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Cómo Envejecer como un Gurú: Ninguna
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Cómo Envejecer como un Gurú: Ninguna
Libro electrónico138 páginas1 hora

Cómo Envejecer como un Gurú: Ninguna

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Información de este libro electrónico

Con el envejecimiento, independientemente de la etapa de la vida de la que estamos hablando, se está produciendo una metamorfosis. En verdad, asusta al ser dentro de todos y cada uno de nosotros. ¿Por qué? Porque no sabemos cómo hacer esto llamado envejecimiento. Preferiríamos practicar la NEGACIÓN probada y verdadera. ¿Quién quiere admitir a sí mismos, o a cualquier otra persona, el grado en que se sienten impotentes e indefensos sobre lo que les está sucediendo? Um, como, nadie! Envejecer como un gurú: ¿quién soy yo? Es una asimilación de blogs escritos en 2017 sobre todos los aspectos de la vida a medida que envejecemos. Te encontrarás revelado a través de muchos de los temas cubiertos de manera brillante y sensible por el Dr. Rosie. Experimentará alivio al saber que no está solo, y verá el humor y la humildad del envejecimiento diario como un gurú. Quien yo ?!

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento14 jun 2020
ISBN9781071550113
Cómo Envejecer como un Gurú: Ninguna

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    Cómo Envejecer como un Gurú - Dr. Rosie Kuhn

    Envejecer como un gurú... ¿Quién soy yo?

    Por Rosie Kuhn

    Dedicación

    Dedico este libro a todos los seres humanos. Todos somos gurús que envejecen.

    Tabla de contenido

    1. Introducción

    2. ¿Es tan bueno como se pone?

    3. Si yo, no fuera yo

    4. El Soñador Envejecido – El Soñador Eterno

    5. Mayoría de edad: independientemente de la edad

    6. Ah, malestar

    7. Siéntate y relájate: listo para despegar

    8. Discernir la esencia de la vida

    9. Cuanto más viejo  soy con más suerte me siento

    10. Víctimas de las circunstancias de la vida... ¡o no!

    11. El camino de la anticipación bien usado

    12. ¿Me gustará esto cuando termine?

    13. Cambiadores de juego: suceden cuando menos se espera

    14. Tu vida es un testamento para cambiar

    15. Envejecimiento y cambio

    16. Envejecimiento: la perfección que se desarrolla

    17. Los perros viejos aprenden nuevos trucos

    18. A nadie le gusta la madre naturaleza

    19. Ageismo: ¡eso es una locura!

    20. Morir: la gran aventura final

    21. La felicidad es un trabajo interno

    22. ¿Amo mi vida?

    23. Lo que he aprendido hasta ahora en mi viaje espiritual

    24. Estoy agradecido por mis dientes

    25. No hay paz en la tierra

    26. Envejecimiento: ¿cuál es el punto?

    27. Terco y enojado - ¿Quién soy yo?

    28. La agonía y la angustia de la resistencia implacable

    29. La potencialidad de no peros

    30. Puedes poner tu fe en eso

    31. Hacer el trabajo sin intentarlo

    32. Gurús cotidianos entre nosotros

    33. Una coma, no un punto

    Envejecer como un gurú: ¿quién soy yo?

    Introducción

    Envejecimiento: ¿Quién soy yo?

    Si tienes la edad suficiente para leer este libro, tienes la edad suficiente para entender que has estado participando en el proceso de envejecimiento mucho antes de que tus pequeños pies aterrizaran en el planeta. Experimentó el proceso de envejecimiento cuando perdió sus primeros dientes alrededor de los seis años. Seis años más tarde, comenzó a desarrollar músculos, senos, vello púbico y crecimiento. Las hormonas invisibles comenzaron a crear sensaciones que estaban mucho más allá de su capacidad de control. Muchos de nosotros, esperamos estos cambios. ¡Pero otros, no tanto!

    A mediados de los años treinta y cuarenta, comienzas a notar una arruga o dos, y las canas comienzan a aparecer en los lugares más peculiares. Quizás el reloj biológico esté corriendo, presionando sobre usted la necesidad de comenzar a hacer bebés, si aún no lo ha hecho.

    A finales de los años cuarenta y hasta los cincuenta, su piel comienza a aflojarse y ponerse crepé. Las tetas se hunden, y lo mismo ocurre con todo lo demás. Las erecciones son más difíciles, y también lo es orinar. Poco a poco experimentas cambios físicos que escuchaste venir, pero siempre creíste que nunca te sucederían. ¿Quién, yo?

    Recientemente di una charla en el Orcas Island Senior Center sobre el envejecimiento y la independencia. En esa hora y media, los que asistieron comenzaron a compartir cómo era realmente dentro de sí mismos y cómo estaban participando, voluntariamente o no, en el proceso de envejecimiento. ¡Nadie minó palabras o usó un lenguaje que aligere la realidad de que la vida, tal como la conocíamos, había cambiado drásticamente, y que no hay forma de salir de este proceso de envejecimiento!

    Lo que se compartió fue el grado de negación en el que muchos de nosotros vivimos: el tipo de negación que nos priva de la libertad de elección. Lo que también se compartió fue el grado en que muchos de nosotros nos aislamos, porque creemos que somos los únicos que estamos pasando por los trastornos emocionales del proceso de envejecimiento.

    Cuando miramos a nuestro alrededor cómo los demás están envejeciendo, parece que todos los demás lo manejan. Una persona ofreció al grupo; "Me temo que si comparto cómo es realmente el envejecimiento para mí, la gente dirá que hay algo definitivamente malo en mí. Así que me aíslo. No quiero que la gente me vea como viejo y decrépito. Me imagino que  -¡Lo fingiré hasta que lo logre!-

    Por lo tanto, considere a cada individuo, especialmente a las mujeres en su edad adulta temprana (30 y 40 años), que utilizan cirugía plástica para evitar y distraerse de la progresión natural y la evolución de su ser, físico y de otro tipo. Cada uno de nosotros, a nuestra manera, intenta fingirlo hasta que lo logran. Quieren mantener a raya la inevitable aniquilación del YO que nos imaginamos ser. Pero, ¿quiénes somos realmente? ¿Quizás ya somos quienes pretendemos ser? ¿Cómo podemos saber a menos que exploremos un poco quién está dentro de esta bolsa de huesos, si no es que ya lo hizo?

    Con el envejecimiento, independientemente de la etapa de la vida de la que estamos hablando, se está produciendo un proceso de metamorfosis. En verdad, asusta a Bejeesus de todos y cada uno de nosotros. ¿Por qué? Porque no sabemos cómo hacer esto llamado vida. Preferiríamos practicar la NEGACIÓN probada y verdadera: Ni siquiera sé que estoy mintiendo. ¿Quién quiere admitir ante ellos mismos, o ante cualquier otra persona, el grado en que se sienten impotentes e indefensos ante los cambios que se les ocurren? Um, como, nadie!

    Johnny Depp dice: No sé cómo ser un adulto, nunca lo había hecho antes. Ninguno de nosotros sabe cómo envejecer. Incluso aquellos que se consideran expertos en el campo, también tienen que tener su propia experiencia personal y directa del envejecimiento, para bien o para mal, para comprender y conocer verdaderamente el envejecimiento.

    Cada uno de nosotros está aquí para tener la oportunidad de descubrir quiénes somos a medida que hacemos la transición a través de cada etapa de desarrollo del envejecimiento. ¡No estás solo! Y sin embargo, puede parecer que esta etapa de envejecimiento no va a terminar bien, ¡la verdad es que será lo que hagas de ella!

    El otro día, en una segunda reunión de personas lo suficientemente curiosas como para continuar la discusión sobre el envejecimiento en el Centro de Mayores, uno de los participantes declaró: No es una aventura si no puedes morir haciéndolo. ¿Quién está preparado para una aventura? De acuerdo, la mayoría de nosotros no estamos tan entusiasmados con la idea de que la muerte es posible cuando nos enfrentamos a una aventura. Sin embargo, en esta aventura particular llamada Tu Vida, la muerte no es solo una posibilidad, es inevitable.

    Lo que quiero para cada individuo en el planeta es experimentar el cumplimiento de su espíritu humano. Cultivar la conciencia de que cada uno de nosotros tiene la capacidad de empoderarnos para hacer que eso suceda, bueno, esa es una responsabilidad que viene con la experiencia, a través del envejecimiento.

    Ninguno de nosotros saldrá de aquí con nuestros trajes humanos puestos. Es como si estuviéramos en un viaje de negocios, aquí en la Tierra, para hacer el trabajo. Luego, nos vamos a casa. Pero, ¿cuál es el trabajo por hacer? No tengo dudas de que sabes lo que tienes que hacer. Y, bueno, puedes decidir cómo procederás, dadas las tareas que tienes entre manos.

    ¿A dónde vamos desde aquí?

    Lo que encontrará en las portadas de este libro son cuentos, narraciones y anécdotas sobre personas y etapas de sus vidas. Cada uno se enfoca en un aspecto particular de la vida a medida que envejecemos. La intención de este libro es proporcionar una perspectiva y un estímulo para examinar y explorar quién es usted en medio de esta experiencia humana, independientemente de dónde se encuentre en el proceso de envejecimiento. Este no es un libro de instrucciones, per se. Es más un libro de cómo es y cómo puede ser.

    Claro, puede parecer que estamos tratando de hacer limonada con limones, pero ¿por qué no? Tenemos todos los limones del mundo, ¡tal vez podamos hacer un pastel o dos mientras lo hacemos!

    Me encanta el dicho de John Lennon: Todo es genial al final. ¡Si no es genial, no es el final! ¡Qué gran recordatorio!

    Envejecer como un gurú requiere que nos familiaricemos con quién está dentro de estos hermosos vehículos de la vida: nuestros cuerpos. Requiere que veamos el humor y la alegría que nos acompaña. Y, para envejecer como un gurú requiere la práctica de ver que, como siempre decía mi padre hasta que murió a los 91 años, ¡cada día mejora!

    ¿Es esto tan bueno como es posible?

    La mayoría de nosotros esperamos que cuando envejezcamos disminuiremos de todas las formas posibles. Nos mantenemos firmes en la creencia de que así es como se supone que es, y caminamos ciegamente por el camino del declive. Pero si esa es la verdad, ¿por qué algunas personas realmente prosperan a medida que envejecen? ¿Qué pasa con eso?

    Al hacer un inventario de lo bueno, lo malo, lo bello y lo feo a veces, mientras conduzco por la carretera, veo autos viejos en perfecto estado, y me pregunto cómo es que esas cosas aún funcionan. Obviamente, alguien los cuida muy bien, ¡así es como! Alguien adora y acelera su máquina bien engrasada para mantenerla así. Admiro a esas personas por su sueño, su visión y sus pasiones: mantiene su auto luciendo genial y los mantiene desafiados y entusiasmados con la vida.

    Nuestros cuerpos son muy parecidos a esos autos. Creo que la mayoría de nosotros tenemos muchas más millas disponibles, especialmente porque muchas de nuestras partes se pueden reemplazar. No requiere mucho ajuste; solo un poco de pedal a medalla de vez en cuando, para evitar que las tuberías se obstruyan. Entonces, ¿qué nos mantiene en la mentalidad de permitir oxidarnos, por así decirlo, y terminar en el depósito de chatarra?, ese no es un pensamiento feliz, ¿verdad?

    Nos gustaría creer que la transformación milagrosa nos restaurará a nuestro brillo y belleza originales. Sin embargo, lamentablemente, incluso los milagros requieren cierto esfuerzo, por lo que la mayoría de nosotros decidimos que ya no queremos hacerlo.

    El manual de mecánica

    En estos

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