DIAPOSITIVAS BASES DE DERECHO PENAL

Descargar como ppt, pdf o txt
Descargar como ppt, pdf o txt
Está en la página 1de 52

BASES DE DERECHO PENAL

Y
PENITENCIARIO
2
3
4
• En cualquier acción delictiva se presentan,
invariablemente, un autor y el resultado material de su
conducta.

• Del estudio del primero, es decir, del protagonista del


delito, se encargará la criminología,
criminología realizando el examen
integral de su personalidad, requisito indispensable para la
justicia penal.

*A su vez, del estudio de las huellas materiales del delito, es


decir, de los indicios,
indicios se ocupará la criminalística.

*Ambas disciplinas hermanas que provienen de un tronco


común, la medicina forense, y más que auxiliares del
derecho penal deben ser consideradas básicas e
insustituibles.
• “A propósito de las funciones de los peritos en criminalística
de campo, sobre todo para la investigación del delito más
grave, me refiero, claro está, al homicidio, los criminalistas
hemos formulado una especie de ‘‘catecismo’’ aplicable
muy especialmente en los casos de mayor complejidad,
conocido como ‘‘Los siete puntos de oro’’,
oro’’ consistente en
dar respuesta correcta a siete preguntas que pueden
conducir al esclarecimiento de todo crimen”. (Ensayo)

• “Supongamos que se encuentra a un hombre muerto,


aparentemente asesinado. ¿Qué sucedió? ¿Quién es la
víctima y quién es el victimario? ¿Cuándo ocurrieron los
hechos? ¿Dónde ocurrieron? ¿Cómo? ¿Con qué y por qué
se cometió?, son las preguntas de rigor. Si se consigue
contestarlas, el crimen queda completamente
esclarecido”.
• La primera pregunta, ¿qué sucedió?, es fundamental para el comienzo de la
investigación, ya que a menudo depende de ella que la investigación pueda o no
proseguir.
• La interrogante ¿quién es la víctima?, suele ser difícil de contestar por la forma en que
se haya producido la muerte o porque el homicida haya desfigurado el cadáver.
• La respuesta a la ‘‘trivial’’ pregunta ¿cuándo sucedió?, requiere la participación de un
perito médico forense, quien tomará en cuenta para responderla los siguientes datos:
rigidez, enfriamiento, livideces y putrefacción.
• El lugar del crimen, ¿dónde se cometió?, no siempre corresponde al lugar donde se
encuentra el cadáver. Precisar el ‘‘lugar de los hechos’’ equivale, muy a menudo, a
descubrir al culpable
• La contestación a la pregunta ¿cómo ocurrió?, frecuentemente supone también la
investigación de las circunstancias más remotamente vinculadas al hecho. A este
respecto, los indicios brindan por lo general la luz que ilumina el oscuro caso. Los
indicios originados por la actuación del victimario en el escenario del crimen, pueden
ser tanto los producidos por él sobre las cosas que le rodean, como los producidos por
las cosas sobre su persona.
• ¿Con qué instrumento se ejecutó el hecho? La importancia de plantear esta cuestión
es obvia. Aquí, de nueva cuenta, la participación del médico forense resulta necesaria.
• ¿Por qué se cometió el hecho? A menudo la propia naturaleza del mismo da la
respuesta, pero con igual frecuencia se necesita de mucho ingenio para descubrirla.
• Ahora bien, para contestar las ‘‘siete preguntas clave o de oro de la
investigación criminalística’’, revisten especial significación los ‘‘indicios’’,
también conocidos como ‘‘testigos mudos de los hechos’’, definidos por el
criminalista alemán Eirch Anuschat, de la siguiente manera: ‘‘todo lo que el
criminalista puede observar y utilizar’’,
utilizar’’ o bien, en palabras de Susan M.
Hunt: ‘‘cualquier objeto que permita esclarecer que un crimen ha sido
cometido, o bien que establezca una relación entre el criminal y su víctima o
un sospechoso’’.
• Son fuentes de indicios la propia escena del crimen, la víctima o los
sospechosos. Entre los indicios más frecuentes se tienen la sangre, el semen,
la saliva, las fibras, las armas, los proyectiles, los casquillos, las impresiones
dactilares, las pinturas y los cabellos.
• Cada indicio, conforme a su naturaleza y ubicación, permite reconstruir los
hechos e identificar a su autor o autores. De lo antes mencionado, se deduce
la necesidad de ‘‘proteger’’ y ‘‘conservar’’ el lugar de los hechos, piedra
fundamental de la investigación. (delito Código Penal Veracruz)
• Si no se cumple con este precepto, las probabilidades de que fracase la
investigación serán muy elevadas.
• El perito en criminalística debe ocuparse de fijar detalladamente el lugar de
los hechos, así como de levantar y embalar los indicios (cadena de custodia),
para ser llevados al laboratorio.
• En la justicia penal hay un protagonista, que concentra en sí todo el interés del
proceso. El delito es un síntoma de su personalidad criminal. La pena o la medida han
de graduar su eficacia en relación con él, con su personalidad biosicológica integral,
con su grado de antisociabilidad, con su aptitud de rehabilitación y con su capacidad
para reintegrarse a la vida en común.
• Sólo la criminología clínica permite a la justicia estudiar al hombre delincuente, para
conocer las causas de su delito, su grado de desadaptación social, su peligrosidad y sus
posibilidades de resocialización, y sobre la base de este conocimiento determinar la
pena o medida más adecuada a su readaptación y, en caso de sujetos inadaptables, la
de mayor eficacia asegurativa. Por todo esto, en los establecimientos destinados al
cumplimiento de penas privativas de libertad, debe existir algún organismo técnico
criminológico que se ocupe del examen riguroso de la personalidad de los internos.
• Juzgar al hombre delincuente es responsabilidad de los jueces, resocializarlo
compete al personal penitenciario. Al respecto, recordemos las palabras de don Luis
Jiménez de Asúa, insigne penalista español: ‘‘Hacer buenos jueces y buenos
funcionarios de prisiones es más difícil que hacer un código, y además es mucho más
importante’’
• Si Hanns Gross, el padre de la criminalística, contribuyó a que los encargados de
procurar e impartir justicia cuenten con una disciplina que les permita acercarse, con
todo rigor científico, al conocimiento de la verdad histórica de los hechos sometidos a
su consideración; César Lombroso, el padre de la criminología, irradió la verdad de
humana justicia, acercándose, con amor científico, a los abismos de todas las miserias
morales.
La Teoría del Delito

en el

Sistema Penal Acusatorio Adversarial


Es por ello, que la Teoría del Delito en el derecho penal constituye
uno de los parámetros más importantes para acreditar la
responsabilidad penal de un sujeto imputado en un proceso penal,
por la supuesta comisión de un hecho delictivo; de ahí que resulta de
la mayor relevancia analizar y establecer si se han colmado los
elementos constitutivos de un hecho que la ley señala como delito.

Una acción para poder constituirse como un delito debe ser una
conducta típica, antijurídica y culpable. Por tanto, el análisis del
hecho que se considere delictivo debe ser analizado desde la óptica
de estos tres supuestos constitutivos, ya que el delito es un
fenómeno social que se estudia a través de una ciencia llamada
Teoría del Delito.

La Teoría del Delito tiene como finalidad analizar y estudiar los


presupuestos jurídicos en la comisión de un hecho que la ley señala
como delito, mediante una acción u omisión, lo que traerá aparejada
una sanción penal.
PRISIÓN PREVENTIVA JUSTIFICADA. SUPUESTOS EN LOS QUE SU
IMPOSICIÓN SE CONSIDERA ARBITRARIA. Los artículos 18, primer
párrafo y 19, segundo párrafo, de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos son el fundamento primigenio de
la prisión preventiva en el orden jurídico nacional, que se concretiza
en la legislación secundaria en los artículos 154, 155, 156, 157, 161,
165 y 167 del Código Nacional de Procedimientos Penales. Al
respecto, el numeral 7.3 de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos proscribe la detención o encarcelamiento
arbitrario, cuya interpretación por parte de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos en los Casos Gangaram Panday Vs. Surinam, J.
Vs. Perú y Pollo Rivera Vs. Perú, permite afirmar que
la prisión preventiva es de aplicación excepcional y se rige por los
principios de legalidad, previsibilidad, idoneidad, necesidad y
proporcionalidad, aunado a que debe ser susceptible de revisión
periódica sobre la base de que no debe prolongarse cuando no
subsistan las razones que motivaron su imposición. En consecuencia,
la imposición de la prisión preventiva justificada será arbitraria y, por
ende, incompatible con el respeto a derechos fundamentales cuando
se actualice alguno de los supuestos siguientes: 1) no sea necesaria
para el fin pretendido, 2) exista insuficiente o nula motivación sobre
la necesidad y proporcionalidad de su imposición y, 3) el riesgo pueda
cautelarse por medio de medidas menos lesivas. Tesis Aislada(Constitucional,
Penal) (2022128)
PRISIÓN PREVENTIVA. LA PENA MÁXIMA COMO ÚNICA RAZÓN PARA JUSTIFICAR SU
IMPOSICIÓN COMO MEDIDA CAUTELAR, VULNERA EL PRINCIPIO DE PRESUNCIÓN DE
INOCENCIA EN SU VERTIENTE DE REGLA DE TRATO PROCESAL, CONTENIDO EN LOS ARTÍCULOS
20, APARTADO B, FRACCIÓN I, DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS
MEXICANOS Y 7 Y 8 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS. El
artículo 19, párrafo segundo, de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos establece que la prisión preventiva tiene el carácter de excepcional, ya que debe
solicitarse cuando otras medidas cautelares no sean suficientes para garantizar la
comparecencia del imputado en el juicio, el desarrollo de la investigación, la protección de la
víctima, de los testigos o de la comunidad, así como cuando el imputado esté siendo procesado
o haya sido sentenciado previamente por la comisión de un delito doloso. Asimismo, precisa que
la prisión preventiva procede oficiosamente cuando se trata de delitos muy específicos y de alto
impacto, como delincuencia organizada, homicidio doloso, violación, secuestro, trata de
personas, delitos cometidos con medios violentos como armas y explosivos, así como delitos
graves que determine la ley en contra de la seguridad de la Nación, el libre desarrollo de la
personalidad y la salud. Por su parte, el artículo 20, apartado B, fracción I, de la propia
Constitución, regula el principio de presunción de inocencia, que implica que toda persona debe
ser tratada como inocente, mientras no se pruebe su culpabilidad en un juicio mediante una
sentencia, impidiendo, en la mayor medida posible, la aplicación de medidas que impliquen una
equiparación de hecho entre imputado y culpable, es decir, conlleva la prohibición de cualquier
tipo de resolución judicial que suponga la anticipación de la pena. De igual forma, de los
artículos 7 y 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos deriva que toda persona
tiene derecho a la libertad y a la seguridad personal; y que todo inculpado por un delito tiene
derecho a que se presuma su inocencia mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. En
ese orden de ideas, la necesidad de la prisión preventiva en función únicamente de la pena
de prisión que prevé el hecho delictuoso señalado por la ley como delito, deviene contraria a los
preceptos constitucionales y tratado internacional invocados, pues atento al carácter excepcional
de la medida cautelar en análisis, como al principio de presunción de inocencia en su vertiente
de regla de trato procesal, su imposición con el solo argumento de la penalidad es una postura
anticipada sin justificación alguna, pues se tiene por cierto que el imputado se sustraerá del
procedimiento penal con base en la posible imposición de la pena de prisión que el tipo penal
sanciona. Máxime si se tiene en cuenta que la fracción II del artículo 168 del Código Nacional de
Procedimientos Penales expresa que para decidir sobre el peligro de sustracción del imputado,
deberá atenderse al máximo de la pena que, en su caso, pudiera llegar a imponerse de acuerdo
con el delito de que se trate y a la actitud que voluntariamente adopte el imputado, de lo que se
advierte que el factor relativo al máximo de la pena no debe ponderarse aisladamente, sino en
conjunto con las circunstancias señaladas. Jurisprudencia(Constitucional, Penal) 2018459
• El 15 de abril de 1876 se puede considerar que es la fecha
oficial en que nace la Criminología como ciencia, ya que ese
día se publica el “Tratado Antropológico Experimental del
Hombre Delincuente”, por Cesare Lombroso quien aquí
expone su teoría.

• El nombre de Cesare Lombroso está fuertemente ligado a la


historia de la Criminología. Su clasificación de los criminales
fue durante mucho tiempo, la principal herramienta para
establecer el perfil de los delincuentes. De hecho, muchos de
sus postulados se debaten todavía en el campo del derecho.

• Cesare Lombroso, médico y antropólogo de formación, es


considerado el padre de la criminología. Su obra “Tratado
Antropológico Experimental del Hombre Delincuente” se
asume como la primera compilación sistematizada en esta
área. Junto con Enrico Ferri y Raffaele Garofalo, fue uno de los
grandes representantes de la criminología primigenia o
criminología positivista.
Aspecto Positivo Aspecto Negativo
1.- Conducta o hecho (8) 1.- Ausencia de conducta
(13)
2.- Tipicidad (14) 2.- Atipicidad (18)
3.- Antijuricidad (20) 3.- Causas de Justificación
(20)
4.- Culpabilidad (29) 4.- Inculpabilidad (36)
5.- Punibilidad (42) *5.- Excusas absolutorias
(42)
I.- PRESUPUESTOS DEL DELITO
a)Presupuestos del delito. (pág. 5 Libro)
b)Presupuestos del hecho. (pág. 6 Libro)

II.- CONDUCTA O HECHO


a)La conducta. (pág. 8 Libro)
b)Formas de la conducta. (pág. 8 Libro)
c)El hecho (pág. 11 Libro)
DOLO DIRECTO Y DOLO EVENTUAL. DIFERENCIAS. Del
artículo 8o. del Código Penal Federal, se desprende que los
delitos pueden ser dolosos o culposos. El dolo significa la
conciencia y voluntad de realizar el tipo objetivo de un
delito. Por ello, un delito tiene este carácter, cuando el
sujeto activo lo comete conociendo los elementos del tipo
penal o previendo como posible el resultado típico y, aun
así, quiere o acepta la realización del hecho descrito por la
ley. El dolo, a su vez, admite dos
modalidades: directo y eventual. El primero se puede
asimilar a la intención, lo que el sujeto persigue
directamente y abarca todas las consecuencias que,
aunque no las persiga, prevé que se producirán con
seguridad; mientras que el dolo eventual se presenta
cuando el sujeto activo no persigue un resultado y tampoco
lo prevé como seguro, sino que sólo prevé que es posible
que se produzca, pero para el caso de su producción lo
asume en su voluntad.
Tesis Aislada(Penal) Registro 175604
LOS ELEMENTOS DEL TIPO

A)ELEMENTOS OBJETIVOS:

• Calidad en el sujeto activo (peculado). (pág. 15 Libro)


• Calidad en el sujeto pasivo (feminicidio-mujer). (pág. 15 Libro)
• Referencia de lugar (allanamiento de morada). (pág. 15 Libro)
• Referencia de los medios de comisión (violación) (pág. 15 Libro)
• Referencia al objeto material (robo). (pág. 16 Libro)
• Bien jurídicamente protegido (aborto). (pág. 16 Libro)
• Referencias de tiempo (aborto). (pág. 16 Libro)
B) ELEMENTOS SUBJETIVOS:

“animus lucrandi”, es el motivo y fin que persigue el sujeto activo.


(secuestro). (pág. 16 Libro)

C) ELEMENTOS NORMATIVOS:

Valoración jurídica: cosa mueble (delito de robo) (pág. 17-18 Libro)


•Valoración cultural: “indebidamente” (delito de Revelación de
Información Reservada, art. 348 segundo párrafo, CPV?????). (pág.
17-18 Libro)
DEFENSA ADECUADA EN LA ETAPA DE INVESTIGACIÓN INICIAL DEL PROCEDIMIENTO PENAL
ACUSATORIO. EL INDICIADO Y SU DEFENSOR TIENEN DERECHO A OBTENER COPIAS O
REPRODUCCIONES FOTOGRÁFICAS DE LOS DATOS DE PRUEBA QUE OBRAN EN LA CARPETA DE
INVESTIGACIÓN, CUANDO EL IMPUTADO SE UBICA EN ALGUNO DE LOS SUPUESTOS
ESTABLECIDOS EN EL ARTÍCULO 218, PÁRRAFO TERCERO, DEL CÓDIGO NACIONAL DE
PROCEDIMIENTOS PENALES. Una interpretación sistemática de los artículos 113 y 218 del
Código Nacional de Procedimientos Penales permite concluir que el imputado y su defensor
podrán tener acceso a los registros de la investigación cuando aquél se encuentre detenido, sea
citado para comparecer con tal carácter, o bien, sea sujeto de un acto de molestia y se pretenda
recibir su entrevista. Sin embargo, para el goce efectivo del derecho fundamental de defensa
adecuada, debe permitirse que puedan obtener una reproducción de dichos registros, ya sea en
copia fotostática o como registro fotográfico cuando el imputado se ubica en alguno de los
supuestos establecidos en el artículo 218, párrafo tercero, del Código aludido lo que es acorde
con los principios del sistema procesal penal acusatorio, relativos a la igualdad y equilibrio entre
las partes. Sin que obste a lo anterior el hecho de que el artículo 219 del Código aludido
establezca que una vez convocados a la audiencia inicial, el imputado y su defensor tendrán
derecho a consultar los registros de investigación y a obtener copia con la oportunidad debida
para preparar la defensa, pues dicha disposición legal no debe interpretarse como una regla
restrictiva ni considerar que sólo a partir de ese momento procesal pueden obtener copias, ya
que de la redacción de dicho precepto deriva la obligación del Ministerio Público de respetar el
derecho a una defensa adecuada y de igualdad entre las partes, permitiendo el acceso a los
registros de investigación y la obtención de copias o reproducciones fotográficas de los datos
que obran en la carpeta de investigación, de manera que no prohíbe que éstas se obtengan con
anterioridad, pues lo que debe privilegiarse es que llegada la audiencia inicial, quien habrá de ser
imputado cuente ya con los datos y registros necesarios que le permitan desarrollar una defensa
adecuada, por lo que al actualizarse el supuesto en que el imputado pueda tener acceso a la
carpeta de investigación, ello implica también su derecho a obtener copia de su contenido.
Jurisprudencia 2020891
Artículo 26.- Son causas de inculpabilidad: (págs. 29-31/36-41 Libro)
I. Que razonablemente no pueda exigirse al agente una conducta
diversa de la que llevó a cabo;
II.Que el agente actúe por miedo o temor fundado e irresistible de
un mal inminente o grave en su persona o de alguien ligado a él
por vínculos de parentesco, por lazos de amor o de estrecha
amistad;
III.Que el agente realice la acción o la omisión bajo un error
invencible (págs.37-40 Libro) sobre:
a)Alguno de los elementos objetivos que integran el tipo penal; o
b)La ilicitud de la conducta, ya sea porque el sujeto desconozca la
existencia de la ley o el alcance de la misma o porque crea que
está justificada su conducta. Si el error es vencible, será
responsable a título de culpa si el tipo legal admite ésta; o
PROCEDIMIENTO PARA PERSONAS JURÍDICAS (compliance)

Artículo 421. Ejercicio de la acción penal y responsabilidad penal


autónoma
Las personas jurídicas serán penalmente responsables, de los delitos
cometidos a su nombre, por su cuenta, en su beneficio o a través de
los medios que ellas proporcionen, cuando se haya determinado que
además existió inobservancia del debido control en su organización.
Lo anterior con independencia de la responsabilidad penal en que
puedan incurrir sus representantes o administradores de hecho o de
derecho.

El Ministerio Público podrá ejercer la acción penal en contra de las


personas jurídicas con excepción de las instituciones estatales,
independientemente de la acción penal que pudiera ejercer contra
las personas físicas involucradas en el delito cometido.

No se extinguirá la responsabilidad penal de las personas jurídicas


cuando se transformen, fusionen, absorban o escindan. En estos
casos, el traslado de la pena podrá graduarse atendiendo a la
relación que se guarde con la persona jurídica originariamente
responsable del delito.
La responsabilidad penal de la persona jurídica tampoco se
extinguirá mediante su disolución aparente, cuando continúe su
actividad económica y se mantenga la identidad sustancial de
sus clientes, proveedores, empleados, o de la parte más
relevante de todos ellos.

Las causas de exclusión del delito o de extinción de la acción


penal, que pudieran concurrir en alguna de las personas físicas
involucradas, no afectará el procedimiento contra las personas
jurídicas, salvo en los casos en que la persona física y la persona
jurídica hayan cometido o participado en los mismos hechos y
estos no hayan sido considerados como aquellos que la ley
señala como delito, por una resolución judicial previa. Tampoco
podrá afectar el procedimiento el hecho de que alguna persona
física involucrada se sustraiga de la acción de la justicia.

Las personas jurídicas serán penalmente responsables


únicamente por la comisión de los delitos previstos en el
catálogo dispuesto en la legislación penal de la federación y de
las entidades federativas.
*Artículo 42 Código Penal del Estado de Veracruz
“El tema del compliance ha llegado con mucha fuerza a los
estudiosos de temas jurídicos. No se trata de una cuestión
teórica, sino de una necesidad práctica. Los abogados que
asesoran a empresas se han dado cuenta de la relevancia
de generar instrumentos que se anticipen al surgimiento de
los problemas (incluso de carácter penal) que deben
enfrentar las personas jurídicas. De esto nos habla Miguel
Carbonell.
Esto supone un escenario de riesgos y oportunidades, tanto
para los posibles afectados como para los profesionales del
Derecho que se hayan actualizado en la materia. Una
imputación penal puede implicar una grave afectación para
el normal funcionamiento de una empresa, por los riesgos
que supone para su competitividad, el impacto que
produce en el gobierno corporativo, la mala publicidad para
la empresa y la afectación de bienes jurídicos de
considerable importancia”.
(elmundodelabogado.com)
“De hecho, el artículo 421 del Código Nacional de
Procedimientos Penales requiere que haya existido
“inobservancia del debido control” al interior de la empresa,
para hacerla penalmente responsable por determinados
hechos. Dicha inobservancia se puede realizar por acción o por
omisión, y de manera dolosa o culposa, nos explica Rubén
Quintino, quien además señala que la inobservancia del debido
control va de la mano con lo que en otros países han llamado
un “defecto en la organización” y con la materialización de un
“riesgo no permitido”.

La necesidad de adoptar planes de compliance no se limita a las


empresas grandes. Las PYMES también deben poner atención al
contexto de nuevas exigencias que les resultan aplicables en
materias como el lavado de dinero, las prácticas anticorrupción,
la protección medio-ambiental, la protección de datos
personales, la prevención del acoso laboral y sexual en la fuente
de trabajo, entre otras. ”

(Miguel Carbonell)
Artículo 104.- El perdón extingue la acción persecutoria si concurren los siguientes
requisitos:
I.Que el delito sea de los que se persiguen por querella;
II.Que lo otorgue expresamente el ofendido o su representante legal, con facultades para el
caso; y
III.Que el imputado no se oponga al otorgamiento. Tratándose de delitos contra la libertad y
seguridad sexuales y lesiones que admitan el perdón, éste estará condicionado a la
reparación del daño.
Al sujeto activo de los delitos mencionados en el párrafo anterior se le aplicarán medidas
reeducativas, integrales, especializadas y gratuitas, conforme a los programas establecidos
por el Sistema Estatal para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las
Mujeres.
Artículo 105.- Si los partícipes fueren varios, el perdón otorgado a uno de ellos aprovechará
a todos los demás incluyendo al encubridor. El perdón podrá otorgarse en cualquier etapa
del proceso penal, será acordado por el juez o el tribunal de alzada y, otorgado, no podrá
revocarse. El perdón del ofendido o del legitimado para otorgarlo en delitos de querella
necesaria también extingue la ejecución de la pena, debiéndose tramitar en vía incidental
ante el juez de la causa. Cuando sean varios los sujetos pasivos y cada uno pueda ejercer por
sí mismo la facultad de perdonar al autor o partícipe del delito, el perdón surtirá efecto sólo
por cuanto concierne a quien lo otorga. En este caso, para dejar extinguida la pretensión
punitiva o la potestad de ejecutar las consecuencias jurídicas del delito, se requerirá el
perdón de todos los sujetos pasivos, otorgado por sí mismos o por sus representantes
legítimos, facultados para ello.
Artículo 109.- La prescripción extingue la acción penal y las sanciones, es personal
y, para que opere, bastará el transcurso del tiempo señalado por la ley.
Artículo 110.- La prescripción será declarada de oficio o a petición de parte y será
resuelta en cualquier etapa del procedimiento.
Artículo 111.- Los términos para la prescripción de la acción penal serán continuos
y se contarán a partir de que:
I. Se consumó el delito, si fuere instantáneo;
II. Se llevó a cabo la última conducta, tratándose de delito continuado;
III.Cesó la consumación en caso de delito permanente; o
IV.Nació la acción persecutoria, si se trata de tentativa. En los casos de concurso
real de delitos, los plazos para la prescripción de la pretensión punitiva
empezarán a correr simultáneamente y prescribirán separadamente para cada
uno de ellos. En el concurso ideal, la pretensión punitiva prescribirá conforme a
las reglas para el delito que merezca la pena mayor.
Artículo 112.- A excepción de su tentativa, son imprescriptibles todos los delitos
calificados como graves, según lo dispuesto en el Código de Procedimientos
Penales????. En los demás, la acción persecutoria prescribirá en un plazo igual
al término medio aritmético de la sanción privativa de libertad
correspondiente al delito; pero en ningún caso será menor de tres años.
Artículo 113.- La acción persecutoria prescribirá en seis meses cuando el delito se sancione
sólo con multa o alternativamente. En este último caso, se atenderá a la prescripción de
la privativa de libertad. Lo mismo se observará cuando corresponda alguna otra sanción
accesoria.
Artículo 114.- Si el delito sólo mereciere destitución, suspensión, privación de derechos o
inhabilitación, la prescripción se consumará en el término de dos años.
Artículo 115.- El derecho para formular la querella prescribirá en un año a partir del día en
que la parte ofendida tenga conocimiento del delito y, en tres años, independientemente
de esta circunstancia.
Artículo 116.- Cuando para ejercitar o continuar una acción persecutoria sea necesaria
declaración de autoridad competente, la prescripción comenzará a correr hasta que se
haya satisfecho este requisito o al día siguiente de aquel en que cese la inmunidad.
Artículo 117.- La prescripción de la acción persecutoria se interrumpirá por las actuaciones
que se practiquen en la investigación del delito aunque, por ignorar quienes sean los
delincuentes, no se practiquen diligencias contra persona determinada. También
interrumpirán la prescripción las actuaciones que se practiquen con motivo de la
extradición o requerimiento de entrega del inculpado que haga formalmente el Ministerio
Público. Si se dejare de actuar, la prescripción comenzará a contarse de nuevo desde el
día siguiente a la última diligencia. La prescripción se interrumpirá igualmente cuando el
inculpado cometiere un nuevo delito.
Artículo 118.- Lo previsto en el artículo anterior no se aplicará en caso de que las diligencias
comenzaren a practicarse después de transcurrida la tercera parte del plazo de
prescripción. Ésta continuará y no podrá ser interrumpida sino por la aprehensión del
indiciado.
Artículo 119.- Los términos para la prescripción de las sanciones serán continuos.
Principiarán a correr desde el día siguiente a aquel en que el sentenciado se sustraiga a la
acción de la justicia, si fueren restrictivas o privativas de libertad; y si no lo son, desde la
fecha en que cause ejecutoria la sentencia.
Artículo 120.- La sanción privativa de libertad prescribirá en un lapso igual al fijado en la
condena, pero no podrá ser inferior a tres años.
Artículo 121.- La prescripción de las sanciones privativas de libertad se interrumpirá por la
aprehensión del sentenciado o por la comisión, por parte de éste, de un nuevo delito. No
corre la prescripción cuando exista obstáculo jurídico para ejecutar la sanción impuesta.
Artículo 122.- La sanción de multa prescribirá en un año. Se interrumpirá la prescripción por
cualquier acto de la autoridad competente tendiente a hacerla efectiva y comenzará a
correr, nuevamente, desde el día siguiente al último acto realizado.
Artículo 123.- La sanción pecuniaria de reparación del daño prescribirá en cinco años. Se
interrumpe la prescripción por cualquier acto tendiente a hacerla efectiva y comenzará a
correr, nuevamente, desde el día siguiente al último acto realizado.
Artículo 124.- La acción de reparación del daño que se exija a terceros, así como el derecho
para pedir la ejecución de la sentencia irrevocable en que se declare tal obligación, se
extinguirán conforme a los términos y por los medios establecidos en los Códigos Civil y
de Comercio. Para el comienzo del término, se estará a lo dispuesto en este código.
Artículo 125.- Las demás sanciones prescribirán en un término igual al de su duración y las
que no tengan temporalidad prescribirán en dos años.

También podría gustarte