boliviana de Diabetes 2019/20)
El parto es un proceso biológico e inherente a la mujer, que trae consigo muchas emociones, de los más
variados sentimientos para ambos sexos, pues, además de traer varias transformaciones
biopsicosociales, es un período crítico que requiere readaptación a su nueva vida, desencadenando
vulnerabilidad mental, además de la aparición de sentimientos como el miedo y la angustia, que tienden
a aumentar, especialmente con la proximidad del parto. (Silva et al., 2017) Con el objetivo de humanizar
la atención, el Ministerio de Salud implementó en junio de 2000 el Programa de Humanización de la
Atención Prenatal y del Parto (PHPN), cuyo objetivo es garantizar el acceso a la cobertura y calidad de la
atención prenatal, el parto y la asistencia puerperial a las mujeres embarazadas y recién nacidos. El
programa no incluye especialmente a las adolescentes, sino a todas las mujeres. No impedir que el
profesional de la salud esté atento a esta clientela. Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima
que, anualmente, nacen 15 millones de bebés antes de las 37 semanas de gestación en el mundo, es
decir, son bebés prematuros. Según datos de 2013 de la OMS, Bolivia ocupa el puesto 10 en el ranking
de países con el mayor número de nacimientos prematuros: 279.300 cada año. Los recién nacidos
prematuros son susceptibles a numerosos problemas de salud, que pueden desencadenar una disfunción
en un órgano o sistema del bebé, afectando negativamente su salud y su desarrollo cognitivo. Entre los
problemas más comunes se encuentran: Bajo Peso al Nacer - BPN (según tabla 6 del SINAS), problemas
respiratorios o síndrome de dificultad respiratoria, persistencia del conducto arterial, anemia, ictericia,
enterocolitis necrotizante y problemas neurológicos (OMS, 2013).
Andrade (2015) refuerza que una estrategia importante para el control y prevención del embarazo precoz
sería tratar de retrasar lo más posible que la vida sexual de estas adolescentes, que comienzan muy
temprano, señale como la mejor medida el estímulo para el uso de métodos anticonceptivos. En este
contexto, la enfermera tiene un papel fundamental, ya que puede actuar directamente como educadora,
creando y desarrollando proyectos sobre salud reproductiva, junto con la ayuda de las familias, con el fin
de reducir las tasas de embarazo en la adolescencia, a través de acciones en las escuelas de promoción,
prevención y atención de la salud, con miras a enfrentar las vulnerabilidades que comprometen el
desarrollo integral de los niños y jóvenes en el sistema escolar público.
El Protocolo de Salud del Adolescente cubre algunas consecuencias sociales y psicológicas adicionales,
que pueden encontrarse como resultado de embarazos no planificados: ocurrencia de abortos inducidos,
dependencia financiera de adultos, abandono o interrupción de estudios, dificultad para regresar a la
escuela, profesionalización deficiente y dificultad para ingresar al mercado laboral con mantenimiento del
ciclo de pobreza, falta de apoyo y/o aislamiento social y familiar, mayor riesgo de separación matrimonial,
ausencia del padre durante el embarazo y la vida del niño, sensación de inseguridad, mayor riesgo de
depresión y suicidio y mayor riesgo de explotación sexual (MINAS GERAL, 2007).
Muchas adolescentes cuando quedan embarazadas abandonan la escuela, muchas veces por vergüenza
de colegas o maestros y otras veces porque sufren las acusaciones de los padres de las estudiantes,
diciendo que son un mal ejemplo para sus hijos, por lo que la escuela deja de funcionar como un factor
protector en un segundo embarazo, que a menudo ocurre dos o tres años después del primer embarazo
(MINAS GERAL, 2007; CARVALHO, A. Y. C. et al., 2009; (SOUZA, T. A. et al., 2012).
La deserción escolar o la disminución del rendimiento escolar de aquellas adolescentes que no dejaron
de estudiar pueden ser las consecuencias más preocupantes citadas por todos los autores, pues la falta
de formación profesional conduce a la falta de empleo o empleos informales, perpetuando el ciclo de
pobreza que se considera una de las principales causas que lleva a las adolescentes a quedar
embarazadas, además de seguir dependiendo económicamente de sus padres, a menudo sufren abuso
familiar tanto para la madre como para el niño (SUZUKI et al., 2007; CARVALHO, A. Y. C. et al., 2009;
WIECZORKIEVICZ y SOUZA, 2010; SCHWANKE y PINTO, 2010; SILVA, F. N. et al., 2012). "La
percepción más extendida es que las mujeres jóvenes interrumpen su trayectoria profesional y escolar
para dedicarse a un hijo, y el embarazo, en ese momento, se considera un retroceso, tanto en la vida de
estas madres como desde el punto de vista social" (OTTONI et al., 2012, p. 22).
8 Atención y cuidado
Según el Ministerio de Salud (BOLIVIA, 2012) La Política Nacional de Humanización toma la acogida
como una postura práctica en las acciones de atención y gestión de las unidades de salud. Acoger, en el
contexto de la salud, se traduce como un conjunto de acciones que tienen como objetivo mejorar la
atención y aumentar la especificidad frente a una situación dada que enfrenta la mujer embarazada. El
acto de acoger está intrínsecamente ligado a la actitud de escuchar atentamente al paciente y reconocerlo
como un todo, y valorarlo.
9 Consulta Médica
La consulta médica tiene como objetivo proporcionar condiciones para la promoción de la salud de las
mujeres embarazadas y la mejora de su calidad de vida, a través de un enfoque contextualizado y
participativo. El profesional puede seguir plenamente la atención prenatal de bajo riesgo en el centro de
salud y de alto riesgo por parte del especialista, según el Ministerio de Salud y según lo garantizado por
la Ley de Ejercicio Profesional.
Durante la consulta, además de la competencia técnica, el médico debe mostrar interés en la mujer
embarazada y su forma de vida, escuchando sus quejas y considerando sus preocupaciones y
ansiedades. Para esto, el médico debe hacer uso de una escucha calificada con el fin de proporcionar la
creación de vínculo. Así, puede contribuir a la producción de cambios concretos y saludables en las
actitudes de la mujer embarazada, su familia y comunidad, ejerciendo así un papel educativo.
Las consultas prenatales pueden realizarse en el centro de salud o durante las visitas domiciliarias. El
calendario de atención durante la atención prenatal debe programarse de acuerdo con los períodos
gestacionales que determinan mayor riesgo materno y perinatal. El calendario debe iniciarse temprano
(en el primer trimestre) y debe ser regular, asegurando que se realicen todas las evaluaciones propuestas
y que se completen tanto la Tarjeta de Mujer Embarazada como la Forma Prenatal.
El número total de consultas debe ser de al menos 6 (seis), con seguimiento. Las consultas deben
llevarse a cabo de acuerdo con el siguiente calendario:
La mayor frecuencia de visitas al final del embarazo tiene como objetivo evaluar el riesgo perinatal
y de las complicaciones clínico-obstétricas más comunes en este trimestre, como el parto prematuro, la
preeclampsia y la eclampsia, la amniorrexia prematura y la muerte fetal. No hay "alta" de la atención
prenatal antes del parto. Cuando el parto no ocurre hasta la semana 41, es necesario derivar a la mujer
embarazada para la evaluación del bienestar fetal, incluida la evaluación del índice de líquido amniótico
y la monitorización cardíaca fetal. Estudios clínicos aleatorizados han demostrado que la realización de
inducir el parto en todas las gestantes a las 41 semanas de embarazo es preferible a la evaluación seriada
del bienestar fetal, ya que hubo un menor riesgo de muerte neonatal y perinatal y una menor probabilidad
de cesárea en el grupo sometido a la inducción del trabajo de parto a las 41 semanas. El seguimiento de
las mujeres en el ciclo puerperal embarazada debe iniciarse lo antes posible y sólo finaliza después del
día 42 del puerperio, período en el que se debería haber realizado la consulta puerperal.
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