Supranacionalidad
La supranacionalidad es un sistema político en el cual determinados Estados ceden parte de sus atribuciones de gobierno (en mayor o menor medida, dependiendo del grado de supranacionalidad) a organismos internacionales que afectan a más de una nación. Uno de los objetivos de los gobiernos supranacionales desde el punto de vista del globalismo neoliberal es la internacionalización de la economía, la implantación de sistemas monetarios supranacionales, etc. , aunque se pueden tener otros objetivos, como la regulación de las transacciones internacionales y la preservación de los derechos humanos, el medio ambiente y otros objetivos similares.
Es importante diferenciar el término nación de Estado, ya que el primero tiene un sentido más bien cultural e histórico y el segundo tiene que ver con las estructuras gubernamentales que pueden tener una nación o un conjunto de naciones.
La supranacionalidad se advierte especialmente en que las decisiones de los organismos no necesitan ser refrendadas por los Estados para entrar en vigor (a diferencia de los tratados internacionales clásicos).
El caso de ESPAÑA y los demás
La Unión Europea es la única organización internacional que, en la actualidad, es considerada una organización supranacional. Esto es posible gracias a las llamadas Comunidades Europeas, uno de los tres pilares de la Unión y el único con carácter supranacional.[1] Las decisiones tomadas en el seno de sus instituciones —incluso aquellas que se han tomado por mayoría— no pueden ser revocadas por los estados miembros. De esta forma, las normas tienen prioridad sobre el derecho nacional y deben ser aplicadas: son vinculantes en cuanto a sus objetivos, aunque, en ocasiones, se deje libertad a los Estados miembros en cuanto a la forma de su aplicación. Por ello, se dice que en las Comunidades Europeas hay cesión de soberanía, lo que es la característica más neta de la supranacionalidad.
Los otros dos pilares de la Unión se organizan de forma intergubernamental, es decir que los estados guardan la última palabra: las decisiones se han de tomar por unanimidad.
Referencias
- ↑ «Los fundadores de la UE». Deutsche Welle 20.03.2007. 2007. Consultado el 21 de marzo de 2008.