14 Cap - Tto Hipomovilidad
14 Cap - Tto Hipomovilidad
14 Cap - Tto Hipomovilidad
Contractura Choque
Anquilosis muscular coronoideo
ANQUILOSIS
Inmovilidad anormal de la mandíbula.
Se diferencian dos tipos básicos de anquilosis en
función de los tejidos responsables de la
limitación de la movilidad:
FIBROSA ÓSEA
Anquilosis fibrosa
Es la mas frecuente y puede producirse entre el cóndilo y el
disco o entre el disco y la fosa.
La anquilosis ósea de la ATM
Se produciría entre el cóndilo y la fosa, por lo que deberá
haberse perdido ya el disco del espacio discal. son raras y
constituyen un trastorno más crónico y amplio
Anquilosis
Dado que la etiología y el tratamiento de las anquilosis fibrosas y óseas son
similares, se comentaran conjuntamente.
HISTORIA CLÍNICA:
Los pacientes refieren una limitación de la apertura de la boca sin que exista
dolor. El paciente es consciente de que el trastorno ha estado presente durante
mucho tiempo y puede desconocer que esto constituye un problema
importante.
En la mayoría de los casos de anquilosis, el
cóndilo continua siendo capaz de girar, lo que
CARACTERISTI
sugiere adherencias en el espacio articular CAS CLINICAS
superior. Cuando esto ocurre el movimiento
puede ser posible en el espacio articular
inferior entre el cóndilo y la superficie inferior
del disco. Por tanto el paciente puede abrir la
boca hasta una distancia interincisiva de
aproximadamente de 25mm. La exploración
clínica revela una amplitud de movimiento
lateral hacia el lado afectado relativamente
normal, pero con una limitación del
movimiento hacia el lado no afectado.
Durante la apertura de la boca, el trayecto
presenta una deflexión hacia el lado afectado.
En la radiografía no se visualiza un movimiento
condíleo. Cuando la anquilosis es ósea, puede
visualizarse a menudo en una radiografía o
una TC de haz cónico.
Tratamiento definitivo
Dado que el paciente tiene un cierto movimiento (aunque limitado) el
tratamiento definitivo puede no estar indicado. Si la función es
insuficiente o la limitación resulta intolerable, la cirugía es el único
tratamiento definitivo.
La cirugía artroscópica es la técnica quirúrgica menos agresiva, por lo
que debe considerarse siempre esta posibilidad, muchas articulaciones
anquilosadas están demasiado inmovilizadas para poder liberarlas
mediante artroscopia, y deben considerarse otras opciones quirúrgicas.
Cuando esta indicado un tratamiento quirúrgico, hay que recordar que
es probable que los músculos elevadores estén en un estado de
contracción miostatica, lo cual debe tratarse una vez resuelta la
anquilosis
Tratamiento de apoyo
Por lo general, la anquilosis es asintomática, y no esta
indicado un tratamiento de apoyo, sin embargo, si se fuerza el
movimiento de la mandíbula mas allá de la limitación
(traumatismo), puede producirse una lesión de los tejidos, si
esto da lugar al dolor e inflamación, esta indicado un
tratamiento de apoyo que consiste en restringir
voluntariamente el movimiento hasta limites en los que no
produce dolor.
También pueden utilizarse analgésicos, junto con un
tratamiento de calor.
Fibrosis capsular
Otra causa de hipomovilidad mandibular relacionada con alteraciones
fibrosas es la fibrosis capsular.
El ligamento capsular que rodea la ATM es responsable en parte de la
limitación de la amplitud normal del movimiento articular. Si el
ligamento sufre una fibrosis, sus tejidos pueden tensarse o crear una
limitación.
El movimiento del cóndilo en el interior de la articulación
puede quedar también limitado, con lo que se establece un trastorno
de hipomovilidad mandibular crónica.
La fibrosis capsular suele ser consecuencia de una inflamación, que,
aunque puede ser secundaria a una inflamación de los tejidos
adyacentes, habitualmente se produce por un traumatismo.
El traumatismo puede deberse a una fuerza extrínseca (ej. golpe en la
cara), a una intervención quirúrgica o a una fuerza intrínseca asociada
con una opresión de la mandíbula.
Tratamiento definitivo
Existen dos motivos que hacen que el tratamiento definitivo de la fibrosis capsular esté
casi siempre contraindicado.
En primer lugar, la fibrosis capsular reduce los movimientos limites de la mandíbula,
no constituye un problema funcional importante para el paciente.
En segundo lugar, dado que las alteraciones son de tipo fibrosis, el tratamiento entra
en el ámbito quirúrgico. Sin embargo, la cirugía es uno de los factores etiológicos que
pueden causar este trastorno. Así, pues, la posible utilidad de una intervención
quirúrgica para liberar las restricciones fibrosas debe sopesarse con cuidado, teniendo
en cuenta que la propia cirugía podría causar una nueva fibrosis con la cicatrización.
Cuando la limitación supone un problema funcional, puede intentarse la fisioterapia.
Los ultrasonidos en los tejidos pueden proporcionar un calor profundo que puede
ayudar a relajar los tejidos. Este tratamiento, seguido de un movimiento manual
(distracción) de la articulación, puede ayudar a proporcionar más movilidad. Este tipo
de tratamiento es relativamente inocuo, por lo que merece la pena intentarlo.
Las hipermovilidades agudas responden mejor que las crónicas.
Tratamiento de apoyo
• Como la contractura
miofibrotica rara vez asocia
con síntomas dolorosos, no
Tratamiento esta indicado un
tratamiento de apoyo.
de apoyo Cuando aparecen síntomas,
se instaura el mismo tipo
de tratamiento que se ha
sugerido para la
contracción miostatica.
Tratamiento definitivo
En la contractura miofibrotica los tejidos musculares pueden relajarse, pero la
longitud muscular no aumenta. Esta contractura es permanente.
Puede conseguirse un cierto alargamiento del musculo mediante una tracción
elástica continua. Esto se produce con un crecimiento lineal del musculo, que es
un proceso lento y limitado por el estado de salud y la adaptabilidad del tejido
muscular.
Habitualmente, el tratamiento definitivo es la desinserción quirúrgica de los
músculos afectados.
Si esta indicada una intervención quirúrgica, la función de los músculos no
afectados ha sufrido también una limitación cónica y es probable que aquellos
se encuentran en un estado de contractura miostatica.
Una vez resuelta quirúrgicamente una contractura miofibrotica, se instaura un
tratamiento de la misma y de los demás músculos elevadores y los músculos se
desinsectan quirúrgicamente suelen reinsertarse con el tiempo. Si los ejercicios
pasivos mantienen el grado con el tiempo. Si los ejercicios pasivos mantienen el
grado de movimiento, la limitación puede no volver a producirse.
A menudo resulta difícil determinar mediante la
historia clínica y la exploración física si una contractura
muscular es miostática o miofibrótica.
En muchos casos, la clave del diagnóstico está en el
tratamiento.
Cuando el tratamiento lleva a aumentar la longitud
muscular, se confirma que se trata de una contractura
miostática.
Si el tratamiento causa síntomas repetidos, sin
alcanzar un aumento de la longitud muscular, es
probable que se trate de una contractura miofibrótica.
EJERCICIOS
CHOQUE
CORONOIDEO
3. CHOQUE CORONOIDEO
Esta reconstrucción de TC
tridimensional revela una apófisis
coronoides muy larga que limita la
apertura de la boca
TRATAMIENTO DEFINITIVO
El tratamiento definitivo del choque coronoideo es la modificación del tejido
responsable. A veces, la aplicación de ultrasonidos, seguida de un estiramiento
pasivo suave, ayuda a movilizar las estructuras.
El tratamiento definitivo es la cirugía, que acorta la apófisis coronoides o elimina
la obstrucción tisular (según la causa) (fig. 14-7).
Dado que por lo general el trastorno es indoloro,
la intervención quirúrgica suele
estar contraindicada por su agresividad.
Una característica frecuente de los trastornos del crecimiento óseo es que los
síntomas clínicos descritos por el paciente están directamente relacionados con
las alteraciones estructurales asociadas. Puesto que estos trastornos producen por
lo general cambios lentos, no hay dolor y los pacientes modifican con frecuencia la
función para adaptarse a los cambios
CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS
Dado que la mayoría de los trastornos del crecimiento óseo no cursan con
dolor ni disfunción, o es necesario un tratamiento de apoyo.
Si apareciera alguna de estas características, el tratamiento se ajusta al
problema identificado (p.ej., dolor muscular local, alteración discal,
inflamación).
Las fases avanzadas de una neoplasia, no debe utilizarse un tratamiento de
apoyo que enmarcarse los síntomas.
Esta indicado un tratamiento mas definitivo, y debe remitirse al paciente a
los especialistas odontológicos o médicos apropiados.
TRASTORNOS MUSCULARES
SISTÉMICOS CONGÉNITOS Y DEL
DESARROLLO
Existen muchos tipos de trastornos musculares sistémicos.
Algunos de ellos parecen tener componente genético,
mientras que otros se asocian al desarrollo; sin embargo, aún
no se conocen bien muchos de estos trastornos.
Los trastornos musculares pueden clasificarse en tres
amplias categorías:
Hipotrofia (debilidad muscular), Hipertrofia (desarrollo
excesivo) , Neoplasias (crecimiento destructivo incontrolado).
ETIOLOGÍA:
BIBLIOGRAFIA