Cotnrato de Construccion

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EL CONTRATO DE CONSTRUCCIN Y SUS PRINCIPALES GARANTAS 1 Osvaldo Contreras Strauch Introduccin.

En las Clusulas que se estipulan habitualmente en los contratos de construccin, se incluyen normas que regulan la aplicacin de garantas que es obligado a rendir el contratista o constructor de la obra. Veamos un ejemplo: CLAUSULA: El precio convenido ser pagado por el propietario en la siguiente forma: a) Con un anticipo de $.................., que el propietario entrega en ste acto al constructor y que este declara recibir. En garanta del anticipo estipulado, el constructor entrega al propietario...( modalidades de la garanta: boleta bancaria o pliza de seguro)......., por el mismo valor, garanta que deber ser devuelta por el propietario..................(modalidades de la devolucin de la garanta) b) Por Estados de Pago segn avance de obra, que el constructor presentar (perodo),de acuerdo al presupuesto detallado. Los Estados de Pago debern ser presentados a ( el Arquitecto de la obra o la Inspeccin Tcnica de la Obra) quien deber darles su visto bueno en un plazo mximo de 7 das para pagarlo en dinero efectivo. Los plazos establecidos en este inciso empezarn a correr a contar de la fecha de presentacin del Estado de Pago a quien corresponda. En los Estados de Pago se podr incluir el valor de los materiales al pie de la obra, en cuyo caso debern presentarse acompaados de los comprobantes o facturas correspondientes debidamente canceladas. 1 Este trabajo ha sido elaborado por el autor, a partir de la charla que dict, junto con don Arturo Prado Puga, Profesor de Derecho Comercial de la Universidad de Chile, el 13 de junio de 1996 en el Colegio de Abogados, constituyendo una versin actualizada y ampliada de aquella. Las sumas recibidas por materiales al pie de la obra se devolvern descontando el valor de estos materiales en la partida correspondiente a cada estado de pago de avances de obra, hasta completar devolucin. En todo caso, el saldo que falte por devolver debe ser en todo momento inferior al monto de la obra que falte por ejecutar. Del valor de cada estado de pago, el propietario retendr un...( 10% u otro porcentaje convenido) del monto del contrato, retencin que servir para garantizar la buena ejecucin de los trabajos, el cumplimiento de los plazos que ms adelante se estipulan y, en general, todas las obligaciones del constructor para con el propietario. El constructor tendr derecho a canjear, en cualquier momento estas retenciones por boletas bancarias o plizas de seguro de garanta. De la clusula anteriormente transcrita, que bajo distintas formas de redaccin similar, se aplican en el ramo de la construccin, surge la conclusin de que en este contrato existe una serie de obligaciones emanadas de l que requieren ser garantizadas. Ahora bien, las garantas ms usadas en el contrato de construccin son las siguientes: a) La Boleta bancaria de garanta;

b) La Pliza de seguro de garanta; y c) Las retenciones. El presente trabajo tiene por objeto analizar el concepto, caractersticas y aplicacin de estas diversas formas de garanta en el contrato de construccin. Para abordar este propsito, hemos dividido nuestra exposicin en los siguientes epgrafes: I.- Generalidades acerca del contrato de construccin. II.- Las garantas y el contrato de construccin. II.- La Boleta bancaria de garanta. IV.- El Seguro de garanta o caucin; y V.- Las Retenciones I.- Generalidades acerca del contrato de construccin: 1.- Definicin: Nuestro Cdigo Civil configura el contrato de construccin dentro de los moldes romanos del arrendamiento de obra. A pesar de la singularidad de sus rasgos y de su poderosa autonoma, no tenemos noticias que este prevista su tipificacin en alguna legislacin positiva vigente. Nuestro Cdigo se refiere a l integrndolo a la disciplina del arrendamiento para la confeccin de una obra material (prrafo 8m Tit. XXVI, art. 1.915 del C. Civ.) aunque escasamente slo dos artculos (2003 y 2004) se refieren a la construccin de edificio. Tomando como idea inicial los elementos que aportan la definicin del arrendamiento, se le ha definido como aquel en que las dos partes se obligan recprocamente la una a ejecutar una obra y la otra a pagar por ella un precio determinado2 o ms recientemente como aquel en que una parte se obliga, mediante un precio convenido, a materializar en un terreno un proyecto determinado, de cualquier obra de arquitectura. Dentro de este ltimo concepto de obra de arquitectura, quedan englobados tanto la construccin como las labores de refaccin de la obra relativas a edificios, puentes y caminos 3 . Cabe hacer notar, sin embargo, la tendencia actual en orden a emancipar este contrato del contrato de arrendamiento de obra, por cuanto el contrato de obra o ejecucin de obra servira para agrupar los resultados ms diversos, desde la confeccin de un traje o una mesa hasta la construccin de una nave. De all la denominacin adoptada en algunas legislaciones europeas como contrato de empresas4 (Italia) y la formacin autnoma que le confieren algunas entidades gremiales de ese continente, al ocuparse de su estructura, funcionamiento y ejecucin. As, por va de ejemplo, la Confederacin Nacional de la Construc-cin de Espaa, ha elaborado un folleto 5 en que define el contrato privado 2 Jorge Prat Echaurren, Nociones sobre el Contrato de Construccin Privada, Memoria de Prueba (Santiago, 1940), pg. 5.Vid. tambin Alberto Pulido Morgan, Los crditos refaccionarios en la ley de quiebras, Revista de Derecho y Jurisprudencia T. LIX Primera Parte, pgs. 80-109. 3 Jos Jerez Riffo- Ismael Palacios Baeza, Estudio Legal y Prctico sobre la Construccin, Editorial Jurdica,( Santiago, 1968), pg. 67. 4 Vid. Miguel del Arco Torres- Manuel Pons Gonzlez, Derecho de la Construccin ( Madrid, 1991) pg. 19 y sigs. Sealan estos autores que esta denominacin tambin es criticada como parcial ya que se basa en un criterio exclusivamente econmico que hace referencia a grandes obras, y puede dar lugar a confusin cuando ambas partes contratantes son empresas.

5 Vid. F. Javier Garca Gil, El Contrato de Ejecucin de Obra y su Jurisprudencia ( Madrid, 1995) Varios Autores, Manual de Contratos de la Construccin ( Madrid, 1980), pg. 13.- de ejecucin de obras, canalizndolo como aquel en que una persona denominada ( constructor, contratista o empresario) se obliga a ejecutar una obra de acuerdo con un proyecto, en favor de otra (denominada propietario o promotor) y a cambio de un precio. Tiene inters resaltar esta definicin, por cuanto ella se refiere al contrato privado de ejecucin de obra, para distinguirlos de aquellos relativos a obras pblicas donde el Estado acomete la tarea de las grandes obras de construccin de puentes, caminos, viviendas, y urbanismo. Trasladando este criterio de delimitacin a nuestro medio, el contrato privado de ejecucin de obra se rige principalmente por las estipulaciones de las partes y en los preceptos que supletoriamente establece el Cdigo Civil. El contrato de obra pblica, en cambio por tal aquel inmueble construido por el Estado, directamente o en virtud de un contrato, cuya finalidad es propender al bien pblico esta regido por normas administrativas que sectorialmente se han ocupado de regulacin (Obra Pblicas y Viviendas), siendo el principal cuerpo que regula la materia el Decreto Supremo reglamentario N15 del Ministerio de Obras Pblicas publicado el 6 de abril de 1992. En sntesis, de modo general podemos sealar que el contrato de construccin ser aquel en que una de las partes, denominada comitente o dueo de la obra, encarga a la otra, denominada contratista o constructor, la construccin de una obra determinado con relacin a un plano o proyecto, obligndose a pagar por ello un precio cierto7 2.- Modalidades y diferencias: Desde nuestra ptica jurdica ( art. 1996 del C.Civ.), el contrato de construccin de clasifica atendiendo a quien suministra los materiales. As, el contrato de confeccin de obra es venta cuando el artfice o empresario el que suministra los materiales y su perfeccin solo se alcanza cuando se aprueba la obra por el que la ordena. 6 Vid. Ramn Huidobro Salas El Contrato de Construccin de Obra Pblica, Revista Gaceta Jurdica, N 170, ao 1994, pg. 20-30. 7 Ramn Mara Mullerat, La Denominacin del Contrato de Construccin Revista Jurdica de Catalua, ao 1977, pgs. 681-683, citado por Miguel del Arco Torres- Manuel Pons Gonzlez, Derecho de la Construccin, ob.cit,pg.21. Es de arrendamiento de servicios, cuando los materiales son suministrados al artfice o empresario, por el comitente que encarg la confeccin de la obra. La importancia de esta clasificacin, en ambos casos, radica en la asuncin de los riesgos de perdida de los materiales que de desplazan y se transfieren al que ordena la obra con suministros de materiales o al artfice o constructor dependiendo si esta ha sido reconocida y aprobada ( Art.2000 del CC) Ha de tenerse presente que en nuestro medio se ha discutido acerca de que se entiende por el trmino materiales y la calidad de principal que revise a este respecto el suelo con relacin al resto de los materiales que se suministran de carcter mueble. Conforme lo establece el

inciso cuarto del art. 1.996, si se considera que lo principal es el suelo y es aportado por el que ordena la obra, el contrato ser de arrendamiento de obra. En cambio si el suelo en que se construye es de propiedad del constructor, el contrato es de venta. Nuestros Tribunales de Justicia ( Gaceta 1.895, T.II, Sent, 2.019, pgina 141) han entendido que bajo la denominacin materiales deben considerarse comprendidos todos los materiales incluyendo el suelo sealando que de los antecedentes que constituyen la historia fidedigna de dicho artculo, se deduce claramente que el suelo en que se construye un edificio por un arquitecto, forma la materia principal de la obra; y esta regla no aparece modificada por la Ley, an cuando se trate de Construcciones a precio alzado.8 No obstante, coincidimos con la tendencia doctrinal que considera que el suelo es un elemento extrao al contrato de construccin. Este ltimo tiene por objeto la ejecucin de una obra material (edificio), la cual una vez terminada, viene a ser una cosa hecha o producida por un agente (el hombre); de tal modo, el terreno queda excluido del concepto mismo de edificio (como obra material), jugando entonces un papel mero soporte.9 Ahora bien, a pesar de esta clasificacin, es frecuente tanto en el extranjero como en nuestro pas, recurrir a una divisin tripartita de los contratos de construccin, que atiende a uno de los elementos del mismo, 8 Vid. Jorge Prat Echaurren, ob. cit. pg. 20.-9 Jos Jerez RiffoIsmael Palacios Baeza, Estudio ob. cit. pg. 69. Cual es la fijacin del sistema de precios y que extiende su utilizacin incluso al contrato de obra pblica. As se clasifican en: 1.- Contrato para la construccin de obra material, por suma alzada o precio fijo o cerrado. 2.- Por precios unitarios o determinado por unidades. 3.- Contrato arrendamiento de servicios o por administracin delegada. 1.- Contrato de construccin a suma alzada: Bajo esta modalidad, el constructor, contratista o empresario, dirige, ejecuta y administra la obra hasta su total terminacin por un precio cierto, global y nico aportando el trabajo y los materiales. El precio convenido con el mandante o comitente o con el propietario del terreno que encomienda la ejecucin de la obra, se mantendr invariable 10 o inamovible (art. 4, N 27 del D.S. N15 de M.O.P.) salvo que se establezca una clusula de revisin de precios o que se introduzca obras extraordinarias o bien reformas o modificaciones introducidas por el propietario en el proyecto que impliquen un aumento o disminucin de la obra, en cuyo caso el precio ser renegociable. Por lo general, la revisin del precio depender, del tiempo transcurrido desde el inicio de la obra y de la incidencia que pueda revestir en el monto total. La ventaja para el comitente es manifiesta ya que conoce en forma anticipada el precio final de la obra, por este motivo, el contratista o constructor debe prever inicialmente y en forma realista sus precios en funcin del riesgo que acepta asumir, y de la realidad del mercado, particularmente en perodos de inflacin. 10 Con respecto al estudio de la clusula rebus sic stantibus en relacin a la revisin del precio, parece interesante colacionar la Sentencia de la Audiencia Territorial de Oviedo, de Espaa de 15 de Febrero de 1978, citada, citado por Miguel del Arco Torres- Manuel Pons Gonzlez, Derecho de la Construccin, ob.cit.pg.57 Considerando: Que en cuanto a la aplicacin de las citadas clusulas de revisin de los contratos fundadas en circunstancias posteriores al contrato que influyen de modo sensible en el equilibrio de las prestaciones, se han elaborado por la doctrina cientfica diversas teoras para justificar que el principio de irrevocabilidad o inmodificacin del contrato no es absoluto, teoras que basadas, bien en la

presuposicin de la base del negocio, en la equivalencia de las prestaciones en la propia causa del mismo, en el riesgo imprevisible, en la buena fe y equidad, en el abuso del Derecho o en el enriquecimiento injusto, no han sido ajenas a la jurisprudencia de nuestro Tribunal Supremo...

Presente inters esta modalidad por cuanto en ella se advierte con nitidez que el contratista se obliga respecto del comitente o propietario a la obtencin del resultado proyectado al que se debe encaminar toda su actividad 11 . Se trata de un arrendamiento de obra que podra aproximarse por sus caracteres a la compraventa de cosas futuras. Lo esencial- para ser fieles a la distincin entre la obligacin de medio y de resultados- radica en la obra ejecutada por el contratista a cambio de un precio cierto y en principio irrevocable, la cual debe ser aprobada y recibida conforme por el comitente al momento de su terminacin. 2.- Contrato de construccin pactado a una serie por precios unitarios o determinado por unidades: Bajo esta modalidad, los precios se descomponen 12 y no existe un precio global si no una suma de precios en funcin que las unidades de obras o trabajos efectuados. Se trata de un contrato en que el comitente o mandante convienen con el constructor precios unitarios por volmenes de obras, cuando no se conoce con exactitud o no se puede calcular en forma anticipada, salvo que existan largos estudios previos, la cantidad probable de todas ellas. Presenta como ventaja para el mandante o comitente que puede contratar la realizacin de una obra sin tener la necesidad de contar y proporcionarle la realizacin de una obra sin tener necesidad de contar y proporcionarle al contratista todos los antecedentes por ejemplo, de estudios de mecnica de suelo y de subsuelo. Esta mayor flexibilidad permite tomar decisiones en el camino sobre la base de precios unitarios que ya son conocidos. El constructor sabe que recibir en abono de su trabajo un precio en armona con el presupuesto y tipo de trabajo ejecutado cuya naturaleza es conocida mas no su cantidad. 3.- Contrato de arrendamiento de servicios: Son muchas las ocasiones en que en materia de construccin esta 11 Miguel del Arco Torres- Manuel Pons Gonzlez, Derecho de la Construccin ob. cit. pg. 23. La doctrina es casi unnime en puntualizar que, la distincin entre estos dos contratos, la diferencia esencial entre el arrendamiento de servicios y el de obra (llamado tambin contrato de empresa), radica en que, la prestacin est constituida por el servicio en s, mientras que en ste la prestacin esta representada por el resultado, sin que importen para nada las horas de trabajo, es decir, el servicio. 12 El Cdigo Civil en su art. 1.821 y el Cdigo de Comercio en su art. 143 N3 se refieren a la hiptesis de venta de cosas con precio ajustado por peso, cuenta o medida. presente el arrendamiento de servicios. En la confeccin del proyecto arquitectnico, en la ingeniera de clculos, en la direccin e inspeccin tcnica de la construccin y en los subcontratos a que da lugar, en todos ellos que requieren conocimientos especializados que suponen largos estudios que conforme a las normas del art. 2.118 quedan sujetos a las reglas del mandato y a las normas que regulan el arrendamiento de servicios materiales 13 En este esquema el propietario encarga a la empresa constructora, quien acepta, la direccin, administracin y ejecucin de la construccin de una obra, de modo que el costo total y efectivo de la construccin es de cargo exclusivo del propietario y la empresa constructora solo recibe un honorario por la direccin, administracin de la obra que normalmente se concreta en un porcentaje sobre el costo efectivo de la obra o en un monto fijo determinado. Algunos autores han afirmado que, en rigor, aqu no existe contrato de construccin desde el momento en que el mandante o comitente o propietario del terreno acta tambin como empresario aceptando los riesgos del financiamiento del proyecto, los costos de construccin

de la obra y los materiales contratados ya sea en forma directa o bien actuando el contratista por cuenta y a nombre suyo, como sucede, por ejemplo con los contratos celebrados con los distintos proveedores de materiales. La gestin del contratista se endereza hacia un arrendamiento de servicios- obligacin de medio- y recae especficamente sobre su trabajo de direccin, coordinacin y fiscalizacin de la construccin, actividad o servicio que aparece como medio de consecucin de resultado til final. Se trata, como dijimos de una obligacin de medio en la que cobra relieve la calidad, cantidad y duracin de los mismos a diferencia del contrato de arrendamiento de obra en que el resultado es decir la obra ejecutada y convenida esta siempre presente y en funcin del cual se concierta el precio. Los plazos de ejecucin de la obra estn afectos a un sistema de premio, incentivos y multas. 13 Segn Miguel de Arco Torres- Manuel Pons Gonzlez, Derecho de la Construccin ob. cit, pg. 112: Por algunos tratadistas se califica de contrato mixto: de mandato y de obra. De mandato, en cuanto el contratista adquiere los materiales y contrata la mano de obra por cuenta del comitente; ya lo haga en nombre propio o en nombre de su mandante. Y de obra, en lo que se refiere a la ejecucin por el constructor de los trabajos que le son propios. Naturalmente, este tipo de contrato es el que menos riegos tiene para el empresario de la construccin pero es el que menos estimula su productividad e inventiva. Se ocupa normalmente, cuando no se conoce siquiera la naturaleza de las obras a ejecutar por no tener los proyectos terminados o solo se pueden terminar despus de un tiempo. 3.- Consideraciones generales: Con todo lo expuesto anteriormente, estimamos que las distintas modalidades de contratos se deben emplear atendida cada circunstancia en particular. La correcta evaluacin inicial de un proyecto y por lo consiguiente, de la modalidad contractual que conjugue los factores de precio, plazo y calidad, depender muchas veces de la informacin y especificaciones tcnicas previos que disponga el mandante ( del mtodo constructivo, de ingeniera, topografa, cubicaciones, mecnica de suelos y conocimiento del subsuelo, de arquitectura, etc. etc.) permitiendo alcanzar as la meta de un costo mnimo, plazos reducidos y mxima calidad. Sin duda, el mejor contrato ser siempre el ms equilibrado para las partes, es decir aquel cuyas condiciones benefician y perjudican por igual a ambos contratantes14 En esta direccin, debe evitarse que los contratos se transformen en un dictado unilateral de una de las partes en que prima bsicamente el factor sorpresa y desenlace. Por ello deben existir reglas sencillas, claras y similares para ambos contratantes donde los resultados que se espera obtener o sea los beneficios recprocos, no dependan de las ambigedades o rendijas que deje abierta el contrato sino que la eficacia con que cada parte desarrolla su cometido. No podemos descartar como sugerencia en esta materia, la necesidad que los rganos gremiales puedan desarrollar una labor profesional oficiosa durante la ejecucin de los contratos, cualquiera sea la modalidad convenida, a modo de consultor tcnico, con el objeto de proceder a orientar donde suelen encontrarse discrepancias que no necesariamente requieren de la formalidad de un arbitraje. 14 Varios Autores, Manual de Contratos de la Construccin ob. cit. pg. 18

II.- Las garantas y el contrato de construccin: 1.- Que se garantiza. No es exagerada la afirmacin que sostiene que la historia de las obligaciones se confunde con la de los medios destinados a garantizar su cumplimiento.

En el contrato de construccin se garantizan las prestaciones y contra las prestaciones pecuniarias recprocas de las partes para el caso que no se cumplan las obligaciones que asumen o se cumplan de una manera defectuosa o inoportuna, esto es, fuera de los plazos estipulados para el desarrollo del proyecto, ya que en esta materia resulta especialmente relevante no solo como se cumple el contrato sino cuando y en que tiempo se ejecuta. 2.- Tipos de garanta: Las garantas en este tipo de contrato estn establecidas como exigencia, generalmente por intermedio de la autonoma contractual. Algunas de ellas son convencionales y accesorias del contrato principal, como la fianza, los avales y las clusulas penales que se estipulan generalmente por los retrasos. Otras son independientes como la boleta bancaria de garanta y la pliza de seguro de garanta a slo requerimiento. Existen, no obstante, garantas de origen legal como son las garantas por los daos y perjuicios que traiga consigo la ruinas de las obra provenientes de vicios de la construccin. Esta ltima es la responsabilidad tpica del constructor causada por el desplome o destruccin total de lo construido que se extiende a aquellos defectos graves parciales que hagan impropia o intil la obra para la finalidad que se construy. Dicha responsabilidad que dura cinco aos a contar de la fecha de recepcin del inmueble, es de orden legal y se encuentra establecida en los arts. 2.003 N3 y 2.324 del C. Civil. Hechas estas precisiones, veamos cuales son las garantas convencionales ms frecuentes:

a) En los contratos por suma alzada y serie de precios unitarios: 1) Garantas por devolucin de anticipos: Se extienden por la empresa constructora, conjuntamente con el pago por el mandante de la primera cuota del precio convenido. Esta garanta toma la forma de un pagar a la vista, pliza de seguro o una boleta bancaria que se restituye al contratista conjuntamente con el pago de la ltima cuota en que se divide el pago o lo que es lo mismo, con la aprobacin del ltimo estado de pago por avance de obra. 2) Garanta de fiel cumplimiento del contrato: Se extienden por la empresa constructora como boleta bancaria o seguro de de garanta en favor del propietario por un monto equivalente a un porcentaje del valor del contrato, la que es devuelta al momento de la recepcin definitiva de la obra. La garanta es para responder del fiel y oportuno cumplimiento de todas las obligaciones legales y contractuales del contratista y en especial del pago de las penas contractuales y de las indemnizaciones que pueda decretar el rbitro y los gastos de reparacin a que haya lugar. Normalmente esta garanta se extiende en su vigencia por un plazo adicional que se cuenta desde la fecha de la recepcin de las obras por el propietario. 3) Garantas de cumplimiento de la obra en los plazos pactados: El incumplimiento de los plazos estipulados por el contratista para la realizacin de la obra lo hace incurrir generalmente en multa de carcter moratorio sin perjuicio de las penas compensatorias. 4) Garantas de suministro oportuno de materiales y equipos si se conviene que son del cargo del contratista. b) En los contratos de arrendamiento de servicios: Garantas de reembolso de la provisin de fondos o anticipo: se extienden por la empresa constructora en favor del mandante o propietario quien financia ntegramente la obra. Como los bancos estn impedidos de extender boletas para garantizar obligaciones de dar como sucede con la restitucin de dinero, se extienden como garanta de fiel cumplimiento del contrato.

Normalmente se establece que al iniciarse la construccin , la empresa constructora recibe del propietario una provisin de fondos para los gastos que demanda la obra, suma que se reembolsa al propietario al trmino de la misma. La empresa constructora puede canjear el valor de estas retenciones por boletas de garanta bancaria o plizas de garanta emitidas por compaas de seguros. c) Extendidas por el demandante o propietario en favor del contratista: Garantas de cumplimiento de los estados de pago dentro del programa establecido en el contrato: en estos casos, adems de conceder la ampliacin de los plazos que guarden relacin con el atraso, se establece generalmente una multa como pena moratoria en contra del mandante en favor del contratista. III.- La Boleta Bancaria de Garanta 15 1.- Generalidades: Normalmente son los bancos los que para obtener la seguridad de reembolso de los prestamos que otorgan a sus clientes, exigen garantas para el cumplimiento de obligaciones. Sin embargo, en la hiptesis de la boleta bancaria son los bancos los que, como sujetos profesionales de crdito, y dentro de las operaciones de su giro (art. 69 N 13 de la Ley General de Bancos) refuerzan y garantizan ante terceros las obligaciones asumidas por sus clientes. En materia de construccin, el empleo de boletas es utilizadas como garanta personal que asegura la ejecucin de un resultado (Vgr. devolucin de anticipos). En esta direccin, no podemos desconocer, en la realidad del trfico actual, el papel competidor que cumplen las compaas de seguros ya que 15 Miguel Gonzlez Saavedra, La Boleta Bancaria de Garanta (Santiago, 1962 ) Rodrigo Winter Igualt, La Boleta de Garanta, Anlisis Prctico y Jurdico ( Santiago, 1995); Rafael Gmez Balmaceda La Boleta Bancaria de Garanta, Boletn de la Fiscala Nacional de Quiebras N 13-15; Sentencia Wewssel Duval y Ca. Con Saelzer y Scharzenberg, Casacin en el Fondo 11 de enero de 1947, Revista de Derecho y Jurisprudencia, ao 1948, Segunda Parte, Seccin Primera, pgs. 120-143; nota de don Ral Varela Varela, pgs. 124 y sigs.

para una misma finalidad econmica representada por la cobertura del inters del acreedor, resultan adecuados los seguros de caucin y las garantas bancarias por igual. Aunque nacida de la practica bancaria nacional, la boleta bancaria presenta afinidad con aquellas pactadas a primera demandao a primera solicitud como las que existen en el campo del comercio internacional (carta de crdito stand-by) nacidas de las nuevas modalidades de garanta, admitidas en su aplicacin a travs de reglas uniformes compiladas por la Cmara de Comercio Internacional 16 . En ellas basta atender la reclamacin del beneficiario de la garanta, sin que medie proceso judicial previo, para hacer efectivo su importe. El carcter autnomo y abstracto de esta garanta, distinto al de la fianza rgidamente accesoria por su propia naturaleza ( art.2354 del C.C.) o de la clusula penal (art. 1536), impide que se puedan oponer excepciones al beneficiario por parte del Banco en orden al incumplimiento del contrato que la origina y asienta, o que se pueda oponer al cumplimiento tardo o defectuoso. En sntesis, a travs de estas garantas el banco garante asume ante el beneficiario una obligacin independiente consistente en la obtencin de un resultado sin que puedan oponerse las excepciones del contrato subyacente. 2.- Definicin:

Podemos definir la boleta bancaria de garanta como un documento emitido por un banco (banco emisor) a solicitud y por cuenta de un cliente (tomador), en virtud del cual el banco de obliga a pagar a la persona a cuyo favor se extiende (beneficiario) una cierta cantidad de dinero, contra la sola presentacin del documento de cobro17 , o una operacin bancaria que consiste en un depsito de dinero en beneficio de un tercero; depsito que permite perfeccionar un contrato de prenda de dinero que el tomador celebra con el beneficiario para garantizar una obligacin principal en favor de este18 . 16 Vid. Juan Snchez- Calero Guilarte, El contrato autnomo de garanta. Las garantas a Primera Demanda ( Madrid, 1995), pg.76 y sigs. Acerca de las analogas y diferencias con la carta de crdito Stand- by, vase pg. 111 y sigs. Vid Rodrigo Winter Igualt, La Boleta de Garanta Bancaria, Anlisis Prctico y Jurdico ob.cit. Pg. 87-89. 17 Rodrigo Winter Igualt, La Boleta de garanta Bancaria, Anlisis Prctico y Jurdico ob.cit. pg.15 18 Miguel Gonzlez Saavedra La Boleta Bancaria de Garanta (Santiago, 1962) pg.7. Se trata, como se advierte, de un depsito de dinero que el tomadorrealiza en favor de un tercero, el beneficiario, con la finalidad de garantizar el cumplimiento de obligaciones del primero en favor del segundo. El certificado que emite el Banco interviniente se llama boleta de garanta. La diferencia con respecto a las boletas tomadas en efectivo radica en que, en todo caso el banco le entrega (ficta o simblicamente) el dinero al tomador, para que ste, a su turno, lo entregue al banco a fin de constituir el depsito propiamente dicho. En la prctica, por razones de economa y para evitar trmites intiles, no hay entrega real de dinero, tal y como sucede cuando el Banco otorga un crdito para reprogramar otro anterior, pagndolo y extinguindolo, por medio de una novacin por cambio de objeto. Como se sabe, en esos casos el desembolso real no se produce, pues los fondos son aplicados de inmediato al objeto que se tuvo en vista con ocasin del segundo crdito. Anloga situacin se produce con la entrega de las letras hipotecarias al vendedor de un inmueble -que regularmente nunca toma contacto fsico con ellas-, en los mutuos de esa naturaleza. Las normas que rigen estos instrumentos estn contenidas en la Ley General de Bancos (art. 69 N13) y las Circulares que emite la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Recopilacin Capitulo 8-11). Presenta la caracterstica de ser una garanta autnoma, incondicional e irrevocable, a menos que se convenga lo contrario, y es intransferible por endoso, salvo el endoso en comisin de cobranza (art. 18, Ley N 18.092). Su objeto es caucionar obligaciones de hacer que no sean de crdito de dinero, con la salvedad de aquellas extendidas en beneficio de las entidades del sector pblico que deben llevar la glosa a favor de organismos pblicos, en cuyo caso se autoriza la caucin para garantizar obligaciones que representan la entrega diferida de una suma de dinero cuando la exigencia de otorgar tales Boletas emana de la institucin a cuyo favor se extienden.

3.- Antecedentes: La Boleta Bancaria de Garanta presenta una peculiar historia que la separa del resto de los depsitos bancarios. Nacen de la prctica comercial por razones muy concretas. Antes que se promulgara el D.L. 559 en el ao 1925 (Ley General de Bancos), los Bancos podan caucionar el cumplimiento de obligaciones ajenas otorgando su fianza. Al dictarse esta ley se estim que los bancos solo podan realizar las operaciones que expresamente se autorizaba, con lo cual se entendi que no podan prestar su fianza al no estar sealada sta figura, dentro de las operaciones bancarias permitidas. Se estim por la Superintendencia que, no obstante, los bancos podan emitir depsitos constituidos en garanta, que por ser depsitos los bancos si estaban autorizados a recibir.

La anterior situacin se vino a modificar a partir de la Ley 13.305, que permiti a los bancos otorgar avales y fianzas adems de las Boletas Bancarias. Sin embargo, la necesidad de contar con una slida garanta bancaria hizo popular el uso de estos documentos, considerndose que en la mayora de los casos el cliente o tomador de la boleta no hacia un depsito con sus propios fondos el banco sino que ste otorgaba la boleta con los fondos provenientes de un prstamo que este le otorgaba. Por motivos de seguridad y especialmente por la eventualidad de embargo o quiebra del cliente-tomador, supuesto ante el cual el banco tendra dificultades para compensar o embargar el depsito por el crdito que se le deba, se opt por modificar ( 1931 ) la Ley General de Bancos configurndose a partir de entonces su caracterstica ms significativa, esto es el privilegio de la inembargabilidad por terceros extraos al contrato u obligacin que caucionan las boletas, ni tampoco pueden estar afectas a la concurrencia de ningn otro acreedor. La circunstancia que esta institucin jurdica carezca de una espe-cfica regulacin legal, como sucede con otras instituciones comerciales denominadas atpicas, no obsta a que exista un reconocimiento formal de la existencia de esta operacino, ampliamente acreditada por su cotidiana aplicacin. Tampoco tienen explcito reconocimiento legal algunas prcticas internacionales, sobre la base de las cuales los bancos realizan diversas operaciones, como por ejemplo, las propias cartas de crdito stand by, los swift o los arbitrajes de monedas.19 Por lo dems, en el Derecho Comercial Moderno, existe la tendencia a dar cabida a contratos elaborados al amparo de la autonoma contractual y al comps del proceso de especializacin e internacionalizacin de la economa y que se desplazan en forma expansiva desde el mundo anglosajn, manteniendo incluso su denominacin de origen, como sucede con el leasing, el factoring, el franchising o los contratos de colaboracin empresarial o jointventure, o aquellos que se aplican a la instalacin de una actividad industrial o contrato de engineering, o bien, el contrato de forwardque se utiliza en el mbito financiero para asegurar el tipo de cambio en los arbitrajes de monedas. A pesar que como sealbamos en un comienzo, las boletas de garanta reconocen su origen y eficacia en la prctica o costumbre mercantil bancaria (art.4 del C. de Com.), no cabe duda que un acuerdo de voluntades de esta naturaleza tiene pleno amparo jurdico por tratarse de un contrato legalmente celebrado (artculo 1.545 del Cdigo Civil) cuya fuerza y sancin se asimila nada menos que a los efectos de una ley. El nmero 13, del artculo 69 de la Ley General de Bancos -al igual que el N 10 del artculo 83 de la anterior legislacin bancaria, DFL. 252 de 1960- y las Circulares que emite la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Recopilacin Capitulo 8-11), reconocen en forma expresa la existencia de estas boletas. 4.- Principales caractersticas de las boletas. La Boleta Bancaria es una garanta autnoma por excelencia, ya que tiene una vida independiente del contrato que garantiza. El banco emisor no podr alegar que el contrato subyacente no ha sido cumplido en forma fiel y en tiempo oportuno. Esta caracterstica obedece a lo que en el mbito del derecho anglosajn se denomina primero pague y luego discuta (pay first, argue later), cuya justificacin obedece al objetivo que cumple la boleta. El beneficiario eso s, debe cuidar de no abusar de la garanta o reclamarla o extenderla fuera de los casos permitidos debiendo devolverla al tomador, en los casos en que proceda. 19 Resulta curioso constatar que las cartas de crdito stand-by presentan su origen en las prohibiciones legales a los bancos norteamericanos de asegurar por medio del otorgamiento de garantas personales el cumplimiento de obligaciones ajenas. Vid. Juan Snchez- Calero Guilarte, El Contrato autnomo de garanta. Las Garantas a Primera Demanda, (Madrid, 1995), pgs. 113-114; Fernando Snchez Calero y otros, Las garantas a primer requerimiento (garantas a primera demanda), (Madrid, 1996).

La Corte de Apelaciones de Talca ( Rev. de Der.y Jurisp. Ao 1988, Seg. Parte, Secc. Quinta p.212) 27 de mayo de 1.988 Empresa Constructora Fuenzalida y Gonzlez con Alcalde (s) de la I. Mun. de Curic. (recurso de proteccin) ha mantenido este criterio al estimar que la conducta de la I.Municipalidad- que haba ordenado hacer efectiva la Boleta era equivalente a una auto tutela declarativa ilcita.20 Pueden emitirse con validez de un plazo determinado, al cual debe hacerse referencia en la propia boleta y deseablemente, en el contrato caucionado. Transcurrido el plazo mximo establecido sin que el beneficiario la haya hecho efectiva, se entender haber caducado su validez. Si no tienen sealado plazo, tendrn duracin permanente hasta que prescriban los derechos del beneficiario. La Superintendencia, en caso de boletas emitidas con cargo a un prstamo bancario (contra crdito), recomienda a los bancos con el objeto de acotar su responsabilidad, colocar en el texto una exigencia adicional por la cual el beneficiario con una determinada anticipacin, normalmente treinta das, avise su nimo de hacerla efectiva comunicndole al tomador de la boleta el cobro de la misma a fin de que este prevea de los fondos para efectuar el pago o haga valer sus derechos en caso de cobro irregular (recurso de proteccin, medida perjudicial precautoria de retencin). El Banco se encuentra obligado a pagar el importe de la boleta transcurridos los treinta das aunque el aviso se haga el ltimo da de vencimiento. Es una garanta irrevocable, salvo que se convenga lo contrario; es intransferible por endoso, salvo el endoso en comisin de cobranza (art. 18, Ley N 18.092). Pueden ser emitidas en moneda nacional con o sin clusula de reajustabilidad o en moneda extranjera o expresadas en moneda extranjera pagaderas en moneda nacional. En sntesis, a diferencia de la fianza de los avales y de las clusulas penales que son accesorias a un contrato principal, las boletas bancarias son independientes y fruto del ejercicio de la autonoma contractual. A travs de estas garantas el banco garante asume ante el beneficiario una obligacin independiente consistente en la obtencin de un resultado sin que puedan oponerse las excepciones 20 Establece el fallo Pero lo que es de mayor importancia es que la finalidad de la garanta ha sido alterada, ya que su objetivo era asegurar la correcta ejecucin de las obras, segn lo acreditala clusula dcima del contrato tipo suscrito por ambas partes, despus de lo cual existe la obligacin de restituirla, una vez extendida el acta de recepcin definitiva. del contrato subyacente (independent of the performance of the underlying contract for which the credit was issued). Como se advierte en la especie, los riesgos del incumplimiento de la obligacin garantizada (allocation of risks) se transfieren del acreedor que es beneficiario de la boleta, al deudor que es el tomador de la misma, quien tendr que iniciar las acciones judiciales en caso que se haya efectuado un cobro indebido de la boleta. 5.- Naturaleza Jurdica de la Boleta Bancaria de Garanta. La Boleta Bancaria de Garanta presenta una naturaleza compleja ya que engloba negocios jurdicos diferentes. Algunos han sostenido que se trata de una prenda de dinero, y recuerdan, la prctica de usar dinero como prenda en las Bibliotecas, para garantizar la devolucin de libros. La Corte Suprema en fallo de 11 de Enero de 1947. 21 expresamente admiti que el valor real y efectivo que la moneda representa, pueda utilizarse en otros fines, como el de garantizar el pago de una obligacin cualquiera, agregando que: Si no pudiera calificarse como prenda la garanta consistente en una suma de dinero, constituira de todos modos una caucin que no esta prohibida por la ley. El Cdigo de Procedimiento Penal, en materia de libertad provisional (art.371) permite sustituir la fianza por un depsito de dinero. Igual cosa sucede en materia de solicitudes de quiebra con la consignacin inicial (art. 44 de la Ley 18.175) y en materia de juicio ejecutivo con relacin al interesado en hacer posturas (art. 494 C.P.C.). Los autores que se han ocupado del tema postulan su explicacin desde ngulos diversos.

La mayora estima que entre el tomador y el banco emisor tiene lugar las figuras jurdicas del depsito y la estipulacin en favor de otro en tanto que entre el tomador y el beneficiario existira una prenda, para algunos de dinero, para otros sobre el crdito. Entre las ms relevantes: a) Don Ral Varela Varela 22 , opina que estamos delante de una 21 Sentencia Wessel Duval y Ca con Saelzer y Scharzenberg, Casacin en el Fondo 11 de Enero de 1947, Revista de Derecho y Jurisprudencia, Ao 1948, Segunda Parte, Seccin Primera, pgs. 120-143; nota de don Ral Vrela Vrela, pgs. 124 y sigs 22 Comentario a la Sentencia Wewssel Duval y Ca. con Saelzer y Scharzenberg, Casacin en el Fondo 11 de enero de 1947, Revista de Derecho y Jurisprudencia, ao 1948, ob. cit. pg.131, N 19. prenda de dinero depositado en manos de un banco representado en una boleta y que autoriza al acreedor prendario para hacerla efectiva y entrar en posesin efectiva, otorgndole una seguridad extraordinaria, ya que ningn acreedor puede disputarle el derecho a pagarse sobre su valor. b) Don Ral Varela Morgan 23 , sostiene que es una combinacin de negocios diferente, configurndola como un servicio que el banco presta a su cliente ya que para otorgar la boleta de garanta no es imprescindible la existencia de un depsito de dinero que el banco reciba. El banco emite un ttulo de crdito que contiene una promesa unilateral, incondicionada y abstracta en que se compromete a pagar el beneficiario una determinada suma. Entre el tomador y el beneficiario la boleta sera una caucin consistente en la prenda de la boleta o de la obligacin consignada en ella, que el tomador entrega al beneficiario. c) Don Alvaro Puelma Accorsi:24 , sostiene que se trata de un negocio fiduciario o de confianza: El tomador al hacer un depsito a nombre de un tercero, con fines de garanta, est realizando no un acto simulado, sino un negocio fiduciario que es real. d) Miguel Gonzlez Saavedra:25 Siguiendo a don Rul Varela V. La define como un depsito de dinero en beneficio de un tercero que permite perfeccionar un contrato de prenda de dinero que el tomador celebra con el beneficiario para garantizar una obligacin principal en favor de este. e) Por ltimo, don Rodrigo Winter Igualt ha negado el carcter de depsito de dinero que revise la boleta, particularmente en el caso de las boletas contra crdito, consagrndola como un ttulo de crdito intransferible emitido por un banco a nombre propio pero en virtud de un mandato del tomador, con el exclusivo objeto que este ltimo lo utilice para garantizar al beneficiario el cumplimiento de la obligacin que se consigna en su texto, y que es pagadero contra su sola presentacin a cobro. El citado autor formula severas criticas a la configuracin de la relacin jurdica entre el tomador y el banco garante o emisor asentada como dijimos, en un depsito y una estipulacin en favor de otro 26 , por la incertidumbre jurdica que trae aparejada la eventual 23 Apuntes taquigrficos de las clases de don Ral Varela Morgan tomados por don Miguel Gonzlez Saavedra de los cursos de Derecho Bancario organizados por la Universidad Catlica de Chile, citado por este ltimo, pgs. 27-34. 24 Alvaro Puelma Accorsi, Estudios Jurdicos sobre Operaciones Bancarias (Santiago, 1971), pgs. 88 y sigs. 25 Miguel Gonzlez Saavedra, La Boleta Bancaria de Garanta ob.cit.pg.7 y 41 y sigs. 26 Rodrigo Winter Igualt La Boleta de Garanta Bancaria, Anlisis Prctico y Jurdico ob.cit.pgs. 62-73 revocacin y postula que la relacin jurdica entre el tomador y el beneficiario se acerca a lo que el denomina contrato innominado de garanta27 6.- Partes que intervienen en la operacin: a) El tomador de la boleta de garanta, que es el cliente del banco que

necesita garantizar el cumplimiento de una obligacin principal y obtiene para ello la emisin de la boleta de garanta, sea mediante un depsito en dinero en efectivo o documentado con un prstamo a travs de un pagar a la vista, que es una verdadera contragaranta del banco emisor. b) El beneficiario, que es el acreedor de la obligacin principal que el tomador cauciona. Es la persona a cuyo favor se emite la Boleta de Garanta, o, en otros trminos, es el titular del derecho que acredita o da cuenta el documento. c) El banco emisor del documento, que recibe el depsito y otorga el certificado o boleta como consecuencia de haber celebrado con el tomador un contrato que lo obliga a dicha emisin. Sea que se constituya a travs de la recepcin de un depsito efectivo o por un crdito que le concede el banco a su cliente y cualquiera que sea la obligacin que caucione, el banco no interviene en las relaciones entre tomador y beneficiario. 7.- Relaciones jurdicas que intervienen en ella: A nuestro entender, la operacin con boletas bancarias de garanta es un acto complejo en que intervienen diversas figuras. Entre el tomador y el banco se dan las figuras del depsito y de la estipulacin en favor de otro, en tanto que entre tomador y el beneficiario se dice que estn relacionados por un contrato de prenda de dinero. Confluyen, en sntesis, tres actos jurdicos: a) Un contrato de depsito sea en efectivo, o a travs de un mutuo que solicita el tomador al Banco emisor y que se instrumenta en un pagar a la vista. Si la garanta no se hace efectiva, como ocurre en la mayora de los casos, la boleta se restituye por el beneficiario al tomador y lo que el banco percibe por este servicio son los intereses de la operacin de crdito. b) Una estipulacin en favor de otro, que en este caso se celebra entre el tomador y el banco, por la cual se considera depositante al beneficiario desde que la acepta. 27 Rodrigo Winter Igualt, La Boleta Bancaria, Anlisis Prctico y Jurdico ob.cit.pgs. 110111. c) Finalmente, entre tomador y beneficiario las relaciones se rigen por un contrato de prenda de dinero de acuerdo a las caractersticas precedentemente sealadas. Surge, naturalmente, una figura de garanta. 8.- Objeto de las boletas garantas: nicamente se permite caucionar obligaciones de hacer que no sean de crdito de dinero con la salvedad de aquellas extendidas en beneficio de las entidades del sector pblico que deben llevar la glosa a favor de organismos pblicos, en cuyo caso se autoriza la caucin para garantizar obligaciones que representan la entrega diferida de una suma de dinero cuando la existencia de otorgar tales Boletas emana de la institucin a cuyo favor se extienden. Cabe sealar, que dentro del concepto de obligacin de hacer 28 se comprende aquella que tenga por objeto garantizar la devolucin de los anticipos recibidos a cuenta del pago de una obligacin de hacer, como sucede precisamente con aquella que extiende el contratista en favor del mandante. 9.- Problemas que se presentan en torno al cobro de la boleta: El carcter autnomo y abstracto que exhibe la boleta inhibe al banco emisor a oponerse bajo cualquier forma al pago de la boleta en el evento que el beneficiario reclame su importe y las obligaciones que cauciona no existan o hayan sido debidamente cumplidas, o exista un plazo o condicin pendiente para su cumplimiento, o cualquiera otra excepcin derivada del negocio causal (nulidad, incumplimiento, etc.) El banco debe atenerse exclusivamente a la literalidad del ttulo y de las obligaciones que en el consignan y no puede negarse a cumplir la obligacin alegando o aduciendo razones o defensas que no surjan del tenor del mismo. La referencia que se hace en el texto a las obligaciones garantizadas sirve nicamente para delimitar el alcance de la garanta y su mbito especfico, ya que de acuerdo lo ordena la Superintendencia, en ningn caso puede disponerse de la boleta de

garanta para una finalidad distinta de aquella para la cual fue tomada. (Capit.8-11 N 1.1.-). En el supuesto que se pacte entre tomador y beneficiario que la 28 Miguel Gonzlez Saavedra, La Boleta Bancaria de Garanta ob. cit pg. 104: En nuestra opinin, no hay ningn inconveniente de orden jurdico para que la boleta bancaria de garanta caucione indistintamente, obligaciones de dar, de hacer o de no hacer; porque la prenda de dinero- que es el vnculo jurdico que existe en las relaciones del tomador con el beneficiario-procede respecto de cualquiera de esas obligaciones, sin que la ley civil o mercantil lo prohba o limite. boleta sirva de caucin para obligaciones distintas a las que se indican en ella, se estara infringiendo la condicin impuesta para su pago y en tal supuesto, pensamos que el banco debe excepciones oponindose a ello. 10.- La Boleta Bancaria y la intervencin jurisdiccional. En principio, el funcionamiento de la Boleta Bancaria descarta la intervencin de tribunal alguno, de modo que el beneficiario debe limitarse a cobrarla directamente al Banco. Sin embargo, siempre queda a salvo la posibilidad de acudir a los Tribunales, aunque por cierto, con diversos resultados. En efecto, existen casos puntuales en que han intervenido nuestros Tribunales, como por ejemplo, aquellos en que las Cortes de Apelaciones han rechazado, por la va de recursos de proteccin, la alegacin del tomador de una boleta que pretende inhibir el cobro por parte de su legtimo beneficiario. Aos atrs, como dijimos , la Corte de Apelaciones de Talca sent el criterio de que el beneficiario deba cuidar de no abusar de la garanta o reclamarla o extenderla fuera de los casos permitidos, debiendo devolverla al tomador, en los casos que procediera, estimando que la conducta de la I. Municipalidad -que haba ordenado hacer efectiva la Boleta- era equivalente a una autotutela declarativa ilcita. Tambin quedan fuera las situaciones en que se comprueba -casos excepcionales- en que nuestros tribunales han aceptado medidas precautorias que inhiben el pago de la boleta y otros en que ha existido fraude.29 Por otra parte y siempre dentro de la esfera de la jurisdiccional, hay quienes han sugerido incorporar a los contratos caucionados, una clusula arbitral. Prado Puga estima que dicha clusula arbitral no debe extenderse al cobro de las boletas ya que con ello se desnaturaliza la autonoma de estos instrumentos exigibles a primera demanda. Sostener lo contrario podra significar involucrar a los Bancos en los contratos que dieron origen a su emisin lo cual, a la larga, implicara privar a los bancos de prestar este servicio cuya caracterstica fundamental es la incondicionalidad de su pago.30 29 Vase Derrick C. Tay - David M.A. Amato Fraud and Letters of Credit (Toronto, Ontario 1998) One general exception to the principle of autonomy has been recognized in the common law: Fraud on behalf of the beneficiary allows an issuing bank to dishonour an L/C. 30 Este criterio es aplicable incluso cuando la obligacin caucionada ha sido cumplida por el deudor-tomador en forma parcial ya que nada obsta a que la boleta pueda ser parcialmente cobrada y que el acreedor beneficiario renuncie a cobrar el saldo conforme a los principios que gobiernan la renuncia de derechos en el C. Civil (art. 12) En todo caso, de establecerse alguna, dicha clusula en nada obstara a que el beneficiario cobre de todas formas la boleta sin necesidad de recurrir al rbitro, a menos que se haya condicionado expresamente la ejecucin de la boleta a la autorizacin previa del rbitro 31 , el cual conocer, de todas formas, de cualquier reclamacin posterior acerca del cobro indebido de la boleta.

11.- Sobre si la Boleta constituye un ttulo de crdito: Debido a que la boleta bancaria se extiende con carcter de nominativa y no endosable (Capit. 8-11 N 1.-2.-), y para una finalidad especfica, de circulacin muy restringida, la doctrina la distingue como un ttulo de crdito o ttulo valor, por la conexin con el derecho que en el se indica- de aquellos que se clasifican como de legitimacin - y que sirven para identificar al acreedor de la prestacin quien se encuentra designado en el ttulo, en posesin del mismo y habilitado para su presentacin al cobro. Distinto es el caso de los ttulos de circulacin o fungibles (a la orden o al portador) creados o que se emiten para ser transmitidos y facilitar la legitimacin del titular por el hecho de la posesin del ttulo 32 IV.- El Seguro de Garanta 1.- Ideas Generales. Origen y desenvolvimiento histrico. Diferencias entre el seguro de garanta y la fianza. Mediante el contrato de seguro de garanta, el asegurador se obliga a pagar al asegurado, llamando tambin beneficiario, la indemnizacin que corresponde por causa del incumplimiento del deudor afianzado, de las obligaciones legales o contractuales cubiertas por la pliza. Las primeras compaas que se ocuparon del seguro de crdito, institucin muy cercana al de garanta fueron la British Commercial Insurance Co. (1820 ) y, con ms propiedad, la Assurances Generales de Trieste(actualmente Assicurazioni Generali) de Italia, en 1837".33 31 La Corte de Apelaciones de Puerto Montt, con fecha 06 de Mayo de 1996, en fallo confirmado por la Excma. Corte Suprema, estableci que las boletas de garanta emitidas en cumplimiento de un contrato de construccin en que se haba pactado arbitraje para solucionar todas las controversias entre los contratantes, no pueden ser cobradas unilateralmente por quien las recibe sino previa resolucin del rbitro ya que de lo contrario se conculca el derecho de propiedad. Vd Memorndum N185-1996,Oficina Coordinadora. 32 Rodrigo Winter Igualt, La Boleta Bancaria, Anlisis Prctico y Jurdico ob.cit.pg. 100102 y pg.108. 33 Javier Camacho de los Ros El Seguro de Caucin, Editorial Mapfre, 1994 pg. 10 y sig. En cuanto a su consagracin en la ley positiva, la mayora de la doctrina sita su reconocimiento legislativo en el Cdigo de Comercio Italiano de 1882"34 , cuyo artculo 440 se refera mas propiamente, en general, al seguro de crdito. Por su mayor antigedad e, incluso por su mejor redaccin, cabe citar al respecto el art. 6 de la Ley Belga sobre Contrato de Seguro de 1874. En nuestro pas, si bien no est reglamentado por el Cdigo de Comercio, el Seguro de Garanta ha sido regularmente usado en los ltimos 50 aos, si bien tan solo en la ltima dcada ha tenido un impulso importante, con el aparecimiento de las plizas llamadas a primer requerimiento o de ejecucin inmediata. En la doctrina se discute si el seguro de garanta es propiamente un seguro o no, habiendo muchos que sostienen que no lo es y que su naturaleza jurdica no es otra que la de una forma mas de caucin. En principio resulta muy dificultoso en la practica encontrar entre esta institucin y el contrato de fianza diferencias esenciales. Es mas. En algunos pases, entre los cuales el ms importante de Estados Unidos, en general la Compaas de Seguros no otorgan este tipo de coberturas (no obstante lo cual a fines del siglo pasado y principios del presente se formaron 3 compaas que lo emitan). En ese pas es ms usado un tipo de cobertura que en cambio emiten las instituciones de crdito bajo el nombre de Performance Bonds. En otros, como los pases Europeos, el Seguro de Caucin tiene gran importancia, a tal punto que fuera de las ms arriba citadas de Inglaterra e Italia , otorgaron coberturas de este tipo compaas de Francia, desde 1845; Alemania, 1885; Noruega, 1915;

Dinamarca, 1895; Suiza, 1920; Blgica, 1909; Holanda, 1893; Espaa, 1929; y Checoslovaquia, 1927. La verdad es que si bien existe una gran semejanza entre el contrato de seguro y la fianza, de acuerdo a la ley chilena se trata de dos contratos diferentes y no puede discutirse que el Seguro de Garanta tiene todas las caractersticas y cumple con todos los requisitos de un contrato de seguro. Las razones que apoyan esta conclusin son varias: 1.- En primer lugar el texto de diversas disposiciones legales que se refieren explcitamente al contrato de seguro de garanta, entre las que cabe citar: a) El art. 11 del D.F.L.N 251, que, al referirse a las Compaas de Seguros Generales (conocidas tambin como compaas de primer grupo), establece que: 34 (Ob.cit. pg.13). Los riesgos de crdito debern ser asegurados solo por Compaas del primer grupo que tengan por objeto exclusivo precisamente cubrir este tipo de riesgos, pudiendo, adems, cubrir los de garanta y fidelidad; b) El artculo 109 de la Ley Orgnica del Ministerio de Obras Pblicas, que dispone: La caucin para el fiel cumplimiento de los contratos deber constituirse mediante boleta de garanta bancaria. Sin embargo, los funcio-nario a quienes corresponda resolver la aceptacin o rechazo de las propuestas, podrn aceptar, previo informe favorable de la fiscala de obras pblicas, plizas de garanta otorgadas por compaas de seguros, siempre que dichas plizas contengan las mismas condiciones de seguridad, cubran los mismos riesgos de responsabilidad y puedan hacerse efectivas con la misma rapidez que las boletas de garanta bancarias.;y c) El art. 129 del D.F.L.458, que contiene el texto actual de la Ley General de Urbanismo y construcciones, seala que: La garanta de urbanizacin por el total de las obras de urbanizacin que exige esta ley para el efecto de autorizar ventas y adjudicaciones de sitios antes de estar ejecutada y recibida la urbanizacin, podr consistir, indistintamente, en valores hipotecarios reajustables u otros garantizados por el Estado, boletas bancarias o plizas de seguros. 2.- Segn lo dispone el art. 4 del D.F.L.N 251, el comercio de asegurar riesgos a base de primas, solo pueden hacerse en Chile por sociedades annimas nacionales de seguro que tengan por objeto exclusivo el desarrollo de dicho giro, y actividades que sean afines o complementarias a este, de modo que si se concluyere que las plizas de garantas no son un contrato de seguros sino un contrato de fianza, las Compaas del ramo no podran emitirlas, puesto que excederan del giro y objeto exclusivo que la ley les reserva. 3.- Como todos los seguros, el contrato de seguro de garanta es, en Chile, solemne, puesto que se perfecciona, de acuerdo con lo dispuesto en el art. 514 del Cdigo de Comercio, mediante la emisin de la pliza, en tanto que en nuestro pas el contrato de fianza es consensual. 4.- En la fianza, es de la naturaleza el denominado beneficio de excusin, segn el cual el fiador tiene derecho de exigir al acreedor que se dirija primeramente en contra del deudor principal y solo una vez que esta gestin fracase es posible dirigirse en contra del fiador. Por lo contrario, hoy en da lo normal es que en las plizas de seguro de garanta no exista el beneficio de excusin, de modo que el titular de ellas puede dirigirse directa o inmediatamente contra la Compaa sin ser requisito previo el haber perseguido al deudor principal. 5.- Tambin es de la naturaleza en la fianza, que esta no sea remunerada. De modo que, salvo estipulacin en contrario, el fiador no puede cobrar al afianzado una remuneracin, en tanto que en el contrato de seguro de garanta, la remuneracin para el asegurador, que se llama prima, es de la esencia del contrato de seguro es absolutamente nulo. 6.- Por ltimo, mientras en el contrato de fianza las partes estipulan sus trminos y condiciones con entera libertad, el seguro de garanta es un contrato dirigido, toda vez que

no se puede pactar sino en plizas cuyo texto haya sido previamente inscrito en un registro que lleva al efecto la Superintendencia de Valores y Seguros, a menos que en el seguro que se celebre, tanto el asegurado como el beneficiario sean personas jurdicas y el monto de la prima anual que se convenga no sea inferior a U.F. 200, debiendo la pliza respectiva ser firmada por los contratantes. En cualquier caso, es preciso reconocer que es tan distinta la operacin de los seguros de garanta ( y la de los seguros de crdito tambin), que la que rige a los seguros generales, entre los que tradicionalmente se inclua a aquellos, que el legislador chileno ha estimado del caso crear, a fines de la dcada de los ochenta (en virtud de las leyes 18.660 de 1.987 y 18.814 de 1.989, que reformaron el art.11 de D.F.L. 251, que reglamenta la actividad aseguradora en Chile), una categora especfica de compaas de seguros, llamadas Compaas de Seguros de Crdito, pudiendo estas cubrir, adems, los riesgos de garanta y fidelidad. A virtud de esta normativa legal, hoy en da los seguros de garanta pueden ser contratados por compaas de seguros generales o por compaas de seguros de crdito y caucin.35 2.- Similitudes entre el contrato de seguro de garanta y el contrato de fianza. No obstante que hemos llegado a la conclusin de que se trata de instituciones distintas, que tienen un perfil y una identidad jurdica propia y diferente, existen entre ellas notables semejanzas, a saber : a) Ambos contratos son, por su naturaleza, cauciones. La circunstancia de que el seguro de garanta sea por esencia un 35 En relacin a ste punto vid.Re-Capacitando, Volumen II, Publicacin de American Re Insurance Company (Chile) S.A., Captulo 12, Juan Achurra Larran, Aspectos Jurdicos del Seguro de Garantapgs. 225y sigs. contrato de seguro, no impide que cumpla la funcin de una caucin y que dentro de estas, sea una caucin de tipo personal, por que implica la garanta de un patrimonio distinta -el de la Aseguradora- que se obliga en beneficio del acreedor hasta concurrencia de la suma contratada. b) Ambos son, como todas las cauciones, contratos accesorios, lo que significa que su existencia est subordinada a una obligacin principal a la que acceden, de modo que la inexistencia, nulidad o cualquier modo de extincin de dicha obligacin principal, extinguen tambin al seguro de garanta en cuanto contrato de seguro. c) En los dos contratos, el garante (compaa aseguradora o fiador segn sea el caso) no pueden obligarse en trminos ms amplios y/o gravosos que el deudor principal. d) En ambas instituciones, el garante que ha pagado al afianzado tiene el derecho de repetir en contra el deudor principal, las sumas que haya pagado al acreedor por causa del incumplimiento de las obligaciones de este. 3.- Definiciones del contrato. Partes que intervienen en l. Como hemos avanzado, el seguro de garanta es aquel en el cual un asegurador se obliga a pagar al asegurado o beneficiario, las prdidas en dinero que le irrogue el incumplimiento por el deudor afianzado en la pliza, de obligaciones legales o contractuales individualizas en ellas, dentro de los lmites establecidos en la ley y la pliza. Por lo tanto, las relaciones jurdicas en torno a las cuales el seguro de garanta gira, surgen de dos fuentes: 1) La que provienen del acto jurdico, normal pero no nicamente un contrato, que son fuente de las obligaciones que contrae el afianzado por la pliza; y 2) Las que emanan de la pliza de seguro de garanta, de las cuales, la principal que contrae el que la contrata es pagar la prima y la principal que contrae el asegurador es pagar la suma asegurada o parte de ella al beneficiario de la pliza, en el evento de que el afianzado no cumpla con las obligaciones respecto de aquel a que se refiere el numero 1) precedente. En este tipo de contratos de seguros intervienen normalmente tres partes perfectamente diferenciadas entre s: el tomador del seguro, el

asegurador y el asegurado o beneficiario de la pliza. a) El tomador. Se le individualiza tambin con las denominaciones contratanteo afianzado. El trmino afianzado designa especficamente a la persona del deudor cuyas obligaciones para con otra persona son garantizadas mediante la pliza de seguro de garanta. Usualmente se trata de la misma persona que contrata el seguro, no obstante lo cual, en este seguro es dable encontrar la figura del seguro contratado por cuenta ajena, reglamentada por el artculo 519 del Cdigo de Comercio, segn el cual...el seguro puede ser contratado por cuenta propia, o por la de un tercero en virtud de un poder especial o general y an sin su conocimiento y autorizacin. Por lo tanto, el seguro de garanta puede ser contratado por un tercero a nombre de un tomador, en virtud de un poder general o especial e incluso sin este, pero por su cuenta y cargo, en aplicacin a la institucin de la estipulacin en favor de otro. Es mas, no vemos inconveniente en que el seguro de garanta pueda ser contratado por cuenta propia, o a cargo del afianzado, por el propio asegurado beneficiario. El afianzado suele tambin ser llamado tercero (persona distinta del asegurador y del asegurado) o tomador del seguro. No obstante, y reconociendo que en la inmensa mayora de los casos la pliza es contratada por el afianzado o deudor para serle presentada a su mandante o contraparte y -desde el punto de vista del seguro- asegurado, es difcil tener por razonable algn impedimento para que la pliza pudiere ser contratada por el mismo asegurado o beneficiario, de modo que el afianzado no siempre ser el tomador de la pliza. En consecuencia, tomador o contratante de la pliza pueden ser tanto del afianzado (lo ms comn) como el asegurado (realmente excepcional, al menos en Chile). Es claro que tratndose de contratos adjudicados por el MOP (mandante), ser siempre el afianzado (contratista) quien contrate o tome la pliza. b) El asegurado o beneficiario. Es la persona del acreedor a cuyo favor se emite la pliza y que, en caso de siniestro, esto es, de incumplimiento de la obligacin garantizada por el contrato de seguro de garanta, tiene derecho a cobrar la indemnizacin correspondiente. c) La Compaa Aseguradora. Es la Compaa de Seguros Generales o la especializada en Seguros de Crdito y Caucin que emite la pliza. Es de hacer notar que, dadas las especiales caractersticas de este tipo de seguro, la compaa emisora de la pliza deber ser especialmente cuidadosa en investigar el perfil de cumplimiento que de sus obligaciones ha hecho y que se puede presumir que en el futuro har el candidato a afianzado. De hecho se trata de una emisin de plizas en la que el anlisis econmico del riesgo del crdito es esencial. 4.- Estatuto jurdico del Seguro de Garanta. En atencin a su doble naturaleza -seguro y fianza- las relaciones entre las personas que en el contrato de seguro de garanta intervienen se rigen por las clusulas y condiciones de la pliza, subsidiariamente por las normas legales aplicables a todo contrato de seguro de garanta y, por ltimo, por las normas que en relacin a la fianza estn contenidas en los Cdigos Civil y de Comercio. Estimamos necesario remarcar que el orden es el precedentemente expuesto, de modo que la fuente principal para determinar los derechos y obligaciones de las partes que intervienen en el contrato ser siempre la pliza de seguro, en particular, la propuesta de seguro que le sirve de antecedente (junto con los documentos presentados a la Compaa con ella) y las condiciones generales y particulares de esta. 5.- Contenido de las plizas de seguro de garanta. 1.- Obligaciones susceptibles de ser aseguradas. Como hemos dicho, este seguro garantiza el fiel y oportuno cumplimiento de la o las obligaciones contradas por el deudor, en favor del asegurado o afianzado. Por lo tanto, en ste seguro el siniestro estar dado por el incumplimiento absoluto o parcial que de sus obligaciones garantizadas por la pliza, haga el deudor. El incumplimiento ser total cuando el deudor haya infringido totalmente sus obligaciones garantizadas por la

pliza, y parcial cuando las haya ejecutado, pero en forma incompleta y/o defectuosa o tarda. Sin embargo, tradicionalmente, por razones tcnicas y reglamentarias en la pliza de seguro de garanta propiamente tal, que es aquella que pueden emitir las Compaas de Seguros Generales ( y tambin las de Crdito y Caucin), slo se ampara el incumplimiento de obligaciones de hacer o de no hacer, de modo que las obligaciones que consisten en el pago de una suma de dinero, no son materia de plizas de seguro de garanta, sino de una pliza de seguro de crdito. En efecto, normas administrativas emanadas de la Superintendencia de Valores y Seguros, prohben a las Compaas de Seguros no especializadas en seguros de crdito, garantizar el pago de obligaciones de dinero, tales como precios o saldo de precios, mutuos o prstamos de dinero y letras de cambio o pagars. Estas mismas compaas pueden, atendida su naturaleza, otorgar coberturas que amparan, en una misma pliza, riesgos de crdito y de caucin. No hay completo acuerdo en la doctrina, respecto de si la pliza de seguro de garanta puede extenderse a caucionar obligaciones de no hacer en tanto que es indiscutida su aptitud para amparar obligaciones de hacer. En efecto, se sostiene que la pliza de seguro de caucin es un....medio de reforzamiento de un derecho de crdito en sentido amplio, por lo que estaran excluidos del anlisis los...seguros de infidelidad, o seguros de malversacin, de gran arraigo en los pases sudamericanos y anglosajones, ya que estos, al tener por objeto la cobertura de los perjuicios econmicos ocasionados como consecuencia de un acto de infidelidad o falta de honradez de personas que estn unidas por un vnculo laboral, se identifican con el aseguramiento de obligaciones de no hacer, o de comportamiento negativo, que no se ajustaran ...a nuestra idea de seguros de caucin.36 En lo que si hay completo acuerdo es que, si bien el seguro de caucin puede garantizar obligaciones emanadas de las relaciones jurdicas mas variadas, es lo mas frecuente que... esta venga conectada a contratos de ejecucin de obras, suministros o gestin.37 Uno de los mas importantes campos es, pues, el ligado a contratos de construccin y/o urbanizacin, y naturalmente, los modernos contratos de concesin de obras pblicas, que llevan insertos en si mismos un importantsimo y esencial componente de construccin de grandes obras pblicas . Por otra parte, es muy frecuente que se extienda a cubrir obligaciones precontractuales, siendo la mas importante la garanta de oferta o licitacin; las que surgen durante el curso de la ejecucin misma 36 Camacho de los Ros ob.cit. pg. 23 37 Ob. cit.pg.25. del contrato, como es la garanta de fiel cumplimiento de contrato y la garanta de correcta inversin de anticipos; por ltimo, las obligaciones que permanecen an despus del trmino de la ejecucin del contrato, como son las garantas de mantenimiento o calidad. Actualmente, hay en vigencia 24 plizas de seguros que bajo distintas modalidades cubren los riesgos de garantas o caucin, algunas de las cuales amparan tambin, el riesgo de crdito.38 2.- Multas o Clusulas Penales. En aplicacin de la tesis sustentada en el prrafo precedente, se ha discutido mucho en la doctrina sobre si la pliza de seguro de garanta tradicional puede cubrir o no las multas o clusulas penales, sobre todo si el monto de estas exceden del dao efectivamente sufrido por el asegurado o afianzado. Para un importante sector de la doctrina, no habra impedimento en cubrir con este las multas o clusulas penales, puesto que estas no constituyen sino una avaluacin anticipada de los perjuicios que experimenta el patrimonio del acreedor a causa del incumplimiento de la obligacin contrada por el deudor y si el afianzado tiene derecho a cobrar la indemnizacin de dichos perjuicios, no se divisara la razn por la cual ese derecho no pudiera estar cubierto por una pliza de seguro.

Se trata de un tema complicado, por que por otro lado se arguye que una norma de este especie ira, cuando la multa o pena excede el valor del perjuicio real, contra el carcter meramente indemnizatorio del seguro, consagrado expresamente por el artculo 517 del Cdigo de Comercio, reforzado por la norma del inciso primero del artculo 532 del mismo cuerpo legal. Adems, las plizas de seguros de garantas tradicionales, suponen la existencia de un proceso de liquidacin, que involucra no sola la determinacin de si ha habido o no un siniestro cubierto por la pliza, sino adems, en caso de que si lo haya, la determinacin del monto de los perjuicios indemnizable y esto ltimo, en caso de aceptarse la cobertura de multas y penas convencionalmente pactadas, quedara automticamente excluido. En todo caso, con el surgimiento de las Compaas de Seguros especializadas en seguro de crditos y caucin el problema tiende a desaparecer, puesto que a estas ltimas nada les impide cubrir las multas y penas contractuales pactadas, as como tambin los crditos 38 Ver anexo contenido nmina de plizas de seguro de garanta Inscritas en el Registro de la Superintendencia a la fecha. de dinero e incluso, ellas han puesto a disposicin del mercado, modelos de plizas que llevan inclusa una clusula denominada de ejecucin inmediata o a primer requerimiento, que obliga al asegurador a hacer efectivo el seguro hasta el momento de la suma asegurada, al slo requerimiento del afianzado, materializado en una declaracin suscrita por este en la que conste el hecho en que consiste el incumplimiento y el monto de la indemnizacin solicitada. En sntesis, para resolver sobre el problema a que ste prrafo se refiere, resulta indispensable examinar en cada caso concreto, si el modelo de pliza ofrecido cubre o no las multas contractualmente estipuladas. 6.- Origen o causa del incumplimiento. Si bien este, como en general, cualquiera otra tema vinculado con la obligacin garantizada, debe ser materia del anlisis que se haga de la pliza misma y de sus antecedentes, en general puede decirse que es posible asegurar toda obligacin, siempre que el respectivo incumplimiento sea imputable al deudor o contratante del seguro. En general, el deudor responde de los incumplimientos que son atribuibles a su hecho o culpa grave, leve o levsima, siempre y cuando la ley o el contrato o hayan restringido la especie de responsabilidad cubierta. El deudor y, por ende, la compaa, no responde, salvo norma legal o contractual en contrario, del incumplimiento de la obligacin que provenga de una caso fortuito o fuerza mayor. En resumen, siempre que segn la ley y/o el contrato el deudor sea responsable del incumplimiento de sus obligaciones, ya sea que provengan de dolo, culpa e incluso fortuito, en los mismos trminos ser responsable la Compaa Aseguradora, salvo disposicin en contrario de la respectiva pliza. 7.- Distintos modelos o clases de Seguro de garanta actualmente en uso. Como hemos dicho anteriormente, a partir de la ley 18.814 de 1.989, el artculo 3 letra e del D.F.L. N 251 estatuye que no se puede contratar sino con modelos de plizas previamente registradas en al Superintendencia de Valores y Seguros. Se supone que esta situacin constituye un cambio en cuanto a la legislacin preexistente, que exiga la aprobacin de las plizas por la Superintendencia; pero en la prctica, el organismo contralor no registra las plizas que previamente no hayan sido aprobadas. En otros trminos a pesar de que la ley ha querido relevarlo de la obligacin de aprobar las plizas, el organismo de control, celoso del inters publico que protege, sigue examinando el contenido de las plizas en un proceso de registro que involucra a su Departamento de Estudios y a su Fiscala, y que puede durar varios meses. Una vez registradas, pasan a estar disponibles para que las compaas autorizadas a comerciar en el ramo, puedan utilizarlas.

Inscritas en el Registro Pblico de Plizas de la Superintendencias existen actualmente una amplia gama de plizas de seguros de garanta 39 , que podramos subdividir en las siguientes categoras: Primer criterio de clasificacin: A) Plizas de seguro que cubren nicamente el ramo de Garanta. B) Plizas de seguros que combinan los ramos de Garanta y Crdito. La subdivisin es importante, toda vez que con el primer tipo de plizas pueden trabajar tanto Compaas de Seguros Generales como Compaas de Seguros de Crdito y Caucin, en tanto que con el segundo slo pueden operar las Compaas especializadas de Seguros de Crdito y Caucin. Segundo criterio de clasificacin: Una segunda subdivisin de las plizas de Seguro de Garanta consiste en si su articulado (condiciones generales 40 ) contienen o no clusulas que estipulen ejecucin inmediata, pronto pago, a primer requerimiento o a slo requerimiento es decir, por el grado de su ejecutividad. En efecto, tradicionalmente el siniestro de una pliza de seguro daba origen al procedimiento de liquidacin, que puede ser ejecutado por la propia Compaa o, en la mayora de los casos (salvo los menores y triviales), lo ejecuta un Liquidador de Siniestros independiente.41 A este tipo de trmite estn afectas las plizas de seguro de garanta mas tradicionales, todava en uso generalizado entre particulares. 39 Ver nota - infra 34. 40 Las condiciones generales son las clusulas comunes aplicadas a todos los contratos de seguro que se extienden bajo un determinado modelo de pliza registrado. 41 Para distinguirlos de los llamados liquidadores directos, que son funcionarios de las propias compaas y que efectan lo que se conoce como una liquidacin directa. La liquidacin es un procedimiento en el cual se establece si el caso denunciado constituye o no un siniestro susceptible de ser cubierto por la pliza y, en caso afirmativo, el monto de las prdidas indemnizable. Desde este punto de vista, las plizas de seguro de garantas mas modernas, que llevan una clusula de ejecutividad automtica, a simple requerimiento u otra denominaciones similares, establecen la obligacin del asegurador de pagar la indemnizacin al simple requerimiento, bastando con que se haga constar la causal de incumplimiento y el monto del perjuicio causado. En suma, la Compaa queda obligada a pagar la correspondiente indemnizacin sin requerir previamente la opinin del afianzado, ni hacer otra comprobacin que no sea que el cobro de la pliza se ajuste a los trminos de la Pliza emitida. An ms. En este tipo de pliza de seguro de garanta ms modernas se establece un plazo mximo, para que las Compaas paguen la indemnizacin, plazo que se mueve en el rango de entre 15 a 30 das. 8.- Contratacin del Seguro de Garanta. Antecedentes necesarios. Documentos relacionados con l y en especial la pliza. Las contragarantas. El Seguro de garanta se contrata en un proceso que comprende las siguientes etapas: 1.- Proposicin del contrato.42 Al igual que la gran mayora de los seguros, la emisin de la pliza de garanta comienza con la propuesta de seguro que, generalmente en un formulario predispuesto por la propia Compaa, debe llenar el tomador. En dicha propuesta debe identificarse claramente la persona del tomador a afianzado, el contrato y/o las obligaciones que se persigue garantizar y la persona del asegurado beneficiario del seguro. Junto a la propuesta deben acompaarse los documentos relativos a la negociacin que vincula al tomador con el beneficiario de donde arrancan las obligaciones del primero que se pretende garantizar y otros antecedentes legales relacionados con la persona del tomador, en especial, 42 En la legislacin y doctrina extranjera, esta es la denominacin comn de la institucin. En

la prctica chilena se usa bien la expresin propuesta. si se trata de una persona jurdica, los que conciernen a la personera de quien comparece a su nombre. Por ltimo, el tomador debe acreditar ante la Compaa su solvencia o capacidad econmica, por medio de copias de sus balances yestados de resultados, inventario de bienes que posea, etc., que en este tipo de seguro son de gran importancia puesto que, generalmente, de la solvencia del afianzado depender su cumplimiento o incumplimiento, en otro trminos el grado de riesgo que asumir el asegurador. Del mismo modo, la mayor o menor solvencia de tomador del seguro tendr influencia en el posterior derecho a recupero que en favor del asegurador que paga, reconoce la legislacin y la pliza. 2.- Las contragarantas. Una vez que el asegurador ha evaluado el riesgo con los antecedentes mas arriba indicados, antes de entregarle la pliza al tomador, el asegurador le exige una contragaranta, esto es, un medio por el cual aquel que asegure el reintegro de lo que este tenga que pagar al asegurado por concepto de indemnizacin. Las contragarantas van desde un simple pagar que el tomador suscribe en favor de la Compaa, con algunas de sus menciones en blanco e instrucciones para llenarlas con los datos concernientes al monto y fecha, hasta fianzas de terceros y, en casos muy especiales algunos tipos de garantas reales. 3.- Emisin de la pliza. Evaluado el riesgo, aceptada la proposicin de celebrar el contrato de seguro y constituidas por el tomador las contragarantas, el asegurador procede a emitir y hacer entrega de la pliza, que es el instrumento en nuestro pas, el nico -que perfecciona y acredita el contrato. Las plizas constan de dos partes: a) Las condiciones particulares, que son aquellas en las que se identifica al tomador o afianzado, el contrato y las obligaciones garantizadas, la persona del beneficiario, la vigencia del seguro y el monto de la prima o precio del seguro. b) Las condiciones generales, que son aquellas en las que se describen los alcances jurdicos de la cobertura, el riesgo, los derechos y obligaciones de las partes, los procedimientos en caso de siniestro y la forma en que se determina y paga la indemnizacin. Son estas ltimas, las condiciones generales, aquellas que constan en formularios pre impresos segn modelos registrados ante la Superintendencia de Valores y Seguros, siendo prohibida la contratacin bajo clusulas no registradas, a menos que se trate de contratos celebrados con asegurados y beneficiarios que sean personas jurdicas y en los que el monto de la prima no sea inferior a U.F. 200 debiendo el contratante y el asegurador firmar la pliza 43 . 9.- Obligaciones de las partes. En el seguro de garanta intervienen tres partes, de modo que nos referiremos a las obligaciones que contrae cada una de ellas: a) Las del tomador o afianzado. Las principales obligaciones del tomador afianzado son las siguientes: - Pagar la prima en la forma y poca convenidas. Normalmente corresponde nicamente al afianzado el cumplimiento de esta obligacin, quedando el asegurado libre de ella. En la generalidad de los modelos de plizas actualmente vigentes en Chile, la falta de pago de la prima no es causal de resolucin del contrato, ni faculta al asegurador para poner trmino anticipado al seguro y ni siquiera le permite invocar la excepcin de contrato no cumplido. En suma, el asegurador debe pagar la indemnizacin frente al asegurado, aunque la prima este impaga, lo que se comprende, toda vez que el beneficiario, quien frente a la negociacin del contrato de seguro es, en la inmensa mayora de los casos, un tercero absoluto, no puede sufrir las consecuencias jurdicas de la falta de pago de la prima, porque en este caso el instrumento perdera gran parte de su eficacia. En este punto el seguro de garanta ha evolucionado fuertemente en el curso de los ltimos aos, como resultado, por una parte, del desprestigio que afect a las plizas que permitan al asegurador exonerarse del pago de la indemnizacin por falta de pago de la prima y por la

profesionalizacin de este tipo de seguros, con los que han entrado a trabajar compaas especializadas.44 43 En oposicin a la regla general en Chile, que las plizas lleven slo la firma del asegurador. 44 Estamos informados que clasificadoras extranjeras estn considerando actualmente un nuevo criterio de evaluacin aplicable a las instituciones que otorgan garantas y que es el de la voluntad de pago, que es distinto al de la solvencia y que apunta al profesionalismo con que, en respeto a la institucin de la garanta, afrontan dichas instituciones el cumplimiento de sus obligaciones. - La segunda obligacin del afianzado es la de restituir al asegurador toda suma que este haya debido indemnizar al asegurado en caso de haberse hecho efectiva la pliza. En los casos en que as esta previsto en las condiciones generales del contrato de seguro, las alegaciones del tomador sobre la hipottica circunstancia de que no hubo incumplimiento de su parte no son bice para que la Compaa pague la indemnizacin y para que, a su turno, recobre del tomador lo indemnizable. Cualquier disputa que surja sobre si hubo o no incumplimiento debe discutirse directamente entre el tomador afianzado y el asegurado beneficiario. b) Obligaciones del asegurado o beneficiario. - En primer lugar, el asegurado debe comunicar a la Compaa Aseguradora la ocurrencia del siniestro, obligacin que ha de cumplir al tenor de lo que la pliza prescriba y en el improbable caso de que la pliza nada diga, conforme a lo contemplado en el artculo 556 N 5 del Cdigo de Comercio. - En segundo trmino, debe no agravar el riesgo y actuar diligentemente en caso de que el siniestro se produzca, para evitar que la magnitud de este se incremente. En este sentido, reviste una importancia fundamental que el asegurado no renegocie con el afianzado los trminos del contrato ni otorgue quitas o esperas, por que ello implica variacin y en muchos casos agravacin del riesgo o, al menos, disminucin de las posibilidades de recobro de la Compaa 45 . Producido el siniestro las plizas obligan al asegurado, generalmente, no slo a denunciarlo, sino tambin a, al menos iniciar contra el afianzado las acciones legales que deriven de dicho incumplimiento. En todo caso el alcance de las obligaciones del asegurado y las de la compaa frente a un siniestro ya producido, varan grandemente segn la clase de seguro de garanta de que se trate, siendo del caso hacer presente que en las plizas de ejecucin inmediata generalmente basta al asegurado con la denuncia del siniestro en los trminos que el contrato seale para que la Compaa proceda al pago de la indemnizacin, previa verificacin muy limitada de los antecedentes esenciales (fundamentalmente que de por si 45 Lo cual es, en verdad, una forma de agravacin del riesgo tambin, porque las Compaas de Seguro toman en cuenta las posibilidades de recupero para evaluar el riesgo. el hecho constitutivo del siniestro - la obligacin incumplida- est dentro de la cobertura, de su vigencia y de su monto). c) Obligacin del asegurador: La obligacin del asegurador consiste en pagar al asegurado beneficiario, la indemnizacin del siniestro. Nos referiremos a este tema a continuacin. 10.- Liquidacin y pago de siniestros. En cada pliza de seguro de garanta, segn su naturaleza y caractersticas, se encuentra regulado este tema de gran importancia, como que es aqu donde en la prctica se dan las principales diferencias entre los distintos modelos de plizas registrados en la Superintendencia. De partida hay que consignar que en el seguro de garanta se entiende que hay siniestro cuando el afianzado deje de cumplir, fiel y oportunamente, y por causas que son de su responsabilidad, con las obligaciones garantizadas por la pliza. La configuracin del siniestro y la determinacin y pago de la indemnizacin correspondiente varan de una pliza en otra, dependiendo, fundamentalmente, de si en ella

se encuentra la clusula de ejecucin inmediata, a simple requerimiento u otra frmula semejante. En caso afirmativo, en este tipo de plizas la Compaa estar obligada a hacer efectivo el seguro hasta el monto de la suma asegurada bastando el simple requerimiento del asegurado. El requerimiento consistir en una declaracin suscrita por el asegurado en la que consten los hechos constitutivos del incumplimiento y el monto de la indemnizacin solicitada. Recibido el requerimiento, que hace las veces de denuncio del siniestro, la Compaa aseguradora en forma directa cuantificar la prdida con el slo mrito de los antecedentes proporcionados por el asegurado en el requerimiento y efectuada tal cuantificacin o vencido el plazo mximo previsto en la pliza, la compaa dispondr el inmediato pago de la indemnizacin, sin perjuicio del derecho que asiste al asegurado de optar porque se designe un liquidador de siniestros, lo que en este tipo de coberturas no es necesario y probablemente dilatara la ejecutividad de la pliza. En este tipo de pliza la Compaa pagar el monto de la indemnizacin sin necesidad de pedir la previa conformidad del afianzado ni de hacer otra cosa que comprobar que el requerimiento y el monto de la indemnizacin solicitada se ajusten a los trminos de la pliza emitida. En el seguro, en principio, salvo las plizas de seguro ya analizadas, que llevan incluida la clusula de ejecucin inmediata, de pronto pago o a simple requerimiento, todo siniestro da origen a un procedimiento de liquidacin, conforme a las normas contenidas en los artculos 61 y siguientes del D.F.L. 251 del ao 1931, que regula la actividad aseguradora en Chile. La liquidacin formal de siniestros persigue determinar, en un procedimiento reglamentado por la ley , si el siniestro se encuentra cubierto o no por la pliza y en caso afirmativo, el monto de la indemnizacin correspondiente. La liquidacin la puede hacer la propia Compaa en lo que se llama liquidacin directa, pero en la mayora de los casos se encomienda a Liquidadores de Siniestros independientes.46 En este tipo de plizas, uno de los pasos indispensables de la liquidacin consiste en escuchar la opinin que sobre el reclamo de indemnizacin pueda formular el afianzado, toda vez que es su incumplimiento lo que se est denunciando y la admisin del reclamo y el pago de la indemnizacin acarrearan consecuencias en su contra, toda vez que, como hemos dicho precedentemente, la Compaa tiene el derecho a hacer efectivo en su contra las contragarantas que haya constitudo ,lo que implica el derecho a reembolso que le reconoce el art. 553 del Cdigo del Comercio. Si existe un procedimiento de liquidacin, una de las conclusiones a que ste puede llegar es el rechazo del reclamo de indemnizacin. Pero si la liquidacin admite el reclamo, la indemnizacin deber pagarse de inmediato, una vez evacuado el informe de liquidacin, o que se hayan resuelto las eventuales impugnaciones deducidas por una u otra parte y que la Compaa y el asegurado hayan dado su conformidad al resultado final de la liquidacin. 11.- Vigencia del seguro de garanta. Una de las estipulaciones esenciales de toda pliza de seguros es aquella que especfica su vigencia, toda vez que slo los eventos ocurridos durante ella estarn cubiertos. 46 Se ha eliminado la exigencia de que para liquidar este tipo de seguros deben ser liquidadores que cuenten con el ttulo profesional de abogado, no obstante lo cual, en la prctica observar dicha precaucin es muy necesaria dada la naturaleza estrictamente jurdica que tiene ste tipo de seguros y las situaciones de hecho en que se inserta. Normalmente las plizas de seguro de daos, como lo son los seguros de garanta, se extienden para durar por un lapso de tiempo cronolgico absolutamente preciso, como lo es seis meses, un ao, 18 meses, etc. Sin embargo, nada obsta a que la pliza de seguro se extienda para durar lo mismo que el trmino de un contrato o de las obligaciones que de l surjan, lo que es perfectamente factible y normal en una pliza de seguro de garanta, que como toda caucin est, en principio, ligada a la obligacin caucionada.

Las clusulas de las plizas de seguro de garanta no modifican mayormente los principios arriba expuesto, pero generalmente agregan una idea novedosa: la caducidad del plazo de vigencia de la pliza no extingue la responsabilidad de la Compaa para con el asegurado, por incumplimientos de obligaciones garantidas que se hayan producidos durante su vigencia. Pero en esto casos, en beneficio de la certeza jurdica, se establece un plazo mximo para que, luego de expirada la vigencia del seguro, pueda el asegurado reclamar el pago de un siniestro, plazo que en la mayora de los modelos de las plizas, es de 30 das, contados a partir de fin de la vigencia del seguro. Es de hacer notar que en el seguro de garanta no se ha introducido hasta la fecha la clusula claims made, que tantas controversias ha acarreado en el seguro de responsabilidad civil. Segn dicha clusula estn cubiertos los siniestros que, no solo hayan ocurrido, sino tambin, denunciados dentro del mismo trmino de vigencia del seguro, salvo que la pliza se renueve con el mismo asegurador 47 . Antes de terminar con este punto, cabe hacer notar que las plizas de seguro de garanta, en general, disponen que las circunstancias de devolver el asegurado la pliza a la Compaa antes del trmino de la vigencia de ella o del plazo adicional para reclamar siniestros, implica su renuncia al eventual derecho a reclamar indemnizaciones por los riesgos cubiertos por dicha pliza 48 . 12.- Subrogacin y reembolso. El artculo 553 del Cdigo de Comercio reconoce el derecho del 47 El valor y los alcances de esta clusula fueron objetos de prolongado debate en el ltimo congreso de AIDA (Asociacin Internacional de Derecho de Seguros) celebrado el ao pasado en Santiago de Chile. 48 Vid. Achurra. Op. Cit. asegurador que paga una indemnizacin a perseguir el recobro o recupero, de parte del responsable del siniestro. En los trminos del Cdigo, el asegurador se subroga en los derechos del asegurado para perseguir a los causantes o responsables del siniestro. As las cosas, una vez pagada la indemnizacin al asegurado, la Compaa pasa a ser titular de una accin para recuperar hasta la totalidad de lo pagado, de parte del tomador o afianzado, por concepto de cuya obligacin incumplida se produjo el siniestro de la pliza. Este derecho de la Compaa tiene en el seguro de garanta una caracterstica especial, toda vez que en este caso la compaa no persigue a un tercero que haya causado el siniestro sino que, en la mayora de los casos, precisamente a quien contrat con ella, quien solicit la cobertura del seguro. Entre otras razones, esta caractersticas hace que la doctrina coincida en que la accin de reembolso que tiene el asegurador en este seguro no es la que reconoce la ley al asegurador en todos los seguros de daos, sino una accin propia del asegurador que nace del contrato de seguro.49 Lo que ocurre es que, dadas las particularidades y caractersticas de este seguro, una vez pagada la indemnizacin el asegurador pasa a ocupar el mismo lugar que tena el acreedor asegurado, por lo que se justifica plenamente su derecho a perseguir el recobro, fuera de la existencia de las normas legales ( e incluso las contractuales) que establecen dicho derecho. Una ltima consideracin: la caracterstica de que las plizas de ejecucin inmediata, a solo requerimiento o de pronto pago que han surgido en el ltimo tiempo no conceden al asegurador mayores posibilidades de objetar el cobro que exige el asegurado, ni requieren como condicin previa a dar curso a la indemnizacin, la opinin del afianzado, supuesto incumplidor de las obligaciones garantizadas, puede dar lugar a que al intentarse el recobro, el afianzado alegue la inexistencia del siniestro, que manifieste que no es efectivo su incumplimiento de las obligaciones garantidas y que, no logrando rendir el asegurador prueba de lo contrario, se vea privado de obtener el recupero por una situacin que, tericamente al menos, habra obstado al pago de la indemnizacin. Pensamos que, en este caso, en aplicacin del principio pay and argue after, que rige universalmente a las garantas con clusula de pronto pago o a solo requerimiento, cabe el derecho de perseguir el reintegro

49 Camacho de los Ros Ob. cit.,pg. 107 de la suma pagada al acreedor, por que en ste caso estaramos, evidentemente, en presencia de una enriquecimiento sin causa o ilcito. Ahora bien: quien lo ejerce?. El afianzado, quien no podra oponer al asegurador una excepcin, el asegurador por no haber podido obtener de dicho afianzado el recobro?. La doctrina extranjera (Garrigues, Tirado de Suarz, Olivencia, Gmez Calero), esta dividida en cuanto a si el tomador puede oponer al asegurador la excepcin de pago indebido del seguro, fundada en que no es efectivo el incumplimiento que se le imput y que constituy el fundamento ltimo del cobro del seguro, siendo mayoritariamente la tesis de los que sustentan que es admisible la excepcin de pago indebido por el tomador a la Compaa Aseguradora. V. Las Retenciones en el Contrato de Construccin. 1.- Introduccin al tema. Como sealbamos en la Introduccin, en los contratos de construccin, muy especialmente en aquellos pactados bajo la modalidad de suma alzada, es usual que se contemple una forma adicional de garanta: las retenciones. Veamos lo que al respecto dice un modelo de clusula al respecto: Del valor de cada estado de pago, el propietario retendr un...(10% u otro porcentaje convenido), hasta completar un (5% u otro monto convenido) del monto del contrato, retencin que servir para garantizar la buena ejecucin de los trabajos, el cumplimiento de los plazos que mas adelante se estipulan y, en general, todas las obligaciones del constructor para con el propietario. El constructor tendr derecho a canjear, en cualquier momento estas retenciones por boletas bancarias o plizas de seguros de garanta. 2.- Definicin de la institucin. Las retenciones son un porcentaje del monto al que alcanza el estado de pago de un contrato de construccin, que el propietario no paga al constructor, mantenindolo en su poder en calidad de garanta de la fiel y oportuna ejecucin y trmino de la obra encomendada. 3.- Naturaleza jurdica de las retenciones. Si bien es cierto las retenciones constituyen una modalidad de garanta propia, y exclusiva del contrato de construccin, con ciertas peculiaridades que la distinguen jurdicamente, en su esencia participan de la calidad de un prenda de dinero. Las particularidades propias de las retenciones son las siguientes: a) No constituyen una suma de dinero que el deudor entregue en garanta, sino que, de acuerdo al contrato, de una que ste consiente en que se le deduzca, de la suma a que ascienda cada estado de pago. b) Equivalen a un porcentaje de la suma a que ascienda cada estado de pago, por lo que son de una cuanta variable. c) Al terminarse con la ejecucin de la obra corresponde determinar si la garanta constituida por ellas en favor del propietario de la obra, se aplica en todo o en parte a solventar el monto de deducciones que proceda en contra del constructor, por obras no ejecutadas o ejecutadas deficientemente o si corresponde entregarlas o devolverlas ntegramente al constructor. Tambin puede darse el caso que no haya acuerdo entre las partes respecto a determinada objecin con el propietario, caso en el cual el destino de las retenciones o la parte de ellas que proceda, habr de ser resuelta por la instancia jurisdiccional correspondiente, que, en los contratos de construccin es, generalmente, un rbitro. El trmino devolucin de retenciones, es el que se usa habitualmente en el mbito de los contratos de construccin. Como se puede apreciar, la extensin de las peculiaridades que le son propias no alcanza a alterar su verdadera naturaleza jurdica, puesto que, como hemos dicho, en el fondo son una prenda de dinero. Como seala Somorriva, la regla general es que sobre cualquier bien inmueble, sea corporal o incorporal puede radicarse una prenda, quien agrega: Tambin el dinero es susceptible de darse en prenda50 El referido autor seala que la prenda de dinero presenta la caracterstica de que en ella el acreedor no es mero tenedor sino dueo del bien dado en garanta, y que una vez cumplida la

obligacin debe restituir una suma igual a la recibida, pero no las mismas monedas que le fueron entregadas.51 El artculo 2.395 del Cdigo Civil prohbe al acreedor servirse de la prenda sin el consentimiento del deudor, sealando que a ste respecto sus obligaciones son las mismas que las del mero depositario; pero, a su vez, el artculo 2.221, que se refiere al depsito de dinero, llamado depsito irregular, autoriza al depositario para emplearlo con la obligacin de restituir otro tanto en la misma moneda. 50 Manuel Somarriva U. Tratado de las Cauciones. Editorial Ediar Conosur 51 Ello como lgica consecuencia del carcter fungible que tiene por naturaleza el dinero. As las cosas, seala Somarriva, la prenda de dinero y el depsito irregular son instituciones muy semejantes. 4.- El Canje de retenciones. Los contratos de construccin, en algunos casos, como aquel que sirvi para encabezar este captulo, prescriben la posibilidad de que en cualquier momento el constructor efectu un canje de las retenciones acumuladas, por otra garanta suficiente, que podr ser cualquiera de las anteriormente estudiadas, boleta o seguro de garanta, u otra estimada suficiente. Es de hacer notar que para el propietario de la obra, la retencin es una garanta de suyo muy eficaz y que le brinda grandes ventajas, como quiera que la retencin de dinero (que mas encima puede utilizar), no requiere de liquidacin alguna para saldar el eventual crdito que se produzca a su favor. De all resulta que, para que el canje de retenciones sea aceptable, tiene que tratarse de una garanta, sino igual a las retenciones mismas, al menos de una muy gran eficacia. Por otro lado, el del constructor, se justifica plenamente el que se admita el canje, porque, mas que mal, las retenciones son sobre dinero suyo, que podra usar en sus asuntos particulares, si presenta en reemplazo una garanta eficaz. 5.- La Devolucin final de las retenciones. Descuentos, extensiones y otras modalidades. Como hemos dicho, terminada la obra, debe procederse a su entrega al propietario, quien es en ese momento, debe formular los reparos por obras no ejecutadas o mal efectuadas, y hacer aplicables las retenciones o una parte de ellas. Si no hay objeciones a la obra, el propietario debe proceder a la devolucin del total de las retenciones. Si habiendo reparos, su monto no alcanza al total de las retenciones, el propietario debe hacer la devolucin previo descuento de la suma equivalente al valor de los reparos. Por el contrario, si los reparos son iguales o exceden el monto de las retenciones, habra derecho a hacer efectiva la garanta por el monto total, e incluso, para exigir del constructor los perjuicios que excedieren al total de las retenciones. En cualquiera de estos eventos, y tambin en otros que interesan mas al propietario, puede estar previsto el derecho a impetrar o pactar extensiones de coberturas, en otros trminos, prrrogas del plazo para ejecutar obras faltantes o corregir errores, mantenindose las retenciones en poder el propietario por un plazo determinado. Por ltimo, si no hay acuerdo entre las partes sobre la validez de las objeciones a la recepcin de la obra, o su monto, debe recurrirse al procedimiento de solucin de conflictos que, de no decirse nada en el contrato, ser acudiendo a la justicia ordinaria. Sin embargo, como mas arriba decamos, en la inmensa mayora de los casos en los contratos de construccin el tribunal competente ser el rbitro designado o que se designe de acuerdo a sus clusulas. Una ltima consideracin respecto al tema: no habiendo causa legtima de objecin a las obras o resueltas estas de acuerdo al contrato y/o el fallo del organismo jurisdiccional correspondiente, el propietario no puede denegar la devolucin ntegra y oportuna de las retenciones. No hacerlo trae consigo, no slo las responsabilidades civiles del caso, sino tambin, las penales, derivadas de la figura de retencin o apropiacin indebida de dinero, contemplada en el art. 470 N1 del Cdigo Penal.

ANEXO. LISTADO DE POLIZAS DE SEGURO DE GARANTIA Y FIDELIDAD INSCRITAS HASTA LA FECHA EN EL REGISTRO QUE LLEVA LA SUPERINTENDENCIA DE VALORES Y SEGUROS. Resolucin Fecha Cdigo Materia Seguro de Garanta para Agentes. Pliza de Seguro de Crdito y Garanta

Circ. 814 10-08-88 POL.1-88-011 Administradores de Mutuos Hipotecarios. Res. 131 12-08-96 para Contratos en General. POL.1-91-034

Res. 131 12-08-91 POL.1-91-035 Pliza de Seguro de Crdito y Garanta para Contratos en General y de Ejecucin Inmediata. Res. 019 04-02-92 por Cesanta Involuntaria. POL.1-92-001 Pliza de Pago de Cuotas Hipotecarias

Res. 040 19-03-92 POL.1-92-004 Pliza de Garanta de Presentacin a Propuesta de la Direccin de Aprovisionamiento del Estado. Res. 040 19-03-92 POL.1-92-005 Pliza de Garanta Cumplimientode Contrato con la Direccin de Aprovisionamiento del Estado. de Fiel

Res. 042 24-03-92 POL.1-92-007 Pliza de Garanta de Fiel Cumplimiento de Contratos de Construccin o Confeccin de Obra entre Particulares con Pago de Indemnizacin a 30 das Hbiles.

Res. 042 24-03-92 POL.1-92-008 Pliza de Garanta de Fiel Cumplimiento de Contrato de Construccin o Confeccin de Obra entre Particulares con Pago de Indemnizacin Sujeto a informe de Liquidacin. Res. 113 02-04-92 POL.1-92-014 Pliza de Garanta a Favor de Aduanas. Pliza de Seguros de Garanta de Fiel Pliza de Garanta para Licitaciones,

Res. 188 19-08-92 POL.1-92-054 Cumplimiento de Contrato de Obras Pblicas. Res. 261 30-11-92 POL. 1-92-063 Propuestas o Subastas Pblica o Privadas. Resolucin Fecha Cdigo

Materia Pliza de Garanta de Cumplimiento de

Res. 261 30-11-92 POL.1-92-064 Contrato en General y de Ejecucin Inmediata.

Res. 261 30-11-92 POL.1-92-065 Pliza de Garanta de Cumplimiento de Contrato en General con Pago de Indemnizacin Sujeto a Liquidacin. Res. 276 16-12-92 para Empleados Pblicos. Res. 276 16-12-92 Conductores de Vehculos. Res. 276 16-12-92 Valores Fiscales. Res. 045 Cambio Res. 045 26-02-93 26-02-93 POL.1-92-108 POL.1-92-109 POL.1-92-110 POL.1-93-010 POL.1-93-011 POL.1-93-012 POL.1-93-013 Pliza de Fianza por Permanencia Pliza de Fidelidad Funcionaria

Plizas de Fidelidad Funcionaria Pliza de Garanta para Casas de Pliza de Garanta. Pliza de Fidelidad Funcionaria para Seguro de Garanta. Pliza de Seguro de Garanta

Res. 046 26-02-93 Empleados Particulares. Res. 046 26-02-93

Res. 047 26-02-93 POL.1-93-014 Corredores de Bolsa y Agentes de Valores. Res.064 de Seguros. 03-06-94 POL.1-94-019 POL.1-94-036

Pliza de Garanta para Corredores Pliza de Seguro de Garanta de Pliza de Seguro de Garanta para los

Res. 130 08-09-94 Obras Pblicas.

Res. 037 28-02-95 POL.1-95-032 Servicios de Vivienda y Urbanismo. Res. 069 13-04-95 de Compraventa.

POL 1 95 042 Pliza de Garanta para Contratos de Promesa

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