La Educación de La Primera Infancia
La Educación de La Primera Infancia
La Educación de La Primera Infancia
Y ello se confirma una y otra vez, sin que apenas tomemos conciencia de ello.
Sin duda las recientes declaraciones del Doctor Venter, director de una de las
dos compaas que han realizado la investigacin del mapa del genoma
humano, son fundamentales al afirmar: La idea que las caractersticas de la
personalidad est estrechamente ligada con el genoma humano se puede
considerar falsa. Los hombres no son necesariamente prisioneros de sus
genes y las circunstancias de la vida de cada individuo son cruciales en
su personalidad.
Est claro que en los primeros aos de la vida constituyen los de mayor
significacin para el desarrollo del ser humano. A esta etapa de la formacin del
individuo se le ha denominado con diversos nombres: primera infancia,
preescolar, inicial, entre otros, pero cualquiera sea el nombre que se adopte, en lo
que s estn totalmente de acuerdo todos los estudiosos de la ciencia psicolgica
es que en esta etapa se instauran las bases fundamentales del desarrollo de
la personalidad, que en las sucesivas fases de la vida se consolidarn y
perfeccionarn.
De ah la extraordinaria importancia que reviste esta edad para el futuro del
hombre como individuo y como persona, y de la necesidad de conocer
exhaustivamente sus particularidades: las causas y condiciones de su desarrollo,
el transcurso de sus procesos biolgicos y madurativos, fisiolgicos y funcionales,
psicolgicos y sociales, de modo tal de poder ejercer una influencia positiva en
dichos mecanismos y estructuras que estn en plena formacin y
maduracin, para alcanzar los mximos logros potenciales de este desarrollo,
que posibilite un individuo sano, apto y capaz de transformar al mundo y
transformarse en este empeo.
El medio social y la estimulacin del medio circundante posibilita que estos
procesos y formaciones se estructuren y permitan un cierto nivel de desarrollo en
todos los nios, determinando por un sistema de influencias que funciona de
manera espontnea y sin direccin exacta de este desarrollo. Sin embargo, el
medio social y familiar actuando por s solos y sin una direccin cientficamente
concebida de la estimulacin, puede que no sea el adecuado, no llegando a
posibilitar que los nios alcancen todas las potencialidades de su desarrollo.
Los padres de familia en el hogar generalmente carecen de las posibilidades y
conocimientos para poder ejercer de manera consciente y tcnicamente dirigida
una accin de esta naturaleza, por lo que se requiere del concurso de otros
agentes educativos para poder realizar esta funcin.
Es necesario crear un sistema de influencias organizado conscientemente y
que, partiendo del conocimiento de las particularidades evolutivas de los
primeros aos, dirija las acciones de estimulacin en un sentido apropiado,
lo que permitir lograr niveles cualitativamente superiores del desarrollo.
As, por ejemplo, se sabe que en los primeros seis aos de la vida est presente
el perodo sensitivo de la percepcin, es decir, el momento en que se encuentran
las condiciones ms propicias para la formacin de este proceso cognoscitivo,
base de todo el conocimiento humano. En un nio, en las condiciones de su
educacin familiar, puede alcanzar metas ms altas de desarrollo para todos los
nios.
Este sistema de influencias educativas se materializa en un currculum que,
de manera planificada y metodolgicamente bien organizado, estructura y
dirige todas las acciones a realizar con cada nio en su devenir evolutivo, y as
lograr cumplir sus objetivos de alcanzar un nivel cualitativamente superior de
dicho desarrollo. Este currculum puede asumir formas muy diferentes en
dependencia de la base terica - conceptual que lo sustente, pero no importa
cual sea su diseo, todos van hacia un propsito idntico: lograr: alcanzar los
mximos niveles del desarrollo en todos los nios.
1.2.-Por que educacin desde la primera infancia
La primera infancia constituye una etapa fundamental en el proceso de desarrollo
y formacin de la personalidad. Esta afirmacin es generalmente aceptada y
compartida por psiclogos y pedagogos, independientemente de las
tendencias, teoras y escuelas a las que se adscriben. Se fundamenta
esencialmente por la gran plasticidad del cerebro en estas edades, que sin
constituir una tabla rasa en la que puede inscribirse cualquier impresin, si ofrece
amplsimas posibilidades para el establecimiento de conexiones que van a servir
de base para el registro y fijacin de las ms variadas estimulaciones.
En toda actividad humana, para poder satisfacer las necesidades
biolgicas, socioculturales, productivas o espirituales, se articulan
diferentes sistemas fisiolgicos, psicolgicos y sociales de alta
complejidad. Ello implica que cada persona tiene una particular manera de ser y
estar en el mundo, de relacionarse con la realidad, con las otras personas, con el
espacio y los objetos. Este esquema se construye y desarrolla especialmente
durante los seis primeros aos de vida. Se puede afirmar que el nio comienza a
aprender desde el momento de su concepcin, retroalimentando su mundo
interno de todo lo que recibe del exterior.
Los mltiples datos cientficos obtenidos en innumerables estudios e
investigaciones han evidenciado que en esta etapa se sientan las bases, los
fundamentos esenciales para todo el posterior desarrollo; as como la existencia
de grandes posibilidades que en ella se dan para el desarrollo y formacin de las
ms diversas capacidades y cualidades personales.
Existen muchas razones para desarrollarla educacin de la primera infancia,
entre las que destacamos:
Los primeros aos de la vida del nio, desde el nacimiento hasta los
seis/siete aos de edad, ponen los cimientos para un crecimiento
saludable y armonioso del nio. Se trata de un perodo marcada por un
rpido crecimiento y por cambios que se ven influenciados por su entorno.
Estas influencias pueden ser positivas o negativas, determinando en gran
medida cmo ser el futuro adulto, las futuras generaciones y la sociedad.
Es evidente que han de ser los centros el punto de confluencia de padres y nios
y profesionales dedicados a la educacin de la primera infancia.
El nio convive, crece y se comunica con la familia, y a ella le corresponde,
en primer lugar, el derecho y el deber de educar a sus hijos. Los juicios y
actuaciones formuladas en el mbito familiar, no deben formular dicotomas ni
marcar una distancia excesiva con relacin a los parmetros sociales vigentes,
lo cual aportara duplicidad y controversia en la creacin de los criterios
bsicos.
Por otro lado, la sociedad y los poderes pblicos deben tutelar y facilitar,
mediante los recursos que sean necesarios, el hecho de que el individuo
disponga de los elementos precisos para el desarrollo sistemtico de sus
capacidades personales. Es pues, en el mbito de las instituciones
educativas donde deben favorecerse las vas de la socializacin y donde se
sedimentan las bases de los procesos de aprendizaje.
El objetivo comn de la familia y de la institucin educativa es,
indiscutiblemente, conseguir el desarrollo integral y armnico del nio.
Ambas vas de actuacin han de incidir en una misma direccin para
garantizar la estabilidad y el equilibrio, factores indispensables para una
adecuada educacin.
Por supuesto, las sociedades no tienen una existencia separada de la de los
individuos que las constituyen. La prolongacin de la escolaridad en los ltimos
aos no slo ha sido una respuesta a las necesidades sociales ya aludidas,
sino tambin a las demandas de los individuos. Por qu los padres desean
enviar a sus hijos a los centros de educacin de la primera infancia?
En primer lugar, la educacin es una de las principales formas de
preparar a los nios a ser miembros competentes e integrados de
su sociedad. Es decir, para su propio desarrollo personal.
En segundo lugar, la educacin es el medio principal de mejorar la
condicin social. Los estudios ms prolongados acreditan la capacidad
del individuo para un trabajo generalmente ms estimulante, mejor
retribuido, ms prestigioso y menos fatigoso que los empleos accesibles
a las personas que han frecuentado la escuela un tiempo ms breve.