Contactos No Humanos en El Plano Astral

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CONTACTOS NO HUMANOS EN EL PLANO ASTRAL.

Dion Fortune
Hay otras formas de vida adems de la nuestra cuya esfera de evolucin incide sobre la tierra. En el
dominio del folklore nos encontramos constantemente con la idea de la comunicacin entre el reino
humano y el de las hadas; del matrimonio de un ser humano con una esposa hada, o el robo de un nio por
las hadas, siendo dejado a cambio otro travieso en su lugar.
Seremos atolondrados si asumimos que un extenso cuerpo de la creencia popular est de hecho
enteramente sin fundamento. Examinemos por tanto estas viejas y crudas creencias y veamos si podemos
encontrar algunos apoyos para ellas, y si es as, cul puede ser la naturaleza real de los hechos, y si arrojan
alguna luz sobre los fenmenos psquicos modernos de la clase que estamos considerando en estas
pginas.
Hay muchos de nosotros que han encontrado a gente que podra muy bien ser descrita como no-humana,
sin alma, en cuanto que los motivos humanos ordinarios no operan en ellos, ni los sentimientos humanos
ordinarios les impulsan o inhiben.
No podemos sino amarlos, porque tienen gran encanto, pero no podemos sino temerlos tambin, pues
esparcen una infinitud de sufrimiento alrededor suyo. Aunque sean raramente deliberadamente malos, son
singularmente detrimentales para todos aquellos con los que entran en contacto. Ellos, por su parte, son
infelices y solitarios en medio de nosotros. Se sienten ajenos y sin compaa; la mano de todo hombre est
contra ellos, y en consecuencia demasiado a menudo sucede que su mano est contra todo el mundo y
desarrollan una traviesa malevolencia, aunque raramente hacen el mal calculadoramente.
Gratitud, compasin, buena fe, moralidad y honestidad comn son extremadamente extraas a sus
naturalezas, tan lejos de su concepcin como el clculo diferencial. No son inmorales, sin embargo, sino
simplemente no-morales. Por otra parte, poseen las virtudes de la sinceridad absoluta y un gran coraje. En
trmino de ticas humanas son "indeseables", pero tienen una tica propia a la que son leales, y sa es la
belleza que es la verdad, y esto es todo lo que saben, y, hasta donde concierne a su vida, es todo lo que
necesitan saber.
De apariencia son usualmente pequeos y leves, poseyendo fortaleza y resistencia fsica no usuales, pero
siendo muy propensos a la exhaustin nerviosa y al arrebato cerebral. En las relaciones sociales toman
apetencias y desapetencias violentas; muestran un afecto fcil y demostrativo hacia aquellos que les
agradan, pero les olvidan pronto. La gratitud y la piedad son desconocidas para su naturaleza.
Hacia aquellos que les desagradan son mezquinamente maliciosos, y en todas las relaciones de la vida son
del todo irresponsables. Uno no puede describirlos mejor que diciendo que no se parecen a nada tanto
como a una mezcla de gatito persa y mono domstico. Tienen la belleza, el alejamiento y el encanto de un
gato, y la destructividad divertida y maliciosa de un mono. Muchos seres humanos les odian al verlos;
otros son fascinados por ellos porque traen consigo una sensacin de belleza no terrenal y una
reanimacin de las fuerzas de la vida. He podido investigar la historia de dos de tales seres, y es
interesante notar que ambos de ellos fueron concebidos mientras sus madres estaban bajo la influencia de
la bebida.
Hay una cantidad muy grande de informacin disponible concerniente al aspecto oculto de la encarnacin
de las almas, pero nunca se ha impreso demasiado del conocimiento concerniente a los hechos reales de la
concepcin. Yo he dado un poco en mi libro La Filosofa Esotrica del Amor y del Matrimonio. No puedo
entrar en el tema profundamente en estas pginas, pues sera con mucho una digresin. Algunos puntos,
sin embargo, es esencial tocarlos para un examen comprehensivo de nuestro tema.
En el momento de la unin sexual se forma un vrtice psquico que se asemeja a un remolino de agua, un
torbellino en forma de embudo que se eleva a otras dimensiones. Conforme cuerpo tras cuerpo se ajustan,
el vrtice asciende los planos. En todos los casos estn involucrados los cuerpos fsico, etrico y astral; el
vrtice por lo tanto llega siempre tan lejos como el plano astral; un alma sobre el plano astral puede ser
atrada en ese vrtice si est madura para la encarnacin, y entrar as a la esfera de los padres. Si el vrtice
se extiende ms arriba del plano astral, pueden entrar a esta esfera almas de un tipo diferente, pero tal
extensin es rara, y se dice por tanto que el hombre nace del deseo, pues pocos nacen de otra cosa.

Pero este vrtice puede no slo extenderse verticalmente hacia arriba de los planos (hablando
metafricamente), sino que puede tambin, bajo ciertas condiciones, ser desviado, como si fuera, fuera de
la lnea humana normal de evolucin, de modo que su extremo abierto se extienda adentro de la esfera de
evolucin de otro tipo de vida. Bajo tales circunstancias es tericamente posible para un ser de una
evolucin paralela el ser atrado a la encarnacin en un cuerpo humano.
Los ocultistas sostienen que esto ocurre ocasionalmente, y explica ciertos tipos de anormalidad no
patolgica que se encuentran ocasionalmente. Estos no-humanos son adorados u odiados por sus
asociados humanos. Ellos tienen una fascinacin peculiar por ciertos tipos de temperamento, los tipos que
los psiclogos llaman inestables. En estos tipos el subconsciente llega muy cerca de la superficie, lo
profundo llama a lo profundo, y son atrados instintivamente hacia los reinos elementales.
No hay nada ms desastroso que el matrimonio con un no-humano, pues no tienen nada en su naturaleza
que pueda satisfacer los anhelos humanos normales de afecto y simpata. La nica caracterstica que salva
en una unin as es que las razones para el divorcio son invariablemente rpidamente asequibles, pues las
morales del no-humano son las de la era.
El poder de los no-humanos de daar a sus enemigos es relativamente pequeo, pues son extraos en una
tierra extraa cuando encarnan en forma humana, y no pueden procurarse ninguno de los recursos
humanos ordinarios para el mal. Son, de hecho, singularmente indefensos y desvalidos, y ellos mismos
sufren agudamente de manos de la sociedad.
Ocurre de otro modo, sin embargo, en sus relaciones con sus amigos. Parecen tener una capacidad infinita
de infligir dao sobre aquellos que les aman. No deliberada o maliciosamente, sino como un nio
haciendo pedazos a las moscas por ociosidad, no realizando lo que est haciendo.
Obedeciendo a las leyes de su propia naturaleza, son destructivos para los seres de la evolucin humana.
Sin embargo, qu otras leyes pueden obedecer? Para ellos el someterse a nuestras normas es negar sus
instintos ms profundos.
El efecto que tienen sobre aquellos que les aman constituye un sndrome tan bien sealado entre las
patologas psquicas que debemos considerarlo en detalle. La persona que forma una relacin con un nohumano se vuelve profundamente estimulada por las fuerzas elementales que encuentran entrada en
nuestra esfera a travs del canal de este alma vagabunda y ajena. Se ve, como si fuera, apartada de las
cosas humanas normales y se encuentra vagando sobre los confines del reino de las hadas, y sin embargo
no puede encontrar ah descanso para su pie ni sustento para su alma.
El cuento del bello muchacho pescador y la sirena es indicativo de esta condicin. Ella le ama, lo atrae
hacia s, y l se ahoga, pues no puede vivir en el elemento del agua. La explicacin del curioso poder,
tanto de fascinacin como de destruccin, que es ejercido por los no-humanos puede residir en el hecho de
que pertenecen slo a un elemento, mientras que en el hombre los cuatro estn combinados. Cualquier
contacto elemental no es estimulante, porque los seres elementales vierten en abundancia la vitalidad de su
propia esfera particular, y esto vitaliza el elemento correspondiente en nosotros mismos. Pero si una
criatura de cuatro elementos es atrada a la esfera de un solo elemento, es envenenada por una sobredosis
del elemento nico en que se encuentra, y pasa hambre de los otros tres.
Es por esta razn que de los mortales en el reino de las hadas se dice siempre que estn encantados o
dormidos. Nunca estn viviendo normalmente en completa posesin de sus facultades.
Un problema igualmente difcil se le plantea al no-humano que es atrado a nuestro medio. Una criatura de
un solo elemento se ve forzada a controlar y asimilar tres elementos adicionales para los que no tiene
equipamiento o experiencia, y el resultado es desastroso. Pero no es suficiente con que describamos
meramente las condiciones y el estado de los problemas en estas pginas. Nuestro objetivo es
esencialmente prctico. Qu, pues, puede hacerse cuando ha de encararse y tratarse con un no-humano?
Debe realizarse claramente que cualquier casamiento entre un humano y un no-humano es una
proposicin sin esperanza. En primer lugar, slo puede ser el prembulo para un divorcio, porque los nohumanos son promiscuos en sus hbitos sexuales; y, en segundo lugar, no hay nada en la naturaleza de un
no-humano que pueda satisfacer las aspiraciones superiores del humano. No debemos permitir a la forma
humana que nos confunda en cuanto a la existencia de un alma humana.

Un no-humano es un animal domstico, no una criatura compaera. Ese, francamente, es el nico terreno
posible sobre el que pueden ser aproximados. Si no esperamos ms de ellos de lo que lo haramos de un
pajarillo domstico, si los manejamos como manejaramos un gatito, nos hemos acercado tanto a la
solucin del problema como nunca es probable que lo consigamos hasta que el ngel Negro los restaure
misericordiosamente a su propio reino; una misericordia rara vez aplazada largo tiempo, pues los nohumanos no hacen huesos viejos.
Hay casos, sin embargo, en que una asociacin as puede conducir al dao. El compaero humano en la
asociacin puede estar mal equipado o mal adaptado para el cometido. Puede haberse aventurado ms all
de sus posibilidades, habiendo cogido una frmula de algn ocultista ms experimentado, y usndola sin
la preparacin debida. O, de nuevo, no es infrecuente encontrar gente que ha trado de encarnaciones
anteriores una aptitud natural para entrar en contacto con los reinos elementales. En tales casos puede
ocurrir que un elemental que haya tenido experiencia de relaciones con seres humanos pueda conseguir
entrar en contacto con ellos deliberadamente.
Esto es de todo punto indeseable, pues el elemental no ha conseguido el conocimiento necesario de las
condiciones humanas para permitirle evitar herir a su nuevo amigo. En cualquier caso, los elementales
tienen una inteligencia de una sola va, y no est bien que sean compaeros en cualquier alianza con los
seres humanos. Toda la cuestin de los contactos elementales, una extremadamente fascinante, es
demasiado extensa e intrincada para entrar en ella en estas pginas. Ha sido necesario referirse a ella, sin
embargo, pues ciertos casos de dificultad psquica pueden ser debidos a operaciones inexpertas a ambos
lados del Velo.
Cuando tocamos los contactos elementales conseguimos la misma reaccin que es causada por el
psicoanlisis cuando el censor es penetrado. Las personas en quienes la mente subconsciente est cerca de
la superficie, tal como el artista, el chiflado, el inestable, y, en cuanto a eso, el genio en cualquier dominio
de la vida, aman los contactos elementales porque estimulan las fuerzas elementales en su propia
naturaleza que son para ellos los manantiales de su poder e inspiracin. Pero el ciudadano corriente, cuyo
contenido mental est organizado mayormente sobre una base de represin y compromiso a fin de que
pueda ser realmente un ciudadano y tomar su lugar en la sociedad organizada, es trastornado por los
contactos elementales de acuerdo con la proporcin de represin a compromiso en su constitucin.
El compromiso es el lote normal de la humanidad; la represin es la patologa del compromiso. La
persona que se las ha apaado para hacer un compromiso que funciona entre los diferentes elementos de
su naturaleza, puede permitirse una vacacin con los Devas (Reino de los Devas, como se llama a veces a
la esfera que los elementales comparten con los Espritus de la Naturaleza) sin hacer dao a nadie; pero la
persona que est reprimida encontrar que estn activamente en desacuerdo con ella, porque estn
teniendo el mismo efecto sobre ella que el que tendra un drstico psicoanlisis

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