Conferencia de Bandung
Conferencia de Bandung
INFORMACION E HISTORIA, S L
PRESIDENTE: lsabel de Azcrale.
ADMINISTRADOR UNICO: Juan Toms de Satas,
DIRECTOR: David Solar.
SUBDIRECTOR: Javier Villalba,
IMPRIMET Rvadeneyra, S. A
DISTRIBUYE: INDISA Bufin Gonzlez, 34 bis
Telfono: 5BO 31 00. 28037 N/adrid.
P.V,P. Canarlas: 320 ptas,
ISBN: 84-7679-271-9
327 1094.
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/Telefnica
CUADERI\OS DEL
Coordinacin:
1. La historia
de hoy. o
2.
3. La sociedad
.4.
Las revolu'
ciones cientficas.i5. Orgenes-de la guena fra.o6. La Espaa aislada-o7. Mxico: de Lzarc Crdenas a
hoy. o $. La guerra de Coiea. o 9, Las-ciudades. o 10. La ONU. o 11. La Espaa del-exs. o 12' El Aparl
hed. o t3. Kejrnes y las bases del pensamieirto econmico contemporneo. o 14. El reparto del Asia otomana. o 15. Alemania 1949-989: o 16. USA, l caza de brujas. o 17. Los padies de Europa. o 18. Africa: hibus y Estados, el mito
de las naciones africanas. o 19. Espaa: nMr. Marshallr. o 20. Indochina: de Dien Bien fu q l-o-s jm-eres rojos. e 21. Hollywood: el mundo del-cine. o22. La descolonizacin de Asia. o 23. Italia 1944.1992. o 24. Nas'
rs.o25. Blgica.o26. Bandung.o27. Militaresypoltica.r28. Elperonitto.o29. Tito.-o30. ElJapndeMcA*'
hur. o 31. H esorden monetario. o 32. La descolnizacin de Africa. r 33. De Gaulle. o 34. Canad. o 35. Mujer y
trabajo. r 36. Las guenas de Israel. o 37, Hungra 1956. o 38. Ghandi. o 39. El deporte de-masas. o 40._-La Cuba de
Cashb. o 41. EI Ul-ster. o 42. LaAldea Global.-Mass media, las nuevas comunicaciones. o 43. China, de Mao a la Re'
volucin cultural. o 44. Espaa: la emigracin a Europa. o 45. El acomodo vaticas. o 46. Kennedy, o -47 . El feminis'
,6. o 48. El tratado de'Roma. o 49. Argelia, d la independencia a la ilusin frustrada. o 50. Bad Godes'
berg. o 1. Nehru. o 52. Kruschev. o 53. Espaa, la revolucih del 600. o 54. El ao 1968. o 55. USA, el sndrome
del-Vietnam. o 56, Grecia, Z. o 57. El fenmeno Beatles. o 58. Praga 1968. o 59. El fin del mito del Che. o 60' W.
Brandt. o 61. Hindes y musulmanes. o 62. Portugat 1975. o 63. El Chile de Allende. o 64. La violencia-poltica en Eu'
ropa. o 65. El desanol[o del subdesanollo. o 66. Filipinas. o 67, Espqa, la muerte de Franco. 68. La URSS deBez'
nev. o 9. La crisis del pehleo. o 70. La Gran Breta de MargarefThatcher. o 71. El Japn a9!ua! o 72. La transi.
cin espaola. o 73. USA en la poca Reagan. o 74. Olof Palme, la socialdemocracia sueca. o 75. Alternativos y ver'
s5. o 76. Amrica, la crisis del iaudillismo. o 77. Los pases de nueva industuializacin. o 78. China, el postmaos'
mo. o 79. La crisis de los pases del Este, el desanollo de Solidarnosc en Polonia. o 80. Peru, Sendero Lumino'
so. r 81. La lglesia de Woytila. o 82. El lrn de Jomeini. o 83. La Espaa del 23 F. o 84. Berlinguer, el eluoi.omunis'
mo. o 85. Algnistn. o 86. Espaa 1982-1993, el PSOE en el poder. L 87. Progresismo e integrismo. o 88_. El peligro
nuclear/la ma--ncha de ozono, o'89. Gorbachov, la perestuoika y la ruptura de la URSS. o 90. La sociedad -postindus'
hial, o 91, La guena del Golfo. o 92. Los cambios-en la Europ del Este: 1989. o 93. La OTAN hoy.-o !4. La unifica'
cin alemana. gS. El SIOR. o 96. Yugoslavia. o 97. Hambr y revolucin en el cuemo de Africa. o 98. Las ltimas migaciones. o 99. Clinton. o 100. La Espaa plural.
Ii\DICT
6
Lderes v padres fundadores
del anticolonialismo
7
{froasiatismo y coexistencia
pacfica
o
Los antecedentes
10
Las vsperas
12
La Conferencia
t5
E1 Comunicado Final
20
Los principios de Bandung
22
Los inicios del No Alineamiento
26
El neutralismo positivo
27
El ]lovimiento de los
No Alineados
30
El final de un capiulo
31
Bibliografa
Manifestantes desfrlan por las calles de Pekn portando rctratos de lvlao duante larcvolucin crultural, 7967
La Confercncia
de Bandung
Por Roberto Mesa
Catedrtico de Relaciones Internacionales
Universidad Complutense de Madrid
na (1 de octubre de
En Lai. Este es otro de los hombres que buscarn una lercera va para los pueblos que,
en aquellos aos, no queran someterse-a la
hegemona de las dos superpotencias, Estado Unidos y la Unin de Repblicas Socialistas Soviticas.
Hoy da, nadie discute que la revolucin
colonial comenz en Asia. El27 de diciembre de 1949 -las fechas se sucedan con
una rapidez vertiginosa- el furno de la indepenencia llegaba a Indonesia, las. antigus Indias Neerlandesas. Ahmed Sukarno
ra, en esta ocasin, elhombre que arranc
la independencia de su pas de las manos
de la Corona holandesa.
El calendario de las liberaciones produca
escalofros, sobre todo en las espaldas de los
poderes metropolitanos. A las ya.enuncia-
pendecias d los aos sesenta resulta ocioso: prcticamente, todo el continente africano, con dolorosas salvedades bien conoci-
Gandhi y la no violencia
Dejadme plantearos cinco
axiomas de la no violencia, tal
como yo la entiendo:
1. La no violencia implica
un esfuerzo de autopurifica-
sea
humanamente posible.
2. La fuerza de la no violencia es rigurosamente pro-
porcional, no a la voluntad,
sino a la capacidad en la que
se encuentra de recurrir a la
violencia el adepto de la no
violencia.
excepcin, superior
4. Ia no violencia
excluye
Ia
derrota ms cierta es el
fin de la violencia.
5. El objetivo {inalde la no
violencia es la victoria; en tan-
Afroasiatismo y coexistencia
pacfica
Los pueblos delTercer Mundo, recinllegados a la independencia, desde el mismo
momento en que enarbolan sus propias
banderas ingresan en la historia con n marcado sentido de su protagonismo. Ya en el
temprano ao 1949 tiene lugar la Conferencia de Nueva Delhi, en la que se renen los
nuevos Estados asiticos, a los que se aadieron Australia, Egipto y Etiop.
Cul era su aspiracin, quiz no todava
claramente expresada? Haba un punto de
la rivalidad
entre bloques y se autodefina como una tercera fuerza dotada de funciones conciliadoras. Por
lo dems, es oportuno
subrayar que, en fin de
cuentas, se trata de una
vieja polmica, al menos
en el sentido doctrinal.
Polmica que finalizara
cuando, el24 de octubre
de 1970, la Asamblea
General de las Naciones
Unidas incorporase aquellos principios alordenamiento jurdico internacional.
Y lo hace con gran solemnidad al aprobar la Resolucin 2625 (XXV), de muy expresivo tiio: Declaracin sobre los principios de Derecho Internacional referentes a
las relaciones de amistad y cooperacin en'
tre los Estados de conformidad con la Carta
de las Naciones Unidas. Resolucin histrica que proclama, entre otros, los siguienles
printipis: El principio de que los Estados,
en sui relaciones internacionales, se abstendrn de recurrir a la amenaza o al uso de la
fuerza contra la integridad territorial o la independencia poltica de cualquier Estado.
O,- ms tajantemente: El principio de la
igualdad de derechos y de la libre determinacin de los pueblos. Se enuncian principios de ius cogens, de carcter imperativo
para todos los-miembros de la comunidad
internacional. Pero, en los aos cincuenta,
todava se estaba muy lejos de llegar a tan
rotundas afirmaciones.
brevolaba
Los antecedentes
A la ya citada Conferencia de Nueva Delhi (1949) y alTraiado de Pekn (1954), han
de aadirse otros hitos que jalonan el camino hacia elencuentro de Bandung. As, tuvo
una relativa importancia, signo de los tiempos que se aproximaban, la constitucin de
un grupo informal en el seno de la Asamblea Gneral de la ONU, que actuaba con
una relativa disciplina de voto. Estaba constituido por doce pases afroasiticos: Birmania, India, Irn, Iraq, Lbano, Afganistn, Siria, Yemen, Egipto, Arabia Saud, Indonesia
y Ceiln. Fue un banco de ensayos que tuvo
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Chu En Lai, mano derccha de lrlao y=ministuo de Asuntos Exteiores del gobierno chino durante largos ao.
Abajo, el presidente Sukamo, aftfice de la independencia de Indoneia del imperio holands, o PAS
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Habra que agregar, aunque la observacin result suprflua, que las dos grandes
capitales coloniales europeas, Pars y Londres, contemplaban con escasas simpatas
estos preparativos. Francia era muy sensible
a las actuaciones del grupo afroasitico en
la ONU, incansable en el tema de la independencia del Magreb, an en sus manos.
Estados Unidos, por su parte, tras la penosa
experiencia coreana, volcaba an ms sus
infereses en la vertiente asitica de su poltica exterior. En plena guerra fra, la percep-
cin de Occidente ante la anunciada Conferencia de Bandung se limitaba a una lectura reduccionista y sumamente ideologizada: el Tercer Mundo caera indefectiblemente en manos comunistas si no se actuaba
enrgicamente y con mano dura.
Las vsperas
cmo se materializaba la
En esta ptica,
percepcin de Occidente? El historiador
francs H. Grimal reproduce este expresivo
texto publicado por The EconomLsf, a p_rincipios del mes de enero de 7954: La Conferencia promete ser histrica en sus concepciones, incierta en su ejecucin y poco
satisfactoria en sus efectos... En esta orquesta hay instrumentos tan diferentes que pocos son aquellos que pueden esperar aplausos. Sera temerario pensar que la Conferencia pueda ser algo ms que incoherente y
vana retrica. AI carecer absolutamente de
finalidad positiva, est obligada a sujetarse
a un aspecto negativo. El
t2
la Conferencia actuara
en Comisiones. Se constituyeron tres: una, poltica; otra, de cooperacin econmica; y la tercera, de carcter cultural. Las hes fueron presididas por indonesios,
nacionales del pas anfitrin: el primer minisko
y los ministros de Economa y de Cultura.
Desde el 18 al 24 de
abril de 1955, una semana para los manuales de
Historia, se gest el afroasiatismo. Cuando
el da 18 se inaugura la Conferencia, en sus
gradas toman asiento los representantes de
uevos Estados y de viejos pueblos. Por parte de Africa: Egipto, Etiopa, Libia, Sudn y
Ghana (que an conservaba el nombre colonial de Costa de Oro). Las delegaciones
asiticas representaban a Afganistn, Arabia
Saud, Birmania, CamboYa -KamPuchea-, Ceiln -Sri Lanka-, China PoPular, Filipinas, India, Indonesia, Iraq, Irn, Ja-
pn, Jrdania, Laos, Lbano, Ngpal, Pakistn, Siria, Tailandia, Turqua, Vietnam del
Norte, Vietnam del Sur -separados por la
reciente firma de los Acuerdos de Ginebra,
en 1954- y Yemen.
La Conferencia
La simple lectura de la lista de participantes, provoca ya algunas observaciones que
van ms all de lo puramente formal. En primer lugar, la escasa presencia africana: en
1955, ius pueblos an se hallan en lucha
contra los poderes metropolitanos europeos
que se resisten a abandonar sus Imperios:
rancia, Gran Bretaa, Blgica y Portugal,
fundamentalmente. Africa todava est combatiendo por su futuro. Este hecho repercuti notablemente en el espritu. que se mantuvo en Bandung, impregnado por los principios bsicos de1 pensamiento y de la filosfa asiticos. Hegemona que, entendida
en su sentido positivo, se ver reafirmada
por el protagonismo de tres grandes_pases
v de ss resectivos lderes: India y Nehru;
China Popuiar y Chu En Lai; Indonesia y
Sukarno. Pero, an podra apuntarse otro
rasgo definitorio de Bandung, entonces po-
Mao habla a los dirtgentes del Partido (pintura de Luo Kung-Liu, 1950). Una muestra
de mitificacin
de conciencia ms elevado de
los pueblos
del mundo. en l
incluso
si adviniese despus
Ixnntes.
ms la guena.
la
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aadidura,
-en'
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frent dieron pruebas de Ju talla de poltico mundial. Muri en 1964.
El Comunicado Final
Por Comunicado Final debe entenderse
tanto el documento que lleva este nombre,
como otros dos textos anejos que, separadamente, tambin forman parte de 1.'Uno
de ellos expresa una rofunda condena del
racismo y se dirige expresamente contra la
Repblica Sudafricana y su odiosa prctica
del apartheid. Elotro rccogelas inqietudes
generales ante los problemas planteados por
el peligro de las armas nucleres.
Sin embargo, es el Comunicado Final en
s mismo el que ha pasado a la historia. Se
trata de un texto denso y ponderado que,
gracias a la habilidad de sus redactores,'fue
capaz de aunar todas las voluntades v consensos. Una exgesis del mismo, a bstantes aos de distancia de su redaccin, revela una equiliblqda dosificacin entre los problemas de 1955 y los proyectos utpicos de
una sociedad internacionalque se qera diferente. Muy simplistamente, el Cmunicado Final de Bandung podra caracterizarse
!5
ASIA EN 1955
1.
Lbano
2.
lsrael
3.
Baharain
4.
Kuwait
5.
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Territorios reclamados
por China
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(lndep, 1947) Catc
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Ceremonia de la fundacin del Estado, leo del pintor Tung Hai-wen (aniba). Guardias toios
rccitan el librc de los Pensamientos'de Mao-dwante lis aos de Iarcvolucin cultural
t7
A rengln seguido, en
la Tercera Seccin se
atenda a los Derechos
ciones: Cooperacin
econmica; Cooperacin cultural; Derechos
pases
l8
La Cooperacin cultural, Segunda Seccin, era percibida como uno de los medios
ms poderosos de entendimiento entre las
naciones. Consecuentemente, el colonialismo se presentaba como un obstculo insalvable para el libre desanollo de los pueblos
afroasiticos. Los objetivos se plateaban
modestamente: cooperacin cultural mediante un enhamado de acuerdos bilaterales con las iniciativas particulares de cada
pas.
se proclamaba como b-
I)lasser y Burguiba en una.otografa to-mada durante los aos sesenta (aniba). El presidente indonesio Su-
kamo duante una reunin con dos de sus ministos en el ao 1945, poco despus de la independencia
l9
ciones examinadas,
integridad tenitorial o la
independencia poltica
de un pas;
8) Solucin de todos
los conflictos por medios
pacficos, tales como la
Bandung pasara a la
historia por dos cuestiones fundamentales. Una,
su radical y contundente
condena del colonialismo. El combate todava
gnero humano.
9) Fomento
de los in-
y de la cooperacin;
10) Respeto de la justicia y de las obliga-
tereses mutuos
cimientos, puede afirmarse, sin ningn gnero de dudas, que la coexistencia u.ffi.u
no fue un mero divertimento de intelectuales de saln, ni tampoco una sutil arma de
penehacin de la guena fra, en su versin
de la guerra ideolgica.
As eran, y continan siendo, los Diez
Principios de Bandung:
1) Respeto de los derechos humanos fundamentales, de conformidad con los fines y
con los principios de la Carta de las Naciones Unidas;
2) Respeto de la soberana y de la integridad tenitorial de todas las naciones;
3) Reconocimiento de la igualdad de todas las razas y de la igualdad de todas las
naciones, grandes y pequeas;
4) No intervencin y no injerencia en los
asuntos internos de los dems pases.
5) Respeto delderecho de toda nacin a
defenderse individual o colectivamente, de
acuerdo con la Carta de las Naciones Uni-
ciones internacionales.
Despus de ta Conferencia
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se lee ms
y en
que
rincn.
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Chu En Lai
Ha sido universalmente reconocido como uno de los ms sagaces diplo'
mticos contemporneos. Nacido en 1898 en el seno de una familia de
mandarines, realizara esfudios universitarios en Tien Tsin y, ms tarde,
en Tokio. En 1919 conocera, como trabajador, Europa. En 1920, figura
Nikita Kruschev y Nixon, durante una visita de ste a la capital sovitica en et ao l9S9
Kruschev y
la coexistencia pacfica
a la
Nuestra aspiracin
sideraciones
de coyuntura y
la que no hay
ni grupos sociales inte-
socialista, en
clases
ta-
ingirindonos
en los
asuntos
internos de los pases capitalistas. Nuestra certeza en la victoria comunista es de un gnero muy distinto. Se basa en
el conocimiento de las leyes
fica,7960.\
23
talinistas, tanto en las democracias populares como en los partidos comunistas occiel espaol, entre
dentales (el francs
ohos). Por silo anterior fuese poco, Tito haba resistido ofertas y tentaciones para inte-
de septiembre, 1961
fic el ocaso de aquellos viejos poderes imperiales; pero, al mismo tiempo, la conversin de Oriente Medio y, por extensin, de
todo elMeditenneo, en uno de los escenarios privilegiados de la guerra fra. De forma
simultnea al desencadenamiento de las
operaciones militares, el presidente Eisenhower y el mariscal Bulganin pusieron fin a la
anacrnica aventura anglo-francesa. La
Casa Blanca desautorizla operacin de sus
dos ms fieles aliados y les neg Ia ayuda
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26
blos afroasiticos ya haban expresado su rechazo a aquella divisin maniquea del mundo, Capitalismo o Comunismo,
que les converta en un
campo de Agramante en
el que los Grandes diriman sus diferencias, al
tiempo que iban acotando sus respectivas zonas
de influencia. Pero 1os
pueblos delTercer Mundo tampoco queran verse reducidos al papel de
simples comparsas, marginados de la direccin de las relaciones internacionales.
El neutralismo positivo
En consecuencia, los pueblos afroasiticos optaron por la neutralidad para hacer
frente a la rivalidad sin cuartelentablada enke los bloques. Pero no un neutralismo
como el de la Confederacin Helvtica o el
de la Repblica de Austria. De aquella opcin, surge elneuhalismo positivo o neuhalismo activo.
Sus pretensiones se consideraron, automticamente como desmedidas o utpicas: por
lo dems, se aada en las cancilleras de la
guena fra, nadie haba invitado al Tercer
Mundo a desempear una funcin de aproximacin o de mediacin entre los dos Grandes; mxime, cuando EE.UU. y la Unin Sovitica lo que queran era, precisamente. ampliar sus zonas hegemnicas sobre los tenitorios de los pueblos afroasiiicos. En la Conferencia celebrada en ElCairo ya se haba observado alguna tensin, que dejaba adivinar
las divisiones ideolgicas que acechaban a
esta nueva modalidad de neutralismo.
Mas, pese a todo, la historia continuaba.
La hora de la descolonizacin llegaba al
continente africano. Circunstancia que propici la celebracin de una serie de conferencias continentales; entre ellas, destaca la
de Accra (abril de 1958). El viento favorable proceda de la emergencia de otro de los
grandes lderes del anticolonialismo, el ghans Kwame N'Krumah, que vendra a unirse a los fundadores del neutralismo activo y
que, junto a otros, inspirara el nacimiento
del panafricanismo, has las huellas de su
*ia.:.:
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*
,,
:{
El presidente yugoslavo Tito en una conferencia de [os Partidos Comunistas celebrada en Berln
Tito y el No Alineamiento
Me llena de orgullo el que
a edificar conjuntamente la poltica de No
empezramos
No Alineamiento,
trazamos
una poltica de paz y cooperacin cuyos valores se han a{ir-
primeros documentos internacionales en los cuales se defini lo que ms tarde iba a ser
conocido como idea y praxis
de la poltica de No Alinemiento.
(Palabras pronunciadas por
elpresidente Tito en la ciudad
de Nueva Delhicon motivo de
cin asamblesta.
Todo se preparaba para un nuevo impulso, bajo designios de mayor envergadura,
El Movimiento de los No
Alineados
El primer da del mes de septiembre de
1961 se abra oficialmente la Conferencia de
Belgrado, base organizativa y piedra angular del movimiento de los pases no alinea-
27
Lenidas Beznev y Fidel Castuo en La Habana duante una visita oficial del pfimero en los aos setenta
pas europeo
El final de un captulo
En el encuentro de Belgrado (1961), la
Conferencia de Bandung cerraba el ciclo
Hart-David, 1973.
Colard, D., Le mouvement des pavs non-aliqns.
La Documentation Franqaise, paris, i981.
Duroselle, J.8., Les nauveaux Etats dans les relatians internatianales, Pars, A. Colin, 1965.
a dcatonisaon, 19 19-1965, prs,
o.
Bffi],r!#
des Deuples
co-
na del colonialismo. Sin su impulso, difcilmente la Asamblea General de la ONU oodra haber declarado: La sujecin de'los
pueblos a una subyugacin, dominacin y
explotacin extranjeras constituye una dnegacin de los derechos humanos fundamentales, es contraria a la Carta de las Naciones Unidas y compromete la causa de la
p4z y de la cooperacin mundiales (Res.
1514/XV, 14 diciembre 7960). Tambin en
Bandung, como ya se ha indicado, se pusieron las bases de la Resolucin 2.625
(XXV), que desarrolla y ampla los principios
generales del Derecho Internacional, dsde
la perspectiva de las relaciones de amistad
y de convivencia pacfica entre los pueblos.
Aunque slo fuese por ello, Bandug haba
merecido la pena.
. Uoy, con un cierto alejamiento y objetividad, cuando Bandung ya es un cpftulo de
la historia contempornea, puede firmarse
sin exageraciones que aquella Conferencia
no fue un encuentro ms en la crnica diplomtica, que la dinmica del No Alineamiento fue bastante ms que una simple tctica reactiva a la coyunfura de la guerra fra.
Hoy, cuando se habla de los cambios en la
sociedad internacional e incluso del advenimienio de un nuevo orden internacional, es
justo reconocer que, entre okos lugares, sus
cimientos se pusieron en Bandung. En aquel
lejano ao 1955, cuando los cond=enados de
la Tiena se pusieron en marcha y rechazaron un orden injusto y arcaico. All, precisamente, se inici el proceso de universalizacin de las relaciones internacionales, aquel
que aspira al establecimiento de la libertad
y de la justicia, en un mundo en paz. Las
utopas nunca envejecen.
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