2 - Lucas - Capitulo Uno Versos 5 - 25 - La Anunciacion Del Nacimiento de Juan

Lucas Captulo 1:5-25
La anunciacin del nacimiento de Juan el bautista

o bautizador.
Lucas 1:5-25
Reina-Valera 1960 (RVR1960)
5
Hubo en los das de Herodes, rey de Judea, un sacerdote
llamado Zacaras, de la clase de Abas; su mujer era de las hijas

de Aarn, y se llamaba Elisabet.
El Zacaras de la historia de Lucas era miembro de la suerte o

divisin de Abas. Durante el reinado de David, los sacerdotes fueron
organizados y divididos en 24 grupos (1 Cr. 24:16). Estas divisiones
fueron reafirmadas por Salomn, el hijo de David (2 Cr. 8:14).
La octava divisin o clase o grupo, la de Zacaras, era la divisin de
Abas (1 Cr. 24:10).
Solamente cuatro divisiones regresaron de Babilonia (Esd. 2:3639).
Pero estas cuatro fueron redivididas en veinticuatro y se le dieron los
nombres antiguos. Cada divisin cumpla deberes en el templo dos
veces al ao y cada vez el perodo de servicio era de una semana.
6
Ambos eran justos delante de Dios, y andaban irreprensibles en
todos los mandamientos y ordenanzas del Seor.
Sabemos que el ser humano puede alcanzar la justicia slo por fe, fe
en la palabra de Dios y en el sacrificio del Seor, quien nos imput
su justicia, entonces Cmo es posible que sean considerados justos
por Dios e irreprensibles si el sacrificio del Seor todava no se haba

llevado a cabo? La respuesta no es tan compleja como parece.
La justicia tiene dos aristas, 1) La justicia por imputacin, la cual es
otorgada por Dios slo por gracia y 2) la justicia impartida tambin
llamada santificacin, aunque estas dos caras hay que distinguirlas
no se deben separar.
Efesios 2:8-10
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de
vosotros, pues es don de Dios;
8
no por obras, para que nadie se glore.
10
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jess para
buenas obras, las cuales Dios prepar de antemano para que

anduvisemos en ellas.
En este caso, la justicia que ellos tenan no era alcanzada por obras,
sino que corresponda a la justicia impartida u obras de santidad,
que ellos hacan por la salvacin que no haba sido ejecutada an,
pero que estaba decretada de antemano para ellos.
La justicia de Zacaras y Elizabeth mencionada aqu era la misma que
posea Job y Simen.
Job 1:1
Hubo en tierra de Uz un varn llamado Job; y era este hombre
perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal.
Lucas 2:25
Y he aqu haba en Jerusaln un hombre llamado Simen, y
este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolacin de Israel;
25
y el Espritu Santo estaba sobre l.
El texto tambin dice que ellos eran irreprensibles en todos los

mandamientos y ordenanzas del Seor esto significa que ellos no
slo cumplan el mandamiento literal (por obra de Dios) sino que
tambin todos los derivados de este mandato
7
Pero no tenan hijo, porque Elisabet era estril, y ambos eran
ya de edad avanzada.
Aconteci que ejerciendo Zacaras el sacerdocio delante de Dios
segn el orden de su clase,
8
conforme a la costumbre del sacerdocio, le toc en suerte

ofrecer el incienso, entrando en el santuario del Seor.
9
El ser elegido por sorteo para quemar el incienso era considerado un

privilegio nico. Solamente una vez en la vida se permita a un
sacerdote recibir este honor. Despus de eso siempre se le
consideraba rico y santo. Numricamente hablando, ser escogido
por suerte para encender el incienso era un privilegio del que
participaban solamente unos pocos.
10
Y toda la multitud del pueblo estaba fuera orando a la hora del
incienso.
11
Y se le apareci un ngel del Seor puesto en pie a la derecha
del altar del incienso.

12
Y se turb Zacaras al verle, y le sobrecogi temor.
Pero el ngel le dijo: Zacaras, no temas; porque tu oracin ha

sido oda, y tu mujer Elisabet te dar a luz un hijo, y llamars su
13
nombre Juan.
14
Y tendrs gozo y alegra, y muchos se regocijarn de su
nacimiento;
porque ser grande delante de Dios. No beber vino ni sidra, y
ser lleno del Espritu Santo, aun desde el vientre de su madre.
15
Su grandeza no consista en quien era l sino de quien era heraldo.

l en vez de exaltarse debido a su misin demuestra muchas veces
su virtud al magnificar al que vena despus de l.
Juan 3:30
30
Es necesario que l crezca, pero que yo menge.
El hecho de que se le mandara no tomar vino ni sidra implica parece

sugerir que desde su nacimiento tendra el voto de Nazareo que
implicaba ser apartado exclusivamente para Dios. Aunque en este
caso el texto dice que l nunca deba beber estas cosas, lo que nos
dice que este era un llamado an ms exigente que el nazareato el
cual slo duraba por un tiempo.
Nmeros 6:1-8
Habl Jehov a Moiss, diciendo:

Habla a los hijos de Israel y diles: El hombre o la mujer que se
apartare haciendo voto de nazareo,[a] para dedicarse a Jehov,
2
se abstendr de vino y de sidra; no beber vinagre de vino, ni

vinagre de sidra, ni beber ningn licor de uvas, ni tampoco
3
comer uvas frescas ni secas.

4
Todo el tiempo de su nazareato, de todo lo que se hace de la
vid, desde los granillos hasta el hollejo, no comer.

Todo el tiempo del voto de su nazareato no pasar navaja sobre
su cabeza; hasta que sean cumplidos los das de su apartamiento
5
a Jehov, ser santo; dejar crecer su cabello.

Todo el tiempo que se aparte para Jehov, no se acercar a
persona muerta.
6
Ni aun por su padre ni por su madre, ni por su hermano ni por
su hermana, podr contaminarse cuando mueran; porque la

consagracin de su Dios tiene sobre su cabeza.
8
Todo el tiempo de su nazareato, ser santo para Jehov.
16
Y har que muchos de los hijos de Israel se conviertan al
Seor Dios de ellos.
Es increble notar que en este pasaje a pesar que se reconoce que

los hijos de Israel estn rebelin contra Dios, el ngel dice que Dios
es Seor de ellos.
17
E ir delante de l con el espritu y el poder de Elas, para
hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los

rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Seor un
pueblo bien dispuesto.
Dijo Zacaras al ngel: En qu conocer esto? Porque yo soy

viejo, y mi mujer es de edad avanzada.
18
Acaso recin no se haba atemorizado al ver la aparicin de

Gabriel? A pesar de lo sobrenatural de su conversacin con el ngel
Zacaras no crey las palabras que este le dijo, No retrata esto la
incapacidad del hombre de tener fe por si mismo?
Respondiendo el ngel, le dijo: Yo soy Gabriel, que estoy
delante de Dios; y he sido enviado a hablarte, y darte estas
19
buenas nuevas.
Y ahora quedars mudo y no podrs hablar, hasta el da en que
esto se haga, por cuanto no creste mis palabras, las cuales se
20
cumplirn a su tiempo.
Y el pueblo estaba esperando a Zacaras, y se extraaba de
que l se demorase en el santuario.
21
Para evitar profanaciones involuntarias al santuario el Talmud judo

dice que los sacerdotes luego de ofrecer el servicio salan
rpidamente. Como no sala pronto comenzaron a sospechar que
algo fuera de lo comn pasaba.
Pero cuando sali, no les poda hablar; y comprendieron que
haba visto visin en el santuario. l les hablaba por seas, y
22
permaneci mudo.
Cuando el sacerdote sala luego de ofrecer el incienso bendeca al

pueblo que lo esperaba con la bendicin sacerdotal:
Nmeros 6:24-26
24
Jehov te bendiga, y te guarde;
Jehov haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti

misericordia;
25
26
Jehov alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz.
Ms Zacaras no poda hablar ratificando de esta manera que haba

recibido alguna revelacin.
23
Y cumplidos los das de su ministerio, se fue a su casa.
Despus de aquellos das concibi su mujer Elisabet, y se

recluy en casa por cinco meses, diciendo:
24
25
As ha hecho conmigo el Seor en los das en que se dign
quitar mi afrenta entre los hombres.

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Lucas Captulo 1:5-25

La anunciacin del nacimiento de Juan el bautista

Hubo en los das de Herodes, rey de Judea, un sacerdote

llamado Zacaras, de la clase de Abas; su mujer era de las hijas

El Zacaras de la historia de Lucas era miembro de la suerte o

Ambos eran justos delante de Dios, y andaban irreprensibles en

todos los mandamientos y ordenanzas del Seor.

por Dios e irreprensibles si el sacrificio del Seor todava no se haba

no por obras, para que nadie se glore.

Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jess para

buenas obras, las cuales Dios prepar de antemano para que

y el Espritu Santo estaba sobre l.

El texto tambin dice que ellos eran irreprensibles en todos los

Pero no tenan hijo, porque Elisabet era estril, y ambos eran

conforme a la costumbre del sacerdocio, le toc en suerte

El ser elegido por sorteo para quemar el incienso era considerado un

Y toda la multitud del pueblo estaba fuera orando a la hora del

Y se le apareci un ngel del Seor puesto en pie a la derecha

del altar del incienso.

Y se turb Zacaras al verle, y le sobrecogi temor.

Pero el ngel le dijo: Zacaras, no temas; porque tu oracin ha

Y tendrs gozo y alegra, y muchos se regocijarn de su

Su grandeza no consista en quien era l sino de quien era heraldo.

Es necesario que l crezca, pero que yo menge.

El hecho de que se le mandara no tomar vino ni sidra implica parece

Habl Jehov a Moiss, diciendo:

se abstendr de vino y de sidra; no beber vinagre de vino, ni

comer uvas frescas ni secas.

Todo el tiempo de su nazareato, de todo lo que se hace de la

vid, desde los granillos hasta el hollejo, no comer.

a Jehov, ser santo; dejar crecer su cabello.

Ni aun por su padre ni por su madre, ni por su hermano ni por

su hermana, podr contaminarse cuando mueran; porque la

Todo el tiempo de su nazareato, ser santo para Jehov.

Y har que muchos de los hijos de Israel se conviertan al

Seor Dios de ellos.

Es increble notar que en este pasaje a pesar que se reconoce que

E ir delante de l con el espritu y el poder de Elas, para

hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los

Dijo Zacaras al ngel: En qu conocer esto? Porque yo soy

Acaso recin no se haba atemorizado al ver la aparicin de

Para evitar profanaciones involuntarias al santuario el Talmud judo

Cuando el sacerdote sala luego de ofrecer el incienso bendeca al

Jehov te bendiga, y te guarde;

Jehov haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti

Jehov alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz.

Ms Zacaras no poda hablar ratificando de esta manera que haba

Y cumplidos los das de su ministerio, se fue a su casa.

Despus de aquellos das concibi su mujer Elisabet, y se

As ha hecho conmigo el Seor en los das en que se dign

quitar mi afrenta entre los hombres.

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