Rafal Nadal, retirado del tenis el mes pasado, ha admitido que "durante 30 a�os" transmiti� al mundo una imagen que "no siempre" reflejaba lo que sent�a en su interior.
"Sinceramente, estaba nervioso antes de cada partido, eso nunca te abandona. Todas las noches antes de un partido, me acostaba sintiendo que pod�a perder (�tambi�n al despertarme por la ma�ana!). En el tenis, las diferencias entre jugadores son muy ajustadas y entre rivales a�n m�s. Cuando sales a la pista, puede pasar cualquier cosa, por tanto, todos tus sentidos deben estar bien alerta. Esa sensaci�n de fuego interior, los nervios, la adrenalina de salir y ver una pista llena, es una sensaci�n muy dif�cil de describir", ha a�adido.
"Es una sensaci�n que solo unos pocos pueden entender", expresa el jugador espa�ol en una carta abierta titulada 'El regalo', publicada en 'The Players' Tribune', un medio que proporciona a los deportistas una comunicaci�n directa con sus aficionados.
"Todav�a habr� esos momentos Jugando exhibiciones y quiz�s en otros deportes. Siempre competir� y tratar� de dar lo mejor que pueda, pero no ser� la misma sensaci�n que caminar delante de los aficionados en cualquier pista".
Nadal confiesa que durante la mayor parte de su carrera supo "controlar las emociones, con una excepci�n".
"El dolor f�sico era algo a lo que estaba muy acostumbrado, pero hubo momentos en la pista en que ten�a problemas para controlar la respiraci�n y no pod�a jugar a mi mejor nivel. No tengo problema en admitirlo ahora", se�ala.
"Despu�s de todo, somos seres humanos, no superh�roes. El jugador que ves en el centro de la pista con un trofeo es una persona; agotada, aliviada, feliz, agradecida, pero s�lo una persona. Afortunadamente, no llegu� al punto de no poder controlar cosas como la ansiedad, pero todos los jugadores pasan por momentos de dificultad para controlar la mente y cuando eso sucede, es dif�cil tener el control total de tu juego", contin�a.
"La mayor�a de las veces no ganas el torneo en el que participas. No importa qui�n seas, al final de muchas semanas, has perdido. La vida real es lo mismo. Aprendes a vivir con los momentos de alegr�a y los momentos de dolor, y tratas de tratarlos de la misma manera. En los momentos buenos nunca pens� que era Superman, y en los momentos malos, nunca pens� que fuera un fracaso".
Tras repasar los consejos que recibi� de su familia, en particular de su padre, el ganador de 22 Grand Slams destaca que nunca le impuls� "el odio" hacia sus rivales, "sino un profundo respeto y admiraci�n".
"Simplemente intentaba despertarme cada ma�ana y mejorar un poco para poder seguirles el ritmo. �No siempre funcionaba! Pero lo intentaba... Siempre lo intentaba. Durante m�s de 30 a�os he dado todo lo que he podido a este deporte. A cambio, recib� alegr�a y felicidad. Alegr�a y felicidad, amor y amistad, y mucho m�s", dice el jugador.