Ensayo Revolución de Los Gracos

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UNIVERSIDAD COLEGIO MAYOR DE NUESTRA SEORA DEL ROSARIO FACULTAD DE JURISPRUDENCIA MATERIA: DERECHO ROMANO PROFESORES: DR.

CARLOS MEDELLN BECERRA ESTUDIANTE: JUAN DAVID JIMNEZ P.

LA REVOLUCIN DE TIBERIO Y CAYO GRACO


Y EL MOVIMIENTO DEMOCRTICO EN TIEMPOS DE LA DECADENCIA DE LA REPBLICA ROMANA

I.

INTRODUCCIN

En este ensayo me propongo el objetivo pleno de responder a la cuestin En qu sentido podemos entender las influencias de las revoluciones de Tiberio y Cayo Gracoen las circunstancias poltico-sociales del periodo correspondiente al final de la Repblica, y qu causas contextuales mediaron para la aparicin de tales movimientos? A esto he de responder que las revoluciones de Tiberio y Cayo Graco influenciaron de una forma muy determinada en el ordenamiento poltico social de la poca, ya que trajo consigo una nueva visin sobre la soberana plena del poder y sobre quines tenan que ejercerlos, aparte de los muy notables cambios concernientes a las leyes promulgadas para la democratizacin del campo y sus beneficios, tema que trataremos ulteriormente a fondo, hasta el punto en que grandes eruditos y sabios de la contemporaneidad, como DietrichSchwanitz en su libro La Cultura, los han considerado como los grandes precursores romanos del socialismo por causa de su buena labor en favor de la gran masa popular(Schwanitz, 2006, pg. 81). As, es algo imperante aventurarnos en un anlisis profundo, pero a la vez breve, sobre ese periodo de tiempo que comprende los aos desde 146-121 A.C., y observar a la vez la notable influencia que para el futuro tuvo el susodicho levantamiento. En este panorama, es preciso y necesario, para fines de entender las razones por las cuales sucedi lo mencionado, hacer un breve repaso del contexto socio-poltico anterior a la aparicin en la escena pblica de Roma de Tiberio Graco, en el cual observaremos el antecedente de las revoluciones serviles en distintas latitudes del mediterrneo, ms especficamente en Sicilia, las leyes agrarias expedidas con
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anterioridad y ciertos cambios de carcter electoral que precedieron a la revolucin de los Gracos. Inmediatamente despus, nos proponemos analizar la mencionada revolucin en dos partes, en donde vamos en primera instancia a profundizar los acontecimientos acaecidos con Tiberio Graco hasta el momento de su muerte, y momento seguido veremos las acciones de Cayo Graco, el hermano de Tiberio, en las medidas de carcter agrario y aquellas de tinte poltico en contra de la aristocracia senatorial. Por ltimo, daremos nuestras conclusiones, en donde expondremos la importancia y el legado que para la civilizacin romana tuvieron estos hechos.

II.

PRECEDENTES: LAS REVOLUCIONES SERVILES Y EL PROBLEMA AGRARIO

Despus de superar las guerras pnicas y la batalla de Pidna bajo el panorama de la Tercera Guerra Macednica, Roma vivi un tiempo de paz y esplendor, en el cual sus fuerzas expansivas encontraron espacio para su labor, y su fortaleza institucional era cada vez ms cohesionada. Ya no quedaban enemigos de temer, pues todos haban sido vencidos, y las fasces llegaron hasta Asia y su poder monoplico pareca no tener bice alguno. A partir de esto podramos decir que Roma viva una era de oro, en donde se dulcificaban y amenizaban las costumbres y la tenacidad de la organizacin. Esa sola ser la visin exterior de Roma, claro est, por parte de otras culturas como la hebrea1, pero con el inconveniente de no tener en cuenta la crisis interna que viva la Repblica romana, y los mltiples levantamientos que se produjeron a causa de las constante inequidades y malversaciones sociales que tenan que sufrir las clases populares y los ms desfavorecidos como los esclavos. A estas digresiones me han conducido las claras evidencias que podemos encontrar en diferentes textos de primera mano, como las Periocasde Tito Livio en sus dcadas 62-64(Livius, 1993), en la cual este historiador relata detalladamente los eventos sucedidos internamente, en conjuncin con los
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Ver 1 Macabeos, 8: 12-16 [2]

escritos de otro gran historiador, Plutarco, en sus Vidas Paralelas(Plutarco, 1847). De esta forma, el gobierno aristocrtico de Roma llegaba a un punto en el que aquellas personas que lo detentaban eran inamovibles en sus solios generando el disgusto de las clases populares que se sentan que tal exclusin extrema en el gobierno haba generado la inmensa inequidad y disparidad entre las posesiones de unos y otros, adems de ver que las personas que se hallaban en ese poder en el pasado encontraban su fundamento en la defensa de la ciudad en contra de los grandes peligros extranjeros, mas debido a la cesacin de las compaas blicas haban perdido oficio alguno, promulgando desde hace ya algn tiempo la molicie y el ocio en cantidades inadmisibles. As, esta gran inequidad social se present despus de las Guerras Pnica por una razn que sugiere Isaac Asimov(Asimov, 2000, pgs. 146-150), en la cual menciona que antes de estas guerras los campesinos trabajaban en parcelas labrando durante una parte del ao, y las otras combatan con el ejrcito en campaas de nimia envergadura, lo que gener que las Guerras Pnicas, al ser unas guerras sangrientas sin igual en esos tiempos, causara la muerte de muchos de esos campesinos provocando una despoblacin del campo, hecho que fue aprovechado tiempo despus de ganar la guerra por los aristcratas y nobles -con las innmeras riquezas que haban logrado al conquistar tierras por todo el Mediterrneo- los cuales se hicieron con gran parte de estas tierras formando as latifundios que eran trabajado por la gran masa de esclavos que constantemente ascenda a causa de las conquistas de las ciudades en Grecia, frica, Hispania y Medio Oriente. Este trabajo a gran escala producido por la mano esclava, que tenan peores tratos que los de cualquier animal2, deriv en la ruina de los pocos agricultores campesinos que quedaban, ya que no podan competir en produccin con las grandes cuadrillas serviles de los nobles, lo que result en el abandono de sus tierras y en la bsqueda de mejor futuro en las ciudades, ms especficamente en Roma. Estas migraciones produjeron el gran

Recordemos que los esclavos no eran considerados personas, sino cosas que eran hasta menos valiosas que un animal, pues producan menos beneficios que estos. [3]

ensanchamiento de las clases populares pauprrimas en Roma3, germinando un disgusto generalizado y un grave problema social que atentaba contra la estabilidad del poder en Roma. Pero esta situacin era utilizada por la aristocracia para ejercer la poltica panem et Circus4, mediante la cual obtenan los votos del pueblo como smbolo de respaldo5 y popularidad.Paralelo a esta situacin social en Roma, acaecan en muchas provincias mltiples levantamientos de esclavos a razn de la forma en cmo eran tratados6, siendo Sicilia el lugar en donde esta situacin lleg a los extremos ms infrahumanos. De lo anterior podemos ultimar que Sicilia haya sido la provincia en donde en primera instancia y de peor forma de hayan dado los levantamientos serviles. Pues, as fue, ya que en la ciudad de Enna (Sicilia), los esclavos asesinaron a gran parte de la poblacin, haciendo que se extendiera la revolucin por toda la isla, teniendo a la cabeza a un esclavo de origen sirio llamado Eunus, quien adquiri posteriormente el nombre de Antoco. Fueron ms de 70.000 los hombres en el levantamiento, lo que oblig a Roma a enviar sus tropas, encabezadas por los cnsules y los ejrcitos consulares, las cuales reprimieron de forma eficaz, mas extremadamente carnicera, la revuelta servil en Sicilia retomando el control y el poder sobre la provincia y su capital, Enna(Mommsen, 1958, pg. 125). En este orden de sucesos, el cnsul Publio Rupilio tom decisiones drsticas en todas las dems provincias en las cuales se repitieron los levantamientos imponiendo el cruel castigo de la cruz7. Roma solo pudo acabar totalmente con las resistencias hasta el ao 132 A.C. En estas instancias, sera fcil comprender por qu estos levantamientos y la posterior aniquilacin de los esclavos sediciosos suscit los nimos y pasiones de
Que sern recordadas por su nombre: Proletarios (Porque solan tener muchos hijos) Podra ser traducida como Pan y Circo, entendindose como panema los regalos en concepto de trigo que daban los polticos a la poblacin popular de Roma, proveniente de las plantaciones esclavas, y en especial de Sicilia donde como mencionamos la mano esclava encontr su mximo reducto-, para la consecucin de beneficios polticos, y Circus como ese lugar de entretenimiento popular, esto es, batallas de gladiadores, etc. 5 El pueblo tenan solo un poder de respaldo, y por tal razn los aristcratas deba tener en cuenta a la gran masa popular (Asimov, 2000). En pocas palabras, eran herramientas para mantener al pueblo satisfecho temporalmente. 6 Eran obligados a trabajar constantemente en las minas, apacentar los rebaos, eran marcados con hierro candente y puestos con grillos en las piernas, y por las noches eran encerrados en calabozos subterrneos bajo las peores condiciones posibles (Mommsen, 1958, pgs. 122-124) 7 Muy probablemente la cifra de los crucificados no baje de los 20.000.
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las masas populares de Roma y la inmediata exigencia a la participacin en los asuntos polticos, ya que al quedar esas latifundios sin quien los cultivara gener una grave escasez de trigo en Roma, empeorando de esta forma la situacin, que de hecho ya era grave, de las clases populares y a la vez muchos campesinos, que aos atrs haban ido a la ciudad en busca de la subsistencia que no garantizaba la agricultura, tomaron la frrea decisin de retomar sus tierras(Diakov, 1966). Pero a estas decisiones se les precipit la compra de grandes porciones por parte de los acaudalados de Roma, generando rencillas y una crisis social de gran trascendentalidad. En este sombro panorama social iba a aparecer la figura de Tiberio Graco. Pero antes de entrar a analizar las acciones de este personaje, es importante sealarun aporte importante por parte de otra gran efigie cuyo nombre era Escipin Emiliano, descendiente de Escipin el africano, hroe de la Guerra contra Anbal y cnsul en la tercera Guerra Pnica que trajo consigo la destruccin de Cartago. De este se puede destacar la activa labor para la expedicin de la ley que introduca el voto secreto en los tribunales populares, los cuales eran el rgano de jurisdiccin criminal ms importante, en el cual despus fueron a pagar los culpables pertenecientes a la aristocracia, generando as un sistema jurisdiccional ms seguro y ecunime. Estos movimientos a favor del voto secreto tuvieron su origen en la Ley Gabinia (139 A.C), Casia (137 A.C) y Papiria (130 A.C) por medio de las cuales se estableci el voto secreto para la eleccin de las Asambleas del pueblo (magistraturas), los tribunales populares (rganos de gran importancia y poder) y para la admisin o rechazo de las mociones legislativas,

respectivamente(Mommsen, 1958, pg. 116). Habiendo vislumbrado el panorama de la Republica Romana en la segunda mitad del siglo II A.C. podemos sin rmora alguna analizar las figuras de Tiberio Graco y su hermano Cayo Graco en forma respectiva.

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III.

TIBERIO GRACO: UN
POPULARES

TRIBUNO DEL PUEBLO A FAVOR DE LAS CAUSAS

Tiberio Sempronio Graco (164-133 A.C.), primognito de Cornelia8, hija de Escipin el Africano, fue combatiente en el ejrcito romano, y partcipe de la toma de Cartago en el marco de la Tercera Guerra Pnica. Tiberio posea un importante bagaje en la cultura griega, hecho que tal vez le afect directamente en la forma en cmo vio las cosas, sobre todo los horrores que rodearon las masacres en la represin al levantamiento de los serviles y las catstrofes sociales en Roma, lo cual le hizo pensar en un reformismo urgente(Asimov, 2000, pg. 151). Es as como la intencin de encausar sus propsitos de forma materializada lo lleva en el ao 134 A.C. a postularse para el puesto de Tribuno de Pueblo, siendo elegido notablemente, y posesionndose un 10 de diciembre de ese ao. Desde el primer momento en que lleg al poder puso en marcha un plan de reforma agraria, que efectivamente era una trasformacin de la LeyLicinia etSextia9 del 367 A.C. Esta reforma a la Ley Licina et Sextia consista en el planteamiento y cuestin sobre la redistribucin de las agerpublicus10que, como menciona Diakov aludiendo a Apiano, tena la plena intencin de acrecentar el nmero de ciudadanos romanos en detrimento de la calidad de esclavos que haba provocado los horrores de los cuales l siempre reneg(Diakov, 1966, pg. 175). De esta forma, para lograr el objetivo y los medios mismos, Tiberio prosigui a incautar los terrenos de aquellos que los tenan ocupados de forma no legal, y a cambio se le entregaba una compensacin por los daos causados; redujo los grandes latifundios,

dividindolos en pequeas fincas y distribuyndolas entre los ms necesitados y pobres. Como si fuera poco, expidi una ley agraria revolucionaria con su nombre, LexSempronia, que estipulaba: 1) que eran de disposicin especial en favor del
Cornelia, quien ha pasado a la historia como una ejemplar madre. Les dio a sus hijos una muy rica educacin helnica. Sin duda era una mujer ilustre y de una gran cultura. 9 Que estipulaba los lmites de extensin y dimensiones de una finca o parcela. Obvio est que estos no fueron respetados y por eso comenzaron a proliferar los grandes latifundistas. 10 Tierras de dominio pblico [6]
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heredero (hereditarias), 2) que las tierras eran de carcter enfitutico11 e inalienable, 3) y la existencia de funcionarios permanentes para ejercer control legal sobre las tierras (Mommsen, 1958, pg. 134).A estos propsitos, Henry Pelham, en su libro Outlines of RomanHistorytrae a colacin lo sucedido inmediatamente despus con aquellos que primaban el carcter aristocrtico de las riquezas, cuando menciona:
The senate from the first identified itself with the interest of the wealthy occupiers, and Tiberius found himself forced into a struggle with the senate, wich had been no part of his original plan. He fell back on the legislative sovereignty of the people; he resuscitated the half-forgotten powers of interference vested in the tribunate in order to paralyse the action of the senatorial magistrates(Pelham, 1909, pg. 210)12.

En concordancia con lo anterior, hemos podido denotar que las medidas tomadas por Tiberio generaron una gran molestia en los grandes ocupantes de tierras, entre ellos Marco Octavio, tribuno del pueblo, el cual no dio su aval para la aceptacin de la norma, sin embargo Tiberio us el medio de la Asamblea del pueblo para generar la destitucin de Marco Octavio, por motivos de ir en contra del inters comn del pueblo13. Este recurso fue considerado como ilegal stricto sensu, lo que fue utilizado por sus adversarios para denotarlo de revolucionario y sedicioso. No obstante, las acciones de Tiberio en contra del senado no pararan all, pues de forma ulterior tom medidas que humillaron al poder del senado en cuanto a la administracin financiera y provincial, en el momento en que los triunviros14 pidieron al senado los crditos necesarios para ejercer sus funciones, y el senado resolvi darles en respuesta contraria una suma risible lo que produjo que Tiberio recayera otra vez en el recurso de la Asamblea popular para expedir una ley sobre la administracin provincial que revocara las medidas designadas

(lat. Emphyteusis; gr. ) Cesin perpetua o por largo tiempo del dominio til de un inmueble, mediante el pago anual de un canon y de laudemio por cada enajenacin de dicho dominio. (RAE, 2001) 12 Trad. (non. Of.) El senado desde el primer momento se identific con los intereses de los ocupantes ms ricos y prsperos, y por tal Tiberio se vio forzado a entrar en una lucha con el senado, lo cual no haba sido intencin alguna de su plan original. Tiberio recalc en la soberana legislativa del pueblo; resucit la casi olvidada idea del poder de intervencin del cual estaba revestido el Tribuno del Pueblo, con el fin de paralizar la accin de los magistrados del senado 13 Ver Apiano, Guerras Civiles, I, 12, citado por (Diakov, 1966, pg. 176) 14 Los triunviros eran grupos de tres personas que ejercan control legal sobre la distribucin de las tierras. [7]

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por el senado(Diakov, 1966, pg. 178). Pero lo ms extremo de sus medidas iba a llegar despus, con la distribucin del tesoro del rey de Prgamo. Tiberio, al ver que ya la ley agraria estaba expedida y en total vigencia, se dio cuenta de que estaba dejando de ser necesario para la gente, y eso significara la perdida de cierto apoyo incondicional, lo que lo dejara en la intemperie ante las garras hinidas de sus adversarios polticos que le haran pagar por las afrentas e ignominias proferidas de su parte, por lo cual se vio obligado a buscar una va por medio la cual mantener al pueblo bajo la sombre de su admiracin. As, sucedi que el rey Atalo III de Prgamo al morir dej sus tierras y su tesoro en plena herencia de Roma, lo que aprovech Tiberio, quien a sabiendas de que toda herencia a Roma deba quedar en manos del Estado, siendo el senado su representante, lo reparti entre la muchedumbre para que invirtieran en sus granjas y parcelas, hecho que desquici al senado. Pero esa inmunidad que le daba el cargo de Tribuno no fue eterna. Despus de la ltima afrenta, corri el rumor maliciado de que Tiberio quera tomar la corona y proclamarse rey, lo que produjo que parte de su popularidad bajara y que los aristcratas tomaran esto como subterfugio para hacerse con su cabeza. De esta manera, cuando hubo acabado su periodo como tribuno, aspir a una reeleccin, pero el senado se adelant y prepararon las elecciones en una temporada en que todos los campesinos se hallaban en las provincias, con la intencin de no contar con esos votos a favor de Tiberio. En adicin a esto, Tiberio saba premeditadamente que su hora se acercaba. El da de la eleccin, despus de largar indecisiones, la jornada termin en una sangrienta disputa en la cual la escuadrilla de los enemigos de Tiberio se hallaba mejor preparada y organizada, y cerca al Templo de Jpiter, Dios Capitalino, se vociferaban toda clase de imprecaciones e invectivas de muerte contra Tiberio, quien quiso huir con sus partidarios, pero al bajar la rampa del Capitolio fue asesinado a palos, frente a la estatua de los siete reyes de Roma, junto a ms de 300 seguidores, a lado del templo de la fidelidad (Mommsen, 1958, pg.

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138). Su cadver fue tirado en vejacin hacia el Rio Tber. Los asesinos15 tuvieron que ser exiliados por cuestiones de seguridad, pues la crisis social hizo muy malquista la muerte de Tiberio. Dice Mommsen al respecto Nunca haba Roma atravesado un periodo tan funesto y a manera de reflexin, Diakov expresa que Tiberio Graco pereci por no haber comprendido que los mencionados principios tenan nicamente un valor relativo; educado en el respeto a la ley, crea ingenuamente en las reformas realizadas por va pacfica y constitucional. Por otro lado, tiempo despus de estos incidentes, llegan desde Hispania Escipin Emiliano y Cayo Graco al conquistar con xito a Numancia, y cuyas ausencias impidieron que fueran asesinados junto a Tiberio y sus partidarios. Cayo Graco iba a continuar los pasos de su hermano, y el destino le deparara iguales retos.

IV.

CAYO GRACO: EFIGIE DEL REFORMISMO REPUBLICANO

Cayo Sempronio Graco, hermano del occiso Tiberio, regresa a Roma en el ao 132 A.C. junto con Escipin Emiliano como mencionbamos ms arriba., justo despus de que la marea poltica bajara un poco posteriormente a la muerte de Tiberio Graco. Escipin comenz a obtener una gran relevancia en la organizacin poltica de la ciudad, unindose al conflicto entre conservadores y reformistas, y a su vez optando por los conservadores, hasta el punto de convertirse en su jefe mximo. En este panorama, el pensamiento de Escipin era diametralmente diferente al de los reformistas, y entre ellos Cayo Graco. Empero, una noche Escipin apareci muerto un da antes de pronunciar unos importantes discursos en contra de las leyes agrarias de Tiberio, por lo cual se ha sospechado que fueron los reformistas los causantes de su muerte, aunque de tal aseveracin no se han tenido pruebas (Asimov, 2000, pg. 154). Mientras, como menciona el mismo autor,

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El honor se lo disputan, como menciona Plutarco, Publio Satureyo y Lucio Rufo. [9]

se expidi una ley que permita la reeleccin del tribuno legalmente para que nadie tuviera que correr la misma suerte que Tiberio (Ibd.). Cayo Graco, con la intencin de seguir las polticas de su hermano, se present en el ao 123 A.C. a tribuno del pueblo, quedando elegido16. Al estar ya en el poder, decidi hacer alianzas contra el senado, permitiendo que todos aquellos que tenan algn grado de hostilidad contra el senado o la aristocracia se unieran a la causa democrtica que le reconoci ser electo dos veces seguidas tribuno. Entonces, sus polticas radicaron en la puesta en prctica de la Ley Sempronia expedida por su hermano doce aos atrs, que haba tenido un momento de parlisis entre la muerte de Tiberio y el deceso de Escipin. As, tambin estableci lmites y controles a la venta de alimentos por parte de los terratenientes, ya que quera impedir el enriquecimiento a costa de los ms pobres, dando paso posteriormente a la distribucin gratis de grano entre las personas, uno de sus grandes avances sociales. Tambin, decidi la expansin con la creacin de mltiples colonias trasnmartimas tanto en Capua como en Tarento y en la destruida Cartago, intentando construir sobre su suelo la nueva ciudad de nombre Junonia. Esta medida de la creacin de las colonias transmartimas permiti la abertura a la aceptacin de muchas personas de la ciudadana romana, y primar una igualdad entre los habitantes de Roma, que antes se identificaban con el dominio, y los de las provincias, que solo se crean dominados (Mommsen, 1958, pg. 155). En este orden de acciones, Cayo Graco implement tcticas que produjeron un gran avance en la composicin social del proletariado, pero tambin propici el progreso de otras organizaciones e instituciones, como el ejrcito, ya que modific notablemente los requisitos para entrar en este, expresando que ninguna persona poda tomar las armas antes de los diecisis aos ni despus de los cuarenta y cuatro (Op. Cit., pg. 156). De la misma forma, hubo grandes aportes en materia penal, pues Cayo implement una norma que le quitaba al pueblo conocer sobre
Asumi tal riesgo, incluso, sin tener en cuenta el llanto de su madre, la cual no quera presenciar de nuevo lo sucedido con su primognito en Cayo Graco. [10]
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los delitos capitales; trajo consigo una ley muy antigua mediante la cual la persona poda quedar libre de haber cometido un delito a cambio de la renuncia a la ciudadana romana, y con la libertad mantena su fortuna, aunque esto no era impedimento para la ejecucin de la pena. Hay otro aspecto del cual hablar, y son las mercedes que profiri a la clase de los caballeros17, personas que eran comerciantes y posean cierta fortuna, pero no eran considerados dentro de la aristocracia noble, pues esta era de carcter hereditaria y hermtica. Hay que aclarar que entre estas clases no haban buenas relaciones, o mejor decir, sus relaciones solan ser muy tensas. Es totalmente cierto que Cayo al odiar profundamente a la aristocracia opt por beneficiar a uno de sus enemigos para humillarlos an ms. De esta forma, Cayo expidi una ley judiciaria por medio la cual quiebra los conductos regulares mediante los cuales se elegan a los jurados, pues estos eran nombrados anteriormente por el senado, y ahora pasaran a ser nombrados por los caballeros(Diakov, 1966, pg. 180),(Mommsen, 1958, pg. 161). Por otro lado, Cayo Graco tambin ofreci por medio de una ley administrativa la concesin a los caballeros de un gran nmero de ventajas por concepto del manejo del comercio con los orientales. Adems, concibi plenamente la posibilidad para la apertura de la ciudadana romana a latinos y los dems habitantes de la pennsula itlica, lo que no pudo dejar de provocar el egosmo de las clases nobles de la ciudad. En adicin a esto, quit de las manos del senado toda la administracin del Estado, lo que hizo que el poder tornara claramente hacia una monarqua, pues el que detentaba toda esa gama de responsabilidades estaba investido de un poder sin mediacin de ningn otro establecimiento. Tambin Cayo despoj al senado de la administracin de justicia y de esta manera el senado perdi cualquier autoridad moral o material que algn da pudo tener. Si echamos un vistazo, observamos que todo no para all, debido a que Cayo la sigui emprendiendo lastre en contra a la aristocracia noble, pues comenz a perseguir
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Esta clase de caballeros equivaldra en trminos renacentistas a la burguesa. [11]

sin compasin a aquellos que anteriormente tanto dao hicieron a las causas populares y que eran estandartes de la nobleza hermtica de Roma, como Marco Octavio y el suceso de Publio Nasica18, Publio Pompilio, los cuales huyeron de Roma, a pesar de que ms tarde Cayo retir esta empresa por peticin de clemente madre, Cornelia. Tras esta situacin, abordemos el tema referente a que Cayo cometi un grave error al subestimar la capacidad del senado19, ya que este comenz una campaa contra la votacin de una ley que permita la extensin de la ciudadana romana a los latinos e itlicos, por lo cual un cnsul de nombre Cayo Fannio llam a las personas a no votar, puesto que presuntamente tendran que repartir el trigo entre ms personas y los beneficios se reduciran constantemente a causa del incremento poblacional. La mocin dio efectivamente las secuelas esperadas. La ley no

prosper y la imagen de Cayo Graco disminuy notablemente. A partir de este revs, el senado aprovech esta fisura en la imagen de Cayo Graco y utiliz tcticas para debilitar su poder pero sin levantarse en armas contra los caballeros o la muchedumbre, ya que eso hubiese representado un suicidio vital y poltico. Entonces, estos senadores entendieron que los comerciantes y el populacho estaban unidos a Cayo Graco solo por los beneficios que este representaba y no por la imagen del personaje. As, emprendieron una batalla en contra de Cayo en el mismo terreno. Acaece, entonces, que comenzaron a dar ddivas an mayores que las de Graco a estas clases, los liberaron de impuestos, y les prometieron la expansin y creacin de colonias que albergaran a grandes masas de ciudadanos en detrimento de los dominios de los itlicos. A esto se aun la condicin que Cayo Graco se encontraba en Junonia (Cartago) y su emisario o encargado en Roma, Marco Flacco, result muy torpe para refrenar el maquiavlico plan de la aristocracia y sus intiles acciones terminaron por ayudar a la causa senatorial. Esto se materializ en la aprobacin de unas leyes Livias que contenan todos esos
Hombre que en los tiempos de Tiberio irrumpi en su contra y mucho tuvo que ver con las acusaciones que se le imputaron de querer hacer una monarqua. Fue protagonista de la oleada de personas que fueron a por su cabeza el da de su muerte. 19 As fuera por medios poco ortodoxos. [12]
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propsitos de la nueva alianza entre los aristcratas y la clase popular(Mommsen, 1958, pgs. 168-171), (Diakov, 1966, pg. 182). La situacin de Cayo Graco no se pudo poner peor cuando en el ao 121 A.C. no fue reelegido como tribuno y en su lugar llego una persona perteneciente al partido ultra-noble, llamado Lucio Opimio. Esta eleccin trajo consigo muchas medidas como la reversin de la reconstruccin de Cartago por considerarlo Suelo Maldito. Y as con muchas de las medidas tomadas anteriormente por Cayo Graco. Cierto da, hubo una batalla terrible entre los partidarios y los adversarios de Graco, en donde termin muerto un lictor, lo que utiliz Opimio para advertir a la poblacin que se preparaban atentados contra los funcionarios pblicos (Beesly, 1877). Esto sirvi de antesala al da en que Flacco prepar a toda su gente con armas, ocupando el Aventino20, para buscar la insurreccin, mas Graco fue sin armas y sin intenciones de belicismo. El Aventino fue tomado por las tropas de Opimio y se puso precio en oro a quien entregara las cabezas de Flacco y Graco. Aquel fue capturado y muerto. Graco escap hacia el templo de Minerva, y cuenta la historia que estaba dispuesto a suicidarse con su espada, pero Publio Lntulo le exhort a conservarse para mejores das. Ambos marcharon junto a un esclavo y dos personas ms hacia el rio Tber y mientras bajaban la colina Cayo Graco se lastim un pie y perdieron tiempo en el cual dos de estos fueron muertos. Graco junto a su esclavo Euporo lograron pasar el ro, pero cuentan que despus hallaron sus cadveres en el Bosque sagrado de Furrina. Se presume que su esclavo le dio muerte y paso seguido se suicid(Mommsen, 1958, pgs. 173-174). Las cabezas de Flacco y Graco fueron presentadas al Foro y sus cuerpos lanzados al ro. Despus de estos incidentes fueron ejecutadas ms de 3000 personas. Pobre Cornelia, madre de dos mrtires, se le prohibi vestir luto, y el nombre de los Gracos fue declarado maldito por el senado. El fracaso de estos dos hombres radic en su ingenua posicin de lograr finalidades a partir de
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Lugar que anteriormente era ocupado por los plebeyos. [13]

convenciones y legalidades, y no como los serviles, de forma sangrienta y violenta. Ambos aportaron, como dice Diakov, mucho para el despertar poltico de las clases bajas.

V.

BREVE REFLEXIN SOBRE LA ACCIN POLTICA DE LOS GRACOS

Despues de haber observado y analizado la vida de estas dos figuras de finales del siglo II A.C., es recurrente observar que su importancia es de carcter superlativo en la historia romana y universal, pues se podra decir que fueron las primeras personas que concibieron la gran importancia de la soberana popular y la necesidad imperiosa de rellenar las brechas entre las clases sociales. Ellos apelaron por una sociedad ms justa e igualitaria, en donde todos los beneficios no fueran un fruto egosta de unos pocos, sino que entendieron que una sociedad avanza mucho ms rpido y se dulcifican mucho ms sus instituciones cuando la comunidad es acarreada hacia un bien comn. Ninguna clase de poltica en la historia de la humanidad ha permanecido durante mucho tiempo si sus finalidades materiales son privativas de unos pocos, pues all siempre se enfrentan a la oposicin e insurreccin de la gran masa sufriente. Claros ejemplos podemos denotar en las revoluciones del siglo XX en Rusia, Cuba o los pases latinoamericanos, o yndonos ms atrs, en la antigua Francia en medio de las peores situaciones y vejaciones del absolutismo. Pues aqu hemos podido demarcar un claro precedente de todos estos acontecimientos que han estremecido la historia reciente de la humanidad. Entonces, siendo as, el profesor Schwanitz no se equivocaba al decir que efectivamente fueron los precursores del socialismo, pero no de un socialismo de una clara determinacin bajo la infraestructura econmica como lo planteaba Marx, sino un socialismo que lleva en s la reivindicacin de las causas sociales, lo cual es superior a la visin poltica, ya que es la esencia de la misma poltica que el Estagirita algn da dirimi al considerar que la poltica era el arte de gobernar a las comunidades con la finalidad de

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conllevarlos hacia un bienestar general. A ese bienestar general era donde Tiberio y Cayo Graco queran llegar, y a partir de estos puntos podemos entender su odio ilimitado por la aristocracia noble y el senado, entes de poder, ms no de poltica, de poltica humanizada. Aqu podemos encontrar a unos de los primeros grandes humanistas en la historia, y queda bien visto que su legado fue muy importante tanto en su tiempo como en nuestro tiempo. Sus revoluciones marcaron y mostraron la vulgar decadencia en la que se hallaba la repblica, y sus medidas tomadas en contra de senado propiciaron la aparicin de los principados y posteriormente del Imperio en s. Muy probablemente se les deba esa gran pasin por la gente a la gran educacin de aquella ejemplar mujer, Cornelia, quien los embebi desde el alba de sus vidas con las deleitosas corrientes del saber del Hlade. Ese precedente lo hemos tenido a lo largo de nuestra historia y lo tenemos ms presente ahora para tomar conciencia y ver que toda poltica egosta tiene mal trmino, y que la resolucin de las sociedades y el avance tan anhelado por muchos solo se pueden obtener por medio de polticas incluyentes que primen una apertura total de oportunidades para que cada quien llegue hasta donde las fuerzas del alma le permitan y as mismo el espritu divino. No hay tirana que dure tantos aos ni sociedad ciega que se la soporte. Por eso, a partir de este gran ejemplo de Tiberio y Cayo Graco se pueden tejer nuevos horizontes para que logremos aquellos propsitos que otrora se vean en el amanecer del ser y ahora los percibimos en su ocaso. Este hecho nos muestra que nunca es intil retornar a nuestras fuentes, sabios manantiales de experiencias que siempre nos ilustran para construir mejores futuros. Exhorto a las personas a tomar de este sol, sol que brilla en la vista, en pleno cenit, pero que en nuestras mentes y corazones ya se pone dando lugar a la lobreguez impvida de la noche que nos depara en la lnguida espera de nuestras almas por el codiciado amanecer que solo la Antigedad y sus gloriosas verdades pueden reflejar. Si las ideas no brillan como ese sol, nuestra noche se extender remisamente hasta que la nica luz eterna nos haya de recoger.

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Bibliografa
Asimov, I. (2000). La Repblica Romana. Alianza Editorial. Beesly, A. H. (1877). The Gracchi, Marius and Sulla. London: Longman, Green, and Co. Crook, J. A., Lintott, A., & Rawson, T. l. (1992). The Cambridge Ancient History Volume IX. The Last Age of the Roman Republic, 146-43 B.C. Cambridge, United Kingdom: Cambridge University Press. Diakov, V. (1966). Historia de la Antigedad: Roma. Mexico, DF: Editorial Grijalbo, S.A. Livius, T. (1993). Historia de Roma desde su fundacin. Volumen VII: Libros XXVI-LX. Madrid: Editorial Gredos. Mommsen, T. (1958). Historia de Roma. Mexico DF: Aguilar. Montanelli, I. (1991). Historia de Roma. Madrid: Plaza & Janes. Pelham, H. F. (1909). Outlines of Roman History. New York: Putnam's sons. Plutarco, M. (1847). Vidas Paralelas. Tomo VI. Paris: Editorial de A. Mzin. Schwanitz, D. (2006). Bildung. Alles, was man wissen muss (La Cultura. Todo lo que hay que saber). Torrelaguna, Espaa: Punto de Lectura.

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Italia y Sicilia en el Siglo II A.C. (Crook, Lintott, & Rawson, 1992)


[17]

Roma en el Siglo II A.C. 1 (Crook, Lintott, & Rawson, 1992)

[18]

Roma en el Siglo II A.C. 2 (Crook, Lintott, & Rawson, 1992)

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