Caravaggio, el pintor de los cuadros desaparecidos
Los vaivenes de la vida criminal que llevó el artista italiano y el olvido qué sufrió su obra durante varios siglos hicieron que muchos de sus lienzos se perdiesen y que periódicamente algunos reaparezcan donde nadie los esperaba
Caravaggio (Milán, 1571-Porto Ercole, 1610), el gran artista del Barroco y de la Contrarreforma, fue un pintor muy apreciado en su época, cuyos servicios se disputaban nobles y cardenales, que encima le ayudaban a salir de todos los líos en los que se metía. Porque además de un creador que revolucionó la historia del arte, Caravaggio, seudónimo de Michelangelo Merisi, fue un asesino pendenciero ―algunos biógrafos creen que incluso llegó a ser un proxeneta― que tuvo que huir varias veces para evitar la cárcel. Tras su muerte, su obra cayó en el olvido, aunque fue recuperada en los años cincuenta del siglo pasado por el crítico de arte y profesor italiano Roberto Longhi. La combinación de vida criminal y olvido ha hecho que muchas pinturas se perdiesen a lo largo de la historia: la obra y la vida de Caravaggio se pueden contar también a través de sus cuadros desaparecidos.