Tema 2. La Diversidad Climática
Tema 2. La Diversidad Climática
Tema 2. La Diversidad Climática
Los factores geográficos son cuatro: la latitud, la situación, la influencia del mar y el
relieve.
▪ La altitud hace disminuir la temperatura unos 0,5 °C/0,6°C por cada 100 m de
ascenso y hace aumentar las precipitaciones al enfriarse y condensarse el aire.
En invierno, la corriente en chorro circula más baja en latitud, por lo que afecta al conjunto del
territorio español.
En cambio, en verano, asciende en latitud, por lo que suele incidir sólo en la franja cantábrica
▪ Los tipos de centros de acción son los anticiclones y labor las borrascas. Los
anticiclones son áreas de altas presiones (más de 1016 mbar) rodeadas por
otras de presión más bajas. El viento gira en torno a ellos en el sentido de
las agujas del reloj y producen tiempo estable. Las borrascas, depresiones
o ciclones son áreas de bajas presiones (menos de 1016 mbar) rodeadas de
otras de presión más alta. El viento gira en torno a ellas en sentido contrario
a las agujas del reloj y producen tiempo inestable, frecuentemente lluvioso.
Am: originaria de la cubeta ártica; es muy fría y seca, pero en su recorrido hacia la
península se recalienta por la base y se humedece. Produce nevadas y temperaturas
bajas.
Ac: originario del noreste de Europa o de Siberia; es muy fría y seca. Da lugar a cielos
claros y heladas.
Pm: originaria del Atlántico norte, es inicialmente fría. En su recorrido hacia el sur se
calienta y se humedece. En invierno produce precipitaciones en la cordillera Cantábrica
y en el occidente peninsular. En verano origina fuertes tormentas.
Pc: originaria del continente europeo, surge a partir del anticiclón térmico que se forma
en invierno. Si llega fría y seca, produce tiempo frío y soleado. Si se recalienta sobre el
Mediterráneo, causa precipitaciones en el levante peninsular.
b) Las masas de aire son porciones de aire con unas características concretas de
temperatura, humedad y presión. Éstas características las adquieren en sus
regiones de origen o regiones manantiales. España, debido a su latitud, recibe
masas de aire frías árticas (A) o polares (P) y masas de aire cálidas tropicales
(T). Las tres, dependiendo de la superficie sobre la que se originan, pueden ser
marítimas húmedas (m) o continentales secas (c). Éstas características
originales pueden modificarse si las masas de aire recorren grandes distancias.
c) Los frentes son superficies que separan dos masas de aire de características
distintas. Por tanto, ambos lados de un frente se produce un cambio brusco de
las propiedades del aire. En España, el frente más importante es el frente polar,
que separa las masas de aire tropical y polar. Eso es ondulaciones originan
borrascas de dos frentes, que provocan precipitaciones.
2.5 LA PRECIPITACIÓN
La precipitación es el agua que cae a la superficie terrestre procedente de las nubes,
tanto en forma líquida como sólida. Se mide con el pulviómetro en milímetros (mm)
o litros por metro cuadrado. En los mapas se representa mediante isoyetas o líneas
que unen los puntos de igual precipitación.
La causa de la precipitación es la elevación, enfriamiento y condensación del vapor
de agua contenido en el aire. Según el motivo de la elevación del aire, la
precipitación puede ser orográfica ( debida al relieve); convectiva (por el
calentamiento del suelo); o de frente (al entrar en contacto dos masas de aire de
características distintas, la fría se introduce por debajo de la cálida, obligándola a
ascender).
Los factores que explican la notoria variedad interanual, estacional y espacial de
las recuperaciones en España son tres:
▪ La latitud y la situación: determina el predominio y la sucesión anual de
borrascas o de anticiclones.
▪ La apertura al mar: en las zonas aisladas de la influencia marina, el frío del
invierno favorece la formación de anticiclones; y el calor del verano dificulta
la condensación del aire, aunque puede provocar precipitaciones convectivas
de carácter tormentoso. En las zonas de costa se ve favorecido por la
humedad de la zona.
▪ El relieve: las precipitaciones aumentan con la altura y disminuyen en las
zonas encerradas por montañas.
- El total anual es inferior a los 800 mm, considerándose moderadas entre los
800 mm y los 500 mm; y escasas por debajo de los 500 mm.
▪ Las precipitaciones son moderadas o escasas, entre los 800 y los 300 mm al
año.
▪ Las precipitaciones son moderadas o escasas, también entre los 800 y los
300 mm anuales. Su volumen es algo mayor en el sector occidental del interior
peninsular.
▪ Las temperaturas se caracterizan por una amplitud térmica alta (superior a los
16 °C), debido al aislamiento de la influencia del mar. Las variaciones técnicas
permiten distinguir tres subtipos climáticos:
- La submeseta sur y los bordes del valle del Ebro tienen veranos calurosos
(igual o superior a los 22 °C) e inviernos fríos, aunque con menor incidencia
de las heladas.
- En la zona media del valle del Ebro, la aridez se debe al encajamiento entre
montañas. Éstas montañas hacen que desciendan secas hacia el valle del
Ebro las masas de aire del norte y que ascienden por los Pirineos; las
borrascas atlánticas que alcanzan el sistema ibérico; y las masas de aire del
Mediterráneo que ascienden por la cordillera Costero-Catalana.
- La estepa cálida de la costa del SE, con temperatura media anual en torno a
los 17 °C-18 °C e inviernos muy suaves (no bajan de los 10 °C).
▪ Las precipitaciones son muy abundantes: suelen superar los 1000 mm al año.
▪ Las temperaturas se caracterizan por una media anual baja (inferior a 10 °C) y
por inviernos fríos, en los que algún mes se sitúa cerca o por debajo de 0 °C.
Por este motivo son frecuentes las precipitaciones en forma de nieve. Éstas
características muestran algunas variaciones en función de la latitud y del área
climática.
▪ La corriente fría de Canarias, entre las islas y el continente africano, enfría las
aguas superficiales más de lo que le corresponde por su latitud e incrementa la
estabilidad del aire en verano.
a) En las zonas bajas, las precipitaciones son muy escasas. En las islas
occidentales se encuentran entre los 300 y los 150 mm al año (clima
subdesértico o estepario); y en Lanzarote, Fuerteventura y tierras bajas de Gran
Canaria no alcanzan los 150 mm al año (clima desértico). Éstos escasos valores
explican por el predominio anual del anticiclón de las Azores. El máximo relativo
tiene lugar en invierno, debido a las borrascas atlánticas. Las temperaturas son
cálidas todo el año ya que ningún mes desciende de los 17 °C. Por tanto, la
amplitud térmica es muy baja (inferior a 8 °C).
b) En las medianías (territorios entre los 600 y los 1500 m), las precipitaciones
incrementan y pueden alcanzar los 1000 mm en las vertientes a barlovento del
alisio; en cambio, las temperaturas disminuyen. Y en las zonas más elevadas
de Tenerife y la palma, por encima del mar de nubes (más de 1500 m), las
precipitaciones se reducen (no suelen rebasar 400/500 mm) y la temperatura
media baja de los 10 °C, por lo que en invierno puede llegar a nevar.